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UNIVERSIDAD DEL CARIBE

(UNICARIBE)

CARRERA DE LICENCIATURA EN DERECHO

MONOGRAFÍA PARA OPTAR AL TÍTULO DE LICENCIATURA EN


DERECHO

DETERMINACIÓN DE LOS CONFLICTOS QUE PRODUCEN LAS


CRISIS MATRIMONIALES EN LOS JÓVENES ENTRE LAS EDADES
DE 18-25, CASO: LOS ALCARRIZOS, AÑO 2018

SUSTENTADO POR:
ESTANIR YALTHAIRA PIMENTEL BAEZ
LISSY KATHERINE RAMIREZ SANCHEZ
PERVI LEANDRO VILORIO MENDEZ

ASESOR:
JOSE MANUEL VOLQUEZ, M.A.

SANTO DOMINGO D.N., REPÚBLICA DOMINICANA


2019
UNIVERSIDAD DEL CARIBE
(UNICARIBE)

CARRERA DE LICENCIATURA EN DERECHO

MONOGRAFÍA PARA OPTAR AL TÍTULO DE LICENCIATURA EN


DERECHO

DETERMINACIÓN DE LOS CONFLICTOS QUE PRODUCEN LAS


CRISIS MATRIMONIALES EN LOS JÓVENES ENTRE LAS EDADES
DE 18-25, CASO: LOS ALCARRIZOS, AÑO 2018

SUSTENTADO POR:
ESTANIR YALTHAIRA PIMENTEL BAEZ
2014-4275
LISSY KATHERINE RAMIREZ SANCHEZ
2014-4157
PERVI LEANDRO VILORIO MENDEZ
2006-4142

ASESORA:
JOSE MANUEL VOLQUEZ, M.A.

Los conceptos emitidos en la realización


de este aten proyecto son de total
responsabilidad del sustentante.

SANTO DOMINGO D.N., REPÚBLICA DOMINICANA


2019
DETERMINACIÓN DE LOS CONFLICTOS QUE PRODUCEN LAS
CRISIS MATRIMONIALES EN LOS JÓVENES ENTRE LAS EDADES
DE 18-25, CASO: LOS ALCARRIZOS, AÑO 2018
DEDICATORIA

A mi dios, por darme la fuerza para alcanzar y cumplir este sueño.

A mis hijos, Frangel Josué sosa Ramírez y Jordan Frankelly sosa Ramírez, por ser
mi motor de impulso cada día.

A mis padres, Pascual Ramírez y Tomasa Sánchez, por su apoyo incondicional en


esta hermosa travesía.

A mi hermana, María Rodríguez Sánchez, por ser mi apoyo y creer siempre en mí.

A mi esposo, Windy de los Santos Manzueta, por haberme acompañado en cada


momento sin soltar mi mano nunca.

LISSY KATHERINE RAMIREZ SANCHEZ

i
AGRADECIMIENTO

Muy especialmente agradezco al señor todopoderoso, por sostenerme reafirmando


en mí, la fortaleza para nunca desfallecer ni soltar este anhelo que hoy se
materializa.

A mis padres, en especial a mi madre Tomasa Sánchez, pos su apoyo y ser siempre
esa voz de aliento que me inspiraba a dar todo de mi y a esforzarme, pero sobretodo,
gracias por creer en mí, te amo mami.

A mis hijos, Frangel Josué sosa Ramírez y Jordan Frankelly sosa Ramírez, esto es
para ustedes.

A cada uno de mis maestros, su legado de enseñanza vivirá por siempre en mi,
gracias por tanto.

A mi esposo Windy de los santos manzueta por sacrificar horas de ausencia y por
ser mi mano derecha.

A mi amigo, Robert Badhir Yara fajardo, por ser siempre esa mano amiga
incondicional.

A mis compañeros, Pervi Leandro vilorio Méndez y Estanir Yathaira Pimentel Báez,
el camino ha merecido la pena y agradezco a dios haber tenido tan excelente equipo
de trabajo, éxitos, los quiero.

LISSY KATHERINE RAMIREZ SANCHEZ

ii
DEDICATORIA

Gracias a Dios todopoderoso.

Gracias a mi madre Nidia Méndez quien siempre me insistió y me dijo lo único que
me llenará de orgullo es un diploma en la pared, gracias por tu apoyo mami.

Mi querida compañera mi amor y esposa Ana Almonte.

A mis 3 hijos, también lo hice por ustedes.

A mi querido Profesor y director del colegio, el profesor Peguero muchas gracias.

Al personal docente y facilitador de Unicaribe, mis agradecimientos fueron muchas


menciones generales.

Compañeros y compañeras de clases, gracias.

Gracias a mi asesor del monográfico, Lic. José Manuel Volquez, por tan buenos
consejos durante el proceso.

Gracias Lissy Katherine Ramírez Sánchez y Estanir Yalthaira Pimentel Báez por
aceptarme en su grupo, eternamente agradecido.

PERVI LEANDRO VILORIO MENDEZ

iii
ÍNDICE

DEDICATORIA .............................................................................................................. i
AGRADECIMIENTO ..................................................................................................... ii
INTRODUCCIÓN ........................................................................................................ 1
ANTECEDENTES DE LA INVESTIGACIÓN ............................................................... 3
PLANTEAMIENTO Y SISTEMATIZACIÓN DEL PROBLEMA..................................... 8
JUSTIFICACIÓN DE LA INVESTIGACIÓN ............................................................... 10
OBJETIVOS GENERALES Y ESPECÍFICOS ........................................................... 11
METODOLOGÍA DE INVESTIGACIÓN ..................................................................... 12
CAPÍTULO I
CARACTERÍSTICAS GENERALES DEL SECTOR PUEBLO NUEVO DE LOS
ALCARIZOS
1.1. Historia y evolución del sector ............................................................................ 13
1.2. Infraestructura civil, avenidas principales, puentes y accesos ........................... 18
1.3. Elementos culturales .......................................................................................... 19
1.4. Instituciones educativas presente en el sector de Pueblo Nuevo ....................... 20
1.5. Procesos económicos del sector ........................................................................ 21
1.6. Centros comerciales ........................................................................................... 23
1.7. División territorial, política y social ...................................................................... 24
1.8. Demografía presente .......................................................................................... 25
CAPÍTULO II
TEORÍAS REFERENTES A LOS MATRIMONIOS Y LAS CRISIS MATRIMONIALES
2.1. Concepto y etimología del matrimonio ............................................................... 26
2.2. Definición del divorcio y sus tipos ....................................................................... 30
2.2.1. El procedimiento ordinario ............................................................................... 31
2.2.2. El procedimiento de divorcio extraordinario o Divorcio Al vapor ...................... 33
2.2.3. Procedimiento de divorcio por mutuo consentimiento ..................................... 34
2.3. Características generales ................................................................................... 37

iv
2.4. Efectos jurídicos ................................................................................................. 37
2.5. La Separación de Cuerpos ................................................................................. 38
2.6. Código Civil de la República Dominicana .......................................................... 39
2.7. Ley número 198-11 de matrimonios Religiosos ................................................. 44
CAPÍTULO III
CAUSAS QUE PRODUCEN LAS CRISIS MATRIMONIALES
3.1. Posibles causas de crisis matrimonial ................................................................ 50
3.2. Protagonistas de la crisis matrimonial ................................................................ 59
3.2. Relación de matrimonios entre menores de edad .............................................. 62
CAPITULO IV
ANÁLISIS DE SENTENCIA SOBRE ASUNTOS MATRIMONIALES EN LA
JURISDICCIÓN DOMINICANO
4.1. Análisis de la sentencia TC/0117/16 sobre partición de bienes de la comunidad
matrimonial ................................................................................................................ 65
4.2. Análisis de la sentencia TC/0007/17 sobre continuidad de los derechos en el
matrimonio................................................................................................................. 71

CONCLUSIÓN .......................................................................................................... 81
RECOMENDACIONES ............................................................................................. 83
REFERENCIAS ......................................................................................................... 85

v
INTRODUCCIÓN

La juventud es una experiencia que puede configurar el nivel de dependencia de un


individuo, que se puede marcar de varias maneras según diferentes perspectivas
culturales. La experiencia personal está marcada por las normas o tradiciones
culturales de un individuo, mientras que el nivel de dependencia de un joven significa
la medida en que aún depende de su familia emocional y económicamente. Además
la tasa de desempleo juvenil en República Dominicana se sitúa en un 29.4 %, la más
alta de América Latina y el Caribe, lo que contribuye a una crisis económica en la
juventud lo cual no le permite sostener los gastos diarios de una familia, teniendo
gran influencia en las altas tasas de divorcio.

En los países occidentales se habla de un apocalipsis del matrimonio, muchos


jóvenes todavía se van a casar por una variedad de razones: desde lo cultural a lo
social y al buen amor a la antigua usanza. La tendencia a la baja no ha sido un
repentino divorcio, sino más bien una larga y desordenada ruptura. Aunque esta
tendencia no existe en los países orientales, en la India, el 74% de las mujeres de 20
a 24 años de edad se casaron en 2006, según datos de matrimonio compilados por
la ONU. El matrimonio también sigue siendo la norma en China. Las personas que
aún están solteras después de cierta edad estarán bajo una gran presión de la
familia y la sociedad.

En algunas partes del mundo, el matrimonio arreglado, el matrimonio infantil, la


poligamia y, a veces, el matrimonio forzado, se puede practicar como una tradición
cultural. A la inversa, tales prácticas pueden ser prohibidas y penalizadas en partes
del mundo por preocupaciones relacionadas con la violación de los derechos de las
mujeres o la violación de los derechos de los niños (tanto niños como mujeres) y por
el derecho internacional.

Las sociedades a menudo han impuesto restricciones al matrimonio con sus


familiares, aunque el grado de relación prohibida varía ampliamente. Los

1
matrimonios entre padres e hijos, o entre hermanos completos, con pocas
excepciones, se han considerado incesto y prohibido. En la República Dominicana el
incesto es definido por el artículo número 332-1 del Código Penal Dominicano,
además de que explica Constituye incesto todo acto de naturaleza sexual realizado
por un adulto mediante engaño, violencia, amenaza, sorpresa o constreñimiento.

Esta investigación se realiza en 4 capítulos, en el capítulo I se describen las


características generales del sector pueblo nuevo de Los Alcarizos, haciendo una
historia y describiendo la evolución del sector, además de una informegrafía de la
infraestructura civil, avenidas principales, puentes y accesos, también se analizan
sus elementos culturales, instituciones educativas presente en el sector de Pueblo
Nuevo y la formación de los procesos económicos del sector y funcionamiento de los
centros comerciales, así como una descripción de la división territorial, política y
social y la demografía presente.

En el capítulo II se explican los conceptos y tipos de matrimonio en la legislación de


la República Dominicana empezando con la etimología del matrimonio y sus
características generales, analizando especialmente los efectos jurídicos atendiendo
a los tipos de matrimonios que existen como son el matrimonio religioso y el
matrimonio civil y los diferentes regímenes matrimoniales existente en la jurisdicción
dominicana entre lo que se encuentran el régimen sin comunidad, el régimen de
separación de bienes o strictu sensu y el régimen dotal.

En el capítulo III se explican las estadísticas en materia de matrimonio en la


legislación dominicana, analizando estadística de matrimonio en República
Dominicana, la relación de matrimonios entre menores de edad y crisis matrimonial y
estadísticas de divorcio en República Dominicana. El capítulo IV describe análisis de
sentencia sobre asuntos matrimoniales en la jurisdicción dominicana describiendo las
sentencia TC/0117/16 sobre partición de bienes de la comunidad matrimonial y
sentencia TC/0007/17 sobre continuidad de los derechos en el matrimonio y la
comunidad matrimonial formada por los esposos y como estos derechos son
tutelados por la constitución dominicana.
2
ANTECEDENTES DE LA INVESTIGACIÓN

El matrimonio es una antigua institución social, presente en gran cantidad de


culturas, que establece un vínculo conyugal entre personas naturales, reconocido y
consolidado por medio de prácticas comunitarias y normas legales, consuetudinarias,
religiosas o morales. La unión matrimonial establece entre los cónyuges, y en
muchos casos también entre las familias de origen de estos, derechos y obligaciones
que varían considerablemente según las normas que lo regulan en cada sociedad. El
matrimonio es una realidad que tiene su propio modo de ser, que puede y debe ser
regulado por el ordenamiento jurídico, pero no es creada ni definida por las leyes.
(Capitant, 1977).

En las sociedades actuales existen dos formas principales de matrimonio: matrimonio


civil y matrimonio religioso. En el primer caso son las leyes del Estado las que
establecen los derechos, deberes y requisitos, mientras que en el segundo caso son
las normas o costumbres de la religión bajo la que se celebra. La coexistencia de
ambas formas y el reconocimiento de su validez varían de acuerdo a cada sociedad.

El canon contempla solamente tres tipos de matrimonio: el sólo rato, el rato y


consumado y el putativo. Sin embargo, nosotros estudiaremos otros tipos de
matrimonio considerados en el Código, y algunos más que, si bien no se encuentran
en el Código, tienen su importancia en el sistema matrimonial canónico. La ley
reconoce, con los mismos efectos jurídicos, dos clases de matrimonios: el civil, que
es el que se contrae de acuerdo con los preceptos de la ley civil, y el religioso, que
es aquel que se contrae de acuerdo a las normas y cánones de las iglesias
establecidas en el país de conformidad a las leyes. (Párrafo 2, articulo 2, Ley número
198-11 que regula los matrimonios religiosos y sus efectos en la República
Dominicana)

3
Las normas matrimoniales están vinculadas con aquellas que regulan las relaciones
sexuales (incesto, adulterio, exclusividad sexual, monogamia, poligamia), la
reproducción y la filiación de los hijos, según las reglas del sistema de parentesco
vigente. El matrimonio suele estar estrechamente relacionado con la familia y en
algunos casos constituye el núcleo de la misma. Las reglas sobre finalización del
matrimonio incluyen aquellas referidas al divorcio. (Pérez Méndez, 2010).

El año 2013 se empezó a registrar otro tipo de matrimonio religioso al implementar la


Ley 192-11 que reconoce efectos civiles a los matrimonios religiosos celebrados por
las iglesias no católicas establecidas en la República Dominicana. La primera boda
amparada bajo esta ley se realizó el 28 de agosto de 2013 con las nupcias de una
pareja miembro de la denominación Testigos de Jehová. (República Dominicana, ley
número 198-11 de matrimonio religioso)

Juana Santos Hernández y José Armando Turbí Pérez, en el año 2014, en la


Universidad Autónoma de Santo Domingo, trabajaron la investigación Diferentes
regímenes matrimoniales en la legislación dominicana, el objetivo general de la
misma fue investigar e identificar los diferentes regímenes de separación de bienes
establecidos por nuestro ordenamiento jurídico, así como saber la fundamentación,
envergadura, base legal, particularidades y características de los regímenes que
comprenden esta categoría, con el propósito de enriquecer el acervo intelectual para
el buen desenvolvimiento profesional.

Metodológicamente, la elaboración de este trabajo se basó en investigación


documental, se hicieron consulta de fuentes bibliográficas doctrinales, Códigos,
Leyes, así como las páginas del internet, las cuales no sirvieron como marco teórico
principal para la realización del mismo.

Las conclusiones a la que llegaron fueron que se pudo entender que los diferentes
regímenes de separación de bienes que contemplan la legislación vigente, tienen
una característica similar la cual consiste en que no hay patrimonio en común de los

4
bienes de los cónyuges, pero cada uno de estos regímenes tienen sus propias
características que lo diferencia a cada uno de los demás.

En principio la legislación no autorizaba a la mujer para enajenar sus bienes


inmuebles, sin el consentimiento especial del marido o sin autorización judicial.
Luego, atendiendo a los cambios actuales donde la mujer ha logrado superarse
profesionalmente y sus aportes ayudan al sustento del hogar junto con el marido, el
legislador instauró el régimen de separación que tiende fundamentalmente a proteger
el patrimonio de cada uno de los esposos. La pareja que decida contraer matrimonio
bajo cualesquiera de los regímenes que reglamente la separación de bienes, debe
cumplir con las formalidades requeridas para estos casos, es decir los cónyuges
deben declarar su voluntad ante un Notario Público, con anterioridad a la celebración
del casamiento, y luego depositar por ante el Oficial del Estado Civil correspondiente,
el acto auténtico instrumentado a estos fines debidamente registrado y notificado.
Dentro de los diversos regímenes matrimoniales donde existe separación de bienes
regulados por la normativa jurídica nacional, se consagran 1) el régimen sin
comunidad; 2) el régimen de separación de bienes, y el 3) el régimen dotal.

Además, se pudo observar que los legisladores han procurado adecuar dichos
regímenes acordes con los cambios actuales, y que por consiguiente han introducido
modificaciones al Código Civil en procura de salvaguardar los bienes propios de los
cónyuges que deciden contraer matrimonio bajo cualquiera de ellos, pero sobre todo
y lo más importante le otorga a la mujer la capacidad de administración y de goce de
sus bienes. Sin lugar a dudas, que esta investigación que finaliza nos dejan un
legado de conocimientos esenciales y satisfactorios de haber logrado ampliar el
intelecto para el ejercicio profesional.

José Adrián Sena Hernández y Miguel Ángel Castro Jiménez, en el año 2014, en la
universidad dominicana O & M, El bien de familia y el matrimonio en la
legislación dominicana, el objetivo general del mismo fue describir los elementos
constitutivos de la unión marital de hecho, el método de investigación fue el analítico,
a través del mismo se observaron el comportamiento jurídico y social de las personas
5
al momento de decidir sobre los bienes de familia y las leyes que intervienen en su
proceso administrativo.

Las conclusiones a la que llegaron fueron que la protección de la familia es de


carácter constitucional, el numeral 2 del artículo 55 de la constitución de la República
Dominicana. Expresa: el estado garantizara la protección de la familia. El bien de
familia es inalienable e inembargable, de conformidad con la ley. El patrimonio
familiar es uno de los elementos más importantes dentro de la familia y que juega un
papel fundamental en la estabilidad económica de esta. Dentro de este patrimonio
familiar el Estado ha realizado esfuerzos por preservar el Bien de Familia.

El bien de familia podrá comprender sea una casa, o una porción de una casa, un
piso, departamento, vivienda o local independiente de un edificio, siempre que su
derecho de propiedad esté registrado de conformidad con el régimen establecido por
la Ley No. 5038, del 21 de noviembre de 1958; o una propiedad agrícola. Podrá
también comprender a la vez una casa y las tierras contiguas o vecinas, explotadas
por la familia, o una casa con tienda y taller y el material y herramientas de que estén
provistos, ocupadas y explotadas por una familia de artesanos.

La constitución del bien de Familia no puede producirse sobre bien gravado de un


privilegio o una hipoteca, sea convencional, sea judicial, o de anticresis, cuando los
acreedores han tomado inscripción anteriormente al acto constitutivo, o a más tardar,
en el plazo fijado en el art9 de esta Ley. Las hipotecas legales, aun las inscriptas o
que nazcan antes de la expiración de este plazo, no hacen obstáculo a la
constitución y conservan su efecto. Las hipotecas legales que tomen nacimiento
posteriormente podrán ser válidamente inscritas pero el ejercicio del derecho de
persecución que confieren quedara suspendido hasta la desafectación del bien de
familia.

Mariana Valera y Marco Julio Tapia Guerrero, en el año 2016, en la Universidad


Tecnológica de Santiago (UTESA), trabajaron el tema Diversas formas de cómo

6
anular un matrimonio en República Dominicana, el objetivo general de la misma
fue Explicar partiendo del análisis de sus concepciones y las leyes que la sustentan
las teorías sobre la nulidad del matrimonio. Esta investigación se realiza a partir del
método bibliográfico, analizando las diversas informaciones obtenidas. El cual
contiene una hoja de presentación, índice, introducción, propósitos de la
investigación, objetivos generales y específicos, desarrollo, conclusión y bibliografía.
Utilizamos este método para profundizar en la teoría de varios autores, donde hemos
recopilado informaciones previas.

El matrimonio realizado sin el consentimiento libre de ambos esposos o de uno de


ellos, no puede ser impugnado más que por los contrayentes o por aquel de ellos
cuyo consentimiento no haya sido libre. Cuando haya habido error en la persona, el
matrimonio podrá únicamente ser impugnado por el cónyuge que haya padecido el
error. En el caso del artículo precedente, no es admisible la demanda de nulidad, si
los esposos hubieren hecho vida común continuada durante los seis meses
posteriores al momento en que el cónyuge hubiere recobrado su plena libertad de
acción o en que hubiere reconocido el error. El matrimonio contraído sin el
consentimiento de los padres, de los ascendientes, o del consejo de familia, en los
casos en que es necesario éste, no puede ser impugnado sino por las personas cuyo
consentimiento era indispensable, o por aquel de los cónyuges que tuviere necesidad
del consentimiento.

