TRATADO ELEMENTAL

DB

TERMODINÁMICA,

por

DON JOSÉ ECHEGARAY,

Ingeniero Jefe de Caminos, Canales y Puertos.

~~.~

o FP~
f1ttN
~

MADRtD:

blPRBNTA DE Los Conocimientos útiles, Á CARGO DB !t'. ROIG,

calle del Árco de Santa Maria, número 39.

1.868.
 TERMODIN ÁMICA..
ADVERTENCIA.
En la página 34 de este tratado se dejaron de insertar los números 60, 61 Y 62.
El lector deberá cuidar de referir lo que sigue al lugar que le corresponde.
o. Las dos ecuaciones
que puede tambien ponerse bajo la forma
T=Jl:Q,
O,
y
"JL- o,
- ({t) -
expresan los dos principios fUlldamentales de la
teoría moderna del calor; el primero, la trasfor­
macion siempre proporcional del trabajo en calor,
y de éste en aquél; el segundo, indica en cierto
modo la ley de esta trasformacion; sin embargo,
tanto como el primero es claro, natural, sencillo,
es abstracto. oscnro é indirecto el segundo.
Toda cantidad de calor equivale á cierta canti­
dad de fuerza viva ó de trabajo; esta idea es tan
natural como fácil de comprender.
Pero, ¿qué significa en cambio ~ (~) =o?
¿A qué propiedad nsica, mecánica ó térmica,
que se pueda expresar en el lenguaje comun; que
se vea traducida en hechos en la naturaleza, cor­
responde esta expresion algebrAica?
Procuremos aclarar algun tanto esta materia.
Fijémonos en el cuadrilátero fundamental de la
lig. 8, yen la fórmula sencilla del (N. 57).
O. o.
{(tI) = ((lo)'
Ante todo, digamos, aunque anticipando las
ideas, que las funciones f (t.) Yf (lo) 110 son más las
temperatul'as absolutas t. y t o' segun demostraré­
mos más adelante; de suerte que la. fórmula ante­
rior se reduce á esta otra:
o.t;""" = ---¡;,
Qo
t.
o;=-¡­
Ó bien
0.-00 ti-l.
-O;-=-t-.­
y, asl e5crita, expresa una propiedad muy impor­
tante.
O. - O. es la cantidad de calor que se convier­
te en trabajo:
O. es la cantidad de calor que se toma del foco
superior correspondiente al arco p. PI' Y por lo
tanto, el primer miembro expresa la relacíon en­
tre el calor convertido en trabajo, es decir, uti­
lizado mecánicamente, y el cOl/sumido, y nos dice
que dicha relacion sú/() depende de las tempera­
turas absolutas t. y to de los dos focos, y que por
lo tanto es independiente del cuadrilátero que es­
cojamos entre las dos curvas p. P 2 YPo P~, y del
cuerpo que empleamos como órgano de c01mmi­
cacion.
Materialicemos áun más nuestras ideas.
Supongamos que un cuerpo, Ó mejor dicho, un
punto representativo describe el cuadrilátero fun­
damental de la fig. 8.' entre las curvas extremas
de 3000 y O·; el segundo miembro de la expresion
precedente se convertirá en
(300+274)-lOo+~U) _ 500 -05~'
300+27-l - 574 - ,-,
luégo
O. - O. = O,lS! •
O.
Pero O. es el calor gastado, porque la curva
térmica de la 3000 es el foco de la máquina, y la
de O- corre"ponde, por decirlo así, al condensa­
dor; y toda cantidad de calor que sale del foco su­
pone consumo de combustible. Por otra parle,
O. - 00 es la cautidad de calor convertido en tra-
bajo; luego en el ejemplo que consideramos, de
todo el calor consumido, sólo se aprovecha, y sólo
puede aprovecharse, el 52 por 100. Éste el máxi­
mo rendimiento de una máquina térmica que fun­
ciona entre uu foco á 300 0 Yun condensador á 0 0 ,
prescindiendo de las pét;fiidas que naturalmente
ocurren en todos los aparatos de este género.
Ahora bien, la ecuacion
o. - 00 _ calor utilizado = 0,52
-Q-.- - calor gastado
es independiente del cuerpo que se elija como
desde ahora, alguna idea sobre punto tan impor­
medio de trasmision; sea éste el aire ó el vapQr,
tante.
uno ti otro gas, siempre, teóricamente, la rela­
La máquina, ó el cuerpo, funcionan entre las
cion es la misma; luego dicha ecuacion, ó aquella
curvas A II Ym' e del cuadrilátero A D e m', pero
de que procede,
no de'lcribe este cuad rilátero sino una curva ins­
O. " crita en él. A esta curva se le pllede sustituir una
~=~
expresa una propiedad tan clara, tan inteligible,
tan sencilla como la ecuacion
T=~Q:
él saber: que el calor utilizado ó convertido en
trabnjo en cada cuadrilátero térmico, es decir,
en cada evolucion, entre dos {ocas, á las tempe­
ra/uras tI y t o es independiente, teóricalllente,
del cuerpo que se eh)"a, y el mismo para torlos
ellos. Ilé aquí por qué á este segundo principio se
le Ja el nombre de princljJio de igual rendi­
miento.
61. La ecuacion
calor utilizado " -'0
calor consumido /,
demuestra además, que á igualdad de lus demas
condiciones, esta relacion es tanto mayor, cuanto
mayor sea la diferencia t, -lo entre la tempera­
tura del foco y la del condensador; diferencia á
IIlle comunmente se da el nombre de caida.
Podemos decir, pues, r:omo decia Carnot, que
la fmccion de calor consumido qlle se convierte en
trabajo mecánico es proporcional á la caida de
temperaturas.
Vemos, pues, que asl como el primer ]Jrillc'jJio
pone en evidencia la trasformacion del calor en
trahajo, el segundo indica cómo y hasta qué
punto se verifica dicha tr:,¡,sformacion. Fija este
último un limite para la conversion del calor en
trabajo, y reduce á sus naturales proporciones las
hipótesis gratuitas Ó exageradas que se habian he­
cho sobre las máquinas térmicas, y sohre las ven­
tajas de sustituir á unos cuerpos otros.
Importancia tiene la sustancia que sirva de ór­
I gano de trasmision, pero no la fundamental que
se suponia, sino ventajas meramente de detalle.
62. Una máquina térmica no funciona como
hemos supuesto en los números precedentes. El
cuerpo que sirve de órgano de comunicacion del
calor no describe el cuadrilátero tipo de la figu­
ra 8.", sino una curva a b c d.. ... d' e' b' a (figu­
ra 10"), más ó ménos complicada; ¿cómo podria­
mos hacer extensivo á este caso el principio des­
arrollado en los números 60 y 61 ?
Sin perjuicio de que m¡\s adelante tratarémas
probablemente esta r:uestion, procurarémos dar.
serie de cuadriláteros m b b' m', n c c' p', p el q'
c' ..... del género del cuadrilátero tipo, y en cada
uno de ellos tendrémos un rendimiento disi.into.
Representando por
t' I la temperatura del arco 111 b, Yanálogamen­
te por t" .. t'",..... las de los arcos n c, p d..... :
representando asimismo por
t'o, t"o, t"'o ..... las temperaturas rle los arcos
inferiores m' b', p' e', e' q' ..... ; tendrérnos
calor utiliz~do en el cuatlrililtl'ro m /1 /1' m' /'1 - t 'o
calor consumido en el arco m IJ = --,-,(-:
calor utilil.ldo en 1'1 clladrilfllero 11 C p'c' /".-1"0
calor conslIlnido en el arco 11 C = -1-·'-,-;
y el rendimiento medio será una cierta cantidad
media de estos rendimientos parciales.
Notemos que el tipo de rendimiento del CUt dri­
¡IV _1"
látero circunscrito AllCm', ó ea I IV o , es
un limite superior del que corresponde á "la máqui­
na térmica representada por el contorno a be d...
d' c' b' a.
En efecto, prolongando 105 cuadriláteros ele­
mentales mbb'm', ..... hasta el cuadrilátero AB
Cm', obtendrémos otros tantos cuaririláteros en­
tre las temperaturas mú.xiLUa y m\nima de los ar­
cos extremos; por ejemplo. al m b b' m' entre t'l
y t' o corresponderá el A D]J' m' entre y ,.,; al r
pe1q' c" el E r¡ q' e , y así sucesivamente., o
Ahora hien, estos últimos tienen mayor eaida
de temperaturas que las primeras; luégo su rendi­
mi{jnto, como vamos á demostrar, es mayor, y si 1 es Ilemr, reudm1Íento en m b b' mi < rendimiento
clldil. uno de los tipos de rendimientos parciales es en A D p' m'.
tl"-t" Otro tanto demostraríamos en los demas cua­
menor que el tipo constante ~ es claro que
t, driláteros.
la cantidad media tambien será menor que ésta. De aquí resulta este teorema, que dáuna idea
Comparemos, por ejemplo, los rendimientos de bastante clara de la importancia del segundo prin­
rnb b'm' y ADp'm' . cipio:
Tendrémos Trazada la curva a b c d.. o'. d' c' b' a corres­
¡po del rendimiento en m b b' mi = 1'1 -1' ° pundiente ti U'la máquina térmica, si determina­
mos el cuadrilátero fundamental A B e m' cir­
/IV -l"
" 1

i cunscrito, eltjpo de rendimiento de este cl~adri­

tipo del ndimiento en A D pi m' = _, 0
tI
IV látero será su Umite superior del correspond1°ente
á la máql,illa.
y queremos demostrar que este último es superior
Por ejemplo, el máximo rendimiento - máxi­
al primero.
nJO á que no se llegará ni teóricamente-de una
Si en aquel ponemos, en el Humerador y en el
máquina que funciona entre 300 y tOO, es
denominador, en vez de t/ la temperatura t't',
que es mayor su valor, habrá aumentado puesto 300-10 290

que es un quebrado propio, así: ~O+ 274 = 574 = 8,!iO I Ó sea el 50 por tOO.

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Jo ECHEGARAY.
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 TERlvfODINÁMICA.

CAPITULO PRIMERO.
Introduccion.

L .Dos ltipótesis hay para explicar los fe- I de dicba teoría de la que nos proponemos ocu_
nómenos caloríficos. parnos.
Segun la primera, el calor es una sustancia, Otras veces la accion del calor se manifiesta
un verdadero .flúido, que se distingue de la por la remocion de obstáculos, es decir, por
materia ponderable, aunque él mismo sea efectos mecánicos; en una palabra, por el
maleria, por cierlas propiedades, entre las desarrollo más ó ménos grande de un trabajo,
que se halla la de no estar sujeto á la ley de la En tales casos, el calor, no solo marcha, sino
gravitacion. que se trasforma en efecto útil, venciendo re­
En la segunda hipótesis, el calor no es ya sistencias j y por este motivo algunos dan á la
una sustancia, sino un accidente de la materia, nueva teoría el nombre de Trasforn14cion del
y se supone que dicho accidente es el movi­ calor, mientras otros, atendiendo á que cuan­
miento interno de las moléculas. do así obra es en rigor una fuerza, adoptan la
En lre ambas opiniones extremas, de las que denominacion de Teoria mecánica del calor ó
la primera ha sido ya casi abandonada, mien­ la de Ternwdinámica.
tras cada dia se extiende y afirma más la se­ Diremos, pues, en resúmen, que la Termo­
gunda, bay, si así puede decirse, una escuela dinámica es la ciencia que trata de los efectos
que estudia al calor en sus efectos, sin preten­ mecánicos del calor; y recíprocamente del ca­
der penetrar su orígen, y que combinando el lor producido por los agentes mecánicos.
método experimental con la aplicacion del Los fundadores de este nuevo órden de co­
análisis matemático, ha creado la nueva cien­ nocimientos son Carnot, Mayer (Mayer sobre
cia, ó la nueva rama de la Fisica, á que nos todo), Joule, Thomson, Rankine, Clausius y
proponemos cons<Jgrar estos artículos. algunos otros; y el lector que quiera ampliar
No puede negarse, sin embargo, que más ha las nociones que presentemos en estos artícu­
sido inspirada la Termodin(imica por las nue­ los, puede consultar principalmente las obras
vas teorías que por la antigua hipótesis, con de Hirn, Combes, Saint-Robert, y las notables
la que son incompatibles sus principios funda­ Memorias de Clausius, publicadas en el Jour­
mentales. nal de Liowoille.
2. Vamos á estudiar al calor en algunos Antes de entrar en materia, recordaremos
de sus efectos, y estos son de dos clases: con­ en este primer capítulo algunos principios fun­
viene, pues, distinguir unos de otros. Se mue­ damentales de la Física.
ve el calor, si se nos permite esta manera de 5. Tempe1·at1t1'a. Sea el calor lo que fue­
expresarnos, dentro de un mismo cuerpo; ó re, es algo: es decir 1 es cantidad: y cuando es·
pasa de unos á otros cuando están en contac­ ta cantidad calor aumenta en un cuerpo, el
to ; ó irradia en el espacio sal vando distancias. volúrnen de dicho cuerpo, en general, aumen­
Pero en todos estos casos el calor se mueve, el ta tambien. De aquí se deriva la nocion de
fenómeno marcha, conservándose el mismo en temjJe1·at1wa.
su apariencia, y á este primer conjunto de he­ Elijamos pOI' término de cornparacion cierta
chos, estudiados por Flourier, Poisson, Lamé y masa de ail'e á presion constante, y sometí·
otl'os insignes matenláticos, se les ha dado el masla á dos dislintos grados de calor.
nembre de Teoría (mal/tica del calM'. No es 1. o Al que corresponde al hielo fundente.
 4

2: Al de la ebullicion del agua á la pre­ representando por f la derivada dc./, y por

sion barométrica de 0,m76. ~ Q y ~ t los incrementos correspondientes, y
El volúmen de esta masa de aire pasará de suficientemente pequeños, de temperatura y
1) á v', y á la cenlésima parte dc dicha difercn. calórico.
cia
V-V')
(--:wo- En todo inter\'alo en el cllal , como aproxi­
le daremos el nombre de grado macion, pueda admitirse la fÓl'll1ula (2), podr.l
termométrico. El grado del term6metro de aire , admitil'se tambien la pl'oporcionalidad entre
corno el de otro cualquier termómetro análo­ Jos incrementos de calo?' y los incrementos de
go que se elija. es un aumento de vol1tmen COI'­ temperatU1'a; pero esto siempre como ley
respondienle á una canlidad perfectamente de­ aproximada y panl pequeñas extensiones de t.
terminada de calor. Es decil', traducido lo que preceue al lengua­
Decimos dete1'minada, y no decimos conoci· je vulgal', que próximarnellte se necesitar.í la
da, porque todavía no sabemos cómo se mide misllla cantidad dc calor para hacer pasar á
el calor, ui h~ de creerse que á grados iguales un cuerpo de :')0 á 4°, que para hacerle pasar
~e un termornetro corresponden ca ntidades de 4° á 5°; pel'o no podrelnos comparar tél'.
Igualcs de calor j esto podrá ser ó podrá no minos muy distantes entl'e ~í eIl la escala ler­
, '
ser, que mas adelante lo discutil'crnos, pero mométrica, ni poch'emos decir que P de au­
por el pronto no debernos afirmarlo. Y en mento .í partir de ce?'o supone la misma cllnti­
efect~, no es evidente aprio1'i, que se necesite dad de calor que l° á partir de 80".
la misma cantidad de calor para dilatar un 5. Ya sabemos que pUI'a medir la tempe­
cuerpo ,1 grado, cuando su temperatura es , ratura de un cuerpo se ponen en contacto tan
mtimo
'
como sea posible, el cuerpo y el termó·
de 1,°°, que para dilatarlo otro .t¡rado cuando
es dicha ternperatura de 80"; Y aun más bien metro, y cuando entre ambos hay equilibl'io
puede sosl~echarse lo contrario si se not<l, quc de calórico, es decir, cuando ambos est.ín cn
cuanto mas elevada sea la temperrtlJra ini­ iguales condiciones, y pucde considel'arsc qu
cial, tanto más quebrantados deben estar los el termómetro forma parle del cuerpo, los
lazos de la cohesioD, y tanto ménos trabajo grados que aquel marque dctel'lllillarán el es­
c?sta,rá al caló~ico separar unos mismos.esp·a. tado calórico de este.
CIOS a las molcculas del cuerpo sometido al
Pero como el termómetro aumenta su tem­
expel'imeuto. peratura á expensas del calor del cuerpo, cla­
Consle, pues, que la tempe1'atura no es, 6 no ro es que al establecerse el equilibrio entre
debemos suponer que sea, proporcional al ca­ ambos, el cuerpo habr.l perdido ulla parte de
lor, y que mientras no conozcamos una rela­ su calórico, y que el quc lIJarllue cl lermóme­
cion exacta ontl'e las cantidades de calol' y los tro será algo mcnor que el que lenia el cuer­
grados del I.crmómetl'o, no podrá este servir­ po anles dc verificarse la o[lcl'acion. Pal'a que
nos como aparato de mcdida. esta sea suficientemente e.-<lcla, es preciso,
4. Si repl'csentamos por Q la cantidad de pues, que la masa del tcrlllúmctro sea rJtlt;lj
calor de un cue¡'po, y por t su temperatura pequeíia, compal'ada con la del cuerpo.
ya que Q no sea igual á t, ni aun pl'oporcio~ Sucede aquí una cosa parecida ;í la que se
nal, POI' lo menos, á i ualdad de todas las de. \'el'ilical'ia al medir la altura del agua en un
más condiciones, Q sCI'á fuocíon de tj dc suer­ depósito pOI' la que tomase en un tubo comu·
te que represenlando por f esta funcion des­ nicante j el procedimiento sel'ia cxact.o si las

conocilla, tendl'emos dimensiones del depósito fuesen tan grandes,

respeclo al tubo, que la cantidad de agua quc
Q={(t) . . . . . (J) entrase en Poste y saliese de aquel no hiciera
A Ill.ónos quc f no sea una funcion lineal, es bajal' sensiblemcnte el nivel del agua; no lo
deCIr. de la forma at + b, á incrementos igua­ seria en el caso contrario.
les de t no cOl'1'cspondel'án incrementos igua­ Nos delenemos en estas, que son pequeñeces
les de Q, pel'o en pcqueñas extcIIsiones dc la si se quiere, no por la importancia práctica
curva I'epr'c::;entada por la ecuacion (1) podre­ que puedan tencl', sino pal'a fijar las ideas y
mos sustituíl' tÍ dicIJa cuna la tanO'clIle v en precisal' con toda exactitud la signilicacion dc
t 1h' , lO , J cada tl)rlllino túcnico que empleamos.
a Ipotesis á la ecuacion :H1teriol' poJremos
sustituir tambien esta otra En l'esúrnen, la temperatura dete'i"mi¡¡.a el
estado calol'ifico en quv se halla un cuerpo,
~Q=r(tpt; . . . . (í!) sin 7aedi?' la cantiuad de calor.
 TER~IODI1'LÜnCA..
G. lIemos supueslo que para la construc­
,jan dol termómetro se empleaba el aire; pero
en rigor todo cuerpo bieí¿ definido puede ser­
vir para medil' lenlpcl'aturas ; solo que, como
no todos los cucrpos se dilatan dellniglllo mo­
do, será preciso establecer relaciones entl'e
unas y otras escalas.
Más aun: si el cambio de vol1ímen sirve para
determinar el estauo calol'Ífico de un cuerpo,
otros fenómenos hay que pueden utilizana~ pal'a
el mismo oujeto; pOI' ejemplo, el cambio de
presiono
Podria formal'se un termómetro consen'an­
o una masa detel'lninada de ai7'e bajo volú­
men constante; midienuo su presion á la tem­
pel'ulura del Ilielo fundente y :l la de la ebu­
llicion, y dividienuo la escala de pl'esiones,
comprendida entre amhos puntos, en 100 par­
les iguales.
El gl'auo de este tel'lnómetro sel'Ía la centé­
8ima parte del aumento dtl presioll de una lila·
8a de aÍl'c al pasar de UII estado calol'Ífieo ú
Oll'O, perfectamente definidos ambos.
En el pl'lmer termómetro que hemos descrí­
o, y al que podernos da!' el nOlllbl'e ue termó­
metro de ditatacioí¿, CADA GllADO ES UN YOLÚ­
MEN: en este último CADA GRADO ES UNA rUE­
SION; pero aquel volrímclI y esta presion cor­
responden á cantidades dcterminadas de caló­
rico, y caua temperatUI'a á un estado calorífi­
co perfectamente definido.
Cuando decimos «estado calori/ico }Jerfecta­
mente dqfinido;» «cantidad de calor perfecta­
mente detlmnillada,» no queremos signil1car
que conozcamos aquel ni este, sino que son
estados y fenómenos que pueden ser r'eprouu·
cidos y I'calir.ados en cualquier instan le , en
cualquier Jugar, y por cualquier experimen­
lador.
Son, por decil'lo así, plentos fijos de los que
pueden pUI'til' todos los físicos, y á los que
pueden refel'il'se todos los resultados de las
cxpel'icneins.
7. U¡ddad de calo?'. El termómetro nada
/lOS ensei'ia SOIJI'I:\ la cantidad de calor absoruj·
da ó aI'l'ojada por un cuel'po que se calienta ó
se enfl'Ía ; solo sir\'c para definimos un estado
calorífico; y sin elJlbal'go se concibe que el
calor, como toda cantidad, es susceptible de
ser reducido ~i númcros.
Es evidente, por ejemplo, que el calOl' des­
an'ollado por la cornuustion de ) kilógT. de
I:al'/)on es la mitad del que despI'endcn en iMn­
icas circunslancias 2 kilógr. del mismo com­
)JUstiblp, es la tercer'a parte del que engendran
3 kilógr" y la 'm. JI parle del quc 'In kilógr, des­
anollan,
Para establecer relacinnes nUlJll~ricas entre
dos cantidades de calórico, basta, pues, em­
plear amIJas en pl'oducir efectos idénticos, cuya
repeticion pueda ser\'imos de rnedi(la.
Pal'tiendo de este principio se ha escogido por
U~IDAD DE CALOR el necesario para elevar 1
g?'ado de tempe¡'atlt1'et, tí pa1·tir del hielo flen­
dente, 1 kilóg1'. de agua; y á esla r.antidad de
calol' se le ha dado el nombre de calo?'üe.
El efecto que mide la cantidad de calor es
siempre el mismo, á sahel' : aumento de 1 gra­
do de temperatltra en 1 kitó,r¡r. de agl!a; y este
efecto repetiuo una, UOS, tl'es... '1íl veces, de­
termina y mide una, dos t?'es.,. m uniuades de
calor.
Así, por ejemplo, cuando se dice que son ne­
ces¡Hias 7n calol'Ías para fundir el hielo, se
quiel'e significar que si el ealol' que se emplea
en cOl1\'el'tir 1 kilógr, de hielo en 1 kilógr. dc
agua ¡Í O", se emple<lse en calentar agua á O",
esta canlidau de calor elevaria 7lJ kiJógr. de
a~ua á la Lelnperatnra de 1 gTado,
Véase ahora cómo el termómetro no puede
medil' directamente por su ~I'aduacion el ea­
101' de un cuerpo: los difel'entes gl'ados del
termómetro no son efectos iguales, porque va­
rían Ilas circunstancias que el! cada 11110 de
ellos concul'l'en.
El I.er gTado, á partil' de O", expresa UII dec­
lo pel'fectalncnte definido: al(.},¡en{o de ''Co!-¡í¡n(''l/.
de 1m cue?'jJo que está á ce?'o l/Nidos.
Pero el ~.o grado expresa Otl'O efeclo djslin­
lo: un aumento de volúmen igual al antel'iÜI',
pero no ell iguales circunstancias, puesto (Iue
el cuerpo est~, no á 0°, sino <Í lO,
8. Relacion entre la p'resio71, el 'IJOZú?nCit
y la ternpe1 ·atl/,ra. La expel'icncia dClIlupsll'a
que lodos los cuerpos de la naturaleza, sean
sólidos, líquidos ó gaseosos, vni'Íllu de \'olú­
men cuando caI1Jbia la tempcI'alul'J, I(J pr'l'::dOTl
Ó ambos elementos ti la vez, Puede aseg'urar'·
se, por lo lanto, que entl'e el vol'lmcn v, la
tempel'atuI'a t y la presioIl p de cada cuerpo,
hay una relacion delerminaua, que escrita
analíticamenle será
JJ = f (v, t), ó en general 'í' (p, v, tj = o. .. , . (1
Dados, plJes, para un cuerpo, su volúmcn,
y su temperatur'a, la eeuacion (1) detcI'lIlina­
I'ia Sil lwesion ~i la forma analítica de f fuese
conocida.
La forma de dicha funcion ha sido dclel'mi­
nada experimentalmente para los gases, parn
 G TERMODIN A~nCA,
los "apares y para los cambios de estado. Exa· ponden á un mismo cuerpo á temperatura
minemos estos lres casos. constante, tendremos, segun la ley de Ma­
9. Gases, - Le.ves de llIa1'iotte y Gay­ riolle,
L1tssac.-l.° La ley dc :\I¡.II'iolle establece que
v l' = v, p' • •• , , (7)
cuando en un gas jJermane¡tte la tempe1'atura
se conse1'va constante, los volúmenes 'M1'ian Entre las (5) y (6), que corresponden á prc­
el/, 'razo¡/, i'i/,vC1'sa de las presiones. Así repre­ sion constan le, segun la ley de Gay-Lussac,
sentando pOI' v y por v' dos volúmenes de una tendl'emos asimismo
misma masa de gas, por ejemplo, i k , Ypor P
I -+- '1 t
y p' las presiones, tendl'C1I10S: _ _ _ ; .. , .. (8)
v' I -+- Gl t'
V pi .
- = -,óLlen v p= v' 1>' ....• (2). y eliminando la incógnita auxiliar v,, hallare­
v' p
mas por último
~: Segun la ley de Gay-l.ussac, cuando en
v P J -+- 'X t PV pi v'
1tn gas la presio?/' permanece cO¡tsüente, y la - - - - - - - , ó bien = ---­
V· pi t+Glt' 1-+-cxt- t -+- 'X ti

teí¡/,peratu1'ct va1'ia, el voZúmen recibe incre­

mentos ig1tales pa1'a incre1nentos iguales de Como para todos los estados p", v", t"; pi",
teínpe1'at1tra, Así representando por V o el vo­ ?J"', 1"', .• , . por donde pase el cuerpo, siem·
lúmen inicial, es decir á OQ, Y por ~ el coefi­ pre tendremos
ciente de dilatacion, ó sea la fraccion de volú­
men en que aumenta el cuerpo pOI' cada gra­ v p pi v' p" V" p'" V'"
do de temperatura, tend¡'emos para la tempe­ ---=
-+- '1 t
- =...
ratura t: . . . , = constan te ,
v = V o -+- V o ~ t. ó bien v = V o (t -+- Gl t) •• , .• (3)
Observemos ahOl'a que si un cuerpo consel'· resulta que representando por R' este valor
va la misma presion p en todos sus cambios constante del segundo miembro, valor distinl (l
de estado, y pasa de la tempcratura t á la ti, para cada gas, la relacion buscada tenurá la
sus volúmenes 'V y '/J' satisfarán, segun la rela· forma
cion (5), á las ecuaciones 7) v
- - - = R', ó bien p 11 = R' (1 -+- ti t).
v = V o (1 -+- 'X t) 1 -+-;( t
Vi = V o ('1 -+- 'X ti)
~acando '1 factor cOll1un y rppresenlanclo,

en las que 'V o expresa el volúmen que tendria para dar á esta expresion la forl1la ordinaria,
este cuerpo á 0° con la misma presion p. f
por R el producto R' '1, Ypor a el clIociente-,
De estas ecuaciones se deduce por último, ?

hallaremos por último,

v t -+- '1 t
- = - - .... , (3') p v = R (a -+- t), . . . . (5)
v' i -+- '1 t'
que es la verdadera relacion entre los volúme­ lO, En la fórmula (9) solo entran dos cons·
nes y las temperaturas á presion constante. tan tes: <Í saher, (l y R. La pl'illlcra es conoci·
5.° Fácil es ahora deducir de las dos leyes da, y es la misma próximamente para todos
parciales, reprcsen tadas en las ecuacioncs (2) y los gases: suponicndo que el punto de parlida
(3'), la fórmula general entre v, p y t. es el ce1'0 del terlllÓll1etl'o, puede adlllilil'~e pal'a
Imaginemos que un cuerpo pasa del volú­ el coeficiente de dilaLacion de cualquier gas,
men v I la presion p y la temperatura t á otro
volúlllen 'v', otra presion p', y otra temperatu­ a=--,
274
ra t'; y supongamos un estado intermedio de
este cuerpo con la presion p' y la temperatu­ y por consiguiente, tendremos
ra t, á cuyos uos valores corresponderá cierto
1
volúrncl1 v,. Tenorcmos pucs a= - = 274.
'X
jW1,Jner estado, .. '/J . • p. . t.. (4)
estado inte1'medio, V, . • • • pi, . t" (5) La fÓl'Illula (!J) se cUlJ"iel'lc en
('stndo final . .... '/J'. • , • p'. . t', . (ti)' ]) v = l{ (27. -+- t) . • , .• (9')
Entre' las cantidadcs '1) yrii, que corres- La constantr. R varía de uno á otl'O gas,
 TER1\IODIX _-ünc.\. 7

pero una sola expeJ'iencia que dé valol'es si­ Para un gas cualquiera, suponiendo siem­
multáneos de p, v y t, basta para determi­ pre t = (), y designando por /¿ la altura de
narla. Inercul'io representativa dc la presion, y por
Notcmos, sin embargo, para evita.' con­ ,::' la densidad, tendríamos
fusion, que el valor de dicha constante de­ h P
pende del volúmen, ó de la masa inicial de R= - ­
gas, que consideremos, puesto quc su valor es 2i4 '::,
p' v'
R = - - - !JI Y este valor varia proporcio­ de suerte que, á ~r¡ttaldad de las demas condi­
1 -+-:l L' ciones, n varía en razon im'ersa del peso espe­
nalmente á v'. Es decir, que al aplicar la fór­ cífico.
mula (9') debemos espcciflcar el volúlllcn, la 11. Si en la fórmula
masa, el peso, ó en gener'al la cantidad de ,r¡as
á que se aplica, porque segun sea, así obten­ 1) V = n (2i4 -+- L)
dremos valores distintos para R.
contamos la ternperat~:ra, no desde el cero
Generalmente se supone que la cantidad de
que corl'esponde al hielo fundente, sino desde
gas es la contenida en Ik de peso.
- 274°, la nueva temperatura será precisa­
Tomemos para t el valor particular t = 0°;
mente 274 -+- t, Y pal'a este nuera cero tendre.
y supongamos que se considera 1k de aire á la mas la fórmula
presion de O,Dl76, á 45° de latitud y al nivel del
mar. 11 ti = R t.
Representando por Ti: el peso específico del
aire en estas condiciones, es claro que el vo­ Esta será la forma bajo la cual la empleare­
lúmen que ocupe 1k será su peso dividido por mos constantemente, designándola á veces
7':: es decir,
para aure\'iat' con el nombre de ecuacio1¿ de
elasticidad del gas; pero recuérdese que la
1k temperatura no se cuenta desde el punto de
v=­
Ti: fusion del hielo, sino desdc un nuevo cero,
más bajo que el primitivo en tantos grados
Por otra parte, si designamos por P el peso como unidade~ expresa el coeficiente inverso
del metro cúbico de mercurio, la altura 0, 01 76
representará una presion de dilatacion ( ~ = 2'74)'
p= O,m'76X P. Para distinguir la nueva temperatura así
Deberemos sustituir, pues, en la fórmula (9'), definida de la temperatura ordinaria, la desig­
para deducir el valor de R, naremos con el nombre de temperatura abso­
luta, y á su punto de partida con el nombre de
t cero absoluto.
t = 0°; ti = - ; p = 0,76 X P,
7t Más adelante veremos la razon de estas de­
nominaciones; por el pronto solo deben consi­
y resultará derarse como medios de simplificar las fórmu­
P las ó la explicacion.
0,76 - = R X 274 ; 12. Cambios de estado.-La relacion gene­
'lt
ral1' (p, 'V, t) = o entre la presion, el yolúmen
pero se ha obtenido esperimentalmente que la y la temperatUl'a de cualquier cuerpo, toma
P una fOl'ma particular en los cambios de estado,
relacion - en tre los pesos específicos del mer- ya pase el cuerpo de líquido á vapor, ya de só­
T.:

curio y del ail'c en las condiciones referidas lido á líquido.

