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Historia de la Educación
www.historiadelaeducacion.cl
N° 2 ⎹ Enero 2014
ISSN 0719-3483
Directora Camila Pérez Navarro
Pontificia Universidad Católica de Chile.
Contenido
Presentación ................................................................................................................ 5
Artículos ...................................................................................................................... 7
Claudia Drago & Roberto Espejo: Trazas de Herbart en Chile: una revisión de algunas fuentes
primarias ..................................................................................................................................8
Analía Álvarez, Daniela Colleoni & Luis Horta: El cine en el aula: el Instituto de
Cinematografía Educativa de la Universidad de Chile (1929 - 1948) ...................................... 20
Carola Sepúlveda: Una madrina en época de guerra: Gabriela Mistral y sus recados ............... 47
Josefina Cabrera: La salvación de la patria y la raza: discursos y políticas médico-educacionales
en torno a la figura de Pedro Aguirre Cerda ............................................................................ 69
Miguel Gimeno: Recuperación de experiencias pedagógicas, memoria y patrimonio de la Escuela
Normal Superior José Abelardo Núñez (1842-1973) ................................................................ 87
Inventario bibliográfico ............................................................................................ 114
Cristián Olivares: La consolidación de la Educación Pública, de Víctor Troncoso y Juan
Sandoval (1954) ................................................................................................................ 115
Fuentes para la Historia de la Educación ................................................................... 118
Miguel Gimeno: Cierre de las Escuelas Normales en Chile (1973 - 1974). Decretos N° 179 y
353 ..................................................................................................................................... 119
Dafne Reyes: Apuntes para la historia de la Escuela Normal de San Luis de Potosí ............... 131
Sihomara Hormazabal & Esteban Miranda: Informe sobre Escuela Nacional Unificada ... 154
Reseñas de libros ...................................................................................................... 173
Ernesto Schiefelbein: Historia de la Educación Chilena, de Fredy Soto Roa ..................... 174
Reseñas de tesis ........................................................................................................ 177
María Paz Asenjo: Un nuevo camino de la A a la Z. Enseñanza y aprendizaje de la lectoescritura
en la escuela primaria chilena (1840 – 1880), tesis de Rodrigo Mayorga ........................... 178
5
Presentación
E
n tiempos de acelerados cambios y de proliferación de diversas recetas para el
mejoramiento educativo, a ratos ensimismadas en la contingencia, resulta
pertinente preguntarnos por la contribución de la historia de la educación, en tanto
campo de producción de conocimiento y forma de reflexión educativa, a los procesos de
transformación educacional que acontecen en cada sociedad. Como toda creación social, el
sistema educacional posee una historicidad particular, con elementos que permanecen o
varían de acuerdo a la acción de los sujetos que lo componen. Son los sujetos que
componen el sistema educativo, sus estudiantes, docentes, paradocentes y directivos, junto
a las madres y los padres, los profesionales que rodean a la escuela y, en último término, la
sociedad toda, quienes transforman cotidianamente el sistema mediante el cual la sociedad
es educada. Como Comité Editorial tras Cuadernos Chilenos de Historia de la Educación,
creemos que una mirada histórica del cambio educativo incidirá en el fortalecimiento de
una identidad que lleve a que los actores sociales responsables del cambio asuman que su
esfuerzo contribuya al proyecto colectivo en construcción, con raíces profundas y de
destino abierto.
contribuir a la doble tarea de, por una parte, construir lenguajes, narrativas y horizontes de
sentido comunes por medio de la historización del sistema educativo, y por otro,
diversificar al máximo posible las voces que narran, por medio de distintas tramas, el
proceso de construcción del sistema educacional en Chile. En esta tarea, el conocimiento
del pasado parece ser una condición de posibilidad para una comprensión cabal del
presente.
Creemos que esta ciudad habitada por vivos y muertos puede ser conocida más
cabalmente por medio de su historia, aquella construcción que recoge las aspiraciones,
esfuerzos, conflictos y, muy especialmente, las voces de sus habitantes. ¿Cómo pensar lo
específicamente docente, aquello que distingue a un conocedor de un educador, sin recurrir a
las identidades colectivas que lo componen?, ¿cómo referirse a la ampliación del sistema
escolar, sin inquietarse por las miradas de quienes sostuvieron dicha expansión por medio
de sus prácticas cotidianas?, ¿cómo olvidar el patrimonio educativo que opera como
fundamento de las instituciones que existen en la actualidad? La historia de la educación se
presta a esto cuando evidencia que los diversos actores educacionales formamos parte de
una comunidad afianzada en la evocación y actualización de lo hecho por otros como
nosotros.
Comité Editorial
7
Artículos
8
Resumen
Entre 1885 y 1910 al menos, la educación chilena se desarrolló bajo la influencia alemana.
En este contexto la influencia de la pedagogía de Friedrich Herbart (1776 – 1841) ha sido
señalada por varios historiadores. En este trabajo utilizamos algunas fuentes primarias con
el fin de explorar la evidencia concreta de dicha influencia.
Palabras Clave
Reforma alemana 1885-1910, Friedrich Herbart, herbartismo, pedagogía alemana,
educación chilena.
1
Claudia Drago Camus, Profesora de Historia y Magíster en Ciencias de la Educación, Facultad de
Educación P. Universidad Católica de Chile y Peuma Educación. Roberto Espejo Leupin, Profesor de Física
y Doctor en Ciencias de la Educación, Universidad Nacional Andrés Bello y Peuma Educación.
9
PRESENTACIÓN
2
Valentín Letelier, El Instituto Pedagógico. (Santiago: Instituto cultural germano-chileno, 1949), p. 26.
3
Amanda Labarca, Historia de la enseñanza en Chile, (Santiago: Editorial Universitaria, 1939), pp. 185,
197.
4
Cristián Cox y Jacqueline Gysling, La formación del profesorado en Chile 1842-1987. (Santiago:
Ediciones UDP, 1990), p. 79.
5
Ver F. Herbart, Dos escritos sobre educación, (Santiago: Peuma Ediciones, 2013), pp. 9 – 22.
10
personaje político suizo durante un par de años, lo que hizo germinar en él muchas de sus
ideas sobre la enseñanza y los fines de la educación. En 1799 visitó a Pestalozzi en
Burgdorf, encuentro que tendría una fuerte influencia sobre sus ideas.
6
François Guex, Histoire de l’instruction et de l’éducation, (Lausanne : Payot, 1906), pp. 394-395.
7
François Guex, Histoire de l’instruction…p. 444.
8
Charles de Garmo, Herbart and the herbatians, (New York: Charles Scribner’s sons, 1895), p. 103.
9
J.F. Herbart, Pedagogîa general. (Madrid: Ediciones de la lectura, 1910).
10
John MacVannel, The educational theories of Herbart and Froebel, (New York: Teachers College, 1906),
p. 68.
11
Es así como el gobierno chileno comisiona –por separado, entre 1878 y 1889- a J.
Abelardo Núñez y Valentín Letelier para que estudien los sistemas educativos de algunos
países europeos y de EE.UU. y contraten profesores, en Alemania principalmente, para
que vengan a enseñar en las escuelas normales y en el recién creado Instituto Pedagógico.
Se destinan grandes recursos para esta reforma y en 1885 llegan los primeros maestros y
11
Charles de Garmo, Herbart and the herbatians, p. 32.
12
John MacVannel, The educational theories of Herbart and Froebel, (New York: Teachers College, 1906),
p. 70-71.
13
Charles de Garmo, Herbart and the herbatians, p. 79.
14
Christian Ufer, Introduction to the pedagogy of Herbart, (Boston: Heath and Company, 1894), p. 88.
15
Iván Núñez, La Formación de Preceptores y Preceptoras de Educación Primaria. CONICYT Anillo Soc-
17 PUC, documento de trabajo, sin editar: Santiago, 2009, p. 135.
12
maestras contratados en Alemania por Núñez para las escuelas normales -como los
alemanes Julio Bergter, que en 1888 será director de la Escuela Normal de Preceptores de
Santiago y Teresa Adametz, que dirigirá la Escuela Normal de Preceptoras. En 1889 se
traen académicos alemanes para que dirijan y enseñen en el nuevo Instituto Pedagógico.
Llegan Federico Johow -como su primer director, Francisco Jenschke y Jorge Enrique
Schneider, como profesores- entre otros. También el gobierno financió el viaje de
normalistas a estudiar a seminarios y escuelas de Alemania, Suecia y Suiza para que
retornaran luego a formar a los maestros chilenos en los nuevos métodos.
Aunque no hay acuerdo total entre los historiadores de la educación 16, en términos
generales, podemos señalar que la llamada reforma alemana, sistematizó la formación de
profesores, haciendo suya una visión de la pedagogía como ciencia, de la mano de la
emergente psicología. Además, acentuó la adopción del modelo concéntrico y del método
inductivo, e introdujo la enseñanza de asignaturas como trabajos manuales y canto, o
reforzó otras como gimnasia y ciencias de la naturaleza.
16
Ver, entre otros: L. Egaña, La Educación primaria popular en el siglo XIX en Chile, una práctica de
política estatal. Santiago: DIBAM y Centro de Estudios e investigaciones Diego Barros Arana, 2000; I.
Núñez, La Formación de Preceptores y Preceptoras de Educación Primaria. CONICYT Anillo Soc-17 PUC,
documento de trabajo, sin editar: Santiago, 2009. http://www.ceppe.cl/articulos-proyectos-en-otras-
areas/328-la-formacion-de-preceptores-y-preceptoras-de-educacion-primaria-inunez (21/04/2011); S. Serrano,
Ponce de León, et al. Historia de la Educación en Chile (1810- 2010) Tomo II, Santiago: Editorial Taurus,
2012; Vial, G. Historia de Chile, 1891- 1973, tomo II, Santiago: editorial Zigzag, 1981.
17
Valentín Letelier, El Instituto Pedagógico, p. 56.
13
pedagogía en Jena en 188018 por lo que es razonable pensar estuvo expuesto a las ideas de
Herbart: recordemos que el seminario pedagógico de Jena estuvo a cargo de Stoy entre
1844 y 1885 y el de Leipzig a cargo de Ziller entre 1862 y 1882. Por otra parte, se revisaron
los apuntes de las clases de pedagogía dictadas por Schneider en el Instituto Pedagógico,
tomadas y editadas por un alumno en 1893.19
Finalmente, se consideran los programas de estudio -de fines del siglo XIX- de las
escuelas normales de Santiago20. Los profesores alemanes llegaron a dirigir y enseñar en las
escuelas normales a partir de 1885, por lo que sus programas hacia 1889 habían sido
elaborados por ellos o bajo su directa influencia. Es importante señalar que Julio Bergter,
director de la Escuela Normal N°1 de Preceptores y profesor de su cátedra de Pedagogía
entre 1888 y 1897, estudió teología y pedagogía en las Universidades de Jena y Leipzig
antes de 1878.21
Es importante recalcar que esta revisión no pretende ser exhaustiva y que constituye
parte de un trabajo en elaboración.
Una revisión somera de algunas fuentes secundarias nos permite identificar dos
grandes ámbitos donde la influencia de Herbart se habría hecho sentir en nuestra
educación: el carácter científico de la pedagogía y un método didáctico.
arte especial, basado en una ciencia: la psicología” 22. A su vez, G. Vial dice que: “Los
alemanes […] crearon o enfatizaron cursos –dibujo, canto, trabajos manuales, gimnasia,
“lecciones de cosas”, conocimiento de la naturaleza […] y sobre todo, dieron al trabajo
docente un fundamento científico: el método pedagógico de Johann Friedrich Herbart.” 23
No podemos reproducir aquí todas las fuentes revisadas, por lo que nos limitamos a
transcribir algunos pasajes que evocan el nombre de Herbart y que nos permiten una idea
de la relevancia que tuvo.
1. Las actas del primer Congreso Nacional Pedagógico de 1889: fue una importante
instancia que por primera vez reunió a maestros chilenos y alemanes y autoridades
educacionales y en que se discutió todo lo referente a la educación nacional y sus métodos.
Se registró solo una referencia menor a Ziller y Herbart:
22
Amanda Labarca, Historia de la enseñanza en Chile, p. 185.
23
Gonzalo Vial, Historia de Chile, 1891- 1973, tomo II (Santiago: Editorial Zig zag, 1981), p. 143.
24
J. A. Núñez, Congreso Nacional Pedagógico de 1889: resumen de las discusiones, actas y memorias.
Publicación oficial dirigida por J. A. Núñez. (Santiago: Imprenta Nacional, 1890), p. 38.
15
Metodolojía especial.
Preparación de lecciones.
Ensayos prácticos.
Crítica de lecciones”25.
Sin embargo, en esa misma temática el autor más referenciado en los apuntes es
Wundt, de quien Schneider había sido discípulo en Leipzig.
27
Schneider, J. E. Programa de Pedagogía, Instituto Pedagógico Universidad de Chile (Santiago: Imprenta
Nacional, 1895), p. 8.
28
Retamal, M. Lecciones de Pedagogía recopiladas en el Instituto Pedagógico, Revista Pedagógica (Santiago:
Imprenta El Correo, 1893) p. 56.
17
CONCLUSIONES
En esta línea, Iván Núñez recientemente ha señalado este problema a partir del
análisis de textos de exámenes finales de la asignatura de pedagogía dados en la Escuela
Normal N° 1 de preceptores29.
29
Iván Núñez y Mayaska Vásquez, Exámenes escritos de pedagogía de alumnos de la Escuela Normal de
Preceptores, en Cuadernos Chilenos de Historia de la Educación N° 1, Santiago, julio 2013, p. 150.
18
Bibliografía
Fuentes primarias
Fuentes secundarias
Resumen
Si bien en Chile la aplicación del cine como herramienta educativa puede rastrearse desde
los primeros años del siglo XX, es a partir de la creación del Instituto de Cinematografía
Educativa (ICE) -fundado en la Universidad de Chile el año 1929- cuando su uso alcanza
un carácter profesional. La democratización del conocimiento a través del cine, fue el
objetivo principal del Instituto, razón por la cual su accionar tuvo presencia efectiva de
norte a sur de Chile. El siguiente trabajo tiene por finalidad mostrar la labor que el ICE
desarrolló en sus 18 años de vida efectiva, poniendo especial énfasis en su propuesta
pedagógica, notablemente asociada a las ideas de la Escuela Nueva.
Palabras Clave
*
El siguiente texto forma parte de la investigación realizada por la Cineteca de la Universidad de Chile, en
el marco del Proyecto “Patrimonio Fílmico de la Universidad de Chile 1929 – 1973”, financiado por la
Vicerrectoría de Investigación y Desarrollo, perteneciente a la misma casa de estudio. La investigación
propone el análisis de cuatro departamentos pertenecientes a la Universidad y cuyo eje fue la producción y
difusión cinematográfica: el Instituto de Cinematografía Educativa, el Departamento de Foto-
cinematografía, Cine Experimental y la Cineteca Universitaria. El estudio en su conjunto da cuenta de la
trayectoria fílmica que recorre gran parte de la historia de la Universidad de Chile durante el siglo XX, a la
vez muestra parte del rol cultural y educativo que ha tenido ésta casa de estudios en el desarrollo del país.
1
Analía Álvarez, Licenciada en Historia, Universidad de Chile (analiaalvarezseguel@gmail.com); Daniela
Colleoni, Licenciada en Arte con mención en Teoría e Historia del Arte, Universidad de Chile
(dcolleoniv@gmail.com); Luis Horta, investigador de cine, docente y Coordinador de la Cineteca de la
Universidad de Chile (cinetecaudechile@gmail.com).
21
INTRODUCCIÓN
Para el año 2015 asistiremos a los 120 años del nacimiento de la historia del cine.
Aunque podemos detectar antecedentes del “cinematógrafo” con los inicios de la fotografía
durante la primera mitad del siglo XIX, es en 1895 cuando el mundo asiste a la proyección
de las primeras películas registradas por los hermanos Lumière en París. Tras el éxito de
este maravilloso invento, el cinematógrafo recorre el mundo, llegando a Chile tan sólo
meses después de esta primera exhibición.
Si bien durante este período el cine destacó como un evento de gran convocatoria
social, su alcance no significó un mayor aporte a nivel pedagógico hasta la creación de un
organismo exclusivamente dedicado al aprovechamiento de la técnica cinematográfica en el
aula. En este sentido, el desafío que debía enfrentar la creación del Instituto de
Cinematografía Educativa, no sólo se relacionaba con la organización de un servicio con
personal capacitado y equipos de proyección adecuados, sino también había que superar la
forma en como el cine era presentado socialmente dentro del paisaje cultural de la época.
En palabras de la investigadora Jaqueline Mouesca: “El cine era en todo caso solo una
manifestación menor en comparación con las otras expresiones de la vida cultural, en particular lo
relacionado con los espectáculos de masas”.4
2
Cinema N° 3, Santiago, 12 de diciembre de 1913, p. 17.
3
Jorge Iturriaga, “La película disociadora y subversiva. El desafío social del cine en Chile (1907-1930)”, En:
http://www.ccplm.cl/sitio/minisitios/cuadernos_cineteca/imprimir/iturriaga.pdf (13 de Noviembre de
2013)
4
Jaqueline Mouesca y Carlos Orellana, Breve historia del cine chileno (Santiago: LOM, 2010), p. 14.
22
En Chile, la implementación del cine como medio educativo estuvo precedida por
la inclusión de la “imagen fija”6, aun cuando a nivel particular existían establecimientos
que contaban con proyectores cinematográficos, imitando las experiencias de escuelas en
Europa y Estados Unidos. 7 El año 1911, comisionado por el Ministro de Instrucción
Pública, su Inspector General, el señor Rafael Díaz Lira, realizó un informe acerca de la
conveniencia de introducir en la enseñanza las “proyecciones luminosas”, además de
generar un servicio de conferencias e instalar un taller fotográfico para preparar las
colecciones de diapositivas necesarias. El informe declaraba que “La proyección es la forma
más avanzada de la enseñanza. Da mayor exactitud y precisión a la presentación de las materias i,
por su amplitud de aplicación, le permite realizar en todos los ramos un trabajo más animado, intenso
i eficaz”8.
5
Revista de Instrucción Primaria, Santiago, (nov.-dic. 1912), p. 1045.
6
Fue en la “Exposición de Material de Escolar” de 1885 organizada por José Abelardo Núñez en el Salón
Central del Museo Nacional donde por primera vez en Chile se dio a conocer a los docentes diverso
material gráfico como cuadros, laminas, cartas murales y grabados para la enseñanza de la historia,
geografía, ciencias naturales, entre otros. En: María Isabel Orellana y María Fernanda Martínez, Educación
e Imagen: Formas de modelar la realidad (Santiago, DIBAM, 2010)
7
La primera aplicación escolar de una cinta cinematográfica se habría llevado a cabo el año 1908 en
Bruselas, organizada por Alexis Slyus, vicepresidente de la “Ligue de L’ Enseignement”, en la oportunidad
se habrían proyectado las películas “Gaumont”, sobre ciudades egipcias, para luego pasar a registros fílmicos
sobre física y aeronáutica, ambas cintas estuvieron acompañadas de una clase teórica impartida por
profesionales invitados. El servicio de Cinematografía Educativa en Bélgica se fundaría finalmente el año
1919. En: Revista de Educación. Ministerio de Educación Pública de Chile, Nº 2, Santiago (enero de 1929),
p. 53.
8
Revista de Instrucción Primaria, N° 5 y 6, Santiago (julio-agosto 1912).
23
9
Sabemos de la compra de cuarenta y cinco aparatos por parte de la Dirección de Instrucción Primaria en
1924 a la Fábrica Krupp-Ernemann. Archivo Nacional de la Administración (ARNAD). Fondo Ministerio
de Educación. Vol. 4737.
10
Decreto N° 135 del Ministerio de Instrucción Pública del 16 de enero de 1913. ARNAD. Ministerio de
Educación. Vol. 3096.
11
Informe N° 42 “Pide se cree “Una Sección de Decorado i Proyecciones Escolares” i acompaña unas
reproducciones fotográficas. Inspección Jeneral de Instrucción Primaria, ARNAD, Fondo Ministerio de
Educación, Vol. 3096, Santiago (2 de enero 1912), p. 2.
12
Informe N° 42 “Pide se cree “Una Sección de Decorado i Proyecciones Escolares”, p. 3.
24
mantuvo la Sección de Decorados, así como la falta de una planificación central en sus
actividades, redujo esta innovadora experiencia a sus mínimas posibilidades. Así, la
necesidad de una reforma funcional y acorde a los nuevos tiempos, en donde la imagen se
abría paso de manera ineludible, se hacía más que imperativa.
El proyecto de formación del ICE comienza en 1928 y tuvo directa relación con la
reformulación y modernización de la Sección de Decorados y Proyecciones Escolares. Tras
el largo período de inestabilidad que vivió el país entre los años 1924 y 1927, se apropia
autoritariamente del gobierno Carlos Ibáñez del Campo, cabeza de la oficialidad joven del
Ejército, e inicia una serie de radicales transformaciones a nivel de Estado, que en lo
institucional proyectó una modernización de sus organismos, mientras que en lo
económico ratificó la aplicación de un sistema de tipo desarrollista, todo bajo la práctica
política autoritaria propia de una dictadura. En educación, Ibáñez promovió una reforma
que debe ser entendida mediante el análisis de tres fases: la primera de ellas que puede
denominarse como administrativa, y que tuvo una duración de pocos meses, de abril a
junio de 1927, la segunda de “educación integral”, desarrollada entre diciembre de 1927 a
septiembre de 1928, y por último, una contrarreforma, que se extendería hasta 1930. La
reforma “integral” fue la primera en su estilo, y se denominó así “…por abarcar todos los
niveles y diversas variables de la educación: organización y administración del sistema, objetivos,
currículum y prácticas pedagógicas.”14 Una de las principales características de esta reforma es
13
Memoria del Ministerio de Instrucción Pública, Santiago (1917), p. 12.
14
Sol Serrano et al (Ed.), Historia de la Educación en Chile (1810-2010): Tomo II, La Educación Nacional
(1880-1930), (Santiago: Taurus, 2012), p. 275.