No puede intentarse la acción de nulidad ni por los cónyuges ni por aquellos cuyo
consentimiento era preciso, siempre que hubiesen previamente y de una manera
expresa o tácita, aprobado el matrimonio, o cuando hubieren dejado transcurrir un
año sin hacer reclamación alguna, a pesar de tener conocimiento del matrimonio.
Tampoco puede ser intentado por el cónyuge, cuando haya dejado transcurrir un año
después de cumplir la mayor edad en que ya no es necesario el consentimiento.
Todo matrimonio contraído en contravención a las prescripciones contenidas en los
artículos 144, 147, 161, 162 y 163, puede ser impugnado por los mismos esposos, o
por todos aquellos que en ello tengan interés, y por el Ministerio Público.

7
PLANTEAMIENTO Y SISTEMATIZACIÓN DEL PROBLEMA

En el Distrito Nacional se estimó una población de 2.731.294 en 2002, y con una


extensión territorial de 1400.79 km². Según la proyección del Consejo Nacional de
Población y Familia (CONAPOFA), para el 2006 se incrementó hasta llegar a los
2.973.728 de habitantes, lo que arroja una densidad poblacional de 2,122.89 hàb/
km². Por otro lado, la población del Distrito Nacional, como Distrito Especial, es de
913.540, según el censo del año 2002, y según la proyección del Consejo Nacional
de Población y Familia (CONAPOFA) para el año 2006 era de 994.627. Es la
demarcación geográfica de mayor densidad poblacional con 9,523.43 Hab/km². El
Distrito Nacional tiene la particularidad de ser totalmente urbano.

En la actualidad el matrimonio pasa por problemas diversos, está provocando mucha


inestabilidad en los matrimonios, por lo que tanto del estado como de la propia
sociedad, y a los interno de cada persona, debe existir la firme voluntad de trabajar
para fortalecer los matrimonios en el país. Sin embargo, datos de la Oficina Nacional
de Estadísticas-ONE- y de las Oficialías del Registro Civil establecen que desde el
año 2001 hasta 2014 en el país se produjeron 234 mil 663 divorcios. Las estadísticas
indican que en el Distrito Nacional es donde más separaciones hubo entre los años
2001-2014 que fue de 56,721.

El segundo lugar lo ocupa la ciudad de Santiago, con 39,052, y en tercero la


provincia Santo Domingo con 24,484 mientras que La Vega registró 16,598. Algo
peculiar, único caso que se registra en el país con dos Distritos Judiciales que son La
Vega y el de Constanza ambas pertenecientes a la misma provincia. En primer lugar
están los divorcios por mutuo consentimiento y en el periodo 2001-2014 hubo
119,445 divorcios por esta causa.

Y otra causa es la incompatibilidad de caracteres que en ese mismo periodo fue el


motivo de 115,207 separaciones. Mientras que entre el año 2001-2014 se registraron

8
234,663 divorcios, se llevaron a cabo 573,733 matrimonios. En tanto que los civiles, y
por mucho. Cuando entre 2001-2014 se registraron 518,274 matrimonios civiles y
54,876 canónicos.

Las preguntas que se pretenden responder con la realización de esta investigación


son:

¿Cómo son las características generales del sector pueblo nuevo de Los Alcarizos?
¿Cuáles son las teorías referentes a los matrimonios y las crisis matrimoniales?
¿Qué causas producen las crisis matrimoniales?
¿Cómo se determinan los conflictos que producen las crisis matrimoniales entre los
jóvenes de 18-25 años de edad en el sector pueblo nuevo de Los Alcarrizos?
¿Cómo son los protocolos ante los tribunales de casos de estudio jurídico sobre
sentencia de divorcios?

9
JUSTIFICACIÓN DE LA INVESTIGACIÓN

El matrimonio como organización de la familia constituye una forma representativa,


ideal, social y jurídicamente hablando, por lo que la investigación y análisis de sus
expresiones económicas resulta indispensable en la vida profesional del abogado. El
patrimonio es una entidad esencial en la vida en sociedad, y sobre todo, en la vida
matrimonial, y, su régimen jurídico constituye una pieza angular de la convivencia, la
seguridad y el derecho la familia.

La importancia de la realización de esta investigación es analizar los protocolos de


celebración del régimen matrimoniales donde se detallen como los Oficiales del
Estado Civil que son los únicos funcionarios capacitados para celebrar el matrimonio
civil de acuerdo con esta ley. En caso de que los Oficiales del Estado Civil se
encuentren fuera del lugar o imposibilitados para el ejercicio de sus funciones.
Explicando que el matrimonio que se haya celebrado en incumplimiento de los
requisitos de fondo exigidos por la ley es nulo, asimismo, el matrimonio efectuado en
violación a los requisitos de forma puede ser anulable.

Describir la relación entre el matrimonio y la familia como colectividad que formada


por personas que, a causa de sus vínculos de parentesco o de su calidad de
cónyuges, están sometidas a la misma autoridad, la de la cabeza de familia. Este es
un conjunto de personas que están unidas por el matrimonio o la filiación y
excepcionalmente por la adopción.

Los beneficiarios de realizar esta investigación son los jóvenes de 18 a 25 años


residente en el Distrito Nacional que se crea un marco de referencia desde el punto
de vista teórico para explicar los procesos de matrimonio y su actual crisis en la
República Dominicana para explicar la relaciones además desde el punto de vista
jurídico, también, desde el punto de vista sociológico, psicológico y hasta religioso
atendiendo al estudio de los matrimonios religiosos y su inserción en la jurisdicción
dominicana.

10
OBJETIVOS GENERALES Y ESPECÍFICOS

Objetivo general
Determinar la crisis matrimonial en la legislación dominicana.

Objetivos específicos
Describir las características generales del sector pueblo nuevo de Los Alcarizos.
Conceptualizar las teorías referentes a los matrimonios y las crisis matrimoniales.
Identificar las causas que producen las crisis matrimoniales.
Describir los análisis de las encuestas realizadas a los actores en cuestión.
Exponer casos de estudio jurídico sobre sentencia de divorcios en la jurisdicción
dominicana.

11
METODOLOGÍA DE INVESTIGACIÓN

La presente investigación fue de tipo documental debido a que se fundamentó en


informaciones obtenidas de investigaciones previas sobre tema del divorcio en la
jurisdicción en la República Dominicana y su incidencia en el Distrito Nacional, la
revista y los periódicos fueron otras fuentes de investigación de primera revisaran
ensayos previos sobre estadísticas y análisis sobre el funcionamiento de los
tribunales e instituciones relacionadas a los problemas de matrimonios, además se
describió la percepción general a través de los escritos periodísticos del
cumplimiento jurídico de las normas jurídicas matrimoniales en amplio sentido y
especificando el cumplimiento jurídico-administrativo del proceso legal del tema de
los bienes matrimoniales.

El método descriptivo fue utilizado porque se van a explicar las cualidades de la


situación a investigar, tal como explica el nombre del método aquí se describió cual
ha sido el comportamiento de los procesos objeto de estudio en todas sus
dimensiones. La situación a estudiar es el divorcio en el Distrito Nacional y su actual
crisis.

La técnica de investigación aplicada fue la observación bibliográfica que va ligada a


las fuentes de donde obtendrán los datos que son documentos físicos y electrónicos
además de las estadísticas ofrecidas por los organismos estatales y las agencias
internacionales de desarrollo humano como son la United State AID, así también se
observaran publicaciones del ministerio de la mujer y el poder judicial de la República
Dominicana.

La muestra investigar fueron sentencias jurídicas, documentos del poder judicial que
explican los procesos y protocolos judiciales donde se expusieron el comportamiento
de las leyes que influyen en el tema, además de la jurisdicción constitucional y los
elementos que se requieren para validar el derecho de las partes y del conjunto
como familia.
12
CAPÍTULO I
CARACTERÍSTICAS GENERALES DEL SECTOR PUEBLO NUEVO
DE LOS ALCARIZOS

1.1. Historia y evolución del sector

Los Alcarrizos se remonta al siglo XVIII, cuando en lo que es hoy la entrada al


municipio, operaba un mercado de intercambio de mercancías entre santo domingo y
la región del Cibao, que convirtió el lugar en un espacio de descanso y reposo de los
viajeros, sentando la base para la configuración de una comunidad con un pequeño
núcleo poblacional. Uno de los hechos más destacado vinculados al proceso
histórico de esta comunidad, lo constituye la denominada rebelión de Los Alcarrizos
en marzo del 1824, la cual consistió en la primera revuelta en contra de la ocupación
haitiana, con un dramático desenlace al ser apresados y fusilados los principales
promotores de aquel hecho.

Desde los primeros días de la ocupación haitina, los dominicanos comenzaron a


manifestar su descontento, produciéndose con frecuencia choques sangrientos con
los soldados haitianos, tal como ocurrió en el el camino de Puerto Plata, el pueblo de
Bayaguana, y en otros lugares, alcanzando proporciones de verdadera revolución la
conspiración organizada en Los Alcarrizos, a diecisiete kilómetros de la capital, y la
cual tenía como fin el restablecimiento del dominio español en la parte oriental de la
isla.

El historiador José Gabriel García dice: En febrero de 1824 estuvo a punto de estallar
otro movimiento formidable que, fraguado por hombres adictos a España, tenía por
objeto vitorear al Rey don Fernando VII, y sustituir el pabellón azul y rojo con el
estandarte de Castilla, y continúa: El número de comprometidos llegó a ser tan
grande, que de haberse declarado la revolución, habría sido difícil sofocarla. (García,
José Gabriel, 1894)

13
Este movimiento revolucionario estaba encabezado por Baltazar de Nova y Antonino
González. Otros participantes principales eran: el Presbítero Pedro González, cura
de Los Alcarrizos, de donde tomó nombre la conspiración; Lázaro Núñez y José
María de Altagracia, capitanes de la guardia nacional; Facundo de Medina, Lico
Andújar, Dr. Juan Vicente Moscoso, quien había tomado parte en el movimiento
emancipador del 1821 (la Independencia Efímera), y Juan Jimenes (padre de Manuel
Jimenes, quien sería el segundo Presidente del país), quien se comprometió a reunir
personas de las cercanías del poblado de San Carlos (en la actualidad, barrio de
Santo Domingo).

La primera reunión formal de la trama se realizó el 24 de enero de 1824, en la casa


del Padre Pedro González, en Los Alcarrizos. La segunda reunión tuvo efecto el
domingo 15 de febrero, en San Carlos, cerca de la gallera. Esta conspiración fue
denunciada al General Jerome Maxime Borgellá, gobernador de la Parte Este, por
algún individuo de tendencia pro-haitiana.

El 25 de febrero de 1824 se reunieron, anticipadamente, en San Carlos y en Los


Caimitos (en la actualidad, el barrio Los Prados) hombres provenientes de La Venta
(ubicado entre Manoguayabo y Los Alcarrizos). Estaban esperando a compañeros
provenientes de Los Alcarrizos y El Higüero cuando fueron apresados por el
Gobernador Borgellá quien, al mando de 200 hombres, salió de Santo Domingo para
dirigir personalmente la operación. Todos los conspiradores principales fueron
apresados, con excepción de cinco de ellos, entre los cuales se encontraban los
cabecillas Antonino (o Antonio) González y Baltazar de Nova. Este último pudo
embarcarse subrepticiamente hacia Venezuela.

Los apresados fueron Lázaro Núñez, José María de Altagracia, Facundo de Medina y
Juan Jimenes," dice Max Henríquez Ureña, quienes habían sido sorprendidos en
actitud que no dejaba dudas respecto a su propósito de iniciar una sublevación
contra el gobierno." Además fueron apresados, José Gertrudis Brea, capitán de la
Guardia Nacional de Santo Domingo; Manuel Gil, gendarme; Sebastián Sánchez,
14
José María González, que tenía a su cargo la imprenta del Gobierno; José María
Pérez, encargado del almacén del Estado; el comerciante Juan Cerrá, el doctor Juan
Vicente Moscoso y su hermano Esteban; el cura de Los Alcarrizos Pedro González,
Ignacio Suárez, José Ramón Cabral; José María García, Subteniente de la Guardia
Nacional de Los Alcarrizos; José Figueredo y José María Aguirré. (Moya Pons, 1977)

Otros elementos importantes a destacar, lo constituyen el hecho de que los primeros


18 kilómetros de carretera existente en el país fueron inaugurado por el entonces
presidente Ramón Cáceres en el 1910, desde el centro de la ciudad a la entrada de
Los Alcarrizos lo que marcó el inicio de la autopista Duarte; así mismo en la
comunidad residió el expresidente José Bordas Valdez, quien fuera presidente de la
republica durante el año 1914; reconocido en la comunidad por el aporte que junto a
su familia realizo a favor de la alfabetización y educación de moradores del lugar.

A principio del siglo XX en la comunidad de Los Alcarrizos hubo una gran actividad
ganadera y de producción de cañas para azúcar, que hoy quedan los recuerdos de la
vía férrea que atravesaba todo el sureste y este del territorio por donde se
desplazaban la maquina o tren con sus vagones cargados de cañas hacia el ingenio
azucarero de Haina.

Para 1966, Los Alcarrizos tenía una pequeña población concentrada en Los
Alcarrizos viejos, en el cual operaba como la principal institución de la zona, La
Iglesia San Antonio de Padua, que era dirigida por el sacerdote Pasionista Benito
Arrieta, quien hizo sus aportes al desarrollo del territorio. La expansión poblacional
de Los Alcarrizos, se inicia a principios de los años 70, cuando el entonces
presidente Joaquín Balaguer, empezó a desarrollar grandes proyectos urbanos que
dio paso a la primera oleada de inmigrantes hacia los Alcarrizos al ordenar traslado
de personas de diversos sectores de la capital los cuales fueron alojados en terrenos
del actual sector de Sávica; junto a esto se destaca el desarrollo de un proyecto de
apartamentos denominado hoy sector los multis en el año 1976, siendo el primer
proyecto habitacional en la zona construido por el gobierno dominicano, en torno a
15
este se desarrolló todo un núcleo poblacional que dio origen al sector Pueblo Nuevo,
que junto sávica constituyen los sectores con mayor población del hoy municipio de
Los Alcarrizos.

La segunda ola de inmigrantes se da a partir del año 1979, luego del huracán David,
cuando el entonces presidente Antonio Guzmán Fernández, construye 902
soluciones habitacionales denominada barracones para alojar a damnificados del
sector la Ciénaga afectados por el huracán David y la Tormenta Federico;

En torno a los barracones el Instituto Nacional de la Vivienda (INVI) desarrolla el


proyecto habitacional de casas dúplex que lleva su nombre, constituyéndose el
segundo proyectos desarrollado por el estado con cierto criterio de planificación
urbana. Posteriormente durante el Gobierno del Dr. Salvador Jorge Blanco 1982-
1986, se lleva a cabo el tercer proyecto habitacional desarrollado por el ejecutivo, el
cual fue construido para alojar a las familias que serían desalojadas de la autopista
Duarte para dar paso a la ampliación de la misma en el tramo comprendido entre
kilómetro 9 y kilómetro 28. (García, 1894)

Junto a los proyectos señalados el gobierno del Dr. Joaquín Balaguer desarrolló el
proyecto de vivienda Los Americanos 1991, y dio inicio al proyecto de apartamentos
de canta la Rana el cual fue concluido por el presidente Leonel Fernández 1998 y la
segunda etapa concluida por el Presidente Hipólito Mejía en el año 2002, en estos
tres proyectos se alojaron cerca de 600 familias de las que residían en los
Barracones.

Es importante destacar que fuera de estos proyectos e iniciativas de asentamientos


humanos llevado a cabo por el gobierno, los demás barrios del municipio surgieron
como resultado de la migración campesina que se dio en los años 70 y 80, los
desalojos llevado a cabo por los gobiernos de la administración del Dr. Joaquín
Balaguer de los barrios peri centrales del Distrito Nacional a finales de los 80 y
principios de los noventas, así como de la ocupación de tierras que dieron origen a
16
sectores como la Piña, chavon, La Fe, Juana Saltitopa, Nuevo Amanecer, Nuevo
Horizonte, el tamarindo, Los Progresos, entre otros.

Esto dio origen a un crecimiento y desarrollo horizontal del territorio con barrios
desordenados, sin servicios de energía, agua potable, alcantarillado y sin calles.
Actualmente Los Alcarrizos tiene una población de 272 mil 772 habitantes, sin
excluimos la población de los Distritos Municipales de Pantoja y de Palmarejo Villa
Linda, tendríamos una población de 206,557 habitantes distribuidos en un territorio
de 31 kilómetros cuadrados, que nos ha arroja una población de 6,492 persona por
kilómetro cuadrado, lo que muestra la alta densidad poblacional del municipio.

En su artículo 2 la Ley número 163-01, que crea la provincia de Santo Domingo, el


Distrito Nacional estará constituido por la parte de la ciudad de Santo Domingo que
tiene por límites al Norte, el río Isabela; al Sur, el mar Caribe; al Este, el río Ozama; y
al Oeste, una línea que se inicia en el mar Caribe y que sigue hacia el Norte por el
límite Oeste de la urbanización Costa Verde, hasta la prolongación de la avenida
Independencia. Toma esta vía en dirección Oeste-Este, hasta la avenida Luperón.
Sigue por esta vía de sur a norte hasta la autopista Duarte; sigue dicha autopista en
dirección sur-norte hasta el paraje de Pantoja, de la actual sección de Los Alcarizos,
la cual bordea por sus límites Sur y Este y continúa por los límites occidentales del
paraje la Isabela de dicha sección hacia el Norte, hasta encontrar el Río Isabela.
(Artículo 2, Ley número 163-01, que crea la provincia de Santo Domingo)

Los Alcarrizos fueron elevados a la categoría de municipio mediante la Ley número


64-05, del 31 de enero del año 2005, pero el ayuntamiento se funda el 16 de agosto
del año 2006, cuando son juramentadas las primeras autoridades quienes fueron
electos en las elecciones municipales y congresuales celebradas el 16 de mayo de
ese mismo año. (Ley número 64-05)

17
1.2. Infraestructura civil, avenidas principales, puentes y accesos

Cerca de 1,300 calles distribuidas en los 18 sectores que componen las 6


delegaciones del municipio; en los actuales momentos se lleva a cabo el programa
de asfaltado que ha impactado a casi todos los sectores de Los Alcarrizos, en el
marco de un plan de interconexión barrial que ha desarrollado el Ayuntamiento, se
han construido alrededor de 55 puentes en todo el territorio del Municipio. También
1,100 calles distribuidas en 17 sectores-delegaciones del municipio en los actuales
momentos están siendo intervenidas para mejor las condiciones de las mismas
mediante el programa de asfaltado a calles claves del municipio de Los Alcarrizos, lo
que revela un avance significativo en el tema de conexión vial. (Ayuntamiento Los
Alcarrizos, 2016).

En el marco de un plan de interconexión barrial que ha desarrollado el Ayuntamiento,


se han construido alrededor de 55 puentes en todo el territorio del Municipio. El
municipio de los Alcarrizos se encuentra ubicado en un punto estratégico el cual
colinda con la Autopista principal del país (Autopista Duarte), con el puerto Caucedo,
el aeropuerto el Higüero, al oeste por la carretera de Caballona se comunica con el
municipio de Santo Domingo Oeste, y por la carretera de Hato Nuevo con el
municipio de Pedro Brand, en la actualidad se desarrollan importantes proyectos de
conectividad municipal. El municipio ha venido incorporando un conjunto de
infraestructuras de servicios que forman parte del equipamiento urbano e institucional
del territorio, con la construcción de nuevas escuelas, estancias infantiles, edificio de
la Junta Central Electoral, nuevas estaciones de bomberos, un hospital regional,
asfaltado de vías, instalación de expendios de combustible, desarrollo inmobiliario.

El transito crea un nudo gordiano de la calle Duarte, la cual se intenta desconcentrar


con desvíos a rutas alternas y futuras aperturas de nuevos desvíos. El transporte
público y de pasajeros está organizado en sindicatos y asociaciones de carros,
minibuses, guaguas y motores. El taponamiento vehicular se genera de manera
continua principalmente en la avenida principal (La Duarte); en el municipio existen

18
684 vehículos del concho que cruzan por la misma calle principal durante el día,
sumado a la gran cantidad de paradas de motoconcho que complican la movilidad de
manera significativa, a esto le añadimos los camiones del sector comercial y
productivo, los vehículos privados y los motoristas, lo que explica las dificultades del
tránsito. Existe un estudio preliminar sobre el transito urbano en el municipio, donde
detalla la cantidad y tipos de rutas internas y las interconexiónes de las mismas.
(Ayuntamiento Los Alcarrizos, 2016).