(presion, 0, 01 76: latitud, 45°: altitud, o: tempe­ Examinemos ambos casos.
ratura, 0°) e 1.0 Paso de liqttido á vapor. Imaginemos
p
una masa determinada de líquido, por ejem­
- = 10 5t7,3; plo, l k de agua, dentro de una capacidad cer­
T.
rada, cuyo volúmen podamos variar segun nos
uego hallaremo convenga. Tal seria un CIlindro ccnado por
un émbolo que ajustase perfectamente con las
0,7G X tO 5i7,3 paredes.
-----_. = 2U,172.
274 Supongamos además que estc conjunto s
 8 TER~[OD1 J,\.MIC.\..
conserva á una tem]Je7'atu?'a eonsta1lfe en toda de numerosas sél'les L1e experiencias, de las
la sérje ¡Jc experjencins que vamos á descl'ibil'. qne las Ill{.s moL1ernas y las Ill,ís completa~
Si el élllUO:O, que suponemos inicialmente son las dl'lJil1as ¡í l\[r. Hegnaull, y se hallan
en contacto con el líquido, se separa de él, y consi~nad¡¡s en todos los ll'alados de Físi{;a.
L1eja cicI'to espacio libre, una pal'l,c del agua I'cro 110 basta expresar elllpÍl'icamente la ley
se reducirá <Í \'''por y llenal'¡.Í dicho espacio j y que enlaza las tensiones y las temperaturas,
<Í lTlcL1ida que el élllboto continúe elevándose, PS preciso ndenHís reducir él fó 1'111 1I las estos re­
nue\'ns por'ciones de líquido se eva po l'O:Jr(í n, sullados: ó dicho de otro nlOdo. sustilujr tÍ \.a­
pero sielllpl'e la }J'res'¿on de esta atmósfem .r¡a­ lJlas nUllléricas fórl11ul:.ls analiticas. Solo qur,
seosa será la ?tÚS1JUl, ?J solo dependerá de la COIIIO la teOl'ía lIlatelll<Ítica del calol' no esl::í
temJ)~?'at1t1'a eOJlsta11 te ti que se 'conserve el sis­ lJastanle adelantada para deducir dichas fól'­
tema. mulas a }J1'iori, su fOI'ma es desconocida, y no
Así es que si 11escondemos el émbolo redu­ queda úll'o l'ecll1'SO que proceder por tan leos,
ciendo el espacio que entro él y el líquido me­ viendo CUííl se acomoda mejor tÍ la ley de las
dia, una parte dol vapor se liquidará, y la pre­ curvas que gl'álicarnente exp"esan estas rela­
siolJ no habrá v3riado. ciones.
En resúmen, mientras el vapor está en con­ Las formas principales son las siguientes:
lacto con el líquido que lo engendra, de la re­
lacion entre el \'olúmen, la prcsion y la tempo­ La de YOllng. . p = (a +- b t)m.
raturn, drs;¡pnrece el primero de estos ele­ m' t +- n'
mentos, y solo quedan los dos líllimos. mt+- n
La de Rache. . jJ = a. 10.
Tendr'elllos, pues, para este kilógramo de
. lag. p = a +- b '7. +- e ~t.
t
ngua, mientras todo él no se reduzca á vapor, La de Diot..
p = F (1) . . . • . (1) (YI~ase la Física de Jamin.)
y por úllill1o,
Dedúcese de aquí que otro tanto podemos B C
decir del peso espeeífico del vapor, y que en­ la de fiankine. lag. p = A - - - -.
tre ('ste peso -;: y la temperatura existirá una t t2
rclacion análoga á la ameriOI'j (Véase la Termodinámica de Saint-Hobert.)

T. = ~ (t).
En todas ellas jJ expresa la prcsion, t la
temperatura 3bsoluta y a, b, e, 1J1., 11" m', n',
Traducido esto al lenguaje comun, significa '7., ~, A, B, e son constantes que depcnden de
que mientras el vapor esUí en contacto con el la naturaleza del cuerpo.
líquido que lo origina, su presion solo depende U¡. Desde que todo el kilógramo L1e agua
de la temperatura tí que se forma, y no del vo­ se reduce [1 vapor, el vo!úrnen entra de nue\'o
lúmen que ocupa. Tollo aumento de vohímen eu juego, por decirlo así, y si continúa aumen­
dá orígen á un nuevo desprendimiento de va­ tanL1o, disminuye la presion, obedeciendo pl'Ó­
por, pero no disminuye la fuerza elástica del ximamente á la ley de los gases permanentes,
conjunto: toda disminucion de volúmen con­ expresada por la fórmula
densa una parte del vapor ya formado, pero
tampoco aumenta su presiono En cada cuerpo, p v = R t.
á cada temperatura, corresponde una pl'esion Así, pues, la fuerza elástica del vapor es in­
fija, dctcI'minnda, invariable: conocer la tem­ dependiente del volúrnen, mientras el vapor
peratura á que se forma el vapor, es conocer está en cOUlaeto con el líquido de que proeedej
la presion con que se desprende, y recíproca­ pero á pal'lir del inSlante en que so ha evapo­
mente conocer su presion es conocer la tempe­ rado por completo, varía con el volúmen lo
ratur" ,í que se forma. mismo que otro gas cualquiera: aumenta cuan·
Las experiencias sohre tensiones de los va­ do aquel disminuye, y disminuye cuando el
pores consliLuyen, pues, tablas sencillas: en la volúmen aumenta, siempre en la hipótesis de
primera cotumna se consignan las temperatu­ una temperatura constante.
ras, en la segunda las tensiones j y otro tanto 14. Debemos distinguir, segun lo dicho,
puede decirse de los cuadros relativos tí densi­ dos estados en el vapor:
dades ó pesos específicos. Esta relacion entre P'rime1' estado. Cuando se halla en contac­
las temperaturas y las fuerzas elásticas de los to con el líquido de que procede, y de él puede
v pares dc diferentes sustancias ha sido objeto sacar nuevas cantidades de vapor, ó puede de·
 TERMODIN.'\)[ICA. 9

volvcrle las quc se liquidan. En este caso se / (t) para t = too Por este motivo clan los fl'an­
dice que el vapor est.á satm'arlo, ó que sc h<llla ce8es, á lo que hemos llamado vapm' aisl(ldo,
en el máximum dc satm'acion, ó t.ambien que el nombre grá nco de vapor s1trclta1ff/de, es de­
es vajJor almria;imwm de tension. Cil', recalentado.
Todas estas dcnominaciones son cxactas. En Física se haccn experiencias sumamente
Puede dccirse con verdad que el vapor, ó claras y sencillas que ponen de manifirsto los
aun mcjor, cl espacio en que sc halla, está sa­ distintos cal'actéres de los vapores, ya se ha­
turado, porque en cuanto se trata de condcn­ llen en lIno ya en otro estado; prro la Índole
sal' dicho vapor, disminuyendo á cst.e efecto el especial de estos arlÍculos nos impide entrar
volúmen, una parte se liquida. El cspacio en en más ámplios detalles.
que el vapor está encerrado contiene, pues, to­ Por último, conviene no echar en olvido que
do el que puede contencr ti la t.emperatUI'a lija los vapores, al ménos cuando se hallan á cier­
q lle se considel'a. ta distancia de su punto de liquidacion, son
Es exacta tambien la denorninaeion de va­ verdaderos gases, como los gases 'permanen­
por al mró;illl·1l'm de tension, puesto que, cuan­ Les son vel'daderos vapores.
do para aumcntal' esta se reduce su volúrnen, 16. Paso de sólido á liq1lido. El paso de lIn
deja de ser vapor y se convierte en líquido; al cuerpo del estado sólido al estado líquido dá
paso que aumentando ll1<lS y más cl espacio, oT'Ígen el fenómenos análogos en un todo á los
hasta que todo ellíquiuo se evapore, y conti­ de la evapor<lüioIl. Cuando la ]J7'esion es cons­
nuando aún la expansion, puede obtenel'se tante, la temperat.ura el que un cuerpo sólido
vapor á menores tensioncs. Es decir, que para 8e funde es ellnstante tambipn desde que el
cada tempcratura t hay una tcnsion rnáxima cuerpo cornienza á fundirse hasta que conclIl'
en los vaporcs, y es la deducida de la fóm1l11a ye la fusion (claro es que Imponemos siempre
p =/(t), el mismo cuerpo sin alteracion química ó física
8egwndo estado. Cuando el vapor no se ha­ en sus clementos), lo cual nos prueba que la
lla en con tacto con el líquido dr q llC proccdc, I'elacion entre p y t el' independiente del volú­
y su presion es inferiol' á la máxima. En este men, y que en este caso, eomo en el de la eva­
caso ohedecen próximamentc los vaporcs á la pOI'acion, 11 la fÓl'mula 9 (p, .1), t) = o debemos
ley genMal de los gases, p v = R t; si bien sustituir esta otl'a
este punto ofrece todavía algunas dudas que
convendria aclarar. P=/. (t).
Para abreviar la explicacion llamemos ~í los Podriamos, como en los vapores, distinguir en
vaporcs en este último cstado vapores aisla­ los líquidos dos estados: Ó el de líquido satu­
dos, indicando así que no cstán en contaeto rado, es decir, en contacto con el sólido de
con el líquido de que proceden. cuya fusion procede, ó el dc líquido aislado y
15. Dos medios hay de hacer que pase un obedeciendo á las leyes generales de estos cuero
vapor de aislado á satm'ado. pos. El primero, en general, se solidifica par­
1." Conservando constante la temperat1wa eialmente por el menol' aumento de presion, ó
t o á que se halla, y comjJ?'imidndolo hasta que por el menor descenso de temperatura. El se­
alcance su tension máxima po : po Y t o satisfa­ gundo puede sufrir aumentos de presion y
ciendo á la fórmula jJo = f (t o)' descensos de temperatura sin solidificar8e,
2." lJisrnintli?' Sll temperat1wa, sin cambiar Para cada presion existe pues una tempera­
la presion Po, hasta llegar á la temperatura t o tura úniea de saturacion, ó como se elice co­
que corresponde á la presion máxima po: las munmente, de fusiono
cantidades jJo y t o satisfaciendo aun á la fór­ 17. Res'/Ímen. 1.0 Para los cuerpos sól i­
mula po = f (t o)' dos cxiste una relacion general, aunque toda­
Recíprocamente todo vapor aislado puede vía no está bien estudiada, entre los tres ele­
considerarse que procede de vapor satU?'ado, mentos ya indicados: presion, vol úmen, temo
por una de estas operaciones. pCI'atul'a: así
J.a Conservando consLante la temperatura cuerpos sólidos.. ,. p =/(1), t) . ... (1).
tu y disminuyendo la presion Po hasta que se
rvapore todo ellíquiclo. 2. 0 Al pasar de sólidos á líquidos la fórmu­
2. a Conservnndo la misma presion p" y au­ la ( 1) se trasforma: el volúmen desaparcce y
\!H'ntando la temperatura hasla que la nue­ queda
va sea ig'ual á la de quc se deduciria de p = F1lsion, . ... P =/(1) . .... (2).

 10 TERMODIN.ünCA.
3.° Al pasar al estado líquido vuel\'eá in­ p=f(v.t)jp=f(t)jp=f.(v.t)j
fluir el volúmen y aparece otra relacion, que
tampoco es bien conocida, entre p, v, t; ten· B e
lo"', p = A - - - - ; p v = R t.
dremos pucs ., & t2
cuerpos líquidos. ... p = f. (v, t) . ... (5).
La]YJ'imerap =f(v, t) esuna superficiecu­
4. ° En el cam bio de estado por evapo['acion ya forma todavía no conocernos, y que se apli­
solo la presion y la temperatura aparecen en­ ca al hielo, es decir, al agua en estauo sólido.
lazadas, y resultad en general La sef/unda jJ = f (t) tampoco nos es cono­
E'vajJ01·acion • ••• p = f. (t) . ... (4), cida, pero representa una superficie cilíndrica
ó segun Rankine cuyas generatrices son paralelas al eje de las
'v, y cuya traza tiene pOI' ceuacion sohre el pla­
B e no pO t la misma relacion p = f (t). Dieha
log-. p = A - - - - ••••• (-1').
& [' traza suponemos que es en la figl1l'a c' c"; y e II
sorá la proyeccion vertical de la generatriz que
;:;.0 Por último, cuando todo el líquido se pasa por c' .
ha convertido en vapor, este puede conside­ La tm'cera p = f. (v, t) tampoco está bicn
rarse como gas permanente. y se le aplica la estudiada, pero no es ya cilíndrica, puesto que
fórmula general demostrada en el núm. 11. contiene v. Su proyeccion horizontal cstá com­
Así: p['endida entre c-' c" y e' e".
Va}J01'es aislados ó gases . .. p v = R t • .. (5). B e
La cuarta log. p = A - - - -represen.
18. Ejemplo: Oambios de estado del af/1ta. t t'
La figura 1.' expresa gráficamente la ley que ta otra superl1eie cilíndrica cuya traza sobre
enlaza :í las tres variables p, v, t en los dife­ p O t suponemos que es e' e", y de la cual una
rentes cambios que sufre el agua. generatriz se proyecta en E F Y e'.
La quinta p v = R t representa un parabo­
loide hiperbólico.
Si para formarnos idea de esta superficie. ó
de este conjunto de superficies, cortamos el
sistema por un plano A' G' paralelo al t O Vj es
decir, si suponemos que la presion p = O A' es
constante é igual, por ejemplo, á 0, 76, tcn­ 11I

dl'emos para las diferentes partes de la in ter­

seecion las eeuacionos siguientes:

Para AD (hielo) . . . . . 0,7G=f{v, t)

la línea representada por esla relaeion en·
tre v y t difiere poco de la línea ['ccla.
Para D e (rusion) . . . . t = constantc = 274":
Consideremos Ires ejes coordenados O t, Op,
D e es una paralela al eje dc las v, lo cual
O v, sobre los cuales contaremos las tres va­
significa que mientras p sea constante, t
riables de que se trata: es decir. que sobre O t
lo sOl'á tambien.
contaremos las temperaturas absolutas: sobre
En D, correspondiente á.. t = 274 + 4 = 278°,
O p las presiones en kilógramos por metro cua­
se halla el mínimum de volúmeu, puesto
tirado; y sobre O v los volúmenes que ocu­
que sabemos que á 4° sobre cero oorres­
pa 1k de agua: suponemos además que los pla­
pondo cl máximum de densidad.
nos 1) O t Y t O jJ se aplican sobre el papel se­
Para D E (agua liquida). . . . 0,76 = f. (1), t):
gun el método genel'al de la Geometría des­
tampoco difiere mucho de la linea recta
criptiva: así puede decirse Q'le O t es la línea
dicha funeion.
de tierra. Para E F (vapori7.acion)... t=274+100=374:
En rigor las relaciones (1) (2) (3) (4') Y (5) de­ E F es uua pal'alela al eje de las 1), 10 que
terminan una superficie cuyas tres coordena­ significa que, mientras dura la eyapora­
Jas scránp, v, tj Ó mejor dicho, un conjunto cíon, la tempe['atura es constante si la pre­
de cinco superficies que mútuamente se limi­ sion lo es. El agua aumenta de volúmen
ladn : ¡í saber: desde e E (\'olúmen del agua líquida á
 TERMODINÁMICA. 11
100°) á e F (volúmen de este mismo kiló­ que á la presion cero corresponde la tempera­
gramo de agua reducido á vapor). tura t = 0°, es decir, el cero absoluto, dicha su­
o R perficie no podrá pasar á la izquierda del pla­
Fmalmente, para F G. . . . . v = - t no ti p, Ycortará á este segun el eje o ti.
P Sin embargo, la verdad es quc para temo
representa próximamente una linea recta,
á saber: una generatriz del paraboloide. peraturas y presiones superiores ó inferio·
Para otra presion, es decir, para otro valor res á ciertos límitns, la ley cxpresada por
de p, p = O A", rcsulLa una segunda curva 'í' (p, v, t) = O es de todo punto desconocida.
análoga á la A II e D E F G: las partes verti­ 20. Trabajo P'í'Od1tcido P01' la expansion de
cales II e y E F se sepa¡'an cada vez más, á me­ 1m cuerpo.-Como la determinacion del traba­
dida que p aumcnta, alejándose E F del orí­ jo producido pOI' la expansion de un cuerpo, ó
gcn, al paso que CII se aproxima. Este carác­ del empleado en su comprcsion, son pl'oblemas
ter del agua y de todos los líquidos que al con­ quc se presentan frecuentemente en la teoría
g'elarse aumentan dc volúmen, está exprcsado mccánica del calor, conviene dar desde luego,
en la figul'u por el sentido en que se inclinan )' de una vez para todas, la solucion de dichas
las curvas c' c", e' e". cuestiones.
19. 016e1'jJos q1 e dismin16yen de vol1tmen al
1 Concibamos que un cuerpo de volúmcn v, y
congelarse. Hepitiendo para los CUCI'pOS cuyo tCl'minado por una superficic cualquiera, se
volúmen disminuye al pasar de líquidos á só­ dilata, ejerciendo en todos los puntos de dicha
lidos las cOJlsideracioncs anteriores, obtendre· superficic una presion normal. Designemos
mas la fig. 2.:l por d a un elemento de la supedicie en un mo­
mento cualquiera; y por p la prcsion por me·
tro cuadrado sobre este elemento: la presion
total sobre d a será
pda:
el punto de aplicacion de la fuerza puede su­
I
I
I
ponerse que es uno cualquiera de los de da,
01 ~

J> I
:a \, pOI' ejemplo, su centro de gravedad, y su di­
'~ reccion será la de la normal á la superficie en
f S
\ J.' C1" P'
Y" dicho punto.
Si repl'esentamos por d r la longitud inter­
, ceptada sobre esta normal por la superficie en
dos estados consecutivos, el trabajo infinita­
En la linea AB. . . . E F la ordenada v cre­ mente pequeño desarrollado en este tiempo será
ce constantemente con la temperatura, )' ade­ }J. da. d 1';
más la curva 1/ bU se inclina hácia la derecha
en vcz de inclinarse á la izquierda como en la tcndrá el signo + cuando d r esté engendrado
fig. 1.:1 dc dentro á fuera, y cl signo - en el caso con­
Tales son las diferencias esenciales entre los trario.
cuerpos que al solidificarse aumentan de volú· El trabajo tolal, durante el mismo tiempo
men, )' los que, por el contrario, se contl'aen al infinitamente pequcño, desarrollado por todas
cambiar de estado, pasando de líquidos á sóli­ las presiones que se ejercen sobre la supel'ficie,
dos; pero en todos los casos la superficie que sel'á la integral de dicho elemento p. da. d '1',
representa geométricamente la ley de dila­ es decir, la suma infinita de todos estos ele·
ta bilidad y elasticidad, 9 (p, v, t) = O, se mentas para todos los puntos de la supcrficie
compone dc cinco partes distintas; prcsenta, que termina el cuerpo ¡ lo cual se expresa por
por decirlo así, dos escalones correspondientes
j'p. da. d r¡
á los cambios de estado; y para temperaturas
suficientemente elevadas se confunde con un y si suponemos p constante
paraboloide hiperbólico. Además, como la pre­
sion nunca puede ser negativa, ni tampoco el pj'd a. dr.
1Jol1íme1~, toda la superficie estará situada de­ Pero da. d r es el volúmen infinitamente pe·
lante del plano de las ti t, )' será superior al queño comprendido: 1.0, por la superficie en
de las t p: finalmente, como todo induce á creer el instanle t¡ 2.°, por la nueva po~icion de la
 12

superficie en el instante t + d t; 5.°, por la suo/la ley segun la que varía la presion en fun­

perflcie casi cilíndrica formada por todas las cion del volúmen, y de los valores inicial y

normales levantadas en el contorno de da; y final de este.

por consiguiente Representando por

Jd a. d r p =f(v)
seflÍ el incremento, ó mejor dicho la variacion el valor de la presion en funcion de v. y pOI'
del volúmen total. Así y v, los valores estremos del vo!úmcn, el
'1'0
trabajo tolal será
J da. d r = d v.
El elemento da. d r de volúmen será positivo
ó negativo segun el sentido en que crezca d r,
lo cual coincide con la manera de medir el
trabajo: representan no por T este trabajo ten­
dremos
ó
dT=pdv;
de donde
si p fuese constante.
T=Jpdv.
Hemos seguido en la expOStCIOn de estos
Este resultado demuestra que el trabajo total principios fundamentales el1nétodo de 1\1. Saint­
producido por la espansion del cuerpo no de­ Robert en su escelente obra sobre la Termo­
pende, ni de la forma de la superficie, ni de Sil dinámica, aunque con algunas aclaraciones y
movimiento en el espacio, sino lÍnieamcnte de desarrollos.

CAPÍTULO 11.

Principios fundamentale .

21. lIemos dicho (N° 8) que entre el volú.
men v de un cuerpo, su presion p, y su tem­
peratura t existe en general cierta relacion
':' (p, v, t) = o, de la cual, dados los valores de
dos de las tres cantidades que en ella entran,
se deduce el de la tercera. Podemos tomar
como variables independientes v y p, ó v y t.
ó por último, t y p; pero siempre resultará
que dos de estas cantidades determinan el es­
tado del cuerpo; dadas, por ejemplo, v y t,
llueda determinada la presion, y la cantidad
de calor que el cuerpo contiene.
Puede decirse en general que todos ó casi
todos los problemas de la Termodinámica con·
sisten en deternJinar en cada caso los diferen­
les elem ntos desconocidos en funcion de las
dos variables independientes que se elijan en­
tre lo tre8 grupos ya indicados.
22. Cuando á un cuerpo, qlle se halla en un
estado térmico definido por p y 'V I por cjern­
plo, y por lo tanto por t, J} I '/i, lo ella expl' •
saremos en esta forma (p, v) ó (P, t', t), se le
agregan ó se le quitan, segun cierta ley eon­
tÍnua ó discontínua, eantidades sucesivas de
calor Q, Q'. Q".••. su estado de equilibrio t;C
altera: vat'íau en general su volúmen, su pre­
sion y su temperatura, yal cambiar de volú­
men engendra (;\lo 20) cierta canlidad de trabajo
externo. Hé aquí un elelllellto más que encon­
traremos en todas las cuestiones de Termodi­
námica, y quc ser.l, en la mayor partc de los
casos, el que más nos int.erese. lIemos dicho
que al cambiar el cuerpo do volúrnen, pOI'
efecto de las canticlades de calor que recibe ó
que pierde, desarrolla cierto trabajo, á que he­
mos dado el nombre de trabajo externo, yesla
defl( minacion es nee sada para distinguir el
que desarrolla en su superlicie, del inte¡'¡w y
molecular quc en toda su masa se efectúa.
Hccípl'oeameu e, si sometemos :.í un cuerpo
 TER7\IODI~ .\MICA . 13
lÍ presiones ó espansiones sucesivas segun cier­ narlo con el nomhre de calo?' especIfico aprl­
ta le)', cambial'ú su volúmen, su presion, su sion constante y relativo al vol?tmen.
temperatura, la cantidad de calor que contie­ Fijémonos ante todo en la notacion, que
ne, y aun se desarrollará en el interior de su quizá parezca complicada, pero que sin em­
masa cierto trabajo molecular, bargo es en extremo sencilla y muy útil para
¿ Cómo están enlazadas entre sí todas estas dar simetría <tlas fórmulas. En primer lugar,
cantidades? Hé aquí el problema más general empleamos la letra C para este coeficiente como
ue la Termodinámica. Debemos, pues, buscar para todos los demás, porque es letra inicial á
I'elaciones analíticas entre los siguientes ele­ la vez de la palabra calor y de la palabra coe­
11I en tos: p7'esion; vo!1tm,cn: temperat1tra; can­ ficiente. En segundo lugar usamos indices y
tidad de calo?'; trabajo (',xtenw y trabajo in­ s1tbindiees j el índice indica cuál de los elemen­
te7'7W; pero como sucede casi siempre, las los p, v, t pCl'manece constante; el subíndice
cuestiones difíciles y los problemas complica­ á cuál de las tres variables se refiere el coefi­
dos de esta teoría se reducen á otros más sen. ciente de que se t.rata.
cilios, y en último análisis á cierto número de Comprendido esto, observemos que este cae·
casos particulares, y de estos deberemos ocu­ ficiente específico expreSJ una cantiaad ae ca­
parnos ante todo. l07', Y que esta cantidad de calor no es 1 Ó no
23. Con sel' en extremo sencilla la llueva debemos suponer por ahora que sea constante:
teoría del calor, la exposicion que ue ella se no se necesitará en cfeclo, ó no es probable que
hace en la mayor parte de las obras especiales se necesite, la misma can tidad de calor para
que se ocupan de esta materia es tirida y com­ hacer que un cuerpo se dilale un centímetro
plicada: los problemas se resuelven, es ciel'to; cúbico, sea cual fuere su volúmen , su pl'esion
, P,
pero se resuelven, por decirlo así, sin plantear­ y su temperatura. ASl pues, C. sel'a una fun­
los de antemano, y las ecuaciones van saliendo
cion en general de p, v, t, y como una dc estas
una tras otra, como pOI' arte de Ill<ígia, cuando
cantidades depende de las otras dos, podremos
hacen falta; pel'o sin que sepa nunca, el que escribir, eligiendo, por ejemplo, v y t por va­
por primera vez estudia esta teoría, ni por qué riables independir.ntes,
vienen, ni pal'a qué sil'ven, ni cuándo se con·
cluirán, Este defecto resalta sobre todo en la
bra de Zeuner, libro, por lo demás, de gran C.P = funclOn
• (
v, t).
mérito; baslante mejor es la exposicion que l'
de la teoría del calol' hace Combes en la cs­ Más aún: este cocficienle C es una abstrac­
cclente coleccion de artículos que ha publi­ •
cion analíllca y no un número práctico, aun­
cado en el .D1~lleti'í¿ de la Sociéte d' enCott1'a­ que se use en todos los cálculos del calor, ya
gement j pero solo en un libro hemos encon­ en uno, ya cn otro conceplo.
tl'ado la claridau y el método que tan nece­ Expliquémonos con más claridad.
sal'ios son en las obras didácticas, y es este Si á un cuerpo cuya presion supondremos
liLro la Termodinámica de MI'. Paul-Saint­ siempre la misma, se le dan ó se le quitan cier­
Hobert., ya val'ias veces citada, Aun es posiLJle, las canlidades de calor
ü nuestro entender, dar lJI<Ís clal'idau á la ex­
posicion, y para conseguil'lo alteral'emos el ~Q. ~Q'. ~ Q", . . . . .
órden que suele seguirse ell esta materia, si­ su volúrnen recibirá incl'ementos distinlos
guiendo otl'O completamente distinto, pero
~ v , ~ v' I ~ v", . . . . .
aprovechándonos de algunas ideas del autor
que acabarnos de citar. y es claro que si la funcion que enlaza Q con v
24. Ooeficientes espec{ficos. LO Suponga· no es lineal, los incrementos de vohímen no
1l1OS que en un cuervo la presion pern~üuece serán proporcionales á los incrementos de ca­
p
constant.e j )' representemos por C. (siendo p, 101': es decil', que no tl'lIUrctl1OS
no un exponente, sino un índice) la cantidad ~Q ~Q' ~Q"
- - = - - - = - - - = . . . . . -=
de calor necesaria para que el volúmen del ~ v ~ V' ~ v"
cuerpo reciba un incl'emento igual á la unidad:
p cantidad de calor por 1mülaa de voltí me7t; pero
esta cantidad C. sel'á el primer coeficiente es­
· varIa
esta rcl aClOn 'bl c -~-Q ten'd era" a un 1"11111­
pecifico que consideraremos, y podemos desig· ~ v
 14 TERMODINlÜHCA.
te perfectamente determinado, que será la de- I ciente específico, respecto al cual podriamos
rivada de la funcion que enlaza Q con v; y re­ repetir cuanto hemos dicho para el primero.
presentando por e: este límite, tendremos, Diremos, en resúmen: que <
es, ó debemos
suponer que sea, variable y dependiente de
p dQ
e = - - = funcion (v, t); 'V, t; que representa la cantidad de calor ne­
• d v cesaria para aumentar un grado la tempera­
de donde sc deduce tura de un cuerpo ~í preiion constante, y que
por 10 Lanto 1 si se busca la cantidad de calor
11 II Q necesaria para que la temperatura de un
dQ = e dv,
• cuerpo á presion constante aumente la canti­
Es decir, que para conocer el t''itcremento Út­ dad ~ t, se Lendrá
/in it(('mente jJerjl(ei¿o de calO?' d Q q1te es preciso p
da1' ti un cuerpo á fin de g/te S1t lJOl1(1Jlen ,,'eciba ~Q=Clllt.
1m inc1'ementf) rlete7'1íÚnrU(O d v, perm.aneciendo
COítstantc la JJ?'esion, basta multiplicar el coe­ El índice Jí signil1ca siemprc que la presion es
constan Le, y el subíndice t se refiere á la can­
e:
ficiente ]JO?' dicho incremento de volú1íWt d v. tidad que varía.
Est ecuacion solo es rigorosamente exacta Puede designarse este coeficiente con el
siendo d 11 Yd Q diferenciales, pCl'O en la prác­ nomIne de calor espec(fico á presiO'it constante
tica puede aplicarse á incrementos muy pe­ y relativo á la temperat1tra,
D
queilos. 5, ° e será el calor especifico á 'lJol1tmen
p •
fl
Así, por ejemplo, si conociésemos C. ' es de­ constante y 'relativo á la p"esion: dependerá
cir, si tuviéramos de 'V, t, Yentre el incremento de calor necesa­
rio para que la presion aumente a p y este in­
p cremento, tendremos
c. =-dv, t),
11
II Q = e 6.p,
) se nos pregun tase ¿qué cantidad de calor II Q p
es preciso comuniear á un cuerpo cuyo yolú·
men es 2 m \ su temperatura Soo, y su presion
•
4.° el será del mismo modo el calor espe­
constante para que se dilate un centímet'i'o cú­ cijico á 1JoMmcn constante y 'relativo á la ten¿­
bico ó sea 0, 103 000001 ? resolveríamos el prohle­ pe1'atura: será funcion de v, t, y tendremos,
. d
ma svsL1tuycn o en el valor de e.fl los valores como en los casos anteriores,
v = 2; t = SO, Ytendríamos I
II Q= e II t .
A Q = "( (2; 80) X 0,000001;
•
t

