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EL QVARTO INGA, Mayta Capac: Tenía sus armas y zelada uma chuco [casco] de azul

escuro yanas pacra [azul dizque negro] y su masca paycha [borla real] y conga
cuchuna [hacha], ualcanca [escudo] y su manta de encarnado y de su camexeta de hazia arriua
azul y del medio tres betas de tocapo [paño de labor tejido] y de auajo caxane [camiseta
axedrezada de cumbi] con blanco y uerde y colorado y quatro ataderos de los pies.

Cap. De los Yngas, pág. 99 [99]

EL QVINTO INGA, Capac Yupanqui Ynga: Tenía sus armas y su selada uma chuco [casco] de
uerde anas pacra [azul dizque negro] a y su masca paycha [borla real] y su guaman
chanbi [porra] y uallcanca [escudo] y su manta de encarnado mescla de colorado y su camexeta
de hazia arriua azul escuro y lo del medio un tocapu [paño de labor tejido] y lo de auajo uerde y
en los pies sus quatro ataderos.

Cap. De los Yngas, pág. 101 [101]

EL SESTO INGA, Inga Roca y su hijo: Este dicho Ynga tenía su llauto [cíngulo] encarnado y su
pluma de quitasol, masca paycha [borla real]. Con la derecha mano tenía su hijo y con la
ysquierda tenía su conga cuchuna [hacha] y su uallcanca [escudo]. Y se llamaua el hijo se
llamaua Guaman Capac Ynga. Era muy querido hijo y ací no le dexaua de la mano porque era muy
niño y menor, con su manta de rrozado, camegeta de negro y dos betas de tocapo [paño de labor
tejido] y su llauto de colorado. Y la manta del dicho su padre fue uerde claro y lo de auajo azul
escuro y tres betas de tocapo y lo de auajo amarillo y azul y quatro ataderos de los pies.

Cap. De los Yngas, pág. 103 [103]

EL SÉTIMO INGA, Yauar Uacac Ynga: Tenía su arma y selada uma chuco de color encarnado anas
pacra a, masca paycha, su conga cuchona en la mano derecha y su uallcanca en la esquierda y su
manta de morado yscuro y su camexeta del medio dos betas de tocapo y hacia ariua todo
de tocapo y lo de auajo los lados de colorado y negro y sus quatro ataderos de los pies.

Cap. De los Yngas, pág. 105 [105]


EL SÉTIMO INGA, Yauar Uacac Ynga: Tenía su arma y selada uma chuco de color
encarnado anas pacra a, masca paycha, su conga cuchona en la mano derecha y
su uallcanca en la esquierda y su manta de morado yscuro y su camexeta del medio dos betas
de tocapo y hacia ariua todo de tocapo y lo de auajo los lados de colorado y negro y sus quatro
ataderos de los pies.

Cap. De los Yngas, pág. 105 [105]

EL OTABO INGA, Uira Cocha Ynga: Tenía su arma y selada uma chuco de azul y su pluma
y masca paycha anas pacra y su chanbi [porra de pelear] en su mano derecha y su rrodela en la
esquierda y su manta de rrosado blanquícino y su camegeta de todo de tocapo y quatro
ataderos de los pies.
Cap. De los Yngas, pág. 107 [107]

EL NOVENO INGA, Pachacuti Ynga Yupanqui: Tenía sus armas y su llauto de rrozado y su masca
paycha y su pluma. Tiraua a su enemigo con una honda, con su piedra de oro con la mano
derecha y con la esquierda con su rrodela se guardaua. Y su manta de uerde y su camegeta
desde el cuello hacia los pies dos betas de tocapo, a los lados de color naranxado llano.

Cap. De los Yngas, pág. 109 [109]

EL DÉCIMO INGA, Topa Ynga Yupanqui: Tenía su selada uma chuco azul escuro anas pacra,
masca paycha y su chanbi y uallcanca y su manta de torne azul y su camegeta de todo
de tocapo y quatro ataderos a los pies.
Cap. De los Yngas, pág. 111 [111]

EL ONZENO INGA, Guayna Capac Ynga: Tenía su selada uma chuco de azul anas pacra y
su masca paycha y su chanbi y uallcanca. Y tenía su manta de azul y la camegeta desde el
medio hazia arriua uerde y naranjado y lo de auajo azul y blanco agedrezado y quatro borlas
ataderos de los pies. Y de la cara hermoso y gentil hombre, blanco, muy onrrado, amigo de
todos.

