Está en la página 1de 68

LA MÚSICA LATINOAMERICANA

RITMOS Y DANZAS DE UN CONTINENTE


Isabelle Leymarie

i�. 085 (g:�


LEy
/l'Jv.'3).;�

Título original: La musique sud-américaine. Rythmes et danses d'un continent

Traducción: Isabel Romero

Dirección: Pierre Marchand y Elisabeth de Farcy


Dirección de la redacción: Paule du Bouchet
Edición: Sébastien Deleau et Béatrice Peyret-Vignals.

1." edición: octubre, 1997


ü 1 997, Gallimard
O 1 997, Ediciones B, S. A.

c11 español para todo el mundo


lbilén, 84 - 08009 Barcelona (España)
l111pr ·so en Italia - Printed in Italy

]�)
l111 preso ror Libraria Editoriale, Trieste, Italia
ISl\N: 84-406-7705-7

1 1· ('1 v:1dos lodos los derechos. Queda rigurosamente prohibida,


·.111 . 1 1 1 111 1 il'.�1ci(ll1 escrita de los titulares del copyright, la reproducción CRUPOZETA'S.

1111.il 11 p:11·ci�tl de esta obra por cualquier medio o procedimiento, Barcelona•Bogotá•Buenos Aires • Caracas•Madrid•México D. F.
111111p11'1Hlidw. l:t rcpro raíía y el tratamiento informático, así como
l.1 tl1.. 11 illlwirn1 dl' ·jcn1phres mediante alquiler o préstamo públicos.
Montevideo• Quito• Santiago de Chile
1) 1 �

D esde los tiempos de la conquista, la música de


América latina y del Caribe ha ido perfilándose a través
de préstamos, sustratos o reinterpretaciones. En un
sutil equilibrio de alquimias, las aportaciones a veces
antagónicas de Europa, de África y de las civilizaciones
precolombinas, el Nuevo Continente ha gestado un
florilegio sorprendente.

C A P Í T U LO P RIMERO
EL NACIMIENTO
DE LAS MÚSICAS LATINAS
• En el siglo XVIII, en
Santo Domingo, los
esclavos inventan el
erótico chica (página de
la izquierda), una danza
que conquista las demás
islas del Caribe y que la
ico11ogra/Ta europeo de
e11/1111ce.1· represe11w co1110
1111 /J((i/e cortés
oc11111¡10.rndo. E11 8rnsil.
do11de /(( i11/!11e11ci11 lm1111í
es 11111.\' 11owhle, se
Clill.\'l'IW/11 lllÍll
i11s1m111e11/os de origrn
africo1111 co1110 /((
marimba portátil, e11 la
i Iustración.
14 E L NACIMIENTO DE LAS MÚSI CAS LATINAS

Los ORÍGENES • En Perú (abajo), los


esclavos se concentraban
Como recuerda la divisa de Bolívar, « Humanidad en
en las plantaciones
un microcosmos », América latina y las islas del Caribe costeras. En la marinera
se han visto continuamente importunadas por envites peruana, así como en la
imperialistas e innumerables cambios de gobierno. rumba brava cubana, el
pal1ue/o, que representa
Desde los inicios de la colonización, los
un papel simbólico, pasa
cantos y las danzas indios y negros a ser un elemento de
son reprimidos, sobre todo por el seducción.
·

clero. En un intento por evangelizar a


·

I
indígenas y esclavos, los franciscanos y
los j esuitas abren escuelas donde les
� enseñan sus himnos cristianos. El
cristianismo en contacto con algunos cultos
precolombinos y africanos que, no obstante,
tratan de sustraerse al influjo extranjero, da
origen a las religiones sincréticas .
Desde el comienzo de la conquista
se esboza un proceso de En todas partes aparecen danzas con • La música y la danza
« criollización» que ingredientes mestizos: la marinera -formas de expresión
en Perú, la chacarera en Argentina, por excelencia en todas
propicia la aparición
las sociedades negras­
de géneros musicales el pasillo en Ecuador, el bambuco
.
1Q' propiamente
. desempel1aron un papel
amencanos, en Colombia, el joropo en esencial para los esclavos
' y no amerindios, Venezuela o el tamborito en de América del Sur. Se
africanos ni europeos. Panamá; la lista es convirtieron en un
exutorio contra su
C o ntradanzas, cuadrillas, polcas interminable. La música
sufrimiento y en un medio
y seguidillas, aunque también y la danza son elementos de reajlnnar su identidad.
óperas, cánticos cristianos, indisolubles en zonas con «Cuando los amos no les
marchas militares o canciones una importante población de permiten bailar en sus
viviendas -escribía el
mari n eras se fusionan con raza negra, e incluso en países
cura dominico Labclf en
los ri t mos y danzas negras, como Argentina, donde los el siglo XVIII-, después
in -as o aimaras . negros dejaron igualmente de trabajar en las
Lu -hadares acrobáticos, su impronta, aunque en l a plantaciones de cai'ia de
azúcar andarán 1re s o
¡u ' b a i l a n al compás de cantos e actual idad hayan
c11a1m let;iws los sábados
i11st 1"L1me n t os de origen africano, desaparec ido. El ta ngo, la o 111ediw1r)('/ie para
rn111 1·ibuy n al nacimiento de la sam ba, el mam bo, e l cal i p so e11c1111/rnrse ol/í donde se

1·r1¡1rwiro de Bahía, la laghia de o el reggae so n a la vez d anzas celebre 1111 l}(/ile. »

M:11·ti11i ·;:1 , y la kalinda de y géneros musicales destinados


'1'1 i11id:1 l. /\sí, los r i t os bantús ú n i camente a deleitar el oído.
dl· In 1111di lad se metamorfosean en
•. . 111tl1;1 t'll l kasil, guaguancó

1·11 < 1il1:1, v r;111domlr en


1 ¡•1•111111.1 y
11111¡111.I\
EL TANGO ENFEBRECIDO DE L S ( :AU< :11< >.
16 E L NACIMIENTO DE LAS MÚ S I CAS LATINAS
y luego interpretada en Argentina con el nombre de
EN ARGENTINA: PAYADA1 CANDOMBE Y MILONGA • Tras su dura labor, los
gauchos de la Pampa se tango. Hacia 1 895, su coreografía empieza a estilizarse
A finales del siglo XIX, inmigrantes, campesinos y
reunían para tocar. Aquí con la ayuda de ciertas figuras características.
soldados se hacinan en los sórdidos suburbios de abajo podemos apreciar Contrariamente al candombe --de ritmo alegre- donde
Buenos Aires. En este universo glauco, el gaucho, héroe un arpa, instrumento
hombres y mujeres se miran a la cara, el tango, trémulo
de la Pampa, deja paso al compadre, proxeneta introducido en América
latina en el siglo XVII por y tenso, se baila mejilla contra mejilla, aunque sin
engominado que disimula el aguijón de la miseria y el
los misioneros católicos, embargo conserva dos figuras del candombe: el corte
terror del abandono con su porte fanfarrón. Y en esa y una guitarra. El mulato (parada súbita) y la quebrada (torsión del busto) .
embriaguez del tango, mientras aprieta contra él a su Cabina Ezeizafue uno de
mina (mujer), se toma la revancha frente a su amargo los más célebres
EL TANGO SALE DEL LIMBO
destino. payadores (cantantes que
se acompañan con la En 1 866, un periódico argentino emplea por vez
· El tango, la quintaesencia del alma porteña (de
guitarra) de las primera el término tango para designar la canción La
Buenos Aires) emerge entre esta fauna apócrifa, en pleno postrimerías del siglo XIX
coqueta. De 1 900 a 1 9 1 5 , el tango cantado en lunfardo • En el pasado, cada
corazón del arrabal. El tango propiamente dicho, más En Buenos A ires, otros región de A rgentina
Uerga trufada de palabras italianas y francesas) se oye
europeo, surge de la payada hacia 1 870, género de mulatos conocidos como poseía sus propias
maestritos de piano en burdeles y bares. El tango de la época, canalla y
canciones que los gauchos acompañaban con la danzas
daban lecciones de vulgar, sujeto aún a un ritmo binario y con textos a tradicionales
guitarra. Absorbe elementos del candombe -antiguo música a las jóvenes de
menudo improvisados, es desdeñado por la elite (arriba).
ritual de los esclavos argentinos y uruguayos- y de la la buena sociedad.
argentina. Hacia 1 9 1 O, en el barrio de Palermo
milonga, los cantos negros de carnaval parodiados por
aparecen tríos de tango formados por clarinete (o
los blancos e integrada posteriormente en el repertorio
flauta), violín y guitarra (o arpa), y posteriormente, en
de los payadores. Convertida en una danza plebeya y
la pintoresca zona de La Boca, cuartetos con
descarada, la milonga se acopla al tango, y genera el
bandoneón que
tango:-milonga, con grandes dosis de ritmo. La línea del
tocan en las
bajo-sincopada- del tango proviene de la habanera,
tabernas de los
introducida en Cuba por los marineros hacia 1 850
marineros.
1H l·'.I. NA :!MIENTO DE LAS MÚ S I CAS LATINAS
l ·'. I h:111do11 ·ón susti tu i rá paulatinamente a la flauta y se
re 111Vl'rl irá en el instrumento esencial del tango. Su
1 i l'i ·u l 1 osa té c n i ca confiere a esta música una densidad
11ucva; as i mis mo, la interpretación del fraseado y su
quejido l a ncinante ejercen una influencia decisiva sobre
algunos cantantes. Numerosos bandoneonistas destacan
en los años veinte: Juan Maglio (Pacho), Eduardo
A ro las, Vicente Greco, Osvaldo Fresedo y Pedro Maffia.
En la época de los cuartetos de La Boca, el tango, que
también se interpreta con el órgano de Barbaria, penetra
en el centro de Buenos Aires y el auge del fonógrafo
acelera su implantación en la capital. Locales como
el Hansen, el Armenonville o el Royal Pigall contratan
grupos de tango. El Armenonville se inaugura con
la Orquesta típica criolla de Vicente Greco.

EL TANGO CONQUISTA EL MUNDO


Hacia 1 905, Europa y Estados Unidos descubren
el tango con El choclo y La morocha, dos • C01nposito1; pianista y Buenos Aires, entonces en plena
títulos míticos de la música argentina. De virtuoso director de urbanización. Su triunfo en el extranjero
orquesta, Roberto Firpo
1 907 a 1 9 1 4, el violinista argentino propicia que la burguesía porteña se
(arriba) es uno de los
Alfredo Gobbi graba tangos grandes nombres del reconcilie con el tango y se olvide del origen
en Filadelfia, Londres tango de los aFíos treinta. proletario de la mayoría de sus intérpretes y
y París. Hacia 1 9 1 2, el El que fuera antiguo creadores. La llegada del j azz y de los bailes
director musical del anglosajones a Argentina contribuye
tango causa sensación
Armenonville, en Buenos
en la capital francesa, Aires, popularizó varias
igualmente a recuperar esta música.
y una clientela entusiasta obras, entre ellas La El tango se da a conocer y se refina.
afluye a los espectáculos cumparsita. El compositor Enrique Delfino lo transcribe
del Moulin Rouge -donde a las partituras, Vicente Greco convierte
los músicos se presentan en un estándar la Orquesta criolla, formada
con trajes de gauchos-, • Poco antes de la por violín, flauta, guitarra (o piano) y
así como a los bailes, Primera Guerra Mundial, bandoneón; y el violinista Julio de Caro
Vernon Castle (nacido en impone el sexteto (llamado también orquesta
a los concursos de
Blythe), de origen inglés,
tangos o a los salones acompaiiado de su esposa
típica), integrado por dos violines, dos
de té-tango de l a ciudad; y partenaire bandoneones, un piano y un contrabajo.
y la cantante Mistinguett también interpreta tangos. norteamericana Irene De Caro transforma el tango e n una
(página siguiente)
No obstante, la Iglesia católica no ve con buenos ojos música de vocación artística, con un
introducen el tango de
este baile « lascivo » . El tango conquista Alemania París en Estados Unidos, juego líri co y sab i os arreglos. En
y Loda América latina. Los bailarines Vernon e Irene con un éxito fulgurante. estos años, el tango a !q u i er ' un
asile lo popularizan en Estados Unidos en 1 9 1 3 . movi m i e n to de cuatro tiempos,
1) ·s le 19 1 6 a 1 928, Argentina se ve favorecida por aunque con erva los ritrnos d ' I
1111 �1rnbiente l i be ral y una economía floreciente. can dombe y la mi longa, y su
N 11111 Tosos c i nes, tea t ros y cabarets se abren en coreografía ga n a en complej i d ad.
.w EL NACIM I ENTO DE LAS MÚ SICAS LATINAS EL ALMA DE 1\ltCLNTIN '1

<< PENSJ\MlENTO TRISTE» • Aníbal Troilo (apodado pocas novedades destacan en e l plano musical, salvo e l • '/i111/11,11¡,,1'1'111111
el Gordo) fue uno de los ff/)l"('.\"('///111/1111111111 1111
l ·'.I lango, «pensamiento triste que se baila», según la ritmo canyengue , d e origen bantú, que el violinista y
bandoneonistas más gauclw 1fr.1"<"1111111/11i/11,
l'a mosa máxima del poeta Enrique Santos Discépolo, se director de orquesta uruguayo Francisco Canaro máspol"l'cir/11 11 /'11·11111
inspirados del tango.
dele i ta en la soledad, el desespero, la muerte, el paso Aquí abajo lo vemos introduce en sus composiciones. Hacia 1 940, el tango, lunar ( e11 el 1·11r!l'I ). 11
d el liempo, la inconstancia de la mujer y el sentido posando para la como un vi11(1rac/111 pl11
boy (abqjo), Cordel 1•.1111
absurdo de la vida, con un esteticismo melodramático. fotografía, junto a otros
rres grandes de la música profundamente armigr11/n
Es Ja voz de los arrabales, de los pobres desposeídos
argenrina: arriba (el en la cultura arge111i1111.
por los ricos, como en el efusivo Flor de fango de segundo partiendo de la En su corta carrera
Pascual Contursi o Pan de Celedonio Flores, el poeta izquierda), el cantante grabó cientos de discos
del lunfardo. Contursi evoca también el amor uruguayo José Razzano, y rodó varias películas
con quien Carde/ había como Flor de durazno
desdichado (Mi noche triste) , fatalista y desengañado,
formado dúo, a la y Las luces de Buenos
Discépolo (apodado Discepolín ) , el letrista de Carlos derecha el poeta y lelrista
Gardel, se lamenta de la indiferencia del mundo (Qué Enrique Santos Discépolo
vachaché, Yira yira, Confesión); en los años treinta, v el violinista y director
de orquesta Francisco
Enrique Cadícamo critica la decadencia de las
Canoro (Pirincho).
muchachas de la noche y, en la década siguiente,
Homero Manzi, Aníbal Troilo y Osvaldo Pugliese
rememoran el pasado
perdido para siempre
(Barrio de tango,
Recuerdo) .
A partir de los años
veinte, algunos cantantes
empiezan a tener éxito,
pero sólo Carlos Gardel
alcanzará el aura del mito.
A los ojos de los
argentinos, simboliza el
triunfo del niño del
arrabal que llega a la cima
de su profesión. El 24 de
junio de 1 93 5 , cuando
muere en un accidente de en un principio reprimido por las autoridades
av ión en Colombia, un argentinas, evoluciona en el plano musical y literario,
mi 1 lón de personas asisten hasta el punto de que se regenera con textos
a su entierro y Argentina, desconsolada, no cesará de elaborados, arreglos complejos con ci ertas influ 'n -ias
rendirle culto. del jazz en oca s i o n es y de la mano d ' in Léqx ' I es d e
La muerte de Gardel coincide con la llegada al poder primer orden. E n tre éstos destacan /\níb:..d Trnilo,
d · los m i l i tares en Argentina. En los años treinta, virtuoso del ba n doneón, y los pi:rnisl:..ts Osv:..tl lo
rn110 · i d os corno la « década infame», la situación Pugl i ese y H oraci o algún, arl íf"iccs d · 1111·1 11u'1si ·;_¡
1·(·011<'>micci y social se deteriora. El tango bailado est i m u la n te y cad ·nciosa. /\slor Pi<.tl'J.oll;.i 1rvolu ·iona
dl· ·Ii na y se rcplega sobre su saber adquirido, si bien el el ta ngo a part ir de los afios scscnla inl rnducicnc.Jo el
1:111¡•,o ·�111l�1do s i gue p ro sp er a ndo . Durante este período, tango de con c i erto.
Apocalipsis en la vi.1·1"
de baile

En los años veinte,


Hollywood se apropio del
tango. Rodolfo Vale11ti110.
de origen italiano y antes
bailarín mundano, se vi,1'/I'
de gaucho para
interprétar un fogoso
tango en Los cuatro jinetes/
del Apocalipsis, rodada
por Rex lngram en 1 92 1
(fotografías a l a derecha
y a la izquierda). Además
de Gardel, otros músicos
argentinos ruedan
películas sobre el tango.
Destacamos especialmente
a Roberto Firpo, que
actúa el año siguiente en
La muchacha del arrabal.
26

Los años Locos del tango

Durante los mios locos,


las escuelas de danza,
salones de té, teatros,
cines y hoteles de Europa
y de Estados Unidos
contratan. orquestas de
tango. Numerosos
bailarines se especializan
en el tango de salón,
complejo y refinado, cuyas
figuras en su mayoría han
perdurado hasta hoy. (A la
izquierda, un movimiento
ejecutado por Veloz y
Yolanda, calificados por
Life Magazine como «la
mejor pareja de bailarines
del mundo». A la derecha,
Miss Harding, creadora
del «tango chic»,
iniciando un paso del
braza de su corn.paiiero
en el hotel Cecil. Arriba,
una partitura a/e111a11a
de 1 913.)
8 EL N AC I M I E NTO DE LAS MÚ S ICAS LATINAS «SAM BA» AFRI CAN A, SAM L)/\ BIV\SI 1.l·�N/\ 11)

,¡ ! l t

\�:_. -

EN BRASIL: DEL «LUNDÚ» A LA SAMBA • A principios de siglo, La Habana, la samba despunta en los barrios pobres de • Los amerindios han
con el declive de las
La samba, efervescente y espontánea, es el polo opuesto Río, donde se hacinan los negros. Una botella de esrimu/ado duranre
plantaciones de café y de mucho riempo la
al tango, trágico y codificado. Antes de convertirse en azúcar, muchos negros se cachar;a (aguardiente de caña de azúcar) y unos amigos
imaginación de los
música de carnaval y en uno de los ritmos trasladan a Río de son un pretexto como cualquier otro para cantar y europeos (grabados,
latinoamericanos más conocidos en el extranj ero, la Janeiro (fotografía bailar esta danza . abajo). En algunos
panorámica, arriba). La Hasta la primera década del siglo xx, la samba era
samba era un danza de fecundidad de origen angoleño camava!es de Brasil se
ciudad, con un puerto recogen esras figuras
que incluía la frotación de los ombligos (semba significa floreciente, atrae también
una creación anónima, surgida del inconsciente
indias, y en el norte del
«ombligo » en el idioma bantú). Los negros que huían a ilustres compositores colectivo. Sin embargo, con la aparición de los país, los cu/ros de origen
de las plantaciones y se refugiaban en los bosques como Heitor Villa-Lobos compositores, ésta se convierte en una obra individual africano han inregrado
formaban un círculo para bailar la samba. y Darius Milhaud,
y l as letras dejan de ser improvisadas. a divinidades indias en
entre otros. su panteón.
A finales del siglo XIX, Brasil se entusiasma con el La burguesía carioca, imbuida de valores europeos,
lundú, también de origen bantú y con el maxixe , con así como algunos mulatos que se esfuerzan por ganarse
influencias de la habanera. También en la misma época, la respetabilidad, repudia la
las familias negras de Bahía se afincan en Río e estridencia de las sambas y de las
i n troducen la samba, integrada por entonces en el batucadas . La policía, obstinada en
candomblé (culto nacido de la fusión entre el eliminar de la ciudad a la « chusma
calol icismo y las religiones yoruba y congo ) . Los negra » , difícil de controlar, acosa a
sacerdotes y sacerdotisas del candomblé , los sambistas y confisca sus
conocidos familiarmente con el apodo de « tíos » y guitarras. Pero para los negros
«1 í<. 1s » , organi zan fiestas donde acuden desfavorecidos, la samba es ya la
i 11s1 n1men l i stas, cantantes y bailarines, y la samba reafirmación de su identi dad y u na
pinclc pa ula L i n amente su carácter sagrado. En los forma de guerri l l a cultural . Los
1 ºI 1 i loso s al rededores de la Prac;a Onze de Junho, primeros compos i lores de samba
1<111. idl'1·:1da como una « África en miniatura » , se sueñan con que u n día su música
11111tt·1111·:1 u11u i111ensa aclivi dad musi cal. sea aceptada y c o no;re<.1 u na <.1111 pi ia
l i¡•,11:il ¡11l· l'l 1: 111 'º 'n Buenos Aires, o el son en difusión.
30 EL NACIMIENTO DE LAS MÚ S ICAS LATINAS « SAMBA-EX/\ LTJ\ C)\ C) » JI
Gracias al músico Sinho, con el carnaval, la samba se • En Europa, la moda En 1 9 17, la canción Pelo telefone abre • Nacido ('11 l'or111gol

convertirá en el emblema cultural de Río. También los del arte negro inspira un paso a la samba-canrao, más lenta y aw1que edt(('odo 1' 11
grafismo muy estilizado. Brasil, Car111e11 Mimndu
blancos sucumben a su hechizo, y harán suya esta sentimental que la samba de carnaval.
Un disei1ador representa (Maria do Canno
música, cuyo éxito comercial pondrá fin a su represión. así a uno de los músicos Pelo tele{one, que evoca l a represión Miranda da Cu11ha) cw111i
del grupo Oito Batutas a con que el jefe de policía de Río y bailó en varias
Los COMIENZOS DE LA SAMBA su paso por París (abajo, intenta frenar el j uego clandestino, películas y comedias
a la izquierda). musicales americanas
Sinho es el primero en presentarse como compositor de obtiene un éxito inesperado.
como Copacabana y That
sambas y en ser reconocido como tal, y la propaga por Su triunfo coincide con un Night in Río (abajo).
todo Río . Flautista antes de ser pianista, este músico auge nacionalista y un
frecuenta las batucadas del barrio de Saúde, y las casas deseo por liberarse de las
influencias culturales

Os «Batutas» em Paris portuguesas. La radio,


introducida en Brasil en 1 92 3 ,
y las discográficas popularizan
de candomblé . La samba cuenta siempre una historia y la samba en ese momento .
las canciones de Sinho, como Bofé padmingé, o A finales de la década,
Macumba, expresan el sabor de la cultura afrobrasileña ésta llega a los salones
y reflej an animadas estampas de la ciudad . de baile y por fin logra
El saxofonista y flautista Pixinguinha enriquece consagrarse.
las armonías de la samba e incorpora En 1 92 9 la samba-canrao
Ai, ioi6 es todo un éxito
durante el carnaval. El
• Noel Rosa, músico prestigio de la
blanco original del barrio
de Vila Isabel, en Río, ha
samba cantada
transformado las letras aumenta aún
de la samba en más en los años
verdaderas crónicas treinta con
sociales de la ciudad.
solos para i ns t rumentos intérpretes de la talla
Muerto de tuberculosis
de vi e n to en todas sus a la edad de veintisiete de Mario Reis y
composiciones. mios, dejó escritas más Carmen Miranda, que
Pri m ero escribe choras de doscientas canciones seducirá a Estados
como O orvalho vem
(de la palabra chorar, Unidos con sus tocados
caindo, Com que roupa
« llorar» ) -género con y Ultimo desejo, entre adornados con frutas tropicales.
más prestigio que la otras (abajo, la carátula Gracias a la radio, a partir de ese
samba-, y después de uno de sus discos). momento todo Brasil tararea las sambas
innumerables sambas como del carnaval. Esta música se convierte en
Já te digo , que recuerdan a las un fenómeno de masas y en el símbolo de
de Sinhó, y Carinhoso . Brasil, con el Gobierno nacionalista de
Colabora con varios grupos, y Getúlio Vargas ( 1 930- 1 945). En 1 939, en
cuando recluta a China y consonancia con el patriotismo reinante,
Donga, forma el conjunto Ary Barroso escribe la famosa
Oito Batutas, que se presenta samba-exaltarao (gén e ro de samba
en París en 1 92 1 . que exalta Brasil) Aqllarela do Brasil.
32 EL NAC I M IENTO DE LAS MÚ S ICAS LATINAS MÚS I A CALLEJl�RA .n

siglo los colonos portugueses introducen


Los COMIENZOS DEL CARNAVAL • A comienzas de siglo,

en Brasil la tradición del carnaval (bautizado


En el XVII,
durante el carnaval,
antes de la aparición Qual será o malor compositor
entonces con el nombre de entrudo ) . Tras la abolición das nossas Escolas de Samba 1
de los grupos

de la esclavitud, los blancos celebran su propio


organizados, muchas

carnaval, mientras los negros se entregan a fiestas espectáculo del carnaval, Darius Milhaud, que reside
personas disfrazadas

mucho más exuberantes de espaldas a las la embajada de Francia de Río en 1 9 1 7, se inspirará


como la que muestra el
• La fotografra de
grabado de la.fotografía

autoridades. en la ópera Forrobodó de Chiquinha Gonzaga e incluirá


en abc�jo muestra algunas
de abajo salían al paso

te1nas brasileños en
jóvenes bailarinas

r
TJ
de los transeúntes por

N
de la Escuela de Samba


Saudades do Brasil ( 1 920) y

'u�D 'R t
Porte/a, una de las más
antiguas de Río.