En tal sentido, desde el ayuntamiento se ha planteado la creación de un par vial con


la finalidad de mejorar la movilidad del tránsito en la principal calle del municipio, y se
han generado algunas resoluciones en este sentido, también se ha diseñado un plan
de semaforización y señalización orientado a dar respuesta a la mejora de la
movilidad urbana en Los Alcarrizos.

1.3. Elementos culturales

La expansión del municipio de Los Alcarrizos con relación a sus orígenes, es


resultado de la migración campesina en los años 80 durante los gobiernos del PRD y
en los 70 cuando Balaguer, donde hubo una oleado de invasión de personas que
residían en San Carlos, villa Juana, así como los desalojos de los principales barrios
de Santo Domingo, Los Alcarrizos es una expresión de la diversidad cultural del país,
puesto que hay habitantes del sur, del Cibao, de distintos sectores de la ciudad
capital y en menor proporción de la zona este del país; por lo cual no podemos
indicar una identidad en específico, debido a la gran amalgama de expresiones
generadas en otros entornos. En la actualidad se está promoviendo un carnaval con
el fin de crear una identidad que resalte al municipio, en cuanto a fiesta se celebra el
día de San Miguel, la cual no es oriunda del municipio. (Ayuntamiento Los Alcarrizos,
2016).

19
Lugares Históricos Culturales

Nombre Ubicación
La Cruz De Hierro Calle Duarte Esq, 17
Canal Trujillo Próximo A Villa Linda
Casas De Estilo Victoriano Palmarejo/ Villa Linda.
Multi Uso Pantoja
Capilla Santa Rosa Siglo XIX Hato Nuevo
San Antonio De Padua Alcarrizos Viejo

1.4. Instituciones educativas presente en el sector de Pueblo Nuevo

En el 2010 existían 53 centros educativos públicos y 34 privados, se construyeron


varias escuelas el cual se incluyeron las tandas extendidas para satisfacer las
necesidades del estudiantado. En el 2015 los planteles escolares registrados por la
ONE fueron 257, los estudiantes matriculados en centro escolares zona rural para el
2009 fueron 2,588, continuando en ese mismo año con los estudiantes matriculados
zona urbana fueron de 76,692, los estudiantes matriculados hombres en todo nivel
es de 40,395 para el año 2009, los estudiantes mujeres matriculado en todo nivel es
de 38,885. El porcentaje de planteles escolares privado sobre el total para el año
2015 según datos del censo es de 71.98%, siguiendo el porcentaje de planteles
educativo público sobre el total es de 28.02%. (Ayuntamiento Los Alcarrizos, 2016).

Para el 2010 el porcentaje de la población femenina que ha alcanzado educación


universitaria o post-universitaria en el municipio de Los Alcarrizos era de 14.32%, la
población femenina que ha alcanzado terminar la primaria fue de 43.16% luego
continuando con el porcentaje de la población femenina que termino la secundaria es
de 31.01, para concluir con la población femenina el porcentaje que no asistió a la
escuela o no alcanzo la primaria es de 11.51%. La población masculina que alcanzo
terminar la educación la primaria es 48.09%, la población masculina que alcanzo

20
terminar la educación secundaria es de 30.35%, teniendo un porcentaje más bajo la
población masculina que alcanzo o termino la educación universitaria con un 9.71%,
continuando el 11.86% de la población masculina que no asistió a la primaria. En el
2009 la razón de paridad de género en el nivel básico es de 88.68, en el nivel inicial
es de 88.07 y el nivel medio es de 120.2 datos obtenido la Oficina Nacional de
Estadística. Los datos estadísticos para el 2016 serán mayor tomando en cuenta los
datos presentados según el censo.

Las bibliotecas que existen se encuentran en los colegios privados y escuelas


públicas las misma son físicas y virtuales, y los equipos informáticos con internet
instalados para uso de los estudiantes. Se requiere de una biblioteca pública
independiente con todos los servicios en el municipio. (Ayuntamiento Los Alcarrizos,
2016).

1.5. Procesos económicos del sector

La pobreza del municipio Los Alcarrizos es de un 50% del total de familia y un 30%
sobre la línea de pobreza según estudios realizados. La población económicamente

21
activa, la que trabaja es del orden del 34.41% a partir de los 10 años de edad; el 45%
tiene casa propia y el 49% vive alquilado, el resto es prestada, en uso, etc. Casi la
mitad vive del salario o empleo; el 16% recibe mensualmente menos de $2,000.00; el
36% recibe de $2001 a $4,700.00, el 15.22% recibe de $4,701.00 a $11,400.00, un
2.33% recibe más de $11,500.00 a $17,000.00 y el 2.5% recibe más de $17,000.00.
Existe un 36.08% no registrado que es considerado pobre total, ya que el índice de
pobreza es de 43.2%, aunque la provincia total refleja un 23.4, datos basado en
estudio realizado.
Estructura del mercado laboral por sexo, al año 2010
Indicadores Sexo Total General
Hombres Mujeres
Población En Edad De Trabajar 105,618 106,882 212,500
(PET)
Población Económicamente Activa 58,513 36,457 94,970
(PEA)
Población Ocupada 54,148 32,657 86,805
Población Desocupada 4,365 3,800 8,165
Población Inactiva 44,920 68,300 113,220
Tasa Global De Participación 55.4% 34.1% 89.5 %
Tasa De Ocupación 51.3% 30.6% 81.9 %
Tasa De Desempleo 7.5% 10.4% 17.9 %
Tasa De Desocupación Abierta _ 10.42% 10.42%
Fuente: Oficina Nacional de Estadística, 2010

Según el censo 2010 en Los Alcarrizos la Población Económicamente Activa (PEA)


del territorio representa un 45% de la población total; tasa de ocupación 41% y tasa
desocupados 9%; tasa de población inactiva 53.2% Los sectores y escalas
(tamaños) que absorben un mayor porcentaje de mano de obra local son según
datos basados en el censo es como sigue: En Servicios el 35.71% del total ocupado:
en industrias el 12.1%: en el agrícola 0.75%, en sector construcción el 8.89%. La

22
cantidad de trabajadores por cuenta propia y ocupaciones varias es el mayor
porcentaje Ellos ocupan toda la gama de sectores.

Existen programas de formación ocupacional a través de INFOTEP y muchas fuentes


de posibles de empleo que aún no han sido aprovechadas localmente se imparten
allí. Entidades públicas y privadas invierten en el municipio lo que se convierte en
potencial para generar nuevos empleos; crece el comercio de alimentos,
electrodomésticos, ropas y centros de diversión, y así mismo, se instalan nuevas
sucursales bancarias. También el Estado instala y robustece oficinas y programas en
que abren espacio al empleo, en el área judicial, Junta Central Electoral y programas
sociales como Quisqueya Aprende Contigo, el Programa de Estancias Infantiles, y la
expansión de infraestructura escolares que implicara la contratación de más
profesores.

1.6. Centros comerciales

En la zona de Hato Nuevo se ha desarrollado la producción agrícola a través de la


siembra de diversas hortalizas, chinolas, arroz entre otros rubros los cuales son
sembradas en más de 8 mil tareas de tierra, también ha habido un desarrollo de la
pecuaria y la ganadería, destacándose la existencia de cerca de 2 mil cabezas de
ganado vacuno, más de mil cerdos, más de 200 ovejos, crianza de conejo, gallinas
de cría y pollo de engorde, también el desarrollo de 60 estanque de peces, con
capacidad para 10 mil cada uno. El FEDA ha venido apoyando a los productores de
ganado en especial vacuno, lo que junto a la iniciativa particular de los agricultores y
ganaderos se ha venido fomentando la producción de leche y queso. (Ayuntamiento
Los Alcarrizos, 2016).

Las asociaciones agrícolas de la zona, manifiestan que necesitan más apoyo para
incorporar tecnologías a su trabajo, necesitan equipos, insumos y crédito para
consolidar los diversos proyectos que en el ámbito agropecuario vienen
desarrollando. Otro elemento que generan gran preocupación en el sector, es que los
23
terrenos de la zona sean vendido a desarrolladores inmobiliarios rompiendo con la
dinámica y naturaleza agrícola de la misma, por lo que entienden que esta zona debe
protegerse estableciéndola como frontera o zona de expansión agrícola, que la
convierte en un oasis dentro del desarrollo urbano que ha tenido el municipio.

El municipio posee una fuerte presencia de pequeños negocios vinculados al


servicios de electrodomésticos, restaurantes, peluquerías-salones, tienda de ropas,
servicio de transporte, pequeñas industrias vinculadas a la madera, metalúrgica,
embutidos, etc., muchas de las cuales se asocian con actividades informales de la
economía; no obstante existe una cantidad de grandes empresas o industrias dentro
de las cuales se destacan: Grupo Rojas, Kinox, Industria San Miguel, Ambev
Dominicana-Cervecería Nacional Dominicana; dentro del Distrito Municipal de
Pantoja, Laboratorio ROWE, Laboratorio ALFA, Laboratorio SUED, Cartonera SUED,
Supermercado La Sirena, Laboratorio Amadita, Banco de Reservas, Banco Popular,
Banco BHD, Banco Ademi, Banco De La Mujer, Asociación Popular, Asociación la
Nacional, la Cooperativa de Herrera, Cooperativa Empresarial, Aspire y La
Fundación Dominicana de Desarrollo.

1.7. División territorial, política y social

Es la provincia número 32, constituida por 7 municipios, 8 distritos municipales, 47


secciones, 234 parajes, 93 barrios y 691 sub-barrios. La provincia Santo Domingo
está situada en la región Ozama; su común cabecera es el municipio Santo Domingo
Este. Limitada al norte, con la provincia Monte Plata; al este, con la provincia San
Pedro de Macorís; al sur, el mar Caribe y el Distrito Nacional y al oeste la provincia
San Cristóbal, limitada por el río Haina. Sus coordenadas son 19º 25 ́ latitud norte y
los 70º 50 ́ longitud oeste. Extensión territorial: 1,302.20 km2. - Población 2012:
2,374,370 habitantes. Densidad poblacional: 1,823 hab. /km2. (Ayuntamiento Los
Alcarrizos, 2016).

24
1.8. Demografía presente

La Población Actual del municipio de Los Alcarrizos según censo del 2010, es de
206,557 habitantes y 282,676 incluyendo los dos Distritos Municipales de Palmarejo
con una población de 16,099 habitantes, y Pantoja que es de 60,020 habitantes; la
población urbana del municipio es de 255,169 siendo más baja la población rural con
un número de habitantes de 27,507. Los Alcarrizos es el quinto municipio del país de
mayor tamaño en función de su población y el 4to en densidad poblacional . (Oficina
Nacional de Estadística, 2010)

25
CAPÍTULO II
TEORÍAS REFERENTES A LOS MATRIMONIOS Y LAS CRISIS
MATRIMONIALES

2.1. Concepto y etimología del matrimonio

El origen etimológico de la palabra matrimonio como denominación de la institución


bajo ese nombre no es claro. Se suele derivar de la expresión matris munium
proveniente de dos palabras del latín: la primera matris, que significa madre y, la
segunda, munium, gravamen o cuidado, viniendo a significar cuidado de la madre por
el marido/padre, en tanto se consideraba que la madre era la que contribuía más a la
formación y crianza de los hijos. Otra posible derivación provendría de matreum
muniens, significando la idea de defensa y protección de la madre, implicando la
obligación del hombre hacia la madre de sus hijos.

Para una comprensión más amplia de la expresión matrimonio en su aspecto


etimológico en muchas de las lenguas romances se debe tener en cuenta el
concepto del contrato de matrimonio considerado por el Derecho Romano, que tiene
su fundamento en la idea de que la posibilidad de ser madre, que la naturaleza da a
la mujer núbil, la llevase a procrear una familia.

Una lectura más neutra, por su fidelidad a la pura etimología de los dos términos que
componen la palabra,x se deriva del significado originario del segundo término
monium, que se encuentra también en patrimonium y mercimonium, y que alude a
agente o acción): según tales fuentes,el concepto de matrimonio remitiría a una
acción por parte de la mujer y que pareciera remontarse al rol de la mujer en las
sociedades matriarcales. (Parra-Aranguren, 2007).

El matrimonio, del latín: matrimonīum, es una antigua institución social, presente en


gran cantidad de culturas, que establece un vínculo conyugal entre personas
naturales, reconocido y consolidado por medio de prácticas comunitarias y normas

26
legales, consuetudinarias, religiosas o morales. La unión matrimonial establece entre
los cónyuges, y en muchos casos también entre las familias de origen de estos,
derechos y obligaciones que varían considerablemente según las normas que lo
regulan en cada sociedad. El matrimonio es una realidad que tiene su propio modo
de ser, que puede y debe ser regulado por el ordenamiento jurídico, pero no es
creada ni definida por las leyes.

Las normas matrimoniales están vinculadas con aquellas que regulan las relaciones
sexuales (incesto, adulterio, exclusividad sexual, monogamia, poligamia), la
reproducción y la filiación de los hijos, según las reglas del sistema de parentesco
vigente. El matrimonio suele estar estrechamente relacionado con la familia y en
algunos casos constituye su núcleo. Las reglas sobre finalización del matrimonio
incluyen aquellas referidas al divorcio.

La forma tradicional de matrimonio es entre un hombre y una mujer, con la finalidad


de constituir una familia. Esa definición ortodoxa ha sido cuestionada, de una parte,
porque se ha otorgado reconocimiento a las uniones entre un hombre y una mujer
con finalidades prácticamente idénticas al matrimonio, pero que adoptan formas y
denominaciones distintas (infra las sociedades de convivencia). Por otro lado, el
desarrollo de nuevos modelos de familia han desvinculado la función reproductiva del
matrimonio: parejas no casadas con hijos o matrimonios sin hijos (siendo la causa
más común de esto la esterilidad de uno de los miembros, y no tanto el nivel
socioeconómico, madres y padres solteros o madres y padres con una pareja de su
mismo sexo. (Robleda, 2016)

Finalmente, en varios países y estados se ha producido una ampliación de derechos


que ha dado reconocimiento al matrimonio entre personas del mismo sexo. En esos
casos el matrimonio se realiza, generalmente, por la forma civil o de Estado, porque
las normas de muchas religiones no permiten este tipo de uniones en su seno. Con
todo, en distintos tiempos y lugares se han reconocido otras variedades de
matrimonio.
27
En la Constitución Dominicana se plantea el derecho de la familia como fundamento
de la sociedad y el espacio básico para el desarrollo integral de las personas. Se
constituye por vínculos naturales o jurídicos, por la decisión libre de un hombre y una
mujer de contraer matrimonio o por la voluntad responsable de conformarla. (Artículo
55, Constitución Dominicana)

Todas las personas nacen libres e iguales ante la ley, reciben la misma protección y
trato de las instituciones, autoridades y demás personas y gozan de los mismos
derechos, libertades y oportunidades, sin ninguna discriminación por razones de
género, color, edad, discapacidad, nacionalidad, vínculos familiares, lengua, religión,
opinión política o filosófica, condición social o personal. (Artículo 39, Constitución
Dominicana)

El Estado promoverá y protegerá la organización de la familia sobre la base de la


institución del matrimonio entre un hombre y una mujer. La ley establecerá los
requisitos para contraerlo, las formalidades para su celebración, sus efectos
personales y patrimoniales, las causas de separación o de disolución, el régimen de
bienes y los derechos y deberes entre los cónyuges. (Numeral 3, Artículo 55,
Constitución Dominicana)

Los esposos contraen por el solo hecho del matrimonio, la obligación común de
alimentar y educar los hijos. Los hijos no tienen acción alguna contra sus padres para
que los establezcan por matrimonio o en otra forma. Los hijos están obligados a
alimentar a sus padres y ascendientes necesitados. Los yernos y nueras están
igualmente obligados a prestar alimentos, en análogas circunstancias, a sus padres
políticos, pero esta obligación cesa: Primero: cuando la madre política haya contraído
segundas nupcias. Segundo: cuando hayan muerto el cónyuge que producía la
afinidad y los hijos tenidos de su nuevo matrimonio. Las obligaciones que resultaren
de los anteriores preceptos, son recíprocas. Los alimentos no se acuerdan sino en
proporción a la necesidad del que los reclama, y a la fortuna del que debe
28
suministrarlos. Cuando hayan cesado la necesidad de obtener alimentos en todo o
en parte, o no pueda darlos el obligado a ello, puede pedirse la reducción o cesasión.
(Artículo 203, código civil de la República Dominicana)

Si la persona que debe proporcionar los alimentos, justifica que no puede pagar la
pensión alimenticia, el tribunal, con conocimiento de causa, ordenará que reciba en
su casa y en ella alimente y sostenga a aquél a quien los alimentos se deban. El
tribunal determinará también si los padres que ofrezcan recibir y alimentar en su casa
el hijo a quien deban alimentos, estarán o no dispensados en este caso de seguir
pagando la pensión alimenticia.

Los cónyuges se deben mutuamente fidelidad, socorro y asistencia. Los esposos


aseguran juntos la dirección moral y material de la familia, proporcionan la educación
de los hijos y preparan su porvenir. La mujer casada tiene la misma capacidad civil
que la mujer soltera. El régimen matrimonial que adopten los esposos no puede
contener ninguna restricción a la capacidad civil de la esposa que no se halla
expresamente consignada en la Ley.

Cada uno de los esposos debe contribuir, en la medida de lo posible, a los gastos del
hogar y a la educación de los hijos. A falta de uno de los esposos de cumplir su
obligación, el otro esposo podrá obtener del Juez de Paz de su domicilio la
autorización de embargar retentivamente y de cobrar de los salarios, del producto del
trabajo o de las rentas de su cónyuge una parte proporcionada a sus necesidades.
Antes de decidir el asunto, los esposos serán llamados ante el Juez de Paz por
medio de una carta certificada del Secretario, que indique la naturaleza de la
demanda. (Artículo 214, código civil de la República Dominicana)

Los esposos deberán comparecer personalmente salvo en caso de impedimento


absoluto, debidamente justificado. La notificación de la sentencia por el esposo que
la ha obtenido a su cónyuge y a los terceros deudores vale por sí misma atribución
de las sumas embargadas.
29
Las sentencias así dictadas serán provisionalmente ejecutadas, no obstante
oposición o apelación. Una nueva decisión puede siempre ser provocada si lo
justifica un cambio de las situaciones respectivas. Los esposos se obligan
mutuamente a una comunidad de vida. La residencia de la familia está en el lugar
que ellos escojan de común acuerdo. Sin embargo, si la residencia escogida
presenta para la familia graves inconvenientes, el tribunal puede autorizar una
residencia distinta y, si es necesario, estatuir acerca de la residencia de los hijos.

Los esposos no pueden, el uno sin el otro, disponer de derechos sobre los cuales
esté asegurada la vivienda de la familia, ni de los bienes muebles que la guarnecen.
Aquel de los cónyuges que no ha dado su consentimiento puede pedir la anulación
del acto dentro del año a partir del día en que haya tenido conocimiento del mismo.
La acción no será intentada después de haber transcurrido un año de la disolución
del régimen matrimonial. (Robleda, 2016)

2.2. Definición del divorcio y sus tipos

El divorcio es la ruptura en vida de los esposos, del vínculo matrimonial, mediante


sentencia declarada judicialmente, es decir La ruptura del vínculo conyugal, por
intermedio de una decisión judicial emanada de un tribunal competente, a solicitud de
uno de los esposos o de ambos. La iglesia católica se ha opuesto siempre al divorcio
por considerar que está contra sus dogmas y preceptos religiosos, ya que no es
dable para el hombre separar lo que Dios ha unido. Sin embargo, actualmente, en la
mayoría de los países se admite el divorcio, y República Dominicana no es la
excepción. (Camacho Chavarría, 2000)

El divorcio no debe confundirse con la anulación, que declara el matrimonio nulo y


sin valor, con separación legal o separación de jure (un proceso legal mediante el
cual una pareja casada puede formalizar una separación de facto mientras
permanece legalmente casado) o con separación de facto (a proceso en el que los

30
cónyuges dejan de cohabitar informalmente). Las razones para el divorcio varían,
desde la incompatibilidad sexual o la falta de independencia de uno o ambos
cónyuges hasta un choque de personalidades.