Cap. De los Yngas, pág. 113 [113]

EL DOZENO INGA, Guascar Ynga: Topa Cuci Gualpa se llamó este dicho Ynga. Fue elegido y
nombrado de su padre el sol y fue legítimo y mayor eredero de todo el rreyno deste
Pirú, Capac Apo Ynga. Este dicho Ynga tenía su selada uma chuco [casco], anas pacra, masca
paycha [borla real] y su chanbi [porra] y uallcanca [escudo]. Tenía su manta de azul claro y su
camegeta torne azul en medio tres tocapus [paño de labor tejido] y lo de auajo uerde y quatro
ataderos a los pies.
Cap. De los Yngas, pág. 116 [116]
El dicho Uascar Ynga tenía mal corasón y malas entrañas. Y ací le susedió muy mal porque,
auiendo querido y honrrado su ermano uastarda Atagualpa Ynga, enbiándole con su enbajador
presentes y rriquiesas, rrespetándole al dicho Guascar, le tornó de enbialle a su
ermano Atagualpa bestidos de mugeres y ollas y chamillcos [puchero de barro] y cantarillos
todo de oro y acxo [falda], lliclla [manta de mujer], uincha [cinta], topo [prendedor], pines
[joyas], lirpo [espejo] , naccha [peine], chunbes [faja de cintura], oxotas [sandalias], todo de
muger, por donde por la soberbia ganó Uascar tanto pleyto y batalla y muerte. Y fue causa de
muerte de muchos señores prencipales y capitanes y de yndios pobres y destrución de toda la
rrequiesa deste rreyno.
Cap. De los Yngas, pág. 117 [117]

Y la dicha Mama Uaco, coya, tenía su bestido de rrosado y tenía sus topos [prendedor] muy
grandes de plata. Y que murió en el Cuzco de edad de duzientos años en tienpo de su
hijo, Cinche Roca Ynga.
Cap. De las reinas, o quya pág. 121 [121]

LA SEGVNDA COIA [reina], Chinbo Urma, coya: Era muy hermosa y morena como la primera
casta de su madre. Y fue delgada, amiga de tener rramelletes y flores, ynquilcona, en las manos
y de tener un jardín de flores... Y tenía su lliclla [manta] de color amarilla y lo del medio azul
escuro y el acxo[falda] a de encarnado de Maras y su chunbe [faja de cintura] de uerde muy
entonada.

Cap. De las reinas, o quya pág. 123 [123]

LA TERZERA COIA [reina], Mama Cora Ocllo, coya: Fue muy ermosa, no tanto como su agüela.
Tenía una llicla [manta] de morado y lo del medio naranjado y su acsu [falda] a uerde y su
chunbe [faja de cintura] de colorado. Y fue un poco alto de cuerpo…Y fue muger de Lloque
Yupanqui Ynga.
Cap. De las reinas, o quya pág. 125 [125]

LA CVARTA COIA [reina], Chinbo Mama Yachi Urma, coya: Fue algo fea y morena. Tenía ojos
blancos, pero del cuerpo fue muy damada y bizarra, muger onrrada, amiga de salir a la becita de
otras señoras prencipales y conuersar con ellas y holgarse con múcicas y merendar...Y tenía su
lliclla [manta] de naranjado y del medio en canpo de colorado de tocapo [vestido de lauores
preciosos] a y su acxo [falda] de azul escuro.
Cap. De las reinas, o quya pág. 127 [127]

LA SESTA COIA [reina], Cuci Chinbo Mama Micay, coya: Fue muy hermosa y blanca y del cuerpo
fue muy damada y bizarra muger. Tenía su lliclla [manta] de Parauay Suyo y su acxo [falda] de
Cuzco, chunbe [faja de cintura] y la beta mayor de auajo blanco y su chunbe de uerde, alegre de
cara y rregocijada y amiga de cantar y múcica y tocar tanbor, hazer fiestas y uanquetes y tener
rramilletes en las manos, gran señora y gouernadora y hazía mercedes.

Cap. De las reinas, o quya pág. 131 [131]

LA SÉTIMA COIA [reina], Ypa Uaco Mama Machi, coya: Tenía su lliclla [manta] de azul claro y lo
del medio escuro y su acxo [falda] de uerde y su chunbe [faja de cintura] de colorado.

Cap. De las reinas, o quya pág. 133 [133]

LA OTAVA COIA [reina], Mama Yunto Cayan, coya: Fue muy triste de corasón y bizarra muger de
cuerpo y muy humilde. De tan humilde no se metía en fiestas ni taquies y danzas ni era amiga
de criadas cino pocas…Y tenía su lliclla [manta] de naranjado y lo del medio blanco
o tocapo [vestido de lauores preciosas] con sus cuychis [¿joya?] y tenía su acxo [falda] de
morado y la lista de auajo todo de tocapo.
Cap. De las reinas, o quya pág. 135 [135]

LA NOVENA COIA [reina], Mama Ana Uarque, coya: Tenía su cara rredonda y hermosa y los
ojos chicas y la boca chica, blanquilla, muy damada las manos y pies, de quatro puntos…Y
tenía su lliclla [manta] de rrosado y lo del medio blanco y su acxo [falda] a de uerde y lo de
auajo billpinto y su chunbe [faja de cintura] de colorado.
Cap. De las reinas, o quya pág. 137 [137]

LA DÉZIMA COIA [reina], Mama Ocllo, coya: Fue muger muy espantable y hermosa y rredonda
de cuerpo y baxita y tenía una carita pequeñita, alegre de corasón y pacible...Y tenía
su lliclla [manta] de amarillo del medio y los lados de oque chunbi suyo [listón de la faja] y
su acxo [falda] a de canpo azul escuro con betas de Lari.

