¡HOLA!

Hay veces en las que empiezas a practicar una actividad: deportes como tenis, ballet o
natación, música como piano o guitarra, clases de informática o de inglés, etc. En otras
ocasiones llegas a sitios donde no conoces a nadie: cambias de ciudad, del instituto a la
universidad, etc.

En situaciones como estas, sigue estos pasos para conocer gente nueva y hacer
amigos:

1º Acércate, mira a los ojos y sonríe.

2º Saluda y preséntate

3º Haz una pregunta

4º Escucha con atención

5º No contestes “sí” o “no”, di más cosas

Ejemplo: Julia ha empezado la universidad y no conoce a nadie. Antes de empezar la

clase ve a una compañera. Se acerca, le mira a los ojos y le dice sonriendo:

- ¡Hola! Me llamo Julia, ¿y tú?

- Hola soy Maite. ¿Eres de aquí?
- No. Me he mudado a la ciudad y la verdad es que me encuentro un poco
sola porque no conozco a nadie.
- No pasa nada. Aquí somos buena gente y harás amiga enseguida,
empezando por mí.
Para hacer amigos, además de presentarnos es fundamental saber conversar.

Las conversaciones tienen como finalidad el intercambio de información entre dos o

más personas. En las conversaciones se habla de uno mismo, se dan instrucciones, se
hacen preguntas, información, se expresan sentimientos e ideas, etc.

Existen muchos tipos de conversaciones; éstas pueden ser formales e informales,

pueden durar unos segundos o varias horas y su contenido puede ser muy importante
o bastante insignificante.

Cualquier conversación consta de 3 fases:

1. Iniciar una conversación: significa empezar a hablar con otro chico o chica y
supone saludar (a un conocido), presentarse (a un desconocido) y formular
alguna pregunta o comentario. Por ejemplo:
- Hacer un comentario sobre la situación o sobre una actividad en la que el
otro chico o chica está implicado, o en la que ambos estáis implicados.
- Hacer un cumplido al otro sobre las cosas que hace, su apariencia física, su
talento, etc.
- Pedir ayuda, consejo, opinión o información e incluso ofrecer algo.
- Compartir las experiencias, sentimientos u opiniones personales.

2. Mantener una conversación: significa dialogar con otro chico o chica durante un
tiempo determinado de manera que resulte agradable y positivo para ambos.
Algunos de los trucos para mantener conversaciones son:
- Dar señales de “escucha activa” y prestar atención: mirar a la cara, asentir
con la cabeza, emitir vocablos como ¡ajá! ¿ah, si?, ya, ¡mmmm!, etc.
- Responder a las preguntas que te hagan.
- Respetar el turno de palabra.
- Hacer preguntas abiertas (¿qué….? ¿cómo….? ¿por qué…?) Son preguntas a
las que no se responde simplemente con un sí o un no, así la conversación
se vuelve más duradera.
- Autorrevelación: contar cosas sobre los propios sentimientos, fantasías,
gustos, deseos, metas, etc.
- Buscar temas de conversación que puedan interesar a la otra persona.
 3. Terminar una conversación: significa finalizar el diálogo con el chico o la chica con
la que estamos hablando. Los pasos para terminar adecuadamente una
conversación son:

- Comunicar a la otra persona que se tiene que acabar la conversación,

aunque habéis disfrutado de ella y de su compañía. Utilizar expresiones
como: “Siento tener que dejarte, pero…” “Bueno, para terminar te diré
que…” “me lo he pasado genial hablando contigo, pero ahora tengo que…”.
- Despedirse con expresiones como ¡adiós!, ¡nos vemos!, ¡hasta pronto!,
¡hasta luego!

El éxito de iniciar, mantener y terminar una conversación contribuye a que los

participantes se sientan cómodos con sus interlocutores, reforzando de esta manera la
probabilidad de futuros encuentros.

Para que la conversación sea exitosa hay que evitar:

- Elegir un momento inadecuado (por ejemplo, cuando nosotros y/o nuestro

interlocutor estamos tristes, enfadados, preocupados, etc.).
- Elegir un lugar inadecuado (por ejemplo, una habitación con mucho ruido).
- Utilizar expresiones vagas, respuestas monosilábicas, insultos y hablar en
exceso de uno mismo.
- Hablar con voz temblorosa, hablar gritando, con una entonación
monótona…
- No mirar al que habla o no mostrar expresiones faciales.
- Hablar simultáneamente, interrumpir constantemente.
- Quedarse sin tema de conversación. Para ello se puede volver a un tema
anterior o utilizar frases de transición para introducir un nuevo tema: “a
propósito de lo que estuvimos hablando antes…”, “me gustaría contarte
que…”, “hay otro asunto del que no hemos hablado…”.

¡Por último, me gustaría destacar que las ventajas de saber conversar son muchísimas!
Puedes conocer a otros chi@s y aprender cosas interesantes e importantes de ell@s.
Puedes divertirte, disfrutar y compartir tus ideas e intereses.

Ahora… ¡A PRACTICAR! 