La ley número 1306-Bis de divorcio no define el divorcio sino explica que el


matrimonio se disuelve por la muerte de uno de los cónyuges o por el divorcio. Sin
embargo, en armonía con las propiedades esenciales del matrimonio católico queda
entendido que, por el propio hecho de celebrar matrimonio católico, los cónyuges
renuncian a la facultad civil de pedir el divorcio, que por esto mismo no podrá ser
aplicado por los Tribunales Civiles a los matrimonios canónicos. (Artículo 1, La ley
número 1306-Bis)

2.2.1. El procedimiento ordinario

Toda acción de divorcio por causa determinada se incoará por ante el tribunal o
juzgado de primera instancia del distrito judicial en donde resida el demandado, si
éste tiene residencia conocida en la República; o por ante el de la residencia del
demandante en caso contrario.

El demandante hará emplazar, en la forma ordinaria de los emplazamientos al


demandado, para que éste comparezca en persona, o por apoderado con poder
auténtico, a la audiencia a puertas cerradas que el 'tribunal o Juzgado celebrará el
día y a la hora indicados en el emplazamiento; y dará copia, en cabeza de éste, al
demandado, de los documentos que hará valer en apoyo de su demanda, si los
hubiere. Junto con la demanda el demandante comunicará al demandado la lista de
las testigos que se proponga hacer oír en la misma audiencia. En toda demanda de
divorcio se expresará sumariamente, a pena de nulidad, el pedimento que respecto
de la guarda de los hijos hará el demandante, o se hará mención de lo que las partes
hubieren dispuesto en el contrato celebrado con este objeto. La mujer no necesitará
ninguna especie de autorización para intentar la demanda de divorcio. (Artículo 4,
Ley número 1306-BIS)

31
Vencido el término del emplazamiento, sea que el demandado comparezca o no a la
audiencia, el demandante en persona o representado, con la asistencia de un
abogado, expondrá los motivos de su demanda, presentará los documentos en que
la apoya, hará oír sus testigos si los hubiere, y concluirá al fondo.

Si el demandado comparece a la audiencia, sea en persona, sea por apoderado,


podrá proponer sus observaciones sobre los motivos de la demanda, sobre los
documentos producidos por el demandante, o sobre los testigos oídos a
requerimiento de éste. También podrá el demandado hacer oír en la misma
audiencia los testigos que desee, presentar, contra los cuales el demandante, por su
parte, hará sus observaciones. El demandado no tiene derecho de hacer oír testigos
si no ha comunicado al demandante la lista de éstos por lo menos dos días francos
antes del día da la audiencia.

Terminada la audiencia, el Tribunal ordenará la comunicación del expediente al


Ministerio Público, para que dictamine el plazo de cinco días francos. Antes de
ordenar la comunicación del expediente al Ministerio Público, el Juez podrá ordenar,
si lo estima necesario y si les piezas presentadas en apoyo de la demanda no son
convincentes a su juicio, informativos en la forma que determina el Código de
Procedimiento Civil. (Artículo 10, Ley número 1306-BIS)

Cuando el Juez haya ordenado informativos el Secretario del Tribunal dará copia de
la sentencia que los ordena a la parte demandante para que éste la notifique en
tiempo oportuno a la parte demandada y a los testigos presentados cuyos nombres
figuren en dicha sentencia. La parte demandada podrá hacer citar los testigos por
ella presentados y que figuren en la referida sentencia.

Devuelto el expediente por el Ministerio Público con el dictamen correspondiente, el


Tribunal fallará admitiendo o desestimando el divorcio. La sentencia se pronunciará
públicamente. Cuando el divorcio se pida por razón de que uno de los esposos esté

32
condenado a una pena criminal, las únicas formalidades que deben observarse
consisten en presentar al Tribunal una copia en forma de la sentencia que condene
al cónyuge demandado a una pena criminal, con un certificado del Secretario del
Tribunal que la dictó, atestando que esta sentencia no es susceptible de ser
reformada por ninguna de las vías legales ordinarias. El certificado del Secretario
será visado por el Procurador Fiscal de su Tribunal, o por el Procurador General de
la República.

En virtud de toda sentencia de divorcio dada en última instancia, o que haya


adquirido la autoridad de la cosa juzgada, y salvo que se hubiere interpuesto recurso
de casación, el cual es suspensivo de pleno derecho, el esposo que la haya obtenido
estará obligado a presentarse en un plazo de dos meses por ante el Oficial del
Estado Civil, para hacer pronunciar el divorcio y transcribir la sentencia en el registro
del Estado Civil, previa intimación a la otra parte, por acto de alguacil, para que
comparezca ante el oficial del estado civil y oiga pronunciar el divorcio. (Artículo 17,
Ley número 1306-BIS)

2.2.2. El procedimiento de divorcio extraordinario o Divorcio Al


vapor

El Divorcio al Vapor, recibe este nombre por la rapidez en que el juez a cargo
pronuncia la sentencia. Este tipo de divorcio se estableció en la República
Dominicana mediante la Ley No. 142 de fecha 4 de junio del año 1971 que modifica
la Ley 1306 bis de divorcio, siendo en los aspectos procedimentales muy parecido al
del divorcio por mutuo consentimiento.

Para poder divorciarse mediante este procedimiento la ley requiere que se suscriba
un acuerdo formal de separación de convenciones y estipulaciones donde se
declaren asuntos como la división de los bienes comunes, la custodia de los hijos
nacidos dentro del matrimonio y las pensiones alimenticias. Esta modalidad de

33
divorcio es permitada a extranjeros residentes en República Dominicana o que hayan
residido en el país al momento de introducir la demanda. A partir de la ley 544-14
sobre Derecho Internacional Privado, se ha introducido una sutil modificación al
párrafo V de la ley 142 que instituye el Divorcio al vapor.
Con lo anteriormente indicado, queremos decir que a partir de esta ley la 544-14, los
extranjeros podrán divorciarse en nuestro país siempre y cuando sean residentes en
República Dominicana al tiempo de la demanda o cuando hayan tenido su última
residencia común en nuestro pais y el demandante continúe residiendo en la
República Dominicana al tiempo de la demanda; y en el caso de que ambos
cónyuges tengan la nacionalidad dominicana.

2.2.3. Procedimiento de divorcio por mutuo consentimiento

El consentimiento mutuo y perseverante de los esposos, expresado de la manera


prescrita en la presente ley, justificará suficientemente que la vida en común les es
insoportable. El divorcio por mutuo consentimiento no será admitido sino después de
dos años de matrimonio, como tampoco lo será después de treinta años de vida
común, ni cuando el esposo tenga por lo menos sesenta años de edad y la mujer
cincuenta.

Los esposos estarán obligados, antes de presentarse al Juez que debe conocer la
demanda: al formalizar un inventario de todos sus bienes muebles o inmuebles; 2)
Convenir a quien de ellos confiase el cuidado de los hijos nacidos de su unión,
durante los procedimientos y después de pronunciado el divorcio; 3) convenir en qué
casa deberá residir la esposa durante el procedimiento, y cuál la cantidad que, como
pensión alimenticia, deberá suministrarle el esposo mientras corren los términos y se
pronuncia la sentencia definitiva. (Modificado por la ley no. 142, agregando los
párrafos IV y V)

34
Todas estas convenciones y estipulaciones deberán formalizarse por acto auténtico.
una vez cumplidas las anteriores formalidades, los esposos, personalmente o
representados por mandatarios con poder auténtico, y provistos de los actos en que
consten las estipulaciones a que se refiere el presente artículo, como asimismo de
una copia del acta de matrimonio y de las actas de nacimientos de los hijos
procreados durante el matrimonio, se presentarán al Juez de Primera Instancia de su
domicilio, declarándole que tiene el propósito de divorciarse por mutuo
consentimiento, y que, al efecto le piden proveimiento en forma para establecer su
demanda.

A falta de los actos de nacimiento, por ausencia de éstos en los registros del Estado
Civil, los actos de notoriedad tendrán su validez. El extranjero, las convenciones y
estipulaciones podrán ser redactadas a través de apoderados especiales y firmadas
por éstos por ante un Notario Público de la jurisdicción que ellos indiquen, en el acto
contentivo del poder. En dichas convenciones y estipulaciones, las partes otorgarán,
de manera expresa, competencias a un Juez de Primera Instancia de la misma
jurisdicción señalada por ellos en el poder, para conocer y fallar sobre el Divorcio.

Los extranjeros que se encuentran en el país aún no siendo residentes, podrán


divorciarse por Mutuo Consentimiento, siempre que, hallándose por lo menos uno de
ellos presente en la audiencia, y el otro representado por apoderado especial,
convengan de manera expresa en atribuir competencia a un Juez de Primera
Instancia, en el acta de convenciones y estipulaciones levantada por un notario
Público de la misma jurisdicción del Tribunal por ellos señalado. Para el caso previsto
en este párrafo, no serán aplicables las disposiciones del artículo 27 de la ley número
1306-BIS.

El Juez, en vista de la declaración de los esposos, levantará acto de lo expuesto por


éstos. Después de cerciorarse que se han cumplido todas las exigencias de la ley
para hacer admisible la demanda, el Juez autorizará ésta, fijando un término de no
menos de treinta ni más de sesenta días para que los esposos comparezcan en
35
juicio y con vista de todos los actos, pronunciará sentencia ocho días después de la
audiencia. La sentencia deberá ajustarse en todo a las estipulaciones consignadas
en los actos a que se refiere el artículo 28, los cuales sólo podrán sufrir las
variaciones que los mismos esposos quieran introducir el día de la vista de la causa,
por mutuo acuerdo anterior.

Para el caso previsto en el párrafo V del artículo 28 de la ley número 1306-BIS, el


Juez autorizará la demanda fijándola dentro del término de tres días para que los
esposos comparezcan en juicio. Terminada la audiencia el tribunal ordenará la
comunicación al Ministerio Público, para que dictamine en el plazo de tres días
francos, y el Juez pronunciará sentencia dentro de los tres (3) días siguientes. Los
esposos, o el más diligente de ellos, estarán obligados a transcribir en el registro Civil
la sentencia que haya admitido el divorcio; y hacer pronunciar éste, lo cual deberá
hacerse no menos de ocho días francos después de pronunciada aquella.
(Modificado por la Ley número 142, agregando un párrafo)

En el caso previsto en el Párrafo V del artículo 28 de la ley número 1306-BIS, una


vez dictada la sentencia, se pronunciará el Divorcio por cualquier Oficial del Estado
Civil de la Jurisdicción del Tribunal que conoció del caso, mediante la presentación
de una copia certificada de la sentencia, previamente transcrita en el registro Civil, y
el Dispositivo de la misma se publicará en un periódico de circulación nacional. La
sentencia que ordene el divorcio por mutuo consentimiento será inapelable, y para su
ejecución se observarán las reglas establecidas por el Código de Procedimiento Civil,
habida cuenta de las formalidades consignadas en la presente ley. Los esposos
están obligados a depositar en la Secretaría todos los documentos pertinentes a la
acción en divorcio por mutuo consentimiento, en los términos expresados en el
artículo 28 de la ley número 1306-BIS.

36
2.3. Características generales

Dentro de los requisitos del divorcio, inicia con la sola intención de uno o ambos
esposos expresar que la vida en común les es insoportable por lo tanto los requisitos
han de variar de acuerdo al tipo de divorcio elegido por los esposos, en que es por
mutuo consentimiento debe observarse Que los esposos tengan más de dos años de
casados y menos de treinta; Que el esposo tenga menos de 60 años y la mujer
menos de 50 años. En cuanto al divorcio por causa determinada se requiere de los
esposos. Acta de matrimonio de los esposos; Acta de nacimiento de los hijos;
menores de edad, si los hubiere; y Poder de representación de las partes.

2.4. Efectos jurídicos

Los esposos divorciados que vuelvan a casarse no podrán adoptar otro régimen que
el que los regía anteriormente. La mujer divorciada no podrá volver a casarse sino
diez meses después que el divorcio haya llegado a ser definitivo, a menos que su
nuevo marido sea el mismo de quien se ha divorciado. El esposo contra quien se
pronuncie el divorcio por cualquiera de las causas señaladas en los apartados d), e).
0. 9) y h) del artículo segundo, perderá todas las ventajas que el otro esposo le había
hecho, sea por el contrato de matrimonio, sea durante éste. (Modificado por la Ley
No. 2669, de fecha 31 de diciembre de 1950, G O. 7231). El esposo que haya
obtenido el divorcio conservará las ventajas que le haya otorgado el otro esposo
aunque las hayan estipulado recíprocas y que esta reciprocidad no tenga lugar.

Existe también otro divorcio que es el llamado divorcio al vapor donde se tienen que
llenar algunos requisitos como son Ser residente en el extranjero; Que hayan
celebrado el matrimonio en otra nación; Que sean extranjeros o nacionales
residentes en el extranjero; Otorgar competencia a los tribunales dominicanos; Actas
de nacimiento y de matrimonio de las partes; y Poder de representación.

37
Las causas de divorcio según dicho instrumento legal son Mutuo consentimiento,
que consiste en la disolución del matrimonio mediante el cual las partes se ponen de
acuerdo. El artículo 26 del Código Civil Dominicano dice que “el consentimiento
mutuo y perseverante de los esposos, expresado de la manera prescrita en la
presente ley, justificará suficientemente que la vida en común les es insoportable”. El
artículo 27 de la ley 1306 Bis establece las condiciones bajos las cuales se podrá
realizar el divorcio por mutuo consentimiento.

Los esposos se presentarán ante un notario público y le manifestaran su intención de


poner fin a su unión conyugal, en tal sentido, el abogado procederá a redactar el acta
de convenciones y estipulaciones, la cual contendrá lo relativo a la guarda de los
hijos menores si los hubiere, la pensión ad litem a favor de la esposa, el domicilio en
que quedará la mujer, la manutención de los hijos y la manutención de los menores
será redactada por un notario público.

2.5. La Separación de Cuerpos

La Separación de Cuerpos vinculada al ámbito conyugal, propone una distanciación


física de la pareja por un periodo determinado, bien sea por decisión personal o
judicial.
Para algunos autores hablar de separación de cuerpos es asociada a una decisión
judicial. Como por ejemplo Jean Carbonier, expresa: que consiste en la relajación del
vínculo matrimonial merced a una resolución judicial, que dispensa a los cónyuges
del deber de convivencia. La Separación de Cuerpos se puede interpretar como la
Forma por la cual se suspende entre los cónyuges la obligación de hacer vida en
común. En consecuencia, los cónyuges no se deberán entre si las obligaciones de
compartir el lecho y habitación; además, finaliza el régimen de sociedad de
gananciales precisamente por obra de la separación de cuerpos. (De Pina, 2008)

38
2.6. Código Civil de la República Dominicana

Matrimonio civil es el matrimonio que se contrae, formaliza e inscribe ante las


autoridades civiles (registro civil, administración pública, jueces o autoridades
municipales) y no ante las autoridades religiosas, ni siguiendo el rito de una religión
(matrimonio religioso). Sin embargo, el matrimonio civil no excluye necesariamente el
matrimonio religioso, y, de hecho, en numerosos sistemas jurídicos, en caso de
contraerse un matrimonio religioso, el matrimonio civil tiene lugar de forma
simultánea a éste.

En algunos países la institución del matrimonio civil responde a una voluntad de


separar la institución del matrimonio de la influencia de las instituciones religiosas,
inscribiéndose así en el movimiento de separación de Iglesia y Estado o laicismo,
que comienza en el siglo XVIII. En la ceremonia de matrimonio civil la novia no suele
usar su típico vestido a tal efecto a diferencia de la del matrimonio religioso.

El matrimonio se celebrará públicamente ante el oficial civil del domicilio de una de


las partes. Los dos edictos señalados en el artículo 63, en el título de actas del
estado civil, se harán en el lugar donde cada una de las partes tenga su domicilio.
Sin embargo, si el domicilio actual no está determinado sino por seis meses de
residencia, los edictos se harán además en el lugar del último domicilio.

Si las partes contratantes o una de ellas están, relativamente al matrimonio,


sometidas al poder de otro, los edictos se harán en el domicilio de aquéllos bajo cuyo
poder se encuentren los interesados. El Gobierno podrá por sí o por medio de los
funcionarios que al efecto nombre, dispensar por causas graves el segundo edicto.
(Artículo 169, Código Civil Dominicano)

El matrimonio contraído en país extranjero, entre dominicanos o entre dominicanos y


extranjeros, será válido si se ha celebrado con las fórmulas establecidas en dicho
país, siempre que haya sido precedido de los edictos prescritos por el artículo 63 en

39
el título de Actas del estado civil, y que el dominicano no haya infringido las
disposiciones contenidas en el capítulo precedente. En el término de tres meses
después del regreso del cónyuge dominicano a su patria, el acta de celebración del
matrimonio contraído en país extranjero, se transcribirá en el registro público de
matrimonios de su domicilio.

En el caso de los menores de edad Si el padre ha desaparecido, dejando hijos


menores frutos de un mismo matrimonio, la madre quedará encargada del cuidado
de los mismos, ejerciendo todos los derechos que correspondieren al marido en lo
relativo a la educación de aquéllos y administración de sus bienes. (Artículo 141,
Código Civil Dominicano)
Seis meses después de la desaparición del padre, si la madre hubiese fallecido al
tiempo de esta desaparición, o si muriese antes que se declarase la ausencia del
padre, se confiará el cuidado de los hijos por el consejo de familia a los ascendientes
más próximos o, en su defecto, a un tutor provisional. Lo mismo sucederá en el caso
en que el esposo ausente haya dejado hijos menores de matrimonio contraído
anteriormente.

El hombre, antes de los dieciocho años cumplidos, y la mujer antes de cumplir los
quince años no pueden contraer matrimonio civil. Sin embargo, el Gobierno puede,
por motivos graves, conceder dispensas de edad. No existe el matrimonio cuando no
hay consentimiento. No se puede contraer segundo matrimonio antes de la
disolución del primero. El hijo que no tenga veinticinco años cumplidos, y la hija que
no haya cumplido los veintiuno, no pueden contraer matrimonio sin el consentimiento
de sus padres. (Artículo 148, Código Civil Dominicano)

Si han muerto los padres, o están imposibilitados de manifestar su voluntad, lo


reemplazarán los abuelos; y si hay disentimiento entre el abuelo y la abuela de la
misma línea bastará el consentimiento del abuelo. Si hay disentimiento entre las dos
líneas, el empate produce el consentimiento. Los hijos de familia que hayan llegado a
la mayor edad definida en el artículo 148, están obligados antes de contraer
40
matrimonio, a pedir por acto formal y respetuoso el consejo de sus padres, o el de
sus abuelos cuando aquéllos hubiesen muertos o no puedan manifestar su voluntad.

Desde la mayor edad fijada en el artículo 148, hasta la edad de treinta años
cumplidos en los hijos y veinticinco en las hijas, el acto respetuoso prescrito por el
artículo precedente, sobre el cual no hubiese recaído consentimiento, se reproducirá
otras dos veces, de mes en mes y un mes después de la tercera petición se podrá
celebrar el matrimonio.

Cumplidos treinta años, podrá celebrarse el matrimonio un mes después de la


petición respetuosa de consejo a la que no haya seguido el consentimiento. La
petición respetuosa se notificará a aquel o a aquellos de los ascendientes
designados en el artículo 151 por dos notarios o por un notario y dos testigos, y en el
expediente que al efecto debe formarse, se hará mención de la respuesta.

En caso de ausencia del ascendiente, al cual debe hacerse la petición respetuosa, se


pasará a la celebración del matrimonio, exhibiendo la sentencia declaratoria de la
ausencia; y en defecto de dicha sentencia, de la que hubiere dispuesto la
información, o si no se hubiere practicado, un acta de notoriedad por el Juez de Paz
del lugar en que el ascendiente haya tenido su último domicilio conocido. El acta
contendrá la declaración de cuatro testigos llamados de oficio por aquel funcionario.
(Artículo 155, Código Civil Dominicano)

Los oficiales del estado civil que hayan procedido a la celebración de matrimonios de
hijos o hijas de familia, menores respectivamente de veinticinco y veintiún años
cumplidos, sin que en el acta de matrimonio se mencione el consentimiento de los
padres, abuelos o familia en los casos correspondientes serán, a instancia de las
partes interesadas o del fiscal hecha al tribunal de primera instancia del lugar en que
el matrimonio se haya celebrado, condenados a la multa fijada en el artículo 192
además a una prisión, que no durará menos de seis meses.

41
Cuando en los casos prescritos no hubieren precedido al matrimonio las peticiones
respetuosas de consejo, el oficial del estado civil que lo hubiere celebrado será
condenado a la misma multa y a prisión por lo menos de un mes. Las disposiciones
contenidas en los artículos 148 y 149 y las de los artículos 151 y 155, relativas a la
petición respetuosa que debe hacerse a los padres en los casos previstos en dichos
artículos, son aplicables a los hijos naturales legalmente reconocidos.