Cap. De las reinas, o quya pág. 139 [139]

LA ONZENA COIA [reina], Raua Ocllo, coya: Era muy hermosa y de buen talle y de mucha
cauellera y de buen cuerpo y muy hermosa, como dicho es… Y tenía esta dicha señora
su lliclla [manta] de azul y lo del medio de naranjado y su acxo [falda] a de morado y
su chunbe [faja de cintura] de colorado.

Cap. De las reinas, o quya pág. 141 [141]

LA DOZENA COIA [reina], Chuqui Llanto, coya: Dizen que fue muy muchas ueses hermosa y
blanquilla, que no tenía ninguna dacha en el cuerpo… Y tenía su lliclla [manta] de azul claro y lo
del medio uerde escuro y su acxo [falda] a de uerde y lo del auajo de tocapu [paño de labor
texido].

Cap. De las reinas, o quya pág. 143 [143]

“Yten: Hordenamos y mandamos que todos los oficiales que no sean ociosos ni peresosos, ací
los dichos que tubieren cargo de beneficios, gouernadores, pontífises y saserdotes y señores
grandes que manda la tierra, y de artificios, pintores, que pintan en paredes y en quiro [vaso de
madera] y…. conbi camayoc, bordadores y sederos; pachaca, labradores; pastor, michic, aua
camayoc, dexedores; cirac, jastre, aunque no ací a custorera; panadera, sara tanta rurac c;
cocinera, micuy rurac d; suyoyoc e, mayordomo; collca camayoc f, comón y sapci camayoc g,
administrador; quilca camayoc h, escriuano de quipo [cordel con nudos], cordel; cantores y
múcicos, taquic [cantor, danzante], cochochic; pingollo camayoc, flauteros; auca camayoc,
guerreros. Que no falten estos dichos oficiales en este rreyno, porque serán castigados por
peresoso y ladrón.”
Capitulo IX: De las ordenanzas del inca Pág.191 [193]

Yten: Mandamos en todo el rreyno ayga abundancia de comida y que se cienbre muy mucho
mays y papas y ocas [Oxalis tuberosa] y que hagan caui, caya, chuño, tamos [conservas de
diversos tubérculos], chochoca [maíz seco] y quinua [semilla de altura] , ulluco,
masua [tubérculos] k, todas las comidas hasta las yeruas yuyos [acuáticas] lo sequen para que
tengan qué comer todo el año y se cienbre de comunidad y sapci de mays, papas,
agí, magno [verdura seca], algudón y coxan flor de pauau queuencha l y otras ojas para tiñir
colores para el cunbe [tejido fino] y auasca [corriente] y queman lipta [pasta de
ceniza] de marco m y de quinua.
Capitulo IX: De las ordenanzas del inca Pág.191 [193]

los que tenían pies andauan, los que tenían manos texían y seruían de despenseros y quipo
camayosc, mayordomos.
CAPITULO X. Pág. 201 [203]

No prouauan sal ni agí ni miel ni uinagre ni comía cosa du[l]se ni carne ni cosa de gordura ni
ueuía chicha. Por gran rregalo le daua un poco de mote, maýs cocido, una camiseta y manta
gruesa; aquello le uastaua. Y ci era hijo de prencipal, más castigo lleuaua. Y nunca paraua estos
mosetones hasta treynta años, ni conocía muger en todo el rreyno.

CAPITULO X. Pág. 203 [205]

Que fueron casadores de paxaritos menudos que los toman con lasos y ligas y otras suertes que
llaman los páxaros pulidos: quinte [picaflor], uaychau [pájaro
pardo], chayna [jilguero]; urpay [paloma] y otros páxaros que ay. La carne
b
hacía charque[conserva] , petaquillas. Y las plumas lo guardauan para la pluma y cunpi [tejido
fino] de pluma1. Y para uallcanca [escudo]c, chasca chuqui [lanza] d, ura caua [?] y otras
galanterías del Ynga y prencipales y capitanes, auca camayoccuna.

CAPITULO X (SÉTIMO VECITA).Pág. 207 [209]


Pág. 215 [217] CAPITULO X : la primera calle
DIBUJO:

PRIMERA CALLE, AVACOC VARMI [tejedora]


/ de edad de treynta y tres años / muger de tributo /
/ awakuq warmi /

PRIMERA VECITA: La primera calle de las yndias mugeres casadas y biudas que llaman auca
camayocpa uarmin [señoras de los militares], las quales son del oficio de texer rropa delicada
para cunbe [tejido fino], auasca [corriente] para el Ynga y demás señores capac apoconas y
capitanes y para soldados:
Estas dichas tenían oficio de texer rropa de auasca delgada y hilauan para qumbis.
CAPITULO X: la primera calle. Pág. 215 [217]
SEGVNDA VECITA: En esta calle de la segunda llamadas payacona, biejas de edad de cincuenta
años, biejas que se ocupan a texer rropa gruesa de comunidad:
Y ancí estas dichas mugeres seruían en texer costales y otras cosas para los prencipales y
aqudían a las qumunidades y otras obligaciones de su pueblo, no saliendo fuera de ella. Y eran
rrespetados como biejas honradas y tenían cargo de las doncellas y aqudían en otras mitas [el
turno en cumplir] y obligaciones, lo que lestaua mandado como muger pichera en este rreyno.