advirtiendo que la presion constante á que se 5. ° e, designad el calor especijico á ten¿­

mantendria el cumpo seria pe?'atttra constante y relativo al vol1¿men: será
funcion de v, t, y tendl'emos
P = '1' (2; 80).
P A Q= el• .1 p.
Se comprende fácilmente que e11 es una ex­
I
presion análoga al coijiciente de elasticidad E G. ° eP representará, por úHimo, el calor
de la ~Jecánica <lplicada, á las f1terzas referi­
a(ts tí la 1m'idad de masa de la Mecánica racio­
específico á te'il¿pemtnra constante y relativo á
nal, á las de?'ivadas del cálculo, etc.: es, en la p1'esion: será funcion de v, t, y tendremos
una palabra, la cantidad de calor que seria I
necesll7'io pa'i'a atMítentar el vohimen del C1te1'po 6. O = e IIp.
- p
eít 1!íI(t 11 íddad si se dilatara e,t todo este inte1'­
'Calo, eMito se dilata ó comienza á dilatarse en 25. Resúmen, Hemos dicho que hay seis
el jJ1'imer instante. coel1eientes específicos, y esle número no es
fl arbitrario. Puesto que el estado de un cuerpo
. DeSlgnaremo
'_'.0 . por e I e1 segun d o coe 111­ depende de dos de las canlidadesp, 1', t, yque
 TERMODINÁMICA.
entre estas hay una relacion, al estudiar qué
cantidades de calor infinitamente pequeñas
deben comunicarse á un cuerpo para que,
permaneciendo cualquiera de los tres elemen­
tos antcriores constante, varíe uno de los
otros dos en canti<1ades fijas, es claro que solo
pueden hacerse las seis combinaciones si­
15
de dichas variables, ó aun euando sean cons­
tantes, nada de lo que hcmos establecido hasta
aquí, ni de lo que hemos de desarrollar en lo
sucesivo, exige que especifiquemos esta cir­
cunstancia.
En Física se demuestra experimenlalmente
v

guientcs: que para los gases CI cs constante, es decir,

p
p independiente de v y de t, y quc C 1 es indepen­
1
LO p ..... constante y en v y tendremos C. diente de t; pero quizá estas no sean más que
este caso que varíe. p aproximaciones prácticas de una ley más ge­
t » CI
neral.
2. 0 v..... ,constante y quejt
» C·
,
I 27. Desde luego se prevé que la resol u­
cion de todos, ó de la mayor parte de los pro­
ti
val'lO p » C blemas de la Termodinámica, dependerá de la
P
1 determinacion de estos seis coelicientes espe­
3. o t.. ... constante y que IV » C" cíficos. Y en efecto, ell os expl'esan la ley de
vane
,
p » C
I los incrementos, ó en general de las variacio­
p nes de p, v, t, al dar ó sustraer calor al cuer­
M. Saint-Robert emplea notaciones distin­ po que se considere: es decir, que por medio
tas, y para facilitar la lectura de su Termodi­ de estos coeficientes podremos seguir paso á
námica, así como la de las obras de Combes paso. y elemento por elemento, los cambios
y de Hirn, manifestaremos en un cuadro la que experimenten las tres variables funda­
equivalencia de unas y otras notaciones: mentales p, v, t, Y por lo tanto podremos ha.
llar los valores finales que adquieran bajo la
Notacion .tloptatla. Nolacion de Sainl-Roberl. influencia del calor.
Verdad es que dichos coeficientes solo ex­
presan la ley de las variaciones infinilamente
C • "

•
.Y pequeñas, es decir, la ley diferencial j pero el
p ctilculo enseña cómo se pasa de los incremen­
C. . .•... K tos á los valores finitos, y de las ecuaciones
I
diferenciales á las ecuaciones ordinarias: ade­
C.
• .N más, sustituyendo á incl'ementos infinitamen­
I
te pequeños, incrementos muy pequeños, son
C". .x suficientes á veces las ecuaciones diferencia­
P les para la resolucion práctica de los pro­
e .
1
blemas.
• ••.•• M
•, Por otra parte, desde el momento en que
conozcamos cómo varían en una sél'ie de cam­
c. • .•... P bios de estado la presion y el volúmen, podre­
p
mos conocel' (N. 20) el trabajo externo, luego
26. De estos seis coeficientes solo dos sc en último análisis la determinacion de dichos
estudian en Física, á saber: seis cOf¿jl.cientes nos pe1'mite calc1ela)' los efec­
•
C, = N, al cual se le d.l el nombre de calor
tos mecánicos debidos al calor.
28. Relaciones entre los seis coqicientes_
espec(fico ó capacidad calorífica (t volúmen p p v VII
constante¡ Los seis coeficientes CI ' C, , CI , ep , ep ,e , ~

l' no son independientes: por el contrario, siem­

y CI = K, que se designa con la denominacion
pre es posible expl'esar cuatro de'ellos en fun­
de calor especijico ó capacidad calorf/ica á pre­ cion de los otros d(ls, con tal que se conozca la
sion co'nstante. relacion general p = f (v, t). Yen efecto, dos
lIemos supuesto que todos los coeficientes C , v
son funciones do v, t, y probablemente esta de ellos, por ejemplo C.' Cl ' bastan para de­
hipótesis será exacta; pero de todas maneras, terminar los valores sucesivos de ti, t, Y la
y aun cuando sean independientes de alguna ecuacion p =f(v, t) los de p, luego todos
 16 TERMÜDIN1\.MIüA.
los coeficientes restantes están implícitamen·
2. 0
Análogamente, puesto que C, expresa
•
te determinados. Deteng~lmonos sobre este
punto. la cantidad de calor que seria necesaria pal"
I aumental' la tempel'atura del cuerpo en 1 uni­
1.0 Sabemos que e ,expresa la cantidad dad, si la ley de crecimiento fuese la del primer
•
de calor necesaria para que un cuerpo, cuya instante, resulta que para aumentar dicha tem­
temperatura es constante, reciba en su volú­ peratura en el t será p¡'eciso que
men el incremento 1; Y que pOI' lo tanto al in­
cremento el v corresponderá la cantidad de
•
d Q = e, d t.
calor
t
Pero siendo v constante no puede val'Íar t
d Q = e d v. sin que varíe p, luego el Q producir!) un au­
• mento de presion el p deducido por la difereD­
Pero como v y p están enlazadas por la ciacion dep =f(v, t); así
ecuacion fundamental p = f (1', t), al incre­
mento el v, y suponicndo t constante, cones­
•
e •I d t e,
ponderá el incremento el p ele presion, deter­ e = - - ­ = --. (2)
minado por p d P úp'

d P d t
dp=--dv,
d v Ó segun la notacion de Saint-Robel't
elp I
X=N---·
en que - d representa la derivada parciallle dp
"v
p =f(v, t) con relacion á v. dt
Eg decir, en resúmen, que la cantidad de 5. Supongamos que la presion p perman­
0
I
calor ~ Q, ó C. el v, al mismo tiempo que PI'O­ ce constante y que el \'olúmen aumenta la
cantidad el v: para ellos se necesiLará comuni­
duce un incremento el v en el volúmen, deter­
mina un aumento d p en la presion, luego el car al cuerpo la cantidad de calor
calor necesario para aumentar la presion en l'
dQ=e o d v,
'1, siondo constante la temperatura, será
, , y el cuerpo halJrtI pasado de la presion p y el
e dv e volúmen v, á la misma presion p con otro vo­
• • lúmen distinto v + d 'v (variando naturalmente
dp =-;¡P'
la temperatura). Pero al estado definido por
dv 1J y v + el v podemos pasar tall1bien por dos
Ahora bien, esta cantidad es precisamente cambios sucesivos: 1.°, suponiendo que p pasa
, á p -+- el p, y v á v -+- el v, quedando t constan­
la que hemos designado por ep ,luego tendre­ te j 2. 0 , suponiendo que p + el p vuelve á p,
mos quedando v -+- d v constan le, para lo cual será

,o
1

.
op =ti-p. (1)
preciso que t se convierta en t -+- d t.
Para que se vCl'ifique el primero de estos
cambios será preciso comunicar al cuerpo una
canlidad de calor representada por
dv
, ,
Dicha ecuacion deter'mina el coeficiente ep e d v;
, •
para que se vel'ifique el segundo la cantidad
en funcion de C. y de la derivada principal
de calor que deberemos comunicar al cuerpo
elp será
Segun las notaciones de Saint-Robert v
dv
seria
e 1 d t;
I
P=M-. y la canlidall total de calor
dp I r
dv e d lJ + eI
(i t.
 TERMODINÁMICA. 17
Pero este valor de aQ y el precedente deben Los valores a 1) y a t corresponden á a p = o,
ser iguales, y obtendremos la relacion de suerte que tendremos
P 1 v
dI' dI'
e• d v= e• dv + e1 d t (a) o = -- d v + -- d t.
dv dt
Observemos que d ti Yd t son variaciones de
y t que corresponden á un valor constante Dividiendo la penúltima ecuacion por d t,
f)
a1}
de P, es decir, que deberán satisfacer á la con­ despejando de la última ---;Z¡' y sustituyendo
dicion
en aquella, resultará:
dI' dp
dI' = 0= - - d v + - - d t. (b) dI'
dv d t
" lId t
Dividiendo la ecuacion (a) por av y susti­ e = o -0-; (4)
1 1 • dI'
at d v
tusendo por d v el valor deducido de la ecua·
cion (b), tend¡'cmos ó segun las notaciones de Saint-Robel't
dI' d p
l' 1 • dv d t
e =0 -o -, (3) K=N-M-.
• "d P dI'
dt dv

Ó segun la notaciou de Saint-Robert 29. Las consideraciones precedentes tienen

una significacion geométrica fácil de inter­
dI' pretar.
dv Supongamos (fig. 3.a) tres ejes coordenados
Y=M-N-. Fig. 3. a o t, o 1}, o p en que se
dI' cucnten las tempera tu­
d t 1 ras, los volúmenes y
las presiones, é imagi­

'-
4. o Por último, un cuerpo dado puede pa­ A nemos construida la su­
sar de (t, p) á (t + a t, p) de dos maneras i
\ 'l::'-dp perficie p = f (v, t).
primero: comunicándole una cantidad de ca­ ~l:t ! &. Sea B un punto para
lor determinada por '-~_.~ el cual se tenga R b = p,
p
dQ= O, dt;
v;
:;
:f---é,
/J
a b e = ti i O e = t i Y tra­
cemos por n un plano
paralelo al de las v, t,
que cortará ti. la super­

segunao: haciéndole pasar de (t, v) á (t, 11 + a 11), ficie p = f (v, t) 1 segun una línea de nivcl

para lo cual será preciso comunicarle la can­ 8 C, cuya proyeccion representaremos por b c.

1
tidad de calor C. av, en cuyo caso p se conver­ Demos, finalmente, á v Y t los incrementos

tirá en p + a Pi y despues de (t, v + a v) á

ba=dt;ac=dv;
(t + d t, v + all) de modo quep + ap vuelva
al valor p, para lo que deberemos darle al cuer- y sea
I AD=dp
po una cantidad de calor C, a t.
Como ya por el primer sistema, ya por el el incremento infinitamente pequeño de p cor­
segundo se v;ene á parar al mismo eslado final, respondiente á a t.
y además se parte de las mismas condiciones La ecuacion (2) se ha obtenido pasando del
iniciales, tendremos punto n al A, y observando que para el valor
constante de v, b e -= v, los incrementos
P 1 I B D = a t y A D = a p S01~ simll,ltáneos.
e 1 d t = e• d v + e 1 d t. La ecuacion (1) se obtiene por consideracio·
3
 18 TERMODINÁMICA.
nes análogas pasando del punto C al A, ó del f •
ficientes específicos C.' Cf ; puesto que cono­
B al A', puesto que todo el espacio A D A' e
J
es infinitamente pequeño, y tanto dá conside­ cidos que sean estos. las ecuaciones (1) (2) (3
rar el punto D como el C. (4) (5) determinan los restantes.
f •
Las ecuaciones (5) y (4) se obtienen pasando Pero la determinacion de C• y Cf supone dos
del punto B al C por dos caminos:
Primero, directamente y calculando la can­ ecuaciones más, y estas se deducen de los dos
tidad de calor que corresponde á la variacion principios fundamentales de la teoría del
d v, ó la que corresponde á d t, siendo siempre calor.
lIé aquí por qué dicen los autores que la
1) constante;
Segundo, por el contorno D A C ; é igualan­ Termodinámica parte de dos ptincipios fun­
do las cantidades de calor. damentales: cosa quc á primera vista no se
50. Obse1'vaciones, En las consideracio­
explica; pues no es f,tcíl pl'ever si serán dos
nes anteriores hemos sustituido muchas veces ó sel'án más los que se necesiten, al paso que
á los valores de los coeficientes C, que corres­ se comprende con facilidad suma por las con­
ponden á 'IJ + d v, ó á t + d t los correspon­ sideracioncs que preceden, por qUl! son dos,
dientes '1J ó t; pero esto se sabe por c~Hculo ni más ni ménos, los necesarios y suficientes.
que es permitido, puesto que C ('1J + d v) X d t, En resúmen : todos los problemas de la Ter­
por l'jemplo, sc convierte desarrollando C en modinámica dependen del conocimiento de los
C (v) d t + C' (1)) d?J. d t, que solo difiere de cocficientes específicos; estos son seis. y cua­
e (?J) d t en un infinitamente pequeño de se­ tro se exprcsan en funcion de los dos restan­
gundo órden. tcs: luego solo quedan dos funciones desco­
31. Vemos por lo que precede, que de los nocidas, y solo se necesital'án dos ecuaciones y
f dos principios de que partan dichas ecuaciones.
seis coeficientes C basta conocer dos C y C· En rigor no son dos las ecuaciones sino tres,
'. I '
por ejemplo, para conocer los otros cuatro por puesto que debemos contar con la relacion
las fórmulas, general p = f (v, t); pero nada agregaremos
por ahOl'a á lo dicho para no anticipar las
1ft ideas. Más adelante insistiremos de nuevo so­
C = C -" , . . . (f) brc estc punto.
p • el P
32. Designaremos en adelante con el nom­
el v bre defoco de calor á cierta tempe1'atura dada,
un cuerpo del cual se puede sustraer, ó al
~
C =c "- t (2) cual se puede suministrar cualquier cantidad
l' f d P de calor sin que cambie dicha temperatura.
dt De aquí se deduce que todo cuerpo que se
ponga en contacto con un foco de esta clase
el p adquirirá su mismo estado calorífico, d~índole
pI. el v el calor que le sobra Ó tomando el que necesi­
C
•
=c • - C -'"
I el p
(3) te para ponerse en equilihrio.
Las paredes de la caldera dc una máquina
eL t de vapor, mantenidas ,1 temperatura constan­
te por la combustion en el hogar. ó el conde;¿­
dp salior, que una corricnte de agua conserva
1 el t
siempre á la misma temperatura, realizan ma­
C
"