El hijo natural que no haya sido reconocido, y el que después de haberlo sido, haya
perdido sus padres, o si no pueden éstos manifestar su voluntad, no podrá casarse
antes de pasar los veinticinco años sin obtener previamente el consentimiento de un
tutor nombrado ad hoc. Si no existen los padres o abuelos o hubiese imposibilidad de
manifestar su voluntad, los hijos o hijas menores de veintiún años no pueden
contraer matrimonio sin el consentimiento del consejo de familia. (Artículo 164,
Código Civil Dominicano)

En la línea directa el matrimonio está prohibido entre todos los ascendientes y


descendientes legítimos o naturales y los afines en la misma línea. En la línea
colateral se prohíbe el matrimonio entre hermanos legítimos o naturales, y los afines
del mismo grado. También se prohíbe el matrimonio entre tío y sobrina o tía y
sobrino. Sin embargo, por causas graves, podrá el Gobierno dispensar las
prohibiciones establecidas respecto de los cuñados por el artículo 162, y por el
artículo 163 entre tío y sobrina y tía y sobrino.

El matrimonio se celebrará públicamente ante el oficial civil del domicilio de una de


las partes. Los dos edictos señalados en el artículo 63, en el título de actas del
estado civil, se harán en el lugar donde cada una de las partes tenga su domicilio.
Sin embargo, si el domicilio actual no está determinado sino por seis meses de
residencia, los edictos se harán además en el lugar del último domicilio.

Si las partes contratantes o una de ellas están, relativamente al matrimonio,


sometidas al poder de otro, los edictos se harán en el domicilio de aquéllos bajo cuyo
42
poder se encuentren los interesados. El Gobierno podrá por sí o por medio de los
funcionarios que al efecto nombre, dispensar por causas graves el segundo edicto.

El matrimonio contraído en país extranjero, entre dominicanos o entre dominicanos y


extranjeros, será válido si se ha celebrado con las fórmulas establecidas en dicho
país, siempre que haya sido precedido de los edictos prescritos por el artículo 63 en
el título de Actas del estado civil, y que el dominicano no haya infringido las
disposiciones contenidas en el capítulo precedente. En el término de tres meses
después del regreso del cónyuge dominicano a su patria, el acta de celebración del
matrimonio contraído en país extranjero, se transcribirá en el registro público de
matrimonios de su domicilio.

Tiene derecho a oponerse a la celebración de un matrimonio, la persona casada ya


con una de las partes contrayentes. El padre, y en su defecto la madre, y a falta de
ambos los abuelos y abuelas, pueden oponerse al matrimonio de sus hijos y
descendientes, aunque éstos tengan veinticinco años cumplidos.

En defecto de ascendientes, los hermanos, tíos o primos hermanos, no pueden


oponerse sino en los dos casos siguientes: Primero: Cuando no se haya obtenido el
consentimiento del consejo de familia preceptuado en el artículo 160. Segundo:
Cuando la oposición se funde en el estado de demencia del futuro esposo: esta
oposición podrá desestimarla el tribunal sin forma de juicio; no se recibirá nunca sino
contrayendo el opositor la obligación de provocar la interdicción y de obtener
sentencia en el plazo fijado por el Tribunal. (Artículo 174, Código Civil Dominicano)

En los casos previstos en el artículo precedente, el tutor o curador no podrá en tanto


que dure la tutela o curatela hacer oposición mientras no sea autorizado por un
consejo de familia que podrá convocar. Todo acto de oposición deberá enunciar la
cualidad en virtud de la cual tiene el opositor el derecho de formularla; expresará la
elección de domicilio, el lugar en que debe celebrarse el matrimonio y, a menos que
sea hecha a instancia de un ascendiente, debe contener los motivos de la oposición:
43
todo esto bajo pena de nulidad y de la suspensión del oficial ministerial que hubiere
firmado el acto de oposición.

2.7. Ley número 198-11 de matrimonios Religiosos

Los matrimonios religiosos tendrán efectos civiles en los términos que establezca la
ley, sin perjuicio de lo dispuesto en los tratados internacionales. La unión singular y
estable entre un hombre y una mujer, libres de impedimento matrimonial, que forman
un hogar de hecho, genera derechos y deberes en sus relaciones personales y
patrimoniales, de conformidad con la ley. (Numeral 4 y 5, Artículo 55, Constitución
Dominicana)

Las iglesias cuyo estatus no esté amparado en un tratado internacional, con más de
cinco años de establecidas en el país, provistas de personería jurídica propia de
acuerdo con las leyes vigentes, designarán en cada circunscripción o demarcación
geográfica, mediante cédula o licencia, cuáles de sus pastores, sacerdotes o
ministros tendrán la facultad de oficiar el matrimonio religioso, lo cual mediante
instancia comunicarán al Director Nacional del Registro del Estado Civil y a la Junta
Central Electoral, a través de la Dirección Nacional de Registro del Estado Civil, a los
fines de autorización y registro de las generales y demás datos que fueren de lugar y
de la expedición a cargo de la Junta Central Electoral de la licencia correspondiente.

Será facultad de la Junta Central Electoral la creación del sistema de registro para
todas las instituciones religiosas interesadas en celebrar matrimonios religiosos al
amparo de la presente ley. Sólo se reconocerá efectos civiles al matrimonio religioso
oficiado por los pastores, sacerdotes o ministros de tales iglesias, debidamente
autorizados por la entidad de que se trate y provistos de la licencia otorgada. Las
entidades religiosas deben notificar a la Dirección Nacional de Registro del Estado
Civil cualquier adición, sustitución o eliminación de los pastores, sacerdotes o
ministros autorizados. (Párrafo 2, articulo 3, Ley número 198-11 que regula los
matrimonios religiosos y sus efectos en la República Dominicana)

44
Las entidades religiosas son responsables de la custodia de los Libros Registros de
Matrimonios, debiendo seguir las instrucciones de la Dirección Nacional de Registro
del Estado Civil para el llenado y conservación física de los mismos en un archivo
destinado para tales fines, que garantice la seguridad e integridad de las
informaciones registradas.

Los efectos civiles del matrimonio religioso se originan con la trascripción pura y
simple del acta de matrimonio en el Registro Civil de la Circunscripción
correspondiente. Esta acta debe contener: a) La identificación clara y precisa de la
iglesia a la que pertenece el sacerdote, pastor o ministro oficiante especificando su
estatus jurídico. b) La dirección o ubicación del templo en que se ofició el matrimonio
y lugar en que reposan los archivos correspondientes. c) Nombres, apellidos y datos
generales del pastor, sacerdote o ministro oficiante. d) Fecha, hora y lugar de la
celebración del matrimonio. e) Nombres, apellidos y datos generales de los
contrayentes y testigos, así como su dirección o domicilio. f) Lugar y fecha de
nacimiento de los contrayentes y nombres y apellidos de los padres de ambos. g)
Testimonio de los testigos bajo promesa o juramento, sobre el hecho de no tener
ninguno de los contrayentes impedimento o prohibición legal para contraer
matrimonio. h) Firmas de los contrayentes, de los testigos y sacerdote, pastor o
ministro oficiante, así como el sello oficial de la iglesia correspondiente. Si alguno de
los contrayentes o testigos no supiere o no pudiere firmar, estampará sus huellas
digitales y se dejará testimonio de esta circunstancia. i) Cumplir con las exigencias
establecidas en la ley para la validez del matrimonio civil.

Los efectos civiles del matrimonio religioso celebrado de conformidad con esta ley,
una vez transcrito debidamente, comienzan a partir de la fecha de su celebración.
Sin embargo, cuando la transcripción del matrimonio sea solicitada después de
transcurrido los tres días hábiles siguientes a la celebración del mismo, dicha
transcripción deberá ser autorizada por la Dirección Nacional de Registro del Estado
Civil, luego de realizar una investigación del caso y de comprobarse la veracidad del
45
matrimonio religioso, se ordenará su transcripción tardía, produciendo sus efectos
civiles desde el momento de su celebración, sin perjudicar los derechos adquiridos,
legítimamente, por terceras personas. (Artículo 7, Ley número 198-11 que regula los
matrimonios religiosos y sus efectos en la República Dominicana)

Atendiendo al derecho internacional, el derecho a contraer matrimonio y la libertad de


religión o creencias se puede observar En su decisión en Janis Khan contra Reino
Unido (Decisión de 7 de julio de 1986), la Comisión Europea de Derechos Humanos
hubo de juzgar un caso en el que un ciudadano inglés de religión musulmana
reclamaba le fuese reconocido el derecho a contraer matrimonio con una joven que
no alcanzaba la edad núbil legalmente establecida en ese país, basándose en la
pretensión de que la sanción penal que le había sido impuesta por mantener
relaciones sexuales con una menor tras haber llevado a electo ese enlace vulneraba
su derecho a la libertad de pensamiento, conciencia y religión amparado por el
artículo 9 del Convenio, habida cuenta de que, según sostuvo el demandante, la ley
islámica autoriza a celebrar el matrimonio desde los doce años cumplidos en el caso
de la mujer.

En el caso de la República Dominicana, la constitución en su artículo 45 plantea que


el Estado garantiza la libertad de conciencia y de cultos, con sujeción al orden
público y respeto a las buenas costumbres. Enfrentada a estos hechos, la Comisión
comenzó exponiendo su conocida doctrina acerca de que no todo acto motivado o
influido por la profesión religiosa ha de ser necesariamente considerado como una
práctica amparada por el artículo 9 del Convenio para señalar, seguidamente, que si
bien la religión del reclamante permite el connubio de las féminas desde los doce
años, el matrimonio no puede ser simplemente considerado como una forma de
expresión de la religión profesada sino que está además sujeto a la específica
regulación convencional contenida en el artículo 12; la consecuencia extraída de
estas premisas fue la de que, estando el derecho a contraer matrimonio sometido en
el Convenio a lo estipulado en las legislaciones internas reguladoras de su ejercicio,
que en este caso no permitían el enlace a tan temprana edad, en el supuesto
46
enjuiciado no se había producido vulneración ni de la libertad religiosa ni del ius
connubii convencionalmente protegidos.

Si bien es cierto que el artículo 12 del Convenio supedita el ejercicio del derecho a
contraer matrimonio a lo establecido en cada caso por las leyes nacionales, no lo es
menos que dichas legislaciones no podrán llevar este margen de delimitación hasta
el extremo de hacer irreconocible el derecho regulado, de desvirtuarlo y privarlo de
su sentido y función convencionalmente instituidos en el sistema europeo; en
palabras del Tribunal, el artículo 12 asegura el derecho fundamental de un hombre y
de una mujer a contraer matrimonio y a fundar una familia.

El ejercicio de este derecho da lugar a consecuencias personales, sociales y legales.


Obedece las leyes nacionales de los Estados Contratantes, pero las limitaciones así
introducidas no deben restringir ni reducir el derecho en tal sentido o hasta el punto
de que la esencia del derecho sea perjudicada.

En todos los Estados miembros del Consejo de Europa, estas limitaciones aparecen
como condiciones y se encarnan en normas tanto de forma como de fondo. Las
primeras afectan principalmente a la publicidad y solemnidad del matrimonio; los
segundos a la capacidad, consentimiento y ciertos impedimentos. (Jurisprudencia
Sentencias del Tribunal Europeo de Derechos Humanos, de 18 de diciembre de
1987. Caso F. contra Suiza, ap. 32).

Así pues, a la luz de las determinaciones de la Corle de Estrasburgo, en la


Convención Europea de Derechos existe un contenido nuclear del derecho a
contraer matrimonio a partir del que habría de ser posible identificar y exponer sus
caracteres esenciales, en principio intangibles para el legislador estatal en el
desarrollo de sus privativas competencias reguladoras.

No obstante, el Tribunal, que por otra parte ha frecuentado en relativamente pocas


ocasiones este derecho al menos en relación a las veces en las que se ha
47
pronunciado sobre el alcance de otros preceptos convencionales, tampoco ha
elaborado una doctrina muy completa ni ha desarrollado muy pormenorizadamente
aquellos rasgos de identidad que reflejan esa mencionada esencia del derecho a
contraer matrimonio en el Convenio, inmune a la acción de los legisladores
nacionales.

Da más bien la sensación de que el Tribunal Europeo de Derechos Humanos


(TEDH), invariablemente presupone un significado básico del derecho tutelado en el
art. 12 del Convenio, que entiende generalmente asentado entre los estados
signatarios y que, asimismo, se apoya en una noción del que propiamente es el
objeto del derecho, el matrimonio o la institución matrimonial, que también se
presupone dotado de unos rasgos esenciales generalmente aceptados en la cultura
jurídica europea. (Polo Sabau, 2016)

Cuestión distinta es la de que ese presupuesto significado del matrimonio y del


derecho a contraerlo hayan experimentado en determinadas facetas una cierta
evolución en la doctrina emanada de los órganos aplicadores del Convenio, como ha
sido el caso, por ejemplo, de la rectificación a partir de 2002 del criterio hasta
entonces sostenido a propósito de la mutua implicación entre el ius connubii y el
derecho a fundar una familia, quedando con ello definitivamente desvinculados del
contenido esencial del derecho a contraer matrimonio determinados aspectos como
la recíproca obligación de cohabitar impuesta a los contrayentes o la dimensión
procreativa y abriéndose el camino, en consecuencia, a la posibilidad de entender
amparado por el precepto convencional también al matrimonio celebrado entre
personas del mismo sexo biológico.

Pero más allá de la determinación jurisprudencial del alcance de estas vertientes en


el régimen del derecho, la doctrina sentada sobre este lema parece de algún modo
dar por supuesto lo que haya de entenderse por matrimonio, lo que de hecho se
entiende portal en la cultura jurídica común a los países miembros del Consejo de
Europa, y esa noción, en esencia, nos remite implícitamente a la idea de una cierta
48
relación de naturaleza contractual entre dos personas que implica, o puede implicar,
una comunidad de vida basada en lazos amorosos o afectivos y un trato sexual entre
ellas en régimen de exclusividad pero no necesariamente ordenado a la procreación,
y poco más.

Tan exiguo contenido se explica en buena medida por la existencia de ese fenómeno
común o al menos muy extendido en el contexto europeo y que, entre nosotros, se
ha descrito acertadamente como una suerte de vaciamiento en las legislaciones
estatales contemporáneas de gran parte de los elementos institucionales del
connubio secularmente arraigados, que habría dado origen a lo que, como se ha
dicho también gráficamente, constituye actualmente una grave crisis de identidad del
concepto de matrimonio civil, especialmente perceptible en lo atinente a la pérdida de
su tradicional vertiente procreativa pero similarmente detectable en la ausencia de
otros elementos otrora inherentes al contenido básico de la institución. (Polo Sabau,
2016)

Todo esto, como decía, se traduce en la fijación de una serie de criterios


jurisprudenciales muy básicos en los que implícitamente se parte de la premisa de
que, tanto el matrimonio como el derecho a contraerlo ya poseen un significado
jurídico esencialmente fijado y comúnmente aceptado, por lo que, aparentemente, el
Tribunal no se ha sentido en la obligación de entrar a exponer con mayor detalles el
alcance del derecho en esa su faceta más esencial o nuclear convencionalmente
preservada.

49
CAPÍTULO III
CAUSAS QUE PRODUCEN LAS CRISIS MATRIMONIALES

3.1. Posibles causas de crisis matrimonial

El divorcio, también conocido como disolución del matrimonio, es el proceso de


terminar un matrimonio o unión matrimonial. Por lo general, implica la cancelación o
reorganización de los deberes legales y las responsabilidades del matrimonio,
disolviendo así los lazos de matrimonio entre una pareja casada bajo el estado de
derecho del país o estado en particular. (Parra-Aranguren, 2007)

Las leyes de divorcio varían considerablemente en todo el mundo, pero en la


mayoría de los países, el divorcio requiere la sanción de un tribunal u otra autoridad
en un proceso legal, que puede implicar cuestiones de distribución de propiedad,
custodia de los hijos, pensión alimenticia (manutención del cónyuge), visitas a los
niños / de acceso, tiempo de crianza, manutención de los hijos, y la división de la
deuda. En la mayoría de los países, la ley exige la monogamia, por lo que el divorcio
permite que cada ex pareja se case con otra persona; donde la poliginia es legal pero
la poliandria no lo es, el divorcio permite que la mujer se case con otra persona.

El divorcio no debe confundirse con la anulación, que declara el matrimonio nulo y


sin valor, con separación legal o separación de jure (un proceso legal mediante el
cual una pareja casada puede formalizar una separación de facto mientras
permanece legalmente casada) o con separación de facto (a proceso en el que los
cónyuges dejan de cohabitar informalmente). Las razones para el divorcio varían,
desde la incompatibilidad sexual o la falta de independencia de uno o ambos
cónyuges hasta un choque de personalidades.

El fomento de una cultura del individualismo, en la cual sólo valen los bienestares y
beneficios personales sin importar los del otro es, uno de los principales ejes de la
crisis de parejas que desemboca en un aumento progresivo de los divorcios en
50
nuestro país. Un ejemplo visible de esto puede palparse en los contratos
prenupciales, contratos firmado como si fueran un asunto de compañía donde esto
es mío y aquello tuyo o los matrimonios con separación de bienes que vienen ser
una especie de seguro de fallas y que no hay una intención real de unión con el
objetivo de compartirlo todo, lo bueno y lo malo, la salud y la enfermedad.

La familia se está desintegrando rápidamente y la sociedad no está haciendo nada a


la vista por frenar este proceso. Una de las principales causas de ruptura
matrimonial, la falta de conciencia sobre el peso de la vida bajo este sacramento, al
indicar que el matrimonio no es la cura de los males ni la forma de justificar a la vista
de los demás la actividad sexual de una pareja, sino que va más allá, como una
forma de vivir y una forma de ser seres humanos.

Sin embargo, uno de los grandes problemas que, entiende, se encuentra en las
parejas en crisis, es que no saben a lo que van en el matrimonio. Por ejemplo, se
tiene la creencia totalmente errónea de que los problemas que se manifiestan en una
de las partes de la pareja durante el noviazgo desaparecerán o se corregirán en el
matrimonio porque con mi gran e inmenso amor yo voy a hacer que la persona
cambie. (Parra-Aranguren, 2007)

Esta creencia es errónea porque lo que no está bien en el noviazgo difícilmente


mejore, sino que va a empeorar en el matrimonio. Otro aspecto es el nuevo rol que la
mujer tiene en la sociedad. Con la liberación femenina, sostiene el especialista, se ha
dado un fenómeno sumamente especial, en el sentido de que anteriormente la mujer,
al no tener ni la educación ni la capacidad productiva, tenía que aguantar todo lo que
el marido hiciera, situación que no ocurre ahora cuando la misma se ha insertado en
el rol productivo de la nación.

Otra causa también es la incompatibilidad en la toma de decisiones, falta de


consenso y el no querer acceder o ceder en muchas cosas. En este sentido,
Pacheco llama a las parejas a estar claros en que el matrimonio tiene sus momentos
51
muy agradables, pero también tiene sus momentos en los que hay que aguantar,
donde solamente el deseo de conservar y profundizar la relación hace que
permanezca. Cuando ese deseo se ve dificultado, accidentado por situaciones de
poca monta y la pareja no tiene la motivación de seguir adelante, quizá lo más fácil
sea el divorcio, pero, se aclara, eso va a ocurrir con cualquier otra persona,
simplemente porque no se está como ser humano entregado al proyecto de la pareja.

Causa del divorcio


Año de registro Total Incompatibilidad Mutuo
Homologación
de Caracteres consentimiento

2001 12,821 7,739 5,082 0


2002 12,972 7,993 4,979 0
2003 14,618 8,968 5,650 0
2004 17,691 10,641 7,050 0
2005 16,649 9,592 7,057 0
2006 18,071 8,262 9,809 0
2007 16,705 7,385 9,320 0
2008 17,181 7,606 9,575 0
2009 16,408 7,169 9,238 1
2010 17,674 7,507 10,167 0
2011 17,927 7,785 10,140 2
2012 17,820 7,672 10,148 0
2013 18,882 8,348 10,528 6
2014 19,370 8,638 10,730 2
2015 20,352 9,204 11,143 5
2016 21,750 9,565 12,180 5
(Oficina Nacional de Estadísticas, 2016)

Aunque de por sí los divorcios provocan trastornos en la familia, los conflictos que
generan se debaten asiduamente en los tribunales de la República, dado que

52
abundan las demandas en partición de bienes y la custodia de los menores. También
originan depresiones que los especialistas de la conducta llaman periodo de duelo.