25
que fue “…la primera que resultó de la presión de grupos subalternos, como eran los profesores,
reflejando con claridad la fuerza que ellos habían obtenido como gremio.” 15
15
Sol Serrano et al (Ed.), Historia de la Educación en Chile (1810-2010), p. 275.
16
Leonora Reyes, “Memoria, conflicto educacional y ciudadanía. El movimiento del profesorado primario
en Chile (1922-1928)”, En: www.archivochile.com/Ideas_Autores/reyesjl/reyesjl0002.pdf (20 de noviembre
de 2013)
17
Sol Serrano et al (Ed.), Historia de la Educación en Chile (1810-2010), p. 278.
18
Sol Serrano et al (Ed.), Historia de la Educación en Chile (1810-2010), p. 287.
26
19
La primera gran discusión en torno a las artes ponía en disputa la concepción entre “tradición y
modernidad”. Los movimientos de la Generación del Trece, el Grupo Montparnasse y la crítica de Jean
Emar desarrollaron un discurso crítico hacia el enfoque academicista, predominante en las artes plásticas
nacionales desde el siglo XIX. Estos exponentes introdujeron nuevas propuestas formales y temáticas, en
directa relación, por ejemplo, con las vanguardias europeas, pero con un marcado sentido de búsqueda de
una identidad nacional.
20
Revista de Arte N° 1, (septiembre de 1928), p. 1.
21
Decreto N° 6348. ARNAD, Fondo Ministerio de Educación, Vol. 5488.
27
Para llevar a cabo el proyecto de formación del ICE se convoca en marzo de 1928 al
cineasta radicado en Berlín, Armando Rojas Castro24: “Comunique Armando Rojas que
deséasele contratar dos años para cinematografía y jefe Decorado Escolar sueldo veinticuatro mil
22
Pablo Berríos, Eva Cancino y Kaliuska Santibáñez, La construcción de lo contemporáneo. La institución
moderna del arte en Chile (1910-1947), (Santiago: Departamento Teoría del Arte, Universidad de Chile,
2012), p. 227 y 228.
23
Decreto “El Instituto de Cinematografía Educativa dependerá de la Facultad de Filosofía y Ciencias de la
Educación”, 12 de febrero de 1931. En: Anales de la Universidad de Chile. Boletín del Consejo
Universitario, (Santiago: Prensas de la Universidad de Chile, 1930-1931) p. 135.
24
Armando Rojas Castro es una figura importantísima en la historia de la cinematografía nacional, sin
embargo su nombre y trabajo no han tenido la relevancia necesaria. Ingresa a la Universidad de Chile a
estudiar arquitectura, carrera que abandona a los veinte años para dedicarse a la cinematografía. El año
1919 filma la película “Uno de abajo”, crítica social sobre el alcoholismo y la trata de blancas, que sería
estrenada en 1920. El año 1921, viaja por cuenta propia a Alemania a realizar estudios. En este país se
dedica a la cinematografía, trabajando largos años en la UFA. Anexo a esto desarrolla una carrera docente
en la Humboldt Hochschule realizando clases de español y posteriormente ingresa a la Universidad de
Berlín, donde imparte la misma cátedra. El año 1925 recorre toda Alemania filmando el documental “Lo
que vi en Alemania”, el cual fue adquirido por el Ministerio de Relaciones Exteriores de aquel país. Tras su
paso por el ICE, se convierte el año 1942, en el primer director de la nueva empresa del Estado,
ChileFilms.
28
pesos. Punto. Permanecería dos meses revisando servicios recogiendo informaciones. MINISTRO DE
EDUCACION.” 25
La comunicación indica que las primeras labores que Armando Rojas tuvo que
asumir, fueron las de estudiar el proceso de fomento del cine en las escuelas
implementado en Alemania. A lo anterior se sumó la confección de una nómina con la
maquinaria requerida para emprender el naciente proyecto, en función a esto se urgía a
que “Armando Rojas envié presupuesto equipo cinematográfico que adquiérase. Carecemos todo.
Ministro Educación.”26 No tenemos certeza si dicha compra se llevó finalmente a cabo27,
pero lo más probable es que sí se haya efectuado, lo que supondría que gran parte del
equipo con el cual el ICE operaría durante todos sus años de funcionamiento, fueron
aparatos comprados por el mismo Rojas Castro en Alemania y al parecer en Estados
Unidos28, a esto se debe incluir además, una serie de cintas educativas, de las cuales se
mantiene un catastro escrito29. El proceso de formación del Instituto comienza en 1928, y
vive una serie de transformaciones que concluirían en su concreción el 28 de noviembre
de 1929, cuando por Decreto30 el Ministerio de Educación entrega a la Universidad de
Chile la administración de la Sección de Decorado y Proyecciones Escolares, así como
todos sus elementos y personal, renombrando al naciente departamento como Instituto de
Cinematografía Educativa. No obstante, consideramos que la conformación final del ICE
se concreta a principios de diciembre, momento en que el Ministerio le otorga fondos para
la instalación de laboratorios y talleres31, hecho que significó la conversión final del
naciente Instituto de un simple distribuidor a un productor de material audiovisual.
El primer edificio que albergó al Instituto fue la Escuela de Bellas Artes, actual
Museo de Arte Contemporáneo del Parque Forestal. Las instalaciones estaban distribuidas
25
Cable enviado a la Legación Chilena en Berlín, 6 de marzo de 1928. Archivo Histórico Ministerio de
Relaciones Exteriores de Chile (MINREL), Vol.1164.
26
Cable enviado a la Legación Chilena en Berlín, 27 de abril de 1928. Archivo MINREL. Vol.1164.
27
Sólo contamos con un telegrama del 27 de abril de 1928, donde se daba orden a la Tesorería General de
enviar el dinero destinado al retorno de Armando Rojas Castro a Chile. Archivo MINREL. Vol.1164.
28
Nathan D. Golden, “Post-War Visual Education Potentialities in LatinAmerica”. En: Educational Screen,
Vol. XXII, (Chicago (EEUU), Dic.1943), P. 381.
29
Catastro realizado por los autores a partir de la revisión de diversas fuentes.
30
Decreto del Ministerio de Educación N° 5471, del 28 de noviembre de 1928. En: Ricardo Donoso,
Recopilación de Leyes, Reglamentos y Decretos Relativos a los servicios de enseñanza superior (Santiago:
Talleres de Imprenta de la Dirección General de Prisiones, 1937), p. 45.
31
Anales de la Universidad de Chile, Boletín del Consejo Universitario. (Santiago: Establecimientos
Gráficos Balcells y Co., diciembre de 1929), p. 1666.
29
32
Recurrentes fueron las peticiones hechas por Armando Rojas Castro y el Decano de la Facultad de Bellas
Artes al Ministerio para efectuar el traslado del ICE a otras dependencias. En un informe escrito el año
1934, Rojas señalaba “Necesitamos, además, un local propio que nos permita instalarnos definitivamente y
disponer de salas de clases, de experimentación, salón público de actos, estudio sonoro, etc.” En: Revista de
Educación, N° 48, (Santiago, marzo 1934), p. 24.
33
La entrevista fue realizada en las dependencias de la Cineteca de la Universidad de Chile el día 6 de
septiembre de 2012.
34
La Nación, Santiago, 21 de diciembre de 1929, p. 15.
30
Durante el evento se exhibieron las tres primeras películas realizadas por el nuevo
Instituto: “Del Mundo que no vemos”: Estudio micro-cinematográfico desarrollado por el
doctor Roberto Contreras Stark, y que mostraba imágenes de aguas estancadas,
observación microscópica y ejemplos de microorganismos; “Cultura del cuerpo” 35: cinta de
Educación Física; y “Cerro Santa Lucía”: documental con vistas del entorno del cerro y
vistas parciales de la ciudad de Santiago. Las películas exhibidas habrían sido filmadas en
una semana y pretendían ser una muestra de la capacidad productiva del naciente Instituto
y su personal, generando en la prensa de la época y en el público asistente “la más franca
aprobación y dejaron de manifestó la importancia que tiene el cine como elemento
educacional”. La inauguración concluyó con un recorrido por las instalaciones del ICE.
35
Alicia Vega en Itinerario del Cine Documental Chile (1900-1990), lo registra como la cinta “Educación
Física”.
36
Armando Rojas Castro, “El Instituto de Cinematografía Educativa y sus actividades”. En: Instituto de
Cinematografía Educativa, N° 1 (Santiago: Universidad de Chile, 1930), p. 3.
31
37
Armando Rojas Castro, “El Instituto de Cinematografía Educativa y sus actividades”, En: Boletín
Instituto de Cinematografía Educativa, N° 1 (Santiago, Universidad de Chile, 1930), p. 3.
38
La primera aplicación escolar de una cinta cinematográfica se habría llevado a cabo el año 1908 en
Bruselas, organizada por Alexis Slyus, vicepresidente de la “Ligue de L’ Enseignement”, en la oportunidad
se habrían proyectado las películas “Gaumont”, sobre ciudades egipcias, para luego pasar a registros fílmicos
sobre física y aeronáutica, ambas cintas estuvieron acompañadas de una clase teórica impartida por
profesionales invitados. El servicio de Cinematografía Educativa en Bélgica se fundaría finalmente el año
1919. En: Revista de Educación, Ministerio de Educación Pública de Chile, Nº 2, (Santiago, enero de
1929), p. 53.
39
En la Sección Revistas de la Biblioteca Nacional de Chile se conservan 14 números que van desde enero
de 1931 a febrero de 1932.
32
La metodología sugerida por Ferrière fue replicada por los maestros e Institutos a
nivel mundial, siguiendo el cuidado de marcar la diferencia entre la enseñanza -con
materias y aplicación organizada- de la simple entretención y distracción ofrecida por la
película de espectáculo.
El trabajo del ICE comenzaría por delinear un concepto de cine educativo frente al
desconocimiento de su alcance en términos docentes:
42
Adolfo Ferriere, “Aplicación del cinematógrafo en la enseñanza”, p. 339.
43
“Los nuevos elementos de proyección debían usarse en la misma sala de clases, sin sensacionalismo y sin
mayores trámites que los que exigían el mapa, el globo terráqueo, el pizarrón o el libro”. Armando Rojas
Castro, “Iniciación y desarrollo de la Cinematografía Educativa en Chile”, En: Revista de Educación, Año
XV, N° 64. (Santiago: Ministerio de Educación, 1955), p. 60.
44
Boletín del Instituto de Cinematografía Educativa de la Universidad de Chile N° 3. (Santiago:
Universidad de Chile, 1932).
34
profesor y otra “Guía para el alumno”45, las que tenían como finalidad fomentar el debate.
Cabe destacar que los nuevos avances en la tecnología cinematográfica facilitaron el uso de
este medio en el aula, con equipos y materiales seguros, de fácil transporte y manejo 46.
45
Anales de la Universidad de Chile. Boletín del Consejo Universitario. Año I (Santiago: Prensas de la
Universidad de Chile, segundo semestre de 1931), p. 359.
46
“Hubo que recurrir a nuevos inventos y de ahí resultó la llamada “película angosta”, es decir, de un ancho
más o menos igual a la mitad de la normal, o sea de 16 mm. Su menor resistencia a la tracción permitió
emplear en su fabricación material no inflamable y por ende, reducir el tamaño y peso de los aparatos hasta
un límite no imaginado.” En: Armando Rojas Castro, “Instituto de Cinematografía Educativa”, Revista de
Educación (Santiago: febrero de 1930), p. 139.
47
Armando Rojas Castro, “El instituto de Cinematografía Educativa y sus actividades”, p. 4.
48
El Departamento estuvo a cargo del profesor Miguel R. Ávila, quien en 1943 asumiría como nuevo
director del Instituto.
49
Miguel R. Ávila, “El problema de la divulgación del cine educativo en el Magisterio”. En: Boletín
Instituto de Cinematografía Educativa, N° 1. (Santiago: Universidad de Chile, 1930), p. 10-11.
35
El interés que provocó el cine educativo en los niños fue inmediato y muy
alentador. Testimonios de la época relatan cómo las películas despertaban en ellos un
mayor interés y una participación más activa en clases, garantizando una mayor
compresión, desarrollo de ideas53, motivando la socialización, expresión oral y gráfica a
50
Armando Rojas Castro. “El instituto de Cinematografía Educativa y sus actividades”. En: Op. cit. P. 4
51
El Departamento Pedagógico adquirió literatura especializada para estos fines y dispuso de una biblioteca
ambulante, guías de película, folletos, encuestas y un Boletín de Informaciones. De este último, sólo se
conservan los números 1° (1930) y 3° (1932).
52
“EL Instituto de Cinematografía Educativa de Santiago de Chile y su actividad”, En: Revista
Internacional del Cinema Educativo N° 7, (Roma: julio 1931), p. 730.
53
“La proyección luminosa evita por una parte que los niños hagan estériles esfuerzos de imaginación y de
comprensión, o no hagan ninguno, que es lo más frecuente si el tema no les interesa suficientemente”. En:
El Instituto de Cinematografía Educativa de Santiago de Chile y su actividad. Revista Internacional del
Cinema Educativo N°7, (Roma: Instituto Internacional de Cinema Educativo, Julio 1931), p. 730.
36
través de los diversos comentarios, reflexiones y dibujos. Asimismo, los niños presentaban
un mejor comportamiento e incluso mayor asistencia a clases. 54
Los profesores destacaban además que la aplicación del cine ayudaba a reducir los
tiempos de explicación de las materias, además de presentar contenidos que por diversos
motivos no estaban al alcance de los niños, éste podía ser el caso de materias científicas que
requerían de instrumentos de difícil acceso sobre todo para escuelas de escasos recursos. En
estos casos, la proyección de una película elaborada especialmente para la materia ofrecería
la ventaja de complementar las experiencias didácticas que por falta de recursos habían
sido deficientes o nulas.
54
Relata la Directora de la Escuela N° 44 de Calera de Tango, señora Carmela Ávalos, sobre el
sorprendente aumento de matrícula que de 26 aumentó a 150 estudiantes. En: Revista de Educación N°
48, (Santiago: Marzo de 1934), p. 61-63.
55
Los archivos provinciales se encontraban en las siguientes ciudades: Iquique, Antofagasta, Copiapó, La
Serena, Valparaíso, Santiago, Rancagua, Talca, Linares, Chillán-Los Ángeles, Concepción, Temuco,
Valdivia y Puerto Montt.
37
56
Revista de Educación, Nº 14, (Santiago: Febrero de 1930), p. 140.
57
Tarifas y Disposiciones Generales que regirán para los Servicios del Instituto de Cinematografía
Educativa, Oficio N° 108, 29 de enero de 1932, Universidad de Chile. En: Ricardo Donoso, p. 263 y 264.
58
Revista de Educación, N° 48, (Santiago: Marzo 1934), p. 23.
59
Revista de Educación, N° 48, p. 24.
38
Por otro lado, el ICE mantuvo una labor pedagógica anexa a su función principal en
los colegios. Fiel al mandato impuesto a la Universidad por el medio del Estatuto
Universitario, se apoyó la creación en 1929 de un departamento que llevara “… los
conocimientos doctos al gran público por un lado, y por otro, permitiera el perfeccionamiento de sus
conocimientos a aquellas personas que no tenían oportunidad de seguir el ritmo de progreso que sus
profesiones experimentaran.”61. La creación del Departamento de Extensión Artística vino a
cumplir dichos planteamientos, siendo el ICE, uno de sus principales colaboradores. El
trabajo de ambas entidades fue tan cercano que el mismo Secretario de dicho
departamento, sería el que fuera en un primer momento su asesor pedagógico y
posteriormente su director: Miguel Ávila Alvear. De la mano del Departamento de
Extensión el ICE programaría durante años funciones semanales en el Salón de Honor de
la Casa Central de la Universidad, con un programa que abarcaba tanto películas de
carácter educativo como largometrajes de ficción nacionales e internacionales , además de
participar activamente en las Escuelas de Verano que dicho departamento organizaba
anualmente.62 En concordancia con esta labor extensiva, el Instituto programaba
funciones de cine al aire libre, para lo cual contaba con un camión equipado con máquinas
de proyección63, con este servicio el ICE apoyaba la labor de entidades tales como el
Departamento de la Habitación Popular o el Ministerio de Fomento. 64
60
Cámara de Diputados, Sesión 71 A Ordinaria, martes 13 de septiembre de 1938. En: Cámara de
Diputados, Legislación Ordinaria, Vol. III e Índice, (Santiago: 1938), pp. 3323-3334.
61
Juvenal Hernández, Claustro Pleno 1938. Discurso del Rector de esta Universidad, (Santiago: Prensas de
la Universidad de Chile, 1938), p. 30.
62
El ICE registraría las actividades de la Escuela de Verano de 1946, la cinta se encuentra disponible en
www.cinetecavirtual.cl y se conserva una copia en la Cineteca de la Universidad de Chile.
63
“A nuestra vieja camioneta, que trabaja desde hace diez años sin descanso, le colocamos una polea en eje
del cigüeñal, la cual acciona una dínamo de 1,5 kw, 220 V. Esta dínamo alimenta un proyector y un sistema
sonoro para micrófono y discos musicales. Mediante un cable bien protegido, establecemos la conexión con
el alto parlante, que va colocado en el pie de seis metros de alto de la pantalla, la cual permite proyectar el
cuadro de 4 m. de ancho a 40 m. de distancia”. En: Impreso publicitario sobre labor de extensión del
Instituto de Cinematografía Educativa, (Santiago: Editorial Zig-Zag, s/f), ARNAD, Fondo Ministerio de
Educación, Vol. 6649.
64
“Se agradecen los servicios del Instituto de Cinematografía Educativa”, En: Anales de la Universidad de
Chile. Boletín del Consejo Universitario, (Santiago: Prensas de la Universidad de Chile, primer trimestre
1932), p. 222.
39
65
Impreso publicitario sobre labor de extensión del Instituto de Cinematografía Educativa.
66
“Reglamento para el Servicio de Cinematografía Educativa”, Decreto con fuerza de Ley N°337, 20 de
mayo de 1931. ARNAD. Ministerio de Educación. Vol. 5745.
67
Miguel R. Ávila, Entrevista del mes. En: Revista de Educación N°48, (Santiago: Ministerio de Educación
Pública de Chile, 1934), p. 65.
68
Miguel R. Ávila, , Entrevista del mes, p. 65.
40
Oficios” (1930), “Excursión al Volcán Chillán” (?), “Eclipse parcial en Santiago” (1931?),
entre otros. A este trabajo se sumó la creación del Noticiero ICE, pequeñas notas
periodísticas que fueron proyectadas en las salas de cine comercial entre los años 1940 y
1943.69
La propuesta del ICE incluía contar con la capacidad técnica de generar en sus
instalaciones las películas educativas que no pudiesen ser compradas en el extranjero. Los
inicios parecen haber sido prometedores, sin embargo, a poco andar el Instituto enfrenta
una rebaja en su presupuesto (cuestión que afectó a toda la Universidad) lo cual le impidió
continuar con esta faceta productora. Las carencias económicas con las que se enfrentó el
ICE fueron constantes durante toda su existencia afectando la producción de películas
nacionales, así como también el alcance de este servicio en las escuelas. Hacia el año 1940,
Rojas Castro exponía lo siguiente “No podemos llegar a todos los niños de Chile. No tenemos
elementos. Hay más de 3.000 escuelas primarias en Chile, y el I.C.E. dispone sólo de 75 máquinas…
Estas son anticuadas y hace diez años que trabajan sin descanso.” 70 Llegada la década de 1940
pareciera ser que el ICE retomaría dicha capacidad productora, esta vez de la mano de
Chile Films, empresa fundada el año 1942 por la CORFO para industrializar la
producción cinematográfica nacional, no obstante, esta empresa vivió una serie de
problemáticas financieras desde su fundación las que llevaron al Estado a decretar su
desmantelamiento el año 1948.
Profesor y estudiantes en clases con proyección de película. En: Impreso publicitario sobre labor de
extensión del Instituto de Cinematografía Educativa, Santiago: Editorial Zig-Zag.
69
Actualmente se encuentran algunos de estos noticiarios en el Archivo Histórico de la Empresa Chile
Films.
70
Impreso Publicitario sobre labor de Extensión del Instituto de Cinematografía Educativa de la
Universidad de Chile.
41
CONCLUSIONES
71
Anales de la Universidad de Chile. Boletín del Consejo Universitario, Sesión de 2 de abril de 1942,
(Santiago: Prensas de la Universidad de Chile, 1942), p. 89.
72
Ley N° 8939, 5 de enero de 1948, y DFL N° 4794 del 5 de junio de 1948. “De los organismos,
establecimientos y funciones de tipo cultural antes pertenecientes a la Dirección General de Información y
Cultura”. Los siguientes decretos indicaron el traspaso definitivo del ICE al Ministerio de Educación, y la
administración de la Universidad de los servicios antes realizados por la DIC.
73
Decreto del Ministerio del Interior, N° 6-4817, art. 17, del 26 de agosto de 1942.
http://www.leychile.cl/Navegar?idNorma=3701 (4 de diciembre de 2013)
74
Anales de la Universidad de Chile. Boletín del Consejo Universitario, segundo semestre 1947, (Santiago:
Prensas de la Universidad de Chile, 1947), p. 620 y 621.
75
El Ministerio de Educación fusiona el servicio de Radio Escuela Experimental junto al Instituto de
Cinematografía Educativa, creando así el Servicio de Radio y Cine Educativos, cuya primera directora fue
María Teresa Femenías. Creado por decreto N°3489 del 10 de junio de 1942, dependiente de la Dirección
42
La vida del Instituto dentro del Ministerio queda reflejada en las palabras de
Armando Rojas Castro
General de Educación Primaria. En: María Teresa Femenías. “La radiotelefonía al servicio de la educación”.
Boletín Escuelas Experimentales, N°7, (Santiago: Dirección General de Educación, 1943).
76
Armando Rojas Castro, “Iniciación y Desarrollo de la Cinematografía Educativa en Chile”, En: Revista
de Educación, N° 6, (Santiago: Mayo 1955), p. 61 y 62.
