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50 PENSADORES

I CONTEMPORÁNEOS
ESENCIALES
I John Lechte

• Bachelard • Bajtin • Canigun ....... • eavanats


Freud • Mauss • Merleau-Ponty • Althusser
Benveniste • Bourdieu • Chomsky • Dumézil
•.• Genette • Jakobson • Lacan • Lávi-Etramis • Metz
.• SelleS • Braudel • Batailie • Deleuze • Derrida
Foucault • Letrinas • Barth:es • Eco • Greimas
Iljelmslev • 1.Kristeva • 72.9i:ce • Saussure
To.clifrov • Irigaray • Le Doeuff • Paternan
Adorno • Arendt • Habanas • Laclau • Touraine
Benjamin • Blanchot • Joyce • Nietzsche • Simm.e.1
Sollers • Baudrillard • Duras • Eafila • Lyotard

CATEDRA
Cincuenta pensadores -
contemporáneos esenciales
Título original de la obra:
EiftE Kev Coniempomo , Thinken.

Índice

PREFACIO

Traducción de Mn. Luisa Rodríguez Tapia AGRADECIMIENTOS

PRIMER ESTRUCTURALISNIO 17
Gaston Bachelard 19
Mijail Bajtin 24
Georges Canguilhem 30
Jean Cavaillés 35
Reservados todos los derechos. El contenido de esta obra está protegido Sigmund Freud 40
por la Ley, que establece penas de prisión y/o multas, además de las Marcel Mauss 95
correspondientes indemnizaciones por daños y perjuicios, para Maurice Merleau-Ponty 51
quienes reprodujeren, plagiaren, distribuyeren o comunicaren
públicamente, en todo o en parte, una obra literaria, artística ESTRUCRIRALISMO 57
o científica, o su transformación, interpretación o ejecución Louis Althusser 59
artística fijada en cualquier tipo de soporte o comunicada
a través de cualquier medio, sin la preceptiva autorización. Érnile Benveniste 65
Pierre Bourdieu 69
Noam Chomsky 74
Georges Dumézil 80
Gérard Genette
Reman Jakobson 90
Jacques Lacan ......... 96
Claude Lévi-Strauss 101
Christian Meta 108
Michel Serres 114
ID 1994 John Lechte
Ediciones Cátedra S. A., 1996 HISTORIA ESTRUCTURAL STA 121
Juan Ignacio Luca de Tena, 15. 28027 Madrid Fernand Braudel 123
Depósito legal: M. 40.948-1996
ISBN.: 84-376-1478-3 PENSAMIENTO POSTESTRUCTIDAUSTA 129
Printecl in Spain Georges Bataille 131
Impreso en Gráficas Rogar, S. A. Gines Deleuze 136
Nava lcamero (Madrid) Jacques Derrida 141
Michel Foucault 147
Emmanuel Levinas 153

515mió-ncA 159
Roland Barthes 161
Umberto Eco 166
Algirdas-Julien Greimas 171
Louis Hjelmslev 177
Julia Kristeva 183
Charles Sanders Peirce 187
Ferdinand de Saussure 192
Tzvetan Todorov 197 A la memoria de mis abuelas,
que valoraron la educación.
EL FEMINISMO DE SEGUNDA GENERACIÓN 205
Luce Irigaray 207 CAROLYN LECITTE (1885-1978)
Michéle Le Doeuff 212 MURIEL GARNER (1896-1979)
Carole Pateman 217

Pos-rmARnsmo 223
Theodor Adorno 225
Hannah Arendt 230
Jürgen Habermas 236
Ernesto Laclau 243
Alain Touraine 248

LA MODERNIDAD 255
Walter Benjamin 257
Maurice Blanchot 262
James Joyce 268
Friedrich Nietzsche 273 Misioneros del Espinas Saroa
Georg Simmel 279
Philippe Sollers

LA POSIMODERNIDAD
284

291
11 " iblioteca
Del
ilosofado
Jean Baudrillard 293
Marguerite Duras Provincia Félix de Jesús
298
Franz Kafka 304
Jean-Frasnois Lyotard 309

8
Prefacio

Este libro sigue el admirable modelo establecido por Diané Co-


llinson en Fifty Major Philosophers (1087). Es decir, ofrezco al lector
una visión global de la obra de cada pensador junto a datos biográ-
ficos. Como Ms. Collinson, también pretendo introducir, a veces de
forma muy detallada, uno o más aspectos de la oettvre en cuestión,
especialmente en la medida en que se relacione con los aspectos
del pensamiento inspirados por el estructuralismo. Y abordo con fre-
cuencia ese pensamiento, para disentir de él o apreciar sus revela-
ciones. Confío en que el lector adquiera una sensación real del sa-
bor, el estilo y, en muchos casos, el carácter verdaderamente
innovador de las ideas estudiadas.
No obstante, mi labor ha sido, al mismo tiempo, más fácil y más
difícil que la de Diané Collinson, porque, si bien no he tenido que
recorrer toda la historia del canon filosófico occidental para escribir
estos artículos, sí me he visto obligado a escoger a 50 pensadores
contemporáneos. Y aunque, desde luego, se puede discutir quién
debe figurar en el canon filosófico, existen pocas dudas de que ha
habido un canon muy influyente, hasta el punto de que la gente cica
a Platón, Hobbes o Sartre sin saberlo. En cierto modo, pues, la carea
de Diané Colfinson consistió en hacer explícitas formas de pensa-
miento que ya nos han impregnado. Mi trabajo, por el contrario, ha
sido destilar elementos esenciales en la obra de pensadores que, en
ocasiones, no son muy conocidos, pero que están empezando a ser-
lo. Casi todo el mundo ha oído hablar, por lo menos, de Platón; pero
¿han oído hablar de Saussure? Casi todos saben que el idealismo fi-
gura en algún lugar de la filosofía de Flacón; pero ¿saben que la •i-
ferencia- es un concepto clave en Saussure? Evidentemente, creo que
la respuesta es -no en ambos casos.
11
Na estoy refiriéndome sólo a los conocimientos del lector en ge- dad y, por último, postmodernidad. Cada grupo de pensadores va
neral, sino a los míos propios. Porque el contraste que pretendo sa- precedido de una breve nora introductoria, que pretende dar al lec-
car a la luz es el que existe entre un canon relativamente estable con tor una visión amplia de la tendencia intelectual en cuestión. Algu-
el que estoy familiarizado, aunque no sea en detalle, y una serie de nas personas pueden opinar que los agrupamientos son demasiado
pensadores cuyas ideas están aún, frecuentemente, en plena evolu- reductores. Ami juicio, se limitan a indicar una orientación y ayudan
ción, porque muchos de ellos siguen escribiendo y, por consiguien- al lector a apreciar el significado global de esta colección de ensa-
te, no han terminado su obra y porque, por definición, no es posible yos, un significado que no debe pasar inadvertido y que, empleado
tener un conocimiento profundo de ideas que son esencialmente de forma inteligente, puede ayudar a una mejor comprensión de
contemporáneas e innovadoras. En otras palabras, saber si he esco- cada caso individual.
gido el ángulo más importante o revelador sobre los pensadores que Dentro de cada pensador, he intentado ofrecer información so-
examina será, y debe ser, materia de discusión. bre la obra tanto reciente como temprana a la hora de enumerar las
Ante esta dificultad, mi apuesta en favor del lector es que la luz obras principales, del mismo modo que he intentado sugerir lecturas
que arrojo sobre el pensamiento que examino es una luz informada, adicionales de obras recientes*.
pero que, incluso si resulta que no es más que una de las formas Por último, debo abordar brevemente la cuestión de cómo pue-
posibles de entender a ese pensador, seguirá siendo informativa y de usarse el presente libro. A mi juicio, sería ridículo afirmar que he
educativa en el sentido al que me refiero. Y éste es que (ser capaz presentado a estos 50 pensadores contemporáneos de tal manera que
de) estar en desacuerdo conmigo es comprenderme. no es preciso que el lector acuda a ninguna otra obra para consoli-
Pero ¿qué ocurre con la elección de pensadores? Aquí, el subtítu- dar su conocimiento. Este libro ofrece una vía para comprender a
lo del libro debería indicar la orientación de mis decisiones. Los pen- los pensadores que introduce; no sustituye la lectura de sus propias
sadores elegidos sirven para profundizar en la comprensión de la obras. Como afirma Heidegger, no ofrezco un aprendizaje; intento
orientación estrucruralista del pensamiento tras la Segunda Guerra dejar que ese aprendizaje se produzca.
Mundial, que surgió en gran parte, si no de forma exclusiva, en Fran-
cia. En mis explicaciones he intentado no criticar este punto; no es JOHN LECHTE
posible reducir ninguno de los 50 pensadores estudiadas a un movi-
miento. Aunque me centro principalmente en el periodo de posgue-
rra, no lo hago de manera exclusiva: he intentado incluir a pensado-
res que, cronológicamente, tal vez fueron de otra generación
(Saussure, Freud, Nietzsche), pero que han tenido una importancia
fundamental y una enorme contemporaneidad, desde el punto de
vista intelectual. Es decir, «contemporáneo. significa más que con-
temporáneo en el tiempo.
Dado que la orientación del libro consiste, en gran parte, en ha-
blar de los pensadores que representan una tendencia estructural o
postestrucrural, moderna o postmoderna, he incluido asimismo a una
serie de pensadores indiscutiblemente importantes (Adomo, Haber-
mas) que no se identifican, o se identifican menos, con esta orien-
tación.
Respecto a la presentación material del libro, he agrupado a los • Para la presente edición se han incluido traducciones al español existentes de
las obras de los autores. En muchos casos se recogen las obras en su lengua origi-
pensadores en nueve categorías: primer estructuralismo; estructura- nal por no existir traducción española disponible y ser la obra de relevancia dentro
lismo; historia estrucruralista; pensamiento postestrucniralista; semió- de la producción del autor. Las obras de los pensadores rusos se referencian en
tica; feminismo de la segunda generación; postmarxismo; moderni- inglés, por ser ésta una lengua más asequible al público en general.
12 13
Agradecimientos

Gill Bouomley ha sido una fuente de inspiración en el estudio


de los problemas suscitados por los pensadores en el presente libro,
además de ofrecerme un incansable apoyo material. A ella le ofrez-
co mi agradecimiento más profundo. Eduardo de la Fuente está con-
virtiéndose en una autoridad mundial sobre Adorno y me ofreció su
conocimiento y consejo al respecto. También colaboró en la búsque-
da de bibliografía en casos importantes. Varias personas leyeron y
comentaron los ensayos. Entre ellas, Gill Bottomley, Murray Dom-
ney, Eduardo de la Fuente, Barry Hindess, Ephraim Nimni y Paul
Pacton. Les doy las gracias a todos ellos pero, desde luego, asumo la
responsabilidad de cualquier error que pueda quedar en el texto que,
con tanta generosidad, ayudaron a mejorar.
Por último, me gustaría dar las gradas más sinceras a mi editor,
Richard Stoneman, por la idea para este proyecto y, especialmente,
por su paciencia con una tarea que, me avergüenzo de reconocer,
incumplió plazos en varias ocasiones.

15
Primer estructuralismo

Para ofrecer una idea de los factores que pusieron en marcha el


movimiento estrucruralista, podemos ver que ciertas tendencias en
la obra de un Marcel Mauss o un Georges Canguilhem habían empe-
zado ya a desestabilizar las hipótesis de la fenomenología y el posi-
tivismo. El hecho de centrarse en la sociedad como un sistema en el
que ciertos fenómenos constiruyen un .hecho social total', o en la
base epistemológica del conocimiento (Canguilhem), empieza a tras-
ladar el énfasis, de la explicación esencialista de la sociedad o el
conocimiento, hacia la idea de que es la consecuencia del carácter
estructural (es decir, diferencial y relacional) de tales acontecimien-
tos. Por consiguiente, la historia de la ciencia deja de ser la expre-
sión de una mente; más bien, a través de una configuración episte-
mológica, la historia elabora el marco intelectual que la comprende.
Además, los cambios en la experiencia actual de una sociedad o un
individuo (cfr. Freud) alteran el significado del pasado. Éste no pue-
de entenderse ya por sí solo, porque ahora es preciso interpretarlo
en relación con las preocupaciones del presente.

17
Gaston Bachelard d'un probléme physique, La propaga-
¡ion that-migue dans les solides (Estudio
Gaston Bachelard —epistemólogo, sobre la evolución de un problema fí-
filósofo de la ciencia y teórico de la sico: la propagación térmica en los só-
imaginación— influyó en figuras lidos). Sobre la base de esta obra,
esenciales de la generación estructu- en 1940 le ofrecieron la cátedra de his-
ralista y postestructuralista de la pos- toria y filosofía de la ciencia en la Sor-
guerra. A través de Jean Cavaillés y, bona, puesto que ocupó hasta 1954.
especialmente, en relación con la Tres elementos esenciales del pen-
obra y la dirección de Georges Can- samiento de Bachelard lo convirtie-
guilhem, Michel Foucault descubrió ron en un filósofo y pensador único
su orientación concreta al investigar e hicieron que su obra fuera crucial
la historia de los conocimientos. Asi- para la generación de estructuralistas
mismo, cuando Louis Althusser halló de posguerra. El primer elemento se
inspiración en el concepto de •dis- refiere a la importancia de la episte-
continuidad.. de Bachelard —que él mología en la ciencia. En este senti-
tradujo como •ruptura epistemológi- do, si los científicos poseían una
ca...—, una generación de filósofos comprensión deficiente de su propia
marxistas descubrió estímulos para actividad, ello supondría un obstácu-
reexaminar las nociones de tiempo, lo fundamental para la aplicación de
subjetividad y ciencia. su trábajo. La epistemología es el te-
Gaston Bachelard nació en 1884 en rreno en el que se comprende el sig-
la Francia rural, en Bar-sur-Aube, y nificado de los esfuerzos científicos.
murió en París en 1962. Después de Como escribió Bachelard en La pbilo-
trabajar en el servicio postal (1903- sopbie du •now (la filosofía del •no.):
1913), fue profesor de física en el Co- •El espacio en el que se mira, en el
llége de Bar-sur-Aube entre 1919 que se examina, es filosóficamente
y 1930. A los treinta y cinco años, Ba- muy distinto al espacio en el que se
chelard emprendió nuevos estudios, ve.?. La razón es que el espacio en el
esta vez de filosofía, y completó su que se ve es siempre un espacio re-
agrégalion en 1922. En 1928 publicó presentado, no un espacio real. Sólo
su tesis doctoral, que había defendido se puede tener en cuenta este factor
en 1927: Essai sur la connaissance si se recurre a la filosofia. De hecho,
approchée (Ensayo sobre el conoci- Bachelard pasa, a continuación, a de-
miento aproximado) y su tesis com- fender •un estudio sistemático de la
plementaria, Étude sur l'évolution representación, el elemento inierme-

19
BACHELAhD 13ACI-IELARD

dio más natural para determinar las obra. Como es de prever, un libro anteriores no es la continuidad sino fico, es importante advertir que todo
relaciones de noúmeno y fenóme- como le Rationalisme appliqué (El ra- la discontinuidad. Existe, pues, una el pensamiento científico -es, en su
no- 2 . Estrechamente asociada a la in- cionalismo aplicado) pretende de- discontinuidad entre la geometría propia esencia, un proceso de cosi-
teracción entre la realidad ;y su repre- mostrar la base teórica de distintos euclidiana y no euclidiana, entre el ficación•, un sentimiento con el que
sentación se encuentra la defensa tipos de experimentación. Un racio- espacio euclidiano y las teorías de lo- Fierre Bourdieu (antiguo alumno de
inquebrantable que Bachelard hace nalismo profundo es siempre un ra- calización, espacio y tiempo propues- Bachelard) estaría completamente de
de la relación dialéctica entre raciona- cionalismo aplicado, que aprende de tas por Heisenberg y Einstein. Una acuerdo. Además, al hablar del pen-
lismo y realismo; o empirisruo, como la realidad. Pero eso no es todo, Ba- vez más, Bachelard destaca que, en e/ samiento científico de la era moder-
puede también llamarse. Así, en el chelard está también de acuerdo en na, Bachelard advierte que tiende
pasado, la masa se definía en relación
que quizá se convirtió en su libro más que el empirista puede aprender del con una cantidad de materia. Cuanto fundamentalmente a ver los fenóme-
influyente para el público en general, teórico aspectos de la realidad cuan- mayor era la materia, mayor era la nos desde el punto de vista de su
El nuevo espíritu científico, este ver- do —corno Ocurre con Einstein— la relación y no de su sustancia, es de-
fuerza que se consideraba necesaria
dadero poeta de la epistemología teoría se desarrolla antes que su para oponerse a ella; la velocidad era cir, por tener cualidades esenciales
afirma que existen esencialmente dos correlato experimental. La teoría lo propias. Esta observación indica cla-
una función de la masa. Con Einstein
bases metafísicas predominantes: ra- necesita para confirmarse. Con la im- ramente un rasgo presente en el
sabemos, actualmente, que la masa es
cionalismo y realismo. El racionalis- portancia que daba a la epistemolo- una función de la velocidad, y no a pensamiento estructuralista contem-
mo —que incluye la filosofía y la teo- gía, Bachelard unió ciencia y filosofía la inversa. Lo esencial aquí no es que poráneo. Como confirma Bachelard:
ría— es el campo de la interpretación de una forma raramente vista hasta las teorías anteriores tuvieran caren- -Las propiedades de los objetos en el
y /a razón; por otro lado, el realismo entonces. Las ciencias humanas y na- cias y por tanto se opusieran. sino sistema de Hilbert son puramente re-
ofrece al racionalismo el material ne- turales hallan verdaderamente aquí a que las nuevas teorías tienden a tras- lacionales, y no sustanciales- 6.
cesario para sus interpretaciones. Li- su intermediario, en el hombre que, cender por completo las teorías y ex- Cuando afirma que -la asimilación
mitarse a permanecer en un plano al final, acaba por escribir una -poéti- plicaciones anteriores de fenómenos, de lo irracional por parte de la razón
ingenuo e intuitivo —el nivel experi- ca- de la ciencia. o a mostrar discontinuidad respecto a nunca deja de producir una reorgani-
mental— a la hora de captar hechos El segundo gran aspecto de la obra ellas. Como expone Bachelard: zación recíproca del terreno de la ra-
nuevos es condenar la comprensión de Bachelard que ha tenido especial cionalidad-', Bache/ard confirma el
científica al estancamiento; no puede influencia en relación con el estruc- Sin duda, existen cienos tipos de carácter dialéctico de su enfoque, un
llegar a saber lo que está haciendo. turalismo es su teorización de la his- conocimiento que parecen ser inmu-
enfoque recordado, aunque en un
De/ mismo modo, si se exagera /a im- toria de la ciencia. En pocas palabras, tables. Ello hace pensar a algunas
personas que la estabilidad del con- contexto diferente ,y con objetivos
portancia' de/ aspecto racionalista Bachelard propone una explicación distintos, por Julia Kristeva y sus con-
—quizá incluso asegurando que, en tenido se debe a la estabilidad del
no evolutiva del desarrollo de la cien- continente o, en otras palabras, que ceptos de lo .semiótico- y lo .simbóli-
definitiva, /a ciencia no es más que el cia, en la que los avances anteriores las formas de racionalidad son per- co'. El pensamiento se encuentra
reflejo de un sistema filosófico subya- no explican necesariamente el estado manentes y no es posible ningún siempre •en proceso de cosificaciórhs;
cente—, puede producirse un idealis- actual. Por ejemplo, según Bachelard, nuevo método de pensamiento ra- nunca es algo determinado y comple-
mo igualmente estéril. Por consi- no es posible explicar /a teoría de la cional. Pero la estructura no proce- to, nunca es algo cerrado en sí mis-
guiente, para Bachelard, ser científico relatividad de Einstein como un desa- de exclusivamente de la acumula- mo y estático, como solían pensar
es no dar prioridad ni al pensamien- rrollo a partir de /a física newtoniana. ción; la masa de conocimiento
ciertos científicos.
to ni a la realidad, sino reconocer el Las nuevas doctrinas no se desarrolla- inmutable no posee tanta importan-
cia funcional como a veces se crees. Asociada a esta concepción del
nexo inextricable entre ambos. Ba- ron a partir de las viejas, afirma, -sino pensamiento se encuentra la postura
chelard capta lo que está en juego en que, más bien, /as nuevas envolvieron De hecho, afirma Bache/ard, los anticartesiana de Bachelard. Si Des-
esta frase memorable: da experimen- a /as viejas.. Y continúa: il-a.s genera- cambios —en ocasiones, radicales— cartes había afirmado que, para pro-
tación debe dejar paso al argumento ciones intelectuales están encajadas en e/ significado de un concepto o en gresar, el pensamiento debía partir de
y el argumento debe recurrir a la ex- unas dentro de otras. Cuando pasa- el carácter de un área de investiga- ideas claras y sencillas, Bac.helard ar-
perimentación). Todos los escritos mos de la física no newtoniana a la ción son lo que mejor caracteriza la gumenta que no existen ideas senci-
de Bachelard sobre el carácter de la newtoniana, no nos encontramos con llas, sólo complejidades, como se ve
naturaleza del esfuerzo científico. Por
ciencia se rigen por este principio. la contradicción, sino que la experi- tanto, lo que la ciencia tiene de nue- especialmente cuando esas ideas se
Con su formación científica y filosófi- mentamos.". Basándose en ello, el vo es siempre revolucionario. aplican. •La aplicación es complica-
ca, Bachelard era un ejemplo de la concepto que enlaza los descubri- ción., afirma. Además, aunque la me-
Como añadido a la concepción de
posición que intentó defender en su mientos con una serie de hallazgos Bachelarcl sobre el desarrollo cientí- jor teoría parece ser la que explica la
20
21
BACHELARD
BACHELARD

realidad de la manera más sencilla, nación creativa•t". La imaginación no


La imaginación, por consiguiente, nuevos puedan surgir a partir de nue-
nuestro autor responde que a reali- es un mero reflejo de las imágenes
es el terreno de la imagen y, como vas imágenes.
dad no es sencilla nunca y que, en la exteriores, sino una actividad sujeta a
tal, es preciso diferenciarla de la tra- Más en concreto, las obras de 13a-
historia de la ciencia, los intentos de la voluntad del individuo. Bachelard
ducción del mundo externo a con- chelard destacan el hecho de que ni
lograr la sencillez (por ejemplo, la es- pretende investigar los productos de
ceptos. La imaginación produce imá- el concepto ni la imagen son transpa-
tructura del espectro del hidrógeno) esa voluntad creativa, que no pueden
genes y es sus imágenes, mientras rentes y que dicha opacidad indica
han resultado invariablemente ser predecirse partiendo del conocimien-
que el pensamiento produce concep- que en los asuntos humanos existe
simplificaciones excesivas cuando, al to de la realidad. En cierto sentido,
tos. Sin un surrealismo que aparece siempre un elemento de subjetividad.
final, se reconoce el carácter comple- pues, la ciencia no puede predecir la
con el fin de reavivar la imagen, el Ello significa que, de los seres huma-
jo de la realidad. Como idea derivada trayectoria de la imaginación, porque
mundo de esta última estaría tan en- nos, se habla canto como hablan ellos
de Descartes, la sencillez no se ajusta ésta posee un tipo especial de auto-
cerrado en si mismo que se marchita- mismos en los marcos de la ciencia y
adecuadamente al hecho de que todo nomía. Estar sometida a la voluntad
ría y moriría. Del mismo modo, si no lo simbólico que constituyen sus vi-
fenómeno es un tejido hecho de rela- significa que la imaginación —como
fuera por cierto surracionalismo, el das. Como expresa de nuevo Lecourt:
ciones y no simple sustancia. Por para algunos surrealistas— está rela-
pensamiento y sus conceptos tam- .Nadie puede leer estos textos diver-
consiguiente, los fenómenos sólo cionada con la fantasía semiconscien-
bién se marchitarían, enfermos de su gentes sin percibir una unidad que
pueden captarse mediante una forma te (rénerie) más que con os procesos
propia perfección y sencillez. En rea- debe buscarse bajo la contradic-
de síntesis que corresponde a lo que inconscientes (condensación, despla-
lidad, apertura. y -complejidad. resu- ción 42 . ¿.Unidad., o .sintesis.? La res-
Bachelard llamó, en 1936, surrationa- zamiento, etc.) del ensueño. En reali-
men la posición de Bachelard. En su puesta no carece de importancia. Por-
lisnie9. El surracionalismo es un enri- dad, este factor, junto a su interés por
pléyade de elementos —un poco de- que, mientras la unidad implica
quecimiento y revitalización del ra- los arquetipos, sitúa a Bachelard mu-
masiado jungiana—, el concepto tien- homogeneidad y corre e.I riesgo de
cionalismo mediante la referencia al cho más cerca de Jung que de Freud.
de a estar en el lado masculino de las convertirse en una unidad sencilla, la
mundo material, de igual manera También recuerda a Jung el énfasis
cosas, mientras que la imagen tiende síntesis, como afirmaba Bachelard,
que, desde otra dirección, el surrea- que pone Bachelard, en su análisis de
hacia lo femenino. Igualmente, el tiene que ver con las relaciones, pue-
lismo intentaba revitalizar el realismo la imaginación, en los cuatro elemen-
concepto corresponde a la imagen de existir entre elementos diferentes
a través del sueho. tos primarios. del fuego, el agua, el
del día (porque es equivalente a (siempre que la diferencia no sea ra-
Otra dimensión influyente del pen- aire y la tierra, que considera eterna-
ver.), mientras que la imagen corres- dical) y presupone divisiones de al-
samiento de Bachelard es su análisis mente presentes en una alquimia
ponde a la imagen de la noche. El gún tipo. Por el contrario, la unidad
de las formas de la imaginación, es- poética. Es decir, en el horizonte se
astuto librito de Dominique Lecourt tiene tendencia a borrar las relacio,
pecialmente las imágenes relaciona- ve cierto elemento místico (cfr. Psico-
sobre Bachelard llama la atención nes. Al final, la oeuvre de 13achelard
das con los temas de la materia, el logía y alquimia, de Jung). Además,
precisamente sobre esta característica tiende a encarnar la idea de síntesis
movimiento, la fuerza y el ensueño, la insistencia de Bachelard en la prio-
de la obra del pensador: .En pocas que proponía en sus primeros traba-
así como las imágenes asociadas del ridad de la relación ya reconocida
palabras, para repetir los términos de jos. Pero era, necesariamente, una
fuego, el agua, el aire y la tierra. Ba- entre sujeto y objeto, que extrae, no
Bachelard, entre sus libros científicos síntesis que no podía ver, una cegue-
chelard, en obras como La Tenv et les siempre de forma voluntaria, de la
y sus obras sobre la imaginación exis- ra necesaria que formaba parte (en
réveries de la mimaré (La tierra y los fenomenología, significa que, mien-
te la misma relación que entre el día términos existenciales) del lugar des-
ensueños de la volurnad), incluye nu- tras la imaginación podría crear imá-
y la noche.". En general, Bachelard de el que escribía. En este sentido,
merosas referencias a la poesía y la genes (casi siempre, sublimaciones
se muestra reservado en cuanto a si pues, podría considerarse que la no-
literatura de la tradición cultural occi- de arquetipos), no se piensa que la
ambos términos aparecen juntos, es che tiene prioridad sobre el día en
dental, referencias que utiliza para labor de la creatividad produzca por
decir, si la imagen aparece en la cien- esta obra excepcional.
ilustrar el trabajo de la imaginación. sí misma dicha relación. De hecho, el
, cia y la ciencia en el reino de las imá-
Este último debe diferenciarse de la sujeto aquí es su majestad el yo,
genes. Sin embargo, la obra de 13a-
percepción del mundo exterior tradu- como afirmaba Freud; porque existe
chelard, casi a su pesar, ha llegado a
cida en imágenes. El trabajo de la una presunción de autonomía que NOTAS
considerarse fuente de inspiración
imaginación, como afirma nuestro bordea lo absoluto. De esta manera
para quienes intentan derribar la ba-
autor, es más fundamental que la per- entra en los escritos de I3achelard so- ' Gaston Bachelard, Tbe Philosophyof
rrera entre concepto e imagen, con el
cepción de las imágenes; es cuestión bre la imaginación un elemento de No: A Pbilosopby of me New Scientific
fin de que las imágenes nuevas pue-
de afirmar, por tanto, el carácter psí- cierre aparentemente ausente de sus Min4 trad. de G. C. Warerston, Nueva
dan convertirse en base de nuevos York. Orion Press, 1968. pág. 63. •
quicamente fundamental de la imagi- ensayos científicos.
conceptos científicos y los conceptos !bid., pág. 64.
22
23
1SAJTIN
BAJTIN

' Gaston Bachelard, The New Scienti- la connaissance objectite, París, Vrin, Nacido en noviembre de 1895, Baj- letipinqe, de Voloshinciv, y El método
fíe Spirii, trad. de Arthur Goldhammer, 1938; 8! ed., 1972. tin se licenció en lenguas clásicas y fi- formal en los estudios literarios, de
Boston, Beacon Press, 1985, pág. 4. La Le Psycbanalyse du fu, París. Gallimard, lología en la universidad de Petrogra- Medvedev.
cursiva es de Bachelard. 1938. do en 1918. Debido fundamental- Al margen de los problemas de
'Ibid., pág. 60. La Pbilosopbie du mon-, París, Presses mente a motivos políticos, vivió gran autoria, casi todos los especialistas
5 'bid., pág. 54. Universitaires de France, 1940. parte de su vida en una oscuridad están de acuerdo en que la obra de
'bid., págs. 30-31. El agua y los sueños (1942), Madrid. FCE, autoimpuesta y aceptó en 1936 una Bajtin puede dividirse en tres grandes
7 'Oíd., pág. 137. 1994. cátedra en la remota Escuela del pro- periodos: I) primeros ensayos sobre
" !bid., pág. 176. La cursiva es mía. La Term et les révenks du repos. Essai sur
fesorado del estado de Mordovia, ética y estética; 2) libros y artículos
Gaston Bachelard, Surrationalis- les inzages de rintimité, París, Jose
donde, aparte de una interrupción en sobre la historia de la novela; 3) en-
me•, Inquisitions, 1(1936). Coni, 1948; 6. impresión, 1971,
Le Rationalistne appli qué, París, PUF, los años 40 debida a los rumores de sayos publicados póstumamente que
1 ° Gaston Bachelard, la Terre et les

raerles de la volonté: essai sur rima- 1949; 3. ed, 1966. purga politica, enseñó hasta 1961. vuelven a abordar los ternas del se-
gination des forces, París, Corti, 1948, Le Alaterialistue rationnel, París, PUF, Pese a su escasa prominencia políti- gundo periodo. A pesar de los estu-
pág. 3. 1953; 27 ed., 1963. ca, Bajtin fue arrestado en 1929 por dios minuciosos que se llevan a cabo
" Dominique Lecoun, Bacbelard ou La poética del espacio (1957), Madrid, su presunta participación en la igle- actualmente para mostrar la profundi-
le jour et la nuit (un essai de nzatérialis- FCE, 1993. sia ortodoxa rusa clandestina, y sen- dad de su pensamiento, es cierto que,
me dialectiqzte), París, Maspero, 1974, La Poétique de la réverie, París, PUF, tenciado a seis años de exilio interior fuera de un círculo de especialistas,
pág. 32. 1960; 3. ed., 1965. en Kazajistán, donde trabajó como Bajtin es más conocido en Occiden-
" ¡bid. La cursiva es de Lecourt. Flamme d'une chandelle, París, Presses
Universitaires de France, 1961. contable. En la década de los 60 te, primero, por su noción de carna-
Le Droit de réver, París, Presses Univer- Bajtin pasó a ser figura de culto en val, que procede de su estudio de Ra-
VÉASE TAMBIÉN EN ESTE LIBRO sitaires de France, 1970. Rusia, se redescubrió su obra de 1929 belais; segundo, por el concepto de
sobre Dostoievski y se publicó novela dialógica y polifónica deriva-
Althusser, Bourdieu, Canguilhem, Cavai- por primera vez en la Unión Soviéti- do de su estudio sobre Dostoievski,
llés, Foucault, Kristeva, OTRAS LECTURAS
ca, en 1965, su libro más famoso, so- y, por último, a propósito de térmi-
Paul, Pour connaltre la petuée
GINESTIER, bre Rabelais, presentado inicialmente nos como .cronotopo• y •discurso no-
PRINCIPALES OBRAS DE BACREL;RD de Bachelard, París, Bordas, 1968. como tesis doctoral en los años 40. velístico., que proceden de sus ensa-
LEcourr, Dominique, Bachelard ou le Con el interés renovado por su obra, yos sobre la teoría de la novela'.
Essai sur la connaissance approcbée, jour et la nuit, París, Grasset, 1974, Bajtin empezó a trabajar a principios En su estudio sobre Rabelais, que
París, Vrin, 1928. 3. ed., 1970 (tesis McAuxsrea Jorers, Mary, Caston Bache- de los 70 en una serie de proyectos fue su primera obra traducida al in-
principal para el doctorado en litera- lar& Subversibr Hunzanist. TattS and
Readings, Madison, University of Wis-
-como el relativo a las bases filosó- glés, I3ajtin se centra en el carnaval tal
tura). ficas de las ciencias humanas- que como existía en el periodo anterior al
La Valeur inductive de la relativité, Pa- consin Press, 1991.
rís, Vrin, 1929, SMITH, Roch Charles, Gastan Bachelard, permanecían inacabados en el mo- Renacimiento y en este último (Rabe-
Le Pluralisme coherent de la cbimie uzo- Boston, Twayne, 1982. mento de su muerte, marzo de 1975. lais 11494-15531 escribió sus obras más
derne, París, Vrin, 1932. MIES, Mary, Bachelard, Science and Ob- La trayectoria intelectual de Bajtin importantes a principio de la década
L'Intuition de Pinstant: étude sur la jectivity, Cambridge, Cambridge Uni- y sus costumbres de escritor son ex- de 1530). Para Bajtin, Rabelais conti-
loé- de Gastan Rozipnel, París, Stock, versity Press, 1984. cepcionales. No sólo reelaboraba con núa la tradición del carnaval y añade
1932. frecuencia trabajos terminados y se- sus propias innovaciones. ¿Qué es el
Les Intuitions atomistiques: essai de clas- guia desarrollando de forma distinta carnaval, pues?
sification, París, Boivin, 1933.
Mijail Bajtin conceptos ya formulados -por lo El aspecto más importante del car-
Le Nouvel Esprit Scientifique, París, Al-
que su trayectoria no es tanto una lí- naval es la risa. Pero la risa de carna-
ean, 1934.
L'Expénence de l'espace dans la pbysique Mijall Bajtin es, según algunas opi- nea recta como una espirar-, sino val no puede equipararse a as formas
contempdraine, París. PUF, 1937. niones, uno de los grandes teóricos que, además, existe una controversia específicas que adopta en la concien-
La Terre él les révena de la valoricé: essai de la literatura del siglo Da'. Tanto el sobre varios libros de los que se sos- cia moderna. No es meramente paró-
sur Pinzagination des forces, París, alcance histórico de su obra como las pecha que los escribió él, pero que se dica, irónica o satírico.. La risa de car-
Jose Coal, 1948. condiciones políticas en las que escri- publicaron bajo el nombre de sus naval no tiene objeto, Es ambivalente.
La Dialectique de la durée, París, Boivin, amigos V. N. Voloshinov y P. N. Med- La ambivalencia es la clave de la es-
1936. Nueva ed., PUF; 1950. bió (especialmente la represión poli-
tica bajo Stalin) han hecho de él un vedev. Los más importantes son Frau- tructura carnavalesca. La lógica del
La Fornzation de l'esprit scientifique.
Contribution a uno psychanalyse de filósofo social de cierta magnitud. dianismo y Marxismo y filosofía del carnaval, como ha demostrado Kriste-
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24
BAJTIN BAITIN

va, no es la lógica de la ciencia y la grotesco) y la vida. Corno tal, la risa


tradicción y, de ese modo, empieza a establecen límites, sino que equivale
seriedad, cuantitativa y causal, del de carnaval es una de las •formas
encarnar la ambivalencia del carnaval al poder del continuo (positivo y
verdadero o falso, sino la lógica cua- esenciales de verdad en relación con
corno costumbre. Corno afirma Bajtin: negativo). La lógica de carnaval
litativa de la ambivalencia, en la que el mundo». Sin embargo, Bajtin seña- • a máscara se relaciona con la tran- se muestra más próxima a nosotros
el actor es también el espectador, la la que, con la era moderna, la risa ha
sición, la metamorfosis, la violación cuando comprendernos que cualquier
destrucción deja paso a la creatividad quedado reducida a uno de los •gé- acto de habla es esencialmente biva-
de los límites naturales, la burla y los
y la muerte equivale a renacer. neros groseros.. Pero, por otro lado,
apodos familiares. Contiene el de- lente (al mismo tiempo Uno y el
Por tanto, el carnaval no es priva- el propio carnaval defiende esa gro- Otro), de modo que, por ejemplo, la
mento lúdico de la vida». Para Kris-
do ni supone una oposición especifi- sería. La degradación, el envileci-
leva, la máscara señala la pérdida de seriedad del discurso académico se
ca, como en el periodo inmediata- miento, el cuerpo y todas sus funcio- basa en la represión de la ambiva-
b individualidad y la presunción de
mente anterior al Romanticismo y nes —especialmente la defecación, la
anonimato y, por consiguiente, la lencia.
durante éste. En ningún sentido debe orina y la cópula— forman parte in- En su estudio sobre Dostoievski,
presunción de múltiples identidades.
entenderse el carnaval como un he- tegrante de la experiencia ambivalen-
Por tanto, la máscara juega siempre Baltin afirma que la ficción del escri-
cho sancionado oficialmente o sim- te del carnaval. El cuerpo es parte de
con lo simbólico hasta desencajarlo tor ruso posee una estructura •polifó-
plemente como una época festiva, esa ambivalencia. No es algo cerrado
de sus formas fijas y rígidas. La más- nica• porque —como el carnaval—
una ruptura del ritmo normal de tra- y privado, sino abierto al mundo. Del cara es la encarnación del movimien- incluye en sí misma la voz del otro.
bajo de la vida diaria; tampoco es una mismo modo, la proximidad entre el
to y el cambio. Nunca es seria, a me- Por ejemplo, con un texto como Los
fiesta que refuerza el régimen predo- útero y la tumba no se reprime, sino
nos que comprendamos que negarse bermanos Karamazov, •el discurso
minante de b vida cotidiana, con su que, igual que en el caso de la repro-
a dar poder absoluto a la seriedad es del otro penetra de forma gradual y
jerarquía de poder y sus enormes ducción, se celebra, como se celebra
un asunto serio. Como consecuencia, subrepticia en la conciencia y el ha-
contrastes entre ricos y pobres. El car- la .grosería. en general. El cuerpo
el carnaval exhorta a que entremos bla del héroe..
naval, en resumen, no es producto de sólo llega a estar .acabado. (es decir,
• en el juego de la vida enmascarados; Para Bajtin, el discurso novelístico
una burocracia (siempre seria) que privado), según nuestro autor, en el
es decir, de forma ambivalente e irre- no debe entenderse como la palabra
fortalece su propio poder sobre el Renacimiento.
verente, con espíritu risueño. de comunicación que estudia la lin-
principio del •pan y circo.. La gente Las figuras de carnaval como el
El carnaval, en su ambivalencia, güística, sino como el .medio dinámi-
constituye el carnaval y la burocracia, payaso, que existe en el límite entre
llama la atención sobre las personas co• en el que ocurre el intercambio
corno todos los demás, se ve someti- el arte y la vida, experiencias como
como terreno de participación. Como (el diálogo). En términos lingüísticos,
da a sus leyes y rituales, desde la la locura y la figura de la •máscara•, la palabra, para Bajtin, es translingüís-
participación, es un rodeo para evitar
Iglesia hasta la Corona. En pocas pa- que no oculta sino que revela, ilumi- tica: la intersección de significados,
la representación. Conviene a las per-
labras: el carnaval no es meramente nan la lógica ambivalente y global del
sonas en el elemento más importante más que un punto fijo o un significa-
negativo; no posee un motivo utilita- carnaval. Sobre la máscara, Bajtin es-
de la vida. Éstas, al ser miembros del do único. La parodia, la ironía y la
rio. Es ambivalente. cribe que está .relacionada con la ale-
carnaval como participación, encar- sátira, por ejemplo, son ejemplos cla-
Por consiguiente, más que un es- gría del cambio y la reencarnación,
nan lo universal. Por eso lo universal ros de la palabra en el sentido que le
pectáculo que debe observarse, el con la alegre relatividad y la feliz ne-
es práctico y suele escapar a la cosifi- da Bajtin (tenemos que recurrir a la
carnaval es la hilaridad vivida por to- gación de la uniformidad y la seme-
cación. Una vez más, si bien la risa de dimensión translingüística y semióti-
dos. Y ello plantea la cuestión de si janza». Desde luego, en el siglo xvin,
carnaval puede hallar un lugar para la ca para interpretarlas), mientras que
puede existir, en sentido estricto, una la máscara pasó a ser un símbolo
seriedad (aunque sea para burlarse la obra , de Dostoievski nos conduce
teoría del carnaval. Porque no hay —especialmente en la obra de Bous- al mismo tipo de análisis a través de
de ella, puesto que .ningún dicho del
vida fuera del carnaval. Las personas seau— de todo lo que era falso y no
Antiguo Testamento dejaba de poner- la palabra dialógica que incluye la del
que participan en él son simultánea- auténtico. En realidad, la máscara
se en tela de juicio., asegura Bajtin) 6 , otro en sí misma. Se trata de una pa-
mente actores y espectadores. Y, siempre fue la máscara de la hipocre-
la seriedad no encuentra sitio para la labra polifónica en el sentido de que
como la risa festiva del carnaval se di- sía. Con la ambivalencia del carnaval, . risa. Si equiparamos seriedad y cosi- la polifonía no tiene tampoco un
rige también contra quienes ríen, la resulta siempre obviamente distorsio-
ficación (toda seriedad es tímida), punto fijo, sino que es la interpene-
gente que se encuentra dentro de él nadara. Se entiende con claridad que
ello significaría que la risa no puede [ración de sonidos. La polifonía no es
es tanto objeto como sujeto de risa. cubre y transforma su objeto. La más-
cosificarse, no puede teorizarse. singular sino múltiple; incluye lo que
Dicha risa es general, posee una base cara socava el concepto del ser como quedaria excluido en su represen-
La lógica del carnaval (la lógica de
filosófica y comprende la muerte algo idéntico a sí mismo; al mismo
la ambivalencia) no se reduce a la li- tación.
(cfr. los temas de la risa macabra y lo tiempo que revela, juega con la con- Bajtin lee a Dostoievski en el espí-
mitación de oposiciones binarias que

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BAJTIN
BAJTIN

los momentos de su trabajo, con el cunstancias, los presupuestos y el mecanismo para clasificar diversos
ritu clel carnaval con su lógica doble. momento de enunciación. De hecho,
Por tanto, no es posible hacer justicia fin de poder permanecer, corno si géneros de la novela y un medio para
dijéramos, neutral en relación con el Bajtin insta a tener en consideración elaborar una historia y una teoría de
a sus escritos si se reducen a una his- lenguaje, como observador en una la contingencia del lenguaje.
toria con personajes, corno es típico la novela. Y debería recordarse que,
disputa entre dos personas'. Ese interés por la contigencia del pese a su interés por los detalles pre-
en la estructura cerrada de la épica y • lenguaje llevó a Bajtin, a formular su cisos del habla y otros hechos de la
fundamental de lo que Bajtin denomi- Aunque Bajtin se distanció formal-
mente del estructuralismo y la semió- • teoría del •ronotopo.. Como implica vida cotidiana, Bajtin fue un pensador
na un texto •monológico.. En pocas este término, entran en juego el tiem-
palabras, un texto monológico tiene tica, su rechazo a adoptar la ideolo- que usó el lienzo más amplio posible
gía de las intenciones del autor como po y el lugar, y Bajtin intentó mostrar para desarrollar su teoría de la pro-
una lógica única (mono-), homogé- de qué modo la historia de la novela
nea y relativamente uniforme. Se forma de explicar el significado de ducción literaria. En realidad, el efec-
• había constituido diferentes formas to del uso que Bajtin hace de ma-
presta fácilmente a la apropiación una obra de arte le sitúa mucho más
cerca de una posición estructural de de cronotopo. Inspirado en la teoría crocategorías como •cronotopo. y
ideológica; porque el aspecto esen- de la relatividad de Einstein, Bajtin
cial de la ideología es el mensaje lo que parece a primera vista. Para •género. es hacer invisible lo extraor-
Bajtin, el autor es un espacio vacío en • define el cronotopo como .el grado dinario, lo singular, lo individual y lo
transmitido, y no el modo en el que intrínseco de conexión de las relacio-
el mensaje surge y se articula en el el que se ida a desarrollar el drama inclasificable. Algunos críticos, como
. nes temporales y espaciales en /a lite- Booth, han indicado que Bajtin gene-
terreno de la palabra. Para Bajtin, en o, mejor aún, el autor es una drama-
tización en sí mismo. En este sentido, ',tura.. Después pasa a mostrar las raliza en perjuicio de una exége-
este sentido, las obras de Tolstói son variaciones en el cronotopo a lo largo
casi siempre monológicas. Por el con- Bajtin fundó una visión dinámica de sis detallada de la gran variedad de
la estructura, sin duda más dinámica . de la historia de la novela. Por ejem- obras estudiadas. Además, en su des-
trario, en Los hermanos Karanzazov, plo, las novelas del romanticismo cripción de géneros como el .roman-
no sólo las palabras crean significado, que la desarrollada en Rusia bajo los
auspicios de los formalistas rusos. De griego (siglos u y vi d.C.) se caracteri- ticismo griego o la •ovela idílica.,
sino también la relación contextual zan por el •tiempo de aventura., que
entre ellas (por ejemplo, el .poema- hecho, el interés de Bajtin por desta- asume un enfoque formal, muy simi-
car el carácter inacabado y de final se desarrolla a través de los obstácu- lar al de los primeros estructuralistas
de Iván, •La leyenda del Gran Inqui- los (tormenta, naufragio, enfermedad,
sidor•, y la confesión de Smerdya- abierto que poseen las novelas de (por ejemplo, Propp), que hace hin-
Dostolevski (e incluso el carácter in- etc.) que impiden la unión entre los capié en la individualidad y diferen-
kov). dos amantes. Con frecuencia, la trama ciación de la estructura homogénea
Todo el enfoque de Bajtin llama acabado de gran parte de sus escri-
tos, tanto publicados como inéditos), se desarrolla en'varios emplazamien- del género, con el resultado de hacer
la atención sobre la forma en que tos geográficos y se describen las cos-
se construye la novela —su mise en junto a su preocupación por mostrar invisible la particularidad de las obras
que la forma (estática) nunca es se- tumbres y tradiciones de b gente de que lo constituyen. Podríamos ir más
scene— más que sobre la intriga, la • esos lugares. En la novela idílica (por
historia, las opiniones concretas, la parable del contenido (dinámico), allá y sugerir que el problema del
• ej., Rousseau), el espacio y el tiempo género es que corre el riesgo de con-
ideología o los sentimientos del au- significa que su enfoque es estructu-
ralista, pero se niega a limitarse dan- son inseparables: 'La vida idílica y sus vertir obras de arte concretas en un
tor. Para decirlo brevemente: el autor acontecimientos son inseparables , de
do prioridad a lo sincrónico frente a mito. Porque el mito posee una es-
se convierte en el lugar de rnise en ese rincón concreto y espacial del tructura homogénea y relativamente
SCéne de la novela. La novela polifó- lo diacrónico. Del mismo modo, en
su crítica de la distinción que hace mundo en el que vivieron los padres indiferenciado.; ello permite comuni-
nica lo hace más explícito que otras y los abuelos y en el que vivirán los
formas, pero, en casi todos los géne- Saussure entre tangue y parola, Bajtin carlo a un vasto público que, cierta-
asegura que aquél ignora los géneros hijos.s. El mundo idílico, pues, es au- mente, puede apropiárselo a su ma-
ros novelísticos, existen varios len- tónomo, homogéneo, idéntico a sí
guajes en funcionamiento, y el autor del habla, por lo que resulta dudosa nera.
la utilidad de la langue para explicar mismo, casi fuera del tiempo y el Quizá si Bajtin hubiera sido más
utiliza cada uno de ellos. Como ex- cambio. Ello implica que, en la nove-
el funcionamiento esencial del len- estructuralista en el sentido de Lévi-
plica Bajtin: la polifónica y dialógica, el tiempo es Strauss y hubiera considerado la es-
guaje. Además, Bajtin rechaza lo que
El autor no se halla en el lengua- considera la tendencia estructuralista un elemento heterogéneo, casi irre- tructura de los géneros como un tipo
je del narrador, ni en el lenguaje li- a analizar los textos como si fueran presentable. Además, el tiempo den- de gramática que constituía la condi-
terario normal al que se opone la unidades totalmente autónomas cuyo de a hacer más fluido el espacio ción previa para las obras concretas
historia..., sino que utiliza ahora un (euclidiano), por lo que el tiempo de realizadas en función de ellos, no
lenguaje, luego otro, para evitar en- significado puede establecerse inde-
pendientemente del contexto. A su la relatividad se convierte en una ana- habría dado la impresión de falta de
tregarse por completo a uno dé logía posible. rigor que surge con un intento 'prO-
ellos; utiliza este toma y daca verbal, juicio, Cualquier intento de entender Evidentemente, el cronótopo es un custian0 de situar todas las obras de
este diálogo de lenguajes, en todos la parae debe tener en cuenta las cir-
29
28
CANGUILHEM CANGU1LHEM

Speech Cenres and Other Late Essays, rimbombante, tuvo una influencia so- defendió su tesis sobre la locura, afir-
una época bajo la misma categoría de bre los métodos estructurales para
trad. de Vern W. McGee, Austin, Uni- mo que su protegido poseía el talen-
clasificación. abordar la historia, el marxismo y el
versity of Texas, 2.• impr. de bolsillo, to de un poeta cuando hablaba de di-
1987. psicoanálisis que superó con creces, cha materia.
Teoría y estética de la novela, Madrid, en círculos intelectuales y aca- Firme defensor de Foucault contra
NOTAS
Taurus, 1991. démicos, la idea del público sobre los ataques de Sartre y sus seguido-
La cultura popular en la Edad Media y quiénes eran las grandes figuras. Can- res, Canguilhem preparó el escenario
' Cfr. Tzvetan Todorov, Mikbail Ba- el Renacimiento, Madrid, Alianza,
jtin: 773e Dialogical Principie, trad. de guilhem preparó el camino para La- para una historia de la ciencia que se
Wlad Godzich. Manchester, Manchester 1994, can en 1956 cuando, en una confe- desviaba claramente de todo evolu-
University Press, 1984, pág. ix. rencia pronunciada en el Collége cionismo inevitable y de toda noción
Véase Mijall Bajtin, The Dialogic Philosophique, criticó al decano de la acumulativa del conocimiento como
Int agination, Fottr Essays by M. M. OTRAS LECTURAS
psicología clínica, Daniel Lagache. Su progreso. Acostumbró a una genera-
Bajtin, trad. de Caryl Emerson y Michael artículo se reeditó 10 años después
Holquist, Austin, University of Texas KaisTEVA, Julia, «Word, dialogue and no- ción de pensadores a la idea de una
vel-, en Desire in Language: A Sentía- en Les cahiers pour Panalyse, la publi- historia estructural de las ciencias,
Press, 1981.
) Mijaíl Bajrin, Rabelais and bis tic Approacb to Literature and Art, cación dirigida durante los años 60 que intenta justificar las discontinui-
World, trad. de Héléne Iswolsky, trad. de Thomas Gora, Alice Jardine y en la École Normale Supérieure dades tanto como las continuidades
Bloomington, Indiana University Press, Leon S. Roudiez, Oxford, Basil Black- (rue d'Ulrn) por el yerno de Jacques en la historia de los empeños científi-
1984, pág. 66. well, bolsillo, 1982, reimp. en 1984, Lacan, Jacques-Alain Miller. En él fi- cos. Pocos han sido tan perspicaces
lbíd., pág. 39. págs. 64-91. guran las famosas palabras de Can- como Michel Foucault a la hora de
5 lbíd., pág. 40. MORSoN, Gary Saul y ENERSON, Caryl, guilhem relativas al aspecto positivis- señalar las coordenadas generales del
Mikbail Bajlin: Crearían of a Prosaics, ta de la psicología como .algo proyecto de Canguilhem desde la
Bajtin, 773e Dialogic lmagination,
7 Stanford, California, Stanford Univer- equivalente a la filosofía salvo en su
sity Press, 1990. perspectiva estructuralista que aquí
pág. 314. rigor, la ética salvo sus exigencias y
a lbíd., pág. 225. T0D0R0v, Tzvetan, Mikhail Bajtin: 773e nos interesa. En pocas palabras, éstos
Dialogical Principie, trad. de Wlad la medicina sin comprobación'. son algunos de los elementos clave
Godzich, Manchesrer, Manchester Georges Canguilhern nació en 1904 que destaca Foucault.
VÉASE TAMBIÉN EN ESIE LIBRO University Press, 1984. en Castelnaudary, en el sudeste de Antes del trabajo de Canguilhem,
Francia. En 1924, junto a Sartre, NiZan el método dominante en la historia
Kristeva, Lévi-Strauss, Todorov. y Aron, obtuvo su agrégation de filo- de la ciencia consistía en ver el pasa-
sofía en la École Normale Supérieure do como un precursor coherente y
Georges Canguilhom mientras estudiaba con Alain. Tras continuo del presente. Este enfoque
PRINCIPALES OBRAS DE BMTEN completar sus estudios de filosofía, incluye implícitamente la idea de
De acuerdo con Michel Foucault', Canguilhem se tituló en medicina con que, después de establecer una cien-
Freudianism: A Marrist Critique (1927) la filosofia en la Francia de la posgue- el fin de poder enseñar e investigar da y su objeto, a partir de ese mo-
(con V. N. Volishonov), trad. de 1. R. Ti- rra, además de ser marxista o no mar- en el campo de la historia y la filoso- mento ésta se convierte en garante de
runik, Nueva York, Academic Press, xista, fenomenológica o no fenome- fía de la ciencia. Después de ense- la verdad. De ese modo, las discipli-
1976. nológica, podía dividirse también en ñar en un instituto de Toulouse, Can- nas científicas establecidas en los si-
Manrisnz and ¡be Philosopby of Langua- guilhem impartió clases durante la glos XVII y Xvm servirían de base para
ge (1929) (con V. N. Volishonov).
dos corrientes de distinto orden: una,
la filosofía de la experiencia del sen- guerra en la universidad de Estrasbur- las ciencias desarrolladas en los si-
trad. de L, Matejka e I. R. Titunik, go; su curso sobre Las Normas y lo
Nueva York, Seminar Press, 1973. tido y el sujeto; otra, «una filosofía del glos Xix y st El problema de esta teo-
conocimiento, la racionalidad y el nornzal se convertiría en la base de ría es que se basa en una ilusión re-
Problems ofDostoyetsky's Poetics (1929),
trad. de Caryl Emerson, Manchesrer, concepto.; una filosofía de base más su tesis, que defendió en 1943 para trospectiva. Supone que el pasado es
Manchester University Press, 1984. epistemológica. Si Sartre fue, por su- obtener el doctorado en medicina. una preparación para el presente;
Rabelais and Mis World (1940), trad. de puesto, la figura dominante de la pri- En 1955, tras un periodo como Ins- pero, aún más, supone que el presen-
Héléne Iswolsky, Bloomingron, India- mera corriente, Foucault afirma que pector General de educación nacio- te es estático e inmutable y que, por
na University Press, 1984. el director de su tesis doctoral sobre nal, sucedió a Gaston Bachelard en la consiguiente, una historia de la cien-
77ie Dialogic Inzagination, Four Es.says by cátedra de filosofía de la Sorbooa. En cia escrita hoy será igualmente válida
M. Bakbtin (1965-1975), trad. de la locura, Georges Canguilhem, fue el
principal representante de la otra. En 1961 Canguilhem, como miembro del mañana. Sin embargo, para Can-
Caryl Emerson y Michael Holquisr, tribunal ante el que Michel Foucault
Austin, University of Texas Press, 1981. efecto, Canguilhem, discreto y nada guilhem, lo que caracteriza a la cien-

30 31
CANGUILHEM CANGUILHEM

cia no es el cierre y la continuidad, caso, el hecho del error —o la false-


dad— puede ser tan revelador de la ¿La enfermedad no forma parte de la dicina, en cuyo caso quizá sea posi-
sino la apertura y la interrupción. Lo vida? O, en otras pa/abras, ¿Se puede ble establecer, en términos estricta-
que podría parecer un aspecto me- historia de la ciencia corno la •ver-
dad.. Por consiguiente, el objetivo de construir plenamente una fisiología mente médicos, la existencia de una
nor, o incluso invisible, de la historia sin hacer referencia a la enfermedad? condición patológica antes de que la
de la ciencia, puede hacerse repenti- Canguilhern pasa a ser, no el descu-
brimiento de la verdad, sino la bús- Para los griegos clásicos, normal persona involucrada tenga conoci-
namente esencial al ocuparse de un equivalía a armonía y equilibrio, miento consciente de ella. Si bien la
problema recién descubierto. Así, queda de un modo de establecer el
conocimiento de cómo se constituyen mientras que enfermedad equivalía a tecnología más avanzada puede con-
destaca Foucault, •el descubrimiento desequilibrio, •disarmonía. o •anor- tribuir a arrebatar el conocimiento
de la fermentación no celular —un lo verdadero y lo falso en un momen-
to determinado de la historia de la malidad». Los prefijos •dls.. y «a- im- de la enfermedad al paciente, Can-
fenómeno "secundario" durante el plican una discontinuidad entre lo guilhem, tras una reflexión que reco-
• reinado de Pasteur y su microbiolo- ciencia. En este plano, un modo de
normal y lo patológico. En gran parte rre su libro de principio a fin, destaca
, gía— representó una ruptura funda- construcción de dicha dicotomía pue-
gracias al trabajo de Claude Bernard que el médico suele olvidar que, en
. mental sólo cuando se desarrolló la de ser, y frecuentemente es, disconti-
nuo respecto a otro. La discontinui- en fisiología experimental, la medici- definitiva, «es el paciente quien le lla-
• fisiología de las enzinus• 7. Dado que na del siglo >u desarrolló una con- ma». Este recuerdo de algo obvio le
la ciencia cambia inevitablemente dad; en resumen, implica la visión de
la historia de la ciencia como una se- cepción cuantitativa (muy relaciona- permitirá subrayar que la distinción
—porque, para Canguilhem, es sobre da con los niveles de excitación) de entre fisiología y patología no puede
• todo un •sistema abierto', es decir, in- rie de correcciones realizadas por la
la diferencia entre lo normal (salud) tener más que .significación clínica..
fluido por su entorno—, .hace y re- propia ciencia.
Aunque, en su obra posterior, Can- y lo patológico (enfermedad). La en- Se trata de un punto fundamental.
hace espontáneamente su propia his- fermedad pasó a ser un estado biper- Frente a lo que él denomina el enfo-
toria en cada instante.'. guilhem ha escrito sobre Darwin y su
relación con sus predecesores y pre- o bipo-normal. Dicho de otra forma, que positivista de la ciencia, en el
Esta sensación de la ciencia que para Bernard, existía una relación de que es preciso saber para actuar,
rehace su historia es aún más aguda cursores, su trabajo más conocido e
influyente, como muestra de su enfo- continuidad entre la buena salud y la Canguilhem defiende la importancia
en las disciplinas que no han alcan- enfermedad. Conocer la fisiología del de la »técnica•. Es decir, sólo median-
zado el alto grado de formalización que de la historia de la medicina, es
Le Normal el le patbologique (lo nor-
cuerpo normal era entrar también en te la referencia al entorno, o las con-
de las matemáticas. Por eso Canguil- contacto con la base del cuerpo en- diciones de la existencia, en las que
hem centró sus estudios, casi con ex- mal y lo patológico), publicado por
primera vez en 1943 y reeditado y au- fermo. En resumen, mediante el pa- se dan la buena salud y la enferme-
clusividad, en la biología y la medici- radigma cuantitativo, la buena salud dad (y no intentando construir teóri-
na: las ciencias de la vida. Hizo .bajar mentado en 1966. El texto pretende
(lo normal) era una vía al conoci- camente la distinción a prMr0, pue-
de las alturas« a la historia de la cien- contribuir a explicar la diferencia en-
tre lo normal y lo patológico exami- miento de lo patológico. de sostenerse la diferenciación entre
cia, hacia las »regiones intermedias. En el siglo mr, el trabajo de René ambas. La referencia a las condicio-
en las que el conocimiento depende nando cómo se han desarrollado di-
chos conceptos en la fisiología y la Leriche altera la perspectiva cuantita- nes significa que la distinción entre lo
claramente del entorno exterior. tiva del enfoque positivista. Para Le- normal y lo patológico debe seguir
El resultado es que la verdad y el biología durante los siglos xLX y n. La
pregunta que guía el estudio es: riche, la salud es equivalente al «silen- siendo provisional y continuamente
error, como afirmaba Nietzsche, son cio del cuerpo en sus órganos.. La abierta al cambio. En lugar de cerrar
los que se ven desde una perspectiva ¿Cómo se establece lo normal en bio-
logia y medicina? Al decir normal, po- salud (lo normal) se convierte ahora vías para la expansión de los medios
concreta. Lo que resulta importante e en lo que se da totalmente por des- humanos, la visión de Canguilhem
interesante en la historia de la den- dríamos referirnos a la buena salud,
frente a la enfermedad, o a lo que se contado; el bienestar es el cuerpo parece llevar a su profundo perfec-
cia es lo que parece serio desde la que no se experimenta o se conoce cionamiento.
perspectiva del presente. Así lo acla- considera patológico. Por otro lado, si
hablamos de la vida en su conjunto, como tal; se cree que el conocimien- Otro tema importante que recorre
ra la afirmación de Canguilhem de to del cuerpo es posible sólo partien- la obra de Canguilhem es el relativo
que .es en el presente donde los pro- la enfermedad, o lo patológico, debe-
do de la perspectiva de lo patológico, a la definición formal de lo normal.
blemas incitan a la reflexión» 5. Sólo ría incluirse, en cierto sentido, dentro
de la medicina, y no de la fisiología. Uno de los modos en que se ha
por esta razón, no puede existir una del concepto de .normal.. No obstante, queda aún por esta-
Durante el siglo eax, se considera- definido lo normal es en relación
historia de la ciencia totalmente neu- blecer el carácter de lo patológi- con la norma estadística. Para Can-
tral. Es preciso reconocer, en primer ba que la medicina era la ciencia de
co. Claramente, esta cuestión puede guilhem, las investigaciones del si-
lugar, que una versión concreta de la las enfermedades y la fisiología, la abordarse desde el punto de vista de
ciencia de la vida. Pero esta dicoto- glo XX han sido capaces de demos-
verdad y el error podría ser falsa y, alguien que se siente enfermo o des- trar que un ser vivo puede • ser
en segundo lugar, que, en cualquier mía se ve alterada por una pregunta: de el punto de vista de la propia me- perfectamente normal aunque guar-
32 33
CANGUILHEAI CAVAILLÉS

cle poca relación con un promedio es- sentido, afirma Canguilhem, los se- del mismo modo que éste se encuen- OTRAS LECTURAS
tadístico. En realidad, un monstruo res humanos son seres .normativos., tra unido a los avances más importan-
(una anomalía) podría ser muy normal no porque se ajusten a las normas, tes de la ciencia del siglo XX. FoucAury, Michel y HUECHELL, Graharn,
en el sentido cle que constituye su sino porque crean normas, son sis- •Georges Canguilhem: Philosopher of
propia norma respecto al entorno en temas abiertos que dependen de su error., Ideology and Consciousness 7
el que se encuentra. -Si se torna aisla- entorno. Como confirma nuestro au- NOTAS (otoño de 1980), págs. 51-62.
do, el ser vivo y su entorno no son tor: •Las normas se relacionan entre LECOURT, Dominique, Alarxism and
normales: es su relación lo que los sí dentro de un sistema.'. La enfer- ' Michel Foucault. •Introduction• en Epistemology: Bachelard, Canguilbenz
Georges Canguilhem, On me Normal and Foucault, trad. de Ben Brewster,
hace así• 6 . Una anomalía puede ser medad —el obstáculo— es el estí-
and the Pathological, trad. de Carolyn R. Londres, NTS, 1975.
rara y, aun así, seguir siendo normal. mulo necesario para la creación de
Fawcett, Dordrecht, Holanda, Reidel SPICCER, Stuart, •An introduction to the
En su estudio detallado de la dife- normas que requiere la salud. Publishing Company, 1978, págs. ix-n. medical epistemology of Georges
rencia entre enfermedad y salud, Dada la importancia del lugar que Elisabeth Roudinesco, Jacques La- Canguilhem., JounialoPledicine and
Canguilhem muestra que, aunque el concede a lo patológico, Canguilhem can and Conzpany. A History of Psy- Pbilosophy, 12,4 (noviembre de 1987),
límite entre lo normal y lo patológico se opone a las nociones psicosocia- choanalysis in France, 1925 1985, trad.
- págs. 397-411.
es impreciso, ello no implica conti- les de la norma. Un ejemplo sería el de Jeffrey Mehlman, Chicago, Universi-
nuidad entre ambos. Sin embargo, trabajo de Talcott Parsons. Aquí se da ty of Chicago Press, 1990, pág. 221.
(Trad. esp.: Batalla de cien años, 2925-
cuando se concibe la vida como una por supuesta la norma previa de una
1985: Historia del psicoancilisis en Fran-
especie de totalidad, debe reconocer- sociedad de buen funcionamiento y Jean Cavailles
cia, Madrid, Fundamentos, 1993.)
se también que la enfermedad no más o menos ordenada, y la oposi- 3 Foucault, •Introduction• en Georges
puede ser anormal en ningún sentido ción a la norma, más allá de cieno Canguilhem, On Me Normal and the Pa- Aunque Jean Cavaillés y su obra
absoluto. Si alguien no experimenta- umbral, se considera patológica y peli- thological, pág. xiv. clave, Sur la logique et la tbéorie de la
se mala salud, los resultados serían grosa para la existencia de dicha socie- 4 lart science (Sobre la lógica y la teoría de
nocivos porque, dado que el ser vivo dad. Este tipo de teoría social ve la so- Canguilhem, On the Normal and the la ciencia, en adelante Sur la logi-
es fundamentalmente un sistema ciedad como un sistema relativamente Patbological, pág. 27. que) , quizá no transformaron irrevo-
abierto, necesita una forma de iniciar cerrado en el que la •salud. se mantie- lbíd., pág. 78. cablemente el paisaje intelectual de
nuevas condiciones mediante la su- ne suscribiéndose a la norma, y no
'Ibid., pág. 117.
Francia tras la Segunda Guerra Mun-
8 Ibid., pág. 153.
peración del tipo de obstáculos que creando nuevas formas de normalidad. dial, sí fueron una condición previa
plantea la enfermedad. •El hombre En conjunto, para Canguilhem, la para dicha transformación. Como
sano no huye ante los problemas historia de la propia ciencia tiende a VÉASE TAMBIÉN IN ESTE LIBRO Georges Canguilhem —aunque por
planteados por las alteraciones, a ve- ser un sistema abierto, tal como im- motivos muy distintos—, Cavaillés es
ces repentinas, de sus costumbres, ni plicaba Foucault. La ciencia •hace y Bachelard, Cavaillés, Foucault, Lacan. otro de los precursores invisibles
siquiera en términos fisiológicos; rehace su historia en cada instante•, (para el gran público) del movimien-
mide su salud en relación con su ca- encuentra una norma, sólo para revi- to estructuralista de los años 60. Lo
pacidad de superar crisis orgánicas sarla y transformarla. Por esa razón, PRINCIPALES OBRAS DE CANGUILHEM
que Cavaillés aportó tanto a la vida
para establecer un nuevo arder -1.7. suele ser un proceso de discontinui- COMO a los medios intelectuales fue
Le Normal et le pa tbologique (1943,
En la ciencia médica del siglo xx, dad; una pluralidad de normas, debi- una combinación única de inmenso
1966), París, Presses Universitaires de
nos encontramos con que la salud do a su mismo carácter, implica la coraje (recibió dos condecoraciones
France. 1988 (2.' ed.).
no es la ausencia total de enferme- discontinuidad entre ellas. La historia, El conocimiento de la vida (1952), Bar-
Bar- póstumas por su valor en la Resisten-
dad, sino la capacidad de restaurar como historia de la continuidad, - celona, Anagrama, 1976. cia), energía y poesía, por un lado,
un estado anterior mediante un es- como la idea del sujeto trascendental, dibistoire et de philosophie des unidos a un rigor extremo y brillan-
fuerzo que puede modificar la base es un sistema cerrado y fundamental- sciences, Paris, Vrin, 1975. tez filosófica, por otro. Las famosas
estructural de la persona . afectada. mente incapaz de cambiar en ningún Fornzation du concept de réflex aux XVII palabras de Cavaillés al final de Sur
Esta modificación de la base estruc- sentido esencial. La historia disconti- et XVIII siécles, París, Vrin, 1977. la logique=, con las que reclamaba
tural, equivalente a la interacción del nua, por tanto, siempre se plantea ldéologie et rationalité dans Phistoire una filosofía no humanista de con-
des sciences de la vie (1977), París,
ser vivo con sus condiciones de exis- preguntas, como hizo Kant respecto ceptos que sustituyera a la filosofía
Vrin, 1981 (2.' ed.).
tencia, no produce estados anorma- a la Ilustración. Este principio de pre- La Santé: concept vulgaire et question de la conciencia representada por
les. sino un proceso continuo de guntar, quizá más que ninguna otra philosophique, Pin-Babia, Sables, Sartre y la fenomenología, deben ver-
modificación de normas. En este cosa, une a Foucault y Canguilhem, 1990. se unidas a su compromiso con la Re-

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CAVAILLÉS CAVAILLÉS

sistencia durante la ocupación alema- agosto de 1942 y le internó en el sur riencia nueva se filtra a través de una Dentro de la matemática, los intuicio-
na y su posterior muerte ante un pe- de Francia, al principio en ivfontpe- estructura formal eterna? ¿O lo que nistas han llevado esta cuestión más
lotón nazi de fusilamiento en 1944, a ilier y luego en Saint-Paul d'Eyjeaux. ocurre es, más bien, que una expe- lejos, con la afirmación de que la
los 41 años. Para gente como Geor- Se escapó por segunda vez en di- riencia concreta puede volcar el pro- base Ultima de los axiomas matemáti-
ges Canguilhern, Cavaillés fue la ciembre de ese mismo año y poste- pio edificio, con b que la lógica y la cos es el propio mundo físico. O, en
prueba viviente de que un hombre de riormente viajó a Londres, donde co- experiencia estarían inextricablemen- realidad, se trata de defender que,
acción podía ser estructuralista en su noció a Simone Veil. Tras regresar de te unidas entre sí y un cambio en una como la conciencia humana es una
orientación filosófica. Londres en 1943, fue detenido nueva- tendría inevitablemente profundas re- entidad física en el mundo, la forma-
Jean Cavaillés nació en el seno mente, en esta ocasión por el contra- percusiones en la otra? lización matemática está en última
de una familia protestante en 1903.3 espionaje alemán. Abandonado por Kant y, antes de él, los gramáticos instancia, para los intuicionistas, liga-
Obtuvo su agrégation de filosofía el gobierno de Vichy, fue torturado y de Port-Royal, dieron prioridad, en su da a b conciencia. Por consiguiente,
en 1927 y, en 1929, asistió a las con- ejecutado en febrero de 1944, des- explicación de las reglas de la lógica el punto de partida de la investiga-
ferencias pronunciadas por Husserl pués de que un tribunal militar le y la gramática, a un yo o conciencia ción debe ser el mundo material.
sobre Descartes en la Sorbona. Con condenara a muerte. Tras su muerte fundamental. Las normas no con- Cuando, en 1817, Bolzano demos-
ayuda de una beca Rockefeller, estu- le nombraron Compañero de la Libe- dicionadas y apodícticas de la lógica, tró que ya no era preciso considerar
dió a principios de los años 30 en ración y Caballero de la Legión de como la razón, pertenecerían al ámbi- la ciencia como simple intemediaria
varias universidades alemanas, entre Honor. to de la conciencia. Por consiguiente, entre la mente humana y la realidad
ellas la de Friburgo donde, en 1931, Durante su internamiento en el sur b lógica constituiría la organización externa, abrió una vía de reflexión
conoció personalmente a Husserl. de Francia, Cavaillés se dedicó a es- de esa conciencia. Sería intrínseca de completamente distinta. Cavaillés de-
Después de dar clases en un lycée de cribir la que resultaría ser su obra fi- la psicología humana. De acuerdo fiende que, aunque una teoría de la
Amiens, fue nombrado lector de lógi- losófica más importante, Sur la logi- con esta lectura, la conciencia está or- ciencia debe ser forzosamente una
ca y .filosofía general en la Facultad que. En cierto sentido, llamarla ganizada, pero su contenido es con- teoría de la unidad, ésta es unidad de
de Letras deja Universidad de Estras- filosófica induce a confusión. Porque, tingente o condicionado. Es decir, movimiento, no de eStaSiS; la ciencia
burgo. Allí terminó, en 1938, su doc- si bien Husserl y otros fenomenolo- una conciencia inmutable y, en defi- no está fuera del tiempo. En este con-
torado en matemáticas sobre el mé- gistas aceptaron la opinión de Kant nitiva, formal, se encuentra con un texto, el .verdadero significado de
todo axiomático y el formalismo, con de que la filosofía era el árbitro de las contenido heterogéneo de experien- una teoría no reside en lo que el pro-
una tesina sobre la teoría de-las se- bases epistemológicas de las ciencias cia. Por supuesto, como es sabido, pio científico entiende como esen-
ries. En ambos trabajos, Cavaillás em- naturales y humanas, Cavaillás no Rant asegura que forma y contenido cialmente provisional, sino en una
pieza a elaborar una postura en con- adoptó esa postura. Para él, la inves- son inseparables: no puede haber ex- transformación conceptual que no
tra de la intuición y a afirmar que el tigación de los fundamentos de las periencia sin un concepto ni pensa- puede detenerse- 5. En un sentido más
desarrollo de las matemáticas no ciencias mostraría que la ciencia qua miento sin un contenido. Pese a ello, general, la ciencia no puede reducir-
debe nada a la existencia en sentido ciencia —la matemática cónstituye un Kant y, más tarde, Husserl, conside- se a las intenciones del científico, tal
existencialista, sino que es puramen- ejemplo privilegiado de ello— es ob- ran que el lado formal de la ecuación como han implicado las filosofías de
te formal, el desarrollo de conceptos. jeto de una confusión esencial si se está relacionado con las normas de la la conciencia desde Descartes hasta
En 1939, Cavaillés fue movilizado, considera que necesita un lenguaje lógica que serían trascendentales e Husserh la base de la ciencia debe
primero como oficial del corlas franc metafilosófico para hacer más claro inmutables: el contenido puede va- hallarse en la formación de concep-
(fuerza irregular) y después como ofi- su marco formal. Cavaillés reflexiona riar, pero la forma es siempre la mis- tos y su historia. Es decir, la ciencia
cial de cifra. En junio de 1940 fue a través del modo en el que Kant ma. A este respecto, Cavaillés afirma cambia en el plano conceptual; no
hecho prisionero y se escapó a Bélgi- aborda la cuestión del pensamiento que -en una filosofía de la concien- permanece en un estado congelado
ca mientras le transportaban a Alema- de base en relación con la experien- cia, la lógica es trascendental o no como en el trascendentalismo de
nia; volvió a la enseñanza en la uni- cia, centrándose en saber qué son el existe-4 . Kant.
versidad de Estrasburgo y luego se pensamiento y la lógica frente a ex- Un enfoque semejante es el que se Para consolidar y aclarar su argu-
trasladó a Clemont-Ferrand, en la lla- periencias nuevas. Aquí, Cavaillés ha adoptado en las ciencias con rela- mento, Cavaillés emplea una serie de
mada zona libre. En 1941 fue nom- hace rápidamente hincapié en la re- ción a la lógica y la matemática. Por términos clave. El primero es -estruc-
brado profesor asociado de lógica en lación entre lógica y singularidad. ¿Se un lado está la base normal y fija de tura.. Como investigar el carácter de
la Sorbona. Corno cofundador del trata de una relación en la que la ló- la ciencia y, por otro, la acumulación la ciencia es en sí una actividad cien-
movimiento de resistencia Libération- gica asume un carácter inmutable y de conocimientos que se consideran tífica, la ciencia es la -ciencia de la
sud, la policía francesa le detuvo en trascendental, de modo que la expe- derivados del mundo físico y externo. ciencia.. Sus afirmaciones no son