CAPITULO X : la Segunda vecita Pág. 218 [220]


Las que pueden an de seruir de portera y aconpañamiento y algunas que pueden an de texer
costales y hilar cosa gruesa lo que pueden y de guardar conejos y criar patos y criar perros y
mirar las casas y ayudar a criar a los niños.

CAPITULO X : la tercera vecita Pág. 220 [222]

A éstas el Ynga les casauan con otros como ellos y las demás que pudían trauajar hacían hilar y
texer y sauían estas dichas yndias mil maneras de labores y texían chunbe [faja de
cintura] y uincha [cinta]
Y suelen ser grandes texedoras de rropa y cocineras y chicheras y chocareras para
entretenimiento del Ynga y de los señores prencipales.
CAPITULO X: sesta calle Pag. 226 [228]

SESTA VECITA: En esta calle de la sesta llamada coro tasqueconasa, rotusca tasque b, que quiere
dezir motiloncillas, que fueron de edad de doze años y de dies y ocho años, que serbían a sus
padres y madres y agüelas y entrauan a seruir a las señoras prencipales para prender a hilar y
texer cosas delicadas y seruían de pastoras de ganados y de sementeras, chacaras, y de hazer
chicha para su padre y madre y de otros oficios:
CAPITULO X: setima calle ,Pág. 228 [230]
Que estas muchachas coxían flores para tiñir lana, para cunbis [tejido fino] y rropas y otras
cosas y cogían yeruas de comida de las susodichas para secallo y tenella en el depócito, cullca,
para el otro año.
Estas dichas muchachas tenían de edad de nueue años y de doze años. Con estas yeruas se
seruían al sol y capac ocha 1[sacrificios humanos] del Ynga y a los señores grandes y
capitatenes [sic] y de señoras, coyas [reina] y nustas [princesa] y de mugeres prencipales
para cunbe, auasca [corriente] y conbana b y llauto [adorno de
c
cabeza] y ojotas [sandalias], cunbana, uincha [cinta], chunbe [faja de cintura], chupa
curo [flecos]. Y demás desto ayudauan a sus padres y madres en todo lo mandado y eran muy
ubedente donzellita castigada ellas.ç
CAPITULO X: otaba calle ,Pág. 230 [232]

Estas dichas doncillitas seruían de paxe de coya [reina] o de nusta [princesa] o de las señoras
grandes o de las uírgenes y de mamamaconas [sic] [señoras] y seruían a sus madres y padres
de traer leña, paxa. Estas dichas comiensan a trauajar, hilar zeda dilicada y lo que pudían y
traer de comer yuyos [planta acuática] de la labransa y ayudaua hazer chicha y seruía de criar
a los menores y le trayýa cargado a los niños.

CAPITULO XI: JULIO, Pág. 249 [251]

En este mes sacrificauan con otros cien carneros de color de yauar [sangre], chunbe [faja de
cintura]; los quemauan en la plasa pública y con mil cuys blancos. Este sacrificio hazían para
que no dañase el sol ni las aguas a las dichas comidas y sementeras y chacaras.

CAPITULO XI: NOVIEMBRE,Pág. 257 [259]


En este mes sacan los defuntos de sus bóbedas que llaman pucullo y le dan de comer y de
ueuer y le bisten de sus bestidos rricos y le ponen plumas en la cauesa y cantan y dansan
con ellos. Y le pone en unas andas y andan con ellas en casa en casa y por las calles y por la
plasa y después tornan a metella en sus pucullos, dándole sus comidas y bagilla al prencipal,
de plata y de oro y al pobre, de barro. Y le dan sus carneros y rropa y lo entierra con ellas y
gasta en esta fiesta muy mucho.
Y en este mes tanbién se horadan las orexas los Yngas y hazen uarachicos [primeros
taparrabos] y rutochicos [primer corte de cabellos], las mugeres, quicocu [primera
menstruación]. Lleuan agua de calles pucyo [manantial] y hazen fiesta
de anacacuy [investidura del manto], cusmallicoy [investidura del manto], a los
niños, quiraupi churcuy [puesta en cunas]
En este mes se becitaua ganados de la comunidad y de sapci [comunidad] y de yndios
particulares y de hinchir mugeres en los depócitos que llaman aclla uaci a, mugeres uírgenes,
para que trauajen y sepan hilar, tejer rropa para el Ynga y de los demás señores.

CAPITULO XII: DE LOS IDOLOS,Pág. 265 [267]

De cómo ordenó bestidos y rropa de sus dioses uacas le llaman capac ocha [afrenta al Inka,
sacrificios humanos] 2: Lo hazían de cunbi [tejido fino] y de auasca [corriente] y de su baxilla
de oro y plata y de uarro y mullo [concha] y cobre y donde soterraua y tenía pastos y
sementeras y ganados y yndios llamados yana yaco 3 del sol y de las uacas ýdolos deste
rreyno. Pacha Cuti Ynga dio orden muy mucha hazienda para sacrificar a las uacas y de las
casas del sol y tenplo de Curi Cancha; el trono y aciento de los Yngas
llamado usno [construcción ceremonial] en cada uamani [distrito administrativo
incaico] señaló.
CAPITULO XII: DE LOS IDOLOS ,Pág. 267 [269]

Y los demás yndios Chinchay Cochas, Tarmas, Yauyos, Guanoco, Guaylas, Chachapoya,
Cañari, Cayanpi, Quito, Angarays, Tanquiua, Sora, Lucana, Andamarca, Parinacocha, Quichiua
sacrificauan cada uno en sus uacas ýdolos que son muy muchos, que por prolixidad no lo
pongo. Que a cada destos sacrificauan con criaturas y con oro y plata y rropa, comida y
uaxillas de lo que hallauan en todo Chinchay Suyo sus sacrificios.