43
A través de este trabajo queremos llamar la atención sobre la desidia que ha existido
en torno a esta institución educativa en particular y al patrimonio fílmico en general. La
nula bibliografía que existe sobre el tema, además del poco valor que se le dio al archivo
fílmico y documental del Instituto, ha condenado a esta maravillosa experiencia a
permanecer prácticamente en el olvido, lo que ha significado por ejemplo, que actualmente
contemos con sólo 4 películas de un total de 245 títulos catastrados, en un archivo que
contenía alrededor de 1000 rollos de películas en formato 16 y 35 mm.77
77
Nathan D. Golden, “Post-war visual education potentialities in Latin America”, p. 381.
44
Bibliografía
Fuentes primarias
Tarifas y Disposiciones Generales que regirán para los Servicios del Instituto de
Cinematografía Educativa, Oficio N° 108, 29 de enero de 1932, Universidad de
Chile. En: Ricardo Donoso, Recopilación de Leyes, Reglamentos y Decretos
Relativos a los servicios de enseñanza superior, Santiago: Talleres de Imprenta de la
Dirección General de Prisiones, 1937.
Publicaciones periódicas
Fuentes Secundarias
Resumen
El presente artículo propone una lectura de algunos de los “Recados” de Gabriela Mistral
escritos durante la Segunda Guerra Mundial. Los Recados corresponden a un género de
escrita en el cual la autora critica, felicita, advierte y transmite un poco de su experiencia,
en un sentido benjaminiano. La escritura de los Recados acompañó a Gabriela Mistral
durante gran parte de su vida en el llamado “autoexilio” y constituían, según su propia
opinión, los escritos que llevaban “el tono más suyo”. A través de una lectura de algunos de
estos Recados intentaremos comprender su creación y puesta en circulación en diferentes
periódicos, como un esfuerzo de enviar un mensaje pedagógico en una época de crisis.
Palabras clave
1
Ponencia presentada en las XI Jornadas de Historia de la Educación Chilena, Santiago de Chile, 2013.
Agradezco el apoyo de FAEPEX- Fundo de Apoio ao Ensino, à Pesquisa e Extensão de la Universidad
Estadual de Campinas.
2
Licenciada en Educación y Profesora de Estado en Historia y Geografía (Universidad de Santiago de
Chile). Magíster en Estudios de Género y Cultura en América Latina, Mención Humanidades (Universidad
de Chile). Doctoranda en Educación, Mención Ciencias Sociales (Universidad Estadual de Campinas).
Becaria del Programa “Becas Chile- Formación de Capital Humano Avanzado en el Extranjero”
(CONICYT. Gobierno De Chile).
48
Lucila de María del Perpetuo Socorro Godoy Alcayaga nació en Vicuña el 7 de Abril
de 1889. Mujer, provinciana y pobre fue creciendo en una sociedad y una época marcada
por muchas exclusiones y experimentando una relación compleja y distante con lo que ella
definía como las “instituciones”, incluyendo la educación formal.
3
Gabriela Mistral, “Ronda de la paz”, en: Real Academia Española, Gabriela Mistral en verso y prosa.
Antología (Lima: Santillana Ediciones Generales, 2010), p. 129.
4
Gabriela Mistral, “Memoria”, en: Real Academia Española, Gabriela Mistral, p. 504.
5
Michel de Certeau. A invenção do cotidiano. (Petrópolis: Vozes, 1994).
6
Ana Pizarro. Gabriela Mistral: El proyecto de Lucila. (Santiago: LOM Ediciones. Embajada de Brasil en
Chile, 2005), p. 10.
49
sería el último reconocimiento derivado de una acción como esa, el Premio Nacional de
Literatura que recibió también respondió a la misma fórmula.
Viajaba me parece también como si fuese buscando felicidad, esa que ella decía
encontrar cuando escribía: “escribir me suele alegrar; siempre me suaviza el ánimo y me
regala un día ingenuo, tierno, infantil. Es la sensación de haber estado por unas horas en
mi patria real, en mi costumbre, en mi suelto antojo, en mi libertad total”.8
7
Gabriela Mistral, “Viajar” en: Roque Esteban Scarpa, (comp.) Gabriela anda por el mundo. (Editorial
Andrés Bello. Santiago, 1978), p. 20.
8
Gabriela Mistral, “Cómo escribo”, en: Real Academia Española, Gabriela Mistral. pp. 589
9
A partir de la donación del legado de Gabriela Mistral hecha por Doris Atkinson al Estado chileno, el año
2007, se pudo confirmar esa observación hecha antes por algunos de sus biógrafos (as) y estudiosos (as) de
su obra. A partir de la llegada de ese acervo se han desarrollado iniciativas que han difundido la obra de
Gabriela Mistral, siendo algunas de ellas, la creación de http://www.salasvirtuales.cl/salamistral/ y la
publicación de algunos libros que recopilan parte de su obra en versos y prosa.
10
Olga Grandón Lagunas. “El acervo rural en los Recados en prosa de Gabriela Mistral”. En: Cyber
Humanitatis. nº 23 (Invierno 2002);
50
Así, los Recados serían una forma de comunicación en esa experiencia del
autoexilio, donde en esos viajes geográficos y simbólicos 12 ella piensa y elabora sus
Según Ana Pizarro, el régimen de Vargas fue “un sistema basado en el cinismo, la
mentira, la delación, la tortura, en donde se controla y ejerce no solo la propaganda sino
también la censura”.16 Ejemplo de eso fue la existencia del Departamento de Prensa y
Propaganda del Estado Nuevo DIP17.
13
Olga Grandón. “La prosa poética de Gabriela Mistral: identidad y discurso”. Doctorado en Literatura con
mención en Literatura chilena e Hispanoamericana. Universidad de Chile. Facultad de Filosofía y
Humanidades. 2004. http://www.tesis.uchile.cl/tesis/uchile/2004/grandon_o/html/index-frames.html
(05/07/2013)
14
Gastón Figueroa. “Gabriela Mistral y el Brasil” En: Revista de cultura brasileña, Madrid, v.6.pp. 60.
15
Gabriela Mistral, “Para una ahijado de guerra”, En: Otto Morales Benitez (compilador y prólogo).
Gabriela Mistral: su prosa y poesía en Colombia. Santafé de Bogotá: Convenio Andrés Bello,
2002.Volumen 1. pp. 318
16
Ana Pizarro. Gabriela Mistral, pp. 17.
17
En portugués: Departamento de Imprensa e Propaganda do Estado Novo.
52
Los funcionarios del Ministerio de Relaciones Exteriores de Chile en Brasil, del cual
también era representante Gabriela, describían este Departamento de la siguiente forma:
“columna fuerte del régimen de Gobierno, ejerce funciones de
alta importancia no sólo en lo que se refiere a la vida interna del
país, sino también en la política exterior del Brasil. Controla toda
actividad de prensa; ninguna publicación puede editarse sin estar
sujeta a su autorización previa y censura (…) Con razón se ha
dicho que en el Brasil hay diarios pero no hay prensa.” 18
Esas censuras eran un síntoma de la tensión que se vivía y que nuevamente los
funcionarios describían muy bien:
Este régimen con fuertes trazos fascistas introdujo prácticas cotidianas como:
“La constante repetición del Himno Nacional, la propagación de
fotografías del Presidente aún en los lugares más apartados del
Brasil, la irradiación de programas patrióticos, la violenta
propaganda en las escuelas, en los cuarteles, etc., son unos de los
tantos métodos de “nacionalización” empleados por el Gobierno
durante estos últimos años. Se le enseña actualmente, por método
admirable y en virtud de un plan de acción en conjunto, a los
ciudadanos brasileños a sentirse orgullosos de su nacionalidad.” 20
18
Archivo General Histórico Ministerio de Relaciones Exteriores de Chile. Memoria de la Embajada de
Chile en Brasil correspondiente al año 1941, p. 10.
19
Archivo General Histórico Ministerio de Relaciones Exteriores de Chile. Volumen 1974 (1942)
24 de Noviembre de 1942. p. 3.
20
Archivo General Histórico Ministerio de Relaciones Exteriores de Chile. Volumen 1803 (1940). 5 de
Junio de 1940, p. 3 – 4.
53
Así, en una época de guerra y Dictadura es que Gabriela se instala en Brasil. En este
sentido, entiendo época como “el campo de posibilidad de existencia de un sistema de
creencias, de circulación de discursos y de intervenciones 21, no siendo considerado en este
escrito como un determinismo.
El hecho de que Gabriela Mistral haya sido testigo de varias guerras durante su vida
(dos guerras mundiales y la guerra civil española, por ejemplo) me parece pudo significar
una sensibilización en su escritura, lo que se reconoce, por ejemplo, en la presencia y
profundidad con que ella trabaja esas temáticas.
En 1940, Gabriela decía: “Los políticos ven en la desgracia europea una especie de
zarabanda infernal: desaparecen unas naciones finas y débiles o también otras que no se
dedicaron a ser fuertes. Pero los escritores vemos mucho más que un escamoteo de
fronteras en esta tropelía: vemos jugarse nuestra propia vida espiritual”. 22
Como intelectual, Mistral tuvo que enfrentarse a lo que significaba vivir y escribir en
un tiempo de crisis, donde las condiciones de escritura y las posibilidades de realizar
intervenciones intelectuales no eran fáciles, como ya indicamos, por las censuras y las
dificultades de la comunicación, entre otras cosas.
Sobre las formas en que las algunas mujeres consiguieron abrirse espacios en el
campo intelectual, me parece muy interesante el trabajo de Beatriz Sarlo, quien en una
lectura de las trayectorias de Norah Lange, Alfonsina Storni y Victoria Ocampo indica que
ellas habrían desarrollado un empoderamiento al haber potenciado sus diferencias, es decir,
aquellas características que habían sido definidas como transgresiones sociales. Las autoras
21
Claudia Gilman. Entre la pluma y el fusil: debates y dilemas del escritor revolucionario en América
Latina. (Buenos Aires: Siglo Veintiuno Editores, 2012), p. 19.
22
Ana Pizarro. Gabriela Mistral, p. 99.
23
Federico Neiburg y Mariano Plotikin (compiladores) Intelectuales y expertos. La constitución del
conocimiento social en la Argentina. (Buenos Aires: Paidós, 1994). p. 15
54
habrían re-significado esas diferencias creando con eso espacios de fuga, entendidos como
lugares donde era posible desarrollar identidades femeninas diferentes. 24
Para poder comprender los postulados anteriores es que me propongo analizar dos
de los Recados que Gabriela Mistral escribió durante la Segunda Guerra Mundial, estos
son: “Carta a um afilhado de guerra” publicado el día 9 de Noviembre de 1944 27, y “Outra
carta a um afilhado de guerra”28 publicado día 13 de Abril de 194529, ambos en el
24
Beatriz Sarlo. Una modernidad periférica. Buenos Aires 1920 y 1930 (Ediciones Nueva Visión. Buenos
Aires, 1988). pp. 73-93.
25
Michel De Certeau. A invenção.
26
Federico Neiburg y Mariano Plotikin (compiladores) Intelectuales y expertos, pp. 108-109-112
27
Gabriela Mistral, “Para un ahijado de guerra” En: Otto Morales Benitez (compilador y prólogo). En el
texto aparece que fue publicado en Petrópolis el 7 de Noviembre de 1944, sin embargo, encontramos
recortes de prensa adjuntos a los oficios enviados por Gabriela Mistral al Ministerio de Relaciones
Exteriores en que aparece con la fecha que consignamos en este texto.
28
Analizaremos aquí la versión en portugués por no tener acceso a la versión en español.
29
Gabriela Mistral, “Para un ahijado de guerra” En: Otto Morales Benitez (compilador y prólogo). En el
texto aparece que fue publicado en Petrópolis el 12 de Abril de 1945, pero por lo que encontramos en
recortes de prensa reconocemos que fue en la fecha que indicamos en el corpus del texto.
55
Las cartas, también podrían ser entendidas como un tipo de actuación política, en
tanto, siguiendo el análisis de Luiz Felipe Baêta Neves, éstas tendrían diferentes funciones y
transcendencias: “instrumento de sedução, de conquista de aliados, de denúncia, de ataque
a adversários. A carta não se encerra, pois, com as despedidas e a assinatura do remetente;
ela pretende ter vida posterior á leitura do destinatário pelas ações (inclusive ações públicas
e /ou de alcance significativo) que desencadeará”. 33
Así, siguiendo las lecturas anteriores, reconozco en esas cartas que Gabriela Mistral
escribe a su ahijado de guerra una posibilidad que ella crea para comunicarse y
relacionarse, donde se pueden leer ideas, sentimientos, preocupaciones y donde ella se
posiciona en un tipo de intervención política que se esperaba pudiese circular aún después
de ser firmada y enviada.
30
Para efectos de este trabajo a ser presentado en Chile, trabajaremos con las versiones de los textos en
español que aparecieron en Revista de América de Enero de 1945 y fueron recogidos en: Otto Morales
Benitez (compilador y prólogo). Gabriela Mistral.
31
Petrópolis pertenece político-administrativamente al Estado de Rio de Janeiro, capital de Brasil hasta
1960.
32
Giselle Martins Venancio. “Sopros inspiradores. Troca de livros, intercâmbios intelectuais e práticas de
correspondências no arquivo privado de Oliveira Vianna” In Maria Helena Camara Bastos, Maria Teresa
Santos Cunha, Ana Chrystina Venancio Mignot, (org.), Destinos das letras: história, educação e escrita
epistolar. Passo Fundo: UPF, 2002. pp. 223.
33
Luiz Baêta Neves. “Para uma teoria da carta. Notas de Pesquisa”. En: As máscaras da totalidade totalitária.
Memória e produção sociais. L. Rio de Janeiro: RJ: Forense-Universitária, 1988. pp. 193.
56
34
Real Academia Española. Diccionario usual.
(http://www.rae.es/drae/srv/search?id=iOP2P4ISiDXX2csUBY7N) (05/07/2013)
35
Gabriela Mistral, “Para un ahijado de guerra”, En: Otto Morales Benitez (compilador y prólogo). p. 317.
36
Gabriela Mistral, “Para un ahijado de guerra”, En: Otto Morales Benitez (compilador y prólogo). p. 317.
57
“Esta vez mandamos una caja del “manjar blanco” chileno, que
llaman ustedes doce de leite, y que hacen, igual que el nuestro, las
manos mineras y gauchas. Nunca el “manjar” fue a mejores manos
que a las de un soldado que corre con su camión las tierras
libertadas de la madre Italia y al anochecer tendrá el apetito ancho
de los que se cansaron y lo merecen todo…”40.
37
Gabriela Mistral, “Para un ahijado de guerra”, En: Otto Morales Benitez (compilador y prólogo), p. 318
38
Gabriela Mistral, “Para un ahijado de guerra”, En: Otto Morales Benitez (compilador y prólogo). p. 317-
318
39
Soledad Falabella. “Desierto: territorio, desplazamiento y nostalgia en Poema de Chile de Gabriela
Mistral En: Revista chilena de literatura N° 50. Abril 1997.
(Falabella, 1997: 82)
40
Gabriela Mistral, “Para un ahijado de guerra”, En: Otto Morales Benitez (compilador y prólogo), p. 319.
58
En algunos momentos, me parece que también que Gabriela trata de hacer que su
ahijado se sienta parte de una comunidad más amplia que la nación, tal vez como un
ejercicio de reconocimiento de su labor y sacrificio: “Ustedes tomaron sobre sí la
obligación y la gloria de “hacer presencia”, y la América del Sur se da cuenta cabal de lo
que les debemos y les deberemos aún.” 41 Por otra parte, también lo anima en esa imagen
que le trasmite sobre el fin de la guerra: “Las informaciones de que la guerra se aproxima
hacia el fin natural de su victoria traen contentos a sus familiares y amigos. Tal vez no
tendrá usted un verano de Italia, sino de Petrópolis mi querido ahijado.” 42
“LA CASA ERA ÉL, EL DÍA ÉL, LA LECTURA ÉL”43: LA MUERTE DE YIN YIN
Durante los años que coinciden con la Segunda Guerra Mundial, Gabriela Mistral
se aproximó con la experiencia de la muerte también de forma más directa. Fue en Brasil
donde se suicidaron su hijo44 Yin yin el año 1943 y en 1942, el escritor austríaco Stefan
Zweig con quien compartió residencia en Petrópolis y a quien parecía admirar; siendo la
muerte de este último, al parecer, provocada por el dolor que le significó el desarrollo de la
guerra en Europa y los efectos de ésta sobre el pueblo judío. 45 Después de esos hechos,
Gabriela Mistral dedicó varios de sus escritos para hablar de las emociones que le
provocaron esas muertes, especialmente la de su hijo.
41
Gabriela Mistral, “Para un ahijado de guerra”, En: Otto Morales Benitez (compilador y prólogo), p. 319.
42
Gabriela Mistral, “Para un ahijado de guerra”, En: Otto Morales Benitez (compilador y prólogo), p. 319.
43
Ana Pizarro, Gabriela Mistral. pp. 47
44
Mucho se discute si efectivamente Juan Miguel era sobrino, hijo adoptivo o biológico de Gabriela Mistral.
Mi afirmación sobre la maternidad de Mistral no problematiza el asunto biológico de ésta y la entiendo
como una representación donde Yin yin era su hijo y que le permitió, según mi lectura, localizar la
experiencia de maternidad en un cuerpo y rostro de niño. Por eso, en todas las reflexiones de este texto
entiendo a Juan Miguel, su Yin yin, como hijo de Gabriela.
45
Ana Pizarro, Gabriela Mistral, p. 40.
46
Ana Pizarro, Gabriela Mistral.
59
Según nuestro análisis, tras la muerte de Yinyin , Gabriela Mistral enfrentó lo que
hoy en día podríamos definir como depresión post-traumática, que aunque si bien es cierto
debemos observar ella poseía ciertos rasgos que pueden ser considerados como depresivos,
ahora estaría marcada por un dolor distinto, mucho más permanente e intenso debido a la
pérdida también de ese lugar seguro de identificación que representaba su maternidad y
que le hacía aparecer frente a los otros como adecuada, como femenina.
Gabriela al referirse a la muerte de Yin yin decía: “Y estaré insensata y tocaré fondo
de estabilidad para mí misma mientras no entienda el absurdo. Me aliviaría, me
descansaría, solo con entender y aunque el entender no tenga nada que hacer con el
recobrar y el aceptar”. 49
Así, Gabriela Mistral a sus 54 años de edad, se quedó sin Yin y sin la felicidad que él
significaba para ella, perdiendo ese lugar seguro de identificación que representaba la
maternidad en esa época:
47
Emilce Dio Bleichmar. La depresión en la mujer. (Ediciones temas de hoy, Madrid, 1991), p. 23.
48
Emilce Dio Bleichmar. La depresión, p. 208.
49
Ana Pizarro, Gabriela Mistral, p. 45.
60
“Nunca la poesía fue para mí algo tan fuerte como para que me
reemplace a este niño precioso con una conversación de niño, de
mozo y de viejo, que nunca se me quedaba atrás en ella, que me
pueda encandilar como él: no hay compañía que me cubra el
costado derecho como él, cuando yo iba por las calles de las
extranjerías heladas y duras. La tengo trenzada conmigo en cada
cinco minutos. Y yo voy viviendo en dos planos, de manera
peligrosa (…)
Creo que la depresión de Gabriela causada por la pérdida de Yin pudo ser una
depresión encubierta, las que también se denominan depresiones enmascaradas y que se
caracterizan entre otros rasgos por originar problemas en las relaciones interpersonales
donde se adoptan conductas hipercríticas y descalificativas contra otras personas y se
adoptan como blanco de mal humor e irritación a los otros. 51 Serán ejemplos de esto, la
respuesta de Gabriela Mistral frente a la llamada “banda” a la que acusa de haber asesinado
a Yinyin y algunos silencios y malestares que después de la muerte de éste muestra hacia
Brasil y hacia sus amigos (as) brasileros (as).52
Al perder a Yinyin, no sólo pierde a su hijo sino a quien había sido también su más
cercano discípulo y alumno. Con él también había sido profesora, lo había educado en la
lectura y en la escritura y le había transmitido el valor de la educación: “este niño no era
una porción de mi vida, que era ella misma, que en él empezaban y acababan mi razón de
trabajar, mis alegrías y mis preocupaciones”. 53
50
Ana Pizarro. Gabriela Mistral, p. 47.
51
Emilce Dio Bleichmar. La depresión.
52
Sobre las “acusaciones” que realiza Gabriela Mistral sobre la muerte de Yin yin existen diferentes lecturas.
Algunos (as) lo atribuyen al dolor, falta de equilibrio psicológico y emocional o enfermedad y existen
también interpretaciones que proponen considerar el análisis de lo que serían elementos racistas y violentos
en las narrativas de Mistral. Sobre esto último véase: Licia Fiol Matta “Mulher- raça: a reprodução da nação
em Gabriela Mistral” En: Estudos feministas, Florianópolis, 13 (2); maio-agosto/2005: pp. 227-264.
53
Ana Pizarro. Gabriela Mistral, p. 47.
61
Sigmund Freud señalaba que el móvil que impulsaría al hombre a actuar sería la
búsqueda de la felicidad, la que tendría una doble dirección: por un lado, tratar de
experimentar intensas sensaciones de placer y por otro, evitar en la medida de lo posible el
dolor.55 Así, según el autor conseguir la máxima sensación placentera durante el máximo
tiempo se ve impedido por su propia constitución, que impide alcanzar un estado de
felicidad continua.56 Agregaba Freud que aunque las personas tengan como motor de su
acción el logro de placer ilimitado, existe gran facilidad para sufrir y por eso las acciones
humanas están más orientadas a evitar el dolor que a conseguir placeres.
Siguiendo esa lectura, creo que la muerte de Yinyin afectó a Gabriela de forma
profunda y desgarradora, en tanto, era esa relación la que le entregaba intensas sensaciones
de placer/felicidad y le permitía también evitar el dolor. Siento que Yin yin representaba su
morada en ese desarraigo del exilio. A través de él, Gabriela se aproximaba al amor
maternal, al ejercicio de la docencia y hasta a la experiencia de hablar su lengua materna,
pensando que en esa época vivía en un país lusófono.