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CAVAILLÉS CAVAILLÉS

constituyentes, sino que aparecen in- el encadenamiento es la clave de la vaillés, la fenomenología propone dos), la conciencia es el carácter in-
mediatamente en la propia ilumina- relación entre forma y contenido. Ese una postura semejante a la del lógico separable del pensamiento y su reali-
ción del movimiento científico. Este encadenamiento de la ciencia, que es empirista que asegura que la mate- zación. Por último, todo ello queda
movimiento, afirma Cavaillés, equiva- posible gracias a la lógica, es la cien- mática no tiene contenido propio. Se resumido en la famosa observación
le a la estructura. La estructura, por cia corno demostración. No existe centra en el uso que Hussed hace del de que •no es una filosofía de la con-
tanto, es la manifestación de la cien- principio —ni fin— en el movimien- término -namología• para destacar las ciencia, sino una filosofía del concep-
cia ante sí misma. to de encadenar; sólo sería posible teorías axiomáticas en la matemática. to la que puede ofrecer una doctrina
La revelación con arreglo al movi- si se usa la epistemología kantiana La nomología permite una definición de la ciencia:.
miento de la estructura equivale a lo como base para la comprensión. unívoca de un sistema de objetos; no Jean Cavaillés escribió el libro que
que se revela. No existe ninguna for- Y siempre existe, como reconoce puede producir contradicción y es, más fama le ha dado mientras se en-
ma de revelación separada de lo que CaVaillés, la tentación de incluir la por tanto, tautológica. La matemática, contraba prisionero en una celda
se revela. La revelación da paso a un matemática en las construcciones como forma pura, se halla en el pla- francesa durante la Ocupación, en el
término esencial en el proyecto glo- imaginativas de la experiencia que no nomológico, mientras que su as- sur de Francia. No pudo escribir la In-
bal de Cavaillés, la •demostración.. caracterizan al enfoque kantiano. pecto aplicado, o contenido, está en troducción, que juzgaba necesaria
Con •demostración., Cavaíllés pre- Cavaillés concluye su exposición la física. Sin embargo, para Cavaillés, para hacer más accesible una obra
tende abarcar el trabajo científico en con un examen de la fenomenología como matemático, la teoría de los nú- tan difícil. Participó en la historia
su conjunto. Para ilustrar este punto, de Husserl y su filosofía de la ciencia. meros no es nomológica. El teorema mientras rechazaba su versión exis-
podernos centrarnos en la relación En él muestra que las premisas bási- de Gadd, que afirma que puede exis- tencialista. En pocas palabras, como
entre matemática y física. De acuer- cas de la fenomenología, especial- tir una proposición que no sea el pro- recuerda Canguilhem, la actividad de
do con b epistemología kantiana, la mente en lo que respecta a la mate- ducto ni la contradicción de axiomas, Cavaillés como combatiente (un pa-
relación entre ambas sería el aspecto mática, refuerzan la primacía de la no es compatible con el formalismo pel para el que se veía destinado, de-
•puro• de la ciencia, en comparación conciencia y el yo trascendental. Por- de la nomología. Una vez más, la no- rivado de cierto rigor lógico) fue lo
con su aspecto •aplicado.. Los nuevos que, incluso si la conciencia es siem- ción de infinito de Cantor no encaja que interrumpió su trayectoria como
fenómenos físicos se explicarían y pre conciencia de algo, e incluso si en una matemática puramente for- filósofo e historiador de la ciencia. El
entenderían en virtud del marco ma- Husserl pretendía construir un cuerpo mal. La matemática, afirma Cavaillés, filósofo para el que la ciencia es de-
temático a priori. Para Cavaillés, por conceptual riguroso (léase: científico) empieza con el infinito. Es decir que, mostración, estructura e historia de
el contrario, la verdadera ciencia no para analizar el contenido de la con- al final, el proyecto filosófico de Hus- los conceptos sin fundamento en el
abandona nunca lo que demuestra. ciencia, ésta, en su estructura interna, serl no es único. Tal vez revela que cogito, murió en plena acción, por así
Toda ciencia es inseparable de la de- es fundamentalmente una entidad for- puede haber una conciencia del pro- decir. Y su muerte ha pasado a ser
mostración. No tiene un aspecto to- mal sin ningún contenido concreto. greso, pero no puede ofrecer ningún una especie de demostración, es de-
talmente 'puro., del mismo modo que Así es, a pesar de que Hussed distin- análisis del progreso de la conciencia cir, una síntesis extraordinaria de vida
no tiene un aspecto esencialmente gue entre la lógica formal, como se en sí; esta última es, en definitiva, e intelecto. Como decía, una vez más,
•aplicado.. Por consiguiente, una de- ejerce en los juicios particulares o ar- puramente formal, es decir, nomoló- Canguilhem, la vida de Cavaillés el
mostración es cierta, no porque haga gumentos, y las disciplinas de la Inri- gica. El progreso científico no debe filósofo no fue una preparación para
realidad un teorema, sino mediante el thesis universalis (aritmética, lógica entenderse como la historia de la acu- la muerte; su muerte fue una prepa-
movimiento necesario de la lógica. La pura, etc.) que, al ser absolutamente mulación de conocimientos, sino ración para la Filosofía.
lógica de la ciencia está, pues, en su formales, carecen de base empírica como la *revisión perpetua del conte-
demostración, que consiste en la es- que les dé validez. Esta separación nido existente mediante la profundi-
tructura que habla de sí misma. fundamental en Husserl es, a juicio de zación y la borradura. 6. NOTAS
Con el fin de que esto pueda com- Cavaillés, otra versión de la separa- A partir del análisis que acabamos
prenderse más plenamente, Cavaillés ción entre la estructura formal de la de esbozar, Cavaillés termina su estu- 'Jean Cavaillés, Sur la logique et la
dio afirrnando que no existe una con- théorie de la science, París, Vrin, 4. ed.,
muestra cómo el movimiento de la ciencia y su contenido concreto.
ciencia capaz de generar sus propios 1987. El dado de esta obra lo dieron
ciencia está incrustado en su proceso Al confirmar este último punto, Georges Canguilhem y Charles Ehres-
de encadenamiento, es decir, en su examina la visión que Husserl tiene productos; la conciencia está inme- mann al establecer el texto.
lógica. En lugar de la metáfora del de la matemática. Advierte que el pa- diatamente en la idea, no separada pág. 78.
contenido empírico que se vierte en dre de la fenomenología divide la formalmente de ella. Del mismo ` Los siguientes detalles de la vida y
un continente formal (es decir, en matemática en una parte formal y modo que la ciencia es demostración la carrera de Jean Cavaillés están extraí-
conceptos), Cavaillés considera que otra aplicada. Por tanto, explica Ca- (unión de aspectos puros y aplica- dos de Georges Canguilhem, Vie et mort

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FREUD FREUD

de Jean Cavaillés, Ambialet, Fierre La- los valores de un burgués decimonó- junto tle la obra freudiana —desde to en el joven Freud un colega con-
leure, •Les carnets de Baudasser., 1984. nico, que estaba influido por el posi- el •Proyecto de psicología científica., temporáneo e influyente de Brücke,
Este texto está formado por tres con- tivismo científico v el vitalismo, que escrito en 1895, hasta •El proble- Hennann Helmholtz —que, entre otras
ferencias conmemorativas que Canguil-
sus opiniones sobre la sexualidad es- ma económico del masoquismo, cosas, escribía sobre termodinámica—
hern dio en la Universidad de Estrasbur-
go, la Sorbona y el programa culrural de taban impregnadas por ciertas actitu- de 1924, pasando sobre todo por y el físico y filósofo Gustav Fechner.
Radio France, en 1967, 1969 y 1974, res- des victorianas. Sin embargo, desde • Más allá del principio del placer, Todos ellos representaban el positi-
pectivamente. otro punto de vista, es posible juzgar de 1920— puede verse como un vismo y vitalismo médico que domi-
' Cavailles, Sur la logique, pág. 10. a Freud como un pensador que fue quiasmo en el que aquello que, al nó en Viena y otros lugares durante
5 ¡bid, pág. 23. y, con toda probabilidad va a seguir los tres últimos decenios del siglo nx.
principio, era vida (horneostasis), se
¡Ud., pág. 72. siendo simultáneamente controver- hace muerte (tánatos), y lo que era Su influencia puede verse, especial-
' !bid. tido, en sus afirmaciones sobre se- muerte (energía ilimitada) al princi- mente, en la teoría de la energía físi-
xualidad y psique, y brillante y per- pio se hace vida (Eros)'. Laplanche ca •Iimitada• e .ilimitada. de Freud,
turbador en su modo de fundar el demuestra que no hay nada que sus- dentro del ¡Proyecto de psicología
VÉASE TAMBIÉN EN ESTE LIBRO
psicoanálisis a través del estudio de tituya a la lectura real de Freud. científica', publicado póstumamente.
fenómenos que, hasta entonces, se Sigmund Freud nació en Friburgo El mismo año en el que escribió esta
Bachelard, Canguilhem, Foucault.
consideraban no analizables: por en 1856, en una familia judía. Cuan- obrá, 1895, Freud y Breuer publica-
ejemplo, sueños o deslices verbales. do tenía cuatro años, su familia se ron sus Escritos sobre la histeria, ba-
PRINCIPALES OBRAS DE CAVAILLÉ.S Los textos de Freud resultan más trasladó a Viena, donde Freud vivió y sados inicialmente en el caso de
que estimulantes en lo que dicen trabajó hasta 1938, cuando se vio Anna O. Con esta obra, las investiga-
Méthode axionzatique et formalisme. Es- como entidad (relativamente) discre- obligado a huir a Inglaterra después ciones de Freud en materia de activi-
sai sur le probléme du fondement des ta; son estimulantes también, incluso del Anschiuss. Aunque siempre se dad psíquica adoptaron una nueva
mathématiques, París, Hermann, 1938. principalmente, como rastro de una quejó del ambiente opresivo de la dirección, puesto que el elemento
Remarques sur la formation de la théo- gran odisea intelectual en la que el ciudad, Freud no sólo vivió en ella que pareció causar la recuperación
rie abstraite des ensembles, París, Her- psicoanálisis atraviesa una transfor- casi toda su vida, sino que permane- de Anna O. a través de la catarsis (la
mann, 1932. mación sutil dentro de un cuerpo tex- ció con su familia en el mismo domi- liberación de las tensiones) fue lo
Transfini et continu (1943), París, Her- tual en evolución permanente. En cilio casi cincuenta años: la famosa que la paciente denominó la •cura
mann, 1947.
parte, dicha transformación deriva del Bergasse 19. Freud fue un alumno parlante. En efecto, la •cura parlante»
Sur la logique et la théorie de la science
(1943 y 1947), París, Vrin, 4. ed., hecho de que Freud no posee el con- brillante, siempre con las mejores es el resultado de avanzar con-arre-
1987. trol total de los conceptos (por ejem- notas en el Instituto (Gynznasiunz), y glo al modelo fisicista o vitalista de la
Philosophie mathématique (1962), París, plo, vida, muerte, placer, yo) que se graduó con honores en 1873. psique: la tensión se libera (se logra
Hermman, 1971. pretende explicar, debido a que éstos En 1883 se tituló en medicina por la la homeostasis) hablando e interpre-
son frecuentemente inestables, Bre- Universidad de Viena y, en 1885, ob- tando, es decir, manipulando los sig-
vemente, Freud, que subrayó la im- tuvo una beca para ir a París a estu- nificados.
OTRAS LECTURAS portancia de realizar un trabajo cons- diar con el gran Jean Martín Charcot, Como muestra Laplanche, el paso
tante de interpretación, Freud, que en Salpetriére. Charcot no sólo abrió desde el modelo vitalista de psique
BAcHELARD, Gastan, •L'Oeuvre de Jean Ca- afirmó que, en última instancia, un observado en el análisis de la histeria
a Freud el camino para tomar en se-
vaillés-, en Gabriel le Ferriéres, Jean Ca- psicoanálisis era interminable, ese rio la enfermedad mental, con su se ve de forma más espectacular en
vaillés, philosophe el combattant, París,
mismo Freud debe interpretarse a la diagnóstico de histeria y el uso de la un caso relatado en el •Proyecto»
Presses Universiraires de France, 1950.
CANGUILHEM, Georges. Vie el mort de luz de la idea de .interpretación ilimi- hipnosis; además fue un maestro ca- de 1895, un texto que establece con
lean Cavaillés, Ambialer, Fierre La- tada» que él inició. rismático y estimulante por el que • mayor claridad el modelo cuantitati-
leure, 1976. Por consiguiente, quizá una de las Freud sintió una admiración perma- vo de la psique, la psique como 'una
lecturas más interesantes de Freud es nente. A su regreso a Viena, en 1886, especie de economía de la fuerza
la que ha hecho el psicoanalista fran- Freud se estableció como médico. nerviosa-, como escribió Freud en
cés Jean Laplanche, discipulo de Murió en Londres en 1939. una carta a Fliess. El caso menciona-
Sigmund Freud Jacques Lacan. En pocas palabras, Durante sus años universitarios, el do es el de una joven, Enlata, que tie-
Laplanche ha sugerido que, especial- futuro psicoanalista trabajó en el la- ne miedo de entrar sola en las tien-
Es un tópico decir que Freud fue mente en relación con los conceptos boratorio del fisiólogo y positivista das. En el análisis, Emma relaciona su
un hombre de su tiempo, que poseía de vida y muerte, casi todo el con- ErnSt Brücke. También causaron efec- síntoma con el recuerdo de entrar en

40 41
FREUD
FREUD

No es un impulso animal (aunque, en guaje en sí mismo: se aproxima a un


una tienda a los doce años, ver a dos dad física. Está relacionada con los
ocasiones, el propio Freud parece ideolecto. Quizá el hecho de que
vendedores que reían y huir aterrada. procesos simbólicos y requiere una
haberse sentido atraído por esa opi- Freud demostrara cómo.un sueño es-
La investigación análitica revela que, interpretación. Después de ver que el
nión), sino que está imbricada en to- tiraba hasta el límite el lenguaje y la
tras esta escena, se encuentra otra: a elemento de interpretación es crucial
dos los desplazamientos de la vida interpretación es el motivo de que su
los ocho años, Emma había entrado para la vida psíquica, el modelo
social y cultural. En este caso, despla- obra haya ejercido influencia en cam-
en una tienda a comprar golosinas y cuantitativo —y, más recientemente,
zamiento significa una vía indirecta. pos ajenos al psicoanálisis, relaciona-
el tendero había tocado sus genitales el conductista— de psique resulta in-
En La interpretación de los sueños, dos con la interpretación de textos.
a través de la ropa. Pero, en su mo- suficiente. Esta división aparente en
Freud define el desplazamiento como Para comprender el significado de
mento, Emma no lo había considera- la obra de Freud entre el nivel físico
una de las formas en las que la acti- la ocultación y la distorsión en los
do un hecho traumático. Lo que re- y biológico y el nivel simbólico ha
vidad del soñador oculta el mensaje sueños, Freud demuestra que es tam-
sulta significativo respecto a ambas sido, quizá más que ninguna otra
inconsciente del ensueño. Forma par- bién preciso entender el papel de la
escenas es que la primera es un re- cosa, el centro de numerosos debates
te, junto a la condensación, del pro- represión. Esta última está, por su-
cuerdo traumático pero un hecho y malentendidos. En relación con la
ceso primario. El desplazamiento se puesto, estrechamente unida al in-
inocente, mientras que la segunda sexualidad, por ejemplo, muchos
refiere al modo en que un elemento consciente. Y lo que se reprime son
(cronológicamente la primera) es un comentaristas angloamericanos han
(o varios) del contenido manifiesto las ideas inconscientes en los sueños.
suceso potencialmente traumático tendido a despreciar la teoría de la
del sueño puede ser insignificante, o Desde cierto punto de vista, el que
pero un recuerdo inocente, precisa- sexualidad de Freud porque la inte-
incluso estar ausente, en el conteni- sueña —y, por tanto, el analizando—
. mente ;porque no se experimentó pretan en términos biológicos, es de-
do latente: las ideas soñadas. La con- reprime recuerdos dolorosos y trau-
como traumático. Sólo cuando el pe- cir, de manera positivista y no sim-
densación se refiere a que resulta es- máticos de carácter sexual; en esta
' riodo intermedio de la pubertad dio bólica.
caso el contenido manifiesto de un lectura, la represión es fundamental-
a la violación todo su significado se En La interpretación de los sueños,
sueño en comparación con la canti- mente una forma de defensa. Sin
convirtió en un hecho traumático en Freud empieza por afirmar con clari-
dad de ideas soñadas que pueden de- embargo, después de la labor de Jac-
sentido psíquico, pero, entonces, sólo dad que, en su intento de lograr una
rivarse de él. Cada elemento del sue- ques Lacar', se ha dado una interpre-
• como huella en la memoria, podría comprensión más profunda de los
ño puede generar múltiples líneas de tación más estructural. En ella, la re-
decirse que sólo mediante el despla- sueños, su método se diferencia de
asociación. Freud lo llamó superde- presión se relaciona con la propia
i zamiento. Esta noción de desplaza-
miento resulta crucial, porque hace
los anteriores en que no se basa en
en un código de sueños previo. Pro-
terminación. El desplazamiento y la formación del sujeto en el lenguaje y
; condensación, por tanto, implican lo simbólico. Sería aquello que per-
. que sea imposible la atribución cate- pone estudiar el material de esos sue-
que un sueño requiere interpretación mite la distinción entre sujeto y obje-
gótica de un trauma a un hecho físi- ños por sí mismo. En términos muy
(no puede equivaler a su contenido to. Pero, si es así, ¿por qué es nece-
co. Al contrario, indica que toda idea generales, Freud demuestra que la in-
manifiesto). Ambos procesos son, sario lograr acceso al material
de trauma en un sentido humano terpretación de los sueños debe ser
además, dos aspectos de la actividad reprimido? Si la represión es una ne-
debe tener en cuenta su significado especial porque un sueño es la reali-
soñadora que sirven para ocultar el cesidad estructural, ¿por qué hay que
retrospectivo. En otras palabras, la in- zación de un deseo, el deseo de que
verdadero significado del ensueño .descubrirla? La respuesta es, en par-
! terpretación fisicista o vitalista de la no se entienda en el plano de su con- ;-
(inevitablemente sexual) y que, por te, como demostró Freud, que la re-
. psique resulta insuficiente. Así se re- tenido manifiesto. Un sueño contiene presión puede dejar de funcionar,
consiguiente, permiten el cumpli-
vela la propia realidad del desplaza- invariablemente un mensaje oculto,
miento de un deseo: el enmasca- provocar un síntoma (que Freud de-
miento —que Freud describió más relacionado con la sexualidad del que
ramiento de pensamientos incons- nomina formación de compromiso) y
extensamente en La interpretación de sueña. Si se toma literalmente, mucha
la repetición inconsciente. El primero
cientes.
los sueños— dentro de la estructura gente podría pensar (muchos han
resulta inexplicable para el sujeto y la
Como mencionamos más arriba, el
del texto del autor, cuando se ve obli- pensado) que es una afirmación in-
punto de partida de Freud es que no segunda, frecuentemente, se escapa
gado a modificar su teoría positivista creíble. ¿Cómo es posible estar segu-
existe ningún código predeterminado por completo a la conciencia. En am-
de la vida psíquica mediante el en- ros de que un sueño se relaciona
para intepretar un sueño. Cada ele- bos casos, el objetivo pasa a ser el de
frentamiento con los hechos de la esencialmente con la sexualidad? La
mento (normalmente, una imagen) intepretar el síntoma y la repetición,
psique: los de la suya, que abordó respuesta más rápida es que la sexua-
debe interpretarse como si fuera la con lo que se confirma y quizá se
en la introspección, y los de sus pa- lidad está esencialmente oculta; tiene
primera vez. La razón es que el en- expande el terreno de lo simbólico.
cientes. que estarlo, podría añadirse. Ello
sueño no es tanto el resultado de Lo inconsciente par excellence es el
La psique es, pues, una estructura quiere decir que la sexualidad está
procesos lingüísticos como un len- trauma sexual: es decir, 16 que no
de significado antes de ser una enti- asociada a los signos y lo simbólico.
43
42
FREUD MAUSS

puede decirse o simbolizarse, y que mientras que la segunda hace difícil NOTAS Marcel Mauss
sólo se conoce a través de sus reper- la posibilidad de la propia identidad.
cusiones en lo simbólico. Partiendo Otro factor de complicación en re- Jean Laplanche, Life and Deatb Es dificil subestimar la importancia
de esta base, la obscenidad represen- lación con el yo es el narcisismo. El in Psycboanalysis, trad. de Jeffrey intelectual de Marcel Mauss para, al
taría el paso entre lo simbólico y lo yo sujeto se hace objeto de sí mismo, Mehlman, Baltimore, Jahns Hopkins menos, dos generaciones de pensa-
inconsciente (trauma). poniendo nuevamente en tela de jui- University Press, 1976. dores franceses. Empezando por Ba-
Por supuesto, Freud es famoso cio la noción de una entidad idéntica taille, Dumézil y Lévi-Strauss, Mauss
también por haber formulado el a sí misma. Por su parte, la psicolo- ha &do asimismo punto de referencia
concepto del complejo de Edipo. Li- gía americana del yo ha tendido a para una nueva generación que in-
VÉASE TAMBIÉN EN ESTE LIBRO
teralmente, se trata del fenómeno, considerarlo como centro de la per- cluiría a Bourdieu, Baudrillard, Derri-
observado por él (y que figura en cepción y la conciencia, lo cual abre da y Foucault. La teoría de Mauss
Foucault, Irigaray, Kristeva, Lacan.
su propia introspección), en el que la posibilidad de un yo con la capaci- sobre el regalo y la naturaleza del in-
el hijo (como el Edipo del mito grie- dad de tener una conciencia total de tercambio en las sociedades deno-
go) desea deshacerse de su padre sí mismo. Como señalan Laplanche y minadas arcaicas ha ocupado es-
para acostarse con su madre. Un Pontalis, al Margen de cualquier otra PRINCIPALES OBRAS DE FREUD
pecialmente a los pensadores de
tema semejante surge en Tótem y cosa que pueda decirse, los textos de inspiración estructuralista, como Lévi-
• tabú, en el que Freud se refiere al Freud no dejan dudas sobre la ambi- La referencia habitual para todas las Strauss, mientras que la deuda que
mito de matar y devorar al padre en güedad que predomina en ellos en obras de Freud en español es Obras
completas, 3 vols., Madrid, Biblioteca
con él tienen otros como Bourdieu y
la horda primitiva de Darwin. Los relación con el yo y, podemos añadir, Foucault está más relacionada con
; hijos, en un acto de contrición y Nueva. Indicamos, además, la referencia
en relación con muchos de los con- bibliográfica de as obras mencionadas sus ideas sobre as técnicas corpora-
culpa, renuncian al acceso inmedia- ceptos esenciales del psicoanálisis. en este artículo: les. Habíais es un término que Mauss
to a las mujeres del padre, con lo Y quizá es inevitable, en una oeuvre Escritos sobre la histeria (1895), Madrid, examinó antes de que Bourdieu lo re-
que instituyen el orden simbólico: en evolución permanente y que, en Alianza, 1988. elaborara; y la noción de «tecnología
el orden de la ley. Edipo y la histo- definitiva, pretende arrojar luz sobre La interpretación de los sueños (1900), del cuerpo. en Foucault podría muy
ria de la horda primitiva son dos los mecanismos de su propia elabo- 3 vols., Madrid. Alianza, 1993 y bien tener su origen en la opinión de
muestras de cómo el inconsciente radón. 1994. Mauss de que las técnicas corporales
' (el proceso primario) intenta siena- Freud dejó una obra amplia y he- Tótem y tabú (1912-1913), Madrid, son, efectivamente, una •écnica sin
pre evitar la represión y rodear, de terogénea: trabajos basados en un Alianza, 1993.
Proyecto de una psicología para neuró- instrumento. (la palabra francesa te-
' esa forma, el orden simbólica (el modelo biológico de la psique; obras cbnique indica no sólo lo técnico
logos, Madrid, Alianza, 1981.
; proceso secundario). Deja su huella metapsicológicas que esbozan con- sino lo tecnológico). Es decir, una
; en lo simbólico como síntoma (por ceptos clave; estudios de casos deri- técnica del cuerpo es una tecnología
1 ejemplo, los deslices verbales). vados de la práctica clínica; escritos en la medida en que puede transfe-
1 Un aspecto del pensamiento freu- autobiográficos e históricos; obras ba- OTRAS nc-ruRAs rirse a otras áreas de actividad y por-
diano que ha causado grandes deba- sadas en datos antropológicos e his- que, para ello, debe ser parcialmente
tes es el concepto del yo. Freud lo tóricos; estudios de la vida cotidiana BRENNAN,Teresa, 77)e Intezpretation of cosificada (o sea, formalizada).
. definió en relación con otros dos tér- ¡he Ftesb: Freud and Fentininity,
y obras didácticas que pretendían ex- Mauss, sobrino de Émile Dur-
minos: el id —o depósito, o energía plicar el psicoanálisis a un público Londres y Nueva York, Rourledge,
1992. kheim, nació en Épinal en 1872, y
afectiva— y el superyó, el yo ideal, más amplio. Pero lo que dejó, ai vez, GAY, Peter, Freud. Una vida de nuestro murió en París en 1950. Como su tío,
1 representante de la realidad externa. por encima de todo, es una oeuvre tiempo, Barcelona, P21[155,1990. creció en un ambiente de judíos or-
' Un punto fundamental de controver- que no oculta el proceso de su pro- JONEs,Ernesr, Vida y obra de Signzund todoxos. En 1895 obtuvo el tercer
sia ha sido si el yo equivale al conjun- pia evolución: los falsos comienzos, Fmud, 3 vols., Barcelona, Anagrama, puesto en la agrégation de filosofía,
ro de la personalidad —en cuyo caso, los descubrimientos, la continua mo- 1981. tras lo que estudió griego, latín, he-
; incluiría el id y el superyó dentro de dificación de conceptos esenciales. LABLANCHE, Jean, Life and Deatb in Psy- breo e iraní antiguo en la École Prati-
sí mismo— O Si es un intermediario Ello significa que, para el lector con- cboanalysis, trad. de Jeffrey Mehl- que des Hautes Etudes'. En 1902 era
que intenta diferenciarse de los otros temporáneo, su legado más significa- man, Balrimore, Jahns Hopkins Uni-
versity Press, 1976. ya maitre assistant en dicha Escuela,
dos (id y superyó). La primera opi- tivo es el hecho de que su texto Quinta Sección, donde enseñaba -his-
WEBER, Samuel, Tbe Legend of Freud,
nión introduce la posibilidad de uni requiere, más que nunca, una inter- Minneapolis, University d. Minnesma toria de las religiones de los pueblos
yo idéntico, en definitiva, a sí mismo, pretación. Press, 1982. no civilizados.. Al empezar la Prime-
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MAUSS MAUSS

ra Guerra Mundial, Mauss se ofreció nuestro autor es su asa! sur le don más riqueza, tipica de las sociedades la ley y la economía basada en el di-
voluntario para el servicio, trabajó de (El regalo), publicada por primera capitalistas, las sociedades del regalo nero permitió que el intercambio se
intérprete en el ejército británico y vez en el volumen correspondiente se caracterizan por el gasto —la do- formalizara y se limitara al terreno
fue condecorado por su valor, con a 1923-1924 de Anude sociologique. nación— y la obtención de prestigio. público, mediante la separación de la
dos menciones y dos cruces militares. Aunque, a simple vista, el regalo pue- Por ejemplo, la esencia de los pot- esfera publica y la privada.
Su experiencia en el ejército le dio la de distinguirse de una mercancía (la latch de Norteamérica es la obliga- Mauss concluye su estudio resu-
ocasión de estudiar las diferentes téc- base del intercambio en una econo- ción de dar. Quien puede gastar en miendo una serie de puntos esencia-
nicas corporales que se observaban mía monetaria), porque parece que la máxima medida posible y sitúa al les. En primer lugar, advierte, el re-
entre las tropas británicas, australia- no implica reciprocidad, Mauss afirma beneficiario en obligación de igualar galo sigue impregnando •nuestras-
nas y francesas. Más adelante, en sus que, en realidad, el regalo implica su prodigalidad obtiene y mantiene sociedades, pero de manera muy re-
ensayos sobre las técnicas del cuerpo, una triple obligación: dar, recibir y prestigio y honor. Al menos, en la ducida. Las ocasiones especiales por
Mauss destacará la capacidad de los corresponder. Viendo las etnografías medida en que los pollatch no aca- motivos religiosos, matrimonios, ani-
soldados australianos para sentarse de un amplio abanico de sociedades ban en una orgía de pura destruc- versarios, pueden provocar aún una
en cuclillas durante los periodos de —pero, sobre todo, describiendo a ción, es decir, el puro gasto sin be- gran actividad de entrega de regalos
descanso, mientras que un francés los pottatch en América, los kula en neficio. Pero, en general, los regalos y la sensación de que debernos co-
como él debía permanecer erguido; el Pacífico y los bau en Nueva Zelan- deben devolverse con intereses, de rresponder con intereses, que •:lebe-
porque, como tantos europeos, care- da—, Mauss demuestra que el regalo modo que lo que está en juego es mos devolver más de lo que hemos
cía de esa habilidad. A diferencia de es la verdadera base de la vida social, cada vez más. recibido•'. No ser capaz de corres-
su tío, Mauss era más un bohemio Por lo refinado y diferenciado de las Respecto al carácter de las cosas ponder puede dejar al beneficiario en
con aspiraciones socialistas; coleccio- formas de comportamiento que se que se intercambian en el sistema del una posición de inferioridad respecto
naba objetos exóticos, defendió la ejercen después de él. El regalo no es regalo, sería erróneo suponer que se al donante. Queda por ver si, tal vez,
obra de Debussy y Picasso y siempre un simple intercambio de bienes. Im- limitan a bienes materiales. De he- seria necesario examinar el significa-
estuvo abierto a nuevas formas de plica honor y un uso deterrninado del cho, uno de los puntos en los que do de la caridad y el bienestar social
entendimiento social y formas cultu- tiempo; se trata de un mecanismo más insiste Mauss es que práctica- bajo este prisma, porque, si bien pue-
rales. En 1925, Mauss creó el Institut que afecta a todos los aspectos de la mente todo —servicios, favores se- de estar en juego un elemento de re-
d'Ethnologie y, en 1930, fue elegido vida que garantizan tanto la circula- xuales, fiestas, bailes, etc,— se ve ciprocidad y orgullo, detrás de la ca-
para el Collége de France hasta su ju- ción de personas (mujeres) como de arrastrado al sistema. Si un individuo ridad se encuentra asimismo un
bilación, en 1940. bienes. Dicho intercambio puede ver- o grupo no cumple las obligaciones motivo práctico que está ausente en
En 1899, Mauss publicó con H. Ilu- se en el matrimonio, las fiestas, las que implica el sistema de regalo, se el intercambio de regalos. Sin embar-
ben Nature et function di, sacrlfice ceremonias rituales, el servicio mili- corre el peligro de una guerra. go, las sociedades cuya estructura so-
(Naturaleza y función del sacrificio). tar, las danzas, los bailes, y así suce- Si bien la sociedad capitalista no se cial se basa por completo en el rega-
Pero la fama y la influencia de Mauss sivamente. Incluso cuando el inter- estructura con arreglo a las obligacio- lo no disponen de ningún espacio
se debieron, en gran parte, a los artícu- cambio se relaciona exclusivamente nes sociales generales ligadas al rega- que no esté sujeto al intercambio. Los
los que publicó en la revista Durkhei- con objetos de algún tipo, es preciso lo, Mauss afirma que, teniendo en seres humanos forman parte también
miana de sociología, L'Auné° sociolo- recordar que los objetos no son sólo cuenta las pruebas históricas, resulta del sistema. Se trata de una noción de
gique, más que a ninguna monografía. las cosas muertas e inanimadas que razonable pensar que los sistemas le- intercambio que es preciso separar
Además fue un profesor muy estimu- se supone que son en sociedades ca- gales y económicos de Occidente sur- claramente de los motivos utilitarios
lante y atractivo. Según Georges Du- pitalistas y muy diferenciadas. Los gieron inicialmente de instituciones Mucho más que los intercambios eco-
mézil, que dedicó muy poco tiempo objetos poseen un «alma., una espiri- similares a las de las sociedades do- nómicos en las sociedades que se
a Durkheim —el mentor de Mauss—, tualidad, no son meramente un obje- minadas por él. Más tarde, en las so- consideran muy diferenciadas, con
era infrecuente que este último pre- to; y, a la inversa, aunque los seres ciedades capitalistas modernas, se de- una distinción muy marcada entre lo
parara sus clases, pero tenía un senti- humanos tienen su espiritualidad sarrolló una mentalidad impersonal y público y lo privado, el regalo es un
do de lo universal apoyado en enor- —en general llamada mana—, son calculadora en la que la noción de fin en sí mismo; porque, si bien lo
mes conocimientos casi ilimitados. también objetos que, por consiguien- equivalencia monetaria pasó a susti- que está en tela de juicio es, sin duda,
Debido seguramente, en parte, a la te, pueden formar parte del sistema tuir a la obligación moral y la lucha el mana de una persona, su indefini-
famosa Introducción a la obra de de intercambio. por el prestigio inherentes al regalo. ble cualidad de prestigio, ésta es in-
Marcel Mauss2, escrita por Claude En lugar de la acumulación de ri- En lugar de invadir el conjunto de ac • separable del acto de dar y recibir.
Lévi-Strauss, la obra más conocida de queza con el objetivo de acumular tividades de la vida, el desarrollo de .Dar es mostrar la propia sup .eriori-

46 i7
MAUSS MAUSS

dad-. Corno impregna la estructura terioso, furtivo y fragmentado. Com- Lévi-Strauss, el hecho del intercambio por supuestos, en un marco explica-
social y afecta a todas las facetas de prended aspecto no social del mun- no está inmediatamente presente en tivo con el fin de que dejen de ser
la vida, el regalo es un ejemplo de lo do social y es, al mismo tiempo, una la observación empírica, que se limi- algo arbitrario y el resultado del puro
que Mauss denomina .un hecho so- amenaza para lo social y el límite que ta a proporcionar tres obligaciones: azar. El concepto de 'técnicas del yo»
cial total.. Aunque se produzca a es- le da sentido. Los magos pueden ser dar, recibir y corresponder. La idea de Michel Foucault parece tener su
cala individual o de grupo, el inter- mujeres, niños, extranjeros; cualquier de intercambio explica la relación en- precedente claro en los análisis de
cambio de regalos es, par excellence, ser •o profesional. tre los tres elementos: no existe de Nfauss sobre esta materia. La relevan-
un hecho social. La suerte de los El mana y la magia plantean, pues, manera transparente en los hechos, cia de MaL155 25 especialmente clara
individuos y los grupos está inextri- la cuestión del carácter exacto del sino que debe elaborarse a partir de en la comprensión contemporánea de
cablemente ligada a la suerte de la vínculo social. Para Lévi-Strauss, el ellos. las prácticas si tenemos en cuenta
sociedad en su conjunto. Por tanto, hecho mismo de que el nzana sea En otro estudio importante, el en- que distingue las categorías específi-
para entender las repercusiones y la difícil de definir indica que es esen- foque histórico y contextual que tie- cas de conducta de las técnicas cor-
importancia de un acto individual de cialmente indefinible; o, más bien, ne Mauss de los fenómenos sociales porales, los actos denominados me-
entrega es preciso comprender el ca- dado que puede adoptar múltiples •está, tal vez, aún más pronunciado. cánicos, de tipo •físico y químico..
rácter de toda la estructura social. La significados, que es un •significante En su examen de las •técnicas del Son también los actos tradicionales y
propia estructura triangular del rega- flotante., una «x« indefinible, análoga cuerpo.TM, acude al concepto de bah!- eficaces en el ámbito de la religión,
lo, que implica dar, recibir y corres- al fonema •cero» del que hablan los tus'' para examinar cómo las activida- los actos simbólicos, los actos jurídi-
ponder, evoca claramente la idea del lingüistas de tendencia estructuralista. des culturales son especificas de una cos, los actos relacionados con la vida
hecho social total. Dicho fonema no posee significado cultura y una sociedad determinadas. comunitaria, los actos morales; en
La noción de mana, que se consi- en sí mismo, pero puede adoptar di- Para que exista una técnica corporal otras palabras, actos que, para Mauss,
dera ligada a la cualidad indefinible versos sentidos dependiendo del con- deben estar presentes dos elementos: no pueden quedar reducidos a un
del prestigio en el sistema del regalo, texto y su relación diferencial con primero, la técnica debe ser eficaz y, hecho puraménte físico.
había aparecido previamente en el otros términos. Ello implica que el •por tanto, capaz de producir el efec- Sin embargo, el pensamiento mo-
ensayo de Mauss sobre la magias. En nzana no puede interpretarse más to deseado; segundo, debe inscribir- derno (cfr. Foucault, Bourdieu, Al-
él, el autor destaca que mana es uno que de forma sincrónica, en un mo- se en una tradición que permita su thusser) ha puesto en tela de juicio la
de los conceptos inquietantes de los mento concreto, y no diacrónicamen- transmisión. En pocas palabras, una oposición entre un acto simbólico,
que la antropología creía haberse te, en un sentido evolutivo en el que técnica es algo que puede transmitir- presuntamente consciente de sí mis-
deshecho. Mana es un término vago, el significado derive de algo anterior. se. Para Mauss, las técnicas corpora- mo, y una técnica física. En realidad,
oscuro e imposible de definir con ri- Equiparar rnana al •significante flo- les no son espontáneas ni meramen- de acuerdo con la descripción que
gor. De hecho, observa Mauss, existe tante- fue la forma que tuvo Lévi- te anatómicas o fisiológicas. Con el Pascal hace de la adquisición de la fe
una verdadera .infinidad de manas& Strauss, en la época de su famoso fin de ilustrar hasta qué punto los ac- —.arrodíllate, mueve tus labios en
No se trata sólo de una fuerza, un ser, ensayo de 1950 sobre Mauss, de re- tos supuestamente naturales pueden una plegaria, y creerás. m—, se afirma
sino también •una acción, una cuali- clamar a este último para el estructu- ser, en realidad, resultado de una téc- que incluso el acto más simbólico
dad y un estado.. La palabra es, al ralismo. nica, Mauss relata cómo enseñó a es- está inextricablemente ligado a una
mismo tiempo, •un nombre, un adje- La interpretación estructuralista del cupir a un niño que padecía un res- técnica física, hasta el punto de que
tivo y un verbo.7. Mana no puede ser mana y el regalo tiene otras conse- friado. se considera que la técnica es ante-
el objeto de experiencia porque ab- cuencias. Por ejemplo, el hecho de Toda técnica corporal tiene su for- rior al significado simbólico. Y, como
sorbe toda la experiencia. En este as- considerar que lo social es análogo a ma. El error del pasado ha consistido, para confirmar que él también duda-
pecto, pertenece al mismo orden que la estructura del lenguaje puede arro- ajuicio de Mauss, en pensar que exis- ba de la validez de mantener el as-
lo sagrado. Para Mauss, ello es corno jar luz sobre el carácter de lo que te una técnica sólo cuando hay un pecto simbólico separado del físico,
decir que mana posee una espiritua- evocan el mana y el regalo como instrumento. Las técnicas corporales hfauss termina su reflexión sobre las
lidad equiparable al pensamiento co- •hecho social total». Así, la presenta- son, en realidad, una tecnología sin técnicas corporales afirmando que
lectivo, que equivale a la propia so- ción de los hechos sociales no reve- instrumentos. El marco de una téc-
ciedad. laría inmediatamente el aspecto so- Precisamente creo que, en el fon-
nica nos permite explicar la impor-
do de todos nuestros estados místi-
Por su parte, la magia es irregular cial, como la gramática de un tancia de la multitud de pequeñas cos, se hallan técnicas corporales
y tiende hacia algo que la sociedad lenguaje natural no está inmediata- acciones llevadas a cabo por cada in- que no se han examinado, pero que
prohibe. La magia es un acto priva- mente presente en la conciencia de dividuo cada día de su vida. La técni- estaban perfectamente esrudiadas en
do, secreto y singular. Es aislado, mis- un nativo. Del mismo modo, afirma ca sitúa todos esos casos, que se dan China e India, incluso en épocas

48 •i 49
MAUSS MERLEA U- PONTY

muy remotas... Creo que hay medios ce! Mauss, Sociologie et antbropologie, gy knowledge., Studies fa che His- Ily y Louis-le-Grand y, en 1930, com-
necesariamente biológicos de entrar págs. 1-141. Ed. inglesa, A General tory and Philosophy of S'ciance, 13, 4 pletó su agrégation de filosofía en la
.en comunicación con- Dios.". Theory of Magic, trad. cle Robert Brain, (1982).
Londres y Boston, Routledge & riegan École Normale Superieure (rue
CARRIER. James. Cifts, commodities, and
Repitamos que (gauss es una fuen- Paul, 1972. d'Ulm). Como muchos intelectuales
social relations: A Maussian view of
te poco reconocida de esta corriente ó ¡bid., pág. 104. trad. inglesa, pági- de su generación, Merleau-Ponty asis-
exchange., Sociological Forum, 6, 1
del pensamiento contemporáneo que na 111. (marzo de 1991), págs. 119-136. tió a las conferencias de Kojeve sobre
se ocupa del cuerpo. Míd., pág. 101. trad. inglesa, pági- CARRI1TIERS, Michael, CoLLINs, Steven y Hegel. También estuvo asociado, du-
Por último, debemos destacar, jun- na 108. LUNES, Stetter' (ed5.), anegar)) of che rante breve tiempo, a la publicación
" Marcel Mauss, 'Les Techniques du Pez-son, A n tbropology, Philosopby, católica Esprit. Cuando estalló la Se-
to con Lévi-Strauss, que Mauss, aún
corps., en Marcel Mauss, Sociologie et History, Cambridge, Cambridge Uni-
más que Durkheim, mostró que la gunda Guerra Mundial, Merleau-Pon-
antbropologie, págs. 362-386. Ed. ingle- versity Press, 1985. Además de ensa-
individualidad, aunque no sea redu- ty sirvió en la infantería y fue tortura-
sa, «Techniques of the body«, trad. de yos sobre Mauss, este libro contiene
cible a algo social, siempre posee una do por los alemanes. Durante la
Ben Brewster, Economy ciad Society, 2, una traducción de su ensayo «A Cate-
expresión social. Es decir, como los 1(1973), págs. 70-88. ocupación se unió, dentro de la Re-
gory of the human mincl..
hechos sociales sólo se manifiestan . 9 lbíd, págs. 368-369. Trad. inglesa, GANE, Mike (ed.). Radical Sociology of sistencia, al grupo independiente de
eh los individuos; la sociedad está en pág. 73. Durkbein, ciad Mauss, Londres, Rout- triste destino «Socialismo y Libertad«,
el individuo tanto, o más, que el in- " Citado en Louis Althusser, Lenin ledge, 1992. con el que también se relacionó Jean-
and Pbilosopby and Other Essays, trad. latvt-SmAuss, Claude, Introduction to ¿he Paul Sartre. En 1945 se publicó la
dividuo en la sociedad. Por tanto, en
de Ben Brewster, Londres, New Left Work of Marcel Mauss, trad. de Felici- gran obra de Merleau-Ponty, Fenome-
realidad, el tedioso debate sobre si el
Books, 1971, pág. 158. ty Baker, Londres, Routledge SI Kegan nología de la percepción. En 1949 ob-
individuo es anterior a la sociedad o
" Mauss, .Les Techniques du corps., Paul, 1987,
la sociedad es anterior al individuo se tuvo la cátedra de psicología infantil
pág. 386, y «Techniques of the body., Rima, Henning, «The ethnological re-
acaba con Marcel Mauss. Queda que de la Sorbona y, en 1952, se convir-
pág. 87. volution: On Marcel., trad. de John
así lo reconozcan quienes llegaron tió en el candidato más joven jamás
Burns, Comparativa Civilizations Re-
después que él. view, 22 (otoño de 1990), págs. 1-18. elegido para ocupar la cátedra de fi-
VÉASE TAMBIÉN DT ESTE LIBRO . losofía en el Collége de France, pues-
to que mantuvo hasta su muerte re-
NOTAS Bataille, Bourdieu, Dumézil, Foucault, pentina en mayo de 1961.
Lévi-Strauss. Entre 1945 y 1952, Merleau-Ponty
' Este detalle y los siguientes de la Maurice Nierleau-Posary fue amigo cercano y estrecho cola-
biografía de 'gauss proceden de An- borador de Jean-Paul Sartre, y uno
thony- Richard Gringeri, Jr., «Twilight of PRINCIPALES OBRAS DE MAUSS Aunque quizá siguió siendo un 'fi- de los directores fundadores de Les
the Sun Kings: French anthropology lósofo de la conciencia. en Francia, Temps Modernes. 1952 fue el año de
from modernism to post-modernism, Natura et function da sacrifice (1989), Maurice Merleau-Ponty se fue sepa- su desilusión ante la guerra de Co-
1925-1950., tesis doctoral sin publicar, París, Presses Universitaires de Fran- rando gradualmente de la fenomeno- rea y la posición política de Sartre, y
Universidad de California, Berkeley,
ce, 1989. logía de Jean-Paul Sartre y, tal vez, de dimitió de la junta editorial de lo que
1990. Esquisse d'une tbéorie générale de la
Claude Lévi-Stmuss, .1ntroduction á la de Husserl. En concreto, Merleau- pasó a ser la publicación sartriana.
magie (1902-1903), París, Presses Uni-
l'oeuvre de Marcel Mauss• en Marcel Ponty incluyó a Saussure en sus re- Sus diferencias fundamentales con
versitaires de France, 1989.
Maus.% Sociologie et antbropologle, Paris, flexiones y enseñanzas sobre el len- aquél están contenidas en el libro de
Essai surte don (1923-1924), París, Pres-
Presses Universitaires de France, •Qua- guaje a finales de los años 40 y Merleau - Ponty Les Adventures de la
ses Universitaires de France, 1989.
drige«, 5. ed., 1983, págs. LX-LII. Ed. in- Introducción a la etnografía, Madrid, principios de los 50. Durante esa dé- dialectique (Las aventuras de la dia-
glesa, Introduction to che 1Vork of Mar- cada conoció también la influencia de léctica), publicado en 1955. En él, el
Istmo, 1974.
cel Mauss, trad. de Felicity Baker, Sociología y antropología, Madrid, Tec- Saussure en la obra de Lévi-Strauss y antiguo compañero de armas de Sar-
Routledge & Kegan Paul, 1957.
nos, 1979. formó una estrecha alianza con éste, tre desarrolla un análisis exhaustivo
• Marcel Mauss, Iba Gift: lije Form and
que terminó siendo colega de él en de la relación de éste con el comu-
Reason .ffir Excbange ¿II Arcbaic Societies,
el College de France. nismo, al mismo tiempo que pone
trad. de W. D. Halls, Londres, Routledge,
OTRAS LECTURAS Merleau-Ponty nació en 1908. Su en tela de juicio la prioridad dada a
1990, pág. 65.
• MI., pág. 74. padre, como el de Roland Barthes, la relación sujeto-objeto en la ver-
Marcel Mauss, •Esquisse d'une BLOOR, David, .Durkheim and Mauss re- murió en la Primera Guerra Mundial. sión sartriana de la fenomenología.
théorie genérale de la magie•, en Mar- visited: Classification and the sociolo- Estudió en los Lycées Janson-de-Sai. Como explica Vincent Descombes,

50 51
MERLEAU-PONTE MERLEAU-PONTY

sin un •intramundo•, la dicotomia cido por las ciencias que estudian sus cia vivida cuando afirma que •ia men- equivale a lo que se dice de ella. Mer-
entre sujeto y objeto conduce al so- diversos aspectos. Sin embargo, la te que percibe es una mente encarna- leau-Ponty continúa:
lipsismo: -Si la dicotomia sujeto-ob- conciencia de la experiencia vivida da.". Además, la percepción no es
jeto fuera cierta, todo el significado —la conciencia que es siempre de sólo resultado del impacto del mundo La cosa percibida no es una uni-
derivaría de los hombres y todo el algo— es fundamentalmente distinta exterior sobre el cuerpo; porque, dad ideal que pertenece al intelecto,
significado para mi mismo derivaría de ia aceptación del carácter reco- aunque el cuerpo esté diferenciado como una noción geométrica, por
nocido del mundo, o conocimiento del mundo en el que vive, no está ejemplo; es una totalidad abierta a
de mí misma'. un horizonte de un número infinito
A partir de 1952, Merleau-Ponty científico. Como dice Husserl: separado de él. En realidad, el hecho de perspectivas mezcladas entre sí
empezó a desarrollar una concepción de que el organismo que percibe y su con arreglo a un estilo determinado,
de la actividad política liberada del Lijamos nuestros ojos con firmeza en entorno estén imbricados constituye que define el objeto en cuestión'.
ingenuo coqueteo de Sartre con el la esfera de la conciencia y estudia- la base de la percepción. Ello quiere
comunismo duro. Pero más significa- mos lo que vemos en ella de inma- decir que no existe la percepción en Dado el carácter encarnado de la
nente.., La conciencia posee un ser general, una idea que la convertiría
tivo es el hecho de que Merleau-Pon- propio que, en su carácter absoluta- percepción, ¿cuál es la verdadera rai-
ty empezó a esbozar una trayectoria mente único, no se ve afectadopor la en un abstracto universal; la percep- son d'arre de la definición fenomeno-
filosófica que confirmaba la impor- desconedónjenomenológicai. ción existe sólo tal como se vive en el lógica y la reflexión? La respuesta de
tancia de la experiencia vivida a la mundo. Es precisamente el carácter Merleau-Ponty es que la percepción,
hora de captar la naturaleza del len- De este modo, el estudio de la -vivido- de la percepción y el cuerpo abandonada a sí sola, «se olvida de sí
guaje, la percepción y ei cuerpo. El esencia de las cosas en la conciencia lo que hace que la investigación fe- misma e ignora sus propios logros..
esbozo de los principales aspectos abre el campo de la -ciencia de la fe- nomenológica sea viable y necesaria. Pero no se trata, como parece creer
del vínculo entre percepción y pen- nomenología.s. Como consecuencia del carácter en- Merleau-Ponry, de que corramos pe-
samiento, planteados en la Fenome- El punto de partida de Merleau- carnado de la percepción, el sujeto ligro de volver a un momento no re-
nología de la percepción, ayudará a Ponty es la epoché de Husserl. Pero, que percibe está siempre cambiando, flejado, anterior a la filosofía, sino de
entender de qué hablamos. para él, el objetivo no es permanecer sufriendo un proceso de renovación. que se ha hecho una distinción muy
En el Prefacio a dicha obra, Mer- ligado a la estructura de la filosofía de Por su parte, la conciencia no se rela- clara entre la percepción de lin suje-
leau-Ponty confirma la influencia de la duda en Descartes, como tiende a dona con el mundo del mismo modo to encarnado que percibe y la filoso-
Husserl en su filosofía. Como él, Mer- hacer Husserl cuando ofrece una ex- que un pensador con una serie de fía de la percepción, como si, des-
leau-Ponty subraya la importancia de plicación de la fenomenología, sino objetos. No existe un sujeto general, pués de todo, estuviéramos obligados
la reducción fenomenológica, o epo- acudir al centro de la e-xperiencia en- que sea completamente autónomo y a aceptar, al menos, alguna versión
ché (abstención; también llamada pa- carnada, que es en b que consiste la separado de sus objetos, como asegu- del pienso- universal precisamente
réntesis, o -desconexión.), introduci- percepción. Merleau-Ponty se enfren- raba Descartes. Por el contrario, la cuando la prioridad dada al -percibo.
da con el fin de abrir el acceso a las ta directamente al carácter abstracto y conciencia es perceptiva; por tanto, parecía asestarle un golpe mortal.
-esencias-. Y éstas no deben captarse vacío del cogito cartesiano —pienso, la certidumbre de las ideas se basa Éste sería, quizá, el problema normal-
como las esencias trascendentales luego existo— y demuestra que -ser en la certidumbre de la percepción. mente insoluble al que se enfrentaría
que se dan en las disciplinas científi- un cuerpo es estar unido a un mundo Y la investigación fenomenológica una filosofía de la conciencia que
cas existentes, o en el conocimiento determinado.; y añade: -nuestro cuer- tiene aún que confirmar dicha certi- pretende mantener el sentido de su
abstracto general que puede tener po no está, ante todo, en el espacio: dumbre; para el fenomenólogo no propia presencia (contenido en el
un individuo sobre el mundo (por es del esphcio- 1. En efecto, nuestro existen certezas ideales y universales -pienso.) y proponer, al mismo tiem-
ejemplo, el relativo al espacio y el cuerpo está siempre ya en el mundo; en el plano de las ideas. Es decir, la po, una definición del nivel heterogé-
tiempo). La epoché fenomenológica por consiguiente, no hay un cuerpo fenomenología de Merleau-Ponty se neo del sujeto encarnado. En este
permite el acceso a las esencias inhe- en sí mismo, un cuerpo que pueda opone, por encima de todo, al cogito contexto fenomenológico, Merleau-
rentes a la conciencia de la -experien- cosificarse y tener categoría universal. de Descartes. -Percibo- no equivale a Ponty ha presentado una escisión
cia vivida.. La epocbé es una desco- La percepción es siempre una percep- -pienso-, y no puede hacerse univer- fundamental entre la conciencia y la
nexión del mundo natural dado en ción encarnada, sólo es lo que es en sal. El hecho de que el sujeto que •experiencia vivida., escisión que
toda su objetividad. Hussed se apre- un contexto o situación determina- percibe sea una encarnación abre debe permanecer reprimida.
sura a explicar que dicha desco- dos. La percepción no existe aislada. paso a una definición fenomenoló- No obstante, si la historia se aca-
nexión no es, en absoluto, una nega- En la explicación que da de su tra- gica dei Presente Vivo. En esta defi- bara aquí, es indudable que el filóso-
ción del mundo natural. Lo acepta, yectoria filosófica', Merleau-Ponty nición —es decir, en la epocbé fe- fo de la percepción habría dejado.de
junto con todo el conocimiento ofre- confinna h prioridad de la experien- nomenológica—, la cosa percibida ser interesante hace mucho tiempo

52 53
MERLEAU-PONTY MERLEAU-PONTY

para una generación educada en Concebir el lenguaje desde el punto cómo se puede pasar del •hablo• in- • Maurice Merleau-Ponry, Phenome-
las aporías de las filosofías de la con- de vista sincrónico, afirma Merleau- dividual al hecho de que hable otro. nology of perception, trad. de Colin
ciencia, del mismo modo que los Ponty, es considerar que se trata de La afirmación habitual (sartriana) de Smith, Londres, Rourledge, reimpr. 1992,
maestros de Merleau-Ponty (como algo concreto, no una entidad univer- que el •hablo• implica el reconoci- pág. 148. La cursiva es de Merleau-Ponty.
Brtinschvicg) han dejado de serio. El sal y abstracta, sujeta a una evolución miento de que •hablamos- no mues- 5 Maurice Alerleau-Ponty, •An unpu-

lenguaje y el intento de Merleau-Pon- gradual con el tiempo. Aquí, el len- blished text by Maurice Merleau-Ponty:
tra cómo, en esta interpretación, el A prospectus of his work•, trad. de
ty de convertirlo en centro de sus in- guaje es esencialmente el •presente •yo no se limita a verse elevado a la
vivo en el habla. Hablar, comunicar Aleen B. Dallery en James M. Edie (ed.),
tereses Filosóficos posteriores, bajo categoría del •nosotros., un •nosotros•
—usar el lenguaje—, equivale en par- The Primacy of perception, Evanston,
los auspicios de una lectura de Saus- que el proceso hace homogéneo. Northwestern University Press, 1964.
sure, inspiraron el primer estructura- te a adquirir conciencia de que sólo Este problema no es más que la pun- 8' impr. de bolsillo, 1989, págs. 3-11.
lismo. Por ejemplo, Algirdas-Julien existen presentes vivos sucesivos. ta del iceberg. A la fenomenología 6 /bid.. pág. 3.
Greimas fue uno de los asistentes a Cualquier discurso sobre el lenguaje (incluido Merleau-Ponty) le ha resul- ' Maurice Merleau-Ponty, •The prima-
la lección inaugural de Merleau-Pon- debe lograr abarcarse a sí mismo tado notablemente dificil abordar el cy of perception and its philosophical
ty en el Collége de France de 1952 y como puesta en práctica del lengua- problema general del otro, del que la consequences., trad. de James M. Edie
salió con la sensación de que era je. Por tanto, una lingüística digna de en ibíd., pág. 1.6.
cuestión del -yo hablo , es un ejem- Ibíd., pág. 19.
Saussure, y no Marx, quien poseía la tal nombre reconoce que el lenguaje plo. Después de rechazar cualquier
8

9 Véase Francos Dosse, Histoire du


clave de una verdadera filosofía de la sólo puede entenderse desde dentro. teoría del inconsciente, la fenomeno-
En otras palabras, el lenguaje no pue- structuralisme I. Le champ du signe,
historia.8. logía trata cada caso subjetivo (aun- 1945 - 1966, París, Éditions la découver-
Aunque se dice frecuentemente de reducirse a una historia de la lin- que esté expresado) como una uni- te, 1991, págs. 62-63.
que Merleau-Ponty adoptó, de la teo- güística, del mismo modo que la his- dad presente en sí misma. Después, '8 Maurice Alerleau-Ponty, 71.,eProse of
ría del lenguaje de Saussure, lo que toria no puede reducirse al discurso en una pluralización imaginaria, ele- che World, trad. de John Londres,
necesitaba para confirmar su feno- histórico. va ese caso a la categoría de •'oso- Heinemann, 1974, pág. 22.
menología, es necesario mencionar Sin embargo, al dejar de lado la tros.. Este •osotros. se convierte en 55 /bid., pág. 23.

que además destacó dos principios teoría de la langue de Saussure (el una unidad: la unidad del colectivo. Por ejemplo, Merleau-Ponty escri-
saussurianos que se convertirían en el lenguaje como sistema), que explica be: «La voz de un amigo por teléfono
De ese modo, el fenomenólogo se nos trae al propio amigo, como si estu-
centro de las teorías estructuralistas cómo se pone en práctica el habla, en deshace de la existencia del otro y la
del lenguaje y la semiótica: que el favor de la parole (ésa puesta en viera presente en su forma de llamar y
heterogeneidad con un movimiento decirnos adiós- (.Indirect language and
significado en el lenguaje surge a tra- práctica), Merleau-Ponty no logra de- de su mano homogeneizadora. Pero the voices of silence., en Signs, trad. de
vés de una relación diacrítica entre mostrar que el lenguaje tiene una tal vez haya que atribuir a Merleau- Richard C. McCleary, Evanston, North-
signos, y que el estudio diacrónico doble articulación: el nivel del signi- Ponty el mérito de que, gracias a su western University Press, W64, 8. 5 impr.,
del lenguaje no puede explicar la na- ficante es relativamente independien- audacia creadora, se hace visible en 1987, pág. 43).
turaleza del uso corriente. Así, en su te del nivel del contenido. Y, si él, su trabajo el límite de la fenomeno-
obra inacabada La prosa del inundo, con su énfasis en el presente vivo», logía.
Merleau-Ponty escribe que •Saussure se había centrado en el contenido (la VÉASE TAMBIÉN EN ESTE LIBRO
muestra de forma admirable que.... no puesta en práctica del significado),
puede ser la historia del mundo o el los lingüistas del estructuralismo se Lacan, Lévi-Strauss, Saussure.
NOTAS
lenguaje lo que determine su signifi- iban a oponer, casi desde el momen-
cado actual• 5°. Lo que halla el feno- to de su muerte en 1961, a la impor-
Vincent Descombes, Modera French PRINCIPALES OBRAS DE MERLEAU-
menólogo en la lingüística estructural tancia dada por el fenomenólogo a la Philosophy, trad. de L. Scott-Fox y J. M. PONTY
es una teoría que parece subrayar la transparencia concreta del conteni- Harding, Cambridse, Cambridge Univer-
relación que vive el sujeto con el do'', sólo para quedar confundido sity Press, 1980, pág. 72. La Structure du comportement, París,
mundo. Una vez más, Merleau-Ponty por la opacidad del lenguaje como Edmund Husserl, Ideas. A General In- Presses Universitaires de France, 1942.
escribe que el concepto, en Saussure, sistema de significantes. tro duction to Pura Phenomenology, trad. Fenomenología de la percepción (1945),
de la prioridad de la dimensión sin- Además, al centrarse casi exclusi- de \V. R. Boyce-Gibson, Nueva York, Co- Barcelona, Planera Asostini, 1993.
-

crónica del lenguaje, para entender la vamente en el plano de la parole Ilier Books, 1962, pág. 102. La cursiva es Humanisme et terreur: &sal sur le pm-
naturaleza de este último, •libera a la como concreción del lenguaje, el fe- de Nusserl arad. esp.: Ideas relativas a bMnze comuniste, París. Gallimard,
fenomenología pura yfilosofia fenomeno- 1947.
historia del historicismo y permite nomenólogo se muestra incapaz de lógica, Madrid, FCE, 1993.) Sentido y sinsentido (1948), Barcelona,
una nueva concepción de la razón». dar una explicación satisfactoria de Ihíd. Ed. 62. 1977.
54 55
MERLEAU-PONTY

Consciousness and the Acquisition oí BASCH, 'Montas W„ y GALLAGHER, Sharon


Languagelcurso de la Sorbona, 1945/ (eds.), Mer(eau-Ponty, Henneneutics
50), Evanston, Northwest Universiry and Post-modernism, Albany, State
Press, 1973. Universiry of New York, 1992.
Eloge de la pnilosopbie, Paris, Gallirnard, BURKE, Patrick y VAN DEN VEKEN, Jan, Mer-
1953. leau-Ponty in Contenzporary Perspec-
Posibilidad de la filosofia (1953), Ma- tite, Boston, Kluwer Academie Books,
drid, Narcea, 1979. 1993. Colección de ponencias presen-
Les Adventures de la dialectique, París, tadas en un simposio internacional
Gallimard, 1960. sobre Merleau-Ponty celebrado en
Signes, París, Gallimard, 1960. 1991.
Le visible et l'invisible, París, Gallirnard, DESCOMBES, Vincent, Modern Frencb
1964. Piillosophy, trad. de L. Scott-Fox y
El ojo y el espíritu (1964), Barcelona, Pai- J. M. Harding, Cambridge, Cambridge
dós, 1986. University Press, 1980. Estructuralismo
La prosa del mundo (1967), Madrid, JOHNSON, Calen A. y airrn, Michael B.
Taurus, 1971. (eds.), Ontology and Alterity in frkr-
(eau Ponty, Evanston, Illinois, North-
-
Destacan dos aspectos del método estructural: 1) el reconoci-
western University Press, 1990.
LANCEA, Mordica M., Merleau-ponty's
miento (a pesar de Chomsk-y) de que las relaciones de diferencia-
OTRAS LECTURAS Pbenomenology of Perceptiom A Gui- ción son la clave para entender la cultura y la sociedad; y 2) que,
de and Commentaty, Basingstoke, como consecuencia, la estructura no es anterior a la puesta en prác-
Macrnillan, 1989. tica de dichas relaciones. Saussure, pese a que no reconoció todas
BARRAL, Mary Rose, Body in Intelperso- SCHMIDT, James, Maurice Me rleau-Pon-
nal Relations: Merleau-Ponty, Lan- ty: Between Pbenomenology and las repercusiones de lo que defendía, inspiró la opinión de que dar
han, University Press of America, Structuralism, Basingstoke, Mamut- prioridad a la práctica material es la forma de llegar a comprender el
1965. Reimpr., 1984. Ilan, 1985. significado total y menos esencialista de «estructura..

56 57
Louis Althusser El Capital pretendía dar nuevo vigor
a un marxismo cristianizado bajo la
Louis Althusser nació en Argelia influencia de Teilhard de Chardin',
en 1918 y murió en París en 1990, tras humanizado por la Escuela de Franc-
haber sido encarcelado por estrangu- fort y humanizado con carácter histo-
lar a su esposa. En 1939 fue acepta - ricista gracias a Sartre y Gramscis. Al
do como candidato para una agréga- oponerse a la idea de que los indivi-
tion en filosofía, en la prestigio- duos fueran anteriores, en cualquier
sa École Supérieure Normale (fue sentido, a las condiciones sociales, y
d'Ulm). Pero se produjo la Segunda al conceptualizar la sociedad como
Guerra Mundial y Althusser cayó pri- un conjunto estructurado, compuesto
sionero de los alemanes, con el resul- de niveles relativamente autónomos
tado de que no alcanzó dicho título (legal, cultural, político, etc.) cuyo
hasta 1948. Posteriormente fue nom- modo de articulación o .eficacia. lo
brado •caimán en la calle Ulm, un determina, •en última instancia., la
puesto que incluía la preparación de economía, Althusser sorprendió a
los candidatos para la agrégation. muchos pensadores dentro y fuera
Durante casi cuarenta años, la •crema• del marxismo. La importancia pasó a
de la vida intelectual y académica estar en las diferencias entre dichos
francesa pasó por las manos de ese niveles, y no su unidad expresiva, en
caimán. Uno de los candidatos fue, la que cada parte o demento refleja-
por ejemplo, Michel Foucault. Derri- ría la identidad del conjunto. Se aca-
da fue otro. La influencia de Althus- bó el actor individual que produce
ser en el círculo restringido de la Eco- conscientemente la relación social
le fue siempre considerable, pero fue implícita en la estructura y, en cam-
en los años 60, con los artículos pu- bio, cada sujeto se convierte en agen-
blicados sucesivamente en For Marx, te del sistema.
cuando Althusser se hizo un nombre En la famosa Lire 'Le Capital, (leer
como teórico marxista con tendencias .El Capital.), Althusser no sólo •lee• a
estructuralistas. En 1966 era ya, junto Marc, sino que explica con claridad la
con Michel Foucault, uno de los filó- diferencia entre una lectura .superfi-
sofos franceses más citados en la cial, que sólo se centra en las palabras
agrégationi. del texto, y una lectura .sintomática.,
La fama —o notoriedad— de Al- que intenta reunir las piezas de los
thusser tenía su origen en su célebre problemas que impregnan o rigen el
•antillumanismo«. Con él, el lector de verdadero significado del texto. El én-

59
ALTHUSSER ALTFIUSSER

fasis en la lectura permite que Althus- •estructura teórica definida-. De modo guna forma de conocimiento que ase- ser puede decir que Spinoza es el an-
ser aleje el cencro de arención tanto que el elemento radical:neme nuevo gure formar parte del objeto real. recesor directo de Marx, puesto que
del economicismo —que consideraría en Marx sería, tal vez, incapaz de ha- Toda episcernología que reúna el co- afirmaba que la ciencia es verdadera
a Marx como el heredero del marco llar su expresión en gran parte de sus nocimiento y el objeco real será inca- porque tiene éxito, no tiene éxito
clásico de la economía política (Smith escritos, porque se veía obligado a paz de producir un concepto aplica- porque es verdadera. Ésra es la carac-
y Ricardo)— corno de un humanismo utilizar conceptos y lenguaje deriva- ble a dicho objeto. Ello ocurre, según terística fundamental que, para Al-
e historicismo que había pasado a ba- dos de la problemática que le ha- Althusser, tanto con el idealismo he- thusser, distingue una ciencia de la
sarse en la autoridad de las primeras bía precedido. Considerar que Marx geliano (lo real = pensamiento) como ideología. Por tanto, el rasgo diferen-
obras de Marte Los manuscritos econó- adoptó una visión negativa de la eco- con el empirismo clásico (lo real ciador de la ideología es que asume
micos y filosóficos y las Tesis sobre nomía política clásica y, por tanto, como algo inseparable de la expe- que el conocimiento o las ideas se
Feuerbacb. Limitarse a ver a Marx que defendía a los trabajadores en riencia de los sentidos). Dado que sus derivan de la forma de ser de las co-
como heredero de la economía políti- contra de los especialistas en econo- predecesores (y muchos de quienes sas, ya sean esas •cosas• la obra de
ca clásica, asegura Althusser, es atri- mía política, que defenderían a los llegaron después que él) han sido in- Dios, como en la religión, o la obra
buirle una noción estrecha y vulgar de capitalistas, es semejante al enfoque capaces de evitar el empirismo —han del hombre, como en la filosofía de
la economía que produce el determi- que Feuerbach tiene respecto a He- sido incapaces de romper el vínculo la Ilustración. En resumen, la ideolo-
nismo económico, porque, como en,e1 gel. Oponer el humanismo del prime- entre conocimiento y objeto real—, gía acepta la (falsa) obviedad. de las
caso de Hegel, supone que la socie- ro al idéalismo del segundo es no han podido tampoco .ver. (ofrecer cosas; se resiste a las preguntas y evi-
dad es una totalidad social formada permanecer atrapado en la misma el conocimiento de) el modo de pro- ta la tarea de construir el objeto de
por elementos que expresan directa- problemática hegeliana, que necesita ducción como hizo Marx, y éste, a su conocimiento.
mente sus relaciones económicas. —para ser viable--- su aspecto nega- vez, fue incapaz de desarrollar el con- Dada esta preparación, ¿qué es lo
Si bien puede destacarse el lengua- tivo (lo que rechaza) canto como el cepto del modo de producción por- que descubrió Marx? Se nos plantean
je hegeliano, o de 'economía políti- positivo. que aún dependía del lenguaje del dos respuestas posibles que repre-
ca», en la gran obra de Marx, El Capi- La estrategia de Althusser consiste, empirismo. Esa es la razón de que sentan dos niveles diferentes de aná-
tal, ello no basta para demostrar que pues, en introducir una práctica lec- Marx sólo hable verdaderamente en lisis. La primera es que Marx des-
se le puede situar dentro de la mis- tora capaz de discernir de qué forma su nombre en unos cuantos textos cubrió el concepto del modo de
ma problemática que Hegel o la eco- inaugura Marx una revolución teórica privilegiados (en la Introducción producción en la historia y, sobre
nomía política clásica. Una vez más, basada en un objeto totalmente nue- de 1857, la Critica del Programa de todo, el modo de producción capita-
cuando los comentaristas señalan la vo: el modo de producción. En Marx, Gotba y las Notas marginales sobre lista (plusvalía, valor de cambio, mer-
afirmación explícita que hace Marx éste se convierte eh la estructura in- Wagner). Es decir, el lector actual de cancía); la segunda respuesta es, se-
de haber invertido la dialéctica de visible de la articulación de los ele- Marx debe hacer una lectura sintomá- gún Althusser, que Marx descubrió la
Hegel —haberla .vuelto cabeza aba- mentos en el conjunto social; ya no tica, capaz de hacer visible el descu- ciencia de la historia, o materialismo
jo—, de modo que la base material pertenece al conjunto de problemas brimiento de Marx. Ello significa histórico, además del materialismo
pasa a ser prioritaria, por delante del de la filosofía de Hegel y la econo- suministrar los conceptos para la re- dialéctico, el marco filosófico no em-
ámbito hegeliano de la Idea absolu- mía política clásica. En esta estrategia volución teórica que Marx inició. pirista que proporciona el concepto
ta, Althusser explica que esta inver- se encuentra, como parte integrante, Una vez neutralizada la problemá- para dicho descubrimiento. Por el
sión no significaría, en absoluto, que una epistemología que separa la teo- tica empirista, el conocimiento y el contrario, el historicismo olvida que
se planteen problemas diferentes, ni ría marxista del conocimiento de to- mundo objetivo se separan por com- el marxismo es también una filosofía
que, por consiguiente, sea posible das las demás, pero, especialmente, pleto. De aquí se deduce que la vali- y el humanismo olvida que Marx ini-
escapar a la influencia de la proble- de (odas las formas de empirismo. En dez de una teoría no depende de si ció una nueva ciencia, la ciencia de
mática hegeliana. Porque la pro- consecuencia, para descubrir el con- lo que afirma corresponde de forma la historia, en la que es preciso enten-
blemática traza un horizonte de pen- cepto del modo de producción, Marx inmediata a la realidad, sino de si sus der ésta corno la historia de los mo-
samiemo: es la •forma en la que se tuvo que romper con las formas de premisas tienen coherencia interna. dos de producción. Althusser no se
plantean los problemas.; limita el len- conocimiento cuya validez dependía Del mismo modo, una verdad cientí- cansa nunca de repetir que el modo
guaje y los conceptos que tiene de /a •obviedad• de la experiencia in- fica no deriva a posteriori, sino com- de producción es el objeto único del
el pensamiento en una situación mediata. El modo de producción (la pletamente a priori: la teoría de la materialismo histórico, un objeto muy
histórica concreta; la problemática estructura de la sociedad) no aparece relatividad es totalmente verdadera (o distinto del de las teorías de la eco-
constituye la •condición absolura y en la experiencia inmediata. Tampo- falsa) antes de comprobarla en la rea- nomía política clásica y la Ilustración
categórica de la posibilidad• de una co aparece, afirma Althusser, en nin- lidad. Partiendo de esta base, Althus- sobre la historia y la sociedad. Ahora,

60
ALTHUSSER ALTHLISSER

con Marx, no existe la «sociedad•, de Freud (que la usó en La interpre- económico y el humanismo. Existe nes sucesivas siguen adaptándose al
sób los modos de producción que tación de los sueños para demostrar una ruptura epistemológica que sepa- siatu quo. En palabras de Althusser,
evolucionan en la historia y son siem- cómo los sueños-pensamientos exis- ra al primer Marx, ideológico, del más la ideología •representa, en su distor-
pre inmanentes a los diversos niveles ten de forma desplazada en el conte- tardío, científico. sión necesariamente imaginada, no
relativamente autónomos del conjun- nido manifiesto del ensueño), con el Sin embargo, si la ciencia de Marx las relaciones de producción existen-
to social estructurado. fin de subrayar que la realidad del rompe con la problemática que da tes (y las demás relaciones que de
Si el modo de producción equiva- plano económico, o el modo de pro- prioridad a la ideología en la explica- ellas se derivan), sino, sobre todo, el
le también, en última instancia, a la ducción, no se expresa directamen- ción social, ¿significa que la ideología vínculo (imaginario) de los indivi-
determinación de la economía, ¿cómo te en forma de ideología o en la es una pura ilusión, una especie de duos con las relaciones de produc-
se supone que se manifiesta la eco- conciencia, sino que existe de modo mito, algo sin base real en la vida ción y las que de ellas se derivan.'.
nomía dentro de la formación social desplazado en la formación social social? En 1967, como para responder La ideología suministra el contexto
que genera? Y si se producen cam- pertinente. En este sentido, las con- a esta pregunta y rectificar, con ello, en el que las personas viven su
bios en la economía, ¿se harán evi- tradicciones dentro del sistema están el modo algo brutal en el que había vínculo con la realidad social en la
dentes en toda k sociedad? Al menos superdeterminadas. No son inmedia- arrebatado a la ideología cualquier que están situados. La ideología for-
hasta la mitad de los años 30, la res- tamente visibles, sino que deben ana- poder de explicación en su versión ma a los sujetos y, al hacerlo, los si-
puesta a tales preguntas era que un lizarse, es decir, hacerse visibles, a del marxismo, Althusser escribió lo túa en el sistema de relaciones nece-
cambio en la economía (o infraestruc- través de la ciencia. siguiente en el prefacio a la versión sario para mantener las relaciones de
. Althusser no fue el primer pensa- inglesa de Pour Marx (Para Marx):
tura) se reflejaría en la sociedad y la clase existentes. La ideología «interpe-
cultura (la superestructura). Por con- dor marxista que se opuso a las sim- •Yo no estaba, en absoluto, conde- la« —o •saluda.— a los individuos
siguiente, sic! capitalismo equivalía a plificaciones excesivas de la posición nando la ideología como realidad so- como sujetos del sistema: es da la
la explotación de los trabajadores me- económica determinista. Tras el des- cial: como afirma Marx, es en la ideo- identidad necesaria para el funciona-
. diante la extracción de la plusvalía, o cubrimiento de los Manuscritos logía donde los hombres "adquieren miento del estado actual de cosas.
beneficio, esta relación de antagonis- económicos y filosóficos de Marx conciencia" de su conflicto de clases Dicha identidad se constituye de for-
mo entre capitalista y obrero hallaría en 1932, el marxismo humanista de- y "luchan para decidirlo". 5 . Tres años ma material y concreta en diversas
también su expresión ideológica en la safió no sólo el determinismo econó- más tarde, Althusser avanzó aún más prácticas, prácticas rituales como el
vida social. En otras palabras, el tra- mico, sino todas las intepretaciones en el análisis de k ideología y, en un darse la mano o el rezo. La mbviedad•
bajador y el capitalista adquirirían de la vida social que negaban al hom- famoso ensayo, •Ideología y aparatos —el dar por supuestas las cosas— es
conciencia de ese antagonismo y lu- bre la iniciativa a la hora de modifi- ideológicos del Estado•6 , ofreció una característica de las prácticas ideoló-
charían para decidido. Así, la econo- car las condiciones sociales. La con- teoría marxista de ella. El Estado gicas: y la razón es que dichas prácti-
mía determinaría directamente la ciencia, la ideología, k política, se —del que se supone, a la manera le- cas son inseparables de la forma en
vida social y cultural. convinieron, en os años 60, en las ninista, que interviene de forma muy k que las personas viven el aspecto
Un poco de reflexión revela que, si muletillas de numerosas teorías radi- clara en favor de los intereses de la espontáneo e inmediato de su •exis-
esta explicación determinista tuviera cales de la sociedad. Althusser se en- burguesía y en contra del proletaria- tencia«. Nadie se libra, en este senti-
1 validez, no sería prácticamente nece- frentó a la idea de que el marxismo do— está compuesto de aparatos do, de la influencia de la ideología.
sario acudir a Marx para entender/a; era un humanismo, pero también a la ideológicos (iglesias, escuelas, siste- Ninguna sociedad carece de este pla-
el recurso a la antropología de Feuer- idea de que era un determinismo ma legal, familia, comunicaciones, no de existencia espontáneo y prácti-
bach (que situaba al •hombre« en el económico. Ésa es la razón de que, partidos políticos, etc.) y aparatos re- co. Todo el mundo está en la ideolo-
centro del universo) y a Hegel sería sobre todo en 1965, escribiera con presivos (policía, prisiones, ejército, gía; nadie se escapa. Todo el mundo
más que suficiente. Para Althusser, el tanta insistencia sobre la .ruptura etc.). Althusser intenta utilizar su teo- se constituye como un sujeto en es-
concepto del modo de producción en epistemológica• entre el primer Marx ría de k ideología para llenar lo que tas prácticas materiales.
Marx no puede interpretarse total- y sus obras posteriores". El primer siempre ha sido una laguna manifies- Con toda probabilidad, la popula-
mente desde el plano de la concien- Marx es decididamente humanista, ta en la teoría marxista: la explicación ridad de Althusser Como marxista de-
cia o la ideología. Al contrario, como coincide Althusser, decididamente de cómo se reproducen verdadera- clinó porque la popularidad de la
fenómeno estructural, sólo puede feuerbachiano; pero Althusser expli- mente las relaciones de producción teoría marxista sufrió un descenso a
existir de forma superdeterminada en ca que ése no es Marx. El verdadero, existentes. La ideología es el mecanis- finales de los 70. Quizá la interven-
toda la formación social de la que se LOMO hemos visto, es el que rompió mo a través del cual la burguesía ción de Althusser no había sido nun-
trate. La •superdeterminación- es una con la problemática de Hegel y puede reproducir su dominación de ca más que una operación de conten-
palabra que Althusser tomó prestada Feuerbach que regía el determinismo clase. A través de ella, las generado- ción, de modo que incluso la doctrina