La ligereza y la prontitud que exhiben los legisladores al aprobar leyes especiales y


códigos, derogan sin motivos, normas de orden público, como es la infracción del
adulterio que fue despenalizado por la ley número 24-97, y el nuevo Código Penal
que está siendo conocido por el Congreso, se lleva de paro la bigamia, un crimen
cuya sanción puede llegar hasta diez años de reclusión.

Hay dos tipos de divorcios: por incompatibilidad de caracteres y mutuo


consentimiento de los esposos. Entre las causales de la separación legal se citan las
injurias graves cometidas por uno de los cónyuges, el abandono voluntario del hogar,
siempre que no regrese en el término de dos años. También es una de las causas la
embriaguez habitual de uno de los esposos, el uso habitual o inmoderado de drogas
estupefacientes.

El país vive una época en que los matrimonios no perduran dos años, situación que
revela la crisis de la familia. Cuando una persona contrae nupcias, ignorando que su
pareja está casada, el matrimonio es nulo y se reputa como un matrimonio putativo,
un enlace que reconoce la legitimidad de los hijos que se hayan procreados y los
derechos de la comunidad matrimonial.

La institución del divorcio es casi tan antigua como la del matrimonio, si bien muchas
culturas no lo admitían por cuestiones religiosas, sociales o económicas. La mayoría
de las civilizaciones que regulaban la institución del matrimonio nunca la
consideraron indisoluble, y su ruptura generalmente era solicitada por los hombres.
Aunque en algunas de ellas, el nacimiento de un hijo le otorgaba al vínculo el
carácter de indisoluble. En muchas sociedades antiguas también era motivo de
muerte, como en la antigua Babilonia, donde el divorcio podía ser pedido por
cualquiera de los cónyuges, pero el adulterio de las mujeres era penado con la
muerte.
53
Los celtas practicaban la endogamia (matrimonio de personas de ascendencia
común o naturales de una pequeña localidad o comarca), excepto los nobles que
solían tener más de una esposa. Era habitual la práctica de contraer matrimonio por
un período establecido de tiempo, tras el cual los contrayentes eran libres, pero
también era habitual el divorcio.

En América, los hombres Aztecas solo podían tener una esposa y se la denominaba
Cihuatlantli, Nociuauh o Áhuatlantli (esto es mujer legítima), y aunque se aceptaba la
poliginia, solo la primera mujer tenía el carácter de esposa. En este contexto, el
divorcio era consentido, pudiendo ser solicitado tanto por el hombre como por la
mujer; así, al lograrse -vía sentencia judicial- se quedaba habilitado para contraer
nuevamente matrimonio.

Entre los hebreos, los varones podían repudiar a sus esposas sin necesidad de
argumentar la causa de tal actitud; bastaba con informar al Sanedrín. También
existía el divorcio por mutuo disenso, pero las razones de las mujeres eran
sometidas a un análisis más riguroso que las del hombre. También en la antigua
Grecia existía el divorcio por mutuo disenso y la repudiación, pero el hombre debía
restituir la dote a la familia de la mujer en caso de separación. (Parra-Aranguren,
2017)

En el alto Imperio romano los casos más frecuentes eran los de concubinato y la
unión libre, en todas las clases sociales. El matrimonio, cuando se practicaba,
obedecía a un objetivo puramente económico: la transmisión del patrimonio a los
descendientes directos en vez de otros miembros de la familia o la sociedad y a una
política de perpetuar la casta de los ciudadanos. Si se carecía de patrimonio era
innecesario casarse, y si se era esclavo, imposible (recién a partir del siglo III les
estuvo permitido casarse a los esclavos). La inestabilidad de las parejas parece
haber sido muy frecuente y el número de divorcios muy alto.

54
En el bajo Imperio romano el divorcio era algo poco común, hasta la época de los
emperadores, en donde se acuñó la máxima "matrimonia debent esse libera” (los
matrimonios deben ser libres), en donde el esposo o la esposa podían renunciar a él
si así lo querían. Con la llegada del cristianismo, el divorcio se prohibió debido a la
concepción del matrimonio como un sacramento instituido por Dios y cuyo vínculo
era irrompible. A partir del siglo X, aunque el divorcio estaba prohibido, existía la
Nulidad matrimonial, es decir, el matrimonio se declaraba nulo si se demostraba que
no había existido por diferentes razones. Eran los tribunales eclesiásticos quienes
tramitaban las declaraciones de nulidad matrimonial.

Sin embargo, la Reforma de Lutero, admitió el divorcio aunque únicamente en casos


muy graves. Esta reforma, incluso provocó que Inglaterra abrazara la misma debido
a que su rey, Enrique VIII deseaba divorciarse de su esposa, Catalina, y la Iglesia de
Roma no se lo permitía. En 1796, Francia incorporó la ruptura del vínculo matrimonial
en la ley promulgada el 20 de noviembre, que sirvió de antecedente a muchas de las
legislaciones vigentes.

Italia en 1970 fue de los últimos grandes países europeos en aprobarlo


definitivamente. Irlanda y Malta lo aprobaron en referéndum en 1995 y 2011
respectivamente. El divorcio ha causado grandes polémicas en los países
mayoritariamente católicos, pues la Iglesia católica no considera posible el divorcio.
El 28 de mayo de 2011, Malta fue el último país de la Unión Europea en legalizar,
tras referéndum, el divorcio por un 52% de apoyos. (Oficina Nacional de Estadísticas,
2016)

Mes de registro
2013 2014 2015 2016

Total 18,882 19,370 20,352 21,750

Enero 1,603 1,758 1,635 1,577


Febrero 1,283 1,341 1,448 1,746

55
Marzo 1,370 1,537 1,625 1,668
Abril 1,671 1,502 1,514 1,763
Mayo 1,768 1,638 1,748 1,639
Junio 1,598 1,602 1,726 2,048
Julio 1,595 1,750 1,983 1,675
Agosto 1,725 1,662 1,684 1,921
Septiembre 1,489 1,604 1,827 1,838
Octubre 1,725 1,801 1,808 1,769
Noviembre 1,559 1,551 1,575 1,914
Diciembre 1,496 1,624 1,779 2,192

República Dominicana: Divorcios registrados por año, según mes de registro, 2013-2016

Los conflictos que provocan los divorcios son interminables. El artículo 24 de la ley
de divorcio, permite a la mujer casada figar sellos a los bienes muebles de su marido
y trabar embargos retentivos a sus cuentas bancarias. También el cónyuge tiene el
derecho de inscribir la hipoteca legal de la mujer casada a los inmuebles adquiridos
entre ambos. Estas medidas cautelares tienen el fin de evitar la distracción de los
bienes de la comunidad.

El país vive una época en que los matrimonios no perduran dos años, situación que
revela la crisis que afecta la familia dominicana. Cada día crece el número de
personas que se inclinan por uniones de hecho o consensuales, lo que se conoce
como concubinato, estatus que genera los mismos derechos que los matrimonios
realizados por el régimen de la comunidad matrimonial. (Oficina Nacional de
Estadísticas, 2016)

El divorcio por mutuo consentimiento no será admitido, sino después de dos años de
matrimonio, como tampoco lo será después de treinta años de vida común. Sin
embargo, decenas de divorcios de matrimonios con más de tres décadas de

56
existencia, han sido acogidos por los tribunales, sin que los jueces los hayan
rechazados, probablemente por inobservancia del tiempo de las actas de matrimonio.

El divorcio no es el problema, sino el resultado de un conjunto de inconvenientes,


desavenencias y problemáticas vividas en el contexto del matrimonio que puede
radicar con uno u ambos cónyuges,19 catalogándose por un sinnúmero de
investigadores como el segundo proceso más estresante durante la edad adulta,
inmediatamente después de la muerte de uno de los cónyuges.

Algunos autores, tomando como elemento de análisis al adulto divorciado que es


padre y/o miembro de la familia, indican que el divorcio es el gran responsable de las
profundas alteraciones que sufre el sistema familiar post divorcio, obligando a sus
subsistemas a reorganizarse estructuralmente; en efecto, para el caso de los hijos/as
por ejemplo, se señala que la capacidad que estos tienen respecto a su
funcionamiento adaptativo dependen no solo de las características del sistema
familiar existente durante el matrimonio, sino que también de las relaciones co-
parentales que se dan después de finalizado el proceso de divorcio.

Por otro lado, algunos autores afirman que el proceso de divorcio impactaría en el
bienestar de los niños/as, pudiéndose asociar a algunos problemas que éstos
externalizan, tales como comportamientos agresivos o tendencia a quebrar reglas,
mientras que a nivel interno, con problemas de ansiedad y depresión.

En particular, autores católicos y sociólogos conservadores cuestionan mucho las


consencuencias del mismo y relacionan el divorcio con la delincuencia juvenil. Otros
investigadores consideran que lo que impacta en los hijos es el conflicto parental y
no el divorcio.

Un estudio anual en el Reino Unido realizado por los consultores de administración


Grant Thornton, estima las principales causas de divorcio basadas en encuestas de
abogados matrimoniales. Según esta encuesta, los esposos se involucraron en
57
asuntos extramaritales en el 75% de los casos; Las esposas en el 25%. En casos de
tensión familiar, las familias de esposas fueron la principal fuente de tensión en el
78%, en comparación con el 22% de las familias de los esposos. El abuso emocional
y físico se dividió de manera más equitativa, con esposas afectadas en el 60% y
esposos en el 40% de los casos.

En el 70% de los divorcios relacionados con la adicción al trabajo fue la causa de los
esposos, y en el 30%, las esposas. La encuesta de 2004 encontró que el 93% de los
casos de divorcio fueron solicitados por esposas, muy pocos de los cuales fueron
impugnados. El 53% de los divorcios fueron de matrimonios que habían durado de
10 a 15 años, y el 40% terminó después de 5 a 10 años. Los primeros 5 años son
relativamente libres de divorcio, y si un matrimonio sobrevive más de 20 años, es
poco probable que termine en divorcio. (Oficina Nacional de Estadísticas, 2016)

Los científicos sociales estudian las causas del divorcio en términos de factores
subyacentes que pueden motivar el divorcio. Uno de estos factores es la edad en
que una persona se casa; retrasar el matrimonio puede proporcionar más
oportunidades o experiencia en la elección de una pareja compatible. Las
proporciones de salarios, ingresos y sexo son otros factores subyacentes que se han
incluido en los análisis de sociólogos y economistas.

La elevación de las tasas de divorcio entre las parejas que cohabitaron antes del
matrimonio se denomina efecto de cohabitación. La evidencia sugiere que aunque
esta correlación se debe en parte a dos formas de selección ( a ) que las personas
cuyos códigos morales o religiosos permiten la convivencia también tienen más
probabilidades de considerar el divorcio permitido por la moralidad o la religión y ( b )
que el matrimonio se basa en bajos niveles de compromiso es más común entre las
parejas que cohabitan que entre las parejas que no lo hacen, de modo que los
niveles medio y medio de compromiso al inicio del matrimonio son más bajos entre
las parejas que cohabitan que entre las parejas que no cohabitan), la experiencia de

58
cohabitación en sí misma ejerce al menos algún efecto independiente en la
subsiguiente unión matrimonial.

En 2010, un estudio de Jay Teachman publicado en Journal of Marriage and Family


encontró que las mujeres que habían convivido o habían tenido relaciones sexuales
prematrimoniales con otros hombres además de sus maridos tienen un mayor riesgo
de divorcio, y que este efecto es más fuerte para las mujeres que han convivido
Múltiples hombres antes del matrimonio. Para Teachman, el hecho de que el elevado
riesgo de divorcio solo se experimenta cuando la pareja prematrimonial es otra
persona que el marido indica que el sexo prematrimonial y la convivencia son ahora
una parte normal del proceso de cortejo en los Estados Unidos. Cabe mencionar
que el estudio solo considera datos sobre mujeres en la Encuesta nacional de
crecimiento familiar de 1995 en los Estados Unidos. El divorcio a veces es causado
por uno de los socios que encuentra al otro poco atractivo.

3.2. Protagonistas de la crisis matrimonial

Cada año se casan miles de parejas en la República Dominicana y muchas otras se


divorcian. Para conocer el comportamiento de estos procesos en el país, que
incluyen hasta menores de edad, Diario Libre analiza una base de datos de la Oficina
Nacional de Estadísticas (ONE). Desde el año 2001 hasta 2014 en el país se han
producido 234,663 divorcios, según datos registrados en las Oficialías del Estado
Civil y divulgados por la ONE.

Las estadísticas indican que en el Distrito Nacional. Entre 2001-2014 se registraron


en este territorio 56,721. En segundo lugar Santiago, con 39,052, y en tercero la
provincia Santo Domingo con 24,484. Una cuarta provincia es La Vega, con 16,598.
En el ámbito jurídico se habla de que en La Vega hay menos demora en el
conocimiento de los expedientes. Por ejemplo, un mismo caso puede durar hasta dos
años menos si se hace en esta jurisdicción en vez de Santiago. Igualmente, es la

59
única provincia que tiene dos distritos judiciales: el Distrito Judicial de La Vega y el
Distrito Judicial de Constanza. (Oficina Nacional de Estadísticas, 2016)

Mes de
matrimonio 2010 2011 2012 2013 2014 2015 2016

Total 43,797 44,253 43,307 45,163 47,235 50,158 52,896

Enero 3,687 4,549 4,109 4,382 4,703 4,456 4,880


Febrero 3,478 3,893 3,858 3,268 3,764 3,699 4,334
Marzo 3,965 4,380 4,077 3,627 4,082 4,354 4,367
Abril 3,422 3,668 3,246 3,850 3,747 3,822 4,749
Mayo 3,050 3,541 2,984 3,619 3,758 3,957 3,412
Junio 3,125 3,149 3,297 3,206 3,174 3,719 4,329
Julio 3,711 3,443 3,545 3,792 3,931 4,324 4,621
Agosto 3,378 3,306 3,520 4,017 3,872 4,138 4,481
Septiembre 3,095 2,949 2,836 3,194 3,146 3,526 3,901
Octubre 3,252 2,712 2,923 3,222 3,525 3,634 3,504
Noviembre 3,870 3,231 3,402 3,487 3,387 3,719 3,798
Diciembre 5,764 5,432 5,510 5,499 6,146 6,810 6,520
República Dominicana: Matrimonios registrados por año, según mes de matrimonio, 2001-2016.

Los civiles, y por mucho. Cuando entre 2001-2014 se registraron 518,274


matrimonios civiles, se produjeron 54,876 canónicos. Cabe destacar que desde el
año 2013 se empezó a registrar otro tipo de matrimonio religioso cuando se empezó
a implementar la Ley 192-11 que reconoce efectos civiles a los matrimonios
religiosos celebrados por las iglesias no católicas establecidas en la República
Dominicana. La primera boda amparada bajo esta ley se realizó el 28 de agosto de
2013 con las nupcias de una pareja miembro de la denominación Testigos de
Jehová. A partir de esa fecha y hasta 2014 se produjeron 583 matrimonios de este
tipo.

El Censo de 2010 revela que el 34.9% de la población de 15 y más años se


encontraba en unión consensual, porcentaje que duplica la cantidad de matrimonios,

60
que representaban el 17.4 por ciento. Al analizar estos datos, el demógrafo Antonio
Morillo Pérez, técnico de la Unidad Asesora de Análisis Económico y Social del
Ministerio de Economía, Planificación y Desarrollo, destacó que el patrón de
nupcialidad del país ha sufrido cambios muy significativos en las últimas cinco
décadas. (Oficina Nacional de Estadísticas, 2016)

Indica que a nivel general se observa una tendencia a la disminución en los


matrimonios, al descender de 31% de la población que representaban en 1970 a
17% en el año 2010. Resalta que paralelamente se verifica un aumento de las
uniones consensuales, que aumentan de 25% en 1970 a 35% en 2010. Morillo refirió
que los datos de las Encuestas nacionales de Fuerza de Trabajo (ENFT) del Banco
Central ratifican los cambios recientes en el patrón conyugal de la población, al citar
que de 2000 a 2010 se amplía la brecha entre los matrimonios y las uniones
consensuales. Cita que en 2000 por cada 100 matrimonios existían 121 uniones
consensuales, mientras que en 2010 por cada 100 matrimonios había 171 uniones.

Tipo de matrimonio
Otros religiosos
Año de Total Adventista
Total Otros
matrimonio Civil Canónico otros Testigos del
Evangélico Pentecostal religiosos no
religiosos de Jehová Séptimo
especificados
día

2012 43,307 39,363 3,944 0 0 0 0 0 0


2013 45,163 41,304 3,837 22 0 0 0 0 22
2014 47,235 42,860 3,814 561 14 43 0 37 467
2015 50,158 45,243 4,021 894 41 84 0 132 637
2016 52,896 47,858 3,464 1,574 80 103 181 206 1,004

Leidy Laura Cabreja, de 21 años, y Baldwin Rodríguez, de 26, contrajeron nupcias en


una ceremonia dirigida por el ministro de culto Rafael Ortiz y realizada en la sede de
la Junta Central Electoral (JCE), que es el órgano rector del Registro Civil en el país.

Este acto es la continuación de la insistencia que hace la comunidad internacional,


desde las más diversas corrientes del pensamiento, para avanzar hacia un mundo de
61
convivencia y tolerancia respecto a las creencias, dijo en el acto el presidente de la
JCE, Roberto Rosario. El Estado dominicano abrió las puertas a los matrimonios de
otras confesiones no católicas gracias a una reforma de la Constitución proclamada
en 2010, según la cual los matrimonios religiosos tendrán efectos civiles en los
términos que establezca la ley.

Indica, además, que en el ámbito geográfico se presentan importantes contrastes en


el patrón de uniones. Por ejemplo, la mayor brecha entre los tipos de unión se
presenta en las provincias de la región fronteriza. En Baoruco por cada 100
matrimonios hay 566 uniones consensuales. Por el otro lado, la menor brecha se
presenta en el Distrito Nacional, donde por cada 100 uniones formales existen 108
informales.

De acuerdo con los resultados del Censo 2010, la población masculina es de


4,739,038 habitantes y la femenina de 4,705,243, mostrando un equilibrio relativo
entre los sexos. Sin embargo, Morillo cita que en el ámbito provincial se revelan
algunos contrastes en la razón entre los sexos. Así el mayor déficit masculino se
presenta en el Distrito Nacional, en donde por cada cien mujeres hay apenas 91
hombres. En contraste, el mayor déficit femenino se presenta en la provincia San
José de Ocoa, donde por cada cien mujeres existen 118 hombres.

3.2. Relación de matrimonios entre menores de edad

República Dominicana posee el porcentaje más alto de matrimonios o uniones


estables de menores de 15 años en América Latina y El Caribe, y el segundo más
alto para menores de 18 años. El informe Estado Mundial de la Infancia 2016: Una
oportunidad para cada niño indicó que más de 305,000 niñas, es decir un 11.7 %,
están casadas o unidas; y más de 790,000, un 37.1 %, se unieron o casaron antes
de los 18 años de edad.

Dichos datos que superan la cifra de todos los países en América Latina y El Caribe,
son similares al promedio del África Subsahariana. Unicef informó que tras analizar

62
las cifras de ENHOGAR MICS de la Oficina Nacional de Estadística (ONE),
descubrieron que el 18.4 % de las mujeres del quintil más rico se habían casado ante
de los 18 años, mientras que el 58.6 % del más pobre estaban casadas o unidas al
cumplir esa edad. (Fondo de las Naciones Unidas para la infancia, 2016)

Indicó que el matrimonio y las uniones tempranas afectan el cumplimiento de los


derechos de las niñas, condicionan su desarrollo, las exponen a la violencia, el abuso
y el embarazo adolescente. Además reproduce el círculo intergeneracional de la
pobreza. El matrimonio adolescente está fuertemente ligado a la pobreza en
República Dominicana, según expone que también destacó que el matrimonio y las
uniones tempranas en ocasiones son consecuencias de un embarazo. Asimismo,
estableció que una de cada 5 adolescentes entre 15 y 19 años ha estado o está
embarazada, es decir 199,580 menores. En el quintil más pobre el embarazo
adolescente es 10 veces más que en el quintil más rico.

Otra causa de los embarazos en menores de 15 años de edad, señalado por Unicef
se encuentra el abuso sexual o incesto. Agregó que las adolescentes embarazadas
tienen mayor probabilidad de morir a causa del embarazo, el parto o el postparto. Los
bebes de las adolescentes tienen más riesgo de morir y presentar bajo peso al nacer
y prematuras. La tasa de mortalidad neonatal en el país es 25 por cada 1,000
nacidos vivos, y es la tercera más alta de América Latina, solo Haití y la Guyana la
superan. (Fondo de las Naciones Unidas para la infancia, 2016)

Cada día mueren 13 bebés menores de 28 días, aunque el 80 por ciento de estas
muertes son prevenibles. La probabilidad de un niño pobre morir antes de los 5 años,
es decir 39 por mil nacidos vivos, es casi el doble que la de un niño rico, 25 por mil
nacidos vivos. A pesar de ello, Unicef saludó los esfuerzos que el Ministerio de Salud
Pública y el Servicio Nacional de Salud están realizando con la implementación de la
Iniciativa Hospital Amigo del Bebé en la red de servicios de salud. Dicha iniciativa
recibe el apoyo de Unicef y tiene como objetivo mejorar la calidad de atención para
reducir las muertes evitables de bebés y de embarazadas.

63
64
CAPITULO IV
ANÁLISIS DE SENTENCIA SOBRE ASUNTOS MATRIMONIALES EN
LA JURISDICCIÓN DOMINICANO

4.1. Análisis de la sentencia TC/0117/16 sobre partición de bienes de


la comunidad matrimonial

Se recurre la sentencia número 1089 dictada por la Sala Civil y Comercial de la


Suprema Corte de Justicia el once (11) de septiembre de dos mil trece (2013), la cual
rechazó el recurso de casación interpuesto por el recurrente contra la Sentencia Civil
número 87/2008, pronunciada por la Cámara Civil y Comercial de la Corte de
Apelación del Departamento Judicial de La Vega el veinticinco (25) de julio de dos mil
ocho (2008). (Tribunal Constitución, 2016)

En la síntesis del conflicto de la sentencia analizada es que se contrae al hecho, de


que el señor Juan Bautista Espinal Vargas estuvo casado con la señora María
Infante Peralta, durante quince (15) años. Su matrimonio fue disuelto en el año 2000,
y como consecuencia del divorcio la señora María Infante demandó a su ex esposo
en partición de bienes, ante la Cámara Civil y Comercial de la Segunda
Circunscripción del Juzgado de Primera Instancia del Distrito Judicial de La Vega,
quien mediante Sentencia núm. 569, del cinco (5) de agosto de dos mil cuatro
(2004), ordenó la persecución y diligencias de la parte demandante para que proceda
a la partición, cuenta y liquidación de los bienes comunes fomentados; fueron
designados un notario y un perito para determinar los bienes muebles e inmuebles
pertenecientes a la comunidad y para que determinara el valor de los mismos.

Luego fue sometida la homologación de informe pericial, en relación con la demanda


en partición de bienes, intentada por la señora María Infante Peralta, y el señor Juan
Bautista Espinal Vargas solicitó que sea incluido en el informe pericial un acto de
venta del veintiséis (26) de noviembre de dos mil tres (2003), en el que constaba la

65
venta, por la suma de trescientos mil dólares US$300,000.00, de una propiedad que,
según alegatos del recurrente, pertenecía a la comunidad matrimonial la cual estaba
ubicada en la ciudad de Massachusetts, Estados Unidos. La Cámara Civil y
Comercial de la Segunda Circunscripción del Juzgado de Primera Instancia del
Distrito Judicial de La Vega, mediante la Sentencia núm. 985, del quince (15) de
agosto de dos mil siete (2007), decidió excluir de la demanda el referido documento
solicitado; homologó el informe pericial y ordenó la venta en pública subasta de los
bienes. (Tribunal Constitución, 2016)

Ante tales circunstancias, el señor Juan Bautista Espinal Vargas interpuso un recurso
de apelación, el cual fue resuelto mediante la Sentencia núm. 87/2008, dictada por
Cámara Civil y Comercial de la Corte de Apelación del Departamento Judicial de La
Vega, la cual rechazó el recurso y confirmó la sentencia apelada. No conforme con
dicha decisión, el recurrente interpuso un recurso de casación, el cual fue rechazado
mediante la Sentencia núm. 1098, del once (11) de septiembre de dos mil trece
(2013), la cual es objeto del presente recurso de revisión.

De la sentencia emitida por el tribunal A Quo, La casación es un recurso


extraordinario mediante el cual la parte perjudicada en su derecho persigue la
anulación de una sentencia o fallo dictado por un tribunal del orden judicial o de otra
instancia judicial prevista por la ley, por ante la Suprema Corte de Justicia, en sus
funciones constitucionales de Corte de Casación, a los fines de determinar, sin tocar
el fondo del litigio, si la ley fue bien o mal aplicada. Una vez pronunciada esa
anulación, la Suprema Corte de Justicia, único tribunal con competencia para
conocer de la casación, envía el asunto por ante otro tribunal de la misma categoría
o jerarquía de aquel de donde procede la sentencia anulada, para que conozca y
falle de nuevo el asunto, salvo excepciones previstas en leyes especiales. (Tribunal
Constitución, 2016)

El recurrente en revisión constitucional pretende que se declare nula dicha sentencia,


por ser contraria a la Constitución. Para justificar dichas pretensiones, alega, El
66
derecho del exponente en la comunidad matrimonial formada con su esposa, no fue
debidamente tutelado, como manda el artículo 69 de la Carta Sustantiva del Estado
Dominicano, el cual dispones.

La opinión de Guillermo Cabanella entra en perfecta sintonía con las pretensiones


del exponente, lo que paso fue que la corte no la entendió, tampoco la sala civil de la
suprema corte de justicia. Lo que dice el tratadista es que el tribunal competente para
dirimir un conflicto, es el del lugar donde se produjo el acto, lo que pasa es que había
que hacer hinca pie en el acto que servía de guía en la solución del intríngulis o
incógnita, se trata en consecuencia de un acto solemne, el de matrimonio, no es un
acto como los otros, es único en su género y así había que verlo para evitar tan
grave violación como la cometida.

Los dos principios enarbolados por el brillante tratadista Cabanella que son a) Lex
Fori y b) de la Locus Regit Actum, con quien entran en sintonía perfecta,
precisamente es con las pretensiones del exponente, de ahí que no tenemos la
menor duda en afirmar, que se equivocó el tribunal de primer grado, se equivocó la
Corte de Apelación del Departamento Judicial de La Vega, y la actual Sala Civil de la
Suprema, no se equivocó, quien cometió el error infantil y pueril, fueron los otros
integrantes de dicha cámara, ya que dejaron hecho ese adefesio jurídico los jueces
de esta sala, en especial su presidente, se vio en la necesidad de expedir en fecha 4
de Setiembre(Sic) del año 2013 un auto llamándose el mismo y a los demás jueces
de la Sala Civil para deliberar en cuanto al fallo, que ya habían hechos los otros
jueces en audiencia del 25 de Agosto del año 2010. (Tribunal Constitución, 2016)

De modo que es un absurdo decir: los tribunales dominicanos solo pueden dirimir
conflictos sobre bienes de personas radicados dentro del territorio de la republica
dominicana”, como queriendo decir que el actual recurrente no puede incluir en la
partición que se produce después de la disolución de su matrimonio con la recurrida,
un bien patrimonial aludido, fue vendido en los y el dinero invertido en la ciudad de
Jarabacoa, de tal suerte que lo que importa aquí es el producto de la venta, ya que la
67
señora demandó la partición de manera sutil, después que vendió el inmueble de la
comunidad formado en los estados unidos, no debió, jamás la sala civil de la
suprema confirmar esa impertinencia.

Lo accesorio sigue lo principal, lo principal en el caso de la especie, obviamente que


es el contrato de matrimonio y lo accesorio el bien patrimonial adquirido en la ciudad
de Massachusetts, Estados unidos, como ya dijimos, lo consagra el artículo 822 del
indicado código, necesario es repetirlo: la acción de partición y las cuestiones
litigiosas que se susciten en el curso de las operaciones, se someterán al tribunal del
lugar en que este abierta la sucesión, a no ser que se pretenda que la partición se
abra en el lugar donde residen los contrayentes, donde se celebró el matrimonio y
donde radican algunos bienes patrimoniales y continúe fuera del país donde se formó
otro bien patrimonial, tal pretensión es por aplicación del mismo principio citado en la
sentencia No.1089 recurrida actualmente, absurda, pues como el lugar rige el acto
(Locus Regit Actum), el acto es el matrimonio y el lugar es Republica Dominicana,
¿Qué habría pasado si los bienes hubiesen estado en diez países diferentes?

Entonces si el lugar rige el acto, si el matrimonio fue celebrado entre dominicanos y


en territorio dominicano ¿De dónde le salió a la sala civil y comercial de la supremas,
mantener fuera de la comunidad matrimonial, un bien patrimonial que se vendió por
300 mil dólares?, la forma como se ha aplicado el derecho con justeza, porque crea
una desigualdad inconstitucional, totalmente prohibida por el numeral 4 del artículo
39 de la vigente constitución política del estado dominicano y por los tratados
internacionales.

El recurso de revisión fue notificado a la parte recurrida, señora María Infante


Peralta, mediante Acto núm. 74/2014, del quince (15) de marzo de dos mil catorce
(2014), instrumentado por el ministerial Erminio Tolari G., alguacil de estrados del
Juzgado de Paz del municipio Jarabacoa. No obstante, la recurrida no hizo uso de su
derecho a responder, mediante un escrito, el recurso de revisión jurisdiccional
interpuesto en su contra.
68
El recurso de revisión fue notificado a la parte recurrida, señora María Infante
Peralta, mediante Acto número 74/2014, del quince (15) de marzo de dos mil catorce
2014), instrumentado por el ministerial Erminio Tolari G., alguacil de estrados del
Juzgado de Paz del municipio Jarabacoa. No obstante, la recurrida no hizo uso de su
derecho a responder, mediante un escrito, el recurso de revisión jurisdiccional
interpuesto en su contra.

Sobre el fondo del recurso de revisión constitucional de decisión jurisdiccional a juicio


del recurrente, la vulneración del derecho de igualdad radica en la no inclusión del
dinero producto de la referida venta, lo que le priva del derecho al 50% de dicho
monto, como consecuencia de la corte a-qua excluir el acto de venta del inmueble
del peritaje de la partición de bienes; al aplicar el principio locus regit actum, que
significa que los actos jurídicos están regidos por la ley del lugar en que son
celebrados, con independencia de la nacionalidad de las partes. (Tribunal
Constitución, 2016)

En este sentido, el recurrente considera que la Sala Civil y Comercial de la Suprema


Corte de Justicia debió, al fallar el recurso de casación, revertir este criterio y
proteger su derecho a la igualdad respecto al bien que formaba parte de la
comunidad de bienes, y que su decisión de rechazar el recurso y confirmar la
decisión de la corte le crea una desigualdad que genera un privilegio irritante a favor
de la esposa, contrario a la ley y la Constitución.

Este tribunal considera que la vulneración del derecho a la igualdad se hubiera


configurado si una vez demostrada la existencia de este dinero, se le hubiera
despojado del 50% que le corresponde, tal y como le fue reconocido en relación con
los demás bienes de la comunidad. La valoración de hecho de esta circunstancia, tal
y como lo expresa la Sala Civil y Comercial de la Suprema Corte de Justicia en la
decisión recurrida, correspondía a los jueces del fondo. (Tribunal Constitución, 2016)

69
La Sala Civil y Comercial de la Suprema Corte de Justicia, cuando rechazó el recurso
de casación interpuesto por el hoy recurrente contra la Sentencia núm. 87/2008,
dictada por la Cámara Civil y Comercial de la Corte de Apelación del Departamento
Judicial de La Vega el veinticinco (25) de julio de dos mil ocho (2008), consideró que
la corte a-qua falló sin desnaturalizar los hechos, al apreciar el valor de los elementos
de prueba que se le someten en ejercicio de su poder soberano, cuya censura
escapa del control de la casación, siempre y cuando no se haya incurrido en
desnaturalización de los hechos. (Tribunal Constitución, 2016)

El tribunal constitucional decidió en cuanto al fondo, el recurso de revisión


constitucional de decisión jurisdiccional presentado por el señor Juan Bautista
Espinal Vargas contra la Sentencia núm. 1089, dictada por la Sala Civil y Comercial
de la Suprema Corte de Justicia el once (11) de septiembre de dos mil trece (2013) y,
en consecuencia, confirmar la sentencia recurrida.

Esto atendiendo a que cuando la Corte a-qua fallo en el sentido de los tribunales
nacionales no pueden dirimir conflictos como el de la especie que contienen un
aspecto que trata sobre la partición de un inmueble radicado en el extranjero; bajo el
entendido de que la normativa nacional no es la aplicable para la partición de dicho
bien, lo hace fundamentándose en el acto de venta de fecha 26 de noviembre de
2003; que tales comprobaciones constituyen cuestiones de hecho cuya apreciación
pertenece al dominio exclusivo de los jueces del fondo cuya censura escapa al
control de la casación siempre y cuando, como en el caso, en el ejercicio de dicha
facultad, no se haya incurrido en desnaturalización de los mismos; que además la
sentencia impugnada revela que ella contiene una relación de los hechos de la
causa, a los que ha dado su verdadero sentido y alcance, así como una motivación
suficiente y pertinente que justifican su dispositivo, lo que ha permitido a la Suprema
Corte de Justicia, como Corte de Casación, verificar que en la especie se ha hecho
una correcta aplicación de ley; que por tanto la sentencia impugnada no adolece de
los vicios denunciados por el recurrente, por lo que sus alegatos carecen de
fundamentos y deben ser rechazados.
70
La naturaleza del recurso de casación no admite que la Suprema Corte de Justicia se
involucre en apreciación de los hechos propios del proceso sobre cuya legalidad y
constitucionalidad reclaman su intervención. Si el órgano jurisdiccional superior del
poder judicial se involucrara en la apreciación y valoración de las pruebas
presentadas por las partes durante el juicio de fondo, incurriría en una violación de
las normas en las cuales fundamenta sus decisiones y desnaturalizaría la función de
control que está llamado a ejercer sobre las decisiones de los tribunales inferiores
respeto a la correcta aplicación de las disposiciones legales y constitucionales que le
son sometidas.

4.2. Análisis de la sentencia TC/0007/17 sobre continuidad de los


derechos en el matrimonio

Esta sentencia es recurrida en amparo en contra de la sentencia número 0442-2015


emitida por el Tribunal Superior Administrativo y el Ministerio de Defensa en nombre
de su titular Teniente General Máximo William Muñoz Delgado, la misma fue incoada
por David Acosta Espinosa y Ana Francisca Espinosa Tejar, esposa de quien en
vida fue el Segundo Teniente retirado Emilio Acosta Santillan del ejército nacional
dominicano motivada por suspensión arbitraria de pensión en contra de esta última,
justificada según el artículo 250 de la derogada ley 873 que era la Ley Orgánica de
las Fuerzas Armadas.

Basándose en la legalidad de las formas, cuando se el tiempo, la forma y el lugar de


los actos procesales de la Ley por lo tanto tienen que se ser rigurosamente
observados, que cuando no son ejecutados oportunamente, dichos actos no tienen
eficacia jurídica. Basándose en la sentencia número 16 del 24 de agosto del 1990
que explica que la formalidad exigida por la ley para interponer una acción es
sustanciar y no se pueden sustituir y la inobservancia de las formalidades son pena
de nulidad de la acción.

71
En numeral IV de los fundamentos de la sentencia recurrida explica que para la
solicitud de inadmisión el tribunal de la primera sala del Tribunal Superior
Administrativo decidió sin conocer el fondo del asunto, basado en el artículo 70 de la
ley 137-11, basándose en la extemporaneidad de la solicitud de la acción.

El Tribunal Constitucional se declaró competente para el conocimiento de la revisión


en materia de amparo justificándose el numeral 4 del artículo 185 de la constitución
política dominicana y el artículo 94 de la ley número 137-11, orgánica del mismo
tribunal.

En la admisibilidad de la acción de revisión el Tribunal Constitucional explica está


sujeta a la especial trascendencia o relevancia constitucional de la cuestión
planteada, que se apreciará atendiendo a su importancia para la interpretación,
aplicación y general eficacia de la Constitución, o para la determinación del
contenido, alcance y la concreta protección de los derechos fundamentales.

Sobre el fondo el Tribunal Constitucional explica; este Tribunal Constitucional no


comparte la decisión tomada por el juez de amparo, ya que considera que la Primera
Sala del Tribunal Superior Administrativo obró incorrectamente al declarar
inadmisible la acción de amparo por extemporaneidad, ya que se está en presencia
de un caso en el cual no opera la prescripción; esto así, porque se trata de una
obligación en la cual la institución estatal no debía esperar a que el interesado la
reclamara para cumplirla.

Por lo que el Tribunal Constitucional admitió, en cuanto a la forma, de la acción de


revisión constitucional de sentencia de amparo incoado por los señores Ana
Francisca Espinosa Tejar y David Acosta Espinosa contra la Sentencia núm. 0442-
2015, dictada por la Primera Sala del Tribunal Superior Administrativo el veintiséis
(26) de noviembre de dos mil quince (2015).

72
Acogió en cuanto al fondo, de la acción de revisión descrito en el ordinal anterior y,
en consecuencia, revocar la Sentencia núm. 0442-2015, dictada por la Primera Sala
del Tribunal Superior Administrativo el veintiséis (26) de noviembre de dos mil quince
(2015).

Por último, acoger la acción de amparo interpuesta por la señora Ana Francisca
Espinosa Tejar el veintinueve (29) de mayo de dos mil quince (2015), contra el
Ministerio de Defensa y su titular, Máximo William Muñoz Delgado y, en
consecuencia, ordenar al Ministerio de Defensa que restablezca la pensión de
conviviente superviviente a la indicada señora Espinosa Tejar y, en consecuencia,
que le entreguen todos los valores dejados de pagar que le corresponden por
concepto de pensión desde el momento de la suspensión en el año dos mil (2000)
hasta la fecha, tomando como base la suma que ostentaba al momento de la
suspensión de la misma en el indicado año dos mil (2000).

El Tribunal Constitucional declaró admisible de la acción atendiendo al numeral 4 del


artículo 185 de la constitución y el artículo 94 de la ley número 137-11de los
procedimientos constitucionales. El tribunal basa su decisión a que la ley 837
orgánica del Ejército Nacional, derogada en la actualidad pero vigente en el
momento del hecho, en su artículo 250 establece que los hijos y las viudas de los
militares y asimilados en retiro tienen el mismo derecho que los retirados con
pensión que fallezcan a recibir la pensión. En el artículo 167 de la ley 139-13 del
ministerio de defensa plantea que la compensación y el restiro no prescribe salvo
caso planteados por la ley.

Anterior a este recurso se había presentado la sentencia TC/0012/12 objeto de


recurso de revisión fue dictada por la Primera Sala del Tribunal Superior
Administrativo con el número 156- 2011, en fecha veintisiete (27) de diciembre del
año dos mil once (2011). Dicho fallo declaró inadmisible la acción de amparo
incoada por la señora Lauriana Villar contra la Junta de Retiro de las Fuerzas
Armadas, en fecha veinte (20) de enero de dos mil once (2011).
73
La referida sentencia le fue notificada a la señora Lauriana Villar en fecha 10 de
enero del 2012. Esta última interpuso el presente recurso de revisión contra la
indicada sentencia de amparo mediante instancia depositada en el Tribunal Superior
Administrativo en fecha dieciséis (16) de enero de dos mil doce (2012). El
expediente relativo a dicho recurso de revisión fue comunicado a la Junta de Retiro
de las Fuerzas Armadas y al Procurador General Administrativo mediante Auto
No.131/2012, de fecha dieciocho (18) de enero de dos mil doce (2012), dictado por
la magistrada Sara Henríquez Marín, Jueza Presidente de la Primera Sala del
Tribunal Superior Administrativo.

La recurrente, señora Lauriana Villar, mantuvo una unión marital de hecho durante
más de 40 años con el señor José Agustín Jiminián Ramos, hasta la muerte de este
último, el 26 de febrero de 2008. Con motivo de dicho fallecimiento, y al estimar que
la Junta de Retiro de las Fuerzas Armadas vulneró sus derechos fundamentales en
su condición de conviviente sobreviviente, interpuso una acción de amparo contra
esta última, con la finalidad de garantizar el respeto a su dignidad humana y de
obtener la protección de los derechos fundamentales a la igualdad y a la familia,
conforme a los artículos 38, 39.3, y 55.5 de la Constitución de la República; 8, de la
Declaración Universal de los Derechos Humanos, y 17.1 y 24 de la Declaración
Americana de los Derechos Humanos.

No conforme con la indicada sentencia No. 156-2011, la impetrante interpuso formal


recurso de revisión, en fecha 16 de enero de 2012, fundada en los hechos que se
resumen más adelante.

Conforme a los documentos depositados en el expediente y a los hechos invocados


por las partes, en el caso que nos ocupa se alega que la Junta de Retiro de las
Fuerzas Armadas le ha negado a la recurrente, señora Lauriana Villar, el derecho a
subrogarse en las prerrogativas relativas a la pensión de su compañero de vida por

74
más de 40 años, José Agustín Jiminián Ramos (titular de la cédula de identidad y
electoral No. 001- 1012449-2).

