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LA DIFERENCIA ENTRE EL TRIGO Y LA CIZAÑA

El trigo y la cizaña siempre estuvieron presentes entre aquellos que se


dicen de Dios. Pero, ¿cómo identificarlos si son tan parecidos? En un
campo que se extiende por todo el mundo, en el cual encontramos
frecuentadores, miembros, obreros, pastores y obispos, ¿quién es quién?

Mateo 13:24-52

Parábola del trigo y la cizaña


24
Les refirió otra parábola, diciendo: El reino de los cielos es semejante a
un hombre que sembró buena semilla en su campo;

pero mientras dormían los hombres, vino su enemigo y sembró cizaña


25

entre el trigo, y se fue.


26
Y cuando salió la hierba y dio fruto, entonces apareció también la
cizaña.
27
Vinieron entonces los siervos del padre de familia y le dijeron: Señor,
¿no sembraste buena semilla en tu campo? ¿De dónde, pues, tiene
cizaña?

El les dijo: Un enemigo ha hecho esto. Y los siervos le dijeron:


28

¿Quieres, pues, que vayamos y la arranquemos?

El les dijo: No, no sea que al arrancar la cizaña, arranquéis también


29

con ella el trigo.


30
Dejad crecer juntamente lo uno y lo otro hasta la siega; y al tiempo de
la siega yo diré a los segadores: Recoged primero la cizaña, y atadla en
manojos para quemarla; pero recoged el trigo en mi granero.
Cuando Jesús explicó esa parábola fue muy claro al decir que el enemigo es quien siembra la cizaña,
pero Sus ángeles son quienes recogerán la cosecha y los justos resplandecerán. ¡Este año
resplandecerás! No importa si tienes enemigos, no hay buen superhéroe sin enemigo, pero la
promesa es que será Dios quien hará justicia.

Síntomas de la cizaña
1- Una de las características más comunes de la cizaña es la hipocresía,
ella no es verdadera, no es auténtica, las palabras que salen de su boca no
corresponden a lo que está en el corazón.

“Así también vosotros por fuera, a la verdad, os mostráis justos a los


hombres, pero por dentro estáis llenos de hipocresía e iniquidad.” Mateo
23:28

2- Humildad: esa palabra no existe en el diccionario de la cizaña. Observe


que si usted la sostiene en una de sus manos, la cizaña es erguida, porque
no hay fruto dentro de ella que pese y la haga curvarse. La cizaña siempre
se considera mejor que los otros, nada de lo que los otros hacen tiene valor.
La cizaña tiene mirar altivo, o sea, está siempre mirando a los otros de
arriba a abajo, el orgullo le es peculiar. Vea la situación del fariseo y el
publicano. Lucas 18:9-14

Es impactante ver que Dios nos pide que dejemos que el trigo y la cizaña crezcan juntos porque será
Él quien segará. La cizaña está hueca en sí misma, tiene una semilla negra que envenena. Parece
trigo, pero no lo es, porque solo el trigo se doblega con el peso del fruto que brinda cuando ya está
lista para la siega. Al contrario, la cizaña siempre se mantiene erguida.
Los que llevamos fruto sabemos humillarnos delante del Señor.

3- Es muy común que la cizaña haga de todo para perjudicar al trigo, al


punto de torturarlo con calumnias y difamaciones, intentando destruirlo, pero
siempre de una forma furtiva y camuflada, mostrándose serena por fuera,
pero venenosa por dentro. Como ejemplo está Judas, que durante tres años
convivió con Jesús y los discípulos, y ninguno de ellos, excepto nuestro
Señor, por supuesto, notó su verdadera identidad de traidor e hipócrita.

Frutos del Trigo


1- Por su parte el trigo tiene como característica distintiva su
autenticidad. Él es verdadero, sincero, de una sola palabra, “sí sí, no
no”, su vida es un libro abierto, pues él es transparente en todo.
Después de todo, el Espíritu de Dios es Quien habita en él, su luz
brilla de tal modo delante de los hombres, que glorifica al Padre
celestial en sus actitudes y hasta ilumina a quien está a su
alrededor. Mateo 5:14-16

Muchos nos cuestionamos si lo que estamos haciendo vale la pena, si funciona el esfuerzo. Durante
el huracán hubo tres momentos cuando realmente lloré, cuando pensé en renunciar. He visto
personas irse, gente en quien sembré y a quien amé. Pero Dios siempre tiene un contraste para tus
momentos difíciles y supo cómo consolarnos.
Para que la cizaña no te sorprenda en la cosecha, mantente atento. A veces descuidamos a la familia
y recibimos sorpresas. De repente, alguien siembra una mala semilla. Definitivamente la cosecha es
maravillosa y grande, pero debes estar alerta porque el enemigo desea sembrar malas semillas. Una
mala conversación con la persona incorrecta puede ser lo único que necesitas para que se destruya
la cosecha que esperas de tus hijos, de tu matrimonio, de tu ministerio. Esposa, esposo, cuiden de su
cónyuge, padres, manténganse atentos a sus hijos, aunque ellos no quieran. Todo lo que la mala
semilla necesita es que uno se descuide. Lo que tenemos es tan valioso que no nos podemos
descuidar.