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ALTHUSSER BENVENISTE

social que desarrolló, después de tos en el capitalismo? De pronto ve- sophy and Other Essays, trad. de Ben SMITH, Steven. Reading, Aftbusser An Es-
todo, tuvo dificultades para sacudirse rnos que, con todo el énfasis en el Brewster, Londres, New Leh Books, 1971, say on Structural Manvism, Ithaca.
la visión decimonónica del mundo, descubrimiento científico, por parte de págs. 121-173. (Incluye el ensayo -Ideolo- Cornell University Press. 1984.
gy- and ideological snue apparatuses-.)
inspirada por la industrialización que, Marx, del modo de producción —un 1 'bid., pág. 155.
en parte, la había producido. descubrimiento que deja atrás a la Louis Althusser, L'Avenir dure long-
Por otro lado, los escritos de Al- ideología—, se deja en el olvido el temps salo' de /es faiLs, texto establecido Émile Benveniste
thusser poseen un rigor asombroso, si propio carácter de la ideología como por Olivier Corpet y Yann Moulier
se deja de lado el tono del peregrino inmediatez imaginaría de la relación Boutang, París, Stock/IMEC. 1992. Ed. Nacido en El Cairo en 1902, Émile
marxista y se pemüte que salga a la entre el ser humano y el mundo. Lo inglesa, 77.1e Future ¿asís a Long Time, Benveniste fue profesor de lingüísti-
luz la extrema disciplina de la orga- que parece necesario no es sólo una trad. de Richard Veasey, Londres. Chato ca en el Collége de France entre 1937
nización y la presentación del texto. ciencia de los modos de producción, Sr Windus. 1993.
y 1969, año en el que se vio obligado
Además, no puede negarse que las sino también una ciencia de la natura- a retirarse por problemas de salud.
estrategias de lectura de Althusser leza de la ideología. Aunque Althusser VÉASE TAMBIÉN EN ESTE LIBRO Murió en 1976. Estudió en la Sorbona
apanan dicha actividad, tan familiar, tiene algo importante que decir sobre con Antoine Meillet, antiguo alumno
de la falsa obviedad de la experten- la ideología en general, choca con lo Foucault, Kristeva, Lacan. Lévi-Strauss. de Ferdinand de Saussure, y sus pri-
da inmediata. Pocos teóricos impor- que quiere decir como filósofo marxis- meras obras, en los años 30, fueron
tantes actuales se unirían al empiris- ta preocupado por la explotación. una continuación del interés de este
mo ingenuo que tanto dominaba ¿Qué puede contarnos exactamente PRINCIPALES OBRAS DE ALTHUSSER último por la historia de las formas
antes de la intervención de Althusser. una teoría marxista de la ideología so- lingüísticas indoeuropeas, especial-
Para asumir de nuevo un tono más bre la explotación? Casi nada, si en Montesquieu: La politique et Phisroire,
París, Presses Universitaires de Fran- mente la categoría de los nombres.
crítico, la teorización de Althusser po- este punto nos guiamos por Althusser, Debido al carácter técnico y especia-
see un alcance terriblemente estrecho, pese a que la ideología está inextrica- ce, 1959.
Pour Marz París, Maspero, 1965. lizado de estos primeros trabajos, po-
porque se aferra al canon del pensa- blemente unida a la reproducción del tire le capital (con Etienne Balibar), 2 cos conocían a Benveniste fuera de
miento manista. Por consiguiente, sistema. Gradualmente, empieza a vols., París. Maspero, 1965. un círculo relativamente estrecho de
aunque Althusser se interesa de mane- comprenderse que quizá el mejor libro ¿Sine et la philosophie, París, Maspero, eruditos.
ra muy directa por el concepto de que Althusser escribió fue su autobio- 1969. La situación cambió con la publi-
ciencia y asegura que Marx inició la grafía'. Pbilosophie et philosopbie spontanée des cación del primer volumen de sus
ciencia de la historia, es prácticamen- savants, París, Maspero, 1973. Problémes de linguistique genérale
te imposible determinar exactamente Eléments d'autocrit(que, París, Hacherte,
(Problemas de lingüística general),
lo que significa esa ciencia, fuera del NOTAS 1974. en 1966. Un segundo volumen apare-
hecho nada esclarecedor de que, al Posiciones (1976), Barcelona. Anagrama,
1977. ció en 1974. El libro reúne los escritos
contrario que la ideología, la ciencia ' jean Lacroix, citado por Didier Eri- más accesibles de Benveniste duran-
bon en Michel Foucault, París, Flamma- L'Avenir dure longtempssuivi de les faits,
no posee un sujeto. Además, pese a texto establecido por Olivier Corpet y te un periodo de más de veinticinco
que ciertos aspectos del texto de Al- don, 1989, pág. 183.
pág. 189. Yann Moulier Boutang, París, Stock/ años, y observa el lenguaje corno un
thusser sobre la ideología contienen Véase la ilustrativa observación de IMEC, 1992. objeto lingüístico y semiótica, como
algunas de las mejores cosas que ja- Althusser sobre Gramsci en Reading Ca- El porvenir es largo, Barcelona. Destino. un fenómeno social y cultural y como
más escribió, el vínculo real entre pital, trad. de Ben Brewster, Londres, 1992. un vehículo para la subjetividad. Tras
ideología, reproducción e interpela- New Left Books, reimpr. en bolsillo, la publicación de la obra, Benveníste
ción no queda suficientemente ex- 1975, pág. 130: •Está claro que Gramsci se convirtió en una figura importante
plícito. Si la ideología está siempre tiende a hacer que la teoría de la histo- OTRAS LECTURAS
para la evolución de la tendencia es-
presente (puesto que es la relación in- ria y el materialismo dialéctico coinci- tructuralista en las ciencias sociales y
mediata de la gente con el mundo), dan sólo dentro del materialismo histó- BENTON, Ted, The Rige and Fall of Srruc-
rico, aunque forman dos disciplinas tural Marxism, Londres, Macmillan. las humanidades. Lacan, por ejemplo,
pero es, en el modo capitalista de pro- 1984. reconoce en sus Écrits que es Benve-
ducción, la forma de mantener la ex- distintas.-
Louis Althusser, For Marx, trad. de CALLINCOS, Alex, Altbusser's Marrism, niste quien asesta un golpe mortal a
plotación, ¿cuál es el nexo entre la Ben Brewster, Hannondsworth, Penguin Londres, Pluto Press, 1976. la interpretación concluctista con el
ideología, en general, y el modo his- Books, 1969, pág. 33. KAPLAN, E. Ann y SPRINKER, Michael, The análisis de que, al contrario que la co-
tóricamente específico en el que los pág. 11. Althusserian Legacy, Londres, Verso, municación entre las abejas, el len-
individuos se constituyen como suje- En Louis Alrhusser, Lenin and Philo- 1993. guaje humano no es un mero sistema
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BENVENISTE BENVENISTE

de estimulo y respuesta. Y Kristeva Un elemento clave de la teoría del como un diálogo entre dos o mas
lenguaje corno discurso en Benvenis- sure para la historia de la semiótica y
ha advertido que b teoría de los pro- partes, a diferencia de un sistema de la lingüística modernas, también reco-
nombres de Benveniste —especial- te es su teoría de los pronombres y, señales en el que no hay diálogo.
en especial, b teoría de la polaridad noció la necesidad de modificar su
mente la relación entre ..yo. y -tú—, Además, en el lenguaje se puede teoría, sobre todo respecto a la rela-
o lo que se denomina la polaridad de entre yo y tú. Desde el punto de vis- transmitir un mensaje a tina tercera ción que Saussure establece entre
yo y tú, tiene una importancia fun- ta gramatical, dicha polaridad consti- persona, al contrario que en un siste- ambas materias. La lingüística, afirma-
damental para desarrollar una concep- tuye los pronombres de primera y ma de señales en el que el .mensaje• ba Saussure en el Curso de linguisti-
ción dinámica de la subjetividad. Igual- segunda personas, con la tercera per- no va más allá de quien lo recibe. Por ca general, quedaría al final subsumi-
mente, Roland Barthes vio con claridad sona constituida por él-ella-ello. La último, el lenguaje humano es una
idea de Benveniste es que la tercera da en la semiótica, la disciplina que
la impoaancia crucial de os textos de forma que permite una variedad infi- estudia los sistemas de signos. Ben-
Benveniste sobre la •voz media• del ver- persona funciona como condición de nita de contenidos, mientras que un
posibilidad de la primera y la Segun- veniste reconocía que era preciso re-
bo para entender la posición del escritor simple sistema de comunicación ba- visar minuciosamente esta predic-
actual, el autor que escribe de forma in- da; la tercera persona es una nao per- sado en una señal está siempre limi-
sona•, una categoría revelada por la ción. Al hacerlo, advirtió que sistemas
transitiva (voz media). tado a lo que está programado (por lingüísticos como el código Morse, el
En su trabajo sobre los pronom- voz neutral de la narración o descrip- ejemplo, el sistema de señales de las
ción, la voz de la denotación. Krister Braille o el lenguaje de signos para
bres, Benveniste desarrolló una teo- abejas hace referencia exclusivamen- sordomudos se pueden traducir entre
ría de la diferencia entre el érzoncé va llegará a pensar que esta polaridad te a la miel). Una repercusión impor- unos y otros, mientras que los siste-
(afirmación independiente del con- es la clave para entender la dinámica tante de estos análisis es que el len-
de la relación entre sujeto y objeto mas semióticos se caracterizan porsu
texto) y la énonciation (el acto de guaje humano se puede utilizar de falta de redundancia y, por consi-
afirmar asociado al contexto). Dado (yo = sujeto, tú = objeto) en el len- modo irónico o de una forma que re- guiente, no son mutuamente traduci-
el fenómeno de •deixis• elaborado guaje. El resultado es que, ahora, la quiera la interpretación y reinterpre- bles. Como explica nuestro autor, •no
por Roman Jakobson, ningún signifi- polaridad entre yo y tú tiene signifi- ración constante de los múltiples sig- existe "sinonimia.' entre los sistemas
cado de un énoncé que contenga cado sólo en relación con el ejemplo nificados posibles latentes en la
actual de discurso. Como explica semióticos; no se puede "decir la mis-
pronombres y otros indicadores del énonciation. Ello significa que el len- ma cosa" mediante el habla y me-
deíctico (.aquí., .allí., •este., •ese., nuestro autor al hablar de la •realidad• guaje humanó posee un aspecto in-
a la que se refiere el yo o el tú: •Yo diante la música, puesto que se trata
etc.) puede entenderse sin hacer re- negablemente poético y ficticio. Y a de sistemas con una base distinta».
ferencia al contexto, que aquí equiva- significa "la persona que emite el este hecho va unida otra connota-
ejemplo actual de discurso que con- No obstante, dos sistemas semióticos
le al acto de enunciación. Concedien- ción, la de que el lenguaje humano, pueden muy bien tener la misma
do que es dificil dar un ejemplo de tiene el yo.'. Este ejemplo es único, qua énonciation, nunca se repite con
por definición, y posee validez exclu- base constituyente pero seguir siendo
énonciation porque, de hecho, un exactitud, como ocurre con un^siste-
sivamente por ese Carácter único... Yo intraducibles, como, por citar al pro-
énoncé es siempre el vehiculo nece- ma de señales.
puede identificarse solamente por el pio Benveniste, el rojo en el código
sario para cualquier ejemplo (un Aunque no siempre afirmó que el de circulación y el rojo en la bandera
ejemplo es un caso de acto de habla ejemplo de discurso que lo contie- ^pensamiento y el lenguaje fueran
ne'. Por su parte, tú se define de la tricolor francesa, Por tanto, concluye,
sacado fuera de contexto), es impor- idénticos, Benveniste no aceptaba no hay un solo sistema de signos que
tante reconocer que el sujeto en el siguiente forma: tampoco la posición de Hjelmslev, trascienda a todos los demás siste-
lenguaje es inseparable de su realiza- para quien el pensamiento estaba to- mas; la posibilidad de una semiótica
ción. En otras palabras, el sujeto no al introducir la situación de nnvoca-
ción•, obtenemos una definición si- talmente separado del lenguaje. Ben- global que incluyera la lingüíStica
equivale a la categoría que se le atri- métrica para el tú como .el individuo veniste señalaba que, en la práctica, queda muy reducida. Quizá sea mu-
buye en la estructura gramatical for- al que se habla en d ejemplo actual es imposible separar pensamiento y cho más probable lo contrario, es de-
mal. En ésta, el sujeto es siempre la de discurso que contiene la muestra lenguaje porque, como mínimo, el cir, que el sistema lingüístico sea la
entidad fija y estática que se da en el lingüística de tú». Estas definiciones lenguaje debe ser el vehículo del base de traducción de todos los siste-
énoncé. En resumen, pues, el análisis [añade Benveniael se refieren a yo pensamiento. Como dice Benveniste, mas semióticos.
de Benveniste es que toda lingüística y tú como una categoría del lengua- •quienquiera que intente captar el
je y están relacionadas con su posi- Junto al análisis que hace Benve-
que quiera hacer justicia a la dinámi- marco de pensamiento apropiado en- niste de la diferencia entre los siste-
ca del lenguaje debe Yerio como un ción dentro de él'.
cuentra solamente las categorías del mas sernióticos y lingüísticos se en-
•ejemplo discursivo-, es decir, como lenguaje-3. cuentra su examen de la diferencia
un discurso. El discurso es la puesta Más en general, Benveniste consi-
dera el lenguaje, esencialmente, Aunque Benveniste fue un firme entre las dimensiones semiótica y se-
en práctica del lenguaje. defensor de la importancia de Saus- mántica del lenguaje. La semiótica (le
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BENVENISTE BOURDIEU

séntiotique) es el modo de significa- Por consiguiente, es indudable que ciales. Demostró de forma concluyen- Pmblénzes de linguistique gcInérale, vol. 2,
ción propio del signo. Esencialmente, ocurren cambios importantes dentro te que el lenguaje no tiene origen París, Gallimard, 1974.
la semiótica existe cuando se recono- de las instituciones sociales, pero el precisamente porque es un sistema. Vocabulario de las instituciones indoeu-
ce. Es independiente de cualquier re- vínculo social, en si, no cambia; Por tanto, no puede haber lenguaje ropeas, Madrid, Taurus, 1983.
ferencia. Por el contrario, el aspecto igualmente, las designaciones del len- primitivo. El lenguaje cambia, pero
semántico debe entenderse, y no re- guaje pueden modificarse, pero no el no progresa. Desde el punto de vista
conocerse. En consecuencia, depen- sistema de la lengua. Benveniste in- lingüístico, todo lenguaje natural, sin OTRAS LECTURAS
de totalmente de la referencia y está tentó convencer de ello a quienes, excepción, es complejo y muy dife-
engendrado por el discurso. como Freud en algunos de sus textos, renciado. Con Benveniste, el etno- Lo-FEROCES, Sylvater y GORA, Thomas
Benveniste adquirió gran influen- explicaban el lenguaje y la sociedad centrismo de la primera etnografía (eds.). •Polyphonic linguistics: The
cia durante los años 60 por sus escri- desde el punto de vista de la ontogé- recibe un golpe mortal. many voices of Emile Benveniste., su-
tos sobre la naturaleza del lenguaje. nesis. El riesgo es hacer que la forma plemento especial de Serniotica, La
Como Lévi-Strauss, señalaba que el ¡primitiva. (de la sociedad, el lengua- Haya, Mouton, 1981.
lenguaje constituye el orden social, y je, la cultura) sirva de explicación NOTAS
no a la inversa. Además, fue Benve- Para la forma más avanzada. En este
niste quien demostró que el aspecto sentido, Rousseau y varios antropólo- ' Émile Benveniste, Problems in Ge-
neral Linguistics, trad. de Mary Elizabeth
único y paradójico del lenguaje en su gos influidos por él consideraban que Pierre Bourdieu
las sociedades .primitivas. eran la •in- Meek, Coral Gables, Florida, University
situación social es su condición de of Miami Press. «Miami Linguistics Series
instrumento supraindividual que pue- fancia• de la humanidad y, por tanto, nem. 8., 1971, pág. 218. Dada la complejidad de la obra de
de cosificarse (de ahí la lingüística) y guardaban la clave para conocer los ¡Ud. Pierre Bourdieu, existe siempre el
que, como ejemplo de discurso, cons- cimientos de la sociedad occidental. ¡bid., pág. 63 riesgo de malinterpretar su proyecto.
tituye la individualidad. De hecho, la En honor de Benveniste hay que de- Émile Benveniste, Problénzes de lin- Es preciso ser precavidos al leer su
polaridad entre yo tú implica que cir que, en 1956, demostró que tam- guistique générale, vol. 2, París, Galli-
°cuete, tan precavidos como Bour-
el individuo y la sociedad ya no son poco Freud se había librado de la mard, TEL, 1974, pág. 53.
Ibicl., pág. 94. dieu al escribirla.
términos contradictorios; no existe in- tentación de acudir a una ontogéne- Dicho esto, destacan ciertos ele-
dividualidad sin lenguaje ni lenguaje sis para explicar el sueño, las pala- Benveniste, Problenzs in General
linguistics. pág. 72. mentos: la preocupación por analizar
independiente de una comunidad de bras primordiales y el lenguaje en la desigualdad y la distinción de cla-
hablantes. Aunque Benveniste reco- general. La respuesta de Benveniste ses en un plano estructural, y no
nocía que es perfectamente posible consiste en destacar que VÉASE TAMBIÉN EN ESTE LIBRO ideológico, pero sin ceder a lo que
estudiar la historia de los lenguajes Bourdieu denomina la ilusión •objeti-
de cada nación —del mismo modo al parecer surgieron confusiones en
Freud debido a su recurso constante Barches, Greimas. Kristeva, Lacan, Lévi- vista. del estructuralismo; la preocu-
que es posible estudiar la historia de a los •orígenes.; os orígenes del Strauss, Saussure. pación por permitir que la ciencia
las sociedades—, no se puede estu- arre, la religión, la sociedad, el len- supere su dependencia del modelo
diar la historia del lenguaje en si, ni guaje... Estaba permanentemente para captar la naturaleza de la vida
PRINCIPALES OBRAS DE BENVENISTE
la historia de la sociedad en si, por- haciendo la transposición de lo que social y aborde la práctica o prácticas;
que sólo dentro del lenguaje y la so- consideraba «primitivo. en el hombre el deseo de superar los clichés, los
a un primitivismo original, porque Onkines de la formation des noms en
ciedad es posible la historia. indo - européen, París, A. Maisonneuve, estereotipos y las clasificaciones de la
proyectaba en la historia de este
mundo lo que denominaríamos una 1935. doxa aceptada universalmente y,
cronología de b psique humana'. Les Infinitifs avestiques, París, A. Maison- como consecuencia, hacer explícitas
Para la humanidad, el lenguaje neuve, 1935. las relaciones de poder existentes en
(langue) y la sociedad son realida- Al llamar la atención sobre los pe- Nona d'agent et nonzs ctaction en indo- la realidad social, en un terreno so-
des inconscientes.., ambos son siem- ligros de permitir que la ontogénesis europea'', París, A. Maisonneuve,
cial. Desde su trabajo de campo en
pre heredados y no podernos imagi- ejerciera una gran influencia en la 1948.
nar, en el ejercicio del lenguaje y la Thres et nontsprop res en iran ion anclen Argelia durante os años 60, Bourdieu
práctica de la sociedad, que haya teoría social, Benveniste demuestra se ha comprometido a mostrar los
ser uno de los que abrieron la puerta París, Klincksieck, •Travaux de
podido haber nunca, a ese nivel l'Instituí d'Etudes Iraniennes de modos subyacentes de dominación
esencial, un comienzo para ninguno al enfoque estructuralista (y después l'Université de Paris. I•, 1966. de clases en las sociedades capitalis-
de ellos. La voluntad humana no postestructuralista) del análisis y la Problémes de linguistique générale,vol. I, tas, tal como aparecen en todos los
puede cambiar ninguno de los dos'. interpretación de los fenómenos so- París, Gallimard, 1966. aspectos de la educación y el arte. Su
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BOURDIEU BOHRDIEU

tesis central es que la clase dominan- porque la educación superior en gráficos, Bourdieu delinea un triple hace también desde la posición del
te no gobierna abiertamente; no obli- Francia tiende a estar estructurada en marco de conocimiento teórico, en el que habla, se produce una forma de-
ga a los dominados a atenerse a su torno a personajes e instituciones de que el nivel más reflexivo se acabará fectuosa de conocimiento. Bournieu
voluntad. Tampoco domina en la so- prestigio académico (como la École empieando para clasificar dos clasifi- explica que una teoría de la práctica
ciedad capitalista mediante una cons- Normale Supérieure-rue d'Ulm). •Pre- cadores., •cosificar el sujeto cosifica- adecuada debe tener además una
piración en la que los privilegiados stigio académico« no significa necesa- dor» y juzgar a los árbitros del gusto. teoría del principal defecto del enfo-
manipulen de forma consciente la riamente estímulo científico e inte- El primer elemento de este marco es que objetivista, que es el de estar
realidad de acuerdo con sus propios lectual. Más bien, significa que el la •experiencia primaria., o lo que rígidamente despegada de esa prácti-
intereses. Lo que ocurre, más bien, es aplauso académico suele destinarse a Bourdieu denomina también el nivel ca. Debido a ello, no puede justificar
que la clase dominante en la socie- quienes saben —conscientemente o «fenomenológico». Todos los investi- elementos que forman parte de ella,
dad capitalista es, de acuerdo con las no— cómo manejarse en el sistema gadores en este campo conocen bien como el .estilo., el -tacto., la •destre-
estadísticas, la beneficiaria del poder de protectores y utilizar de la mejor dicho nivel porque es la fuente de za-, el •savoirlaire• y, especialmen-
económico, social y simbólico, poder manera posible todos los privilegios sus datos descriptivos básicos sobre te, la •improvisación». Del mismo
encarnado en el capital económico y heredados o el capital cultural que el mundo familiar y cotidiano, de su modo, al construir un modelo de
cultural, imbricado en todas las insti- puedan poseer. Bourdieu contrasta el propia sociedad o de otra cualquiera. práctica —por ejemplo, el intercam-
tuciones y costumbres de la sociedad privilegio académico y el poder insti- El segundo nivel, casi tan conocido bio de regalos—, el conocimiento
y reproducido por esas mismas insti- tucional que le acompaña con el re- como el primero, es el del «modelo- objetivista no logra justificar los .fa-
tuciones y costumbres. nombre científico e intelectual. Este o el conocimiento •objetivista.. Aquí, lbs. o •estrategias. capaces de perju-
Pierre Bourdieu nació en Dengvin, último implica cierta imaginación, ori- e/ conocimiento .construye las rela- dicar la universalidad del modelo. En
en el sur de Francia. en 1930. Asistió ginalidad y agudeza crítica, mientras ciones objetivas (por ejemplo, econó- otras palabras, el tiempo queda fuera
al prestigioso liceo parisino Louis-le- que los primeros requieren •la prue- micas o lingüísticas) que estructuran del modelo, junto a la noción de «es-
Grand en 1950-1951, y obtuvo su ba más genuina de obsequium, respe- la práctica y las representaciones de trategia«. •La estrategia —afirma Bous
agrégation en filosofía en la École to incondicional por los principios la práctica.. Así, en un nivel prima- dieu— permite la intervención indivi-
Normale Supérieure. Como parte de fundamentales del orden estable- rio•, el investigador puede advertir dual contra el modelo.. Esto es algo
su servicio militar, Bourdieu dio clases cido•. que, en todas las bodas, los aniversa- que la posición estructuralista enun-
en Argelia y, por tanto, experimentó La opinión de que el medio acadé- rios o las Navidades, la gente inter- ciada por Lévi-Strauss no logra hacer.
de primera mano el colonialismo fran- mico es •justo• y .competitivo., y cambia regalos. En un plano objeti- Por supuesto, son las relaciones, y no
cés. Fue una experiencia formativa y presuntamente responsable de •am- vista, el investigador podría teorizar las sustancias, las que caracterizan la
el esfuerzo para entenderla orientó al pliar los límites del conocimiento• y que, pese a lo que sugiere el . sentido vida social y cultural, como la teoría
filósofo hacia la antropología y la so- seleccionar a •las mejores mentes« común, el intercambio de regalos es del lenguaje de Saussure dejó ver a
ciología. Más tarde, entre 1959 y 1962, para la tarea, es el tipo de ortodoxia un medio de mantener el prestigio y los investigadores. SIR embargo, que-
Bourdieu impartió filosofía en la Sor- normal y corriente que intenta elimi- confirmar una jerarquía social, así darse en este plano, como Bourdieu
bona y, a mitad de los años 60, se con- nar la investigación y reflexión socio- como, tal vez, también un ejemplo de asegura que tendía a hacer el primer
virtió en director de estudios en la lógica de Bourdieu. Para él, en reali- cómo el intercambio es un modo de estructuralismo, es quedarse en el
École des Hautes Etudes y director de dad, no es necesario decir lo que es cohesión social. Lo que Bourdieu su- plano del modelo, o conocimiento
European Sociology. En 1982 fue ele- evidente y se da por descontado, que braya en relación con este conoci- objetivista.
gido para la cátedra de sociología en nuestras ideas basadas en el sentido miento es que se trata esencialmente Bourdieu propone que una teoría
el Collége de France. común, o nuestro lenguaje científico del conocimiento del observador des- del conocimiento objetivista sea, al
En su libro H07720 Acadeinicus, impreciso, se apoyan en un mal co- interesado y neutral que se dedica a mismo tiempo, una teoría de la prac-
Bourdieu afirma que la École des nocimiento (néconnaissance) de las desarrollar una teoría de la práctica tica más rigurosa e iluminadora. Afir-
Hautes Etudes en París sigue siendo relaciones desiguales de poder y una implícita en los datos primarios. Al ma que una teoría de la práctica ver-
una de las escasas instituciones del reproducción concomitante del privi- estudiar concretamente el lenguaje o daderamente rigurosa se consigue
sistema académico francés que son legio. el intercambio de regalos, el conoci- adoptando la posición de su des'arro-
marginales pero prestigiosas, capaces En gran parte, Bourdieu presentó miento del teórico desinteresado es no. Muy bien puede juzgarse que es
de promover la originalidad en el su postura teórica subyacente en el muy limitado. Desde luego, si se es- exigir demasiado. Pero no se puede
pensamiento y la investigación. Fue ensayo de principios de los 70 Esbo- tudia el lenguaje sólo desde la posi- negar a Bourdieu. Y, desde la posi-
algo importante para Bourdieu en los zo de una teoría de la práctica. Aquí, ción del que escucha (frecuentemen- ción de la teoría en el Esbozo, elabo-
primeros tiempos de su trayectoria, en el contexto de los estudios etno- te, la posición de desinterés), y no se ra tres importantes trabajos sobre la

70 1 71
BOURDIEU BOURDIEU

torno familiar puede suministrar un obra, porque es la base que justifica división necesita una reelaboración
educación y el gusto: Homo Aca-
gran volumen de conocimientos, su originalidad como sociólogo. para que la obra de I3ourdieu alcan-
<I In loas, La distinción y La Nobleza
comprensión y .gusto- que no se Dado que el enfoque economicista ce el dinamismo de la de Freud.
stétat: Les Grandes Écoles et esprit de
aprende formalmente, sino que se ad- del marxismo es demasiado reductor Una vez más, en el epílogo a su
crups; obras en las que se exponen
quiere de forma inconsciente. y el primer estructuralismo era dema- estudio monumental La distinción,
diversos conceptos claves como •Isa-
Un babiius específico sale a la luz siado objetivista, y puesto que, ade- Bourdieu critica la disposición •culti-
<ampo. y •capital cultural..
cuando se demuestra estadísticamen- más, las teorías de la conspiración de vada« de/ filósofo que se observa in-
Aunque, en ocasiones, se confun-
te que hay diversas variables (traba- la dominación de clase conceden un cluso en la lectura •heterodoxa. que
de con las rutinas especificas de la peso excesivo a la experiencia prima-
vida diaria o con un sinónimo de so- jo, educación, ingresos, preferencias Derrida hace de los escritos de Kant
artísticas, gustos culinarios, etc.) que ria —como se ve, por ejemplo, en sobre estética. Oponerse a la filosofía
cialización, habitas forma parte, de determinados actos cotidianos de
hecho, de la teoría de la práctica de se correlacionan entre sí. Así, en con- desde un punto de vista filosófico no
traste con el trabajador manual, el puro interés egoísta—, Bourdieu ha es más que fortalecer la situación pri-
Bourdieu como la articulación de ac-
catedrático de derecho, normalmente, intentado perfeccionar su teoría de la vilegiada del •terreno filosófico., afir-
titudes en el espacio social. El espa- práctica con el fin de que sea científi-
cio es también un terreno social por- habrá tenido una educación en cole- ma Bourdieu. Es seguir rindiendo ho-
gio privado, preferirá a Bach (y, más ca y pegada a la realidad. Ser científi- menaje a un conjunto de textos
que, en él, las posiciones forman un
en general, la forma artística antes co, en este caso, quiere decir justifi- canónicos que resultan relativamente
sistema de relaciones basado en inte- car la contingencia, los medios y el
reses (poder) significativos y desea- que su contenido), tendrá ingresos inaccesibles para el profano. Es se-
elevados y preferirá la cocina sencilla tiempo. guir olvidando las 'condiciones obje-
dos por quienes las ocupan. Habitas
es una especie de expresión de la in- y elegante, compuesta de carnes ma- Otra cuestión es que el método de tivas.. de la filosofía, en la que se otor-
gras, fruta fresca y verduras. Esta co- Bourdieu tenga éxito. Podria decirse ga prestigio al erudito y se niega al
versión (inconsciente) que quienes
ocupan el espacio social hacen en los rrelación es lo que, a juicio de Bour- que cualquier vínculo con la teoría neófito. Además, es típico que los in-
dieu, constituye una serie concreta de obligatoriamente paraliza la práctica telectuales posean el babitus de los
intereses de poder implícitos. Habirus en su sitio. Desde luego, el habitas
es una especie de gramática de las actitudes (en este caso, burguesa o privilegiados, pese a que suelen com-
acciones que sirve para diferenciar a dominante), o habitas. Un habitas puede ser una actitud, pero ¿cuál es poner la fracción dominada de la cla-
genera una serie de actitudes comu- exactamente la relación entre dicha se dominante.
una clase (por ejemplo, la dominan-
te) de otra (por ejemplo, la domina- nes a una clase. El conocimiento del actitud y los actos contingentes? Las Todo esto está muy bien, hasta
babitus de una clase no permite pre-
regularidades estadísticas, replica cierto punto. La importancia de ser
da) en el terreno social. En La distin- Bourdieu. En otras palabras, el cono-
ción, Bourdieu se refiere a habirus decir exactamente qué va a hacer un consciente de las condiciones socia-
midmbro de la clase dominante o do- cimiento científico. ¿Qué uso (cultu- les de la filosofía —y el arte— debe-
como un sistema de esquemas para la
elaboración de prácticas concretas. minada en un momento y una situa- ral, politico, social, etc.) tiene este co- ría acabar con cualquier afirmación
Así, si e/ •buen gusto. implica que el ción concretos. Ello supondría elimi- nocimiento? Cuando lo utilizan mojigata de autonomía. Sin embargo,
catedrático de universidad va a pre- nar e/ tiempo y los medios y reafirmar grupos con objetivos políticos corre el propio Bourdieu es claramente un
la prioridad del modelo sobre la prác- el riesgo de hacerse puramente ideo- producto de la formación filosófica,
ferir claramente el Clave bien tempe-
tica, precisamente lo que el Esbozo lógico, una dimensión del poder sim- del mismo modo que su obra acude
rado de Bach, mientras que los traba-
había criticado a principios de los 70. bólico: el poder de representar. al canon de textos privilegiados en
jadores manuales y funcionarios de
clase media preferirán El Danubio Bourdieu ha afirmado asimismo que Si bien es cierto que resulta suges- busca de inspiración. Bourdieu reco-
el !habitas está relacionado con el tiva la idea de Bourdieu de entrar en noce tácitamente, pues, que dicho
azul, la validez de/ buen gusto se ve
minusvalorada sólo cuando se revela .sentido del propio lugar., que surge el juego de la práctica sin verse arras- canon es el único que tenemos por
a través de procesos de diferencia- trado por ella y aunque su imagen, ahora y que, para bien o para mal,
que el catedrático (especialmente de
derecho o medicina) es, a su vez, hijo ción en el espacio socia/ y que es un más trágica, de la ciencia como ver- nos vemos obligados a inspirarnos en
sistema de esquemas para la elabora- dadera libertad, en la medida en que él, aunque no pueda haber una con-
de otro catedrático que poseía una
colección privada de arte y cuya es- ción de prácticas y para la percepción es el 'conocimiento de la necesidad., firmación absoluta de su veracidad y
y no percepción de dichas prácticas. ofrece una base posible para enten- legitimidad. Sin duda, la mayor apor-
posa era una buena música aficiona- der mejor el empeño científico y, por
da. E/ catedrático es alguien que no Los límites entre un babítus y otro tación de Bourdieu al pensamiento
son siempre controvertidos porque tanto, sociológico, el trabajo de Bour- sociológico es el hecho de llamar la
sólo ha •alcanzado• ciertos logros en dieu sigue dependiendo de una divi-
el campo de la educación, sino que son siempre fluidos, nunca estables. atención sobre las condiciones obje-
Bourdieu ha trabajado mucho para sión fundamental entre teoría y prác- tivas de distintos tipos de discurso.
ha heredado un capital cultural. Es tica, o entre teoría y realidad. Esta
decir que, en casos concretos, el en- refinar este concepto clave de su Sin embargo, esa sociología corre el

72 73
CHONISKY CHOMSKY

peligro de quedar paralizada si no ne J. Austin-Broos (ed.), Sydney, güística no se adquiere, sino que School de Filadelfia. En la Universi-
desarrolla además nuevos análisis Allen S: Unwin, 1987. págs. 21 0- 225. existe siempre corno un a priori rec- dad de Pensilvania estudió matemáti-
teóricos a partir de esa contribución. ROBINS, Derek, 773e Work oí Pierre Bour-
tor. Tercero, la distinción entre •com- cas y filosofía, además de lingüística
dieu, Milton Keynes, Open University
petencia. y 'actuación. —incluso bajo la influencia de Zelig Harris.
Press. 1991.
cuando no se entendía bien— ha ser- Aunque obtuvo su doctorado en Pen-
NOTAS vido de metáfora para los estudios silvania, la mayor parte del trabajo
estructurales en otras disciplinas para él lo llevó a cabo en la Universi-
' Fierre Bourdieu, Homo Acadenzi- como la filosofía y la sociología dad de Harvard entre 1951 y 1955.
Noam Chomsky
cris, trad. de Peter Collier, Cambridge,
(cfr. la noción de »competencia co- Desde 1955, Chomsky enseña en el
Polity Press, 1988, pág. 87.
Si el interés y las aclamaciones de municativa» en Habermas y el con- Massachusetts Institute of Technolo-
los críticos son un indicio, Noam cepto de •babitus• en Bourdieu, que gy, donde está en posesión de una
Chomsky debería estar considerado son un eco de la idea del agente de cátedra desde 1976.
VÉASE TAMBIÉN EN ESTE LIBRO
como uno de los lingüistas más im- Chomslcy). A través de su padre —que publi-
portantes e influyentes del siglo 'Ax. Hay que destacar que Chomsky se có Hebrew: The Eternal Language
Derrida, Lévi-Strauss, Saussure, Tou-
raine. Chomsky recibió su formación lin- ha convertido asimismo en un inte- (1951)—, Chomslcy entró en contacto
güística de Leonard Bloomfield, cuyo lectual liberal y de izquierdas sin con la lingüística histórica. De hecho,
empirismo conductista dominó la lin- pelos en la lengua, que se opuso su primer escrito importante fue su
PRINCIPALES OBRAS DE BOURDIEU güística norteamericana durante los enérgicamente a la participación nor- tesis de maestría, no publicada, titu-
años 30 y 40, y de Zelig narria, cuyas teamericana en la guerra de Vietnam lada •Morphophonemics of modern
Sociologie de tAlgérie, París, PUF, posiciones políticas durante los 50 y que ha escrito casi una docena de Hebrew» (1951). Dado el interés pa-
ed., 1962. atrajeron a Chorrislcy más que su ver- libros sobre problemas políticos ac- ralelo de Chomsky por la lógica y las
El oficio de sociólogo: presupuestos epis- sión del estructuralismo lingüístico. tuales, tanto nacionales como interna- matemáticas, era de esperar que la
tenrológicos (1968) (con Jean Claude
- La aportación de Chomsk-y a la lin- cionales. Entre los más conocidos es- obra de lógicos (Goodman, Quine,
Passeron), Madrid, Siglo XXI, 1989. güística y, por tanto, al pensamiento tán: American Power and the New Kripke, Lakatós, Hintikka) y filósofos
La Reproduction (con Jean Claude Pas-
-
moderno, ha sido triple, en términos Mandarins (1969); The Backroom analíticos (Austin, Wittgenstein) le in-
seron), París, Minuit, 1970.
generales. En primer lugar, trasladó el Boys (1973); Numen Rights and Atne- teresasen más que los filósofos o los
La distinción (1979), Madrid, Taurus,
énfasis de la lingüística del plano es- rican Foreign Policy (1978); The Fa- lingüistas de la llamada tradición con-
1991.
El sentido práctico 09801 Madrid, Tau- trictamente descriptivo e inductivo (el teful Mangle: Pie United States, Israel tinental. Este interés ha dado a los
rus, 1991. nivel de la catalogación infinita de and tbe Palestinians (1983); Neces- textos de Chomslcy, en ocasiones, el
Homo Acadenzicus (1984). expresiones de las que posteriormen- saly Illusions: Thought Control in De- estilo austero que imita el rigor puta•
La ontología política de Martín Heideg- te se podían extraer conclusiones so- mocratic Societtes (1989); y DelerrbIR tivo de las ciencias naturales. Como
ger (1988), Barcelona, Paidós, 1991. bre la gramática) al nivel ideal de la Democracy (1991). él mismo ha dicho, el interés intelec-
La Noblesse d'état: Les Grandes Écoles et competencia y la •estructura profun- En lo que pareció un tremendo tual de la lingüística, como ocurre
esprit de corps, París, Minuit, 1989. da., el nivel que abre la puerta al as- desliz de juicio político, Chiamsky con la física, reside no tanto en los
Las reglas del arte, Barcelona, Anagra-
pecto creativo del lenguaje. En pocas —que es judío, y cuyo padre fue un fenómenos (los productos del len-
ma, 1995.
palabras, Chomsk-y demostró, con sus especialista en hebreo— escribió un guaje) como en el poder explicativo
conocimientos técnicos de lingüística, prefacio en 1980 al famoso libro de de sus principios'. »La ciencia natural
que el lenguaje era algo más que su Robert Faurisson contra la existencia —afirma Chomsky—, a diferencia
OTRAS LECTURAS realización técnica. Segundo, provo- de las cámaras de gas nazis. Choms- de la historia natural, no se ocupa de
có una revisión del aprendizaje de la ky defendió su acción por el princi- los fenómenos en sí mismos, sino
JENKINS, Richard, ¡'(erre Bourdieu, Lon- lengua al afirmar que la competencia pio (equivocado) de que, para un li- de los principios y explicaciones que
dres y Nueva York, Routledge, Key
lingüística no se adquiere de manera beral coherente, todas las corrientes se relacionan con ellos»'. Este enfo-
Sociologists Series, 1992.
inductiva, a través de un condiciona- de opinión tienen derecho a hacer- que —también evidente en sus traba-
BARRER, Richard, &t al. (eds.), An Intro-
miento conductista de estímulo y res- se oír. jos sobre lógica— implica tomar
duction ro zhe Work of Bourdieu: Pie
Practice ofTheory, Basingstoke. Mac- puesta, sino que es la consecuencia Noam Chomsky nació en Filadelfia como axiomáticos un estilo (uso de b
mullan, 1990. de una capacidad cognoscitiva innata en 1928. Sus primeros estudios los notación), formato (uso de micro-
MUER, Don y BRANSON, Jan, •Pierre que poseen los seres humanos. Es realizó en una -escuela progresiva ejemplos) y método (idealización)
Bourdieu: Culture and Praxis.. en Dia- decir, la libertad y la creatividad lin- experimental» y en la Central High determinados, de forma tan general

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CHOMSKY CHOMSKY

que quedan libres de escrutinio criti- de un número potencialmente infini- 3. Gramática transformanva: se encargada de suministrar todas las
co. Ello ha supuesto que, aunque en to de oraciones bien formadas. 'Ge- trata de un modo de derivar una nue- reglas de la formación de oraciones
otros lugares (por ejemplo, Francia) nerativa' evoca el término matemáti- va estructura de constituyentes (por en el hablante y oyente ideal. En re-
se ha recogido la obra de Chornsky, co 'generador.. Éste produce una ejemplo, de la forma activa a la for- sumen, pues, una gramática transfor-
él se ha visto muchas veces incapaz -función generadora. —por ejemplo, ma pasiva) mediante una serie de re- mativa es una forma de reducir la for-
de emprender el diálogo con lingüis- 2x + 3y – z— que genera una serie glas basadas en la cadena horizontal mación de oraciones al menor
tas cuyos presupuestos proceden de infinita de valores. Por su parte, de la estructura de base de la oración número de reglas posible. Desde una
una tradición diferente. Chomsky define la gramática genera- (representada por un marcador de perspectiva ligeramente distinta, la
Al principio, Chomsky se propuso tiva como una serie de reglas que, al frase) el 'árbol" vertical que resulta de gramática transforrnativa, que sumi-
explicar de qué modo un usuario definir una serie (de objetos) -se pue- tener en cuenta cómo se produjo esa nistra las reglas de la competencia,
ideal del lenguaje podía generar y de decir que genera esa serie- 3 . Y con- cadena. equivale al concepto de la 'estructura
entender frases gramaticales nuevas y tinúa: profunda. de Chomsky.
únicas sin haberse encontrado nunca Chonasky fue capaz de demostraz Es preciso examinar otra faceta de
con ellas en la práctica. Como conse- Se puede decir que (una] gramáti- que la gramática de la estructura de la teoría del lenguaje de Chomsky
ca (generativa) produce una serie de antes de pasar a una breve valoración
cuencia, decidió demostrar la existen- frases y la transformativa son más
descripciones estructurales, cada
cia de una serie de reglas de transfor- poderosas (es decir, pueden hacer de su obra. Se trata de su intento de
una de las cuales, idealmente, incor-
mación, definida y descriptible, que más cosas) que la gramática de esta- reforzar la teoría de la gramática ge-
pora una estructura profunda, una
constituían la -competencia- del usua- estructura superficial, una interpreta- dos finitos, y que la gramática trans- nerativa uniéndola -a una noción de
rio ideal del lenguaje, y que dicha ción semántica (de la estructura pro- formativa es una gramática más pode- 'capacidad cognoscitivm s .
competencia permitía generar ora- funda) y una interpretación fonética rosa que la de estructura de frases. La Dado que Chomsky opina que no
ciones gramaticales. La 'actuación., (de la estructura superficial) 4 . gramática transforrnativa es la contri- podemos explicar la adquisición del
que equivale al número limitado de bución esencial de Chomsky a una lenguaje y la competencia lingüística
La estructura (porque eso es lo que
oraciones gramaticales que ejecutan teoría general de la gramática. Las (que presupone la creatividad lingüís-
es) de una gramática generativa pue-
realmente los usuarios del lenguaje, otras dos —aunque previamente no tica) de forma inductiva, ni gracias a
de ser —siguiendo el método de
ofrece pruebas (un corpus) para in- estaban formalizadas— ya existían ninguna versión de la teoría del estí-
Chomsky en Syntactic Structures-
vestigar la competencia, a juicio de antes de su trabajo. Sólo una gramá- mulo y la respuesta, recurre a la idea
de tres tipos básicos (recordando que
Chomsky, que añade que ésta no im- tica transformativa puede derivar las de una capacidad lingüística innata,
una gramática explica cómo se gene-
plica una apreciación e invocación reglas básicas que constituyen al ha- especificamente humana, como for-
ran las oraciones):
consciente de las reglas generativas blante y oyente ideal, por ejemplo, ma de explicar la naturaleza del
por parte del hablante, sino que debe 1. Gramática del estado finito: es del inglés. La lógica en la que se basa lenguaje humano. En concreto, ha es-
considerarse un equivalente del sólo lineal, de modo que las oracio- la gramática transformativa es que, si tado muy apegado a la opinión car-
modo de estar del hablante en el len- nes se producen mediante sencillas cada expresión implicase una sola re- tesiana de que el lenguaje y la mente
guaje. En otras palabras, la compe- elecciones de izquierda a derecha, y gla corno condición para ser acepta- están tan estrechamente vinculados
tencia es la condición de posibilidad cada elección limita el alcance de la ble, existirían demasiadas reglas. Cla- que el conocimiento del lenguaje
del lenguaje: es un elemento consti- elección sucesiva. ramente, el número de reglas no es permite el conocimiento de la mente
tuyente del hablante, y no al con- 2. Gramática de la estructura de equivalente al número de expresio- humana. Es decir, para el inventor de
trario. frases: corresponde al análisis (la cla- nes; está implícito en cualquier gra- la gramática generativa, el lenguaje es
En cuanto a los aspectos de la teo- sificación de los elementos constituti- mática. Por otro lado, Choinsky seña- fundamentalmente una parte de la
ría del lenguaje de Chomsky, debe- vos de la estructura 'superficial- de la que, si no se puede demostrar que psicología humana, entendiendo psi-
mos centrarnos, primero, en la no- una oración), y se ocupa de los múl- muchas oraciones —aparentemente cología como una teoría de las facul-
ción de gramática 'generativa-. La tiples significados posibles en los distintas en un nivel -superficial- de la tades de la mente humana. La com-
gramática generativa es una especie mismos constituyentes de la frase: gramática de estructura de frases— petencia lingüística tiene un origen
de sistema elemental de reglas que -alcé men and n'amen- (para tomar, el son, en realidad, transformaciones de menos lingüístico que psicológico; o
definen y producen periódicamente ejemplo que ofrece Lyons) puede sig- la misma regla, la gramática adquiere ¿no deberíamos decir que el origen
las transformaciones en la oración. nificar (olcl men) and women ((hom- una complejidad casi infinita y contie- del lenguaje es el sujeto psicológico?
Está unida a la •competencia" básica bres ancianos) y mujeres] o olcl (men ne escaso poder explicativo. La gra- Aquí, Chomsky refleja especialmente
del hablante y oyente ideal, una com- and :minen) (hombres y mujeres an- mática de estructura de frases sería la influencia de Descartes y la tradi-
petencia que permite fa elaboración cianos]. demasiado compleja si fuera la única ción racionalista y científica del si-

76 77
CHOMSKY
CHOMSKY

glo xvli. En lugar de conceder al len- lista de Chomsky de que el lenguaje


de basarse en el hablante nativo pue- ky, Rejlections on Language, Londres,
guaje un carácter autónomo —corno es una expresión de algo distinto,
de tener ventajas a la hora de evaluar Temple Smirh, en asociación con Poma-
acabó pasando en el siglo XX, con la una capacidad cognoscitiva indivi-
la gramaticalidad, ¿no podría propo- na Books. 1976, reed. en 1977. cap. I y
concepción estructuralista del lengua- dual inseparable de la psicología de pássim,
nerse que, idealmente, los hablantes
je mantenida por Saussure—, el racio- cada persona. La pregunta que surge ° La ironía es que casi todos los crin-
puedan adquirir la competencia de
nalismo del siglo xvii lo consideraba es qué debe ser el lenguaje para cos de Saussure (por ejemplo, Bous-
un nativo en varias, o hasta muchas,
como una expresión del sujeto psico- constituir una expresión de la psico- dieu) tienden a afirmar que daba priori-
lenguas? El hecho de que no lo ha- dad a la langue por encima de la pariste.
lógico. Al parecer, Chomsky cree que logía individual. Pero ¿el lenguaje es
gan no debe atribuirse necesariamen-
sólo identificándose con esta tradi- sólo una expresión de algo? Es decir,
te a la propia naturaleza del lengua-
ción puede hacerse justicia a la esen- ¿es totalmente transparente? La se-
je. Segundo, podría sugerirse qué un VÉASE TAMBIÉN EN ESTE LIBRO
cia dinámica y creadora del lenguaje miótica y la poética modernas sugeri-
aspecto esencial del lenguaje es la
y evitar una recaída en alguna for- rían que la respuesta es negativa,
Posibilidad de traducirlo. Al centrar- Benveniste, Jakobson, Kristeva, Saus-
ma de explicación empirista. Para porque también existe el lenguaje 51.1 re.
se en la competencia del hablante na-
Chomsky, el empirismo incipiente (o poético, el lenguaje (relativamente)
tivo ! Chomsk-y pasa por alto la cues-
totalmente desarrollado) de Saussure Opaco.
tión.
le hace inaceptable para la lingüística Supongamos que Chomsky res- PRINCIPALES OBRAS DE CHOMSKY
Por último, el racionalismo de
generativa. De acuerdo con la lingüís- pondiera afirmando que la idealiza-
Chomsky parece ser una reacción
tica cartesiana, Saussure terminaba ción es una exigencia metodológica y Sin ja clic Structures, La Haya, París,
exagerada al conductismo y al empi- Mouton, 1957.
dando prioridad a la parole (habla) no debe confundirse con cómo es el
sismo característicos del ambiente fi- Current Issues in Linguistic Theories, La
por encima de la langue (estructura lenguaje en sí. El inconveniente es
losófico y lingüístico angloamericano Haya, París, Mouton, 1964.
gramati cal) 6 . que resulta imposible evitar la sensa-
en el que se formó. Por ello aparece Aspe cts of tbe neo° , of Syntan Cambrid-
¿Cómo podemos juzgar, entonces, ción de que se está vinculando la
con frecuencia como el• racionalista ge, Mass.. MIT Press, 1965.
la obra de Chomsky? Es necesario re- idealización al principio de compe- Cartesian Linguistics: A Cbapter in the
sitiado que intenta abrirse camino pe-
conocer que toda evaluación profun- tencia per se (la competencia equiva- History of Rationalist Thougbt, Nueva
nosamente contra las fuerzas del em-
da de la gramática generativa deberá le a un número infinito = ideal] de York, Harper & Row, 1966,
pirismo. Sin embargo, los grandes
tener en cuenta los considerables co- oraciones). Otro problema de la idea- The Sound Pattern of English (con Mo-
debates teóricos actuales sobre len-
nocimientos técnicos de Chomsk-y en lización es que no logra justificar rris Halle), Nueva York, Raspes &
guaje y filosofía no se limitan, en ab-
materia de lingüística. Sin embargo, —como ha demostrado Kristeva— el Row, 1968,
soluto, a los que ha provocado la Chonzsiy: Selected Readings, ed. de j. P. B.
ciertas cosas son muy discutibles, in- lenguaje como proceso de realización.
rivalidad entre racionalismo y empi- Alíen y Paul Van Buren, Londres y Nue-
cluso para el profano. Pese a que la El plano de la «actuación- de Choms-
sismo. El hecho de que los escritos va York, Oxford University Press, 1971.
teoría de la gramática generativa es, ky no altera este hecho. Porque la
teóricos de Chomsky no parez¿an Studies on Semantics in Generative
sin duda, uno de los logros intelec- actuación se limita a centrarse en las Gramnzar, La Haya, París, Mouton,
haberlo advertido así es una limita-
tuales del siglo n," resulta limitada, al expresiones ya emitidas; no explica el 1972.
ción grave.
menos, en cuatro aspectos. becbo de su proceso de realización: The Logical Structure of Linguistic
La primera de dichas limitaciones el plano del discurso de Benveniste. Theory, Nueva York, Plenum Press,
se refiere al concepto de idealización. Como consecuencia, la visión del len- 1975.
NOTAS Reflections on Language, Londres, Tem-
En este sentido, recordemos que guaje de Chomsky es estática, más
«competencia. se refiere a la •compe- que dinámica. ple Smith en asociación con Fonrana
' Noam Chomsky, Language and Res- Books, 1976.
tencia del hablante y oyente idealiza- Otro problema planteado por la
ponsibility, Based on Conversations with Butes and Representarions, Oxford, Ba-
do.. El problema no es que la «com- lingüística de Chomsky surge del én- Mitsou Ronat, trad. de John Vierte!, Nue- sil Blackwell. 1980.
petencia. sea imaginaria (es decir, fasis dado a la competencia del ha- va York, Pantheon Books, 1979, pági- Langztage and Problents of Knozvledge:
nunca llevada totalmente a cabo en la blante nativo como hablante modelo nas 58-59. The Managua Lectztres, Cambridge,
práctica), sino el hecho de que dicha de una lengua. Aquí hay que tener en /bid., pág. 59. Mass., MIT Press, 1988.
competencia se identifique con un cuenta dos aspectos (al menos). El 3 Noam Chornsky, Language and

componente no lingüístico, el -ha- primero es si el hablante nativo (el Mind (edición aumenrada), Nueva York, Selección de traducciones al español
blante y oyente. ideal, y no con el que habla una lengua •materna.) es Harcourt Brace Jovanovich, 1972, pági- El conocimiento del lenguaje, su natura-
na 126. leza, origen y uso Madrid, Alianza,
propio lenguaje. Aquí, la idealización un modelo adecuado de cómo fun-
• Ibídem. 1989.
es compatible con la opinión raciona- ciona el lenguaje. Aunque el hecho
Véase, por ejemplo, Noam Choms- Barreras, Barcelona, Paidós, 1990.
78
79
DUMÉZIL

Ensayos sobre forma e interpretación, exactamente, Dumézil intentó mos- européenne (El festín de la inmortali- cada una minuciosamente revisada y
Madrid, Cátedra. 1982. trar el carácter y la relación —sin ne- dad. Estudio de mitología indoeuro- corregida. De acuerdo con Durnézil,
Ilusiones necesarias, Madrid, Libertarias- gar las diferencias— de los elemen- pea comparada) , bajo la dirección
— la civilización indoeuropea se refiere
Prodhufi, 1991. tos constitutivos de la civilización del principal lingüista histórico de la a las culturas de India, el Norte de
El lenguaje y el entendimiento, Barcelo-
indoeuropea. Esta demostración se época, Antoine Meillet. También pen- África (especialmente Egipto e Irán),
na, Seix Barra', 1986.
realiza mediante una asombrosa in- só en buscar un puesto en el extran- Europa (especialmente Roma) . y Es-
El lenguaje y los problemas del conoci-
miento, Madrid, Visor, 1992. cursión en la religión y la mitología jero y fue nombrado lector de francés candinavia. Yen su primera obra, Le
Lingüística cartesiana, Madrid. Gredas. indoeuropeas, tal como se manifies- en la Universidad de Varsovia. Como Festín d'immortalité, publicada en
1991. tan en epopeyas, leyendas e historias vivir lejos de Francia, en aquel enton- 1924, y resultado de su investigación
Politica y cultura a finales del siglo xx, (cfr. la fundación de Roma). Entre las ces, era demasiado doloroso, Du- doctoral, Dumézil inicia su explora-
Barcelona, Ariel, 1994. fuentes fundamentales de Dumézil mézil dimitió al cabo de seis meses y ción de la forma en que ciertos ele-
Sobre el poder y la ideología, Madrid, cabría mencionar el Mababbarata in- regresó a París en el verano de 1921. mentos de diversas culturas dentro
Visor, 1989. dio, el Avesta iraní (libro sagrado . de Gracias a una beca de tres años ter- del contexto indoeuropeo contienen
Zaratustra), los Eddas escandinavos y, minó su tesis, que defendió en 1924. ecos de otras. En el caso de Le Festin
para Roma, la Eneldo; de Virgilio. Poco después, el joven investigador d'immortalité, el interés reside en re-
OTRAS LECTURAS
¿Cómo llegó a ser Dumézil el especia- se marchó a Turquía para asumir un constituir la mitología de la bebida
ALEXANDER. George (ed.),Reflections on lista en la civilización indoeuropea? puesto de profesor de historia de las sagrada de los pueblos indoeuropeos
Cbonuky, Oxford, Cambridge, Mass., Y ¿qué es exactamente lo que Du- religiones en la Universidad de Es- y mostrar cómo la ambrosía sagrada
Basil Blackwell, 1990. mézil denomina •civilización indo- tambul, puesto creado gracias a la (la bebida que permite a los dioses
Baría, Rudolph P., Cballenging Cborns- europea.? política secularizadora de Mustafa Ke- ser inmortales) en Occidente corres-
ky: Tbe Generative Garden Gante, Georges Dumézil nació en París mal. Durante seis años (19251931), ponde al anula indio (sánscrito).
Oxford y Nueva York, Basil Black- en 1898. Según su propio relato, em- Dumézil enseñó en Turquía; dos Aunque Dumézil se distanció de esta
well, 1989. pezó a interesarse por los mitos cuan- melares años- de su vida, afirmó y otras obras realizadas antes de
LYONS, _John, Cbconsky, Hassocks, liar-
do, de niño, conoció las leyendas en 1986. Dumézil volvió a Francia 1938, contiene el embrión del progra-
vester Press, 2. cd., 1977.
griegas. Su padre le había regalado el en 1933 para ser director de estu- ma de toda su investigación pos-
Moocu., Sohan y Morían., Celia (eds.),
Now,: Cbomsky: Consensos and Con- famoso texto paralelo de Niebuhr, en dios en la École Pratique des Haures terior. Como en el caso de su Ou-
troversy, Nueva York, Falmer Press, alemán y francés. Otra obra que el Études, tras haber pasado dos años ranos - Varuna: Étude de mytbologie
1987. futuro mitólogo leyó también a edad en la Universidad de Uppsala (donde comparée indo-européenne (1934)
RADFORD, Andrew, Transformational temprana fueron los cuentos de Pe- se inició en el estudio de las lenguas —donde el dios Urano de la mitolo-
Syntor A Student's Guide to nom- rrau Ir. escandinavas) como lector de francés. gía griega se sitúa al lado del dios in-
sky's Extended nem), Cambridge, Al acabar su educación secundada, En 1949 fue elegido para el Collége dio Varuna — , y Flamen - Brabman
Cambridge University Press, 1981. Dumézil asistió al prestigioso liceo de France, en la cátedra de civiliza- (1935), donde el dios romano Fíamela
parisino Louis-le-Grand, y entró en la ción indoeuropea, donde impartió se compara con el indio Brahmán,
École Normale (rue d'Ulm) en 1916 cursos hasta su jubilación, en 1968. Dumézil considera en 1938 que la
Aunque sus estudios se vieron inte- Después enseñó durante tres años en comparación no sirve.
Georges Dumézil rrumpidos por la Primera Guerra Estados Unidos y fue elegido para la A partir de 1938, Dumézil se inspi-
Mundial (le desmovilizaron en 1919), Academia Francesa en 1978. Murió en ra en la idea, derivada de sus estu-
Junto con Glande Lévi-Strauss, Dumézil obtuvo su agrégation en le;- octubre de 1986. dios, de que las tres funciones de so-
Georges Dttmézil está considerado, tres en diciembre de 1919, y poco Dumézil insistió siempre en el ca- beranía, guerra y producción aúnan
en las ciencias sociales, como uno de después fue nombrado professeur en rácter progresivo y provisional de su los orígenes diversos de las culturas
los primeros representantes del méto- el Liceo de Beauvais, en el norte de oeuvre, y frecuentemente comparó constitutivas de los indoeuropeos.
do estructuralista comparativo. Este Francia, donde enseñó hasta 1920. sus numerosas publicaciones con in- Esta triple división pasará a ser el
método, que se basa en un sistema Incapaz de soportar la vida de un formes anuales. Por consiguiente, centro de toda la obra posterior del
minuciosamente construido de clasi- profesor de enseñanza secundaria, muchos de sus libros son profundiza- autor. Las dos primeras funciones (so-
ficaciones y análisis, le permitió des- Dumézil dimitió de su puesto con el ciones de obras ya publicadas. Los di- beranía y guerra) se tratan en estu-
tacar, en la »civilización» indoeuropea, fin de dedicarse a preparar su docto- versos volúmenes de Mytb et épopée dios particulares: libros sobre la sobe-
tres funciones sociales invariables: ra( d'état —Le Festín d'immortalité. (Mito y epopeya), por ejemplo, han ranía —corno Mitra-Varuna: Ensayo
soberanía, guerra y producción. Mas Étucle de mytbologie comparée indo- aparecido en tres y cuatro ediciones, sobre dos representaciones indoeuro-

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DUMÉZIL DUMÉZIL

peas de la soberanía (1940)—, libros los textos de Dumézil se aproxima a encima de lo que se ha convertido en en sánscrito, •padre• fpérel habría sido
sobre la guerra —corno Aspects de la la estructura inconsciente de la socie- fronteras religiosas, sociales y políti-•pitar., y •madre finare" •iatar-. Esto
fonction guerrier chez les indo-euro- dad. Volveremos sobre ello. cas. La cuestión importante es que la me deslumbró. Ése es el origen de mi
péens 0956) heelaborado y meditado Las tres funciones en los mitos ro- función tripartita tiene su origen en lapasión indoeuropea.'. De modo que,
como Heur et malherir du guerrier manos son Júpiter (que representa a cultura indoiraní, y que esa estmctu- como veremos enseguida, aunque
(1969)1—, en obras, como Jupiter, la clase sacerdotal), Marte (que repre- ra tripartita se extendió progresi- Dumézil está, desde el punto de vista
Mars, Quirinus en el caso de Roma, senta b guerra) y Quirino (que repre- vamente a todos los rincones de la metodológico, cercano al estructura-
que se ocupan de las tres funciones senta la agricultura o productividad). .familia• indoeuropea, como ocasio- lismo contemporáneo, su •pasión in-
en relación con áreas específicas o En India, las tres funciones están en- nalmente la llamaba Dumézil. Esta doeuropea. --el sueño de descubrir
teniendo en cuenta cómo aparecen carnadas en la religión védica —la división precisa de funciones no po- el origen y el subsiguiente parentes-
las tres en el contexto de la mitología más antigua de la región—, respecti- see equivalente en ningún otro lugar co de las tres funciones en las socie-
indoeuropea en su conjunto. Este úl- vamente, por Mitra-Varuna, Indra y del mundo. Una de las objeciones dades indoeuropeas— sitúa clara-
timo tema es examinado en obras Násatyá. Del mismo modo, las tres contra su obra es que resulta obliga- mente su empeño, al menos en parte,
como L'Idéologie tripartite des indo- funciones aparecen en los mitos es- torio encontrar pruebas de dicha es- dentro del paradigma de la lingüísti-
européens (1953), incluido en candinavos como ()din, Thor y Freyr. tructura en la cultura indoeuropea ca histórica del siglo xl.X. Por otro
L'Idéologie des troisfonctions dans les Estos dioses nórdicos guardan una porque es básica para la propia su- lado, el propio Saussure (cuya impor-
épopées des peuples indo-européens estrecha semejanza con sus equiva- pervivencia de la sociedad humana. tancia para el pensamiento estructu-
(1968). La ausencia significativa de lentes alemanes, Thor, Wodan y Frie- Dumézil respondió afirmando que la ralista es innegable) surgió también
esta serie de estudios es una obra que co. Desde la perspectiva norteafri- forma exacta de la división tripartita de ese mismo ambiente intelectual, y
analice en concreto la tercera fun- cana, Irán estuvo históricamente no es esencial: es perfectamente po- Émile Benveniste, que durante algún
ción: la productividad, la fertilidad y vinculado al mundo indio antes de la sible señalar alguna deidad, en otros tiempo se opuso a Dumézil pero pos-
el pueblo en general. Según Dumezil, conquista musulmana (el nombre lugares, en la que las funciones se teriormente fue su más enérgico de-
esta función se resiste a la sistemati- «Irán• se deriva de •ran shahr-). Du- superponen o son muy distintas. fensor, fue asimismo alumno de Mei-
zación y es la más difícil de tratar ais- mézil estudia, pues, el lenguaje y los Pese a la indudable originalidad de !lec, y uno de los inspiradores del
ladamente. Lo que sigue es un resu- mitos indoíraníes con anterioridad a sus estudios y su relación con el pro- movimiento estructuralista contempo-
men breve y muy esquemático de las la religión védica que produjo . el yecto estructuralista de los años 60, ráneo.
tres funciones tal como las analiza sánscrito, y encuentra paralelismos Dumézil fue, en varios aspectos im- Aunque estaba fascinado por la eti-
nuestro autor, en relación con una se- entre el Mitra indio (que equivale a portantes, un producto de la lingüís- mología y el concepto de otigen, la
rie de culturas diferentes. No obstan- la primera función: soberanía) y el tica comparada e histórica del si- influencia de eruditos como Meillet y
te, antes de seguir avanzando, adver- Vohu Manah iraní (también equiva- glo mX. Antoine Meillet, su mentor y Bréal en Dumézil hizo que él también
timos que él mismo denominó las tres lente a la primera función). Dumézil el director de su tesis, y Michel Bréal,abordase el estudio del lenguaje
funciones, a menudo, una ideología muestra que, en los Vedas, Mitra va primer profesor de lingüística compa- —utilizando para ello la ciencia—
-tripartita. (o de tres partes.). Ideolo- acompañado de dos dioses, Aryaman rada en el Collége de France en 1864, como un hecho social, y no natural.
gía es para Dumézil —protector de la comunidad (segun- fueron alumnos entusiastas del funda- El objetivo era separar la ciencia del
da función, guerra)— y Bhaga, en- dor de la lingüística histórica, Franz lenguaje de la ciencia de la naturale-
una concepción y valoración de las Bopp. La obra de Meillet L'Apervu za. Se trataba de estudiar el carácter
grandes fuerzas que dan vida al cargado del reparto de los bienes
(tercera función, producción). En la duna histoire de la langue greque de la acción social a través de los ri-
mundo y la sociedad, así como sus (Panorama de la historia de la lengua tos, mitos y costumbres'.
relaciones. Frecuentemente esta teología de Zaratustra, a Aryaman le
ideología está implícita y debe des- sustituye Sroasa, protector de la co- griega), publicada en 1913, fue una Aunque era reacio a verse envuel-
cifrarse mediante el análisis de lo munidad (segunda función), y a Bha- influencia formativa, y Michel Bréal to en cuestiones generales de meto•
que se dice abiertamente sobre los ga le reemplaza Así, el patrono de la había traducido del alemán la Gram- dologia, Dumézil no estaba, como
dioses —y, sobre todo, sobre sus justa retribución de este mundo en el ?naire comparé° de Bopp. Bréal hizo aseguraba, apegado al enfoque a
acciones—, sobre la teología y, por otro (tercera función). Para cada par- mucho más por el joven Dumézil. Pu- priori tan adoptado en los estudios
encima de todo, sobre la mitología'. te del ámbito indoeuropeo, el trabajo blicó su Dictionnaire étytnologique sobre el lenguaje y el mito. En reali-
Desde luego, si las tres funciones de Dumézil forja vínculos entre dio- du latín, a través del cual Dumézil dad, expresó públicamente su repul-
son una ideología, ello significa que ses, héroes y diversas figuras míticas empezó a experimentar las maravillas sa ante el uso de dicho método (a su
su presencia no es inmediatemente y teológicas, con el fin de demostrar de la etimología y desarrollar su pa- juicio) por parte de Durkheim en Les
visible. Más adelante, la ideología en la presencia de las tres funciones por sión indoeuropea; •Allí descubrí que, Formes élémentaires de la vie vlg (en-

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DUMÉZIL GENETTE

se y Les Régles de la métbode sociolo- manas, Dumézil dejó claro que esta- Oztranos-Varuna. Elude de mytbologie teóricos de la literatura y los semió-
gique. En la primera obra, asegura ba más ligado a lo particular, los .he- comparée indo-européenne, París. logos. El interés permanente en la
Dumézil, se hace que los datos se chos, corno él los llamaba. Dejar el Adrien-Maisonneuve. 1934. considerable obra de este autor, que
ajusten a un esquema previo; no son terreno de los hechos es 'hacer poe- Flanzen Brabman. París, Annales du inu-
-
abarca el espectro literario desde los
el material del que surge éste. Y, en sía., entrar en un mundo de ensue- sée Guimet, peine collection, 1935.
»pitar, Quirinus, París. Gallimard, clásicos griegos hasta Proust, es ela-
el libro sobre el método, escrito en la ños, aseguraba. Debido a su énfasis borar una teoria general —basada en
1941.
primera etapa de la carrera de Durk- en los hechos, en lo particular, Du- esquemas de clasificación— de la sin-
Mear et nzalbeur du guerrier (1956 y
heim, Dumézil reflexionaba sobre mézil no comprendía cómo nadie gularidad del objeto literario. Ansio-
1969).
cómo ningún investigador podía ela- podía extraer de su obra ningún tipo Les DiCtlX souverains des indo-européens so por evitar la tortura de imponer
borar un texto sobre metodología an- de sistema filosófico amplio, semejan- (1959), París, Gallimard, 1977. Parcial- categorias a obras literarias desde
tes de haber publicado verdadera- te al sistema de LéVi-Strausst Ade- mente traducido al inglés como Gods fuera, pero rechazando la ingenuidad
mente una obra de investigación con más, se resistió conscientemente, a lo of Ancient Nordsmen, ed. de Einar del empirismo en la crítica literaria,
base empírica. Por consiguiente, The largo de toda su vida, a los esfuerzos Haugen, varios traductores, Berkeley. Genette ha intentado —mediante un
Golden Bough, de Frazer, y los escri- para situarle dentro de una •escuela. University of California Press, 1973.
•método analítico , flexible— pemátir
tos y enseñanzas de Marcel Mauss, de pensamiento, y siempre deseó ¡dé es ronzaines, París, Gallirnard, 1968.
My& et epopée: un conocimiento del •misterio• de la
fueron mucho más importantes para —ardientemente-- ser él mismo en obra literaria sin destruir ese misterio.
I. 1 L'idéologie des trois fonclions
Dumézil que nada de lo que escribió cuestiones intelectuales o académi- dans les épopées des peuples Inspirado en los análisis estructura-
Durkheim. cas. Creía que ser miembro de una indo-européens. París, Galli- listas que elevaron el análisis tex-
Pese a su tendencia aparente hacia escuela era perder la autonomía mard, 1968. 4. ed. rey., 1986. tual formal a nuevas alturas en los
un enfoque inductivo y empírico en esencial para una investigación ver- II. Types épiques indo-européens: años 60, Genette se ha preocupado
las ciencias sociales, Dumézil, al mis- daderamente original y rigurosa. Un héros, un sorcier, un roi, Pa- de defender la autonomía del objeto
mo tiempo, se expresa enérgicamente rís, Gallimard, 1971, 1986. literario. De ahí que temáne dicien-
contra la opinión de que los hechos Histoires romaines, París, Galli-
do que la gran obra de Proust, En
sociales son autónomos y poseen sig- NOTAS mard, 1973.
Féles romaizzes d'été et d'autonzne, segui- busca del tiempo perdido, en su con-
nificado propio. .Estructura. y •siste- junto, es irreductible: i•No es una ilus-
Georges Dumézil, kiytbs et dieta do de Dix questions romanzes. 1976.
ma•, no hechos aislados, son lo que des indo européennes (Selección presen-
- Afito y epopeya, Barcelona, Seix Barral. tración más que de si misma».
constituye el centro de su método. tada por Hervé Coutau-Bégarie), París, 1977. Genette nació en París en 1930, fue
Para él, ambos términos son inter- Flammarion. 199 2 , Pítg- 240 - Apollon sonore, et nutres essais, EsquEses un producto de la École Normale Su-
cambiables; estructura expresa en la- 2 Le Magazine Littéraire, 229, abril de znythologie. París. Gallimard, 1982. périeure —donde obtuvo su agréga-
tín lo mismo que quiere decir siste- de 1986, pág. 16 (entrevista con Fran- Del mito a la novela, Madrid, FCE, 1993. tion en Lettres clasiques en 1954 — y
ma en griego. Unida al método cos Evialc1). es contemporáneo directo de Jacques
comparativo de Dumézil, la estructu- 3 Véase Jean-Claude Afinen 'Le Piro-
OTRAS LECTURAS Derrida y Pierre Bourdieu. Las re-
ra se convierte en la clave de su es- gramme Dumézilien-, en Le Magazine
linéraire, 229, abril de 1986, págs. 22-24. flexiones de Derrida sobre la escritu-
fuerzo para demostrar que cada reli- BELIER, Wouper, Decayed Gods: ra en De la grammatologie, especial-
• Ver Georges Durnézil, Entretiens and Development on Georges Du-
gión, cultura o sociedad es un avec Didier Eribon, París, Gallimard, mente, influyeron en los artícu-
equilibrio. La combinación de ele- ntézits -idéologie trzpartie., Leyden y
-Folio/Essais-, 1987, págs. 120-122. los publicados por Genette en los
mentos con significado intrínseco no Nueva York, E. J. Brill, 1991.
Scorr Lin-ir-ro:4, C., New Comparative años 60 sobre crítica y teoría literaria.
se produce por azar para formar una Nuestro autor fue uno de los prime-
klytbology. Az: Anthropological Astas-
especie de conjunto (posiblemente) VÉASE TAMBIÉN EN ESTE LIBRO nzent of ¡be 77,eories of Georges Du- ros en señalar la importancia del con-
defectuoso. El conjunto está siempre Berkeley, University of Califor- cepto de gramatología de Derrida en
constituido previamente por las reja- Benveniste, Saussure, Lévi-Strauss. nia Press. 1966. una visión espacial de las obras lite-
dones entre los elementos, y su sig- rarias'. En 1959-1960, Genette y De-
nificado global procede de esas rela- rrida enseñaron en un lycée y prepa-
PRINCIPALES OBRAS DE DUMÉZIC
ciones. Aquí Dumézil se alinea raron a sus alumnos para la entra-
claramente con el movimiento estruc- Le festín ctintmortalUé. Elude de nzytbo- Gérard Genette da en la École Normale Supérieure.
turalista. Sin embargo, a diferencia de logie conzparée indo-européenne, Pa- En 1963 pasó a ser assistant de litera-
la búsqueda que hace Lévi-Strauss de rís, Annales du musée Guimet, 1924 La obra de Gérard Geneue tiene tura francesa en la Sorbona y, des-
los universales en las cuestiones hu- (tesis doctoral de Dumezil). una importancia especial para los pués, martre assistant. En 1967 fue
-