Freud decía que el ser humano desarrolla algunas técnicas para evitar el sufrimiento,
por ejemplo recurrir a los desplazamientos de la libido, intentando reorientar los fines
instintivos, intentando evitar la frustración del mundo exterior, donde “la sublimación de
los instintos contribuye a ello, y su resultado será óptimo si se sabe acrecentar el placer del
trabajo psíquico e intelectual”. 57 Creo que esta pudo haber sido la forma en que Gabriela
Mistral enfrentó la muerte de Yinyin, tratando de independizarse del mundo exterior y
buscando re-encontrarse con su propia infancia por medio de la memoria y la escritura.
De esta manera para evitar el dolor, Gabriela habría utilizado la imaginación y las
letras, haciendo abstracciones de la realidad y centrándose en fenómenos internos que, por
ello, eran independientes del mundo y controlables sólo por ella, permitiéndole con eso
lograr satisfacciones que difícilmente podría haber alcanzado en la realidad.
54
Ana Pizarro. Gabriela Mistral.
55
Sigmund Freud. El malestar en la cultura, Edición de Mariano Rodríguez González, traducción de Luis
López Ballesteros, (Editorial Biblioteca Nueva, S. L, Madrid, 1999).
56
Sigmund Freud. El malestar.
57
Sigmund Freud. El malestar, p. 73.
62
En ese sentido me parece que la figura del ahijado también pudo haber significado
para Gabriela una sublimación de esa maternidad perdida y donde por medio de las cartas
pudo instalarse como la (casi) madre que acompañaba y cuidaba en la distancia, esa que
metafóricamente también la separaba de su hijo. Situación que se reconoce también en la
escritura del Poema de Chile 58 donde un niño que aparece en algunas narrativas como
indígena y en otras como ciervo, va acompañando a la mujer muerta y sin cuerpo en su viaje
por Chile: “son muy tristes, mi chiquito, las rutas sin compañero” 59, donde la creación de
esos compañeros seguramente representaba una táctica para resistir a tanto dolor: “vamos
caminando juntos así en hermanos de cuento60, tú echando sombra de niño, yo apenas
sombra de helecho”.61
Por otra parte, pienso también que ese ahijado le permitió establecer una relación
pedagógica con sus lectores (as), donde ella mostraba, compartía, cuestionaba y enseñaba
sus ideas y sentires sobre la guerra y la paz y donde a través de esos Recados como cartas
para su ahijado, Gabriela enseñaba un mundo más feliz; una tierra en paz a la que volver
después de tanto dolor.
En el texto “El Narrador” Walter Benjamin decía que “la muerte es la sanción de
todo lo que el narrador puede referir y ella es quien le presta autoridad”. 63 Siguiendo esta
lectura, creo que en esos Recados a su ahijado de guerra, Gabriela Mistral se presenta como
una narradora en un sentido benjaminiano, transmitiendo experiencias, entendidas “no
sentido forte e substancial do termo, que repousa sobre a possibilidade de uma tradição
58
Poema de Chile es una obra póstuma de Gabriela Mistral, publicada en 1967 por Doris Dana y que según
Grínor Rojo comenzó a ser escrito durante la residencia de Mistral en Brasil. Véase: Pizarro, el Proyecto de
Lucila, pp. 16.
59
Gabriela Mistral. El Poema de Chile. (Barcelona: Editorial Pomaire, 1967), p. 8.
60
El énfasis es mío.
61
Gabriela Mistral. El Poema de Chile, p.8
62
Mistral, “Para un ahijado de guerra”. En: Otto Morales Benitez (compilador y prólogo), p. 319.
63
Walter Benjamin, El Narrador, (Madrid: Taurus Ed, 1991), p. 5.
63
En esos Recados me parece que ella retoma la tradición oral que heredó de niña, de
su abuela, su padre y especialmente de su madre, donde se estableció una forma de
comunicación y de formación: «y a la par que mecías, me ibas cantando (...) En esas
canciones tú me nombrabas las cosas de la tierra: los cerros, los frutos, los pueblos, las
bestiecitas del campo, como para domiciliar a tu hija en el mundo» 65 recuperando el arte
de narrar Gabriela encontraría una nueva forma de hacer pedagogía: “todos los que vienen
después de ti, madre, enseñan sobre lo que tú enseñaste y dicen con muchas palabras cosas
que tú decías con poquitas; cansan nuestros oídos y nos empañan el gozo de oír contar”. 66
Puede ser que fuese ese gozo de oír contar el que tal vez ella intentaba recuperar,
posicionándose, como una madr(e)-ina y acercándose por medio de la memoria a sus
orígenes, a lo sensible que esos recuerdos e imágenes provocaban en ella.
Con dolor y con marcas en la memoria decía: “Todo eso vivimos; ya ha pasado, pero
las memorias leales no son tablas cepilladas de ataúd”. 71
para los lectores (as) firmados por esa madrina nostálgica de su hijo, de su infancia y de un
mundo en paz.
66
Bibliografía
Fuentes primarias
Cartas
“Carta a um afilhado de guerra”, Tribuna de Petrópolis, Petrópolis, 9 de
Noviembre,1944.
“Outra carta a um afilhado de guerra”, Tribuna de Petrópolis, Petrópolis, 13 de
Abril, 1945.
Archivos
Archivo General Histórico Ministerio de Relaciones Exteriores de Chile. (MRREE,
AGH), Santiago, Chile, Memoria de la Embajada de Chile en Brasil
correspondiente al año 1941.
Archivo General Histórico Ministerio de Relaciones Exteriores de Chile. (MRREE,
AGH) Santiago, Chile, Volumen 1974 (1942).
Archivo General Histórico Ministerio de Relaciones Exteriores de Chile. (MRREE,
AGH) Santiago, Chile, Volumen 1803 (1940).
Manuscrito para programa radial de la BBC, 1946.
Mistral, Gabriela. Carta a Pedro Aguirre Cerda, Rio, 25 de Julio de 1940.
Fuentes secundarias
Baêta Neves, Luiz. “Para uma teoria da carta. Notas de Pesquisa”. En: As máscaras
da totalidade totalitária. Memória e produção sociais. L. Rio de Janeiro: RJ: Forense-
Universitária, 1988.
Benjamin, Walter, El Narrador, Madrid: Taurus Ed, 1991.
De Certeau, Michel. A invenção do cotidiano. Petrópolis: Vozes, 1994.
Dio Bleichmar, Emilce. La depresión en la mujer. Madrid: Ediciones temas de hoy,
1991.
Falabella, Soledad. “Desierto: territorio, desplazamiento y nostalgia en Poema de
Chile de Gabriela Mistral En: Revista chilena de literatura, N° 50. Abril 1997.
Figueroa, Gastón. “Gabriela Mistral y el Brasil” En: Revista de cultura brasileña,
Madrid, v.6.
Fiol Matta, Licia. “Mulher- raça: a reprodução da nação em Gabriela Mistral” En:
Estudos feministas, Florianópolis, 13 (2); maio-agosto/2005: pp. 227-264.
Freud, Sigmund. El malestar en la cultura, Edición de Mariano Rodríguez González,
traducción de Luis López Ballesteros, Editorial Biblioteca Nueva, S. L, Madrid,
1999.
67
Josefina Cabrera1
Resumen
En agosto de 1939 se creó la Campaña por la defensa de la raza y aprovechamiento de las horas
libres. Su principal objetivo era elevar el nivel moral, intelectual y físico del hombre. Los
medios utilizados tuvieron escaso impacto, sin embargo, la sola existencia de la campaña es
sintomática de las ideas del período. Se argumentó que el denominado “deterioro de la
raza" impedía o dificultaba la escolarización. Por tanto, se veía en la escuela un instrumento
eficaz de prevención y cuidado de la salud. Ello explica las convergencias o alianzas entre
educadores y médicos. En este artículo, se analizarán discursos y políticas que repercutieron
en la construcción del sistema educacional en las décadas de 1930 y 1940 en Chile.
Palabras Clave
Educación - raza - salud - medicina - Pedro Aguirre Cerda.
1
Doctor en Historia (C), Pontificia Universidad Católica de Chile. Docente de la Facultad de Educación
PUC. Este trabajo forma parte de la investigación doctoral de la autora.
70
INTRODUCCIÓN
A modo de ilustrar esta problemática, Altamirano destaca los estudios que en esta
línea efectuó Francois Xavier-Guerra para el siglo XIX americano, en los cuales se cuestionó
precisamente sobre que se quería decir cuando se hablaba de “ciudadano” o “pueblo”. Nos
parece pertinente rescatar esta mirada como primera aproximación, que sabemos en
términos generales remite al denominado giro lingüístico, pero que de modo más
específico nos permite establecer un marco teórico ligado a la historia intelectual y de la
recepción de ideas. Esta conceptualización es relevante porque los movimientos de la
eugenesia, del higienismo y de la escuela nueva, por mencionar los más amplios que
atraviesan nuestro estudio, provienen de Europa y Estados Unidos. Por tanto, en América
2
Carlos Altamirano, “De la historia política a la historia intelectual: reactivaciones y renovaciones”, Prismas
Revista de historia intelectual, Nº 9, 2005, p. 7.
71
Latina se recepcionan dichos modelos, pero con adaptaciones que debemos considerar. Es
evidente que las condiciones de apropiación dependieron del contexto y realidad de cada
país. En este ámbito, debemos precisar que el debate “académico” tuvo lugar en un
momento de eclosión e incipiente institucionalización de las ciencias lo que generó un
gran dinamismo en las discusiones. Siguiendo a Bordieu, y teniendo en cuenta su concepto
de “campo” y su vínculo con el poder, es pertinente incorporar al campo científico como un
monopolio en disputa. Bajo esta premisa, nos interesa destacar la conciencia sobre la
relevancia del lenguaje, pues los conceptos que forman parte de esta investigación se
integran a discursos que se entremezclan a distintos niveles, ya sean disciplinarios_ lo
médico y lo educacional_ como en la política partidista y en las políticas públicas.3 A su
vez, la apropiación y circulación de ideas es fundamental para la comprensión del período y
para formular nuevas conexiones entre el mundo científico y el educacional que confluyen
en discurso político.
3
Cabe puntualizar la distinción entre policy y politics, pues la investigación incluirá ambas dimensiones
dado el caso; las políticas públicas y la política.
4
Antonio Viñao, “Higiene, salud y educación en su perspectiva histórica”, Areas revista internacional de
ciencias sociales, Número 20: Higienismo y Educación (ss. XVIII-XX), Universidad de Murcia, 2000, p. 1.
72
Esta carta publicada en la prensa nos da pie para plantear hipótesis preliminares,
pues la asociación con una labor social por parte de médicos y educadores no es casual; de
hecho responde a identidades bastante arraigadas en la época. Sabemos que
tempranamente médicos y profesores asumieron un rol político que se planteó en diversas
ocasiones como una defensa o representación de los sectores más desposeídos. Esta
convicción se agudizó en los períodos de crisis que experimentó Chile, a raíz de situaciones
internacionales y locales, y desde el protagonismo que adquiere la denominada “cuestión
social”. En las décadas de 1930 y 1940, existió un fuerte debate sobre la necesidad de
diversas transformaciones que requería el país; un discurso modernizador proveniente de
estos grupos medios profesionales se hacían sentir en distintas esferas. El contexto, que
describiremos a continuación, coincide a su vez con un cambio en la mirada sobre los
niños, lo que situó a la infancia en el centro de las preocupaciones, ya que ésta: “Dejó de
verse como una mera transición hacia la edad adulta y pasó a considerarse como un
momento de la vida con entidad y función propias, aquel en el que debían crearse las
aptitudes que, más adelante, serían vitales al adulto” 6. La preocupación por el porvenir de
las futuras generaciones se convirtió en un tópico recurrente.
5
Carta publicada en el periódico “La Nación”, 19 de octubre de 1934, p. 12.
6
Enrique Perdiguero, Salvad al niño: estudios sobre la protección a la infancia en la Europa mediterránea a
comienzos del siglo XX, València: Seminari d'Estudis sobre la Ciència, 2004, p. 15.
73
7
Gabriela Ossenbach, "Génesis histórica de los sistemas educativos" en José Luis García, Gabriela
Ossenbach y Javier M. Valle: Génesis, estructuras y tendencias de los sistemas educativos iberoamericanos,
Madrid, OEI Serie “Cuadernos de la OEI: Educación Comparada”, Nº 3, 2001, p. 32.
74
8
Viñao, Antonio, Higiene…
9
Esteban Rodríguez Ocaña, “La salud infantil, asunto ejemplar en la historiografía contemporánea”,
DYNAMIS. Acta Hispanica ad Medicinae Scientiarumque Historiam Illustrandam, Granada, 23, 2003, p.
32.
75
que la ciencia nos dice actualmente acerca de cómo debe vivir un ser
humano…”10
10
Eleodoro Domínguez, El Problema de Nuestra Educación Pública (Imp. W. Gnadt. Santiago de Chile,
1935), p. 18.
11
Jorge Rojas se ha especializado en historia de la infancia, sin embargo varias de sus publicaciones integran
la problemática racial, ver uno de sus últimos trabajos “Los rasgos físicos de los chilenos” en Álvaro
Góngora y Rafael Sagredo, Fragmentos para una historia del cuerpo en Chile: Santiago, Chile, Taurus,
2009. Pablo Toro se ha dedicado a la historia de la educación, ver su artículo “Como se quiere a la bandera:
notas sobre nacionalismo, ciudadanía y civilidad en la educación chilena (1910-1945) en Gabriel Cid y
Alejandro San Francisco, Nación y nacionalismo en Chile: siglo XX, Santiago, Chile: Eds. Centro de
Estudios Bicentenario, 2010. En este mismo volumen hay otros artículos atingentes de Peter Barr Melej y
Bernardo Suberceseux. De Gabriel Cid, véase también “Médicos, abogados y eugenesia negativa en Chile,
1933-1941”, Anales de Historia de la Medicina, Vol. 19, N° 1, 2009. Por último, la tesis de licenciatura de
Javiera Letelier Carvajal “Gobernar es Poblar… Seleccionadamente” Ideas Eugenésicas en Chile 1925 –
1941, UAH, 2009.
13
Armando García González; Raquel Álvarez Peláez, En busca de la raza perfecta. Eugenesia e higiene en
Cuba (1898-1958), CSIC, 1998, p. XXXIX.
76
con una cantidad importante de trabajos de gran nivel y que en las últimas décadas se ha
producido un mayor interés por esta temática. 14
Las problemáticas sociales no solo incluían a los recién nacidos y a los niños, sin
embargo la nueva concepción de infancia que surge en período, y por la incorporación del
discurso científico del que estamos dando cuenta, dichos grupos se convirtieron en sujetos
clave de intervención social16. A su vez, si observamos que la mortalidad infantil y el
analfabetismo por mencionar dos problemáticas gravísimas en Chile, muy discutidas y
atingentes a nuestros fines, comprendemos la injerencia del discurso eugenésico en esta
dimensión.
14
Uno de los estudios más completos sobre eugenesia en América Latina, que por cierto ni menciona a
Chile, en Nancy Leys Stephan, The hour of Eugenics. Race, gender and nation in Latina American, Ithaca,
Cornel University Press, 1996. Ver también el trabajo de Miranda M, Vallejo G, (comps). Darwinismo
social y eugenesia en el mundo latino. Argentina: Siglo XXI; 2005. Sobre Brasil, el interesante trabajo de
Jerry Dávila, Diploma of Whiteness. Race and Social Policy in Brazil, 1917-1945, Durham, Duke University
Press, 2003.
15
Francis Galton, Herencia y eugenesia, Madrid: Alianza Editorial, 1988, p. 119. Citado por Daniel
Soutillo, en Ludus Vitalis, vol. XIV, núm. 25, 2006, p. 31.
16
Claramente no fueron los únicos; los obreros también suscitaron gran atención pues estaba el elemento
económico empieza considerarse. Las políticas del período favorecerán a niños, madres y obreros por lo
general.
77
“No todos los niños pueden llegar a ser lo que los padres desean.
El talento y la inteligencia no son producto de la educación; se
17
Nos quisimos entrar en mayores tecnicismos para no desviarnos de la argumentación, pero cabe precisar
que la eugensia fundada por Galton fue sufriendo modificaciones. Una de las principales divisiones fue la
tendencia weismanniana-mendeliana versus la lamarckiana o neo-lamarckiana.
18
García González…, En busca de la raza perfecta…, p. XXII.
78
19
Moisés Mussa, “La actividad en los niños”, Revista de educación, noviembre de 1937, Número 92, año
VII, s/n. El subrayado es nuestro.
20
Moisés Mussa, “Las diferencias individuales”, Revista de educación, N°88, Año VII, julio de 1937, s/n.
21
Moisés Mussa, “Las diferencias individuales”.
22
Moisés Mussa, “Las diferencias individuales”.
79
sobre factores hereditarios o ambientales en un mismo escrito. Sin embargo, como señalan
algunos especialistas, las posturas eugénicas no fueron absolutas y coinciden justamente
con la toma de consciencia de que las condiciones de vida eran decisivas para la
educabilidad de la población. De hecho, en la misma Revista de Educación, bajo el título
“¿En qué consiste el progreso humano?”, se presenta una visión radicalmente diferente,
pero que también incorpora el elemento racial, ahora desde la sociología:
Además de las políticas como el Servicio Médico Escolar o los cursos obligatorios de
higiene que se establecieron desde fines del siglo XIX, un ejemplo interesante de las
intervenciones en el sistema escolar fueron las colonias escolares o estadías en preventorios,
donde los niños podrían pasar “temporadas de salud”. Parte de los costos de estas
iniciativas eran cargados al Ministerio de Educación como se puede observar en esta nota
de 1940:
23
A. Pereira Alves “¿En qué consiste el progreso humano?, Revista de Educación, Abril 1937, Número 85,
VII, s/n.
80
Como podemos constatar, en este tipo actividades confluyen una serie de elementos
que concitan nuestro interés en pos de dar cuenta de la temática enunciada; la medicina se
integra al sistema educacional no solo a nivel discursivo durante este periodo. Las colonias
escolares, los preventorios, las actividades de la Cruz Rojas y una multiplicidad de eventos
deportivos y extraescolares que tenían como fin último la salud, y el desarrollo integral de
los estudiantes, se hicieron cada vez más frecuentes. 25 De hecho, muchas de las iniciativas
que incorporaban elementos raciales no solo aludían a aspectos físicos y corporales sino
también de personalidad. La “formación del carácter” se convirtió en una temática de gran
relevancia en educación. En el surgimiento de la orientación profesional puede observarse
con claridad este interés. En 1941, en el Boletín de Escuelas Experimentales, se publica un
interesante artículo a raíz de la creación del departamento de orientación profesional. Bajo
el título, “Algunos aspectos de la organización del trabajo de Orientación Profesional en la
escuela primaria”, se sostiene la relevancia del cuadro biotipológico o psicograma. En el
caso citado, se consideraba: Datos generales, salud, inteligencia, escolaridad, datos
profesionales, examen mental, examen de conocimientos, inspección vocacional,
orientación profesional y educacional. La biotipología buscaba clasificar según diversos
criterios a los individuos, en este a los estudiantes, aunque sus orígenes se remontan al área
de la criminalística. Cabe precisar que la medicina, entendida en su sentido más amplio,
había comenzado su ingreso a la escuela a través de los servicios sanitarios a los escolares y
mediante los cursos que se impartían en las escuelas que buscaban promover hábitos
24
ARNAD, Vol 8249. Contabilidad. Núm. 844. Santiago, 3 de Diciembre de 1940.
25
Las fuentes en revisión así lo atestiguan, aun no podemos dar cuenta del panorama completo con
ejemplos específicos.
81
higiénicos que “a través de los niños podían llegar a las familias y, por extensión, al
conjunto social”26. De allí también la importancia del espacio escolar.
Ahora bien, tan relevante como fue la biología con el referente eugenésico; y la
sociología y la psicología en este periodo; la economía como disciplina va a comenzar su
despegue influyendo en el discurso educacional. Es interesante que profesores que ejercían
en escuelas establecieran relaciones entre estas distintas perspectivas, lo que nos demuestra
una vez más la imbricada interrelación disciplinar e ideológica. Samuel Jiménez, profesor
26
Mercedes del Cura, Medicina y pedagogía: la construcción de la categoría "infancia anormal" en España
(1900-1939), CSIC, 2011, p 53.
27
Rojas, “Los rasgos físicos de los chilenos”, p. 84. Para mayores antecedentes ver la tesis de Alberto Mesa
V. Análisis del Servicio Médico Escolar: tesis para optar al grado de médico- cirujano de la Universidad de
Chile, (Santiago: Impr. Ela, 1948), 103 pp.
82
28
Samuel Jiménez S. Alimentación y educación física del niño primario, (Talca: Torre, 1946), p. 100. El
subrayado es nuestro.
29
Ver entre otros estudios: José Miguel Pozo R., El Congreso Nacional de la Educación Secundaria de 1912
en la perspectiva de la evolución de la educación chilena, Santiago, Chile, Academia Superior de Ciencias
Pedagógicas de Santiago, 1990; Andrea López E., Congreso Nacional de Enseñanza Secundaria de 1912
(Tesis para optar al grado de licenciado en Historia, Santiago, Pontificia Universidad Católica de Chile,
1993).
30
Si bien hemos revisado una diversidad de fuentes, no estamos en condiciones de aseverar la regularidad
del uso del concepto capital humano. En este artículo, nos referimos al uso literal, claramente la idea de
que la población es relevante para la riqueza del país es más generalizada. Por otra parte, es evidente que el
concepto de capital humano hace referencia al valor de las personas, pero en la teoría económica desde la
década del sesenta en adelante tiene otras connotaciones en un contexto diferente.
83
Esta aguda crítica nos recuerda la gravedad de las problemáticas sociales de la época,
y nos remite a la relevancia asignada a la escuela en la formación de personas, ya que:
31
Pedro Aguirre Cerda, Discurso pronunciado en la Junta del Partido Radical al asumir la presidencia del
partido, 19 de diciembre de 1934. El destacado es nuestro.
