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RESISTENCIA TERMICA POR CONTACTO.

INTRODUCCIÓN.
Dentro del ámbito de estudio de la transferencia de calor, en un gran
número de aplicaciones es necesario estudiar el comportamiento térmico de la
unión mecánica de dos materiales.

Al poner dos sólidos en contacto, macroscópicamente se observa que en la


unión aparece una resistencia de flujo de calor. Este fenómeno se debe a que la
superficies no son perfectamente lisas: el área real de contacto es solo una
pequeña fracción del área aparente de contacto, produciéndose una constricción
de líneas de flujo de calor. La resistencia térmica se manifiesta como un salto
brusco de temperatura en la unión. Esto tiene gran importancia a la hora de
resolver problemas de transferencia de calor en los que es necesario predecir y
controlar la temperatura con gran precisión.

Podría por ejemplo ser el caso de las barras de combustible de un reactor


nuclear en las que un sobrecalentamiento puede ser crítico.

Al plantear las condiciones de contorno en el contacto entre materiales, no


sería correcto imponer la continuidad de temperatura en el mismo sino que habría
que considerar el efecto adicional de la resistencia térmica de contacto. También
va ser muy importante en aquellos dispositivos en los que el calor se transfiere
exclusivamente por conducción, como puede ser el caso de los sistemas que
disipan potencia instalados en vehículos espaciales, en los que la evacuación de
calor hasta el radiador se realiza por conducción.

Además el hecho de conocer con precisión como se transmite el calor entre


dos superficies en contacto, por ejemplo, es necesaria una resistencia térmica alta
en el almacenamiento de líquidos criogénicos, en el aislamiento de algunos
componentes de vehículos espaciales, en el aislamiento de baterías de alta
temperatura, etc. Sin embargo, la resistencia debe ser baja en reactores nucleares,
en turbinas de gas, en juntas estructurales de aeronaves sujetas a calentamiento
aerodinámico, en sistemas de evacuación de calor de componentes electrónicos,
en el montaje de aletas de cambiadores de calor, en radiadores espaciales, en
prótesis artificiales del cuerpo humano, en la fijación de sensores de temperatura
superficiales (termopares), etc.

La resistencia térmica de contacto va a ser, por tanto, un parámetro


fundamental a tener en cuenta en los procesos de diseño de ciertos sistemas,
como los anteriormente mencionados. Su determinación es una tarea muy
compleja y, a pesar de los esfuerzos que se han realizado abordando el problema
desde distintos puntos de vista, lamentablemente hasta ahora no se dispone de
una teoría que permita predecir satisfactoriamente su valor para los distintos tipos
de materiales ni se han obtenido correlaciones empíricas fiables a partir de los
análisis experimentales realizados.
Fig. RESISTENCIA DE CONTACTO

Fig. DIFERENCIA ENTRE CONTACTO IDEAL Y REAL

La resistencia térmica por contacto se puede determinar a partir de la


ecuación de Fourier al medir la caída de temperatura en la interface y al dividirla
entre el flujo de calor en condiciones estables.

El valor de la resistencia térmica por contacto depende de la aspereza de la


superficie y de las propiedades de los materiales, así como de la temperatura y de
la presión en la interface y del tipo de fluido atrapado en esta. La situación se
vuelve más compleja cuando las placas se sujetan por medio de pernos, tornillos o
remaches puestos que, en ese caso, la presión en la interface no es uniforme. En
ese caso la resistencia térmica por contacto también depende del espesor de la
placa, del radio del perno y del tamaño de la zona de contacto.

Se observa que la resistencia térmica por contacto disminuye al disminuir la


aspereza superficial y al aumentar la presión en la interface, como es de esperar.
la mayor parte de los valores de la resistencia térmica por contacto determinados
experimentalmente caen entre 0.000005 y 0.0005 m2°C/W (el rango
correspondiente de la conductancia térmica por contacto es 2000 a 200000
W/m2°C)

Cuando se analiza la transferencia de calor en un medio que consta de dos


o más capas, lo primero que se necesita saber es si la resistencia térmica por
contacto es significativa o no. Se puede responder esta pregunta al comparar las
magnitudes de la resistencia térmica de las capas con los valores típicos de las
resistencias por contacto

DEFINICIÓN DE CONDUCTANCIA DE CONTACTO.


Cuando dos diferentes superficies conductoras se ponen en contacto, se
presenta una resistencia adicional: la resistencia de contacto. Como las superficies
no son perfectamente pulidas, en medio de ellas siempre existirá una pequeña
capa de aire que provoca una caída de la temperatura adicional. Esa caída de
temperatura se representa, también como una nueva resistencia en el circuito
térmico.

Para cuantificar macroscópicamente esta resistencia se define el coeficiente


̅
ℎ𝑐 , denominado conductancia térmica de contacto. Para ello, se estudia el contacto
estacionario entre dos barras suficientemente largas como para que el flujo de
calor en sus extremos sea unidimensional, definiéndose ℎ̅𝑐 como el cociente entre
𝑄
el flujo de calor en los extremos ( ) y el salto de temperatura que se observaría en
𝐴
el plano de la unión al prolongar la distribución lineal de temperatura de la zona no
perturbada (lejos del contacto) hasta dicho plano de contacto ∆𝑇̅.

