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SIGUIENTES TÓPICOS:
EL IUS PUNIENDI
El IUS PUNIENDI en pocas palabras es la facultad o derecho del Estado a
castigar y para ello se sustenta o legitima en varias teorías tales como las
Absolutas, las Relativas y las Mixtas.
Sobre estas Teorías Absolutas debemos poner nuestro enfoque crítico en tres
aspectos: el primero relativo a que la justicia no puede entenderse realizada
por la pura represalia sin finalidad; el segundo que no puede propugnarse la
restauración de un daño causando otro sin dirigirse a producir un bien; y
tercero que la igualdad entre la ofensa y el castigo no puede tomarse como
algo determinante aunque si debe tomarse en cuenta.
Las Teorías Mixtas son las que toman en cuenta para justificar las Penas el
carácter utilitario como represivo de la Ley y en ellas se enmarcan
el Sistema Anglosajón, el sistema Alemán y el Cubano.
El Sistema Alemán distingue tres momentos por los que pasa la Pena; el
Momento Legislativo donde se hace conminación legal abstracta (prevención
general que hace el legislador); Momento Judicial o de Medición de la Pena,
donde se pone de manifiesto la prevención especial, la justicia (represión o
retribución entre Pena y Delito) y en cierto grado la prevención
general( escarmiento para la sociedad ) y el Momento de Ejecución donde se
pone de manifiesto la prevención especial (resocialización, lograr la
reeducación del ciudadano ). A esta Teoría Mixta se suman los tratadistas
españoles Mir Puig y Muñoz Conde.
El Sistema Cubano también se afilia a las Teorías Mixta y mantiene el concepto
de ¨ Justificación de la Pena ¨, señalando que la Pena se justifica por su utilidad
(por sus efectos preventivos generales y especiales), pero solo dentro de
ciertos límites en los que se expresa la idea de justicia distributiva propia de un
Estado de Derecho.
Debemos concluir que el IUS PUNIENDI no es más que la facultad del Estado
para aplicar una Pena o Medida de Seguridad (dígase derecho de castigar) o
en otras palabras el Derecho del Estado para sancionar a través de los
Tribunales legalmente constituidos.
“Por los principios comienzan las ciencias y por lo tanto ellos explican todos y
cada uno de los conocimientos de cada ciencia particular pero se encuentran
fuera de esta y no pueden ser explicados por ello”.
“Los principios por consiguiente son el mejor punto de partida (se remite a
Aristóteles) pero de ninguna manera representan un punto de llegada o estado
terminal del conocimiento, para derivar conocimiento, los principios deben ser
desarrollados y concretados, de tal modo que el conocimiento que se quede en
ellos no pasa de la generalidad. En el campo jurídico esto significa que han de
ser puestas en relación de sentido y armonía, con las normas a que se refieren
y a las que inspiran. El principio que no se aplica, no sólo no sirve para nada,
sino que en verdad no es “principio de nada”.