32
Fernández Bobadilla, Enrique, Defensa de la raza y aprovechamiento de las horas libres: las condiciones
de trabajo y la vida obrera, (Tesis (Licenciado en Derecho), Universidad de Chile Santiago, 1941), p. 124.
84
Como hemos podido visualizar en este artículo, el discurso educacional integra, por
primera vez, la dimensión del desarrollo productivo y del capital humano. La mirada sobre
la ciudadanía, sobre la raza, sobre el niño, y finalmente sobre el sujeto, se amplia y se
complejiza en virtud del desarrollo de las ciencias, y de las necesidades del país. A su vez, el
cuestionamiento sobre el cómo solucionar los problemas que aquejaban a la población,
fueron potenciando el rol del Estado en dichas materias, lo que generó políticas que
buscaron objetivos tan ambiciosos como mejorar la raza.
33
Maximiliano Salas, “Educación Cívica”, Revista de Educación, febrero de 1937, número 83, año VII.
85
Bibliografía
Fuentes primarias
Archivos
Periódicos y revistas
Impresos
Fuentes secundarias
Resumen
La Escuela Normal Superior José Abelardo Núñez (JAN) fue la primera institución de su
tipo en Chile y Latinoamérica (1842-1973). A cuarenta años de su cierre, el “Proyecto
Escuela Normal JAN” surge como una iniciativa orientada a recuperar y difundir la
memoria -en cuanto experiencias pedagógicas- y el patrimonio de esta relevante institución
en la historia nacional. Hoy, en momentos en que se discute sobre la calidad de la
formación docente, los resultados de este proyecto pueden ser un interesante ejercicio de
reflexión sobre nuestra propia historia pedagógica. El siguiente artículo presenta, en forma
breve, los sustentos conceptuales del proyecto, su planteamiento original y las
modificaciones posteriores, el desarrollo de las actividades que lo componen (entre ellas,
los Talleres de Narrativa, encuentro entre comunidades, recopilación de fotografías y
testimonios) y las proyecciones para continuar este trabajo de recuperación.
Palabras clave
1
Profesor de Educación General Básica de la Universidad de Santiago de Chile, Diplomado en Patrimonio,
Comunidad y Cultura Local de la misma institución. Autor y Coordinador del Proyecto Escuela Normal
JAN.
88
INTRODUCCIÓN
La Escuela Normal Superior José Abelardo Núñez (JAN) fue la primera institución
de su tipo en Chile y Latinoamérica. Durante más de 132 años, forjó una destacada
tradición en la formación de profesores primarios. Sin embargo, un decreto de la nueva
Junta de Gobierno, en diciembre de 1973, terminó con la formación normalista en todo el
país. De esta manera, la Universidad Técnica del Estado (UTE), institución cercana a la
JAN, recibe sus muebles e inmuebles, además de gran parte de sus estudiantes que aún no
habían concluido su formación.
La UTE, que por sucesión del antiguo Instituto Pedagógico Técnico sólo formaba
profesores de secundaria y de nivel técnico, se ve en la necesidad de crear la carrera de
Educación General Básica (1974), en las mismas dependencias de la ya ex JAN, intentando
continuar con su legado.
Con el paso del tiempo y luego de una serie de hitos lamentables –como el cierre de
las carreras de pedagogías de la UTE y la destrucción del edificio de la JAN-, la herencia
normalista fue difuminándose hasta la actualidad, cuando es prácticamente desconocida al
interior de la actual Universidad de Santiago de Chile, ex UTE.
A nivel de sociedad ocurre un hecho similar: lejos van quedando los profesores
normalistas, jubilados en su mayoría. Su historia y trascendencia sólo parece ser conservada
por ellos mismos, a través de su asociación nacional y de los centros de ex alumnos de las
diferentes Escuelas Normales.
La Escuela Normal Superior José Abelardo Núñez o JAN fue fundada por el político
e intelectual argentino Domingo Faustino Sarmiento, el 14 de junio de 1842, bajo el
nombre de “Escuela Normal de Preceptores”. Tuvo una gran transcendencia histórica al ser
la primera institución de su tipo en Chile y Latinoamérica. Antes de su creación, la
formación inicial docente prácticamente no existía, “había gran escasez, se improvisaba
mucho y predominaba el bajo nivel cultural entre quienes ejercían la enseñanza” 2.
2
Iván Núñez, La formación de docentes. Notas históricas. En B. Avalos, Profesores para Chile: Historia de
un Proyecto. (Santiago: Ministerio de Educación. 2002).
3
Cristián Cox y Jacqueline Gysling, La Formación del Profesorado en Chile 1842-1987. (Santiago: CIDE.
1990).
4
Miguel Gimeno, La Escuela Normal Superior José Abelardo Núñez. Memoria y Primeros Aportes
Formativos Para Educación General Básica Usach, (Tesis para optar al Título de Profesor de Educación
General Básica, Universidad de Santiago de Chile, 2011).
90
principalmente ubicadas en el centro-sur del país, entre las que destacan San Francisco de
Mostazal, Granero, Rancagua, Los Lirios, San Fernando5.
En 1929, bajo el Gobierno de Carlos Ibáñez del Campo, se construye el edificio que
albergará a la Escuela de Aplicación Anexa a la Normal “República de Venezuela”, en
donde los futuros maestros normalistas llevarán a la práctica todos aquellos conocimientos
teóricos aprendidos.
5
ANPN AG. Mater Maestra - Asociación Nacional de Profesores Normalistas de Chile. (Santiago, 2010).
6
Iván Núñez., "Las Escuelas Normales: Una historia de fortalezas y debilidades. 1842 – 1973". Revista
Docencia, Nº 40. 2010. Recuperado: 19 junio 2011, desde:
http://www.revistadocencia.cl/pdf/20100907015901.pdf
91
técnico que el sistema requería en la educación primaria 7, lo que motiva que una cantidad
significativa de maestros normalistas, que habían estudiado en otras Escuelas Normales del
territorio nacional, viajen hasta la capital para perfeccionarse en la JAN.
11
Juan Guillermo Múñoz, Carmen Norambuena, Luis Ortega, Roberto Pérez, La Universidad de Santiago
de Chile: Sobre sus orígenes y su desarrollo histórico. (Santiago: Salesianos, 1987).
12
Miguel Gimeno, La Escuela Normal Superior José Abelardo Núñez…
93
Los conceptos que sustentan el Proyecto Escuela Normal JAN son, en primer lugar,
patrimonio y memoria. De estos conceptos derivan los procesos de activación patrimonial
o patrimonialización, que es en definitiva lo que se espera llevar a cabo por medio de las
diferentes acciones o hitos.
13
Juan de Dios López. "Tradición, conflicto y valores en la fiesta: el patrimonio inmaterial desde un
enfoque intercultural". En F. J. García Castaño y N. Kressova. (Coords.). En: Actas del I Congreso
Internacional sobre Migraciones en Andalucía. pp. 1893-1901 (Granada: Instituto de Migraciones, 2011).
14
Ana Mantecón, “Presentación”. En: Alteridades Nº 6. El patrimonio cultural. Estudios contemporáneos,
(Universidad Autónoma Metropolitana, México), 3-9. 1998.
94
social. Es decir, más que un supuesto valor en sí mismos de los bienes patrimoniales, tal
valor es atribuido en procesos en los cuales se les asigna representación y autenticidad. En
este caso, por mucho que se considere que los edificios persistentes de la JAN construidos
en 1889 o sus relatos testimoniales puedan tener un valor patrimonial inherente, la
realidad es que ese valor se lo asignan las propias comunidades en procesos de significación
socioculturales. De ahí que la participación de ellas sea fundamental.
Este proceso de construcción del patrimonio, desde y para las propias comunidades,
es lo que Prats (1997)16 ha denominado proceso de “activación patrimonial” o
“patrimonialización”, es decir, la situación o espacio por el cual distintos sectores sociales o
comunidades, con recursos y poder desiguales, discuten y negocian los criterios de
selección, atribución y condiciones de la acción patrimonial. El patrimonio, por lo tanto,
no existe más que cuando es “activado”17. En ese sentido, sin duda que este proyecto
involucra la negociación entre quienes lo sustentan y el poder, representado en este caso en
15
Alicia Martín, Fiesta en la calle. Carnaval, murgas e identidad en el folklore de Buenos Aires (Buenos
Aires, Colihue. 1997).
16
Llorenc Prats, Antropología y patrimonio. (Barcelona, Ariel, 1997).
17
Llorenc Prats. Concepto y gestión del patrimonio local. En: Cuadernos de Antropología Social Nº 21,
2005, pp. 17-35.
95
el rol del Rector de la Universidad, quien es el propietario legal del inmueble y quien debe
autorizar la mayoría de las actividades planteadas.
18
Antonio Fernández de Rota. "Del objeto etnográfico como vida a la vida como espectáculo". En: Anales
de la Fundación Joaquín Costa, No 17, Huesca. 2000.
19
UNESCO. Convención para la Salvaguardia del Patrimonio Cultural Inmaterial. Adoptada por la
Conferencia General en su 32ª reunión celebrada en París, el 17 de octubre de 2003.
20
Gilberto Giménez, Materiales para una teoría de las identidades sociales. Frontera Norte. Vol. 9.
(Tijuana, México: Colegio Frontera Norte, 1997).
96
21
Andrés Recansens, "Identidad en tanto que diferencia". En: Conferencia inaugural / cuarto congreso
chileno de antropología, 19 de noviembre de 2001. (Santiago, Chile: Universidad de Chile, 2001).
22
M. Garcés, "Las Canteras de Colina: ¿Cómo determinar la existencia de Arte y/o Artesanía?" (Santiago,
Chile). En: Trabajo de Investigación, Cátedra Antropología Rural; Prof. Milka Castro, Univ. de Chile.
(Disponible para consultas en la biblioteca de la I. Municipalidad de Colina). 1999.
23
Pierre Ricoeur, La memoria, la historia, el olvido. (Madrid: Editorial Trotta, 2003).
97
formación, con el fin de conectar ambas experiencias formativas y destacar elementos que
pudiesen significar aportes en la formación inicial docente. Finalmente, muy relevante fue
el grado de desconocimiento por parte de la comunidad de la U. de Santiago de lo que
significó la JAN durante tantos años, especialmente por parte de los estudiantes. Ante esto,
incipientemente se sugería la nominación del sitio en cuestión como “Sector JAN”, la
incorporación de paneles informativos y el inicio de las gestiones para su declaratoria como
Monumento Nacional, con el fin de preservar en mejores condiciones las instalaciones aún
existentes.
De esta forma, el proyecto se organiza cuatro etapas, con sus respectivas actividades:
Escuela Normal JAN y su Escuela Anexa, entendiendo este hecho como una acción
permanente.
En esta etapa, se propone desarrollar una serie de actividades que involucren trabajo
directo e indirecto con ambas comunidades (JAN y U. de Santiago), que le otorgarán el
sustento sociocultural necesario a las posteriores actividades de carácter institucionales. Es
decir, es aquí donde se espera otorgarle sentido y significado al trabajo patrimonial, a través
de las siguientes actividades:
En esta etapa, una vez configurado los elementos socioculturales aportados por las
Comunidades involucradas –y en algunos casos de forma paralela-, se propone desarrollar
actividades desde las Instituciones u “oficialidad”, que otorgarán un importante aporte al
proceso de activación patrimonial.
Objetivo general.
Objetivos específicos.
Acciones a realizar:
El año 2013, al cumplirse 40 años desde el primer decreto que terminó con el
sistema normalista, se planteó como el de mayor actividad en el proyecto, con la intención
103
Tal vez donde más se avanzó fue en la recuperación de material referente a la JAN.
Estas donaciones se realizaron mediante diferentes vías, siendo las más frecuentes el envío
por medio de la página web, correo electrónico y Facebook. Además, se recibió una
investigación completa sobre esta institución, realizada por Arquitectos de la U. de
Santiago, con material inédito hasta la fecha.
Tiempo después se creó una página en Facebook, esta vez con el nombre de la
Escuela Normal (www.faccebook.com/escuelanormaljan), para que pudiese ser encontrada
fácilmente por los interesados, donde también se subiría de forma constante material sobre
la JAN y se esperaba alguna interacción por parte de los normalistas.
Como conclusión de este punto y más allá del prejuicio inicial, cabe señalar que las
TIC fueron fundamentales para los objetivos del proyecto, superando largamente lo
esperado. La página web permitió visitas de normalistas desde el extranjero, el reencuentro
entre compañeros que hace muchos años no se veían, además de constituirse como una
excelente vía de comunicación de las actividades. A su vez, Facebook fue una potente
herramienta de interacción entre los egresados de la JAN, comunidad de la U. de Santiago
e interesados en general. En cada fotografía o noticia subida, se producían comentarios de
estas comunidades, enriqueciendo la participación. Para muchos -especialmente los 370
seguidores en Facebook-, gracias a estas tecnologías, la JAN estuvo constantemente presente
durante este año.
Talleres de memoria:
Por medio de estos talleres, se esperaba producir textos que de lo individual, pasen a
lo común, a lo compartido y finalmente a lo público. Y, luego, poner en circulación textos
para compartir saberes, experiencias y sentires que puedan orientar a otros docentes, por
medio de un libro y documental.
Los talleres, establecidos como el hito principal del proyecto al otorgarle sentido y
contenido a las demás actividades, permitieron descubrir valiosas experiencias pedagógicas
y cotidianas de los maestros que participaron, las cuales no encontraremos en los textos
oficiales. Por ejemplo, valoramos la historia referida a los zurdos en la Escuela Normal, el
riguroso sistema de ingreso, las competencias deportivas contra otras instituciones, la vida
105
Documental JAN:
Exposición fotográfica:
Se diseñó y llevó a cabo una ruta patrimonial en el marco del 112º Encuentro de
Egresados EAO/UTE/USACH, con la participación de normalistas y egresados de todas
las instituciones.
Dos monitores guiaron a los asistentes en torno a una serie de hitos: ingreso JAN,
ala oriente, ala poniente, antiguo gimnasio, piscina y Escuela Anexa, relatando algunos
acontecimientos relacionados con el contexto histórico y su uso actual. Sin embargo, el rol
protagónico lo asumieron los normalistas, compartiendo sus anécdotas y recuerdos vividos
en cada punto. El momento más significativo ocurrió cuando, en medio del tercer hito (ala
oriente), los normalistas hicieron ingreso a una antigua sala de la JAN que se mantiene
prácticamente intacta e instintivamente se sentaron de en sus puestos, reviviendo sus
jornadas como estudiantes.
A finales del 2013, se trabajó en conseguir apoyos diversos que respalden una
posible declaratoria de Monumento Nacional del ala oriente y poniente de la JAN, más su
antiguo gimnasio y la Escuela Anexa, que es básicamente lo que se mantiene hasta hoy. En
cuanto a las centenarias palmeras y árboles, será motivo de estudio posterior su inclusión
en esta propuesta.
Detrás de esta esperada declaratoria, como producto final del proyecto, se plantea
una protección permanente de la JAN, con la intención de que las futuras generaciones -
principalmente docentes en formación- puedan hacer uso de sus instalaciones, valorarlas y
108
reconocer otros procesos formativos históricos. Además, se lograría aquello por lo que
tanto abogaron la Municipalidad de Estación Central y el Colegio de Arquitectos en 1985,
antes de la demolición del edificio principal.
A través de diversas gestiones, se logró el apoyo explícito por medio de carta de parte
de la Asociación Nacional de Profesores Normalistas de Chile y el Centro de Ex Alumnos
de la JAN, la Asociación de Funcionarios de la U. de Santiago (AFUSACH), de los
Directores de los Departamentos de Educación, Filosofía y de la Escuela de Arquitectura,
la Directora de la Fundación de Egresados y Amigos de la U. de Santiago (FUDEA), el
Decano de la Facultad de Humanidades (FAHU), el Director de la Asociación de
Académicos de la U. de Santiago (ASOACAD) y el Grupo de Pedagogías Unidas de la U.
de Santiago. Faltó, hasta el momento, concretizar el apoyo del Rector de la U. de Santiago,
de la Federación de Estudiantes (FEUSACH), de autoridades comunales y de
organizaciones.
Cabe destacar lo fundamental que es contar con la mayor cantidad de apoyos que
respalden una posible declaratoria. Entre todos estos respaldos, es imprescindible la del
Rector de la U. de Santiago, en su calidad de propietario legal del inmueble, quien debe
dar el visto bueno a esta iniciativa.
6. PROYECCIONES
Una vez concluido el 2013, que -como ya se mencionó- es el año más relevante para
el proyecto, se planea continuar con el trabajo en torno a actividades puntuales:
Publicación de libro JAN: Tal vez una de las actividades más relevantes para el
año 2014, es la edición y publicación de un libro recopilatorio de las
experiencias pedagógicas de normalistas, sumado a fotografías y un contexto
histórico de la JAN. Estas experiencias pedagógicas son aquellas recuperadas en
las diferentes sesiones del taller de memoria, reuniendo relatos que no se
encuentran en los libros oficiales. El libro es uno de los elementos más
detallados como producto de este proyecto, por lo que se espera la impresión de
cierta cantidad de ejemplares, la distribución a los normalistas (asociación y
personas que asistieron a los talleres), comunidad universitaria y probablemente
la venta para interesados.
Una vez concluidas todas las actividades, se espera, al menos, mantener los espacios
virtuales -página web y Facebook-, con publicaciones temporales constantes, haciendo de
este proyecto y sus actividades una iniciativa que trascienda más del espacio de uno o dos
años.
7. CONCLUSIONES
La Escuela Normal Superior José Abelardo Núñez (JAN), cerrada hace 40 años,
resurge hoy por medio de diversas actividades en el marco del “Proyecto Escuela Normal
JAN”, iniciativa que planteó la recuperación y difusión de la memoria y el patrimonio de
esta institución.
Otro elemento a destacar en este trabajo fue el inesperado pero relevante aporte de
las tecnologías de la información y la comunicación (TIC), especialmente la página web y
Facebook, que permitió generar espacios de encuentro e interacción entre las comunidades
involucradas y la sociedad en general. No sólo fue utilizado como una vía de difusión, sino
que la participación se vivenció directamente en cada fotografía o contenido publicado.
Bibliografía
Fuentes primarias
Fuentes secundarias
(Coords.). En: Actas del I Congreso Internacional sobre Migraciones en Andalucía, pp.
1893-1901. Granada: Instituto de Migraciones. 2011.
Mantecón, Ana, “Presentación”. En: Alteridades Nº 6. El patrimonio cultural.
Estudios contemporáneos. Universidad Autónoma Metropolitana, México, 3-9.
1998.
Martín, Alicia, Fiesta en la calle. Carnaval, murgas e identidad en el folklore de
Buenos Aires. Buenos Aires, Colihue. 1997.
Muñoz Juan Guillermo, Norambuena Carmen, Ortega Luis, Pérez Roberto, La
Universidad de Santiago de Chile: Sobre sus orígenes y su desarrollo histórico.
Santiago: Salesianos. 1987.
Núñez, Iván, La formación de docentes. Notas históricas. En B. Avalos, Profesores
para Chile: Historia de un Proyecto. Santiago: Ministerio de Educación. 2002.
Núñez, Iván, Las Escuelas Normales: Una historia de fortalezas y debilidades. 1842
– 1973. Revista Docencia, Nº40. 2010. Recuperado: 19 junio 2011, desde:
http://www.revistadocencia.cl/pdf/20100907015901.pdf
Prats, Llorenc. Antropología y patrimonio. Barcelona, Ariel. 1997.
Prats, Llorenc. Concepto y gestión del patrimonio local. En: Cuadernos de
Antropología Social Nº 21, pp. 17-35, 2005.
Recasens, Andrés, Identidad en tanto que diferencia. En: Conferencia inaugural /
cuarto congreso chileno de antropología, 19 de noviembre de 2001. Santiago,
Chile: Universidad de Chile. 2001.
Ricoeur. Pierre, La memoria, la historia, el olvido. Madrid: editorial Trotta. 2003.
UNESCO. Convención para la Salvaguardia del Patrimonio Cultural Inmaterial.
Adoptada por la Conferencia General en su 32ª reunión celebrada en París, el 17 de
octubre de 2003.
114
Inventario bibliográfico
115
E
ste breve texto, comienza planteando que hay
un divorcio entre la educación, las necesidades
de las personas y las exigencias de la sociedad,
Víctor Troncoso y Juan
evidenciándolo mediante una suerte de Sandoval, La
“radiografía de la realidad educacional” de mediados consolidación de la
de siglo XX, dando cuenta de los graves problemas y
las principales urgencias de ese entonces, como los Educación Pública.
altos niveles de analfabetismo, el trabajo prematuro o Imprenta Germinal,
la falta de capacidad de las escuelas para tener
Santiago de Chile,
estudiantes. A partir de ello, los autores concluyeron
que el sistema educacional carecía de una estructura 1954.
funcional que lo organizara y proyectara su carácter
eminentemente social. Por el contrario, Troncoso y
Sandoval observaban cómo éste estaba siendo
desarticulado y dispersado, sin lograr jerarquizar los
problemas en función de su trascendencia social, lo que tuvo como resultado el desatender
a las y los estudiantes al no contar con un sistema continuo y coherente que los conduciera
según sus aptitudes y capacidades desde la escuela de párvulos a la universidad, lo que tenía
un gran costo fiscal.
Con estas propuestas los autores abordaron las relaciones entre escuela, comunidad
educativa y territorio, vinculando el hacer de la escuela con los intereses y necesidades de
quienes estudian en ella y además de las demás personas que vivían en el espacio donde
estaba emplazada. A partir de estas relaciones, proyectoron la creación de un
Departamentos y Zonas Experimentales, además de presentar “Soluciones de Emergencia”
para resolver problemas de corto plazo.