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GENETTE GENETTE

designado para el puesto de director teoría de los géneros en Introductioiz que, para entender totalmente como sar a ser el hecho narrado en una car-
de estudios de estética y poética en rarchitexte (1979); la formación del funciona el lenguaje, debernos expli- ta posterior. Claramente, para que el
la École des Hautes Etudes, en Cien- concepto de •transtextualidad. e •hi- car el acto de afirmar (énonciation) y tiempo de la historia coincida con la
cias Sociales. pertextualidad. en Palimpsests (1982) la afirmación hecha (énoncé). Las narración, ambos tienen que estar
Junto con Tzvetan Todorov y Hé- y, por último, un estudio del paratex- manifestaciones narrativas (úioncés), •en• el mismo tiempo. Una posibili-
l'ene Cixous, Genette comenzó ro» (el título, el prólogo, el epílogo: en sí, suelen ser sencillas y transpa- dad interesante que se deriva de la
en 1970, en las Editions du Seuil, la elementos en el texto principal, pero rentes (por ejemplo, •durante mucho coincidencia de los dos tiempos es
influyente publicación Poélique, así no de él), en Senas (1987). Más recien- tiempo me acosté temprano., de que el fin de la narración se convier-
como la colección literaria del mismo temente, Generic ha publicado sus re- Proust, citado por Genette). Sólo ta en un hecho dentro de la historia,
nombre. Fue en Poélique donde se flexiones sobre un tema indicado por cuando se tiene en cuenta el caso na- como cuando, al final de una confe-
publicó por primera vez el importan- primera vez en Figures 1L la naturale- rrativo se puede apreciar por comple- sión, se ejecuta al narrador.
te ensayo de Derrida •La mitología za de la ficción y la condición de •lite- to el significado narrativo concreto de Desde el siglo XIX, la forma más co-
blanca: metáfora en el texto de la fi- rariedad. en Ficción y dicción. ¿Cuáles una expresión. mún de narración ha sido en tercera
losofía.3 . son las grandes hipótesis que surgen 2. Tiempo narrativo: mientras persona y con posterioridad a los he-
En los primeros artículos de Ge- de los escritos de Genette en estas dos que el lugar o el espacio pueden que- chos relatados. Como advierte Ge-
nene, publicados en Figures 1 (1966), décadas de permanente teorización y dar indefinidos en la narración, el nette, un rasgo curioso de dicha na-
se puede observar un indicio de los reflexión? tiempo no puede, aunque sólo sea rración es que es .intemporal»: no
temas posteriores. Está, por ejemplo, La aportación de Genette a una porque está inscrito en el tiempo del existe indido del tiempo de la escri-
la crítica del psicologismo, que recha- teoría del objeto narrativo y literario verbo y, por tanto, en todo el lengua- tura y narración.
za por su impulso reductor y deter- (es decir, estéticamente satisfactorio), je. Además, el caso narrativo tendrá 3. Planos narrativos: se refiere a la
minista. El teórico considera que un en general, reside en la meticulosidad una relación temporal específica con relación entre el acto de relatar y el
texto literario es literario precisamen- con la que amplía la esfera analítica los hechos relatados. Con frecuencia, hecho relatado. Se considera que todo
te porque no puede reducirse a la del lector crítico. Hasta ahora se han la narración es posterior a los hechos, hecho narrado está en un plano supe-
disposición psicológica de un autor_ dado por descontados numerosos as- pero no inevitablemente. Existen na- rior al hecho de narrar. El relato corto
Igual que Blanchot, Genette está de pectos de la escritura narrativa. Una rraciones •predictivas. (proféticas, de Balzac Sarrasine es un ejemplo de
acuerdo en que el sitio del autor es historia •funciona. por alguna razón, apocalípticas, oraculares) que se re- las posibles variantes en el plano narra-
un lugar de anonimato. Escribir es es- pero pocos han planteado preguntas fieren a un momento futuro, así como tivo. El narrador en la historia refiere
conderse, llevar una máscara. Como incisivas sobre cómo y por qué ocu- narraciones que describen los hechos los hechos que conducen a su relato de
máximo, la experiencia vivida del rre. Pensemos en la narración. Ge- mientras ocurren, o que convierten el la historia de Sarrasine, luego cuenta la
autor se refracta —se desplaza— en nette demuestra —sobre todo en re- propio acto de la narración (por historia del enamoramiento de Sana-
el texto; no se refleja ni se expresa en lación con Proust— que una función ejemplo, Las muy una noches) en el sine respecto a la joven La Zambinella,
él. El especialista en teoría literaria narrativa está constituida por muchos centro de la historia. El tiempo narra- antes de regresar a lo que podría con-
está interesado en el proceso de des- aspectos y planos: no puede reducir- tivo se refiere siempre al tiempo de siderarse el centro de su narración. Una
plazamiento per se, y no en la condi- se a un solo caso de narración de una la narración. Uno de los ejemplos historia dentro de otra, como si dijéra-
ción psicológica del autor (si es que historia. Si tomamos como ejemplo el más claros se encuentra en la novela mos; pero para Genette constituye una
puede establecerse). Genette se une aspecto de la •voz narrativa, a través epistolar, en la que el acto de escribir muestra del plano narrativo.
así a Foucault, Barthes y otros en la del análisis de Genette vemos que y narrar (por ejemplo, en La yzouvelle
adopción de la •muerte. del autor esa voz, por sí sola, está constituida Héloise de Rousseau) forma parte de Éstas son varias de las característi-
como punto de partida. por los siguientes elementos: la propia narración. En tal caso, el cas de la •voz• que Genette descubre
A partir de Figures III (1972), la tiempo del suceso relatado puede ser en su estudio de la narrativa. Tam-
cuestión de la presencia y ausencia del 1. Caso narrativo: se refiere al el mismo tiempo de la narración. Son bién destaca la •metalepsis. (la narra-
autor deja paso a las grandes preocu- hecho de que siempre hay un mo- posibles muchas variaciones sobre el ción del paso de un plano narrativo a
paciones de Genene en los 70 y 80. mento o contexto enunciativo en el tema. Por ejemplo, puede haber una otro), la persona. (la diferencia entre
Entre ellas están: los análisis de la na- que tiene lugar la narración. El caso narración dentro de otra narración, el narrador que se refiere a sí mismo
rrativa [que culminan en Nouveau dis- narrativo es crucial para atribuir sig- como en la Odisea de Hornero. O, de como narrador y una narración en
cours da récit (1983)]; el estudio de b nificado o importancia a lo que ex- nuevo en una novela epistolar, una primera persona), el •héroe. (como
imaginación del lenguaje en illimolo- presa la voz narrativa. Aquí hay que carta anterior que cumplió su papel narrador y como narrado), las •fun-
giques (1976); el desarrollo de una recordar la teoría de Benveniste de en la marcha de la novela puede pa- ciones del narrador. (contar una his-
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GENETTE GENETTE

toria; facilitar la organización interna ponde al plano de la afirmación he- desde los inicios de la era moderna, la del comentario. El texto B no po-
del texto; garantizar la situación na- cha (énoncé), mientras que la narra- que se han visto influidos por el prin- dría existir sin el texto A, pero no
rrativa del narrador y el lector; asegu- ción corresponde al acto de afirmar cipio platónico de la •eponimia.. habla de él. Un ejemplo es el Ulises
rar el carácter afectivo, moral o inte- (énonciation). función de la eponimia —afirma Ge- de Joyce, que se relaciona claramen-
lectual de la narración; expresar una Al estudiar el discurso narrativo en nette— es dar significado a un nom- te con la Odisea de Hornero, Un re-
ideología), y el .receptor. (flan-ataire) Figures!!, Genette se refiere a la opo- bre que presuntamente no tiene nin- sultado evidente del estudio de Ge-
de la narración tal como está indica- sición entre diágesis y mimesis que guno, es decir, hallar en él uno o dos nette es que duda que algún texto
do en la propia narración. aparece en la República de Platón y nombres ocultos que estén hipotéti- sea verdaderamente la singularidad
Además de la •.,oz-, Generic defi- la Poética de Aristóteles. En concre- caliente dotados de significado. 5. Ese que con frecuencia presenta la histo-
ne y estudia también otros cuatro as- to, la diágesis aparece con frecuencia •ignificado. será inevitablemente una ria literaria.
pectos de la narración: en el estudio de la narración que forma de mimesis. Como mencionamos al principio,
hace Genette. Para los griegos, la diá- En Mimologiques, Genette estudia la oeuvre de Genette es, para bien
1. Orden: el orden de los hechos
gesis es el aspecto puramente narra- la capacidad de invención, voluntaria o para mal, un impulso de elaborar
en relación con el orden de la narra-
tivo de la ficción (una mimesis imper- e involuntaria, de quienes han es- una terminología sistemática y rigu-
ción. Un hecho puede ocurrir antes
fecta), que debe distinguirse de la peculado sobre el origen del lengua- rosa para teorizar la •literariedad de
del momento de la narración (analep-
mimesis, el aspecto imitativo o dra- je desde hace más de tres siglos, y la literatura.. Tenemos ante noso-
sis), o puede evocarse por adelanta-
mático. Hoy en día, la distinción en- que han supuesto, como Platón, tros, pues, un proyecto que intenta
do un hecho posterior (prolepsis), o
tre mimesis y diágesis se ha perdido, y con arreglo al principio de la epo- cosificar y, por tanto, hacer trascen-
puede existir un desacuerdo entre
en beneficio de la segunda. En las nimia, que existe una relación mi- dentes, todos los aspectos de la
ambos órdenes (anacronía).
2. Duración: el ritmo al que ocu- obras escritas por Genette a princi- mética entre el nombre y lo que se producción y la esencia del texto li-
"píos de los 70, la diágesis se refería nombra. terario. Pese a las protestas de Ge-
rren las cosas.
concretamente a la narración de los Palimpsests es quizá, por el rigor y nette de que también intenta hacer
3. Frecuencia: el grado de repeti-
hechos. En Sarrasine, Genette consi- el alcance de su incursión analítica, la justicia al misterio de la singularidad
ción en una narración.
dera la introducción al relato de la obra más importante de Genette. En del texto literario, resulta difícil,
4. Modo: el punto de vista, inclu-
historia de Sarrasine y La Zambinella ella clasifica y analiza numerosas for- muchas veces, no verse lastrado por
yendo la •distancia del narrador res-
»extradiagética.; es decir, no una ver- mas distintas en las que un texto se una terminología que parece pre-
pecto a Co que se está narrando.
dadera parte del relato de los hechos. refleja en otro. En el uso que Genette ocuparse, sobre todo, por no dejar
Hasta ahora nos hemos centrado No sólo es una distinción dudosa (lo hace del termino, el palimpsesto es nada al azar, es decir, no dejar nada
en aspectos de la teoría de la narra- extraordinario de Sarrasine es clara- una función; es literatura en segundo a la indefinición que constituye el
ción en Genette. Hay tres términos mente que se trata del relato de dos grado, una nranstextualidad• com- corazón de la literatura y, más en
que especifican los elementos esen- historias), sino que la importancia de puesta, en parte, de los siguientes general, el corazón de cualquier
ciales de todo acto narrativo: 1) una la noción de diágesis parece mínima aspectos: •ntertextualidad., incluyen- producto artístico.
historia (bistoire); 2) el discurso na- frente a la trilogía historia-narrativa- do la cita, el plagio y la alusión; •me-
rrativo (récii); Y 3) la narración (el narración. tatextualidad., de qué forma se agru-
acto de contar la historia). Genette En su obra Mimologiques, de mitad pa un texto en otro sin ser citado, NOTAS
observa: Como narración, el discur- de los 70, Genette se propone inter- como cuando Hegel evoca Le neveu
so narrativo vive a través de su rela- pretar la enigmática teoría de los de Rameau de Diderot en la Fenome- ' Gérard llenare, Figures III, París,
ción con la historia que relata; como nombres en el Crátilo de Platón. A di- nología de la mente; •architextuali- Seuil, Poétique, 1972, pág. 68.
discurso, vive a través de la narración ferencia de la mayoría de críticos e dad., tipos de discurso, modos de Gérard Genette, Figures II, París,
que lo ofrece» 4. Es decir que, ni si- intérpretes de Platón, Genette se enunciación, géneros literarios que Seuil. TEL, 1969, pág. 17.
quiera a un nivel general, existe sen- toma en serio el mimologismo de trascienden cada texto individual, 3 Véase Jacques Derrida, 4.a mytholo-
cillamente una historia relatada, sino aquél, es decir, la idea de que los pero a los que se refiere cada texto gie blanche-, Poétique, 5 (1971).
que hay también un tercer elemento nombres, de una forma esencial, imi- Genette, Figures 111, pág. 74.
concreto; e •hipertextualidack Esta
(el discurso narrativo) que, aunque tan aquello a lo que se refieren. Aun- Gérard Generre, Alimologiques: So-
última constituye el foco principal del yage en Crarylie, París, Seuil, Poétique,
no es separable de la historia o el que d enfoque estructuralista desta- estudio de Generic, y se define como
acto de relatarla, no es tampoco idén- ca el carácter convencional del 1976, pág. 25.
goda relación que reúne un texto B... Gérard Generic, Palimpsests: La
tica a ellos. Desde un punto de vista lenguaje, Genette emprende un largo con un texto anterior A... en el que litrérarure au second degrée, París, Seuil,
lingüístico, la narración (récit)corres- y detallado estudio sobre autores, se imbrica de una manera distinta a Points. 1982, pág. 13.
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JAKOBSON JAKOBSON

VÉASE TAMBIÉN EN ESTE LIBRO contextos específicos son lo que ratura, el folclore y la cultura en ge- und allgenzeine Latageseire (Lengua-
constituyen el sentido y el significa- neral. En 1915, Jakobson fundó el je infantil, afasia y universales fono-
Derrida, Greimas, Todorov do. Dentro de sus variados y prolífi- círculo lingüístico de Moscú y recibió lógicos), una obra pionera, la escribió
cos escritos (casi 500 artículos) sobre la influencia de Husserl, por lo que la en Suecia entre 1940 y 1941, justo
poética, fonología, lenguas y tradi- fenomenología de éste fue especial- antes de su partida hacia Nueva York.
PRINCIPALES OBRAS DE GENETTE ciones eslavas, adquisición del len- mente importante en sus reflexiones Aunque durante los años 50 fue vícti-
guaje, epistemología e historia de la sobre la relación entre la •parte• y el ma de los prejuicios del maccarthis-
Figures 7, París, Seuil, 'FEL, 1966. lingüística, Jakobson se esfuerza de- •todo› en el lenguaje y la cultura. La mo debido a su conexión con la Eu-
Figures II, París, Seuil, 'FEL, 1969. cididamente por elucidar 4os diferen- palabra poética reveló uno de los ropa oriental comunista, Jakobson
Figuras III (1972), Barcelona, Lumen, tes niveles de estructura lingüística. vínculos más claros en este sentido: acabó por obtener nombramientos en
1989, mediante la •obtención e identifica- la poesía es la que más se aproxima Harvard y el Massachusetts Institu-
Minzologiques: Voyage en Cratylie, París, ción consistente de las invariables re- a tener una estructura en la que la te of Technology, y permaneció en
Seuil, Poétique,1976. parte equivale al todo. América hasta su muerte en Boston,
Introduction d Parcbitexte, París, Senil, lacionales dentro de la multitud de
1979. variantes•'. Se impone sobre el lin- A finales de 1920, Jakobson había en 1982.
Palimpsestos: la literatura en segundo güista un enfoque estrictamente rela- dejado Moscú y había pasado a resi- Jakobson fue uno de los primeros
grado (1982), Madrid, Taurus, 1989. cional porque, en primer lugar, cada dir en Praga donde, a partir de 1926, lingüistas del siglo m( que examina-
Nouveau discurs du récit, París, Seull, constituyente de todo sistema lingüís- se convirtió en miembro influyente ron con seriedad la adquisición del
1983 (trad. esp. en preparación, Ma- tico se construye sobre la oposición del círculo lingüístico del mismo lenguaje y las formas en /as que pue-
drid. Cátedra, 1997). de dos elementos lógicos contradicto- nombre. Fue allí donde Jakobson de interrumpirse su funcionamiento,
Seuils, París, Seuil, Poétique, 1987, rios: la presencia de un atributo empezó a interesarse especialmente como, por ejemplo, la afasia. Tiene
Paratate, París, Maison des Sciences de (.marca.) en contraposición a su au- por las diferencias entre las estructu- una importancia esencial el énfasis
l'homme, 1989. sencia (.rio marca.) 2; y, en segundo ras fónicas y prosódicas en ruso y que concedía a dos aspectos básicos
Ficción y dicción, Barcelona, Lumen,
lugar, que el •juego de invariables y otras lenguas eslavas. Bajo los auspi- de la estructura del lenguaje, repre-
1993. sentados por las figuras retóricas de
variables demuestra ser una propie- cios del círculo de Praga, Jakobson
dad esencial e íntima del lenguaje en publicó en 1929 Remarques sur l'évo- la metáfora (semejanza) y la metoni-
OTRAS LECTURAS cada uno de sus niveles. 5. lution phonologique du nisse compa- mia (contigüidad). La metonimia. afir-
Aquí podemos ver hasta qué pun- ré° á celle des mitres langues s'aves ma Jakobson, no debe confundirse
MOSHER, Harold, •Che structuralism of to influyó Jakobson en la antropolo- (Observaciones sobre la evolución con la sinécdoque que, crimo aquélla,
G. Genette., Poetics, 5, 1, 1976. gía de Lévi-Strauss. El interés de este fonológica del ruso en comparación se define a veces como la parte que
Smms, Barban H., •‘Tarrative versions. último por el lenguaje es inseparable con otras lenguas eslavas), representa el todo. Sin embargo, con
narrative theories•, Critica: Inquity, de su esfuerzo para aislar las oposi- En los años 30, Jakobson colaboró la sinécdoque, hay una relación inter-
otoño de 1980, págs. 213-236. ciones entre •marcado y •o marca- con su amigo Nikolái Trubetzkoy en na de la parte respecto al todo (la
do. y analizar la sociedad como rela- la investigación sobre el modelo so- vela por el barco), mientras que, con
ción entre un modelo .invariable. y la noro del lenguaje. Trubetzkoy, segui- la metonimia, la relación es externa
historia .variable.. Dicha influencia se dor de Saussuré, guió a Jakobson ha- (la pluma por el escritor). Entender
Roznan Jakobson intensificó, sin duda, por la experien- cia la idea de que los sonidos en el cómo afectan diversas formas de afa-
cia común de enseñar con Lévi- lenguaje funcionan de manera dife- sia a la función del lenguaje es enten-
Roman Jakobson nació en Moscú Strauss en Nueva York durante la Se- rencial: no poseen significado intrín- der cómo se produce la interrupción
en 1896. Se le considera, de manera gunda Guerra Mundial, en la Nueva seco. Con ello preparó el camino de la facultad de selección y sustitu-
general, uno de los principales lin- Escuela de Investigaciones Sociales para que Jakobson elaborase su teo- ción —el polo metafórico— o de
güistas del siglo ICC y un representan- de la Universidad de Columbia. ría del •rasgo distintivo., como vere- combinación y contextualización —el
te importante del enfoque estructura- En 1914 Jakobson entró a formar mos más adelante. polo metonímico. El primero implica
lista del lenguaje, sobre todo por su parte del claustro de historia y filolo- A finales de los 30, con el ascenso una incapacidad en el plano metalin-
énfasis en considerar que el modelo gía en la Universidad de Moscú, y del nazismo y la perspectiva de la güístico; el segundo, un problema
sonoro del lenguaje (su primera y empezó a trabajar en la sección lin- guerra, Jakobson fue a Suecia y Dina- con el mantenimiento de la jerarquía
constante área de investigación lin- güística del Departamento de lenguas marca. En Copenhague colaboró con de unidades lingüísticas. En el prime-
güística) es fundamentalmente racio- eslavas y ruso. El estudio del lengua- Louis Hjelmslev y el círculo lingüísti- ro se pierde la relación de semejanza,
nal. Las relaciones entre sonidos en je sería la clave para entender la lite- co. Su obra Kinderspracbe, Apbasie en el segundo, la de contigüidad.

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JAKOBSON IAKOBSON

Aunque no inventó el término, el modo que el lenguaje seria la interac- En resumen, lo que interesaba a rrentes que se utilizan en un lenguaje
-cleictico. (shifter) es otro aspecto del ción constante entre la langue y la pkobson y sus colegas en /a época determinado para distinguir palabras
lenguaje que desarrolló Jakobson, y pero/°. no era la poesía, sino la función poé- de significado clistinto.K. Como esta
está estrechamente vinculado a la ca- Debido a esta doble estructura, tica —o poeticklacl— contenida en la noción de fonema sigue centrándose
pacidad de contextualización. El deíc- Jakobson sugirió que el uso de deíc- diversidad de formas escritas y habla- en las cualidades intrínsecas de/ ele-
tico opera en los pronombres perso- ticos, lejos de ser más •primitivo: que das. La •poeticidad. se convierte en mento lingüístico —aunque apunta
nales (yo, tú, etc.) y demostrativos el aspecto denotativo y descriptivo una parte necesaria del estudio de/ hacia el aspecto diferencial—, Jakob-
como .este. y •ese., .aquí. y •allí.. Du- del lenguaje, era una de las últimas lenguaje cuando se comprende que son empezó a usar el término •asgo
rante la adquisición del lenguaje, el capacidades que el niño domina en el lenguaje y realidad —o palabras y co- distintivo., presentado por prime-
uso de los deícticos —términos apli- proceso de adquisición del lenguaje. sas, signo y referente— no coinciden: ra vez en la obra de los lingüistas
cables solamente a un contexto con- En la afasia, esta capacidad es la pri- en pocas palabras, que el significado Bloomfield y Sapir. Los rasgos distin-
creto, sea el que sea— es una de las mera que se pierde. Desde una pers- en el lenguaje no está más que míni- tivos son 'las unidades más sencillas
últimas capacidades que aprende el pectiva ligeramente distinta, podría mamente asociado a la capacidad de de discriminación del sentido, tales
• niño. Los deícticos están unidos espe- decirse que el deíctico es una catego- referencia. Es importante el hecho de como la sonoridad, la nasalidad,
cíficamente a la función enunciativa ría vacía, algo así como el significan- que Jakobson afirme después que etc.•'. Estas .unidades de discrimina-
del lenguaje: su significado no puede te flotante en la obra de Mauss tal esta antinomia fundamental entre len- ción del sentido-, que sólo se estable-
captarse independientemente del como lo interpreta Lévi-Strauss. Me- guaje y realidad significa que •sin cen en función de la diferencia, se
contexto en el que se usan. Constitu- diante la deixis, el código puede contradicción no hay movilidad de vuelven esenciales en la elaboración
yen lo que Jakobson denomina una adaptarse a contextos muy variados, conceptos, no hay movilidad de sig- del significado. Antes del trabajo de
'doble estructura., que quiere decir por lo que permite la elaboración de nos, y la relación entre concepto y Jakobson en este campo, se pensaba
que su significado, al mismo tiempo, una serie relativamente heterogé- signo se automatiza. La actividad se que los fonemas eran semejantes a
invoca el código (yo• es el pronom- nea de mensajes y se convierte en el interrumpe y la conciencia de la rea- •átomos• de sonido que no requerían
bre de primera persona) y el mensaje vínculo más o menos directo del len- lidad se desvanece.'. 'opuestos-. Un análisis posterior reve-
(especifica el habbnte concreto). Los guaje con la historia. Aunque para Jakobson, como para ló que, si bien los fonemas en sí mis-
deícticos permiten que cada persona Éste seria, al menos, el tipo de ar- otros muchos autores, la poesía se mos no requieren opuestos, un rasgo
utilice el lenguaje de forma indivi- gumento propuesto por Jakobson inclina hacia el polo metafórico del distintivo siempre lo necesita. De
dual; constituyen el lugar en el que cuando se le acusa de ignorar las di- esfuerzo lingüístico, fue el modelo modo que la diferencia entre fone-
la historia entra en la lengua. En otras mensiones histórica y socia/ del len- sonoro de la poesía —y no el papel mas, aparente mínima, pero en reali-
palabras, con el fin de entender una guaje, la poesía y el arte, y de apoyar de la metáfora—, evidente por prime- dad crítica, constituye la distinción de
afirmación como L'état, c'est moi, es el principio de l'art pour l'art. En de- ra vez en las diferencias entre los mo- significados entre boor (patán) y poor
preciso explicar el contexto y la iden- fensa propia, y en defensa de los for- delos sonoros de las poesías checa y (pobre). Lo que distingue tboor- de
tidad del hablante (es decir, hay que malistas rusos (con quienes trabajó rusa, lo que empezó a estimular sus .poor. es la diferencia entre /b/
hacer referencia al mensaje), así durante los años 20), Jakobson afirmó primeras investigaciones en este cam- es semisonora y /p/ es sorda. En
como el significado de las palabras en los años 30 que ni él ni los demás po. Jakobson descubrió que la dife- este ejemplo podernos ver un rasgo
empleadas en relación con el código. formalistas rusos habían -proclamado rencia entre la poesía checa y la rusa distintivo constituido por la diferencia
Como demuestra Jakobsonl, la situa- jamás la autosuficiencia del arte- 5 . residía en el ritmo. Desarrolló su •fo- entre rasgos sordos y sonoros. Los
ción puede ser más conipleja, cuan- Y continuaba diciendo que nología- a partir del estudio del ritmo restantes fonemas de cada palabra
do el mensaje se refiere al código poético. En especial, al centrarse en pasan a ser redundantes. Con las pa-
(."yo" es un pronombre.) y el código Lo que hemos intentado demostrar el vínculo entre sonido y significado ! labras tome (tomo) y dome (cúpula),
se refiere al mensaje (•"yo" significa es que el arre es una parre integrante Jakobson llegó a la conclusión de que el rasgo distintivo es la /t/ aspirada
yo, quien habla.). Además, el código de la estructura social, un demento entre ambos se encontraba la diferen- frente a la /d/ no aspirada. En resu-
puede referirse al código (."jerry" es que interacrúa con todos los demás y cia, lo que él pasó a denominar el men, el hecho de que la diferencia
el nombre del chico llamado Jerry-) y es transformable, puesto que tanto el -rasgo distintivo.. O más bien, dado entre /p/ y /b/, o entre /t/ y /d/, y
el mensaje puede referirse al mensa- terreno del arce como su relación con
os demás constituyentes de la estruc- que el lenguaje es, a juicio de Jakob- otros fonemas que presentan una am-
je (Dijo: -No voy a venir.). Más en son, esencialmente un sistema de sig- bigüedad potencial semejante, apa-
general, los deícticos serían el víncu- tura social están en flujo dialéctico
constante. Lo que defendemos no es nificados, el habla no está compuesta rezcan dentro de un texto en estrecha
lo entre la bogue (estructura o códi- la separación del arce, sino b autono- de sonidos, sino de fonemas: -Una se- cercanía, es menos importante que el
go) y la parole (acto de habla), de mía de la función estética'. rie de propiedades sonoras concu- hecho de que existan dentro del uni-
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JAKOBSON JAKOBSON

verso lingüístico, y ese significado nantes. Fue asimismo uno de los pri- receptor hipotético, sino que es un /: Pbonological Studies, ed. de Stephen
depende de que la discriminación hecho fundamentalmente Social; es Rucly. La Haya, París, Montan, 1971,
meros en destacar la importancia del 636.
decir, sólo puede entenderse adecua- Pág.
entre ellos sea verdaderamente clara. ritmo en la poesía de los rusos 9 Roman jakobson y Krysryna Pomor-
Así, cuando un hablante de inglés Mayakovski y Khlebnikov. Pocos lin- damente como sistema, que es la
ska, Dialogues, Cambridge, Cambddge
americano se enfrenta a dos nombres güistas, antes o después de él, han condicion previa para la individua- University Press, 1983, pág. 25.
como Bitter y Bidderw, la diferencia analizado la poesía con tal grado de lidad. l" Véase Jakobson, Selected Writings.
entre /t/ y /d/ se vuelve crucial a la explicación de las estructuras en el Además, aunque Jakobson resultó /, pág. 467 .
hora de oírlos correctamente, mien- discurso poético. En este aspecto, fundamental a la hora de llamar la 'I jakobson y Pomorska, Dialogues,
tras que, cuando aparecen aislados, jakobson reunió las dimensiones .fite- atención sobre el ritmo y el sonido de pág. 87.
ambos sonidos se pronuncian fre- la poesía, no vio que dichos aspectos 11 Jakobson, Selected Writings. I, pá-
rada. y •lingüística globab a través de
cuentemente de la misma forma. una noción de estructura que ligaba fueran, en absoluto, un desafío a la gina 423.
13 Iba, pág. 51.
En relación con la teoría de los ras- una con otra. En una conferencia pro- comunicabilidad y significación idea-
gos distintivos de jakobson resulta nunciada en 1958, Jakobson afirmaba: les de la expresión lingüística. El rit-
más controvertida su afirmación de mo reforzó, incluso, su concepto de
Creo que se ha tornado, errónea- lenguaje corno comunicación. En VÉASE TAMBIÉN EN ESTE LIBRO
que en todas las lenguas están pre-
sentes los mismos rasgos, y que cons- mente, b incompetencia poética de comparación con autores como Bar-
ciertos lingüistas llenos de prejuicios thes y Kristeva, que destacan respec- Barthes, Hjelmslev, Kristeva, Lévi-
tituyen una categoría de invariables por una insuficiencia de la ciencia Strauss, Saussure,
lingüísticas: .La lista de rasgos distin- tivamente la polisemia y la semiótica,
, lingüística. Sin embargo, todos noso- y para quienes la noción de lenguaje
tivos que existen en las lenguas del tros nos damos claramente cuenta
mundo es enormemente limitada, y la de que un lingüista que permanezca como medio de comunicación ex- PRINCIPALES OBRAS DE JAKOBSON
coexistencia de rasgos dentro de una sordo a la función poética del len- efusivamente resulta problemática,
misma lengua está restringida por las guaje, y un estudioso de la literatura JakobSOn parece estar, con frecuen- Selected IVritings, La Haya, París,
leyes de inferencia.". A partir de que sea indiferente a los problemas cia, enfrentado con su psicologismo. Mouton, vols. I-VI, ed. de Stephen
aquí, los rasgos distintivos se convier- lingüísticos y no esté familiarizado Éste contradice, en ocasiones, el es- Rudy:
ten en una de las invariables del sis- con sus métodos, son anacronismos fuerzo de Jakobson por analizar fin- I. Pbonological Studies, 1971.
igualmente flagrantes". güísticamente los fenómenos lingüís- II, 1Vord and Language, 1971.
tema de comunicación.
Los sonidos del lenguaje también No obstante, pese a todas sus in- ticos. III. The Poetry ofGrantnzar and the
Grammar of Poeny,1980.
constituyen la base para la teoría de novaciones, Jakobson siguió encerra- Slavic Epic Studies,1966.
la poética de Jakobson. Pero, una vez do, en cierto modo, dentro del marco y. On Verse, Its Masters and Expío-
NOTAS
más, el término .sonido resulta equí- fenomenológico del lenguaje que le rers, 1978.
voco cuando se examina el enfoque había influido en sus primeros años VI. Early Slavic Paths and Cross-
' Roman Jakobson, Selected Writings.
de nuestro autor. Como el sonido es de profesión. Corno consecuencia, VI: Early S'avíe Paths and Crossroads
roads, Pan One and Pan Two,
una entidad puramente tisica, Jakob- nunca dejó de considerar que el mo- ed. de Stephen Rudy, La Haya, París, 1985.
son prefiere comparar el habla a la delo más pertinente de lenguaje era Six Lectures on Sound and Meaning,
Mouton, 1985, pág. 85. Cambridge, Mass., MIT Press, 1978.
música, que •impone una escala gra- la transmisión de un mensaje entre
duada a la materia sonora., mientras un emisor y un receptor. Aunque 3 Ibid. fe Sound Sbape of Language (con Lin-
que .el lenguaje le impone la escala Roman Jakobson, •Shifters, verbal da Waugh), Bloomington, Indiana,
destacó en repetidas ocasiones la ne- Indiana Universiry Press, 1979.
dicotómica que no es más que un co- cesidad de tener en consideración el categories and the Russian Verb., en Se-
lected IVntings. II: Word and Langua,ge, fe Framework of Language Ann Arbor,
rolado del papel puramente diferen- papel (activo) del emisor en el circui- Michigan, Michigan Slavic Publica-
cial de las entidades fonémicas.". to de la comunicación, además del ed. de Stephen Rudy, La Haya, París,
Mouton, 1971, págs. 130-131. tions, 1980.
En su estudio de la práctica poética, del receptor (pasivo), sigue siendo Roman Jakobson, -What Ls poetry?.,
Jakobson fue un pionero al indicar de cierto que emisor y receptor —enti- en SelectedWrittngs. EP fe Poetly ofGra-
qué modo figuraban en la producción dades psicológicas, más que lingüís- m'Izar and the Granzmar of Poetry, ed. de OTRAS LECTURAS
de poesía las oposiciones de todo tipo ticas— constituyen los elementos in- Stephen Rudy, La Haya, París, Maucón,
(oposiciones fonémicas, la oposición dispensables del sistema. El principal 1980, pág. 749. HOLENSTEIN. Omar, Ronzan Jakobson's
entre sonido y visión, las 'oposiciones problema de este modelo es que no !bid., págs. 749-750. Approach lo Language,Bloomington,
de tono y ritmo, etc.), pero especial- reconoce que el lenguaje no es pro- 7 ¡bid, pág. 750. Indiana, Indiana University Press,
mente las oposiciones entre conso- piedad de un emisor hipotético y un " Roman Jakobson, Selected Writings. 1974.

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LACAN
LACAN

STEINER, Peter, Russian Fornzalism: A do a cabo. corno un ventrílocuo, la


Metapoolics, Ithaca, Nueva York, Cor- reaparición del espejo secreto del M- subversivo y revolucionario del tra- formación del yo (el centro de la con-
nell University Press, 1984. consciente, el síntoma de un domi- bajo de Freud, afirmó Lacan en los ciencia). El lenguaje y los elementos
WAUGH, Linda, Roman fakobso n's Scien- nio siempre al borde del colapso. años 50, era la opinión de que el yo simbólicos (es decir, culturales) se
ce of Language, Bloomington, India- Brujo sin magia, guru sin hipnosis, tenía una importancia fundamental hacen fundamentales, mientras que
na, P. de Ridder, 1976. profeta sin dios, fascinaba a su pú- para comprender la conducta huma- antes se suponía que la base de la
blico con un lenguaje admirable, y
na. La teoría del yo idéntico a sí mis- subjetividad humana la componían
revivía un siglo de ilustración en los
mo, homogéneo y fuente privilegiada los factores biológicos (o sea, natura-
límites del deseo'.
de identidad individual, no sólo do- les). Como afirma Lacan en el Discur-
Jacques Lacan minó en la psicología norteamericana
La retórica del seminario de Lacan so de Roma de 1953: •El hombre ha-
llevó a la práctica el principio, formu- del yo bajo el influjo de Heinze Hart- bla... pero es porque el símbolo le ha
Aunque Jacques Lacan iba a cam-
lado por primera vez en los años 50, mann, sino que se extendió a todas hecho hombre- 1 .
biar toda la orientación del psicoaná-
de que el lenguaje posee la capaci- las disciplinas de las ciencias sociales La teoría saussuriana de la relación
lisis en Francia y otros lugares, su pri-
dad de decir algo distinto a lo que y las humanidades. El periodo inme- arbitraria entre significante y signifi-
mera enseñanza y formación fue muy diatamente posterior a la guerra (so-
dice. En otras palabras, el lenguaje cado, unida a la noción de lenguaje
convencional. Nacido en París dentro
habla a través de los seres humanos bre todo en Estados Unidos y otros como un sistema de diferencias, hizo
de una familia católica burguesa,
tanto como ellos hablan a través países anglófonos) fue la era del hu- que Lacan afirmara, a principios de
en 1901, Lacan estudió —como era
de él. manismo y la creencia de que la in- los 60, que d sujeto es el sujeto del
costumbre— para obtener el título de
El esfuerzo de reinterpretar a tención humana, la comprensión y la significante. Como el significante está
médico en la Sorbona antes de pro-
Freud —volver a Freud», como pre- conciencia eran fundamentales. Rei- siempre separado del significado
seguir su formación en psiquiatría en
fería decir Lacan— se inició posible- naba la certeza de que el yo —para (como en la barra del algoritmo de
los años 20, con el célebre psiquiatra
mente en los años 30, inspirado en la bien o para mal— ocupaba el centro Saussure) y tiene una autonomía real,
Gaétan de Clérambault. De él apren-
interpretación que Alexandre Kojéve de la vida psíquica de las personas. ningún significante se apoya nunca,
dió Lacan el arte de la observación;
hizo de Hegel. Desde luego, en los Con el énfasis estructural ista en el después de todo, en ningún significa-
de los surrealistas, aprendió d arte
textos escritos por Lacan en os 50 es lenguaje como sistema de diferencias do. El ámbito del significante es d
del barroquismo en la presentación.
evidente un vocabulario hegeliano, sin términos positivos, Lacan destacó ámbito de orden simbólico, el orden
Lo evocan con gran belleza las pala-
así como una sensibilidad hegeliana la importancia del lenguaje en la obra de los signos, símbolos, significados,
bras de una historiadora del psicoa-
ante los matices intersubjetivos de la de Freud. Pero, ya antes de que se representaciones e imágenes de todo
nálisis en Francia, Elisabeth Roudi-
dialéctica del amo y d esclavo de conociera de forma general el méto- tipo. En este orden se forma el indi-
nesco, al describir la actuación de
HegeP. Lo más destacable, en este do estructuralista, Lacan había desa- viduo como sujeto.
Lacan en d seminario que dirigía:
caso, es el papel del Otro (con rrollado, en 1936, la teoría de la •fase El lenguaje es también crucial en la
vestía de forma semejante a su sin- O mayúscula, para demostrar que no del espejo.'. La fase del espejo se re- sesión psicoanalítica, donde se anima
taxis barroca. Poco después de la es sólo la otra persona) como algo fiere a la aparición, entre los seis y los al analizando a decir todo lo que le
primera separación se trasladó al an- fundamental en la articulación del dieciocho meses de edad, de la capa- viene a la mente —sin excepción—,
fiteatro de Sainte-Anne.., Allí, duran- cidad del niño (enfans = sin habla), porque es fundamental para la cons-
deseo humano, Dado que se basa en
te un periodo de 10 años, siguió antes de poder hablar, antes de con- titución del recuerdo. Ésa es la razón
la pérdida del objeto (la madre, en el
trabajando con una voz cambiante, trolar sus habilidades motoras, para
primer caso), el deseo no confirma al de que los seres humanos se vean
alternativamente débil y estruendo- reconocer su propia imagen en el es-
sujeto en su identidad, sino que lo inevitablemente atravesados por el
sa, bordada de suspiros y vacilacio-
pone en tela de juicio: el deseo, en pejo. Este acto de reconocimiento no orden simbólico.
nes. Escribía por adelantado lo que
iba a decir y luego, en presencia de realidad, destaca una división en el es evidente; el niño tiene que ver que Pero el lenguaje no es sólo el por-
su público, improvisaba como un sujeto. la imagen es, al mismo tiempo, él tador de ideas e información; tampo-
actor de la Royal Shakespeare Com- Para reelaborar la teoría de la sub- mismo (su reflejo) y no él (sólo una co es sencillamente un medio de co-
pany que hubiera tenido a Greta jetividad y la sexualidad derivadas de imagen reflejada). La imagen no es municación. Lacan afirma que lo que
Garbo de preparadora de dicción y la obra freudiana, Lacan releyó a idéntica al sujeto infantil, y convertir- hace que la comunicación sea defec-
a Arturo Toscanini como guía espiri- se en un sujeto humano (es decir, un tuosa también es importante. Los
Freud con el fin de aclarar y reforzar
tual. Lacan sonaba a falso porque ser social) significa aprender este he-
. toda una serie de conceptos, entre
equívocos, las confusiones, las reso-
decía b verdad, corno si, a través del
ellos el del inconsciente. Lo que más cho. La iniciación del niño al lengua- nancias poéticas y toda una serie de
rigor de una voz perpetuamente a
había impedido conocer el carácter je depende por completo de dicho rasgos (como deslices verbales, 'dis-
punto de romperse, estuviera llevan-
reconocimiento. También depende la tracción, olvido de nombres, malas
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97
LACAN LACAN

interpretaciones, etc., características parencia de lo simbólico; no recono- ámbito de lo real, mientras que el Para numerosas autoras feministas,
analizadas en La psicopatología de la ce la falta de realidad en él. Lo imagi- padre evoca lo simbólico y el niño el principal resultado de la antropolo-
vida cotidiana, de Freud), aparecen nario no es simplemente el lugar en puede captar lo imaginario desde su gía freudiana de Lacan es un sistema
también en y a través del lenguaje. el que se producen las imágenes o sitio. En un plano más preciso y con- patriarcal que valora la virilidad y, por
Éstos son los rasgos mediante los donde el sujeto se entrega a los pla- creto, la identidad del niño es el re- tanto, a la mayoría de los hombres.
cuales pueden apreciarse los efectos ceres de la imaginación. Lo imagina- sultado de su adaptación a la diferen- Desde luego, Lacan no ha hecho más
del inconsciente. Son rasgos que per- rio es el lugar donde el sujeto confun- cia sexual. Lo primero, en este último que reforzar esta opinión a ojos de
• mitieron que Lacan, en un aforismo de (méconnait) el carácter de lo proceso, es el reconocimiento por muchas mujeres, con sus frases provo-
famoso, uniera el lenguaje y el simbólico. Es decir, lo imaginario es parte del niño de que su madre no cadoras como •la femme n'existe pas
inconsciente: •El inconsciente se es- el ámbito de la ilusión, pero de una tiene un pene; ésa es, para ella, la Ila mujer no existe]. y .la femme n'est
tructura como un lenguaje.. Es el in- +ilusión necesaria•, como decía Dur- marca imborrable de la diferencia. pas toute [la mujer no está completa]..
consciente, pues, el que perturba el kheim de la religión. Lacan muestra que el pene tiene un La primera afirmación pretende indicar
discurso comunicativo, no por azar, Una formulación de lo real que carácter irreductiblemente simbólico, que no existe un estereotipo que cap-
sino con arreglo a una regularidad es- ofrece Lacan es que está siempre •en un carácter que indica hablando sólo te la esencia femenina; en realidad, no
tructural determinada. su sitio.. Lo real está siempre en su del falo. El pene es real, pero el falo existe la esencia de la feminidad.
Basándose en la obra lingüística de sitio porque sólo lo que falta (lo au- (simbólico) es el significante; de .he- Y ésa es h razón de que la sexualidad
Roman Jakobson, Lacan asoció las sente) de su sitio puede simbolizarse cho, el falo, debido a su papel como sea siempre un juego de máscaras y
nociones freudianas de •condensa- y, por tanto, formalizarse. Lo simbóli- representación de lo que está ausen- disfraces. De modo que afirmar que -la
don. y •desplazamiento. a los con- co/sustituye a lo que falta de su sitio. te (lo que falta), se convierte en el mujer. no existe es decir que la dife-
ceptos de .metáfora y .metonimia. de El símbolo, palabra, etc., implica significante del significado. rencia sexual no puede contenerse en
Jakobson. De modo que la metáfora siempre la ausencia del objeto o re- Esta experiencia no se deriva sim- ninguna forma simbólica esencial, no
se define como la .sustitución de una ferente. Lacan desarrolla este enfoque plemente del conocimiento (por par- puede representarse. La segunda de-
palabra por otra•, mientras que la de lo real en su ensayo sobre el rela- te del niño) de que la madre carece claración se basa en la idea de que la
metonimia es la •conexión entre una to de Poe •La carta robada>. • realmente de pene, sino también de mujer no tiene pene, por lo que for-
palabra y otra. (contigüidad). Este Sin embargo, en el plano de la for- la madre como intuición de la caren- ma parte de la aparición de lo simbó-
enfoque le permite a Lacan equiparar mación del sujeto individual como un da potencial del propio niño en la lico; el pene se convierte en el falo,
la •presencia. del inconsciente en el ser sexuado, lo que falta es el falo de castración. Por consiguiente, lo sim- que se convierte en el significante de
lenguaje con los efectos creados por la madre. La historia es que el acceso bólico, a través del papel del falo la ausencia. Antes de apresurarse a
la metáfora y la metonimia, del mis- del niño al lenguaje es paralelo a su. como símbolo par excellence, enfren- decir que esta imagen de la mujer es
mo modo que Freud, en La inter- separación de la madre. Antes de la ta al sujeto con su propia vulnerabili- negativa (que beneficia a los hom-
pretación de los sueños, relaciona la separación existe una plenitud basa- dad y mortalidad. bres), es necesario explicar que •el
evidencia del inconsciente en el en- da en la unión de madre e hijo. Des- En el sentido más general, lo sim- hombre. está tan poco dispuesto
sueño con la actuación de la conden- pués de ella, la madre se convierte en bólico es lo que otorga al mundo su como muchas mujeres a aceptar esta
sación y el desplazamiento. el primer objeto del niño, es decir, su significado y su ley, si no su orden. figura de la mujer castrada. Debemos
Si el lenguaje, como parte privile- primera experiencia de falta o ausen- En los años 50, Lacan hablaba de que tener en cuenta h resistencia a la •rea-
giada del orden simbólico, es esencial cia. Por otro lado, para la madre, el la ley se encarnaba en el •nombre del lidad. del mito de la castración que
para la teoría psicoanalitica de Lacan, niño sustituye al falo que no tiene: se padre.: sería, pues, el orden simbóli- aparece constantemente en la vida so-
no es más que un elemento en la tri- siente satisfecha gracias a su estrecha co ejemplificado en el •nombre del cial. Dicha resistencia no está señala-
logía de órdenes que constituyen el relación con el hijo. Pero, si no hay padre. que constituye la sociedad. da en palabras o imágenes, sino pre-
sujeto en el psicoanálisis. Los otros separación, se inhibe la formación del O, más bien, es el nombre del padre cisamente en el rechazo a intentar
dos órdenes son el imaginario y el lenguaje. El padre es el elemento que —de acuerdo con la línea de Freud simbolizar la sensación de pérdida
real. Aunque el inconsciente descen- suele interferir en la relación entre en Tótem y tabú— por lo que los hi- creada por h castración. Con todo, la
tra el sujeto porque introduce la divi- madre e hijo, de modo que, al identi- jos renuncian a su derecho de poseer pregunta que aún debe plantearse
sión, en el plano de lo imaginario (es ficarse con él, el niño puede forjarse a las mujeres de aquél. Para Lévi- —aunque no podemos responder
decir, en el discurso de la vida coti- su propia identidad. En esta situación Strauss, cuya obra interesaba enorme- aquí— es si esta .historia• que cuenta
diana) no se reconocen los efectos —cuyo carácter metafórico no debe mente a Lacan en la época, ése es el el psicoanalista, en parte para dar co-
del inconsciente. En el plano de lo olvidarse—, el lugar de la madre (y el momento de institución de la ley con- herencia al psicoanálisis, acaba signi-
imaginario, el sujeto cree en la trans- lugar de lo femenino) tiende a ser el tra el incesto. ficando opresión para las mujeres

98 99
LACAN LEVI-STRAUSS

como seres sociales. Otra pregunta años 50. A juicio de Roudinesco, .el l'etbique de la psycbanaly- refugió en Estados Unidos, donde
podría ser: ¿Es necesario elegir entre recurso de Lacan a la formalización y se, Paris, Seuil, 1986. enseñó entre 1941 y 1945 en la Nue-
una figura simbólica falsa de la mujer las matemáticas fue un último intento Livre X1 ,71, L'envers de la psycbanaly- va Escuela de Investigaciones Socia-
de salvar a la psicología de sus raíces se, París. Seuil, 1991.
(corno en la madre fálica) y una ver- ¿Jure Mí Le transfer:, París, Seuil,
les de Nueva York. En 1941 conoció
dad inexpresable (la mujer como tal)? hipnóticas, pero también, en el otro a Roman Jakisbson, que sería una in-
1991.
Otra dimensión de la teoría de La- extremo, de la escolarización, en una El seminario, VV. vols., Barcelona, fluencia formativa en la orientación
can, especialmente obvia en los semi- sociedad en la que la escuela tiende Paidós, 1981. lingüística y estructuralista dé su an-
narios de la época más tardía, corno a reemplazar a la iglesia»'. tropología durante la posguerra.
Encore, es el intento de dar al psicoa- Lévi-Strauss se distanció, no sólo
nálisis una base matemática. Así, si OTRAS LECTURAS de la filosofía francesa del momento,
un significante sólo asume un signifi- NOTAS sino también de las interpretaciones
cado en relación con otros significan- FLOWER MAcCmn4su.,.fuliet, Figuring ortodoxas de Durkheim, que destaca-
tes, puede simbolizarse con una ' Elisabeth Roudinesco, Jacques ba- Criticism and Me Cultural Un- ban los aspectos positivistas y evolu-
En otras palabras, un significante can and Co. A History of Psycboanalysis consciozts, Londres y Sydney, Croom cionistas de su pensamiento. No obs-
puro sería una letra en lenguaje ma- in France, 1925-1985, trad. de Jeffrey Helm, 1986. tante, fue una reinterpretación de la
temático, en la medida en que ese Mehlman, Chicago, University of Chica- MULLER, John P. y RICHARDSON, WiIham J., obra de Mauss, discípulo de Dur-
go Press, 1990, págs. 295-296. Lacan: A Reader's Cuide to Ecrits,
significante es puramente formal. La- Véase, en particular. Jacques Lacan, kheim, lo que cumplió una función
can, fundándose en la obra de Jac- Nueva York, International Universi- importante en b definición de la pri-
(The subversion of the subject and the ties Press, 1982.
ques-Alain II/filler, afirma que el in- dialectic of desire in the Freudian un- RAGLAND-SIR.LIVAN, Ellie,
Jacques Cucan mera trayectoria intelectual de nues-
consciente es también un significante conscious., en Ecrits• A Selection, trad. and the PbilosopbyofPsychoanalysis, tro autor.
puro de este tipo y, por ello, puede de Alan Sheridan, Londres, Tavistock, Urbana y Chicago, Universiry of Illi- En su clásica obra sobre el vínculo
adoptar cualquier significado; es de- 1977, págs. 294-324. nois Press, 1986. entre parentesco e intercambio Las

cir, está totalmente abierto al contex- 5 Véase Jacques Lacan, •Che mirror SCHNEIDERMAN, Stuart, Jacques Lacan: la estructuras elementales del pa ren testo
to en el que se halla. Éste es el senti- stage as formative of the function of the muerte de un héroe intelectual, Barce- (1949)—, Lévi-Strauss describe la si-
do que Lacan da a la carta en su I., en Ecrits: A Selection, págs. 1 7.
-
lona, Gedisa, 1986. guiente costumbre. En los restauran-
Irican, Écrits: A Selection, pág. 65,
lectura del relato CDHO de Edgar Allan 5 Véase Jacques Lacan, •Seminar on
tes baratos del sur de Francia, sobre
Poe -La carta robada-. La carta (epís- •Che Purloined Letter-, trad. de Je- todo en las regiones de viñedos, una
tola) robada asume un significado se- ffrey Mehlman en Yale Frencb Studies comida suele incluir normalmente
gún esté en posesión del rey, la reina (Erencb Freud), 48 (1972), págs. 38 72.
- Claude Lévi - Strauss una botella pequeña de vino. La cali-
o el ministro que la ha robado. Dado Roudinesco, Jacques Lacan and Co., dad y cantidad de vino para cada co-
que el lector desconoce el contenido pág. 561. Claude Lévi-Strauss nació en una mensal es la misma: un vaso de la
de la carta —porque no tiene un con- familia judía belga en 1908. Sus calidad inferior. En lugar de servir
tenido esencial—, ésta empieza a pa- padres eran artistas, de modo que, vino en su propio vaso, cada uno ser-
recerse a la letra como soporte mate- VÉASE TAMBIÉN EN ESTE LIBRO mientras aprendía a leer y escribir, el vid al vecino: la cantidad de vino si-
rial del lenguaje: una letra del futuro antropólogo tenía un lápiz D gue siendo la misma'. Este intercam-
alfabeto. En este sentido, el incons- Freud, Irigaray, Jakobson, Kristeva, Levi- un pincel en la mano. bio de vino se convierte en una
ciente se convierte en una forma de Strauss, Saussure. Aunque terminó su agrégation forma de establecer contacto social.
escritura exterior a todo objeto natu- en la Sorbona a principios de los Aún más. En microcosmos se revela
ral. Como fórmula matemática, tam- años 30, el deseo de escapar de las el vínculo entre el intercambio y el
bién puede enseñarse. Porque el in- PRINCIPALES OBRAS DE LACAN ortodoxias filosóficas entonces en vi- -hecho social total., puesto que lo
consciente inexpresable es 'ahora el gor en París (neokantismo, bergsonis- importante no es lo que se intercam-
objeto = x. Durante los años 60 y pri- Écrits, París, Seuil, 1966. mo, fenomenología y, más adelante, bia sino el hecho del intercambio en
Psicoancilisis, radiofonía y televisión
meros 70, las enseñanzas de Lacan existencialismo) le impulsó en 1934 a sí, un hecho inseparable de la propia
(1973). Barcelona, Anagrama, 1983.
acusaron la influencia de matemáti- Le Sénzinaire (El Seminario): aceptar un puesto de profesor de an- constitución de la vida social.
cos como Frege, Russell, Cóctel y Hure XX, Encore, París, Seuil, 1973. tropología en la Universidad de Sáo Aquí se introducen dos aspectos
Cantor. Se fue apartando, cada vez ¿jure 11, Le 7710i dans la !M'oree de Paulo. Posteriormente, tras cumplir importantes de la antropología de
más, del modo retórico que había Freud et dans la technique de la el servicio militar en Francia, Lévi- Lévi-Strauss. El primero es el princi-
dominado sus enseñanzas en los psychanalyse, París, Senil, 1978. Strauss huyó de la persecución y se pio de que la vida social y cultural no

100 101
LÉVI-STRAUSS L ÉYI-STRAUSS

puede explicarse únicamente con una Cada sociedad o cultura muestra ras- a asumir cualquier significado. Sería cantes en relación con los significa-
versión del funcionalismo; la vida cul- gos que están presentes, en mayor o el denle= de la diacronía, o sea, el dos, puesto que hay que pensar que
tural no se explica en función de la menor grado, en otras sociedades y elemento de historia y contingencia, el lenguaje aparece todo de una vez
naturaleza intrínseca de los fenóme- Otras culturas. Lévi-Strauss hace esta el aspecto que justifica la perpetua- (es un sistema de diferencias y, por
nos en cuestión. Tampoco puede ex- afirmación porque está convencido ción de los fenómenos sociales y cul- (anto, fundamencalmente relacional),
plicarse empíricamente mediante he- de que lo que constituye el ser huma- turales. Si la explicación que da Lévi- mientras que el conocimiento (los
chos que presuntamente hablan por no es la dimensión cultural (en l a que Strauss de lo •estructural. en el significados) sólo surge de manera
sí mismos. En pocas palabras, aunque predomina el lenguaje), y no la natu- análisis estructural' tiende a centrarse progresiva.
la investigación empírica constituye raleza (o lo •natural.). Las estructuras en la dimensión sincrónica, en la El aspecto escructural del método
una parte importante de su traba- simbólicas de parentesco, lenguaje e práctica su trabajo se orienta, sin de Lévi-Strauss está aquí más implíci-
jo, Lévi-Strauss no es un empirista. intercambio de bienes se convierten duda, a considerar una estructura CO que explícito. Consiste, en primer
Siempre ha mantenido que es, por en la clave para entender la vida so- esencialmente ternaria y dinámica. lugar, en el hecho de que no se hace
encima de todo, un antropólogo es- cial, por encima de la biología. De Podemos confirmarlo mediante la re- hincapié en el contenido (hipotético)
tructural. En términos generales, la hecho, los sistemas de parentesco ferencia a los principales textos de del mana, sino en su capacidad po-
antropología estructural, inspirada mantienen alejada a la naturaleza, Lévi-Strauss sobre parentesco, mito y tencial de asumir múltiples significa-
por Saussure, se centra en cómo se son un fenómeno cultural basado en arte. dos. Es un significante vacío, del mis-
combinan los elementos de un siste- la prohibición del incesto y no son, Introducción a la obra de Marcel mo modo que, para Lacan, el falo no
ma, más que en su valor intrínseco. por tanto, un fenómeno natural. Per- Mausg, de Lévi-Strauss, publicada posee significado intrínseco sino que
Las nociones clave son ',diferencia. miten el paso de la naturaleza a la poco después de la aparición de Las es el significante de la significación. En
y -relación. Además, la combinación cultura, es decir, a la esfera de lo ver- estructuras elementales de parentesco, segundo lugar, y quizá más importan-
de estos elementos producirá opo- daderamente humano. Para entender- demuestra que, si bien el regalo equi- te, el mana, en la interpretación de
siciones y contradicciones que sir- lo mejor, pasemos a la noción de es- valía al Mecho social total en el Essai Lévi-Strauss, es un tercer elemento
ven para dar al ámbito social su dina- tructura de Lévi-Strauss. sur le don de Mauss, éste no fue ca- que se inserta entre el significante y el
mismo. • Para él, •estructura no equivale a paz de reconocer que el intercambio significado, el elemento que otorgaría
El .alcance. es otro aspecto crucial la estructura empírica (que puede era también la clave para entender el al lenguaje su dinamismo y continui-
del método de Lévi-Strauss. Porque; considerarse, por analogía, en arma- fenómeno del mana. Aunque Mauss dad. Porque, si existiera un «ajuste«
mientras muchos investigadores so- zón o arquitectónica) de una socie- había observado que el intercambio perfecto entre el plano del significan-
ciales han limitado sus interpretado- dad determinada, como en la obra de era un concepto elaborado por el an- te y el plano del significado, no habría
nes de la vida social a la sociedad Radcliffe-Brown. La estructura no se tropólogo y que no poseía un conte- nada más que decir, el lenguaje se ter-
concreta en la que han realizado su da en la realidad observable, sino que nido intrínseco, su tratamiento del minaría. Por consiguiente, el signifi-
trabajo de campo, Lévi-Strauss adop- es siempre el producto de, al menos, ,nana era diferente. Como Durkheim, cante flotante es un rasgo escructural
ta un enfoque universalista y teoriza tres elementos, y es ese carácter ter- Mauss le atribuyó el significado que del lenguaje en general, un elemento
a partir de sus propios datos y los de nario el que le otorga su dinamismo. asumía en las sociedades indígenas, que introduce en él una faceta asimé-
otros antropólogos. De todas las crí- Dicho esto, hay que reconocer que, un significado que implica que el trica y generativa: la faceta de la con-
ticas globales que se le han hecho, la en la oeuvre de Lévi-Strauss, existe mana tiene un contenido intrínseco o tingencia, el tiempo y, en términos de
más común en los países de habla in- verdaderamente una ambivalencia sagrado. Saussure, el nivel de la parola
glesa es seguramente la de que teori- entre el tipo de estructuralismo que Por el contrario, Lévi-Strauss afirma Aunque el título podría sugerirlo,
za a partir de una base empírica in- considera la estructura como un mo- que la diversidad del contenido que Las estructuras elementales del paren-
suficiente. Ello ocurre en los países delo abstracto derivado del análisis asume el mana significa que está va- tesco no hace ninguna referencia ex-
que tienen una tradición empirista de los fenómenos juzgados como un cío, como un símbolo algebraicoí, y plícita a la lingüística saussuriana. El
más fuerte. sistema (más o menos) estático de es capaz de adoptar cualquier signifi- motivo es, sin duda, que Lévi-Strauss
En general, lo que se juega Lévi- diferencias —es decir, que da priori- cado: por ejemplo, la palabra 'cosa.. escribió esta obra, el primer gran tra-
Strauss en su obra es mucho. Intenta dad a la dimensión sincrónica— y el En pocas palabras, mana es un signi- bajo de antropología estructural, en
demostrar que, cuando se dispone de concepto de estructura como algo ficante .flotante » o puro con un valor Nueva York durante los años 40, es
todos los datos, no hay base para ex- esencialmente temario, que contiene simbólico propio de cero. Y existe en decir, antes de que se renovara el inte-
traer una jerarquía de sociedades, ni un aspecto dinámico inherente. EI un sentido general (cada cultura (le- rés por Saussure en Europa, por no
en virtud del progreso científico, ni tercer elemento de esa estructura ter- ne ejemplos de significantes flotan- hablar de Norteamérica. En Las estruc-
con respecto a la evolución cultural. naria estaría siempre vacío, dispuesto (es) porque hay un exceso de signifi- turas elementales del parentesco, el

102 21 103
LÉVI-STRAUSS LÉVI-STRALISS

matrimonio (d resultado de la prohibi- prendió mas tarde Lévi-Strauss, la afecta, en realidad, a tres elementos, •nnentras que los seres humanos na-
ción universal contra el incesto) en as cuestión que surge es si una estructu- precisamente por los requisitos de la cen de la unión de un hombre y una
culturas no industrializadas se reduce ra simétrica puede ser permanente; perpetuación. Toda estructura verda- mujer.'. En efecto, la contradicción,
a dos formas básicas de intercambio: porque, tras un periodo de tiempo, deramente dual (es decir, simétrica) como aspecto inasimilable de la so-
un intercambio restringido y un inter- los grupos X e Y del intercambio res- conduce a la disolución de los grupos ciedad humana, produce mitos. El
cambio generalizado. El primero pue- tringido acabarán fundiéndose, me- involucrados. Debe haber, pues, un mito deriva de la asimetría entre
de representarse en la figura 1. diante el matrimonio, en un solo gru- tercer demento —real o imaginado— creencia y realidad, uno y múltiple, li-
po. Del mismo modo, incluso en el que introduzca asimetría y dinamismo bertad y necesidad, identidad y dife-
X YY —> X intercarnbio generalizado —debido al en la situación. Por consiguiente, las rencia, etc. Desde el punto de vista
carácter simétrico de la estructura—, instituciones que poseen un •valor del lenguaje, afirma Lévi-Strauss, el
Figura I. Cambio restringido
acabaría por surgir un solo grupo. En cero• son un demento indispensable mito es •el lenguaje en funcionamien-
otras palabras, el intercambio, inicia- en cualquier sociedad. Como d mana, to a un nivel especialmente eleva-
Aquí, la reciprocidad exige que, esas instituciones do tienen ninguna
do por la prohibición del incesto, se dom. Además, si la langue —el ele-
cuando un hombre X se casa con una propiedad intrínseca, aparte de la de
encontraría con un límite insupera- mento sincrónico del lenguaje— se
mujer Y, un hombre Y se case con establecer las condiciones previas ne- equipara al tiempo reversible, y la pa-
una mujer X. Igualmente, el intercam- ble, que pondría en peligro la misma
continuidad de las relaciones so- cesarias para b existencia del sistema role, al aspecto histórico, diacrónico
bio generalizado puede representar- social al que pertenecen; su presencia o contingente, el mito constituye un
se mediante la figura 2. ciales.
Para que el intercambio siga sien- —en sí misma, vacía de significado— tercer plano de lenguaje". El mito es
do viable como institución, es siem- permite que exista el sistema social en la síntesis (imposible) entre as face-
pre necesaria la presencia de un ter- su conjunto.". tas diacrónica y sincrónica del len-
A cer demento heterogéneo. Ése es el El estudio del mito hizo que Lévi- guaje. Es el intento permanente de
tema de dos importantes artículos Strauss refinara su método estructura- conciliar lo irreconciliable;
—uno publicado en 1945 5, el otro, lista. Una clara enunciación del prin-
en 19566-- que aclaran este punto. cipio de que los elementos de los dado que el propósito del mito es
En el primer artículo, Lévi-Strauss se- mitos adquieren su significado por el suministrar un modelo lógico capaz
ñala que el niño es el elemento diná- modo en que se combinan, y no por de superar una contradicción (un lo-
Figura 2. Cambio generalizado
su valor intrínseco, lleva a Lévi- gro imposible si, como sude ocurrir.
mico y asimétrico en la estructura de b contradicción es real), se produci-
FUENTE: Lévl - Strauss, Las estructuras ele- parentesco: Strauss a la posición de que los mitos rá un número teóricamente infinito
mentales del parentesco.
debemos entender que el niño es M- representan la mente que los crea, y de /versiones], cada una ligeramente
dispensable para dar validez al ca- no una realidad externa. Los mitos se distinta de las demás".
Así, cuando un hombre A se casa rácter dinámico y teleológico del resisten a la historia, son eternos. Ni
con una mujer B, un hombre B se paso inicial, que establece el paren- siquiera debe considerarse que distin- El mito se convierte así en la terce-
casa con una mujer C; cuando un tesco sobre h base y a través del tas versiones de un mito son falsifica- ra dimensión del lenguaje: en él hay
hombre C se casa con una mujer D, matrimonio. El parentesco no es un dones de una versión auténtica y ver- un intento continuo de reconciliar las
un hombre D se casa con una mujer fenómeno estático: sólo existe me- dadera, sino un aspecto esencial de la otras dos dimensiones aangtie y pa-
A. Casi todo el texto de Las estructu- diante su propia perpetuación. Aquí estructura IllitiCa. Por el contrario, las role). Dado que la reconciliación to-
ras elementales de parentesco es un
no estamos pensando en ei deseo de diferentes versiones forman parte del tal es imposible, 'el mito crece en es-
perpetuar la raza, sino en el hecho mismo mito precisamente porque el piral hasta que el impulso intelectual
desarrollo de las variantes de ambas de que, en la mayoría de los siste-
fomms de intercambio matrimonial. mas de parentesco, el desequilibrio mito no puede reducirse a un solo que lo produjo se agota.. 13. El mito
Incluso para el observador profa- inicial producido en una generación, contenido uniforme, sino que es una crece porque, en el plano estructural,
no, lo que sorprende de ambas for- entre el grupo que entrega a la mu- estructura dinámica. Al final, es pre- la contradicción —la asimetría— que
mas de intercambio es que la recipro- jer y el grupo que la recibe, se pue- ciso tener en cuenta todas las versio- le da vida no puede resolverse.
cidad parece incluir una estructura de estabilizar solamente mediante nes del mito (aspecto diacrónico) Como el mito, las pinturas faciales
simétrica (la única diferencia entre el contraprestaciones en las generacio- para que su estructura salga a la luz. de los indios caduveos de Sudaméri-
intercambio restringido y el generali- nes siguientes'. Desde otra perspectiva, el mito es ca, descritas en la obra autobiográfi-
zado es que el último condene el En ei artículo sobre las organizacio- siempre el resultado de una contra- ca de Lévi-Strauss, Tristes Tropiques",
doble de términos y, por tanto, es nes duales, Lévi-Strauss destaca que dicción; por ejemplo, •la creencia de ofrecen otro ejemplo de estructura
totalmente simétrico). Como com- toda división visible entre dos grupos que la humanidad es autóctona•, como fenómeno dinámico y ternario.

104 al 105
LÉVI-STRAUSS LEVI-STRALISS

Los diseños de la pintura facial son historia, un dato que se ha destacado, D antropología de Lévi-Strauss, como exist?.. en Structural Antbropology. pá-
aquí arabescos asimétricos, una es- sin duda, por la hostilidad de Lévi- se mencionó anteriormente, no pue- ginas 132-163.
de limitarse a su contenido analítico. ' Lévi-Strauss. .5u-un-Lira! analysis in
tructura ternaria que pretende gene- Strauss hacia el existencialismo de Sar-
linguisties and anthropology.. pág. 47.
rar más diseños. Un dibujo puramen- tre, una doctrina en la que práctica- Está en juego mucho más que eso.
Lévi-Strauss, •Do dual organizarions
te geométrico, además de ser difícil mente todo acto es histórico (es decir, Lévi-Strauss muestra la complejidad
exist?., pág. 159.
de 'adaptar. a un rostro real, no po- contingente)' 6. Además, la insistencia de fas culturas no industrializadas que Lévi-Strauss, •The strucrural study of
dría cumplir con el objetivo que se le de Lévi-Strauss en el carácter científi- Occidente —con frecuencia a través myth., en Structural Arttbropology, pági-
asigna. Éste es el mismo que el de las co de la antropología (reconociendo de sus antropólogos (cfr. Lévy-Bruhl na 216.
figuras en los naipes europeos. En que lo hace para defender la posibili- y Malinowski)— había supuesto equi- /bid., pág. 210.
cada naipe, la figura debe cumplir, al dad de que haya una ciencia social valentes a la infancia de la humani- " !bid., pág. 209.
dad y que, por tanto, se consideraban 12 lbíd., pág. 229.
mismo tiempo, una función contin- apartada del debate político inmedia-
gente, corno elemento en una partida más primitivas y simplistas, en su lbíd.
to) no coincide con su opinión de que
pensamiento, que las occidentales Claude L'évi-Strauss, Tristes TroPi-
concreta entre jugadores, y una fun- la ciencia no puede evitar por comple-
quer, trad. de John y Doreen \Vightman,
ción estructural (sincrónica), corno to ser mítica y el juicio de que las cul- (las sociedades primitivas tienen mi-
Arheneum, Nueva York, 1974, pági-
elemento que ocupa un lugar deter- turas no están selladas herméticamen- tos; Occidente posee la ciencia y la fi-
nas 178-197.
minado en el paquete, un lugar que te entre sí, sino que constituyen una losofía, etc.). Así pues, hay que inter- 15 !bid., pág. 194.
no cambia nunca. La pintura Facial de serie infinita de transformaciones. De pretar que el universalismo de David Pace, Claude Lévi-Strauss,
los caduveos intenta captar la simetría modo que mientras que, por ejemplo, Lévi-Strauss significa que las transfor- Tbe Bearer of Asbes, Boston, Routledge
de la función (la situación dentro del la ciencia piensa en lo concreto, el maciones del mismo mito (como en Kegan Paul, 1983, págs. 183-184, y
grupo) y la asimetría de la parte en el pensamiento nativo piensa con lo con- el mito de Edipo) en todo el mundo cap. 6.
indican que los seres humanos perte- Claude Lévi-Suauss, introduction
juego (contingencia) creto. Una vez más, cuando Lévi-
necen a una sola humanidad, y que to a Science ofMytbology, Volume 1. Tbe
Strauss afirma en la •Obertura. a Le
Raw artd tbe Cooked, trad. de John
por la adopción de una composición Crut et le cuit (Lo crudo y lo cocido)" D presencia de los otros es esencial
y Doreen Weightman, Nueva York y
que es simétrica pero establecida que el libro sobre el mito es un mito para construir nuestras diferencias.
Evanston, Harper Torchbooks, 1970,
sobre un eje oblicuo, por lo que evi-
en sí, se pone en tela de juicio la pro- Pág. 7 .
ta la fórmula completamente asimé-
pia posibilidad de una ciencia impar-
trica, que habría satisfecho as exi-
gencias de D posición pero no las cial en el sentido habitual de Occidente.
NOTAS VÉASE TAMBIÉN EN ESTI LIBRO
de la función, y la fórmula opuesta Sin embargo, Lévi-Strauss ha demos-
y completamente simétrica, que ha- trado, a menudo, ser reacio a asumir
las consecuencias de este último hecho. Claude Lévi-Strauss, Tbe Elenzenta- Jakobson, Kristeva, Lacan, Mauss.
bría tenido el efecto contrario".
A diferencia de Julia Kristeva, o de zy Structures ofginship, trad. de James
Los arabescos de la pintura facial quienes se inspiraron en la lectura Bell y John von Sturmer, Boston, Pea-
con Press, ed. rey., 1969, págs. 58-60. PRINCIPALES OBRAS DE LÉVI-STRAUSS
sacan a la luz dos concepciones de la que Lacan hacía de Freud, hay poco
1 Véase; por ejemplo, Claude Lévi-
estructura. Por su parte, Lévi-Strauss en la obra de Lévi-Strauss que se re- Las estructuras elementales delparentes-
Strauss, .Structural analysis in linguistics
escribe como si su propio trabajo se lacione con la subjetividad. Es como co (1949), Barcelona, Paidós, 1991.
and anthropology. en Structural Antbro-
centrase más en la noción estática, si pensara que la batalla de Durkheim pology, trad. de Claire Jacobson y Tristes trópicos (1955), Madrid, Círculo
simétrica y binaria de estructura, para separar la psicología de la antro- Brooke Grundfest Schoepf, Harmonds- de Lectores, 1994.
mientras que sus análisis reales de pología y la sociología estaba aún por worth, Penguin Books, 1972, págs. 31- Antropología estructural (1958), Barcelo-
fenómenos sociales y culturales indi- ganar, y que cualquier concesión a 54, especialmente pág. 33. na, Paidós, 1992.
can que es la segunda concepción de una teoría de la subjetividad equival- 3 Claude Lévi-Strauss, Introduction to El pensamiento salvaje (1962), México,
una estructura ternaria la que posee tbe 1Vork of Marcel Mauss, trad. de Feli- FCE, 1964.
dría a reconocer el poder de explica-
city Baker, Routledge & Kegan Paul, El totemismo en la actualidad (1962),
mucha más fuerza explicatoria y sig- ción de la psicología por encima de
1987. México, FCE, 1965.
nificación metodol ógi ca. la antropología. Pero dicho combate
;bid, pág. 55. Véase págs. 56-66 Mytbologiques (1964-1967) Mlitológi-
Esta ambivalencia en relación con no está aún ganado. Y la labor del casb
para el estudio del nzarta como signifi-
la base de su marco teórico ha provo- antropólogo sufre por la ausencia de cante .flotante.. Mitológicas t Lo crudo y lo cocido,
cado malentendidos. En especial, los todo intento de incluir en ella una 5 Lévi-Strauss, .Structural analysis in lin- México, ECE, 1968.
críticos han podido afirmar que la an- teoría del sujeto. guistics and arahropology., págs. 31-54. Mitológicas IP De la miel a las ceni-
tropología estructural se olvida de la De todas formas, la importancia de Lévi-Strauss, .Do dual organizations zas, México, FCE, 1972.

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Mitológicas HL El origen de las mane- donde alcanzó la agrégation en -letras pezó a investigar el cine basándose después de cruzar un umbral de -irrea-
ras de mesa, México. Siglo XXI, clásicas. (francés, griego, latín) después en los trabajos de Saussure sobre len- lidad.. Este hecho va unido al requisi-
1970. de obtener también un título en ale- guaje, sobre todo en relación con las to de que el espectador deje de lado
Mitológicas 11/2 El hombre desnudo, categorías, en francés, de langage su incredulidad, porque el cine como
mán y una maTtrise en historia antigua.
México, Siglo XXI. (lenguaje en general o un lenguaje medio —como vehículo de represen-
Palabra dada, Madrid, Espasa-Calpe,
La formación académica de Metz culmi-
1985. nó con un doctorar d'état en lingüística técnico y especifico), langue (el lla- tación— es una ilusión relacionada
La alfarera celosa (1985). Barcelona. general en la Sorbona. mado lenguaje natural: francés, in- con la realidad presuntamente verda-
Paidós, 1986. Paralelamente a sus estudios, Metz glés) y pardo (el plano del habla o dera que se halla al otro lado. Por su-
Mirando a lo lejos, Buenos Aires, EME- se dedicó a las actividades de cinéfi- discurso). Igual que la aproximación puesto, -una película no es más que
CE, 1987. lo y animador de cineclubs. Gran par- de Saussure a los textos literarios par- una película.., pero aún así.: ésta es la
Polémica sobre el origen y la universali- te de sus conocimientos de historia tía de la opacidad de dichos textos actitud en la que se basa la suspensión
dad de la fanzilia, Barcelona, Anagra- del cine y películas concretas que, en (su categoría de sistema lingüístico), de la incredulidad.
ma, 1991. ocasiones, sirven de ejemplos para su Metz empezó partiendo de la opaci- Los primeros ensayos de Metz re-
Historia de lince, Barcelona, Anagrama. obra teórica, procede de dichas acti- dad de la película. Casi inmediata- flejan, pues, la noción de que el cine,
1992. mente se vio con claridad que esta en general, es un tipo específico de
Raza y cultura, Madrid. Cátedra, 1993. vidades. Además, Metz realizó traduc-
Mirar, escuchar; leer, Madrid. Siruela, ciones del alemán y el inglés, es- operación no era sencilla; porque, si ilusión, que innegablemente logra se-
1994. pecializado en obras sobre jazz. ¿I analista literario tenía la gramática ducir al espectador para que abando-
Extrañamente, quizá, el contacto con y la poesía como puntos de partida ne su incredulidad. Una vez inmerso
esas obras sobre niúsi c. a no ha deja- para investigar la opacidad o transpa- en el mundo del cine, una vez acep-
OTRAS LECTuRAs do ninguna huella visible en su teo- rencia de los textos, para el estudio tado el principio de que el cine es
ría cinematográfica, y la música es, de de la película —el medio de la trans- una ilusión, una -impresión- de reali-
134ncocit, C. R.. Lévi-Strauss: Structura- hecho, un aspecto olvidado en sus parencia par =d'ella,— no existían dad, la imagen asume todo su poder
lisnz and Sociologicallbeory, Londres, de seducción. No obstante, presentar
estudios (y los de otros) sobre cine. unos soportes dispuestos para ser uti-
Hutchinson, 1975. lizados. La transparencia en el cine, el cine, en gran parte, desde el punto
PACE, David, Claude Lévi-Strauss, Para valorar la importancia de la
Bearer of Ashes, Boston, Routledge 8.-. influencia de Metz, necesitamos saber vio Metz, estaba íntimamente unida a de vista del espectador, como acaba-
Kegan Paul, 1983. que, hasta mitad de los años 60, ha- su realismo o verosimilitud. No es mos de hacer, es ir demasiado rápi-
bía pocos análisis sobre la naturaleza que el cine sea más real que el tea- do, Porque los primeros ensayos de
de las películas (especialmente como tro. Al contrario. Los actores sobre el Metz no se centraron tanto en la pe-
imagen) o la institución del cine (es- escenario pueden constituir una pre- lícula tal como la percibe el especta-
Christian Metz pecialmente desde el punto de vista sencia real para el espectador, en dor (dicha orientación vendría más
del espectador), Es decir, aunque no contraste con la imagen de celuloide tarde, con un estudio psicoanalítico
Nacido en 1931 en Béziers, en el faltaba la critica cinematográfica, no de la película, pero el teatro, en rela- del cine), sino en su modo de signifi-
sur de Bélgica, Christian Metz murió se había escrito casi nada sobre el ción con el drama que se representa, cación. En especial, Metz se interesó
trágicamente a finales de 1993. Metz cine como medio, En respuesta a carece del poder ilusorio basado en por cómo el significante película, en
abrió paso, en los años 60, a la ins- ello, y de acuerdo con la evolución la verosimilitud que, como destacará comparación con otros medios
tauración de la teoría del cine como de su marco teórico, la obra de Metz Metz, es la característica del cine —otros significantes—, logra presen-
nueva disciplina intelectual. Los ar- sigue dos amplias líneas de investiga- corno medio. Así ocurre, al menos, tar una narración (diágesis), intriga,
tículos de su obra Essais sur la sigui- ción: el estudio semiológico de las excepto si el público teatral está inte- descripción, drama, etc. La clave aquí
fication au cinéma (1968), escritos películas y el estudio psicoanalítico resado principalmente en la presen- es que el cine presenta una estructu-
entre 1964 y 1968, prepararon el ca- del cine. El examen de estas dos lí- cia per se de un gran actor. ra narrativa, y no el modo en que
mino para la creación de un departa- neas de trabajo nos permitirá tener En comparación con el teatro, el unas películas concretas se desarro-
mento de estudios de cine en la Uni- una idea global del trabajo de Metz. verdadero poder del cine deriva de su llan y pueden interpretarse a partir de
versidad de Vincennes (Paris VIII). Inspirado por su formación lingüís- capacidad de crear una ilusión de rea- ese desarrollo. En otras palabras, lo
Junto a otros intelectuales de su ge- tica (gracias a su doctoras d'état, Metz lidad. Como el teatro es demasiado importante no es interpretar películas
neración que se inspiraron en la co- impartió cursos de lingüística general real —afirma Metz—, las ficciones tea- (concretas) —en cuyo caso, el signi-
rriente estructural ista (cfr. Bourdieu, M966-19691 en la École des Hautes trales producen sólo una débil impre- ficante película se vuelve secunda-
Derrida, Genette), Metz asistió a la Études en Sciences Sociales antes de sión de realidad- 1 . Paradójicamente, tal rio—, sino analizar el cine corno es-
École Nonnale Supérieure (me d'Ulm), enseñar teoría cinematográfica), em- vez, el -realismo. del cine se logra sólo tructura de significado.