I
=C •

I
-C - , .. (4)
• eL p
terialmente esta concepcion teórica de unfoco
constaí¿te de calO'!'.
d v
Todavía más: una mezcla de 'Mpor y de lí­
con tal que deduzcamos de quido á presion constante conserva siempre la
misma temperatUl'a, ya se le sustraiga calor.
p=f(v,t) (5) ya se le dé (N. 14), puesto que el exceso de ca­
lor se emplea en evaporar nuevas porciones
dp dp de líquido, y por la sustraccion se condensa
los valores de las derivadas parciales - . --,
d'1J dt una parte del vapor, pero sin que la tempera­
El problema general de la Termodinámica tura varíe mientras la presion no cambie.
flueda reducido á la determinacion de dos coe· Otro tanto puede decirse de las mezclas de
 TERMODIN Á~IICA.
sólidos y tifjuidos á la temperatura de fusiono
Vemos, segun lo dicho, que esta concepcion
de focos á tcmperatura constante ó invariable
no es puramente abstracta, sino que hay modo,
entre ciertos límites, de realizarla práctica­
mente: por lo demás, para facilitar la explica­
cion puede suponel'se que dichos focos son
depósitos i1'.flnitos que no sc aiteran porque se
les tome ó se les dé cantidades finitas de ca­
101'; así como se supone en la teOl,ía eléctrica
que el globo es un inagotable foco de electri­
cidad,
55. El estado calorífico de un cuerpo que­
da perfectamente determinado cuando se co­
noce su volúmen v y la presion p que ejerce
lbttt:
en su superficie,
Figura 4.&
Tracemos, pucs, dos ejes
rectangulares, O v, O p, fi­
gura 4:, y conlernos sobre
ellos los volúmcnes v como
abscisas, y las presiones p
O "como ordenadas.
o J1.n V.. Es e\'idente que cada es­
[(tdo pa1,ticnla1' del ClIe1'­
po estará pe1:fecta'mellte dqflnido por 1Mt p1tntO
del plano p O v; en efecto, dado un punto P,
sus coordenadas O V, V P quedan detel'111ina­
das; luego quedará detp,rrninado el volúmcn
ti = O V, la presion p = y P del cuerpo, y por
lo tanto su temperaLura t, y su estado c310­
rífico.
Una sucesion de diversos estados infinita­
mente próximos, corresponderá á una série de
puntos infinitamente próximos tambien j y si
el cuerpo varía por la ley de continuidad, el
p1mto 1'epresentativo trazará tina curva Po P P"
Figura ;j,'
Supong:\lnos ahora UII
cuerpo con el volúrnen
V o = O Vo y la presion
Po = Vo Po, y pongámos­
lo en contacto con un fo_
co de calor T á tempera­
tura constante t.
n n..--,,-v Las cantidades de calor
que cl cuerpo reciba al­
terariÍn las condiciones en que se hal1aha, y
variarán su volúmen y su presion segun ciel'ta
ley determinada por la curva Po m que descri­
be el punto rejJresentati1)o.
Supongamos todavía que al llcgar el volú­
men del cuerpo á O n y su presion á 'lit n, se
interrumpe la comunicacion enLJ'e el cuerpo y
el foco '1', )' se sustituye á este último otro foco
'1" á temperatura constante f. Segun que f sea
mayor ó menor que t, el cuerpo recibirá calor
19
de '1" Ó le dará parte del que posee; pero de
todas maneras variarán su volúmen y su pre­
sion, pasando por una série dc estados cuya
le)' estará expresada por la cUJ'va m m'.
nepitiendo de nuevo la sustitueion del foco
'1" por otro nuevo foco '1''', tendJ'emosotra nue·
va línea m' PI! y así podríamos continuar in­
. definida mente.
5.1. Es claro que las eun'as Po m, 71t m' ,.....
'" 71t' PI pueden ser infinitamente pequeñas,
y que los focos '1', '1", '1''', .. pueden variar por
la ley «le continuidad, en cuyo caso el contor­
no dh>contínuo Po m 71/,' P, se convertirá en una
curva contínua.
En resúmen : podemos siempl'e suponer que
la curva descrita por el punto 1'epresentati'Do
de un cuerpo procede de haber puesto en con­
tacto dicho CUCl'pO con una série de focos de
calor de temperatura constante, variando de
una lIlanera contínua ó disconLínua.
En tolla curva del genero de ta p,) m m'... 1',
habrá arcos en que el cuerpo reciba calor de
los focos con los qlle se le ponga en contacto,
y otros en que, por el conLJ'ario, ceda calor á
dichos focos.
Por ejemplo: si la temperatura dcT es su­
perior á la del cuerpo, mientras dcscribe el
contol'l1o Po m, saldrá calor de T y pasará al
cuel'po; si, pOI' el contrario, la temperatura
de T' es inferior á la de aquel, mientras su
punto generador recolTe 'lit 11t', el cuerpo ce­
derá una parte de su calor al foco,
55. Hemos supuesto que 'r, '1", ••• son/o­
cos infinitos, pero pudieran ser finitos, y sin
embargo no habria erl'or en considerarlos
como de temperatUl'a constante si solo están
en contacto con cl cuel'po un tiempo infinita­
mente pequeño, puesto que las cantidades de
calor cedidas ó adquiridas serán inlinitamente
pequeñas tambien, y esto no altcrará el ealol'
finito de dichos focos.
Más aún: pueden perder ó ganar los focos
de calor cantidades linitas, sin que por esto
dejen de ser exactas todas las consideraciones
que hemos expuesto hasta aquí: no habrá más
diferencia entre unos y otros casos que en la
ley, segun la cual variarán las curvas del con·
torno Po 71t11t' P"
56. Al poner en con Lacto un cuerpo con un
foco de calol' á distinLa temperaLura de la
suya, no son únicamente los cambios de volú­
men, presion y temperatura del cuerpo, l,os
fenómenos que se presentan: otras dos C1r­
cunstancias hay dignas de estudio: LO, las al­
teraciones moleculares que en el interior del
I
 20 TERMODINÁMICA.
cuerpo se habrán de verificar forzosamente;
2.°, el trabajo exterior, positivo ó negativo,
que desarrollará por su cambio de volúmen.
Del primer efecto no podemos ocuparnos toda­
vía, pero es ya llegado el momento de estudiar
detenidamentc el segundo.
El estad(l de un cuerpo, hemos dicho varias
veces, depende de su volúmen y de su presion,
elementos que determinan su temperatura: de
suerte que para cierto volúmen, cierta tempe­
ral,ura y una presion determinada, el CUPl'pO
permanecerá en equilibrio si de fuera adentro
obra otra presion igual y contraria á la suya,
sea esta presion la de la atmósfera, ó la resis­
t encia lle las paredes, ó un medio ma terial
cualquiera que ]a sustituya. Dedúcese df' aquí,
que si comunicamos al cuerpo una pequeña
cantidad de calor d Q, su presion aumentará i
y como la presion de la atmósfera, ó de la en­
volvente, ó en general la presion eXLeriOl' no
habrá variado, el equilibrio no serlÍ ya posible,
y el cuerpo aumentará de volúmen, rechazan­
do la fuerza exterior que le oprime i pero ven­
cer una fuerza á lo largo de un camino es des­
arrollar un trabajo; luego esta dilatacion del
cuerpo dará lugar á un trabajo elemen­
tal (N. 20)
+p.dv,
representando por jJ la presion y por d v el
aumento tle volúmen.
Claro es que si el cuerpo perdiese calor, su
volúmen disr'Jinuiria, y la presion de la atmós·
fera 6 de la envolvente seria en este caso la
que desarrollaria un trabajo venciendo hácia
dentro, por decirlo así, la resistencia del cuerpo
en cuestion, el trabajo de este seria en dicha
hipótesis de signo contrario al anterior, ó bien
- P d v.
011'0 efecto secundario hay que acompaña á
toda variacion de volúmen, y es el desarrollo
de una pequeña cantidad de fuerza viva en la
masa del cUf~rpo; pero si estos cambios de
figura son lentos, como sucede en la mayor
parte de los casos, bipn puede despreciarse
dicha cir'cunstancia.
Oz,servacion.-Notel1los antes de continuar
que no basta poner á un cuerpo, durante pe­
ríodos perfectamente fijos, en contacto con
una série de focos, para que la curva de la
figura 4." quede determinada: será preciso
además que establezcamos la ley de val'iacion
de las presiones ó de los volúmenes. Y en
efecto, mil ejemplos pudiéramos poner en
apoyo de esta verdad: si la presion exterior es
co1tstante, la curva se convertir..l en una para­
lela al eje de las v i si el volúrnen lo es, la lí­
nea del punto representativo será una paralela
al eje de las Pi y á cada ley de variacion para
P ó v corresponderá otra para el punto varia­
ble y una nueva curva sobre el plano p v.
En resúmen:
f.o Una série de focos y una série de presio­
nes determinan la curva en cuestiono
2: Una série de focos y otra de volúmeneg
la determinan igualmente.
5.° Una série de presiones y volúmenes, ó
lo que es igual, una curva dada, corresponde
á una série determinada de focos, es decir, de
temperaturas.
Hay, por decirlo así, dos sistemas variables
independientes y uno que es funcion; ó de otro
modo, tres sistemas variables enlazados en­
tre sí.
En cada problema y en cada caso uno será el
principal, el que merecerá toda nuestra aten­
cion, y en el que nos lijaremos de preferencia;
pero entiéndase que otro varía al mismo tiem­
po que él, segun cierta ley que no hace al caso
expresar.
57. El trabajo elemental pi v que, con ar­
reglo á la convencion del ~. 2.° será positivo ó
negativo segun el signo de d v, representa el
área de un rectángulo cuya altura es P y d v la
base, luego no es oLra cosa que el elemento
m 1t ni m', fig.4.', del área correspondiente á
la curva Po P PI que engendra el punto repre­
sentativo. Y como otro tanto puede decirse
para cualquier valor de p y de v, resulla este
Teorema.-Al poner 1tn cuerpo en contacto
sucesivamente con una .~érie de focos ae calor,
el trabajo que desarrolle po'/" S1.es cambios de
volúme1¿ será i!lteal al área de la curva q1ee
describe el punto representativo de dicho e1ter­
pa. Este trabajo será posltivo mientras v ere;·
ca, negati1)o cuando dismimeya esta 1)ariable.
Por ejemplo, en la fig. 4.' el trabajo en­
gendrado es igual en valor numérico al área
Vo Po PI V•.
Del mismo modo en la flg. 5.' el trabajo en­
gendrado por el calor, al pasar este de los fo­
cos T, T', T"..... al cuerpo, es igual al área
Vo Po m m' P, V•. En general la expresion del
trabajo será
 TER~fODI~ ÁMICA. 21
representando por va y v, los volúmenes ex­ Así, pues, en la evolucion completa del
tremos; pero esta integral no pu ede efectuar­ cuerpo se ha desarrollado un trabajo total
se mientras se ignore la ley que enlaza á p con cuyo valor será la diferencia de los trapecios
/J, es decir, qué funcion de v, p =f(v), hay Vo Po P P, VI Y Vo Po P' P, V" es decir, el área
\lue sustituir bajo el signo integral. rayada de la figura:
38. Pongamos un cuerpo trabajo total desarrollado = área Po P P, P' Po.
Figura 6 ..
en comunicacion sucesiva 5." El efecto que la evolucion calorífica del
con una série de focos de cuerpo habrá ejercido sobre los focos, será to­
calor T, T', T"...•. (fig, 6:), mar calor en unos para dar á otros: ó dicho
pero de tal modo que la brevemente, alterar la distrib1tcion del calo'!'
~ curva descrita por su punto en todos ellos.
I I I '\t v l;enerador Po sea cerrada; En el caso particular que consideramos los
lo es decir, que caminando de focos T, 1", T".. , . , habrán perdido cierta can·
p" á P, por 1', despues retroceda segun otra tidad de calor que babrá pasado á los focos
I'ama P, P' p. hasta el punto primitivo de par­ S, S', S".....
tida. 39. Aquí aparecen ya dos distintas hipóte­
~1ientras el punto va de Po á PI! el cuel'po sis y dos diversas teorias de los efectos mecá­
está en contacto con una série contínua ó dis­ nicos del calor. Ó se supone que la cantidad
contínua de focos de calor T, T', T"..... T(n)¡ de calor tomada por el cuerpo á los focos
"licntras recorre el arco inferior P, 1" Po se T, T', T"..... es igual á la que este mismo
pone asimismo en contacto con otra sél'ie de cuerpo en 8U evolucion cede á los focos S, S',
focos S, S', S". , ... S(n): estudiemos cuál es S"; ó se supone, por el contrario, que son dife­
la modificacion que el cuerpo experimenta; rentes. Representando por Q la cantidad de
cuál es el trabajo desarrollado, y cuál es la al­ calol' que de los focos superiores T...•. pasa
leracion que sufren los focos T, T'... S, S', •. al cuerpo, y por Q' la que del cuerpo pasa á
1.0 Claro es que el cuel'po no experimenta­ los focos inferiores S, las dos hipótesis estadn
I'á alleracion final en su estado calorífico. En representadas por las siguientes condiciones
efecto, el punto genet'ador vuelve á Po , y por analíticas:
lo tanto el volúl1lcn, la presion y la temperatu­
I'a al fin del movimiento serán los mismos que 1.11 hipótesis..... Q=Q'
al principio: volviendo, pues, p, v, t, á sus pri­ . .... , Q >
2 .a h'IpO't eSls < Q'
lI1ilivos valores, y siendo éstas tres variables
las que caracterizan cada estado particular (al La prirnera kip6tesis es la de Sadi-Carnot.
ll1énos esto es lo que boy supone la ciencia), el La segunda es la que constituye la teoría
cuerpo volverá tambien al mismo estado que moderna del calor.
tenia. En una y otra es preciso explicar este hecho
2.° Mientras el punto generador va de Po á notable: la creacion do cierto trabajo mecánico
PI' segun marca la flechaf, el volúmen crece Po P P, P' por la evolu.cion calorífica de 1en
de O Va á O V, bajo la influencia de los focos ctterpo e1¿ c01dacto s1tcesi'lJo C01¿ una série de fo­
1', T', T"... lue¡o el cuerpo desarrolla por su cos, 11 volviendo al terminar dicha e'lJol1tcion ti
expansion un trabajo representado por el área su estado pri'N¿iti'lJo.
Vo 1'0 l' 1', V,: tendremos. pues. trabajo positivo Decimos este hecho, porque el hecho existe,
desarrollado en y no es una simple hipótesis. Corno hipótesis
no tendria fuerza ni valor, como hecho bien
Po P P, = área Va Po P PI V,. puede servir de base á una teoría. Decimos,
que como hipótesis no tendria importancia,
Al retroceder el punto generador de P, á Po' porque no es evidente a p1'iori que exista el
uescribiendo la curva .\ P' Po, Yponiéndose en área Po P P, P': pudiera muy bien suceder que
contacto con 103 focos S, S', S"... el volúmen al llegar el punto representativo á P, volviese
disminu~'e de O V, á O Vo, y la contraccion del por el mismo camino que trajo, es decir, des­
cuerpo dá orígen á un tl'abajo negativo repre­ cribiendo la línea P, P Po en sentido contrario
sentado por el área P, V, Vo Po P,: de donde se á la flecha f, en cuyo caso el área, y por lo
deduce trabajo negativo desarrollado en tanto el trabajo creado en la evolucion del
cuerpo, serian nulos: pudiera aun sucedrr
P, p' Po = área P, V, Va Po P,. que siendo distinta de Po P PI la nueva rama
 22 TER~rODIN ÁMICA.
P, P' Po, Yaun tomando infinitas formas, cor­
tase siempre una Ó más veces á Po P P, , deter·
minando áreas positivas y negativas, y que es­
tas se destruyeran dando en todos los casos
un resullado igual á cero.
Pero nada de esto se verifica en general, y
numerosas experiencias, entre otras las de
:MI'. Rirn sobl'e las máquinas de vapor, prue­
han que en tales evoluciones caloríl1cas hay
un trabajo ganado ó perdido, es decir, cierta
área Po P PI p' positiva ó negativa.
40. En cfecto, ¿qué es una máquina de va­
por? la evolucion calorífica de cierta masa de
agua. III'imero se introduce agua en la caldera
á la temperatura t de la atmósfera: despues se
pone en contacto con un foco de calor, es de­
cir, con el hogar: y por üllímo, convertida esta
agua en vapor recorl'e los tubos de alimenta­
cion, la caja de dislI'ibuciOI1 , el cilindro motor
y llega al condensador donde vuelve á la mis­
ma temperatura inicial t. Tenemos, pues, un
ciclo cerrado y una evolucion calorífica, ¿y
qué nos dice la experiencia? que se produce de
este modo cierta cantidad de trabajo.
Hasta aquí la nueva teoría del calor es pura­
mente experimental.
Puesto en evidencia el hecho, sabiendo ya
que el área Po 1) P, P' de la fig. 6." existe; na­
tural es ouscar la explicacion.
¿A qué es debida esta cI'eacion de tl'abajo?
En la hipótesis de Sadi ·Carnot se tiene
Q = Q', y pOI' lo tanto lo único que ha ocur­
rido, pOI' decirlo así, en el sístema, la única
alleracion que ha expel'imentado, es el paso de
cierta cantidad de calOl' de lus focos T á los
focos S: esta debe ser la causa del nuevo tra­
bajo producido. Así suponía Camot que, por el
paso de cie'i'ta cantidad de calor de un foco á
otro se creaba t1'abajo.
La idea, aunque hoy está probado que es
falsa, el'a ingeniosa, y no podía rechazarse
a p1·iOj·i. ~las aun: ciertas analogías estaban
en su favor.
¿Cómo ejerce su accion y crea trabajo una
masa de agua?
Cayendo de un nÍ\'cl superior ;:í otro inferior.
Pues no parece ahsul'tlo que cierta cantidad
ue calor cayendo de un fuco cuya temperatura
sea t' á otro foco á temperatura inferior t pro­
duzca ciel'ta cantidad de trabajo. Lo que en el
ejemplo precedente es la aHura de la caida ó
el dcsnivel, es en la teoría de Carnot la dife­
I'encia t' - t. Yla masa de agua es la cantidad
de calor Q = Q'.
Esta hipótesis es hoy inadmisiole: no solo
está en contradiccion con la teoría moderna
del calor, segun la cual es este un movimiento
y no una sustancia, sino que la experiencia
ha probado terminantemente que Q> Q'. Es
decir, que más calor sale de los focos T que
pasa á los S, y que en la evolueion del cuerpo
sc ha perdido, ó mejor dicho, se ha anulado
cierta cantidad de calor Q - Q'.
En la nueva hipótesis Q > Q' ¡.cómo se expli­
ca la anulacion del calor Q - Q' y la creacion
del trabajo Po P P, P'?
Por una trasformacion de calor en trabajo
mecánico. El calor Q - Q' desaparece como
calor, pero íntegro en su esencia aparece
como trabajo; porque nada brota de la nada,
ni torna á la nada lo que es. En el gran oleaje
de la naturaleza los fenómenos lJasan y se
trasforman, la ésencia íntima de las cosas
queda igual á sí misma.
La experiencia comprueba esta teoría y los
trabajos de lIil'O y de otros fisicos prueban que
hay pl'oporeionalidad exacta entre el calor
pe'í'dido y el f1'abajo ganado; como dehe suce­
der n el'cclo si este procede de aquel, y es,
por decirlo así, calor trasformado.
41. lIemos supuesto hasta aquí que el cuero
po sometido á la discusion cambiaba de estado
hajo la influencia de uno Ó varios focos de ca­
101'; pero no es este el único medio de obli­
gal'le á pasar por estados sucesivos, Los tres
elementos, presion, volúmen, temperatura ó
calor, est¡ín enlazados por la relacion gene­
ral.f (p, '/), t) = O, Ycuando el calor y la tem­
peratura, que es su manifestacion, cambian, se
altera el estado del cuerpo; pero tambien se
alleral'á cuando cambia la presion,
Supongamos que se aumenta l(presion ex­
terior en una cantidad infinitamente peque­
ila d p: será imposible que'/) y t sigan siendo
lo que eran, y tendrán que variar. Continuando
las variaciones de]J, continuarán variando di­
chas cantidades '() t, Yel punto representativo
describirá ciel'ta CUl'va análoga á la de la figu­
ra 4. 11 , curva que dependerá de las circuns­
tancias en que se halle el cuerpo. Podrá estar
en contacto con un foco á temperatura cons­
tante é igual á la que tenia el cuerpo inicial­
mente: entonces, si el aumento de presion es
lento, la temperatura se mantendrá constante
tall1oien, pasando cierta cantidad de calor del
cuel'po al foco. Podrán variar el volúmen y la
temperatura del cuerpo sin dar este ni recibir
calor, como sucederia si en cada instante es­
tuviel'a en contacto con un distinto foco cuya
temperatura fuese igual á la que en ese mismo
 TERMODIN.{MICA.
instanle posee el cuel'po. Podrian aun verifi­
carse infinitas otras combinaciones; pero siem­
pre lendremos que el cambio de presion de­
termina alteraciones en el estado del cuerpo,
y que su punto representativo describe ciertas
y determinadas curvas sobre el plano de
las p v.
En una palabra, en la primera hipótesis con­
siderábamos á los focos como la causa deter­
minanle pl'Íncipal, era el sistema variable in­
dependiente en que fijábamos nuestra aten­
cion; ahora son las presiones las que cambian,
y á ellas sigue en segundo término la série de
focos calorílicos; pero entiéndase bien que
uno y olro caso son idénticos en el fondo, por­
que en ambos hay dos sistemas variables in­
depe1ulientes; á saber, focos y presiones.
lIemos supuesto que la presion aumenta,
pero á iguales consecuencias llegJriamos su­
poniendo que disminuye, ó en general, que
cambia segun una le~' cualquiera.
VOI1l0S, en rcsúmen, que el contorno repre­
sentativo de los diferentes estados de un cuer­
po puede proceder de dos causas distintas
combinadas: cambios en la canlidad de calor
del cuerpo, originados por uno ó varios fo­
cos calol'Ílicos, y cambios en la presion ex­
terior.
En la fig. 5. a el cuerpo desCl'ibe la curva
P m n~' Pt hajo la inlluencia de tres focos T,
T', T", con los que está sucesivamente en con­
tacto, y segun cierta ley de variacion en las
presiones, al describir esta curva su punto re­
presentativo desarrolla el cuerpo un trabajo
útil, igual numéricamenle al árca Yo Po m n~'
P, VI'
Pues bien; si tomamos al cuerpo en el esta­
do Pt como estado inicial, es decir, con la pre­
sion Pt Vt y el volúmen O V, Y lo comprimi­
mos de manera que su volúmen decrezca de
O V, á O Vo , siempre podremos hacer que su
punto representativo descI'iba el contorno P,
m' m Po, para lo cual bastará ponerlo en con­
tacto con los focos T", T', T; ,en una palabra,
deshacer elemento por elemento la primitiva
operacion.
Vemos, setmn lo dicho, que en el primer ca·
so cierta canlidad de calor pasa de los focos
al cuerpo, y al mismo tiempo aparece un tra­
bajo positivo Po Vo V, P,; que en el segundo
gastamos cierto trabajo en comprimir el cuer­
po, lo cual hace que cierla cantidad de calor
pase del cuerpo á los focos caloríficos.
En adelante, siempre que trazemos una cur­ cion M' puede ocupar infinitos lugares al rede·
va representativa de los varios estados de un dor de M; pero si fijamos por ejemplo el valor
23
cuerpo, supondremos que los cambios han si­
do originados:
1.0 Poniendo al cuerpo en contacto con di­
ferentes focos, y
2.° Comprimif1ndo lentamente al cuerpo, lo
cual supone un aumento en la presion exte·
rior ~' un consumo de trabajo; ó bien dejando
dilatarse al cuerpo, lo cual supone que la PI'C­
sion exterior disminuye lentamente.
42. lIemos supuesto en la lig. G. a que un
cuer'po dado, poniéndose en contacto con va­
rios focos, ~' por val'iaciones de la presion ex­
terior, describia el contornu cerrado Po 11 P, P'
en el sentido que indican las Ilechasf, f. Aho·
ra bien i en gran número de casos será po­
sible hacer recorrer al cuerpo la misma CUI'·
va, pero en sentido contrario, segun indica la
Fig.7.- Cuando esto sucede, se
dice que el contorno es
,'eve1'Sible, y es evidente
que por dos operaciones,
una directa yotra inver-
OL'¿' r ~ I sa! ~odo volverá á su p~i.
- V ~ ~ lllltlYO estado. Es deCIr,
o ~ que el CUeI'pO volverá á
la presion, al volúmen y á la tempcl'atura que
tenia; el ll'abajo posilivo repl'csentado por el
área Po P P, p' quedará compensado con el tra­
Lajo negalivo representado por la misma área
en la reversion; y por último, el calor que en
la primera operacion pasó de unos focos á
otros, volverá de estos á aquellos: el cuerpo y
los focos quedarán pues como estaban, y el
trabajo creado serlí nulo.
Todo ciclo de operaciones que resulla de au­
mentos ó disminuciones de volúmen, lentos y
contínuos, es reversible: basta para conven­
cerse de ello estudiar lo que sucede en un ele­
mento cualquiera de la curva que traza el pun­
to representativo del cuerpo.
Imaginemos un cuerpo con el volúmen v, la
presion p, y la temperatura t, y designemos su
punto representativo por M. Si ponemos al
cuerpo en contacto con un foco á la tempera­
tura t + d t, bien pronto se establecerá eQuili­
brio entre el cuerpo y el foco, elevándose aquel
á la temperatura t + d t: de suerte quo los
nuevos valores v' y p' habrán de satisfacer á
la ecuacion
'? (v', p', t + d t) = o.
Los valores de V',j/ quedan indeterminados
y el punto representativo en su segunda posi­
 24 TERMODrN}ünCA.
I
de p' = p -+- d]J, el valor del volúmen queda autorizan para generalizar este resultado,
determinado por la relacion agregando que si hay consumo de trabajo en
la evolucion del cuel'po, la cantidad final de
9 (v', P -+- d p, t -+- d /) = o,
calor es mayor que la primitiva.
y queda determinada la posicion ~I' de dicho Tenemos, pues, el gran principio de la tras­
punto representativo, así como el elemento formacion del trabajo en calor, y recíproca­
1\1 M' de la curva. mente del calor en trabajo; principio pura­
Hemos pasado, pues, de Má M' poniendo en mente experimental; y decimos que es experi.
contacto al cuerpo con un foco á la tempera­ mental, porque no es evidente a prio?'i que f)
('a t -+- d t Yaumentando cn d p su presiono sea mayor que Q' y que el ürea de la curva re­
Ahora bicn j para pasar de M' á M, es decir, presentativa sea positiva.
para recol'l'er en sentido inverso la cur\'a re­ 45. Pero admitida la creacion de trabajo
presentatira, bas~al'á; 1.0 reducir la presion por la trasformacion de calor, y recíprocamen­
exterior de Jj + d jJ á jJ; 2.° poner al cuerpo en te; es decir, suponiendo en la IIg. 6. que 11

cOlltacto con el foco á temperatul'a t. Q> Q' y que el ál'ea Po P p. P' sea positiva, es
Lo que hemos dicho del elemento ~I W pu­ fácil probar a priori, que las cantidades de
diera decirse de otro cualquiera. trabajo creadas son proporcionales á las can­
43. No todos los ciclos, dice Mr. Robert, tidades de calor que desaparecen.
SOIl I'eversibles ; al ménos directamente. Tendremos en efecto el siguiente
Supongamus tlue se deja caer cierto peso de Teorema. Si representamos por T la canti­
agua, á la temperatura t o, de un vaso superior dad de lrabajo que crea la evolucion cerrada
á otro inre.'ior. El agua al cael' adquirirá cierta de un cucrpo, y por q el gasto de calor, ó el
fuerza viva que se extin~uirá por el choque calor anulado, tendremos siempre. sea cual
con el vaso inferior. Este choque hará, sin em­ fuere el cuerpo, y sean cuales fueren las con­
bargo, que la temperatura del agua en el de­ diciones de la experiencia,
pósito infel'ior se eleve de t o á t. ; Ysi ponemos
dicha masa de agua en contacto con un foco á T
- = constante.
la temperatura t o , bien pronto comunicará á q
este foco el calor que el choque desarrolló, y
.1Je?Jt. Supongamos que para un ciclo cer­
volverá á su temperatura primitiva too
El agua vuelve al terminal' todas estas ope­ rado y reversible, que á fin de abreviar la ex­
raciones á su estado inicial, y tendremos un ci­ plicacion designaremos por A , la cantidad de
clo cerrado ¿pero sel'á directamente reversi­ trabajo creado sea 1', y q el calor que desapa­
ble? no, porque el rozamiento no tiene otra rece: representemos por J la relacion de 'f á
operacion inversa como la compresion ó la ex­ q; es decir, que tendremos
pansion. T
Más adelante, y al ocuparnos de la teoría de -=J.
q
las trasformaciones de Clausius, insistiremos
de nuevo sobre este punto que es de la ma)'or Admitiendo ahora que con el mismo cuerpo ó
importancia. con otro cuerpo distinto, describimos otro ci­
44. Resúm,(m. 1.° Poniendo á un cuerpo clo D, y que por la llueva operacion ganamos
en contacto con varios focos y aumentando ó la cantidad de trabajo T' con el gasto de calor
disminuyendo la presion exterior segun cierta q', representemos por J' la nueva relacion, de
ley; ó bien, aplicando á un cuerpo cierta canti­ suerte que
dad de trabajo y poniéndolo á la vez en comu.
T'
nicacioll con focos distintos de calor, se le pue. -,=J',
de hacer pasar por diferentes estados. q
2.° El resullado de esta e\"olucion es hacer
siendo J' diferente de J.
pasar cantidades determinadas de calor de
unos á otros focos, y al mismo tiempo crear Si se repiten m veces las operaciones que
trabajo. forman el ciclo A, obtendremos el trabajo me­
cánico 'JJt T con un gasto de calor igual á m q;
5.° Si en la evolucion desaparece cierta
cantidad de calor, aparece en cambio una can­ y sumando las 'JJt relaciones
tida.d.. por decirlo así, equivalente, de trabajo T T T
pOSitiVO; Y las explicaciones anteriores nos -=J;-=J;-=J;
q q q
 TERMomNÁ~nCA. 25
resultará I Pero sean cuales fueren '1 y '1' siempre po­
demos repetir los razonamientos anteriores y
mT
--=mJ,ÓbienmT=J.mq. . . (-1) elegil' dos números m, n que cumplan con la
q condicion
Supongamos que se repiten n veces las ope·
raciones que constituyen el ciclo B, pero en m q - n q' = o, o bien -
m
= _q' ;
órden inverso j es decir, de manera que se n q
consuma trabajo y se gane calor: habremos luego podremos establecer en general que
gastado la cantidad de tra1Jajo n 1', creando la T
cantidad de calor n ri. relacion - , entre el calor consumido y el tra­
q
Las n ecuaciones
bajo ganado, ó recíprocamente, es una canti­
T' T' T' dad constante, independiente de la naturaleza
- = J'; - = J'; - - = J'; .
q' q' q' del cuerpo y de las operaciones á que se le so­
meta.
sumadas darán:
46. Cuando el ciclo no sea reversible, co­
n T' mo por ejemplo en el caso de choque ó roza­
-q'- = ti J', ó bien n T' = J'. n q' . •. (2) miento, el método uc demostraeion del último
número no es aplicable, pero el teorema aun
Efectuando sucesivamente las operaciones subsiste.
que comprenden los 1JL ciclos directos y los n En efecto, se puede imaginar que el calor
ciclos inversos, habremos gastado. en definiti­ obtenido por el rozamiento se destina á ali­
va, la cantidad de calor mentar una máquina térmica perfecta de ciclo
mq-nq', reversible, es decir, á crear trabajo; yen este
caso, el trabajo creado T debe ser igual al que
obteniendo en cambio una cantidad de trabajo repr'csenta el choque 'f' porque si fuera mayor
representada por tendriamos creacion de trabajo motor sin cau­
mT-nT', sa, es decir, el movimiento contínuo¡ y si fue.
ra menor, habria deslruccion de trabajo sin
que segun las ecuaciones (1) y (2) será igual á creacion de algun efecto equivalente.
J m q-J' nq'. Ahora bien ¡ en la máquina térmica la rela­
cion del calor q engendrado por el rozamiento
Si escojemos los números arbitrarios 'Il/, y n al trabajo creado T es igual á J es decir
de manera que
T
mq - nq' = o, -=J;
q
el gasto de calor será nulo¡ pues d e lo contra­
rio, sin consumo de calor podríamos crear tra­ luego sustituyendo á T su igual T'
bajo mecánico, ó bien sin aumentar aquel T'
desapareceria cierta cantidad de este, hipóte­ -=J.
q
sis ambas inadmisibles en la teoría que esta­
mos exponiendo y contrarias además á la ex­ 47. Esta relacion invariable entre el traba­
periencia. jo mecánico creado, y calor consumido; es de­
Se debe por lo tanto tener cir, entre el calor ftue desaparece y el trabajo
que aparece, es lo que se llama eq1tivalente
J m q - J' n q' = o,
mecánico del calor, y generalmente se designa
ó bien, toda vez que m q y n '1' son iguales, por J en honor de 1\11'. Joule. J representa un
trabajo: es la cantidad de energía mecánica
(J ­ J') m q = o,

que puede crear cada unidad de calor; en una

de donde palabra. el número de kilográmetros en que
se convierte cada caloría.
J =J',

Diversos métodos se han empleado para de­

y por lo tanto terminar este importantísimo coeficiente, y
T T'

siempre se han deducido valores próximamen.

-- = --o te iguales.
q q' lIé aquí varias determinaciones:
4
 2"6 TERllODIX.\:\IICA,
Segun ,{ro Joule, J = 423,5;) kilográmentrosj pero faltan desarro 1 s analíticos qu den for­
~egun MI'. Hirn., J = -1;:)2; ma exada y precisa á la idea.
Segun Trpsca De dos principios pueden deducirse todos los
y Laboulaye. . J = 435. que hemos cHado precedent.emcnte, saber:
48. Si cada calol'ia crea 4301¡m término me­ Ler jJ1'i'i¿cipio. El calor es una rOl'lIla del
dio, ó s trasform ell 450 klll , es claro que cada movimiento j es el movimiento interno y 1110­
kilog1'árnet1'o puedc crear, ó puede lrasfonnar'. lecula' de la materia.
'1 2,° !J1'incijJio, La fuerza viv de la materia
se en, 430 de caloría; de suerte que en ge­ cspare:ida por el universo es constante.
Se comprende en efecto que l? temperatura
ner'ul~, que se representa por A, sed el equí- dependa de la ca nlidad defuel'za vi'vf(, contcni·
J da en un cuerpo, es decir, de los movimientos
valMtc calor{jico del trabajo mecúnico. de las partículas maWriales, y que esta fuerza
40, Conviene, antes de seguir adelante, que viva sea precisamente lo que llamamos cal01',
recol'demos rápidamente la marcha seguida Se comprende aun que dadas las velocidadps
hasta aquí y los prineipios establecidos. de las diferentes moléculas y la presion oxte·
1.0 En todo cuerpo, y salvo los cambios de rior que obra sobre el cuel'po, su volúml'n
estado, existe una relacíon general entl'e las quede determinado, y que por lo tanto e:ista
tres val'iables p, v, t: este es un pl'Íocipio em­ una relacion 9 entr'e la tcnípCl'atura, I volú­
pírico, es decir, puramente experimental. men y la presion; eon lo cual qu da demo ­
2.° El paso del calor de unos cuerpos á trado el primer pl'incipio del núm. ·19.
otros, por sí solo, no es susceptible de crear Así cuando 01 calor aumenta, es decir, CUfll1­
trabajo meC<Ínico: de suerle que es inexacta do crece la velocidad de las moléculas, sus
la hipót.esis de Carnal. trnycctorias tienden á en~ancharse pOI' el in­
;;.0 En todo ciclo, ó sea en toda evolucion cremento qne cada fuerza centrífuga recibe, y
calorífica de un cuerpo, en que hay trabajo el volúmen del cuerpo crece j ó si esto no s
er'eado, se anula cierta camidad de calor; yal posihle por estar encenado en una envolven­
contrario, si se consume trabajo se crea calor. te rígida, aumenta la presion del interior al
El calor se t1'asforma, ¡ntcs, en t1'ab(tjo; y recí· exterior.
procamente: nuevo principio experimental. Por otra parte, pasar calor de un sistema'
4,° Hay proporcionalidad exacta entre las otro, es pasar cierta canlidad de fue za viva de
canlidaues de calor y tI'abajo, que mútuamen­ las moléculas de un cuerpo á las mol ~culas ¡le
le Se trasforman y sustiluyen, de suerte que 011'0, Yesto no supone creacion de trabajo, El
T principio de que partia Camot es, pues, radi­
- = constante, calmente falso.
q Sabemos adcm~¡s por mecánica fIt e toda
Esto teorema es consecuencia del principio I fu:r1.a viva ee¡ riyale á c' ~rtn anlidad oe tra·
;lIltl~l'iur y del siguiente axioma: de la nada, baJO, lupgo la trasforrnacIOn de <'st.os (!o~ 010­
Ylltrl(~ brota; lo q11C es, menca vuelve rí la nada. n~entos un,o en ot.ro es ?onsecuencJ~ logIOn de
tos que no quieran aceptar la cxactitud de dIcha eqUIvalencIa. '\~J la fuerza viva '/, 'm v"
representa cierto número de kilográm tr s T:
y lodo kilográmetro puede inversamente reclu­
esi' :lxiol11a pueden considerar la ecuacion
cirse á fuerza viva. Porejemplo, un peso de LOk
T animado de una velocidad de 4m por segundo
- = con tante
q equivale á
como resultado de la experiencia, porque en f 10 SO
efeclo está compl'obado experimentalmente -~ -~ 9
" = --- = 3,16 unidades de fuerza iva;
9,8
por muehos y eminentes físicos,
50. Vemos por lo que p¡'eeede, que los fun. y la anulacion de f'sta fuel'za viva supone la
llnmentos de la nueva teoría que intentanlOs creacion 8,'16 kkilogdmetros.
f~xponer son, aunque en corto número, pura­ 10
La masa - - quedará inmóvil; su fuerza vi­
mente experimentales, y ocurre esta pregunta: !J
¿ no habria medio de reducirlos á un principio va quedarú anulada al pareeer, pero en cam­
liupcrior, á un a:ioma, á una ley racional? bio aparecerá un trabnjo positivo do 8, \Gkm
Eslo se ha intenlado, y se ha consrg-uiLlo; que nntes no existia,
 TERl\IODL'\Al\lICA. 27
Si, pues, la fuerza viva se convierte en traba­ Estas cuestiones no han recibido 1111sta hoy
'0, solucion satisfactoria, y aunque al¡;unos mllte­
y el calor es una suma, ~ '/2 1n v\ de fuer­
zas vivas, es natural que el calor se trasforme máticos ingleses, sobre todo \Jr, Rankine, han
en trabajo, ó que todo trabajo consumido su­ publicado trabajos de gran Illl!rito, encamina­
ponga cierta cantidnd do calor creado. dos á I'esolver este importantísimo problema,
Estas sencillas consideraciones demuestran slem pre queda algo oscuro ó hipotético en el
los dos últimos principios del núm . .in. fondo de dichas teorías.
¿ Qué es, en la hipótesis que venimos exami­ Sin deLenernos, pues, en ollas, y aceplando
nando, la caloría? los principios del núm. 49, ya como postulados
Cierta cantidad de fuerza vivJ, equivalente áracionales sumamente probables, ya como
430 km • principios deducidos de la experiencia, ya
Por ejemplo, una masa compuesta dc dos finalmente como l'esulLados de la teoría mate­
1ni! millones de partículas, en quc el peso de mática del calor, en toda su pureza abstracta,
cada una sea de O, ~000004214, y vibrando con laprosigamos nuesLra tarea.
velocidad media de '1 m pOI' 1" , l'epl'esenLa pre­52. Antes de lerminar la exposicion de este
isamen te una caloI'Ía; porque en efecto, la primer pI'incipio, relativo á la equivalencia y
fuerza viva de una de estas partículas será tl'asformacion del trabajo en calor y del calo r
en trauajo, conviene para mayor claridad que
0,000004214
- - - - - P = 0,000000215 hagamos algunas obsen'acianes,
2 9,8 1.' obseroacion. liemos dicho varias veces
Yla fuerza viva de los dos mil millones de par­ que toda cantidad q dc calol', anulada, supone
tículas, creacion de trabajo, y que la cantidad de este
se determioará por la ecuacion
2,000,000,000 X 0,000000215 = 430 kilográmetros,
T=J q;
Casi es inútil advertí!' que este ejemplo es
recíprocamente, flue cuando se consume y des.
puramenLe ideal.
51. El calor, segun la teoría moderna, no es aparece cierto tI'abajo q, en cambio ganamos
una cantidad de calor
ya un nuevo flúido, especie de sutilísima ema­
nacion que vá de una parte á otl'a, es tan solo f
un movimiento, una fuerza viva, un conjunto q= -J T '
de parLículas que se Inuevcn en LI'ayectol'ias
peq ueiíísimas, que el sentido de la vista no Pero estos principios no son exactos sino en
percibe; y así tuda acoion mecánica, todo tra­ cuanto la tJ'usformacion solo se efectúa entre
unjo, todo movinliento que al parecer se anu­ ('stas dos formas de la fuerza viva: el tmbajo y
la, eo realidad no hace otra cosa que cambiar el calo1'; si además entran en juego otras po­
de forma: de tl'abajo Ó de fUNza viva total pasa tencias naturales, como la luz, cllllagnetismo,
<1 fuerza viva molecular, Los sentidos descono­ la electricidad, las acciones químicas, claro es
cen el nuevo aspecto dcl fenómeno y le dan el que puede desaparecel' y trasformarse el calor
nomine de calol', pero la ciencia que penetra, siu l]uP. aparezca precisamente bajo [m'ma de
{¡ (lrOCUl'3 penetrar, en la esencia de los he­ trahajo: hasta pal'a ello que se convierta en
chos, le dLÍ su \'el'dadero nombre, á sabel': Juz, en I1wgnetismo, en accion química, etc.
.fuerza viva. Seria prf'ciso, en esta última hipóLesis, ge­
Segun lo que precede, toda la teoría del ca­ neralizar el principio; hacer la cnumeracioll
lor queda redueida éÍ un problema de mecáni­ exacta de las potencias naturales A, n, C... ;
ca: Inovinliento de un sistema de partículas determinar sus equivalentes l'cspeeUvos J a ,
elllazadas pOI' eiertas fuerzas, y leyes de esLe J. , J c •••• y escribir
IJlovimicnto.
,\ X J a -+- B X Jb -+- e x J c -+- , ••• = constante.
Pel'o aquí surgen grandes dificultades j ¿ qué
elasc de movimiento es el que constituye el 2,· observacion. Muchas veces decimos: «po­
;alor? niendo en comllnicacion tal cuerpo con Ull
lEs movimiento vibratorio de los átomos, ó foco de calor» y como esto en la práctica su­
de las partículas, Ó de las atmósferas eLól'ens pone cicdo trabnjo, pudiera extrañar el lector
que, segun algunos, las rodean? que nunca Lengamos en cuenta el consumido
¿ Es una especie de movimiento permanente por este concepto. Pero debe notar ante todo,
del t~ter ~ I pal'a qllc sus dudas se desnnezran, que esle
 2 TERMüDINÁMICA.
es un acto ageno á la teoria del calol', y que
además estas operaciones cada vel se efectúan
en la indust.t·ia con mayor economía. Para nos­
otros, y puesto que tratamos tan solo dc la teo­
ría térmica, poner en cornunicacion un CUCI'·
po con un foco, ó dos focos entre sí, ó al con­
trario, interrumpir dichas comunicaciones,
serán actos quc supondremos ejecutados sin
consumo de fuerza motriz, por más quc en la
práclica deuan calcularse todas estas resistcn.
cias pasi ras.
3: obser'vacion. Al estudiar los ciclos que
un cucrpo recorre en sus cambios de estado,
digimos que puede val'iar, ya por 13 influencia
de uno ó más focos, ya por variaciones en la
presion exterior; y ahora debemos agregar que
el acto de aumental' ó disminuir dicha prcsioo
extel'ior no supone un trabajo consumido con
el cual deba contarse en la teoría del calor,
por más que en la práctica exija dicho acto
cierta fuerza actuante Por ejemplo, una masa
de aire se halla cncerrada en un cilindro; y la
presion cxterior consiste en ciertos pesos que
cargan SO\)I'C el émbolo ó sobre su varilla: ¿qué
tl'abajo suponc el acto de disminuir la presion
exterior'l El necesario p:ua separar uno de cs­
tos pesos; pero e:5to puet.le teóricamcnLe redu­
cirse tanto como se quiet'a, pucs basta clcvar
dicho peso una cantidad infinitamente JJeq1teiia,
y trasladarlo horizontalmente, en lo cual ha­
bremos consumido un trabajo infinitamente
pequeño tambien.
Otro ejemplo aun. obre el émbolo dcl caso
precedeute ' como presion exterior ohra la del
aire encerrado en una capacidad en la cual se
ha becllO parcialmcnte el vacío: ¿cómo podre­
mos aumentar la presion? Abriendo una llave
y dejando cntrar airc: este acto claro es que
supone cierta can tillad de trabajo, pero este es
ageno á la teoría llel c~lor, y puede reducirse
tanto como se quiera perfeccionando los me­
canismos.
Por lo demás, apl'oximar pesos al cilindro.
hacer préviarncnte el vacío, construir capaci­
dades, émbolos, llaves, etc., son operaciones
que suponen consumo de trabajo, pero son
operaciones como hemos dicho agenas al fe­
nómeno que estudiamos y que para nada de­
bemos tenerlas en cuenta.
La naturaleza puede espontáneamente pro­
ducir esto mismo; si nosotros queremos rea­
lizarlo, habremos de trabajar para crear las
ircunstancias necesarias á su produecion;
mas en uno y en otro caso lo que pI'etende­
mos estudiar son las leyes del fenómeno tér·
mico, es decir. del cambio de estado del cuero
po, cuando dichas circunstancias se realizan,
y poco nos importa lo que el realizarlas nos
haya costado.
53. Queda con lo dicho explicado el pt'itner
principio de la Termodimímica. á sabel': tras­
fonnacion del calor en trabajo y recíproca­
'mente, y la ecuacion que lo expresa es
T = J. q,
en la que J es igual á 430 kilográmetros y q
se expresa por calorias.
Pasemos ya á la exposicion del segundo
principio.
54. Antes de entrar en el estudio de este
segundo principio, conviene dcsarrollar algu­
nas ne las ideas presentadas en otro número.
01t1"MS tét'micas de p1'itnet'a y segunda clase.
Sean O v, O}J (flg. 8. a ) los ejes coordenados re·
lativos al volúmen y á la presion de un cuerpo,
y sea Po su punto representativo en el estado
(v o, Po, tolo
p Fi~, 8,'
Supongamos que la presion exterior aumen,
ta, y que el cuerpo ni da ni recibe calor: su
volúmen irá decreciendo, su temperatura au­
mentará y el punto representativo describirá
cierta curva a b. Para que esto 8e realice, es
decir, para que el cuerpo no dé ni rcciba calor,
basta que en cada instante le supongamos en
contacto con un foco cuya temperatura sea
igual á la del cuerpo en dicho instante.
Supongamos aun que el mismo euerpo, por
una evolucion cualquiera, llega al punto a', y
quc ¡Í ptlrtir de esta posicion describe, com
lÍnLes desde Po, la eun'a a,' b'j que pasa des­
pues al punto a", que describc an<Í1ogamen­
te, sin dar ni recibir calor, la curva a" b"; y
 TEHMODIN"\.:;\UCA,
que e~tu. operacion ~e repite para inl1nitos Illlll­
tos a, a', a" ..... ínflnitamcnle pr()\imos. Tendré­
mos IIl1a ~erie ele líneas (J h, a' h', a" h", ..... va­
riando por In. ley de continuidad, y que cubrirán
el plano de las p v. ó cierta porcion de él.
En nada una de estas cunas la cantidad de ca­
101' 1lO puede decirse que es eOl/slante, puesto que,
al recorrerlas el punlo representativo, ha obrado
sohre el cuerpo eiel'to trabajo externo Po Vol VI }>¡,
Y que una parte de él ha podiclt"l GOll\"crtir:ie ell
calor.
Es claro que para cada punto de una de estas
curvas tendrélllos nlla temperatura distinta, y que
irá constantemente crecil'ndn de a á h, de a' á h',
de a" á h", etc.
Para abreviar la explieacioll, diréruos que e~t.as
curvas son de primera clase ó relativas á O,
VolvalÍlos ahoru al pUllto de partida Po' Ysu­
pong"mo~ que decrece la presioll exterior y c]uc
el cuerpo se dilata, consenando siempre la misma
temperatura 'o' Basta para ello qUd llli('lltrils alI­
menta de volúmen por el decrC'cilniento de la pr¡)­
sion exterior, esté en contacto con un 1'01;0 Ú la
temperatnra constante 1,,: ciertu canlidad de Ca­
lor pasarr¡ de dicho foco al eu!:',rpll, ¡I, ir:'! aumen­
tando este lIujo de calóriL:o á medida que el vuer­
po se dilate. Tendrérnos de este moJo la curva
téITnica e d.
Si en vez de partir de Po partiruos de e', POdl\­
mas SUPOIIeJ' engendrada otra nlJem cuna c' rI',
náloga ú la c d; y repitiendo la misma flperat:ion
desde lo~ pUIltlls en .. ... hal)l'(~lllos obtenido nna
segunda serie de cnrvas c d, e' ti', e" d" ..... ú las
que l1amarélllos Cl/l 'vas térmicas de segunda clase,
ó relativas á 1, 6 I1nalmente, cnrvas isolermas.
Las curvas de pl'ilnera y segunda clase divirún
al plano en una serie de cuadrilútcros, 1" á ellas,
COI\W {¡ c.ic~ coordenados, rei'erirélllos casi siem­
pre elllluvilllient.o del punto representativo; pero
ante todo, y conlo prolJosicion auxiliar, demos­
trarélllos el siguiente
55. l'eorema.~nado un cuadrilátero Po 1\ 1\ [>3
(fi~. 8), formado por dos cnrvas térmicas de pri­
mera clase Po Pi' P3 I'~, Y por otras dos de se­
gunda cla:se P" P3' PI 11 2 , correspondientes ú las
temperatnn~s lo Y ti" la relacion entre la cantidad
de calor 0\, que el cuerpo recibe del foco de ca­
lor T¡ (á la temperatura constallte tI), miéntras
descrihe el areo f\ p~, Y la cantidad dc calor 00
que dicho cuerpo cede al foco T o (ú la tempel'iltu­
ra IJ mi'~ntras deseribe el arco )13 Po, es inde­
pendiente de la naturaleza del agen~e físico que se
emplee, es independiente asimismo par.:J. cada
2U
cuerpo del cuadrilátero que se considel'ü, y <;610
depende de las temperaturas 1" y 11 : es decir,
Q.
'Jo
=" (/", (1)'
lJe/ll. -I\.ecordelllos ante todú CÓlllÚ puctle
suponerse descrito el cuadrilátero en euestiún
Po l\ 1\1\,
El punto representativo parte de p,., corres­
pondiente al estadp (v oPo to ) del ouerpo.
Aumentando lentamente la presion exterior,
comprimimos el cuerpo, pero de lIIanera que no
tome ni ceda calor: el punto representativo des­
cribirá la curva de pri,oera dase 1\ P" marchan­
do de P" á 1\.
I~ll PI' estado en 1<1 cual el euerpo tendrá la
temperatura 11 , le abandonamos á sí IllislllO, de­
jándole dilatarse libremente, pbrú de tllOJO que
su temperatura se conserve llOJistante é igual ú
t., para lo que será precbil ponerle en cOllluniea­
cion con un I'oco invariable '1'" 8ste cedenl al
cuerpo la cantidad de calor (JI y así llegará el pun­
to representativo á P~, descrilliendo la curva bo­
terma 1\ 1"'2'
En P2 suprimirérnos la comunicacion entre el
roco 1\ y el Guerpo, y disminuyelldLl lentamente
la presion exterior, le dcjarélllus dilatarse hasta
13 , Ú cuya posicioll llegará el punto reprcsentati­
\'0 dcspue~ de descriui,' la cuna de primera clase
P~ 1\.
Por último, en Po pnnJl'émos al cuerpo eu co­
lllullicaeion con un I'oco T o a temperatura cous­
Urnte lo' Ycomprimiéndolo lentamente, liarúmos
desl:rihir al punto reprcsenlativo la línea isoterma
Po Po ,oon lo cual quedal'L1 cerrado e.1 circuito. En
esta última parte dr. Sil evoluciúlI pasará del cuer­
po al roco T o cierta cantidad ele calor 00'
La cuestion eslil redul~i¡/a ¡\ probar que entre
las cantidades 01 y O. de calor, recibida del I'oco
'f¡ por el cuerpo la primera, y dpvnelta la seguJI­
da al foco 1'0' existe ulJa relaciol] que sajo depen­
'o
de de las t.emperatnras y 1,.
En efecto, sea A un euerpo que ell uu cido
(;ompltto entre dos focos de calor 1'1 y 1'0 alas
temperaturas l., lo' lOma la (;alltidad de calor 01
del primero y cede la cantidad 0 0 al segundo.
Sea n otro cuerpo (6 el mismo cuerpo A descri­
hiendo otro cuadrililtero entre las curvas Po P3 Y
PI P2) qne en un cicle. Gúrnplelo entre los dos Inis­
IllOS focos toma del primero 1'1 la cantidad Q'I de
calor, y cede al segundo T o otra cautidad 0'0'
Concibamos que el cuerpo A ejecuta 111 ciclos
'j
 30 TE DWDIN.\.MICA.
completos entre 1\ y 1'0: tomará del foco TI la
cantidad de . lar m 01, cederá al foco 1'0 la mO O )
y engendrará un trabajo mecánil:o ( . 53)
mT = J (m Q,-11I \)0)'
Supongamos ahora que el cuerpo n ejecuta n
ciclos completos, pl l' inversos de los anteriores
(es decir', describiendo el cuadrilátero en el seo i­
do Po Ps P.) p\ Po): es claro que tomará del foco
1'0 la cantidad de calor 11 0'0 ; cederá al foco TI la
fl Q'I' Y ~onsumirá Ul a cantidad de trabajo
11 1" = J (n 0'.,-11 ()'.,).
Puesto que los nÍImeros In y 1l SOIl arhitrarios,
podrémos tomarlos de manera que se verifique la
relacioo
11/0,=IIQ'"
con lo cual es claro que la.; cantidades de calor
recibidas y devueltas al foco 1'. en las dos series de
ciclos, directa una é inyersa otra, se campe sa­
rán e 'actamente, y el foco superior, en definitiva,
ni ganará ni perderá calor.
La diferencia eotre el trabajo engendrado y
consumido será
mT- IIT'= J (nQ'o-1II Qo),
y podrá verificarse una de tres hipótesis.
1." Que se tenga flO'o>mOo; es decir, que
sea mayor la cantidad de calor tomada en el foco
To en virtud de los ciclos TI, que la cedida en los
ciclos A.
En este caso,
IIIT-nT'> o,
ó bien
/liT liT';
es dedr, que el trabajo engendrado en la serie de
ciclos ,e.~ mayor que el consumido en la serie B.
ediJcese de aqu\, que si sucesivamente opera­
mos entre I,)s dos focos 1'0 y TI con los cuerpos
A, 1) pour "mas engendrar IIna cantidad determi­
nada de trabajo sin que el foco superior pierda
calor, y sí solo el inferior.
Ahora hien, si se admite como un axioma que
es imposible engelldrar trabajo mediante cOtlSU­
mo de calor s/'n que este pase de un foco superior
lÍ Ot1'O inferior, es dedr, d 11'1 foco á cierla
lemperatura á otro á 1 mperatura más baja; es
claro que la consecuencia precedente será absur­
da, y que no podrá admitirse la desigualdad
n Q'o > m Oo'
2," Que m Qo > n Q'e' Basta pam reducir este
I CUJ) al anterior, alternar los Guerpos II y A, cn­
I gendrando cIclos directos con el primero. y ciclo:>
inversos con el segundo.
3: Queda, pues, corno ilnica hipótesis adm'­
sibIr~ 11 Q' ° = lit Qo, ú hien
y c(lmo tenem05 adeIllils t/j 01 = 11 Q'" de donde
(1, n
'"(}'; = /11
se dedllce, finalmente,
Aplicando ú un número indefinido de cuerpos
e, D..... el mismo principio; ú bien, para un
mismo cuerpo, á todos los cuadriláteros compren­
dido entre P, Pi (cu['\'11. i:oterma correspondi ote
á la temperatura '1) y Po Ps (curva isoterma cor­
respondiente á 1,,), tendrémos
Q', O",
-(1, = -, = -.-" = ..... = constante.
(.l" ti"
Esta constanle s61 depende de las curvas ele­
gidas PI Pi YPo P;; luego solo será funcion de lo
y '" y tendrémos, ppr último,
Q' = runcion (/0' ',).
O
"
56. El principio ante 'iOJ'. que es en el que se
fl nda la segunda ley de la Termodillámica. deja
mucho qUJ desear, Desde luégo ocurre que el axio­
ma en que la demostraciofl estriba, no es Lal axio­
ma : Thornsoo lo establece Goma tal; e este con­
cepto muchos lisicos lo aceptan, pero otros lo re­
chazan; y en verdad que no s , presenta al e:;píritu
con el carácter de evidencia que todo axioma debe
llevar consigo. Cierto es que en la práctica, para
que se desáJ'l'olle un trabajo mecánico mediante
el empleo del calor, es necesario: 1.0, un foco á
alta temperatura (el hogar de UlJa J1áquina); 2,°,
otro á temperatura menor (el condensador, ú bien
la atmósfera); 3.°, que cierta cantidad de calor
pase del primero al segundo; y de aqu\ resulta
una pérdida de calor precisamente en aquel foco.
Pero si esto es lo que la práctica nos enseña; si
toda generacion de trabajo supone una caida, di­
 TEnJfODIN A1111CA. 1

gámosl() así, de calor de IJIJ roeo elevado á otro ~=F(tt,I):

á menor temperatura; si nunca es el roeo inferior CJ
el quP. pierde ¡;alól'ieo, y todo esto da fuerza al funcionando entre (t) y (1,,), se tendrá asil!li~mo
principi n anunciado, es en el concrpto de p,.¡IIf1jJiO
empírico, y no en el de ...el'dad teórica y I'llClOllal. 1I = 1"(1, 1,,):
Tanto es as!, que Jos mismos que lo consideran (i o
como axioma se (~sfuerzan por aclararlo con prue­
y runcionalldo, por último, de una vez entre ti
bas y demostraciones q!le Illégo resultan ser, 6
y lo,
falsas 6 incompletas, y que exigen nuevos y lOás
extensus desarrollos. Sirvan de cornprohaci.Jn il lo ~ -1"((,,1 0 )
00
dicho, los grandes esfuerzos que el distinguirlo
MI'. II irn ha !Jecho pal a rlar carácter racional al Multiplicando l¡¡s dos primeras relaciones, é
principio que nos ocupa sin que, por de.::gracia, igualando los segundos miembros de la que resul­
ta y de la tercera, tentirémos :
lo haya conseguidt!.
Oc todas maneras, y ya que no pueda ¡¡cep! ar­
F(I¡.t,,)=F(II,t).F(1,I,,)
.
(l),
se como principio racional, puede considerarse
sin eSl'l'úpulo como una pl'Oposicion empírica que debe verificarse inrlepeudiente del valor de l.
plenamente comprobada en numerosas experien­ Veamos si de esta relacion podernLls deducir al­
cias. Pero hay IJlás: no sólo es incompleta la de­ guna conseuuencia relativa á la forma de F.
mostracion de este segundo principio, si no <.j ueó.u n A este fin, hagamos 1=1", y resultará
suponiéndolo cierto, no es tan claro en Sil esencia,
tan sencillo y tan directo, como el de la lras['or­ F (1,. lo) = F (tI' 1,). F (/",I u ):
macion del calor en trabajo. lIay en dicha pro­
r posicion algo de forzado y artificial; IJay compli­ ó bien dividiendo porF (t" t,),
cacion en su enunciado; y no adivina el que por
primAra vez estudia esta teoría, ni cuál es su im­ 1= F (lo, lo).

portancia, ni CÓmo se enlaza ta.n directamente con

llagamos ahora ti = (o, y hallaremos
la Termodinámica, que viene á constituir nada
ménos que uno de los nos principios fUlldanH:ln­ F(I", 1,,)= F (to I). F (1, lu);
tales de esta eiencia. Por ahora no nos es posihle
insistir más sobre este punto, que en ocasion opor­ ó bien
tuna nos esforzarémos por aclarar. t = F (lo, 1). F (1 , lo),
57. liemos demostrado que en el cuadrih\tero
de donde
fundamental de la figura 8.", se tiene
I .
\)1 . F (1, lo) = F Tt;;":tj'
-=1.(1,,1 0 );
(lo

pero ~e pUéde ir nl:'ls léjos y determinar en cierto y sustituyendo este valor en la ecnacion funda­
modo la ['tlrma de la fUllcioll F. melltal (1) ,
En erecto, concibamos un foco intermedio de F (1 ,,1)
calor á la temperatura 1, es decir, que se ten~a F (1, , 1,,) = 1" (f", .ff

1,> 1> lo, El segundo miembro es caso particular de esta

nueva forma más general:
y hagamos funcionar al cuerpo que escojamo
como vehículo del calor, primero entre tI Y t. Y r(t tl
F(tl,I")=7T:) (2)
despues entre ( y f o : el resultado debe ser el mis­
mo que si ['uncionase directamente entre l I Y lo' en la que res corn pletamente arbitraria, y nada
6 al ménos esto es lo que hoy parece, miéntras presupone respecto ¡'l la forma de F.
una teorla más exacta no venga á desvanecer las Pero muy bien pudiera ser esta nueva forma
dudas que á cada paso asaltan en esta noyí:;ima é demasiado general é incompatible con la condi­
imperfecta ciencia. cion (1). Para averiguarlo, introducirérnos este
Fnnciollando entre (t,) y (1), debe tenerse la re­ resultado en dicha eCllaeion (1), Y si se reduce á
lacion una identidad, podrérnos admitir la forma (2), al
 32
paso que deberémos rechazarla si resultan nuevas
condiciones para f'.
Tendrémos, pues.
y susti tu yendo en la (-1) ,
De aqui se dedur,e que en virtud de las condi­
ciones físioas de la cuestion, la forma F está com­
prendida en esta otra forma:
F (' t) = ((1'> .
'" ((1,,)'
y por lo tanto, el teorema fnndamental del (N. ::>5)
se ex presa 'así :
Ik= ((1,) Ó hien ~=~:
Hespecto á trabajos mecánicos, como están re­
Q" ((lo) re',) ((to)
la funcion ( (t) de 1 temperatura es la misma
para todos los cuerpos de la naturaleza.
De aquí se deduce que pnes siempre es la mis­
ma, basta conocerla para lUlO solo, con lo cual
quedará deterlI1inada en general.
58. Generalizacion delleorema fundamental.
Ante todo observemos que á la curva A n e D E
(Fig. O,"), descrita por el punto representativo de
un euer'po, se puede sustituir otra cualquiera A a
B " e e D d r: infinitamente próxima,
Fig. o:
U 1 cuer () ~e pone ell contacto con IIna serie de
fa ,os Q. Q'. _. contínuos ó disr.ontínnos. que
e to 1 ca importa; al lLlisrno tiempo la presion
exterior aument.a ó disminuye segun cierta le ,
y de aq I resulta, como vimos en el .33, que el
punto representativo describt-l la línea A B e o E.
Si en vez de ponerse en contacto con los focos Q,
Q/, .. se pone en comunicacion con otra serie de
focos, poco distinta de la anterior, O., Q', .. :
y la nueva ley de las presiones tam poco difiere
sensiblemente oe la precedente, el punto repre­
sentativo describirá una curva que, para fijar las
ideas, supondrémos que sea la A a TI 6 e e D d E
infinitamente próxima á la primitiva.
TEllMÜDINkMICA.
Pero. ¿qué ~ignillca esto de sustituir á lino da
los contornos el otro? Signillc::L que en uno y en
otro casu, es decir, ya describa el punto el primer
contol'llo, ya recorra stJgunno, el f'uerpo pa­
sará próximamente por los mismos estados suce­
sivns, y podrémos siempre sllstitllir á los volúme­
I nes, presiones, lemperaturas, trabajos mecáni­
eos. y eanll"dades de calor cedidas ó lomadas
correspondientes ti un caso ó coutorno, todas las
cantidades de estos cinco gl'llpos que se refieren al
segllndo contorno.
Ell efecto, las presiones y volúmenes son pró­
ximamente iguales, puesto que ambos elemento
est(lI1 representados por las ordenadas y abscisas
de las curvas A 11 e D•..• A a 13 b e e. .. con
relacion á los ejes O p, O v, y estas curvas están
por hipótesis inl1nitamente próximas. Ademas.
puesto 4ue las temperaturas son funciones de p y
v, In igualdad de estas últimas trae consigo la de
la variahle l.
pr séntados por las áreas de una serie de trape­
cios. y la.' diferenr:ias de estas áreas son los trián­
glllos infinitamente peqneñ()~ dl~ ~egllli'¡U IIl'lfell
A a R, B b C... , se deduce qlle t()davía podernos
suponer iguales estos nuevos elementos.
Por ú!Limo las cantidades de calor que pasen
de los focos Q... al cuerpo en los arcos A B,
e o... , sólo podrán dil'erir de las análogas T)ara
los focos 0 •... Y Jos arcos A (l TI, n b e... en
cantidades infinitamente pequerlt1.s de segundo ór­
den, puesto que son proporcionales á los trián­
gu los A a B, 13 6 e. . ,
Basta para con vencerse de ello considerar los
contornos cerrados A n . B b C...
59. j' tablecido est nrincipio. imaginemos una
l'
I;urvct l: Iréllla al/ ':. _ . h' lFl~. -10), descrita
: por el punto répresentativo de un nerpo al po­
I nerse en contacto con una serie de focos O, Q/,
Q" ... , variando al mislll tiempo sus presiones
Ó sus va lúrnenes, segun cierta ley.
Imaginemos a-imismo en el plano de las p 'V una
serie infinita de curvas térmicas de primera clase
m 111', 11. 1/, P p' . .. y otra serie de arcos de se­
gunda clase m 6, n e, p d. .. m/ 6', 6' p', e/ q/,
d' n' . .. y formemos un contorno a '111 h n e p el
q r f s s' f' r' e' n' d' q/ e' p' 6' m' a con curvas
de una y otra clase, que se aproxillle tanto como
queramos al contorno dado a 6 e. .. e' 6' a.
Aquél sen\, por decirlo asl, la variable auxiliar
del sistema; éste la cantidad fija á la cual se apro­
xima indefinidamente dicha variable.
Hemos probado que. elemento por elemento,
 TERl\:IODINA.~nCA. 33

\
i
P

(l' - ~
fig. 10.

podemos sustituir á un contorno otro, en todo lo al de la figura 8", y por lo tanto podrémos apli­
(lile se refiere á presiones, volúmenes, temperatu­ car á las cantidades de calor correspondientes el
ras, traLajos desarrollados y cantidades de calor teorema del N. 57.
tomadas de'los focos O, O' ... ó cedidas á dichos Llamando á dichas cantidades de calor 00 y O' o;
focos, sustituyendo á estos últimos la serie O. , O, y 0'1; O, Y O',... y representando por lo, tI>
O'•... de focos correspondientes al contorno que­ tt . .. las temperaturas de los focos, tendrémos:
brado.
Teudrémos. segun esto: Qo Qo
para el cuadrilátero ni b b' m'.
. {(t o) - {(t'o) = o;
ciliar cedido por lo. {ocas Q... en el arco ~ b = cal%~~ cedido

por los {ocas Q•... en el contCrtlO:I m b;

id ..• . . • • . . n e p' b'. ~-~=o;
calor cedido en el arco he = calor cedido en el contorllo b nc.
. {(II) r(['1)
"', -
iJ . . . . • . . . . . p d q' 0' . . . . . {(tt) Q', --o',
{(l',)

Pero en cada uuo de estos contornús hay dos •••• I •••••••••••••••••••••••••••••

arcos térmicos: por ejemplo, en el b n e tenemos

el arco b 11 de primera clase, y el n e de segunda; Sumando todas estas ecuaciones, resultará:
y miéntras el punto recorre el arco n h, ni toma
Qo Q. Q~ Q'o Q'I Q'!
ni recibe calor; luego sólo queda el arco efectivo -+-+-+ ... - - - - - - - - - .. =0,
(Uo) (Ud ((1,) ((1'0) ((1'.) (U',)
11 e, y como lo mismo podriarnos decir de ah,
e d, de . .. resultará: en la que 00' 01, 02' .. son las cantidades de
calor correspo/ldiellle ti ~ h = calor correspondiente á m b
calor cedidas al cuerpo ó recibidas de él por los
id. . . . . . . . . . h e = id..... 11 e focos O, O', Qff . .. al ponerse en comunicacion
id. . . . • e d = id. •. . Pd con ellos.
id. .. Ie= id qe
Si convenirnos en dar el signo á las cantida­ +
des de oalor que los focos ceden al cuerpo, y el
id . . . . • . . • . . . e' d' = id. . . . • . . . . . . e' q' signo - á las que el cuerpo cede á los focos, po­
id • • . . • . . . . • • h' e' = id b' p'
id. . :1 h' = id. . m' b'
drémos expresar abreviadamente la ecuacion an­
terior, de este modo:
Por otra parte, cada dos arcos m h, m' h'; u e,
b' p' ; P d, e' q' ; ... corresponden á un cuadri­ ,. Q
_7fij=o.
lAtero 711 b 1/ m', n e p' b', p d q' e' . .. análogo
 34 TER\IODIK.' n 'A.

De lo expuesto se dedu·e I siguipnte , si el cuerpo ll/lelve á su es/arlo i111áal, la suma

TEOHE)(A. - - Cuando un cuerpo se pone efi con­ de los cuocientes que rf!sulfan de dIvIdir cada
tacto con Uf/a serie de focos de calor á fempem­ cantidad de calor por Ulla {I!ncion COIl frl1lLe, f,
t'Uras diversas t o, t{, t~ ..... .ti de ellos recibe, Ú de la fempe1'llLura c(¡l'resp()1/(lil'llf(I, es igual (Í
b1"en les cede, crmLir!arles tie calor Qo' Q l ' Qt . .. , cero.

CAPITULO 111.

ECU¡)GiOllt':::> fund;llDclllaJe'''''

63. Dijimos en el N. 6t • que siendo seis los r, que representa el úrea ncerrada en el con­
coeficientes específicos, y expresúndose CUütro de torno P 11 P' m, podrá considerarse como u pa­
ellos en funcion de los otros dos, eran necesarias ralelógramo, y tendremos:
dos ecuaciones mas entre dichos coeficientes y
T =Pn vV';
las variables p. v, t: estas dos ecnaciones son
las obtenidas en el capitulo anterior pero P 11 es el incremento de presion al pasar el
T=HQ;
cuerpo de (p, v, l) á (p+dp, v, L+d t), puesto
que las curvas t.érmicas corresponden á LY t+ d l;
y Q ­
- ((1) -o.
luego es el íncrell1 p nlo parcial de p por el incre­
mento de l, r¡uedando v constante; es decir,
Verdad es que en dichas ecuaciones entra la dp
cantidad Q; pero esta se expresa fácilmente en Pn= di dI,
funcion de los coeficientes especificas.
Veamos, pues, cómo deducimos de las dos re­ en cuya expresion d--!!.-
d. I
es la derivada parcial uedu­
laciones fundamentales dos ecuaciones en l'uncion cida dep = {(v, t).
deC,p,v,t. Además :
64. Ecuacion deducida de T=J'f. Q. Adverti­
v v' = d /';
remos ante todo, que para mayor sencillez supon­
dremos contada la temperatura, ú partir de 274 0 por consiguiente,
bajo el hielo fundente; Ó de otro modo . supon­ T =!!!.... dI. dv.
dremos que t representa la temperatura absoluta. dI

lmaginemos (Fig. 1'1.") en el plano de las p v Tenemos ya expresado el-primer miemb o en

funcion las variables p, v, L: pasemos al segundo.

1 ll.
'f. Q es la suma algebráica del calor reoibido ó
dado por el cuerpo al recorrer su punto represen­

P tativo el contorno P n, p'm;asi,

p
; .. 'f. Q=calor recibIdo en P n+calor recibido
en n p'-calor cedido en P' m-calor cedido
l : '"
I I I .1
; : I
en m P.
V V y
O El calor recibido en el lado JI 11, es el nece:-a­
t·i¡¡. 11.
rio para aumentar la temperat.ura de t á l+d L,
un cuadrilátero infinitamente pequeño P n P' m quedando constante el volúmen; lue5'0
formado por dos curvas térmicas de se~unda cia­
se P m, n p', correspondientes á las temperaturas ealor recihido en P 11 = e: d t.

L, y L+d L, Y por dos paralelas P n, P' m, al El calor recibido en el n pi es el necesario para

eje de las p, correspondientes á los volúmenes que el vo!úmen pase de v á v+d v, f]ueJando
ti = O V, v + d v = O V'. constante la t.em peratura; as! ,
 TEUMüDINAUIC.l\. 35

P' = r.:, d v.
calol' re¡'ihido en /1
cantidad de calor e did:: t'n P' 111= ( e: -r-
de"
dv' dv
) (H.
11~1
G,lior eerliuo (L lo:" roco~ Gutorlficos en P' 'in es
el mismo que estos cAderian al cuerpo si pasase Del mismo modo obtendremos
dem á P', cantidad análoga á la ya obtenida para
el lado P r¡ , con la dirercneia que en vez de refe­ cantidad de (:alor ced j 'a en m P = ( C:, - de'
--,¡f dI ) duo
rirse e;' al valor ·tl , se reflere ;l v el v,. por con­+
siguiente: y ~ustitoyendo en ~ Q,

~O=C; dI
dr,~) dl- (e, - -de'
e , dv- ( C,"+-du "dI
) dv'
" du "dI'

y simplificando, ilrt'alIP'mP=
dp
lit dI. dv;
dC't' dC"),
~Q= ( - - - dV.dl. lueo'o
(/1 dv b

ustituyendo ahora en la euuaeion T =.J ~ Q Q,-Qo=A{j¡dl.dv.

dp
los valores obtenidos para T y ~ Q, tendremos:
y sustituyendo
dp
- d dl.du=J
de' v,
dC")
(- - - r/u.dl;
du
I dI A _~ ti_'._ti_u =/
_.0--(1,,-')",,-....,:-(.:.-(t.:.;.,,)
dIO, (Id
ó bien,
Las cu rvas térmicas 1t P' Y r s son infinita­
d<
¡¡¡ -
dC:
dV= T
1 dp
(Ji'
mente prúxim¡u;; luego t~ = to el t, Y próxima­ +
mente
Finalmente, poniendo en vez de -}- el equiva­ ((t.) - ((lo) = ((10+ d 1)-( (lo) =f (lo) d t;

lente caloril1co de un kilográmetro A, tendremos Ó prescindiendo del suhlndice,

la primera ecuacion de la Termodinámica, ((1,) - f (lo) = f (/) d t.
de'"
dC"
t dp Así, despreciando infinitamente pequeños de
---=A- ( 1).
dI dv dI órden superiur,
65. Ecuacion deducida de E (~) = o. Aplique­ dpdl.dv
A---=-­
f(l)dl
dI Q, (1) .
mos la ecuacion del segundo principio al cuadri­
látero n, '1', S P' (flg. 10), análogo al fundamen­ Solo nos queda por eliminar O. pero O, es la
tal P. PI p~ P~ de la flg. 8."; pero supuesto infi­ cantidad de calor que el foco superior debe ceder
nitamente pequei'to, resultará: á un cuerpo al pasar de n á P' por la curva tér­
mica rle segunda clase n p'; es decir, la cantidad
UI ((11) de calor necesaria para que el cuerpo aumente el
o;;- = (1,,);
volúmen el v, quedando constante la temperatura;
ó bien, luego
u, - 00
-0-,- =
((11) - ((1,,)
((1,)
o, - C: d u;
y por último,
Prouuremos eliminar de esta fórmula O, y O.,
dp di. dv f(t) dI
para que sólo quede una relaoion entre p, tI, 1, Y A---=--.
dI d dv ((e)
los coeficientes especil1cos. •
Tenemos ú simplificando y representando, segun el uso,
. ((l)
Q,-Oo=A.:ireanrsP'; por e la funclOn ('(1)'

u hi~n, puesto que los paralelógramos n ,. s P' y

fl. P' m P son próximamente equivalentes, C~= AC !!..!!..
dI
(2).
(l.) - Qo = A. áreá 11 P' m P ;
pero 66. Las dos ecuaciones ('1) (2) Ylas cuatro del
 36 TERMÜD N.' MICA.

(N. 31), unidas á la relacion general entre p. v, l, y por lo tanto,

son las generales de la Termodinámica. de'• d ¡;V
Presentémoslas aquí reunidas para fijar a<; ideas; (j( -
I
du' = o.
dC'• dC·I dp lo cual está 611 contraJiccion con la ecuacion (1).
fit-/iV=A-¡¡¡ ... (1)
De aquí se deduce que la cantidad de ealor Q
I dp que haya de comunicarse á I1n cuerpo para que
Cv = A r. dt ...... ... ... (2)
pase de vo ' ' . Ú v, t, no puede :er funcion ele es­
tas dos variables; es deci r, qlle no puede tenerse
t
c, dP
, t!
Cp = (3)
\j = l' (v, t, v" '/u)'
dv
y di rectamente se ve que asl debe ser. puesto
i que el calor que sale de lIn fono y pasa al cuerpo
e, di ''''' ......''
ti ,t'
Cp = (4)
entre dos estados fijos, no depende única y exclu­
dI
sivamente de dichos estados, sino de la curva que
dp el punto repre entativo descrihe, 6 sea de la ley
,p
(. = e - , "dv
CI -;l.... (5) segun la (jllal varian v y l.
W IJ ... p
Vemos, segun lo que precede. que si se nos di­
dI
jese : ¿ qué cantidad de calor será preciso comu­
dp nicar á un cuerpo para que pase d (v o , ]Jo) á
p • 1 M (v,. 11.)? :\os seria absolutamente 'IlJposihle res­
CI=CI-C.¡¡¡; .... (6)
ponder á esta pregnnta. El prohlema es, en efec­
dv
tn, indeterminado: la cantid JI) cada Qu puede

p = f(v, 1) (7) var'ar enlre ¡¡mites muy extenso', y dep nd de

La ecnacion (7) dá las derivadas parciales de
p; las (1) y (2), los coeficientes especlncos
v
Cl ;
y las (3) (4) (5) Y (6), los restantes: conocidos to­
dos los coeficientes en funcion de v, t, fácil es
resolver la mayor parte de las uestiones que pue­
dan presentarse, como ya hemos anunciado y como
Irémos viendo en la serie de estos articulas.
67. Consecuenáas principales que se deducen
de las ecuaciones (1) y (2). T. La ecuacion
la manera segun la cual camhie el uerpo para
pasar ue uno á otro estaJo.
C:' En efecto, sigamos paso á paso esta ley de va­
riacjon ; es decir, veamos el incremento d Q que
correspond á cad; dos incremento de v '/.
Para que el cuerpo aumente el v de VOIWl n,
quedando l fija, se necesita la cantidad oe ca­
lor e:, v,.
d para que aumente d l la temperatura,
sin que varle el volúmen, neeesi ta lisien 'SIllO la
cantidad de calor C~ dI; luego par' que pa e de
v, t á v+dv, t+dt, ~e necesitará:

nos demuestra que y C: C;

no pueden :>er las Je­ Pero esta ecuacioll 110 puede integra Sil Jircc­
rivadas parciales de una funeion de v, t. En efec­ tamente, pues no satisface á la condiciolJ de illte­
to, si d Q representa la cantidad de calor que es grabilidad
preciso comunicar á un cuerpo para que pase de dC:. de:
ti, t, á v+d v, t + d t,. Ysi pudiera ser Q fun­ dT= -;¡¡;,
cion de ti, t, es claro que tendriamos Para integrarla sería precio o fijar \lila relacion
dQ
dQ=/iV di!
dQ
+.¡¡¡ d.l; entre v y l : y en este caso, sDstituyendo á v y
á d v, sus valores en funcíon de y ti l, 6 pcí­
de suerte que procamente, tendriamos una ecuacioll diferencial
I dQ v (IQ
ordinaria
Cv = -¡:;¡;C, = di; d Q= q> (1) (/1 •

pero ent6nces susceptible ya de ser integrada exacta ó aproxI­

madamente. y que 110S daria
Q. = ~. '( (/) dI.
 TERMÜDINA1\lICA. 37

Pero 00 depende dl' I~ forma de 'f, Y ésto. de­ por ellos la relucion p = f (o, t), 'lue, segun he­
pende de la relaoioll entre 'v y 1,. luego 00 depen­ mos visto en el (N. 10), es p 'v = R l.
de de dicha relacion; es decir, del camino segui­
do por el punto á que hemos dado Poi nombre de
Sacando oe aqul :¡-, que es la derivat1iJ. par­
cial que aparee" en l:J.s ecuaoiones (1) Y (2) • len­
represen tativa.
drémos:
En resumen'
t •• e',. Jvr.rt no son las derivadas (Jan:iales de ¡Jp n
-;¡¡=-v-;
llIa funcion de v. f.
2." Al comunicar cierta Ijantidad de calor ÍJ. un y $u~tituyendo en dichas ecuacione
.:uerpo, no quedan determiDlldas las variacione
de v y 1,. Y reclproeamente, para que el vo!úmelJ
ta temperatura 1eciban IIIcrementos deterrnina­
dos, la cantidad de calor que debe comunicarse
d
fU
e: _ ~I e; =
dv
AR
v
¡ (8).
R
al cuerpo depende del catnino que el punto repre­ ,1
,.
= AC - -
" . I

senativo siga. y 110 AS, por In tanto. fija, deter­

minada y dependiente d~> t!". too y rJl';;US increll1en­ flastu que cO/lozcalllo~ rara un solo e: y e;
lo;;. gas en funcion de lJ, l. pues eliminando A entre
liS. 11. En las ecuacione;; (t) Y (2) entran la las ecuaciones (8). hallarémos la I'orma de e; y
oon;;tante A v la I'uncion e; pero estas ecuacio­ basta asimismo que IjOlJozcall¡os tantos sistemas
es dun el ITIl'diu de dettmninar una y otia incóg­ simultáneos de valores de p. v. 1 como sean las
nita. constantes desconocidas de mas uno, para qu e
En primer lugar, A es el equivalente calorlOoo determinemos lo:; valores nlllnéricos ¡Je dicha cons­
tante y da A.
e un kilográmetro; es decir, el n umero de cala­
rlas que equivalen (¡. 1k,,, , Y es igual tarnbien ú
iendo .1 el equivalente mecánico del calor, ósea
+ Ahora bien; 8n los gases la cantidad de calor
necesaria para elevar lo la temperatura, quedan­
do el volúlllen constante. es indeLJendiente del vo­
el número de kilográmetros equivalentes á una lumen; luego
caloría. dG"
En segundo lugar, e representa la relacion de
I
-¡¡¡; = Q;
r r
(1) a (l) i es decir, una fllncion de 1, cuya for­
y las ecuaeiones (8) quedan reducidas á eslas ¡JI)
ma es desconocida, como son desconocidns, por
{~onsiguientc, sus parámetros.
hora bien, del mismo modo que las COlls{all­ de:=-
dI
~¡ 11
les que entran en las ecnaciones que expre~an la (8').

ley de un fenómeno natural. se detel'lllinan espe­ el =At:~

1 ti
rimentalmente LusculIllo uno, dos ó más siste­
mas simulláneos de valores para las variables, así
Diferenciando la segunda por relncioo o. I
lendrémos:
tambien en el caso quo nos ocupa podemos deter­
minar el calor de A y la fl'f1na de e, aplicando dt:: A n de.
las ecuaciones (l) Y(i) ú vn.rio~ cuerpos; (1 de otro di = -v- -¡¡¡,
modo, por una serie de experiencias. de'
Si la teoria del caloJ' ql:e venimos exponiendo y eliminando di entre ésta y la primera del2Tu­
es cierta. A es constante é independiente del eue\'­ po (8')
po qne se elija; es decir. la misma para todos: y
dG_ = i;
e tiene siempre la misma forma, y el mismo va­ lit
lor sus parámetros, sean cuales fueren los cuerpo
que ensayemos y el estado en que se encnen­
tren. e=I+ constante;
Pues bien, t:scojamos el estado gaseoso, y de­ designando por ex la oonstante,
terminemos para dicho estado A y e; claro es que
determinadas quedar(ln estas expresiones para el c= I+!l (9).

estado sólido y el liquido ; y es evidente que nos Conocemos ya la forma e, y sólo (Jos falta de­
conviene fijarnos en los gases, pues cono¡;emos terminar la constante IX y la. constante A.
6

--
J'!"': l'
 Introdu 'íe do la e Ill.licion (fl) en ratura, lo ual e n ba e. pcrimentalmente;
de la. ecuacinnes (R') , hal1arémo. : lueg el primer miembr de la última ecuacion es
A R O) independiente de t. YGtl' tanto debe ser el se­
e,,1 - -,-, (I-+-a) (l.
gunrl • para lo cual f\S ne e~ ri ue se tengo
De todo. lo: cocfici ,nte' pecí/ko:; que h 100 c<=o.
enumerad , sól- do ~e l .lian ,o 1f t 'ice, y;-;o ConucellJOS, pues, el valor J IX' Ysustitl1yén­
deducen e.- VerirneJltillmenle; a saber, ;, e, e;' dolo en dicha ecuacion despejando A, hallaré-
decir, la antidad de cal " llece aria para e e­ I m s, por último,
val' 1" d te el' lura un ,lIer' , cOllservo.ndo c"-
constante, -a el volúl1l n, ya la presion; can ti­ _ _l•.
A=_'
11 '
dade á. qu ,e ita los nomhr . de elHentes es­ J

peclfi os á vnlümen I'on:itnnt Ó ti pre. ion e n,­ y por 1 tanto

tanteo 11
J=---.
L, primero SClJ'lln to, que tell mos que ba­ f:~ - e;
cer, es expresar r,:, en runc'oll d e: y ~; pero
e o que [lara un solo gas cooozcamo los do
en la eCl! cíon (fi) tAn n azada e. las tres call­ coefi ienles e 'ppclficos ordinari s, y la constant
tidade.. luego despejando C~, lendr mos' R, podremos deducir el valor e A y el del coefi­
d
ciente mecánic del calor J.
Par el aire atmosférico. los alores más pro­
("'v = .!!...!!- (1'" - (fI
úp" abtes de R, e: ye, ' soo :
di
11= 2!J,ti:!
y sustituyendo en la (10),
f:~ = 0,238
dp
d v (.
dp C, - f:,
ji) = -,-,
AR
(I-T' /l).
e: = O,i6!J

dI
2 ,1i2 .
J = = 422,8 kIlográmetros.
,amo estamos considerando cuerpos gaseosos, 0,23S - 0,16!J

eherémos deducir :~ y ~~ de la relacion p [ ara ':JI hidrógeno se tiene

R 1, Ytendrémos : "91-"
r1--~-
O,069'!6 - "IW".)
-l.,
dp p up R
dV = - IJ ¡¡¡= "-;-;
de donde
-p
Rv (C,-
' C," =-(I-+a:);
A lue o
"!t,ifti 113 k') .
J = .405 _ 2.410 = . I ogrametros.
ó bIen,
E. verdadera ent a mirable. y es singular
,", ,= -AR ( 1 +11,; cornp 'oba i n d la teorla t mo inámica, esto de
fl
nconlrar por u medi an indirecto y compli­
y su tituy .od por p) u valor R t, cad ,US ndo Jatos xperimentales tao aparta<1os
C," - f. ,u An
= -,-(I+/l). I á primera vista de l 1 orla d 1equivalente mecá­
nico, 1mi mil número que p r experiencias di­
E en ral, b ri m s ' st' uir por : ' , rect é inm iatas se hila.
su valores en runcion u v, t; Y dando de pues En un de I c pllutos pI' ,'im s insislirémo
dos sistemas de valore im lláneo á p, ti, 1, de­ Aun roá obre e la ¡ngularl ima comprobacion'
d ciríamos de las do e uací ne es Hantes 10 po allOra continuemo. iti Juliend las ecuacio­
de A y IX; pero en 1 c, presente el roblema e~ nes fun amentales.
(¡,un m: encillo. En resümen :
En efe lo. e: y : soo md p odien 1 d la lem­ j a fun io ((1) = e,
A ue g' eralment s
rll)
 TEHMÜDIN.Á l\lICA. 09
a 131 nombre de (ullcícm de Carnol, !;lO;; igual á de /lIndon lenllorlinúmica ó funcion de Rankine.
la variable r,. nsi , COlloci!la que <¡ea, hallaréll1o~'
r (1) = t. , de¡>
r.,,=I-¡;; ,"
c,=l d'l'
fU) di ;
La experiencia cOlllprlleha las dos ecua y su~litu)'end{) estos \alores en las reuaciones e
es fllndamentale~. puesto qu~ da para el f'oefl­ (/1) (5) Y (0\, lendrémos expresados en funci
ciente J, empleando nLtOs cueficientes prilcllcos de <f los seis coeticientes especificos.
referentes :L olras cll('sli(1I)/·~. 1'1 mismo valor (jllt' r.omencemos, pues, por detellllillul' la forma
directamente se aL! ¡ene dI' 9- Sustituyendo á /Jsll~ 1111 en la ecuacion (2) el
9. 111. Ona de la:) principall3:) ~lJn~eculjllcias valor dI' el/, , re.__ultará:
que de las dos eClJacíolles flllldamenlalel' ~e dedu­ de¡> dp
ce, es la relativa é!. la foneion a qlJe generalmenl I-=Al­
uv d
e lIa::-.a (Ilt/cion termodinalll;ca, Ú funcion d~ (¡ bien.

Ral1k;l1e, que conviene no confundí" eOIl la 1'1l1l­ d t

-='\­
dp

oion de Carnot. dv . di'

Veamos cómo se viene á paríLr ú ~.~tll f'lJlleilln, ~: ~~ lIna deri\a~a parüial torllada respecto a v;
que e~ una especie de potetwial análoga á la qu
en ia teorla !le la ahsnrcinn se emplea l:Oll l!rall integrando r,on rdaf'Íotl (1 esta variable, obtell­
ventaja. drérnos
Sustituyendo en las ecuaciones (1) Y (2) él IU­ 'P - 1\. ¡ di dP
d l' + F (1);
101' e = t , lend rémos :
ient10 F (t) una funcion arbitraria de la illlegra­
~
de' (IC:
-=A­
dp (t) cion, y delJi(muosc tümur lu integral respecto fl. v,
dT-
l'
dv a r s decir, que si ~~ os A (v, t). en esta funoíon
e',. = A I dp
lit
(~)
considerarémos á l como constanL.
Pasemos á la delerrninacion de F (l). Esta fun­
l\Iultiplicando la primera por r • y restando de 0ion es independiente de v, )' podemos, segun
ella la se!runda, resulLa: esto, suponer el \'olúmen sulicienLernente grand
de: de;' , para que el cuerpo al cual se a~liqllell estas fór­
/---1: -1
at .. dv
mulas se halle reducIdo al estado de güs perfecto,
I en cuyo caso tendréruos la relucíon]J v = R l.
Ó bi6l1. I Susl ituyenrlo el ,alor ? en la ecuacion
dC I l' al dC"I ,
/di
- - c "dt
- ­ dv 1:" = I
, 1/ t •
_d.­
I~ I resullari'J. :
j -di'
'IJ~l)
ua puede escrihirse bajo la lorma .-( = I(A -l/ti F' (/));
•

d_'_v
C' ) u (e;) bien
I - I -,

/ -á
'd~P
di (Tv c, =
V
A 1
. I~
d v-+-I F' (1).

Esta ecuacion nos prueba que y pueden -+;' +

(} i representarnos ahora pOI' e el ralor de e; en
los gases, can lidad tI uc es , segUll todas las expe­
,onsiderar~e como las derivadas paroiales, con re­ iencías, próximamente constante, y sustiluimos
lacion á v y á t, de una fnncion de v. t, que de­
por ~: su valor deducido de]J v = R t,
signarémos por la oaraclerlstica 9. Tendrémos,
d'p
ues, dl 1 =;).
r
e'• d<p cI df
i=¡¡;¡; ,=lil' tendrémos, finalmente,
e = ( F" (t);
y la deterrninacíon de los dos coeficientes especí­
cos fundamentales <) e;
queda reducida á la
ó bieu,

d fl (O

d"t=T;
e la funcion 'f'. A esta l'uncion se da el w mhre
 40 TERMODIN MICA.

de donde
I a) = e lo:;. I -t- consl3l1te.

:'ustlLuyendo este valor en el de í' tendrémo

definiti"umenle para la funcion termodinámica
~
d u

a",
.!!!._ dy !!.!!.­
dt

dp
elp
dI
el 1

df d
c/u
¡ (12)

JI lit -;¡; - (iI; d'

-7 ~c lo~. f+ <l:':lf'-rA
dP
-.-dl/; e, = t clp
•( ti 1
dv
6 JncJuyend en la integral la constante
Uniendo á estas ecuacione~
dP
~ = e J(¡~. , -t- A
,f -
d,
dI' ( \1).
cp = e log. I -t- .\
•f -
dP
di
d" (11).

70. NucIJa eXJlresiolt (/r, los coeficientes espe­ , para deducir de ella las deri"adas de 'f con rela­
clficos.-Nada más fá.cil ya que expresar todos I cion á v y 1 YIIníendl1 a"lIni,.;rn0 á estos dos g'ru­
Jo' coeficientes específicos en funcion de '?' la pos la relaclOll general
cual á s r Z está perfectamente determinada por
p= I'cv, t) (\5).
la ecuacion (1 j) en funcion de p, fJ, t, al ménos
"uando conozca la relacion p = f v, t). para deduoir' las derivadas de p, te dr o:s toda
Basla pur'u ello suslituir los valores la ecuaciones fundamentales de la Termodinámi­
ca, en las que sólo entrarán dos funciones '1' y f.
cl = , .!!5:-.
l' dv"
e' = I df
di
I 71. V rias veces hemos dicho, lo verémos
confirmado más arielante, que de los coeficientes
e 1 las ecuacIOnes fJ) (4) (5) y (6), le drém Iespecificas y de la funcion ('J::I) dependian todo
lo problemas de la Tcnnudinámic' ,y 11 ec:tamos
I de
',='¡¡;;; en I caso de estudiar detalladam 'me las princi­
pales que pueden presentars ; pero como la cua­
t' d-r.
C, =1 (j(; ciones ("11) (12) Y(13) no son las únicas de que se
hace uso; como muchos autores, adoptando una
d,!,
marcha distinta de la que hasta ahora hemos se­
et = t ~. (12) gui o, establezcan sistemas de ecuaciones diver­
JI dp'
dI s, en la forma de las anteri res, bueno será, par
d
evitar dudas y dejar completamente esclarecido
. di este punto, que demos una idea, siquiera rápida.
e =1-; de estas várias formas que suelen adoptarse, y
v d"
dI éste será el objeto del capítulo siguiente.

CAPITULO 1V.

GIl' ~ ::¡i, lem;-¡. o ~cua('J()n()!:" h ndamenlale'l-.