Al finalizar el texto los autores realizan una crítica más política, señalando, entre
otras cosas, que los docentes que aprecian la educación en función del Estado sólo buscan
su acomodación y la de sus partidarios, mientras que ellos orientaban su pensamiento
“hacia la consolidación de un mundo nuevo, que se rehace y se fortalece a pesar de los
imperialismos que tratan de destruirlo y de desquiciarlo para satisfacer sus apetitos de
preeminencias”. Como maestros de largas trayectorias docentes, sindicalistas y políticas,
manifestaban que Chile debía buscar su propio destino tanto en educación como en otros
órdenes de acción, sin ser tributario de intereses foráneos, para lo cual se contaba con un
pueblo ávido de cultura y con la ruta que trazaron algunos independizadores
latinoamericanos.
Sin lugar a dudas, es un texto de gran importancia histórica, ya que junto con
plantear una propuesta que busca responder a las necesidades de su tiempo, siendo fruto
de ciertos conflictos sociales muy importantes. En este sentido, cabe mencionar que sus
autores fueron parte de procesos de lucha por transformar el sistema educativo,
participando activamente agrupados en la Asociación Gremial de Profesores (AGP) en la
década de 1920, en el Movimiento de Escuelas Consolidadas entre las décadas de 1950 a
1970, período durante el cual se publicó este libro, cuyas ideas fueron recogidas,
posteriormente, en la propuesta de la Escuela Nacional Unificada (ENU) donde algunos de
los planteamientos surgidos desde las luchas se pueden ver reflejados.
Cristian Olivares26
26
Estudiante de Pedagogía en Historia, Geografía y Educación Cívica con mención en Geografía en la
Universidad Metropolitana de Ciencias de la Educación (UMCE). Integrante del Colectivo Diatriba de
Pedagogía Militante y del Colectivo de Geografía Crítica Gladys Armijo. Educador popular de la Escuela
Pública Comunitaria. Contacto: cristian.olivares.gatica@gmail.com
118
E
ntre las “víctimas” de la Dictadura Militar
liderada por Augusto Pinochet (1973-1990),
no debemos omitir a las organizaciones e
instituciones que sufrieron a causa de las reformas y
“Cierre de las Escuelas
ajustes implementados por medio de la fuerza: el Normales en Chile”
Sindicato Único de Trabajadores de la Educación,
el Parlamento, los Partidos Políticos, la Central Decreto Ley 179, del 10
Única de Trabajadores. Y, cómo no, las Escuelas de diciembre de 1973
Normales de Chile, instituciones históricas que por
más de 130 años fueron las únicas encargadas de la Decreto Ley 353, del 15
formación del profesorado de Educación Primaria
o Básica de todo el territorio nacional.
de marzo de 1974
Las Escuelas Normales iniciaron sus Junta Militar
actividades en 1842, con la fundación de la Escuela
Normal de Preceptores, posterior Escuela Normal
Superior José Abelardo Núñez (JAN), primera en su
tipo en Chile y Latinoamérica. Luego, al cabo de algunos años, se consolidó una red de
Escuelas dispersas estratégicamente en todo el país. Entre 1973 y 1974, dos Decretos
impuestos por la nueva autoridad militar terminaron abruptamente con la larga tradición
pedagógica de las dieciséis Escuelas Normales chilenas.
Luego del Golpe de Estado de 1973, el nuevo Gobierno no tardó en fijar sus ojos en
estas instituciones. El 10 de diciembre, mediante Decreto con Fuerza de Ley Nº 179, la
Junta de Gobierno ordena suspender las clases en las Escuelas Normales y declara un
“estado de reorganización”, lo que en la práctica significaría el fin del normalismo como
modelo de formación docente. Esta decisión se fundamentó principalmente en dos
argumentos, los que dejan en manifiesto la particular visión de los militares:
Para ejecutar lo dictado en este Decreto, se crea una Comisión Coordinadora Central,
la cual se encargó de proponer pautas para la reestructuración y reorganización del sistema
de formación docente.
Sobre los motivos implícitos en estos Decretos, la comunidad normalista tiene una
visión prácticamente unánime al responsabilizar a la Junta de Gobierno, sus motivaciones
políticas e interés en incrustar desde la base los nuevos valores que ellos promovían,
haciendo de la escuela –y la sociedad- un espacio despolitizado. Los mismos docentes
normalistas consideran que, en general, fueron siempre de una tendencia radical y de
izquierda, lo que era un evidente obstáculo para los propósitos de la Dictadura.
Matizando estas apreciaciones, autores como Iván Núñez plantean que el modelo
tradicional de formación normalista ya no resistía el impacto de las nuevas tendencias y
había entrado en una crisis estructural en que “la intervención de la Dictadura –por sus
propias y espúreas razones- no hizo sino evitar una agonía larga”.
Hoy, a 40 años del fin de las Escuelas Normales, si estas hubiesen resistido el paso
del tiempo o los Decretos adelantaron su cierre, es algo que no podremos saber jamás.
1
Profesor de Educación General Básica de la Universidad de Santiago de Chile, Investigador y
Coordinador del "Proyecto Escuela Normal JAN", iniciativa que busca recuperar el patrimonio y
experiencias pedagógicas de la Escuela Normal José Abelardo Núñez.
122
Artículo 3º Créase una Comisión Coordinadora Central encargada de proponer las pautas
a que deberá ajustarse la reestructuración y reorganización del Sistema de Enseñanza de
formación de profesores. Este informe deberá ser emitido en el plazo de noventa días,
contado desde la publicación del presente decreto ley en el Diario Oficial y deberá ser
123
elevado al conocimiento del Ministro de Educación Pública para la dictación del respectivo
decreto ley. Entre otros aspectos, la referida Comisión deberá considerar la denominación
de la enseñanza, el número, calidad, ubicación y estructura de los establecimientos
educacionales que la imparten; los requisitos de ingresos, evaluación, promoción de
alumnos, los títulos y grados que se otorguen; la reestructuración y dependencia de la
mencionada enseñanza; las calidades que debe reunir el personal que en ella labore y los
planes y programas a que deberá ceñirse.
Artículo 4º La Comisión a que se refiere el artículo precedente estará integrada por las
siguientes personas:
Las personas señaladas en las letras a) y d) de este artículo serán designadas por el Ministro
de Educación Pública. Esta Comisión podrá sesionar con asistencia de a lo menos, tres de
sus miembros; adoptará sus acuerdos por simple mayoría y, en caso de empate, decidirá su
presidente.
Artículo 5º En todas las Escuelas Normales del país, sean fiscales o particulares,
funcionarán, por una sola vez, Comisiones Examinadoras de los alumnos, encargadas de
evaluar su idoneidad para la docencia y sus niveles de rendimiento escolar. Para estos
efectos suspéndese la calidad de alumnos de los establecimientos señalados en el inciso
anterior, mientras las referidas Comisiones Examinadoras emitan el informe respectivo.
Evacuado este informe la Dirección de Educación Primaria y Normal dictará una
resolución en la que se señalará el nivel de estudios aprobado por los alumnos y aquellos
que pierden su calidad de tal.
a) Designar Comisionados Locales en cada una de las Escuelas Normales del país, quienes
tendrán todas las atribuciones y deberes de los Directores de los respectivos
establecimientos, debiendo velar por conservación de los locales y de los bienes fiscales,
124
pudiendo recaer dicha designación en los actuales Directores, o en los que designen en su
reemplazo.
Artículo 2º Transitorio.- Los alumnos del Tercer Año de las Escuelas Normales que se
encuentran atendiendo en forma interina una plaza de profesor en práctica supervisada en
Servicio, continuarán desempeñando dichos cargos hasta el 28 de Febrero de 1974, pero
en cuanto a su calidad de alumnos, quedarán sujetos a lo dispuesto en el artículo 5º del
presente decreto ley.
General del Ejército, Comandante en Jefe del Ejército, Presidente de la Junta de Gobierno.
Núm. 353.- Vistos: los decretos leyes N° 1, de 11 de Septiembre de 1973, y 179, del 10 de
Diciembre de 1973, y Considerando:
1.- Que la formación de docentes para todos los niveles debe realizarse en un proceso
integrado que garantice su mejor nivel académico y profesional, en conformidad con la
elevada función que están llamados a realizar en la sociedad contemporánea.
2.- Que el educador, en virtud de su vocación, debe asumir la conducción del proceso
educativo mediante el cual el hombre alcance el pleno desarrollo de su ser personal y
social.
3.- Que hasta este momento la formación del docente se cumplió a través de las Escuelas
Normales Fiscales y Privadas y por algunas Universidades, circunstancia que, pese a los
valores positivos con que esta tarea fue realizada, produjo ciertas discriminaciones en el
ejercicio profesional de los docentes y una indudable descoordinación en su formación y
perfeccionamiento que se hace necesario superar.
4.- Que debe cumplirse una aspiración y tendencia constante, tanto nacional como
internacional, que todos los docentes se formen en un mismo nivel superior que
corresponda a la jerarquía de la Universidad, y 5.- Teniendo presente el informe elaborado
por la Comisión Coordinadora Central, la Junta de Gobierno de la República de Chile ha
acordado dictar el siguiente
Decreto ley:
Artículo 2°- El Ministro de Educación entregará las normas sobre política de Formación de
Docentes al Consejo de Rectores de las universidades chilenas. Este Consejo de Rectores
para asesorarse en el cumplimiento de estas normas, organizará un Consejo de
Coordinación Nacional de Formación de Docentes bajo su dependencia.
Artículo 4°- Para fijar las normas sobre política de formación de docentes, el Ministerio de
Educación Pública podrá constituir un organismo de Planificación de Formación de
Docentes en el Ministerio que lo asesore en la programación, planificación y elaboración
de las recomendaciones que sobre la materia deberá entregar al Consejo de Rectores de las
universidades.
Artículo 5°- Los bienes fiscales, actualmente en poder de las escuelas del Estado, sean estos:
corporales o incorporales, muebles o inmuebles, podrán ser transferidos a las universidades
que asuman la responsabilidad de la formación de docentes. Dicha transferencia se
formalizará, previo acuerdo entre éstas y el Ministerio de Educación, si ellas lo solicitaren,
bajo las condiciones, plazos y modos que ambas entidades convengan, con arreglo a las
prescripciones legales que al respecto regulen las leyes vigentes sobre la materia.
Artículo 6°- Exceptúanse de lo dispuesto en el artículo anterior, los bienes que actualmente
se encuentran destinados exclusivamente a las Escuelas de Aplicación Anexas a las Escuelas
128
Normales. Quedan excluidos, de la misma manera, los bienes que conforman las
bibliotecas, archivos y obras de arte que posean las Escuelas Normales.
Artículo 7°- La dotación bibliográfica de las actuales Escuelas Normales del Estado podrá
ser destinada a las Universidades que formarán docentes, al Museo Pedagógico, a la
Dirección General de Bibliotecas, Archivos y Museos o al Ministerio de Educación Pública.
Para determinar el material que podrá ser destinado a los organismos mencionados, el
Consejo de Coordinación designará una comisión para que en un plazo no superior a 180
días, contado desde la vigencia del presente Decreto-Ley, proponga los procedimientos y
medidas tendientes al cumplimiento de esta disposición.
Artículo 8°- Los archivos existentes en las Escuelas Normales fiscales del país, en su
integridad pasarán a formar parte de los archivos oficiales del Ministerio de Educación.
Para este efecto el Ministerio deberá habilitar un local especial, en el cual se mantendrán
clasificados cronológicamente y por materias los documentos que cada Escuela Normal
posee a la fecha de vigencia del presente Decreto-Ley. Artículo 9°- El Ministerio de
Educación designará a los Interventores que realizarán el escrutinio e inventario de los
archivos de cada Escuela Normal, para su posterior concentración en el Ministerio.
Artículo 11°- El archivo de la Enseñanza Normal, tendrá por objeto reunir, en un todo
orgánico, los archivos de las Escuelas Normales, tanto para que a él se pueda recurrir para
obtener copias de los documentos que allí existan, como para atender a su mejor
aprovechamiento cultural.
Artículo final.- Deróganse las disposiciones vigentes sobre la materia en todo aquello que
fueren contrarias a lo que se dispone en el presente decreto ley.
DISPOSICIONES TRANSITORIAS
profesionales, en las distintas Escuelas Normales del país y que figuren en la nómina oficial
producto de la aplicación del artículo 5° de D.L. N° 179, de 1973.
Cuarta.- Los actuales alumnos de tercer año de Escuelas Normales que realicen su práctica
supervisada satisfactoriamente y cumplan demás requisitos legales se harán acreedores a
que se les otorgue su título. Aquellos alumnos que no hayan cumplido con el plan de
estudios, para obtener el título correspondiente podrán valerse de medidas especiales que
adoptará el Centro de Perfeccionamiento, Experimentación e Investigaciones Pedagógicas,
durante el año 1974. No obstante lo anterior, podrán ser designados profesores de
Educación Básica en calidad de interinos por el período ya señalado.
Quinta.- Los alumnos que no pudieren continuar sus estudios en 1974, y que cumplan lo
consignado en la Primera Disposición Transitoria, podrán solicitar a la universidad
respectiva que resuelva su situación. Esta facultad sólo podrá ejercerse en el transcurso del
primer semestre del mismo año, siendo definitivo lo que la universidad resuelva.
Sexta.- Para establecer el futuro funcionario del personal que presta servicios en las
Escuelas Normales del país, se fijan las siguientes normas, para cada una de sus actuales
plantas:
a) Docentes Directivos y Docentes propiamente tales podrán ser incorporados a las diversas
universidades y sus sedes con arreglo a las normas estatutarias de cada universidad, en tal
forma que los antecedentes curriculares de los docentes directivos y docentes propiamente
tales serán elementos de juicio para la determinación de su incorporación a esos Centros
de Educación Superior.
130
Séptima.- El personal de las Escuelas Normales y de las Escuelas de Aplicación fiscales del
país, en un plazo de treinta días, a contar desde esta fecha, será reubicado por el Ministerio
de Educación en sus establecimientos y dependencias y en las funciones que éste
determine, sin perjuicio de lo establecido en la disposición precedente. Las rentas que
perciba este personal en el futuro serán las correspondientes al cargo que sirvan y en el caso
de que haya diferencia a favor con respecto de sus rentas anteriores percibidas hasta el mes
de Febrero de 1974, ésta se cancelará por planilla suplementaria.
Educación Pública.
131
E
n Europa, desde la época de Juan Luis
Vives (1492-1540), después con Juan Amos
Comenio (1592-1670) y Juan Enrique
Pestalozzi (1746-1827) se había insistido en la
"Apuntes para la
necesidad de que las personas encargadas de historia de la Escuela
educar, recibieran una preparación adecuada, de Normal de San Luis de
acuerdo a las exigencias propias de la labor
desempeñada. Con el paso del tiempo en el Potosí"
mundo suceden rápidas e importantes
transformaciones que repercuten directamente
sobre la educación en cada uno de los diversos
países. El apogeo internacional de la enseñanza
primaria desde mediados del siglo XIX, trajo
consigo la necesidad de promover y reorganizar las
escuelas normales1.
EN MÉXICO
En Oaxaca, cuando Don Benito Juárez fue Gobernador del Estado se observó un
incremento en el número de escuelas primarias en los distintos departamentos en que se
dividía la entidad, antes de la Constitución de 1857. El número de escuelas en Oaxaca en
el año de 1852 eran de 682. Juárez decidió crear escuelas normales en las cabeceras de los
partidos y expidió el decreto correspondiente en 1850 y para 1852 existían ya ocho
Escuelas Normales 3.
1
Francisco Larroyo. Historia General de la Pedagogía. (México: Editorial Porrúa, S.A. 1973), p. 596.
2
Abraham Castellanos (Recop.) Asuntos de Metodología General relacionados con la Escuela Primaria. 2ª
Edición. (México: Librería de Ch. Bouret, 1909), p. 26.
3
Víctor Raúl Martínez Vásquez. Historia de la educación en Oaxaca 1825/1940 Instituto de
Investigaciones Sociológicas UABJO, (Oaxaca: Talleres de EDI-OAXAQUEÑA, S.A. 1994), p. 16 y 17.
132
El Sistema Lancasteriano fue inventado o adaptado por los ingleses Andrew Bell
(1753-1832) y Joseph Lancaster (1779-1838) a fines del siglo XVIII6 Andrew Bell quien
puso por primera vez en práctica la enseñanza mutua en Egmore, cerca de Madrás, en una
escuela que albergaba unos 200 niños, hijos de soldados ingleses, declara haberse inspirado
en prácticas de las escuelas hindostanas y es probable que Joseph Lancaster haya seguido el
ejemplo de Bell cuando introdujo la enseñanza mutua en la escuela que abrió, movido por
sentimientos humanitarios, en uno de los barrios más pobres de Londres. Bell era pastor
anglicano. Lancaster era cuáquero. La rivalidad religiosa condujo a la fundación de dos
diferentes sociedades para la propagación de la enseñanza mutua. Las modalidades
elaboradas por ambos eran muy semejantes, pero Bell le daba mayor importancia a la
educación moral y religiosa y no aceptaba más que niños anglicanos, mientras Lancaster
4
Juan Zilli. Historia de la Escuela Normal Veracruzana. Colección Suma Veracruzana. (México: Editorial
Citlaltépetl, 1961), p. 32.
5
Manuel Muro. Historia de la Instrucción Pública en San Luis Potosí. (San Luis Potosí: Imprenta,
Litografía, Encuadernación y Librería de M. Esquivel y Compañía, 1899), p. 102.
6
Francisco Larroyo. Historia General de la Pedagogía, p. 505.
133
admitía niños de cualquier religión, preocupándose en enseñarles las nociones que les
ayudarían a lo largo de la vida.7
La tecnología educativa utilizada era sencilla. Los niños recién entrados a la escuela
aprendían a escribir, no en pizarras sino en mesas cuya superficie era una caja de arena
donde trazaban las letras con palitos. Los que ya sabían el alfabeto se sentaban en mesas y
usaban pizarras y lápices hechos de pedazos de pizarras rotas, pulverizados y pegados con
goma. Cada grupo de diez sentados en su mesa era dirigido por un alumno-instructor,
también llamado monitor, que dictaba una letra a los de la primera clase, y una palabra de
una, dos y hasta cinco sílabas a cada una de las siguientes cinco clases. La séptima y la
octava escribían en papel con plumas. Para evitar que las voces de los instructores de las
varias clases se confundieran, cada uno hablaba en orden y después de dictar seis letras o
palabras, esperaban la señal del preceptor para revisar lo que habían escrito sus diez
alumnos. A esta revisión se le llamaba “examen”, y era indicada a los instructores por el
maestro a través del “telégrafo”8, que era un palo que tenía colgado en su punto más alto
7
N. Abbagnano y A. Visalberghi. Historia de la pedagogía. (México: Fondo de Cultura Económica, 1964),
p. 450.
8
Abraham Castellanos (Recop.) Asuntos de Metodología General relacionados con la Escuela Primaria, p.
28.
134
una placa que decía en un lado, en número de 1 a 8 que indicaba la clase, y al otro “ex”
para examen. 9
Don Ramón Adame (fue dos veces Gobernador del Estado de San Luis Potosí de
1846 a 1848 y de 1853 a 1854), ordenó “que en la misma escuela que dirigía el Profesor
Vallejo se estableciera una clase normal para jóvenes que habiendo terminado la
instrucción primaria, quisieran dedicarse a la noble profesión de enseñar”. 10
El Profesor Pedro Vallejo animado por los buenos resultados de los exámenes de sus
alumnos decidió proponerle al Gobernador que era Don Julián de los Reyes la creación de
una Escuela Normal (Iniciativa aprobada por la 6ª Legislatura, elevada a rango de Ley bajo
el número 41 y autorizando al Ejecutivo para que reglamentara dicha escuela en los
términos que creyera convenientes).
El Señor Lic. Don Julián de los Reyes, Gobernador Provisional del Estado, publicó
el 4 de Abril de 1848 el Decreto No. 41 por el que fue creada la Escuela Normal del
Estado. (El día 4 de Marzo de 1849, como se ha dicho, el Lic. De los Reyes declaró
inaugurada la Escuela Normal establecida en el mismo local de la Escuela Principal
Lancasteriana, situada en el lado poniente de la Plaza de las Recogidas, hoy Jardín Vallejo.
9
Isidro Pedro Ortiz Enciso, et al. La Escuela Normal Lancasteriana y su influencia en las bases del sistema
de formación de maestros (México, D.F. Secretaría de Educación Pública. Biblioteca Pedagógica del
Mejoramiento Profesional del Magisterio, 1986), p. 49.
10
Manuel Muro. Historia de la Instrucción Pública en San Luis Potosí, p. 93.
11
Mílada Bazant. Historia de la Educación durante el Porfiriato. (México: El Colegio de México, 1993), p.
129.
135
Imagen 1. Casa para mujeres delincuentes, llamada de Recogidas, con su capilla dedicada a Ntra. Sra. de
los Dolores. Fuente: Peña, Francisco (1979) Estudio histórico sobre San Luis Potosí. San Luis Potosí. México:
Imprenta Evolución.
7º Cada curso durará cuatro años. Al concluir este periodo presentarán un examen general
que comprenderá los siguientes ramos. Gramática General, Lógica, Gramática Castellana,
Ideología, Aritmética teórico práctica, Algebra, primera parte de Geometría o sea tratado
de la extensión en longitud, Escritura, Caligrafía, Doctrina Cristiana, Cartilla Social, o sea
12
Manuel Muro. Historia de la Instrucción Pública en San Luis Potosí, p. 99 y 100.
136
instrucción sobre derechos y obligaciones del hombre en sociedad y teoría del método
lancasteriano.
El primer Director fue el Profesor Don Pedro Vallejo, y contó con 13 estudiantes.
EL Profesor Vallejo fue considerado un educador ejemplar, atacado por la enfermedad del
cólera murió el 5 de junio de 1850 a los 31 años de edad.13
El Reglamento para las Escuelas de Instrucción Primaria del Estado de San Luis
Potosí con fecha 30 de marzo de 1863 con algunos de los artículos que la integran:
1º Ser mayor de 18 años de edad sin llegar a la de sesenta. Ser ciudadano mexicano en
ejercicio de sus derechos y acompañar un certificado de la primera autoridad del lugar de
su residencia, suscrito por tres personas idóneas en el que acredite su intachable conducta
y moralidad.