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El cine, en general, tiende a ser un cimiento de unas cuantas películas ma, una palabra es, corno explicó La- ta entre sintagmas. Es un sintagma
desafío para el análisis, porque ser escogidas, la preocupación funda- can, un nudo de significados (en gran acronológico.
una «impresión de realidad » es su ras- mental de Metz es el cine en general. parte convencionales) que da fragili- 3. Sintagma de acolada: sintagma
go definitorio. En toda la primera eta- Decir que una película comercial dad al flujo horizontal del lenguaje. de evocaciones. Por ejemplo, Metz
pa de su obra, Metz tiene en cuenta —una película de ficción— se desa- Pero una imagen, repitámoslo, no es indica de qué forma evoca Godard el
que la historia fílmica, la materia, se rrolla a través de una estructura na- una palabra. Está producida (en el erotismo en Une fenune mariée, me-
plasma siempre a través de la imagen rrativa, es decir que es un discurso y tiempo y el espacio) por el discurso diante referencias al .significado uni-
(el significante película), y que esta que, por canto, como afirmaba Ben- cinematográfico, un discurso que no versal• del •..amor moderno•. Este sin-
última, aunque es un elemento esen- veniste, es una enunciación (énon- sólo se lleva a cabo a través de la di- tagma también es acronológico.
cial de la fascinación, no es en lo que ciation) realizada por un sujeto de rección de la cámara, sino también 4. Sintagma descriptivo: aquí, la
consiste el cine. enunciación (sujet de l'énonciation), por el procedimiento del montaje, el relación entre todos los elementos
¿Cómo es posible, pues, que una o, como prefiere Metz, un .instrumen- acto de unir una imagen con otra me- presentados sucesivamente es de si-
serie de imágenes presenten una his- to narrativo. (instance racontante). diante la contigüidad. No se trata de multaneidad. Por ejemplo, un rostro,
toda que, aunque sea mínimamente, En efecto, las imágenes cinematográ- negar la existencia de ciertos estereo- luego la persona a la que pertenece,
siempre está narrada (es decir, siem- ficas están siempre organizadas de un tipos (el vaquero heroico) en el cine, luego la habitación u oficina en la
pre se presenta mediante una diáge- modo determinado; no se ofrecen ni el uso de símbolos para crear opo- que está esa persona (Metz ofrece el
sis)? Un documental puede recurrir a nunca en forma bruta y descriptiva siciones (por ejemplo, blanco frente ejemplo de una vista del campo, tro-
una voz en off para dar orden y co- aunque, desde luego, puede haber a negro para corresponder al bien zo a trozo). Un sintagma descriptivo
herencia a las imágenes presentadas secuencias descriptivas dentro de la contra el mal). Sin embargo, Metz, al- es cronológico.
de forma temporal. Es cierto que al- diágesis de la película. En tanto que menos en sus ensayos de los años 60, 5. Sintagma altenzatzte: este sin-
gunas películas comerciales utilizan discurso, la película debe interpretar- señala que dichos rasgos paradigmá- tagma corresponde al .montaje de al-
el mismo recurso; pero la mayoría no se como paro/e —o proceso—, y no ticos son muy frágiles. Puede venir ternancia., .montaje paralelo•, etc.
lo hace. ¿Cuál es la sintaxis básica del como langue o sistema. Por otro otro cineasta que deje obsoleto el es- Mediante la alternancia, el montaje
desarrollo de una película de ficción? lado, Metz explica que las imágenes tereotipo o símbolo modificando el presenta varias series de sucesos que
Igual que en el caso del análisis que cinematográficas corresponden a afir- contenido de los elementos signifi- se interpreta que ocurren al mismo
hace Greimas de la estructura básica maciones (énoncés), o actos de habla, cantes (negro = mal, por ejemplo). tiempo.
de significado en las acciones de los más que a palabras, precisamente En cualquier caso, Metz decidió 6. Escena: la escena, propiamen-
textos literarios, con un intento de porque, a diferencia de estas últimas, apoyar su construcción más rigurosa te dicha, equivale a un flujo continuo
construir una sintaxis universal de las las-imágenes tienen un número infi- de una sintaxis cinematográfica en el de imágenes sin ningún hiato diagé-
acciones, a Metz le interesa construir nito y están creadas por el cineasta- eje sintagmático de significado. Resu- tico; una de las construcciones cine-
la estructura básica o sintaxis de la hablante. Además, el cine no es un mamos brevemente dicha construc- máticas más antiguas.
diágesis cinematográfica tal como se Lenguaje (langue), sino un arte que ción, que él denomina la grande 7. Secuencia por episodios: la dis-
plasma en imágenes. Ni Greimas ni reúne la connotación (al contrario syntagmatique (la gran cadena sin- continuidad se convierte en un prin-
Metz están interesados en interpretar que la música o la arquitectura) y la tagmática). Esta gran cadena se divi- cipio de la construcción. Un sintagma
un texto concreto (no se limitan a expresividad (utiliza objetos naturales de en ocho segmentos autónomos: lineal provoca una discontinuidad de
trabajar, repitamos, en el plano del que no evocan un código). •Un con- los hechos. Metz la denomina .la se-
significado), sino que pretenden al- cepto significa, mientras que una 1. Plan autónomo: no es un sin- cuencia propiamente dicha•.
canzar un objetivo mucho más des- cosa es expresiva., señala Metz'. tagma, sino un tipo sintagmático. 8. Secuencia ordinaria: la dispo-
alentador: la descripción del orden Debido a que se basa en la presen- Equivale a exponer aisladamente un sición de las elipsis en orden disper-
sintáctico básico de cualquier texto tación de imágenes en el tiempo y el solo episodio de la intriga. Los inser- so, cuyo ejemplo son los momentos
posible, sea literario o cinematográfi- espacio, el cine suele dar preferencia tos —por ejemplo, un .inserto no dia- que saltan y que parecen no tener in-
co. Si bien es verdad que podría arro- al eje sintagmático, horizontal, frente gético» (la imagen ajena a la acción terés. Lo importante de cualquier se-
jarse cierta luz sobre el problema del al paradigmático o vertical. Por pre- de la historia)— pueden ser también cuencia es que es ajena a las »condi-
significante película mediante un aná- caución, debemos preguntarnos cuál equivalentes a un plan autónomo. dones reales de percepción.
lisis detallado de películas concretas, es la razón de que sea así. La res- 2. Sintagma paralelo, correspon-
y aunque tal vez podría aprenderse puesta es que, aunque puede parecer de a lo que, a menudo, se llama una A mitad de los 70, Metz había em-
algo sobre la estructura del significan- que una página de texto gráfico se •secuencia de montaje paralelo.. Aquí pezado a pensar que el enfoque se-
te cinematográfico mediante el cono- desarrolla también como un sintag- no se observa ninguna relación exac- miótico del cine solía dar preferencia
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al plano de la estructura del discurso que ofrece una imagen del propio relatada por Lacan, las imágenes cine- ca diferenciadora del significante
fílmico y olvidar las condiciones de deseo del sujeto. Metz demuestra matográficas también provocan pla- cinematográfico, podría afirmarse, re-
recepción de la película, la posición que, puesto que el cine está estructu- cer. Por supuesto, a diferencia del es- side precisamente en que se experi-
del espectador. Además, Metz se dio rado de este modo, el discurso sobre pejo, el cuerpo del espectador no mema corno ilusión. Es justo el mis-
cuenta de que justificar la dinámica cine forma frecuentemente parte de está en la pantalla. Y el espectador es mo tipo de placer que Lacan atribuye
de dicha posición suponia, al mismo la institución cinematográfica. Por lo muy consciente de que la imagen es al /rompe l'ocil en la pintura, que, le-
tiempo, explicar el cine como institu- que sólo en escasas ocasiones puede sólo una imagen. Sin embargo, afirma jos de engañar, se entrega como lo
ción; porque el cine no existiría si no ser crítico de ella. Metz, la identificación sigue siendo que es, como pura apariencia, corno
fuera por el deseo de los espectado- Por el contrario, el teórico intenta crucial, sólo que ahora el espectador ilusión. Muchos pensarán que el aná-
res de -ir al cine.. Este cambio de asumir la posición de lo simbólico, •se identifica consigo mismo, consigo lisis de Metz no concede suficiente
orientacióo, del significado a la re- pero dicha posición, como reconoce corno acto puro de percepción. 3. importancia a este aspecto. Hasta tal
cepción de la película, coincidió con Metz, es precaria, precisamente por- En la oscuridad del cine, el espec- punto, que un autor5 ha observado
su interés en el estudio psicoanalítico que está involucrada también la ima- tador desarrolla una serie de situacio- que Metz ha contribuido a la confu-
(es decir, freudiano y lacaniano) del ginación (léase: deseo) del teórico. nes freudianas, derivadas precisa- sión, en la teoría del cine, entre el
cine. En otras palabras, el cine plantea, de mente del carácter de irrealidad del sujeto panóptico de Foucault, enga-
Metz emplea los conceptos laca- forma aguda, el problema de distin- significante fílmico. Destacan espe- ñado por una identificación demasia-
nianos fundamentales de -imaginario. guir un juicio sobre lo que es bueno, cialmente la pasión de gran alcance, do enérgica con lo que sucede en la
y •simbólico para explicar la lógica u objetivo, de una expresión de lo el voyeurismo y el fetichismo. Cada pantalla (la pantalla pasa a ser equi-
de la fascinación del espectador ante que es deseable. uno de ellos estimula impulsos que, valente al espejo), y la teoría de La-
la imagen. Mediante la evocación de En un estudio psicoanalítico conti- hasta cierto punto, no necesitan un can sobre el sujeto de la mirada, que
la --fase del espejo. de Lacan, Metz nuado del significante cinematográfi- objeto reaf para lograr satisfacción. El siempre percibe una ilusión como
considera que el hecho de que el es- co (es decir, la materialidad del cine, voyeuristno evoca la escena primitiva una ilusión (la pantalla no equivale al
pectador quede cautivado por la ima- no lo que significa), Metz intenta del niño que está presente mientras espejo).
gen equivale a la identificación del comparar el cine con el nivel del pro- sus padres tienen relaciones sexuales.
niño con su propia imagen en el es- ceso primario en la teoría de Freud, La posición del voyeur es pasiva e im-
pejo. Más importante, dicha identifi- con lo que llama la atención sobre el plica una separación entre el ojo y el
cación produce placer, un factor re- NOTAS
aspecto del impulso: el modo en que objeto. El fetiche equivale a un susti-
forzado por los estímulos que la fascina la imagen, el modo en que la tutivo del pene en la castración. Es
institución cinematográfica ofrece al ' Christian Men, Film Language: A
visión de la película se aproxima al una forma de negar la ausencia del Senziotics of rbe Cinema (traducción de
espectador. Desde luego, esta institu- ensueño, y el modo en que la metá- pene (= objeto real) y asombrarse Essai sur la signification au cinéma
ción tiene uo enorme interés en ase- fora y la metonimia se aproximan al ante el cine como gran técoica de ilu- 119681, volumen I), trad. de Micha& Ta-
gurar que el expectador experimenta pensamiento del proceso primario sión. ¿Hasta el punto del engaño y la ylor. Nueva York, Oxford University
cualquier película individual como basado en la condensación y el des- alucinación? Así lo indica práctica- Press, 1974. pág. 10,
—para utilizar términos de Klein- plazamiento. El aspecto del impulso mente Metz en algunos momentos, ¡bid., pág. 78. Traducción modifi-
un •auen objeto•: el objeto imagina- implica, en primer lugar, que existe por el interés que tiene en subrayar cada.
rio que frecuentemente constituye la 3 Christian Metz, 77ce Imaginar), Sig-
placer en percibir lo que ocurre en la el hecho de que el espectador, qua
base de uoa fantasía placentera. Un nifier Psycboanalysis and tbe Cinema,
pantalla y, además, debido a la irrea- espectador, rechaza la irrealidad cine- trad. de Celia Britton et al., Blooming-
-mal objeto-, por el contrario, es lo lidad de la película, que el placer del mática. ton. Indiana University Press, 1982, pá-
que el sujeto espectador pretende espectador no procede de un objeto Podría decirse del tratamiento que gina 49. La cursiva es de Metz.
evitar. propiamente dicho, sino que es nar- Metz hace del ensueño y el cine lo ' Sigmund Freud, An Outline of Psy-
El espectador ha asimilado el ele- cisista, imaginario. La irrealidad del mismo que acabamos de decir sobre cboanalysis, trad. de James Strachey,
mento positivo asociado a ir al cine significante cinematográfico invita a su tratamiento del espectador como Londres, The Hogarth Press, 1940, ed.
porque también forma parte de la ins- la comparación con el ensueño y la fetichista. La analogía resulta dema- rey. 1969, pág. 29. (Trad. esp.: Esquema
titución cinematográfica. Es decir, la imagen en el espejo. Como el sueño, de/psicoanálisis y otros escritos, Madrid,
siado completa. Porque, mientras que Alianza, 19903
imaginación del sujeto es pane inte- la película posee una cualidad aluci- el ensueño y la alucinación producen
grante de dicha institución. El cine se natoria que, al mismo tiempo, exige Loan Copjec, -The oithopsychic sub-
frecuentemente una confusión entre ject: Film theory and the reception of
integra, en efecto, en su deseo. La interpretación; como la experiencia la realidad y la ilusión (por eso Freud Lacam, October, 49 (verano de 1989),
pantalla pasa a equivaler a un espejo prototípica del niño ante el espejo, llamó al sueño una psicosis)^, la mar- págs. 58-59.
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SERRES SERRES

VEME TAMBIÉN ESTE LIBRO es, para Serres, estimular la inven- lor, es decir, en movimientos aleato- demia naval y posteriormente,
ción. dos y desordenados de las moléculas en 1952, a la École Norrnale Supé-
Barrhes, Benveniste, Lacan, Jakobson. En 1824, un ingeniero del ejército del aire y el proyectil). rieure (rue d'Ulm). En 1955 obtuvo
Saussure. francés, Sadi Carnot, llamó la atención Este carácter aleatorio o desorden una agregat ion en filosofia, y en-
sobre el hecho de que, en la máqui- —corno en los bordes inestables de tre 1956 y 1958 sirvió en diversos bu-
na de vapor, el calor fluía desde una una nube, o en los efectos del vapor, ques como oficial de marina para el
PRINCIPALES OBRAS DE METZ zona de alta temperatura (la caldera) o en el movimiento de las mareas- servicio marítimo nacional francés. Su
a otra de baja temperatura (el conden- es objeto de estudio sólo ahora, en la vocación de viajero, por tanto, es
Essai sur la signification au cinéma, vo- sador). Aunque Carnot llegó a la con- teoría del caos. Anteriormente, la es- algo más que una importación acadé-
lumen II, París, Klincksieck, 1973, 2. 2 clusión errónea de que no se perdía tocástica —la teoría del azar— y la mica. En 1968, Serres obtuvo el doc-
ed., 1976. ninguna energía del sistema, sí valoró teoría de la probabilidad desarrolla- torado con una tesis sobre la filosofía
Essais sémiotiques, París, Klincksieck, que, cuanto más eficiente era éste, de Leibniz. Durante los años 60 en-
ron principios dirigidos a explicar los
1977. menos energía se necesitaba para su fenómenos aleatorios. señó con Michel Foucault en las uni-
funcionamiento, y que era la diferen- En este breve resumen advertimos versidades de Clermont-Ferrand y
cia de temperatura entre la caldera y que Un Sistema mecánico de tipo Vincennes, y después se le designó
OTRAS LECTURAS el condensador lo que producía ener- newtoniano es un sistema de reversi- para la cátedra de historia de la cien-
gía. La obra de Carnot se interrumpió bilidad: en él, el tiempo es reversible. cia en la Sorbona, donde aún da cla-
AGIS COZYRis, George, Christian Metz prematuramente cuando murió a los Con el sistema termodinámico predo- ses. Serres es también profesor en la
and the Reality of Film. Nueva York, treinta y seis años. Varias personas si-
Asno Press, 1980. minan la contingencia y el azar, por Universidad de Stanford desde 1984,
COPJEC, JOan, ;Che onhopsychic subject: guieron desarrollando su trabajo, lo que se convierte en un sistema de y fue elegido miembro de la Acade-
Film theory and che reception of La- como Herrnann Helmholtz y Rudolph tiempo irreversible. Para añadir un to- mia Francesa en -1990.
tan., October, 49 (verano de 1989), Clausius en Alemania, y William que sociológico, podemos decir que Con el reconocimiento de la inte-
págs. 53-71. Thompson (Lord Kelvin) en Glasgow, Bourdieu ha denominado al ejercicio rrelación entre distintas ciencias y dis-
HENDERSON, Brian, Classical Film Tbewy: con el resultado de que, en 1865, de la lógica la lógica del tiempo irre- tintas formas de conocimiento, así
Eisenstein, Bazin, Godard, and Metz, Clausius acuñó el término •entropia. versible. como entre la ciencia y diversas prác-
Ann Arbor, Mich., University Micro- para el calor que se pierde en cual- Serres es claramente un filósofo de ticas artísticas, es evidente el esfuer-
films International, s.a. quier sistema mecánico. La era de la la ciencia. Pero, a diferencia de su zo de Serres para descubrir cómo se
ROSE, Jacqueline, ;Che imaginary., en termodinámica había llegado. Sus le- mentor, Gaston Bachelard, nunca ha interpenetran mutuamente diferentes
Sexuality in tbe Field of Vision, Lon- yes primera y segunda son, respecti-
dres, Verso, 1986. aceptado que una ciencia concreta áreas de conocimiento. Más aún: Se-
vamente, que •la energía del mundo —desde luego, no la ciencia natu- rres se ha propuesto la tarea de ser
permanece constante. y que •la entro- ral— se ajuste a la determinación po- un instrumento de comunicación (un
pía del mundo tiende hacia el máxi- sitivista de un campo de investigación médium) entre as ciencias y las ar-
mo•. La entropía es también la ten- hermético y homogéneo. En una obra tes, el Hermes del estudio moderno'.
Michel Serres dencia hacia el desorden en un reciente', Serres ha indicado que la Con la llegada de las ciencias de la in-
sistema. forma y la naturaleza del conocimien- formación, se hace posible una nue-
Michel Serres es un .viajero. entre En relación con Serres, interesa to se aproxima, sobre todo, a la figu- va figura para representar la ciencia:
las artes y las ciencias y un pensa- aquí la diferencia entre una simple ra del arlequín: una figura compuesta es el .modelo. de comunicación. Por
dor para quien el viaje es invención. noción mecánica de energía y el con- que siempre tiene otro disfraz bajo el consiguiente, tenemos tres elemen-
La invención se denomina también cepto de termodinámica. En el mode- que acaba de quitarse. El arlequín es tos: un mensaje, un cauce para trans-
'traducción., •comunicación• y 'metá- lo mecánico de Newton, en principio, una figura híbrida, hermafrodita, mes- mitirlo y el ruido, o interferencia, que
fora.. Corno introducción a la obra no se pierde ninguna energía: la me- tiza, una mezcla de diversos elemen- acompaña la transmisión. El ruido re-
de Serres, simultáneamente filosófi- cánica del sistema es reversible. Teó- tos, un desafío a la homogeneidad, quiere cierto desciframiento, porque
ca, científica y poética, vamos a re- ricamente no hay efectos aleatorios. del mismo modo que el azar en la hace más difícil la lectura de un men-
ferirnos a un hecho crucial en la his- •De acuerdo con la segunda ley de la termodinámica abre el sistema de saje. Pero, sin él, no habría mensaje.
toria de la ciencia: la termodinámica termodinámica.., el movimiento uni- energía e impide que haya una im- Es decir, no existe mensaje sin resis-
y la consiguiente superación del sis- direccional de lun1 proyectil se vería plosión. tencia. Lo que Serres, al principio,
tema cerrado de la mecánica newto- continuamente transformado, por la Michel Serres nació en 1930 en considera intrigante respecto al ruido
niana. Superar ese sistema cerrado resistencia de fricción del aire, en ca- Agen, Francia. En 1949 fue a la aca- (más que el mensaje) es que abre una
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SERRES SERRES

vía de reflexión muy fértil. El ruido, concepto del sistema. Porque •no co- de demostrar, mediante una compa- miento en Verne es lo desconocido
en vez de quedarse sólo en eso, se nocernos ningún sistema que funcic>- ración de series de relaciones, que la en lo que debemos adentramos con
convierte en un medio de transporte. ne perfectamente, es decir, sin pér- mitología indoeuropea posee la mis- el fin de constituir el conocimiento.
Así, en el primer volumen de la serie didas, huidas, desgaste, errores, ma estructura, pese a la variedad de Lo desconocido está formado por
Hernies, se analiza el ruido como ter- accidentes, opacidad; un sistema contenidos. En una formulación muy mundos para los que aún no existiría
cer elemento, el elemento emptrico, cuya rentabilidad sea del uno por precisa, Serres afirma: .con un conte- concepto ni lenguaje. Con Zola y Tur-
del mensaje. En teoría, la comunica- u nido cultural determinado, sea Dios, ner, el principio de la estocástica se
ción debe estar separada del ruido. El El interés de Serres por el •ruido• una mesa o una palangana, un análi- ve en su esfuerzo artístico para pre-
ruido es lo que no se comunica; está como tercer elemento empírico y ex- sis es estructural (y es sólo estructu- sentar d vapor, el humo y diversos
ahí como una especie de caos, como cluido en la existencia humana le ha ral) cuando hace que dicho conteni- fenómenos indeternu nad os.
ese tercer elemento empírico del hecho traducir (traduire) entre cam- do aparezca como modelo.": el Para Serres, percepción de la
mensaje, la parte accidental, la parte pos aparentemente heterogéneos, en modelo estructural se define corno .el estocástica [que] sustituye a la espe-
de la diferencia que queda excluida. un esfuerzo por construir pasos. (por análogo formal de todos los modelos cificación de la forma• es un gran
Todo formalismo (las matemáticas, ejemp(o, el paso del noroeste) entre concretos que organiza.. En lugar de avance en la relación entre las cien-
por ejemplo) se basa en la exclusión ellos, pasos no sólo de comunicación, •análisis estructural., Serres propone cias. Porque la ciencia es un sistema,
de ese tercer elemento. Todo forma- sino también de no comunicación y el término ,loganalyse-. igual que la poesía es un sistema. Llu-
lismo es un modo de pasar de un parásitos. En un momento de su tra- Mediante su enfoque no referen- via, sol, hielo, vapor, fuego, turbulen-
área de conocimiento a otra. Comu- yectoria intelectual, la noción de es- cial y comparativista del lugar (nin- cias: todos ellos crean efectos aleato-
nicar es moverse dentro de una clase tructura pareció ser útil para los pro- gún lugar constituye el objeto de aná- rios. La física moderna empieza aquí,
de objetos que poseen la misma for- pósitos de traducción y, por tanto, lisis estructural), el sitio estructuralista con la comprensión de que la turbu-
ma. La forma debe extraerse de la ca- transporte. En realidad, Serres carac- está, al mismo tiempo, .aquí y allí.. Es lencia impide la implosión de siste-
cofonía del ruido; la forma (comuni- teriza el método estructuralista como un sitio muy móvil que se constituye mas. El •exterior• del sistema es lo
cación) es la exclusión del ruido, una un método en el •sentido etimológi- a través de una enunciación. No hay que impide la implosión.
huida del ámbito de lo empírico. co; es decir, una forma de transfe- un punto fijo, aquí y ahora, sino una .Lo que existe —afirma Serres— es
En su libro El parásitos, Serres re- rencia.9 . Partiendo de la formación multiplicidad de espacios y momen- lo más probable. (es decir, desorden,
cuerda que parásito. también signifi- matemática de Serres en álgebra y to- tos. Ello implica, asimismo, que no azar y la excepción). Lo real no es
ca ruido. Un parásito es un ruido en pología, la estructura llega a las cien- existe un sujeto concreto y empírico, racional. .Solo existe la ciencia de la
un canal. Y por eso, al describir las cias humanas, en las que un análisis sino un sujeto como virtualidad dis- excepción, de lo raro y el milagro. (es
comidas de las ratas en una historia estructural continua. decir, de la ley, el orden, la norma).
de las fábulas de La Fontaine —las La obra más reciente de Serres ha El sistema, en la época clásica, es un
examina uno o dos modelos concre-
comidas de dos parásitos—, Serres tos reducidos a una forma (o varias): destacado la importancia que, a su equilibrio; en el siglo MIX es la termo-
también se refiere al ruido: •Los dos un orden preestablecido y transitivo. juicio, tienen la poesía y los efectos dinámica y la meteorología se con-
compañeros se escabullen cuando Luego, analógicamente, halla su for- de las nuevas tecnologías (como L vierte en una metáfora del conoci-
oyen un ruido en la puerta. No era ma o estructura en otras áreas, et si- tecnología de /a información) en la miento.
más que un ruido, pero era también n:ala tan, facilla. De ahí su poder vida cotidiana. La poesía, en cierto En El parásito, Serres pregunta si el
un mensaje, un trozo de información de comprensión, clasificación y ex- sentido, es el ruido de la ciencia. Sin sistema es una serie previa de limita-
que producía pánico: una interrup- plicación: geometría, arkmética, me-
poesía no habría ciencia. Sin ciencia ciones o si, por el contrario, es la re-
cánica, método. filosofia".
ción, una corrupción, una ruptura de —o, al menos, filosofía— no puede gularidad manifiesta en los distintos
información. ¿Era realmente un men- Serres está menos influido por haber poetización ni ficcionalización. intentos de constituir un sistema.
saje, este ruido? ¿No era, más bien, Saussure que por el grupo de mate- La lectura que hace Serres de Julio •¿Esos intentos constituyen por Sí So-
algo estático, un parásito?. 6. máticos de Bourbaki, y encuentra en Verne, Emite Zola y los cuadros de los el sistema?-, pregunta Serres. El
Serres se ocupa del tema del ruido el anlilisis estructural un medio de Tumer sirve para confirmarlo. En Ver- ruido,como hemos visto, es el siste-
y la comunicación para demostrar trasladarse entre áreas e incluso en- ne, por ejemplo, se muestra el signi- ma. 'En el sistema, d ruido y el men-
que .el ruido forma parte de la comu- tre realidades diferentes. El análisis ficado de enfrentarse al no conoci- saje intercambian sus papeles con
nicación.'; no puede eliminarse del estructural conduce inevitablemente a miento. El no conocimiento es el arreglo a la posición del observador
sistema. El ruido, en el lenguaje como la comparación, y por eso Serres tie- misterio —el ruido, podríamos decir y la acción del actor.". El ruido es un
en otros sistemas de comunicación, ne gran respeto por la obra de Geor- ahora— necesario para la constitu- comodín necesario para el sistema.
posee su equivalente en el propio ges Dumézil; porque éste fue capaz ción del conocimiento. El no conoci- Puede asumir cualquier valor y, pnr

116 117
SERRES SERRES

tanto, es impredecible, por lo que el plo, la tecnología de la información 3 Michel Serres, Le Tiers-Instrust, Pa- nuir, 1969.
sistema no es jamás estable. Por el transforma los sentidos. rís, Francois Bourin. 1991. Hermés II Linterférence, París, Minuit,
contrario, es el no conocimiento. Los La obra de Serres es un desafío al ' Cfr. los cinco volúmenes publicados 1972.
sistemas funcionan porque no fundo- buen sentido. A su juicio, no estimu- bajo el título de Herm& el dios mensa- Herm& 111. La traduction. París, Minuir,
nan. Lo disfuncional es esencial para lar al lector para que halle la cóheren- jero de los griegos: 1. La communication 1974.
(1969); 11, L'interférence (1972); III. La Surfules Verne, París, Minuir,
el funcionamiento. El modelo está li- cia en su trabajo —como ha hecho
bre de parásitos, libre de elementos traduction (1974); IV. La distribution 1974.
con otros— es dejarlo estéril y sujeto (1977); V. Le passage du nord-ouest Feux et signaux de brame. Zola, París,
estáticos (como en la matemática), al colapso que aguarda inevitable- 0 90 . Grasset, 1975.
mientras que el sistema está siempre mente a todos los sistemas cerrados. Michel Serres, The Parasite, trad. de Augusto Conzte. Lecons de pbilosophie
infectado de parásitos que le otorgan En la historia de la física, Serres ha Lawrence R. Schehr, Baltimore. Johns positive, Vol. I, París, Hermano, 1975.
su carácter irreversible. Es un cuadro afirmado que LucreCio se adelanta al Hopkins Universiry Press, 1982. Hennés IV. La distribution, París, Minuit,
de Turner. Con su representación de marco de la física moderna. De rerum 6 /bid., pág. 3. 1977.
los efectos aleatorios de nubes, lluvia, natura (De la naturaleza de las co- 7 Mol., pág. 12. El nacimiento de la fsica en e/ texto de
mar y niebla, Turner interpreta la se- sas.) se ha tratado convencionalmen- s !bid., págs. 12-13. Lucrecio (1977), Va/encia, Pre-Textos,
gunda ley de la termodinámica, la ley te como una obra poética con escasa i! Michel Serres, L'inteitérence. París, 1994.
Minuit, 1972, pág. 145. Hernies V. El paso del Noroeste (1980),
que Carnot hizo posible. Turner tra- relevancia para la ciencia moderna. Madrid, Debate, 1991.
1 ° Michel Serres, La communication,
duce a Carnot. Ésa es la intuición Pero, según explica Serres, la turbu- París. Minuit, 1969, pág. 121. Gendse, París, Graset, 1982.
poética de Serres. lencia de todo tipo es fundamental !! /Ud., pág. 32. Les dna sens, París, Grasset, 1985.
Dos figuras, por consiguiente, im- para el sistema de Lucrecio. Con la Serres, 773e Parasite, pág. 66. Staines, París, Francois Bourin, 1987.
pregnan la oeuvre de Serres: Hermes idea del clinamen —la variación infi- El contrato natural (1990), Valencia,
y Arlequín. Hermes, el viajero e inter- nita en el curso de la trayectoria de Pre-Textos, 1991.
mediario, permite el movimiento en y un objeto—, Lucrecio anticipa la tea- VÉASE TAMBIÉN EN ESTE LIBRO Atlas, Madrid, Cátedra, 1995.
entre las diversas áreas de la vida so- ría del desorden —entropía— de la
cial. El arlequín es un payaso multi- física moderna. Sin embargo, más que Bachelard, Canguilhem, Cavaillés.
OTRAS LECTURAS
color que representa el caos de la esto, Serres pretende mostrar que es
vida. Dos ámbitos de interés especial posible producir matemática a partir PRINCIPALES OBRAS DE SERRES Livroux, Bruno, •Postmodem? No simply
para quien viaja por el conocimiento de lo que escribió Lucrecío en el últi- Amodern!Steps towards an anthropo-
son los de las ciencias naturales y las mo siglo antes de Cristo. Le Systéme de Leibniz et ses mathénzati- iogy of science., Studies in :beHistory
humanidades. ¿Debe abrirse verdade- Por extensión, la historia de la ayes, 2 vols., París, Presses Universi- and Pbilosophy of Science, 21, 1 (mar-
ramente la ciencia a la poesía y el ciencia está también sometida a tur- mires de France, 1968 (un vol., 1982). zo de 1990), págs. 145-171, recensión
arte, o esto no es más que una idio- bulencia: está sujeta a conexiones Hennés L La conununication, Paris, Mi- de Statues de Serres.
sincrasia por parte de Serres? ¿Se tra- aleatorias de todo tipo entre diversas
ta de su truco personal? La respuesta áreas. Contra la rígida ordenación
es que Serres cree firmemente que la convencional, Serres propone el des-
viabilidad y la vitalidad de la ciencia orden relativo de la poesía, es decir,
dependen de hasta qué punto esté del milagro, el azar y la excepción.
abierta a su otro poético. La ciencia A su manera, la propia obra de Serres
sólo avanza si recibe una infusión de es un atisbo de ese milagro de la poe-
algo caído del cielo, algo impredeci- sía en una isla de orden.
ble y milagroso. El impulso poético
es la sangre vital de la ciencia natu-
ral, no su némesis. La poesía es el NOTAS
camino del viajero abierto a lo ines-
perado y siempre dispuesto a estable- ' La información sobre la historia de
cer nexos inesperados entre objetos y la termodinámica procede de Stephen
Mason, Historia de las ciencias, 5 vols.,
lugares. La forma que adoptan esos Madrid, Alianza, 1994, cap. 39.
vínculos está influida, desde luego, 1 Mason. A History of tbe Science&
por los avances técnicos; por ejem- pág. 496.
118 119
Historia estructuralista

Hablar de historia •estrucruralista• se considera, a veces, contra-


,.
diaorio. Puede suponerse que la historia la elaboran sujetos —en-
.,
tendidos como seres humanos sensuales—, y los estrucruralistas ha-
- blaron de la historia sin sujeto. Sin embargo, a través de la escuela
de los Annales, dirigida por Pernand Braudel, la noción de historia
se amplía para incluir el ritmo más lento de la historia geográfica; y
el cambio se mide, no sólo en relación con una conciencia inmedia-
ta de los hechos, sino en relación con los cambios a largo plazo que
están siempre produciéndose pese a la conciencia de los individuos.
La historia de largo alcance (longue duré& es, por tanto, historia de
cambios estructurales fundamentales, pero éstos pueden conocerse
., sólo a partir de sus modelos de realización; la estructura no determi-
na esas modificaciones.

121
Fernand Braudel enseñaba en una escuela secundaria
de Argelia, entre 1923 y 1925, descu-
Con su concepción de un tiempo brió el Mediterráneo, el tema de su
plural —una concepción evocada, en primera gran obra, y quizá la más
parte, por la noción de fatigue durée conocida, El Mediterráneo y el mun-
(largo alcance)—, Fernand Braudel, do mediterráneo en la época de Feli-
fundador de la versión de posguerra pe 11'. En 1925, Braudel completó su
de la revista histórica fírmales, aten- servicio militar en Renania y regresó
dió a la dimensión espacial de la his- a Argelia hasta 1932, mientras reco-
toria. Abrir la historia al espacio es, gía, durante todo este tiempo, mate-
en manos de Braudel, darle un aspec- rial para su doctoral d'état sobre el
to estructural, una faceta que no está Mediterráneo. Entre 1932 y 1935 en-
inmediatamente a disposición de la señó en los lycées parisinos de Pas-
conciencia de los actores históricos. teur, Condorcet y Henri IV, para
Si, para el historiador inglés R. G. Co- aceptar después un nombramiento de
Ilingwood, la historia consiste en las tres años en la Universidad de Sao
acciones de los hombres en el pasa- Paulo. El año que Braudel asumió el
do, Braudel añadió que la historia es puesto —1935— fue el año en el que
además el resultado de los efectos Lévi-Strauss llegaba a la misma uni-
lentos, a menudo imperceptibles, del versidad con el fin de iniciar su tra-
espacio, el clima y la tecnología so- bajo de campo para- Las estructuras
bre las acciones de los seres humanos elementales del parentesco. De su ex-
en el pasado. Por consiguiente, d periencia con una cultura diferente,
contexto, humano y natural, afecta a en Brasil, Braudel afirmaría más ade-
las acciones tanto como las acciones lante que fue «el mejor periodo de su
afectan al contexto. Pero, más que vida., un sentimiento repetido por
esto, Braudel da un carácter tempo- otros fugitivos juveniles de la Francia
ral al espacio y a aspectos como el metropolitana, como Dumézil en Es-
entorno natural: da carácter temporal tambul o Foucault en Uppsala.
a elementos que, en gran parte, se En 1938, Braudel entró en la École
habían tratado como si fueran intem- des Hautes Etudes como profesor de
porales. filología de la historia. Al empezar la
Braudel nació en 1902 en un pe- guerra, en 1939, fue llamado a filas y
queño pueblo francés de 250 habitan- en 1940 fue hecho prisionero hasta el
tes, Luméville-en-Ornois. A los veinte fin de las hostilidades. Durante su pe-
años era agrógé en historia. Mientras riodo de cautividad desarrolló el mar-

123
1312AUDEL BRALIDEL

co de su tesis doctoral, en especial la cliscursos. 2 , y, podríamos añadir, en- dad de la materia. Además, la lógica vas implica frecuentemente que cada
noción de los tres planos temporales. tender las pautas de la naturaleza de causa y efecto acompaña la ten- una reclama el derecho a reivindicar
Su tesis sobre el Mediterráneo se pu- además de los modelos de actividad dencia a ver los hechos aislados en que sólo ella puede explicar la natu-
blicó en 1949, año en el que fue ele- humana. un tiempo concreto, y no como parte raleza de la existencia. Braudel vio
gido para el Collége de France tras la Antes del enfoque de Annales, afir- de un complejo entramado de fuerzas que era necesario movilizar a todas
jubilación de Lucien Febvre. En 1947, ma Braudel, la literatura histórica se que interactúan con arreglo a una las ciencias sociales porque era esen-
con este último y Charles Morazé, centraba en la coarte durée (corto al- pluralidad de momentos. cial que una historia basada en la Ion-
Braudel fundó la famosa Sexta Sec- cance) o en lo que se conoce corno Por el contrario, la longue durée que durée fuera realmente polifa-
ción de 'Economía y ciencias sociales. las:aire événmenhelle (historia de los deriva de los .mil ritmos diferentes. cética.
en la École Pratique des Hautes Etu- hechos). La historia política y diplo- del tiempo social. Puede incluir el Si bien la obra de Braudel en tres
des. Se retiró en 1968 y en 1983 fue mática ha sido el ejemplo fundamen- tiempo de los cambios en el entorno volúmenes, Civilisailon matérielle
elegido miembro de la Academia tal de histoire événmentielle, aunque que es, según explica Braudel, la his- (Civilización u:a:Mau s, también ha
Francesa. Murió en 1985. no tiene por qué sedo. Con esta his toria más lenta. Tiende a ser de orien- captado la imaginación de especialis-
Indudablemente, la mayor aporta- toria tradicional y la fama que adqui- tación estructural, porque deriva de la tas y profanos, las verdaderas innova-
ción individual hecha por Braudel a rió en el siglo ax, no sólo se convier- forma en que muchos sucesos —que ciones de su trabajo histórico resultan
la literatura histórica y, más en gene- te la historia en un cuadro, una pueden estar representados en sedes evidentes, sobre todo, en su estudio
ral, a las ciencias sociales, es su teo- cosificación en la que el observador estadísticas— se organizan en distin- sobre el Mediterráneo. Las innovacio-
ría de la longue durée. Aunque al queda fuera y la idea de historia tos periodos de tiempo. Para el histo- nes que Braudel aportó a la literatura
principio surgió de manera intuitiva, como reconstrucción se elimina, sino riador de Annales, la estructura es histórica están ahí a la vista de todos.
por su deseo de capturar el rico tapiz que la teoría de que el problema de una construcción que puede conver- En primer lugar, Braudel no desa-
de un 'mundo; que interactúa con la historia está en el paisaje, •en la tirse en prisión si no se reconoce la rrolla una historia narrativa, al menos
otros en su historia monumental del propia vida., se vuelve inaccesible 3 . pluralidad radical de tiempos. Acep- no una historia narrativa de visión
Mediterráneo desde el siglo Lirt hasta Para Braudel, en cambio, no existe la tar la longue durée implica la disposi- única como la que se había heredado
el xvEr, la longue durée se hizo pro- historia unilateral, igual que no hay ción de cambiar todo: desde las pro- del siglo Ynx. Para Braudel, no existe
gresivamente más explícita a medida individuos abstractos. Por el contra- pias ideas hasta el estilo de escribir y un centro que permita actualizar una
que Braudel y la escuela de historia- rio, está siempre en movimiento un presentarlas, hasta aceptar un tiempo sola narrativa. Lo que hay son múlti-
dores de Annales alcanzaron su máxi- 'espectáculo fugaz.: se teje una •red que puede ser tan lento que se acer- ples perspectivas. Por consiguiente,
ma influencia en los años 60 y 70. La de problemas. hasta asumir <ien as- que •a lo inmóvil.. Claramente, Brau- al estudiar el mar Mediterráneo, Brau-
longue durée posee un objetivo más pectos diferentes y contradictorios». del defiende, aunque no lo dice de del se apresura a indicar que, para él,
global que la historia narrativa tradi- Una gran dificultad de la historia forma tan explícita, una concepción no existe un solo mar; hay muchos
cional y hace hincapié en la diversi- centrada en el corto o medio plazo es de la historia radicalmente abierta, la mares, una 'vasta y compleja exten-
dad de interacciones que constituyen que corre el peligro de convenirse en historia como sistema abierto, donde sión• a la que se enfrentan los seres
una unidad de base amplia: .coyun- pura crónica y carecer de profundi- cada subsistema, en la medida en que humanos. En el Mediterráneo se de-
tura y estructura., es el lema de Brau- dad, porque asume la homogeneidad puede distinguirse, dependería de su sarrolla la vida: la gente trabaja, pes-
del. Como en respuesta a la noción del tiempo y una singularidad de entorno. ca, entabla guerras y se ahoga en
de perspectivismo de Nietzsche, la de perspectiva. En su uso de la repre- Para llevar a la práctica sus aspira- esos mares, El mar se entrega a las
Braudel es una historia escrita simul- sentación, la historia de los hechos de dones en relación con la literatura llanuras y las islas. La vida en las lla-
táneamente desde muchas posiciones corto alcance tiende a utilizar un histórica, Braudel habló con energía nuras es variada y compleja; el sur,
o perspectivas diferentes, no basada, modo dramático junto con la parafer- en favor de un enfoque radicalmente más pobre, sufre los efectos de la di-
intencionalmente o no, en una sola nalia retórica que lo acompaña. Por interdisciplinario para las ciencias so- versidad religiosa (catolicismo e Is-
posición o un punto de vista único. ejemplo, una sociedad, o incluso toda ciales. Disciplinas como la economía, lam) e intrusiones —tanto culturales
Ademzis, en lugar de intentar distin- una cultura, se ha enmarcado fre- la geografía, la antropología y la so- como económicas— del norte, más
guir —normalmente en uno o más cuentemente mediante una metáfora ciología debían intervenir en los pro- rico. En otras palabras, el Mediterrá-
momentos determinados— entre gra- orgánica y biológica; igual que la per- blemas detectados por el historiador. neo no puede entenderse indepen-
dos de realidad, el objetivo es ahora, sona, la sociedad nace, atraviesa un Ninguna disciplina concreta posee el dientemente de lo que resulta exte-
como con la historia de Foucault, periodo de desarrollo y muere. La monopolio de la verdad sobre la exis- rior a él. Toda adhesión rígida a los
•comprender cómo se articulan los biografía pasa a ser el marco básico tencia humana o natural; pero la ló- límites es una roana de falsear la si-
modelos de práctica y las series de de análisis, al margen de la compleji- gica de sus presentaciones respecti- tuación. Equivale a ofrecer una •filo-

124 125
BRAUDEL IIRALII)EL

sofía de la historia- en lugar de escri- chos (histoire civénineiztielle). Es o


— utiliza el motivo de la nieve para de- que abarca un campo demasiado am-
bir la historia propiamente dicha'. La puede ser--- la historia de los indivi- mostrar cómo un aspecto del clima plio para captarlo en su conjunto.
grandeza del estudio de Braudel, duos. Para Braudel, éste es el tiempo de montaña se entrelaza con con la Braudel le otorga una posición prio-
pues, consiste en que ofrece un claro de las superficies y los efectos enga- vida de aldea en el borde del mar. La ritaria en sus escritos históricos. La
conocimiento de los efectos de la ca- ñosos. Es el tiempo de la courte dit- nieve que se lleva desde las monta- noción de .mundo- también es funda-
tegorización dogmática y la construc- rée propiamente dicho, y un ejemplo ñas en Italia es el origen de la crea- mental en el enfoque braudeliano.
ción de identidades problemáticas. es la Parte 3 de El Mediterráneo, que ción de los helados en las ciudades Como era de esperar, ha habido
En este sentido, Braudel es, con toda se ocupa de •hechos, política y per- durante el calor del verano. objeciones a Braudel y su escuela.
seguridad, el primer historiador au- sonas. Además, existe probablemen- Toca prácticamente todas las face- Del lado de los marxistas ha surgido
ténticamente postmoderno. te un cuarto plano temporal: el tiem- tas de la existencia. La marina y su la afirmación de que su trabajo es, en
Braudel amplía la dimensión del po del momento, o coyuntura, en el tecnología; la economía en toda su realidad, un solo punto de vista so-
Mediterráneo, de ser una individuali- que una situación específica —la en- diversidad, incluyendo la fuerza labo- bre el material que analiza, le guste o
dad estereotípica con un carácter de- trada de los ingleses en el Mediterrá- ral, el dinero, los precios, tos salarios, no a Braudel. La elección de la ma-
terminado (clima cálido y casas enca- neo durante el siglo xvi, y sus conse- el comercio, la guerra, las clases, la teria y la manera de tratarla son ine-
ladas), a ser un mundo; es decir, a ser cuencias— se estudia desde varios delincuencia y el crimen; el transpor- vitables. Otros han asegurado que
una pluralidad de subsistemas que ángulos. La coyuntura se abre hacia te y las comunicaciones. Todo ello existe una tensión más o menos irre-
interactúan entre sí, que penetran el tiempo social y geográfico. De he- constituye un rico tejido con la parte soluble, en su trabajo de historiador,
unos en otros. El imperio otomano cho, el desacuerdo de Braudel con la sumergida en el todo, pero en el que entre una orientación hacia el proble-
musulmán está inextricablemente li- sociología consistía en que, a su jui- la unidad del conjunto no es un ma —en la que participaría el mayor
gado al Mediterráneo; la vida católica cio, ésta dedicaba una atención exce- sistema cerrado individual sino la número posible de ciencias socia-
en las mesetas y colinas se entreteje siva al tiempo individual, el tiempo unidad de una diversidad. El Medi- les— y el deseo de captar la imagen
con la vida musulmana en las monta- de la coyuntura, sin tener en conside- terráneo se convierte en una red global. Otros han declarado que el
ñas; la vida nómada está vinculada a ración el tiempo de la longue durée. compleja, un fascinante abanico de uso extendido de series de datos es-
la existencia sedentaria. Es decir, el Como consecuencia, la sociología co- encrucijadas e intersecciones de todo tadísticos para revelar tendencias a
espacio se contempla como la inter- rría el riesgo de trazar una imagen tipo. Más importante, para captar largo plazo en todo, desde cambios
sección de toda clase de agrupamien- superficial de la humanidad. todo el significado del proyecto de climáticos hasta transformaciones en
tos espaciales. El Mediterráneo, explica Braudel, Braudel, es necesario comprender los hábitos alimenticios, convierte a
Tres planos temporales organizan es un conjunto de mares. Pero es que cada subsistema se mueve con los seres humanos en objetos cosifi-
la historia del Mediterráneo de Brau- también el desierto y las montañas. Si arreglo a su propio ritmo. Una forma cados y, por tanto, les arrebata su li-
del. El primer nivel es el del medio el desierto puede suponer una forma de definir lo que Braudel ha puesto bertad.
ambiente. Implica un cambio lento, nómada de organización social en la de manifiesto es una red rítmica. Sean o no válidos estos argumen-
casi imperceptible, un sentido de la que toda la comunidad se mueve, la Como él afirma, tos, es difícil ver cómo una mayor
repetición y los ciclos. La transforma- vida en la montaña es sedentaria. Sin tendencia a centrarse en las relacio-
ción puede ser lenta, pero hay trans- La ciencia, la tecnología, las insti-
embargo, antes de poder establecer tuciones políticas, los cambios con- nes, unida a la obligación de que
formación. Ése es el argumento de una norma rápida y estricta, es preci- ceptuales, las civilizaciones (para re- nunca deba escogerse un tipo de his-
Braudel. Se trata, pues, de un tiempo so tener en cuenta un tercer tipo de gresar a esa palabra tan útil), Poseen toria para excluir todos los demás
geográfico. El segundo plano tempo- organización social basado en la tras- sus propios ritmos de vida y creci- (siempre hay que estar abiertos a
ral es el de la historia social y cultu- humancia. La trashumancia (el movi- miento, y la nueva historia de las co- nuevos tipos de historia), puede de-
ral. Es el tiempo de grupos y agrupa- miento de la montaña a la llanura, o yunturas sólo estará completa cuan- jar de ser un punto de partida pro-
ciones, imperios y civilizaciones. En viceversa, en una estación concreta) do haya formado toda una orquesta ductivo para cualquier historia digna
este plano, el cambio es mucho más parece ser una combinación de exis- con todos estos elementos'. de tal nombre.
rápido que en el del entorno; sin tencia nómada y sedentaria. Braudel En lugar de rehuir la complicación
embargo, en ocasiones puede haber se esfuerza enormemente, como en e intentar un método único y mono-
un plazo de dos o tres siglos para otros momentos, para demostrar que gráfico en el que las variables estén Nous
poder estudiar un conjunto específi- una adhesión rígida a límites muy más o menos controladas, Braudel y
co de fenómenos, como el ascenso y precisos en esta materia es insoste- la escuela de Annales adoptan la Fernand Braudel, The illediterra-
la caída de varias aristocracias. El ter- nible. complejidad. Así, en vez de abando- nean and the Mediterranean World in
cer plano temporal es el de los he- Desde otro punto de vista, Braudel nar la categoría de civilización , por- the Age of Philig II, 2 vols., trad. de Silin
126 127
BRAUDEL

Reynolds, Glasgow, William Collins. Civilización material, economía 3, mate-


1972, vol. I, 1973. Vol. II, Fontana/Co- Halls= (1980), 3 vols., Madrid.
Ilins, 1975. Alianza, 1984,
1 Roger Charrier, Cultural History. L'Ere industrielle et la société d'aujour-
Between Practicas and Represe ntations, d'hui: le siécle 1880-1980, 3 vols.,
trad. de Lydia G, Cochrane, Cambridge, París, PUF, 1982.
Polity Press, 1988, pág. 61. Las civilizaciones actuales, Madrid, Tec-
' Fernand Braudel, On History, trad. nos, 1983.
de Sarah Matrhews, Chicago, University La dinámica del capitalismo, Madrid,
of Chicago Press, 1980, pág. 9. Alianza, 1985.
' lbíd., pág. 10. La identidad de Francia, Barcelona,
3 Fernand Braudel, Civilisation n'até - Gedisa, 1993.
n'elle, économie et capitalinne (XV -X1 ,7J1 La historiad' las ciencias sociales, Ma-
siécles), 3 vols., París, Armand Colín, drid, Alianza, 1994.
1980. Una lección de historia, Barcelona, Pensamiento postestructuralista
6 Braudel, 77,e Mediterranean, vol. I, Mondadori, 1994.
pág. 18.
7 ¡Ud., pág. 30.
El pensamiento postestructuralista, frecuentemente asociado con
OTEAS LECTURAS
la obra de Jacques Derrlda, examina el concepto de diferencia en
VÉASE TAMBIÉN EN ESTE LIBRO todas sus facetas y descubre que Saussure había dejado intactos ciér-
BINTUFF, John (ed.), Annales School and
Foucault, Lévi-Strauss. A rchaeology, Leicester, Leicester Uní- tos presupuestos (metafísicos) sobre la subjetividad y el lenguaje (por
versity Press, 1991. ejemplo, el predominio del habla sobre la escritura), vestigios del
KPArti, A. Bernard (ed.), Archaeology,
PRINCIPALES OBRAS DE BRAUDEL Anuales and Ethnohistory, Cambrid-
marco historicista del. que el propio Saussure estaba descontento. El
ge, Cambridge University Press, pensamiento postestructuralista examina la escritura como fuente pa-
El Mediterráneo (1949), Madrid. Espasa- 1992. li radójica de subjetividad y cultura, mientras que, en otro tiempo, se
Calpe, 1988. BURKE, Peter, La revolución historiográ- U
Escritos sobre la historia (1969). Madrid, fica francesa, Barcelona, Gedisa,
creía que era secundaria. Más importante, el postestructuralismo es
Alianza, 1991. 1984. una investigación sobre cómo ocurre este hecho.
Otro aspecto del pensamiento postestructural comprende el he-
cho de poner radicalmente en tela de juicio la naturaleza del otro
(Levinas, Batalle) y la relación entre sujeto y objeto. En la obra de.
Deleuze, inspirada por Nietzsche, el 'árbol. (la búsqueda de los orí-
genes) de la relación csujeto-objeto se compara con el «rizoma del
pensamiento horizontal, el pensamiento en movimiento constante.

128 129
Georges Bataille y la locura periódica de su madre. Sea
cierto o no, los escritos de Bataille,
• Resulta adecuado empezar a expli- tanto de ficción como científicos, se
car la obra de Georges Bataille con centran frecuentemente en el horror
fragmentos de su biografía porque, y la obscenidad. En su libro El erotis-
en cierto sentido significativo, sus mo, por ejemplo, Bataille destaca que
textos se encuentran en la encrucija- lo erótico es esencialmente una vio-
da entre la ficción y la biografía. lación del yo puro; está (inconscien-
Bataille nació en Billon, Francia, temente) unido a la muerte. Del mis-
en 1897. Su padre se había quedado mo modo, en Las lágrimas de Eros,
ciego antes de que naciera el hijo, Bataille afirma que la historia del arte
y quedó parcialmente paralítico demuestra que éste ha estado siem-
en 1900, cuando Georges no tenía pre vinculado al horror. Esa es la ra-
aún tres años. Bataille afirma, en sus zón de que se iniciara en cavernas
fragmentos autobiográficos, que la si- como las de Lascaux, en Francia.
(nación de su padre fue consecuen- Para algunos, la dedicación, o in-
cia de la sífilis. Pero su hermano lo cluso obsesión, de Bataille con res-
negaba. Fuera cual fuera la verdad, pecto al horror y la obscenidad en su
Bataille asegura haber conservado, de ficción y, en menor grado, en varias
su infancia, imágenes de horror que de sus obras teóricas más importan-
utilizó en sus obras de ficción. En es- tes, parece reflejar cierta inestabilidad
pedal está el recuerdo de los ojos mental. Al menos, ésta parece ser la
inexpresivos de su padre, totalmente opinión de André Breton en el Se-
abiertos mientras orinaba. Este re- gundo manifiesto surrealista cuando
cuerdo le sirvió, según decía, como se refiere a Bataille como un •caso•'.
base de transposición imaginada. Así, Y es cierto que, durante 1927 y quizá
en Historia del ojo, los blancos del durante más tiempo, Bataille estuvo
ojo se transforman en claras de hue- en tratamiento con el psicoanalista li-
vo y testículos de toro, y se asocian a beral Dr. Adrien Borel. Éste animó a
la orina y la muerte, especialmente la Bataille a poner sus obsesiones sobre
muerte de un torero, Granero, que el papel y, de ese modo, dio estímu-
recibió una cornada en el ojo. lo a la carrera literaria de su anali-
El horror que aparece tan a menu- zando.
do en la ficción de Bataille tiene su Incluso si Bataille se mantuvo en el
origen en el recuerdo infantil de la borde de la locura durante gran parte
muerte lenta y dolorosa de su padre de su vida, incluso si estuvo obsesio-

131
BATAILLE BATA1LLE

nado por el horror y la muerte, ha taille. El grito forma parte de una se- guera: la iluminación total oculta la za. Las guerras suministraban víctimas
dejado una obra que, según la opi- rie de términos que señalan la pre- oscuridad, muy real, del desconoci- para el sangriento ritual, en el que el
nión generalizada hoy en (lía, posee sencia del eje horizontal (el eje de la miento, del materialismo de base, la sacerdote hundía un cuchillo de ob-
una enorme profundidad e intensidad diferencia) en su pensamiento. Su ex- locura que el propio Hegel temió sidiana en el pecho del sacrificado y
teórica. Porque Bataille fue verdade- plicación de dicho eje se halla en su muy cercana en 1800, tras la muerte arrancaba el corazón aún latiente
ramente capaz de teorizar sobre los ensayo de 1930 .El ojo pineal•. La ve- de su padre. Lo que el sistema de que, a continuación, ofrendaba al sol,
temas centrales de sus obsesiones; getación, afirma aquí Bataille, ocupa Hegel no puede afirmar, y mucho dios supremo de los aztecas. Sin jus-
fue asimismo capaz de aportar su for- una posición exclusivamente en el menos integrar, es elemento que tificar en absoluto el sacrificio, Batai-
mación numismática a sus empeños eje vertical, mientras que la vida ani- equivale en él a su propia ceguera, lle muestra que se atiene a cierta ló-
intelectuales, uno de los cuales fue la mal tiende hacia el eje horizontal, una ceguera que predice la caída gica. En primer lugar, el sacrificio
creación de una revista etnográfica y aunque los animales luchan por le- del filósofo clarividente. Otra forma humano es una forma de introducir el
de arte, Documents, dirigida por él vantarse y asumir cierta verticalidad de expresarlo es decir que el sistema desequilibrio en una sociedad domi-
entre 1929 y 1930. En 1946, Bataille literal. de Reset, cpmo encarnación del eje nada por valores de cambio utilita-
creó la que se iba a convertir en una Para captar todo el poder de la vertical trascendental, no deja espacio rios. La degradación de las relaciones
de las revistas más famosas de Fran- compleja interacción entre lo hori- a la horizontalidad. Del mismo modo utilitarias se plasma en la esclavitud,
cia: Critique, que presentó los Prime- zontal y lo vertical en el pensamiento que el obelisco procedente de Egipto donde el esclavo no es más que un
ros trabajos de Blanchot, Barthes, de Bataille, debemos tener en cuenta y erigido en la Plaza de la Concordia objeto que deben utilizar las personas
Foucault y Derrida al público general. la influencia de Hegel. Como otros de París, en 1836, señala el lugar del libres. La víctima del sacrificio azteca,
Desde un punto de vista intelec- pensadores importantes, Bataille instrumento de la muelle en la Revo- en cambio, recibía frecuentemente un
tual, Bataille estudió en el liceo de aprendió su Hegel en las idiosincráti- lución —la guillotina—, el sistema fi- trato humano, e incluso un tratamien-
Reims. En 1913 pasó a estar interno cas conferencias de Alexandre Kojéve losófico homogeneizador de Hegel to especial; había un vínculo íntimo
en el colegio de Epernay donde, sobre la Fenomenología de la mente, oculta una bajeza material y hetero- entre la víctima y quien le había cap-
en 1914, obtuvo su primer baccalau- a las que asistió de forma intermiten- génea. turado. En realidad, la víctima muere
réat. En 1915 pasó el segundo y, tras te entre 1933 y 1939. Para Bataille, Gran parte de la obra de Bataille en el lugar del verdugo. Es su expe-
ser desmovilizado del servicio militar el sistema del conocimiento absoluto aborda la -bajeza materia., que se riencia de muerte, una experiencia
en 1917, fue aceptado en la École des de Hegel, en el que la conciencia se manifiesta en la obscenidad, en el expresada en angustia porque los
Chartes en París con el fin de estudiar apropia hasta de la muerte, represen- caso de su ficción, y en una serie de verdugos se identifican con el sufri-
para ser medievalista, y se graduó en ta el punto final de una especie de costumbres, en el caso de sus escri- miento del ejecutado. El sacrificio
segundo puesto en 1922. Ese mismo delirio de la razón. La luz, llevada tos teóricos. Dichas costumbres pre- -restaura al mundo sagrado aquello
año, Batalle viajó a Madrid para asis- al extremo, es tan luminosa que abre sentan el eje horizontal como eje de que un uso servil ha degradado y
tir a la Escuela de Altos Estudios His- la vía a una cierta ceguera, igual que sacrificio, pérdida, azar y erotismo. hecho profano.'. Lo sagrado, pues,
pánicos. En 1923 leyó a Nietzsche y mirar directamente al sol puede ce- Enseguida examinaremos cada uno permanece más allá del valor de cam-
Freud por primera vez y en 1924 le gamos, aunque el sol es la fuente de estos elementos. bio; no posee equivalente; de modo
nombraron bibliotecario del Cabinet de luz. El enfoque que Batalle hace La preocupación de Bataille por que no hay nada que pueda sustituir
des Médailles en la Bibliothéque Na- de Hegel se anticipaba, sin duda, en mostrar cómo los productos intelec- al acto de sacrificio. En una sociedad
tionale de Paris. su artículo de los años 30 sobre Pi- tuales esconden con frecuencia un en la que el valor de cambio se ha
Para 13ataille, Nietzsche es tan au- casso, -El sol podrido., en el que uti- elemento de base inasimilable le hecho casi por completo con el po-
tor como filósofo, en primer lugar, lizaba el mito de faro (que cayó a orientó hacia las etnografías de socie- der, no puede entenderse el sacrifi-
porque no excluye la autobiografía tierra después de volar tan alto por- dades cuyo vínculo social parecía cio. Sin embargo, sigue teniendo eco
(ficticia o no) de sus escritos filosófi- que el sol había derretido la cera de fundarse en prácticas que horrorizan en la mutilación corporal (como la de
cos y, segundo, porque, al negarse a sus alas) para ejemplificar el peligro a una sensibilidad occidental moder- Van Gogh), en la que el acto rompe
prestar su voz a ninguna causa, se del exceso de iluminación. Hegel, na. Así, en La Par: Inaudita (La parte la homogeneidad del yo e introduce
condena a la soledad. La filosofía de con su gran sistema idealista, vuela maldita) 2, el teórico del gasto como la heterogeneidad en la vida social.
Nietzsche se convierte en un grito en tan alto como ¡caro. Su filosofía sería, exceso afirma que la magnificencia Por una cierta paradoja, la ruptura
el desierto. Esta idea del -grito-, junto pues, la encarnación del eje vertical, de los artefactos culturales aztecas del sacrificio y la mutilación se con-
con las lágrimas, la angustia y la risa, quizá su manifestación más extrema. debe interpretarse en combinación vierte en un momento de continui-
asumen un lugar fundamental en el Pero Batalle explica que, en el siste- con la costumbre del sacrificio huma- dad. El testigo que experimenta la
propio panorama filosófico de Ba- ma hegeliano, existe un punto de ce- no: la belleza debe ir unida a la baje- angustia de la identificación con la

132 H 133
BATA1LLE BATAILLE

víctima lo comunica a otros, con lo ha considerado frecuentemente un gustia, por sí sola, define totalmente La tesis que surge progresivamen-
que establece una continuidad con síntoma de la limitación del conoci- el azar: el azar es lo que la angustia te de la lectura de Batailte es que la
los demás. Como consecuencia, •lo miento humano. Es decir, el azar ten- dentro de mí considera imposible. La ceguera es un elemento esencial del
sagrado es sólo un momento privile- dría un carácter subjetivo, más que angustia es la oposición al azar- 9. El conocimiento, que las elevadas altu-
giado de unidad comunitaria, una for- objetivo. Además, se ha supuesto que grito, la risa, las lágrimas, el excre- ras de la iluminación son correlativas
ma convulsiva de lo que normalmen- la causalidad y la noción asociada de mento (los productos de desecho del con las profundidades del desconoci-
te está sofocado.. determinación constituyen la verda- sistema), la poesía, todo ello provoca miento y la risa obscena. La vista —la
Estrechamente asociada al sacrifi- dera base de la explicación científica. el azar. El azar no puede integrarse teoría— no puede captar a su otro,
cio y lo sagrado está la noción de El conocimiento ha convertido siem- en ningún sistema, porque es el •otro« como acertadamente ha indicado De-
pérdida. Para Bataille, la teoría del pre el azar en una excepción. Esta del sistema. Por eso el azar no existe nis Hollier". Bataille demuestra que
potlatch de Marcel Mauss no demues- opinión se ha empezado a superar para Hegel. El azar es el amor fati el hecho de ver, y todo el trabajo teó-
tra que el intercambio sea esencial- sólo desde la aparición de la mecáni- (amor al destino), que se opone al rico, incluye un componente vital: la
mente un sistema de reciprocidad. ca cuántica en los años 20. gran equilibrio del edificio hegeliano. energía intelectual necesaria para sos-
Más bien, el potlatcb debe conside- Tres de los principales libros de El azar está ligado al sacrificio por- tenerlo. Por tanto, el agotamiento y la
rarse un ejemplo de la economía ge- Bataille —La experiencia interior, El que, como éste, es también una rup- fatiga a los que se refieren constante-
neral en la que el exceso y el lujo son culpable y Sobre Nietzsche-- se escri- tura con la identidad y la experiencia mente los textos de Bataille encuen-
los aspectos fundamentales. La eco- bieron entre 1941 y 1944, es decir, utilitaria basada en la determinación tran su análogo en el carácter relati-
nomía general es una economía de durante la ocupación de Francia. El de los hechos. vamente fragmentario de la oeuvre:
pérdida, desequilibrio y gasto sin be- azar figura de manera analógica, por En el erotismo, la sexualidad hu- en las explosiones de poesía, el nú-
neficio. No puede analizarse en fun- encima de todo, en cada una de ellas. mana alcanza su cenit como transgre- mero prolífico de obras ocasionales y
ción de lo que Bataille denomina la Cada una posee el aire de un diario, sión (regulada) de tabuesm. El erotis- el estilo ensayístieo. Estos indicios de
economía .restringida. de producción, el aire de contingencia que procede mo pasa a ser, en la teoría de Bataille, un gasto de energía son quizá lo
equilibrio y libros ajustados: la eco- de mezclar una transcripción de he- una via hacia la continuidad del ser máximo que el lector puede aproxi-
noma de la •utilidad clásica.. Todas chos cotidianos con recuerdos perso- en la muerte. Como individuo, cada marse a lograr un análogo de su pro-
las formas de exceso —que, por defi- nales. Por tanto, la •forma de cada persona es discontinua. El erotismo, pia ceguera.
nición, no poseen ningún equivalen- texto es más fortuita que predetermi- como violación de dicha discontinui-
te— entran dentro de la economía nada. En su introducción a El culpa- dad, es una fuente fundamental de
general. El exceso y la pérdida no tie- ble, Denis Hollier repite que lo que angustia; porque es también la viola- NOTAS
nen una función evidente en la vida está presentando no es realmente un ción, o transgresión, de las prohibi-
social; representan elementos necesa- libro, •Bataille no está interesado en ciones; la prohibición se da a cono- ' André Breton, Second Surrealist
riamente disfuncionales y hetero- dar a las ideas una forma sistemática cer mediante la transgresión. El Manifesto, en Manifestoesof Surrealisrn,
géneos. ni desarrollar una historia?. Sin em- erotismo confirma así la ruptura de lí- trad. de Richard Seaver y Helen R. Lane,
Bataille se ocupa del azar, sobre bargo, los escritos de Bataille están mites y fronteras, y provoca una fu- Ann Arbor, University of Michigan Press,
impregnados, en este sentido, de 1972, pág. 184.
todo, en dos textos 3. Pero el azar es sión de los seres, una fusión que da
Georges Bataille, The Accursed Sha-
algo más que un concepto en sus es- cierta lógica, basada en un deseo de pie a la comunicación de la angustia
re, vol. I, trad. Roben Hurley, Nueva
critos; es también parte de una prác- permitirse una especie de juego que debido a la pérdida de integridad. Por York, Zone Books, 1988.
tica. El texto de Bataille sobre Nietzs- permita atisbar el azar. En Sobre Nietz- ese motivo, el impulso erótico se ha lbíd., pág. 55.
che es, en si, una analogía del azar, sche está más claro este aspecto: el utilizado con fines religiosos. Y, en ' Georges Bataille, «The sacred«, en Vi-
del mismo modo que el surrealismo libro es, en parte, una narración coti- lugar de ser la antítesis de lo sagra- stens of Excess. Selected Writings, 1927-
pretendía, muchas veces, ser una diana de .jugadas de dados.. El azar do, el erotismo —como apertura al 1939, trad. de Allan Stoekl, Minneapolis,
analogía de la locura'. El elemento se convierte en la verdad de la vida, otro— es su verdadero fundamento. University of Minnesoca Press, 2 , impr.
del azar debe incluirse en cualquier equivale al desequilibrio llevado al Los seres humanos se unen a través 1986, pág. 242.
5 Véase Georges Bataille, Guilty, uad.
análisis de la práctica de escritor de eje vertical. Más intensamente, el azar de lágrimas, heridas y la vioiación de
de Bruce Boone, Venice, che Lapis
Bataille, porque así es como el azar tiene una vinculación explícita con la límites. El erotismo está claramente
Press, 1988, págs. 69-86; 077 Metzsche,
asume plenamente su puesto en el angustia. Ésta, como el azar, es una situado en el eje horizontal; sin em- trad. de Bruce Boone, Nueva York, Pa-
eje horizontal. Para valorar el azar en oscuridad imposible. .La angustia bargo, un sistema de prohibiciones ragon Press, 1992, pássim.
los escritos teóricos de 13ataille, recor- dice: "imposible": lo imposible está a —el eje vertical— es el requisito de Véase Elisabeth Roudinesco, Jac-
demos que, desde Laplace, el azar se merced del arar. Más aún: •La an- posibilidad de esa horizontalidad. ques Lacan & Co, .4 History of Psycboa-

134 135
DELEUZE DELEUZE

nalvsis in France, 1925- 1985. trad. de de Denis Hollier. trad. de Betsy Wing, Guattari, dos volúmenes de Capitalis- gador en el Centre National de Re-
jeffrey Mehlman, Chicago, University of Minneapolis, University of Minnesota mo et schizophrénie, KaJka y 'Rizo- cherche Scientifique (CNRS). Des-
Chicago Press, 1990, pág. 26. Press, 1988. Contiene textos de Barai- ma ,). Lecercle observa asimismo que
' Denis Hollier, -A rale uf unsatistjecl Ile y otros participantes en el College. de 1964 hasta su nombramiento,
desire-. Introduction ro garante, Guilty, Teoría de la religión, Madrid, Taurus, Deleuze es, -en la escena filosófica en 1969, como profesor de filosofía
pág vii. 1991. francesa, un extraño.= cuya obra ha • en Vincennes, por designación de
Georges Bataille, •Sur Nietzsche», merecido escasa atención crítica en Michel Foucault, Deleuze enseñó en
Oeuvres Completes, VI, París, Gallimard, su país, en gran parte porque .ha per- Ja Universidad de Lyon. También
1973. pág. 134. OTRAS LECTURAS manecido al margen de las relaciones en 1969 defendió su tesis doctoral,
9 Ihíd, maestro-discípulo en las que tantos Différence et répétition, y su tesina,
1 " Véase Georges Bataille. Eroticism, GILL, Carolyn (ed.), Georg,es Bataille: de sus colegas están envueltos- 3. Spinoza et le probléme de l'expression.
trad. de Mary Dalwood, Londres y Nue- Writing and 'he Sacred, Londres y En los paises de habla inglesa, por Se retiró de la enseñanza en 1987.
va York, Marion Boyars, 1987, reimpr. Nueva York. Routledge, 1994.
el contrario, Deleuze es posible:men- En términos generales, el argumen-
1990, pág. 63-70. HOLLIER, Denis, Against Architecture:
" Denis Hollier, Against Architecture: The Writings of Georges Bataille, trad. tú, jump_corLMcfieLFoncault y Jac- to de Diffé rente et répétition se funda
The Writings of George& Bataille, trad. de de Bersy Wing, Cambridge, Mass., ques Derrida, uno de los pensadores en la opinión de que, en la era con-
Be tsy Wing, Cambridge, Mass., MIT iv1IT Press, 1989. fitree-ses contemporáneas más men- temporánea, el juego de la repetición
Press, 1989. págs. 87-88. narre, John, •Introduction to Bataille. cionados. Ello resulta más asombroso y la diferencia ha sustituido al del
The impossible as (a practice of) wri- si-lb-ti-ene en cuenta que, a diferen- mismo y la representación. En efec-
ting-, Textual Practice, 7, 2 (verano de cia de sus colegas, Deleuze ha viaja- to, diferencia y repetición son indi-
VÉASE TAMBIÉN EN ESTE LIBRO 1993), págs. 1973-1994. do raramente fuera de Francia para cios de un avance hacia el pensa-
1'EFAN15, Julian, Hetero/ogy and the Post- exponer sus ideas. Si bien es cierto miento no figurativo y radicalmente
Baudrillard, Kristeva, Lévi-Strauss, modern: Bataille, Baudrillard, and
que Deleuze ha rechazado las •re- horizontal; y Deleuze es el practican-
Mauss. Lyotard, Sydney, Allen St Unwin,
laciones de maestro y discípulo., te supremo de dichas ideas. Como
1991.
PLOTNiTSKY, Arkady, Reconfigurations: es necesario reconocer el papel de veremos, la lectura que Deleuze hace
PRINCIPALES OBRAS DE BATAILLE Critica! Theory and General Eco- Nietzsche en su trayectoria filosófica; de Nietzsche ofrece un camino en el
nonly, Honda, University Press of Flo- pese a que, como Nietzsche, Deleuze laberinto de la horizontalidad. Pero
Historia del ojo (1928), Barcelona, Tus- rida, 1993. tiene pocos imitadores o ninguno, antes de pasar a esto, veamos lo que
quer& 1986. RICHMAN, Michéle, Reading Georges Ba- esta relación inimitable posee una ló- implica afirmar que el pensamiento
La experiencia interior (1943), Madrid, taille: Beyond the Gift, Baltimore, gica definitiva, la lógica de un pensa- de Deleuze es radicalmente horizon-
Taurus, 1989._ Johns Hopkins University Press, 1982. dor cuyo pensamiento es radicalmen- tal. Aunque los términos 'horizontal-
El culpable (1944), Madrid, Taums, 1986. &osó., Allan, -On Bataille-, Vale French te horizontal.
Studies, 78 (1990). Colección de ar- o •vertical», o sus variantes (el térmi-
Sobre Nietnche (1945), Madrid, Taurus, Deleuze nació en 1925. Se educó
tículos sobre Bataille. no deleuziano •rizoma , evoca ya la
1989.
La parte maldita (1949), Barcelona, 'ca - en el Lycée Carnot de París y estudió horizontalidad, pero ésta es de alcan-
ria, 1987. filosofía en la Sorbona entre 1944 ce más amplio), no figuran en reali-
L'Abbé C (1950), París, Minuit, 1950. y 1948: allí conoció, entre otros, a Mi- dad en ningún sentido explícito den-
El azul del cielo (1957), Barcelona, Tus- chel I3utor, Michel Tournier y tro de la oeuvro ,de Deleuze, sí
quets, 1985. Gines Deleuze Fratnois Chatelet. Sus principales tienden a iluminar su estructura y,
El erotismo (1957), Barcelona, Tusquets, profesores fueron Ferdinand Aliquié por tanto, poseen cierto poder expli-
1988. , Como Jean-Jacques Lecercle ad- (especialista en Descartes e intérpre- cativo.
La literatura y el mal (1957), Madrid, vierte en su excelente libro sobre la te de la filosofía del surrealismo), El pensamiento radicalmente hori-
Taurus, 1987. filosofía y el délirel , los escritos filo- Georges Canguilhem (supervisor de zontal puede compararse con otras
Las lágrimas de Eros (1961), Barcelona, sóficos de Gilles Deleuze han ido Foucault) y Jean Hyppolite (especia- formas de pensamiento sólo con difi-
Tusquets, 1981. desde obras de historia de la filosofía
El verdadero Barba-Azul: la tragedia de lista en Hegel). Tras obtener su agré- cultad; porque los medios para tradu-
(obras sobre Hume, Nietzsche, Kant, galloh en filosofía en 1948, Deieuze cirlo son difíciles de formular. Dicho
Gilles de Rais (1965), Barcelona, Tus-
Bergson, Spinoza, respectivamente) enseñó dicha materia hasta 1957 en pensamiento actúa, en gran parte,
quers, 1983.
Mi madre, Barcelona, Tusquers, 1986. hasta trabajos de filosofía crítica y crí- varios ()leeos. Entre 1957 y 1960 im- con arreglo a sus propias normas y
Ala dame Edwarda, seguido de El muer- tica literaria -no convencional. (D9'- partió historia de la filosofía en la conceptos. Por ello Deleuze, signifi-
to, Barcelona, Tusquets, 1988. renco Ci répétition, Logigue da sens Sorbona, y durante cuatro años, a cativamente, no ha asumido jamás la
77.w College of Sociology, 19374939. ed. (Lógica del sentido] y, con Félix partir de 1960, trabajó como ínvesti- historia de la filosofía tal corno la dis-

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DELEUEE DELEUZE

ciplina la ha definido convencional- pleto, destacan varios elementos. El fiere. Así, para Platón, el concepto Tampoco la moralidad es una serie
mente en Francia. Para él, un filósofo primero es el hecho de que, para •bien. es distinto de toda manifesta- de ideales a los que puede aspirar
que piensa (es decir, que crea un he- Nietzsche —a diferencia de Hegel—, ción material de ese bien; se supone alguien. La expresión es un modo de
cho en el pensamiento) se aparta de •origen' significa una pluralidad de que el mundo de las apariencias está estar y actuar en el mundo, mientras
la historia de la filosofía, entra en el diferencias. Esta idea va unida al uso separado y diferenciado del mundo que la moralidad es •una ética de la
desierto, en palabras de Nietzsche. que hace de la noción de genealogía. de la esencia, o realidad. Por el con- alegría que perfecciona 'el poder de
Tal vez resulta paradójico que esta La genealogia es la colocación de los trario, el Nietzsche de Deleuze recha- actuar5. En el caso de Proust, el énfa-
horizontalidad radical no lleve a un antepasados en un momento determi- za tales distinciones. Para él, bien y sis está en los signos, no en los sig-
orden de igualdad (todos en el mis- nado con el fin de separarse de ellos. mal son valores; no hay bien objeti- nos como representaciones de obje-
mo plano), sino a la inestabilidad de A.si, el idealismo de Pluton, las críti- vo sólo valores subjerlY4.5 0. más- es - tos, significados o verdad, o —como
las diferencias. La horizontalidad ra- cas de Kant y la dialéctica de Hegel toctamente, sólo hay valones, o sea, podría haberse pensado respecto a
dicales pues, el cuasi-orden de-Tu
, son importantes para Nietzsche en la direrencias; el mundo aparente, .sub- En busca del tiempo perdido— en los
'clerencia radical, y la base de com- medida en que su filosofía es un dis- !emita., es el único mundo que existe. signos como vehículos para el recuer-
paraHón se convierte en un proble- tanciamiento positivo de todos ellos, Nietzsche da así un vuelco al eje ver- do, sino en los signos como entida-
ma. El eje horizontal no implica unos logrado a través de una reevaluación. tical de la verdad objetiva en favor des que enseñan algo. En los textos
límites firmes entre identidades, Para él, pues, como demuestra De- del eje horizontal de los valores. De- de Proust, interpretar esos signos es
como ocurre con el pensamiento fi- leuze, la genealogía es, más que una leuze se siente muy atraído por ello. atravesar un proceso fundamental de
gurativo basado en el Mismo, sino interpretación, esencialmente una La horizontalidad en el pensamien- aprendizaje que, en el caso de la obra
que produce la permeabilidad de to- evaluación. Ea evaluación supone un to, iniciada en la era moderna por de arte, muestra que están unidos a
dos los límites y fronteras. Ésa es la distanciamiento; el distanciamiento Nietzsche, abre paso a la mente crea- las esencias y que éstas se constitu-
razón de que el pensamiento hori- es el componente de la diferencia, tiva, como una forma de poesía, tal yen a través de las diferencias (no
zontal evite (sin oponerse a él) el Nietzsche necesita a los filósofos del vez. Y, de hecho, Nietzsche no sólo son unidades, sino cualidades únicas)
pensamiento vertical cotidiano, la je- pasado sólo en el sentido en el que es un gran estilista, sino que convier- en las que los sujetos están involucra-
rarquía burocrática, el pensamiento un guerrero necesita un enemigo dig-. te el exceso de estilo en parte de su dos. Deleuze muestra también que,
que incluye la consolidación de iden- no para confirmar sus proezas; no filosofía. Dekuze advierte que los cuando Leibniz inventó el concepto
tidades. hay nada reverencial en su utilización grandes filósofos han sido siempre del .pliegue en filosofía —un con-
Teniendo en cuenta la horizontali- del pasado. Deleuze afa_ a ue grandes estilistas. El estilo confirma el cepto inspirado por el periodo barro-
dad radical, ¿cómo interpreta Deleuze pensamiento de—iche es decidi- carácter incoMparable del filósofo de co de la historia del arte—, abrió el
a Nietzsche? ¿El hecho de que lea ver- damente antidialerticoy sosp_eriloso la diferencia. El estilo, además, con- camino a una nueva forma de ejercer-
daderamente a Nietzsche (un filósofo de todas las identidades. El objeto vierte la filosofía en práctica, en el la como la construcción de figuras
del canon, por así decir) no hace sos- contra el que se enfrenta el filósofo sentido de que no hay un sujeto fi- disyuntivas. El pliegue es el modo de
pechosa la idea de que es ajeno a la de la diferencia es .la jerarquía de lósofo trascendental por encima de unidad de esas figuras (por ejemplo,
historia de la filosofía? Aquí es preci- fuerzas. —o intensidades— que lo los productos de su filosofía, igual la mónada). Más exactamente, el plie-
so hacer dos aclaraciones. Primero, expresan. Esa jerarquía de fuerzas es que no existe un actor separado de gue es la relación de diferencia con-
Deleuze se considera un filósofo y el valor del objeto'. Si el objeto es sus actos ni una causa separada sigo mismo. Por último, lo horizontal
trabaja con el material que le ofrece siempre, para Nietzsche, un juego de de sus efectos. •Sujeto., oidor. y •cau- aparece en la lectura de Lewis Carroll
la historia (el canon) de la filosofía. fuerzas, ello significa que, en reali- sa• son nociones metafísicas caracte- en un libro —Tbe Logic of Sense-
Ser un filósofo es relacionarse con la dad, es otro sujeto; o, más bien, la fi- rísticas del eje vertical. Dicho eje en- construido o ensamblado en una se-
obra de otros filósofos. Segundo, losofía de Nietzsche empieza a hacer cama todo lo que está atrincherado y rie. La serie, por definición, puede
Nietzsche es tangencial respecto a la problemática la distinción entre suje- es relativamente inmutable, mientras proliferar; y, como señala Lecercle, •la
historia de la filosofía y Deleuze lo to y objeto. Sujeto y objeto son cate- que el eje horizontal está siempre en proliferación es siempre una amena-
interpreta de forma particular, subra- gorías metafísicas; presuponen las movimiento. za para el orden. 6. Lo horizontal se-
yando la importancia de los concep- nociones de unidad e identidad. Son Deleuze hace un gran uso del prin- ría, por tanto, equivalente a la proli-
tos nietzscheanos de •regreso eterno. categorías de una filosofía •vertical. cipio de horizontalidad en sus inter- feración de la serie.
y .voluntad de poder.. (como la de Hegel). La faceta única pretaciones de Spinoza, Proust, Leib- En su colaboración con Félix
Aunque la lectura que Deleuze de toda fi loso fí a vertical es la separa- niz y Lewis Carroll. Así, para Spinoza, Guattari, el principio de horizontali-
hace de Nietzsche es demasiado com- ción, dentro de ella, de la verdad del •expresión. no es una apariencia me- dad que caracteriza la filosofía de
pleja para explicarla aquí por com- concepto y la realidad a la que se re- diante la que se expresa una esencia. Deleuze es totalmente visible en la
138 .1 139
DELEUZE DERR1DA

crítica de Freud y el psicoanálisis. toso/36y, trad. de Hugh Tomlinson. Nue- BURCHELL. Graham, .Imroduction ro De-
un cuerpo corno el político, siempre
va York, Columbia University Press, leuze•, Economy and Socimy, 13
Para Deleuze y Guattari, la teoría del en proceso de formación y deforma-
1983, pág. 8. (1984), págs. 43-51.
complejo de Edipo de Freud sirve ; ción. El cuerpo sin órganos se produ-
Gilles Deleuze, S'Innata: Practica( HARDT, Michael, Gules De/cure: Ali
para confirmar el predominio del ce en una síntesis conjuntiva, y no es Pbilosophy, trad. de Robert Hurley, San Apprenticeship in Philosophy, Minnea-
pensamiento jerárquico, •en árbol.. El ! ni una imagen del cuerpo ni una pro- Francisco, City Lights Books. 1988, pá- polis. University of Minnesota Press,
principio de Edipo, afirman, conduce yección. En otras palabras, el cuerpo gina 28. 1993.
inevitablemente a la idea de un he- sin órganos es .rizomático y no en- 6 Lecercle, Philosopby through the LECERCLE, Jean-Jacques, Philosophy
cho original, o trauma, que los auto- gendrado ni en árbol. Looking-Glass, pág. 95, tbrough the Looking-Glass, La Sane,
res del Anti-Edipo juzgan poco ima- En conjunto, no cabe duda de que Illinois, Open Court, 1985, págs. 86-
ginativo y reductivo. A diferencia de Deleuze es uno de los filósofos crea- '17 y 160-197.
VÉASE TAMBIÉN EN ESTE LIBRO PATFON, Paul, Conceptual politics and
Lacan, Deleuze y Guattan rechazan la tivos más inseguros de la era contem-
che war-machine in Mine Plareaux.,
teoría del deseo basada en la caren- poránea. Aunque escribe de s de la
Bataille, Freud, Lacan, Nietzsche. Substance (1984), 44/5, vol. XIII,
/ cia y, de hecho, rechazan también el posición de alguien sumergido en la núms. 3-4, págs. 61-80.
I concepto freudiano de represión. historia de la filosofía, sus ideas pa-
Para Freud, la posibilidad de la dis- recen haber tocado una cuerda de- PRINCIPALES OBRAS DE DELEUZE
tinción entre sujeto y objeto depende mocrática en numerosos países de
1 del concepto de represión. La repre- habla inglesa. Hay que preguntarse, Empirismo y subjetividad (1953), Barce- Jacques Derrida
sión se produce en el proceso de se- no obstante, si la búsqueda radical lona, Gedisa, 1981.
paración de la madre y el niño y el Nietzsche 3 , la filosofa (1962), Barcelo- Recientemente, Jacques Derrida ha
de la horizontalidad inspirada por
na, Anagrama, 1994. añadido otra orla a su obra con un
acceso de éste (en palabras de Lacan) Nietzsch-e-ii-o-PWifilbergar su pro-
Proust y los signos (1964 y 1970), Barce- libro sobre Marx. Su filosofía decons-
al orden simbólico, el orden de la ley pia clase de pureza. Porque parece
lona, Anagrama. 1972. tructora, afirma, no ha sido nunca
y el •nombre del padre.. Nuestros au- que nos encontramos, al menos en El bergsonismo (1966), Madrid, Cátedra,
tores rechazan enérgicamente este los textos más abiertamente políticos antimancista en ningún sentido senci-
1987.
• principio paterno•, el principio del llo. De modo que muchos están aho-
de Deleuze, con un nietzscheanismo Differénce et repetition, París, Presses
origen como identidad. Para ellos no sin reservas; el .sí. de Nietzsche se Universitaires de France, 1968. ra expectantes, quizá sin razón, para
existe distinción entre lo individual Lógica del sentido (1969), Barcelona, ver si existe verdaderamente un ele-
eleva a la enésima potencia y el •o•
—definido por el deseo— y la co- se elimina. En la prisa por evitar la re- Paidós, 1989. mento político en la gramatología de
lectividad, definida por la ley; sólo presión y lo negativo en beneficio de Spinoza. fflosofia práctica (1981), Barce- Derrida.
existe el deseo social. Como conse- lona, Tusquets, 1984. Hijo de una familia de judíos arge-
una creatividad sin trabas, es impor-
La imagen-movimiento: estudios sobre linos, Jacques Derrida nació en 1930
cuencia, el deseo está siempre en tante preguntar si, como han indica-
cine, 1(1983), Barcelona, Paidós, 1994. en Argea liv 546
11 a Erán'élreint,52'1
movimiento, siempre compuesto por do varios psicoanalistas, el resultado
La imagen-tiempo: estudios sobre cine,!! Értrclan-en la Ecole Normale-Supér
elementos diferentes dependiendo de de dicha creatividad podría ser una (1985), Barcelona, Paidós, 1987.
la situación; es una especie de máqui- rieure (rue d'Ulm) de París, Derrida
disminución de la guerra (organizada El pliegue: Leibniz y el Barroco (1988),
na, más que un teatro de representa- verticalmente), pero un incremento empezó a captar la atención del pú-
Barcelona, Paidós, 1989.
ción edípica. Las expresiones, •má- en el potencial de violencia. La im- Qu'en ce que la pbilosophie? (con FelLx
-
blico general a finales.de 1965, cuan-
quinas de deseo. y •cuerpo sin Guattari), Paris, Minuit, 1991. do publicó dos largas reseñas de li-
portancia de la filosofía de Deleuze
órganos-, refuerzan la horizontalidad Critique et dintel:re, París, Minuit, 1993. bros sobre la historia y la naturaleza
exige que se investigue plenamente
de la teoría. Hemos visto que el de- esta cuestión. Conversaciones, Valencia, Pré-Textos, de la escritura, en la revista parisina
1994. Critique'. Estos textos formaron la
seo no está basado en la carencia
—que es negativa—, sino que siem- base del libro más importante y, tal
pre está en movimiento y en trance NOTAS vez, más conocido de Derrida, De la
OTRAS LECTURAS
de reformarse: es un proceso afirma- gramatologia.
' Jean-Jacques lecercle, Philosophy Varias tendencias importantes
tivo de flujos y líneas de vuelo. El BOGUE, Ronald, Deleuze uncí Guattari,
through the Looking Glass: Language,
-
constituyen la base de la aproxima-
•cuerpo sin órganos. (el término está Londres y Nueva York, Routiedge,
Nonsense, Desire, La Sane, Illinois, Open ción de Derrida a la filosofía ,y,,Inás
tomado de Antonin Artaud) es, quizá Court, 1985, pág. 90. 1989.
previsiblemente, no un cuerpo orgá- BOUNOAS, C. V. y OLKOWSKL D. (eds,), en cpocretO7rinaTICT11-1-Préidental
¡Ud, pág. 91.
nico (un cuerpo con órganos, •el Deleuze and the Theatre of Philoso- de pensamiento. Se trata, en primer
1 ¡Ud.
cuerpo de la reducción edipica.), sino phy, Nueva York, Routledge. 1993. lugar, de una preocupación por refle-
' Gines Deleuze, Nietzsche and Phi-

