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Donde:
C es la capacidad calorífica, que en general será función de las variables de estado.
Q es el calor absorbido por el sistema.
ΔT la variación de temperatura
Donde:
La capacidad calorífica es, de este modo, una variable termodinámica y está perfectamente
definida en cada estado de equilibrio del sistema.
1.2.2 Capacidades caloríficas de sólidos y gases
La capacidad calorífica de los sólidos y gases depende, de acuerdo con el teorema de
equipartición de la energía, del número de grados de libertad que tiene una molécula, como se
explicará a continuación.
a) Gas monoatómico
Un gas monoatómico, como por ejemplo son los gases nobles tiene moléculas formadas por un
sólo átomo. Eso a que la energía de rotación, al ser la molécula casi puntual, pueda despreciarse.
Así en los gases monoatómicos la energía total está prácticamente toda en forma de energía
cinética de traslación. Como el espacio es tridimensional y existen tres grados de libertad de
traslación eso conduce de acuerdo con el teorema de equipartición a que la energía interna total
U de un gas ideal monoatómico y su capacidad calorífica CV vengan dadas por:
Donde T es la temperatura absoluta, N es el número de moléculas de gas dentro del sistema que
estudiamos, n el número de moles, k la constante de Boltzmann y R la constante universal de los
gases ideales. Así el calor específico molar de un gas ideal monoatómico es simplemente cv =
3R/2 o cp = 5R/2. Los gases monoatómicos reales también cumplen las anteriores igualdades
aunque de modo aproximado.
b) Gas diatómico
En un gas diatómico la energía total puede encontrarse en forma de energía cinética de traslación
y también en forma de energía cinética de rotación, eso hace que los gases diatómicos puedan
almacenar más energía a una temperatura dada. A temperaturas próximas a la temperatura
ambiente la energía interna y la capacidad caloríficas vienen dadas por:
Para temperaturas extremadamente altas, la energía de vibración de los enlaces empieza a ser
importante y los gases diatómicos se desvían algo de las anteriores condiciones. A temperaturas
aún más altas la contribución del movimiento término de los electrones produce desviaciones
adicionales. Sin embargo, todos los gases reales como el hidrógeno (H2), el oxígeno (O2), el
nitrógeno (N2) o el monóxido de carbono (CO), cumplen a temperaturas ambiente moderadas las
anteriores relaciones. Por tanto estos gases tienen calores específicos o capacidades caloríficas
molares cercanos a cv = 5R/2.
c) Gases poli atómicos
El teorema de equipartición para gases poliatómicos sugiere que los gases poliatómicos que tienen
enlaces "blandos" o flexibles y que vibran con facilidad con q frecuencias, deberían tener una
capacidad calorífica molar.
Donde r mide los grados de libertad rotacionales (r = 1 para moléculas lineales, r = 2 para
moléculas planas y r = 3 para moléculas tridimensionales). Sin embargo estas predicciones no se
cumplen a temperatura ambiente. La capacidad calorífica molar aumenta moderadamente a
medida que aumenta la temperatura. Eso se debe a efectos cuánticos que hacen que los modos
de vibración estén cuantizados y sólo estén accesibles a medida que aumenta la temperatura, y
la expresión (*) sólo puede ser un límite a muy altas temperaturas. Sin embargo, antes de llegar a
temperaturas donde esa expresión sea un límite razonable muchas moléculas se rompen por
efecto de la temperatura, no llegando nunca al anterior límite. Un tratamiento riguroso de la
capacidad calorífica requiere por tanto el uso de la mecánica cuántica, en particular de la mecánica
estadística de tipo cuántico.
En la tabla se puede ver que de los materiales comunes poseen una gran capacidad calorífica el
agua muros de agua, la tierra o suelo seco compactado (adobe, tapia), y piedras densas como el
granito junto a los metales como el acero. Estos se encuentran entre los 500 y 1000 kcal/m³ ºC.
Luego se encuentra otro grupo que va de 300 a 500 kcal/m³ ºC entre los que se ubica la mayoría
de los materiales usuales en la construcción actual, como el ladrillo, el hormigón, las maderas, los
tableros de yeso roca y las piedras areniscas.
En un último grupo se encuentra (3 a 35 kcal/m³ ºC), los aislantes térmicos de masa como la lana
de vidrio, las lanas minerales, el poliestireno expandido y el poliuretano expandido que por su "baja
densidad" debido a que contienen mucho aire poseen una capacidad calorífica muy baja pero
sirven como aislantes térmicos.