CAPITULO XII: DE LOS IDOLOS ,Pág. 275 [277


Otros hichezeros toman un hilo torcido a lo esquierdo con blanco y negro y ponen en los
caminos. Lo estiran y lo ponen como lazos de los demonios por donde an de pasar sus
enemigos, para que le coxa el lazo y hechisos puesto en ellas hecho sus encantamientos,
para que cayga en peligro de la enfermedad y padesca y muera el quien quebró el hilo. Para
esto tiene cuydado quando a de pasar el enemigo; le aguarda aquella ora el hichezero.
Cómo fue enterrado el Ynga y le balzamaron cin menealle el cuerpo y le pucieron los ojos y
el rrostro como ci estubiera bibo y le bestían rricas bestiduras. Y al defunto le
llamaron yllapa [el rayo] que todos los demás defuntos les llamauan aya [difunto]y le
enterrauan con mucha baxilla de oro y plata.
Capítulo XIII:, pág 290
Cómo fue enterrado el Ynga y le balzamaron cin menealle el cuerpo y le pucieron los ojos y
el rrostro como ci estubiera bibo y le bestían rricas bestiduras. Y al defunto le
llamaron yllapa [el rayo] que todos los demás defuntos les llamauan aya [difunto]y le
enterrauan con mucha baxilla de oro y plata.

Capítulo XIV, pág. 301

Uírgenes pampa acllaconas [“escogidas campesinas”] de las que serbían a la luna y estrellas
y los demás uaca bilcas ýdolos, dioses comunes. Las quales fueron estas mugeres texedoras
de chunbes faxas y uinchas [cinta] y chuspa uatus [cordones de la bolsa para
coca] b y chuspas ystalla [bolsa de mujer] c y otras galanterías, de edad de cincuenta años.

Capítulo XIV, página 301

Otra cas[a] de acllaconas del mismo Ynga. Que alguna destas eran uírgenes, algunas estauan
corronpidas y amanzebas del mismo Ynga. Eran hijas de prencipales y éstas se ocupauan
sólo en hazer rropa para el Ynga mejoor [sic] que tafetán y seda.
Capítulo XIV, página 302
Castigauan a éstos con unos asotes que llamauan uauquin songo que era texido como
cordón y era de cabuya.
Capítulo XV, página 315

Éstos fueron hijos de apoconas [señores grandes] c, secretarios de los alcaldes de corte que
prenden a los señores deste rreyno. Estos dichos secretarios onrrosos
tenían quipos [cordeles con nudos usados en contabilidad] de colores teñidos y se
llaman quilca camayoc [encargado de la iconografía] o quilla uata quipoc [el que lleva cuenta
de los meses y los años]
Capítulo XVIII, página 361

“Esto dezía del bestido que se bisten para dansar y baylar taquies que hazen los yndios con
bestidos de plata, oro, culque curi cusma a, cacro, chipana, canipo, culqui uayta, topos
[ornamentos], todo de oro y plata. Y dezía que abía camellos chiquitos de los carneros de la
tierra.”
Capítulo XIX: de la conquista española y las guerras civiles. Pág. 370(372

Cómo los primeros conquistadores trayýan otro traxe por temor del frío, coleto y bonetes
colorados, unos calsones chupados y cin cuello como clérigo y trayýa mangas largas, la
rropilla, el capote corto. Acimismo las dichas mugeres, como usaron los antigos yndios, unas
camegetas largas, manta corta. Y después uan apuliendo y delgasando la tierra en mucho
más en este rreyno,
Capítulo XIX: el de la conquista española y las guerras civiles, Pág. 395 (397)
Y como no pudo allí acistir en el dicho pueblo de [Ollantay] Tanbo, desde allí se rretiró más
adentro a la montaña de Bilcabamba con los demás capitanes y llebó yndios y a su muger,
la coya [reina]. Y dexó el rreyno y corona, masca paycha [borla real] y chanbi [porra de
pelear] al señor enperador y rrey, nuestro señor don Carlos de la gloriosa memoria questá
en el cielo y a su hijo don Phelipe el segundo questá en el cielo y a su hijo don Phelipe el
tersero rrey nuestro señor.