140 141
D ERRI DA DERRIDA

jar y socavar la dependencia,de dicha el carácter


_ (lela tradición metafísica y conocer el mundo; pero esa media- términos positivos., Derrida advirtió
66respecto ala Logic '''''' occidental y su base en la ley de cTórdél 'Cspejo (esas impurezas) tie- cliniitrisYricturalistas más recien-
ideMidad. La lógica de la identidad Oen:cid:íd. A simple vista, los resulta- nen que quedar excluidas del proce- tes ni el propio Saussure habían va-
deriva especialmente de Aristóteles y, dos de dicha investigación parecen so de conocimiento; lo hacen posible, lorado plenamente las repercusiones
, r en palabras de Bertrand Russell, com- celielar-una.traclición llena de parado- pero no están incluidas en el proce- de esta idea. La diferencia sin térmi-
prende los siguientes rasgos esen- jas y aporías lógicas como la siguien- so. O, si lo están, corno en la filosofía nos positivos significa que esa dimen-
ciales: te, de la filosofía de Rousseau. de los fenomenólogos; pasan a equi- sión del lenguaje debe pasar siempre
Rousseau afirma en cierto momen- t ;1.:) valer, también ellas (conciencia, sub- inadvertida, porque, en términos es-
1. La ley de la identidad: "Lo que __
to que sólo debería escucharse la voz jetividad, lenguaje), a una especie de trictos, no puede conceptualizarse.
es, CS.•
de la naturaleza. Esta naturaleza es presencia idéntica a sí misma. Con Derrida,li diferencia se convier-
2. La ley de la contradicción:
idéntica a sí misma, una plenitud a la --vEl proceso de •deconstrucción. que te en el prototipo de lo que está aún
'Nada puede ser y, al mismo tiempo,
que no puede añadirse ni sustraerse investiga los fundamentos del pensa- fuera . clel ; alcance del, PellsaMiento
no ser..
nada. Pero nos llama también la aten- miento occidental no lo hace en la es- metafísico .occidental, por la condi-
3. La ley del medio excluido:
ción sobre el hecho de que la nmura- ; peranza de poder eliminar estas pa- ción de posibilidad de éste. Desde
'Todo debe ser o no ser• 2 . -
leza, a veces tiene carencias, como : radojas o contradicciones; tampoco luego, en la vida diaria la gente ha-
Estas deyes tidel_pensamieuto_no cuando una madre no puede produ- • pretende ser capaz de escapar a las bla enseguida de diferencia y diferen-
presuponen una coherencia . 16-
sólo_..., cir suficiente leche para el niño que exigencias de la tradición y crear un cias. Decimos, por ejemplo, que •b
-
gica, sino que aluden a algo igual- amamanta. Esas carencias pasan a sistema por sí solo. Laviue_hace (que posee una cualidad específica)
irielte profundb y característico de juzgarse como algo corriente en la reconocer oyese ve ,obllgado2 utili- es diferente de .y• (que tiene otra
esa tradición, el hecho de que existe naturaleza, si no una de sus caracte- zar, los_mismoiconceptos,que,cousi- cualidad específica), y normalmente
una realidad esencial —un origen— rísticas más significativas. De modo dera insostenibles_en relación.con queremos decir que es posible enu-
al que se refieren dichas leyes. Para que, a juicio de Rousseau, la_natu- • raspes que se les atribuyen. Es decir, merar las cualidades que constituyen
.;., mantener la coherencia losica, este raleza
. .autosuficiente
„. también_tiene también este proceso debe mantener esa diferencia. Sin_embargo, esto es
origen debe ser 'sencillo" (es decir, li- carencias, nos dice. Derrida'. La caren- (al menos, provisionalmente) dichas atribuirle términos positivos —.supo-
bro...de... contradicciones), homc2Rén .eo cia pone en peligro esa autosuficien- pretensiones. ner que puede tener forma de fenó-
(de la misma sustancia, 'da - mismo cia, es decir, la identidad o, como El propósito de la deconstrucción meno—, de modo que no puede ser
I
I orden), islt_ itisp_o_presente_ance,si- prefiere Derrida, la autopresencia de no es sólo_ dernossrar que, ,desde_el la -diferencia anunciada por Saussure,
1 mismo, (es decir, separado y distinto la naturaleza. Ésta sólo puede preser- que no puede conceptualizarse. Así
Pull.1224g.viffia (1.12 5 (1fic9: s.e.,Ve que
de toda mediación, consciente de_sí var su autosuficiencia si se cubre esa las 'leyes" aparece la primera razón paractneo-
. del
, pensamiento tienen
mismo sin ningún vacío entre el ori- carencia. Sin embargo, de acuep rencias. Más bien, la tendencia que se logismo de Derrida: quiere distinguir
gen y - la conciencia). Claramente, di- ceilia_lbgica-deJaidentidad, ál la tiGS-édvIl en la obra de Derrida es la la diferencia conceptualizalile dei
,5-•I chas •leyes• implican la exclusión de naturaleza requiere un complemento 1/4, 0- sentido Común cle.ttriadilecencla que
ell.efee tes,
4 31
I' • ciertas características, a saber: com- no_ puede ser ;autosuficiente (idéntica 4`12 :1, 131" c9.-R aión....? °c...P. 19
abrir el campo -filosófico para que do rae eii" el orden de lo mismo
a sí misma); porque la autosulden- I' , . •.
plejidad, mediación y diferencia; es pueda seguir siendo el terreno de la para recibir una :denudad mediante
decir, rasgos que invocan 'impureza. cia . y la carencia son opuestas; la base un cbriceptd. La diferencia no es una
t
.... 1I o complejidad. Este proceso de ex- de una identidad puede consistir en
creatividad y la invención. La gócion
de diferencia, o différance, nos lleva idénifdad: tampoco lo es la diferencia
clusión ocurre en un plano general, una u otra, pero no ambas, si se quie- quizá a la segun-da tendencia mis vi- entre dos identidades. La diferencia
metafísico, en el que, además, llega a re evitar la contradicción. Este ejem- sible en su trabajo, estrechamente es la diferencia diferida rjrfralree'd,
establecerse todo un sistema de con- plo no es una excepción. La impure- unida al deseo de conservar la creati- g verbo 7/7;Tér-éncrifib "diferir. en
ceptos (sensato-inteligible; ideal-real; za de esta identidad o la destrucción vidad de la filosofía. - español, significa 'diferenciarse. y
interno-externo; ficción-realidad; na- de la autopresencia son realmente Diffirance es un término que De- 'aplazar.). La différance nos advierte
turaleza-cultura; habla-escritura; acti- inevitables. Porque, en términos más rrida acuñó en 1968, tras sus investi- sobre una serie de términos muy im-
vidad-pasividad, etc.) que rige la ac- generales, cualquier origen aparente- gaciones sobre la teoría del lenguaje portantes en la obra de Derrida y
tuación del pensamiento en mente 'sencillo" tiene, como condi- de Saussure y los estructuralistas. cuya estructura es inexorablemente
Occidente. ción de posibilidad, un no origen. Los Aunque Saussure se había esforzado doble: fármaco (tanto veneno como
A_ tragls-del-método-Ilamado.-cle- sere,s humanos necesitan la media- ,•>.*) para demostrar que el lenguaje, en,su antídoto), suplemento (excedente Y
onskrucciógr, Derrida ha iniciado cien dfliconciencia, o d espejo del b, - forma más general, podía „ente/II:lel:se añadido necesario), himen (al mismo
na investigación fundamental sobre lenguaje, para conocerse a si - Mi-sillas- como un sistema de diferencias .sin tiempo dentro y fuera).
.1._
142 143
24..:
£
- t
DERRIDA FOUCAULT

texto •primario en una fuente de plica la posibilidad de falsificación de 54. De la gramatología (1967), Buenos Ai- Michel Foucault
nueva inspiración y creatividad. Aho- las firmas. res, Siglo XXI, 1971.
ra el crítico y lector no se limita ya a En resumen, el empeño filosófico La escritura y la difemncia (1967), Bar- Nacido en Poitiers en 1926, Michel
interpretar (cosa que, de todas for- de Derrida pretende deconstruir viejos celona, Amhropos, 1989. Foucault obtuvo su agrégation a los
mas, no era nunca exactamente así), Posiciones (1972), Valencia, Pre-textos,
lemas omnipresentaTfiti'COM'ci aPare- 1977. veinticinco años y, en 1952, un di-
sino que se convierte en autor por sen tanto en él trabajo académico La diseminación (1972), Madrid, Funda- ploma en psicología. Durante los
derecho propio. tomo en el lenguaje de la vida cotidia- mentos, 1975. años 50 trabajó en un hospital psi-
Una vez más, aunque el sentido la. El leneuaie diario no es neutral. Afárgenes de la filosofía (1972), Madrid. quiátrico y en 1955 enseñó en la Uni-
común tiende a suponer que la itera- Cátedra, 1989. versidad de Uppsala, en Suecia. Su
bilidad es una cualidad más o menos ; culturales de...toda„Pna_tradición. Al Glas. París, Galilée, 1974. primer libro importante, Folie er dé-
accidental del lenguaje, de modo que iSnic).tieMpo, la reelaboración crítica La tedié en peinture, París, Flammarion, raison: Histoire de la folie á Page das-
las palabras, expresiones, oraciones, b base filosófica de dicha tradición 1978. sigue (Historia de la locura en la era
etc., pueden repetirse en diferentes oduce, quizá de manera inesperada, Espolones: los estilos de Nietzsche (1978), clásica), se publicó en 1961 después
contextos, ésa es precisamente la nuevo énfasis en la autonomía y Valencia, Pre textos, 1981.
-
de que lo presentara como doctoras
La Carta postale. De Socrate á Freud et
cualidad que, a juicio de Derrida, se- catividad individuales del investiga- au - delá, París, Flamjmañon, 1980. d'état, bajo la dirección de Georges
para de forma irrevocable el plano r, filósofo y lector. Quizá este ele- Signéponge Signsponge (en inglés y fran- Canguilhem, en 1959. Murió de una
del significante y el plano del signifi- mto de la ganiaAclogía, antipopulis- cés), trad. de Rochard Rand, Nueva enfermedad asociada al sida en 1984.
cado. Por tanto, si el significado se re- Pero antiplatónico, sea la principal York, Columbia University Press, 1984. En abril de 1970, Foucault fue ele-
laciona con el contexto, no existe, mribución de Derrida al pensamien- La filosofía como institución, Barcelona, gido para la cátedra de •historia de
j con respecto a la estructuradérlén- de la posguerra. Granjea, 1984. los sistemas de pensamiento. en el
ji%ç,ningún contexto adecuado que Psyché: inventions de l'autre, París, Ga- Collége de France. El resumen de su
c:Ifrezc aj j prueba de un jsignificado. de- lilée, 1987. primer curso, llamado •La voluntad de
finitivo. Él coniexto no está vincula 'Some statements and truisms,..., en Da- verdad., e impartido allí en 1970-
do, como ha explicado Jonathan Cu- Véase Jacques Derrida, •De la gra- vid Carroll (ed.), 77e States of Theory
Nueva York, Columbia University 1971, habla de .prácticas discursivas.
Iler. El debate entre Derrida y el mmatologie (1)., Critique, 223 (diciem- y dice, entre otras cosas:
bre de 1965), págs. 10161042; y •De b Press, 1989.
filósofo norteamericano John R. Searl, grammarologie Crilique, 224 (ene- Del espíritu: Heidegger y la pregunta,
sobre la teoría de los •performativos. Estos grupos de regularidades [en
ro de 1966), págs. 23-53. Valencia, Pre-textos, 1989. las prácticas discursivas) no coinci-
de J. L. Austin, gira precisamente en Bertrand Russell, The Problerns of El otro cabo (1991), Barcelona, Serbal,
1992. den con obras individuales. Aunque
torno a esta cuestión. Austin intenta- Philosophy, Londres, Nueva York, aparezcan en ellas, incluso si pare-
ba hacer que un performativo opor- Oxford University Press, reimpr. 1973, Spectres de Marx. L'Éter de la dette, le cen surgir por plimera vez en una
tuno (hacer mediante la palabra, pág. 40. (Trad. esp.: Los problemas de la trauall du deuil et la noutelle interna- de ellas, se extienden mucho más
como cuando se hace una promesa) filosofía, Barcelona. Labor, 1991.) tionale, París, Galilée, 1993.
La deconstrucción en las fronteras de la
allá ya menudo representan un nú-
3 Jacques Derrida, Of Grammatology,
dependa de su realización en un con- filosofía, Barcelona, Pajel:5s, 1993.
mero considerable. Pero tampoco
texto adecuado y por parte de la per- trad. de Gayatri Chakravorty Spivak, coinciden necesariamente con lo
Baltimore y Londres, Johns Hopkins que solemos llamar ciencias o disci-
sona adecuada, pero el performativo Universiry Press, 1976, pág. 145.
inoportuno —como cuando alguien OTRAS LECTURAS plinas, aunque sus límites pueden
' lbíd., pág. 9. ser en ocasiones, y de forma provi-
dice •sí, quiero. fuera de la ceremo- 5 David Wood y Robert Bernasconi BENNINGTC" Geoffrey (con Jacques De- sional, los mismos'.
nia del matrimonio, o cuando una (eds.), Derrida and •Différance-, Evans- rrida), Jacques DerrYcla, Madrid, Cate
persona que no corresponde abre ton. Northwestern Universiry Press, dra, 1994. La explicación de Foucault ilustra
una reunión— no puede eliminarse 1988, pág. 88. GAscHÉ, Rodolphe, Tain of tbe Mirron I el carácter innovador y, muchas ve-
del lenguaje. La razón es, como ad- Derriat a and ¡be Philosophy of ReJTec - j ces, asombrosamente individual, de
vierte Derrida, que el carácter inopor- VÉASE TAMBIÉN EN ESTE LIBRO
tion, Cambridge, Mass., Harvard Uni- i su obra. En el fragmento citado alude
tuno está imbricado en la propia es- versiry Press, 1986. a la tesis, presentada en La arqueolo-
tructura del performativo: la cualidad Joyce, Laclau, Lévi-Strauss, Saussure. NORRIS, Christopher, Derricla, Londres i
Fontana, 1987. ' j gra del saber, de que no podemos re-
de iterabilidad significa que cualquie- ULNIER, Gregory, Applied Grammatology: i ducir las •practicas discursivas, a las
ra puede apoderarse del lenguaje PRINCIPALES OBRAS DE DERRIDA
Post(e)- Pedagogyfir nrjacques Derrida ' conocidas categorías de una obra in-
—incluidas las firmas— en cualquier La va z y el fenónzeno (1967), Valencia, ¡o Joseph Beuys, Balfirnore y Londres, dividual o una disciplina académica.
momento. La iterabilidad, pues, im- Fre-textos, 1983. Johns Hopkins Universiry Press, 1985, Por el contrario, la práctica discursiva
146 147
FOUCAULT FOUCAULT

es la regularidad que surge en el pro- •su lógica, su estrategia, su evidencia pasado; escribir una historia de/ pa- Foucault, como demuestra el siguien-
pio hecho de la articulación; no es y su razón.. sado es verlo de nuevo, igual que te fragmento, de su historia de la
anterior a ella. El carácter sistemático Antes de revisar brevemente varias quien se analiza ve de nuevo hechos sexualidad:
de las prácticas discursivas no es de de las principales obras de Foucault, de su biografía individual a partir de
tipo lógico ni lingüístico. La regulari- y para mejor valorar su originalidad, El pensamiento... no debe buscar-
la experiencia del psicoanálisis. En
dad del discurso es inconsciente y se es importante aclarar cinco términos otras palabras, el pasado asume un se, pues, sólo en formulaciones teó-
produce en el plano de la parok de clave que están relacionados entre sí. significado nuevo teniendo en cuen- ricas como las de la filosofía o la
Saussure, no de una langue previa- Se trata del presente, la genealogía, la ciencia; puede y debe analizarse en
ta los hechos presentes. Ello impide
mente existente. epistemología, la discontinuidad y la cada forma de hablar, hacer o com-
la posibilidad de proponer una mera portarse donde el individuo aparez-
• En vez de estudiar los movimien- tecnología (técnica). relación de causalidad entre el pasa-
tos del pensamiento a la manera de Dado que, como demostró Nietzs- ca y actúe como sujeto de un apren-
do y el presente. El peligro del histo- dizaje, como sujeto ético o jurídico,
una historia de las ideas —en la que che, no existe ningún área o proble- ricismo disminuye cuando se com- como sujeto consciente de sí mismo
Las ideas serían anteriores al material ma intrinsecamente importante en la prende que no •puede interpretarse y de otros'.
estudiado—, o la forma en que las historia, sino sólo áreas de interés ninguna época pasada por sí sola,
I ideologías o teorías expresan las con- material, el historiador se ve siempre dado que la historia es, en cierto sen- En relación con la tecnología o la
diciones materiales, Foucault analiza 'absorbido por lo que interesa en cada tido, siempre una historia del pre- técnica, tan importantes en las últi-
los •regímenes de prácticas.. O, dado . momento, en una coyuntura deter- sente. mas obras de Foucault, la inspiración
• que la línea entre decir y hacer minada. La historia, por tanto, se es- Estrechamente unido a la noción parece derivar de Mauss, aunque
—corno entre ver y hablar— es siem- cribe siempre desde la perspectiva del presente y la reevaluación perma- prácticamente no hay ninguna refe-
pre inestable (la división cambia I del presente; satisface una necesidad
nente del pasado está el concepto de rencia concreta a él en los textos de
constantemente), los •regímenes de del momento. El presente propone genealogía. La genealogía es la histo- nuestro autor. Para Mauss no existía
prácticas• no pueden reducirse al problemas que se estudian desde un ria escrita en virtud de los intereses casi ninguna forma de acción huma-
ámbito de la teoría. Dicho de otra for- punto de vista histórico: el auge del actuales. Es la historia escrita con na que no estuviese encarnada en un
ma, las historias de Foucault, inspira- estructuralismo en los años 60, o arreglo a un compromiso con los pro- marco de repetición. En este sentido,
;
das por el anti-idealismo de Nietos- los disturbios en las prisiones duran- blemas del momento actual y, como demostró, incluso escupir era una
'
che, intentan evitar da proyección de te los primeros 70, son buenos ejem- tal, interviene en el momento actual. técnica. Daba prioridad, pues, a la
í un •significado» en la historia»'. Y, en plos, que produjeron entre las obras Es decir, la genealogía es la •historia técnica sobre la contigencia en la
1. este sentido, resulta sospechosa in- de Foucault, respectivamente, Las pa- eficaz» (Nietzsche), elaborada como comprensión de las acciones huma-
cluso la noción de causa, como el labras y las cosas (1966) y Vigilar y una intervención actual. nas, y llamaba a las técnicas del cuer-
actor detrás del acto. El famoso últi- castigar: el nacimiento de la prisión po una .tecnología sin instrumentos•.
Inspirado por Bachelard, Canguil-
mo párrafo de Las palabras y las co- (1975). hem y Cavaillés, Foucault reconoce Una regularidad de acciones puede
i sas lo confirma al hablar de que el
hombre, el actor, se borra corno un f Si el presente determina los temas
de interés para el historiador, ¿no ha-
que, si la historia es siempre genea-
logía e intervención, los marcos de
aparecer como una técnica con la que
5C cuenta hasta tal punto que no pa-
rostro dibujado en la arena, a la orilla brá el peligro de que el pasado se conocimiento y modos de compren- rece haber sido aprendida. Foucault,
del mar•'. Todo lo que tenemos son convierta en una preparación mas o sión están siempre en transformación. sobre todo en sus análisis del poder,
los resultados materiales y los actos menos inevitable del presente' La res- La epistemología estudia dichas trans- se preocupa por revelar la regulari-
materiales; las cosas no tienen un puesta de Foucault es que se trata de formaciones como la •gramática• de la dad no reconocida de acciones que
; significado esencial, ningún sujeto un peligro exacerbado por el idealis- elaboración de conocimiento, y se constituye la característica peculiar de
• esencial detrás de la acción; tampoco mo. La historia no es más que un pre- revela a través del ejercicio de la una técnica. Y, hacia el final de su
existe un orden fundamental en la parativo del presente si se permite ciencia, la filosofía, el arte y la litera- vida, hablaba de las -tecnologías del
historia. El orden es /a propia escri- que el concepto de causa predomine tura. La epistemología es además un yo-. Como tecnologia, las técnicas
tura de la historia. Dos libros de sobre el efecto (material) y si se deja modo de vincular los hechos materia- pueden transferirse a distintas series
Foucault, Las palabras y las cosas y La que la continuidad invalide las dis- les al pensamiento o las ideas. No es de prácticas, como demuestran las
1 arqueología del saber, son el 'resulta- continuidades que muestran las prác- fácil ver que una práctica concreta formas de disciplina corporal. Pase-
' do de ese enfoque nietzscheano de la ticas. Sin embargo, el hecho de que
1 representa una idea; es preciso acla- mos ahora a un examen de algunos
historia del conocimiento. Surge un el presente esté siempre en proceso rar la conexión gracias a la epistemo- de los textos más importantes de
nuevo mapa: las prácticas se convier- de transformación significa que es logía. Esto sigue siendo importante Foucault.
ten en modos de pensamiento con preciso reevaluar constantemente el incluso en las obras posteriores de El título de la tesis doctoral de

148 149
FOLICAULT FOUCAULT

Foucault, Folie et déraison: Hisioire de hombre se enfrentaba a su verda locos desde principios del siglo \int de la locura, Foucault afimm que no
la folie á l'áge classigue, defendida en moral, a las normas propias de s (un hecho clave fue la creación del es posible separar el nacimiento de la
mayo de 1961, es un recordatorio de naturaleza y su verdad*. La locur Hópital général en 1656), y aunque la prisión corno principal forma de cas-
que la era clásica —la época de Des- , posee aquí su propia forma de razó medicina en la era moderna pasó gra- tigo legal, en el siglo XIX, de la histo-
cartes— es también la era de la Ra- y se juzga como una característic dualmente la responsabilidad de los ria de una serie de instituciones —el i
zón. Foucault intenta demostrar que general de los seres humanos. La ra enfermos mentales al manicomio, ejército, la fábrica y la escuela— que:
Descartes, en su •Primera medita- zón irrazonable y la sinrazón razona éste había sufrido cambios funda- hacían hincapié en la disciplina cor-
ción*, excluye la locura de la duda hi- be podían existir, una junto a otra. mentales cuando Tuke y Pinel lleva- poral mediante técnicas de vigilancia'
perbólica: Descartes puede dudar de Con la época del clasicismo (lo ron a cabo sus reformas a finales del real o aparente. La prisión nació, no .
todo excepto de su propia cordura. siglos xvu y xviu), la locura queda re siglo XVIII. La medicina y el interna- por la buena voluntad y el humanita-
Foucault quiere averiguar qué podían ducida al silencio; o, mejor dicho, nt miento se acercaron más, no por al- rismo de reformistas con las modifi-I
ser la locura y la sinrazón en la épo- tiene voz propia, sino que existe dt gún gran descubrimiento médico, caciones del derecho criminal, sinij
ca de Descartes, y por qué era tan manera confusa en figuras presunta sino por dos factores indirectamente por la aparición de una sociedad dis-
importante la diferencia entre ellas. mente antisociales como el libertino relacionados: una mayor preocupa- ciplinaria y la nueva articulación sub-
O, como formularía mucho más tar- el homosexual, el vicioso, el disipa ción por los derechos individuales a siguiente del poder.
de, deseaba estudiar de qué forma se do o el mago. Éstas eran las personal partir de la Revolución Francesa y la La figura que captura con más pre-
establece la división entre locura y confinadas en hospitales, asilos y pri: transformación del manicomio en un cisión la estructura de la articulación
razón. Éstas se presentan como resul- siones. Del mismo modo, el pensa- lugar de prácticas terapéuticas, en lu- del poder a partir del siglo xviu es, se-
tado de procesos históricos; no exis- miento de esos siglos define la furia gar de ser únicamente una institución gún Foucault, el Panoptican de Jere-
ten como categorías universalmente —que comprende la conducta crimi- de castigo. my Bentham. Permite la vigilancia
objetivas. Para algunos, este método nal y la locura-- como -sinrazón.. En- A medida que la ola de entusiasmo invisible de un gran número de per-
parece demasiado relativista. Por la tre el Renacimiento y la era clásica no estructuralista empezó a remitir en los sonas por parte de un número rela-
misma razón, también ofrece la opor- sólo cambia la imagen de la locura, años 70, el discurso empezó a ocupar tivamente escaso. Como la locura, el
tunidad de enfrentarse con un enfo- sino también las estrategias de la so- un lugar menos prominente en la castigo legal tiene una historia varia-
que mucho más complejo y sutil de ciedad para afrontarla. Estamos aún obra de Foucault y la •tecnología• en da e inestable que depende no sólo
los hechos históricos. muy lejos de cualquier cosa parecida relación con el poder y el cuerpo co- de las percepciones del criminal, sino
Más concretamente, Foucault traza a una concepción médica de la locu- menzó a ocupar su lugar. En sus dos de los cambios producidos por el na-
de qué forma el loco, al que has- ra. Hasta el siglo mX, la locura o de- grandei libros de los años 70 resaltan cimiento de instituciones encargadas
ta 1600 no se le confinaba en ningu- mencia era más un asunto policial dos aspectos de la teoría del poder de de formar un conocimiento de los in-
na institución, pasa a asumir, a mitad que médico. No se pensaba que los Foucault: el poder en relación con el dividuos. Por tanto, el conocimiento
del siglo xvu, la categoría de persona locos estuvieran enfermos. De modo conocimiento y el cuerpo en el casti- está ligado al poder, y la prisión se
excluida par excellence, un puesto que no hay base, afirma Foucault, go y la sexualidad, y el poder enten- convierte en una herramienta del co-
anteriormente ocupado por el lepro- para investigar los antecedentes del dido como algo distinto del marco fi- nocimiento.
so. En el siglo xv los locos eran vaga- tratamiento de los enfermos mentales losófico y jurídico de la Ilustración, Desde un punto de vista más teó-
bundos, como inmortalizaron el poe- en la historia de la psiquiatría o, más con su énfasis en el gobierno de re- rico, quizá, el primer volumen de la 1
ma de Sébastian Brant Stulifera navis en general, en la historia de la medi- presentación. En pocas palabras: el historia de la sexualidad vuelve a
(-La nave de los locos, 1497) y el cina. Por el contrario, salen a la luz poder deja de tener cualquier conte- analizar el vínculo entre poder y co-
cuadro, inspirado por el poema y del discontinuidades históricas: primero, nido sustancial; en vez de poseerse y nocimiento. En él, la concepción jurí-
mismo nombre, pintado por el Bos- entre la imagen de la locura en el centralizarse, empieza a verse como dico-filosófica—que considera el po-
co. Además, el tema de la locura apa- Renacimiento y en la era clásica, que una tecnología. der esencialmente represivo y, por ;
recía comúnmente en la literatura y la la equiparó a la sinrazón y la conde- Vigilar y castigar presenta dos imá- tanto, esencialmente negativo y que
iconografía porque se consideraba nó al silencio; y segundo, entre la genes del cuerpo de los condenados: debe evitarse— se presenta como
que el loco era una fuente de verdad, opinión de la era clásica y la medí- el cuerpo torturado y públicamente algo perteneciente a la era de la Ilus-
sabiduría y crítica de la situación po- calización de la locura como enfer- mutilado del aspirante a regicida Da- tración. Ahora, afirma Foucault, el po-
lítica existente. En el Renacimiento, la medad mental en el siglo mx. En la miens, y el cuerpo castigado del pri- der está disperso en toda la sociedad I
locura ocupa un lugar de honor: es historia de la locura predomina la dis- sionero en su celda, un preso bajo la I (no pertenece a nadie) y tiene efec-
•una experiencia en el área del len- continuidad (entre eras). amenaza secreta de la vigilancia cons- tos positivos. La persistencia de la de- t
guaje, una experiencia en la que el Aunque se empezó a encerrar a los tante. Como en el caso de la historial finición jurídica del poder como algo \

150 151
FOLICAULT LEVINAS

que se posee y se centra/iza significa • reglamentadas con los demás. En La l'áge classique (1961), París, Galli- OTRAS LECTURAS
que aun hay que cortar la cabeza al atención al .vo, Foucault analiza e! mard. TEL, 1972. pág. 39.
rey. Igual que el poder no tiene con- Concepto-drdominio de sí mismo y COUSINS, Mark y HUSSAIN, Áithar, Michel
:tenido sustantivo, el sexo no se ha esboza la forma en que los griegos Foucault, Londres, Macmillan, 1984.
/ reprimido. Por d contrario, la investi- dedicaron grandes esfuerzos a desa-
VÉASE TAMBIÉN EN ESTE LIBRO reimpr., 1990.
DRETFUS, Huberr L. y RABINOW, Paul, Mi-
' gación histórica muestra que ha habi- rrollar diversos sistemas de normas Bachelard, Braudel, Canguilhem, Cavai-
che! Foucault: Beyond Structuralism
• do una verdadera explosión en los aplicables a una gran variedad de llés. Mauss, Nietzsche, Saussure,
and Henneneutics, Brighton, Harves-
discursos sobre sexualidad y activi- conductas, entre otras, la conducta ter Press, 1982.
dad sexual. Por tanto, es preciso di- sexual. Sin trabajar la propia identi- MARTIN, Luther 1-1., GUTMAN, Huck y Hu-
PRINCIPALES OBRAS DE FOUCAULT
ferenciar las teorías que aseguran ex- dad -y alcanzar un mayor dominio frow, Patrick H.. Technologies of me
plicar hechos históricos de los hechos de sí mismo-, el acceso al placer y Enfermedad nzental y personalidad Sol A Senzinar with Micho! Foucault,
reales. De nuevo aquí, un método la verdad se limita. Para una vida do- (1954 y 1962), Barcelona, Paidós, Londres, Tavistock, 1988.
genealógico meticuloso descubre que minada por la atenciln a sí mismo, el 1992. »amas, Meaghan y PARTON, Paul, Michel
las teorías -y no las prácticas expli- exceso es el peligro, más que la de; Historia de la locura, México, FCE, 1979. Foucaulti Power, Trua), Strategy, Sid-
cativas- forman parte de costumbres viacion; el problema no es el sexo Raymond RousSel (1963), Buenos Aires, ney, Feral Publications, 1979.
Siglo X,X1, 1973. OTARRELL, Ciare, FOUGatlit, Basingstoke,
situadas en una época histórica con- fuera del matrimonio, sino demasia-
Las palabras y las cosas (1966), México, Macraillan, 1990.
creta. do sexo dentro de 4,1,_
Siglo )1.7.1, 1974.
Las últimas obras de Foucault so- La historia de Foucault presenta, La arqueología del saber(1969). México.
bre la historia de la sexualidad volvie- por tanto, otra faceta del placer: el Siglo XXI, 1991.
ron la mirada hacia la Greda antigua placer a través de la reglamentación El orden del discurso (1971), Barcelona. Emmanuel Levinas
y cómo allí la sexualidad formaba y la autodisciplina, y no a través de Tusquets, 1987.
j , parte de una red de costumbres (mo- una conducta libertina o permisiva. Vigilar y castigar nacimiento de la pri- En su biografía de Jean-Paul Sartre,
rales, políticas, económicas) funda- En relación con la sexualidad, existe sión, Madrid, Siglo XXI, 1992. Annie Cohen-Solal refiere que el su-
Mentales para la producción, el go- una discontinuidad entre el mundo Historia de la sexualidad, 3 vols,, Ma-
jeto de su libro, que se había aproxi-
bierno y la atención a uno mismo. griego y el mundo cristiano, y otra drid, Siglo XX7, 1993.
mado a la fenomenología hacia 1930,
El pensamiento del afuera Valencia,
¡Aquí, el interés explícito de Foucault idea heredada se derrumba. .compró un libro reciente de Emma-
Pre-textos, 1993.
'es la historia de la subjetividad; pero nuel Levinas, Théorie de l'intuition
Escritos espirituales, Barcelona, Herder,
el método utilizado -el análisis me- 1988. dans la phénomenologie de Husserl, y
yiculoso de textos- recuerda Las NOTAS Espacios de poder, Madrid, Endymión, lo hojéo ávidamente, reconociendo
'palabras y las cosas, donde la subjeti- 1991. constantemente en sus páginas sus
'yidad es resultado de prácticas dis- ' Michel Foucault, Résumé des cours, Esto no es una pipa, Barcelona, Anagra- propios pensamientos- 1 . Hasta tal
'cursivas. El uso del placer muestra 1970 1982, París, Julliard, 1989, pág. 10.
-
ma. 1993. punto se sentía la persona que iba a
Friedrich Nietzsche, The Will tu Gerzealogía del racismo, Madrid, Endy-
"cómo el placer (sexual y de otros ti- ser uno de los filósofos más influyen-
Power, trad. de Walter Kaufmann, Nue- mión. 1992.
pos), aunque es parte legítima del sis- tes de Francia en deuda con el estu-
va York, Vintage Books, 1968, sec. 1011, La microfisica del poder, Madrid. La Pi-
'tema social griego, constituye una dioso de la fenomenología Enmanuel
pág. 523. (Trad. esp.: La voluntad de queta, 1978.
fuente de tensión, especialmente en poderío, Madrid, Eciaf. 1981.) Levinas. Igualmente importante es
La vida de los hombres infames, Madrid,
el juego de relaciones sociales entre 3 Michel Foucau h. The Order of La Piqueta, 1990. cómo Levinas influyó también en una
superiores e inferiores. La mayor can- T'Ungí. An Archaeology of the Burilan Michel Foucault, Barcelona, Materiales, generación posterior de pensadores,
tidad de placer deriva de la plena rea- Sciences, trad. del francés, Nueva York, 1978. gente como Blanchot, Derrída, higa-
lización de la propia posición sodal Vintage Books. 1973, pág. 387. Nietzsche: la genealogía de la bistoria, ray y Lyotard. Para esta generación ha
en la sexualidad; el placer no es, ' Michel Foucault, Prefacio a The His- Valencia. Pre-textos, 1992. sido especialmente Interesante la re-
pues, consecuencia de una transgre-
tory ofSexuality, vol. 11, trad. de William Nietzsche, Freud, Marx, Barcelona, 'Ana- visión que Levinas hace de concepto
Smock en P2U1 Rabinow (ed.). Foucault grama, 1970.
sión o conducta ilícita, como iba a y la realidad del Otro (Aun-u°. En
Reader, Nueva York. Pantheon Books, Saber y verdad, Madrid, Endyinión,
sedo en el cristianismo, sino que se ética, como veremos, Levinas ha afir-
1984, págs. 334-335, Es claramente una 1991.
cumple en el matrimonio. traducción de una versión anterior de lo mado que le preocupa el Otro, •antes
Tecnologías del yo y otros textos afines,
Los griegos también vinculaban el que sería la Introducción a The History que cualquier acto- 1 .
Barcelona. Paidós, 1991,
/placer y la libertad individual al do- of Sexualily, vol. II. Yo Pierre Riviere, Barcdona, Tusquets, Levinas nació en el seno de una
' minio de sí mismo en las relaciones 5 Michel Foucault. Histoire de la folie 1983, familia judía en Kovno, Lituania,

152 :71" 153


LEMAS
LEV1NAS

en 1906. Corno sus padres pensaban de los nazis. Durante su cautiverio en simbólicos. Sin embargo, es preciso ción. Levinas quiere efectivamente
que su futuro pertenecía a la lengua Alemania. Levinas comenzó su libro recordar también que el horror está rodear el pensamiento en la filosofía
y literatura rusa, más que al idioma De rexistence a l'existan!, que se pu- siempre dado previamente; es inevi- Explica que su trayectoria le aleja de
lituano, el joven Emmanuel aprendió blicó en 1947. table, igual que el ser es inevitable. la ontología, la epistemología o la
a leer ruso y hebreo. A principios del Después de la guerra, Levinas se No puede entenderse, pues, como razón, hacia un punto en el que la al-
siglo ?CC, Lituania era un centro de convirtió en director de la École Nor- algo equivalente a la angustia heideg- teridad se afronta en toda su -desnu-
estudios talmúdicos, y ello dejó tam- rnale Israélite Orienta/e. En 1961 se geriana antes del reconocimiento dez. (para utilizar un término favori-
bién su huella sobre la obra de Levi- publicó su tesis doctoral, Totalité et de la nada. -Ser consciente es ser to de Levinas), un punto en el que
nas, en sus interpretaciones del Tal- infini, que provocó su nombramien- arrancado del hay). La razón es que puede reconocerse su carácter irre-
mud y otros textos de teología judía. to de profesor de filosofía en la Uni- la conciencia debe constituirse en ductible.
Como ávido lector de Dostoievski, versidad de Poitiers. Posteriormente una subjetividad construida por un La trascendencia de la filosofía oc-
Tolstoi, Pushkin y Gógol, Levinas se le designaron para /a Universidad de marco de racionalidad determinado. cidental está contra esta empresa si,
vio absorbido por los problemas éti- París-Nanterre, en 1967, y para una Levinas está interesado por el lado por trascendencia, queremos decir lo
cos que dichos autores planteaban, cátedra de filosofía en /a Sorbona, oculto de esa racionalidad, que no es que puede conceptua/izarse, teorizar-
especialmente la cuestión de la res- en 1973. Se retiró de esta última uni- simplemente el elemento irracional o se, visualizarse, cosificarse; universa-
ponsabilidad hada el Otro en Dos- versidad en 1976. el vacío inexpresable, sino una fuer- lizarse. Levinas, por el contrario, em-
toievski. Para Levinas, este y otros El íntimo contacto de Levinas con za positiva que no puede quedar ex- plea la trascendencia en el sentido de
autores rusos fueron una gran prepa- la fenomenología de Husserl suminis- cluida. Dicho de otra forma; la subje- ruptura y apertura al Otro, en oposi-
ración para leer a Piarán y Rant. tró la base para un estudio detallado tividad se construye con arreglo a los ción a la reducción del otro al Mismo
Su lectura de los escritores rusos del .reconocimiento. de la existencia, principios universales de la filosofía en la tradición occidental, con su ob-
mencionados le llevó a Estrasburgo, representada, por ejemplo, en la for- occidental; en cambio, el •hay. es jetivo de cosificar y universalizar. El
Francia, en 1825, para estudiar filoso- ma impersonal del verbo haber, .hay., contingente, lo particular que elude predominio de/ Mismo convierte lo
fía con Charles 13Iondel y Maurice o su equivalente francés, Uy a, o, en lo universal. El 'espectro fantasmal. universal en el objetivo de/ pensa-
Pradines. En aquel momento, la filo- alemán, es gibt. Levinas otorga a una que se ve en el Macbeth de Shakes- miento. Lo universal es, por defini-
sofía de Henri Bergson causaba gran expresión de las más corrientes un peare es Ser como 'hay., y eso es pre- ción, independiente de cualquier se-
impacto. Para Levinas significó recibir matiz lleno de fuerza, a/ vincularla al cisamente lo que horroriza a Mac- de reconocida - de circunstancias
una enorme influencia de la teoría de horror. «Hay- es impersonal y recono- beth. La noche, e/ crimen, el fantasma concretas. Por tanto, es incorpóreo e
la duración de dicho autor. Mientras cido; no es exterior ni interior; es, y el horror se unen para ofrecer la idealista. De acuerdo con el tono del
viva en Estrasburgo, Levinas entabló dice Levinas, el •puro acto de ser). sombra del ser. proyecto fenomeno/ógico, el propó-
amistad con Maurice S'anchor, que le -Hay. —e/ carácter reconocido (cfr. es ¿Qué está exactamente en juego en sito es reducir la distancia entre pen-
introdujo a Proust y Valéry. En 1975 gibt) de ser— equivale a la noche, el proyecto de Levinas si, como él samiento y encarnación o, como en e/
se publicó una colección de escritos la ambigüedad, la indeterminación. propone, ni un marco fenomeno/ógi- caso de Heidegger, entre Ser y exis-
de Levinas sobre Sianchot. •Hay• llega a la mente, se enfrenta a co ni uno psicoanalítico pueden ha- tencia.
En 1928-1929, Levinas asistió a las ella antes de que la revelación o el cer justicia al horror-Ser como condi- Al atribuir una especie de priori-
lecciones de Husserl en Friburgo y concepto /a ordene; se desliza por la ción del Otro? Para responder esta dad a la alteridad, por encima del su-
leyó Ser y tiempo de Heidegger. trascendencia y desafía al yo y a to- pregunta, advirtamos que, desde la jeto pensante, Levinas se ha encon-
En 1930 apareció el libro de su tesis das las formas de lo simbólico. Levi- época de las conferencias que pro- trado, por supuesto, con la objeción
de doctorar de trviskime cycle sobre nas declara: •El crujido de hay.. es el nunció en el Collége de Filosofía en de quienes afirman que, al final, se
Husserl, el que cautivaría a Sartre. El horror.. Y continúa anotando de qué 1946-1947 sobre el tiempo y el Otro, quiera o no, el Otro de lo universa/
mismo año en el que editó su tesis, forma •se insinúa en la noche, como hasta su obra posterior sobre Dios y —la alteridad que nos reclama— es
Levínas obtuvo /a nacionalidad fran- una amenaza indefinida, liberada de la idea, la condición de/ otro, la alte- inevitablemente el Otro del pensa-
cesa. De modo que, al estallar la Se- su función como receptáculo de ob- ridad, ha sido la cuestión central. El miento occidental, un Otro que espe-
gunda Guerra Mundial, era elegible jetos, como medio de acceso a los tiempo como alteridad, /a existencia ra ser puesto en forma conceptual y
para la movilización y sirvió como seres). Aunque Levinas rechazaría el corno alteridad, la otra persona (au- universalizado, un Otro necesario
intérprete de ruso y alemán hasta que menor indicio de explicación psicoa- (rui) como alteridad, el lenguaje para el pensamiento occidental. Este
cayó prisionero de guerra en 1940. nalítica, es como si el horror del 'hay- corno alteridad y Dios como alteri- Otro sería ineviiablemente otra ver-
Casi toda la familia de Levinas que fuera un trauma para la conciencia y dad: estas palabras indican un pro- sión del Mismo; en definitiva, un Otro
quedaba en Lituania murió a manos una imposibilidad para los procesos yecto de gran sutileza y determina- formal (el Otro de la negación), no

154 155
LEV1NAS LEVINAS

una verdadera alteridad. Las feminis- yo corno entidad idéntica a sí misma. parecería 'implicar que la misma tra-
ducirse a un sistema de lógica o re-
tas se enfrentan a una objeción simi- El yo incluso se sitúa para el otro, dición que desafía podría tener una
presentación. Como el futuro, el infi-
lar cuando afirman, como Irigaray, mas que para sí mismo. La desnudez flexibilidad hasta entonces insospe-
nito y el rostro, el lenguaje pasa a ser
que lo femenino es una alterídad que del otro corno algo exterior y prácti- chada; del mismo modo que el pro-
una epifanía prolongada. Es el asom-
debe juzgarse independientemente co, inasintilable por la ontología, im- pio Levinas demuestra que el lengua-
bro del Otro que habla en mí, y el
del orden patriarcal de identidad (el plica la disimetría de la relación entre je está revestido de posibilidades
otro que habla en mí me perrnite ser
Mismo). Es interesante que, en una el Yo y el Otro; en otras palabras, su- yo en el lenguaje; en otras palabras, también insospechadas hasta el mo-
entrevista concedida en 1985, Levinas pera la simetría de la intersubjetividad mento. En otras palabras, Levinas
a través del lenguaje, el otro me per-
señale que, cuando escribió sus lec- esbozada con tanta energía por el puede haber demostrado que la filo-
mite tener una identidad.
dones publicadas corno El tiempo y el idealismo. Levinas equipara esa disi- A través del rostro de la alteridad, sofía no es reducible, en absoluto, a
otro, en 1948, pensaba que la femini- metría al tiempo irreversible, el tiem- afirma Levinas, se llega a Dios: la ontología.
dad era la forma de alteridad que es- po que no puede representarse en
taba buscando'. El conocimiento tam- los relojes, sino que corresponde a su El rostro •significa• más allá, no
bién reproduce, a juicio de Levinas, NOTAS
experiencia interna capturada en el como indicio ni como símbolo, sino
la relación del Mismo y el Otro en la concepto de .duración. de Bergson. precisa e irreductiblemente como un ' Annie Cohen-Solal, Sartre: A Life,
que el Otro queda reducido al orden La dimensión del tiempo que inte- rostro que me convoca. Significa a trad. de Anna Cancogni, Nueva York,
del Mismo'. Pese a ello, Levinas sigue resa a Levinas más que ninguna otra Dios (á Dieu.), no como signo, sino Pantheon Books. 1987, pág. 91. (Trad.
buscando un modo de presentar el es el futuro. A diferencia del pasado, como puesta en tela de juicio de mí esp.: Sartre: 19054980, Barcelona, Ed-
Otro irreductible en filosofía, un Otro mismo, como si me convocaran o hasa, 1990.)
el futuro no puede asimilarse tan fá-
me llamaran, es decir, me desperta- Emrnanuel Levinas, •Ethics and Po-
que sea verdaderamente ajeno al or- cilmente a otro presente. Por el con-
ran o me citaran por ser yo'. fines- (Levinas en debate con Alain Fin-
den del Mismo. Sin duda, habría que trario, el futuro es la diferencia del
detenerse en las resonancias del con- kielkraut), trad. de Jonathan Romney en
presente consigo mismo: es un futu- En su obra posterior, Levinas in- Sean Hand (ed.), The Levinas Reader,
cepto de -búsqueda-; porque lo que ro absolutamente nuevo y absoluta- siste más en equiparar a Dios con el Oxford, Basii Blackwell, 1989, pág. 290.
quizá está presentando aquí Levinas mente Otro. El futuro es el tiempo sin infinito. Es casi como si la teología pa- Emmanuel Levinas, -There is: Exis-
es el rastro de su búsqueda de una un concepto. tence without existents•, trad. de Al-
sara a ocupar el lugar de un panora-
forma de presentar el Otro que sea Un aspecto intrigante de la filoso- phonso Ungís en Hand (ed.), 77,e Levi-
ma filosófico de Occidente con el fin
inteligible sin recurrir.al lenguaje del fía de la alteridad en Levinas es el nas Reader, pág. 31.
de garantizar que la alteridad vuelva
idealismo. relativo al lenguaje. Aunque era de • !bid., pág. 32.
a encontrar su sitio en el pensamien-
Por su parte, Levinas no ha cesado esperar, quizá, que Levinas conside- • !bid.
to, un sitio más allá de la ontología.
nunca de subrayar que el Otro apa- 6 Emmanuel Levinas, •Intretien- [rea-
rara que el lenguaje estaba domina- Con su énfasis en la importancia
rece en relación con otros y no inme- lizada en febrero de 19851, en Jean-
do, en gran parte, por el idealismo y práctica de la ética como algo distin- Christophe Aeschlimann (ed.), Répondre
diatamente en relación con la univer- el orden del Mismo, de hecho opina to de la ontología, Levinas abre una d'asarla Enmanuel Letrinas, Neuchátel,
salidad de la ley. Esta relación es la que el lenguaje es la base de lo ético nueva perspectiva dentro de la filoso- Editions de la Baconniére, Collection,
única relación de responsabilidad éti- porque permite crear vinculas entre Langages, 1989. pág. 10.
fía. ¿Dentro de la filosofía? Ésta es tal
ca. La ética es la relación práctica de las personas. Aquí el significante no Emmanuel Levinas, Trascendanceet
vez la pregunta que es preciso plan-
uno con otro; una relación previa a es nunca una presencia completa, y intelligibilité, Ginebra, Labor et Fides.
tear a quien ha revelado el solipsis-
la ontología. El absolutamente Otro se convierte en una apertura al Otro. 1984, pág. 12.
mo de la razón y ha demostrado que
es la otra persona (autrui). El Otro, Aunque el lenguaje es una estructura • Emmanuel Levinas, Totalité. et infi-
las anteriores filosofías del sujeto han
continúa Levinas, es una -desnudez.. formal, se puede definir, según Levi- essai sur l'ea-té:inri:é, La Haya, Mar&
reducido la alteridad al orden del nus Nijhoff, 1961, pág. 47.
No es la desnudez que surge tras una nas, como una ruptura potencia/ con Mismo. Otra pregunta que surge es la • Emmanuel Levinas, -Beyond inten-
revelación; la verdadera desnudez es, la representación y el impulso totali- siguiente: ¿cómo debe entenderse a tionality-, trad de Kathleen McLaughlin
más bien, el rostro (del Otro) corno zador del orden del Mismo. Para su- Levinas, el intérprete de Husserl y en Alan Montefiore MillosoPkY 1 "
epifanía que nos reclama; ese rostro brayar este punto, Levinas define la Heidegger, cuando habla claramente France Today. Cambridge, Cambridge
es el que nos llega del exterior. -El significación en general como infini- University Press, 1983, pág. 112.
dentro de la historia de la filosofía
rostro es por sí mismo, no mediante to, es decir, como la existencia de la pero intenta escapar de ella, aunque,
la referencia a un sistema•s. El Otro es alteridad. El interés del enfoque de es cierto, sus textos tienden sin duda VÉASE TAMBIÉN EN ESTE LIBRO
también el infinito en mí, en la medi- Levinas procede, en parte, de su aná- hacia la teología? Para Levinas, hablar
da en que provoca una ruptura en el lisis de que el lenguaje no puede re- Blanchot, Derrida. Irigaray. Lyotard.
dentro de la historia de la filosofia
156 157
LEVINAS

PRINCIPALES OBRAS DE LEVINAS OTRAS LECTURAS

El tiempo .11 el otro (1948), Barcelona, BERNASCONI, Robert, .Levinas face to face
Paidós, 1953. - with Hegel., Journal of the British
Totalidad e infinito (1961), Salamanca, SocietY for Phenomenology, 13, 3
Sígueme, 1987. (1982), págs. 267-276.
De otro modo que ser o más allá de la GANS, Sreven, •Echics or ontologyN, Phi-
esencia (1974), Salamanca, Sígueme, losophy Today, 16, 2 (1972), pági-
1987, nas 117-121.
Sur Maurice Blanchot, Mompellier, Faca LIBERTSON, Joseph, PrOximity, Levinas,
Morgana, 1975. Blanchot, Bataille and Communica-
Ética e infinito (1982), Madrid, Visor. tion, La Haya, París, Martinus Nijhoff,
1991. 1982,
Trascendance et intelligibilité, Ginebra, LINGIS,Alphonso, Libido: the French Semiótica
Labor er Pides, 1984. Existential Timones, Bloomington,
Entre nosotros: ensayos para pensar en Indiana University Press, 1985, pági-
otro, Valencia, Pre textos, 1993.
- nas 58-73 y 103-120.
Humanismo del otro hombre, Madrid, LYOTARD, Jean-Franpais, Jewish Oedi- La semiótica es la teoría y el análisis de los signos y los significa-
Caparrós, 1993. pus., en Driftworks, Nueva York, dos. Un semiótico como el primer Barthes juzga la vida social y cul-
El sujeto europeo, Madrid, Iglesias, 1991. Semicae:ct(e), 1984, págs. 35-55.
Dios, la muerte y el tiempo, Madrid, Cá- tural en función del significado y, por tanto, del carácter no esencial
tedra, 1994. de los objetos. Jean Baudrillard lo explica exhaustivamente en su li-
bro El sistema de los objetos. Desde un enfoque semiótico, basado en
un marco lingüístico saussuriano, la vida social se convierte en una
lucha de prestigio y situación; o, mejor dicho, se convierte en un
signo de esa lucha. La semiótica estudia también de qué forma signi-
fican esos signos, en textos literarios convencionales y documentos
legales, o en anuncios y conducta corporal.

158 159
Roland Barthes ma; porque Barthes no pasa a ser, en
ningún momento, un autobiógrafo
Roland Barthes nació en Cherbur- convencional. Por el contrario, con-
go en 1915. Apenas un año más tar- vierte su vida en ficción mediante el
de, su padre murió en combate naval uso de la tercera persona cuando se
en el Mar del Norte, por b que el hijo refiere (convencionalmente) a sí mis-
creció al cuidado de su madre y, pe- mo, cuando —como Joyce— descu-
riódicamente, de sus abuelos. Antes bre las profundidades de la vida en el
de terminar su educación media y se- •pan• de la experiencia diaria. Por
cundaria en París, Barthes pasó su in- ejemplo, en el ensayo citado sobre la
fancia en Bayona, en el sudoeste de fotografía escribe, a propósito de un
Francia. Entre 1934 y 1947 sufrió va- retrato de su madre, que había halla-
rios brotes de tuberculosis. Y fue du- do el rostro de ésta —el rostro que
rante esos periodos de convalecencia había amado— en la fotografía: •La
forzosa cuando leyó de forma omní- fotografía era muy vieja. Las esquinas
vora y publicó sus primeros artículos estaban melladas por haber estado
sobre André Gide. Después de dar pegada en un álbum, la impresión en
clases en Rumania y Egipto, en don- sepia estaba descolorida•. Por fin,
de conoció a A. J. Greimas, y en la relata, .estudié a la niña y, al cabo, en-
École des Hautes Etudes en Sciences contré a mi madre•2. Entonces suenan
Sociales, Barthes fue designado para en sus oídos las palabras escépticas de
el Collége de France en 1977. Mudó Godard: •No es una imagen justa, es
en 1980. justo una imagen• 3. En su aflicción,
Estos datos elementales de su bio- Barthes desea una imagen justa.
grafía han suministrado frecuente- Este estilo .personalizado, caracte-
mente a los psicocríticos material para rístico del último Barthes, confirmó al
explicar los aspectos subyacentes (in- serniótico y crítico literario como au-
conscientes) de la obra del autor. Sin tor por derecho propio. Barthes escri-
embargo, Barthes se apodera de ellos be .novelística sin novela., en pala-
y los utiliza corno materia prima de bras propias. En realidad, ésta es
sus propios textos, e incluso de su probablemente la verdadera base de
estilo. Así ocurre en dos libros que su originalidad, más que las teorías
escribió hacia el Final de su vida: Ro- de la escritura y el significado. Así, en
!and Barthes y La cámara lúcida: Fragmentos de un discurso amoroso,
nota sobre la fotografía. Aquí, la cla- Barthes afirma que •no sabernos
ve es la condición de la materia pri- quién habla; habla el texto, eso es

161
BARTHES
13ARITIES

apreciar su profundidad derivan de lo que, si el mito es el modo (le natura-


todo.'. Hoy, el discurso de un aman- El semiótico incipiente formula
te no puede ser sino de soledad; no ambicioso del proyecto de distinguir lización par excellence, como propo-
una teoría del mito que sirve para
tiene un ema especifico, sino que rato de ideología y un sistema de sig- ne Mitologías, sí oculta algo, en defi-
apoyar los textos de Mitologías. El
nos que requiere interpretación. Si, nitiva: su base ideológica.
puede verse invocado por •miles de mito es hoy, afirma Banhes, un men-
por un lado, los comentaristas de Bar- El influyente estudio de Barthes
ternas. El discurso del amante, como saje; no un concepto, una idea ni un
thes han pasado frecuentemente por sobre la narrativa, de 1964', continúa
equivalente de la novelística, se con- objeto. Mas en concreto, el mito se
alto la sutileza de otorgar al mito una su misión de desenmascarar los códi-
viene en el discurso de la construc- define •por cómo expresa su mensa-
ción del discurso de un amante: un categoría sui generis de habla natura- gos de lo natural, visibles entre líneas
je.; es, por tanto, un producto del -ha-
lizada, sigue siendo importante saber en las obras de los años 50. Barthes
puro tejido de voces que manifiestan bla. (parole), más que del •lenguaje.
qué repercusiones podría tener, apar- adopta como guía un relato de James
lo que querríamos y podríamos decir (langue). Con la ideología, lo que se
te de la percepción de que el éxito Bond y analiza los elementos que son
si se representase la narración. dice es crucial, y sirve para ocultar.
del mito supone que no sea analiza- estructuralmente necesarios (el len-
La obra de Roland Barthes encar- Con el mito, lo crucial es cómo dice
ble como tal. guaje, la función, las acciones y la
na una diversidad significativa. Se lo que dice, y distorsiona. En reali-
El análisis y el ejercicio de la escri- narración de la narrativa) para que
mueve entre la teoría semiótica, los dad, el mito •no es una mentira ni
tura, que empieza en Le Degré zéro de ésta se desarrolle, como si no fueran
ensayos de crítica literaria, la presen- una confesión: es una inflexion.s. Por
l'écriture (1953), ofrece otra pista so- resultado de códigos convencionales.
tación de los textos históricos de pi- consiguiente, en el ejemplo del solda-
bre las preocupaciones implícitas en Es característico que la sociedad bur-
les Michelet en función de sus obse- do negro que saluda a la bandera
siones, un estudio psicobiográfico de francesa, que Banhes tomó de la por-
Mitologías. Éstas se centran en el re- guesa niegue la presencia de ese có-
conocimiento de que el lenguaje es digo; quiere -signos que no parezcan
Racine, que escandalizó a ciertos tada de Paris Match, el negro se con-
un sistema relativamente autónomo y signos.. Sin embargo, un análisis es-
sectores del mundo literario francés, vierte, para el lector del mito, en •la
que el texto literario, en vez de ser el tructural de los textos implica cierto
y las obras más -personalizadas so- verdadera presencia del carácter im-
transmisor de una ideología o el sig- grado de formalización que Barthes
bre el placer del texto, el amor y la perial francés.. La explicación de Bar-
no de un compromiso político, o la empezó a rechazar. En contraste con
fotografía. [hes es que, como el mito no oculta
expresión de valores sociales o, por teóricos como Greimas, al lector le
Aunque en el primer Banhes es ya nada, su eficacia está garantizada: su
último, un vehículo de comunicación, impresiona casi siempre el grado de
visible cierto refinamiento de estilo, poder revelador es el medio para la
es opaco, y no natural. Para Banhes, libertad e informalidad de su escritu-
su objetivo era analizar y criticar la distorsión. Es como si el mito fuera el
lo que define la era burguesa, desde ra. Aunque aparecen cierta notación
cultura y la sociedad burguesas. Mi- escándalo que ocurre a plena luz del
el punto de vista cultural, es su nega- lingüística, diagramas y cifras en
tologías (1957) es el ejemplo más cla- día. Ser lector de mitos —en contras-
tiva sobre la opacidad del lenguaje y obras como El sistema de la moda,
ro. En esta obra, as imágenes y los te con un elaborador de mitos o un
la instalación de una ideología centra- Barthes no estaba satisfecho con esta
mensajes cotidianos de la publicidad, mitólogo que los descifra— es acep-
da en la idea de que el verdadero arte incursión en el •cientifismo. y sólo
el espectáculo, la cultura literaria y tar el mensaje tal como se presenta.
es verosimilitud. En cambio, el grado publicó su libro sobre la moda (ini-
popular, los bienes de consumo, se O, mejor dicho, el mensaje del mito
cero de la escritura es la forma que, cialmente pensado como tesis docto-
someten a un escrutinio reflexivo de es que no existe distinción entre el
en su neutralidad (estilística), acaba ral) a insistencia de amigos y colegas.
aplicación y resultados extraordina- significante (el soldado negro que sa-
atrayendo la atención. Indudable- Sin embargo, en El sistema de la
rios. A veces, la prosa de Banhes en luda a la bandera francesa) y el signi-
Mitologías recuerda a la de Walter mente, la escritura del nouveau m- moda es donde Banhes aclara una
ficado (el imperio francés). En pocas
inan (inspirada inicialmente por Ca- serie de aspectos del método semió-
Benjamin, por su capacidad de com- palabras, el mensaje del mito es que
mus) ejemplifica esta forma: sin tico o estructural en el análisis de los
binar una sensación de delicadeza y no necesita que lo descifren, interpre-
embargo, esa neutralidad de estilo se fenómenos sociales. La semiología, al
minuciosidad con la agudeza crítica. ten o desmitifiquen. Como explica
revela enseguida, sugiere Barthes, final, examina las representaciones
Sin embargo, a diferencia de Benja- Banhes, leer la imagen como un sím-
como un estilo de neutralidad. Es de- colectivas, más que la realidad a la
min, Banhes no es esencialmente un bolo (transparente) es renunciar a su
cir, en un momento histórico determi- que éstas pueden referirse, como
filósofo marxista, ni un critico cultu- realidad de imagen; si la ideología del
nado (Europa tras la Segunda Guerra hace la sociología. El método estruc-
ral de inspiración religiosa. En los mito es evidente, entonces no sirve
Mundial), sirve como medio de mos- turalista intenta reducir la diversidad
años 50 y 60 es un seiniótico: alguien como mito. Y al contrario, para que
trar el predominio del estilo en toda de fenómenos a una función general.
que concibe el lenguaje, a partir de el mito funcione como mito, debe
la escritura; el estilo prueba que la La semiología —inspirada por Saus-
la teoría del signo de Saussure, corno parecer totalmente natural.
escritura no es natural, que el natura- sure— está siempre viva para la face-
base para entender la estructura de la Pese a esta aclaración sobre la con-
lismo es una ideología. De modo ta significante de las cosas. En reali-
vida social y cultural. dición de mito, las dificultades para

162 1 163
BARTHES
BARTHES

dad, muchas veces se encarga de re- la estructura del código del vestido
que se ve en la retórica del signo en un gran autor, sino que desdibujó
velar el lenguaje (langue)de un cam- en virtud de: el significante moda
moda. Barriles trabaja aquí con cinco la distinción entre critica y escritura
po como el de la moda. Por ello Bar- —en el que el significado se deriva
códigos: hermenéutico (presentación (poética).
riles moviliza todos los recursos de la de la relación entre objeto (por ejem-
de un enigma); sémico (significado
teoría lingüística —especialmente el plo, una chaqueta), soporte (por
connotativo); simbólico; proairatico (la
lenguaje como sistema de diferen- ejemplo, el cuello) y variación NOTAS
lógica de las acciones) y gnómico, el
cias‘— con el fin de identificar el len- (por ejemplo, de cuello abierto)— y
código cultural que evoca un conjun-
guaje Ganga& de la moda en su es- el significado moda: el contexto ex- Roland Banhes, Camera Lucida: Re-
to de conocimientos específico. La lec-
tudio de dicho campo. terno del objeto moda (por ejemplo, flections on Pbotography, trad. de Ri-
tura de Barthes no pretende tanto chard Howard, Londres, Vintage, 1991,
Gran parte de El sistema de la •tusser verano.). El signo moda, sin
construir un sistema muy formal de pág. 67.
moda, no obstante, es un discurso embargo, no es la mera combinación clasificación de los elementos narrati- 1 lbíd., pág. 69.
sobre el método, porque la moda no de significante y significado porque la vos como mostrar que las acciones 3 ibid., pág. 70.
equivale a ningún objeto real que moda es siempre una connotación, y Roland Barthes, A Lover's Discourse,
más plausibles, os detalles más con-
puede describirse y del que se puede no una denotación. El signo de la trad. de Richard Hoviiard, Nueva York,
vincentes o os enigmas más intrigan-
hablar de forma independiente. La moda es la propia escritura sobre Hill S: Wang, 1978, 6! impr. 1984, pági-
tes son productos del artificio, más
moda está implícita en los objetos, o moda, que, corno explica Barthes, •es na 112.
que una imitación de la realidad.
en la forma de describirlos. Para faci- 'tautológico., porque la moda no es Roland Barthes, Mytbologies, trad.
Después de analizar a Sade, Fourier
litar el análisis, Barthes limita el cam- nunca más que la prenda de moda:. de Annene Lavers, St. Albans, Hert., Pa-
y Loyola como •Iogotetas. y fundado- ladin, 1973, pág. 129.
po: Su área consistirá en los signos En la tercera parte de M sistema de
res de •lenguajes. en Sade, Fourier, Roland Barthes. •Introduction á ['ana-
escritos de la moda para las mujeres la moda, Barthes examina el sistema Loyola —un ejercicio que recuerda el lyse structurale des récits, Communica-
tal como aparecen en dos revistas de retórico de la moda. Dicho sistema .lenguaje. (langue)de la moda—, Bar- tions, 8 (1966), pass. 1-27. Ed. inglesa,
moda entre junio de 1958 y junio captura •todo el código del vestir.. thes escribe sobre d placer y la lectu- dnuoduction to the sunctural analysis of
de 1959. El inconveniente es que en E, igual que en el caso de este últi- ra en Le Plaisir du tete. Este libro su- narratives• (1964), en Image -Music - Text,
ellas no se escribe nunca directamen- mo, en el sistema retórico se exami- trad. de Stephen Heath, Glasgow, Fonta-.
pone un anticipo del estilo de escritos
te sobre la moda, sino que ésta se na la naturaleza del significante, el na/Collins, 2. hnpr. 1979, págs. 79-124.
sucesivos, más fragmentado, persona-
encuentra en connotaciones. El siste- significado y el signo. La retórica del ' Roland Barthes, The Fashion Sys-
lizado y semificticio. El placer del tex-
ma de moda implica siempre que las significante en el código del vestir tem, trad. de Manhew \Vard y Richard
to •está vinculado a la coherencia del Howard. Nueva York, Hill and Wang,
cosas (prendas de vestir) se dan de abre una dimensión poética, dado
yo, del sujeto que confía en sus valo - 1983, la irnpr. 1984, pág. 220, n. 16.
modo natural o funcional: unos zapa- que la prenda descrita no posee va- res de comodidad, expansividad y sa- 8 Roland Barthes, Tbe Grairz of tbe
tos son •ideales para andar, mientras lor productivo demostrable. La retóri- Voice, Interviews 1962-1980, trad. de
tisfacción.". Dicho placer, que es típi-
que otros están hechos tara una oca- ca del significado se relaciona con el co del texto legible, contrasta con el Linda Coverdale, Nueva York, Hill
sión especial..... Los textos sobre mundo de la moda, una especie de texto de jouissance (el texto para dis- Wang, 1985, pág. 206. Traducción mo-
moda, pues, se refieren a las prendas mundo 'novelístico. imaginario. Por frutar, la felicidad, la pérdida de uno dificada.
de vestir, no a la moda propiamente último, la retórica del signo equivale mismo). El terto de placer tiene, a me-
dicha. Si este tipo de escritura tiene a las racionalizaciones de la moda: la nudo, una delicadeza y un refinamien-
un significado (la prenda), está claro transformación que sufre la prenda VÉASE TAMBIÉN EN ESTE LIBRO
to supremos, a diferencia del texto
que no es la moda. El lenguaje de la de moda descrita en algo que es ne- poético de ,louissance, muchas veces Benjamin, Eco, Genene, Greimas, Saus-
moda sólo se manifiesta cuando se cesario porque cumple naturalmente ilegible. Los propios textos de Barriles, sure, Todorov.
tiene en cuenta la relación entre sig- su propósito (por ejemplo, prendas especialmente a partir de 1973, se
nificante y significante, y no la rela- de noche) y cumple naturalmente su pueden definir con precisión con arre-
ción (arbitraria) entre significante y propósito porque es necesario. glo a esta concepción del placer. Tras PRINCIPALES OBUAS DE BARTHES
significado. La relación entre signifi- Una obra posterior de Barthes, S/Z, destilar el lenguaje (langue) de otros,
cantes constituye el signo de la vesti- analiza el relato corto Sarrastne de Le Degré zéro de l'écliture, París, Seuil,
Barthes empezó, como autor de pla-
menta. Barthes orienta su estudio con Balzac y es un intento de hacer explí- 1953.
cer, a dar salida a su propio lenguaje
arreglo a una serie de ejes, todos citos los códigos narrativos que actúan Mitologías (1957). Madrid, Siglo XXI,
único. Desde una situación en la que 1980.
ellos relacionados con el carácter de en un texto realista. Sarrasine, afirma se convirtió en médico por temor a no Sur Racine, París, Seuil, 1963.
la significación. Después de unas Barthes, está tejido con códigos de na- ser capaz de escribir (especialmente Ensayos críticos 0964), Barcelona, Seix-
reflexiones metodológicas, examina turalización, un proceso semejante al ficción), Barthes no sólo se convirtió Barral, 1983.