Un caso especial es el aire (0,29 kcal/m³·K; 1,214 J/m³·K), que sirve como un medio para
transportar el calor en los sistemas pasivos pero no para almacenar calor en su interior.
Ecuaciones básicas:
Cantidad de sustancia
Cuando se mide el calor específico en ciencia e ingeniería, la cantidad de sustancia es a menudo
de masa, ya sea en gramos o en kilogramos, ambos del SI. Especialmente en química, sin
embargo, conviene que la unidad de la cantidad de sustancia sea el mol al medir el calor
específico, el cual es un cierto número de moléculas o átomos de la sustancia. Cuando la unidad
de la cantidad de sustancia es el mol, el término calor específico molar se puede usar para referirse
de manera explícita a la medida; o bien usar el término calor específico másico, para indicar que se
usa una unidad de masa.
Conceptos relacionados
Hay dos condiciones notablemente distintas bajo las que se mide el calor específico y éstas se
denotan con sufijos en la letra c. El calor específico de los gases normalmente se mide bajo
condiciones de presión constante (Símbolo: cp). Las mediciones a presión constante producen
valores mayores que aquellas que se realizan a volumen constante (cv), debido a que en el primer
caso se realiza un trabajo de expansión.
El cociente entre los calores específicos a presión constante y a volumen constante para una
misma sustancia o sistema termodinámico se denomina coeficiente adiabático y se designa
mediante la letra griega (gamma). Este parámetro aparece en fórmulas físicas, como por ejemplo
la de la velocidad del sonido en un gas ideal.
El calor específico de las sustancias distintas de los gases monoatómicos no está dado por
constantes fijas y puede variar un poco dependiendo de la temperatura [2]. Por lo tanto, debe
especificarse con precisión la temperatura a la cual se hace la medición. Así, por ejemplo, el calor
específico del agua exhibe un valor mínimo de 0,99795 cal/(g·K) para la temperatura de 34,5 °C,
en tanto que vale 1,00738 cal/(g·K) a 0 °C. Por consiguiente, el calor específico del agua varía
menos del 1% respecto de su valor de 1 cal/(g·K) a 15 °C, por lo que a menudo se le considera
como constante.
La presión a la que se mide el calor específico es especialmente importante para gases y líquidos.
Unidades
Unidades de calor
La unidad de medida del calor en el Sistema Internacional es el joule (J). La caloría (cal) también
se usa frecuentemente en las aplicaciones científicas y tecnológicas. La caloría se define como la
cantidad de calor necesario para aumentar en 1 °C la temperatura de un gramo de agua destilada,
en el intervalo de 14,5 °C a 15,5 °C .Es decir, tiene una definición basada en el calor específico.
Grados de libertad
El comportamiento termodinámico de las moléculas de los gases monoatómicos, como el helio y
de los gases biatómicos, el hidrógeno es muy diferente. En los gases monoatómicos, la energía
interna corresponde únicamente a movimientos de traslación. Los movimientos traslacionales son
movimientos de cuerpo completo en un espacio tridimensional en el que las partículas se mueven
e intercambian energía en colisiones en forma similar a como lo harían pelotas de goma
encerradas en un recipiente que se agitaran con fuerza. (vea la animación aquí). Estos
movimientos simples en los ejes dimensionales X, Y, y Z implican que los gases monoatómicos
sólo tienen tres grados de libertad traslacionales.
Las moléculas con mayor atomicidad, en cambio tienen varios grados de libertad internos,
rotacionales y vibracionales, adicionales ya que son objetos complejos. SE comportan como una
población de átomos que pueden moverse dentro de una molécula de distintas formas (ver la
animación a la derecha). La energía interna se almacena en estos movimientos internos. Por
ejemplo, el Nitrógeno, que es una molécula diatómica, tiene cinco grados de libertad disponibles:
los tres traslacionales más dos rotacionales de libertad interna. Cabe destacar que la capacidad
calorífica molar a volumen constante de los gases monoatómicos es , siendo R la Constante
Universal de los gases ideales, mientras que para el Nitrógeno (biatómico) vale , lo cual muestra
claramente la relación entre los grados de libertad y el calor específico.
Masa molar
Una de las razones por las que el calor específico adopta diferentes valores para diferentes
sustancias es la diferencia en masas molares, que es la masa de un mol de cualquier elemento,
la cual es directamente proporcional a la masa molecular del elemento, suma de los valores de las
masas atómicas de la molécula en cuestión. La energía calorífica se almacena gracias a la
existencia de átomos o moléculas vibrando. Si una sustancia tiene una masa molar más ligera,
entonces cada gramo de ella tiene más átomos o moléculas disponibles para almacenar energía.