72. La e uncion ("1) (2) del (N. 69), que tado de un cuerpo, qu e h la\ enlazadas por
e pre an os do principios fundam nt les de la la ecuacion f (p, fJ 1) = o, la v la t como in­
Termodinámica, pueden ser 'I:stituidas por otr dependientes; pero pudiéramos hab r escogido la
vArias en I que entren lo' seis coeficientes espe­ t la p, ó la 1 y la p; y segun elijamos uno Íl otro
cificos combinado do~ dos. e DIO el número de estos tres is ema. vendr 'mo á para á ecua­
de e ta ombinacion e ~~ = 15. resultan iones diversas.
5 ecuaciones distintas. En cada rupo, p, ti; 1 ,JI; 'V, t, el número
d m ,nosolro hemos escogido hasta ahora posible de ecuacione qne conteng n dos d 10_
de la tI' arí le t, , p, que xpresan el es­ seis coeficiente~ específico, 1 '. luégo e los
 TEllMÜDIN.c\MICA. 41
1res sistemns lenctr6mos nlJ lotal de ·'1·5 ecuaciones de variables, ó podemos acudir á un método di­
diversas. recto, y esto es precisamente lo que harémos, por
Á cada UIIO de los tres grupos (p, v), (/, p), ('v, 1), considerarlo mAs sencillo y más ventajoso, como
corr6~ponrle además una funci'ln termodinámica, nuevo ejercicio de los procedimientos y artificios
es facil repetir para las dos nuevas hipótesis to­ que se emplean en la Termodinámica.
dos los razonamientos que en los capítulos ante­ 1.' Cuando v permanece constante 'i p varia,
riores, y tomando v, 1 por variables independien­ al mismo tiempo varia 1, toda vez que ona ecua­
tes, hemos desarrollado. cion enlaza las tres variables. Lu~go la cantidad
Seg;lJn 10$ autores, así son diferentes los grupos e"p d p de calor, que determina Ull incremento d p
e aonue parten, y de este modo lIegan á ecuacio­
en la presioo, determinará un incremento cor­
nes distintas, aunque siempre equivalentes, pero
ue pueden confundir al que por primera vez estu­ respondiente en (, cuyo valor será di = :; d]J.
die esta materia; ó al que, conociéndola algo por
un autor, trata de estudiarla en otro. Sin embargo,
Y por lo tanto, el coeficiente especiUco e; serA
en la esencia todos estos métodos son id~nticos, _ C; dI'
c.,_.-­
comprendido su esplritu general, nada más sen­ (Véase el N. 2.1)
dI
cillo que pasar de las fórmulas deducidas en el djid p
sistema (v, 1) 1 las correspondientes al (p, v) Ó , hien
(1, p), é igualmente <;i se quiere deducirlas de una • "1
manera directa. c, = c" di (1)
Exalllinarémos en este capitulo, para comple­ dp
tar la exposicion genel'al, las dos hipótesis prin­
..... Análogamente, cuaado p permanece cons­
cipales (o, p) (t, p): la primera de estas dos es la
tante y v varia, varia asimismo ti de suerte que
seguida por Zeuner, lIirn y Combes; la segunda
presenta alguna:. "elltajas especiales en ciertos la cantidad de calor cP d v, que determina el in­
problomas; y per último, la ya tratada (v. 1) es la cremento de volúmen" d v, determina el incl'l:'­
dI
que aJopta )11'. Saint-Roberl. mento de ternpel'atnra d 1= dV d v, asl el calor
73. Fórmulas de ZeUller. Este autor t011l11
pOI' variables independientes p y 'v, de suerte que que corresponde al incremento uno. ó sea C~,
su palie despejada ( de la ecuacion f (p, ti, 1) == o. será
Tenemos que elegir dos coeficientes especificas c"-
como principales; expresar los restantes en fun­ ,­ C: d v
-~-
dI
ion de éstos; traducir en fórmulas los dos prin­ r¡;:d 11
ipios fundamentales de la Termodinámica, á sa­ ó bien
ber: el de In transformacion del calor en trabajo, JI ,,,_1~
y ellle igual rendimiento; deducir la funcion ter­ c,= c,'~ (2)

modinámica correspondiente, y expresar 103 seis dv

coefioientes e en valores de dicha funcion. ~t·
Supongamos ahora que 1 sea constante, y
Asl como en la primera hipótesis, es decir,
determinemos C en funcion de eP y eV •
I
cuando v .• t eran las variables independientes, to­ P " P
mábamos por ooel1cientes especificos principa­ El estado primitivo del cuerp
les e: e;;
'i así en esta nueva hipótesis, en la (1, p, v):

quo p y V son las variables independientes, to­ el estado final

llr~mO¡; por coeül:Íenle~ especificos principale
e; ye: ' que ~on aqnellos en que sólo entran en
índIces y sublndices dichas varIables independien­
tes. Véa<;e aqul una nueva ventaja de la notaciol
elegida.
En cuanlo á los demas coeficientes y á las dos
ecuaciones fundamentales, ó pudiéramos, para
deducirlos, IJartil' de las fórmulas del capítulo an­
terior, aplicando el método ordinano del cambio
(t,p-t-dp. v+dv);
y para pat>ar directamente de uno á otro est.ad
se necesitará la canlidarl de calor
C;dp.
ero tambien podemos pasar de uno á otro es­
tado, por el siguiente estado intermedio:
Estado primitivo
(1, p, 11). • • • • • • . . •• , . (Cl)

,11['·
 112 ERM:ÜDINÁM: CA.

estado ¡nter edio LueO"o

(t + dt, l' + riP. 11)• . ~) f:'• dv = :"dp+C"all
P •

estado final ó bien

(1 -1- di - dt, l' -+-d1l, u+ dv) {¡ ¡,ien (t, p -+- ¡/p, v +du). . (y)

Para pasar de (a) á (~), puest que v permane­

8 constante, necesitar mos la cantidad ci ca­ .
Ysuslltuyen d4) p r d/l IIn
-d va Ior d uucido de
/1

lor e;
dp. (1 t de
Para pasar de (~) Ú (y) puesto que p dP + dl=o=-dp+-
dp dv
11

queda invariable, necesilarémos ta bien, pres­ t drél os finalmente

jn iendo d cantidad infinitnmente pequeñas
dt
e 2.' órden, ~ dv. e' = ,P - r,' ~ 14)
P dt
Luego la c tIdad total '11 este nuevo sisl ma tI 11

'erá dii
r,; d l' + I:~ d v, Te lemos ya " presaoos los v Ir' d C~, '~,

'lue d be r igual á e' d p. T ndrém ;;, pll '

1 ,
v
e' n rUDCl II de
"
,p \'
. J
e y de las derivadas
P
de 1 con r lací n á JJ Yv erivada" filie deduci­
r.'up-C
p p .
dp (/du rémos de la e uacion I=f(v,p).
ó bien 74. Pa:'emo~ 'a [1 la~ fórmula T -=.1 }; Y
1= c' "T"cl'.!!..!!... }; -Q-
(t)
= .
" p " dp
1. o Tran forma ion de T = J }; (J. A ' de
Ahora bien; ti v y d P son IOcrementos inlUl­ simplificar, tomarémos 1 contorno P n P' m
taneos correspondientes á d t = o. (fig. 12) formado por dos paralelas al eje de las
1

Luego
dI dI Fig. Il!.
d l = o = - dp+-du
dp dI' p
dará
dI
du dP
([p'=- dT
du

y sustituyendo en la ecuacion que da el valor de

e: ' hallar 010: por 1'11 i!Uo
di
e' = (: _ cP dp v y otra. s al de las ¡J , di tantas d v la prime­
"p dI
dI!
ras y d p las ·c.,undas.
Tendrémos evidentemente
4.· or último, para .1ue dUClr
. ~.I segUlmmo~
. , Ia
'1' = d p d 11 ) SllSlllll\'e do J l'"01 ~
A'\ d rroll:mdo ~
misma marcha qu el l~a o 11.nt61 ¡or, y ten­ •

drémos: A dp. dI! = .alor .. P n+ ah, el ti T"=calol' 11 111­

,':¡!or pn m P.
pasando ilireclame:ll de... 1, p, v)
~., . . . . . . . . . . • . . Ct,p,+dp,v+dv)
El c L r que va lel I e al 'uerp mi otras
el punto r pres ntat'vo lescribe la \lnea P tI. crá
c.1IIlíáad de tullir = ,~d v;
el necesario para que permanecíendo 0:;1 nte el
pasando rI • . . • . . . . . , 1, p, v) volúmen, elcllcrpo pase ne p p+dp; lue,.,o
.. .. . . .. (I+dl,p+dp, 1') tendrémos:
cantidad de calor = e: d JI; calor lJlI 1I=C~dP.
pasandol1e .. (I+dl,l)-+-dp u) El calor uc d be comunicarse al cuerpo mién­
l. . . . . .. (I+d(-dl, p+dp, v+dv) Ó (1, p+dp, u+dv) tras rec rre el unto rep ese lativo n " ser por
canlidad de calor = ,P d u. una razon análoga.
 'rERMOIJINÁ MICA. 4

dl.
fI
puesto que el cuerpo conserva el mÍJimo volú
":¡lor ('11 11 P' = ( cPo + __v d 11) dv,
dp men,

y en efecto, el valor del coellcicnte en esp~clfico, C310rC'np'm=(c; ~du

e" ) dp.
el arco P m , es e:,
luego en el arco 11 P' será est
y por (¡Ilimo. para el arco tu P, tendrémo
du

mismo aumentado di'1 incrempnto que le corres-

asimismo
de" alor en mP = C:;d~.
pont1e por el incremento de d p, ósea d p. dP"

El calor que corresponde á la \lnp.a P' m. ser". ustituvendo tod tas cantidades. resulta:
P
dC ) ( de· )
AdP.dv=C~dp+ ( ~~+dp·dP dv- C;+d:dv dp-C:dV.

Simplificando y dividiendo por d p. d tJ I ten­ Qt-Qo=A.:lreaP,(r'=A.áreaPmP'n=A.dp dlli

drémos la primera ecuacion de Zeuner. Y (lue
(t)
"C~dC; ('(/)=/;
---=A (1').
dp dI)
tendrémo
75. 2. Tralls{ormaGiOtl de ~ (~t) = o. con­
0
A dp. du dt
--0-.- = -/-;
sideremos (;úlllO en la figura 11. el ouadriláter
1) lamhieo
fundamentul P s s' r' (fig. 12) infinitamente peque­
ño, y del cual uno de los vértices coincida cc, 00 d t
t=d¡¡.du·
P. Los cuadril~.teros P m P' n 'i P oS s' 1" • sarAu.
ciertamente. distintos en la forma, pero sus área Alwra bien, 0" representa el (;alor que pasa del
serán próximamente iguales. puesto que ambo cuerpo al foco inferior, miéntras su punto repre­
on equivalentes al P tl r s. y ademas los coen sentativo describe el arco s P de s a P ; ó si s6l
cien tes específicos serán idén'jcos para ambo se liene en euenta el valor numérico. el calOl
(salvas diferencias de órden superior), es decir. que pasaría del foco iuferior al cuerpo al descri­
para todos los punlos da sus perlmetros, áreas bir el mismo arco de P á s.
zona... inmediatas, puesto que en el punto P ui sta arco supone un incremento de volume
ellos coeficientes, tanto pertenecen á uno de lo in = rl v, y un incremento de presion m s=dp,
cuadrilAteros como al otro. I quedanuo la temperatura constante, toda vez que
¿\pliquemos, pues, á dicho cuadrilátero P h' s' r' I P S ~s \lna curva isot.erma; luego

fórmula ~ f~t) = o, y tenclrémos 1I.= c;rJl)+C;dp,

n P m = d v y 'In S = d p, no so
o, (11.>
ino que estan enlazadas por la ecua­
o;;- = {(I u
);

ea la que Q. representa la cantidad do calor qu dt dt

"'=o=-dp+--dv.
sale del foco superior y pasa al cuerpo en el arco dp dI'
r' Si, Y 00 la que del cuerpo pasa al foco inferior Despejando de esta última d v y sustituyendo
miélltras el punto representativo describe P s. en Q•. resultará
Ademas. t. Y ( SO/1 las temperaturas de ambo"
focos. cP~ •dt
il I! dp -C ­
'Iv = p dI)
e la eOllauion anterinr se deducl:', corno siem­ di du.
pre. dp
Q.-, (".) ­ (t,,)
{(tJ Por otra parte, en la eC'.Jacion

Q., d t Qo di

ó bien A/=--=-­
·pdv dudp
t - (\" f' (to ) d J
o;;-=~. la diferencial d p es precisamente igual a l'" n,
y d t es el inr,remento de temperatllra al pasar del
Yrecordando qu punto P al tI, permaneciendo v constante I lu

;lIk
 TEHl\'lODINÁ 'lIüA.

:; no e oll'a cosa que la derivada parci I de 1 La ecuacion (1') ernllesll'a. por n r zona­
con relaClon II p, es decir, la misma ue aparece
l! iento análogo al del (N. 07), que: e; no son
en el denominador de Oo' las derivadas parciales duna fun iau de 1), v;
SusliLu ndo e"te viI' n el de t, tendré­ pero en cambio por la ecu cion (a) se v que di­
mas vididas por t adquieren esta propiedad que (tntes
no tenian.

AI =
.!!!..- - c'I'dv
el'"dp
dI
.!!.!.­
d v.
t
¡¡;; CiP
dI Aquí, como en el (l. (7) re p cto a e: y ;,

dp
podemos explicar perfe tamente e. t propIedad
de e: ,e; de no ser las derivadas de una funclOn
ó implificando
O (v, p); y en efecto, j lo fuesen, la cantid' d de
cP ~
dp
- e' .!!..!- = A I
l' dv
(2') ,a[or que habrla de pa.. l' de un ro o {¡ un euerpo
para que éste pasu,e de {v, p) ft (v+d ,V, p+d p)
ue la segunda enuacion fundamen al 'egulI s rla perfectamente determinada é ind pendi nte
Zeuner. del camino descrito por I punto representatilu.
76. Fvncio11 termodil/fímica. De las os ecua­ lo cual e evidentcm ule r· L-o, - aun hemo de­
iones mostrado.

.1')
77. Sustituyendo los alores de e: ye' edu­
ciJo:> de (b) en la ec aClOn (2'). tendrélfJ . la e ua­
ion de dil'eren iales parciales de primer Ó1'rleu
P~-I.·!!!..-=At· (2')
rdp I'dl! '

'c deduce multiplicando la primera por t. )' l' s­

tanda o ella la s "unda. en la ual se sustituirán 10- 'alore- de -!!.!.- y !..!.­
dI' d v
dC P d c,· deducida de f (p, v, t) = o, y que integrada no'
I-"-Cll~= 1_1'_ e di hará conocer la forma de !~ en funcion de p, .
dp "dp dv I'dv
Esta ecuacion es análoga á la inte"rada por
MI'. elapeyroll en su Memoria sobre la potencia
c~ c'¡ motriz del calor (Jou1'nal de tE ole polyteclltli­
d-'- d-'
I I que, callier 2:3. ""'; a1l1uJe 1844).
.4)
-dP =--¡¡¡;- Conocida que sea, nada más fácil que expre al'
todos los coeficientes especificas en funcion de <)J.
e
2 son las den vadas En efecto, de las fór nulas (b) educirn los
e donde se deduce I
valore de e fl de e l't' en ruuciun ue ,~. y de sus de­
parciale con relacion Ú v ~ p oe una funcion de ~

e las dos vuriahles, ú. la cual Ilamarémos 'f ri das, y demas hL ~ rInulas (1) (2) (3) (4)
AsI p dI' os escribir dan los "alores de e; , C~ , e' , e: en 'uncion :
y e; ; luego sustituyendo estos úlLin o , e:presa­
dI} c~ dI} c~ dos en valores de <);, ten réro lo d nichos. eis
¡¡;;= . -d-p = " <.b)
coeficien tes especlfic .
Esta funcion ~ e pl'ecis ente la funcion 1 Por este métod se lie l' serie de e~uacio-
adinámica cDrrrespondiente al i tema de 'alia­ nes, equivalentes ti las del apí tulo dnlerior, ue
hles p, , como'f lo era al pnmitivo ~istema v, r. contin acion eepresan.

X=C"=I
l'
~;
dp
 TERMODINÁMICA. 4.5
d<jJ
N=C"=C"_t_=1 -dP.
I Pdl dI'
dp dp

dI di d<jJ dI d.} dI

P = (. =
,1
r. - e diJ
.' P d<jJ
- = / -dp ­ dP
d<jJ
I -- -- = I
!iP'dii-dV'd/J = -
Al
_ .•
P P v dI dv d t dI dI'
dv dV (fu dii
dlJ¡
K=CP = cp_t__ I dii.
I "dl- di'
dV dV

A estas ecuaciones deben agregarse otras dos: Sin entrar en ddalles, para evitar repeticionvv,
Para determinal' O/, la ecuacion diferencial resolvamos estos tres problemas.
78. Coeficientes específicos. 1. v Permanecien­
d<jJ dI d~ dI
-.---·-=A· do t constante, las variaciones d f) Y d P son si­
dI> dp dp dI> '
multáneas; luego tanto da comunicar al cuerpo la
para determinar las derivadas de t con relacion cantidad de calor e:, d v cOtila la can tillad e; dp,
á v y p, asl : .
1= {(P. v). CId v=cldP.
l' P

Aqul, como en el (N. 70), basta conocer 'f y I Ó bien

fln funcion de p, v para expresar todos los coefi­ d = CI !!...!!- = e' _~_
cientes especificas en [uncion de estas dos varia­ l' Pdv l'dv
bies; y es evidente, como ya hemos dicho. que el dp

sistema anterior y el del (N. 70) se equivalen por en la cual se deducirá el valor :; de la ecuacion
completo: son dos métodos distintos en la forma,
pero absolutamente idénticos en el fondo. v = f (p, t), suponiendo en ella t constante.
77. Terceto sistema de variables independien­ 2.· El coeficiente e;
supone que v queda cons­
tes. Todo lo que hemos dicho para los dos siste­ tante y que t varia; pero de (v, p. t) se pasa á
mas anteriores de variables independientes (v, t) (v, p + d p, t + d t) de dos modos:
Y (p, ti), es aplicable al tercer sistema (1, p), que
es el que vamos rápidamente á considerar.
Primero. directamente: supone la cantidad de calor e: dI;
~'egundo, por dos cambios sucesivos:
Asi los cuatro coeficientes especificas
11 • p, I ) (11 + d v, p + d p, I )
cPv e"p' el'v' e"~l' ( v+dv,p+dp,1 y /J+dv-dv,p+dp,l+cll
1
para el primer cambio elemental se necesita la cantidad de
se expresan sencillamente en funcion de dos loro . . . . • . '" • . . . . . . . . . . . G~ d p;

e: ' e; relativos en sus indices subindices á lasy para el segundo. . . . . . . C¡ dI;

variables independientes del sistema, del mis­
mo modo que en el sistema (v, t) se expresaban y como los estados iniciales y finales son idénticos
t v en una y otra evolucion, resulta
en valores de el! ' e, las cuatro restantes, yen el
(p, v) se expresahan asi mismo en funcion de
V
Ct d 1= e'l' dp + e"t dI J

el' y cP los otros cuatro.

V ó bien
II

As! tambien los dos principios fundamentales cV-c'.!!.!!..+c p •

1 - "dI l'

de la Termodinámica, á saber, el de la lransfor­

macíon del calor y el del máximo rendimiento I se pero las diferenciales d p Y d t suponen v cons­
traducen en dos ecuaciones, que agregadas á las tante; luego
dv
cuatro anteriores, completan las seis que son ne­
dI> dv dp di
cesarias. IIv=o=- dp+-dl,
dp dI
de donde -
dI
= --d ;
v
Asl, por último. se deduce una tercera funcion dp
termodinámica. en funcian de la que se deducen
los seis coeficientes especificas. y sustituyendo este valor en el de e;
1

,IIC

 46 TERMODINÁMICA.
du
:; es la derivada parcial de v con relacion á t.
c"= c P
- C'~
I I P dv deducida de v:....... f (p, t).
ap 80. Ecuaciones fundamentales. Transforma­
3. ermaneciend v constante, las variac'o­ cion de T = J ~ Q. Dividiendo por J , sustituyen­
+,
0

nes el t, 1 P son simultánea. ; luego tanto da que do A = y tomando por cuadrilátero e)em~­
calculemos el calor necesario para que el c erpo
varie d t, como que calcule os el necesario para tal el P n P' m (03. J ), formado por dos curva
que la presion reciba el incremento ti p ; as! Fig.13.

el'I di = eP d p
I
de donde ~

c" - c".!!:..!...
' p - '1 dp'
,
Q -. ­ --
pero ti t Y ti P suponen d v = o, asi Q ·-._------
do p
av dv at dp o~-------v
dv=v=(j(dt+¡¡¡;d p, de donde --¡¡¡;=-¡¡¡;;
al
térmicas de segunda clase P n, P' m, y dos pa­
y sustituyendo en C; los valores de C~ y de :; ralelas al eje de las v, tendrémos
tendrémos A. área P n P' m = calor. arco n P + calor. urco P m - -calor.
arco m P' - calor. arco P' n.
~) ~
CP" =
( P I
c I - cp a IJ
dt

dP
x-
dP
dv
1/1
' demas,

área P n P' m = n pi X Q' Q = ~~ 111. d p.

Ó simpliflcancto
dv calor. arco n P = c'P ap;
c"=t.'-c
P p
P
!!...!!-,
dv I

at calor. arco P m = e; + dC~)

dp d P di;
(
4. 0 POI' úlLimo, determinemos C:. Al variar v
I
suponiendo p constante, varia t; luego d v, ti t dC )
calor.arcomP'= ( C'+-Pdl dp;
son imultáneas, y tend érnos, omo anterior­ P d t

mente
calor. arco P' n=C~ d t;

cP
c~ a v = c~ di. de donllc e: = --iJ.
y sustituyendo en la ecuacion precedente
dt

dv I dC~ dC'
A-dt.dp=C dP+C~dl+-ddp. dl-Cldp--Pdl.dp-CPdl.
di p. p P di I

ó simplificando

dC~ dC~ dv
---=A- (IU)
dp d t di de donde se deduce
Ésta es la primer ecuacion funJarr.ental en las QI-QO={C1t) - f{l.,) r (t.l d t
coordenarJas t, p. 1). f{lo) ({ to)

81. Tralls{ormacioll de 1: f~) = o. Considere­ Pero

mos el cuadrilátero infinitamente pequeño n P s r . . dv
formado por dos curvas térmicas de primera cla­ Q. - Q" = A area n P s r = A urea n P m p/= A dT di. dP.

se n r, P s; y otras dos de segunda, n P, r G. y además

Aplicando á este cuadl'ilátero la ecuacion ~ {~t5=o
resullat'á
 TERMODINÁMIOA. 47
luego sustituyenuo y suprimiendo el subindice o El valor de e"1) sustituido en (2") da la ecuacion
d 11
A 1 -di d t. d P = Q d t. dI.. dv
d/i=-A di ,
Pero observemos que si el punto generador re­
de la cual se deduce
corre el cuadrilátero como hemos supuesto en el
sentido" P s r, el trabajo desarrollado es negati­ dV
va; luego, en rigor, el primer miem bro debe ser
x=F¡ (I)-~
f d¡d p

negativo. y tendrémos, en la que F 1 (i) representa una funcion arbitraria,

dv pero idéntica para todos los cuerpos y para todos
I di. dp = Q
- A I -d . d t.
los estados; basta, pues, detem1inarla para los
Por último, Q es la cantidad de calor que pasa cuerpos gaseosos.
del foco inferior al cuerpo, miéntras el punto re­ En éstos se tiene p ti = R t, Yde aqul podré­
presentativo describe 11 P ; luego mas deducir las Jerivadas de v con relacion á
l p Yt.
Q =cp d P. Oe la primera de las ecuaciones (e) se deduce
y sustituyendo
1 dlJ c~ = I d'l.
Cpdp. di = -A I (Ji dp. dI. al'
ó bien Ysustituyendo por -tÚ sn valor
dZ
1 dv
el' =-A/-
dI
(2")

-dI..
d,
= ~'/ ¡ (1) - AIdtv
•
-., d p,
ti 1­
Tal es la segunda ecuacion fundamental en el
sistema (t, p). tendrémos
82. Funcion termodÚlámica. De las dos ecua­ d1 V
ciones (1") y (2") se deduce inmediatamente la C;=IF/I(')-A~. f dl~dp,
funcion termodiwimica. d2 V
MultIplicando (1") por t y agregando al resu1­ Ó poniendo por d " su valor, que es cero, segun se
tado (2"), tendréll10 deduce de la ecuacion v = ~,
p
hallarémos por fin
p
dC dd1
1 _ 1 _ 1 _'+(/=Q' C;=tF't(/),
dp di P •

pero esta ecuacion puede ponerse bajo la torma n cuya ecuacion d; no es el valor general Je este
p coeficiente, sino el que corresponde al estado ga­
dC1
t _ (dC'
1 _1' _ e' ) = v
d]J
_
di l'
seoso: representándolo por k tendrémo
2 Ji =1 F't (/)
ó dividiendo por t

d., dp
e"I
_
d.
---¡¡¡-
G
...!!..
I
= o,
ó bien
el F 1
di
(/) k
I

de donde
e donde

d. ~
CP
,
d.
eL
...!!..
I
1'1 (1) = ¡ 'kdl
-,- = Ji log. 1+ conslanlf'.

---¡¡¡;- = 1iI' Por consecuenoia, sustituyendo este valor de

F. en el de X.. é incluyendo la con~tanto en la in­
cp e'
tegral, resulta
Esta ecuacion prneba que -;- y -{- son las de­
rivadas parciales con relacion á t YP de una fun­ Z = k log, 1 - A
. r dl
dv
d p.
eian /.. de t, P que es la funcion termodinAmica J
relativa A las variables t, P consideradas como 83. Conocida la funcion x, ficil es determinar
independientes. todos los coeficientes específicos en valores de
Por lo tanto, dicha funciono Basta para cunseguirlo sustituir
e~ y e~ sacadas de las ecuaciones (e) en todas las
c~ dz. C' d.x
-,' = di' "-
-,- - ---"
df} (e).
ecuaciones del N. 78.
 48 TERMODINÁMICA.
----------
Asl obtendrémos, empleando las dos notacio­ guen constantemente, sean cuales fueren las va­
nes: riables, estos dos métodos.
dZ
Para deducir una ecuacion fundamental del
K=CP = / - " principio de la transformacion, se aplica dicho
I di'
principio á un cuadrilátero infinitamente pequeño.
dz
p=c'P = 1dp
-'; formado como vamos ¡\ explicar.
Tres son en todos los casos las variables de esta
dZ serie de prohlemas, á saber, p, v, t.
I dp
M=Cv='liV; Cu,uldo p queda constante y v. ( varían, el
dp puoto representativo describe una ¡Inca I ceta pa­
ralela al eje de las v: á todas lus paralela:- á este
eje les darémos el nomLre dp líneas de nivel
r'llativas á p, es decir, en las que JI es cons­
tante.
Cuando v queda invariable y ( ,1' cambian, el
dI! dl. dI! dl. dI!
pLtrlto representativo de:>crihe IIna recta paralela
l/z dz dp dp dI.-dldP.
,c· = /-' -/-' . - = l.::..!:.---==-...:-.,------.::..::... ni eje de las p . á todas las pnralelas ú este eje po­
P dp 01/ dv av'
di dt drémos dcjgnarlas con el nombre de líneas de ni­
vel relativas á v.
o1Z
Por último, cuando l permanece constante y
p al
y = c. = , -¡¡¡; ; varian vI, el punto representativo describe una
di linea térmica de segunda clase 11 P' (fig. i i);
pod rémos decir baj o este nuevo punto de vista
A estas ecuaciones dehernos unir la relacion ge­ que las line s térmicas de segunda clase son lineas
neral p v= R t. de nivel relativas á t.
84. RESI'MF.N. "." Sean cuales fueren las dos Las liueas de nivel de una clase sólo difieren en­
\ariables que se elijan como independientes, siem­ tre si por los valores de las constantes p, 'v, 1;
pre cuatro coeficiente- especll1cos pueden expre­ pero en todos los puntos de una misma linea de
sarse 130 funcion de lo.. otro' dos, y conviene ele­ nivel ¡J es la misma, ó lo es v, Ó finalmente es in­
gir para tos últin os lo en fIue entran como in­ variable ,.
dices y ::iUblndices las dos variables independien­ Comprendido e,to, podrémos establecer la si­
tes: asl cuando éstas son v y t, se expresan en guiente regla sencillísima, pero que no está en
fnncion de e:" e;
los otros cuatro coeliciente ; ninD'un tratado de Termodinamica, y no segura­
mente porque la ignorasen sus autores, que es so­
eua do la 'ariahle elcgidílS como independteu­
brado sencilla para ocultarse á la penel.racion de
tes son p y11. se xpresan en funcion de c;', e:
quienes tanto valen, sinu quizá porqlle desdeña­
los coeficientes restantes;

han descender á ciertos detalles.

por último, cuando son l r ¡J la variables inde­
pendientes, en fnnci n de C~, C~ se hallan los de­
mas coeficientes especlficos,
Los artificios empleados á este fin 5011 siempre
los mismos y "on de do clases: ó recordar 1)\1e
quedando constante IIna de las tre. varia les
p, v, l, las variacione- de las otra' ,los son simul­
táneas, lo cn I perm'te enlazar en una ecuacioll
dos coel1ci ntes específico:;, ó pasar por un l-sta­
do intermedio, enlazando de este modo tres coefi­
cientes,
_.0 Los dos principios fundamentales de la
Termodinámica son siempre, el de la transfor­
maci n del calor eu trabajo, Ó reclprocamló'nte, y
el de la igualdad de rendimiento. Ambos dan lu­
Kar á dos ecuaciones, y para determinarlas se si­
Sin b nbargo , para el que por primera vez es­
tudia esta materia, juzgamos que ti ne 'riln im­
portancia.
He aqul, pues, dicha regla.
Para traducir el primer princl}J/o fundamen­
tal (el de la tFati (urmacioll dellrabajo) en ecua­
cion, basla aplicar diclto rincipio Ú UII ,uadri­
lálero infinitamente pequeño, (ormndo por cuatro
líneas de nivel infinitamente próximas dos á dos,
y perteneciendo ambos pares de Nneas á las dos­
variables elegidas como l:rulepend ·enles.
.\8\ cnando las variables i ¡dependientes son f1
y " el cuadl'ilá.tero elegido es ) n P' 111 (fig. 11),
en el que n P y m P' son Ilneas de nivel relativas
á v; y n P' P m son I1neas de nivel relativas á t.
Cuando las variables son v y p , el cuadrilátero
 TERMODINÁMICA.
----
elegido es (Ilg. f 2), P 11< P' In, en el que n P y m P'
son lineas de nivel relativas á v, y n P' , P m son
asimismo lineas de nivel relativas á p.
Por último, cuando las variahles son { y p. el
cuadrilátero de que se parte es n P m P' formado
por dos lineas de nivel relativas á p, que son n P'
y m P, y otras dos relativas á t, n P y m P'.
Fácil seria explicar la razon de este artificio, que
simplifica notablemente los cálculos, pues no ha
de creerse que es el único medio de llegar á una
ecuacion entre los co~licientes especificos, y si
sólo el más sencillo.
Para deducir oel segundo prineipio (el del ren­
dimiento constante) \Ina ecuacion entre eyp, v, t,
se aplica dicho principio á un cuadrilátero elemen­
tal formado por curvas térmicas de primera y se­
gunda clase, que tenga ademas un vértice ó un
lado comun con el cuadrilátero empleado ante­
riormente y la misma área.
Diversos cfectot5 del eulor t50bru 10:-; cLlerpos.
ss. Cuando á un cuerpo se le comunica una
cantidad determinada de calor Q, este produce
diferentes efectos, que nos proponemos estudiar
detenidamente.
Oividamos á este I1n Q en elementos diferen­
ciales, y estudiemos la influencia de caoa uno de
ellos; d Q pOI' ejemplo.
En primer lugar, el volümen, la presion, y
por lo tanto la temperatura, varian.
Este camhio de volúmen y de presion trae con­
sigo un desarrollo de trabajo externo.
Al mismo tiempo la posicion relativa de las
moléculas que constituyen el cuerpo se altera,
dando origen á un determinado trahajo interno.
Las variaciones de temperatura suponen una
alteracion en el estado calorifico d81 cuerpo.
y por último, al cambiar de volúmen toda la
masa del CUerpl), adquiere ciert.a fuerza viva.
En resumen, toda 0antidad de calor inDnita­
mente pequeño d Q comunicada á un cuerpo, se
transforma en los efectos siguientes:
Una vartacion de calor prcclil'o..
Un trabajo externo.. . . .
Un trabajo interno Ó molecular.
iert.:J fue: 7.a "iva de la totalidad de la masa.
¡lit
49
Así los cuad riláteros empleados en las figuras
f 1 J f 2 Y f 3, son ti r s P' en la f.·, P s s' r' en
la 2.· . y n PSI' en la última.
3." De las dos ecuaciones fundamentales se de­
duce siempre una funcion termodinamica; á sa­
ber. 'f' cuando las variables son v y t; \ji cuando
son p, v; y l.. cuando son elegidas como tales
t y p.
Por último, todos los coeficientes especificas se
expresan en cada caso en valores de la funcjon
termodinámica y de las derivadas parciales de una
de las tres cantidades p, t', Ó t, con relacion á
las otras dos.
4.· A todas las ecuaciones precedentes es pre­
ciso unir f (p, v, t) = o, la cual dependenl del
estado particular del cuerpo J y será distinta, se­
gun se trate de sólidos, liquidas ó gases; pero los
principios deducidos, miéntras no se particulari­
ce f, son completamente generales.
CAPITULO Y.
y corno e:.to se verifica para cada elemento de
calor d Q, claro es que la misma division se veri­
ficará para la cantidad total de calor Q.
Pollemos traducir este principio en eClJacion
reduciéndolo todo á calorias; d JI ya está medi­
do en esta clase de unidades, pero d T, dI,
Y ~ d F, que son Ó trahajos ó fuerzas vivas, será
preciso Il1ultipli0arlas por A, número de calarlas
que corresponden á un kilográmetro. Tendrémos,
pues,
1
dQ=dH+Adl+AdT+~AdF (1).
Pero ocurre estll pregunta: ¡, dado d Q, quedan
det.erminadas las diferentes partes del segundo
miernhl"') No : Sil suma es constante é igual á d Q,
pero ni en la ecuacion ("1) se pueden determinar,
ni quedan determinadas tampoco. porque al dar
á un cuerpo la cant.idad de calor el Q, la distribu­
cion de este en los diferentes efectos señalados
depende de otras circunstancias. Miéntras sólo se
d H. conozca d Q, el prohlema es esencialmente inde­
d T, terminado.
di.
Para resolverlo es preciso conocer la ley segun
L2 dF .
la cual varian las {lresiones ó los volúmenes, ó bien
--­
 50 TERl\IODI T.' ?InCA.
alguna otra condicion equivalente. Tal es el punto
que en este capitulo debemos dilucidar.
86. Observemos ante todo que, dado el volú­
men y dada la temperatura de un cuerpo ú otros
dos valores de las tres indeterminadas p, t', t, su
estado calorlfico queda fijo, y que por lo tanto II
debe ser funcion de v, l. Así, al pasar el cuerpo
del estado (v o , to) al (VI' t.), su calor efectivo H
recibira un incremento
y nótese que importa poco el camino, por de­
eirlo asl , que el cuer'po haya seguido para pasar
de (v o , (o) á (Vi, tI), Ó lo que es lo mismo, la se­
rie de estados pOI' que haya tenido qne pasar. El
incremento de calor efectivo sólo depende de
los estados extremos, no de los estados interme­
dios.
Así, el calor efectivo H en cualquier estado
será
ó en general,
H-{(v,l).
87. Todo lo que respecto á 8 hemos dicho,
pudiéramos repetir respecto á ), cantidad de ca­
lor que se emplea en producir efectos molecula­
res.
A cada volúmen y á cada temperatura corres­
ponde un estado molecular en el cuerpo; luego la
diferencia de estos estados moleculares, la canti­
dad de trabajo necesaria para originar esta rlife­
encia, y por lo tanto, la cantidad de calor, sólo
puede depender de dichos estados extremos. Por
lo tanto,
en cuya ecuacion 11 -1 0 representa el incremento
de trabajo interno.
Representando por 1 la cantidad de tl'abajo
total á partir de un estado cualquiera, tendrémos :
88. A veces se agrupan H é J, Yrepresentan­
do la suma por T, telld rémos :
U=H+AI,
y por lo tanto,
U=,~(v.l).
OOSERVACIONES. 1.' A esta cantidad U se le da
comunmente el nombre de calor disponible, por­
que, en efecto. por volu ione" del cuerpo puede
convertirse en parte ó en totalid d en trabajo me­
cánico.
2.' Expresando los incrementos de c lo efec­
tivo y de calor molecular por VI - 110 Y por
JI - lo, suponemos una existencia real á estas
dos cantidades U él, es decir un calor efectivo
para cada estado del cuerpo, y una cantidad. de­
terminarla tambien, de ca or' moleculül'. IJé aqui
cómo pllede comprenderse e~lo. Serú preciso ante
todo elegir /In estado del cuerpo (Rol como punto
de partidil, y desde él med i l' los calores efectivos
y moleculares necesrrri,)s para pasar á otros esta­
dos. De suerte que U designa á el calor necesa­
rio para pasar del estado (R,,) á otro estado cual­
quiera. De modo que para pasar de Eo á dos es­
tados (v o • (J y (v, • '1), tendrémos:
y si quisiéra os pasar de (v o • IJ á (v,. l.). ~eria,
como hemos visto preeedenternente.
89. He:mltu de lo dicho, qlle d H Y A dI son
diferenciales totales de v, t, Yque, por lo tanto,
se tendrá.
dH clll
dH=-dv-f--dl; Adl:.", (dI
- d v +d
-d il)
dv dI dv dI
¿ pero podrémos expresar del mismo modo A d T?
Esta cuesLion en rigor, ya ha sido resuelta:
la cantidad de trabajo que 1cuerp desarrolla en
sus evoluciones pUI'a pasar de (v o , l.) á. tI),el,
no sólo depende de los estados extremos, sino de
la ley intermedia de ariucion, ó lo que es lo mis­
mo, de la curva descrita por el punto represen­
tativo.
f
A dI es de la forma A P d v, y esta expre­
sion no puede integrarse ¡éntras no conozcamos
p en funcion de 'v,
90. Por último, el término +
A el F e des­
preciable, porque las riaciones oel cuerpo son
bastante lentas para poder prescindir de la fuerza
viva correspondiente.
De aqui se deduce que podrémos rescindir de
este término la mayor parte de las veces, y la
ecuacion (1) se reducirá á esta otra:
el Q = el H + A el 1+ A el T (4).
Subemos ya cómo se expresa d T en funcíon
 TERMüDINÁMI 51
de v y t, Ycómo se hulla su vulor siempre que ' En esta expresion se tiene
entre estas dos variables existe una relucion co­
dT=pdIJ.
nacida: veamos abara eómo se determinan las
luego
funciones de v, t que dan los valores de H y de 1.
dH+ A clJ= d U = C~ dv +c; dI-A pdll.
91. Tomemos t' y t por variables independien­
tes; pero es claro que en nada variaria la esencia
Tenemos, pues, expresada la cantidad de ca­
del método que vamos á exponer si tomásemos
lor disponible en funcion de los coeficientes espe­
como tales variables las de otro cualquier grupo: cificas.
v, p ó t, p. Pero éstos estan expresados en funcion de la
Cuando se comunica á un cuerpo la cantidad
funcion termodinámica; luego nada más fácil que
de calor d Q y se prescinde de la fuerza viva de la
transformar la expresion precedente.
masa total, esta cantidad de calor se divide en
Sustituyendo en
tres partes, como ya hemos dicho: una que se
convierte en calor efectivo d n, otra que ejecuta d Q = c~ d 11+ c; dI
cierto trabajo molecular, otra que ejecuta el tra­
bajo externo. por C~ y C; sus valores t ~: ' t ~~ tendrémos
La apariencia de todos estos fenómenos es que
el cuerpo pasa del volúmen v al v d v de la + J da;
d Q = t ( --'- d v + -
d'l')
+
presion p á ]J d p, de la temperatura t á la dv tl t
dI

t + d t. Pero el ca) 01' necesario para que el cuer­ I ó bien

po pase de (p, v, t) á (p+dp, v+d v, t+d t) dQ=ld'l'
es
c~ d v +c~ d t. representando por d lf la diferencial total de la
funcion termodinámica.
En efecto, puesto que 'V, t son las variables in­ Resulta, pues,
dependientes, se puede suponer que para pasar
del primer estado al segundo, t permanece inva­ d H + A dI = d U = t d 'f - Ad v;
riable, y sólo v varia, recibiendo el inc.remento
definitivo tI v, para lo cual se necesita la cantidad pero se sabe (N. 69) que
de calor d P
r.~ d v. 'l'=clog.I+A
/
litdv,

y despues que, quedando v con su nuevo valor en la que c representa la capacidad calorífica ab­
v+ d v, varia t hasta adquirir el incremento d t, soluta es decir, la cantidad de calor necesaria
J

para cuyo efecto se necesitará la cantidad de calor para que en un gas perfecto y á volúmen constan­
te la temperatura aumente un grado, y advirtien­
c; (v + el v, 1) dI = (C: dC.)
+ el ~ d 11 dI
do que en la in tegral está incluida una constante.
Sustituyendo en el último valor de d U este de
ó despreciando infinitamente pequeños de segun­ d <p, tendrémos :
do órden
e: d l.
dH+A d I=d U=I d [e log. I+A J~~ d VJ-APdV.

Tcndrémos, pues, sustituyendo este valor de d O La diferencial es total y se refiere por lo tanto
en la ecuacion (4)
á las do:; variables v y t; Yademas : ~ es una fun­
c~ d v + r.: d t = d H + A dI + A d T. cion de -v, t; teniendo esto presente hallarémos,
i tlp
dH+Adl=dU=1 [ cTdl+Alitdv+A J tl'p
dI' dI dI! ] -Apdv;

ó bien
dll+AdI=rJU=cdl-t AldTdv+AIJI
dp f dip
dI' dV-Apdv.

Esta ecuacion podrémos escribirla bajo la nueva forma

¡l( ­
 52 TERMODINÁMICA.

dP)
dlJ=cdt+A ( '(jt-P dV+A.
f( t tflp dp dP) dv.dt,
d,.-(Jj+di

refiriéndose siempre la integral A ti; Ó de este otro modo,

( dP)
dU=cdt+A ' / i t - P dll+A. r (1 .'!.!!-_p)
d
dI
dI dll. dt

y tambien

La cantidad que está entre paréntesis, es la diferencial total de./ (t :~ - d ti, tomada p)
con relacion á ti Yl, Yadvirtiendo que esta última integral se refiere á 'v.
Jntegrando el vlllor de d U entre dos eslados (Po, vo' lo) y (p, ti, t) del cuerpo, lennrémos:

A.I.. (t :~ - p)
p

(H - Hu) + A (1 -lo) =U- Uo = e (1 -lo) + d 1I (IS) •

En esta última integral, que se refiere á v, debe y de aqui se lieduce inmediatamente el valor de
ponerse despues de integrada simultáneamente 1-10 ,
(p, ti, l) para el limite superior, (Po' lI u' lo) para En efecto, sustituyendo en la ecuacion (5) el
el inferior. valor (6), tendrémos
Claro es, por lo demas, que no podrá integrar­
se miéntras no se conozca p en funcion de v, ú (t liT
otra relacion cualquiera entre las tres variables
1 -lo =.
D.
I v dp
- P d
)
11 (7).

que combinada con f (p, ti, 1) =, o, determine

el valor de p en valores de ·v. OBSF.RVAr.lOiSF.S. La Pudiéramos demostrar la
Tenemos ya expresado en la fórmula (5) todo ecuaeion
el calor disponible en funcion de p, ti, l; sólo nos H - 11 0 = e (1- t o)
resta separar las dos partes; él saber: H - Ho é
directamente sustituyendo en las ecuaciones fun­
I-Jo '
damentales á la variable l la variable H, pero lo
92. Hemos dicho que e representa el calor es­
creemos inútil por ser bastante clara la demostra­
pecífico absoluto, es decir, la cantidad de calor
cion anterior. Sin embaro-o, el que desee ampliar
necesaria para elevar la temperatura de cualquier
este punto, puede consultar la Termodinámica de
cuerpo reducido al estado de gas un grado, per­
Saint-Robert, página 87.
maneciendo constante su volúmen. O de otro mo­
2.' En el N. 69 hemos visto que
do, el valor de C: para los gases perfectos.
Pero en este último caso todo el calor c se con­ ·
e, = e + A t. Jd'Pd t' d 11;
vierte en calor efectivo, puesto que ni puede con­
vertirse en trabajo externo, toda vez que el \"olú­ es decir, que el coencien te específico de un cuer­
men no varía, ni en trabajo interno porque el po clJYo volúmen permanece constante miéntras
cuerpo se halla en estado gaseoso. Ahora bien; i varia la temperatura, ó sea lo que generalmente
suponemos que la misma cantidad de calor em­ se llama capacidad calorifica á volúmen constante,
pleada en calor efectivo se traduce en la misma se compone de dos partes: una c, que es el valor
temperatura, es evidente que sea cual fuere el es­ de dicha capacidad cuando el cuerpo se halla en
tado del cuerpo para pasar de to A t, necesitará estado gaseoso, y adernas un término
convertir en calor efectivo una cantidad de calor
d'P
e (t -tolo De aqui resulta que la cantidad de ca':'
101' que en todo caso se convertirá en calor efecti­
At • f d ti d 11

vo será que expresa la diferencia entre ambos coeficien­

H-Ho=c (1-/ 0 ) (6), tes C; y c.
 TERMODINÁMICA. 53

Pero, ¿en qué puede consistir esta diferencia? coeficiente especifico aparente C~ y el verdade­
¿por qué se ha de necesitar ml1s calor para elevar ro k.
un grado la temperatura de un cuerpo il volúmen 93. En resúmen, tenemos para los t1iferentes
constante cuando es sólido ó liquido que cuando términos en que se descompone 0- 00 , ó cual­
es gaseoso? Evidentemente, porque no todo el quier incremento de calor,
calor que se le da se convierte en calor efectivo
sensible al termómetro; porque una parte de di­ 8-0 0 =e(I-I.) '" (6);
cho calor se emplea en algun otro efecto, y este
efecto dehe ser el relativo al trabajo molecular.
Es decir, que cuando el cnerpo permanece con 1-10= fV(:~ _p) dv.... (7);
v.
el mismo volúmen, el trabajo molecular aumenta
en el coeficiente especifico la cantidad
T-T o =. ( " pdv. . . . . . . • (8).

d!P v,
Al.
f d l~ d /l.

Entre las integrales (7) y (8) hay una diferen­

3. o Hemos visto (N. 82) que la funcion termo­ cia: la (7) dehe obtenerse sustituyendo por p y
dinilmica Xtiene pOI' valor ~~ sus valores en v, '. y efecluando la integra­
dV cion corno si t fuese constante. La (8) no pued~
X =- k log. 1 - A
I dl d P + consl3nle.
verificarse miélltras no se sustituya por p su valor
en funcion de v.
y que ademas
E!'to.s ecuaciones nos determinan, al pasar un
dX' = t -
r,P = 1 - (k1 - A• fdtv)
-- d P
cnerpo del esrado (P., v o , 'o) al (p, v, t) Ycono­
I di d li ciendo la serie intermedia, qué cantidad de calor
ó bien se emplea en elevar la temperatura, cuál en el
trabajo molecular, y qué otra porcion se convier­
dtU
C~=k-At
J dl~ dp. te en trabajo mecé.nico. La suma de estas tres can­
tidades mide y expresa el calor necesario para pa­
c~ es la capacidad calorlfica á presic.n constante sar de uno á otro estado, es decir, Q- O•.
Aquí pueden ya presentarse varios problemas:
en un cuerpo cualquiera y en cualquier estado, y
k es esta misma capacidad para los gases. Pero
examinemos algunos.
94. PRIMER I'ROOLEMA. Un cuerpo parte del es­
en los gases, todo el calor se emplea, ó en alte­
tado (v o , p., t o)' Ysigue su punto representativo
rar la temperatura, 6 en ejecutar cierto trabajo
exterior, al paso que en los sólidos ó liquidas en­ la linea p = Cf (v) : ademas recibe la cantidad de
tra como nuevo elemento el trabajo interior: el calor A O.
Se pregunta cuill será su estado final, y cómo
término
se habril dividido el calor A O en calor efectivo,
_Atld~V efectos moleclUlares y trabajo externo.
• dl~dp
Sólueion. Eviden lemente tend rémos, llaman­
expresa la diferencia, por decirlo as!, entre el do (PI' VI' ti) al estado final,

J.Q=e(l-lo)+A,rVI(t :~ -P)dV+A.rv'pdV (a);

v. ,!.
adema,;, ademas, PI , v" t" satisfacen A las ecuaciones
p={(v,I) (b) (6), (e) luego;
y p,={(V,. ',) (b')
p= <;>(v) (e).

Sustituyendo estos valores en A O, podrémos .

P, =" (vd (c').

efectuar ambas integrales, y resultará, por lo Las ecuaciones (a') (6') (e') determinarán los
tanto. valores finales p" v" t" Y ya seril filcil deducir
AQ = F (PI. V" '1' Po, va. '0) (a'); H-Ho ' 1-10 , T-T o '
s

-~--~ -- -""-~
.. ~
1._ ¡jI , jllll,
._-,
 54
SEGUNIl PRonLE. ,Conociendo el estado inicial
de un cuerpo (Po' vo' to)' Yla ley que enlaza el
calor co unicado con el "olúmen re. pectÍ\o, es
decir, ~ = 'll (11), determinar ué cantidad de ca­ I
lor haLrá recihido al llegar el volúmen á VI , cuá­ ,
ademas
p, = {(VI' t,).
Si conociémmos p en funcion de v, esto pro­
Llema sería. análogo al anterior, pllc~to que nos
serian conocidas en amhas ecuaciones todas las
cantid' ele: que entran, ménos ¡JI y ti; pero corno
ignorarnos cuál erá la funcion
'1' (u) - 'l' (u o )= e
Sn:tiluyendo en taJa la ecu cíon Iliéuos en la
última integTaI, en vez de t, su valor dedUCido de
p={(v 1),
resultará
). (JI, IJ) = Aj"'P du;
v,
y diferenciando por rel cion á v, Y como siendo
p funcion .le esta variahle, tendrémos
d), dp d),
- --+-----= Ap
dv
d l' dV
que lutegrad nos dan' la expresiolJ de p
!I= i' (v),
con la que el problema a tual enlra en el ante­
rior.
F"cil erla ya mnltiplicar lo: !'jernplos, pero lo
creemos inútil.
u Seguu dijimo: "nt " la primera integral se
9 Si tln la: tres eenaciones (6) (7) (8) toma­
•
mos como C,' Uf o inicial el qne corresponde á la
temperatura nI/In el calor' e~ cli\o el" n JI tarn­
bien. y tendrérn Hu -= (1: el est'¡ lJipóle 'is
r- lo repr .' Iltal'<l la calltíJad de trahajo occc­
'urio para \ r i i ',r f¡do'> lo earuhir.: Illnle nli­
res ({ue COff'l'spolldan al paso df'1 cuerpo dd esta­
do E Cf;rre: 11111di nte ;'1 t = o al ,tado Eo • Es
'o
decir. que tl J nI) tienen ai j' d, JIleDI i~lJifi­
ca 'ion I",llna, á Tmlnn. ljuP. no se rE' lerao Hlnhns
·:t;¡do~ ;. ¡'Iro di. tilllo P.' como Ir I nlino de com­
p:mlciol1 , l n el! 'o caso 1 é 1" ,'Ignillc' pín traba­
jos m,jleculares al pas<u' ue E' ir • y de E' tl F.".
I)! r tlioto podemos decir a 'a T.
Para:i1 'ficur leple"entar m s por 1 y T la
TERMODINÁMICA.
les serán los va'ores de t y p, y cómo habrá dis­
tribuido dich. cantidad de calor.
Soluciono En la ecuacion general (a) deherémo.
poner por ~ O su valor Ol-Ou = '1" (v l)- 'JI' (v o )'
y resultar~L
(a"),
e; lo (Jrimt)ro delel'lninar btu,
Claro es que hahr~ de dderminarse pOI' la con­
dicinn de ljue I>ustiluida en el i>cgnndll miembro
de la eeuacion (a") dé precisamente para .1 Q la
ky qlle lIIarca la funcio:l \l", Ilás claro, y re­
l:re:;entarrdo pOI V \lna variahle
(I--t u ) .-,­ . •[''(t ~ i - p) d u-+-. fb pdu.
V. ll ..
diferen¡;i J -1" Y T - To , y llamando Val vo­
lumen del cuerpo cuando t = o, ltallarémos estas
tres uenlS ecuaciones:
11 = e t;
1=. / '''('-¡¡¡-p
dI' ) (Iu;
\'
T =. / '" pdu.
v
H, J, 'f repl'esent. rll'espectivamente. rr, calor
necesario para pasar Je (t = o; p = o,. 'v = V) á.
(t = t; P = p"v = v). y qne se convierte total­
mente en calor efectivo: r, trabajo molecular qu
se desarrolla en un cuerpo ni pasar del mi, o es­
tado (t=o; p=o; IJ=V) á (I=t; p=p_; v=v);
T , trabajo exterior qu :e desarrolla en e ta seri
de cambios.
efectna ~ oniend.- (con auto; la segunda, sns­
tituyendo fl = -;, (v)
96. Para la aplic¡wi 11 inmediata de las tres
f'órUIIlla . ant lio 'p., ~nc/lulra .1OS una dificultaJ:
I
i, ¡;uúl es 1'1 \ 1,,( V del rolúlIleli á cero O'mdos ab­
sollll¡:; ?
I Pan e: ti diMla ('amhiarer os la varialJle, de
~lIerte que eu lo límites, en vez ¡jel volúrnen en­
I lre la pIe iou. por un en I ero' soluto la pre­
fi¡OU 1',' CID ta l!lien,
T ¡lilUdo III \ul'iablc, Ind endienles l y ]J,
funcio 1 tCI'ml)¡lin(uniUtl o (:'l 2
dI'
·,=/;I(I~.,'-.\
l.
J -llp
dI
 TERMüD INAl\ItCA. 55

cuya integl'al se determina considerando á t como siendo d x. una diferencial total.

constante en ~ ~ despues de deducir esta deriva­ Pero del valor de X. se deduce
da parcial de la ecuacion general f (p, v, t) =0. di
d"=k--11
.fd!1! dv
-dp.dl-A-dp
Para pasar un cuerpo de (t, p) á (t +dt, fJ+dp) 'o I d I~ dt •
necesita absorber la cantidad ue calor
de donde
dQ= C~dp-+ c~ d I
d2V dv
d Q = 1 d Z = k dI - A 1d 1_ j d ti d p - A I di d P.
ó sustituyendo por los coeficientes especlficos sus
valores (N. 83) y por lo tanlo

cl=t!!Z.
p dp'
CP=I dI..
1 dI'
d l'= /. dl-ÁI dI
.
¡ 'd'/}
d I~
áv
- d p - A 1-- dp-Apdv.
di

dQ=I[d Z dp-+d"l.. di] =Idr.

Del mismo modo que en el (N. 91) el segundo
dp dI' miembro Bueue ponerse bajo la forma

d2 V dv ]
d U = /; d t _o A 1I (p (1) ­ [ A t d t• [ --. d p -+ A 1 - - d p - ,\ l' d fJ
d t· dt

Ó bien

dU=kdt-Adep,v)- [
d. A,f(, :¡
d
t
-11) dP
dI-+-
d.Af(1 ~~ -V) dp ]
d
,p
dp

y representando por d la diferencial lolal, es de­ En cuanto al trabajo exterior. es siempre

cir. respecto (¡, t Yp.
-dU=kdl-Adep,v)-\d.
- -f(I ddvI - v) T T,,=.fv pdv.
dp (d). v..

01' olra parte lenemos (N. 9J), pero si se quiere tomar por variable independien­
te p. basta inlegrar por partes. y tendrémos.
~
d U = e di 4- ,\ -f(I lit
d,. dp - P) d 11,

ó segun el (~. 92).

- T.. = ep v - Po v.)--. ¡ 'P
11 d p,
P.
dU=cdl-+AdI, que se reduce. PUIIl('l1do del cero absuluto H
luego comparando este valor con el (d) resultará
¡
J
'P
T= ¡, V - . /1 ti l'
,.dl=ek-c)dl-Ad(pll)-Ad
.
- --f( 1dp
- - 1 1 ) dJ!,
tI/.
o

Las tres fól'llllJlu

de donde
H =cl
dI = -,\-
k-¡; ,11 -del), 1') - -J(
d dlJ -
I dí' v) d T¡ .
l.'--u
I=-A- f - pv -
fP( tdi-u
dI) ) d/l,
integrando
(í l.llllre dos estados cualesquiera E y o

E",
T '~rIL'- ¡ II
111/ p

j '''(
1.- e
1-- 1,,=-\- ((
0

1,,) - JI v 4- /l u 11" - IIp

1 (ii - )
ti ti Ji

P.
~usliluYCIl Ú las d·~l \ 95. Yen éstas ha desapa­
por último. si se toma el cero absuluto por PUlllo tecido lo lJO intleterminacion
e part.ida. p" = o _y J'I~sullará úl')gal1ellle fl otra üll,'~rvacion que hicimos
al1yerliréruo" .
=k-e f!'( 'Ii/-II
dv ) dI'. ' (t'!!'!!- - V)dP
P
--t-pv-
o
j .. Para d'ertual la iul(llf'aI
o
o
I (JI
 ....l:.tJl;1oJJL,ODIN ICA.

8C deducir ~: de la ecuacioD v=f t,p) 98. lnlerpretacion de 101 van'ol 'fectos del
calor segun la teoria del mOf1imienlo. Nada más
I rar en el coeficiente (1 :~ - v) á la fAcil que interpretar segun la teorla del movimien­
e I como constante. to, los varios efectos de una cantidad AO de ca­
lor, comunicada á un cuerpo.
.• Oue en la inlegral fP v d 1), es necesario En primer lugar, A O no es otra cosa sino
o
cierta cantidad de fuerza viva, y ésta se va á di­
liu v-",(p). vidir en otras vá.rias, ó lo que es lo mismo, en
7. D6Iagregacion de los cuerpos. La suma
trabajos mecánicos equivalen les, pOl'que toda fuer­
e I cantidades de calor empleadas en el trabajo za viva es igual fJ. cierta cantidad de trabajo.
in! ri r y exterior, es igual á
El calor efectif10 H no es otra cosa que la parte
ti"
tlQ-tlH=At/il"'1+Utl'.
ftl'p
tlt1 tllJ.
de fuerza viva de A Q que pasa á las moléculas ó
Atomos del cuerpo, y quizá al éter intermolecular.
e d nde En una palabra, 11 es lo que aumenta la fuerza
tlQ-d H tlp f~P
viva de los átomos: expresa en cierto modo la
~...,.-";" = A -ti dv+A ti, -ti' dv. aeeleracion de su movimiento.
I , .'
El trabajo interno A 1 representa la parte de
• tlQ-tlH " fuerza viva de A Q, que se convierte en trabajo,
uOOleote I se le da el nombre ues­
y separa y aleja las moléculas venciendo sus atrac­
ion d cuerpo, y designándolo por d Z,
ciones reciprocas.
mos A T es la parte de A Q que se convierte en tra­
u= ~~ dlJ+Atll r~; dv = A;¡ r:~ d 11, bajo externo.
y por último, } A F, es la conversion de una
onde
parte de la fuerza viva A Q, en fuerza viva de toda
la masa del cuerpo.
QOmo La ecuacion
.1Q=II+AI+.\'I'+ ~ 11.10',

mos por último la relacion notable no es má.s que una identidad entre fuel'zas vivas
~ = e log. '+Z. bajo una ú otra forma.