Capítulo XIX: el de la conquista española y las guerras civiles, Pág. 406 (408)

Otro corregidor le amolestia al dicho don Cristóbal de León y le tubo preso porque no a
querido dar yndios trageneadores ni a querido hilar y texer rropa ni otros rrescates. Le
prendió el dicho corregidor y de ello se quejó,
Capítulo XXI: del Corregimiento, Pág. 497 (501)

…Y defiende de los padres y de españoles y caualleros y judíos y moros y mestizos y mulatos


y negros. Defiende del tragenear uino y texer rropa y amasar y hazer chicha y forsar de sus
mugeres, hijas, donzellas de toda la prouincia.
Capítulo XXI: del Corregimiento, Pág.498 (502)

Acauaron de echallo todo los pobres de los yndios de sus pueblos y lo hizo tiniente de
corregidor del rrepartimiento. Y ancí este tiniente lo pagaua de su bolsa la taza y cobraua
doblado en rropa y plata y ganados. Ci el dicho pagaua mil pesos, cobraua dos mil pesos. Y
ancí se aprouechaua muy mucho y hurtaua y hazía tratos y el dicho comendero no se podía
pagarse y tener tantos corregidores. Es gran mal de los pobres yndios.

Capítulo XXI: del Corregimiento, Pág. 517 (521)

En el pueblo de Hatun Lucana, tiniente de corregidor tenía en su cocina media dozena de


solteras y donzellas, otra dozena de yndias mitayas, haziéndole trauajar, hilar y texer y
panadera, chichera, coquera, pulpera y su aconpañado padre lo propio. Aunque lo saue en el
mundo, no ay rremedio. Y su aconpañado el alcalde tiene otras tres yndias, ¿cómo hará
justicia? El mandón, el mandador, el aconpañado son yguales, ¿cómo puede dar egenplo a
los fieles cristianos? Antes le rroba toda las noches a los pobres. Esto pasó en el año de
16[0]8.
Capítulo XXI: del Corregimiento, Pág. 518 (522)

Que bienen a las dichas prouincias con color de que falta un yndio o dos yndios de las dichas
minas o plazas en este rreyno, abiendo de enbiarse a la costa de los dichos mineros y de
bezinos. Bienen estos dichos juezes de comez[i]ones hurtando y rrobando en las estancias
y llama miches [pastor] de los ganados. Le quita quanto puede, ací de plata como ganados
y charque [carne hecha conserva] a, lana, soga, costales, chuci [frazada], apa [frazada], maýs.
Y algunos le fuerza a sus mugeres y hijas y le haze cargar cin pagalle. Y ci se defiende le mata
de palos.
Capítulo XXI: del Corregimiento, Pág. 520 (524)
Y no le paga su trauajo de la yda y buelta de los caminos y de acudir en las minas, de los
tienpos questá y a los yndios de sus jornales. Con color de las minas y tarías le ocupa en
guardar ganados y tragenear y los mete a los llanos y se muere los yndios. Y
hazen cunbes [tejido fino] y a otros les manda texer rropa y a otros les pone por rrescatadores;
a éstos no le paga su taría y lo esconde su trauajo.

Capítulo XXI: del Corregimiento, Pág. 526 (530)

Que los mayordomos se haze justicia y prenden y castigan y lo encierra en sus despensas y en
sus casas a los yndios y a las yndias. Tanbién pide media dozena de mitayo y media dozena
de mitaya y le haze hilar y texer y tiene panaderas, chicheras y pulperas y
muchos yanaconas [criado] y chinas [criada], muchachos, cozenera, ama, despenseras y mucho
aparato.

Capítulo XXI: del Corregimiento, Pág. 525 (539)

Y a estas no se les paga y ellas se huelga y se ponen nueuas bestiduras y chunbes [faja de
cintura] de colores y se enbijan las caras para hazerse putas y bellacas. Las dichas sus mismas
madres lo alcagüetea y les enseña con color de la mita [turno de cumplir] y les haze trauajar a
los mitayos y traen yerua, leña, a los mosos enbía a los llanos. Y ancí se muere sus maridos,
enbiando con mensages, y después quedan amansebados con ellas. Y ancí hazen grandes
pecados y ofensas del seruicio de Dios.

Capítulo XXI: del Corregimiento, Pág. 528 (542) – 529 (543)

Y ací gastaua quanto podía. Éste hazía hilar y texer a los yndios, yndias pastores cin pagar y
hacía trauajar sementeras y se ponía a ueuer con los yndios.

Capítulo XXI: del Corregimiento, Pág. 533 (547)


Los dichos encomenderos se dan a contratar y pide ganados y yndios para tragenear de uino y
manda hazer yxangas[cestillo] a y sogas y haze hilar y texer rropa, cunbi [tejido fino] y
de auasca [corriente] y costales. Y no les dexa de día y de noche yr a sus casas y pueblos a los
pobres de los yndios. Y de ello no se les paga de tanto trauajo y ocupación fuera de la tasa que
da los yndios.

Capítulo XXII: de los encomenderos de los indios, Pág. 552 [566]

Se a de cobrar por esta taza y becita general hecha por don Francisco de Toledo, bizorrey, y
confirmado por su Magestad en todo este rreyno. Y los dichos desmeros y tezoreros y
contadores y otras personas an de seguir esta horden de cobrallo de los yndios de todas las
especias de plata en cada tercio, peso y medio corriente la hanega de maýs, a says tomines y la
hanega de trigo, a says tomines, la hanega de papas a tres tomines; la rropa de auasca [tejido
grueso] la piesa, a peso y medio; el carnero de la tasa, a peso y medio y el puerco zebón, a
peso. Y una gallina, un tomín y el pollo, medio tomín.