16 4 1 165
ECO ECO

Systéme de la mode, Paris. Senil, 1967. Eco nació en 1932 en el Piamonte, un mundo polifónico y abierto. Los un insomnio ideal- (FIV 120: 13-14).
.S/Z, Paris, Senil, 1970, Italia. Antes de ser semiótica estudió dos polos del campo intelectual de El lector ideal no es, en realidad, un
El imperio de los signos (1970), Barcelo- filosofía y se especializó en las teo- lector perfecto, sino alguien que re-
Eco se pueden apreciar si se sabe
na, Mondadori, 1991, rías filosóficas y estéticas de la Edad que, el año en el que publicó su ca- presenta /a gama de lecturas posibles
Sade, Fourier, Loyola (1971), Madrid,
Media. Su tesis en la Universidad de pítulo sobre estética medieval, apa- justificadas en función de la propia
Cátedra, 1997.
Turín, sobre la estética de Tomás reció un artículo con su nombre ti- estructura del texto: el lector que está
Le Plaisir du texte, París, Seuil, 1972.
de Aquino, se publicó cuando tenía tulado •L'opera in movimento e la despieno hacia estas posibilidades.
Roland Barthes (1975), Barcelona, Kai-
ros, 1978. veinticuatro años, en 1956. Tres años coscienza dell'epoca• OLa obra en La otra dimensión que constituye
Fragmentos de un discurso amoroso más tarde, Eco escribió un capítulo, movimiento y la conciencia de la la trayectoria intelectual y académica
(1977), Madrid, Siglo ni, 1993. -Sviluppo delPestetica m edieva le- (»El época.), que examinaba de qué for- de Eco es la semiótica. Desde 1975,
La cámara lúcida: nota sobre la fotogra- desarrollo de la estética medieval.) ma la música moderna (Stockhausen, Eco ocupa la cátedra de semiótica en
fía (1980), Barcelona, Paidós, 1994. para un manual en cuatro volúmenes Berio, Boulez), la escritura moderna la Universidad de Bolonia, y ha escri-
La aventura senziológica (1985), Barce- sobre la historia de la estética. to en inglés dos libros esenciales que
(Mallarmé, Joyce) y el arte moderno
lona, Paidós, 1993. En 1986, dicho capítulo apareció en (Calder, Pousseur), en relación con la desarrollan su teoría de los signos y
Incidentes, Barcelona, Anagrama, 1987,
traducción inglesa bajo el título Art ciencia moderna (Einstein, Bohr, Hei- la significación. Se trata de A 773eory
Lo obvio y lo obtuso: inzágenes, gestos,
and Beauty in the Middle Ages (Arte senberg), producen -obras en movi- of Sepniotics (1976) [Tratado de semió-
voces, Barcelona, Paidós, 1992.
El susurro del lenguaje: más allá de la y belleza en la Edad Media). Esta eru- miento• y -obras abiertas., en las que tica generall y Semiotics and the Phi-
palabra y la escritura, Barcelona, Pai- dición, como hemos advertido, sirve el destinatario pasa a ser un demen- losophy of Language (1984) (Semióti-
Mis, 1994. para buenos propósitos en la ficción to activo para lograr la terminación ca y Filosofía del lenguaje).
de Eco, pero ¿tiene una verdadera provisional de una obra, o donde la Aunque A Theory of Semiotics se
relación con su trabajo sobre semióti- propia obra pone su apeftura por de- ocupa explícitamente de una teoría
OTRAS LECTURAS ca? Se puede responder afirmativa- lante. Desde este punto de partida, de los códigos y la elaboración de
mente, por varios motivos. Primero, Eco desarrolla el tema de su trayecto- signos, su punto de partida es el con-
CULLER, Jonarhan, Roland Barthes, Nue- como han demostrado Todorov y ria intelectual que se refiere al -papel cepto de •semiosis ilimitada. de Peir-
va York, Oxford University Press, otros, la época de Tomás de Aquino del lector•. ce. La semiosis ilimitada se refiere, en
1983. es también un capítulo en la historia En una declaración reciente sobre manos de Eco, al tipo de posición in-
LAVES, Annette, Rotand Barthes: Strzic- de la teoría de los signos. El Aristóte- la lectura y la interpretación', Eco ha termedia en relación con la posición
turalism and Ajter, Harvard, Harvard
les que tanto influyó en el -Doctor destacado que la versión del -todo del lector. Aunque la semiosis ilimi-
University Press, 1982.
angélico , ha dejado asimismo su hue- vale» de la crítica postmoderna no es tada es resultado del hecho de que
MORIARTY, Michael, Roland Barthes,
lla, reconoce Eco, en la semiótica lo que está implícito en la noción de los signos en el lenguaje se refieran
Cambridge, Polity Press, 1991.
contemporánea; por ejemplo, en la obra abierta. Se puede decir que toda siempre a otros signos y un texto
teoría de la metáfora'. Segundo, obra literaria propone un lector mo- siempre ofrece la perspectiva de infi-
como medievalista, Eco se sentía fas- delo correspondiente a las posibilida- nitas interpretaciones, Eco quiere evi-
cinado ante os escritos de James Joy- des reales y justificables que estable- tar los extremos del significado uní-
Umberto Eco ce, en los que se hallan amplias re- ce el texto. Para Eco, proponer que voco, por un lado, y significados
ferencias a Aquino, Aristóteles, es posible un número infinito de lec- infinitos, por otro. La semiosis ilimi-
Umberto Eco es conocido por el Dante, los bestiarios medievales y la turas para cualquier texto es un ges- tada corresponde, más bien, al »inter-
gran público en todo el mundo gra- retórica. pretante• de Peirce, en el que el sig-
to totalmente vacío. Ello no significa,
cias a sus dos novelas, El nombre de Su interés por Joyce debe verse en nificado se establece mediante
sin embargo, que un autor empírico
la rosa' y El péndulo de Foucault 2 . el contexto de la curiosidad , y la -ad- deba poder juzgar la validez de la in- referencia a las condiciones de posi-
Ambas obras aluden a aspectos de miración- de Eco ante el mundo mo- tepretación basándose en sus inten- bilidad.
teorías del signo pasadas y actuales, derno y sobre la modernidad como ciones. Se trata de indicar pruebas Contando con la semiosis ilimitada,
así como a una enorme variedad de fenómeno histórico y cultural. Joyce que puedan producir una interpreta- ¿cómo explica Eco la naturaleza de
textos académicos (especialmente de llena el vacío entre la pasión científi- un código? En términos generales, los
ción pertinente y coherente, aunque
la Edad Media) y de otro tipo (Sher- ca de Eco hacia un tiempo pasado códigos pueden ser de dos tipos.
sea a pesar del autor empírico. En
lock Holmes en El nombre de la rosa, (aunque quizá esté regresando) i y el este sentido, a Eco le gusta citar la Pueden ser de tipo unívoco, como el
el Corpus Hermeticum en El péndulo mundo empírico del aquí y ahora, un código Morse, donde una sede deter-
frase de Finnegaru IVake que se re-
de Foucault). mundo de complejidad y diversidad: minada de señales (puntos y rayas)
fiere a -ese lector ideal que padece

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ECO ECO

corresponde a una serie determinada de un objeto supuestamente real. En ción del lenguaje como una semánti- cluso cuando aparentemente hay un
de signos, en este caso, /as letras del otras palabras, es necesario evitar la ca basada en el valor de verdad de caso claro de objeto o conducta que
alfabeto. Este tipo de código —en el -falacia del referente». Así, el vehícu- las proposiciones. La risa, la mentira, parece existir fuera de todo formato
que un sistema de elementos se tra- lo-signo /perro/ no es equivalente a la tragedia, son fundamentales para convencional (es decir, más allá del
duce a otro sistema— posee unas ningún perro particular (= objeto entender el código desde un punto código), tales ejemplos se vuelven rá-
aplicaciones muy amplias, de modo real), sino que tiene que representar de vista semiótico. pidamente convencionales. Las ilus-
que la relación entre ADN y ARN en a todos los perros, tanto vivos como El campo semántico está envuelto traciones más significativas son los
biología se puede analizar como un muertos. Un ejemplo más claro, qui- -en múltiples giros- que hacen insufi- ejemplos de Gombrich (mencionadds
código. zá, es el hecho de que /sin embargo/ ciente el concepto de código como por Eco) de lo que pasaba por realis-
Aunque Eco ofrece varios ejemplos no tiene un referente; es puramente equivalencia de los elementos de dos mo en pintura durante diversos mo-
técnicos de este tipo de código, su un producto del código. Segundo, sistemas. De hecho, afirma Eco, todo mentos de la historia del arte (por
principal interés es el lenguaje, com- Eco reconoce que los códigos tienen gran código lingüístico es -una com- ejemplo, los dibujos de Durero). Se
puesto de langue (donde código = un contexto. Dicho contexto es la pleja red de subcódigosi. Para decirlo puede incluso probar que una foto-
gramática, sintaxis, sistema) y parok vida social y cultural. -Las unidades sucintamente: el modelo Q de Eco •es grafía tiene aspectos convencionales;
(acto de lengua). O, para utilizar los culturales-, pues, •son signos que la un modelo de creatividad lingüística-. por ejemplo, el revelado del negativo
términos de Hjelmslev, como hace vida social ha colocado a nuestra dis- Y confirma: -En efecto, el modelo Q ofrece la posibilidad de cierto toque
frecuentemente Eco, el código corre- posición: imágenes que interpretan supone que el sistema puede alimen- convencional por parte del fotógrafo.
laciona el plano de la expresión en el libros, respuestas adecuadas que in- tarse con información fresca y que de Pero, si se considera la fotografía des-
lenguaje con el plano del contenido. terpretan preguntas ambiguas, pala- los datos incompletos pueden inferir- de la perspectiva de su condición
Eco utiliza el término 'código-s- para bras que interpretan definiciones, y se datos nuevos.". Con el modelo Q, analógica (cuánto se parece a su ob-
designar un código empleado en este viceversa.. Lo que hace alguien como por tanto, el código se modifica con jeto), Eco nos recuerda que la digita-
sentido. Dicho de otra forma: el códi- reacción ante un vehículo-signo con- arreglo a las competencias variables lización, como forma determinada de
go-5 del lenguaje equivale a la orga- creto (por ejemplo, ¡tu grito/ en Aus- de los usuarios del lenguaje, en vez codificación, implica nuevas posibili-
nización específica de los elementos tralia produce que alguien invite a de estar determinado por el propio dades de reproducción. En resumen,
de la paro/e. Sin un código, las mar- todas las bebidas), señala Eco, nos da código. los elementos esenciales de la tipolo-
cas sonoras y gráficas no tienen sig- 'información sobre la unidad cultural. El otro aspecto de la teoría de los gía de modos de elaboración de sig-
nificado, en el sentido más radical de involucrada 6. Como consecuencia de códigos es una teoría de la elabora- nos de Eco son los siguientes:
que no funcionan desde un punto de tener en cuenta la condición del sig- ción de signos. En su estudio de esta
vista lingüístico. Los códigos-s pue- no como unidad cultural, una teoría cuestión, Eco vuelve a centrarse en la 1. Trabajo físico: esfuerzo nece-
den ser •denotativos• (cuando una de los códigos es capaz de explicar tensión entre los elementos que pue- sario para elaborar el signo.
afirmación se interpreta literalmente) de qué forma los signos pueden asu- den ser fácilmente asimilados o pre- 2. Reconocimiento: el objeto o
o connotativos (cuando se detecta mir múltiples significados, cómo de- vistos por el código (cfr. los símbolos suceso se reconoce como expresión
otro código —por ejemplo, el código riva el significado de la competencia en la terminología de Peirce) y los del contenido de un signo, como en
de cortesía— dentro de esa misma que tiene el usuario del lenguaje o que no pueden asimilarse con facili- el caso de las huellas, los síntomas o
afirmación). Nada de esto es realmen- sistema de signos y cómo, por consi- dad (cfr. el concepto de icono en las pistas.
te ajeno al trabajo de Saussure, pero guiente, pueden crearse nuevos sig- Peirce). Eco designa los elementos de 3. Ostensión: se demuestra que
Eco quiere introducir una intepreta- nificados. La langue como código la primera categoría como ratio faci- un objeto o acto es representativo de
ción del código-s que es más dinámi- pasa a ser equivalente a la competen- lis y los de la segunda, como ratio una clase de objetos o actos.
ca que la que se halla en la teoría de cia del usuario del lenguaje. Ocurre difj?cilLf. Cuanto más nos aproxima- 4. Réplica: tiende en principio ha-
Saussure, y en gran parte de la lin- así incluso cuando el hablante de la mos a la ratio difficilis, más está el cia la ratio difficilis, pero asume ras-
güística vigente. Para ello desarrolla lengua utiliza el código de forma in- signo del objeto »motivado» por la gos de codificación mediante la esti-
lo que denomina, siguiendo a Qui- competente. Porque la •incompeten- naturaleza del propio objeto. Los ico- lización. Son ejemplo los emblemas,
fijan, un -modelo Q-, el modelo del cia» (por ejemplo, para citar a Eco, nos son la categoría de signo que lo tipos musicales, signos matemáticos.
código que explica la semiosis ilimi- que la nieve es mantequilla de caca- expresa con más claridad. Sin embar- 5. Invención: el caso más claro
tada. Antes, sin embargo, Eco debe huete) es también interesante para la go, a Eco le interesa mostrar que in- de ratio difficilis. El código existente
demostrar que el significado de un semiótica. La risa es una respuesta cluso los signos más motivados (por no la prevé; es la base de un nuevo
-vehículo-signo. (por ejemplo, una posible a dicha incompetencia, risa ejemplo, la imagen de la Virgen) po- continuo material.
palabra o imagen) es independiente que debe quedar excluida de la no- seen elementos convencionales. E in-

16s 169
ECO GRE1MAS

Lo que propone Eco mediante su red •rizomática. de definiciones loca- ' (bid.. pág. 124. Hoy en día, pese a que su valor
modelo Q y la invención de la elabo- les; su estructura es como un mapa, ' 'bid., págs. 183-184. heurístico está algo disminuido y
radón de signos —y lo que la semió- en vez de ser jerárquica y de árbol. Eco. Senziotics and Me Philosopby aunque su postura no es muy origi-
of Language, pág. 46. nal, estarnos aún tentados de seguir
tica convencional ha tendido a dejar De hecho, para coinportarse adecua-
el ejemplo de Propp y, de acuerdo
de lado (la obra de Kristeva es una damente como red de palabras que
con el principio de avanzar de lo co-
excepción notable)— es la necesidad permita la posibilidad de nuevos sig-
VÉASE TAMBIÉN EN ESTE LIBRO nocido a lo ciesconncido, de lo más
de explicar la capacidad de renova- nificados, un diccionario tiene que sencillo a lo más complejo, pasar de
ción y revitalización del sistema lin- ser como una enciclopedia. Es »una Barthes, Benveniste, Greimas. la literatura oral a la literatura escri-
güístico. Eco afirma que el sistema de enciclopedia disfrazada., afirma Eco. ta, de la tradición al relato literario,
signos, en vez de ser cerrado y estáti- Así, la enciclopedia puede convertir- en nuestro intento de confirmar los
co, es abierto y dinámico. se en un modelo general de lengua- PRINCIPALES OBRAS DE ECO modelos teóricos parciales disponi-
Una motivación equiparable es la je, una forma de hablar sobre él sin bles e incluso hechos recalcitrantes
Tratado de semiótica general (1976), que nos permitan aumentar nuestro
que se observa en el examen que Eco imponerle una globalidad artificial y
Barcelona, Lumen, 1991. conocimiento de la organizacit5n de
hace de los signos y la significación definida.
La definición del arte, Barcelona, Martí- la narración y el discurso'.
en Semiótica y filosofía del lenguaje. Después de todo, quizá la aporta-
nez Roca, 1978.
Aquí, Eco sostiene que un signo no ción más duradera de Eco a la teoría En esta declaración hay, al menos,
7"be Role of tbe Reader: Etplorations in
es sólo una cosa que representa otra de la semiótica es demostrar que el the Semiotics of Text& Londres, Hut- dos cosas interesantes. La primera es
cosa (y, por tanto, tiene un signifi- lenguaje es corno la enciclopedia, in- chinson, 1981, reimpr., 1985. que el •ejemplo de Propp al desarro-
cado de diccionario), sino que es pre- ventada por los philosopbes en el si- Semiótica y filosofía del lenguaje(1984), llar un modelo de relato tradicional
ciso interpretarlo. Como hemos ob- glo ximi. ¿También la ilustración, al Barcelona, Lumen, 1990. ruso —pese a su notable rigidez— si-
servado más arriba, el concepto de menos en este sentido, es postmo- El nombre de la rosa, Barcelona, Lumen, gue influyendo en la obra de un se-
interpretación que actúa aquí es el de derna? 1989. miótico de inspiración científica a
•interpretante. de Peirce, que genera La estructura ausente, Barcelona, Lu- mitad de los años 70; y la segunda,
la semiosis ilimitada. men, 1989.
que el lector advierte las referencias
El péndulo de Foucault, Barcelona, Lu-
El tema clave en Semiótica y filoso- NOTAS a conceptos metafísicos: el movi-
men, 1991.
fía del lenguaje es la diferencia entre •13etween aurhor and text•. en Stefan miento de •lo conocido a lo descono-
la estructura del diccionario y la enci- ' Umbeno Eco, El nombre de la rosa, Collini (ed.), con Richard Rorty, Jona- cido, de lo •más sencillo a lo más
clopedia. Aunque no lo explica exac- Barcelona. Lumen, 1989, than Culler y Christine Brooke-Rose, complejo- e incluso de •la literatura
tamente en tales términos, para Eco, Umberm Eco, El péndulo de Fou- Inte,pretation and Ovennropretation, oral a la escrita» (cfr. la obra de De-
el diccionario, como el .árbol de Por- cauk Barcelona, Lumen, 1991. Cambridge, Cambridge University rrida). Dichas referencias parecen
firio» jerárquico (cese modelo de defi- 3 Véase, por ejemplo, el examen de Press, 1992. surgir de cierta predisposición filosó-
nición, estructurado por géneros, es- Eco en Semiotics and the Pb ilosophy of Signo, Barcelona, Labor, 1994. fica que dada impulso a la semiolo-
pecies y diferencias.)m, corresponde a Language, Londres. Macmillan, 1984, gía de Greimas, pero que éste, al mis-
págs. 91-103.
una concepción del lenguaje como el mo tiempo, ha intentado evitar o
• Véase U-liberto Eco, .The retum of OTRAS LECTURAS
sistema estático y cerrado de la lin- transformar. En sus propias palabras,
the Middle Ages», en Travels in Hipe-
güística convencional. El modelo »dic- n-callo', trad. de William Weaver. San FRY, Virginia, •A juxtaposition of two la dependencia implícita de un mar-
cionario. del lenguaje no podría ex- Diego, Harcoun Brace Jovanovich, 1986, abductions for stuclying communica- co o un grupo metafísico de hipóte-
plicar la semiosis ilimitada. Por el págs. 59-85. tion and culture», AniriCall Jou r nal sis equivaldría a confundir al ser se-
contrario, la enciclopedia correspon- 5 Véase Umberta Eco, •Between au- ofSenziotics, 5, 1 (1987). págs. 81 -93. miótica con la esfera de la ontología,
dería a una red sin centro, un labe- thor and rext•, en Stefan Collini (ed.), con o el ser como tal.
rinto del que no existe salida, o un Richard Rorty, Jonathan Culler y Christi- Quizá desde el momento en el que
modelo infinito y deductivo que está ne Brooke - Rose, Interpretation and la lingüística intentó separar su esfe-
abierto a nuevos elementos. El dic-
Oznntnpretation. Cambriclge, Carribrid-
Algirdas Julien Greimas ra de lo extralingüístico, era obligato-
ge University Press, 1992. págs. 67-88.
cionario sufre la aporía de ser signifi- rio que surgiesen dificultades de ca-
Umbeno Eco, A Timar) , ofSenziotics,
cativo, pero de alcance limitado, o de En una reveladora declaración rácter conceptual e incluso empírico.
Bloomington, indiana University Press,
alcance ilimitado pero incapaz de dar 1976, 1." ed. en Midland Book, 1979. de 1975 sobre la relación entre su tra- Como veremos, aunque Greimas no
un significado concreto, mientras que pág. 71. bajo y el de Vladimir Propp, A. J. escapa a dichos problemas, ha avan-
la enciclopedia corresponde a una !bid., pág. 125, La cursiva es de Eco. Greimas escribe: zado seguramente más que ningún

170 • 171
GREIMAS GREIMAS

otro especialista en el desarrollo de grupo de investigaciones semiaticas con el fin de describir y analizar se- traslada a unidades de análisis que
una teoría estrictamente semiótica de Lévi-Strauss en el Collége de Fran- mióticamente el ámbito del discurso. describen la elaboración de significa-
(léase descriptiva) del discurso y en ce. Murió en 1992. En un plano más o menos auxiliar. dos en un contexto determinado. En
el reconocimiento de las verdaderas La trayectoria intelectual de Grei- nos encontramos con: el «sema- (uni- pocas palabras, la semiótica estructu-
dificultades que ello implica. Al final, mas es resultado de un esfuerzo para dad mínima de significado), el -seme- ral describe el significado del signifi-
Greimas compensa el esfuerzo, pese analizar y formalizar todos los aspec- ma- (el núcleo sémico más los semas cado. Éste no será intencional (rela-
a que su esfuerzo incansable por dar tos del discurso. Este término incluye contextuales, que corresponde al -sig- cionado con el sujeto psicológico) ni
un carácter científico a la semiótica no sólo el discurso narrativo, sino nificado concreto de una palabra.), el hermenéutica (un significado que
corra, en ocasiones, el riesgo de po- tembién el de las ciencias humanas y •clasema. (o se ma contextual), la existe antes de la realización del len-
sitivismo. sociales. Greimas ha escrito sobre el -anáfora. (lo que sirve para enlazar guaje). Greimas pretende estudiar la
Algirdas Julien Greimas nació en discurso legal, concretamente sobre expresiones o párrafos), y así sucesi- producción del significado en el dis-
Lituania en 1917. Llegó a Francia la ley francesa relativa a empresas vamente 3 . Si bien este vocabulario es curso: el significado como proceso de
en 1936 para estudiar leyes en la Uni- comerciales, y ha señalado que -por distinto de la terminología de la lin- significación.
versidad de Grenoble. Durante su es- lo que respecta a su forma, todo dis- güística convencional, porque su uni- Por discursa, Greimas quiere decir
tancia en dicha ciudad, adquirió el curso legal es producido por una gra- lo mismo que Benveniste: -El lengua-
dad de análisis no es la oración sino
gusto por la cultura de la Edad Me- mática legal que es distinta de la gra- el discurso, sin embargo, Greimas se je tal corno lo asume la persona que
dia. Tras completar su ¡icen ce en Jet- mática del lenguaje natural en el que muestra frecuentemente en deuda está hablando.- Es decir, el discurso
tres en 1939, Greimas empezó a estu- aparece dicho discurso- 2 . La presencia es el lenguaje realizado. Interpretado
con aquella, por el giro técnico que
diar el dialecto provenzal. Regresó a de unidades recurrentes, diferencia- da a términos corrientes como «inven- de este modo, resulta evidente que a
Lituania en 1940, para ver su tierra in- das de las unidades lingüísticas con- tario-, -presupuesto- o 'práctico- y por Greimas le interesa, en primer lugar,
vadida sucesivamente por soviéticos vencionales, es uno de los indicios de cómo considera que la lingüística es el aspecto parola de la ecuación fan-
y alemanes. Tras volver a Francia que existe una gramática más o me- -la más desarrollada de las disciplinas gue/parole. Sin embargo, no se olvi-
en 1944, inició los estudios de docto- nos formalizable y la posibilidad de semióticas-, de la que -se admite que da de la lang,ue, o sistema; porque,
rado, que culminaron en su tesis so- que haya un modelo para las relacio- tiene el mayor derecho a ser conside- para construir una -gramática- semió-
bre la moda: -La mode en 1830. Essai nes entre dichas unidades. Como rada una ciencia- 4 . El valor científico tica de la producción de significado,
de description du vocabulaire vesti- Saussure, Greimas admite la impor- y putativo de la lingüística hace de debe considerarse que las expresio-
mentaire d'aprés les journaux de tancia del sistema: un signo aislado ella el punto de partida necesario nes están organizadas de una forma
mode de l'époque• (1948) [La moda no tiene significado. Sin embargo, a para un investigador que valoraba concreta; no son simplemente contin-
en 1830: Intento de descripción del diferencia de Saussure, Greimas colo- este rigor intelectual por encima de gentes y arbitrarias. Por esta razón, la
vocabulario sobre vestimenta en los ca el énfasis en el lenguaje como un casi todo lo demás, y que comenzó semiótica estructural de Greimas,
periódicos de la épocal. En este títu- -ensamblaje de estructuras de signifi- su labor académica en el campo de como la etnografía de Bourdieu, se
lo hay ecos de Roland Barthes y su El cación- que implica que el sistema no la lexicografía. En 1969, Greimas-pu- centra en las estrategias, más que en
sistema de/a moda, que también em- está predeterminado sino que debe blicó su Dictionnaire de rancien las normas. Las normas presuponen
pezó como doctorado. articularse o producirse. El centro de francais (Diccionario del francés an- que detrás de las acciones hay un ac-
En 1956, Greirnas publicó un articu- las investigaciones de Greimas es tiguo). tor que se ajusta a ellas. La noción de
lo muy oportuno e influyente sobre la cómo funciona el lenguaje; y ahí se No obstante, la semántica estructu- norma domina gran parte del primer
obra de Saussure, que aprovechaba el puede ver la influencia de Merleau- ral se aparta de la concepción del sig- estructuralismo que, por consiguien-
trabajo de otras dos influencias impor- Ponty. Así, pese a que Greimas estu- nificado en la lingüística convencio- te, da prioridad al actor que realiza la
tantes, Maurice Merleau-Ponty y Clau- dia las relaciones entre los elementos nal porque no se centra ni en la acción. En cambio, para Greimas, no
de Lévi-Strauss. Diez años después, del discurso —sobre todo, el discur- palabra ni en la oración fuera de con- existen más que •actantes-, entidades
en el año culminante del estructura- so narrativo—, y no las cualidades texto, sino en la red de relaciones en producidas por la propia configura-
lismo de 1966, Greimas fundó, con sustanciales de dichos elementos, al la que surge el significado. Como he- ción de las acciones discursivas. Del
R. Barthes, J. Dubois y otros, la revista mismo tiempo se distancia de las mos visto anteriormente, dado que, mismo modo, para una semiótica es-
Langages, además de publicar su obra creencias idealistas del -padre- de la para Greimas, la noción de •red de tructural corno la de Greimas, no
crucial de semántica estructural, Sé- lingüística general. relaciones- va acompañada de la rea- existe un sujeto detrás del discurso;
mantique structurale. Junto con To- Greimas se inspira en Hjelmslev lización del lenguaje, la semántica es- sólo el sujeto producido por el pro-
dorov, Kristeva, Genette, Metz y otros, para desarrollar una verdadera parri- tructural se convierte en una semióti- pio discurso. O, mejor dicho, quizá
Greirnas fue también miembro del lla de términos, todo un vocabulario, ca estructural cuando el significado se hay un sujeto último, pero éste entra

172 173
GREIMAS
GREIMAS

completas. Un elemento clave de la cid,: de los sueños, entre el contenido


en el ámbito de la ontología, no la paz de•, -hacer. y •ser., etc., son valo-
aspectualiclad es la importancia del •latente• y .manifiesto• del sueño'. Sin
semiótica. Greirnas afirma que el •ac- res modales fundamentales que co-
lugar que ocupa en él el cuerpo en negar ni la posible penetración de la
tante sintáctica. no es •/a persona que rresponden a valores concretos de
relación con las pasiones y la actitud •isotopia• ni las complejidades de la
está hablando. —el sujeto ontológi- existencia del microuniverso autóno-
del sujeto, una iniciativa que se agra- cuestión, deberíamos recordar quizá
co , sino •la persona que está ha-
— mo y semiótico: •querer. y .ser capaz
dece en un conjunto de estudios que que, si Greirnas investiga de qué for-
blando-, la persona virtual constitui- de• corresponden a/ plano virtual de
aparenta ser increíbiernente abstracto ma un texto ya homogéneo (por
da en función de su habla'. Además, existencia de os valores modales, «sa-
y cerebral. ejemplo, •Dos amigos.) es homogé-
Greimas, como otros pensadores es- ber. y .ser capaz de. corresponden al
•Isotopia es otro término funda- neo, Freud se ocupaba, en la mayo-
tructuralistas, desea evitar el psicolo- plano de la realidad, y •hacer. y «set --
mental en el vocabulario semiótico ría de las ocasiones, de una serie de
gismo en relación con el sujeto dis- pertenecen al plano de la ejecución.
de Greimas. Como señaló Ronald elementos radica/mente heterogénea
cursivo. Un actante puede equiva/er En resumen, la modalización es un
Schleifer en su Introducción a la tra- con la que era preciso e/aborar un
a dos actores psicológicos; por ejem- •planteamiento« en forma de .declara-
ducción inglesa de Sémantique struc- texto homogéneo. Por consiguiente,
plo, una pareja de esposos que, jun- clon axiomática.; Se basa en •un pro-
tztrale, Greimas, gracias a la noción es probable que las nociones de •ma-
tos, constituyen un haz de funciones cedimiento hipotético y deductivo., y
de isotopia, pudo trasladar el centro nifiesto. y •latente. sean distintas en
pertinentes para el desarrollo de una no en la inducción.
de atención de la semiótica, de la ora- ambos casos.
narración. O una ciudad podría ser Las modalizaciones determinan ex-
ción al discurso. La isotopia, tomada Vamos a intentar ahora una valo-
un actante, como lo es París en el cesivamente la acción de los actantes,
de la química (Greimas toma frecuen- ración del esfuerzo de Greimas, en
análisis que hace Greimas de •Dos los sujetos del discurso narrativo.
temente prestados términos de las primer lugar, con respecto a la sepa-
amigos. de Maupassant 6. Como tienen una relación concreta
ciencias naturales), se refiere a nive- radón de lo semiótica y lo metafísi-
Para describir cómo funcionan los con las acciones, son necesariamente
les paralelos de significada dentro de co, planteada al principio, y, segun-
actantes, sobre todo en el discurso discontinuas. Por tanto, son incapa-
un solo discurso homogéneo. Se di- do, en relación con el análisis que
narrativo, Greimas ha elaborado una ces de explicar estados continuos re-
ferencia de la oposición jerárquica hace de la última parte de su estudio
serie de términos esenciales que es lativos, por ejemplo, a la pasión y la
entre •superficial y latente• y la hace semiótico sobre el relato de Maupas-
preciso entender por completo para emoción, a las actitudes —o •modali-
redundante, además de estar más sant 'Dos amigos, ya mencionado.
apreciar su labor o, llegado el caso, zaciones del estado del sujeto."—, en
próxima a D estructura del juego de Respecto a la separación de lo semió-
oponerse a ella. vez de las acciones. Además, si las
palabras. La isotopia permite que dis- tico y b metafísico, o b ontológico,
El primer término clave es -moda- modalizaciones derivan de una aácio-
tintos elementos (significados, accio- podríamos limitarnos a hacer la si-
lidad-. En lingüística, este término se mática que produce un orden y un
nes, expresiones) se relacionen con guiente pregunta: ¿es verdaderamen-
refería inicialmente a •lo que modifi- sistema, las pasiones introducen un
el mismo discurso. En su estudio del te factible esta separación, te-
ca el predicado de una expresión:. carácter desordenado, incompleto,
relato breve de Maupassant «Dos ami- niendo en cuenta que el lenguaje
Por ejemplo, en la afirmación -Juan entrelazado, con ondulaciones e Mes-
gos., Greimas muestra que una isoto- natural, que contiene numerosas in-
tuvo que escribir la carta., el predica- tabilidades; procesos que son precisa-
pia puede ser: acto rial, cuando se ve crustaciones metafísicas (cfr. Derri-
do es el modo de obligación. En ló- mente muy difíciles de sistematizar.
que unos fragmentos que describen da), tiene que ser el vehículo para la
gica, la modalidad se refiere al modo En vista de ello, Greimas introduce
acciones separadas se refieren, en ciencia de la semiótica? Las pruebas
en el que algo es, o no es, verdadero en su estudio semiótico de las pasio-
definitiva, al actor, •París•; discursiva, presentadas por el propio lenguaje de
o falso; decir que «estuvo enfermo nes el término «aspectualidad., y ob-
cuando se ve que unas estructuras Greimas parecerían confirmar que
en 1930. es atribuir una modalidad serva que ésta predomina en el poe-
ejecutadas de forma independiente se existe una dificultad genuina.
temporal al hecho de estar enfermo. ma de Paul Eluard Capital de la
refieren al mismo sujeto; figurativa, En cuanto al estudio de Greimas
El uso que Grehnas hace de la moda- douleur, porque dicho poema se cen-
cuando el texto se convierte en ve- sobre •Dos amigos. de Maupassant,
lidad está quizá más cercano al senti- tra en lo incompleto, más que en el
hículo para diversas alegorías o pará- resulta indudablemente sospechoso,
do lógico que al lingüístico, porque •valor semántico de los objetos que se
bolas diferentes; y temática, cuando desde un punto de vista metodológi-
quiere dar al concepto un carácter desean.. Por ejemplo: -el amor es
el texto implica un conocimiento que co, examinar un comentario sobre el
axiomático. La modalización es, pues, aceptable sólo al principio; la mirada,
va más allá del conocimiento narrati- final de la historia aisladamente de lo
lo que caracteriza y limita cualquier cuando los párpados se abren al des-
vo (en este caso, sobre la pesca y la que lo ha precedido. Pese a ello, b
situación actancial. En realidad, es b penar; el día, en el momento en que
amistad). Con M •isotopia., Greimas que sigue es un argumento general e
que está siempre determinado en rompe con la oscuridad; la vida hu-
considera que ha restado validez a la intenta tener en cuenta la labor de
cualquier situación de ese tipo. Así, mana, en la infancia.. Es decir, el
distinción de Freud, en La interpreta- Greimas en su conjunta.
-querer., •tener que«, •saber., •ser ca- poema de Eluard aprecia las cosas in-
175
174 1
GREIMAS HJELMSLEV

En primer lugar, se advierte que el ma, caracterizado por la ausencia de de Larry Crist etal.. Bloornington, India- University of Nebraska Press. Lon-
texto de base —Dos amigos— com- perturbaciones somáticas o noológi- na University Press, 1982. dres, Croom Heim, 1987.
prende apenas seis páginas, mientras cas•". Para Greimas, la última frase es ' Greinus, Narrative Semioties and SORENSEN, Dolf. Theorzy Formation and

que el texto analítico tiene casi 250 un elemento que contribuye a parte Cognitive Discowses, pág. 12. tbe Study of Literature, Amsterdam.
páginas de largo. Dicha disparidad, de la gramática del discurso narrativo lbid, la cursiva es de Greinus. Rodopi, 1987.
típica de este trabajo', parece poner que está intentando construir. Desde Greimas, Maupassant: Tbe S'en:io-
nes of the Tart, pág. 3.
en tela de juicio la posibilidad prácti- esta perspectiva, intenta mostrar la ' Greimas y Courtés, Sentiotics and
ca de analizar, no sólo un texto más estructura de lo que denomina las Language, pág. 193.
largo, sino más complejo. Sobre todo, posibilidades del discurso narrativo, Louis Hjelmslev
• A. J. Greimas y Jacques Fontanille.
el lector empieza a preguntarse si constituidas por modalidades, isóto- 77.3e Serrijones q (Passion (1991), trad. de
Greirnas ha dejado realmente atrás la pos, acciones cognítivas y pragmáti- Paul Perton y Frank Collins. Minneapo- El lingüista y semiótico danés Louis
minuciosidad lingüística que caracte- cas, etc. Esta gramática sería el sis- lis y Londres, University of Minneapolis Hjelmslev nació en 1899 y murió en
riza a los estudios de la oración. tema implícito en los procesos Press, 1991, pág. 5. 1966. Hjelmslev intentó dar más rigor
Más importante es que el modo en 9 A. J. Greimas, Structural Senumtics: y claridad a la teoría general del len-
narrativos. De manera muy laudable,
que su análisis aborda el desenlace de An Attempf at a Metbod trad. de Daniele guaje y la semiótica de Saussure. En
da prioridad a la estrategia sobre las
la historia plantea ciertas dudas sobre McDowell, Ronald Schleifer y Man Velie, concreto, se le recuerda como el in-
normas. Sin embargo, en un sentido Lincoln, Universiry of Nebraska Press,
la perspicacia del trabajo de Greimas. fundamental, sigue pareciendo exter- 1983, pág. 112. ventor de la .glosemática• (véase más
Después de ser apresados por los pru- no a los procesos que aísla; sigue do- 1 ° Véase Greimas, .0n chance occu-
adelante) y por haber dado nuevo ri-
sianos (es la época de la guerra fran- minando el texto de base y parece rrences in what we cal' the human gor al concepto de connotación.
co-prusiana) mientras disfrutaban de que ése es su objetivo clave, además sciences: Analysis of text by Georges Como Saussure, Hjelmslev parte de
un día de pesca, los dos amigos son de evitar ser dominado (es decir, des- Dumézil., en Narrative Sennotics and la posición de que el lenguaje es una
fusilados por ser espías franceses y sus orientado) por él. Cognitive Discourses, págs. 59 61.
- institución supraindividual que debe
cuerpos son arrojados al río de donde Dicho esto, la aspiración científica " Greimas, Maupassant: 77.3e Santo- estudiarse y analizarse por derecho
procedían sus peces. Una vez ejecuta- nes of ten, pág. 243. propio, y no como vehículo o instru-
que constituye la base del proyecto
dos, el oficial prusiano que la había di- de Greimas comprende la apertura mento del conocimiento, el pensa-
rigido ordena que se cocine el pesca- hacia la modificación de la teoría a la miento o la emoción ni, más en ge-
do vivo. Inmediatamente después VÉASE TAMBIÉN EN ESTE LIBRO
luz de las dificultades encontradas. neral, como medio de contacto con lo
llega la última línea: •Entonces empe- Por consiguiente, en principio, quizá que está fuera de él. En pocas pala-
zó, de nuevo, a fumar su pipa.. Benveniste, Eco, Jakobson, Hjelmslev. bras, el enfoque trascendental (len-
sería posible terminar justificando el Lévi-Strauss, Merleau-Ponry, Saussure.
Aquí, al lector le choca con gran poder emocional del texto, aunque guaje como medio) debe dejar paso
energía el agudo contraste entre la plantee el mayor desafío afrontado a un enfoque inmanente (el estudio
frase final y los hechos inmediata- por la semiótica estructural. del lenguaje por sí solo)i. Para ello,
PRINCIPALES OBRAS DE GREIMAS
mente anteriores. Esta última línea, Hjelmslev desarrolló lo que conside-
podríamos sugerir, al estar tan fuera Sémantique structurale (1966).
raba un sistema sencillo y riguroso de
de lugar —o, más bien, por parecer NOTAS Semiótica del texto: ejercicios prácticos conceptos y términos que aclararan la
tan arbitraria—, guarda la clave del (1976), Barcelona. Paidós, 1993. naturaleza del lenguaje, en el máximo
poder emocional del relato, un poder ' A. J. Greimas, Maupassant.. 773e Se- Greimas y J. Courtés, Semiótica. plano de generalidad, e hiciera° más
creado por el sentido de la cruel in- /71011es o( the Text, trad. de Paul Perron, Diccionario razonado de la teoría del competente el estudio de sus realiza-
diferencia del oficial prusiano. Pese a Amsterdam y Filadelftajohn Benjamins, lenguaje (1979), Madrid, Gredos, dones.
sus referencias —mediante el empleo 1988, pág. xxiv. 1990. Para el Hjelmslev de los Prolegó-
de la isotopia— a simbolismos cristia- A. J. Greimas, Narrative Serniones Del sentido lb Ensayos semióticos (1983), menos a una teoría del lenguaje su—

nos y de otro tipo, Greimas no abor- and Cognitive Discourses, trad. de Pau( Madrid. Gredos, 1990. obra más conocida—, el lenguaje es,
da en ninguna parte este aspecto Perron y Frank Collins, Londres. Pinter al mismo tiempo, un sistema de sig-
esencial de la historia. En el segmen- Publications, 1990. pág. 108. nos y un proceso de realización (en
to que se ocupa de las últimas líneas El lector hallará un excelente inven- OTRAS LECTURAS
el caso de Saussure, la terminología
tario muy elaborado de todos los térmi-
del relato escribe lo siguiente: .Fumar nos relevantes de la obra de Gteimas en SCHLEIFER, Ronald.
A. J. Greinzas and ¿he
comparable es, respectivamente, lan-
una pipa es, sin duda, la representa- A.). Greimus yJ. Courtés, Serniotics and Nature Aleaning: Linguistic Senjfo- gue Y ParOle). Como Saussure,
ción figurativa de un estado de cal- Language: An Anablic Dictionary, trad. ti and Discourse Tbeory, Lincoln, Hjelmslev también considera que el

176 177
HJELMSLEV HIELMSLEV

lenguaje es un sistema de signos, por para /a formación de otros nuevos.


ral, a intención es •inaccesible al co- conversación y escritura cotidiana).
lo que es importante ser claro acerca A esta especie de -todavía no signos.,
nocimiento• en la medida en que el En otras palabras, la e:cpresión adop-
de la naturaleza del signo. En primer Hjelmslev los llama •figuras•. Las figu-
conocimiento es una •formación. 1. ta una forma concreta (por ejemplo,
lugar, advertimos que ningún signo ras evocan la noción de -significante
Para aclararlo, es necesario explicar en las palabras -quiero a Ron.) y exis-
existe aisladamente; los signos están flotante- que Lévi-Strauss descubre en
lo que Hjelmslev quiere decir con te en una sustancia (por ejemplo, la
siempre en un contexto, en relación la obra de Mauss. Sugieren que el
.expresión. y .contenido.. voz humana, o unas marcas grabadas
con otros signos. Para subrayarlo, lenguaje es siempre una totalidad
Antes de entender todo el sentido en un muro). Por consiguiente, exis-
Hjelmslev no habla del signo en si abierta y no un sistema propiamente te una forma de la expresión (las pa-
de -expresión. y -contenido-, veamos,
sino de la función de signo. Una fun- dicho, en el que os elementos com-
en primer lugar, que Hjelmslev con- labras) y una sustancia de la expre-
ción que define como -una depen- pondrían un conjunto autónomo. Hay sión (el material de las palabras). En
sidera el lenguaje como dos planos
dencia que satisface las condiciones que decir, no obstante, que en el aná- el lado del contenido también hay
diferentes pero conectados entre sk el
para un análisis• 2. De mismo modo lisis de Hjelmslev, como en Mauss, no .forma. y •sustancia•. El contenido
del •sistema. —que corresponde a la
que existe una función entre una cla- hay un reconocimiento explícito de puede definirse, en términos genera-
estructura subyacente, siempre reali-
se y sus componentes, existe una esta consecuencia. Incluso para él,
zada, del lenguaje— y el del proce- les, como la forma en la que se ar-
función entre un signo y sus compo- que está intensamente dedicado a ticula un significado. Hjelmslev pre-
so-, también llamado •texto., que es
nentes, •expresión- y .contenido.. Un elaborar una formalización rigurosa, fiere el término •contenido• en lugar
siempre virtual. El proceso (texto) no
signo, en resumen, no es una marca sencilla y exhaustiva del lenguaje,
es, como podría creerse, la ejecución de .significado•, porque un mismo
o un gesto con cualidades intrínsecas debe considerarse que éste tiene un significado puede articularse a través
del lenguaje (sistema); de modo que,
(una flecha puede no siempre ser un vínculo esencial con el significado y de distintos contenidos, los conteni-
si bien es imposible tener un texto sin
signo), sino lo que funciona como el pensamiento'. No está claro si se dos de un lenguaje natural. Hjelmslev
lenguaje, es posible tener un lengua-
signo en un contexto determinado. trata del significado o el pensamien- ilustra este argumento con el ejemplo
je sin textos. Dado que Hje/mslev
Para que exista una función de signo, to; en cualquier caso ! Hjelmslev pre- que se muestra en la figura 3, en la
confunde .virtual., •real• y .concreto,
por tanto, debe haber —de nuevo, en fiere afirmar' que el lenguaje está que el contenido varía en relación
una forma más clara de expresado
terminología de Hjelmslev— una -ex- vinculado a la •intención., que es, con la misma área semántica (área de
sería decir que el lenguaje se hace
presión- y un •ontenido.. Entonces como explica en una formulación, .el
real, pero sigue siendo virtual, mien- la intención). •
existe una función de signo entre es- factor común... a todos los lenguajes.,
tras que el proceso es concreto pero
tas dos •erminales• .absolutamente da •masa de pensamiento. amorfa.' Alemán 1 Francés
sólo se realiza en parte. El sistema (la Danés
inseparables.. Para las terminales que que, hasta cierto punto, es exterior al 1 arbre
gramática, la sintaxis, el vocabulario), B um
constituyen la función de signo —el lenguaje. Como veremos, la -inten- tr ae HoIz bois
pues, permite la producción de un
•signo expresión y el .signo conteni- ción• es el factor más problemático en skov
número infinito de textos, mientras Walci forét
do.—, HjemIslev ofrece el nombre- toda la teoría de Hjelmslev. Por aho-
que muchos textos no implican nun-
técnico de •funtivos.. Para ser lo que ra, anotemos que la intención es in-
ca más que un solo sistema o lengua- Figura 3. Intercambio de contenido y
es, la función de signo depende de la separable del lenguaje —el lenguaje
je. Hjelmslev analiza la relación entre significado en Hjelmslett.
correlación mutua de los funtivos. Lo dejaría de tener toda raison d'étre sin
•expresión. y contenido. con arreglo Fuente: Hjelmslev, Prolegómenos,
que Hje/mslev quiere decir aquí es ella— y sin embargo, en cierto senti-
a los dos ejes mencionados.
que un signo no es ninguna entidad do, es externa a él. •En sí misma
-Expresión. y .contenido., observa- Aquí vemos que, en danés, trae
física o no física que el lingüista o el —explica Hjelmslev—, la intención
mos, son también los dos funtivos in- abarca todo el Baum alemán y el ar-
semiólogo puedan dar por supuesta. no tiene forma, no está sujeta a una
separables de la función de signo. La bre francés, y parte del Holz alemán
En realidad, no hay una ejecución formación, sino que sólo es suscepti-
expresión puede darse en una varie- y menos del bois francés. Del mismo
real del signo que sea idéntica a la ble de De modo que, como
dad de formas: mediante el habla, la modo, skay traduce, en parte, el Holz
función de. signo. La terminología Saussures, Hjelmslev afirma que el
escritura, el gesto (lenguaje de sig- y el Wald alemanes, además de la
comparable en Saussure, .signo•, •sig- rasgo más distintivo del lenguaje, en
nos), y cada medio, a su vez, se reali- mayoría de bois y parte de jordt, am-
nificante. y -significado., indica que general, es que es una forma en rela-
za en otros muchos medios (libros, bos franceses. Hjelmslev comenta
podría ser asi. ción con la sustancia (intención). Por
televisión, radio, periódicos, folletos, que esta •incongruencia en la misma
Para consentir signos, el lenguaje otro lado, la situación es más compli-
teléfono, código Morse, semáforo, ta- zona de intención aparece en todas
contiene varias clases de no signos cada para Hjelmslev porque, para él,
blillas de piedra, inscripciones de partes:). En el ejemplo, desde la pers-
(por ejemplo, letras del alfabeto) que hay intención-expresión e intención-
todo tipo !sobre muros, suelos lápi- pectiva del plano del sistema, está
componen la materia prima necesaria contenido; y, sin embargo, en gene-
das!, películas, carteles, obras de arte, ilustrado el nivel de la forma del con-
178 179
WELMSLEV HIELMSLEV

tenido de la función de signo. Es distintos idiomas —por utilizar otro no vamos a detenernos aquí. Sin em- Queda por hacer una breve valo•
corno si el lenguaje, en sus diversas ejemplo de Hjelmslev— intentan pro- bargo, desde una perspectiva semió- ración de la teoría del lenguaje y la
articulaciones, separara la misma área nunciar -Berlín., la intención de la ex- tica más general, es preciso explicar semiótica de Hjelnislev. Desde luego,
de significado (intención) de maneras presión variará (debido al acento), la teoría de la -denotación« y la •con- el proyecto de Hjelmslev abre una
específicas de dichas articulaciones mientras que la intención del conte- notación. de Hjelmslev. La denota- amplia variedad de cuestiones, y el
(contenido). La forma de la intención nido será la misma. También puede ción, como implica el término, es el rigor introducido en la semiótica
la da la forma del contenido, y el sig- ocurrir que la misma pronunciación área de expresión que se refiere a un muestra qué fácil es dar por descon-
nificado es la sustancia del contenido. (intención de la expresión) en distin- contenido; por ejemplo, la oración .el tada la noción de signo y que éste se
Un modo de entenderlo, según uno tos idiomas sea la misma fgot, Gott gato se sentó en la estera» denota un convierta en un mero vehículo de sig-
de los intérpretes de Hjelmslev, es («Dios» en alemán), godt (bien » en gato sentado en una estera. Esa mis- nificado, al margen del lenguaje invo-
• afirmar que -ambas formas [forma de danés)), mientras que la intención del ma oración, desde el punto de vista lucrado. Por otro lado, la elaboración
la expresión y forma del contenido] contenido es distinta. Ambos ejem- de la connotación, podría evocar el que hace Hjelmslev de su teoría del
se manifiestan en una "sustancia"rn. El plos proceden del plano del proceso, contexto de unos niños, o una espe- lenguaje se opone frecuentemente a
término clave aquí no es •sustancia» según Hjelmslev. cie de ejemplo .típico. usado como las limitaciones de la coherencia y la
• sino .manifiesto.: hecho visible, reve- La razón de esta elaboración de la ejemplo. Más formalmente, la conno- sencillez. Del mismo modo, si los
lado, perceptible, publicado, etc. función de signo, afirma nuestro au- tación se refiere al hecho de que la conceptos de 'forma. y .sustancia. de
Desde el punto de vista filosófico, la tor, es demostrar que el signo no es expresión y el contenido, unidos, se Saussure exigen verdaderamente
sustancia, ene! siglo mu, era equiva- sólo una etiqueta para algo previa- convierten en otra expresión que se aclaración, es precisamente en ese
lente a la esencia, precisamente lo mente existente. Significa también refiere a otro contenido. Se puede ex- punto donde Hjelmslev también está
que no era manifiesto (Hjelmslev evitar las divisiones artificiales en la presar en un diagrama como el de la a punto de embarrancar. tina lectura
censura el denominado uso no lin- lingüística, entre 'fonética, morfolo- figura 4. minuciosa de los Prolegómenos, des-
güístico de os términos, pero parece gía, sintaxis, lexicografía y semánti- EXPRESIÓN CONTENtDO
de el punto de vista de su coheren-
que precisamente un rasgo del len- ca». De hecho, a Hjelmslev le intere- EXPRESIÓN CONTENIDO
da, deja al lector completamente in-
, guaje es evocar varios contextos dife- sa hasta tal punto partir de una nueva seguro de cómo la •intención. —la
rentes simultáneamente). Incluso en base para el estudio del lenguaje que Figura 4. Expresión y contenido ene! masa amorfa inaccesible fuera del sis-
relación con la forma más moderna utiliza el nombre de •glosemática• pensamiento de Eco. tema de signos— puede vincularse a
de -sustantivo., el sentido no es tanto (del griego glossa, que significa .len- Fuente: Eco, A Theozy of Senziotics, la •expresión y al •contenido• en los
lo que se revela como lo que se ocul- guaje.) para indicar el carácter inno- pág. 55. términos ;intención de la expresión. e
ta. Aunque así fuera, no supondría vador de su método. •intención del contenido.; porque,
necesariamente un problema para la La glosemática seria •n álgebra Por su parte, Hjelmslev afirma que para incluirse en cualquiera de ambos
teoría de Hjelmslev si el término «sus- del lenguaje que opera con entidades la semiótica denotativa es .una semió- funtivos del signo, la intención debe
tanda» pudiera traducirse consistente- sin nombre•u, una ciencia que posee tica en la que ninguno de los planos adoptar una forma específica que,
! mente como manifiesto. Pero, cuan- .el álgebra inmanente del lenguaje.' • es una semiótica, mientras que una por definición, no puede tener. Lo
do también se dice que la intención como objeto. La razón de este nuevo • semiótica connotativa es una semióti- que tenemos son dos intenciones di-
es sustancia", sólo puede producirse enfoque deriva del argumento inicial ca .cuyo plano de la expresión es una ferentes que son lo que son porque
la confusión. de que durante demasiado tiempo, semiótica.". Pero no sólo. Porque el se distinguen entre sí. El hecho de
Hjelnislev equipara las variaciones según Hjelmslev, la lingüística ha es- • plano del contenido también puede que la intención se distinga la lleva a
en la forma del contenido (distintos tudiado el lenguaje desde un punto • ser una semiótica, lo que Hjelmslev la esfera semiótica, de modo que deja
1 significados asociados a la misma de vista trascendente, es decir, que se . denomina una mietasemiótica». La fin- de ser externa al lenguaje o amorfa.
área de intención, por lo que los idio- han utilizado características no lin- giiistica, afirma, es un ejemplo de me- Sin embargo, existe otro problema
mas no son directamente traducibles) güísticas para explicar el lenguaje. La tasemiótica: el estudio del lenguaje con respecto a la intención. Se trata
al sistema del contenido, mientras glosemática pretende ofrecer un mar- •• que es, eh sí mismo, un ejemplo de de que, aunque pasemos por alto el
que la constancia en la forma de co y una terminología que sean rigu- lenguaje. Autores como Barthes, To- uso inconsistente que Hjelmslev hace
• aquél (la misma idea expresada en rosos, sencillos y exhaustivos para rr dorov y Eco han utilizado las nocio- del término, el autor de los Prolegó-
distintos idiomas, de modo que las explicar la realidad y el empleo del nes de semiótica denotativa y conno- menos se ve obligado a recurrir a una
expresiones son directamente tradu- lenguaje. Para ello, Hjelmslev dedicó tativa, pero se han mostrado más dimensión extralingüístíca o semióti-
cibles), la equipara a su proceso. sus energías a desarrollar y perfeccio- circunspectos sobre la viabilidad del ca con el fin de facilitar el desarrollo
Igualmente, cuando los hablantes de nar un vocabulario técnico en el que concepto de metasemiótica. de una lingüística •inmanente.. En

180 181
HJELMSLEV ERISTEVA

otras palabras, la intención es la for- J. Whidield, Madison, University of \Vis- Concepts, La Haya, Paris, Martinus Ni- chis por analizar lo no analizable: la
ma inadvertida que tiene Hjelmslev consin Press, ed. inglesa rey., reimpr. jhoff, 1955. alteridad inexpresable, heterogénea y
de dar a su teoría un elemento tras- 1963, págs. 4-5. radical de la vida individual y cultu-
cendental, precisamente lo que inten- 'bid., pág. 33. , ral. Aunque ello podría abrir la vía
3. En la traducción francés de los
taba no hacer. Ésa es la razón de que hacia el misticismo, Krísteva muestra
Prolegomena de Hjelmslev, •urport.
Julia Kristeva pueda afirmar que la —traducción de la palabra danesa me- Julia Kristeva un interés equiparable por la apropia-
teoría de Hjelmslev permanecía arrai- ;ring— equivale a ,sens• (significado). ción simbólica de este campo no ana-
gada en el influyente marco fenome- ' Hjelmslev, Prolegomena, pág. 52. Para algunos, Julia Kristeva es co- lizable. Sus escritos posteriores, sobre
nológico que ha dominado la lingüís- 5 Md. , pág. 76. nocida, sobre todo, corno teórica del todo, aluden con claridad a la locura
tica hasta hoy". 6 Véase F. de Saussure, Cours de Un- feminismo. Y, si bien es cierto que la de todo abandono a la alteridad.
Desde una perspectiva más positi- guistique générale, París, Payar; 1972, orientación psicoanalítica de su traba- Kristeva empezó a ser conocida a fi-
va, Hjelmslev hizo progresos en la págs. 155 - 156. (Trad. esp.: Curso de jo le ha inducido a reflexionar sobre nales de los 60 como intérprete de la
aclaración de la distinción de Saussu- lingüística general, Madrid, Alianza, la naturaleza de lo femenino (que obra del formalista ruso Mijail
re entre langue y paro/e. Saussure se 1994.) considera la fuente de lo innombra- Destacó la teoría de Enid') sobre la no-
' Hjelmslev, Prolegomena, pág. 76.
equivocó al dar prioridad a la palabra ° lbíd., págs. 39-40. ble y lo inexpresable), siempre ha vela .dialógica. y su concepto dé car-
hablada en el plano de la paro/e, y el 9 lbíd., pág. 54. • mantenido un interés claro en la na- naval.. Poco después, Kristeva se es-
uso que Hjelmslev hace del «texto. o '° B. Siertsema, A 'Study o] Gossema- turaleza del lenguaje y sus manifesta- tableció como importante teórica del
•proceso• contribuye al rigor de la de- tics. A Critica! SurveY of its Fundamen- ciones. En 1990 demostró ese interés lenguaje y la literatura por derecho
finición. Por otro lado, al definir el tal Concepts, La Haya, París, Martinus de manera muy práctica, mediante la propio, con el concepto de ',semanal-
', sistema. (la l anue de Saussure) Nijhoff, 1955, pági 17. publicación de un reman á cié titula- sis.2. El semánalisis, intentaba demos-
como algo independiente del «texto., Hjelmslev, Prolegomena, pág. 52 y do Les Samourais. Como Les Manda- trar, se centra en la materialidad del
Hjelmslev parece afirmar que el len- pág. 80. rins de Beauvoir, cuyo título recuer- lenguaje (sus sonidos, ritmos y distri-
kfd., pág. 79. bución gráfica), y no simplemente en
guaje es esencialmente un sistema, da, Les Sarnourafs (Los samurais) es
3 /bid., pág. 80:
porque, si el lenguaje sin texto es «ima- también una clara vivisección de las su función comunicativa. Aunque la
'' pág.• 114., lógica de esta última puede incluirse
ginable., el texto sin lenguaje no b es. 15 Julia Kristeva, Revolution in Poetic
vidas y los amores de la vanguardia
El riesgo es el de reducir el lenguaje a Language; trad., de Margaret Waller, intelectual parisina. En esta ocasión en los procedimientos científicos con-
un modelo lingüístico, en vez de re- Nueva York, Columbia University Press, es b generación de Kristeva —la in- vencionales que, sobre todo, se es-
conocer que los dos planos (modelo 1984, págs. 38-40. mediatamente posterior a Sartre— la fuerzan por eliminar la contradicción,
y empleo) son inseprables entre sí. Umberto Eco, A lleory of Senzio- que se convierte en centro de aten- la base material del lenguaje no pue-
Aunque, como admite Eco, la teo- tics, Bloomington, Indiana University ción. de explicarse dentro de los límites de
ría de Hjelmslev sorprende frecuente- Press, 1979, pág. 52. Julia ICristeva nació en 1941 y salió esa lógica científica convencional. El
mente al lector por ser de una com- Véase Jacques Derrida, Of gram- de Bulgaria en 1965 para ir a París lenguaje poético, como encarnad&
matology, trad. Gayarri Chakravorry Spi- de la materialidad del lenguaje, no
plejidad aparentemente bizantina. 16, como estudiante. Inmediatamente se
vak, Bakimore, johns Hopkins Univer- puede formalizarse utilizando ese mar-
su determinación de ofrecer una teo- sity Press, 1976, págs. 57-60. sumergió en la vida intelectual de la
ría estrictamente •inmanente. del len- ciudad, asistió a los seminarios de co, sino que necesita uno que sea mu-
guaje y la semiótica ha servido de ins- Roland Barthes y empezó a relacio- cho más flexible y perfeccionado.
VÉASE TAMBIÉN EN ESTE LIBRO Dado su carácter esencialmeMe hete-
piración para otros como Eco y narse con los autores e intelectuales
Derridau para emprender el proyec- Den-ida, Eco, Greimas, Kristeva, Saussure. que giraban en torno a la revista lite- rogéneo, el lenguaje poético (como en
to de establecer un marco semiótico raria de vanguardia Tel Quel, dirigida las obras de Joyce o Mallarmé) desa-
que empiece a desestabilizar el edifi- PRINCIPALES OBRAS DE HJELNISLEV por Philippe Sollers. En los últimos fía a la forma de lenguaje homogénea
cio metafísico que constituye el cen- años 60, dicha revista se convirtió rá- y comúnmente aceptada por ser úni-
tro de la teoría trascendental de los Prolegómenos a una teoría del lenguaje, pidamente en la fuerza impulsora de camente un vehículo de significado y
signos y los sistemas de signos. (1943), Madrid, Gredos. la crítica de la representación —tanto comunicación. El lenguaje poético in-
El lenguaje (1970) Madrid, Gredos. terrumpe el significado o, al menos,
en la literatura como en la política—,
y esta influencia resultó duradera permite roda una variedad de nuevos
NOTAS 0111AS LECTURAS significados e incluso nuevas formas
para Kristeva.
Véase Louis nelmslev, Prolegomerza SIERTSEMA,B., A Study of Glossenzatics: La característica predominante en de comprensión. Por tanto, no ser ca-
to a 713eory of Language, trad. de Francis Critical Survey of lis Fundamental el trabajo de Kristeva es su preocupa- paces de entender, al principio, el len-

182 1 183
KRISTEVA KRISTEVA

guaje poético, es el primer indicio per- notexto» y el .fenotexto-. El genotex- bras, o en la risa, el niño presenta la cación. Dicha capacidad es el requi-
ceptible de sus muy palpables efectos. to, explica, •no es lingüístico., -es, Materia prima que va a utilizar el sito necesario para la formación de la
El interés de Kristeva en intentar más bien, un proceso.'. Es el funda- poeta de vanguardia. Se trata de una identidad y depende de una separa-
analizar el carácter heterogéneo del mento del lenguaje. El .fenotexto., en dimensión ex' tralingüística vinculada ción bien hecha entre el niño y la
lenguaje poético mientras era aún es- cambio, corresponde al lenguaje de a una práctica de significación: es madre: es decir, de que se logre asu-
tudiante en Paris, a finales de los 60 la comunicación. Es el nivel en el que decir, una práctica capaz de sacudir mir la autonomía individual. Con una
y principios de los 70, la distinguió normalmente leernos cuando busca- una forma existente, quizá osificada, actitud más religiosa, sería más fácil
de otros semióticos que estaban más mos el significado de las palabras. de lo simbólico, para que pueda de- para nosotros valorar el papel que
interesados por formalizar el fundo- Pero ni el genotexto ni el fenotexto sarrollarse otra forma nueva. cumplía, en otro tiempo, el concepto
namiento convencional del lenguaje. existen aislados. Siempre aparecen KriSteva ha escrito numerosos en- de Dios como amor (ágape) en la for-
Le dio el interés por captar el lengua- juntos en lo que Kristeva denomina sayos y artículos, a menudo comple- mación de la subjetividad. Ágape es
je en sus formas dinámicas, transgre- •el proceso de significación.. jos y elaborados, sobre los temas el poder que procede del •exterior.,
soras y prácticas, y no en forma de un En su obra magna, La révolution du mencionados, y en 1977 os reunió la primera fuente tentativa de identi-
instrumento estático, como implica- langage poétique, Kristeva no sólo en una colección denominada Polylo- ficación, el primer intento de separa-
ban los análisis de numerosos lingüis- muestra que autores de vanguardia gue. Pero en 1980 el tono de su tra- ción de la madre. Sin ágape, cros se
tas. La concepción estática del len- del siglo NIX, como Mallarmé-y Lau- bajo cambió. Desaparecieron los convierte en un impulso ciego en la
guaje, aseguraba Kristeva, está ligada tréamont, explotan la base semiótica complicados intentos de desarrollar vía hacía la destrucción. Kristeva da,
a la idea de que el lenguaje es redu- del lenguaje (sus sonidos y ritmos, sus una teoría general del sujeto y el len- al equivalente de ágape en Su teoría
cible a las dimensiones (como las múltiples bases de enunciación), sino guaje y, en su lugar, surgió un inte- psicoanalítica del sujeto, el nombre
proposiciones lógicas) que la con- que demuestra que el lenguaje poéti- rés por analizar experiencias persona- de padre de la prehistoria indivi-
ciencia puede aprehender, con exclu- co tiene efectos dentro de una forma- les y artísticas concretas (tanto suyas dual.: la base más elemental e indis-
sión de la dimensión material, hete- ción histórica y económica específica, como de sus analizandos), experien- pensable para la formación de la
rogénea e inconsciente. El interés por la ¡'randa de la Tercera República. En cias que pudieran, al mismo tiempo, identidad. El mensaje no es, quizá,
el inconsciente hace que Kristeva de- esta obra, además, Kristeva continúa su ofrecer una comprensión más profun- que la identidad sea todo —como pa-
sarrolle su teoría del sujeto como su- elaboración de una teoría del sujeto da de la vida social y cultural. Así, en recían implicar varios de los primeros
jeto en proceso. Es decir, el sujeto no como sujeto en proceso; pero ahora Poderes del horror: Ensayo sobre la semióticos—, sino que es preciso lo-
es nunca sólo el fenómeno estático recurre de forma muy explícita a la abyección, Kristeva demuestra que lo grar una especie de armonía entre la
capturado en una forma imaginaria u teoría psicoanalítico lacaniana. La se- abyecto, como punto de ambigüedad identidad y los elementos heterogé-
otra, que puede comunicarse a otros; miótica pasa a equipararse a la cbora superior a lo que el individuo o la neos, potencialmente poéticos y ca-
es también su forma inefable, innom- femenina, que es, en términos aproxi- sociedad pueden afrontar consciente- paces de romperla. A diferencia del
brable, que sólo se conoce a través mados, el lugar irrepresentable de la mente, se evoca en la persona que amor, la melancolía equivale a un
de sus efectos. madre. Es una especie de origen, pero vomita porque le desagradan ciertos grave impedimento para la constitu-
La preocupación por la conexión que no es nombrable, porque enton- alimentos, o en rituales sociales rela- ción de las capacidades simbólicas e
entre el lenguaje y su importancia en ces estaría claramente situado en el cionados con la contaminación, o en imaginarias. Normalmente, quien está
la formación del sujeto llevó a Kriste- ámbito de lo simbólico y nos daría obras de arte que intentan expresar o gravemente afectado de melancolía
va a elaborar, en 1974, una teoría de una idea falsa. Como el demento fe- reprimir lo abyecto como horror y es incapaz de amar porque es inca-
lo .semiótico. (le sémiotique) en su menino en general, la chora se en- ambigüedad. paz de construir las idealizaciones ne-
tesis doctoral, La révolution di tanga- cuentra en el lado de la dimensión Posteriormente, KriSteva ha elabo- cesarias. Los melancólicos y los de-
ge poétique (La revolución del len- material y poética del lenguaje. rado estudios sobre el amor (Relatos presivos viven en una especie de luto
guaje poético). Kristeva distingue le La disposición semiótica del len- de amor), ia melancolía y la depre- perpetuo por la madre. Como dice
sémiotique de la sémiotique (la se- guaje puede observarse en la obra de sión (Sol negro) y la historia y expe- Kristeva: -EI habla de los deprimidos
miótica convencional) y lo 'simbóli- poetas como Mallarmé, pero es im- ndida de ser extranjero (Extranjeros es, para ellos, como una piel ajena;
co., el ámbito de las representacio- portante reconocer que lo que el ar- para nosotros mismos). A diferencia las personas melancólicas son extran-
nes, las imágenes y todas las formas tista hace explícito se manifiesta tam- de sus obras anteriores, predomina la jeros en su lengua materna.".
de lenguaje plenamente articulado. bién durante la adquisición del importancia de que el sujeto particu- La obra de Kristeva durante la últi-
En el plano textual explícito, lo se- lenguaje por parte del niño. En los lar logre acceder a lo simbólico. Por ma década puede considerarse una
miótica y lo simbólico corresponden gritos, el canto y los gestos, en el rit- ejemplo, el amor es imposible sin la serie de elaboraciones concretas de
respectivamente a lo que llama el •ge- mo, la prosodia y los juegos de pala- capacidad de idealización e identifi- una teoría del sujeto. No puede ha-

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KR M'EVA PEIRCE

ber una elaboración definitiva. Por- bólicas que permitan que el objeto VÉASE TAMBIÉN EN ESTE LIBRO te, obtuvo los títulos de BA, MA y B5c
que Kristeva presenta un sujeto que sea un nuevo ingrediente en la vida en dicha universidad. Durante más de
nunca es totalmente analizable, sino social. El objetivo, pues, es producir Bairin, Barthes. Joyce, Lacati. Mallarrné treinta años (1859 - 1860, 1861 - 1891),
siempre incompleto: el sujeto corno una situación en la que la subjetivi- Peirce llevó a cabo, sobre todo, tra-
impulso para una serie infinita de ela- dad sea un •sistema abierto- o una bajos astronómicos y geodeticos para
boraciones. •obra en progreso., un abrirse al otro• PRINCIPALES OBRAS DE KRISTEVA los reconocimientos de costas de Es-
El espacio en el que Kristeva sitúa que, al mismo tiempo, pueda generar tados Unidos. Entre 1879 y 1884, fue
el desarrollo de la dinámica de la sub- una forma revisada de la propia iden- Semiótica (1969), 2 vols., Madrid, Fun- profesor de lógica a tiempo parcial en
jetividad es el espacio artistico. Es tidad. damentos, 1981. la Universidad Jahns Hopkins.
importante ver en qué sentido ocurre Kristeva demuestra estar aún vincu-
El texto de/a novela (1970), Barcelona. Estos méritos y esta experiencia no
Lumen, 1982. expresan verdaderamente la erudi-
esto, porque distingue a Kristeva de lada a una teoría vanguardista del arte
La Réuolution du langage poétique, Pa- ción clásica que se transmite en los
otros muchos críticos y semióticos. Si y la sociedad. Es vanguardista porque
rís, Seuil, 1974.
bien toda obra artística debe mostrar reclama la formación de nuevas iden- textos de Petrce. No sólo tradujo del
Po/y/ogue, París, Seuil, 1977.
indicios de un control y orden huma- tidades, no la destrucción de la iden- griego antiguo el término .semiótica»,
El lenguaje ese desconocido, Madrid.
no para poder identificarla como tal, tidad, algo que, a su juicio, puede te- Fundamentos, 1987. ahora tan familiar, sino que fue un
no hay un sujeto completo anterior a ner graves consecuencias sociales en Soleil noir. Depression et nrélancolie, Pa- estudioso de Kant y Hegel, a los que
esa obra. El trabajo artístico constitu- forma de violencia insidiosa y la im- rís, Denoél, 1987. leía en alemán, y se sintió especial-
ye al sujeto tanto como el sujeto posibilidad de que las personas se se- Les Samourais, París, Fayard, 1990. mente cercano a la filosofía de Duns
constituye la obra de arte. Además, paren individual y autónomamente de Extranjeros para nosotros mismos(1988), Escoto, sobre todo al término aniña-
debido a la íntima relación entre el
• Barcelona, Plaza klanes, 1991. do por éste, haecceitas, que significa
su entorno. Por el contrario, las per-
Las nuevas enfermedades del alma, Ma - .cualidad de esto-'. La haecceitas eva-
arte y la formación de la subjetividad, sonas se arriesgarían a quedar total-
• den Cátedra, 1995.
ICristeva ha creído siempre que el arte mente subsumidas en el ambiente. ca también la singularidad.
es una base especialmente fructífera Hay que subrayar que no se trata de Se ha recordado a menudo que
para el análisis. La poesía de Mallar- retroceder a una concepción estática DrRss tr.c.rusAs Peirce fue una mente original que,
mé pone de relieve la •disposición del individuo como una identidad además de ser considerado el funda-
semiótica», mientras que Romeo y p- anterior a las relaciones sociales, sino GROSZ, Elizabeth, Sexual Subversion. dor del pragmatismo, hizo aportacio-
ileta indica la dinámica del amor y de una visión que nos recuerda la Tbree French Feminists:Julia Kristeva, nes importantes a la lógica filosófica y
Dostoievski, la estructura del sufri- necesidad de garantizar que las nece- Luce lrigaray, Micbéle Le Doeuff Sid - matemática y, sobre todo, fundó la
miento y el perdón en relación con ney, Allen Sz Unwin, 1989. semiótica. Con menos frecuencia se
sarias transformaciones de lo simbóli-
• Raleña»Jollo Y BEgAMTN, Andrew (eds.). destaca el hecho de que Peirce consi-
una actitud melancólica. En el caso co no implican su destrucción.
Aljjection, Me/ancho/ja and Lote 773e derab a su teoría semiótica -5u tra b a_
de una actitud abierta, los receptores
Work °Bulla Krisieva, Londres y Nue - .
del mensaje artístico, o los resultados jo sobre los signos— inseparable de
va York, Roudedge, Wanvick Studies
artísticos, pueden ver ampliadas sus NOTAS su trabajo sobre lógica. A su juicio, se
in Philosophy and Literature, 1990.
capacidades simbólicas e imaginarias; Lscsrm, John, Julia Kristeva, Londres y considera que la lógica, en su sentido
' Véase Julia Kristeva, AVord, dialo- más amplio, •ocurre siempre median-
es decir, una obra de arte puede con- Nueva York, Routledge, 1990.
gue, novel., en Toril Moi (ed.), The Kris-
vertirse en la base de una experien- • OttVER, Kelly, Reading Kristeva, Bloo- te signos., equivale a una •semeiótica
teva Reader, Dxford, Basil Blackwell,
cia auténtica capaz de abrir la vía a mlngton, Indiana University Press, [sic/ general, que no se ocupa simple-
1986, págs. 34-61.
un cambio de personalidad. El pro- 1993. mente de la verdad, sino de las condi-
Véase Julia Kristeva, Sémélotiké. Re-
blema actual, sugiere el trabajo de cherches pour une sémanalyse, París, ciones generales para que los signos
Kristeva, es que la vida social se ca- Seuil, 1969; y Julia Krisleva, 'The sYsIern sean signos. (1.444). En pocas pala-
racteriza, cada vez más, por sujetos and the speaking subject., en Mol (ed.), bras, los signos están vinculados a la
que no tienen acceso a las cualidades 71.7e Knkteva Reader, págs. 24-33. Charles Sanders Peirce lógica porque son los vehículos del
3 Julia Kristeva, Revolution in Poetic pensamiento como articulación de las
de las obras de arte que no se ajus-
Language, trad. de Margaret Waller, Charles Sanders Peirce nació en el formas lógicas. De forma aún más
tan a prejuicios y estereotipos. O bien
Nueva York, Columbia University Press,
la gente se limita a estar fascinada y seno de una familia de intelectuales oportuna, Peirce demuestra, en un
1984, pág. 87,
seducida por el juego de imágenes o en 1839 (su padre, Benjamin, era pro- texto de 1868, cuando tenia veintinue-
' Julia Kristeva, Block Sun, trad. de
actos —por el objeto— sin ser capaz fesor de matemáticas en Harvard) y, ve años, que •el único pensamiento,
Leon S. Roudiez, Nueva York, Columbia
de desarrollar nuevas cualidades sim- University Press, 1989, pág. 51 en 1859, 1862 y 1863, respectivamen- pues, que puede conocerse es el que

186 1 187
PEIRCE PEIRCE

se piensa en signos. Pero el pensa- interpretativo —el elemento interme- nos pueden contener elementos con- pureza de sus formas básicas de sig-
miento que no puede conocerse no dio— es una muestra de Tercero. vencionales, Eco ha afirmado que nos, icono, indicio y símbolo era pro-
existe. De modo que todo pensamien- ', circe buscaba estructuras ternarias una imagen de espejo es un 'icono blemática. Podía pensarse que cual-
to debe estar necesariamente en sig- siempre que podía. En el contexto de absoluto*. Un indicio por su parte, quier caso concreto de icono (por
nos. (5.251). Por consiguiente, para la elaboración de signos, Tercero pro- es un signo físicamente unido a, o ejemplo, un retrato) tenía e/ernentos
Peirce, /a filosofía en general es inse- duce asimismo una semiosis ilimita- influido por, su objeto. Los ejemplos convencionales, y si el retrato era
parable de h articulación e interpreta- da, en la medida en que un interpre- que da Peirce son un gallo de veleta, una fotografía, se unían las caracterís-
ción de los signos. De cualquier forma, tativo (idea) que lee el signo como un barómetro, un reloj solar. Los pro- ticas de icono y de índice. Aunque la
su teoría de los signos es lo que nos signo de algo (es decir, como repre- nombres demostrativos (éste, aquél), división básica y tricatómica del sig-
• interesa aquí; es decir, nuestro centro sentación de un significado o un re- un grito de •Socorrol. que indica a no que hemos mencionado es la di-
• de atención será Peirce el semiótica. ferente) puede siempre ser captado alguien que necesita ayuda, o un gol- ferenciación más conocida, Peirce di-
Aunque Peirce produjo más de por otro. El interpretativo es el ele- pe en la puerta que indica que al- vidió los signos también con arreglo
diez mil páginas impresas, nunca pu- mento indispensable para vincular el guien quiere entrar, son también a otras dos tricotomías, quizá en un
blicó un libro completo sobre ningu- signo a su objeto (inducción, deduc- ejemplos de signos que sirven de in- intento de añadir cierta flexibilidad a
na de sus materias de interés. El re- ción y abducción (hipótesis] consti- dicios. A diferencia del icono, el indi- sus clasificaciones, pero quizá, in-
sultado es que, en relación con su tuyen tres —repetimos, tres— tipos cio tiene una relación .dinámica con conscientemente, porque se sentía
trabajo sobre los signos, debe consi- importantes de interpretativos). Un lo que significa. El 'símbolo., como inclinado a ver las cosas en estructu-
derarse que las ideas de Peirce están signo, para existir como tal, debe in- recuerda Peirce, significaba inicial- ras ternarias. Fuera por lo que fuera,
siempre en progresión y sujetas a terpretarse (y, por tanto, tener un mente 'algo que se unía., mediante Peirce elaboró una plétora de tricoto-
modificación y elaboración. Además, interpretativo). La palabra •S-T-0-1 3. un contrato o convenio (2.297). En mías, hasta el punto de que, en el
Peirce da frecuentemente la impre- sobre fondo rojo, en una intersección un escenario contemporáneo, un sím- caso de las divisiones de signos, pro-
sión de que juzgaba necesario empe- de tráfico, significa que hay que de- bolo se refiere, para Peirce (que se dujo (como se ve en el Cuadro 1, en
zar de nuevo en cada reflexión sobre tenerse al llegar a dicha intersección. aparta de Saussure en este punto), a pág. siguiente) una tricotomía básica
el problema, como si, en cada oca- El signo es /stop/; el objeto es 'dete- los signos convencionales utilizados, de tricotomías.
sión, se dirigiese a un público nuevo nerse., y el interpretativo es la idea por ejemplo, en el habla y la escritu- Con la primera y /a tercera de di-
(de ahí la repetición) y como si la for- que une el signo a ese objeto concre- ra. 'Un símbolo auténtico —escribe chas tricotomías, Peirce añade refina-
mulación previa del tema tuviera de- to. El signo podría indicar también la Peirce— es el símbolo que tiene un miento a su división y le da la capaci-
fectos (de ahí las alteraciones y ela- presencia de una carretera principal, significado general. (2.293). La no- dad de analizar una diversidad y
boraciones). Es decir, Peirce no o una zona densamente poblada. ción de símbolo de Peirce sugiere la complejidad mayor en la producción
posee un documento definitivo sobre A través de la función del interpreta- concepción de la relación arbitraria de signos. Tornando como punto de
la naturaleza de los signos; sólo recia tivo se pone en funcionamiento un entre significante y significado en partida ese núcleo de tres tricotomías,
boraciones sucesivas que repiten tan- proceso de semiosis ilimitada. Es de- Saussure. Porque la relación de un Peirce fue aún más allá, hacia la ela-
to como renuevan. ¿Cuáles son los cir que, como explica Eco, el inter- símbolo con su objeto es de carácter boración de una nomenclatura analíti-
aspectos esenciales de estos textos? pretativo es otra interpretación'. 'imputado». Con la noción de símbo- ca para distinguir entre signos diferen-
En el campo de la semiótica se ha Como el signo de función, los tipos lo también se hace más clara la fuer- tes y propuso 10 clases distintas. Es-
repetido con frecuencia' que, en el de signos también tienen una forma za del concepto de interpretativo. tas 10 clases están formadas por com-
sentido más amplio, un signo es, se- básica de tríada. Los tres elementos Porque ningún símbolo, dada su re- binaciones de las tricotomías de base.
gún Peirce, lo que representa algo fundamentales son el icono, el indi- lación imputada o inmotivada con su Tomenios un ejemplo —un frecuente
para alguien (cfr. 2.228). La sencillez cio y el símbolo. Dicho más sencilla- objeto, podría ser un símbolo sin ser favorito de Peirce—, el de la veleta: es
de esta formulación contradice el he- mente, un signo icónico es el que, en interpretado. Las expresiones de ha- un .Sinsigno dicente. (una clasificación
cho de que hay una función de sig- uno o varios aspectos, es lo mismo bla determinan signos correspondien- derivada de las tricotomías 1 y 3). De
no: el signo A denota un hecho (u que el objeto significado. En otras tes (= interpretativos) en la mente de este signo, Peirce escribe que
objeto) B, para un intérprete C. Es palabras, el .significante virtud, de un quien escucha. De modo que símbo-
decir, un signo no es jamás una enti- icono es su cualidad. Un retrato es lo e interpretativo son inseparables. es cualquier objeto de experiencia
dad aislada, sino que siempre tiene irónico en la medida en que las cua- Peirce siguió analizando esta divi- directa, en la medida en que es un
estos tres aspectos. Un signo, dice lidades de la representación sean si- sión fundamental de los signos du- signo y, como tal, presenta informa-
Peirce, es una muestra de Primero, su milares a las del sujeto representado. rante toda su vida. Basándose en di- ción relativa a su objeto. Ella es
• objeto, una muestra de Segundo, y el chos análisis, comprendió que la posible sólo si su objeto le afecta
Aunque Peirce reconoce que los ico-
188 189
PEIRCE PEIRCE