Artículo 4. La clasificación de los Profesores, será de 1º, 2º, 3º y 4º orden. Para obtener el
título de 1er orden sustentarán el examen de las materias siguientes: Lectura y Ortología;
Escritura y Caligrafía; Aritmética; Gramática Castellana, Nociones de Geografía Física
especializando la del país; Nociones de Historia del País; Cartilla Social; Urbanidad
Teórico-Práctica.
Para obtener el de 3er orden: Lectura; Escritura; Aritmética hasta los decimales;
Gramática, solo Analogía; Doctrina Cristiana.
13
Manuel Muro. Historia de la Instrucción Pública en San Luis Potosí, p. 111.
137
Lectura, Silabario del P. García de San Vicente, libro segundo, libro tercero, amigo de los
niños, Historia de México, Catecismo Constitucional de Pizarro. Ortología, la adoptada
por la Junta. Escritura, inglesa y española, Caligrafía, la que publicará la Junta. Aritmética,
por Bermúdez de Castro. Gramática, la de Don Joaquín Avendaño. Geografía, la de García
Cubas. Historia de México, la de Roa Bárcena. Cartilla Social de la Junta. Urbanidad, la
adoptada por la Junta; Doctrina Cristiana, la de Ripalda explicada por García Mazo.
Historia Sagrada, la del Abad Fleuri.
Para los alumnos servirán de texto los siguientes: Lectura, los mismos que para los
Profesores. Ortología, la adoptada por la Junta. Escritura, inglesa y española. Caligrafía, la
que publicará la Junta. Aritmética Demostrada, la publicada por la Junta. Gramática
Castellana, la de Don Bibiano G. Casamadrid. Geografía la de García Cubas. Historia del
País, la de Roa Bárcena. Cartilla Social, la adoptada por la Junta. Urbanidad, la de Don
Mariano Murguía. Doctrina Cristiana, la del P. Ripalda, Historia Sagrada, la de Abad
Fleuri.
Artículo 9. Las escuelas de la Junta abrirán diariamente de ocho a doce y de dos a cinco
de la tarde. El número de alumnos que se admitirá en cada escuela será el que permita la
capacidad del local respectivo.
Artículo 11. En toda escuela de la Junta habrá, además de los monitores que previene el
sistema referido un ayudante por cada cien alumnos.
138
Artículo 12. Las obligaciones [de los Profesores] que a ambos comprenden son las
siguientes:
1ª. Asistir al establecimiento media hora antes que los niños, a fin de conservar el orden y
de que todo esté preparado para dar principio a las tareas escolásticas.
2ª Anotar las faltas de los alumnos y cerciorarse de las causas que las hubieren
originado….
5ª. Acostumbrar a los niños al aseo en su persona vestido, libros, planas y demás cosas
que les pertenezcan; inculcándoles el deber de conservarlas cuidadosamente.
6ª. Vigilar con estricta observancia, que tanto en la escuela como en la calle, practiquen las
máximas de urbanidad que aprendan. Para que esta importante disposición tenga su más
exacto cumplimiento, se hace preciso que el preceptor respectivo, elija de entre los jóvenes
más juiciosos y circunspectos, un número suficiente de celadores que escrupulosamente
cuiden de que los niños no cometan excesos ni escándalos en el tránsito del
establecimiento a sus casas.
Los celadores darán cuenta a mañana y tarde de las faltas que hubieren reprendido, y de si
a la reprensión, hubiere respondido la irrespetuosidad o la obstinación; para que así el
superior pueda aplicar el castigo merecido.
Artículo 17. Cada tres meses después de comenzado el año escolar, habrá sabatinas en
todas las escuelas de la Junta, éstas se verificarán de la manera siguiente. Dividirá el
preceptor la cifra numérica de los alumnos del establecimiento en tres clases que se
distinguirán con las denominaciones de 1ª, 2ª, y 3ª.; en cada una de ellas practicará un
sorteo, sacando por cada una tres jóvenes que serán los sustentantes del relacionado
examen.
Concluida la última sabatina, en la que ya se presentarán todas las materias del año,
los alumnos comenzarán su repaso y recordación general para prepararse a los exámenes
privados y públicos de que va a tratar el artículo siguiente.
Artículo 18. A fin de año, y en el mes de Noviembre, tendrán lugar los exámenes generales
de todos los establecimientos de la Junta Inspectora de Instrucción Primaria; y para su fiel
cumplimiento, se observarán las disposiciones siguientes:
1ª. Cada Profesor cuidará de remitir a la Junta en el mes anterior, un estado nominal de los
alumnos que se hallan bajo su dirección. El estado se encontrará dividido en las tres clases
generales de que trata el artículo anterior. Cada una de estas clases contendrá el número de
exámenes que en ella habrá de verificarse. Estos podrán ser individuales en grupos de dos,
cuatro, seis o más niños, según su instrucción. Sobre este punto, solo el Director dispondrá
con acierto, en vista de los datos que para ello tiene, lo que a su juicio crea más
conveniente y oportuno.
2ª. En su visita, la Junta nombrará dos Profesores que asociados con el que va a presentar el
examen de su escuela, lo verificarán en el día y hora reglamentados por la misma Junta.
Este acto lo presidirá uno de sus socios; pero sin que en él, tenga voz ni voto. En las
poblaciones foráneas, las Juntas Subalternas suplirán la falta de Profesores, con las personas
que a su juicio merezcan el título de más ilustradas o idóneas.
3ª. Cada sinodal preguntará por un espacio de tiempo que ni baje de un cuarto de hora, ni
exceda de media hora.
5ª. Como estos exámenes son privados, y su principal objeto es calificar el grado de
instrucción, y la aptitud en que se hallen los jóvenes para sostener sus actos públicos; no
concurrirán a ellos sino los padres o tutores de los niños, los sinodales y el socio presidente
de que trata la disposición 2ª de este artículo.
Artículo 19. Estos exámenes comenzarán por las clases superiores, y concluirán por las
inferiores. Pero cuidando siempre de que vayan al fin de las respectivas clases, los grupos
140
mayores de los alumnos, que por su falta de instrucción o por su desaplicación, hubieren
desgraciadamente merecido este lugar.
Artículo 20. Todo alumno que en sus exámenes privados hubiese merecido la suprema
calificación, se hará acreedor también al acto público, que sustentará para su mayor
lucimiento y satisfacción.
Artículo 21. Para los efectos del artículo anterior, la Junta nombrará los sinodales que
juzgue necesarios, eligiéndolos, ya de entre los Profesores titulados, o ya de entre las
personas más notables por su saber e instrucción.
Artículo 22. La Junta Inspectora impuesta de todos los antecedentes relativos a los
exámenes privados; procederá inmediatamente después, a dar la correspondiente
solemnidad a los actos públicos.
Artículo 23. En los lugares foráneos, las Juntas subalternas desempeñarán las mismas
funciones que aquí la Inspectora; remitiendo después a esta, todos los antecedentes y
resultados de los exámenes de las escuelas que estén bajo su inspección.
Artículo 25. En todos los establecimientos de la Junta habrá dos especies de premios.
Premios de instrucción y premios de mérito. (Estos fueron retirados por La Ley de
Educación Primaria en el Estado de San Luis Potosí de 1912)
El primero, lo obtendrán los alumnos que por su clara inteligencia y notables adelantos,
hubieren alcanzado la suprema calificación en sus exámenes privados y públicos. El
segundo, los que hubieren merecido la calificación de buen porte, nobles modales,
asistencia constante y aplicación notoria.
En cada escuela habrá seis premios que se distribuirán a fin de año; siendo los tres
primeros de instrucción y los otros tres de mérito, que se aplicarán, observando las
disposiciones siguientes:
Artículo 26. Los alumnos a quienes no les hubiere tocado en suerte recibir el premio, se
les expedirá un diploma suscrito por el C. Presidente y Secretario de la Junta, declarando
en él, que el alumno fulano, en su examen de tal fecha, fue acreedor por su instrucción o
por su mérito, al premio correspondiente.
141
Artículo 27. Los premios que se distribuyan, consistirán en libros escogidos y adecuados a
la instrucción de la juventud, en colecciones de dibujo, medallas, etc. que los alumnos
conservarán siempre y con su valor estimativo, sin olvidar jamás que la posesión de tan
preciosos objetos, no es más que un timbre de honor, conquistado por sus tiernos talentos
y envidiables méritos.
Artículo 28. Así como la instrucción y una constante aplicación, son dignas de la
retribución y de los premios, así son dignas de los castigos, la supina ignorancia, la
desaplicación y la indolencia; pero la prudencia será siempre el guion de las penas y de las
correcciones, y éstas por lo mismo, quedarán sujetas a las reglas siguientes:
2ª. Anteponer los goces y privaciones a las penas corporales; pero sin que las privaciones
sean de tal magnitud, que puedan causar el detrimento de la salud en el individuo, ni dejar
en él, rastro alguno después de terminado el castigo.
3ª. Hincar a los niños en las horas de estudio o en las horas de clase, imponerles encierro
o jubilarlos en los días festivos. Estas serán las únicas penas corporales de que se hará uso
en todas las escuelas de la Junta Inspectora de Instrucción Primaria.
4ª. La expulsión de la escuela, será la máxima y última pena aplicable a los alumnos; pero
de esta, sola se hará uso en casos extremos y previa disposición de la Junta.
Artículo 29. Para formar en lo sucesivo todos los Profesores de ambos sexos que el Estado
necesita en los establecimientos de instrucción primaria que están a cargo de la Junta
Inspectora, se abrirán dos Escuelas Normales, una de niños y otra de niñas, bajo la
dirección exclusiva de sus respectivos Profesores, y en los lugares que la Junta determine.
Artículo 32. Estos establecimientos abrirán diariamente de las siete de la mañana a las
doce, y de las dos de la tarde a las seis. Las dos primeras horas de la mañana así como la
última de la tarde, las empleará el Profesor exclusivamente en la enseñanza de los
ayudantes, quienes concurrirán a recibirla con la debida puntualidad, sin pretexto ni
excusa alguna. Las restantes horas las empleará en la instrucción general. Aunque el
142
estudio de los ayudantes es de menor duración que el de sus compañeros, nada importa,
puesto que aquellos practican el que les falta enseñando a los niños, y bajo la vigilancia del
preceptor a quien están subordinados.
Artículo 37. Para ser Profesores de la Normal, sustentarán el examen en las materias que
para los profesores de 1er orden, y además, en Geografía, Historia del País, Dibujo y 1er
curso de Matemáticas, con excepción de la Trigonometría; acreditando tener, por lo
menos, cinco años de práctica.
Artículo 38. Las Profesoras serán examinadas en todos los ramos designados a las de 1er
orden, con más los correspondientes a costura y bordado; quedando sujetas a la fuel
observancia de lo impuesto a los Profesores. El sistema que se adoptará para estos
Profesores, será el mutuo y simultáneo.
Artículos Transitorios
1º Todos los sábados, de las tres a las seis de la tarde, habrá Academias de Profesores de
ambos sexos; presididas por los Directores Normales, en sus respectivas localidades. En
estas Academias, se promoverán conferencias, sobre puntos generales de la instrucción
primaria. Se harán, previo estudio competente, proposiciones sobre la adopción de los
mejores autores que puedan servir de texto ya para los Profesores, ya para los alumnos;
sobre reforma del sistema actual de enseñanza, sobre reforma del presente reglamento, y
finalmente sobre todo cuanto tienda a los adelantos y perfectabilidad de la instrucción de
la juventud. Estas proposiciones suficientemente deliberadas y resueltas, la Academia, si lo
acordare por mayoría de sus miembros, las elevará a la Junta para su aprobación.
El Reglamento del año de 1863 clasifica de manera puntual sobre los conocimientos
que deberán tener los Profesores de 1º, 2º, 3er y 4º orden para poder desempeñar su labor
enfatizando la conducta “irreprensible” que los mismos deben manifestar, tanto de palabra
como de hecho, dentro y fuera del establecimiento educativo, lo que permitía una
enseñanza de valores éticos y morales que todo niño y joven deberían aprender para saber
comportarse dentro de la sociedad.
Llama la atención la forma en que los propios docentes deberían ser tratados por
sus superiores “con urbanidad y comedimiento”, resaltando la forma de observar y corregir
143
los errores que se pudieran cometer al interior del salón de clases, siendo ésta de manera
personal, nunca en público.
2º Saber leer, escribir, la primera parte de la Gramática, de la Aritmética hasta acabar los
quebrados comunes, Doctrina Cristiana, Historia Sagrada y Urbanidad.
49.- El cursante que cumplido un año, no manifestare adelantos, será despedido y lo será
también si su conducta fuere mala según informes del Director.
Artículo 1º. Todos los alumnos de la Escuela Normal deberán estar en el establecimiento
a las siete de la mañana y a las dos de la tarde en punto de los días de trabajo, conforme lo
previene el reglamento de escuelas vigente en su artículo 44.
Artículo 2º. Un cuarto de hora después pasará lista el regente de estudios, anotando la
falta de los alumnos que no se hallen presentes.
Artículo 4º. El Director nombrará de entre los alumnos al que considere más a propósito
por su aplicación, buena conducta y modales, para desempeñar el cargo de regente de
estudios, siendo este un cargo honorífico y de distinción.
144
Artículo 10º. No se permite que los alumnos destrocen sin objeto los libros, mapas,
instrumentos y útiles que se les proporciona para su estudio, así como que emborronen las
paredes del establecimiento, haciéndose por ello acreedores al castigo que el Director
prudentemente les imponga según la gravedad de la falta.
Pedro Diez Gutiérrez, Gobernador Constitucional del Estado de San Luis Potosí
(1881-1885) y el X Congreso Constitucional decretaron La Ley Reglamentaria del Artículo
104 de la Constitución del Estado sobre Instrucción Primaria vigente en 1899 (Muro,
1899), elaborada en mayo de 1884.
Artículo 50. La Escuela Normal de Profesoras, estará a cargo de una Directora y una
Subdirectora: ésta será la preceptora de una de las escuelas de que trata el artículo
siguiente. En el establecimiento habitará, por lo menos, una de la superiores.
Artículo 67. Las escuelas públicas se abrirán el día diez de Enero de cada año, fecha en que
comienza el año escolar, y se cerrarán el veinte de Noviembre, en que termina. El tiempo
comprendido entre la clausura y la apertura, será de vacaciones y durante el tendrá lugar la
Academia de la que habla el artículo 23.
Artículo 68. Los exámenes serán públicos, y en cuanto al curso, se dividen en parciales y
generales: los primeros serán de simple reconocimiento y se verificarán dentro de los
primeros seis meses de abiertas las clases; y los segundos en los últimos quince días del año
escolar.
Artículo 71. Los alumnos serán calificados con relación a su instrucción de la manera
siguiente: el alumno que fuere reprobado no será calificado, y los que resultaren
aprobados, se calificarán con estas expresiones: medianamente, bien, muy bien, perfectamente
bien.
Artículo 72. El mismo jurado de examen, en vista de los libros y registros de que habla el
artículo 27, procederá a hacer la calificación de la conducta de cada alumno. Los que la
hubieren tenido mala, no serán calificados, y aquellos que la hubieren tenido buena, se
calificarán con esta expresiones: bien, muy bien. El jurado tendrá en cuenta, ya se trate de
la instrucción o de la buena conducta, los informes verbales del Director del
establecimiento, a que los alumnos pertenezcan.
Artículo 50. La Escuela Normal de Profesoras estará a cargo de una Directora y una Sub-
directora; ésta será la preceptora de una de las escuelas de que trata el artículo siguiente.
En el establecimiento habitará, por lo menos, una de las superiores.
Artículo 51. En cada Escuela Normal, habrá una de Párvulos y otra de niños de tercer
grado, del sexo que corresponda, en las que harán su práctica los alumnos normales. En las
primeras se darán necesariamente la enseñanza objetiva y las segundas se dividirán en tres
secciones, correspondientes a los tres grados de instrucción de que habla el artículo 41.
146
Artículo 52. Los Directores de las Escuelas Normales y de las adjuntas para la práctica
serán indispensablemente Profesores titulados en el Estado.
Artículo 53. Los cursos especiales en las Escuelas Normales serán dados por catedráticos
nombrados por el Ejecutivo.
Artículo 54. Las facultades, atribuciones y obligaciones de los funcionarios escolares antes
dichos, serán determinadas en el Reglamento General de esta Ley.
Artículo 55. Todas las municipalidades del Estado, sostendrán en la Escuela Normal de
Profesores un alumno, pagando la pensión anual de ciento veinte pesos. Las
municipalidades cuyos ingresos no excedan de mil doscientos pesos anuales, pagarán media
pensión, y las que tengan recursos suficientes podrán pensionar más de un alumno
conforme se fije en el presupuesto de cada municipalidad. En la pensión están
comprendidos los gastos de alimentación, vestido, libros, muebles y todo lo que necesite el
alumno.
Artículo 56. Los alumnos pensionados por las municipalidades serán los que más hayan
sobresalido en el grado superior de instrucción que se de en ellas, y serán nombrados por la
autoridad política respectiva, de acuerdo con el Inspector.
Artículo 57. Además de los alumnos pensionados por las municipalidades se elegirán
cuarenta entre los más aprovechados de las escuelas públicas, que serán sostenidos por el
Estado; teniendo también éste la obligación de completar la pensión de los alumnos
correspondientes a las municipalidades pobres.
Artículo 58. En la Escuela Normal de Profesores sólo habrá alumnos internos que se
sujetarán al régimen y condiciones que establece esta Ley y su Reglamento.
Artículo 59. Para ser admitido a la Escuela Normal de Profesores, el aspirante deberá
comprobar:
IV. Presentar el contrato de aprendizaje que sus padres o tutores deberán celebrar
con la primera autoridad política local, bajo estas bases: primera, permanecer en
la escuela hasta concluir la carrera; segunda, servir por seis años el
establecimiento de instrucción que se le designe, mediante la remuneración que
la Ley determine.
Como se puede observar la lectura era una de las materias primordiales que se
cursaban ya que “la práctica de la lectura en el siglo XIX no sólo se daba en el espacio
público de la escuela, sino también en diversos espacios privados, como en asociaciones y
tertulias y en las propias familias. 14
Para 1899 Don Manuel Muro menciona la existencia de dos Escuelas Normales,
una de Profesores y otra de Profesoras, siendo el Director de la primera el Sr. Herculano
Cortés, Profesor titulado de primer orden y la Directora de la Escuela Normal para
Profesoras la Srita. Refugio Marmolejo, Profesora titulada de primer orden: “La educación
14
Luz Elena Galván Lafarga. “Leer es aprender: una práctica del siglo XIX” en Alicia Civera, et al. (Coord.)
Debates y desafíos en la Historia de la Educación en México (El Colegio Mexiquense, A.C. Instituto
Superior de Ciencias de la Educación del Estado de México. México, 2002), p. 191.
15
Bazant, Mílada. Debate pedagógico durante el Porfiriato. Antología. (México. Sep. Ediciones El Caballito
1985), p. 9.
148
aparece como tema primordial de nuestra historia desde los remotos tiempos mexicanos:
formas diversas de enseñanza impartidas por los mayores a los niños, tanto en el
adiestramiento para la vida cotidiana, en especial la agricultura, como en la formación
militar; luego también en la alfarería, la metalurgia, el comercio, la música y la pesca. A las
niñas se les enseñaba a despepitar el algodón, a hilar y tejer, y fundamentalmente a moler
el maíz, hacer las tortillas, cosechar y recoger frutos, hierbas medicinales y la necesaria leña
para el fogón”16.
Al paso del tiempo, el 11 de abril de 1945 se colocó la primera piedra del edificio
actual de la Escuela Normal. El Sr. Don Gonzalo N. Santos dijo solemnemente “Protesto
comenzar y terminar esta Escuela Normal de San Luis Potosí”.
La siguiente imagen muestra el edificio que ocupaba la cervecería y que después fue
adquirido por el Gobierno del Estado de San Luis Potosí para que en sus terrenos se
construyera el edificio de la Escuela Normal. Se puede notar la extensión que tenía el cual
contaba con tres pozos que le surtían del agua necesaria para el funcionamiento de la
empresa.
Imagen 2. Este terreno, propiedad de la Cervecería San Luis, fue el que adquirió el Gobierno del Estado
de San Luis Potosí para edificar las instalaciones de la Escuela Normal. Archivo Personal del Profesor Raúl
Reyes Echeverría (APPRRE), s.f.
16
Conaculta. Secretaría de Educación Pública. Infancia en la memoria. Cien años de educación básica en
imágenes. (México: Ediciones Marca de Agua, 2010), p. 14.
149
17
Alfredo Díaz González Iturbe, et al. La educación, le liberalismo, el positivismo y el auge del
Normalismo. (Biblioteca Pedagógica de Mejoramiento Profesional del Magisterio, 3ª época. México: 1986),
p. 146.
150
Imagen 4. Alumnos de la Escuela Normal del Estado. Fotografía Benjamín Orea Luna.
Imagen 5. Vista parcial de la Escuela Normal del Estado, con sus alumnos.
Fotografía Benjamín Orea Luna. Archivo Personal del Profesor Raúl Reyes Echeverría (APPRRE) 1963.
151
CONCLUSIÓN
Como se puede observar en este documento con el paso del tiempo la Educación Normal
en San Luis Potosí se ha transformado afinando los lineamientos que la distinguen hasta el
día de hoy. La Educación Normal cumple de esta forma con la finalidad para la que fue
concebida. Actualmente la Benemérita y Centenaria Escuela Normal del Estado ofrece los
niveles de Licenciatura, Maestría y Doctorado.
Bibliografía
Fuentes primarias
Archivo Personal Profesora Dafne Evelia Reyes Guerra (APPDERG) San Luis
Potosí, S.L.P. México.
Archivo Personal Profesor Raúl Reyes Echeverría (APPRRE) San Luis Potosí, S.L.P.
México.
Memoria de los trabajos de la Junta Inspectora de Instrucción Primaria durante el
año de 1882. San Luis Potosí. Imprenta de Dávalos.