Es por esto que el hidrógeno, la sustancia con la menor masa molar, tiene un calor específico tan
elevado; porque un gramo de esta sustancia contiene una cantidad tan grande de moléculas.
Una consecuencia de este fenómeno es que, cuando se mide el calor específico en términos
molares la diferencia entre sustancias se hace menos pronunciada, y el calor específico del
hidrógeno deja de ser atípico. En forma correspondiente, las sustancias moleculares (que también
absorben calor en sus grados internos de libertad), pueden almacenar grandes cantidades de
energía por mol si se trata de moléculas grandes y complejas, y en consecuencia su calor
específico medido en términos másicos es menos notable.
Ya que la densidad net de un elemento químico está fuertemente relacionada con su masa molar,
existe en términos generales, una fuerte correlación inversa entre la densidad del sólido y su cp
(calor específico a presión constante medido en términos másicos). Grandes lingotes de sólidos
de baja densidad tienden a absorber más calor que un lingote pequeño de un sólido de la misma
masa pero de mayor densidad ya que el primero por lo general contiene más átomos. En
consecuencia, en términos generales, hay una correlación cercana entre el volumen de un
elemento sólido y su capacidad calorífica total. Hay sin embargo, muchas desviaciones de esta
correlación general.
Enlaces puente de hidrógeno
Las moléculas que contienen enlaces polares de hidrógeno tienen la capacidad de almacenar
energía calorífica en éstos enlaces, conocidos como puentes de hidrógeno.
2. Conductividad térmica
La conductividad térmica es una propiedad física de los materiales que mide la capacidad de
conducción de calor. En otras palabras, la conductividad térmica es también la capacidad de una
sustancia de transferir la energía cinética de sus moléculas a otras adyacentes o a sustancias con
las que está en contacto. En el Sistema Internacional de Unidades la conductividad térmica se
mide en W/(K·m) (equivalente a J/(m·s·K) )
La conductividad térmica es una magnitud intensiva. Su magnitud inversa es la resistividad
térmica, que es la capacidad de los materiales para oponerse al paso del calor. Para un material
Cuanto mayor sea su conductividad térmica, un material será mejor conductor del calor. Cuanto
menor sea, el material será más aislante. Por ejemplo, el cobre tiene una conductividad de 380
vatios por kelvin y metro, y es más de 10 000 veces mejor conductor del calor que el poliuretano
(0,035 vatios por kelvin y metro).
Origen molecular de la conductividad
Cuando se calienta la materia la energía cinética promedio de sus moléculas aumenta,
incrementándose su nivel de agitación. La conducción de calor, que a nivel macroscópico puede
modelarse mediante la ley de Fourier, a nivel molecular se debe a la interacción entre las moléculas
que intercambian energía cinética sin producir movimientos globales de materia. Por tanto la
conducción térmica difiere de la convección térmica en el hecho de que en la primera no existen
movimientos macroscópicos de materia, que sí ocurren en el segundo fenómeno. Todas las formas
de materia condensada tienen la posibilidad de transferir calor mediante conducción térmica,
mientras que la convección térmica en general solo resulta posible en líquidos y gases. De hecho
los sólidos transfieren calor básicamente por conducción térmica, mientras que para gradientes de
temperatura importante los líquidos y los gases transfieren la mayor parte del calor por
convección.[cita requerida]
Conductividades térmicas de los materiales
La conductividad térmica es una propiedad de los materiales que valora la capacidad de transmitir
el calor a través de ellos. Es elevada en metales y en general en cuerpos continuos, es baja en
polímeros, y muy baja en algunos materiales especiales como la fibra de vidrio, que se denominan
por ello aislantes térmicos. Para que exista conducción térmica hace falta una sustancia, de ahí
que es nula en el vacío ideal, y muy baja en ambientes donde se ha practicado un vacío bajo.
El coeficiente de conductividad térmica (λ) caracteriza la cantidad de calor necesario por m2, para
que atravesando durante la unidad de tiempo, 1 m de material homogéneo obtenga una diferencia
de 1 °C de temperatura entre las dos caras. Es una propiedad intrínseca de cada material que
varía en función de la temperatura a la que se efectúa la medida, por lo que suelen hacerse las
mediciones a 300 K para poder comparar unos elementos con otros. Cuando el elemento no es
homogéneo, pero su heterogeneidad se distribuye uniformemente, como por ejemplo, un muro de
ladrillo con juntas de mortero, se obtiene en laboratorio un λ útil, media ponderada de los
coeficientes de cada material.