Hasta mediados de los ffJf�


Le Boeuf sur le Toit ( 1 924) .


�:��:�:�1:: :i���1�
en el centro de R10, solo is lrt1li• ¡ ,J JREuNIAO
podía participar �na elite. Sin J10Jb n�n

U HBIJ J/,P"JJ
f�/·
.. \
embargo, en ocas10nes, algunos grupos de UU u
juerguistas que bajaban de las favelas aprovechaban
para meter cizaña. Ansiosos por ser incluidos en el
Fundada en

desfile, algunos músicos negros como Heitor dos


los arios treinta, junto con

Prazeres deciden organizar asociaciones carnavalescas


Mangueira, Salgueiro e
lmpério Serrano, es una

y presentar un espectáculo elaborado. de las cuatro grandes ·

En una favela del barrio de Estácio, Dos Prazeres


escuelas que compiten

funda en un principio un conjunto de pastoras


año tras aíio por el

(granjeras ataviadas con trajes de bahianas) al que se


primer premio del
ca.mavr;tl.

suma la cantante de samba


Clementina de Jesus. En 1 927, este
grupo toma prestado el nombre de la
Escuela Normal del Río, donde
enseñaban los sambistas conocidos, y
se bautiza como Escuela de Samba
A finales del siglo el carnaval empieza a Deixa Eu Falar (Déjame hablar).
estructurarse y aparecen los cordoes, grupos que Con compositores como Ismael
XIX, las calles de Río,

desfilan con un portaestandarte al son de la marcha. Silva, oriundo también de Estácio, la


preguntándoles de
sopetón: «¿Me conoce

Poco a poco, éstos son sustituidos por los ranchos, samba de carnaval se enriquece en el
usted?»

negros de origen bahiano ataviados como los granjeros plano armónico. Hacia finales de los
del noreste, que se acompañan con una orquesta y años veinte se acompaña por grupos
coros. A estos ranchos, con de percu ión en los que domina el
trajes cada vez más estruendo del su rdo (tambor) e
suntuosos, se suman pronto
los blocas, grupos que
O REfiULAMENTO DEFINITIVO DA i nstrumentos ele viento con
i nrluencias ele jazz; y las sambas-
preceden o siguen a la
banda. Atónito ante el "PARADA DAS MElODIAS" ver ados, con largas coplas, sustituyen
poco p co hs marchas de antaño.
a

Tras el hundimiento de la Bolsa en 1929, Estad s

Unidos se enfrenta a los años treinta con una renovada


vitalidad: la alegría está en el swing y en los bailes
desenfrenados. Después del tango, descubren la rumba
y la conga cubanas. París, en pleno apogeo de la
bohemia de Montparnasse, también se deja llevar por
la rumba y el biguine, que entusiasma a todos con
su aire sensual.

C A P Í T U LO 11
EL FULGOR
DEL CARIBE

• ü/111u11 do Ros (a la
r/1'1'1'1·/ia ), de origen
1•1·111'�11/111w. dirigió un.a
("('/('/J/"('()/"1/111'.\'/{/ d('
1 111111111 1·11 !11ula1erra
rl111'1111/1·l11,\'{l
/ (/ ),\'//(
" 'ÍI// (./
A In 1:1¡1ul'rt!n. 1111" calle
r/1•/,¡1 l/11/n11111, <"lll/nr/1·
l'.1/111////,\'/I(./
l�L FULGO R DEL CARIB E EL CRISOi, < :t Jl\AN<)

La Habana favorece también la difusión del son . El


género de canción anecdótica surgido en las
• Entre los pueblos son, • /·,'l 1:1p11lc11do,

postrimerías del siglo se entona al principio con un


africanos hoy afincados (l("(//l/flll/llll
l 1111l11
en Cuba, los congos guital"l"rt <' i111mr/111·1l
r 111·11

acompañamiento de marimba (cajón de resonancia),


XIX,
siempre desempeñaron un Cubo por los i111111¡;1111111·,1

bongo, botija (vasija por la que se sopla y que desempeña


papel preponderante en espaiiole.1·. se /Jui/11/111

el papel de una tuba), guitarra o tres (instrumento de


el desarrollo de la música antiguarnente e11 ri1•rt11s
regiones de la isla

nueve cuerdas), y dos cantantes, uno que toca las claves


populw: La yuka (a la
izquierda) y la makuta (fotografía inferior). No

(dos palitos de madera percutidos uno contra otro), y


han dado origen a la obstante, los irresistihle.1·

otro que sigue el compás y toca las maracas.


rumba brava, un ritmo ritmos negros cubanos

Repudiado en un principio por la burguesía, el son se


que se bailaba en los han aportado una no ta 11!­

ve marginado a los barrios negros de La Habana. El


barrios populares de La color a casi todos los
Habana y Matanzas. géneros musicales

contrabajo sustituye poco a poco a la botija y la europeos.

marimba, y los grupos de son se rebautizan con el


nombre de sextetos que pasarán a ser septetos cuando,
por la influencia del
jazz, se agregue una
trompeta; y en los o.

Desde la época de la colonización, Cuba ha ido creando


E N CUBA: LAS LUCES DEL SON

su propia música gracias a aportaciones de diversa


índole; no obstante, la influencia negra sigue siendo allí
particularmente importante. La herencia española es
evidente en la guajira, género de canciones que los
campesinos del interior del país entonaban con un
acompañamiento de guitarra. Asimismo, el legado
francés se aprecia en el <lanzón.
Pese al régimen represivo de Gerardo Machado ( 1 925-
1933), el país vibra con un verdadero fervor creativo. Las
orquestas, las bandas de jazz y los grupos cubanos tocan
en los cabarets y hoteles más conocidos. Y los trovadores,
cantantes que se acompañan con guitarra, presentan su
música en teatros y cines. Oriundos de la provincia de
01·icnte (situada en el extremo este de Cuba), éstos
porulari za n en La Habana el bolero (más romántico y
dil"icre en el plano rítmico de su homónimo español)
alegre e impertinente. Sindo Garay, Manuel
q11c

Alberto Villalón y Rosendo Ruiz, grandes


y ·I so11,

t1111•nrl11!'cs d 1 momento, componen canciones que


< ·, 11'<l11�1,

bs orquestas de danza de la isla.


de los campes i nos de Oriente hasta
111lt·1 p1°l·l;111
1o11·111i1·1·:1v i011
.rn U. FULGOR DEL CARI BE « TROVADO RES, S EXTETOS Y S EPTETOS » 39
de las más famosas composiciones de Ignacio Pifí.eiro,
obtiene la medalla de oro en la Feria de Sevilla
• Los discos del Trío

de 1 929; y durante una visita a


Cuba el año siguiente,Gershwin
tomará prestado un motivo de su
canción Échale salsita para su
Obertura cubana . Los discos del
Septeto Nacional de Piñeiro,una
auténtica institución del son , arrasan
en Cuba.
El Trío Matamoros,otro grupo
relevante del momento con sus
canciones impregnadas de savia
oriental (Son de la loma, El que siembra
años cuarenta estos últimDs se llamarán conjuntos,al su maíz, Lágrimas negras) , ha difundido
sumarse un piano y una conga. el son por el mundo entero. Músico de
• El son es la espina

La guaracha,que interpretan también los trovadores y tres y cantante,Miguel Matamoros


dorsal de la música

los sextetos y septetos, se parece al son en su ritmo recluta en Santiago,capital de Oriente,al


popular cubana. Grupos

tenor y guitarrista Rafael Cueto y al barítono Ciro


como el Septeto Nacional

arrebatador,en los textos satíricos o pícaros y en la


de Ignacio Piíieiro y el

alternancia copla-estribillo. Surgida en las tabernas del Rodríguez,que se acompaña con las claves . En 1 926, el
central. La rumba zaireíia
Sexteto Habanero

trío fija su residencia en La Habana,y posteriormente


(precursora del soukous)

puerto de La Habana en el siglo ésta se integra en el


(carátulas de discos,
también debe mucho al

repertorio de la ópera bufa,introducida en Cuba por los graba en Estados Unidos.


arriba) dieron a conocer
XVIII, son cubano.
este género musical en el

napolitanos. A partir de los años setenta,el término


extranjero hacia finales

«guaracha»,en la salsa,designará las piezas que


de los w1os treinta.

contienen frases anacrúsicas.


Compositores de

Machado,contrario a la música negra,censura ciertas CUBAN OVERTURE


renombre, como
Gershwin, se inspirarán

canciones consideradas ofensivas para el régimen y en el son. (A la derecha, Two Pianos - Four Hands

obliga a sus autores a exiliarse,lo que no impide que el


partitura de la Obertura Transcribed by

son siga extendiéndose. Paradójicamente,primero son

· · · · · ··
cubana). GREGORY STONE
GEORGE GERSH\VIN TP..

los clubes blancos quienes la acogen,ya que la sociedad


de «negros finos» desaprueba esta música «demasiado»
Mode, ato e molto ritmato J = 92

·1:··;· ·;· ·;- ·;·: ·[;-· ; · ·1 ·rur ·:r· ;rr- ··:··1


africana para su gusto,que puede desacreditarlos frente
,... .....

a la alta sociedad.
Hacia finales de los años veinte,las discográficas l
ST u
NO ·,.. 1.L

norteamericanas contratan a los grupos de son más


importantes como el Sexteto Boloña,el Sexteto
-V

rrf ff
Mode l."ato e molto ritma to J

Habanero,el Sexteto Occidente y el Septeto Nacional. Al gf tf


= u2

igual que la samba en Brasil,el éxito de las primeras r r r


,.. 1.L

grabaciones de son propicia el ascenso social de este


{��
>ND f
género musical. Los blancos se lo apropian y conquista
NO

el derecho de ciudadanía en las academias de baile


_·.:..-·__·r_ _-- t·�5_·_·r_ ·;·_.-f_;- _�W -¡fr[[�-f@IE�- l/i1-�ct�f�
--

s ,1 1vc. ecz. tº' temª que e 1ºgia 1 ºs méritos de 1sº n ,y unª


negras .
..
__
...._ �
.... . 9.
........ r
.. . __ .._r·_r r_.
..
__ .
/¡ ( ) EL F U LG O R DEL CARIBE DE MATANZAS A EAST H /\ I U 1 ·'. M ;¡ J

Las cándidas orquestas de <lanzón, con flauta travesera


El aristocrático <lanzón arraiga en La Habana,en de madera,violines, contrabajo,piano,pailitas
E L DANZÓN • E11 / t J.i 11, 11 1 1.1 , 1 111 1 11 1 1 1 1 1

GRAN BAILE
Ja misma época que el son y el bolero. Creado a partir (pequeños timbales) y el güiro (cilindro metálico con
que el .� 011 , .,,.,,,

estrías), contrastan con los septetos de son más briosos


destro111111rln 1 1 / r /011 . 1 11 1 ,

de la contradanza y luego transformado en danza,


CLUB AZTECA el flautislo, s11.1 1 !/1 111 istu

a su llegada a tierra cubana, este ritmo seduce a la que se acompañan de trompeta y bongo.
y direclor de nrq111 ·.1·111

burguesía habanera, sin importarle que la mayor Uno de los más prestigiosos
Aniceto Díaz ( a!H(jo ),
PUERTO RICO
parte de sus intérpretes y compositores sea de sangre representantes del <lanzón de entonces
� IU,. J>>UJ. &OOW D&L llOT>IL ...,.L .,..IJT V">nA
originario de Maw11::.as,

negra. es el pianista Antonio María Romeu.


CALLl:"' T ••rTI><" .o.'"""'ll>A

Sabado 1 5 de Octubre de IQJ2


yuxtapone estos
- -

A finales del siglo Miguel Failde,joven cometista La pieza Tres lindas cubanas ( 1 923),
2 ORQUESTAS 2

inspirada en un s o n de Guillermo
C.b,h"'� ",¡¿.,,'llitt Sl..00 . . ,

mestizo y director de una orquesta,compone varias


• .., I• T•""'11• • . . $l.50
XIX,

piezas, como Las alturas de Simpson (nombre de un Castillo (miembro del Sexteto
barrio de Matanzas) entre otras. Introduce síncopas en Habanero) y sobre la que improvisa
con brillantez,se impone en toda
la isla.
• A partir de 1 91 0, los

En los años treinta,muchos


puertorriqueños de Nueva

puertorriqueños que huyen de la


York crearon socials clubs
(centros donde se reunían
las personas de una
miseria de la isla y numerosos
músicos cubanos se trasladan a
determinada región de la

Nueva York. Con sus clubes,


isla). Incluso en nuestros

teatros, salas de baile y


días, las formaciones
«latinas» animan las
reuniones con simpáticas
restaurantes, East Harlem,más
conocido como «El Barrio»,se
fiestas y bailes. A rriba,

convierte en el polo de atracción latino


un cartel de 1 932 para

de la ciudad.
una Fiesta de la raza.

La mayoría de artistas del Barrio tocan una música


esencialmente cubana, aunque a veces añaden a su
• Romeu (en la carátula

repertorio valses,pasodobles y tangos. Entre éstos


de un disco, a la

destacan el cornetista puertorriqueño Augusto Coen y


izquierda) fue uno de los

el flautista cubano Alberto Socarrás, el trompetista


primeros directores de
charangas (orquestas de
danzón) que contrató a
cubano Pedro Vía y los cantantes puertorriqueños
Davilita, Daniel Santos y Johnny Rodríguez.
cantantes: primero dos ritmos en su
·

El cantante Canario (Manuel Jiménez) rompe con


reclutó a Fernando composición Rompiendo
la rutina. Ésta da lugar al

esta hegemonía cubana e introduce en Nueva York la


Collaza que se suicidó a
los 37 mios, para alumbramiento de un

plena,género musicalaparecido en Ponce, en la costa


desespero de sus género nuevo, bautizado

sur de Puerto Rico hacia 1 9 1 4 . El equivalente


admiradoras, y luego a como danzonete, que

puertorriqueño del son , la plena, se acompaña con dos


Barbarito Díez. El provocará un en/usiu.1·11111

la coda de la danza y desarrolla esta parte final sobre tamboriles, uno que marca el ritmo de base,el otro
danzón alcanzará una espectacula1; aunque
auténtica expansión a pasajero. Varios

la que los músicos improvisan. Tras abandonar las improvisando,y un acordeón.


partir de los años compositores y

figuras que impone la danza, a partir de ahora los Algunos músicos trabajan también con grupos
cuarenta, sobre todo con numerosos ( ·a11ta11 t1'.1".

bailarines harán progresos en pareja sobre este nuevo americanos para sobrevivir. Coen colabora con Duke
la charanga del flautista entre ellos, !\IH•l1m/11

género musical,bautizado como <lanzón. El bombín de Ellington, Socarrás toca en la orquesta del Cotton
Antonio A rcaiio y luego Barroso .'' ( '('/ i11 ( '1 1 1 . ,
apadri11r 1 1 w 1 1 · /

Baneto de José Urfé ( 1 9 1 0) establecerá definitivamente C l u b, el saxofonista y trompetista Mario Bauzá en el


con la Orquesta A ragón.
Romeu se dará a conocer da n 1,! l l l l' f l'

la forma tripartita del <lanzón. g ru po de C h i c k Webb y luego en el de Cab Call oway.


después en Estados
Unidos.
42 EL FULGOR DEL CARIBE « LATI N BAN DS » PARA « DA N C I N G » AM E R I CA N OS

resto del mundo. Los estadounidenses se entusiasman


con la música cubana y aprenden a bailar la rumba
• Después de s11 Riro co11

y la conga.
A zpiazu, Antonio Machín
se queda en Nueva York,
donde formará un
cuarteto (a la izquierda)
y grabará numerosos
singles de 78
revoluciones. Como el
Trío Matamoros, Machín
contribuirá también a
difundir la música
cubana en el extranjero.
Abajo: Eclmu.ndo Ros
tocando el bongo.

La rumba, a medio camino entre la rumba brava y


invade los salones de baile. Baile serpentina de
los carnavales de La Habana y de Santiago, la conga
son,

es introducida en Estados Unidos por el compositor


Elíseo Grenet y el cantante y actor Desi Arnaz.
Dejando a un lado sus inhibiciones,los
estadounidenses bailan la rumba con frenesí
cogidos por la cintura en fila india y dando una
patada en el cuarto tiempo.
Los clubes y hoteles elegantes de Manhattan
contratan a grupos «latinos» como el del
pianista puertorriqueño Noro Morales,los
Happy Boys del percusionista
puertorriqueño Federico Pagani o la
Un día, el compositor cubano Don Azpiazu se inspira Orquesta Siboney del violinista cubano
• En el guaguancó
L A LOCURA D E L A RUMBA Y DE L A CONGA
(arriba), al compás de

en el ambiente callejero y escribe El manisero (el


tambores y cantos, el
Alberto Iznaga.
vendedor de cacahuetes) en la mesa de un café de La A comienzos de los años treinta,las
hombre persigue a la

l ; t lx111a. En 1 930, Azpiazu es contratado por un teatro grandes orquestas de Azpiazu,Ernesto


mujer e intenta realizar

dr H rnad way y Antonio Machín, estrella del Lecuona y Armando Oréfiche


el vacunao (contacto
l
pélvico), mientras ella

( ' " i >l ' · 1 ;'1 · u l o , can l a El manisero . Traducida con el título promocionan la rumba y la conga en el
lo esquiva.

t ll · 'f'lli ' Pcr/ 1 7 1 1 / Vendar, la canción triunfa de extranjero. Las orquestas «latinas» de
1 1 1 1 w d 1 : l l c > \ ' 1 1 t ·:� 1 ; 1 d os U n i dos , y posteriormente en el salón con vocación comercial como la
1 1 1 1 ·. I
• ..,
44 EL F ULGOR DEL CARIBE « BEGIN THE B EGUINE» 45
• Además de los
clarinetistas Stellio y
Ernest Léardée (llegados
a París en 1 929), otros
, muchos músicos
propagaban el biguine
por la ciudad (a la
izquierda). Maurice
Chevalier, Jean Sablon y
Joséphine Baker también
grabaron biguines; y en
Nueva York, Cugat induce
a Cole Porter a escribir
Begin the Beguine.

• Numerosos biguines
evocan a las seductoras
criollas engalanadas con
joyas a las que los

de Xavier Cugat ejecutan ritmos simplificados momento


antillanos llaman

destinados al público anglosajón. predominan los


«matadors» (a la

instrumentos de
izquierda). «Las

Francia descubre el bigu ine , importado de la matadoras, personajes

Martinica, al mismo tiempo que la m ba y la conga. cuerda. El clarinete no


pintorescos de la

Juguetón o sentimental según los casos, el biguine será el instrumento


ru sociedad antillana de

expresa a las mil maravillas el encanto y la picardía característico del biguine


principios de siglo, no

criollas. Podría provenir del bélé (o bélair), conjunt hasta los años treinta.
eran en modo alguno
mujeres fáciles, sin duda

cantos y danzas de tambores que los esclavos de 1 A principios de siglo vivía


eran cortejadas en todas

plantaciones ejecutaban después del trabajo y en Luisiana una


partes, pero se hacían

tradición ha perdurado en las Antillas; o inclu comunidad antillesa,de


e mucho de rogar antes

cuadrillas y las polcas. Es posible que el nom ahí que la instrumentación


de otorgar sus favores
al elegido de su corazón

biguine derive del inglés begin , interjección del biguine recuerde a la


-o de su bolsa- por una

los directores de música anglófonos hacía de las primeras jazz bands.


duración que podía

sus músicos. En efecto, encontramos un


variar según su gusto. »

Hacia 1 90 5, la burguesía manifiesta s clarinete (más tarde el


(lean-Pierre Meunier
y Brigitte Léardée. )

por los bailes importados como la cuad


el charlestón y el fox-trot; el pueblo vibra
saxofó n ) , u n t rom bón , u n

biguine en los casinos (salas de baile a ve


con t rabaj o, u n ba njo ( o v i o l í n ) ,

rudimentarias) como el Bal Loulou, el G


u n p i a n o y u n t a m bo r

en l os bailes populares. Aunque también


( s u s t i t u i do m á s t a rde p o r l a

· la ri n e t i s t a s excelentes como Isambert,E


b a t e ría ) , más d o s i n s t ru me n tos

Ti - . co r · e s E l i sabet h o Léon Apanon, en lo go l peado p o r baquetas que


a n t i l l a nos: e l tibwa ( ba m b ú
46 EL FULGOR DEL CARIBE ORQUESTAS C RI OLLAS Y BAILES NEGROS 47
• En los bailes antillanos
del París de los años
treinta reina un ambiente
desenfrenado: «Todo el
mundo baila con todo el
mundo -recuerda el
clarinetista Ernest
Léardée-. Las .fronteras
y las diferencias de clase
110 existen y uno creería
estar en una ceremonia
ritual, donde todos los
pueblos se comunican
con la pasión del ritmo y
del baile. »
Stellio (abajo) compuso
numerosas canciones
criollas como A h ! Gadé
chabine-la, alusión a una

Tras la Primera Guerra Mundial, soldados y músicos


EL «BIGUINE» INVADE PARÍS hermosa chabine (mujer

antillanos,como el clarinetista Sam Castendet,se


de tez clara) a la que su

trasladan a la Ciudad de la Luz. Sin embargo,los


amante rico abandona

franceses descubren realmente el biguine en 1 9 3 1 , con


por una joven mejor
situada.

el Stellio' s Band del clarinetista Alexandre Stellio


(Fructueux Alexandre),quien se presenta en el
pabellón antillano de la Exposición
colonial.
marcan el ritmo de base y el cha cha (una suerte de Stellio recuerda a Sidney Bechet
maracas). por su lirismo y su vibrato. Tras
• En los bailes antillanos

El biguine , cantado en criollo,tal vez sea grabar algunos de los primeros discos Ali '1!' Gadé ¡ ¡ 1
se baila el biguine de

de biguine se convierte en una de las t t f Chabine-ta


buena gana (en la foto

romántico o nostálgico (Adieu foulards, Adieu madras, superior se puede ver a

glorias de la música antillana.


Ninon); no obstante,tiende a tratar más bien temas
·
un músico tocando el

divertidos o picarescos (Bossu o La Danse de Bam En mayo de 1 929, Stellio


trombón en los

desembarca en un París chacotero y


Clllnnhae n•1irllnlc¡u1llN(" )

Bam , Dans trou crab'la) . El biguine bel-air, que toma


bastidores). Se baila

noctámbulo, ansioso de placeres


Chnnson t'rénlc.-

el relevo al de Saint-Pierre,es la canción de moda en


también la mazurca
J);(}ur 1•lu110

exóticos. Artistas y aristócratas se


criolla y la cuadr illa con

las salas de baile y las fiestas; el biguine vidé (del


sus distintas figuras:

nombre que se le da en las Antillas al desfile de dejan seducir por los «bals negres» en
il1••�••,ne
el pantalón, el verano,

carnaval),satírico y desenfadado, predomina en auge,como el Tagada,el Elan Noir


la gallina, la pastoral

-frecuentado por Joséphine Baker


A. Stellio
el carnaval y en las campañas electorales,donde los
y el .final. En la cuadrilla,

y Mistinguett-, la Cabane Bambou,


un «comendador» dirige

candidatos desfilan con música. Un gentío abigarrado


.....
a los bailarines que

que baja de las colinas acompaña al cortejo de Vaval


avanzan hasta el centro
la Boule Blanche,el Bal Blanqui,
-el rey del carnaval- por las calles de Fort-de-France y el Boeuf sur le Toit. Stellio toca sus ,''f-r
de un círculo.

entonando biguines vidé con letras a menudo cautivadoras melodías en el Bal


vengativas. El biguine suena también en los Colonial de la Rue Blomet, donde unaA h l (lnd• Ntuhlae-1.. "'" '�•e en t•clll ........... u··�·· .........�.

numerosos bailes organizados durante el período noche el príncipe de Gales hace un


de carnaval. sonado acto de presencia.
lt 8

En los años cuarenta y cincuenta, las músicas


caribeñas inician una fase de intensa creatividad. En
Nueva York, la fusión entre el mambo, el chachachá
y el jazz crean un género incandescente; el cubop,
conocido más tarde como «jazz latino». Trinidad
exporta con éxito su calipso e inventa los steel bands.