Reglamento interior de la Escuela Normal para Profesores. San Luis Potosí (1877)
Tip. de la Instrucción Primaria, a cargo de Jesús A. Sierra Reglamento para las
Escuelas de Instrucción Primaria del Estado de San Luis Potosí. (1863) Tip. de
Gerardo Dávalos Reglamento para uniformar la Instrucción Primaria en el Estado
de San Luis Potosí del año 1871.
Fuentes secundarias
Abbagnano Nicola y A. Visalberghi. Historia de la pedagogía. México: Fondo de
Cultura Económica. (1964).
Bazant, Mílada. Debate pedagógico durante el Porfiriato. Antología. México. Sep.
Ediciones El Caballito (1985).
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Larroyo, Francisco. Historia General de la Pedagogía. México: Editorial Porrúa, S.A.
(1973).
153
18
Doctora en Gestión Educativa por el Centro de Investigación para la Administración Educativa
(CINADE). Departamento de Investigación Educativa Sistema Educativo Estatal Regular de San Luis
Potosí, México.
154
E
l 4 de septiembre de 1970 triunfa la Unidad
Popular y asume la Presidencia de la
República Salvador Allende, para quien era “Informe sobre Escuela
necesaria una reforma educativa que convirtiese la Nacional Unificada”
labor pedagógica en un proceso de valoración y
participación política del pueblo, contemplando la
democratización del acceso a la educación en todas las
fases de la enseñanza y una reformulación de los
planes de estudio. Este afán se expresó tempranamente en la realización del Congreso
Nacional de Educación en diciembre de 1971, en el que participaron trabajadores de la
educación, padres, apoderados, juntas de vecinos, representantes estudiantiles, organismos
docentes y organizaciones sociales. El objetivo transversal del Congreso fue la búsqueda de
un nuevo sistema educacional que velara por la descentralización administrativa y
educativa del país, y donde adquiriera una participación activa la comunidad escolar. En
efecto, el Congreso reafirmó la necesidad de la creación de los Consejos de Educación a
nivel regional, provincial y nacional, donde debía asegurarse la participación de las
organizaciones sindicales, estudiantiles y comunitarias, con amplias atribuciones en cuanto
a la elaboración, ejecución y evaluación de los planes educativos.
1
Véase Informe sobre la Escuela Nacional Unificada, apéndice sobre “Caracterización”, 1973.
2
Tesista Licenciatura en Historia, Universidad de Chile. Mail: sihomarah.v@gmail.com.
3
Estudiante 4º año, Licenciatura en Historia, Universidad de Chile. Contacto:emirandachavez@gmail.com.
156
INTRODUCCIÓN
compañero Jorge Tapia Valdés, Ministro de Educación, con motivo de la entrega oficial del
informe.
Esta área irá progresivamente desarrollándose, bajo una planificación muy flexible,
para cubrir en primera prioridad las necesidades educacionales de los inescolares y
analfabetos, los desertores de la enseñanza regular, los trabajadores que requieren una
superación cultural y tecnológica consonante con su nuevo rol, los sectores de irregulares
físicos y sociales, las comunidades locales, especialmente las más atrasadas, etc. Todo ello
sin olvidar las necesidades de recalificación y perfeccionamiento de quienes recibieron una
educación regular o más o menos completa.
2.- FUNDAMENTOS
2.2 La contradicción entre el cada vez más vigoroso impulso popular a los procesos de
participación y solidaridad social y un sistema educacional autoritario, competitivo y
tradicionalista, destinado a producir individuos descomprometidos, egoístas y centrados en
su propio éxito.
2.3 La contradicción entre la poderosa lucha que libra el pueblo a través de una
permanente lucha por mayores conquistas sociales que signifiquen una incorporación real
de los trabajadores a mejores niveles de vida y un sistema educacional discriminatorio e
injusto que, en los hechos sigue negando a la mayoría del pueblo el acceso a la educación,
o discriminándolo en la calidad de la que logra recibir.
2.4 La contradicción entre la poderosa lucha que libra el pueblo para hacer de Chile una
sociedad efectivamente democrática en que el poder lo ejerzan las grandes mayorías y un
sistema educacional diseñado para reproducir la sociedad de clases y su consiguiente
sistema de denominación de las mayorías por las minorías y de la explotación del hombre
por el hombre.
2.5 La contradicción entre las crecientes exigencias científicas y técnicas de la lucha contra
las raíces del subdesarrollo y el deterioro de la capacidad de evolución científico- técnica de
la actual organización escolar.
161
2.6 La contradicción entre una sociedad que aspira a construir su cultura en la valorización
del trabajo productivo como fuente de la realización personal y de la riqueza nacional y una
educación que desprecia el trabajo en favor del consumo como signo de prestigio y
dignidad social.
2.7 La contradicción entre las exigencias de calificación laboral del pueblo como condición
básica de un mejoramiento de la productividad del sistema económico y un sistema
educacional que desvaloriza el trabajo productivo y no otorga, a la inmensa mayoría
ninguna capacitación especial para ejercerlo.
Este proceso trae consigo un doble compromiso a la Educación Chilena; por una
parte pone de manifiesto las incapacidades y deficiencias del sistema educacional para
contribuir al éxito de las tareas que el pueblo hoy se plantea y, por otra parte constituye
una oportunidad histórica para desarrollar un cambio profundo del sistema educacional
que le permita superar las contradicciones que se anotaron más arriba.
Para esa tarea, la educación chilena cuenta con los recursos necesarios y suficientes:
a) posee una valiosa tradición de investigación y cambio del magisterio chileno y de los
especialistas en educación, que junto con estudiar y luchar con las transformaciones
sociales, han ensayado, con diversa suerte, toda una gama de innovaciones concretas.
3.- CARACTERIZACIÓN
3.1 Nacional, porque nace del esfuerzo intelectual, social y material de la comunidad
chilena y de su historia, y porque contribuirá al fortalecimiento de nuestra identidad y
soberanía.
3.2 Unificada, porque hará suya la unidad del proceso de crecimiento psico-biológico y
social del ser humano, supondrá el desarrollo de una cultura fundada en la unidad entre
teoría y práctica, y entre educación y vida y, en consecuencia, tendrá un carácter continuo,
superando la compartimentación entre enseñanza parvularia, básica y media; integrará los
163
3.3 Diversificada, porque atenderá las necesidades diferenciadas del desarrollo nacional,
responderá a los requerimientos desiguales de las regiones y comunidades locales y
atenderá a las exigencias del desarrollo individual compatibilizándolos armónicamente.
3.5 Pluralista, porque no será vehículo de imposición doctrinaria, sino que buscará hacer
de la educación una tarea libertaria en que el educando crezca y forme su propio modo de
pensar, a través de un trabajo pedagógico creativo que lo enfrente a la realidad en forma
crítica y científica.
3.9 Humanista, ya que apoyándose en una concepción unitaria de la cultura que incorpore
la ciencia y la tecnología a los logros de la humanidad, se propondrá aportar decisivamente
a la tarea social de moldear nuevas generaciones de chilenos integral y armónicamente
desarrollados; y
4.- OBJETIVOS
4.1.1 Contribuir a afianzar el naciente sistema social de vida propiciando, por una parte,
elevar la capacidad de organización y unidad del pueblo en función de los grandes objetivos
y tareas del proceso de cambio revolucionario y, por otra, favorecer una real participación
de las mayorías en la construcción de la nueva sociedad, haciendo de cada chileno un
agente innovador y promotor de cambios sociales.
4.1.2 Desarrollar la capacidad científica y técnica del pueblo que le permita controlar los
mecanismos de poder de la sociedad para hacer realidad una sociedad de participación.
4.1.3 Promover un profundo proceso de incorporación masiva del pueblo que permita
asegurar el acceso y disfrute de la cultura y la educación por parte de las mayorías haciendo
del derecho a la educación una realidad concreta de cada chileno.
4.1.6 Hacer posible que las universidades puedan desarrollar la ciencia y la técnica en los
más altos niveles de calidad y excelencia, al liberarla de las presiones y distorsiones
provenientes de la actual orientación del sistema educacional que las ha limitado a coronar
la educación regular y les ha exigido una aceptación masiva de postulantes. El ingreso a las
universidades deberá fundarse en la capacidad objetivamente medida de los postulantes, a
165
4.2.4 Acentuar el valor del trabajo como elemento activo en la formación de la nueva
sociedad, creando en los jóvenes el respeto al trabajo físico, dejando de considerar a éste
como una actividad de nivel inferior.
4.2.5 Crear una conciencia nacional, libre y soberana, con la facultad para buscar en los
términos de la relación solidaria con los otros pueblos latinoamericanos y el resto del
mundo nuevas estructuras de convivencia internacional.
4.2.6 Exaltar la nacionalidad por medio del cultivo de los valores y productos culturales
autóctonos, al mismo tiempo que se incorporen elementos de la cultura universal que
permitan enriquecer el acervo nacional y la participación del pueblo en el arte, la literatura,
la tecnología y los medios de comunicación.
4.2.8 Contribuir al desarrollo armónico de la personalidad de los jóvenes en los valores del
humanismo socialista.
4.2.9 Proporcionar una educación general y politécnica que responda a los requerimientos
de la planificación nacional y regional haciendo posible que la juventud cumpla un rol
activo en la vida del trabajo.
4.2.11 Atender las necesidades de progreso regional y local en una acción planificada y
desarrollada con la comunidad, como una manera de propender a arraigar a los jóvenes a
su respectiva región.
5 ESTRUCTURA
5.1.1 Los niños de 0 a 6 años estarán atendidos por las Salas Cunas y Jardines Infantiles.
Cualesquiera sea su dependencia administrativa, estos organismos estarán sujetos a la
tuición técnica del Ministerio de Educación en lo referente a sus actividades educativas, a
la eficiencia y calidad de su personal y, en general, a la conducción científica del proceso de
desarrollo del niño en la más importante fase de su existencia.
5.1.2 La acción de la educación parvularia se extenderá más allá de los propios niños para
llegar a los padres, a la familia y a la comunidad, mediante programas integrados y
permanentes de educación familiar.
5.2.1 La Educación General y Politécnica creará las condiciones para que educandos,
trabajadores de la educación y comunidad, participen en la creación colectiva de los bienes
culturales que necesita nuestra sociedad.
Ello implicará que los educandos conocerán creando y no sólo consumirán ciencia,
sino que contribuirán a producirla; no sólo disfrutarán de los valores del arte y la cultura,
sino que aportarán a su desarrollo y enriquecimiento. La Educación General y Politécnica
ayudará a la adquisición de los fundamentos científicos de las ramas más importantes de la
producción de bienes y de servicios, al dominio teórico y práctico de la tecnología y al
conocimiento y solución de los problemas sociales que afectan al país. Esto se logrará por
medio de la íntima vinculación entre la escuela y la vida, la enseñanza y la producción, la
teoría y la práctica, haciendo de este modo la educación más vital, el conocimiento más
científico, el desarrollo más pleno, y asegurando en cada joven la formación del hombre,
del ciudadano y del productor.
5.2.2 Atenderá a los jóvenes de 6 a 18 años. En principio tendrá una duración de 12 años y
se expresará como un proceso continuo que atienda las necesidades del desarrollo nacional
y asimismo responda a las características del crecimiento psicobiológico del estudiante y a
sus potencialidades, a través de una adecuada organización curricular.
5.2.3 Para facilitar la educación del currículo a las características de las diversas etapas del
desarrollo del alumno y permitir una mejor planificación de la Escuela Nacional Unificada,
este ciclo se estructurará en cuatro tramos:
5.2.3.4 De 9º a 12º año, con un currículo estructurado a base de tres planes, común,
electivo y de especialización, intensificando gradualmente la formación tecnológica.
5.2.4 Los siguientes son algunos rasgos específicos del currículum de la educación general y
politécnica:
5.2.4.4 Desde el 1.er año se dará énfasis a las actividades de orientación para
favorecer el conocimiento de todas las áreas tecnológicas a través del proceso de
estudio-trabajo y de los trabajos voluntarios, lo que dará oportunidad para observar y
registrar las experiencias y preferencias de cada estudiante.
5.2.4.6 Los propósitos de los 3 planes de los cursos 9º a 12º son los siguientes:
a) El plan común tiene por objeto asegurar una base cultural mínima, tanto
para la continuación de estudios como para la incorporación a la vida
familiar y de la comunidad.
5.2.4.7 En el 10º año cada alumno reducirá su actividad tecnológica a una sola área,
además del plan común y del electivo. Así intensificará su conocimiento teórico
sobre el área y acentuará las prácticas supervisadas en las diversas especialidades
que ella cubre.
5.2.4.8 En los 11º y 12º además del plan común y del electivo, el alumno se
concentrará en lo tecnológico en una sola especialidad.
5.2.4.11 Para los alumnos que no continúan sus estudios en el área de educación
regular, habrá cursos especiales de superación cultural y orientación laboral, que les
permita obtener una calificación.
170
5.2.4.12 Los alumnos que por cualquier razón o motivo deban abandonar la
escuela, podrán reincorporarse al nivel que corresponda de acuerdo al desarrollo
logrado fuera de ella.
6.2 La forma orgánica más general que asumirá la ENU será la Complejos Educacionales,
cuya jurisdicción, en general, coincidirá con la de los Consejos Locales de Educación.
6.3 Todos los establecimientos fiscales de un Complejo Educacional funcionarán bajo una
dirección unificada, con autonomía para planificar su desarrollo dentro de los planes
locales, regionales y nacionales, y partiendo de la consideración básica de obtener un
racional aprovechamiento de los recursos humanos, materiales, técnicos y financieros de
los establecimientos y de la comunidad respectiva. En el hecho, los actuales planteles
educacionales llegarán a considerarse como distintos locales de una gran escuela unificada.
6.5 Al momento de iniciarse el proceso, los Complejos serán integrados por escuelas
básicas y de enseñanza media, humanístico – científicas y técnico – profesionales
dependientes del Ministerio de Educación. Podrán incluir actividades correspondientes al
área extra – regular que estén bajo la tuición del Ministerio, como también las instituciones
dependientes de la Junta Nacional de Jardines Infantiles.
6.6 También la ENU podrá tomar forma de una unidad escolar completa, que funcione en
un mismo local o establecimiento. Estas se ubicarán de preferencia en ciudades pequeñas,
rurales o industriales, barrios o poblaciones, en los que la estructura económica y social y
educacional presente condiciones adecuadas.
171
6.7 Las actuales Escuelas Consolidadas podrán ser organizadas a partir de 1973 como
Unidades Escolares completas y/o ser integradas a los Complejos correspondientes.
6.9 Se prevé que de debido al desarrollo económico desigual y a la estrechez del mercado
ocupacional de determinadas profesiones, habrá necesidad de crear Centros Regionales o
Nacionales Unificados en los que, junto con el plan común y electivo de los últimos años
de la ENU, se entregarán planes correspondientes a ciertas especialidades muy complejas
y/o cuyo campo de producción presente una gran concentración geográfica.
6.12 Las escuelas básicas que formen parte de un Complejo Educacional deberán ofrecer
como mínimo, a más tardar en 1976, los seis primeros años de la educación general y
politécnica.
6.13 La Escuela Nacional Unificada tendrá carácter coeducacional, para cuyo efecto la
planificación de su desarrollo contemplará las medidas para que progresivamente, vayan
integrándose alumnos de ambos sexos a las unidades escolares y cursos que la compondrán.
Reseñas de libros
174
Los antecedentes que el libro pone a disposición son valiosos para: sistematizar el
debate, reducir los errores de interpretación, buscar soluciones que hayan sido efectivas
para problemas similares o aceptar la necesidad de llevar a cabo ensayos cuidadosos y
realizar los ajustes pertinentes de acuerdo a los resultados que se vayan logrando en cada
etapa. En otras palabras, esta obra ayudará a evitar el alto costo de poner en práctica
soluciones improvisadas, que no toman suficientemente en cuenta lo que se ha aprendido
en las diferentes experiencias que se han llevado a cabo en nuestro país y en el extranjero.
Esta segunda edición llega hasta la primera década de este siglo, lo que permite
examinar los avances, al mismo tiempo que constatar la necesidad de redefinir los
problemas. Por ejemplo, el analfabetismo fue identificado como el "Problema Nacional"
por Darío Salas en 1917 (p. 107) y se buscó su solución ampliando la cobertura de las
escuelas primarias. No obstante, graduarse de la escuela primaria no siempre fue suficiente
para ser admitido en un liceo (p. 103). En cambio, en 2006 sólo el 4% se declara
"analfabeto" (p. 300), lo que correspondería a los que nunca estudiaron en una escuela
básica. Sin embargo, ahora el problema consiste en que cerca del 80% de los chilenos entre
15 y 65 años no puede usar información escrita para tomar decisiones adecuadas, es decir,
son analfabetos funcionales. No es suficiente haber asistido a la escuela por ocho años para
participar en una sociedad moderna, es necesario comprender lo que se lee. Cambió la
175
definición de calidad mínima que se debe ofrecer a las nuevas generaciones. En otras
palabras, el "Problema Nacional" se mantiene, pero con otra definición.
La dificultad para definir con precisión los problemas y buscar soluciones factibles y
efectivas, queda en evidencia con la misma estructura del libro. El sistema de educación se
describe desde diversas perspectivas, aunque en cada una de ellas se toman en cuenta
elementos examinados en las anteriores. De esta manera se demuestra que es esencial
tomar en cuenta esas interrelaciones al diseñar una estrategia de cambio.
1
Rector de la Universidad Autónoma de Chile.
177
Reseñas de tesis
178
Pero el autor busca también enfocarse en el proceso de aprendizaje, aquel que está
vinculado a los alumnos y a cómo éstos recibieron los saberes entregados por las
instituciones educativas y cómo fueron capaces de resignificarlos. Resulta más complejo el
trabajar en torno a las recepciones, pues ya no hablamos de discursos establecidos o
prácticas educativas concretas, sino de procesos subjetivos que tienen que ver con una
apropiación del proceso educativo. Es por esto que en este punto para el autor fue
fundamental el análisis de las prácticas efectivas que se dieron en las aulas. En este sentido,
Mayorga asume el complejo campo en el cual se interna, por lo que desarrolla el concepto
de “marco de posibilidades de aprendizaje”, los cuales pueden construirse en torno a las
interrelaciones entre Discurso, Operacionalización y Praxis, y que entregan referencias con
las cuales es posible analizar, de manera general, las posibilidades reales de aprendizaje en
las aulas, solucionando así el problema de la subjetividad e individualidad inherente a un
proceso de este tipo. Pero es aquí en que el autor toma otra opción metodológica
interesante, pues decide estudiar y comprender los procesos cognitivos de los estudiantes
con la ayuda de otras disciplinas, como la psicología de la educación, vínculo que se ve
desarrollado fuertemente en el capítulo V de la tesis y que cuenta con el estudio particular
de autores como Jean Piaget y Lev Vigotsky, quienes entregarán herramientas teóricas para
analizar aquellas posibilidades de aprendizaje.
Así, el texto de Mayorga tiene una organización clara, que permite comprender
gradualmente los discursos vinculados a la educación, la forma en la cual estos discursos se
transformaron en mecanismos de enseñanza, como el Método de Lectura Gradual para
introducir a los niños en la lectura, para luego, recién hacia el capítulo IV introducirnos de
lleno al aula, en el espacio físico en donde enseñanza y aprendizaje confluyen. Esta
gradualidad en la presentación de los argumentos permite a los lectores compenetrarse con
el proceso de enseñanza y aprendizaje en sus diferentes niveles.
180
Un elemento clave para comprender el análisis del autor tiene que ver con que esta
investigación se enmarca en el proyecto Anillos de Investigación SOC–17, “La educación
ante el riesgo de fragmentación social: ciudadanía, equidad e identidad nacional”, lo que
entregó herramientas excepcionales, especialmente en cuanto a las fuentes disponibles para
el análisis, especialmente en torno a la información relativa a la expansión del sistema
educacional en Chile. En cuanto a las fuentes que ayudan a desarrollar el objetivo
propuesto en esta tesis, es fácil dividirlas en dos categorías. En primer término, se recurrió
a los elementos que se utilizaban en los procesos de enseñanza, como los libros de texto, los
silabarios, manuales, etc. Este primer tipo de fuente tiene un peso por sí mismo, pues nos
ayuda a comprender, particularmente, los discursos y el proceso de operacionalización que
desarrolla el autor. Por otro lado, es importante conocer la verdadera presencia de estos
elementos en las escuelas y de esta forma conocer su alcance real. Así, fuentes como el El
Monitor de las Escuelas Primarias, entregan la posibilidad de conocer la realidad dentro de las
aulas en esta materia. Para el autor, además, El Monitor de las Escuelas Primarias tuvo una
importancia mayor, pues en algunos casos contaba con testimonios que nos acercan aún
más a las prácticas que se desarrollaban dentro del aula.
Para terminar, parece relevante señalar que el objetivo final de este texto es
preguntarse por lo que realmente aprendieron los niños que asistieron a la escuela en el
período trabajado. La importancia de esta pregunta está en que aparece como novedosa,
pues no pone un énfasis netamente en la institución educativa, sino que complementa esa
información con lo que sucede dentro de las aulas. El autor llega a la conclusión de que, si
bien la escuela no fue capaz de entregar las herramientas fundamentales y necesarias para
que los niños y jóvenes se relacionaran adecuada y correctamente con la cultura escrita, el
proceso vivido sí permitió el acceso a una nueva forma de codificación y decodificación, lo
que tiene consecuencias en el desarrollo de la vida cotidiana. Así, aquella relación entre los
mecanismos de enseñanza, el aprendizaje y las consecuencias que éste trae para los niños
que crecieron en la sociedad del Chile del siglo XIX, parece un análisis que entrega nuevas
herramientas no sólo para el estudio de la educación en Chile, sino para la conformación
de la sociedad, nación e identidad chilenas, pues revela un proceso que marcó
profundamente a una importante parte de la población.
1
Estudiante de Licenciatura en Historia, Pontificia Universidad Católica de Chile. Contacto:
paz.asenjo@gmail.com