Capítulo XXII: de los encomenderos de los indios, Pág. 558 [572]

Cómo los dichos padres y curas entienden en hazer rropa de cunbe [tejido fino] y
de auasca [corriente] para mugeres ychunbes [faja de cintura] para uender, deziendo que son
para los perlados. Le manda y comisarios le haze hazer rropa y ocupa a los pobres yndios y no
se les paga cosa nenguna en todo el rreyno.

Capítulo XXIII: de los padres de doctrina, Pág. 562 [576]

Cómo los dichos padres y curas de las dichas dotrinas ocupan en hazer texer rropa
de auasca [tejido corriente], costales y pabellones, sobrecamas y sobremesas y chunbis [faja de
cintura] y uinchas [cinta] y cinogiles y sogas y otras cosas para uender y grangeriar cin pagalle.
Y para ello castiga a los prencipales y a los alcaldes y fiscales. De tanto trauajo se ausentan de
todo el rreyno. Cómo los dichos padres y curas de las dichas dotrinas deste rreyno cada uno de
ellos ocupan a los dichos yndios mitayos: dos yndios en la cocina, otro caualliroso, otro
ortelano, otro portero, otro en la cocina, otrosmitayos de leña y de y[e]rua y miches [pastor],
rrescatadores y mensageros y chacareros y galleneros y cabrero, ouegero, baquero,
yegua camayo, porquero. Y en otras cosas enpertinente le ocupa a los yndios y a las yndias cin
pagalle a los dichos pobres yndios deste rreyno. Y ancí se ausentan de sus casas.

Capítulo XXIII: de los padres de doctrina, Pág. 563 [577]


Que los dichos padres del santo sacramento de la confición mande exsaminar su ánima y
consencia una semana el dicho penetente, aunque sea español. Y el yndio haga quipo [cordeles
con nudos] de sus pecados. Y al yndio y a la yndia le enseñe cómo lo a de confesarse de cada
pecado y le dé a entender al dicho penitente la culpa del pecado mortal o uenial, soltero,
furnicación cimple, y del casado, adulterio; y de la parienta, yncisto; y del uirgo con donzella o
donzel uírgenes, estupro; del sacrelego con persona rreligiosa dedicada a Dios, adulterio; con
saserdote, cierbo de Jesucristo se dize sacrelego, adulterio esperitual, el mayor pecado del
cristiano y de la cristiana.

Capítulo XXIII: de los padres de doctrina, Pág. 616 [630]

FRAILE DOMINICO MVI colérico y soberbioso que ajunta solteras y biudas, deziendo que
[e]stán amanzebadas. Ajunta en su casa y haze hilar, texer rropa de cunbe [tejido
fino], auasca [corriente] en todo el rreyno en las dotrinas.

Capítulo XXIII: de los padres de doctrina, Pág. 645 [659]

Los dichos rrebrendos frayles son tan brabos y soberbiosos, de poco temor de Dios y de la
justicia, el qual en la dotrina castiga cruelmente y se haze justicia. Todo su oficio es ajuntar las
donzellas y solteras y biudas para hilar y texer rropa de auasca [tejido corriente], cunbe [fino] y
costales, pauellones, sobrecamas, nanacas [?] y otros muchos daños en las dichas dotrinas de
Xauxa, de los Yauyos, de Guamanga, Parinacocha. Y ancí de tanto daño se ausentan los yndios y
las yndias de sus pueblos. Y ancí quedan despoblado sus pueblos y ya no multiplica porque le
detiene todas las solteras con color de la dotrina. Y no ay rremedio como son flayrres.

Capítulo XXIII: de los padres de doctrina, Pág. 646 [660]

Este dicho Morúa fue comendador del pueblo de Yanaca de la prouincia de los Aymarays, el
qual destruyyó grandemente a los yndios con el mal y daño y trauajos de ajuntar las solteras,
hilar, texer y hazer cunbi [tejido fino] y de auasca[corriente], pauellón y
sobrecama, uascas [soga] y frezadas y costales y de tiñir lana, amasejos de chicha y penas que
le pone a los yndios de los pueblos y a los forasteros y al común de los yndios, yndias solteras,
muchachos y muchachas.

Capítulo XXIII: de los padres de doctrina, Pág. 648 [662]

Que los dichos fiscales y mayordomos de la yglecia y de cofrades y sacristanes procuran de


hurtar y rrobar a los yndios del pueblo o a los forasteros sus haciendas, deciendo que están
amansebados o porque no fue a la dotrina o a misa o porque entró sus ganados al sementerio
o no se quitó su sonbrero o llautos [cíngulo] a presto en la yglecia. Y ací le lleua de pena,
quanto puede lo lleua de fuerza a los yndios.

Capítulo XXIII: de los padres de doctrina, Pag. 662 [676]- 663 [677]
Porque solía andar todo de seda y de cunbes [tejido fino] y se rregalaua como señor y príncipe,
nieto del dézimo rrey. Se hizo pobre y desnudo sólo para alcansar y uer el mundo con la
merced y lesencia y uista de ojos de parte de su Magestad. ¿Qué cristiano hará esto, dexar
hijos y hazienda, valor de ueynte mil, y desnudarse, meterse con los pobres treynta años?