C A P ÍTU L O 1 1 1
LA EDAD DE ORO

• En el efervescente
crisol americano, las
músicas caribeñas y el
jazz se han mezclado con
éxito gracias a sus raíces
comunes. El proceso se
inicia en Nueva Orleans,
donde se celebra (a la
izquierda), una velada
e1 �febrecida. En la
.fátograf'ía de la derecha,
lo 11wrq11esina del Savoy
/Jol/mo111, 1 111 .fomoso club
r/1' / lorle111.
50 LA E DAD D E ORO A F RO-CU B /\ NS 'i l

Hacia finales de los años treinta, hastiados de los


EL MATRIMONIO DE LA HABANA Y HARLEM

tópicos de la era swing, un grupo de músicos


afroamericanos, entre los que figuran Charlie Parker,
Dizzy Gillespie y Thelonious Monk, revoluciona
el jazz.
A su llegada a Nueva York en 1 93 7 , Mario Bauzá ha
tocado ya con numerosos jazzmen como Gillespie, con
los que comparte su sed de experimentación. En 1 940,
el cantante Machito (Frank Grillo) crea con su cuñado
una gran orquesta cubana en la que integra sus
innovaciones armónicas del be-bop, en plena gestación
en ese momento. Los tambores de origen africano,
erradicados por los blancos, desaparecen de Estados
Unidos desde los inicios de la esclavitud, de tal
manera que hasta mediados de los años treinta, los
baterías tienen que conformarse con marcar el ritmo.
Como contrapunto a esta carencia, las congas, bongos,
timbales, maracas, claves y güiros, aportan a la música
cubana una asombrosa exuberancia rítmica.
En La Habana, Bauzá ha tocado con grupos de
<lanzón y con la Orquesta Sinfónica Nacional.
Machito, más instintivo que su cuñado, ha cantado
con varias formaciones de son como la de María
Teresa Vera e Ignacio Piñeiro.
Junto a John Bartee, arreglista de Calloway, Bauzá
escribe las partituras para su nueva orquesta, los
Afro-Cubans. El grupo asombra al público con sus
percusiones desenfrenadas y sus arreglos inéditos.
Integrada en un principio por tres saxofones, dos latinas, en ocasiones con la colaboración
trompetas, piano, contrabajo, bongo y timbales, en los de las percusiones de los Afro-Cubans.
• Machito, nacido en

años siguientes se irá perfilando gracias a la En diciembre de 1 948, Charlie Parker


Tampa y criado en La

reproduce algunos títulos con Bauzá


Habana, dirigió una de

incorporación del percusionista de conga Carlos Vidal


las mejores orquestas

y la cantante Graciela, hermana de Machito. y Machito, y el encuentro con el


latinas desde 1940 hasta

Un día de 1 943, en el club La Conga, los músicos de genio del be-bop y de la mejor
su muerte en Londres,

los Afro-Cubans hacen una improvisación espontánea orquesta latina del momento
en 1 948. A rriba, en una

consagra el advenimiento del jazz


película rodada por la

sobre El botellero de Gilberto Valdés. Bauzá crea una


Paramount. A la derecha,

melodía sobre los solos y Machito le pone la letra. El latino. En el transcurso de los
tocando las maracas

tema, al que llaman Tanga, será el emblema del jazz años siguientes, algunos de
con el bongocero

latino. Cuatro años más tarde, Stan Kenton, l os más grandes nombres
puertorriqueño José
Mangua!.

deslumbrado ante los Afro-Cubans en un concierto, se


convierte a la música latina. g ra ba rá n con los
de la m ú s ica a m e ri cana

Fs te último graba The Peanut Vendar y otras piezas A fro-Cu ba n s .


52 LA EDAD DE ORO « B E- B O P» y ce ) N ( ;As

tocado en las ceremonias secretas de los Ñáñigos


Si Bauzá y Machito integran el jazz en la música (secta de origen nigeriano) y en los carnavales de La
DIZZY GILLESPIE y CHANO Pozo • En 1 94 1 , Dizzy

cubana,Dizzy Gillespie hace lo contrario y en ·1 946 Habana,y su virtuosismo y su imaginación


Gillespie (página de la
derecha) abandona la

incorpora,por primera vez en la historia del jazz, desbordante es motivo de admiración entre sus
orquesta de Cab

tambores «latinos» en una big barid americana. compañeros. En la big band de Gillespie ; los rÚmos
Calloway (abajo) después ·

A finales de los años treinta,este trompetista cubanos de Pozo chocan al principio con aquéllos,
de un altercado

apasionado de los ritmos cubanos ya ha tocado en el más breves,del jazz. No obstante, Chano transmite
legendario. El cantante le
acusa de haberle lanzado

Savoy Ballroom de Harlem y ha colaborado con el una albóndiga al


paulatinamente su saber a Dizzy y a sus músicos,y el
flautista Alberto Socarrás. Además,durante su trompetista le enseña al conguero a interpretar el
escenario; el trompetista

estancia en la casa de Cab Calloway,formaba parte del fraseado del jazz.


niega los hechos, saca

Dizzy enriquece su repertorio con Manteca, Tin Tin


un cuchillo y se lo clava

Deo y otras piezas con ritmos creados por Pozo a los


tambores,y los armoniza y orquesta con la
ayuda de arreglistas. Durante un concierto
en Camegie Hall,la big band de Gillespie
toca Cubana Be Cubana Bop, donde el solo
de conga y los cantos afrocubanos de
Pozo causan sensación. En diciembre
de 1 948, Gillespie se presenta en la
sala Pleyel. Atónitos,los músicos de
jazz franceses descubren a la vez el be­
bop y la magia de Pozo. La repercusión
de este magistral concierto perdurará
mucho tiempo en el recuerdo.

En los años cuarenta y cincuenta,el auge


MAMBO Y CHACHACHÁ

del jazz latino coincide con el gusto por el


mambo y el chachachá,igualmente de
origen cubano.
En 1 93 8 , en La Habana,el
violoncelista Orestes López
pequeño grupo que Bauzá fundó CAB CALLOW A Y compone un <lanzón muy
antes de crear los Afro-Cubans. rítmico,bautizado como
También ha sido el compositor y a nd his Cotton Club Mambo . Dos o tres años
arreglista de dos temas con cadencias más tarde,Arsenio
latinas: Pickin ' the Cabbage y Night in Tunisia . Q rC h eS t ra Rodríguez introduce en el
Por recomendación de Bauzá,Gillespie síncopas que anuncian
contrata al músico de conga Chano Pozo en su gran alOlvidando las d e l mambo. Sin embargo,
son

orquesta. Pozo,que toca los tambores con las manos rencores, Calloway el a u l é n l i co creador de este
cantante en el muslo.

y no con las baquetas,deja estupefactos a los )·é ncro m u s i c al es el


viejos
no

instmmentistas de jazz de entonces.


dejará de elogiar

En Cuba,Pozo,este genio de la percusión,ha P ra d o . P r;.1 d o se i n s l al a en


nunca el talento p i <. 1 1 1 i s l ;.1 c u ba n o Pé rez
de Gillespie.
LA EDAD DE ORO Y D I OS CRl�() 1 ·'. L M A M BO 55
con la calle Cincuenta y dos, se convierte en el
catalizador de estos nuevos bailes.
• / )e ¡wdres

El mambo, fluido y arrebatador y el chachachá


puenorric¡ueíiJJs y
educado en Harlem, Tito

inspiran asombrosas coreografías. Toda la ciudad pasa (Ernesto) Puente (abajo)

por allí para admirar a los bailarines profesionales:


introdujo los timbales en

The Mambo Aces, Louie Máquina, Killer Joe Piro y los


la música latina de

músicos de jazz de los clubes vecinos improvisan con


«Estados Unidos». Los
timbales (a la izquierda),

los Afro-Cubans o las orquestas de Tito Puente y de procedentes de los

Tito Rodríguez, con arreglos más sofisticados que los


timbales militares que los

de Prado.
soldados negros de Cuba
tocaban con un s w i ng
muy especial, están
provistos de un cowbe l l
(cencerro) que se utiliza
para el chachachá.

México, donde forma una gran orquesta latina en


1 95 0 . Incorpora instrumentos de jazz al <lanzón, como
• Silvana Mangana y

son los vientos dinámicos y una batería, y bautiza su


Brigitte Bardot (arriba,

nueva música con el nombre genérico de mambo. Tras


en Y Dios creó a la
mujer) bailaron juntas el

una breve colaboración con el cantante cubano Benny


mambo en la pantalla. /¡

Moré, se dedica exclusivamente a la música


Hacia mediados de los

instrumental aunque con breves riffs cantados por


m1.os cincuenta, muchos

miembros de la orquesta. Sus composiciones Qué rico


cantantes y músicos de
jazz americanos

el mambo, Mambo N. º 5 y Patricia , sencillas pero


interpretan mambos, y las

bailables, conquistan América latina y Estados Unidos


escuelas de baile enseíian

antes de triunfar en Europa.


que el chachachá no

Hacia 1 954, el chachachá, una suerte de mambo


admite improvisaciones.
Pese al éxito

más marcado con una interjección característica sobre internacional de Pérez

el tercer tiempo, hace furor en Estados Unidos.


Prado, los mambos más

A comienzos de los años cincuenta, en La Habana, el


estimulantes se oyen

violinista Enrique Jorrín, miembro de la charanga


en Nueva York.

Orquesta América, empieza a simplificar el ritmo del


mambo en sus composiciones y a moderar el tempo.
Un día de 1 952, cuando este grupo tocaba el <lanzón
Silver Star de Jorrín, los músicos, inspirados en el
rozamiento de los pies de los bailarines, se ponen a
can t ar: «Chachachá, chachachá es un baile original.» Tito Puente, timbalero (percusionista de timbales)
EL COMBATE ENTRE LOS TITO

Esta onomatopeya da lugar a la aparición de un pianista y vibrafonista, es uno de los compositores y


gé n e ro musical homónimo y el chachachá se extiende arreglistas más fecundos de la música latina. Grabó
po r · t odo el mundo. varios centenares de temas (entre ellos, Oye cómo
l ·'. 1 1 N u eva Yo rk , el Palladium Ballroom, gigantesco q u e con l ri b uyó a l éxito de Santana a comienzos de l os
va

": i l < J r i de ba il ' s i l uado en u n a esquina de Broadway años sc l c n l a ) .


A principios de los años cincuenta, el cantante Tito
Rodríguez, rival de Puente, crea un conjunto que
bautiza como Los Lobos del Mam�c:t Mientras Puente
triunfa con Abaniquito, Picadillo y Ran kan kan ,, ,
Rodríguez (,lfianza su nombre con Hay cráneo , L:a r,
' >?patria chica,
y Mambo mona. La competencia entre Puente y que a

Rodríguez aumenta a principios de los años sesenta y�


en vista del interés de Puente por el jazz, Rodríguez
graba también un disco de clásicos de jazz, con Zoot
Sims, Clark Terry y Bob Brookmayer. Para seguir
desafiando al timbalero, graba un álbum titulado Tit
N. º 1, donde proclama en una I:umba: « Haz saber a :
adversario que estoy aquL>}¡ ba. fama ·por la calidad él
su orquesta, su ,impecable dicción, su donaire sedu�tor
y sus boleros sensuales le llevan a triunfar en toda
América latina. Morirá de leucemia en 1 973 , después
de un último concierto en el Madison Square Garden,
acompañado por la formación de Machito.

EL CALIPSO ACUÑA EL CARNAVAL EN TRINIDAD


A busa ndo del sarcasmo y de la hipérbole, el calips 9 ,
v i ncu lado estrechamente al carnaval, comenta cori Lib.
l 1 1 1 1 1 1 o r corrosivo los acontecimientos políticos y ·
1 ./\ 1 ·� 1 )/\ D D E ORO HUN, EL LEÓN RUGIENTE Y EL CAN TAN T E N l � N C :/\ N ' l 'O \)

• Lord Beginner, A tilla y absorbe elementos d e j azz a s í como otras músicas • C11n .\'/l .fisin 1 di' g11/1111,
el jo ve n //1m:1• lir/11/111111·
the Hun y Tiger en 1 93 7 caribeñas y latinoamericanas.
(a l a izquierda); abajo, (abajo) es uno r/1' los
Hacia 1 950, Harry Belafonte (de ascendencia primeros antillww1·
Roaring Lion en 1 936,
cuatro famosos cantantes
jamaicana) populariza el calipso en Estados Unidos que se impone en
de calipso del momento. con Mathilda y Brow Skin Gal (canciones originales, Hollywood cantando
A Roaring Lion, que granadinas, en realidad) . El éxito de Belafonte desata en inglés.
pretende sorprender con
canciones sagaces, A tilla
le replicó en un calipso:
«Nada más empezar, ya
estás cantando sandeces.
[. .. ] Crees que haces
versos bien construidos.
pero sólo sacas a relucir
tu estupidez. »

gracias a la industria del petróleo, las bases navales


americanas y el turismo, y aparecen calipson ianos de
renombre como Wilmoth Houdini, The Inventor,
Lord Executor y Chieftain Walter Douglas.
Douglas prescinde del dialecto francés e introduce el
ballad calipso , con largas coplas cantadas en inglés.
Crea las « tiendas » -un simple armazón cubierto
con chapa ondulada, provisto de un escenario y los celos de algunos cantantes de
sil las-, y consigue atraerse a la clase media, que Trinidad. Sin embargo, una nueva
h abía sido hostil al calipso. A partir de entonces, el generación de calipsonianos como Lord
p ú b l ico asiste a los concursos de calipso, entre Melody y Lord Kitchener, apodado
pa rti cipantes que rivalizan en elocuencia. Las «joven brigada » , aparece en Port
o rq u estas que acompañan a los cantantes se of Spain y contribuye
'Om ponen generalmente de flauta, clarinete, cuatro también a la fama
( ru i l a rra de cuatro cuerdas de origen venezolano), internacional de este
1 u i l a 1 -ra, maracas, contrabajo y en ocasiones género musical . El
violín. calipso alcanza su
l 'o r a q u ella época, las autoridades d e Trinidad apogeo con una
T 1 1s1 1 r: rn los cal i psos , considerados « indecentes» orquestación más
o � 1 i l wnsivos, y Ati lla the Hun se rebela contra rica y una forma
1 ", l : 1 1 \ • ¡ m ·s i (> 1 1 a rb i l ra r ia . N o obstante, l a calidad más acabada.
1 1 1 · 1 . 1 1 i : 1 y 1 1 1 1 1 s i rn l d e l cal i pso mejora. Éste se A fi nales de los
.d 1 1 1 · .1 1 : 1 : 1 v l u : i l i d : i d i n l c rn a c ional (prueba de a ñ os c u a re n ta , l a
1• ! 1 1 1 , . .. 1 · 1 Ci 1 ·il Wr1 1 · i 1 1 S¡H1 i 1 1 d G rowl i ng Tiger) «joven b r · i gad a »
60 LA EDAD DE ORO CARNAVAL EN PO R T F S PA I N () 1

denuncia los problemas sociales, sin descuidar en • La Trinidad Ali Steel y otros marcan la melodía o los contrapuntos. • En el l'omovrJ/ dr• l'nrt

modo alguno los temas eróticos. Atilla the Hun , Perscussion Orchestra se El virtuosismo de las steel bands aumenta of Spain, los i11te¡.;ra11tr'.1'
presenta en público bajo de las compar.rns
elegido e n e l consejo legislativo e n 1 950, pasa revista la dirección del
paulatinamente, a medida que se perfecciona la
disfrazados,
a la actualidad en sus canciones y protesta contra lugarteniente N. Joseph técnica de fabricación de los pans. A partir de los años suntuosamente vestidos,
el racismo. Griffi th, de la policía de cincuenta, el carnaval gana adeptos y se convierte en pueden ser un auténtico
Santa Lucía (fotografía una de las principales atracciones turísticas de teatro ambulante con
de la izquierda). Los personajes tradicionales
pans, dispuestos aquí
Trinidad. Los ensayos y los festejos se inician con
o imaginarios. (Aquí
verticalmente, suelen varios meses de antelación y el calipso culmina en abajo vemos vestidos que
tocarse planos, o con enero, febrero y marzo. Los cantantes se presentan en emulan algunos
una inclinación más salas de conciertos y teatros (a los que se sigue personajes del Egipto
pronunciada. Las steel de los faraones. )
llamando « tiendas » ) y los jueces eligen a los finalistas.
bands actuales pueden
incluir hasta doscientos Por su parte, el público escoge su road march que, a
pans. Entre las más partir de ese momento, las steel bands tocarán por las
famosas destacan los calles de la capital. Con el paso de los años, estos
Amoco Renegades
grupos van a adquirir fama internacional, y a partir
y Panberi.
de 1 963, todos los años se organizará un concurso de
steel bands (Panorama) antes del carnaval. El calipso
y las steel bands llegarán a todas las islas anglófonas
del Caribe, así como a las comunidades de Trinidad
residentes en Inglaterra y Estados Unidos.

LAS «STEEL BANDS» SE INTEGRAN EN EL CARNAVAL


La expansión del calipso coincide con la aparición de
las steel bands en el carnaval de Trinidad. Durante la
colonización inglesa, las autoridades prohibieron en
varias ocasiones los tambores, así que los músicos
sustituyeron éstos por varillas de bambú percutidas
(tamboos bamboos) , botellas golpeadas con un
cuchillo, bidones de hierro colado o cubos de
basura. Después de la Segunda Guerra Mundial,
en Port of Spain, los percusionistas Ellie Manette,
Winston Spree Simon y Neville Jules, se entregan
a la búsqueda de sonidos nuevos para el carnaval
y recuperan los barriles usados (pans) en las
refinerías de petróleo. Los músicos consiguen
producir distintas notas martilleando estos pans . Las\ .
primeras steel bands aparecen en seguida, integradas
por pans (o steel drums) afinados de forma diferente,
de manera que uno proporciona las notas de bajo
A principios de los años sesenta aparece la b ossa n o va,

J
elegante y púdica. Esta creación de una elite cultivada
contrasta con el rock y el folk pusilánime del momento.
El reggae, proletario y militante, surge en la década
siguiente en Kingston, mientras la salsa, exuberante y
cabal, transmite su calor y su alegría de vivir.

CAPÍT U LO I V
LA EXPLOSIÓN
MUSICAL

• La música
sudamericana estalla en
los aiios sesenta. La
sa111ba v la bossa nova se
propagan por todo el
1111111do ( o lo derecha, un
i11s1n1111r'11t i.1·10 de reco-
rc o) 111ie111ms /Joh
Mor/e\' (u lo i�r¡11ierdo )
se co11 11il' r l < ' 1'11 ('/ sf111/Jolu
del r ·g ' : JL' .
LA EXPLOSIÓN MUSI CAL LA N UEVA OLA B R/\S I L E N /\ (¡/

E N BRASIL: LA «BOSSA NOVA» podría traducirse por <<nueva ola» o <<nuevo estilo » . E l • «C111110 11 111 10.1· 1 1 1 1 "·'

EMERGE EN LA ZONA SUR DE Río autor d e Chega de saudade y Desafinado -los primeros nií'íos, y11 1011i/1i1'11
adoraba la bossa 1 1o v a
A finales de los años grandes éxitos de la bossa nova- es el pianista, y a Tom Jobim. Q11erf11
cincuenta, el Gobierno de guitarrista y arreglista Antonio Carlos (Tom) Jobim. ser composi101; igual
Juscelino Kubitschek ;! Considerado como el compositor más completo de que Tom Jobim. No me
contribuye a la prosperidad 1 este género, Jobi m alcanza un verdadero estado de gustaban las cancio11.es
económica de Brasil . No
obstante, en Río se acentúan
1 gracia con unas canciones que revelan un equilibrio
melancólicas. [. . . ]
Quería tocar e l piano
como Tom Jobim, [. .. ]
las diferencias entre los barrios - · contar historias como
negros y los barrios blancos. Tom Jobim, así que fui
Las favelas siguen fieles a la a lpanema, a la casa
de Tom Jobim. A loysio de
ardiente samba de morro,
Oliveria me lo presentó
mientras la opulenta zona del y le toqué mi samba a la
sur de la ciudad -como guitarra. Tom miraba.
Copacabana, Ipanema y Al día siguiente, creó un
acorde para mi samba.
Leblon, o sea la de las
[. .. ] Cuando Tom entra
playas y las discotecas de con uno de sus acordes,
lujo- se decantan por el jazz. es como si alguien
La samba-cani;;iio , desabrida abriera una ventana. [. .. ]
Se fue a Nueva York,
desde la década anterior bajo
grabó con Sinatra (a la
el influjo de la variante izquierda) y todo el
americana y del bolero, deja mundo se extasió con él.
paso entonces a la bossa nova . Luego regresó porque
añoraba a sus viejos
Sobria y discreta, con su
compaíieros. »
canto susurrado (bautizada con el nombre canto • La bossa nova, una
Chico Buarque
[alado) , la bossa nova bebe en las fuentes de distintas música popular y
sofisticada obtiene una
ideas armónicas y de la sensibilidad que destila el jazz
calurosa acogida en las
cool de entonces. Se forman varios grupos vocales discotecas de Río y Sao
inspirados en los de Estados Unidos, y la joven Paulo (arriba, el cartel
cantante Nara Leao reúne a los músicos que serán las de un concierto). En
1 958, Vinícius de Moraes
estrellas de la bossa nova en su apartamento de la
y Tom Jobim escribieron
avenida Atlántica. letras para la cantante
En 1 958, Joao Gilberto, guitarrista desconocido, Elizete Carcloso. (A bc�jo, sutil entre el ritmo, la armonía, la melodía y las letras.
oriundo del estado de Bahía, graba en Río con la carátula del disco. ) Job im colaborará en muchas ocasiones con el poeta
cantante Elizete Cardoso. El ritmo de y leLrista Vinícius de Moraes ( « Cree en la poesía de la
acompañamiento (batida) , desfasado con respecto al m ú s ica -dice V. de Moraes de Jobim- y yo creo en
canto, desconcierta a algunos oyentes que tachan su la m ú s i ca de la poesía » ) . Juntos, los dos amigos
innovación de « guitarra tartamuda » . Algunos meses a l u m b ra rá n las sambas de L 'Orfeu da Conceii;;iio • En 1 959. la pelfculo
más tarde, Gilberto vuelve a tocar la misma batida en ( re u ¡ ' ra d as en la película 01feo Negro ) y otras obras de Marcel Can11 1.1". Orl' ' D
Negro (arriho) r' 1 fm¡){ )/n
otro disco (que incluye Chega de saudade, Outra vez, i n m o i 'l a l es .
el mito de Orfi'o o/
Desafinado y Bim bom ) y éste consagra el U p i ;;rn i s t a y cantante Johnny A l f (Alfredo José d a amhie11 f1' d1'i < '1 1 n11 1 1 '1 1 /
advenimiento de la bossa nova . En portugués, bossa ' i l v; 1 ) , � ' q u i e n l e e n tusiasma tanto George Shearing, d e Hío.
s ign i fi ca « astucia » o « manera de hacer » , y bossa nova N a l K i 1 1 ' ' o l , y C o l e Porter como Debussy o el be-bop ,
U\ l � X P LOS I Ó N MUS I CAL LAS CARTAS DE NOBLEZA DE LA «BOSSA NOVA» 69
• La mulata es la reina
proclama también la bossa nova . Él mismo se
del carnaval brasileíio,
acompaña al piano con acordes rebuscados y obtiene cubano y antillano. El
el éxito con Que vou dizer eu ( ¿ Qué voy a decir? ) , travesli (abajo) parodia
improvisada e n e l estudio, porque había olvidado l a a este vistoso personaje.

letra de u n a canción. Roberto Menescal, pianista


convertido en guitalTista, organiza la primera orques t a
de bossa nova y otros artistas apuestan p o r esta
música. Entre éstos destacan los guitalTistas
Baden Powell, Luis Bonfá y Toquinho, los
pianistas Joao Donato y Sergio Mendes y las
cantantes Silvia Teles y Maria Creuza.
En 1 962, Jobim se inspira en los andares de
una exhuberante joven para componer Carota de
Ipanema (The Girl from Ipanema) , un éxito mundial
de la bossa nova . El 2 1 de noviembre de aquel año, se
organiza un concierto de bossa n ova en Carnegie Hall
que se presenta como el <<nuevo jazz brasileño » .
Encabezan e l cartel Joao Gilberto, e l guitalTista Bola
Sete (Dj alma Andrade), Lu i s Bonfá y el pianista
argentino Lalo Schifrin. La música impresiona
acompaíiado por un
profundamente a músicos de j azz
bi rimbau (arco musical estadounidenses como Miles Davis, Dizzy
de origen angole1io, Gillespie y Stan Getz, quien grabará Jazz Samba
cuyos rilmos reproduce
(con Charlie Byrd) y The Girl from Ipanema (con
a veces en su
instrumento), se inspira
la cantante Astrud Gilberto, mujer de Joao)
en la música de Bahía. -dos de sus hits-parades-, y Gillespie incluirá
Junto a Vinícius de numerosos temas brasileños en su repertorio.
Moraes, es uno de los
Sergio Mendes, el organista Walter
autores de espléndidas
Wanderley y el guitarrista Laurindo Almeida
afro-sambas.
triunfan también en Estados Unidos . En
California, Mendes y el percusionista
• E/is Regina (abqjo), Chico Batera improvisan con Barney
oriunda del estado de Rio
Kessel y Bud Shank; Joao Donato
inmortalizó varias obras colabora con instrumentistas de j azz
maestras de la música y músicos cubanos como Mongo
popular brasileíia con su Santamaría, y la bossa n o va se
magn (fica voz. y su
convierte en part e i n teg ra n ! ' d e l 1 ·c pc 1 ·1 o r i o
temperamento pasional.
Murió a los treinta y siete
d e jazz.
aFíos de una sobredosis En B ras i l , l a hosso 1 1 0 1 10 � 1 1 1 ·� 1 ' i g u ¡_ \ 1 1 1 1 · 1 1 1 '
de cocaína. al can t a n t e , ' t 1 i l <. 1 1 T i s l a y cu 1 1 1 pus i l u 1 · Ed u Lo l o
( a u l o r d ' Lts cs p l é 1 1 d i d a s Bora 1 1da y Co 1 1 t u t riste )
y a la c x p 1 ·c s i va F l i s Regi na, u n a ele l as voces más
be l l a s d ' l a 1 1 1 C1 s i c a brasileña.
74 LA EXPLOSIÓN MUSI CAL LOS «SEVENTIES» DE BRAS I L 75
DESPUÉS DE LA «BOSSA NOVA» fusión acertada a l mezclar el j azz y l o s ritmos • Después de la bossa
nova, canla111es co11·1.o
Hacia mediados de los años sesenta, la bossa nova tradicionales de Brasil.
Chico Buarque y Maria
empieza a marchitarse y aparecen diversas tendencias. Bethánia (abajo), o
Martinho da Vila, Wilson Simonal, Chico Buarque DEL «MENTO» A LOS «SOUND SYSTEMS» incluso Djavan. y Joüo
y Benito de Paula inyectan sangre nueva a la En los años cuarenta, el mento emerge en Jamaica a Bosco, se convierten en
samba-can(;éio; en la tradición de la canción protesta partir de una amal gama de ritmos tradicionales, entre estrellas de la «MPB»
(música popular
latinoamericana, Geraldo Vandré propone canciones ellos los cantos de trabajo. Anecdótico y cercano al
brasileña).
comprometidas, los cantantes bahianos Gilberto Gil calipso, esta música, esencialmente rural, se tocaba
y Caetano Veloso abandonan los ritmos cariocas y • «Soy un niño y un con una guitarra e instrumentos fortuitos
fundan un movimiento con influencias del rock'n roll, sociólogo, psicólogo, (sonajeros, raspadores y botellas golpeadas con un
matemático, místico,
denominado tropicalista , con el que se identifican cuchillo) . A finales de la década aparecen los
bailarín, dentista,
especialmente las cantantes Maria Bethania (hermana poeta, etc. » primeros discos de mento , interpretados por
de Veloso) y Gal Costa. Gil triunfa con Louva9ao, Caetano Veloso grupos con influencias de las orquestas
Domingo no parque y Aquele Abra90. En 1 968, el cubanas además del calipso, que
presidente Arthur da Costa e Silva gobierna por la ley incorpora vientos , piano, bajo y
del terror y censura todos los medios de • Mi/ton Nascimento batería. Después de la Segunda
comunicación. Las fuerzas del orden anulan algunos (abajo, a la izquierda) Guerra Mundial, las grandes
tocó muchas veces con el
conciertos, y Gilberto Gil se exilia algunos años en orquestas de baile se presentan en los
pianista Wagner Tiso,
Londres. amigo de la ü�fáncia. En clubes y los hoteles de la isla que
A principios de los años setenta, el cantante 1 966, Elis Regina graba acogen de buen grado s t e género
y guitarrista Mil ton Nascimento se vuelve hacia la la sublime Can<;:ao do Sal musical.
de Milton. Pese a ello, el
música de Minas Gerais, su patria chica. Dotado de una A comienzos de los a ñ os c i ncuenta,
cantante no triunfará
espléndida voz en todo su registro, hasta los años setenta. el mento es des t ro n a d o por e l rhythm 'n
compone, en colaboración con A rriba, en la carátula blues americano. Los b<.1 i les ( l lamados
su letrista Fernando Brant, de u1io de sus discos, blue dances) e o r JéH l i 1.a n e n distintas
Caerano Ve/oso luce una
obras poéticas con armonías regiones de la i s l <.1 y en l os guetos de
indumentaria muy
inéditas que versionarán parecida a la de las Kingston. En sus so1 1 1 1d systems
músicos de j azz como Sarah estrellas estadounidenses (platinas p ortá t i l ·s -on i n mensos
Vaughan, Stanley Turrentine del momento. bafles que a ve , ·s se t ra nsportan en
y Wayne Shorter. A partir de los camiones), 1 os d 'l'jays (disc jockeys)
años ochenta se impondrán Clement Coxso 1 1 ' Dod d , Duke Reíd
cantantes más convencionales. (The Ti-ajan) o Ki n r Tubby pinchan
U n grupo de instrumentistas los éxit os a rn c r i 'a nos más
formado por el saxofonista calientes .
Paulo Moura, el guitarrista Con el a u -,- ' d e l rock'n roll,
Egberto Gismonti, el música q u e desp re cian, los deejays
acordeonista Sivuca, jama i c a nos d ej a n de importar
el multiinstrumentista discos de Es t ados Unidos.
Hermeto En K i n ·s t o n se abren varios
Pascoal y el es tud i os p<.1 ra promocionar a
percusionista ar t i s t as l oc a l es y graban los
Airto Moreira a n t i g u os i n t é rpretes de
crean una men t o , e n t re otros.
76 LA EXPLOSIÓN M USICAL D EL «S KA» AL « REGGAE» 77
Al principio, éstos imitan a los cantantes de rhythm 'n• Un apuesto Bob • Jimmy Clifl (James
blues , y posteriormente, hacia mediados de los años Marley antes de Chambers), nacido
convertirse al en 1 948, debutó com.o
sesenta, surge un estilo nuevo que marca los backbeats rastafarismo. Ya miembro cantante de ska antes de
(tiempos débiles) , que recibe el nombre de ska . En de los Wailers, aparece evolucionar hacia el
general, los grandes nombres del ska proceden de los aquí vestido a la moda reggae (fotos de la
rock'n rol l del momento,
guetos de Kingston como los Skatalites, uno de los izquierda e inferior).
como otros muchos En África y en América
principales grupos del momento, originarios de West intérpretes de ska del Sur, disfruta de un
Kingston. No obstante, también hay excelen tes igualmente fascinados prestigio similar al de
instrumentistas profesionales como los trombonistas por artistas Bob Marley, con éxitos
Don Drummond y Rico Rodríguez, el saxofonista estadounidenses como como Wonderful World,
The Platters o Fats Beautiful People, Wild
Roland Alphonso y el pianista Jack Mittoo, miembros de
Domino. World o Many R i vers
los Skatalites. Prince Buster (Madness) o Junior Smith to Cross.
(Cool Down Your Temper) protestan en sus canciones
contra la desigualdad social y la degradación de las
ciudades, abigarradas por el éxodo rural y aterrorizadas
por los rude boys Uóvenes gángsters armados hasta los
dientes) . Por primera vez en la historia de la música
jamaicana, los pobres y los desposeídos toman la
palabra.
El rock steady, más lento y limpio, con la
batería, la guitarra y el bajo marcados, sucede al
ska . Este estilo debe su nombre a una canción
de Alton Ellis titulada Get steady rock steady .
Con una clara influencia d e The Cables o
Desmond Dekker y su orquesta The Aces, éste
evoca, como el ska, la figura del rude hoy
y los problemas de los guetos, exacerbados
por la llegada de nuevas masas de
campesinos analfabetos.

EL «REGGAE » , VECTOR DEL « RASTAFARISMO»


El reggae aparece hacia finales de los años jamaica n a , s i guen reivindicando sus
sesenta con las canciones Nanny Goat, y más lazos popu lares. Denuncian con
tarde Do the Reggae de Toots y The Maytals. El vehem e n c i a la pobreza, la injusticia y
ritmo se vuelve aún más lento , los tiempos la viole n c i a de los suburbios y propalan
débiles son cada vez más marcados y la ideología rasta.
predomina el baj o . A comienzos de los años Introd u c i d o en Jamaica a comienzos
setenta, el mundo descubre el reggae y al de siglo por el ideólogo Marcus
cantante Jimmy Cliff gracias a la película The Garvey, el rastafarismo preconiza
Harder They Come, pero Bob Marley es sin el regreso a Etiopía -tierra
duda quien se convierte en el máximo bíb l i ca y c u n a mítica de las
exponente de esta música. Los cantantes, que civi l i zac i o n es africanas-,
se expresan en l a lengua vernácula el rec h a zo de los valores /
78 LA EXPLOSIÓN MUSICAL « RU DE BOYS » Y « RASTAS» DE K I N G STO N

decadentes de Occidente (Babylon) y, de forma más


espectacular, la adopción del pelo largo (dreadlocks)
y el consumo de ganja (marihuana). Esta ideología, que
realza los valores de la población negra, seduce a los
rude boys y a numerosos músicos de reggae como
Desmond Dekker, Bunny Wailer, Burning Spear,
Gregory Isaacs, Pablo Moses y Ras Michael.
El percusionista rasta Count Ossie introduce en el
reggae los tambores del burru (antiguo cul to
afrojamaicano convertido en música profana de los
guetos) y el repeater, tambor solista del nyabinghi
(facción militante de los rastas) . Los ritmos nyabinghi
serán extrapolados también a otros instrumentos. El
reggae adopta también los ritmos (riddims) de las
ceremonias rastas y de las iglesias revivalist
(protestantes que creen en el Espíritu Santo y emplean
tambores) .
El carismático Bob Marley, convertido al
rastafarismo en 1 966, predica el pacifismo y la igualdad
social y racial, fascinando con su mensaje
apostólico a la juventud de distintos
países . Hijo de un inglés -que
le abandona después de su
nacimiento- y de una
jamaicana, crece en Trench
Town, un gueto de
Kingston. En 1 960, a los
quince años, forma
un trío con Bunny
Livingston
(Bunny Wailer)
y Peter Me Intosh Peter Tosh (Peter
• contribuye sustancialmente a su popularidad. • Burning Spelll; alias

(Tosh) . En 1 963, lntosh), apasionado


Me Después del éxito de su primer LP, Catch a Fire, con Winston Rodney, es uno
rasta, fue el miembro de de los intérpretes más
el grupo, con el sofisticados arreglos ( 1 973), Marley inicia una
los Wailers más admirados del reggae
nombre de fulgurante carrera internacional y empalma un éxito roots (o ras ta), por
vehemente (foto de la
Wailing Wailers, izquierda). Popularizó con otro: Burning, Natty Dread, Rastaman Vibrations, canciones como Marcus
acompañado la .figura del rude boy Exodus, Uprising, I Shot The Sheriff (grabado por Eric Garvey o Slavery Days.

por los
en el reggae. Fue Clapton ) . Los grupos se multiplican, a menudo
encarcelado durante
Skatalites, acompañados en sus grabaciones por el tándem Robbie
un breve período por
graba Simmer posesión de ganja, y Shakespeare (bajo) y Sly Dunbar (batería) y el reggae
Down -una exhortación en 1 987 murió asesinado se d ive rs i fi c a en un amplio abanico, desde el roots
a la calma ante la violencia
en su casa de Kingston (o rasta ) más ortodoxo hasta un estilo romántico,
durante un atraco.
de los guetos- que próx i m o a l a soul m usic.
os rastas veneraron
siempre Eliopía y a Hailé
Selassié, coronado en
1 930 con el 1í1ulo del
Negus Ras Tafari (Negus
rey de reyes). En 1976,
Marley se presenlaba en
concierto bajo una
gigantesca efigie del
Negus.
82 LA EXPLOSIÓN MUSI CAL NUEVA YORK: BARRIO LATINO 83
• El Cheetah (a la l o s creadores d e l boogaloo y e l shing a ling acuden • Celia Cruz, bautizada
izquierda), situado en la como «la guarachera de
a Nueva York como abejas a l a miel. Gracias
esquina de la calle 52 y Cuba» en los años
la Octava avenida, debe a esta amalgama de son cubano y rhythm 'n blues, cincuenta, ya era famosa
parte de su éxito al éstos entusiasman a l os j óvenes puertorriqueños en La Habana antes de
promotor Ralph Mercado, con sus letras en spanglish , un argot que aúna trasladarse a Estados
hoy director de una de Unidos. Durante los años
el inglés y el español y que reflej a la realidad de los
las agencias de setenta consiguió
management y compaiiía
barrios. culminar con gran éxito
discográfica más Hacia finales de los años sesenta, las minorías su reconversión a la
florecientes de la salsa; y étnicas estadounidenses vuelven a cuestionar su salsa.
al deejay /zzy Sanabria, marginalidad y reivindican sus derechos de plena
grafista de profesión que
ilustró las carátulas de
ciudadanía. Esta toma de conciencia política y
los discos de los Alegre cultural lleva a los latinos neoyorquinos a volverse
A ll Star antes de fundar hacia un estilo de vida más auténtico y más próximo
la revista Latín New a sus raíces. Conocida al poco tiempo con el nombre
York.
de salsa, esta nueva música exalta el amor, la
musicalidad de la raza negra y la belleza de la patria
( Cuba o Puerto Rico) y expresa la dureza de la
calle, infestada de droga y gángsters.
La salsa hace su debut en el hotel
Saint-George de Brooklyn, donde los
Lebrón Brothers, de origen puertorriqueño,
entusiasman al público. El Cheetah, club
EN NUEVA YORK: DEL «BOOGALOO» A LA SALSA • Ray Barretto (abajo, de Manhattan, sustituye al Saint- George
En 1 960, Fidel Castro toma el poder en La Habana a la izquierda, el artista como punto de encuentro de los salseros
y Estados U nidos rompe sus relaciones diplomáticas en plena acción) debutó neoyorquinos, y con el éxito de esta música,
en las jam-sessíons de
con Cuba. Cuando Castro anuncia abiertamente que los latinos de Nueva York recobran los
Harlem con be-boppers.
simpatiza con el marxismo, numerosos músicos También acompaiió a los valores de identidad y su orgullo. E n los
cubanos emigran a Estados Unidos y popularizan las músicos latinos y de jazz. comienzos de los años sesenta, Ray Barretto,
charangas (orquestas de flauta y violines) . A pesar Pasó de la charanga al Willie Colón, Eddie y Charlie Palmieri, de
latín soul y luego a la
de este nuevo influjo, los músicos origen puertorriqueño, y el flautista Johnny
salsa, y hoy dirige un
latinos de Nueva York, excelente grupo de jazz Pacheco, nacido en Santo Domingo, son los
a partir de ahora latino, en constante principales exponentes de esta música.
privados de sus evolución. Machito, Tito Puente y la cantante cubana Celia
contactos cubanos, Cruz se unen a la corriente de la salsa y
vuelven la mirada aparecen nuevas estrellas como los cantantes
hacia los ritmos Pete El Conde Rodríguez, Cheo Feliciano,
puertorriqueños Justo Betancourt, Héctor Lavóe e Ismael
y afroamericanos, Miranda, capaces de improvisar las letras en
en busca de público, siguiendo la tradición del son cubano.
inspiración. Rubén Blades, nacido en Panamá, se asocia
E n la euforia con Wi l l i e Colón y, más tarde, a finales de los
de los años años setenta, prosigue su carrera en solitario.
sesenta, Sus canciones sofisticadas (Juan Pachanga,
84 LA EXPLOSIÓN MUS ICAL EL I M PETUOSO MERENGUE 85
Plástico, Buscando América) , sacan la salsa del barrio Santa Cecilia, dirigida por Rafael Alberti (autor de • En las campañas de la
neoyorquino, extendiendo su temática por toda temas inmortales como El sancocho prieto y República Dominicana,
el merengue ha
América latina. Compadre Pedro Juan ) . conservado su carácter
Los grupos de salsa proliferan en Nueva York Durante los años setenta, e l cantante y bailarín africano, a pesar de la
y Puerto Rico así como en Venezuela y Colombia. Johnny Ventura y el trompetista Wilfrido Vargas presencia del acordeón,
D esde l os años cincuenta, en Puerto Rico -marcado imponen un merengue desenfrenado, muy importado de Alemania
en el siglo XIX. En Áfi-ica
mucho tiempo por la variante americana a causa humorístico y pícaro, con brillantes coreografías.
oriental se pueden
del turismo-, los cantantes Rafael Cortijo e Ismael Inspirándose en géneros musicales como el zouk, el encontrar tambores
Rivera ensal zan l a música negra de la isla y dan h ighlife ghanés, e l rap o el soukous zaireño, Vargas parecidos a la tambora
a conocer la salsa. Los grupos locales, como los inyecta sangre nueva al merengue. Aparecen grupos (que se golpea con la
mano derecha con una
de Willie Rosari o, Bobby Valentín o Roberto Roena, • Ismael Rivera (arriba) femeninos ( Millie y sus vecinos, Las chicas del can)
es una de las mejores baqueta), como puede
La Sonora Ponceña (dirigida por e l gran pianista y en los años ochenta, el cantante Juan Luis Guerra verse en el cuadro
voces de la música
Papo Lucca) o el Gran Combo, rivalizan con los afropuertorriquei'ía. presenta un merengue con letras y arreglos inferior.
de Nueva York. La influencia de l a salsa en sofisticados (Bachata rosa) .
Venezuela, Colombia y en otros países de América
latina continental pone de rel i eve que la salsa no
es únicamente una música de gueto sino una forma
de expresión reconocida, una suerte de lingua fi'anca
que une a todo el universo afrolatino.

EL MERENGUE SALE A RELUCIR EN LA SALSA


A finales de l os años setenta, la salsa empieza
a impregnarse del éxito de lo comercial, aunque
el merengue dominicano, impetuoso y fácil de bailar,
le aporta un nuevo vigor. La importante colonia de
dominicanos afincada en la Gran Manzana en el
curso de la década lo baila desde el pri ncipio en los
clubes de Little Santo Domingo, barrio situado al
norte de Manhattan . El merengue se introduce en
l a salsa, ganándose así a toda l a comunidad latina
de Nueva York y de Puerto Rico, donde, tras un
huracán devastador, numerosos dominicanos buscan
refugio a principios de los años ochenta.
A mediados del siglo XIX, en Santo Domi ngo, el
merengue destrona a la tumba, de origen europeo,
escandalizando a las mentes bien pensantes por sus
letras descaradas, sus parejas estrechamente
enlazadas y sus sugestivas contorsiones. La región de
Cibao se convierte en el bastión del merengue ripiao ,
el merengue rural que se acompaña con acordeón,
tambora ( tambor bimembranófono) y güira (rascador
metálico ) . El dictador Radamés Truj illo ( 1 930- 1 96 1 )
respalda a ciertas orquestas de merengue como la
86 87

D esde hace unos quince años, los sintetizadores y


otros instrumentos electrónicos invaden América del
Sur. Este despliegue de high tech da lugar, por un
efecto bumerán, a un retorno a las raíces africanas,
amerindias o europeas. Se dibuja también un
ecumenismo musical que revela un deseo de
entendimiento entre los pueblos de las Américas y
una fraternidad que derriba las barreras artificiales
erigidas por la colonización.

CAPÍT U LO V
« FUNK », « TEC N O » Y EL RETO RNO
A LAS RAÍCES

• Dos nombres de
primera. fila de la canción
antillana: a la izquierda,
el tórrido Francky
Vincent -considerado
como el crooner del
zouk- en un baile
pegado-apretado, según
la expresión criolla;
a la derecha, la sensual
Tanya St Val.
88 «FUN K», «TECNO» Y E L RETORNO A LAS RAÍCES MAZURCA CRIOLLA 89
Y AHORA TODOS A «ZOUKEAR» • Kassav ' (abajo), líder profesionalidad de algunas producciones antillanas • Las cantantes de Zouk
El zauk, creado por el grupo Kassav', se considera indiscutible del zouk, fue del momento. Orquestada con sintetizadores y Machine (abajo), grupo
fundado en 1 979. Se formado en Guadalupe
hoy como el nuevo emblema de la música de las vientos, conserva la cadencia de base del biguine , al
presenta en el mundo en 1 986, se inspiran en
Antillas francesas. entero acompañado de tiempo que incluye los riffs de salsa y de funk, además el soul y defienden la
Durante los años setenta, la Martinica la carismática vocalista de elementos propios de los ritmos tradicionales de la liberación de la mujer
y la Guadalupe absorben el campas haitiano, Jocelyne Béroard. Martinica y de Guadalupe (bélé y gwoka) . antillana. Miembro del
trío desde el principio,
la cadence-lypso , híbrido creado por Gordon E n l a onda expansiva d e Kassav', otros artistas
Joelle Ursull continúa
Henderson en la isla Dominica, así como la salsa en antillanos se imponen también tanto en las islas como hoy con su carrera
su variedad europea y americana. No obstante, en la metrópolis : el grupo Zouk Machine, los de solista.
• «Hay que escuchar a
algunos músicos antillanos aspiran a formas de cantantes Edith Lefel, Ralph Thamar,
Kassav ' tal como se
expresión más personales. escucha el crisol que Tanya St Val, Eric Virgal, Francky
Hacia 1 978, el pianista de la Martinica Marius abarca todas las músicas Vincent y Joelle Ursull.

EL « DUB» Y EL « RAP» LATINO


En 1 98 1 , la muerte de Bob Marley eclipsa
la buena estrella del reggae para dejar
paso al dub y sus variantes, el dancehall y
el ragga . En los años cincuenta, los deejays
j amaicanos, inspirándose en los
vehementes serm o nes de las iglesias
evangelistas, empiezan a hablar con
una base de ri t m o (toaster) en la
cara B -instru m ental y
remezclada- de algunos éxitos para
estimular el ímpetu de los bailarines.
Después de Count Machouki y Sir Lord
Comic, toasters de finales de los años
cincuenta y principios de los años sesenta,
llegan Big Youth y 1 Roy, y más tarde
Yellowman, que se inclinan por letras
obscenas y provocadoras. Paralelamente,
se desarrolla el concepto de «versión»
Cultier introduce la palabra zouk en uno de sus del mundo. [. .. ] De ahí (interpretación y recreación) de un éxito .
que tantos artistas
discos. Unos años más tarde, Kassav' -fundado en Este estilo de rap , denominado dub, se
en el mundo y tantas
París por tres músicos de estudio: Jacob Desvarieux, poblaciones puedan introduce en Inglaterra, donde
Georges Décimus y Pierre-Édouard Décimus­ identificarse con la frase da origen (gracias sobre todo a Linton
implanta el zauk como género musical . El vocablo musical de Kassav ': Kwesi Johnson, Benjamín Zephaniah
proviene de mazauk ( « mazurca» en criollo) , y por esta polirritmia alegre, y Mutabaruka) a la poesía recitada
esta métrica encantada
derivación designa también un baile popular. En las por una contramétrica
con elementos rítmicos (poetry dub) .
Antillas, zouker se ha convertido en sinónimo de desmesurada que huele En 1 985, Under Me Slenf Teng de
« bailar» . a buena comida Wayne Smith inaugura la era del
Kassav' presenta una música avanzada desde el tropical. » reggae digital, compuesto con
Patrick Chamoiseau
punto de vista técnico, lo que contrasta con la escasa sintetizadores o utilizando la técnica
90 « FUNK», «TECNO» Y EL RETORNO A LAS RAÍCES RAPEROS TROPICALES 91
del sampling (recuperación de fragmentos de otras • Shabba Ranks (abajo), • El cantante y
locuaz y megalómano, percusionista Carlinhos
músicas). El raggamuffin o ragga (de la palabra
aficionado a los temas Brown (a la izquierda),
raggamuffin , « harapiento » ) , rap sobre ritmos de reggae sabrosos, se ha impuesto nuevo ídolo de la música
y su variante el dancehall, con letras también muy en el plano internacional bahiana, ha grabado
lascivas, se impregnan del h ip hop estadounidense. El como el rey del ragga con músicos de jazz
dancehall toma prestados ciertos ritmos (fusión entre el reggae estadounidenses.
digital y el rap). «Nací Combina el rap y los
de los cultos afroj amaicanos. Shabba ragga y no me he criado ritmos afoxés.
Ranks, Cocoa Tea , Red Dragon o para ser un raggamuffin,
Tiger imponen sus textos porque he nacido en un
provocadores, declamados a país con un ambiente
social muy duro, en
ráfagas, y sus poses de bad boys .
la injusticia. »
El rap latino, pariente del dub,
invade a s í toda América latina • Los Van Van (abajo),
y el Caribe. Los raperos pioneros del songo, son
puertorriqueños en Estados Unidos, una de las charangas
actuales más cotizadas de
los colombianos en Cartagena, los
Cuba. Fundada por el
brasileños en Río, Bahía (donde el bajista Juan Formell,
percusionista y cantante obtiene un gran éxito en
Carlinhos Brown conjuga el rap y los años setenta, con
Aquí se enciende la
los ritmos bahianos) o Sao Paulo,
candela, Pastorita tiene
apuestan con vehemencia por el
rap con letras en español,
spanglish o portugués. El dúo
puertorriqueño Latín Empire,
oriundo del Bronx, evoca las
peripecias de la vida cotidiana
en Así es la vida . En Haití y en las
Antillas francesas, los deejays expresan
sus propias preocupaciones rapeando en
criollo. En Cuba aparecen igualmente
varios grupos de rap como Amenaza,
entre otros, y a partir de entonces en La
Habana se organiza un festival de rap .

« SOCA » , «SONGO » , «BACHATA » :


UNA CONSTANTE RENOVACIÓN
En los años ochenta, en Trinidad, bajo la
influencia de la música disco, el calipso se
transforma en soca , música de baile
desenfadada y comercial con letras
relativamente insulsas, y a menudo
desprovista de humor y en absoluto
contestataria. En los años setenta, en Cuba,
92 «FUNK», «TECNO» Y EL RETORNO A LAS RAÍCES « RAP LATINO» Y «SAMBA-REG GAE» 93
• Desde .finales de los Changuito, el extraordinario percusionista del grupo • Gilberto Gil (abajo),
wfos setenta (carátulas nacido en 1 942 en Bahía,
Los Van Van, se inspira en la música yoruba para crear
a la izquierda), han ha cambiado el curso
un ritmo al que bautiza con el nombre de songo. Los de la música pop
surgido numerosos
raperos latinos en cubanos refugiados en Estados Unidos en 1 980 lo brasileiia al .fundar el
Es1ados Unidos. En propagan por este país y también en Cuba; el songo, movimiento tropicalista.
Nueva York destaca más suelto y nervioso que la salsa puertorriqueña o Sus comienzos estuvieron
sobre todo el dúo marcados por la
neoyorquina, se convierte en el ritmo predilecto de los influencia de Luis
puertorriqueiio Latin
Empire; en la Costa grupos cubanos actuales (NG La Banda, D an Dén, Gonzaga y Jooo Gilberto.
Oeste, los raperos David Calzado) . Exiliado algún tiempo
chicanos (de origen Hoy, l a bachata s e impone e n l a República en Londres a principios
mexicano) Kid Frost de los aíios setenta por
Dominicana con intérpretes como Leonardo Paniagua
(a la izquiera, arriba) sus letras consideradas
y Mellow Man Ace. y Luis Segura. Este género de canción romántica, subversivas, triunfa
Los raperos se inclinan aunque a menudo machista y abiertamente sexual, en Brasil en 1 9 76 con
a expresarse en spanglish surge a principios de los años sesenta en los suburbios Refazenda y desde
(argot que mezcla el entonces siempre ha
de la capital. En los años noventa, Juan Luis Guerra
espaiiol y el inglés), ocupado un lugar de
y en lengua barrioba¡era pone de moda esta música, durante mucho tiempo honor en el escenario
mexicana, en la Costa considerada marginal y propia del populacho, con el musical.
Oesre. tema Bachata rosa. En la actualidad, la tecno-bachata,
orquestada por sintetizadores, está en plena evolución.
Frente al fenómeno comercial por el que atraviesa la
música latina y caribeña y la invasión de la tecnología,
numerosos músicos se repliegan en las raíces
tradicionales.
En Bahía, Gilberto Gil se entusiasma con el reggae
que, a sus ojos, simboliza la unidad del pueblo negro y
la vitalidad de la cultura africana, y en Río de Janeiro
aparece la samba-reggae . También en Bahía, otros
músicos reconstituyen grupos de chóro (género de
origen portugués surgido en Río a finales del siglo XIX
y luego difundido por el noroeste). Los afoxés y los
• 1 Roy (carátula de
arriba) es con King blocas afro (grupos carnavalescos que se inspiran en
Tubby, U Roy o Dillinger, los ritmos del candomblé) experimentan un nuevo
uno de /os .famosos auge. En 1 975 se reorganiza el afoxé Filhos
deejays jamaicanos que
de Gandi y, a partir de entonces,
experimentaron con el
dub, género de rap sobre
grupos de inspiración
ritmos de reggae, que ha africana (Ilé Ayé , Ara,
il1fluido en gran medida Ketu, Olodum ) pasean
en el movimiento de h ip todo su esplendor por
hop americano.
el carnaval. Luis
Gonzaga y Geraldo
ON A S U N DAY AFTERNOON Azevedo han devuelto
F EATUR!NG SHIRO A.N O INTRO BY 1 !U<.)GY SOY

el honor al forro, música


campesina del Sertao, que
94 « FUNK», «TECNO» Y EL RETORNO A LAS RAÍCES RAÍCES 95

se acompaña con una sanfona (acordeón), triángulo y • Las descargas


(improvisaciones) de
zabumba (cajón de resonancia). El xote , procedente del percusión son
escocés (scottische) , también se recupera del olvido. fundamentales en la
En Haití, tras la caída de los Duvalier, el música cubana. La
movimiento rasin (de « raíz » ) adquiere un auge conga, utilizada en la
rumba brava y en la
considerable con grupos como Boukrnan Ekspeyrans
música popular, proviene
(de Boukman, nombre del esclavo rebelde que a del Congo, como su
finales del siglo XVIII dirigió las insurrecciones contra nombre indica.
los franceses ) . Interpretando ritmos vudús con Antiguamente, los
músicos a.finaban sus
sintetizadores, Boukman Ekspeyrans ha vuelto a dar
tambores disponiendo
carta de nobleza al criollo, durante mucho tiempo la piel cerca de una
menospreciado por l a clase media . fuente de calor (por
En l o s años setenta, la isla d e Guadalupe redescubre ejemplo una vela).
El conguero cubano
el gwoka (gros ka , de ka , « cuarto » , nombre de un • En la América negra,
Patato Valdés ha
tambor hecho con un ban-il) , antigua música de los el tambor actúa de
generalizado el uso del
mensajero entre los
esclavos y los negros, relegada en tiempos al rango de sistema de tensión con la
hombres y los dioses.
mizik a vié Neg, y la Martinica el bélé, emparentado A rriba, un tambor mina,
ayuda de claves
con el gwoka. Por su parte, el percusionista Dédé Saint metálicas. En la rumba
de la región de
brava, que se toca con un
Prix y Max Cilla, instrumentista de flauta tradicional Barlovento, en la costa
conjunto de tres congas
de Venezuela. A bajo,
de bambú, vuelven a hacer chouval bwa , un género de d{ferentes tamaíios,
tamborileros de la
musical que se tocaba en los antiguos tiovivos. cofradía de San Benito.
uno de los tambores
En Cuba y Nueva York, los ritmos tradicionales de marca el ritmo de base,
el segundo el contrapunto
origen africano gozan de un éxito renovado, mientras
rítmico y el qui nto (conga
en Puerto Rico, los aguda) improvisa.
músicos jóvenes combinan
antiguos géneros como la
bomba y la plena con el
jazz. En Buenos Aires y
Montevideo, cantantes e
instrumentistas interpretan
otra vez el candombe y la
milonga. En Venezuela,
algunos grupos como
Guaco tocan los ritmos de instrumentistas y cantantes adoptan, modernizándolos
las cofradías negras de la a veces, la marinera, la cueca, y otros ritmos mestizos
costa. En la costa de antaño.
colombiana del Pacífico, Las músicas latinoamericanas extraen su vitalidad
algunas orquestas dotan al de esta oscilación continua entre la tradición y la
cunulao (género modernidad. Siempre vinculadas a las antiguas y
tradicional sustanciales con-ientes, y acogiendo ideas nuevas a la
afrocolombiano) de un vez, éstas son una fuente fecunda de la que el mundo
registro comercial, actual, en ocasiones hastiado de la variante
mientras en Perú, anglosajona, no cesa de beber.
97
96

TESTIMONIOS
Y DO CUMENTO S
98 TESTIMONIOS Y DOCUMENTOS TESTIMONIOS Y DOCUMENTOS 99

Las danzas de los diablos éxlasis, apelando al regreso del antiguo extraño poder, no en vano son los
LA MÚSICA En n u merosas comunidades indias o orden . Los españoles emprendieron bailarines del diablo.» Y por los dedos de
u n a dura campaña contra estos enviados los músicos corre, como por encanto, l a
TRADICIONAL DE LOS negras de A niérica latina, la figura del
diablo encama la libertad, la rebelión del d iablo. Así, el cura Cristóbal m úsica d e l agua, el canto d e l o s anliguos
ANDES contra el colonialismo y el de A lbornoz mandó castigar a más de dioses.
anticonformismo. E l diablo, cuya dan.za 8.000 indios y ordenó destruir todas Máximo Damián
Para los amerindios, la y música magnifican los poderes las huacas. El violín de lshua
Sin embargo no pudo erradicar e l
música, investida de catárticos, en ocasiones permite a los
hombres marginados recobrar de n u e vo canto d e l agua y d e l a s cascadas, esta El «huayno»
poderes sagrados, ha estado su orgullo e identidad, y trastrocar m úsica del diablo y de l os espíritus que El género musical más popular de los

permanentemente temporalmente un sistema alienante s u rgía de las entrañas de la tierra y de las A ndes, el huayno, existía ya en los

y opresor. montañas para transmitir su fuerza y su tiempos de los incas y hoy se ha


vinculada al cosmos y a los magia. difundido en el medio urbano.
ciclos solares y lunares. Tras la conquista aparecieron Todos los Viernes Santos, los diablos
importantes movimientos milenaristas bailan porque están contentos. Cristo ha Sus l etras se escriben en español o en
Siempre vigorosa en el m uerto, la vía está libre, y los antiguos quechua. Cantan al amor, a la política, al
en la región de Chanka (Huancavelica,
Altiplano, se toca sobre Ayacucho, y en una parte de Apurimac d i oses vuelven a tomar posesión del ciclo de l a existencia, a la belleza de la
todo en las ceremonias y Arequipa). Surgida en Huamanga m undo. Ese día, bailarines y músicos ciudad natal, a los animales y a las flores.
entre 1560 y 1 570, el Taqui Onquoy, e n sayan en un lugar secreto para festejar Pueden oírse durante las fiestas y
agrarias y en los rituales su retorno. Y los mejores harán un pacto conciertos de huayno, en la radio y en
enfermedad del canto y de la danza,
des tinados a favorecer la tiende a propagarse por toda la sierra. con el /-luamani [espíritu de la montaña] discos. Su estilo, fácil mente reconocible,
Se decía que muertos de los huacas q uc los protege y los acompaña a cambio los distingue de la música propia de los
pesca, así como en las de s u vida. «Su cuerpo está imbuido de la rituales andinos y las fiestas estacionales.
[lugar sagrado donde se enterraba a los
fiestas patronales. antepasados] habían resucitado y se fuerza diabólica y pueden realizar Flauta, trompeta, flauta de pan, violín,
rruebas como lanzarse desde lo alto de arpa, mandolinas,, bandora ... ele hecho,
Asimismo, los incas habían unido para combatir el D ios de
Jos cristianos. Éstos se encarnaban en las torres, o bailar sobre el arpa como cualquier instrumento imaginable puede
tocaban m úsica en las los hombres que bailaban, presa del u n a p l uma. Están poseídos por un acompañar el huayno en los Andes.
cuatro grandes fiestas Aunque al oído occidental esta música
pueda parecer triste, nostálgica, o
anuales dedicadas al sol: soñadora, los pueblos andinos la sienten
las de los solsticios y las de de forma distinta. Para ellos es la música
de todos los días, el medio de expresar
los equinoccios. �
sus alegrías y sus tormentos, su poesía
y su identidad cultural. El huayno, una
amalgama de música indígena de Perú y
música colonial española, es la forma de
expresión más genuina de los Andes . . . En
los pueblos de la sierra, con frecuencia
uno puede toparse con grupos de
hombres y mujeres andinos que beben
cerveza o chicha ante una pequeña t i e n da
tras su jornada de trabajo, y bai l a n en l a
calle al son de los huaynos que se
escuchan en la radio.
.l o h n Coh · n
l .1 1 d1 111 :n de /ns di11/J/os. Pa11cartambo,
/-luayno M11sic of l 'em
• en en

/, 1 1 \ 1 11/¡ • 1 ¡11' /'l/l l/lll.I'.


1 00 TESTIMONIOS Y DOCUMENTOS TESTIMONIOS Y DOCUM E NTOS 101

La juventud de Gardel las letras son como u n remiendo Así se abre la nueva vía del tango; e s el
CARLOS GARDEL, FIGURA El 9 de marzo de 1 893, Berthe Gardes torpe, pueri l , a menudo grosero comienzo de la G uardia Nueva, un
MÍTICA DEL TANGO llega a Argentina con su hij o de dos y siempre de poca calidad. Las únicas período de transformación total del
años y su amiga Marie D ucassé y letras dignas de mención son las tango que va a personalizarse y
Un halo de leyenda Etienne, hijo de esta última. Algunos de La morocha ( 1905), de Ángel convertirse en un género musical
l ibros refieren que Gardel vivió Villoldo, con música del violinista diferente de los otros y con
envuelve la biografía de primero en Uruguay, que estudió en Enrique Saborido. No obstante, el características perfectamente defini das.
Carlos Gardel. Nunca un el colegio San Estanislao, y que un texto es comedido, ingenuo, i nsípido, Sergio González
payador con el que se encontró en una escrito con l a intención de no «Carlos Gardel, la voz del tango
cantante de tango fue objeto y mucho más»
pulpería local (una suerte de bar de amedrentar a nadie, lo que
de tantas controversias y comidas donde se reunían los músicos) no se corresponde e n absoluto con
tantas pasiones. Aunque le inició en la música. No obstante, el mundo inquietante y perturbador
según otras biografías, Berthe Gardes del tango.
algunos argentinos y se instala en B uenos Aires, en un Gardel, que conoce y ama ya e l
uruguayos afirman que el conventillo ( conjunto de edificios con tango, n o podía cantar este tipo de
un patio y baños com unes) del Abasto, textos. Puede decirse que esperaba
can tante era oriundo de -a sabiendas de que iba a llegar­
barrio popular de los mataderos.
Montevideo, lo cierto es que El francesito, apodo por el que se le que el tango encontrara unas letras
Charles Romuald Gardel conocía, prefiere la calle a la escuela, a su medida, que lo arroparan, para
así que se dedica a hacer pequeños darle una dimensión nueva. Así,
nació en Toulouse el 1 1 de trabajos además de cometer pequeños cuando se produce el acontecimi ento,
diciembre de 1 890, fruto de hurtos. Pero lo q ue realmente le G ardel trastoca su discurso y sus
apasiona es la música. Su madre, formas y se vincula al tango para
las relaciones entre Berthe lencera del teatro Politeama, l o lleva a siempre.
Cardes, u na planchadora y escuchar cantantes de ópera y Carlos se El acontecimiento es Mi noche triste,
inspira también en algunos payadores. con letra de Pascual Contursi y música
lavand� J.ª de oficio y de un
padre r};y
sconocido.
A cuestas con su guitarra, se presenta
en los almacenes (sinónimo argentino
del compositor Samuel Castriota. Un
drama íntimo resumido, con personajes
de pulperías) , bares y fiestas locales emotivos y creíbles, con un decorado
donde muy pronto se le empieza a realista y significativo y dotado de un Gardel, el personaje
conocer como el Zorzal por su lenguaj e que aúna con acierto el El escritor Ramón Gómez de la Serna
espléndida voz. lunfardo y la lengua vernácula. Pero nos transmite sus impresiones de Carde/
En 1 9 1 3, forma un dúo con el más allá del simple tango que Contursi en forma de elogio fúnebre.
cantante y guitarrista uruguayo José cantaba en Montevideo, el verdadero
Razzano. Ambos se promocionan en acontecimiento es que lo canta Gardel, Carlos Gardel se fue impresionado
Armenonville y en otras salas de que el texto de Mi noche triste se ve de nocturnidades de Bu e nos Aires
B uenos Aires y Montevideo, y realiza ensalzado, sublimado, como dotado de y llegó a estar macerado de
numerosas grabaciones hasta 1 925 . una nueva fuerza, hasta e l punto sentimentalismo.
de confundirse con l a música que No tenía nada de compadrito
« Mi noche triste» lo sostiene, gracias a una voz que [término diminutivo y peyorativo de
En la época de la G uardia Viej a se parece hecha tan sólo para interpretar compadre que designa al indi viduo
cantan también algunos tangos. Pero el tango. de porte y maneras arrogantes q u e
El 14 de octubre de 1 9 1 7, en e l s e l a s d a d e caballero s i n t e n e r los
• Peinado con gomina ( a la izquierda) o tocado
teatro Esmeralda de B uenos Aires, medios de serlo]; era el gaucho b u · n o
con un panam.á (a la derecha), la sonrisa de una Gardel canta por primera vez en y todos le pedían e s o q u e al l í se 1 1 ; 1 1 1 1 : 1
estrella. público Mi noch e triste, su primer tango. una gauchada, y q u e e s u n s · rv i · i o
1 02 TESTIMONIOS Y D OCUMENTOS TESTI M O N I OS Y D O C U M 1 ·'.N' 1 ·os 1 03

generoso y desinteresado: « Haga una herido, conmovedora alocución a los alrededor del cajón en que está el ser
gauchada. D éj elo y véngase a cantar borrachos. del cuerpo presente, acompaña bien la
tangos a La B oca [barrio genovés de Así Gardel tomó parte e n Espérame, tristeza por la pérdida del propio
B uenos Aires, situado cerca del Melodía de arrabal, Cuesta abajo , El tanguista.
.
puerto] .» Y Carlos Gardel, buen tango en Broadway, El día que me En el tango hay unas últimas
amigo, hombre noble que sabía que hay quieras y Tango bar. burbujas del ahogado, un poco de
que llorar la vida antes de perderla, Era el varón del tango, en contraste voz de agonía.
hacía la gauchada de irse con los con la mujer del tango, el hombre La voz de Gardel era una herida en
amigos e n una noche de farra, a comer probo, adolorido que sabe meditar sus su rostro, y n os acordaremos siempre
chinchulines y a beber vino tinto, para desengaños. de su expresión llagada.
cantar después entre el acune de las El tango, que tiene algo de baile, El tango tiene una significación
guitarras. canto y música de fun eral, sigiloso oportuna y por eso hay un tango que
Estaba entre su noche de Buenos cada uno puede aplicarse y hay tangos
Aires y las noches de M ontevideo q ue alejan y tangos que acercan, tangos
cuando vinieron a buscarle para para el día del deshaucio y tangos para
París; y en el verano de 1 931 el día del amor.
se despedía en Buenos Aires El tango se encoge y estira
e n el Broadway, con un y podríamos decir que está cardíaco,
tango en el que lloraba como casi todos lo solemos estar.
su viaj e. Después de esta sesión necrológica,
El Rey del tango tan sobre l a frescura de las rosas
rodó L uces de de sus coronas, parece que Carlitas
B uenos A ires, ve en mayor descanso, con más
la única película, perspectivas, los caminitos por los que
que he visto ve venir a su morocha [morenita, Volvamos atrás los viejos fi l mes
suspender en u n de tez oscura. Apelación afectuosa. para encontrarnos otra vez a Gardel,
c i n e de nuestro También es el título de una famosísima agobiado de tangos, pronto a m i t igar
M adrid para que milonga] con diadema de una cinta penas cantando penas con el
se repitiese su tango azul. prosaísmo emigrante e inigualable
Tomo y Obligo, l l eno Ya sólo podrá repetir sus tangos en del tango.
de consej os amargos, victrolas o radios que digan sus discos M uchos años han pasado desde
'
pero con el consuelo en el archivo de lo retrospectivo; en la esa sesión de radio, pero nunca se
del hombre a hombre vida encendida de vida, sólo oiremos le olvida y crece su estatura mientras
i nstándole a beber para sin su voz viva las músicas de sus la voz de los tanguistas canta el
olvi dar. tangos. último tango que le han dedicado
Se le veía andar baj o No podrá inmiscuirse en la orquesta, estos días y en el que le suponen
las luces del cinema, pero la orquesta pensará e n él cuando resucitado en la edad que tendría en
deslumbrado, humano, se encuentre sin las palabras pastosas, el presente:
sin excesos de actor, profundas, que leía su voz en la
llevando su canción memoria.
M e hubiera gustado verte
en el alma, esperando Descanse en paz el tanguero
Carlitas Gardel añoso,
con paseos lentos ilustre, el Rey del tango, camarada
con el cabello canoso . . .
la hora de lanzar en noches que no vivimos al par
su tango vivificado que él, pero que han quedado como
de la película, voz vividas en nuestro recuerdo de sus Ramón G ó m c z de l a S e rn a
del corazón películas. fnlerp relaci/m del lr11 1f{o
1 04 TESTIMONIOS Y DOCUMENTOS TESTIMONIOS Y DOCU M l ·: N ' I '( )S 1 0)

Atahualpa Yupanqui, la tierra misma pasión, la de l i l 1 1 1 u s H·; 1 , y p or 1 1 1 1


REVUELTA Y y el silencio mismo ideal, e l d e l a l i h · r t : 1 d .
COMPROMISO POLÍTICO Yupanqui extrae su materia prima de la Creemos que la trágica r u p t 1 1 1 : 1 q u ·

cultura andina, que ha absorbido se operó en la recien t e h i s t o r i : 1 d · C h i l ·


En los años sesen ta se intensamente y que ha evocado en -su brusco paso de la d i fíci l cd i fi ·aci ó n
n u merosas canciones. de una sociedad socialista a u n a c l ; 1 pa
da en todo el continente de represión política sin piedad, t a n to
americano un fenómeno Él [Atahualpa] cuenta que vivió unos p ara los chilenos que se q u e d a ro n p a ra
cinco años en una región argentina luchar contra el régimen como p a ra los
excepcional por su
situada e n una ladera de los Andes, en chilenos refugiados y enfrent ados a u n a
amplitud, el de la canción la frontera con Chile y B olivia. En este Para el indio, las palabras poseen una supervivencia dramá tica al ot ro lado d e l
comprometida; canción lugar hay numerosas aldeas indias que gran fuerza persuasiva. Es l a manera de mundo- ha aportado, en el plano de l a
no tienen más de 60 a 80 habitantes. j ustificar su presencia en l a tierra. creación artística, u n a percepción n ueva
protesta, n ueva canción, o Estuvo con ellos, aprendió la lengua Cuanto menos hable mejor, porque así de las exigencias del arte musical
n ueva traba en Cuba. Este quechua y observó sus ritos, como por capta, sin tratar de comprender, la político.
ejemplo la forma en que cortaban un diferencia que existe entre concepto La actitud ofensiva, enriquecida por
n uevo género de canción y palabra, entre idea y opinión, entre el contacto permanente y fecundo ele u n
árbol con un hacha. Antes de abatirlo,
latinoamericana, a menudo el hombre lo tantea como si quisiera discurso y relato. Piensa que no debe pueblo q u e lucha e n la vida cotidiana
de inspiración marxista, apreciar el espesor de la madera. perderse con las palabras. Parece que el por l a edificación d e una sociedad j usta,
Al menos es lo que cree o imagina indio sea el autor del proverbio que dio paso, con sangre y cenizas, a la
con frecuencia se confunde un mero observador. Ahora bien, nada dice: « Cuando hables, haz de modo que génesis ele una actitud que, si bien no
también con la canción más lejos de eso. Lo toca porque va tus palabras sean mejor que tu era completamente defensiva, al menos
silencio.» Sin embargo, él no ha llamaba a una situación de resistencia.
folk. a matar a un hermano. Lo acaricia, lo
abraza como si quisiera medir su inventado este proverbio; viene ele R esistencia, pero también creación, ya
diámetro, pero no es eso. Él le dice lejos, de Oriente, pero lo ha aplicado que el arte debe sobrevivir y
adiós, y Yupanqui puntualiza: toda su vida, a lo largo de todas las prolongarse si no quiere morir.
«El ritual traducido del quechua generaciones de gente de su raza, su Pero el exilio también se
significa esto: " no me condenes, lengua y su pensamiento. corresponde con el final de una época,
hermano. H ago esto porque el patrón Frarn;:oise Thanas con la presentación de u n balance. Es el
me lo ha mandado, porque he recibido A tahualpa Yupanqui momento e n que el observador puede
la orden". Así es el ritual. Y su hacha discernir, a través d e las numerosas
empieza a trabajar sobre el algarrobo, Chile y el exilio preferencias de los artistas, lo ese n c i a l
el quebracho o cualquier otro árbol Tierra musicalmente fecunda, de l o accesorio, lo fundamental de lo
para abatirlo . . . » lastimada p o r las ansias de la dictadura, superfluo. Es también la deuda q u e s ·
Cuando se le pregunta por el silencio Chile ha n utrido con sus fermentos a paga a los mayores, el reconoci m i e n t o
de los indios, que a veces extraña un artistas como Víctor Jara y Violeta q u e s e demuestra a aquellos q u e h ¡ ¡ n
poco al observador, responde: «El Parra, figuras representativas de la tenido genio suficiente para dej a r u 1 1 : 1
hombre no se calla porque no tenga n ueva canción latinoamericana y huella. Es la obra e n la q u e se i n sp i r a .
nada que decir. Al contrario, tiene símbolos de la resistencia frente a la la obra que se ha hecho renacer y q u l'
mucho que decir, pero no quiere hablar. opresión para n um erosos chilenos se prolonga en el seno de una cr • < i <: i o n
Piensa que las palabras se diluyen en el exilio. nueva, como para impregnarse l ' 1 1 v i -

cuando se dicen e n una conversación y sentido m á s etimológico d e l térm í 1 H 1


que pierden su fuerza y su significado.» Los cantantes y músicos pertenecientes del ejemplo y l a esperanza q u e d l ' s t i l 1 1 1 1
al movimiento de la nueva canción las obras m á s antiguas.
• Atahualpa Yupanqui, cantor de la cultura india chilena forman un grupo de creadores B erna rd I� · ss í 1.· 1 ·s
(a la izquierda). variopinto, aunque unido por una L a nouvelle chanson chiliem l l ' 1 ·1 1 1· 1 i/
1 06 TESTIMONIOS Y DOCUMENTOS TESTI M O N IOS Y DOCU M E N TOS 1 07

África, tierra mítica inmediato. Sólo me acuerdo de que no Kong y su firma Beverley's. Es un
BOB MARLEY, EL DIOS Bob Marley, de origen jamaicano, era necesario que corriera . » fracaso como los dos singles que siguen.
DEL REGGAE proclamó en voz alta toda su vida sus The Best of Reggae Pero esto tiene poca importancia,
lazos con África, la tierra de sus Hors série n.º 7 teniendo en cuenta que sólo tiene
dieciséis años. Luego funda los Wailin'
La m uerte premat u ra antepasados.
L a vida de Marley Wailer's con sus «colegas de siempre»
de Bob Marley le convirtió «Mi orientación, mi obj etivo último Desde esta imagen en blanco y negro de de Trench Town, que más tarde serán los
en la figura e mblemática es la unidad de África. Cuando llegue un Bob delgado, con boina de lana, medio Wailers. Sus propias «Impresiones», en
ese momento, la gente mirará atrás abatido por el cáncer, han transcurrido cierta manera.
de la m úsica jamaicana, catorce afios. Desde su desaparición, e l Desde 1962, año del auténtico éxito
y se dirá que todo eso tenía un por qué.
como ocurrió con Carlos Ante todo soy un rasta, y eso viene de reggae n o s e ha vuelto a recuperar, y Simmer Down, el trío empieza a grabar

África. N ací en Jamaica tras la seguramente Jamaica tampoco. para Coxsone en el mítico Studio One.
Gardel y el tango. Desde Nacido e n 1945, en la parroquia de St H asta 1966 se sucederán varios singles,
abolición de la esclavitud, pero de
su conversión al hecho mi lugar está en África. Jamaica Ann, en algún lugar al norte de la isla, el aunque sin ningún éxito relevante. Los
rastafarismo, Marley vivió pertenece a los indios atawah, pero joven Robert N esta, que no conoce a su Wailers se inspiran sobre todo en el sou/
todos fueron asesinados por Cristóbal padre -un inglés blanco y capitán por de la Motown, pero el grupo no ha
durante toda su vida de Colón y sus guerreros. M i obj etivo es afiadidura del ejército de Su Majestad­ encontrado aún su propio sonido. En
acuerdo con sus principios aportar algo nuevo a la gente. Lo será educado por Cedella, su madre. 1966 se produce la primera ruptura para
demás no me i mporta. Si lo consigo, es Todo empieza verdaderamente cuando Bob. Sigue a su madre a Estados Unidos,
religiosos, haciendo del l lega a Kingston, a los doce afios. En donde se quedará varios meses
porque estoy l uchando por la verdad.
reggae la m úsica de Jah, No me dejo intimidar. No moriré así. Trench Town, precisamente, en la parte trabaj ando en una cadena de montaj e de
el dios rasta. Su Las balas ya me hirieron gravemente oeste de la ciudad que a pesar de ser un automóviles.
una vez. Unos días antes de aquel nuevo complejo inmobiliario seguía De regreso a Jamaica, Marley
m isticism o, sus desvelos atentado que estuvo a punto de siendo el barrio de los marginados y encontrará el país cambiado. Hailé
por la paz m u ndial y la costarme la vida, tuve un suefio sobre todo de l os rastas. Muy pronto, e l Selassié ha pasado por allí, desatando el
premonitorio, pues me disparaban en joven Marley se interesa por los fervor rasta. Junto a Peter y B unny,
igualdad social, así incipientes sound systems, por el de vuelve a las grabaciones para Coxsone y
una emboscada. M i madre me sacaba
como su talento, lo una bala de la cabeza. Una voz m e Coxsone en particular, y escucha la radio también para Leslie Kong. Es un
decía que no huyera y q u e plantara que le permite sintonizar los programas momento de vacas flacas, pero el trío
transfarmaron a los ojos
cara a los asaltantes. Luego, cuando estadounidenses donde se dan a conocer continúa perfeccionando su aprendizaj e .
de los jamaicanos en u n me atacaron de verdad a los tres días, los grupos vocales negros como N unca se hablará bastante de estas horas
verdadero apóstol. esta visión me vino a la mente de Moonglows, Drifters y sobre todo de ensayos que habrá de convertirlos
I mpressions de Curtis Mayfield, a los unos meses más tarde en uno de los
que Bob siempre hará referencia. grupos más temibles de la isla.
Desde entonces, el chico al que En este final de 1969, e l productor al
todavía llaman Nesta, siempre estará que nos referimos es un antiguo
vinculado y se codeará con los mej ores. ingeniero de sonido de Coxsone , un l t1 I
El primero de todos fue su vecino Joe Lee Perry. U n afio antes, n o con t e n t o
Higgs, que organiza sesiones musicales con haber «parido» práctica m e n l ' e l
en Third Street. Éste es e l responsable reggae con su People Funny Boy > r ; 1 · i a s
-entre otros- de que el j oven Marley a u n nuevo ritmo ligerame n t rnas k n l P
·

desarrolle su preferencia por e l canto e n comparación con e l a n t er i o r , · I


sincopado. rockstedy, Scratch -su a po d u : 1 v.1h . 1
El año de la i ndependencia de de situarse e n quinto l u g < 1 r · 1 1 la� l 1� t ; 1 �
Jamaica, 1962, coincide con la primera británicas con Retur11 Of / Jj1111�, 1 1 . 1 1 1 H d v
1

grabación de Bob, ludge Not, para Leslie esos instrument ales d l o s q u l ' :-< 1 l l 1 v i
·
1 08 TESTIMONIOS Y DOCUMENTOS TESTI M O N I OS Y DOC U M E N TOS 1 09

más tarde- le bastan para ganarse una álbumes Survival y Uprising auguran un que había sobre la c h i m e n e a . Era u n a
reputación en un medio puramente rock. futuro mejor para los Wailers. El sonido señal -añadió- de que u n o de los
Los textos y las guitarras incisivas que se es más vigoroso si cabe, y la inspiración grandes espíritus de la tie rra se h a bía ido,
turnan con el órgano omnipresente parece no acabarse nunca. Sin embargo, la señal de que se había elevado a l a s
contribuyen a apreciar esta <<nueva» no habrá más. El último tema de esferas celestes».
música y a perfilar sus contornos. No Uprising se l lamaba Redemption Song, Jamaica se sumió en un estado de
obstante, este éxito repentino y las un título que no podía augurar nada estupor. E l parlamento incluso aplazó sus
continuas giras contribuyen a darles alas. bueno. Al poco tiempo sale a la luz el sesiones durante los diez días que se
Bunny abandona el grupo y luego Peter, diagnóstico. E l deportivo Marley, el rasta prolongaron los preparativos para los
dejando a Bob una libertad total para que seguía un estricto régimen Ital (y funerales nacionales. Fue la
imponer su música. consumidor de 3 0 0 gramos de marihuana concentración más importante de esta
1 974- 1 98 1 . Durante los últimos siete a la semana, como dirán algunos) tiene índole en toda la historia de las islas
años de su vida, la música de Bob no cáncer. Lo demás se limitaría a ser la caribeñas. Edward Seaga, el primer
variará sustancialmente. Con sus crónica hospitalaria que iba ministro recientemente elegido,
álbumes, Marley redondea una fórmula reduciendo paulatinamente rindió un homenaje
que engloba, además de los inamovibles una ínfima esperanza a l a e locuente al
hermanos Barrett, dos guitarristas nada. humilde cantante
(Junior Marvin y Al Anderson ) , Tyrone Hasta e l 1 1 de mayo y tuvo la audacia
Downie (que acaba de producir a Tonton de 1 98 1 . Al día de concluir con un
Davi d ) a los teclados y, cómo no, a las siguiente de unas ferviente «.!ah
I-Threes en los coros. Ésta es la elecciones. Ocurrió rastafari!». Un millón
tiene e l secreto. Así pues, hasta 1 972, los formación que va a causar sensación en hace catorce años . . . de personas, casi la
Wailers grabarán sus más bellos títulos las salas del mundo entero con sus roots Medhi B oukhelf mitad de la población
con el apoyo de Perry. Este técnico loco rock reggae. En cuanto a su fe en Jah y en en B Mag, n.º 43, 1 995 del país, se había
ha encontrado un sonido para ellos. Un Hailé Selassié, reencarnación del Cristo reunido en el
bajo «rebelde» que puntea «como una en la tierra, ésta seguirá creciendo con los La muerte de trayecto del
metralleta», al igual que las armonías años. Como miembro de las 12 Tribus de Mar!ey cortejo fúnebre
mágicas del trío recuperadas en un eco Israel, una organización rastafari En el momento de que llevó su
lejano que destacan unos textos incisivos relativamente abierta (ya que acepta en su muerte, Judy cuerpo hasta
y divertidos. Con canciones como Kaya, su seno a mestizos e incluso blancos ) , Bob Mowatt se las verdes
Lively Up Yourself, Duppy Conquerer, asumirá un papel activo en la vida política encontraba colinas de
Small Axe, Marley ha dicho casi todo. de su país. Y si bien escapa a un atentado en su casa con Nine Mile,
Seguro con este repertorio, sólo le resta en 1 976 y opta por el exilio, dos años más una amiga, donde fue
ampliar su audiencia, no sin antes haber tarde consigue lo imposible al reunir en en Kingston. enterrado en
mostrado a Scratch su par de ases, la un concierto a los dos enemigos por El cielo un sencillo
sección bajo-batería más temible de excelencia: el primer ministro Michael estaba sarcófago de
entonces: los hermanos B arrett. Manley y al líder de la oposición Edward claro, cemento. Tenía
La máquina funciona sola desde Seaga en el One Love Peace Concert. pero de treinta y seis años,
principios de 1 972, cuando Bob propone El final de los años setenta coincide repente un la edad exacta que
sus últimos títulos a Island, de paso por con el momento de su consagración. Bob relámpago se un día de febrero ele
Londres. Chris B lackwell, que ya ha oído Marley se ha convertido en un símbolo, coló por l a 1 969 él anunció a
hablar de él, lo anuncia como artista en más aún, en un profeta. Desde 1 980, las ventana y «se sus amigos I bis y
solitario, m ientras los otros dos, Peter y giras son gigantescas, a veces salen fuera paró un instante Dion q u e m o r i ría .
Bunny son relegados al rango de del espacio europeo o estadounidense, -dijo ella- en el Ro g c r S t c ffc ns

Wailers. Desde entonces todo va muy como ocurre por ejemplo cuando toca en marco de metal de !Jo/J Mflrley
de prisa. Catch A Fire y Burnin -un año Gabón y luego en Zimbabue. Los una foto de Bob S¡>irit / Jr111u:r
1 10 TESTIMONIOS Y DOCUMENTOS TESTI M O N J OS Y D OC U M E N TOS 111
La voz de Celia
CELIA CRUZ, REINA Tito Puente grabó varios discos con
como si quisiera elevarse. Cuando Celia en un concur ·o rad i o fó n i co
Celia canta Beniba colará, salta, sus conocido como La h o ra del té, de la
DE LA MÚSICA CUBANA Celia Cruz, como Cuba, Puerto Rico brazos parecen alas y l a vemos subir cadena García Sierra. El o b j e t i vo de
Son . . . Celia Cruz y Tito Puente y Celia al cielo. El público la imita como estas e misiones de radio e ra desc u b r i r
En el universo latino, Celia Cruz y Tito Puente en Españ.a, hechizado, saltando y gritando sin nuevos talentos y, una v e z al m e s , e l
considerados clásicos de la música d escanso. Y sucumbimos poseídos por programa consistía en un concurso para
Cruz se considera la gran latina. ese torbellino de sonidos, voces y aficionados de una hora de duración
sacerdotisa de la música El percusionista recuerda: «Cuando ritmos. Celia canta a todos mis amigos dedicado a los niños. Celia, que
oí cantar a Celia por primera vez, su d e Cuba en general y también a todos entonces era sólo una adolescente,
cubana por su presencia
voz era tan potente que creía que era mis compañeros de América central . participó en el concurso. En aquella
en el escenario, su alegría un hombre.» « Y o quisiera dedicaros el guaguancó época, las canciones en boga eran las
de vivir, su espon taneidad, [ género de rumba que se baila y se baladas románticas y los tangos de
Célia Cruz en Cali: canta al compás de los tambores] de Libertad Lamarque. De acuerdo con
su voz excepcional y su don cien años de «salsitud» mi querida Cuba y alumbrado en mi esta moda, Celia escogió para el
para la improvisación. Celia vista por el escritor solar [ manzana de edificios con un concurso un tango romántico llamado
colombiano Umberto Valverde. patio común, propios de los barrios Nostalgia. Obtuvo el primer premio y
Famosa en La Habana ya
« Cuando ella canta -afirma-, Europa populares de La Habana], que se fue fue la estrella invitada del programa . . .
en los años cincuenta, Cruz tiembla, África se contorsiona, Nueva ele Cuba para N ueva York, mi Celia empezó a presentarse a todos
York gime, Puerto Rico vibra y las
se traslada a Estados gllaguancó para Puerto Rico, los concursos radiofónicos c;le l a ciudad,
A n tillas se enardecen. » mi guaguancó para Venezuela, para y allí donde iba siempre dejaba
Unidos en los años sesenta, Brasil, para Perú, mi guaguancó ¡ ah ! impresionados a los oyentes . . .
donde ha grabado discos La diosa se levanta y entona la para l o s chilenos, para Argentina, para En aquel los años determinantes,
canción: «Oiga, l legó el frutero con los aztecas . . . Celia t rabaj ó su voz y estudió teoría
y ha dado conciertos con frutas de m i país, casera cómpreme
»

Reina Rumba m usical en el Conservatorio de La


casi todos los músicos frutas que son ricas para usted . . . Habana. Pero, aun así, ella deseaba
y can tantes de salsa. L a piña blanca, la fruta bomba y el Los comienzos de una estrella seguir su vocación que era enseñar
sabroso canisté . Mango, mango, Un p¡ ograma de radio apartó a Celia l iteratura. Nacida en el seno de una
mango m angüe ... » La voz que brota de La literatura. . . familia modesta, invirtió el dinero que
del escenario, brota al mismo tiempo había ganado con su talento m usical en
de nuestras propias entrañas. Escucha Celia Cruz, misteriosa y equilibrada, completar su educación, y a fuerza de
ese bongo. Escucha esa voz que es pertenece al signo de libra. Nació un un trabajo constante, consiguió su
tuya y es nuestra. Es Celia Cruz. Celia 21 de octubre aunque nadie ha podido diploma. Su envolvente voz era cada
no canta sólo con la boca; canta con saber nunca de qué año. En su vez más conocida, así que sus
las manos, con las piernas, creadoras juventud, Celia, la segunda hij a de una profesores le preguntaron si quería
de ritmos y portadoras de pasos, con familia numerosa, cuidaba a su cantar en las fiestas de la escuela. Un
sus pantorrillas vibrantes y alborozadas, hermano y sus hermanas, a quienes día, una profesora que Celia admiraba
con su peinado a lo B o Derek, y su distraía cantando. Cuent a Celia que desde mucho tiempo atrás le aseguró
traje que parece m overse de forma cuando sus vecinos la oían, acudían que, si bien su deseo de enseñar era
autónoma. Cuando mirarnos sus ojos hasta el umbral de la puerta para adm irable, su verdadero talento era
hipnotizadores, su risa generosa y su escucharla. «Yo estaba tan ocupada con cantar. Y persuadió a su j oven
forma de cruzar las piernas, esta los niños que no sabía por qué toda esa protegida diciéndole que ganaría más
m ujer bajita se convierte en un gente se agolpaba en mi puerta. A dinero en un día que ella en va r i o s
gigante que crece desmesuradamente, veces, eso me ponía furiosa porque no meses de trabajo. Celia se r i n d i ó a s u s
caía en la cuenta de que era mi voz lo argumentos, de modo que a parlir de
• Celia Cru::, con el pianisra Papo Lucca que les atraía.» entonces no se lo p e n só m á s y s i g u i ó su
y el can/Cinte Justo Betancour1. Un primo mayor que ella inscribe a camino.
1 12 TESTIMONIOS Y DOCUMENTOS TESTI M O N IOS Y DOCUM ENTOS 1 13

Celia Cruz obtuvo su primer gran éxito «Celia es única, es la más grande» »Nunca he visto a na d i e c o m o e l l a ,
cuando se presentó en el estudio de El pianista de salsa y director de sólo ella puede cantar u n a canción
radio Cadena Suaritos, e n el verano de orquesta neoyorquino Larry Harlow entera sin ensayarla, con las
1 950. La puertorriqueña Myrta Silva, cuenta sus impresiones sobre Celia al improvisaciones y todo lo demás. Era
cantante titular de la Sonora musicólogo venezolano César Miguel como si ya conociera mi orquesta como
Matancera, la orquesta m ás famosa de Rondón. la palma de mi mano . . . Te lo aseguro,
Cuba, iba a regresar a su país natal. El Celia es ú nica, es la más grande . . . »
grupo buscaba a alguien que sustituyera « Cuando grabé Hommy, n adie El libro de la salsa
a Myrta, cuya voz había contribuido en entendía nada ... fue e n 1 972. Ismael
gran medida a la reputación de la ( M iranda) _ya no formaba parte de la El homenaje de Madison Square
orquesta. orquesta y yo preparaba algo grande, Garden a Celia
Celia recibió una llamada telefónica heavy. Estaba poniendo la música a En los años setenta, Madison Square
del director de Radio Progreso para punto con Marty Sheller y grabábamos Carden fue uno de los reales sitios de
que se presentara a una audición. E l poco a poco . . . la salsa neoyorquina.
grupo supo apreciar el talento de Celia, »Nadie había hecho n a d a igual con
e inmediatamente le ofrecieron un la salsa, y la gente decía que era «Fue la noche de Celia Cruz. Sin
contrato. No obstante, numerosos fans una locura. Había de todo, violines, una duda alguna. Celia se dio
criticaron que una desconocida cantara gran orquesta. Cheo interpretaba completamente, canción tras canción,
con esta famosa formación, pero ella no una canción; Justo, El Conde . . . y bis tras bis. Cuando las luces del
se dejó intimidar. « Los miembros de la Adalberto, otra. No te puedes Garden se iluminaron al llegar al final,
orquesta me tomaron cariño imaginar, nadie entendía qué pasaba. cuando ella ya no pudo dar nada más
-recuerda- y el director de la cadena Ahí fue cuando pensé e n invitar a porque había sonado la hora de cierre
me aseguró que no iba a cambiar de Celia. Quería que ella grabara para mí y los aplausos del público la
opinión, así que m e quedé. Siempre he el donaire de la m uj er, de la Gracia i nundaron con un amor merecido, nos
pensado que uno consigue aquello en lo Divina . . . Y estaba convencido de que quedamos con el mejor recuerdo
que persevera . » ¡Y lo consiguió con sólo ella podía hacerlo. Pero se de la noche.
creces ! encontraba en México y en ese »Presa de la emoción, viendo toda
El primer LP que Celia grabó con la momento ella no tenía n ada que ver la sala en pie y aparentemente sin
Sonora M atancera apareció en enero de con l a salsa, de m an era que le envié habla, Celia Cruz se arrodilló, cruzó
1 95 1 . Y a partir de entonces se suceden una casete con la música de su canción los brazos sobre su pecho e inclinó la
las giras por e l Caribe, México y para que se la aprendiera y se la cabeza en homenaj e al público que
Estados U nidos. Según la costumbre de metiera más o menos e n la cabeza. Así tanto había contribuido al éxito de
la época, Celia viaj aba siempre con una ganaríamos tiempo cuando viniera a aquel aconte.cimiento. E n el momento
señora de compañía, en este caso su Nueva York a grabar . . . B ien, pues lo de hacer balance, una vez que el
prima. «Celia ha sido siempre una dama que nos dejó impresionados y talento se debilita por e l i nevitable
-asegura Rogelio Martínez, director de anonadados a los otros músicos y a mí paso del tiempo, esta visión de Celia
la Sonora Matancera-. Cuando se viaja fue que Celia no ensayó nada ... Esa Cruz permanecerá p ara siempre
mucho con una orquesta, siempre te muj er es un genio, el genio más grabada e n mi memoria. Cuando ella
puede ocurrir algún incidente extraordinario que uno pueda podía haber salido al escenario en una
desagradable. Pero cada vez que imaginarse. Cuando le dij e que carroza dorada, ella cayó de rodillas.
alguien (por lo general u n hombre) le ensayaríamos, me respondió que no, ca nción desde principio a fin sin En efecto, más allá de la gran artista
faltaba al respeto a Celia, toda la que intentarímos grabarlo todo eq uivocarse n i una sola vez, y sin que es, siempre se h a portado como
orquesta se ponía de su parte para directamente . . . Y la versión del disco cnsayar nada . . . Yo estaba estupefacto: un gran ser humano. Y ésa es una
defender su honor.» fue la primera y la _única que la sesión estaba a p unto de comenzar, virtud que j amás podría com pra r
Latin New York grabamos. Celia no ensayó Ce lia estaba perfecta y no hubo que el dinero.»
octubre 1 982 absolutamente nada, ella ejecutó la cambiar nada. Latin N e w York, n o v i e m b re 1 982
1 14 TESTIMONIOS Y DOCUMENTOS TESTIMO N I OS Y OOC U M l·'.N'I '< )S 1 1

VALLENATO Y TEX-MEX Los orígenes míticos del «Vallenato»


El vallenato aparece en la región del
Las jotas de «vallenato» imitando a los m ús i cos con l os q 1 1 · s ·
/ J esde la famosa confrontación con el encuentra en las fi e s t a s ca n 1 pc s i 1 1 < 1 s ,
Valledupar, situada en la frontera de diahlo, las jotas de cantores y de ya q u e atraviesa Lodo e l n o r t e u e l p; 1 ís
En sus largas horas de Colombia y Venezuela, hacia principios 1 1 1 1 ísicos (piquerías) serán siempre una interpretando canciones.
soledad, los centinelas de de siglo. Los cantos antiguamente rle las características del vallenato. Unánimemente reconocido por su
improvisados y conocidos como sones, Valga citar aquí La carta escrita, talento de cantante, su virtuosismo como
las tropas de Valledupar,
tenían por lo general un talante triste y canción que el acordeonista Lorenzo acordeonista y su talento para la
en la costa atlántica de nostálgico. Sin embargo, en el medio Morales compone para su rival improvisación, muere en 1 989 en
urbano se volvieron m ucho más alegres.
Colombia, y los apostados 1�·miliano Zuleta: Montería.
Tradicionalmente, el vallenato se
en ambas orillas de Río acompañ.a con una caja (tambor), una He mandado decir a Emiliano Zuleta La música «Tex-Mex»
Grande, en México y en guacharaca (rascador) y un acordeón. que me espere durante el carnaval. La canción mexicana en general,
Según la leyenda, a comienzos de siglo, Le pediré y en los añ.os cuarenta y cincuenta
Tejas, co mponían un acordeonista de Guajira llamado que toque conmigo unas notas, el bolero mexicano, con cantantes
canciones. Hoy, éstas han Francisco Moscote se encontró con un y doy por seguro como A gustín Lara, Jorge Negrete
misterioso caballero que le invitó a que no le saldrán. la Negra
dado lugar a la aparición o Toñ.a ha brillado en toda
medirse con él en una jota m usical. El Si Emilianito conociera A mérica latina, amenazando incluso
de géneros musicales caballero sacó a su instrumento unos mi forma de tocar, con desbancar al tango en
muy populares donde sonidos tan divinos que Moscote, no se atrevería más a salir por las calles A rgentina.
desamparado, se puso a recitar el Credo y menos aún a retarme. A unque en el extranjero se conoce
predom ina el acordeón: al revés. Entonces, el caballero h uyó al Na die se puede igualar conmigo, sobre todo la tradición de los mariachis
vallenato en Colombia galope y un olor de azufre quedó nadie puede afrentarme. (de la palabra francesa «mariage»),
y Tex-Mex (o música flotando mucho tiempo en el lugar del Yo, Morales, tengo mi forma de tocar. la música Tex-Mex goza actu a lme n te
incidente. Para Emiliano Zuleta de una p op u laridad considerable en
norteña) al norte de México Lizette Lemoine, notas del CD México, así como en otras com un idades
y en las co munidades Es verdad que este acontecimiento Colombia - El vallen.ato chicanas (mexicanas) de Estados
ha reafirmado la identidad de un Unidos.
mexicanas del sur de Tejas. pueblo que posee su patrimonio más Alejo Durán En 1848, Estados Unidos se apropia
preciado con la m úsica vallen.ata. Por Varios acordeonistas de vallenato se han de Tejas y otros territorios
esta razón, Francisco Moscote dejó h ech o famosos en toda Colombia. pertenecien tes a México. D u rante
de ser un modesto vaquero para Destacan entre otros Nafer D u rán Díaz, m ucho tiempo, a ambos lados de la
convertirse en un acordeonista lulián Rojas, A lfredo Gutiérrez, Pedro frontera delimitada por Río Grande se
prodigioso cuya existencia estuvo Galán y sobre todo A lejo D u rán, hace la misma música, aunque la del
siempre envuelta en una aureola de conocido como el Rey negro del lado tejan o (Tex-Mex), se impone h oy
fantasía y misterio. Su fama llegó va llena to. sobre la música norteñ.a de la frontera
incluso hasta el mundo de la literatura. n orte de México, que continuó siendo
Gabriel García M árquez lo describe En 1 968 se organizó el primer Festival más marginal. Entre los artistas más
en Cien aiios de soledad como «un de la leyenda vallen.ata y Alejo Durán cotizados cabe citar L os A legres de
anciano vagabundo de casi doscientos ( G ilberto Alejandro Durán Díaz) fue Terán, el Conjunto Berna!, Los
años que pasaba a menudo por coronado rey. Apodado El Negro Durán, Pingüinos del Norte, el acordeonista
Macando tocando las canciones que nace en 1 9 1 9 en El Paso, en la región L eonardo Flaco Jiménez y los
había compuesto y relatando con · todo de Magdalena, hijo del acordeonista cantantes Freddie Fender (en f.,'s1or/1 1s
lujo de detalles las nuevas aparecidas en Nafer Durán y de la cantante Juana Unidos) y Chayito Valdés y f?a111r511
los pueblos por los que había pasado» . Díaz. Ayala (en México). El Tcx - M c x a
Música tropical y salsa e n Colombia Mientras se gana su vida como men u do habla de los gringos, de los
Bogotá, 1 992 vaquero, aprende a tocar el acordeón mexicanos de Tejas , alienrrdos rlc sus
1 16 TESTIMONIOS Y DOCUMENTOS
tradiciones, de las m ujeres y los El papel de la mujer en la difusión
prisioneros, como en la B alada del de las canciones
automóvil gris: Las muj eres han desempeñado un
papel importante en la transmisión
En Matamoros usted me verá, ebrio, de las canciones, aunque ellas no
fumando buenos puros, bebiendo pudieran cantar «Canciones de
coñac, jerez y cerveza al son de hombres» como los corridos y se
la alegría. Estoy haciendo negocios presentaran en público muy pocas
en San Antonio, Laredo, Tejas y en veces. No obstante, las muj eres solían
el otro lado, en Belén. cantar en casa, casi siempre sin
acompañamiento mientras realizaban
Soy la mano que aprieta, las tareas caseras, y también por la
que ataca, que mata y que roba, noche, en l as reuniones fam i liares,
y allí donde yo vaya, donde todos los miembros de la familia
yo los enredo a todos: cantaban por turnos . . . Las mujeres
pertenezco a la banda cantaban (también) en las bodas,
del automóvil gris, entonando a menudo cantos de
me llamo Higinio de Anda felicitación dirigidos a los recién
y me he paseado por París. casados o cantos afectuosos destinados
a los padres de estos últimos, que
En Matamoros usted me verá . . . perdían a sus hijos para empezar una
nueva vida. Estos cantos de boda,
Y a l l í e n l a penitenciaría, muchas veces canciones conocidas
donde he estado doce años y dotadas de una nueva función, se
en compañía de otros hombres llamaban enlaces. Pero las muj eres de
como Chato Barnabé, la frontera cantaban fundamentalmente Las orquestas de Tex-Mex l a radio mexicana y Fender aprecia
y en la celda once en su papel de madres ... interpretaban Las orquestas de Tex-Mex, conocidas por primera vez los géneros
donde murió Frank el Negro, todo tipo de canciones para sus hijos, bajo ...el nombre de conj untos, musicales locales: rancheras
donde asesinaron a Udilio, desde danzas narradas a canciones de aparecen a principios del siglo XX. [canciones aparecidas en los ranchos
muerto a traición. amor románticas. La mayoría de Están formadas por un bajo sexto mexicanos a finales del siglo xrx],
nosotros ha oído l os primeros cantos (guitarra de doce cuerdas) , tololoche corridos y boleros, y posteriormente
En Matamoros usted me verá ... tradicionales de nuestra madre. Doña (suerte de contrabajo, hoy sustituido música country, blues y rock. Pender
Petra Longoria de Flores, que vivía en por un b aj o e léctrico ) , batería y un empieza a grabar, en inglés y en
Y ese don Pablo González, B rownsville, era una de estas saxofón o un acordeón. Excluidas español para compañías de discos
que nos salvó la vida, excepciones. Le encantaba cantar en los años sesenta por grupos más americanas. En 1 960, detenido en
que está formando un grupo, corridos, lo que era muy poco modernos, actualmente vuelven B aton Rouge por posesión de
disparó con su pistola; frecuente en muj eres de su generación . . . a gozar de un nuevo período marihuana, pasa dos años en pri sión .
yo pertenezco a la banda Conservo un intenso recuerdo suyo de vitalidad. A finales de los años sesenta, su ca rre ra
de este automóvil gris, a la edad de ochenta y dos años, declina y se traslada a Luisiana, donde
me llamo Higinio de Anda saliendo de su cocina y entrando de Freddy Fender trabaja en el campo. Algunos años m ; í s
y me he paseado por París. sopetón en su comedor para cantarnos El cantante Preddy Pender (Baldemar tarde se hace famoso en Estados
Malhaya La cocina, con un pollo medio H uerta) es una de las figuras más Unidos con éxitos como Befo re 1/1c Nc".1 t
En Matamoros usted me verá . . . desplumado en una mano y un puñado representativas del Tex-Mex. Pender Teardrop Falls y Vaya con Dios.

de plumas en l a otra. nació en 1 936 en San B enito, Tejas, También ha grabado t e m a s t íp i c; 1 1 1 1 · 1 1 1


Américo Paredes A mérico Paredes en la frontera con México. Sus padres mexicanos como EL roble viejo
A Texas-Mexican Cancionero A Texas-Mexican Cancionero campesinos, que no saben inglés, oyen Nuestro juramento.
1 18 ANEXOS BlB LI O C R/\ P (/\ 1 1 <)

- Lo mejor del vallenato (estuche de 5 CD) , Discos La canción com11romc1icl11 y d « fo l k »


DISCOGRAFÍA Fuentes. - Violeta Parra: El folklore de C '/Jill', 1 � M 1 .
- Alfredo Gutiérrez: Vallenato King, Erde Records. - Atahualpa Yupanqui: Don 1\ 10. Tro p i l: < i l
Las músicas sudamericanas en general - Dizzy Gillespie/Chano Pozo: Pleyel Jazz
M usic.
- West fndies an Jsland Carnival, Elektra Nonesuch. Concert 1948, B M G .
Música andina - Soledad Bravo: Chants du Venezuela. B udu
- África en América latina (2 C D ) , Corasón. - Ismael Rivera: Esto s íe s l o mío, Tico.
- Bolivia Manta: Pak'cha, Auvidis. Records.
- Caribbean Beat, Int uition Music. - Rafael Cortijo: Baile con Cortijo y su combo
- Máximo Damián: El violín de lshua, A.S.PI.C. - Silvio Rodríguez: Canciones urgentes, Wa rn c r
- Perú - Música negra, A.S.PI.C. (con Ismael Rivera), Seeco.
- Uña Ramos: Uiia Reunas, Le chant du monde. B rothers.
- Bandolas au Venezuela, Dorian Discovery. - Eddie Palmieri: Echando pa 'lante, Tico.
- Inti-Illimani: A n dadas, Xenophi l e . - Pablo Milanés: Filin, Egrem/Color.
- Totó la Momposina: Carmelina, La bel Bleu. - Celia and Johnny: Caché, Vaya.
- Florencio Coronado: Harpe andine, Playasound. - Daniel Viglietti: Esdrújulo, Aris.
- Guadeloupe - Gwoka - Soirée léwoz a Jabrun, - Willy Colón: Tiempo pa ' matar, Messidor.
Ocora. - Rubén Blades: Mucho mejor, Sonodisc.
El tango - Ray B arretto: My Summertime, E M I . B I B LIOGRAFÍA
- Carlos G ardel: El álbum de oro, EMI/Odeon. - Johnny Ventura: Como el café, Sony.
- A rgentine, terre du tango (estuche de dos C D ) , - Juan Luis Guerra 4.40: Bachata rosa, B MG . Obras generales Reggae, G uinness Publishing Ltd. , Enfield,
EMI, Milán. Leymarie, Isabelle: Du tango au reggae, musiques 1 995.
- Julio de Caro: El inolvidable Julio de Caro y su El calipso, e l «biguine», e l «compas» naires d 'A mérique latine et des Caraibes, Leymarie, Isabelle: Cuban Pire, Musiques
Sexteto Típico ( 1 926-1928), E l bandoneón. - Stellio: Intégrale chronologique 1929-1931 Flammarion, París, 1 996. populaires d'expression cubaine, Outre M esure,
- Tangofón: Gomina, Celluloid. ( 2 CD), Frémeaux and Associates. -Musiques caraibes, Actes Sud, París, 1 996. París, 1 996.
- Quand Paris bigu.inait - Orchestres créoles Moreno Fraginals, Manuel: África en A mérica -La Salsa et le Latin Jaz z , Collect ion «Que Sais­
La música brasileña (1 930-1 940), M M . latina, Unesco/Siglo Veintiuno, México, J e ? » PUF, París. 1 993.
- Noel Rosa: Inédito e desconecido, Sony Music. - Calypso Calaloo ( C D d e l libro homónimo - 1977. Me Gowan, Christ y Ricardo Pessa n h a : The
- Samba Enredo, I m p . véase bibliografía ) . Sweeney, Philip: The Virgin Directory of World Bit/board B oo k of Brazi/ian M11sic, Guinncss
- A incrível bateria d o mestre Marr.;al. Polygram. - Calypso Carnival ( 1 936- 1 941), Rounder. Music, Henry Holt and Company, Nueva York, Publishing Ltd . . Enfiele!, 1 99 1 .
- Antonio Carlos Jobim : Personalidade, Philips. - Harry Belafonte: Golden Records, RCAIBM G . 1991. Meunier. J e a n - Pi e rrc y B r i gi t t e Léa rcléc: La
- Joao Gilberto: Joiio Gilberto, Polygram. - Trinidad - Le carnaval des steel bands, Playasound. Biguine de l'Oncle Ben \ Ernesr Léardée
- Badem Powell: Ria das valsas, JSL. - Arrow: Heavy Energy, Mélodie. Obras especializadas raconre, Ecl i t ions c a r i b é c n n c s . París, 1 989.
- Elis Regina: No fino da bossa nova ao vivo, Velas. - Dédé St-Prix: Levé - A rrete ton délire, Karac. Andreu, Jean ; Francis Cerdan y Anne-Marie Mira Pons, M i c h e l c : Le Reggae, C o l l cct i o n «Üui,
- Maria Bethania: A cervo especial. BMG. - La Compagnie Créole: La fiesta, Arcade. Duffau: Le Tango, hommage a Carlos Carde!, Quand, Quoi » , Hachettc, París. 1 995.
- Mil ton Nascimento: Travessia, Sigla. - Kassav': Majestic zouk, CBS. Actes du Colloque International, 1 3 - 1 4 nov. Monette, Pierre: Le Cuide rlu tango. Triplyq u e .
- Tania Maria: Piquant, Sound Service. - Magnum B and: Sanfwontie, Déclic. 1 984.i Université de Toulouse-le-Mirail, Eché Montreal, 1 99 1 .
- Cantoria: chansons populaires du Nordeste, Auvidis. - Boukman Ekspeyrans: Vodou A djae, Mango. éditeur. Pacini Hernández: Bachata - A Social /-fisrory ofa
- Paulo Moura: Confusiio urbana, sub rana e rural, - Haiti - Rap et ragga - Match la red, Tap tap music. Castro, Ruy: A história e as histórias da bossa Dominican Popular Music, Temple Univers i ly
Braziloid. nova, Editora Schwarts Ltda., Sao Paulo, 1 99· 1 . Press, Filadelfia, 1 995
El «reggae» Clarke, Sebastian: Jah Music, Heinemann Paredes, Américo: A Texas-Mexican Cancionero,
La música cubana, la salsa, el merengue - Toots and the Maytals: Funky Kingston, Mango. Educational Books Ltd., Londres, 1 980. University of Illinois Press, Chicago, 1 976.
- Septeto Nacional: Sones cubanos, Seeco. - Jimmy Cliff: Jimmy Cliff Special, Sony. Geijerstam, Claes: Popular Music in Mexico, Pelinski, Ramón: Tango nomade, Tryptique,
- Sexteto Habanero: Las raíces del son, Tumbao. - Bob Marley and the Wailers: Natty Dread, Tuff University of New Mexico Press, Albuquerque, Montreal, 1 995 .
- Trío Matamoros: La China en la rumba, Tumbao. Gong. 1 976. Perrone, Charles A.: Masters of Contemporary
- Antonio María Romeu: El mago de las teclas, - Peter Tosh: Wanted Dead and Alive, Electrola. Guilbault, Jocelyne: Zouk: World Music in the Brazilian Song, MPB 1 965-1 985, University o f
Tumba o . - B unny Wailer: Protest, Island. West Jndies, The University of Chicago Press, Texas Press, Austin, 1 989.
- Antonio Machín: Cancionero d e oro, v o l . 2 - Burning Spear: Jah Kingdom, Mango. Chicago, 1 993. Ramos Tinhorao, José: PequeFw historia da
(2 CD) , B l ue Moon. Harcourt ( d ' ) , R. et M.: La Musique des Incas et música popular, Art Editora, Ltda., Sao Paulo,
- Arcaño y Sus Maravillas: Danzón mam bo. Mariachis, «Tex-Mex» y «Vallenato» ses survivances, Paul Geuthner, París, 1 925. 1 986.
Tumbao. - Mexican Music - Mariachis, Para Música. Hill, Donald, R . : Calypso Calaloo - Earfy Rondón, César Miguel: El libro de la salsa,
- Arsenio Rodríguez: Dundunbanza, Tumbao. - Narciso Martínez: Pather of Texas, Mexican Carnival Music in Trinidad, University Press of Editorial Arte, Caracas, 1980.
- Pérez Prado: Cuban Mambo, Or feón/Sony. Conjunto, Arhoolie. Florida, Gainesville, 1 993. Rosemain, Jacqueline: La musique dans la sucié1é
- Benny Moré: Voz y obra, Milan Latino. - Los Pingüinos del Norte/Fred Zimmerle and Jallier, Maurice et Lossen, Musique aux A ntilles, antillaise 1 635- 1 902, L'Harmattan, París, 1 986.
- Machi to: Machito and His Afro-Cubans 1 94 1 , Trio: Tex Mex Conjuntos, Arhooli e . Mizik b6 kay, Editions caribéennes, París, 1 985. Salas, Horacio: Le tango, Actes Sud, París. 1 986.
Palladium. - Conjuntofrexas - American Border Music, Jaramillo, Luis Felipe: Música tropical y salsa en White, Timothy: Catch a Pire. - Th.e Life of Boh
- Tito Puente: Mambo of the Times, Picante. Rounder. Colombia, Discos Fuentes, Medellín, 1 992. Marley, Holt, Rinehart and Winst o n . N u e v a
- Tito Rodríguez: Boleros Whit Lave, Palladium. - Colombie-Le va/lenato, OCORA. Larkin, Colin: The Guinness Who 's Who of York, 1 983.
1 20 ANEXOS ÍNDICE DE I LUSTRACIONES 121
47b Partitura de 60 Le Trinidad Ali 74a Caetano Veloso, 92d I Roy, carátula del
ÍNDICE DE ILUSTRACIONES Ah! Gadé Chabine-ld, Steel Percussion carátula de disco. disco Straight to the
un biguine de Orchestra tocando 74b Milton h eart.
15a Danza de negros 27 Miss Hardy, 36-37 El zapateado, A Stellio. bajo la dirección de N ascimen to en 93 Gilberto Gil.
C U B I E RTA Lieutenant N. Joseph concierto en N iza, 94a Tambores de las
liberados en Santo fundadora de la Chic danza cubana,
Grupo de músicos Domingo, grabado Society Tango, litografía, Bibl. nac. de Griffith e n las calles 1 988. cofradías negras de
CAPÍTULO I I I 75 Chico B uarq ue y Venezuela.
de samba, Río de inglés de A. B runias, bailando en el hotel Francia. de Trinidad, en 1 953.
J aneiro. finales del s. XVII I , Cecil, en 1 91 3 . 3 8 a Ignacio Piñeiro y 48 La cantante lnez 6 1 Los habitantes de M a ria Bethania. 94b Tamborileros
Bibl. des Arts D éco, 27d Tango es n; i su grupo El Septeto Cavanaugh en Nueva Port of Spain vestidos 7 6 Bob Marley. de la cofradía de
París. vida, de José Alvarez, Nacional, carátula de Orleans, en 1 949. para el carnaval. 77a J i mmy Cli f'f. S a n Benito,
INTROD UCCI Ó N 49 Insignia del club 62 Steel band en 77b Idem. Ve n ezuela.
1 6- 1 7 Grupo de 1 9 13. disco.
1 Percusionista gauchos músicos 28-29a Vista 38a E l Sexteto Savoy en Harlem, en Maracas Beach, 78 Peter Tosh. 95 Pcrcusionista
brasileño en las argentinos, Société de panorámica de Río de Habanero, carátula 1 947. Trinidad. 78-79 Burning Spear cubano.
calles de Río de Géographie, Bibl. nac. Janeiro, fotografía de del disco Las raíces 50-5 1 Machito y su 63 Steel band en Port en concierto en 96 Percusionista.
Janeiro. de Francia, París. Marc Ferrez, del son. orquesta. of Spain. J amaica, en 1 979.
2-3 Bailarines 17a Danza argentina, principios del s. xx. 39a El trío 51b Machito tocando 80 Bob Marley.
TEST I M O N I OS
cubanos en el postal coloreada de 28b-29b Danza de Matamoros. las maracas. 8 1 a ldem.
CAPÍTULO I V Y DOCUMENTOS
vestíbulo del B anco principios del s. x x . salvajes de la Misión 39b La obertura 52 Cab Calloway y la 8 1 b ldem.
de la Industria, La 1� Bandoneón, 1 9 1 � de san José, acuarela cubana de Gershwin, orquesta del Cotton 64 Bob Marley. 82a Rótulo del Club 97 Rodolfo
Habana, 1 963. Sammlung Oriwhal, de Jean Baptiste partitura. Club, hacia 1 949. 65 Instrumentista de Cheetah en N ueva Valentino vestido de
4-5 Músicos cubanos Berlín. Debret, hacia 1 820, 40b La orquesta de 53 Dizzy Gillespie, reco-reco. York en 1 966. gaucho, fotografía
tocando en e l 1 8 - 1 9 L a Orquesta Bibl. nac. de Francia, Antonio M ." Romeu, en 1 955. 66a Cartelito para 82b Ray B arretto. de la película
restaurante La Típica de Roberto París. carátula del disco 54 Brigitte Bardot anunciar un concierto 83 Celia Cruz, 1 98 1 . Los cuatro jinetes
Bodeguita del Medio, Firpo, en el Cabaret 30 El viaje del grupo Oriente y Occidente. en el rodaje de la de bossa nova en l a 8 4 a Ismael Rivera. del Apocalipsis,
La Habana, 1 984. de los Embajadores, Os B atutas a París, en 40b Cartel que película Y Dios creó Facultad de 84-85 Orquesta de de Rex l ngram,
6-7 Pedrito, cantante en 1 936. 1 922, cartel. anuncia un baile a la mujer, de Roger Arquitectura de Río, merengue, pastel de 1 92 1 .
d e Los Van Van e n un 1 9d Los bailarines 30b Noel Rosa, puertorriqueño en Vadim, en 1 956. en 1 959. J ulio Sen ior. 98-99 Fiesta india
concierto en La Vernon e Irene Castle, carátula de disco, col. N ueva York en 1 932. 55i Orquesta 66b Elizete Cardoso, en Paucartambo,
H abana, 1 986. Col. Library of part., París. 4 1 a Rompiendo la Afro-Cubans. carátula del disco Perú.
CAPÍTULO V
8-9 Bob Marley en Congress, Washington. 3 1 Carmen Miranda. rutina, partitura del 55d El percusionista Canr;ao do amor 100 Carlos Gardel.
concierto. 20 El bandoneonista 32 Escena de carnaval, danzonete de Aniceto Tito Puente, hacia demais. 86 Francky Vincent 1 0 1 /dem.
1 1 Grupo de Aníbal Troilo, acuarela de J ean Díaz. 1 955. .. 67c Tom Jobim durante la entrega 1 0 2 Joséphine Head
mariachis. en 1 944. B aptiste Debret hacia 41b Aniceto Díaz, 56 La orquesta de con Frank Sinatra, de un disco de y Albert Zapp
2 1 a Carlos Gardel, 1 820, Bibl. nac. de creador del Tito Rodríguez, en 1 968. oro, 1 995. bailando el tango en
cartel de Paul Colin, Francia. danzonete. en 1 960. 67b Carátula del disco 87 Tanya St Val, 1 993. el Picadilly Hote l .
CAPÍTULO 1 56-57 Fachada de l a banda sonora 88 El grupo Kassav' 1 03 Cartel de la
Bibl. nac. de Francia, 33 Grupo de niños de 42 Bailarines de
1 2 Negros y negras París. l a Escuela de Samba rumba en Cuba. decorada de una calle original de la pelícÚla en concierto, 1 987. película El día que
de la Martinica 2 1 b Carlos Gardel. D a Portela, Río, 1 930. 43a El cuarteto de de Port of Spain. Orfeo Negro de 89 El grupo Zouk me quieras, 1 935.
bailando la chica, 22 Partitura del tango A n tonio Machín. 57a Benny More, Marce! Camus, 1 959. Machine, en 1 992. 1 04 Atahualpa
grabado coloreado Collar de amores, 1 945. 43b Percusionista de carátula del disco El 68a Baden Powell, 90 Shabba Ranks, en Yupanqui.
CAPÍT U LO I I bárbaro del ritmo. 1 977. 1 992. 1 05 Jdem (detall e ) .
según Grasset de 23 Partitura del tango bongo de l a orquesta
Saint Sauveur, 1 806, La cumparsita. 34 U n a calle de de Edmundo Ros en 57b Carnaval en 68b Elis Regina en un 9 1 a Carlinhos Brown, 1 06 Bob Marley.
Bibl. des Arts D éco, 24 Rodolfo Valentino La Habana, el St Regis Hotel, Trinidad, h acia 1 950. concierto en el carátula del disco 1 08 Jdem.
París. bailando el tango, fotografía de 1 94 1 . 58 Los tres grandes Olympia, 1 978. A lfagamabetízado. 1 09 !dem.
13 Músico brasileño, fotografía de la principios del s. XX. 44 L a orquesta de del calipso ; de 69 Travesti 9 l b Los Van Van en 1 1 0 Celia Cruz,
acuarela de Carlos película Los cuatro 35 Instrumentista de Xavier Cugat. izquierda a derecha : encarnando una concierto en Viena, carátula del disco
J ulia, finales del jinetes del Apocalipsis maracas de la 45a Músicos Lord Beginner, Atilla mulata en el carnaval 1 993. Recordando el ayer.
s. XVI I I , Bibl. nac. de de Rex Ingram, 1 92 1 . Congas Band en el antillanos en La the Hun, Tiger, col. de Río de Janeiro. 92a Kid Frost, 1 1 3 Celia Cruz.
Río de Janeiro. 25 /dem. St Regis Hotel, Nueva Boule Blanche, en part. 70-7 1 Desfile carátula del disco 1 1 4 M ariachis en
1 4i ldem. 26 Los bailarines York. París. 58b The Roaring Lion, durante el carnaval La raza. México.
14- 1 5 El chocolate, Veloz y Yolanda 36 D anza de 45b Joven antillana. en 1 936, col. part. de Río. 92b LSOB ( Lighter 1 1 7 Músicos
danza indígena, bailan e l tango, indígenas en Cuba, 46 B aile en las 59a Harry Belafonte. 7 l d B ailarín brasileño. S hade of Brown) , mexicanos.
grabado coloreado fotografía de la fotografía, Société de Antillas, hacia 1 930. 59b Harry Belafonte 72-73 Desfile durante carátula del disco 1 22 Ca rlos Cardcl
hacia 1 850, Bibl. des película The pride of Géographie, Bibl. nac. 47a Orquesta antillana en la película Island el carnaval de Río. On a sunday vest ido con el traj e
Arts D éco, París. the Yankees, 1 942. de Francia. en París, hacia 1 930. in the Sun . 7 3 d Bailarín brasileño. afiernoon. tradicion a l argent ino .
1 22 ANEXOS ÍNDICE ALFABÉTI CO 1 23

