Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Las supuestas oportunidades como cuando llega el Black Friday son las ocasiones
en las que más se aprecia. Pero podemos tomar precauciones cuando nuestro cerebro
sale de compras. Pensar y analizar antes la compra es fundamental.
“Las compras, como la comida, son más que una manera de gestionar las emociones”,
recuerda la psicóloga Patricia Ramírez. “Buscamos en ellas un premio por haber
trabajado duro, una manera de conseguir la felicidad. Pero es un error. Está demostrado
que la felicidad la dan las experiencias, los momentos compartidos con otros, no el
acaparar cosas”.
Ese autocontrol parte de la base de que hay que conocerse. Analizarnos a nosotros
mismos y preguntarnos qué nos lleva a querer eso. No te prohíbas la recompensa, sólo
retrásala. Te puede ayudar seguir estos consejos:
No improvises, planea tu compra. Haz una lista de lo que quieres. Toma conciencia y
reflexiona sobre lo que verdaderamente necesitas.
No compres cuando estés triste. No sustituyas una emoción porque las cosas no
reconfortan. Lo descubrirás en cuanto lo hayas pagado.
Ve con otra persona. Un amigo o familiar puede ser tu respaldo. Te dará consejos y hará
el paseo más gratificante.
Haz un presupuesto. Sal de casa con el dinero contado Parece elemental pero el 85%
de las familias españolas no sabe exactamente cuánto gasta cada mes, según un
estudio del Observatorio del Consumo de ESADE. Solo el 11% analiza con regularidad la
gestión de la economía familiar y únicamente el 9% se esfuerza en prever y planificar.
Consúltalo con la almohada. Algunos vendedores pueden ser muy convincentes. Aplaza
la decisión, más cuanto más importante sea la cantidad que gastas. El sueño nos ayuda
a valorar y tomar decisiones ya que juega un importante papel en las funciones
cognitivas.
ASÍ TE AUTOENGAÑAS EN LAS COMPRAS
También solemos justificar determinados gastos diciendo que lo hacemos por nuestros
seres queridos cuando en realidad es para nosotros.
El típico ejemplo es el padre que compra el Scalextric para el hijo cuando es él a quien
le hace ilusión.
Otras compras las justificamos por razones prácticas cuando es un capricho, por
ejemplo un bolso más grande.
LA ADICCIÓN EN INTERNET
Con el avance del comercio por internet, sobre todo a través de los smartphones, se ha
disparado un nuevo fenómeno que algunos estudios señalan que ya afecta a 2 de
cada 10 españoles: el consumo compulsivo en la red.
Los principales factores que intervienen en esta adicción, son muy parecidos a los de la
compra en general. Verónica Rodríguez los divide en dos:
A ello hay que añadir otros dos. La facilidad de moverse de una web a otra, con una
cantidad ilimitada de productos, y el pago con tarjeta, que nos hace ser menos
consciente de las cantidades que gastamos y controlar el presupuesto.
Hay un momento en que las compras pueden pasar a ser un pequeño problema
emocional a un verdadero trastorno emocional. Los compradores compulsivos no son
sólo personas infelices, con un vacío que no saben cómo llenar. Los psicólogos también
los definen como narcisistas, con una gran necesidad de admiración y poca o nula
empatía.
Puede haber un vacío en la vida que se intenta llenar con algo material
De todas formas no hay una norma fija para explicar y tratar a estas personas. Como en
todo problema psicológico hay grados. Sólo el autoconocimiento ayudará a estas
personas a entender por qué compran.
Lo principal es que busques ayuda si las compras han puesto en números rojos tus
ingresos, si te descubres amasando cosas que luego apenas usas. La opinión
profesional de un psicólogo o terapeuta te ayudará a analizar el vínculo que has creado
con el consumo.
En 2016, los estadounidenses gastaron más de $ 4.8 Esto es suficiente para cubrir toda la
billones en compras minoristas. [1] superficie del planeta con billetes de $
100.
Más común entre las mujeres Genero Más común entre los hombres
Los trastornos del humor, los trastornos por ansiedad, los trastornos por
abuso de sustancias, los trastornos alimentarios, el TDAH y una variedad
de trastornos en el control de los impulsos. [8]
El gasto excesivo puede ser un síntoma de trastorno de personalidad
marginal.[9]
Los brotes de gastos pueden ocurrir durante los episodios del trastorno
bipolar; Sin embargo, no es posible que se haya finalizado el episodio de
Maníaco. [10]
Por: