Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Tepehuas PDF
Tepehuas PDF
CONSULTORÍA EN DEMOGRAFÍA
Constanza Rodríguez Hernández
Carlos Guadalupe Heiras Rodríguez es pasante de etnohistoria, investiga temas relacionados con la cosmovisión e identi-
dad entre otomíes orientales y tepehuas.
http://www.cdi.gob.mx
TEPEHUAS
MARICELA HERNÁNDEZ MONTES
CARLOS GUADALUPE HEIRAS RODRÍGUEZ
http://www.cdi.gob.mx
CDI
972.004
C65
TEPEHUA
Hernández Montes, Maricela
Tepehuas / Maricela Hernández Montes, Carlos Guadalupe Heiras
Rodríguez -- México : CDI : PNUD, 2004.
39 p. : retrs., tabs. (Pueblos indígenas del México contemporáneo)
Incluye bibliografía
ISBN 970-753-031-6
http://www.cdi.gob.mx.
Queda prohibida la reproducción parcial o total del contenido de la presente obra, sin contar previamente con la autorización
del titular, en términos de la Ley Federal del Derecho de Autor, y en su caso de los tratados internacionales aplicables. La
persona que infrinja esta disposición se hará acreedora a las sanciones legales correspondientes.
http://www.cdi.gob.mx
TEPEHUAS
TEPEHUAS
1
Traducción del profesor bilingüe Godelevo Gervasio Carlos.
2
Artículo vigente hasta julio de 2001.
http://www.cdi.gob.mx
PUEBLOS INDÍGENAS DEL MÉXICO CONTEMPORÁNEO
http://www.cdi.gob.mx
TEPEHUAS
http://www.cdi.gob.mx
PUEBLOS INDÍGENAS DEL MÉXICO CONTEMPORÁNEO
Los verbos tepehuas, lo mismo que en la que todas las lenguas amerindias de Latino-
lengua totonaca, están compuestos de raí- américa, ha retomado palabras de origen
ces y numerosos afijos, los cuales definen español, de la misma manera en la que el
el tiempo, diversas nociones adverbiales, castellano ha adoptado palabras de las len-
persona, número de sujeto y objeto, grados guas nativas con las que ha estado en con-
de transitividad, etcétera. Los sustantivos se tacto. En nuestros días, la mayoría de los
componen frecuentemente de varios sus- tepehuas habla también español, aunque
tantivos simples; por ejemplo, en el tepe- hay algunos que sólo hablan tepehua; mu-
hua de Tlachichilco, laka-stapu, “pupila”, chos de ellos pronuncian los préstamos del
literalmente se traduciría como “ojo-frijol”.7 español de acuerdo con los fonemas (soni-
8 El tepehua también puede definirse como dos con rasgos pertinentes para una lengua
un idioma sintético o polisintético, ya que dada) tepehuas; por ejemplo, la palabra ca-
su compleja morfología (estructura de las ballo, que no forma parte del vocabulario
palabras) “empaca” en una sola palabra tepehua debido a que no existía este ani-
muchos morfemas, que en otras lenguas mal antes de la llegada de los europeos a
serían palabras independientes.8 América, se pronuncia kawayu.9 En el mis-
Como todas las lenguas, el tepehua ha mo sentido, la mayoría de las palabras que
tomado préstamos de otros idiomas con los llevan el fonema /r/, suelen ser préstamos
que ha tenido contacto. El tepehua, al igual del español.10 Fonéticamente, una de las
diferencias entre el tepehua y el español la
encontramos en sus vocales, conformadas
7
J. Ingle, “Totonac”, en R.E. Asher y J.M.Y. Simpson por la /i/, /a/ y /u/, y sus versiones largas: /i:/,
(eds.), Encyclopedia of Language and Linguistics, /a:/ y /u:/ (o, si se prefiere: /aa/, /ii/, /uu/),
vol. 9, Oxford, New York, Seoul, Tokyo, Pergamon
Press, 1994, p. 4640. siendo estas últimas pertinentes para dis-
8
M. Fortescue, “Morphology, Polysynthetic”, en
R.E. Asher y J.M.Y. Simpson (eds.), Encyclopedia of
Language and Linguistics, vol. 5, Oxford, New York, 9
J. Ingle, op. cit., p. 4641.
Seoul, Tokyo, Pergamon Press, 1994, p. 2600. 10
James Watters, op. cit., p. 87.
http://www.cdi.gob.mx
TEPEHUAS
tinguir una palabra de otra; por ejemplo, te tepehuas, pero se adoptó finalmente el
shqan significa “mosca” y shqa:n (o shqa- otomí. Esta cercanía, pertinente asimismo
an), “vaina del maíz”.11 para una serie de prácticas rituales —en-
Una peculiaridad del tepehua es que tre las que destaca el recorte de papel, del
sus hablantes pueden comunicarse silban- cual hablaremos más adelante—, es útil
do la lengua. En 1952, George Cowan pu- para entender, respecto del idioma silba-
blicó un artículo en el que daba cuenta de do, que tepehuas y otomíes llevan a cabo
que, en Huehuetla, los hablantes de tepe- rituales en los que la música, imprescindi-
hua podían comunicarse sin pronunciar las ble en cualquier acto devocional, comparte
vocales, silbando frases; de cerca, podían esta cualidad cantable: la música de cos-
escucharse las consonantes; cuando la co- tumbre supone una melodía interpretada
municación se establecía a distancia, no se por el violín, misma que, aunque no siem-
oían las consonantes, pero el emisor silba- pre cantada, es traducible lingüísticamen-
ba siguiendo “el contorno entonacional de te; además, la melodía en el ritual indica
la expresión hablada”,12 pudiendo silbar no la fase ritual específica, operando como un
sólo el tepehua sino también el español. Es- mensaje lingüístico que puede ser interpre-
ta característica no es exclusiva del tepe- tado por quienes conocen el código.14 9
hua: también es una posibilidad del otomí
oriental, el que se habla en la Huasteca, LOS TEPEHUAS A TRAVÉS
vecino del tepehua.13 Esto nos obliga a su- DEL TIEMPO
brayar la estrecha relación entre tepehuas La historia del grupo tepehua, como en ma-
y otomíes orientales (y, aunque menos cer- yor o menor medida la de todos los grupos
canos, también los nahuas de la Huasteca indígenas, está por escribirse. Con todo,
meridional): muchas comunidades en las sabemos algunas cosas sobre los tepehuas
que hoy se habla otomí fueron antiguamen- del pasado.
En la Historia tolteca-chichimeca se de-
11
Ibid., p. 88.
finen Tlematepeua (hoy Tlamacuimpa, mu-
12
George M. Cowan, “El idioma silbado entre los nicipio de Ilamatlán, estado de Veracruz),
mazatecos de Oaxaca y los tepehuas de Hidalgo,
México”, en Tlatoani, vol. I, núms. 3 y 4, México,
Instituto Nacional de Antropología e Historia,
mayo-agosto de 1952, p. 32. 14
Véase Charles Lafayette Boilés, “Tepehua
13
Véase Juan H. Hasler, “El idioma silbado”, en La Thought-Song: a Case of Semantic Signaling”,
palabra y el hombre, núm. 15, Xalapa, Universidad en Ethnomusicology, vol. XI, núm.3, Middletown,
Veracruzana, julio-septiembre de 1960. Wesleyan University Press, 1967.
http://www.cdi.gob.mx
PUEBLOS INDÍGENAS DEL MÉXICO CONTEMPORÁNEO
Tezcatepeua (el actual Texcatepec), Tle- español y algunos otomí; es muy probable
quaztepeua (el desaparecido Tlaquetzalo- que la población del lugar no haya abando-
yan, municipio de Tlachichilco), Tzanate- nado su residencia sino que haya cambiado
peua (actualmente Zanatepec, municipio de idioma. Francisco de Zorita registra que
de Venustiano Carranza) y Tecollotepeua durante el periodo colonial, en Jalpan (hoy
(ahora llamado San Mateo Tecolotlán, mu- parte del estado de Puebla) hubo tepehuas,
nicipio de Pahuatlán, estado de Puebla) co- además de otomíes y nahuas.18 En el mismo
mo aliados de Tollan15 entre los siglos X y sentido, todavía en el paso del siglo XIX al
XIII. Ixtlilxóchitl, cronista náhuatl educado XX, el antropólogo norteamericano Frede-
por los españoles al momento del contac- rick Starr registró tepehuas en Tlaxco (es-
to entre el Viejo y el Nuevo Mundo, reve- tado de Puebla)19 ubicados ambos, Jalpan
la la identidad de uno de sus informantes: y Tlaxco, efectivamente, al oeste del terri-
“de nación Chichimeco Tepehua, oriundo torio tepehua de nuestros días.
de Conzoquitlan, pueblo aledaño a Tuto- Este muy probable desplazamiento de los
tepec”.16 La nación del informante del cro- hablantes de tepehua de noroeste a sureste
nista y los sitios declarados aliados de To- coincide con la memoria de los propios te-
10 llan coinciden en términos generales con pehuas de Hidalgo y Puebla, muchos de los
las definiciones contemporáneas del terri- cuales reconocen que sus abuelos, sus pa-
torio tepehua, aunque se aprecia que, de dres o ellos mismos en el caso de los más
ser ciertas nuestras suposiciones, las fron- viejos, llegaron a vivir a comunidades toto-
teras tepehuas llegaban más al norte y más nacas ya existentes o formaron nuevas co-
al oeste que en nuestros días. munidades al sureste del lugar de donde
En 1569, el prior de Huayacocotla in- partieron, motivados, en su mayoría, por la
forma que en Texcatepec había dos sitios: escasez de recursos y, para el caso de los
Patlahuica y Omaxac, que eran tepehuas.17 migrantes de principios del siglo pasado,
En nuestros días, en Amaxac (seguramente como respuesta a la violencia resultante del
el antes llamado Omaxac) la mayoría habla movimiento revolucionario de la segunda
década del mismo siglo. Algunos descen-
dientes de tepehuas que arribaron a comu-
15
Roberto Williams García, Los tepehuas, Xalapa, nidades totonacas, muchos de ellos naci-
Instituto de Antropología de la Universidad Vera-
cruzana, 1963, p. 43.
16
Ibid., p. 49. 18
Ibid., p. 38.
17
Ibid., p. 60. 19
Idem.
http://www.cdi.gob.mx
TEPEHUAS
11
Sitio arqueológico huasteco del posclásico en el actual territorio otomí-tepehua-totonaco. Cerco de
Piedra, Francisco Z. Mena, Puebla.
Fotógrafo Carlos Heiras, 2002.
Acervo personal.
dos ya en este lugar al que sus ancestros con la hipótesis de Valle,21 otros tepehuas
inmigraron, no aprendieron el tepehua sino hicieron lo mismo respecto del nahua.
el totonaco y/o el español. En otras comu- Esta redefinición de las fronteras territo-
nidades tepehuas, según registró Roberto riales tepehuas responde, pues, por un la-
Williams a mediados del siglo XX en Tzi- do, al abandono de la lengua materna en
catlán (municipio de Texcatepec), los nati- favor de otras más utilizadas y, por otro,
vos tepehuas abandonaron su idioma ma- a movimientos migratorios a través de los
terno en favor del otomí20 (como sugiere, cuales los tepehuas, todavía hasta media-
en el mismo sentido, la información sobre dos del siglo XX, ocuparon espacios habi-
Amaxac) y muy probablemente, de acuerdo tados o no. Este movimiento poblacional
20
Ibid., pp. 26-28. 21
Julieta Valle Esquivel, comunicación personal.
http://www.cdi.gob.mx
PUEBLOS INDÍGENAS DEL MÉXICO CONTEMPORÁNEO
http://www.cdi.gob.mx
TEPEHUAS
http://www.cdi.gob.mx
PUEBLOS INDÍGENAS DEL MÉXICO CONTEMPORÁNEO
http://www.cdi.gob.mx
TEPEHUAS
escala y se cazan animales como armadi- El cultivo de frijol, maíz y café requie-
llos, conejos, tuzas reales y tejones. Como re un arduo trabajo en el campo. En la re-
entre los grupos vecinos, a nivel domésti- gión suelen darse dos cosechas al año: la
co se crían gallinas, cerdos, guajolotes y, en de temporal o época de lluvias y la de épo-
ocasiones, patos. Algunos tepehuas poseen ca de secas o tonalmil. Algunas variedades
cabezas de ganado vacuno, pero lo más fre- de chile suponen también el trabajo de la
cuente es que la ganadería sea una activi- siembra, la limpia y la cosecha; otras se dan
dad a la que se dedican los mestizos de la de manera silvestre, por lo que sólo hay
región, quienes han acaparado las mejores que recolectarlas; también se practica el
tierras para ello. Muchos tepehuas tienen ahumado de algunas de estas especies.
perros para la cacería y para cuidar la ca- En la vida cotidiana, las mujeres se en-
sa, y burros o mulas para cargar los pro- cargan de preparar los alimentos, cuidar a
ductos que se cosechan y algunas veces se los hijos, acarrear la leña y el agua, lavar
comercian. la ropa y en algunos casos se dedican a al-
http://www.cdi.gob.mx
PUEBLOS INDÍGENAS DEL MÉXICO CONTEMPORÁNEO
http://www.cdi.gob.mx
TEPEHUAS
17
Llevando productos para la venta en el día de plaza en la cabecera municipal. Huehuetla, Hidalgo.
Fotógrafo Fernando Rosales, 2003.
Fototeca Nacho López, CDI.
http://www.cdi.gob.mx
PUEBLOS INDÍGENAS DEL MÉXICO CONTEMPORÁNEO
http://www.cdi.gob.mx
TEPEHUAS
http://www.cdi.gob.mx
PUEBLOS INDÍGENAS DEL MÉXICO CONTEMPORÁNEO
http://www.cdi.gob.mx
TEPEHUAS
21
Estructura de la casa tradicional. Xalame, Tlachichilco, Veracruz.
Fotógrafo Carlos Heiras, 2000.
Acervo personal.
otro familiar menos cercano, por ejemplo La vivienda suele tener base rectangu-
el nieto. La vivienda tiende a ser hereda- lar, con techos redondeados o no en las
da al hijo menor, siempre que éste se haya esquinas. El redondeado en la esquina su-
encargado del cuidado de los viejitos. La
tierra, en cambio, aunque suele heredarse
al hijo varón mayor, puede también dividir-
La vivienda suele tener base
se entre varios hijos, incluidas las mujeres,
rectangular, con techos
dependiendo de la vastedad del recurso y
de otros factores: la existencia de conflic- redondeados o no en las esquinas.
tos intradomésticos, la cantidad de hijos, Algunas casas cuentan con horno
la condición económica del yerno o nue- de pan, granero y corral, construyen
ra y el lugar de residencia de los hijos, en- también temascales de piedra.
tre otros.
http://www.cdi.gob.mx
PUEBLOS INDÍGENAS DEL MÉXICO CONTEMPORÁNEO
http://www.cdi.gob.mx
TEPEHUAS
http://www.cdi.gob.mx
PUEBLOS INDÍGENAS DEL MÉXICO CONTEMPORÁNEO
http://www.cdi.gob.mx
TEPEHUAS
25
Quienes ocupan los cargos religiosos se encargan de mediar entre la comunidad y lo divino y se rotan
año con año. Huehuetla, Hidalgo.
Fotógrafo Fernando Rosales, 2003.
Fototeca Nacho López, CDI.
nos que habitan el mundo, y las segundas La fiesta patronal suele durar varios
en la celebración del Carnaval. días, para cada uno de los cuales se nom-
Los mayordomos, casi siempre hom- bra a un mayordomo, quien debe alimen-
bres y a veces también mujeres, son res- tar, con ayuda de su familia y algunos ve-
ponsables de conducir adecuadamente cinos, y dar de beber a quienes participen
el ritual con la ayuda de los especialis- en la fiesta, así como pagar a los músicos,
tas rituales. A los mayordomos de cada comprar los cohetes y elaborar los arre-
fiesta se agregan, en algunas comunida- glos florales y muñecos de papel recorta-
des tepehuas, los mayordomos vitalicios, do para la ofrenda. En cambio, los gastos
especie de consejo de ancianos que su- del Carnaval, que también dura varios días,
pervisa y orienta respecto de las prácti- se dividen entre los capitanes; junto con
cas religiosas. sus familiares y vecinos, cada día un capi-
http://www.cdi.gob.mx
PUEBLOS INDÍGENAS DEL MÉXICO CONTEMPORÁNEO
tán se encarga de ofrecer un convite a los para lo cual utilizan máscaras que van de
danzantes, mientras otros capitanes pagan las narigonas de confección local a las de
la música de viento y el baile del último producción industrial traídas de alguna ciu-
día, y otros más, los cohetes. Muchas de dad (actualmente muchas de ellas parodian
las capitanías menores son asumidas por a personajes famosos); 2) damas, hombres
los miembros jóvenes de la comunidad; vestidos con indumentaria femenina; 3) dia-
cada vez con mayor frecuencia, estos car- blos, que portan un lazo y cuyo disfraz in-
gos son desempeñados por mujeres que cluye una cola; 4) comanches, con plumas
tienen recursos económicos propios gra- y espejos por tocado y una pequeña falda
cias a que también ellas migran en busca de corcholatas o cascabeles y; 5) animales,
de trabajo. Estos capitanes menores, jun- gatos y toros, fundamentalmente.
tos, se distribuyen los gastos de la música En toda la región, participar en el Car-
y los cohetes. naval es sinónimo de jugar; es del juego de
De todas las fiestas y celebraciones sin las transgresiones del que se trata. La fiesta
duda es el Carnaval la más concurrida y la tiene fundamentalmente dos aspectos pa-
que mayor expectativa genera entre los par- ralelos: la inversión de las prohibiciones
26 ticipantes. Suele principiar el sábado ante- sexuales y la inversión de las relaciones de
rior al Miércoles de Ceniza y terminar con subordinación. Respecto del primero, los
un baile que inicia la noche del martes y disfraces incluyen la simulación del miem-
finaliza la mañana del Miércoles de Ceni- bro viril o del embarazo de alguno de los
za. Cada año, después del baile —que se danzantes, a lo que añade gesticulaciones
ameniza con música de viento y tiene lu- sexualmente agresivas y declaraciones con
gar en la galera—, se nombran los capita- doble sentido de quienes juegan. Con res-
nes de comida y de música para el Carna- pecto al segundo, la ridiculización de per-
val del año próximo. Quienes participan en sonajes famosos, provenientes todos ellos
el Carnaval pueden disfrazarse de 1) viejos, del mundo mestizo y la anulación parcial
http://www.cdi.gob.mx
TEPEHUAS
http://www.cdi.gob.mx
PUEBLOS INDÍGENAS DEL MÉXICO CONTEMPORÁNEO
28
Tepehuas ahumando el altar de muertos. Mecapalapa, Pantepec, Veracruz.
Fotógrafo Carlos Heiras, 2003.
Acervo personal.
de depositan veladoras, queman cohetes, a los difuntos de los que nadie se respon-
beben aguardiente, cerveza y refresco; an- sabilizó.
tiguamente se llevaba a cabo una comida El 12 de diciembre se festeja a la Virgen
en el cementerio. Entre una y dos semanas de Guadalupe. En algunos casos la cele-
después de las celebraciones, se recoge el bración es a la vez la fiesta patronal; pero
arco del altar y se guardan las semillas de incluso cuando no existe esta coinciden-
las flores, consagradas en el arco, para ser cia, se realizan diversos rituales, entre los
sembradas en la milpa. que se encuentran las peregrinaciones y las
Aunque todos los católicos de la comu- danzas. Particularmente en esta ocasión, y
nidad celebran los días de muertos, cada también en las fiestas patronales, se llevan
grupo doméstico celebra de manera inde- a cabo danzas de reciente introducción,
pendiente a sus propios difuntos, con to- como la “danza de Concheros”. De toda
do y que hay quienes ofrendan también la sierra parten contingentes de peregrinos
http://www.cdi.gob.mx
TEPEHUAS
http://www.cdi.gob.mx
PUEBLOS INDÍGENAS DEL MÉXICO CONTEMPORÁNEO
http://www.cdi.gob.mx
TEPEHUAS
http://www.cdi.gob.mx
PUEBLOS INDÍGENAS DEL MÉXICO CONTEMPORÁNEO
http://www.cdi.gob.mx
TEPEHUAS
http://www.cdi.gob.mx
PUEBLOS INDÍGENAS DEL MÉXICO CONTEMPORÁNEO
Al final de su vida, por la noche, en ca- de creación y está dividido en tres planos:
sa del difunto se ofrece una cena. A veces el celeste, el terrenal y el infraterrenal, po-
los visitantes llevan parte de la comida, en blados todos de seres divinizados, con los
apoyo a la familia del muerto. Tradicional- cuales el tepehua mantiene una fuerte in-
mente, por supuesto siempre que no haya terdependencia.
muerto antes, la madrina de bautizo llega a El sol y la luna son entes muy impor-
ser quien cambia de ropa al difunto. Se ve- tantes en la cultura tepehua. El primero
la y se reza toda la noche, se levanta una representa a Cristo y es el protector de
34 cruz de cal en el lugar en que el difunto solía los hombres; la segunda tiene un aspec-
dormir; ya en el día, se notifica el deceso a to ambivalente de muerte y renacimiento,
la autoridad civil y a los vecinos. Pasado el y es considerada la protectora de las mu-
mediodía, se entierra al difunto, cuya familia jeres. La luna es asociada con la brujería;
prepara una comida; al día siguiente empie- de ella depende el crecimiento de la flo-
za el novenario: nueve noches de oración ra, pero también ocasiona enfermedad y
cerradas por la levantada de la cruz, la cual muerte. Igualmente, el arco iris se vincula
posteriormente se erige en el panteón. con el mundo de la brujería; se dice que
los brujos encuentran en él su sitio de re-
LA COSMOVISIÓN, EL UNIVERSO poso y que si cualquiera lo señala con el
TEPEHUA dedo, éste se pudre de inmediato. Los te-
La cosmovisión es la manera en que el pehuas apuntan que el arco iris siempre
grupo percibe e interpreta el mundo en surge donde alguien cayó asesinado. Se-
sus variadas manifestaciones: cósmica, gún otra interpretación tepehua, el arco
biológica, vegetal, animal y humana. En iris es el dueño de los pozos y manantia-
la cosmovisión tepehua, la existencia del les, por lo cual se le considera una advo-
mundo es el resultado de un acto divino cación de la Sirena.
http://www.cdi.gob.mx
TEPEHUAS
http://www.cdi.gob.mx
PUEBLOS INDÍGENAS DEL MÉXICO CONTEMPORÁNEO
cia. Todas las manifestaciones de la natu- obligaciones sociales o rituales. Gran nú-
raleza tienen un “dueño”. Así, los hay del mero de enfermedades tiene su origen en la
monte, de la tierra, de las plantas, del aire, agresión ejercida por los malos aires. Éstos
del agua, entes sobrenaturales que son re- representan la emanación de los difuntos,
presentados en papel recortado. La repre- la cual envuelve el espacio de los cemen-
sentación en papel de las fuerzas sobre- terios, el monte y los caminos durante las
naturales es uno de los instrumentos más noches. La pérdida del alma por un sobre-
importantes de la vida ritual de los tepe- salto es resultado de un contacto brusco
huas y quizá uno de los más antiguos. En con la tierra; el fuego y el agua también
la actualidad, el papel recortado está pre- pueden robar el alma, pues se les concibe
sente en los rituales básicos: terapéuticos, como elementos animados. La envidia es
de fertilidad y de brujería. Antiguamente, el también fuente de enfermedad y una de las
papel se hacía artesanalmente con la cor- causas principales de la muerte, según el
teza de algunos árboles. En nuestros días, pensamiento tepehua.
si bien ya no se confecciona localmente el En la cosmovisión tepehua se conside-
papel sino que se compra el producido in- ra que la morada de los difuntos es deter-
36 dustrialmente, se siguen recortando figuras minada por la causa de su muerte y no por
antropomorfas que sirven de soporte a las su conducta moral entre los hombres. La
deidades a las que se ofrenda. Esta práctica muerte representa para los tepehuas el pa-
no es exclusiva de los tepehuas; es carac- so al mundo de los antepasados. Quienes
terística común de varios grupos indígenas perdieron su vida por accidente o asesinato
que viven en el sur de la Huasteca: nahuas, van al Laknín (inframundo), que está bajo la
otomíes y tepehuas (los totonacos, que no tierra. Los matrimonios casados por la igle-
recortan muñecos de papel, en cambio sia, al morir, van al cielo; el destino de las
hacen figuras también antropomorfas con mujeres que murieron durante el parto es
corteza de árbol) e incluso fue práctica el cielo, en donde atienden a los viejos que
común hasta hace algunos siglos en toda producen los truenos y la lluvia. El espíritu
Mesoamérica (centro y sur de México). de los que perecen ahogados en el río se
El concepto de causa natural de la en- queda en la corriente; estos espíritus juegan
fermedad no existe entre los tepehuas: en el agua y no pierden la oportunidad de
muerte y enfermedad son el resultado de jalar al que pasa por ahí, descuidado. Los
una sanción de los dioses o antepasados curanderos van al cielo porque hacen el
a los individuos que no cumplen con las bien a la comunidad; en cambio, los brujos
http://www.cdi.gob.mx
TEPEHUAS
van al infierno porque se dedicaron a hacer vestido tradicional (cuya confección resul-
el mal. Los niños sin bautizo se convierten ta más cara que la compra de ropa manu-
en víboras, excepto los que fallecieron re- facturada) o algún viejito que use calzón
cién nacidos, quienes son recibidos por la de tela blanca; a pesar de que hay costum-
Virgen. En el más allá prosigue la vida que bres de las que ya sólo los mayores tienen
se tuvo en el mundo terrestre, repitiéndose memoria; con todo y que la adopción de
las mismas actividades y modos de actuar valores y hábitos no tradicionales es mo-
del individuo. La ocupación que se tuvo en neda común —particularmente entre los
la vida diaria determina el sitio al que la per- jóvenes—, el tepehua es un grupo indíge-
sona irá después de la muerte. Por su lado, na que mantiene su identidad étnica. Los
el Laktian (“cielo”) es también lugar de los movimientos poblacionales, el constreñi-
muertos, un reflejo de la tierra. miento del territorio, el enfrentamiento a
Dios reina en el cielo y se encarga de la globalización, la condición de minoría
proveer de alimento a los fallecidos. Ak- en su propia región, no han impedido que,
mosnó, el diablo, reina en el infierno. A aunque relativamente pocos, los tepehuas
esta deidad, una de las principales para los sigan reproduciendo su forma de vida co-
tepehuas, se le rinde culto abierto duran- munal, conservando a la vez que transfor- 37
te el Carnaval. Aunque deidad nefasta, se mando su manera de percibir y actuar en
considera necesario ofrendarla, con el ob- el mundo, reivindicando el uso de su pro-
jeto de apaciguarla y evitar que envíe des- pia lengua. De ello da cuenta la vitalidad
dichas a los humanos. con que se realizan “algunos costumbres”,
el empeño con que los intelectuales te-
SER TEPEHUA pehuas investigan sobre su propia cultu-
La residencia (vivir en la comunidad), la co- ra y promueven la lectura y escritura de
operación en el trabajo (sobre todo el de su lengua materna, y el hecho de que en
faena, pero también el de “mano vuelta” y muchos casos la mayoría de los miembros
el trabajo ofrecido en la fiesta) y la ascen- de la comunidad hablan tepehua, aunque
dencia (el que los padres sean considera- también español.
dos miembros de la comunidad) son los
criterios fundamentales que definen la per-
tenencia de los tepehuas a su comunidad.
Aunque es más bien excepcional en-
contrar alguna viejita que todavía use el
http://www.cdi.gob.mx
PUEBLOS INDÍGENAS DEL MÉXICO CONTEMPORÁNEO
BIBLIOGRAFÍA
ANZALDO FIGUEROA, Rosa Elena, Los sistemas de parentesco en la Huasteca. Un estudio etnolingüístico, México,
Instituto Nacional de Antropología e Historia (Científica, 406, Serie Lingüística), 2000.
BOILÉS, Charles Lafayette, “Tepehua Thought-Song: a Case of Semantic Signaling”, en Ethnomusicology, vol. XI,
núm. 3, Middletown, Wesleyan University Press, 1967, pp. 267-292.
–––––––––, “Cognitive Process in Otomi Cult Music”, tesis de doctorado, New Orleans, Tulane University, 1969.
CARRASCO, Pedro, Estructura político-territorial del Imperio tenochca. La triple alianza de Tenochtitlan, Tetzcoco y
Tlacopan, México, Fondo de Cultura Económica / El Colegio de México / Fideicomiso Historia de las Américas,
1996.
COWAN, George M., “El idioma silbado entre los mazatecos de Oaxaca y los tepehuas de Hidalgo, México”, en
Tlatoani, vol. I, núms. 3 y 4, México, Instituto Nacional de Antropología e Historia, mayo-agosto de1952, pp.
31-33.
FORTESCUE, M., “Morphology, Polysynthetic”, en R.E. ASHER y J.M.Y. SIMPSON (eds.), Encyclopedia of Language
and Linguistics, vol. 5, Oxford, New York, Seoul, Tokyo, Pergamon Press, 1994, pp. 2600-2602.
GESSAIN, Robert, “Les Indiens Tepehuas de Huehuetla”, en Revista Mexicana de Estudios Antropológicos. Huastecos,
totonacos y sus vecinos, tomo XIII, núms. 2-3, V Mesa Redonda, Xalapa, 1951, México, Sociedad Mexicana
de Antropología, 1952-1953, pp 187-211.
HASLER, Juan H., “El idioma silbado”, en La palabra y el hombre, núm. 15, Xalapa, Universidad Veracruzana,
julio-septiembre de 1960, pp. 23-36.
HERNÁNDEZ VARGAS, Baltazar, “La reestructuración de los pueblos indios en la provincia de Huayacocotla: el
caso de San Agustín Tlachichilco, Veracruz (1590-1650)”, tesis, México, Escuela Nacional de Antropología e
Historia, 2000.
38 INGLE, J., “Totonac”, en R.E. ASHER y J.M.Y. SIMPSON (eds.), Encyclopedia of Language and Linguistics, vol. 9,
Oxford, New York, Seoul, Tokyo, Pergamon Press, 1994, pp. 4640-4641.
OLIVERA DE V., Mercedes y Blanca SÁNCHEZ, Distribución actual de las lenguas indígenas de México, 1964,
México, Instituto Nacional de Antropología e Historia, 1965.
PÉREZ TÉLLEZ, Iván, “La cosmovisión nahua de Cuacuila: una aproximación etnográfica”, tesis, México, Escuela
Nacional de Antropología e Historia, 2002.
WATTERS, James, “Aspects of Tlachichilco Tepehua (Totonacan) Phonology”, en SIL-Mexico Workpapers, núm. 4,
México, Summer Institute of Linguistics, 1980, pp. 85-129.
WILLIAMS GARCÍA, Roberto, Los tepehuas, Xalapa, Instituto de Antropología de la Universidad Veracruzana,
1963.
OTRAS FUENTES
DOW, James W., “Tepehua”, en “Ubicación de los idiomas ñahñu (otomí), nahua, totonaco, tepehua y español en la
Sierra Oriental de Hidalgo, la Sierra Norte de Puebla y la Sierra Norte de Veracruz”, en http://www.oakland.edu/
~dow/personal/papers/langmap1/maptec3.html, 1998.
EQUIPO REGIONAL HUASTECA, “División Política”, México, Instituto Nacional de Antropología e Historia, Univer-
sidad Nacional Autónoma de México-Instituto de Geografía, 2001 (información de campo).
http://www.cdi.gob.mx
TEPEHUAS
Viviendas 3 247
Notas
1
Se refiere a la población en hogares en donde el jefe, el cónyuge o algún ascendente declaró ser hablante de lengua
tepehua.
2
Incluye hablantes de tepehua y de otras lenguas indígenas de 5 años y más.
3
La diferencia entre la población ocupada y aquella en actividades agropecuarias está distribuida en otras actividades
económicas.
4
La diferencia entre la población ocupada y aquella sin ingresos está distribuida en otros rangos de ingresos.
Fuente: Comisión Nacional para el Desarrollo de los Pueblos Indígenas / Programa de las Naciones Unidas para el Desa-
rrollo, “Sistema Nacional de Indicadores sobre la Población Indígena de México”, 2002, con base en XII Censo General
de Población y Vivienda, México, Instituto Nacional de Estadística, Geografía e Informática, 2000.
http://www.cdi.gob.mx
Tepehuas, de Maricela Hernández Montes y Carlos Guadalupe Heiras Rodríguez, se terminó
de imprimir en diciembre de 2004 en los talleres de Impresora y Encuadernadora Progreso,
S.A. de C.V., San Lorenzo Tezonco 244, Col. Paraje San Juan, Deleg. Iztapalapa, C.P. 09830,
México, D.F. El tiraje fue de 6 000 ejemplares.
Las tareas de digitalización y retoque de imágenes, composición tipográfica, diagramación
y cuidado de edición estuvieron a cargo de la Coordinación Editorial de la CDI.
http://www.cdi.gob.mx