ÍNDICE ALFABÉTICO
Bachata 93, Bomba 94 Canto triste 69
A tecno- 93 B onfá, Luis 69 Canyengue 2 1
A Count Machouki 89 Bachata rosa 85, 93 Boogaloo 83. Capoeira 14
Abaniquito 56 Baker, Joséphine 47, Baranda 69 Cardoso, Elizete 66,
Academias de baile 38 45 Bosco, Joao 75 66
Aces, The 76 B al Blanq ui, Le 47 Bossa nova 66-69, 65, Carinhoso 30
Adidi, Eugene 44 B al Colonial, Le 47 66, 6 7 Carnaval ( A ntillas) 43,
A dieu foulards, Adieu B al Loulou 44 Bossu 46 46 (Brasil) 28, 30,
madras 46 Bal negre 47 Boukhelf, Medhi 1 09 3 1 -33, 32, 33, 69, 71 ,
Afoxé 91 , 93 Bambuco 1 5 B oukman Ekspeyrans 73, 93
Afro-Cubans 5 1 , 52, Bandoneón 1 7, 1 8, 19 94 Carnaval de Cuba 43,
55 B arretto, Ray 82, 83 B oule Blanche 47 53
A h ! Gadé chabine-ld Barrio de tango 20 B rant, Fernando 74 Carnaval de Trinidad
47 B arroso, Abelardo 41 B rasil 13, 14, 28-33, 56, 57, 57, 60, 6 1 ,
A i, ioi6 3 1 B arroso, A r y 3 1 2 9 , 3 8 , 66, 90, 93, 61
Aimaras 1 4 B artee, J ohn 50 93 Carnegie Hall 69
Alberti, Rafael 85 B atera, Chico 69 Brigitte B ardot 54 Castendet, Sam 47
Alegre Ali Stars 82 Batucadas 29 B rookmeyer, Bob 56 Castillo, Guillermo 41
Alf, Johnny (Alfredo B auzá, Mario 4 1 , 50, Brown Skin Gal 59 Castle , Vernon e Irene
José da Silva) 67 5 1 , 52 Brown, Carlinhos 90, 1 8, 1 8
Almeida, Laurindo 69 Be-bop 50, 5 1 , 69, 82 91 Castriota, Samuel 1 0 1
Alphonso, R o l a n d 76 Beautiful People 77 B uarque, Chico 67, 74, Castro, Fidel 82
Amenaza 90 Begin the Beguine 45 75 Catch a Fire 7 9
Amoco Renegades 60 Belafonte, Harry 59, Burning 79 Chacarera 15
Andes 98, 99 59 B yrd, Charlie 69 Chachachá 49, 53, 54,
Antillas 44, 46, 88, 90 Bélé (o bélair) 44, 89, 54, 55
Apanon, Léon 44 94 Chamoiseau, Patrick
c
A quarela do Brasil 3 1 Béroard, Jocelyne 88 88
Aquele Abrar;o 74 Bessieres, Bernard Cabane B ambou 47 Changuito 93
A quí se enciende la 1 05 Cables, The 76 Charanga 40, 82, 82,
candela 91 B etancourt, Justo �3 , Cachao ( Israel López) 91
Ara 93 110 56 Cheetah 83
Arcaño, Antonio 40 B ethánia, Maria 74, Cadence-lypso 88 Chega de saudade 66,
Argentina 14, 14, 1 5 , 75 Cadícamo, Enrique 2 0 67
1 6-2 1 , 1 6 , 1 7, 94 Big Youth 89 Calipso 1 5, 56c60, 58, Chevalier, Maurice 45
Armenonville 1 8, 1 8 Biguine 44-47, 4 5 , 46, 75, 90 Chica 13
Arnaz, D esi 43 89 Calloway Cab 4 1 , 50, Chicas del can, Las 85
Arolas, Eduardo 18 Biguine bel-air 46 52, 52 Chile 1 05
Así es la vida 90 Biguinevidé 46 Calzado, David 93 China 30
Atilla the Hun 58, 58, Bim bom 66 Camus, M arce! 67 Chirrín - Chirrán 9 1
60 Blades, Rubén 83 Canario ( M anuel Ch6ro 30, 93
Aimaras 1 4 Blocas 32 Jiménez ) 41 Chouval bwa 94
Azevedo, Geraldo 93 Blocas afro 93 Canaro, Francisco Cilla, Max 94
Azpiazu, Don 42, 43, Boeuf sur le Toit 47 (Pirincho) 20, 2 1 Civil War i n Spain 59
43 Boeuf sur le Toit, Le Canr;iio do Sal 74 Clapton, Eric 7 9
( D . Milhaud) 33 Candombe 14, 1 6, 17, Cliff, J immy 76, 77
Bofé padmingé 30 1 9, 94
B Cocoa Tea 90
Bolero 36, 40, 66 Candomblé 28, 30, Coen, Augusto 4 1
Bnbylon 78 Bolívar 1 4 93 Cohen, John 99
1 24 ANEXOS fN l ICE

Colombia 1 5, 84, 90, 94 Dans trou crab 'la 46 Ecuador 1 5 Gershwin, George 38, H oudini, Wilmoth 58 arrabal 25 Makuta 36 M o ra l es, N o ro 43
Colón, Wil l i e 83 Danse de Bam Bam, El bo'm bin de Barreta 39 H uayno 99 La Habana 29, 36, 37- M ambo 1 5 , 49, 53-55, M o ré, 1 3 c n n y ."iLI , . 7
Collazo, Fernando 40 La 46 40 Get steady rock 47, 50, 50, 53, 54, 54 M o r e i r a . A i r t o 74
Com que roupa 30 D anza 40 El botellero 50 steady 76 57, 83, 90 M ambo Aces, The 55 Morocha, La 1 8
Compadre Pedro D anza de los diablos El choclo 1 8 Getz, Stan 69 La renta 56 Mambo mona 56 M oscote, Francisco
Juan 85 98, 98 El que siembra su Gil, Gilberto 74, 93, I Roy 89, 92 Labat (cura dominico) Mambo n. º 5 54 114
Campas 88 Danzón 36, 40, 41 , 40, maíz 39 93 I Shot The Sheriff 79 14 M anette, Ellie 60 M oses, Pablo 77
Confesión 20 4 1 , 50, 53, 54 El sancocho prieto 85 Gilberto, Astrud 69 [ Jé Ayé 93 Laghia 1 4 M angano, Silvana 54 M oulin Rouge 1 8
Conga 42, 43, 44, 50, Danzonete 4 1 Elan N oir, L' 47 Gilberto, Joao 66, 69, L mpério Serrano Lágrimas negras 3 9 M angua!, José 50 M oura, Paulo 74
52, 53, 95 D avilita 41 Elizabeth, Ti-Georges 93 ( Escuela de Samba) Lamarque, Libertad Manisero, El 42 M utabaruka 89
Conquista 1 4 D avis, Miles, 6 9 44 Gillespie, Dizzy 50, 52, 33 111 Manteca 53
Contradanza 40 D e Caro, Julio 1 9 Ellington, D u ke 41 52, 53, 69 I n gram, Rex 25 Many Rivers to Cross
Las alturas de
N
Contursi, Pascual 20, D e Jesus, Clementina Ellis, Alton 76 Girl of lpanema, The I1wentor, The 58 Simpson 40 77
101 33 Escuela de Samba 69 Isaacs, Gregory 77 Latin Empire 90, 92. M anzi, Homero 20 Nanny Goal 76
Cool Down Your De Paula, Benito 74 Deixa Eu Falar 33 Gismonti, Egberto 74 l sa mbert 44 Latín New York 82 Marchas 33 N áñigos 53
Temper 76 D e bussy, Claude 67 Escuela de Samba Gobbi, Alfredo 1 8 Iznaga, Alberto 43 Lavóe, Héctor 83 M arimba 37 N ascimento, Milton
Copacabana 3 1 D écimus, Georges 88 Mangueira 33 Gómez de la Serna, Leao, Nara 66 M arinera 14, 15, 95 74, 74
Coqueta, La 1 7 D écimus, Pierre- Escuela de Samba Ramón 1 0 1 , 1 03 Léardée, Stellio y Marley, Bob 65, 76, N atty Dread 79
J
Cordoes 32 Édouard 88 Portela 33 Gonzaga, Chiquinha Ernest 45, 47 76, 78, 81 , 89, 1 06, N egus 81
Corona, M anuel 36 D ek ker, Desmond 76, Escuela de Samba 33 Já te digo 30 Lebrón Brothers 83 1 07 , 1 08, 1 09 N esta, Robert (véase
Cortijo, Rafael 84 77 Salgueiro 33 Gonzaga, Luis 93, 93 Jamaica 74-76, 89, 92 Lecuona, Ernesto 43 Martínez, Rogelio 1 1 2 B ob M arley)
Costa, Gal 74 Delfino, Enrique 1 9 Exodus 79 González, Sergio 1 0 1 J a ra, Víctor 105 Lefel, Edith 89 Martinica 1 4 , 44, N G La Banda 93
Costa e Silva, Arthur Desafinado 66, 67 Ezeiza, Gabino 1 4 Graciela 50 J azz latino 49, 50, 5 1 , 82 Livingston, B unny 88-89, 94 Night in Tunisia 52
da 74 Desvarieux, J acob 88 Gran Combo 84 Jaz z Samba 69 ( B unny Wailer) 78 M atamoros, Miguel 39 Ninon 46
Cotton Club 41 Díaz, Aniceto 41 Grand B alcon, Le 44 Jobim, Antonio Carlos Lobo, Edu 69 Mathilda 59
F
Count Ossie 77 Díez, Barbarito 40 Greco, Vicente 1 8 (Tom) 66, 67, 67, 69 Lobos del Mambo, Maxixe 28
o
Creuza, Maria 69 D illinger 92 Failde, Miguel 40 Grenet, Eliseo 43 Johnson, Linton Los 56 Mazurca 46
«Criollización» 1 4 D isco 90 Feliciano, Cheo 83 G uaco 94 Kwesi 89 López, Orestes 53 Me lntosh, Peter O orvalho vem
Cruz, Celia 4 1 , 83, 83, Djavan 75 Fender, Freddy 1 1 7 Guadalupe 88-89, 89, Jo ropo 1 5 Lord Executor 58 ( Tosh) 78, 78 caindo 30
1 10, J J O, 1 11 , 1 1 2, Do the Reggae 76 Filhos de Gandi 93 94 J o rrín, Enrique 54 Lord Kitchener 59 M el Jow M an Ace 92 Obertura cubana
1 13 D odd, Clement Firpo, Roberto 18, 25 Guaguancó 1 4, 42 Juan Pachanga 83 Lord Melody 59 Mendes, Sergio 69 ( G . Gershwi n ) 38,
Cuadrilla 46 Coxsone 75 Flor de durazno 21 Guajira 36 J ules, Neville 60 Los Van Van 90, 91 Menescal, Roberto 69 39
Cuatro jinetes del Domingo no parque 74 Flor de fango 20 G uaracha 83 J u nior Smith 76 Louie M áquina 55 Mento 75 Oito B atutas 30, 30
Apocalipsis, Los 25 Dominica, isla 88 Flores, Celedonio 20 Guerra, Juan Luis 85, Louvar;ao 74 M ercado, Ralph 82 Oliveria, Aloysio de
Cuba, 1 � 1 4 , 1 � 36, Dominicana, Formell, Juan 91 93 Lucca, Papo 84, J J O Merengue 84, 85 67
K
36, 37, 39, 39, 40, República 13, 84, Forro 93 Gwoka 89, 94 Luces d e B uenos Merengue ripiao 84, 85 Ol odum 93
55, 75, 82, 83, 90, 85, 93 Forrobodó (Chiquinha Kalinda 1 4 Aires, Las 21 Mi noche triste 20, Ó pera bufa 38
91 , 93, 94 D omino, Fats 76 Gonzaga) 33 Kassav' 88, 88, 89 Lundú 28 1 00, 1 01 Oréfiche, Armando 43
H
Cubana Be Cubana D onato, Joao 69 Fresedo, Osvaldo 1 8 Kenton, Stan 50 Michael, Ras 77 Orfeo Negro 67, 67
Bop 53 D onga 30 Funk 89 Habanera 1 6 , 28 Kessel, B arney 69 Milhaud, D arius 28, 33 Orfeu da Conceir;iio
M
Cueca 95 D os Prazeres, H e i tor H aití 88, 90, 94 Ketu 93 Milonga 1 6, 19, 94 67
Cueto, Rafael 39 33 Hansen 1 8 Kíd Frots 92 Machado, Gerardo 36, Milton 74 Orquesta A mérica
G
Cugat, Xavier 44, 44, Douglas, Wal ter 58 Happy B oys 43 Kíller Joe Piro 55 38 Millie y sus vecinos 54
45 Dr ummond, Don 76 G a ray, Sindo 36 Harder They Come, Kíng Cole, N a t 67 Machín, Antonio 43 85 Orquesta Aragón 40
Cultier, M arius 88 Dub 89, 92 García M árquez, The 76 Kíng Tubby 75, 92 Machito (Frank Miranda, Carmen 3 1 , Orquesta S i bone y 43
Currulao 94 D unbar, Sly 79 Gabriel 1 1 4 Harding, Miss 2 7 Kubitschek, Juscelino Grillo) 50, 50, 5 1 , 31 Orquesta Sinfónica
D urán, A lejo 1 1 5 Gardel , Carlos 20, 20, Harlow, Larry 1 12 66 52, 83 Miranda, Ismael 83 Nacional ( Cuba)
21 , 25, 1 00, 1 0 1 , 1 02, Hay cráneo 56 Macumba 30 Mistinguett 1 8, 47 50
D
103 Henderson, Gordon Madness 76 Mittoo, Jack 76 Orquesta típica criolla
E L
Da Vila, Martinho 74 Carota de lpanema 69 88 Maffia, Pedro 1 8 Monk, Thelonious 50 1 8, 1 9
Dan Dén 93 East Harlem 41 Garvey, Marcus 77, Hernández, René 56 La Boca 17, 1 8 M aglio, J uan (Pacho) Moraes, Vinícius de Outra vez 66
Dancehall 89, 90 Échale salsita 39 81 Hip hop 90, 92 L a muchacha del 18 66, 67, 68 Oye cómo va 55
1 26 ANEXOS CRÉDITOS FOTOG RÁFI COS 1 27

Qué vou dizer eu 69 Ros, Edm undo 35, 43 Shank, Bud 69 Tha1 Nighr in Río 3 1 Vaval 46 Wild World 77
p The Afro-Cubans 50
u Veloso, Caetano 74, Wonderful World 77
Qué vachaché 20 Rosa, Noel 30 Shearing, George 67
Quinto 95 Rosario, Wi l lie 84 Shing a ling 83 Tiger, Growli n g 58, Ultimo desejo 30 74
Pacheco, Johnny 83
Royal Pigall 1 8 Shorter, Wayne 74 59, 90 U Roy 92 Veloz 2 7 X
Paga n i , Federico 43
Tin Tin Deo 5 3 Under M e Sleng Teng Venezue la 1 5 . 84, 94.
Palmieri, Eddie 56, 83 R Ruiz, Rosendo 36 Si lva, Ismael 33
Tiso, Wagner 74 94 Xote 94
Palmieri, Charlie 83 Rumba 35, 39, 42, 43 Silva, Myrta 1 1 2 89
Ragga 89, 90 Rumba brava 14, 36, Si/ver Star 54 Tito N. º Z 56 Uprising 79 Ve n t ura , J o h n ny 85
Palladium Ballroom 54
Raggamuffin 90, 90 43, 95 Simmer Down 78 Toots y The Maytals Urfé, José 40 Vera, M a ría Teresa y
Panamá 1 5
Ran kan kan 56 S i m o n , Winston Spree 76 Ursull , Joelle 89, 89 50
Panberi 60
Ranks, Shabba 90 60, 74 Toq uinho 69 Uruguay 1 4, 94 Vía, Pedro 4 1 Y Dios creó a la
Paniagua, Leonardo 93 s
Parker, Charlie 50, 5 1 Rap 89, 90, 90, 9 1 , 92 Sims, Zoot 56 Tres lindas cubanas Vicia!, Carlos 50 mujer 54
Rasin 94 Sablon, Jean 45 S i n h 6 30 41 Villa-Lobos, Hcitor Ye llowman 89
Parra, Violeta 1 0 5 V Yira yira 20
Pascoal, H e r m e to 74 Rastafarismo 76, 78, Saborido, E n ri que 1 0 1 Sir Lord Comic 89 Trinidad 1 4, 56-60, 63, 28
1 06 Saint Prix, Dédé 94 90 Valclés, M iguelito 44 Villalón, Alberto 36 Yolanda 27
Pasi l l o 1 5 Sivuca 74
Saint-George 83 Trin idad Ali Steel Valclés, Patato 95 Vil lolclo, Ángel 1 0 1 Yoruba 93
Pasodoble 4 1 Rastaman Vibrations Ska 76, 76, 77
79 Salgán, H o racio 2 1 Skatalites 76, 78 Percussion Valentín, Bobby 84 Vincent, Francky 87, Yuka 36
Pastoras 33
Razzano, José 20, 100 Salsa 1 5 . 28-3 1 , 30, 38, Orchestra 60 Valentino, Roclolfo 25 89 Yupanqui, Atahualpa
Pastorita tiene Slavery Days 79
Recuerdo 20 65, 67, 67, 7 1 ; S m i t h , Wayne 89 Trío Matamoros 39, Valses 4 Virgal, Eric 89 104, j 04, 1 05
guararé 91
Red Dragón 90 afro-68 �� Soca 90 39, 43 Valvercle, Umberto
Patricia 54 •

Payada 1 6 Refazenda 93 Samba 1 5 , 28-3 1 , 30, Socarrás, Alberto 4 1 , Troilo, Aníbal 20, 20, JJO
w z
Reggae 1 5, 65, 76-78, 38, 65, 67, 67, 7 1 ; 52 21 Val/enaLO 1 1 4, 1 1 5
Paz, Víctor 56
77, 79, 89, 90, 90, Tropicalista 74, 93 Van Van 9 1 , 93 Wailer, Bunny 78 Zaire 39
Peannut Vendar, The afro-68 Son 28. 36-39, 38. 39,
93, 1 06, 1 07 Samba-canr;tío 3 1 , 66. 40, 4 1 , 4 1 , 43 Trovadores 36, 38 Vanclré, Geralclo 74 Waili n g Wailers 78, Zapateado 37
42, 51
Reggae roots 79 74 Truj i l l o , Raclamés 84 Vargas, Getúlio 3 1 78 Zephaniah, B e nj a m i n
Pelo telefone 3 1 Son de la loma 39
Regina, Elis 68, 69 Samba-exa/tar;üo 3 1 Tumba 8 4 Vargas, Wi l friclo 85 Wanderley, Wal ter 69 89
Perú 1 4 , 1 5, 95, 98 Songo 9 1 , 93
Reid, Duke ( The Samba reggae 93 Sonora Matancera 1 1 2 Turrentine, Stanley Vaudou 94 Webb, Chick 41 Zouk 87, 88, 88
Piazzolla, Astor 2]
Trojan) 75 Samba- versados 33 74 Vaughan, Sarah 74 West Kingston 76 Zouk M achine 89, 89
Picadillo 56 Sonora Ponceña 84
Pickin 'the Cabbage 52 Reis, M ario 31 Sampling 90 Soukous 39
Piñeiro, Ignacio 38, Rhytm 'n blues 75, 83 Sanabria, l zzy 82 Spear, Burning 79
39, 50 Río de Janeiro 29, 30 Santa Cecilia 85 S t effens. Roger 1 09 CRÉDITOS FOTOGRÁFICOS
Pixi nguinha 30 Rivera, Ismael 84, 84 Santamaría, Mongo 69 St Val, Tanya 87, 89
Plástico 83 Rivera , Mario 56 Santana 55 Stellio 47 Abreviaturas: a = arriba ; b = abaj o ; e = centro ; d = derecha ; i = izquierda
Platters 76 Roaring Lion 58 Santos, Daniel 4 1 Stellio, A lexandre 47 Pierre Allard 98-99. J.-L. Charment, París 1 2, 1 5a . Dagli-Orti , París 1 3 , 1 4i , 1 4- 1 5 . Bib l . nac. de
Pl ena 41 , 94 Rock steady 76 Santos Discépolo, Stellio's Band 47 Francia 1 6- 1 7 , 2 l a, 28b, 29b, 32, 36, 36-37. Cól. Sirot, París 17a, 28-29a, 34. AKG , París 1 8i , 22, 23,
Porter, Cole 45. 67 Rock 'n rol/ 74, 75, 76 Enrique Sua vecito 38 27d. DR 1 8- 1 9, 20, 30 30b, 33, 38, 39, 40, 41 , 43a, 47b, 5 1 b, 57a, 58, 66, 67b, 74a, 84a. 84-85, 91a, 92a,
Powe l l , Baden 68, 69 Rodney, Winston (Discepolín) 20, 20 92b, 92d, 1 03 , 1 1 0, 1 1 3. Library of Congress, Wash ington 1 9, 53, Adriana Groisman/Contact Press
lmages 2 1 , 1 00, 1 0 1 , 1 22 . BFI, Londres 22, 23, 3 1 , 97. The H ul ton Getty, Londres 26, 27, 35, 42, 43b,
Pozo, Chano 52, 53 (Burning Spear) 79 Saudades do Brasil
T
Prac;:a Onze de Junho Rodríguez. Arsenio (D. M i l haud) 33 45a, 47b, 60, 102. N a t i o n a l Archives, Was h ington 44, 5 2 . Roger V i o l l e t , París 45b, 46, 47a, 5 5 i .
( Río) 28 53 Savoy B a l l ro o m 49, 52 Tagada 47 A r c h i v e p h o t o s , P a r ís 4 8 , 4 9 , 5 0 - 5 1 , 5 5 cl , 5 6 , 5 9 a , 6 0 - 6 1 , 6 7 c , 8 2 b . C o l . C a t 's , P a rís 5 4 .
Schifrin, Lalo 69 Tamborito 1 5 Explorer/FPG , París 1, 5 9 b . Explorer, París 6 5 b , 69. Rapho/F. A n c e l l e t 96. Rapho/G . S i o e n , París
Prado, Pérez 53, 54, 55 Rodríguez, Ciro 39
Rodríguez, Pete El Segura, Luis 93 Tanga 50 62. Raph o/J . Launois, París 63. Rapho/Olivier Marte! 1 1 . Rapho/Sera i l lier cubierta. Rapho/Marc
Prince Buster 76
Conde 83 Septeto Nacional 38, Tango 1 5 , 1 6-2 1 , 18, Tulane 4/5. Rapho/Franc;:oise H uguier 6-7. Stills, París 8-9, 64, 74b, 75, 76, 77a, 77b, 78, 80-8 1 , 87,
Puente, Tito ( E rnest o )
89, 90. S t i l l s/Onyx/Ta l am o n 108. S t i lls/Re t n a/Cor t o 1 0 9 . J . P. Leloir, París 68a, 68b, 78-79, 83.
55, 55, 56, 83, 1 7 0 Rodríguez, Rico 76 39, 39 25, 27, 29, 4 1 , L OO.
Magnum/B runo Barbey l í7 . Magnum/Yann Berry, París 70-7 1 , 72-73. Magnum/Rio Branca, París,
Puerto Rico 4 l , 56, 83, Rodríguez. Tito 5 5 . 5 6 , Sete ( Djalma 1 0 1 , 10 2 , 103
7 1 cl , 73cl. Magn um/Eric D ussaud 95 . Magnum/René Burri 2-3, 1 1 4. M agnum/J e a n G a u m y l 04.
8 4 , 9 0 , 94 56 Anclraclc ) , Bola 69 m i longa 1 6
Magnum/Alex Webb 106. PPCM , París 82a. Kipa, París 86, 88. M ep h isto, París 9 l b . Sygma/Tony
Pugliese, Osvalclo 20, Rocna , Roberto 84 Sevilla 39 Tecno 89
Frank 93. Michel Plisson, París 94.
2l Rome u , Antonio Sexteto Boloña 38 Teles, Silvia 69
M aría 40. 41 Sexteto H abanero 38, Terry, Clark 56
Rompiendo la rutina 38, 4 1 Tex-Mex 1 1 4, 1 1 5 AGRADECI MIENTOS
Q
41 Sexteto Occidente 3 8 T h amar, Ralph 89
Qué palo e s ése 9 1 Rondón, César M iguel S hakespeare, Robbie Thanas, Frarn,:oise El autor y l a editorial G a l limard agradecen su valiosa colaboración a los Servicios culturales de la
1 12 79 105 Embajada ele Brasil en París, así como a Olivier Cachin, Marie-Anne Desquenes y H éctor Herrera.
Qué rico el mambo 54
1 28

Índice de materias
I EL NACIMIENTO DE LAS IV LA EXPLOSIÓN MUSICAL
MÚSICAS LATINAS
66 La nueva ola brasileña
1 4 El mestizaje musical 68 Las cartas de nobleza de la
1 6 El tango enfebrecido de los «bossa nova»
gauchos 70 Profusión de colores
20 El alma de Argentina 72 Trances extáticos
24 Apocalipsis en la pista de 74 Los «Seventies» de Brasil
baile 76 Del « ska» al «reggae»
26 Los años locos del tango 78 «Rude boys» y «rastas » de
28 Samba africana, samba' Kingston
brasileña 80 El león vivo
30 « Samba-exaltayao» . 82 Nueva York: barrio latino
�2 Música callejera 84 El impetuoso merengue

) 1 g . o�::> f2 �&)
II EL FULGOR DEL CÁR il3 E V FUNK, TECNO
.
L e. 'Í.
-· · Y E L RETORNO A LAS RAÍCES
36 El crisol cubano . � � g )..¡ q
.

38 «Trovadores, sextetos y s.eptetos)> · · 88 Mazurca criolla


40 De Matanzas a East Harlem 90 Raperos tropicales
42 «Latin bands » para «dancings» 92 «Rap latino» y « Samba-reggae »
americanos 94 Raíces
44 «Begin the Beguine»
· 46 Orquestas criollas y bailes
negros TESTIMONIOS Y D OCUMENTOS

98 La música tradicional de los


III LA EDAD D E ORO Andes · ..

1 00 Carlos Gardel, figura mítica del


50 Afro-Cubans tango
1 04 Revuelta y compromiso
político
106 Bob Marley, el dios del «reggae»
1 1 O Celia Cruz, reina de la música
cubana
1 1 4 «Vallenato» y «Tex-Mex»
1 1 8 Anexos

También podría gustarte