2- Los frutos del trigo hacen la diferencia entre él y la cizaña, y con el peso
de esos frutos, el trigo acaba curvándose.

Observe, cuantos más frutos del Espíritu Santo hay en el trigo, más
reconoce él la grandeza de Dios en su vida, disminuyéndose a cada día, él
se ve como un bisturí en las manos de un cirujano.

Note que en una cirugía exitosa, el paciente siempre dirige sus elogios al
médico cirujano y nunca al bisturí, o a la pinza, o a la tijera que él usó, ¿no
es verdad?

Entonces, el trigo reconoce que necesita estar siempre bien afilado y


esterilizado para ser usado por su Creador.
La primera profecía que Dios dio fue a Satanás al decirle que habría enemistad entre su simiente y
la de los hombres, pero que nosotros lo aplastaríamos. Dios profetizó cuál era el final de tu enemigo,
así que tranquilo. Cuando vengan los problemas, debes confiar en que has sembrado buena semilla.
Tal vez tus hijos ahora están confundidos, pero debes estar seguro de que has sembrado buena
semilla, así que la buena cosecha saldrá.
Génesis 3:15: Y pondré enemistad entre ti y la mujer, y entre tu simiente y la simiente suya; ésta te
herirá en la cabeza, y tú le herirás en el calcañar.

Asegúrate de que tu semilla es buena para que tu cosecha sea buena. Tu prosperidad viene, la
restauración para tu familia viene. La buena cosecha vendrá, aunque el enemigo intente sembrar
cizaña. Tranquilo, tu negocio dará fruto, tus hijos estarán bien. No arranques, no te desesperes, no
tomes decisiones arrebatadas, porque tu confianza debe estar en la buena semilla que has
sembrado. No sé por qué el templo se destruyó, solo sé que he sembrado buena semilla. En medio
del problema, confía en la buena semilla que has sembrado.

3- Como el Señor Jesús, el trigo fue, es y será perseguido, sea por los que
están afuera o adentro, pues él sigue firmemente las pisadas de su Señor,
el cual ya había previsto eso en Juan 15:18-21.

Volviendo a hablar de la cizaña, ella se muerde de envidia al ver los frutos


del trigo llenando los graneros de reino de nuestro Señor, y entonces se
transforma en un aliado del diablo para perseguir e intentar perjudicar al
trigo.

Le pido a Dios que te dé paz, a pesar de la cizaña. Dios se encargará de hacer justicia por ti, no
intentes hacer justicia por ti mismo. El enemigo te tiene miedo, sabe que, si te levantas, no te podrá
detener. Debes ser capaz de caminar con la cizaña a tu lado. Debes ser capaz de ver que tu enemigo
tiene mejor negocio que tú, que los que levantan confusión prosperan más rápido, porque al final,
tu semilla dará mejor fruto. Ahora las malas noticias no te harán correr, ahora estarás tranquilo. Si
se va alguien de la iglesia, tranquilo. Si hablan mal, tranquilo. Tus enemigos comerán de las migajas
que caen de tu mesa. No pienses en arrancar, cerrar, correr, huir. Si arrancas, no ciegas porque
revelas que confías más en tus fuerzas que en las promesas de Dios. ¡Confía en tu semilla!

Siembra buena semilla para estar confiado, porque es la que asegura tu buena cosecha a pesar de la
cizaña. Aplaza la decisión que tomarás motivado por tus emociones. El mundo ha hablado mal de ti,
te han defraudado, abandonado, pero debes tener confianza en que Dios te dará la victoria y te traerá
paz. Pídele: “Señor, muéstranos quién es realmente la cizaña”. No dejes ir a tu esposa, no dejes ir a
tu esposo, tu empresa, tus hijos por un error. Ten paz, busca sabiduría para no destruir tu cosecha
por arrancar la cizaña. Toda confusión desaparece ahora por el poder de la Palabra de Dios. El Señor
te dará fortaleza para tomar buenas decisiones, porque la buena semilla dará buena cosecha.

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