Capítulo XXXVI: del viaje del autor a Lima, Pág. 1094 [1104]

Y ancí como se fue al dicho pueblo de San Cristóbal de Suntunto y Santiago de Chipao adonde
estaua un yndio mandón de dies yndios hecho curaca prencipal. Y ci llamó apo [el señor] don
Diego Suyca 2, yndio tributario, el qual fue castigado por hichesero con su ermana. El corregidor
Martín de Mendoza le quemó dos culebras llamado solimán, matacallo y otras mundicias. Este
yndio, como aqudía al serbicio del dicho corregidor Juan de León Flores y del padre Peralta, y
ancí fue querido porque le texía quinientas piesas de rropa de auasca [tejido corriente] y daua
yndios trageneadores y otros rrescates y molestia de los yndios. Y en San Cristóbal de Suntunto
estaua por cacique prencipal don Grauiel Cacyamarca 3y por su segunda persona don
Francisco Usco 1, lexítimo. Y ancí halló destroýdo con los trauajos de los dichos corregidores y
padres de la dicha prouincia. Y halló en ello todos los yndios, yndias ausentes, como tenían
tanto trauajo. Y demás desto, halló metido en su casa y solar Pedro Colla Quispe, Esteuan Ata
Pillo, y en su sementera Chinchay Cocha con ellos otros yndios por mandado deste dicho don
Diego Suyca, yndio tributarío.

Capítulo XXXVI: del viaje del autor a Lima, Pág. 1096 [1106]- 1097 [1107]

Responde el dicho español: “Hijo, como hombre que lo saue, te digo que tanbién fue unos
tienpos tiniente de corregidor don Pedro de Mena, hombre muy rrico del Collao. Ciendo tan
rrico, hizo este dicho corregidor quatro mil piesas de rropa de auasca [tejido corriente] para
meter a Potocí. Acimismo me lo hizo para mí y para el padre y comendero. Saued que las
hordenansas del señor don Francisco de Toledo y de los demás bizorreys son buenas para
yyndios [sic], que no para españoles. Que las hordenansas y leys están en Castilla de los
españoles. Somos libres. Y ací te digo que nos canséys. Texe, hila de priesa. Con eso acauarés y
se contentará ellos.”

Capítulo XXXVI: del viaje del autor a Lima, Pág. 1106 [1116]

Primeramente llorando con lágrimas, dixo a su señor el autor y le preguntó que ci estaua bibo
que toda la prouincia los pobres de Jesucristo an llorado de vuestra merced: “Y nuestro pueblo
solo hila y texe ochenta piesas de rropa de auasca[tejido corriente] y pide cien yndios
trageneadores y tanto rrescate que nos haze trauajar el dicho corregidor y los dichos padres y
tinientes y españoles del tanbo [mesón]. Señor, los demás prencipales questán nombrados de
yndios tributarios y bajos: don Carlos, don Cristóbal de León, don Diego Suyca, sólo quieren
rrecibir cohechos. Ancimismo pasamos muy gran daño en estas dichas minas de que un yndio
Guanca mayordomo, Juan Puxare del ayllo [parcialidad] a Lurin Uanca, que no paga tributo ni
cirue y nos castiga cruelmente, quitando los calsones, y nos esconde la tarea. Y en las minas de
Guancabilca acimismo le haze este dicho daño el minero llamado Juan Tomás de Contrerias.”

Capítulo XXXVI: del viaje del autor a Lima, Pág. 1109 [1119]

Y demás de eso, les dixo que un becitador de la Santa Yglecia llamado dotor Áuila y corregidor,
con color de dicille que son ydúlatras, les a quitado mucha cantidad de oro y plata y bestidos y
plumages y otras galanterías, bestidos de cunbe[tejido
a
fino], auasca [corriente], topos [prendedor], camigetas, porongos [vaso] , aquillas [vasija],
todo de plata y de oro. Los quales tenían para dansar y holgar en las fiestas y pasquas, Corpus
Criste del año y se los a lleuado todo de los pobres yndios. Y fuera desto, en el pueblo de San
Lorenso a dexado dos hijos uecitadores. Y demás desto, que hará la costa de comida
y mitas [prestación de trabajo] de todos ellos y de sus criados y los daños y otras cosas. Porque
tiene fabor de su señoría, desuella a los pobres de Jesucristo y no ay rremedio y no ay becita
para él.

Capítulo XXXVI: del viaje del autor a Lima, Pág. 1121 [1131]

“Dime, autor, ¿cómo se hará rrico los yndios?”


A de sauer vuestra Magestad que an de tener hazienda de comunidad que ellos les
llama sapci, de sementeras de maýs y trigo, papas, agí, magno [verdura seca], algodón,
uiña, obrage, teñiría, coca, frutales. Y que las donzellas y biudas hilen y texan dies mugeres
una piesa de rropa en un tercio de la comunidad, sapci. Y tengan ganados de Castilla y de la
tierra de su comunidad y sapci. Y de cada yndio o yndia tengan hazienda.
CAPITULO XXXII, Pág. 963 [977]

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