Este último falleció el 26 de febrero de 2008, siendo beneficiario de una pensión de


diez mil pesos (RD$10,000.00) mensuales, en su condición de militar, cuyo último
rango fue de segundo teniente. La recurrida, Junta de Retiro de las Fuerzas
Armadas, sostiene que el hecho se originó en marzo de 2008 y la acción de amparo
se intentó el 20 de enero de 2011, por lo que considera el recurso de revisión
inadmisible, por haber transcurrido más de dos años.

En cuanto al fondo del recurso, el Tribunal Constitucional expuso, en la especie, la


recurrente toma conocimiento pleno de que sus derechos son desconocidos o
vulnerados cuando, en fecha 21 de diciembre de 2010, la recurrida, Junta de Retiro
de las Fuerzas Armadas, le notifica mediante acto de alguacil No.1232-10
(instrumentado por el ministerial Roberto Eufrasia Ureña) que, para que estos
derechos le fueran reconocidos y se le transfiriera la referida pensión, debía
depositar, entre otros documentos, el acta de matrimonio intervenido entre ella y el
fenecido ex-militar José Agustín Jiminián Ramos.

La Junta de Retiro de las Fuerzas Armadas fundamentó su negativa en que el


artículo 252 de la Ley Núm. 873, Orgánica de las Fuerzas Armadas, establece una
limitante respecto de una persona que no esté unida bajo el vínculo matrimonial
(como resulta en el caso de la recurrente), en los siguientes términos: La viuda sólo
tendrá derecho a pensión cuando el matrimonio haya durado un año por lo menos,
salvo el caso de que tenga hijos del causante o que el fallecimiento hubiere sido
causado por un accidente o por las causales del artículo 247.

lenamente configurada, toda vez que en el expediente de que se trata están


incluidas dos (2) actas de nacimiento expedidas por las Oficialías del Estado Civil de
la Segunda y Tercera Circunscripción del Distrito Nacional, inscritas en los Libros
Nos. 00646 y 987, folios Nos. 0149 y 106, Actas Nos. 02149 y 506, de fechas 29 de
75
octubre de 2008 y 28 de julio de 2001, respectivamente, probatorias de que de la
unión de Lauriana Villar y José Agustín Jiminián, nacieron Carlos y Maritza Jiminián
Villar.

En vista de las circunstancias de hecho y de derecho en que se basa el recurso de


revisión que nos ocupa, el Tribunal Constitucional no solo ha de limitarse a examinar
la admisibilidad o inadmisibilidad del recurso interpuesto por la señora Lauriana Villar
contra la sentencia emitida por la Primera Sala del Tribunal Superior Administrativo
de fecha veintisiete (27) de diciembre del año dos mil once (2011); sino que también
debe establecer su trascendencia o relevancia, atendiendo a la importancia del caso
para la interpretación, aplicación y eficacia del texto constitucional, y determinar su
contenido y alcance, y si en el presente caso quedan desprotegidos derechos
fundamentales.

El Artículo 6 de la Constitución expresa textualmente: Todas las personas y órganos


que ejercen potestades públicas están sujetos a la Constitución, norma suprema y
fundamento del ordenamiento jurídico del Estado. Son nulos de pleno derecho toda
ley, decreto, resolución, reglamento o acto contrarios a esta Constitución. El artículo
38 de la Constitución proclama el respeto a la dignidad de la persona y establece su
carácter sagrado, innato e inviolable.

La Suprema Corte de Justicia de nuestro país, en una importante sentencia dictada


el 17 de octubre de 2001 (que este Tribunal Constitucional estima conforme a la
Constitución) dictaminó que la unión consensual: “(…) se considera prevista,
considerada o aceptada por el legislador en el ordenamiento legal como una
modalidad familiar, criterio que debe ser admitido, en los casos como el de la
especie, siempre y cuando esa unión se encuentre revestida de las características
siguientes: a) una convivencia “more uxorio”, o lo que es lo mismo, una identificación
con el modelo de convivencia desarrollado en los hogares de las familias fundadas
en el matrimonio, lo que se traduce en una relación pública y notoria, quedando
excluidas las basadas en relaciones ocultas y secretas; b) ausencia de formalidad
76
legal de la unión; c) una comunidad de vida familiar estable y duradera, con
profundos lazos de afectividad; d) que la unión presente condiciones de singularidad,
es decir, que no existan de parte de los dos iguales o nexos formales de matrimonio
con otros terceros en forma simultánea, o sea, debe haber una relación
monogámica, quedando excluidas de este concepto las uniones de hecho que en
sus orígenes fueron pérfidas, aún cuando haya cesado esa condición por la
disolución posterior de vínculo matrimonial de uno de los integrantes de la unión
consensual con una tercera persona; e) que esa unión familiar de hecho esté
integrada por dos personas de distintos sexos que vivan como marido y mujer sin
estar casados entre sí.

Dicha sentencia estableció, además, lo que sigue: Considerando, que las uniones no
matrimoniales, uniones consensuales, libres o de hecho, constituyen en nuestro
tiempo y realidad nacional una manifestación innegable de las posibilidades de
constitución de un grupo familiar, y las mismas reúnen un potencial con
trascendencia jurídica; que si bien el matrimonio y la convivencia extramatrimonial
no son a todos los efectos realidades equivalentes, de ello no se puede deducir que
siempre procede la exclusión de amparo legal de quienes convivan establemente en
unión de hecho, porque esto sería incompatible con la igualdad jurídica y la
prohibición de todo discrimen que la Constitución de la República garantiza.

Para reiterar la admisión de la unión marital de hecho en nuestra normativa jurídica,


la indicada sentencia señaló igualmente otros estatutos y disposiciones adjetivas
que protegen, regulan y respaldan a la unión consensual more uxorio en nuestro
ordenamiento jurídico, en los siguientes términos: “Considerando, que por otra parte,
leyes adjetivas, interpretando la realidad social dominicana, se han ocupado en
diversas ocasiones de regular y proteger, no sólo a la persona de los convivientes y
sus bienes, sino también a la descendencia que esta relación pueda generar; que en
tal sentido, la Ley No.14-94, del 22 de abril de 1994, Código para la Protección de
Niños, Niñas y Adolescentes y su Reglamento, reconoce a la unión consensual
como una modalidad familiar real, al igual que la familia cimentada en el matrimonio
77
y, al mismo tiempo, protege su descendencia; que la Ley número 24-97, del 27 de
enero de 1997, también reconoce la existencia de las uniones de hecho al tipificar
como infracciones graves los actos de violencia doméstica, de agresión sexual y de
abandono en que pueda incurrir un conviviente o ex-conviviente en perjuicio del otro;
que además, el artículo 54 del Código de Trabajo por su lado, dispone: El empleador
está obligado a conceder al trabajador cinco días de licencia con disfrute de salario,
con motivo de la celebración del matrimonio de éste; tres días en los casos de
fallecimiento de cualquiera de sus abuelos padres e hijos, o de compañera, y dos
días para el caso de alumbramiento de la esposa o de la compañera debidamente
registrada en la empresa.

A las disposiciones legales anteriormente indicadas deben agregarse las que


benefician al (a) compañero (a) de vida de una pensión de sobreviviente, al tenor del
artículo 51 de la ley 87-01, sobre Sistema Dominicano de Seguridad Social; al igual
que los artículos 58 y 118 de la Ley 136-03, Código para la Protección de los
Derechos de los Niños, Niñas y Adolescentes, tal como ha sido consagrado incluso
por la Cámara Civil y Comercial de la Suprema Corte de Justicia en su reciente
sentencia del 15 octubre 2008 (que este Tribunal estima conforme a la Constitución):
“Considerando, que “(…) el ordenamiento jurídico dominicano ha mostrado
preocupación por amparar, de alguna forma, aquellas relaciones que se originan
fuera de un matrimonio, dado el carácter común en los cimientos de la sociedad
dominicana de este tipo de uniones, tal como lo demuestran las disposiciones que
benefician al (a) compañero (a) de vida de una pensión de sobreviviente, al tenor del
artículo 51 de la ley 87-01, sobre Sistema Dominicano de Seguridad Social; los
artículos 58 y 118 de la ley 136-03, que aceptan dentro de la denominación de
familia aquella que provenga de una unión de tipo consensual y que permiten la
adopción de niños o niñas por parte de pareja con unión de hecho, por solo
mencionar algunas disposiciones; que esa preocupación por otorgarle a las uniones
consensuales derechos propios de una unión familiar, no constituye un afán nuevo
del pensamiento jurídico que rige nuestra legislación, puesto que la doctrina jurídica
civil tiene años admitiendo, el propio hecho de la existencia de la relación.
78
En la especie, la Junta de Retiro de las Fuerzas Armadas fundamentó su negativa a
entregar la pensión de referencia en que el artículo 252 de la Ley Núm. 873,
Orgánica de las Fuerzas Armadas, establece una restricción respecto a las personas
no casadas, como resulta en el caso de la recurrente. Según el citado artículo 252,
el otorgamiento de la pensión de superviviente está condicionado a la existencia de
un matrimonio, requisito que contradice el artículo 55.5 de la Constitución, cuyo texto
dispone lo siguiente: La unión singular y estable entre un hombre y una mujer, libres
de impedimento matrimonial, que forman un hogar de hecho, genera derechos y
deberes en sus relaciones personales y patrimoniales, de conformidad con la ley.

Por otra parte, según el indicado artículo 252, sólo la viuda tendría derecho a la
pensión de superviviente, mas no así el viudo, lo cual vulnera el principio de igualdad
entre el hombre y la mujer previsto en el artículo 39.4 de la Constitución, que
expresa: La mujer y el hombre son iguales ante la ley. Se prohíbe cualquier acto que
tenga como objetivo o resultado menoscabar o anular el reconocimiento, goce o
ejercicio en condiciones de igualdad de los derechos fundamentales de mujeres y
hombres. Se promoverán las medidas necesarias para garantizar la erradicación de
las desigualdades y la discriminación de género.

En este mismo sentido, el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos, en su


artículo 26, indica: la ley prohibirá toda discriminación y garantizará a todas las
personas protección igual y efectiva contra cualquier discriminación por motivos de
nacimiento o cualquier otra condición social.

De acuerdo con los principios expuestos, para el Tribunal Constitucional, la


interpretación conforme a la Constitución del artículo 252 de la Ley No. 873,
Orgánica de las Fuerzas Armadas Dominicanas, debe ser la siguiente: Tendrá
derecho a pensión el o la sobreviviente de un matrimonio o de una unión marital de
hecho con por lo menos un año de duración, salvo el caso de que hayan

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engendrado hijos o que el fallecimiento hubiere sido causado por un accidente o por
las causales del artículo 247.

En consecuencia, resulta evidente que el texto objeto de análisis transgrede la


Constitución, particularmente los principios relativos a la igualdad, la dignidad
humana y la familia. No obstante, dicho texto sería conforme con la Constitución, a
condición de que se interprete en la forma que más adelante indicará este Tribunal
Constitucional, ejerciendo así la facultad de garantizar la permanencia de una
determinada norma en nuestro ordenamiento jurídico.

Por lo que el tribunal constitucional decidió ADMITIR, en cuanto a la forma y el


fondo, el recurso de revisión incoado por la señora Lauriana Villar el 16 de enero de
2012, contra la sentencia de amparo No. 156-2011, dictada por la Primera Sala del
Tribunal Superior Administrativo en fecha 27 de diciembre de 2011.

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CONCLUSIÓN

Para el año 2017 la Oficina Nacional de Estadística (ONE) registra un total de 55


divorcios para este año, con una relación de 652 matrimonio registrado para este
mismo periodo en esta jurisdicción, esto con una población de 212,500 donde se
cuenta con 105,618 hombres y 106,882 mujeres. En la actualidad la República
Dominicana sufre una crisis en las relaciones matrimoniales, en la actualidad se
realizan más de 20,000 divorcio en el año llegando a convertirse en una verdadera
epidemia y teniendo una espiral en ascenso aumentando de manera desproporcionar
cada año, teniendo gran incidencia en la causa del divorcio los elementos
psicológicos de los caracteres de los esposos y la condiciones económicas.

En efecto, la etimología de matrimonio es matris munium, que en su esencia en el


idioma español significa el cuidado de la madre, mujer en pro de crear la familia, por
parte del padre, El matrimonio es considerado la base de la sociedad porque a partir
de éste se ve reflejada la misma sociedad; hoy en día el matrimonio ha sufrido una
serie de reformas en algunos códigos.

El matrimonio según todos los regímenes legales establecidos presuponen una


obligación entre las partes, conyugues, los cuales quedan bajo un régimen legal y
social preestablecido por las normas que plantea la sociedad, estas regulaciones
plantean los elementos sobre la sexualidad, moral del hombre como de la mujer
sobre la fidelidad y el comportamiento económico.

La concepción ortodoxa del matrimonio explica que el mismo se realiza entre el


hombre y la mujer, aunque en la actualidad los países desarrollados de occidente
esta concepción está cambiando permitiendo el matrimonio homosexual aunque esto
no está acorde con la etimología de la institución jurídica. El derecho de familia es la
figura jurídica que regula la relación de matrimonio, lo que en República Dominicana
está regido por el artículo 55 de la Constitución Dominicana, el mismo plantea que la

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familia es el fundamento de la sociedad la cual se forma por un hombre y una mujer
de manera libre y voluntaria, esta institución será protegida por el Estado y las leyes
nacionales, estas misma establecerán los derechos y deberes de los conyugues.

Según las leyes dominicanas los efectos jurídicos del matrimonio no solo traen
obligaciones entre los conyugues, sino que estos tienen obligaciones con sus hijos y
los padres políticos, se plantean las leyes dominicanas, que los yernos y nueras que
estén en determinadas circunstancias a ayudar a sus padres políticos, estos
regulados por las posibilidades económicas del que reclama y de quien suministra.
Además, el Código Civil Dominicana acentuadamente que no se puede poner en
juego la vivienda de la familia ni de los bienes muebles que la guarnecen.

Las leyes de la República Dominicana permiten básicamente dos tipos de


matrimonios el matrimonio civil y el matrimonio religioso, el matrimonio religioso es
regulado por la ley número 198-11 que regula los matrimonios religiosos y sus
efectos en la República Dominicana, la misma reconoce los efectos civiles del
matrimonio siempre cuando sean auspiciados por pastores, sacerdotes o ministros
de iglesias reconocida por el Estado Dominicano. Las instituciones religiosas que se
dediquen a la celebración de matrimonio tienen la responsabilidad de los registros de
los mismos bajos las ordenanzas del Dirección Nacional de Registro del Estado Civil,
en caso de las religiones deben tener en cuenta que el matrimonio se celebra bajo
los requerimientos de las leyes y las costumbres en la República Dominicana,
atendiendo a los planteado en el artículo 45 de la constitución dominicana.

El código civil dominicano reconoce el matrimonio celebrado en el extranjero,


siempre y cuando se hayan realizado bajo lo establecido en el artículo 63 del el título
de Actas del estado civil. La unión matrimonial presupone una comunidad de bienes
lo cual se plantea bajo la figura jurídica de régimen matrimonial, el mismo explica la
relación de los esposos en materia de los bienes e inmuebles que adquieran durante
el matrimonio y los derechos de cada uno hacia estos, también existiendo el régimen
matrimonial sin comunidad donde cada uno conserva sus bienes de forma individual.
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RECOMENDACIONES

El Ministerio de Educación debe de fomentar el conocimiento esencial del matrimonio


como elemento de origen de familia, que en su esencia en la antigüedad era la
protección del padre a la mujer, aunque en la actualidad y bajo las leyes dominicanas
la figura jurídica del matrimonio incluye deberes y derechos iguales para cada una de
las partes, tanto el hombre como la mujer, lo que se debe explicar en los programas
de escolares en las aulas del país, a través de las explicaciones por medio de la
psicología, sociología, derecho y espiritualismo.

El Estado dominicano debe de fomentar el matrimonio legal estructurado sobre la


unión libre, dada la vinculación solo afectiva y de convivencia entre los componentes
de las parejas de hecho, que en ocasiones conlleva una dependencia económica
análoga a la de un matrimonio, aunque el derecho dominicano regula la unión libre,
el derecho no puede controlar la cantidad de unión libre que puede realizar cada
pareja, además de que se puede cometer bigamia y un descontrol total de la forma
que propone la ley del matrimonio.

El Estado dominicano debe por medio del registro civil controlar los procesos
sociales más allá de la unión de pareja, los registros civiles deben de contemplar un
registro de familia donde en las uniones estén registrados los descendientes y
ascendientes de la familia, esos mismos elementos deben registrarse en las uniones
libres con el fin de evitar la doble relaciones que tienen una incidencia en los
hombres.

El Estado Civil Dominicano debe crear protocolos donde se asegure el cumplimiento


del artículo 55 de la constitución dominicana cuando plantea los elementos de que la
institución jurídica del matrimonio debe realizar de manera libre y voluntaria, lo que
en lo social se puede observar que en algunas veces se viola ese elemento lo que
puede fomentar el desinterés en la unión matrimonial y aumente la tasa de divorcio
en la sociedad dominicana lo cual se ha convertido en un verdadero problema social.

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El Estado Dominicano debe de realizar una modificación al artículo 4 de la ley
número 198-11 que regula los matrimonios religiosos donde la responsabilidad del
registro matrimonial no quede bajo la custodia de las entidades religiosas,
atendiendo a que no existe una garantía precisa de que estos están la capacidad
moral, legal y de seguridad de la protección de los datos obtenidos a través de la
realización de matrimonio lo que constituye un problema jurídica en caso de uso mal
sano de los datos que estos tienen en sus manos, además de que los datos
personales de los ciudadanos solo pueden estar en mano del Estado como
salvaguardor.

El poder legislativo debe de modificar el artículo 63 de la constitución dominicana con


el objetivo de que además de proceder a la celebración de un matrimonio, el oficial
del estado civil fijará dos edictos en la puerta de su oficina con intervalo de ocho
días; esos edictos y el acta que deba extenderse, expresarán los nombres, apellidos,
profesión, nacionalidad y domicilio de los futuros esposos; su condición de mayores o
menores de edad, y los nombres, apellidos, profesión y domicilio de sus padres, se
debe establecer un domicilio en la República Dominicana para los procesos jurídicos
que emanan y la responsabilidad que contraen el matrimonio.

El ministerio de la mujer debe de incluir en su agenda programas de intervención


familiar para evitar la taza de divorcio que se registra en la República Dominicana,
además de que estos debe de ir de acuerdo a una línea de fomentar el matrimonio
legalmente registrado sobre la costumbre de los dominicanos de amancebarse en
unión libre. Un divorcio o una separación puede conducir a la mujer involucrada en
una dinámica de discriminación de propios y extraños hacia ella por no disponer en
su hogar de un hombre en tanto esposo, por lo que el Estado en su esencia debe de
intervenir en los procesos matrimoniales como elemento de cuidado social y para el
mejor desarrollo de los niños, niñas y adolescentes que son los más afectado con la
ruptura del núcleo familiar.

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REFERENCIAS

Ayuntamiento Los Alcarrizos (2016). Plan municipal de desarrollo Los Alcarrizos.


Santo Domingo.
Camacho Chavarría, A. (2000). Derecho sobre la familia y el niño. San Jose:
EUNED.
De Pina, R. (2008). Diccionario de Derecho. México, D.F.: Editorial Porrúa.
García, J. (1894). Compendio de la historia de Santo Domingo. Santo Domingo:
Editora Cosmos.
Henríquez Ureña, M. (1941). Episodios Dominicanos: Conspiración de los
Alcarrizos. Lisboa: Sociedad Industrial de Tipografía.
Jimenes Hernández, J. y Jimenes, M. (2001). Prócer de la Independencia.
Academia Dominicana de la Historia. Santo Domingo: Fuentes para la Historia
Republicana.
Moya Pons, F. (1977). Manual de Historia Dominicana. Santiago: UCMM.
República Dominicana (2001). Ley 163-01, que crea la provincia de Santo
Domingo Oeste. De fecha 2 de octubre del año 2001. Santo Domingo
República Dominicana (2005). Ley Numero 64-05 que eleva los Distritos
Municipales de Los Alcarrizos. Santo Domingo.
República Dominicana (2011). Ley número 198-11, Que regula los Matrimonios
Religiosos y sus efectos en la República Dominicana y Reglamento de
Aplicación. Santo Domingo.
República Dominicana (1997). Ley número 1306-bis, Sobre Divorcio de fecha 21
de Marzo del 1937, G.O. 5037 y su modificaciones. Santo Domingo.

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