En la figura se ilustra cómo se mide este salto. Por tanto, matemáticamente


la conductancia de contacto de expresa como:

𝑄
ℎ𝑖 = (21)
𝐴 ∆𝑇

Fig. ESQUEMA PARA DEFINIR LA


CONDUCTANCIA DE CONTACTO

La resistencia de térmica de contacto, 𝑅𝑐 se define como el inverso de la


conductancia de contacto. Su valor es:
1 ∆𝑇
𝑅𝑐 = = (22)
ℎ𝑐 𝑄 ⁄𝐴
Note que 𝑅𝑐 representa la resistencia térmica por contacto por unidad de área. La
resistencia termica para la interface completa se obtiene al dividir 𝑅𝑐 entre el área
A aparente de dicha interface.

Fluido en la Interface Conductancia por contacto, 𝒉𝑪 [𝑾⁄°𝑪 𝒎𝟐 ]


Aire 3640
Helio 9520
Hidrógeno 13900
Aceite de siliconas 19000
Glicerina 37700

Tabla CONDUCTANCIA TÉRMICA POR CONTACTO (YUNUS CENGEL


TRANSFERENCIA DE CALOR Y MASA)

Cuando superficies a distintas temperaturas se ponen en contacto, aparece


una resistencia térmica en la interface de los sólidos, que se conoce como
resistencia de contacto, y que se desarrolla cuando los dos materiales no ajustan
exactamente, por lo que entre la resistencia de la interface depende de:

 La rugosidad superficial

 La presión que mantiene en contacto las dos superficies

 Del fluido de la interface

 De su temperatura

Si el calor a través de las superficies sólidas en contacto es Q, la diferencia de


temperaturas a través del fluido que separa los dos sólidos es la resistencia de
contacto Ri se expresa en función de una conductancia interfacial hi, W/m2ºK, se
tiene:
∆𝑻𝒊 ∆𝑻𝒊
 𝑸 = 𝒉𝒊 𝑨 ∆𝑻𝒊 = 𝟏 = (23)
𝑹𝒊
𝒉𝒊 𝑨

En los sólidos mecánicamente unidos no se suele considerar la resistencia de la


interface, a pesar de que siempre está presente. Sin embargo hay que conocer la
existencia de la resistencia de la interface y la diferencia de temperaturas
resultante a través de la misma; en superficies rugosas y bajas presiones de unión,
la caída de temperatura a través de la interface puede ser importante, incluso
dominante, y hay que tenerla en cuenta.

La resistencia térmica de contacto, (Rtc) generalmente se determina


experimentalmente, Rtc depende en general de:

 La presión de contacto

 Del acabado superficial

TRANSFERENCIA DE CALOR EN LA UNIÓN.

La transferencia de calor atreves de la unión se realiza mediante tres


mecanismos que van a contribuir en diferentes cuantías al valor de la
conductancia:
1. Conducción a través de la estructura sólida porosa o fibrosa

2. Conducción y/o convección a través del aire atrapado en los


espacios vacíos

3. Radiación entre porciones de la estructura sólida, lo cual es


especialmente importante a temperaturas elevadas o en recintos
vacíos.

El espesor de la zona de contacto es pequeña de manera que, si existiese


un líquido o un gas intersticial, la convección en el hueco seria en casi todos los
casos despreciables y habría que tener en cuenta solo la conducción en el fluido.
Numerosos autores han estudiado, sobre todo de forma experimental, la influencia
de distintos fluidos intersticiales en la conductancia de contacto.

Lambert y Fletcher (1997) recopilan algunos de estos trabajos.

En algunas ocasiones se introduce un material intersticial no gaseoso con el


fin de aumentar la resistencia térmica, actuando de este modo como elemento de
control térmico.

ESPESOR ÓPTIMO, TECNICO ECONOMICO DE AISLAMIENTO.

Uno de los campos de aplicación más importante dentro del diseño térmico
de elementos, maquinas, equipos, sistemas y plantas térmicas, es la
determinación del aislamiento más eficiente técnicamente pero que sea compatible
con la inversión económica requerida para el proyecto, por ello es necesario
encontrar el Espesor Optimo Técnico- Económico de Aislamiento.

ESPESOR ÓPTIMO TÉCNICO DE AISLAMIENTO (POR ANÁLISIS DE LA


RESISTENCIA DE TRANSFERENCIA DE CALOR POR CONDUCCIÓN).

Esto requiere un simple análisis de la resistencia de transferencia de calor por


conducción:
𝜟𝒙
𝑹𝑻𝑪 = 𝒌 …….Ec. (1.3.14.1.1)
𝒎 𝑨𝒎

Donde:

Km = Conductividad térmica media del material

Am = Área media de transferencia de calor

El flujo de calor está dado por la ecuación de Fourier:


𝝏𝑻
𝑸 = −𝒌. 𝑨 𝝏𝒙 …….Ec. (1.3.14.1.2)

Pero también se tiene que:


𝜟𝑻
𝑸= 𝑹𝑻𝑪
…….Ec. (1.3.14.1.3)

Según la Ec. (1.3.14.1.3) ,para disminuir el flujo de calor, basta incrementar


las resistencias de transferencias de calor .
Para incrementar la resistencia a la transferencia de calor se tiene tres
alternativas:

1.- Disminuir la conductividad del material.

2.- Disminuir el área de transferencia de calor

3.- Aumentar el espesor de aislamiento.

Las dos primeras son definidos en el diseño del proyecto, por tanto cambiar
representa, cambiar el proyecto mismo lo que es inviable técnicamente. Por tanto
la única alternativa es el de incrementar el aislamiento.

Fig. ESPESOR ÓPTIMO TÉCNICO- ECONÓMICO DE AISLAMIENTO EN


PAREDES

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