Es un mecanismo molecular de transferencia de calor que ocurre por la excitación de las
moléculas. Se presenta en todos los estados de la materia pero predomina en los sólidos.
La tabla que se muestra a continuación se refiere a la capacidad de ciertos materiales para
transmitir el calor.
Titanio 21,9
H
H
e
Li
Be N
0,84 B C N O F
2 e
7
Na Mg Al Si
P S Cl Ar
1,41 1,56 2,37 1,48
K Sc Ti V Cr Mn Fe Ni Ga Ge
Ca Co Cu Zn As
1,02 0,15 0,21 0,30 0,93 0,078 0,80 0,90 0,40 0,59 Se Br Kr
2 1 4,01 1,16 0,5
4 8 9 7 7 2 2 7 6 9
Rb Sr Y Zr Nb Pd In Sn I
Mo Tc Ru Rh Ag Cd Sb X
0,58 0,35 0,17 0,22 0,53 0,71 0,81 0,66 Te 0,4
1,38 0,506 1,17 1,5 4,29 0,968 0,243 e
2 3 2 7 7 8 6 6 5
Cs Ba Ta Os Pt Hg Tl Pb Bi
Hf W Re Ir Au Po R
0,35 0,18 * 0,57 0,87 0,71 0,083 0,46 0,35 0,078 At
0,23 1,74 0,479 1,47 3,17 0,2 n
9 4 5 6 6 4 1 3 7
O
Fr Ra ** Rf Db Sg Bh Hs Mt Ds Rg Cn Nh Fl Mc Lv Ts
g
La Ce Pr Nd Eu Gd Tb Dy Er Tm Lu
Pm Sm Ho Yb
* 0,13 0,11 0,12 0,16 0,13 0,10 0,11 0,10 0,14 0,16 0,16
0,15 0,133 0,162 0,385
4 3 5 5 9 5 1 7 5 9 4
U Np Pu
Th
** Ac Pa 0,27 0,06 0,067 Am Cm Bk Cf Es Fm Md No Lr
0,54
6 3 4
2. DILATACION
Los efectos más comunes que causan las variaciones de temperatura en cuerpos o sustancias,
son los cambios de sus dimensiones y de fase.
Cuando un cuerpo o sustancia, sufre un cambio en sus dimensiones, pero no de fase debido a la
temperatura; se trata de un proceso de dilatación.
CAUSA DE LA DILATACIÓN
En un sólido las moléculas tienen una posición razonablemente fija dentro de él. Cada átomo de
la red critalina vibra sometido a una fuerza asociada a un pozo de potencial, la amplitud del
movimiento dentro de dicho pozo dependerá de la energía total de átomo o molécula. Al absorber
calor, la energía cinética promedio de las moléculas aumenta y con ella la amplitud media del
movimiento vibracional ya que la energía total será mayor tras la absorción de calor. El efecto
combinado de este incremento es lo que da el aumento de volumen del cuerpo.
En los gases el fenómeno es diferente, ya que la absorción de calor aumenta la energía cinética
media de las moléculas lo cual hace que la presión sobre las paredes del recipiente aumente. El
volumen final por tanto dependerá en mucha mayor medida del comportamiento de las paredes.
Según su naturaleza cada cuerpo posee lo que se llama coeficiente de dilatación térmica, cuyo
símbolo es “alfa” y su unidad de medida es 1/°C o °C-1, algunos valores son:
PLOMO ALUMINIO
29*10^-6 29*10^-6
HIELO BRONCE
52*10^-6 29*10^-6
CUARZO COBRE
0,6*10^-6 29*10^-6
ACERO LATON
12*10^-6 29*10^-6
ORO VIDRIO(PIREX)
14*10^-6 29*10^-6
Ø Dilatación lineal
Esto se lleva a cabo en materiales, como son los alambres, varillas o barras, al calentarse
aumentan su longitud, y por tanto su volumen
r=2[Lf-Lo/Lo (Tf-To)]
Ø Dilatación volumétrica
Esto se refiere al aumento del tamaño de los cuerpos en sus tres dimensiones por efecto de la
dilatación, y podemos conoces este valor con la siguiente formula:
B=3[Lf-Lo/Lo(Tf-To)]