Cuadro 1. Sumario de las tres tricotomías de Peirce avances de Peirce en b distinción de dispuesto a ceder su lugar en la his-
signos, Eco ha sido capaz, sin embar- toria a una nueva generación de in-
1 Cual/signo Sinsigno Legisigno go, de levarnar sospechas sobre la po- vestigadores, sino también como al-
l= una cualidad que 1= un suceso que es 1= una ley que es un . sibilidad de una propiedad verdadera- guien que se juzgaba un pionero o,
es un signo] un signo] signo. Cualquier sig- mente natural, tan necesaria para la más bien, un patán•, dedicado a -acla-
no convencional es viabilidad del icono o el índice en rar y abrir. la 'semiótica, es decir, la
un legisignol nuestro autors. Según Eco, el signo icó- doctrina de la namraleza esencial y
9 Icono índice Símbolo nico emá siempre codificado por la las variedades fundamentales de la
i= un signo que tie- l= un signo que de- l= un signo conven- cultura, sin ser totalmente arbitrario. semiosis posibles. (5.488). Y, como si
ne la cualidad del nota un objeto afec- cionall Y parecería que tiene que seno para se adelantara a la lectura que Bajtin
objeto que denota] tado por ese mismo ejemplificar el principio de semiosis ili- hace de Dostoievski, Peirce afirmó
objeto] mitada de Peirce. La semiosis ilimitada también, no sólo que todo el pensa-
—quizá la aportación más original de miento se halla necesariamente en
3 Rema Signo dicente Argumento Peirce a la semiótica— implica que un signos, sino que •todo el pensamien•
l= un signo de una l= un signo de la I= un signo de una signo sea traducible a otro a través de to tiene forma dialógica• (6.330), aun-
posibilidad cualitati- existencia real de un ley] un interpretativo. Ahora bien, si se dis- que sea un diálogo consigo mismo.
va, por ejemplo, re- objeto] tinguiera un icono que hace de signo Este hilo dinámico en su teoría del
presenta un objeto de otros signos porque tiene las mis- signo hace de Peirce el padre de la
posible] mas cualidades que el objeto significa- semiótica no positivista.
do, el principio de la semiosis ilimitada
Fuente: Basado en Peirce, 2.243-53. parecería estar en peligro.
realmente: de modo que es necesa- Para Eco, una salida posible es re- NOTAS
más allá de su intento de desarrollar conocer que, en lo que se refiere a
riamente un indicio. La única infor- y refinar un cuadro de categorías de
mación que puede ofrecer es la de una estructura de signos, las cualida- ' Véase Collected Papers of Charles
signos. Como ocurre con cualquier des llamadas físicas están encerradas, Sanders Peirce, 8 vols., ed. de Charles
un hecho real. Dicho signo debe in- cuadro de categorías, se supone que
cluir un sinsigno icónico que encar- • de hecho, en una estructura de per- Hartshorne y Pau! Weiss (vols. 1-6) Y
ne la información y un sinsigno re- éste es exhaustivo. Sin embargo, po- cepción y, por tanto, están codifica- Arthur Burks (vols. 7-8), Cambridge,
manco indicial para señalar el objeto demos preguntarnos si un cuadro (re- Mass,, The Belknap Press of Harvard
das. Al estar codificada (es decir, al University Press, 1931-1958, vols. 1 y 2
al que se refiere la 'información. lativamente) estático refleja el verda- • no ser idéntica al perceptunz), la per-
Pero el modo de combinación de dero dinamismo de la elaboración de en un volumen, 1965, vol. 1, párra-
cepción puede reproducirse o tradu- fo, 341. En adelante, el volumen y el nú-
ambos, o sintaxis, debe ser también signos. Además, el hecho de que
significativo (2.257). cirse a otros signos. Eco propone, mero de párrafo aparecen en el texto.
cada signo parezca tener una'autono- pues, que 'los signos irónicos no po- Cfr. Umbeno Eco, A 7beory of Se-
mía relativa frente a los demás no seen las 'mismas" propiedades físicas miotics, Bloomington, Indiana University
Aquí se demuestra que ningún hace más que aumentar la sensación Press (ed. Midland Book), 1979; Julia
que sus objetos, pero sí dependen de
caso material aislado de signo corres- de que, al final, el sistema de Peirce 1Cristeva, Language, The Unk.nown: An
ponde exactamente a una clasifica- Ja misma estructura de percepción o
es bastante newtoniano. A diferencia el mismo sistema de relaciones. 6 . Por Initicztion into Linguistics, trad. de Mine
ción determinada. Sólo mediante el de Saussure, Peirce parecía mucho Menke, Nueva York, Columbia Universi-
otro lado, Eco sugiere asimismo que ty Press, 1989.
perfeccionamiento continuo de la no- más interesado por el aspecto físico
menclatura se logrará la profundidad un signo irónico es difícil de analizar 3 Eco, A Theory of Semiotics, pág. 68.
de los signos materiales, por sí mis- • precisamente porque pone en tela de
analítica. Con esta estrategia, Peirce mos, que por los signos como ele- • Umberto Eco, Semiotics and the
intenta hacer justicia a la complejidad juicio el código existente. Es un caso Philosophy of Language, Londres, Mac-
mentos en un sistema discursivo. Es- de ratio difficilis, que puede desafiar
de la elaboración de signos. En cieno tos últimos se incluirían en lo que millan, 1984, pág. 212.
el código existente y, por consiguien- 5 Véase Eco, A neory of Serniorics,
sentido, no existe una teoría peirceia- denomina la categoría de símbolo; y, págs. 191 201.
te, hacerlo más sutil. -

na de los signos, sólo un cuadro más aunque Peirce no olvida la naturale- Hasta cierto punto, el propio Peir- lbfd., pág. 193.
Flexible para su clasificación. za del símbolo, su interés se centra ce se adelantó a las Limitaciones que
Del enfoque de Peirce se deducen claramente en los signos icónicos y
dos aspectos cruciales. El primero se de indicio, esencialmente físicos. Eco y otros han detectado en sus tex- VÉASE TAMBIÉN EN ESTE LIBRO

refiere al hecho de que rara vez va tos sobre los signos. Y no sólo en el
Aunque reconoce debidamente los sentido de un científico positivista Bajtin. Eco, Kristeva, Saussure.
190 191
SAUSSURE SAUSSURE

PRINCIPALES OBRAS DE PEIRCE bra, en 1907, 1908-1909 y 1910-1911. En 1880, después de defender su caso, se creía que el sánscrito, el idio-
Da que pensar el hecho de que Saus- tesis sobre el caso genitivo absoluto ma sagrado de la antigua India, con-
Obra lógico-semiótica, Madrid, Taunzs.
sure, lingüista y, para la comunidad en sánscrito, Saussure se trasladó a siderado el más antiguo de todos, era
1967.
académica más amplia y el público París, y en 1881, a los veinticuatro además el vínculo que conectaba a
Escritos lógicos, Madrid. Alianza, 1968.
El hombre, un stgno, Barcelona, Crítica, general, un oscuro especialista en años, fue nombrado lector de alto ale- todas las lenguas, de modo que, en
1988. sánscrito y lenguas indoeuropeas, se mán gótico y antiguo en la École Pra- definitiva, el lenguaje y su historia se
conviertiera en la fuente de innova- tique des Hautes Etudes. Durante algo hacían uno. La tesis neograrnática (asi
ción intelectual para las ciencias so- más de un decenio, Saussure enseñó se llamó el movimiento) de Franz
OTRAS LECTURAS ciales y las humanidades. Indica que en París, hasta que le nombraron pro- Bopp sobre el sistema de conjugacio-
había ocurrido algo extraordinario en fesor de sánscrito y lenguas indoeuro- nes del sánscrito en comparación con
Eco, Unten°, A neoty of Senziotics, la historia del siglo XX, que un nuevo peas en la Universidad de Ginebra. otras lenguas (tibor das Konfirgations-
Bloomington, Indiana University modelo de lenguaje basado en el A pesar de la aclamación de sus co- system dar Sanskritspracbe (El sistema
Press, 1979, págs. 68-72 y 195-200. método estructural de Saussure esta- legas y de su dedicación al estudio del de conjugaciones de la lengua sáns-
Fiscn, Max, •Peirce's general theory of ba apareciendo para convenirse en el lenguaje, las publicaciones de Saussu- crita) inició la lingüística histórica, y
signs», en Kenneth Laine Ketner y
modelo de teorización de la vida so- re empezaron a disminuir con el paso las primeras enseñanzas e investiga-
hristian J.W. Kloesel (eds.), Peirce,
cial y cultural. La teoría saussuriana de los años. Según explicó, estaba in- ciones de Saussure no contradijeron
Semejo tic and Pragmattism: Essays by
Mas H. Fiscb, Bloomington, Indiana tiene su base en la historia de la lin- satisfecho con el carácter de la lingüís- Ea postura neogramática sobre la im-
University Press, 1986, págs. 5 2 1 - 555. güística y sus repercusiones se ex- tica como disciplina —su falta de re- portancia esencial de la historia para
KRIMIWA, Julia, Language and tbe Unk- tienden a todas las ciencias sociales. flexión, su terminologíai—, pero se entender la naturaleza del lenguaje.
nown: A71 Initiation hito Linguistics, De modo que debemos examinar es- sentía incapaz de escribir un libro que Sin embargo, el aspecto de la Mb-
trad. de Anne Menke, Nueva York, tos aspectos. renovara dicha disciplina y le permitie- znoire que destacó Benveniste en el
Columbia University Press, 1989. Saussure nació en Ginebra en 1857, ra continuar con su trabajo de filología. quincuagésimo aniversario de la
HOOKWAY, Christopher, Peirce, Londres, en el seno de una de las familias más muerte de Saussure —el papel de la
La obra tan famosa actualmente,
Roudedge & Kegan Paul. 1965.
conocidas de la ciudad, famosa por Curso de lingüística general, com- arbitrariedad en la lengua— se siente
SAVAN David, /In Durad:ration to C.S.
sus triunfos científicos. Fue contempo- puesta por las notas de varios cursos con enorme fuerza en el Curso.
Peirce's Senziotics, Toronto, Toronto
Semitatic Circle, 1988. ráneo directo de Emite Durkheim y de Saussure y los apuntes de sus El enfoque histórico de la lengua y,
Sigmund Freud, aunque hay pocas alumnos, podría considerarse quizá en menor medida, el enfoque racio-
pruebas de que entrara jamás en con- un cumplimiento parcial de su opi- nalista, suponen que el lenguaje es
tacto con ninguno de ellos. Tras un nión de que era necesario reexaminar esencialmente el proceso de nombrar
año insatisfactorio de estudios de físi- el lenguaje en sí para trasladar la lin- —asociar palabras a cosas, sean éstas,
Ferdinand de Saussure ca y química en la Universidad de Gi- güística a una base más firme. o no, imaginarias— y que existe cier-
nebra, en 1875, Saussure fue a la Uni- Dentro de la historia de la lingüís- to vínculo intrínseco entre el nombre
Hasta 1960, pocas personas habían versidad de Leipzig a estudiar lenguas. tica suele considerarse que el enfo- y su objeto. Se creía que era posible
oído el nombre de Ferdinand de Después de dieciocho meses de estu- que de Saussure, patente en el Cur- determinar históricamente —o inclu-
Saussure, dentro o fuera de los cír- diar sánscrito en Berlín, publicó, a los so, opuso dos influyentes opiniones so prehistóricamente— por qué un
culos académicos. Pero, a partir veintiún años, su aclamada mémoire, contemporáneas sobre el lenguaje. La nombre determinado llegaba a aso-
de 1968, la vida intelectual europea titulada Mémoire sur le systénze primera era la establecida en 1660 ciarse a un objeto o idea particular.
se llenó de referencias al padre de la Vil' des voyelles dans les langues indo- por la Grammaire de Port-Royal, de Cuanto más nos remontábamos en la
lingüística y el estructuralismo. Que européenrws (Memoria sobre el sistema Lancelot y Arnauld, en la que se cree historia, más cerca estábamos, pre-
Saussure fue tanto un catalizador primitivo de vocales en las lenguas in- que el lenguaje es un reflejo de las suntamente, de llegar a la coinciden-
como un innovador intelectual se doeuropeas). Cincuenta años después ideas y se basa en una lógica univer- cia entre nombre y objeto. Como de-
confirma porque la obra por la que es de la muerte de Saussure, el famoso sal. Para los gramáticos de Port-Royal, cia Saussure, esta perspectiva supone
actualmente famoso fuera del campo lingüista francés Emile Benveniste afir- el lenguaje es fundamentalmente ra- que el lenguaje es, sobre todo, una
de la lingüística —el Curso de lingüís- maría, a propósito de esta obra, que cional. La segunda opinión es la de nomenclatura: una colección de nom-
tica general— se recopiló a-partirde - bilinglIrs1ibrdel -argl5 xix, en la que Eirés para objltos e ideas.
tres series de apuntes de alumnos ción futura de Saussure sobre la natu- se pensaba que la historia de una len- ¿Cuáles son, pues, IOS elementos
durante los años en los que impartió raleza del lenguaje, inspirada por la gua concreta explicaba el estado ac- clave de la teoría de Saussure, tal
este curso en la Universidad de Gine- teoría del carácter arbitrario del signo. tual de dicha lengua. En este último como se manifiestan en el Curso?

192 193
SAUSS ORE SAUSSURE

Para empezar, Saussure traslada el ber cómo han llegado Iris piezas a esa dos del lenguaje (es decir, las confi- El lenguaje está siempre cambian-
centro de atención de la historia de colocación), sino que éstas podrían guraciones o totalidades lingüísticas do. Pero no cambia a petición de los
la lengua, en general, al examen de sustituirse por cualquier tipo de obje- concretas). La postura •nomenclatu- individuos; cambia con el tiempo in-
la configuración actual de una lengua tos (un botón podría reemplazar al rista• pasa a ser, así, una base total- dependientemente de las voluntades
natural concreta, como el inglés o el rey, etc.), porque lo que constituye la mente insuficiente para la lingüística. de los hablantes. Desde una óptica
francés. Con ello, la historia de la len- viabilidad del juego es la relación di- Quizá los términos que han provo- saussuriana, el lenguaje forma a los
gua se convierte en una historia de ferencial entre las piezas y no su va- cado más dificultades conceptuales y individuos tanto como éstos forman
las lenguas, sin que haya un vinculo lor intrínseco. Concebir el lenguaje atraído más críticas en relación con la el lenguaje, y el problema es si esta
a priori entre ellas, como habían su- como un juego de ajedrez, en el que teoría de Saussure son tengue (el len- concepción podría tener repercusio-
puesto los lingüistas del siglo XL-t. la posición de las piezas en un mo- guaje natural particular, concebido nes en otras disciplinas de las cien-
Centrarse en la configuración ac- mento concreto es lo que cuenta, es como estructura o sistema) y parole cias sociales. De hecho, así lo vieron
tual de (una) lengua es, automática- verlo desde una perspectiva sincróni- (actos de habla individuales, o actos los teóricos incluidos en la rúbrica del
mente, centrarse en la relación entre ca. Por el contrario, dar prioridad al de lenguaje como proceso). Este par 'estructuralismo- durante los ahos 60.
los elementos de esa lengua, no en enfoque histórico —como hacía el si- conceptual introduce la distinción en- Con la aparición del modelo saus-
su valor intrínseco. La lengua, afirma glo por— es juzgar el lenguaje desde tre el lenguaje que existe como una suriano en las ciencias humanas, el
Saussure, está siempre organizada de una perspectiva diacrónica. En el estructura más o menos coherente de investigador trasladó su atención del
una manera concreta. Es un sistema, Curso, Saussure prefiere el aspecto diferencias y el lenguaje tal como lo hecho de documentar sucesos histó-
o una estmctura, en la que ningún sincrónico sobre el diacrónico porque practica la comunidad de hablantes. ricos o registrar los hechos de la con-
elemento tiene significado fuera de ofrece una imagen más clara de los Aunque Saussure afirmó en el Curso ducta humana hada el concepto de
sus límites_ En un fragmento muy factores presentes en cualquier esta- que la estructura lingüística específi- acción humana como sistema de sig-
enérgico e insistente del Curso, Saus- do de la lengua. ca es distinta del habla y que la base nificado. Ello fue consecuencia de su-
sure explica: .En el lenguaje (lengua] Otro principio que tiene la misma del lenguaje, como hecho social, brayar, a un nivel social más amplio,
no hay nids que diferencias-. Aún más importancia para captar la peculiari- debe captarse exclusivamente en el el carácter arbitrario del signo y la
importante: una diferencia, en gene- dad de la teoría de Saussure es el de plano de la estructura, también es idea correspondiente del lenguaje
ral, implica unos términos positivos que el lenguaje es un sistema de sig- • cierto que nada entra en el ámbito de como sistema de convenios. Si bien,
entre los que se establece la diferen- nos, y cada signo se compone de dos la estructura lingüística sin hacerse hasta entonces, se había llevado a
cia; pero en el lenguaje existen sólo partes: un significante (signifiant) antes manifiesto en actos de habla in- cabo la búsqueda de hechos intrínse-
diferencias sin féminas positivos%. Lo (palabra o pauta de sonido) y un sig- dividuales. Más importante, el grado cos y sus efectos (por ejemplo, cuan-
importante no es sólo que el valor o nificado (signrié) (concepto). A dife- de totalidad de la estructura sólo pue- do el historiador suponía que los se-
el significado se establezca a través rencia de la tradición en la que se de saberse con certeza si se conocen res humanos necesitan alimentos
de la relación entre un término y otro educó, pues, Saussure no acepta que también todos los actos de habla. En para sobrevivir, del mismo modo que
en el sistema de la lengua —de modo el vínculo esencial dentro del lengua- este sentido, el ámbito de la estructu- necesitan el lenguaje para comunicar-
que, en el ejemplo usado por Saus- je sea el que existe entre la palabra y ra es siempre, para Saussure, más hi- se entre sí y, por consiguiente, los
sure, se puede escribir de diversas el objeto. Por el contrario, el concep- potético que el ámbito del habla. Sin hechos se desarrollaron de esta ma-
formas y entenderse siempre—, sino to de signo de Saussure indica la embargo, todo depende de que se nera), ahora el objeto de estudio pasa
que los propios términos del sistema relativa autonomía del lenguaje en re- examine el habla desde un punto de a ser el sistema sociocultural en un
son producto de esa diferencia: no lación con la realidad. Más funda- • vista individual y psicológico o cen- momento concreto de la historia. Se
existen términos positivos anteriores mental aún es que Saussure enuncia trándose en toda la comunidad de trata de un sistema dentro del cual
al sistema. Ello quiere decir que una lo que se ha convertido, para el pú- hablantes. En el primer caso, una está también inscrito el investigador,
lengua existe como una especie de blico moderno, en el principio más • cosa es concebir el lenguaje a través igual que el lingüista está compren-
totalidad, o no existe en absoluto. influyente de su teoría lingüística: del habla del individuo como dido en el lenguaje. De modo que el
Saussure emplea la imagen del juego que la relación entre el significante y duo; otra muy distinta es verlo a tra- hecho de ser más reflexivo pasa a te-
• de ajedrez para ilustrar el carácter di- el significado es arbitraria. Partiendo vés de los actos de habla de toda la ner un interés esencial.
ferencial del lenguaje. Porque, en el de este principio, ya no se supone • comunidad. El argumento de Saussu- Para muchos autores, como el an-
ajedrez, no sólo ocurre que la confi- que la etimología y la filología reve- re es que el lenguaje es fundamental- tropólogo Claude Lévi-Strauss, el so-
guración actual de las piezas sobre el len la estructura básica del lenguaje, mente una institución social y que, ciólogo Pierre Bourdieu o el psicoa-
tablero es lo único que interesa al re- sino que la mejor forma de captarla . por tanto, el enfoque individual resta- nalista Jacques Lacan, como para
cién llegado (no sirve para nada sa- es entender cómo cambian los esta- ta insuficiente para el lingüista. Roland Barthes en la crítica literaria y

194 1 195
SAUSSURE TOIDOROV

la semiótica, las hipótesis de Saussure cultural. La estructura nos recuerda NOTAS Guasa, Jonathan. Ferdinaml de Saus-
prepararon el camino inicial para un que ninguna cosa social o cultural sure, Ithaca, Nueva York, Comen Uni-
enfoque más riguroso y sistemático (incluyendo, por supuesto, lo indivi- ' Cfr. •Cada vez soy mas consciente versity Press, 1986.
de las ciencias humanas, un método dual) existe corno un elemento •po- de la inmensa cantidad de trabajo que GADET, FalinOiSe, Saussure and Con-
requiere mostrar al lingüista lo que está temporary Culture, trad. de George
que intentase tornar verdaderamente S. itivo• y esencial aislado de todos los Elliott, Londres, Hutchinson Radius,
haciendo.., la total insuficiencia de la
en serio la prioridad del terreno so- demás elementos. Este enfoque es el 1989.
terminología actual, la necesidad de re-
ciocultural para los seres humanos. contrario del adoptado en la filosofía formarla y, para dio, demostrar qué tipo Hiumrs, Ray, Reading Saussure: A Criti-
Igual que Saussure había destacado política de los siglos :mil y xix, don- de objeto es el lenguaje, disminuyen cal Commenuny on me Cours de lin-
la importancia de no estudiar los ac- de se situaba al individuo biológico continuamente mi placer en la filología•, gutstique générale, Londres, Duck-
tos de habla separados del sistema en el origen de la vida social. Y, del Ferdinand de Saussure, cana del 4 de worth. 1987,
de convenios que les dan su vigencia. mismo modo que esta filosofía no enero de 1894, en •Lenres de F. de Saus- HOLDCHOFT, David, Sattssurre SI:912S, »S-
El foco del estudio es la sociedad o creía que existiese ninguna sociedad sure 5 Antoine Meillet., Cabiers Perdí- tern and Arbitrariness, Cambridge,
la cultura en un estado de desarrollo antes que el individuo, también ne- nand de Sau.ss ure, 21 (1964), pág. 95, Carnbridge University Press, 1991.
determinado, y no las acciones hu- gaba la relativa autonomía del len- citado en Jonarhan Culler, Ferdinand de
Saussure, 'chaca, Nueva York, Cornell
manas particulares, pasadas ni pre- guaje.
University Press, 1986, pág. 24.
sentes. Si la generación anterior (la Seguramente la principal objeción Ferdinand de Saussure, Cours de Tzvetan Todorov
generación de Sartre) había intentado que puede hacerse a la traducción linguistique genérale, ed. de Tullio de
descubrir la base natural (intrínseca) del énfasis de Saussure sobre la es- Mauro, París, Payot, 1976, pág. 166. Ed. Como Julia Kristeva, Tzvetan To-
de la sociedad humana en la historia tructura al estudio de la vida social y inglesa, Course in General Linguislics, dorov nació en Bulgaria y llegó a Pa-
—del mismo modo que los lingüistas cultural es que no deja espacio sufi- trad. de Wade Baskin, Glasgow, Fonta- rís en 1963- Después de obtener su
del siglo XIX habían intentado revelar ciente para la práctica y la autonomía na/Collins, 1974, pág. 120. primera titulación en Bulgaria, y ar-
los elementos naturales del lengua- individual. El hecho de concebir la li- mado de una recomendación de la
je--, los esfuerzos de la generación bertad humana como un producto de Universidad de Sofía, la primera per-
estructuralista se dirigieron a mostrar la vida social, en vez de su origen o VÉASE TAMBIÉN EN ESTE LIBRO cepción que Todorov tuvo del carác-
que las relaciones diferenciales de los causa, ha causado que varios obser- ter conservador de la Sorbona antes
elementos en el sistema —que podría vadores consideren este enfoque muy Banhes, Benveniste, Bourdieu, Derrida, de 1968 se produjo cuando indagó en
ser una serie de textos, un sistema de limitado. Una consecuencia de la es- Jakobson, Kristeva, Lac.an, Lévi- la facultad de letras sobre la posibi-
&muss.
parentesco o el medio de b fotografía tructura sería la tendencia conserva- lidad de investigar en teoría literaria.
de moda— producían un significado, dora que niega la posibilidad de cam- El decano de la facultad respondió
o significados, y, por tanto, debían bio. Aunque éste sigue siendo un •con frialdad. que •no se hacia teoría
PRINCIPALES OBRAS DE S AUSSÉRE
•leerse. e interpretarse. En otras pala- problema sin resolver, quizá es im- literaria en su facultad y no iba a
bras, se piensa que el estudio de la portante admitir la diferencia entre la Cours de linguistique générale, ed. críti- hacerse.'. Sin desanimarse, el joven
vida sociocultural implica descifrar los libertad del individuo hipotético ca de Tullio de Mauro, París, Payot, Todorov empezó a estudiar en la bi-
signos centrándose en su valor dife- (cuya mera existencia social equival- 1976. blioteca de la Sorbona y, a través de
rencial, no en su valor sustancial pu- dría a limitar la libertad) y una socie- Cours de linguistique générale, 2 vols., sus empleados, acabó por entrar en
tativo (con frecuencia equiparado a dad de individuos libres, en la que la ed. crítica de Rudolf Engler, Wiesba- contacto con Gérard Genette, que le
•natural«), y prestando atención al pla- libertad sería resultado de la vida so- den, 0, Harrassowitz, 1967-1974. sugirió que asistiera al seminario de
no sintomático de la significación, cial entendida como una estructura Curso de lingüística general, Madrid, Roland Barthes en la École des Hau-
además del nivel explícito. de diferencias. O podríamos decir, Alianza, 1994. tes Études en Sciences Sociales.
Así, pues, la estructura, inspirán- más bien, que quizá los investigado- El contacto con Barthes --con
dose en la teoría del lenguaje de res deberían empezar a explorar la quien completó un doctorat de
OTRAS LECTURAS troisiéme cycle en 1966— permitió
Saussure, puede referirse al •valor• idea de que, para parafrasear a Saus-
de los elementos en un sistema, o sure, la sociedad es un sistema de li- que Todorov escribiera artículos para
BENNTENISTE, Émile, •Saussure aíres half la influyente publicación semiótica e
contexto, y no sólo a su existencia bertades sin términos positivos. En century«, en Pro blems in General Lin-
física o natural. Ahora se comprende esta interpretación, no existiría ningu- , guistics, trad. de Mary E. Meek, Mia-
interdisciplinaria Communications.
que la existencia física de una enti- na libertad esencial o sustancial, nin- mi Linguistics Series núm. 8, Coral Destacan dos colaboraciones inicia-
dad es más compleja debido a las guna libertad encarnada en el indivi- Cables, Florida, University of Miami les. Una, titulada •La description de la
influencias del medio lingüístico y duo en estado natural. Press, 1971, págs. 29-40. signification en littérature., desarrolla

196 197
TODOROV
TODOROV

los diversos niveles de análisis estruc- lizar los planos de la •historia•


tural y subraya que la forma del ob- (bisroire) y el discurso. Este enfoque En su libro Littérature et significa- queda, para toda obra, de un signifi-
jeto literario es prioritaria, en un aná- conduce al tipo de estudio llevado a ¡ion (1967), Todorov amplía el análi- cado último fuera de ella misma —es
lisis estructural respecto a la sustancia cabo en Littérature et significarían, el sis de Las amistades peligrosas inicia- decir, la búsqueda de un significado
del contenido, que está asociada a la libro basado en la tesis electoral de do en el artículo de 1966. El elemento más allá de la existencia de la obra—,
semántica?. En esa época, Todorov, Todorov que examinaba b novela fundamental de su argumentación es se está distanciando implícitamente
como otros teóricos estructuralistas epistolar de Lados Las amistades pe- que incluso un género cuyo éxito de- del enfoque hermenéutico del texto,
(por ejemplo, Barthes y Generic), re- ligrosas del siglo >BAR. En todo relato pende tanto de la verosimilitud a tra- el método que con frecuencia ha pre-
lacionaba el estudio del significado narrativo hay acciones o sucesos. vés de /a mimesis como la novela tendido captar el mensaje definitivo
con un marco hermenéutico (y, por Pero no ocurren con arreglo a una epistolar, está basado en una serie de (a menudo, ideológico) del texto. Re-
tanto, humanista). Hasta que la obra cronología ideal. Por el contrario, procedimientos internos de /a estruc- sulta interesante que, después de es-
de A. J. Greimas no se conoció me- constituyen una red frecuentemente tura de la novela, como acto de len- cribir una serie de obras influyentes
jor, no empezó a relacionarse un pa- compleja de hilos que sólo se unen guaje (énonciation)—en el que son sobre el Decan2erón, el estructuralis-
radigma claramente estructuralista en un punto determinado. Sólo estu- visibles el estilo y la subjetividad— y mo y la literatura fantástica —todas
con el campo de la semántica. diando los planos de acción y los como historia (é.norzró). Pero ¿cuál es ellas, basadas en el concepto de au-
El otro artículo importante de la personajes se puede comprender la historia de toda novela? Es, a juicio tonomía relativa del texto literario—,
primera época de Todorov —que cómo es la lógica de esa red de hilos. de Todorov, la historia de la propia la dirección del trabajo de Todorov
mostraba la influencia de los forma- Usando Las amistades peligrosas creación de la novela. Al resumir su empezase a cambiar con un estudio
listas rusos— fue -Les catégories du como ejemplo, Todorov demuestra postura en Littérczture et significarían, de la historia de la teoría del símbo-
récit littéraire-'. En él, Todorov reite- que: 1) las acciones en una narración Todorov resume la posición de mu- lo. Todorov afirma que, incluso en la
ra que -una descripción de la obra se no son arbitrarias, sino que obedecen chos teóricos estructuralistas de la era del estructuralismo, la influencia
refiere al significado de los elemen- a cierta lógica; 2) una narración tiene generación de los 60. Así, escribe del Romanticismo es inevitable.
tos literarios; el CatiC0 literario pre- más de una estructura que se revela que: -Toda obra, toda novela relata, a En 1981, Todorov regresó a sus
tende darles una interpretación-I. El cuando en su análisis pueden fundo- través de una serie de acontecimien- mentores, los formalistas rusos, esta
significado de los elementos, de nar igualmente bien dos modelos di- tos, la historia de su propia creación, vez, no tanto para asimilar sus méto-
acuerdo con el principio saussuriano, ferentes, y 3) puede no ser posible su propia historia- 6. La búsqueda de dos formalistas como para interpretar
reside en las relaciones entre ellos. aislar para análisis el plano de acción un significado último resulta vana, su pensamiento. Su relectura de la
Sin embargo, si es así, ¿qué ocurre cuando la -acción• de la narración porque -el significado de una obra es °marre de Bajtin, en este sentido, su-
con el significado (sens)de la obra en equivale a /as vicisitudes del estado pronunciarse, hablamos de su propia pone un hito en su aproximación a la
su conjunto? Afirmar que el significa- psicológico de los personajes, como existenciaj. En efecto, una novela teoría literaria. Si en los años 60 se
do depende de las relaciones es de- ocurre en Las amistades peligrosas. comienza donde termina: -porque la había adherido al formalismo a través
cir que los elementos del significado En términos generales, Todorov propia existencia de la novela es el del estructuralismo, como forma de
forman un sistema: están ordenados pretende sacar a la luz los diversos último eslabón en la cadena de su rechazar el método ideológicamente
de una manera concreta y no son un procedimientos (procédés)de elabora- intriga. Este punto se advierte con correcto del realismo socialista, a
agregado ad hoc. ¿Se escapa la obra ción de una narrativa. Dichos proce- gran claridad en la última carta de Las principios de los 80 Todorov empezó
entera a este principio, por lo que su dimientos deben permanecer relativa- amistades peligrosas, que explica a elaborar un marco más interpretati-
significado es especifico de ella, en mente invisibles para el lector si se cómo llegó a publicarse la correspon- vo dirigido a combatir lo que consi-
su particularidad y autonomía? No, quiere que la narración logre transmi- dencia que constituye la novela. En deraba el enfoque excesivamente
asegura Todorov. El significado de tir una historia con una intriga. Equi- cierto plano, el hecho de que haya apolítico del análisis textual formal.
una obra (en contraste con su inter- valen también a las funciones o signi- una obra ficticia no es ficción; sin em- Lo que más valora Todorov en Bajtin
pretación) deriva de su relación con ficados (sens) de cada elemento en el bargo, la diferencia entre ficción y no es la -antropología filosófica- que se
otras obras en la historia de la litera- conjunto de la narración. Igual que ficción parecería problemática cuan- interesa por la cuestión de la -alteri-
tura. •El significado de kladame 13o- Generic, Todorov está interesado en do se considera que la obra ficticia dad•s. Para Todorov, el «otro- en la
vary consiste en su oposición a la li- analizar, en un texto detemünado, la es, en sí misma, el procedimiento de articulación que Bajtin hace del prin-
teratura romántica'. narración, la subjetividad (o el contex- su propia creación. Porque, entonces, cipio dialógico, llega a asumir la
En el artículo mencionado, Todo- (o, o el procedimiento de narración) y el hecho de la ficción (es decir, la no máxima importancia. Asegura que la
rov refleja el trabajo de Genecte so- b objetividad (o la narración como ci- ficción) parece convertirse en el ras- principal intuición de Bajtin fue com-
bre la narración (récit) y pasa a ana- tación o acto lingüístico completo). go esencial de la ficción. prender que, después de Dostbievs-
Cuando Todorov habla de la bús- ki, ninguna obra artística digna de tal
198
199
TODOROV
TODOROV
que le suministraban los informado- ción del principio de Rirnbaud, »yo es
nombre podía dejar de enfrentarse a el otro a través del velo de sus pro- res, sino que utilizó los mitos aztecas otra persona•, en el que •yo. y »tú• es-
la alteridacl: •La renuncia de la unidad pios prejuicios culturales (V, dentro en una estrategia montada para enga- tarían presentes simultáneamente. El
del "yo" tiene su contrapeso en la de ellos, religiosos). Se considera y se ñar al enemigo. Así, Cortés alimentó diálogo implica otra cualidad: cuanto
afirmación de un nuevo estatus para trata a los indios corno animales, sólo la fantasía azteca de que era un dios más se elabora, más genera la capa-
el "tú" del otro» 9. Por tanto, el otro capaces de ser esclavos de los euro- y, en cierto momento, engañó a los cidad de improvisación, de abordar
deja de ser un objeto y se convierte peos. O, más bien, se viola al indio habitantes de lo que hoy son las Ba- una situación tal como es y actuar
en sujeto. Dostoievski muestra a To- —se le trata como a un •perro su- hamas para que pensaran que se di- conforme a ello. Lo que resulta dis-
dorov esta concepción a través de los do— llegado el momento del en- rigían a la tierra prometida de sus cutible en la postura de Todorov, sin
escritos tardíos de Bajtin. •Pero ¿aca- cuentro, mientras que se le idealiza a antepasados cuando, en realidad, embargo, es que nombra la civiliza-
so no es —pregunta Todorov— la distancia, se le llama noble salvaje, iban a ser explotados como mano de ción occidental (es decir, Europa)
característica esencial del conoci- corno habían ordenado las escrituras. obra. En resumen, Cortés reconoció corno el origen del diálogo y la escri-
miento en las ciencias humanas, •La alteridad humana —afirma Todo- la importancia del lenguaje y el cono- tura y, al menos por alusiones, como
como describe Bajtin, no ocuparse rov— se ve, al mismo tiempo, revela- cimiento de la cultura azteca y los fuente de la capacidad de improvisa-
del "objeto" mudo de las ciencias na- da y negada.» por los europeos". utilizó para manipular la situación en ción que la escritura implica. Aunque
turales y transformarlo en un diálogo Todarav quiere dejar patentes dos beneficio propio". la intención de nuestro autor no es,
de textos, que conoce y debe ser co- aspectos de la conquista de América: Pese a su genuina comprensión de desde luego, atribuir una superiori-
nocido?•'°. en primer lugar, desea mostrar que los elementos culturales del otro (y dad intrínseca a la cultura europea
Partiendo de la propuesta de que los signos y su interpretación —len- este es el segundo punto importante por encima de ninguna otra, no está
el investigador debe considerarse in- guaje y comunicación— cumplieron que hay que subrayar a propósito de claro si ha logrado expresar lo que
volucrado en el objeto de estudio un papel inmenso en el contacto en- la conquista), Cortés participó tam- queda.
—tiene que entablar un diálogo con tre españoles y aztecas en el siglo :en, bién en la destrucción de la cultura En una obra posterior Nous et les

él—, Todorov inició una serie de el siglo de la conquista. Todorov ex- azteca. Los españoles —Cortés inclui- azares (Nosotros y los demás) , sobre

obras que examinaban cómo se han plica que los españoles ganaron la do— sólo se interesaban por los ob- el diálogo entre el yo y el otro, To-
ocupado —o no— del otro la historia guerra de conquista bajo los auspi- jetos, especialmente el oro, y no lo- dorov examina los temas de la raza,
y la cultura francesa y europea. Des- cios de Hernán Cortés, en gran parte, graron reconocer a sus oponentes la nación, lo universal y lo exótico en
tacan, sobre todo, dos textos: La con- porque el conquistador fue capaz de como seres humanos. El verdadero los textos de diversos autores: Lévi-
quista de América (1982) y Nous et les actuar con arreglo a los conocimien- horror de tal situación alcanza su Strauss, Montaigne, Gobineau, Renan,
aut res (1989). tos derivados de la observación: es máximo nivel durante la colonización Tocqueville, Chateaubriand, Artaud y
En La conquista de América, Todo- decir, Cortés hizo el esfuerzo de in- española, cuando, entre 1500 y 1600, otros. Lo que más le interesa es cómo
rov analiza e interpreta documentos formarse sobre muchas de las cos- no sólo se esclavizó al pueblo sino, ciertos autores indican una vacila-
de y sobre el descubrimiento de tumbres del pueblo contra el que lu- según cálculos fiables, una población ción, en la reflexión francesa sobre la
América por Colón en 1492. Se trata chaba, y así llegó a entenderlas. de 80 millones para toda Sudamérica diversidad humana, entre el etnocen-
de un estudio comprometido, la obra Mactezuma y los aztecas, por el con- se redujo a un millón, en una época trismo universal (el otro cómo mero
de un moralista preocupado por as trario, estaban paralizados por una en la que la población mundial era objeto) y el relativisma universal (el
relaciones entre europeos e indios, el visión del mundo que se basaba en aproximadamente de 400 millones. otro es todo y el yo no es nada). Re-
yo y el otro, la identidad y la diferen- una lectura inflexible del presente a Pese a su capacidad de comprender nan y Barrés representarían la prime-
cia. Si, como demuestra Todorov través del prisma del pasado. Los az- al •Otr0., la empresa de Cortés provo- ra postura, mientras que Lévi-Strauss,
abundantemente, Colón tenía una tecas se apoyaban en la profecía y la có la destrucción de la civilización a juicio de Todarov, representaría la
forma muy concreta y fija de enten- noción de destino que iba inextrica- azteca. segunda. Aunque Todarav tiene un
der la vida, tanto consciente como in- blemente ligada a ella. Por ejemplo, En su conclusión, Todorov reafir- cuidado significativo en no apresurar-
consciente (incluyendo una opinión creyeron que la llegada de los euro- ma su compromiso con el principio se a hacer juicios sobre el racismo, el
sobre lo que iba a encontrar al otro peos era un mal presagio, y asumie- de diálogo de Bajtin. Sólo en un diá- colonialismo o el universalismo, pa-
lado del mundo), lo importante es ron una actitud psicológica (negativa) logo verdadero, en el que la voz del rece mucho menos cómodo al abor-
saber cómo afectó este hecho a su frente a ella. En cambio, Cortés, aun- otro es audible sin perjuicio de la dar problemas filosóficos y morales
contacto real con los pueblos de que estaba influido por sus creencias propia voz ni anulación de la voz que al hacer análisis semiótico de tex-
América Central. En un sentido, sig- cristianas, intentó aprender la lengua opuesta, es posible una auténtica tos. Por ejemplo, al hablar de su con-
nifica que Colón se comportó de ma- de los otros en más de un aspecto. igualdad. El diálogo es la confimn- cepción de •un humanismo madera-
nera muy previsible: se encontró con No sólo prestó atención a los datos
201
200
TODOROV TODOROV

do•, se basa, sin reconocerlo, en la Früle bonheur: essai sur Rousseau


PRINCIPALES OBRAS DE TopoRov Las morales de/a bistoria (1991), Barce-
noción a priori de que la libertad de (1985), que intenta capturar la inten-
lona. Paidós. 1993.
la humanidad corno especie es esen- sidad del pensamiento de este último, Face á l'extrénze, París, Seuil. 1991.
Gmnznzaire du Décanzéron, La Haya,
cialmente un asunto individual: •Se y Face á l'extrénze (1991), sobre el to- París, Mouton, 1969.
dice que la libertad es el rasgo distin- talitarismo nazi y comunista. Critica de la crítica (1984), Barcelona,
tivo de la especie humana. Es cierro En general, la obra de Todorov es OnAs LECTURAS
Paidós, 1992.
que mi medio me impulsa a reprodu- interesante e importante por la ten- Frágiljblicidad(1985), Barcelona, Gedi- BANN, Stephen, .Structuralism and the
cir la conducta que valora; pero tam- sión que presenta entre el rigor del sa, 1986. revivat of rhetoric., Sociological Re-
bién existe la posibilidad de arrancar- análisis estructural y la escritura del La Notion de la littérature et azares es- viewMonograpb, 25 (agosto de 1977),
me de ella.' 3. Aquí, Todorov suscita compromiso moral, los escritos de su sais, Paris, Seuil, 1987. págs. 68-84.
numerosas preguntas: ¿se puede ha- fase postestructuralista, como si dijé- Teoría de los géneros literarios, Madrid, Borromixy, Gill y lica-m, _John, ,Nation
blar de libertad en relación con la hu- ramos. Una última cuestión sería sa- Arco libros, 1988. and diversiry in France», Journal of
Nous et les mares. La réflexionfrawaise Intercultural Studies, 11, 1 (1990),
manidad como especie sin caer en el ber si dicha tensión es, o no, inevi- sur la diversité hunzaine (1989).
biologismo? ¿Cuál es exactamente la table. págs, 49-63.
relación entre humanidad e indivi-
duo? Si la libertad es peculiar del in-
dividuo, ¿no implica que los indivi- NOTAS
duos construyen su libertad en contra
de la humanidad? Pero otra cuestión ' Francos Dosse, Histoiredustructura-
más acuciante: ¿La libertad está inevi- lisme, k Le cbanip du signe, 7915-7966;
tablemente opuesta a la determina- París, La Découverte, 1991, pág. 240.
ción, como afirma Todorov? ¿No po- Tzveran Todórov, -La description de
la signification en, littérature., Communi-
dría haber, por ejemplo, un sentido cations, 4, 1964. '
en el que el individuo decida asumir ? Tzvetan Todorov, •Les catégories du
los valores comunitarios existentes? récir linéraire., 'Communications, 8
¿No es ése, precisamente, el carácter (1966), págs. 125-151.
de una elección moral o política de ' lbed., pág. 126,
tipo conservador? En resumen, la Ibid.
cuestión no es que Todorov no plan- 6 !bid., pág. 49.
tee problemas importantes en Nous et ' lbíd.
les autres, sino que, con frecuencia, • Tzveran Todorov, Mikbail Bakbtin:
Dialogical Principie, trad. de Wlad
las respuestas que ofrece a preguntas Godzich, Manchester, Manchester Uni-
filosóficas inmensamente complejas versity Press, 1984, pág. 94.
se quedan asombrosamente sin desa- • !bid., pág. 104.
rrollar en un libro cuyo propósito 1 ° /Ud., pág. 107.
declarado es el de ampliar la com- " Tzvetan Todorov, The Conquest of
prensión de la interacción entre el yo Anzerica: Tbe Question of tbe Otber,
y el otro en la experiencia contempo- trad. de Richard Howard, Nueva York,
ránea. Harper 6r: Row, 1984, págs. 49-50.
Entre La conquista de Anzürica y " Véase ÍbW, p:Igs. 98-123.
P3 Tzvetan Todorov, Nora et les mi-
Nous et les aun-es, Todorov siguió pu-
tres, La réflexion franaise sur la di-
blicando trabajos sobre la naturaleza versité humaine, París, Seuil, 1989, pá-
deja literatura y la crítica, como Cri- gina 428.
tique de/a critique (1984) [Crítica de
la crítical y La Notion de la &t'era-
ture (1987). Estos libros pueden con- VÉASE TAMBIÉN EN ESTE LIBRO
trastarse, en parte, con textos más
abiertamente comprometidos corno Bajtin, Kristeva, Generre, Greimas.
202 203
1
El feminismo de segunda generación

El feminismo de segunda generación pone en tela de juicio más


que las desigualdades sociales experimentadas por las mujeres; tam-
bién examina las estructuras ideológicas de hondas raíces que sitúan
inevitablemente a las mujeres en desventaja con respecto a los hom-
bres. El patriarcado es una de dichas estructuras, y el contrato social
—tan influyente a la hora de justificar las instituciones políticas de
Occidente— es otra. Frecuentemente inspirado por los hallazgos del
psicoanálisis de Lacan, que demuestra que la conciencia, o el yo, no
es el centro de la subjetividad, el feminismo de segunda generación
desafía la tendenciosidad sexual en el lenguaje, la ley y la filosofía.
Afirma que las mujeres no deben aspirar sólo a ser como los hom-
bres (como ocurre a menudo en la batalla por la igualdad social),
sino que deben aspirar a desarrollar un lenguaje, unas leyes y una
mitología que sean nuevos y especificamente femeninos.

705
Luce Irigaray de una imaginación masculina que
condena a las mujeres a callar como
Luce Irigaray se formó como lin- mujeres.
güista y analista de tendencia la- Aunque ferozmente opuesta a mu-
caniana. Sus primeras publicaciones chos de sus aspectos, la filosofía de
exploraban el lenguaje de quienes lo femenino de Irigaray empieza con
padecían demencia. En sus investiga- la teoría lacaniana de lo real, lo sim-
ciones, Irigaray descubrió que el len- bólico y lo imaginario: lo real como
guaje del esquizofrénico tiende a ser lugar de la madre y la muerte, lo sim-
un idioma privado, o ideolecto. Pero, bólico como el ámbito de las leyes
sobre todo, propuso que lo que fre- basadas en el .nombre del padre•, y
cuentemente se consideraba un deli- lo imaginario como el efecto de lo
rio incomprensible (délire)estaba, en simbólico en la conciencia y la ima-
realidad, sometido a normas de es- ginación. Tal como lrigaray interpre-
tructura lingüística, aunque dichas ta b situación, el orden simbólico de
normas se rompieran todo el tiempo. Lacan —la condición del lenguaje—
Como Irigaray se ha dedicado poste- es fundamentalmente masculino y
riormente a construir formas femeni- patriarcal; expresa la imaginación de
nas de simbolización y lenguaje los hombres y se organiza con arre-
—formas basadas en aspectos de la glo a la ley del orden simbólico que
experiencia femenina que se conside- lo mantiene. Todo lo que está fuera
ran ajenos a los modos de expresión del rerreno del orden simbólico debe
convencionales (como el ideolecto traducirse a sus términos; en otras pa-
del esquizofrénico)—, debemos tener labras, su otro simbolizado es real-
presentes esos primeros trabajos al mente lo mismo que él mismo. O, en
estudiar su trayectoria como una de caso contrario, el otro (como la muer-
las principales representantes del fe- te o lo femenino) es tan radicalmente
minismo filosófico. distinto que no existe ningún medio
En 1974, lrigaray publicó Espéculo simbólico de comunicarlo. Se trata de
de la otra mujer-, que, al revisar la algo evidente, especialmente, en el
noción de feminidad —incluida la re- ámbito de la sexualidad. Y la sexuali-
lación entre madre e hija— en Freud dad, como demostró Freud, afecta
y el psicoanálisis, intentaba desarro- casi a cada esfera de la vida intelectual
llar una escritura especificamente fe- y cultural. Por el momento, el sujeto
menina (écriurre fenzinine), una es- presuntamente neutral de la ciencia,
critura que subvirtiera la hegemonía o el sujeto pretendidamente neutral

207

".;1 .
tRIGARAY IRIGARAY

del lenguaje (la tercera persona) son, pene es el factor fundamental para el ante los demás en el mundo social, menos que por niño se interpreta el
a juicio de lrigaray, de género mas- desarrollo sexual de ambos sexos. las mujeres, en cambio, se encuen- hijo varón. Éste tiene que apartarse
culino. Dicho con brevedad: la crítica Como no hay acceso inmediato al tran en tina posición que lrigaray de- de la madre mediante la intenunción
de las instituciones del psicoanálisis, cuerpo real, Lacan interpreta que la nomina de •abandono.'; es decir, de del lenguaje, o el 'nombre del padre».
el lenguaje y la cultura que hace liti- presencia o ausencia del pene es la no poder conocerse ni amarse por- El hijo no sólo es un posible padre;
gara). es radical en la medida en que presencia o ausencia del falo, que que la mediación (el orden simbóli- es también un sujeto, un hombre. La
cree que incluso gestos ostensible- significa la diferencia sexual. Para Iri- co) les es ajena. •Las mujeres no tie- hija, en cambio, es sólo una posible
mente igualitarios están comprometi- garay, por el contrario, el falo simbo- nen mediación para realizar la madre. Su feminidad debe buscarse
dos desde el principio; porque siem- liza la carencia en la mujer que es el sublimación., afirma'. Por tanto, no en la experiencia de la maternidad.
pre presuponen inevitablemente que otro, porque una mujer es, en reali- pueden cosificarse o, por lo menos, La primera lección para el hijo, por
las mujeres están en el lado perdedor dad, un hombre castrado. les resulta difícil. Por otro lado, los así decir, es ser capaz de cosificar a
de la balanza, que les •'alta. algo (en Si el lenguaje (para Lacan) es irre- hombres no sólo se sitúan como ob- la madre a través del orden simbóli-
términos sociales o sexuales) que tie- ductiblemente fálico, la única forma jetos, sino que también son capaces co, con el fin de cumplir con la pro-
nen los hombres y que las mujeres, de que las mujeres puedan hablar o de cosificar a las mujeres. Consecuen- hibición del incesto. La hija, sin em-
con toda justicia, también merecen comunicarse es apropiándose del ins- temente, a las mujeres se les niega el bargo, está desprovista de medios
(situación social, una vida pública, trumento masculino. De uno u otro acceso a la sociedad y la cultura en para lograr dicha separación, debido
autonomía e independencia, una modo, la mujer tiene que •tener. el proporción directa con la medida en a su pobre relación con lo simbólico.
identidad aparte). falo del que carece; tiene que com- que los hombres son de la sociedad Por eso corre un mayor rieSgo de psi-
Desde el punto de vista sexual, el pensar ese déficit. Para hablar con y la cultura. En realidad, la situación cosis y melancolía; o, más bien, su
gesto igualitario que atribuye a la va- claridad, para comunicarse y estable- de las mujeres es aquí, para lrigaray, lenguaje tiende a estar dominado por
gina la misma categoría que al pene cer vínculos con otros —para ser so- reminiscente de la concepción del los impulsos, como averiguó Irigaray
cede de forma inadvertida al concep- cial—, la mujer debe hablar como un proletariado en Marc: el prolétariado, en sus estudios sobre el delirio. Qui-
to de envidia de pene de Freud. Por- hombre. No hacerlo es correr el ries- afirmaba éste, está en la sociedad, zá, añadía, el delirio tiene el poten-
que el pene sigue siendo el punto de go de psicosis: volver a caer en un . pero no es de la sociedad. En térmi- cial de ofrecer la base para un len-
referencia. ¿Por qué debe serio?, nos ideotecto y la ruptura del nexo social. nos sociales, las mujeres —al menos, guaje de las mujeres, una forma de
pregunta Irigaray. Cuando Lacan pa- La versión del lenguaje de Lacan (que desde una perspectiva tradicional— permitir que las mujeres se comuni-
rece avanzar aún más que Freud al él denomina la pére-version) se repi- deben estar unidas a un hombre para quen entre sí, igual que los hombres
afirmar que todo el orden simbólico te, a juicio de Irigaray, en la mayoría tener presencia en la sociedad; una se han comunicado entre sí.
es fálico (que el falo es el significante de las teorías psicoanalíticas del len- 1.1 mujer no tiene identidad propia. Iri- Irigaray ha trabajado sin cesar des-
de toda significación, que el sujeto es guaje y la sexualidad. Para que las garay afirma que tener una identidad de mitad de los años 70 para perfec-
un significante) y que a través del mujeres posean una identidad propia que no es la propia —ser un •sexo cionar los medios simbólicos equi-
orden simbólico se representa el dra- es preciso subvertir la versión fálica que no lo es- (es decir, que no está valentes a la relación entre madre
ma de la diferencia se:cual entre ple- de lo simbólico a la que han estado completo porque tiene carencias, no e hija. Dicho trabajo le ha llevado a
nitud (lo masculino) y la carencia (lo sometidas durante tanto tiempo. Por- está unificado sino que es dependien- investigar los aspectos de la cultura
femenino), Irigaray advierte a las que lo simbólico ha sido el origen de te)— es estar excluida de la plenitud occidental, hasta ahora reprimidos y
mujeres que tomen nota de que ésta la opresión de las mujeres. de ser: es quedar abandonada, preci- excluidos, que se relacionan especial-
es una visión masculina de las cosas. Tal como lrigaray presenta el pro- samente, en una situación de .aban- mente con la condición femenina en
En efecto, .la sexualidad femenina se blema, pues, las mujeres tienen una dono.. la sociedad: la divinidad femenina, la
ha conceptualizado siempre partien- condición perturbadora y opresiva- Las mujeres como mujeres están brujería, la magia, por citar varios
do de parámetros masculinos•'. Una mente paradójica como sujetos; para excluidas, pues, del contrato social. ejemplos. Como ha destacado Marga-
vez más, confirma Irigaray, lo que les hablar, deben hablar corno hombres; Y un factor importante es la dificul- ret Whitford 5 , la lógica del proyecto
toca a las mujeres •es la •carencia•, la para conocer su sexualidad, deben tad (léase imposibilidad actual) de de Irigaray no consiste en valorar un
•atrofia. (del órgano sexual) y la •en- compararla con la masculina; deben simbolizar la relación entre "madre e estado místico incomunicable o a una
vidia de pene., puesto que éste es el •ser la falta de un pene. Mientras los - hija. Aunque el psicoanálisis ha he- mujer esencial, sino vencer la caren-
único órgano con valor reconocido?. hombres pueden apresurarse a invo- cho grandes avances al hablar de la da de la mujer que no esta simboli-
Aquí está en juego la teoría de la cas- car el orden simbólico (la mediación) entrada del elemento humano en el zada como mujer. El objetivo, pues,
tración de Freud. Se considera que él al conocerse y amarse a sí mismos y, ámbito del lenguaje y la separación no es el misticismo, sino llevar á la
, afirma que la presencia o ausencia de por consiguiente, al representarse del niño y su madre, se ha destacado mujer al orden simbólico en sus pro-

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IRIGARAY IRIGARAY

píos términos. Las mujeres necesitan formación, los flujos, los ritmos y •el es en lo que uno se convierte. Es de- que trigal-ay pretende subvertir. Es
ser capaces de representarse ante sí esplendor del cuerpo.; en otras pala- cir, el otro no puede reducirse a una decir, si no predominara la lógica de
mismas (pero de forma muy distinta bras, a todas aquellas cosas que no representación que está, como todas, la ideniidad, las mujeres no serían ne-
a los hombres) con el fin de consti- pueden recibir una imagen viable en en deuda con el orden del Mismo. Lo cesariamente mujeres; lo femenino
tuirse como seres auténticamente so- una experiencia religiosa patriarcal. que atrae a Irigaray hacia Levinas es no sería necesariamente feminista. El
dales, capaces de formar relaciones -Una deidad femenina — admite Iriga- el énfasis que sitúa en el encuentro riesgo —un riesgo muy grave— es
positivas entre sí. ray— está aún por venir-' 0. Y ésa es material dentro de su teoría de la al- una posible forma de racismo basada
Todo ello ha producido una expe- • la cuestión, sin duda: el •aún por ve- teridad. En realidad, la verdadera al- en un modo insidioso de clasificación
rimentación con diferentes estrategias nir» de la deidad femenina es la dei- teridad sólo se articula en un plano del que no se puede escapar.
lingüísticas en los propios textos de dad de la transformación, la diosa de material y corpóreo; sólo el encuen- El tercer aspecto Se refiere a ele-
Irigaray y la evocación de experien- la fluidez y los límites temporales, los tro genuinamente material con el otro mentos de lo femenino (deidad feme-
cias y figuras culturales que han estado elementos amorfos del fuego, el ah-e, puede ser sorprendente y asombroso. nina, elementos de fuego, aire, tierra
excluidas de la vida social y cultural la tierra y el agua. -¿Cómo podría ima- Para Irigaray, el femenino es el pro-
ginarse nuestro Dios [de las mujeres]? y agua, lenguaje femenino y fiestas),
por haber estado tan estrechamente totipo de esa alteridad. que el trabajo de Irigaray hace visi-
asociadas a lo que se consideraba —pregunta Irigaray, que continúa—, Dada la minuciosidad con la que bles. En cierta medida, este enfoque
• esencialmente femenino. Con respec- ¿o nuestra deidad?. ¿Hay alguna cua- Irigaray ha articulado una nueva visión se refiere al aspecto más creativo de
to al estilo, Elizabeth Grosz ha dicho lidad que nos pertenezca y que pu- de lo femenino, parece extraño que su estilo de feminismo. Los limites se
de Irigaray que: .Su escritura, sus "es- diera invertir el orden y poner el pre- siga habiendo ciertas dificultades, de han derrumbado y se han abierto
tilos", representan nuevas formas de dicado en posición de sujeto?.". las que tres reclaman particularmente
La búsqueda de una deidad deci- nuevas formas de imaginación. Sin
• discurso, nuevos modos de hablar, nuestra atención. En primer lugar, embargo, la firme impresión que se
una "poesía" que es necesariamente didamente femenina es la búsqueda existe una deuda con el psicoanálisis obtiene es que, para lograr el efecto
innovadora y que evoca nuevas con- de una posición —un punto de refe- lacaniano. Aquí —a pesar de Levi- político deseado, dichas imágenes
cepciones de las mujeres y la femini- rencia— que, sin embargo, no repro- nas— es difícil evitar la sensación de necesitan partidarios. Es preciso pre-
dad-6. En este sentido, tiene experi- duzca la toma de posición del patriar- que la obra de Irigaray es otro proyec- guntar, en este momento, si una per-
mentos ejemplares: Amante marine", cado. En términos actuales, sería una to en contra de Edipo y que, por con- sona puede ser verdaderamente femi-
Passions élénzetztaires" y L'Oubli de posición que, en cierto sentido, evite siguiente, se rige por la lógica que nista de acuerdo con los términos de
Pair chez Martín Heidegger". En estas toda toma de posición. Para la lógica intenta subvertir. En efecto, los ele- Irigaray y no suscribir su versión de
interpretaciones sobre figuras de la de la identidad ésta es una postura mentos real, simbólico e imaginario de lo femenino. Irigaray sintió una enor-
historia de la filosofía, Ifigaray presta insostenible. Desde luego, Irigaray Lacan permiten que Irigaray destaque me alegría —como mujer— al ver
atención a los elementos reprimidos está convencida de la necesidad y la la insuficiencia tanto del •feminismo una figura femenina de Jesús en un
que se abandonan en silencio, ele- viabilidad del proyecto; pero ¿podría igualitario. como del•que define la fe- museo de la isla de Torcello' 1. Pero
mentos pertinentes para las feminis- estar equivocada? Las propias mujeres minidad en virtud de una carencia y ¿no podría ocurrir que uno no se
tas, COMO el cuerpo y los elementos: están empezando a preguntárselo. una alteridad irrepresentable. sienta emocionado, como mujer, co-
agua, tierra, fuego y aire. El proyecto filosófico de Irigaray Un segundo factor, más preocu- mo persona o como ambos, ante esa
Irigaray ha reflexionado asimismo afecta también al estudio de b ética pante, es cómo se emplean los térmi- escena? Una respuesta afirmativa pa-
. sobre la tradición teológica con el fin partiendo del concepto de obligación nos 'mujer. y •mujeres., •hombre. y recería complicar precisamente el
de hallar en ella una concepción po- ética en Emmanuel Levinas. Igual que •hombres• para designar realidades vínculo que Irigaray está intentando
sitiva de lo divino (el infinito) que sea Irigaray en relación con las mujeres, aparentemente homogéneas: es decir, establecer entre la iconografía de lo
adecuada para las mujeres. Dado que Levinas se ha preocupado de desve- que los hombres deben ser hombres femenino y el sentimiento de conver-
el Dios del cristianismo, corno ejem- lar los elementos reprimidos de la tra- y las mujeres deben ser mujeres. Po- tirse en sujeto femenino.
. plo del elemento imaginario masculi- dición judaica dentro del cristianismo. líticamente, ello ha hecho que se
no, excluye la experiencia de las Paras Levinas, el imperativo moral no plantee que un hombre (por ejemplo,
mujeres como punto de referencia, está centrado en la categoría del yo Derrida) no puede ser un feminista'''.
• Ingaray cree que es necesario encon- —en la que el otro sólo sería impor- Sin embargo, parece que la opinión NOTAS
trar una figura capaz de ejemplificar tante para confirmar el valor moral de de que los hombres no pueden ser
• el elemento imaginario femenino. La uno mismo—, sino en el otro como feministas sólo puede mantenerse si
• deidad femenina daría forma a la algo exterior, como alteridad que in- ' Luce Irigaray, TbisSex Not
se conservan las categorías homogé- One, trad. de Catherine Poner con- Ca-
• • multiplicidad, la diferencia, la trans- voca al yo y que, en cierto sentido, neas de identidad (hombre, mujer) rolyn Burke, Ithaca, Nueva York. Cor-
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••
LE DOEUFF LE DOEUFF

nell Universiry Press, 4 4 impr., 1988. pá- Sexes et parentés, París. Minuit, 1987. L'Imagina ire pb ilosopb (que'. En a, tor no cultivado o profano. A ojos de
gina 23. Sexos et genies á travers les fatigues. Pa- la autora demuestra, entre otras cosas, Le Doeuff, ambas explicaciones no
!bid. rís. 1990. que Kant, en el primer párrafo de la sirven sino para ocultar el verdadero
' Luce Ingaray. Étbique, de la diffé- Po, tú, nosotras, Madrid, Catedra, 1992. parte de la Crítica de la razón pura efecto de la imagen en la filosofía.
ronce sexuelle, París. Minuit, 1984, pági- que se ocupa de la distinción entre fe- A través de las imágenes, 'toda filo-
na 70.
nómenos y nournenos, se refiere a la sofía puede emprender una clara
' OTRAS LECTURAS
comprensión como un 'territorio- que dogmatización y decretar que "así es-
5 M3fgarCt WhilfOrd, Luce Irisara)); Phi-
losopby in the Feminine, Londres y Nueva la parte anterior del libro ha -explora- tán las cosas", sin miedo al argumen-
MIEN, Jeffner y YOUNG, Iris Mari0f1, 73be
York, Routledge, 1991, págs. 84 - 85. Thinking Atuse: Feminisni and Mo- do). Pero hay algo más que esta ima- to en contra, porque se entiende que
Elizabeth Grosz, Sexual Subt,tersions. dem Frencb Pbilosopby, Blooming- gen de un territorio; porque Kant con- el buen lector pasará por encima de
Tbree Frencb Feminists: Julia Kristeva, ton, Indiana Universiry Press, 1989. tinúa diciendo que el 'ámbito- de la dichas "ilustraciones”. 5 . Las imágenes,
Luce Irigaray, Alicbéle Le Doeuff, Sidney, Gsosz, Elizabeth, Sexual Subversions. comprensión por tanto, son un medio de que la fi-
Allen St. Unwin, 1989, pág. 101. 773rce Frencb Ferninists:Julia Kristeúa, losofía sea no filosófica cerrando la
' Luce Irigaray, Marine Lover of Frie- Luce Ingaray, Michéle Le Doeuff, Sid- es una isla, encerrada por b propia
imagen al escrutinio y la discusión.
dricb Niet=che, trad. de Gillian C. Gill, ney, Allen Sz. Unwin, 1989. naturaleza dentro de límites inalte-
rables. Es la tierra de la verdad Para Le Doeuff, cerrar la imagen al
Nueva York, Columbia Universiry Press, WHITFORD, Margaret, Luce Irigaray: Pbi-
—inombre encantador—, rodeada escrutinio equivale a cerrar la propia
1991. losopby in tbe Feminine, Londres y
8 Luce Irigaray, Passions élémentaires, Nueva York, Routledge, 1991. por un océano vasto y tormentoso, filosofía.
París, Minuit, 1982. el hogar de la ilusión, en el que nu- El trabajo filosófico de Le Doeuff
9 Luce Irigaray, L'Oubli de Pair diez merosos bancos de niebla e icebergs se ha asociado con frecuencia al de
Ataran Heidegger, París, Minuit, 1983. que se derriten rápidamente crean la las feministas Luce Irigaray y Héléne
I° Luce Irigaray, Divina Women, trad. falsa apariencia de que hay costas Cixous y, en menor medida, Julia
de Stephen Muecke, Sidney, Local Con- más allá, engañan al navegante au-
Kristeva. A diferencia de Irigaray, que
sumption, 1986. Michele Le Doeuff daz con vanas esperanzas y le em-
examina el lenguaje filosófico con
" /bid. pujan a empresas que nunca puede
confiar en abandonar pero que es grandes sospechas porque, a su jui-
Para una explicación más comple-
Michéle Le Doeuff es profesora de incapaz de llevar a término'. cio, tiene un carácter machista, racio-
ta y sutil de por qué ocurre así en la
economía de la filosofía de kigaray res- filosofía en la École Normale Supé- nalista y patriarcal —un carácter que
pecto a una figura como Derrida, véase rieure de Fontenay, en Francia. Su in- Para Le Doeuff, estas imágenes priva a las mujeres de su propia
'Margaret Whitford, ddentiry and violen- terés por la filosofía no se inició le- (isla, niebla, iceberg, mar tormentoso, voz—, Le Doeuff afirma que la razón
ce•, en Luce 1:taray: Pbilosopby in tbe yendo a los grandes pensadores, sino etc.) en un texto filosófico no pueden y la racionalidad no son esencialmen-
Feminine, págs. 123-147. mediante la identificación con el Loco interpretarse como una simple metá- te masculinas. El solo hecho de que
' 3 Luce Irigaray, Je, tu, nous. Torvard de las obras de Shakespeare. El Loco fora. Su efecto es el de cerrar el texto haya una pluralidad de racionalida-
a Culture of Difference, trad. de Alisan tiende al discurso subversivo, una a más escrutinio, hacerlo autónomo, des tiende a contradecir la idea de
Martín, Nueva York, Londres, Routled- igual que es autónoma la compren-
vocación que Le Doeuff, al principio, una razón masculina hegemónica.
ge, 1993, pág. 25.
consideró intrínseca de la filosofía; y sión como una •isla- de verdad. Además, Le Doeuff añade que siem-
ésta, a diferencia del Loco, existe en De forma más general, Le Doeuff pre ha habido mujeres en la filosofía,
VÉASE TAMBIÉN EN ESTE LIBRO la vida real. afirma que las imágenes en la filoso- en toda su historia —aunque, es cier-
En su libro El estudio y la rue- fía se han explicado, dentro del me- to, sin las mismas ventajas que los
Freud, Kristeva, Lacan, Le Doeuff, Levi-
ca', Michéle Le Doeuff explica que tadiscurso filosófico, de dos Maneras: hombres—, por lo que resulta contra-
nas, Pateman. o se han juzgado la señal de la reapa-
juzgó posible empezar su proyecto fi- producente preguntar repetidamente
losófico probando .que existe en la fi- rición de una forma de pensamiento por qué ha habido pocas mujeres en
PRINCIPALES OBRAS DE IRIGARAY losofía un nivel imaginario que no se más primitiva o infantil, o se ha pen- dicho campo. E insiste en este punto
ha importado de ningún lugar sino que sado que tienen una claridad intuiti- al declarar que hoy, a diferencia del
Le Langage des elements, La Haya, París, es especifico de /a filosofia, y estable- va y evidente, como si la imagen pu- pasado, 'nada impide que una joven
Mouton: Approaches ro Semiotics, ce las condiciones de lo que puede diera expresar directamente las ideas estudie filosofía y produzca obras fi-
1973.
elaborarse como racionalidad dentro que el filósofo deseaba comunicar. losóficas.. Y pregunta: •¿Para qué sir-
Amante marine, París, Minuit, 1980.
Passions élémetuaires (1982). de ella.. Asi describe Le Doeuff la tra- Esta última característica haría de las ve, pues, volver una y otra vez sobre
L'Oubli de l'a& chi': Martín Heidegger, yectoria hasta el libro por el que ha imágenes una forma eficaz de trans- una pregunta anticuada y hablar de lo
París, Minuit, 1983. adquirido más fama fuera de Francia, mitir el pensamiento a un interlocu- que ocurrió anteayer?- 8 .

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LE DOELiff LE DOEUEF

Sartre —que rechazaba la idea de que pensamiento que ofrece la filosofía es


Por otro lado, la forma en que se ocurrido normalmente en el trabajo
lo exterior (el otro) estuviera determi- ilusoria, es difícil ver córno se puede
ha ejercido la filosofía, sin duda, ha creativo. Lo que caracteriza a un
nado moral o filosóficamente— des- evitar pensar filosóficamente al llegar
hecho frecuentemente más difícil que hombre como filósofo, por encima de
aparece cuando •de Beauvoir adopta a esa conclusión. Sin embargo, para
las mujeres fueran filósofas profesio- todo, es ser un pensador indepen-
esa misma filosofía.. En definitiva, Le Doeuff, las limitaciones históricas
nales, igual que también es cierto que diente y creativo al que los demás
como si dijéramos, Le Doeuff cree de la filosofía pueden resultar benefi-
la forma en que se ha caracterizado a respetan. Los hombres que no lo han
que Beauvoir resulta atractiva por- ciosas si se reconoce que, a través de
las mujeres, casi exclusivamente por logrado por completo han tenido con
que, aunque empieza en el existen- ellas, aunque parezca paradójico, la
su sexo, constituye otro elemento frecuencia a una mujer para satisfacer
cialismo, llega a hablar con voz pro- filosofía demuestra su pertinencia.
poco reconocido (como la imagen) la 'carencia ontológica. del filósofo.
pia. Es decir, deja de ser una par- A pesar de que es necesario reflexio-
de no filosofía dentro de la historia Por ejemplo, pese a su éxito, Sartre
tidaria. nar cuidadosamente sobre este víncu-
de la filosofía. En ésta existe un sexis- tendía a tener este tipo de dependen-
Su concepción de la filosofía como lo para no resultar insinceros, el fra-
mo esencial; pero, para luchar contra cia respecto a Beauvoir. En el exa-
práctica potencialmente liberadora ha caso de la filosofía es ser universal y
él, Le Doeuff acude a los propios re- men detallado de la relación entre
hecho que algunos vean en el enfo- la realidad de sus límites históricos es
cursos de la disciplina (su preocupa- Sartre y Beauvoir que presenta en El
que de Le Doeuff una reverenda im- lo que la hace pertinente. En otras
ción por la apertura, su esfuerzo por estudio y la rueca, Le Doeuff ana-
plícita hacia los philosophes del si- palabras, los límites históricos signifi-
reflexionar sobre sus propias hipóte- liza cómo Beauvoir utiliza la filo-
glo xvw. Críticas feministas corno Eli- can estar vinculados a los problemas
sis), pese a que hay que admitir tam- sofía existencial de Sartre (es decir,
zabeth Grosz han sugerido que, de- del momento.
bién que la filosofía sueña con ser utiliza su condición de discípula) en
bido a dicha reverenda y al decoro Una última razón, pero fundamen-
su propio principio fundador e ins- El segundo sexo para poder darle la
de sus textos, es •casi como si fuera a tal, de que las mujeres no deban re-
trumento de legitimación, así como vuelta de forma subrepticia. Beau-
afirmar que, si la filosofía es misógi- nunciar a la filosofía es que histórica-
sueña con ser la base y el principio voir no desafía directamente el sexis- -
na, puede limitarse a los elementos mente, las mujeres se han definido
fundamental de todas las demás dis- mo de la filosofía de Sartre. Lo que
imaginarios que ha estado interesada como tales al ser designadas corno no
ciplinas. Es decir, la fantasía que tie- hace, a juicio de Le Doeuff, es 'remo-
en revelan,. Según Meaghan Morris, filosóficas. Ello ha generado el prejui-
ne la filosofía sobre su omnipotencia delar "en el calor del momento". las -
el hecho de que Le Doeuff acepte la do de que el hombre es filosófico (es
y autonomía es uno de sus mitos más categorías sartrianas 7 . Beauvoir toma -2
filosofía como una fuerza positiva, en decir, no determinado por su sexo) y
poderosos. Al final, sin embargo, Le por descontado el marco del existen-
conjunto, con respecto a las mujeres, la mujer no es más que su sexo. En
Dbeuff se opone al sexismo de la fi- cialismo (no está construyendo su
podría ser simplemente «una opera- su capítulo •El quiasmo de Pierre
losofía en nombre dé la filosofía. Por propio sistema filosófico) yh lo utiliza -
ción de salvamento para rescatar a la Roussel», de L'Imaginaire pbilosophi-
tanto, lo que está en tela de juicio no con el fin de presentar un •punto de _
filosofía_ de las acusaciones más. perr... que, Le Doeuff puede dar un ejem-
&S la filos-ofía per se, sino la historia vistas una perspectiva sobre el aquí 7-
judiciales de las críticas feministas. ! ?. plo de hasta dónde han llegado los
de cómo sé ha ejercidO. Dicho ejercí: y ahora. Se refiere a ejemplos concre» -
Si bien admite.que la simación,es científicos para reducir a las mujeres
do ha luzga-do erróneamente él . efec- tos -y cita datos - etnográficos, no para
compleja, la reacción - de Le Doéuff a su sexo. Como si se inspirase en el-
to de las imágenes; ha destacado la demostrar un Marco filosófico, sino
ante estas críticas es afirmar que, nos Libro V del Emilio de Rousseau (que
abstracción y la universalización a porque son ejemplos de cómo vive la
guste o no, la filosofía ofrece el mo- afirma que las verdades abstractas no
costa de la pertinencia; ha rechazado gente. Además, Beauvoir no toma del '-
delo-de autonomía e Independencia son para las mujeres), Pierre Roussel,
la idea del pensamiento .errantes ha existencialismo una 'colección de
de pensamiento al que pueden aspi- eh su ,tratado de 1777 sobre la mu-
pensado que las mujeres eran su "posiciones teóricas"., sino una serie ,
rar las Mujeres feniinistas. Quizá esto jer", ¿firma que las mujeres no están
•OVO»; ha sido inflexible en cuanto al de valores. "De modo que la elección -
sea una especie de operación de sal- preparadas para la teorización por-
estilo por loquee! lugar de la enun- de Simone de Beauvoir es, ante todo, '4..
vamento; pero es una operación que que su primer impulso, en sus fundo-
ciación ha permanecido, en principio, una cuestión de moralidad'''. Como
intenta salvar a la filosofía del encie- nes nauirales de esposas y madres, es
invisible. Todos estos aspectos de la consecuencia, aunque Le Doeuff
rro al que ha estado sometida en ma- ser prácticas, tener una imaginación
práctica filosófica han contribuido a sigue encontrando numerosos pro-
nos de los hombres. Si, históricamen- hiperactiva que no les permite rete-
apartar a las mujeres de b filosofía. blemas en El segundo sexo, no ha .=7
te, los hombres han puedo límites a ner ideas, pero que sí les permite
Del mismo modo, las mujeres - se construido su feminismo, como Otras
la filosofía, ello no significa que la fi- identificarse con el sufrimiento de los
han encontrado a menudo en la po- muchas autoras, a partir de un lucha:
losofía sea limitada_ demás gracias a sus propias debilida-
sición de partidarias y discípulas de zo total de Beauvoir. Y, al final, con- _
Aunque se quiera explicar que la des. Entre otras cosas, Le Doeuff, des-
los grandes filósofos varones, en vez sidera que ésta es importante preci-
Posibilidad de independencia de taca dos puntos generales sobre la
de pensar por sí mismas, como ha samente porque la .fantasmagoría' de rt-

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LE DOEUFF
PATEMAN

imagen de la mujer en Roussel. El se reviste de un aspecto contempo_


NOTAS •Utopies scolaires.. en Rev. Mtph. Moral,
primero es que las ideas que explican ráneo cuando Le Doeuff asegura que 88, 199-217 (1983).
las capacidades de las mujeres a par- la crítica moderna del poder del amo Shakespeare: Venus et Adonis, Alidades-
' Michéle Le Doeuff, Ilipparcbia's
tir de su sexo y, lo que es más, que intelectual —como proponen los Distique. 1986.
Choice. .1,2 Essay Concerning Women,
consideran que ese sexo es una cons- nuevos filósofos— presupone que El estudio y la rueca (1989), Madrid, Cá-
• Philosophy, etc., trad. de Trista Selous,
tante en el tiempo y el espacio, si- ya se ha logrado una utopía intelec- tedra. 1993.
, Oxford, Basil Blackwell, 1989, pág. 23.
guen prevaleciendo hoy en ciertas tual. Estos •ideólogos —explica—. Anhele Le Doeuff, 77,e Philosopbical
áreas de la biología, el psicoanálisis y están siguiendo, en realidad, los sue- Imaginen, trad. de Colin Gordon, Stan-
la filosofía. El segundo punto es que ños de las primeras utopías.". A tra- . ford, Stanford University Press, 1989, 0111AS LECTURAS
el argumento que presenta esas opi- vés de la imagen de la utopía, la fan- 5 Irnmanuel Kant, Critique of Puye

niones es tan especioso, tan ideoló- tasía del filósofo produciría un Reason, trad. de Norman Kemp-Smich,
Gkosz, Elizabeth, Sexual Subversions.
gico, que el propio hecho de su exis- mundo en el que el amo intelectual Londres y Basingstoke, Macrnillan, reim-
772ree Frena) Feminists:Julia Kristeva,
presión, 1970, pág. 257. (Trad. esp.:
tencia en un entorno presuntamente ya tiene poder absoluto. La auténti- Luce lrigaray, Micbéle Le Doeuif Sid-
tica de/a razón pura, Madrid, Magua-
filosófico constituye una limitación ca utopía está anunciada en la fanta- ney, Allen & Unwtn, 1989. ,
. ra, 1994.)
para la filosofía, igual que las imáge- sía de que la sociedad es de la es- MORRIS, Meaghan, •Operative reasoning:
' !bid.
nes constituyen un límite. cuela. Michéle Le Doeuff, philosophy and
5 Le Doeuff. The Pbilosophical *mg&
Una de las imágenes perdurables Mediante un estilo que evoca el , feminism., Ideology and Conscious-
/lag), pág. 12.
que analiza Le Doeuff en L'Imagi- lugar de la enunciación, mediante
ness, 9 (1981/1982).
Le Doeuff, Ilipparcbia's Choice,
naire philosophique y otras obras es una filosofía que demuestra que •no Pág. 3 .
la de la utopía. En un artículo publi- existe pensamiento que no sea erran- 7 Ibid., pág. 88.
cado en inglés en 19S2', habla de te., que no avance a través de digre- pág. 90.
cómo la utopía, en las famosas obras siones y un sentido del compromiso Elizabeth Grosz, Satual Sublersions.
Three Frencb Fon:int:sis: Julia Kristeva, Carole Pateman
de Moro, Bacon y Campanella, re- que sea flexible y reflexivo, Michéle
Luce Ingaray,Micbéle Le Doeuff Sidney,
presenta •una defensa e ilustración Le Doeuff ha empezado a otorgar a
Mien & Unwin, 1989, pág. 212. Carole Pateman es una teórica po-
de la vida intelectual socializada.". la filosofía un nuevo rostro. Lo que w Meaghan Morris, •Operative reaso- lítica contemporánea. Aunque su
Es cierto que la utopía es la fantasía quizá prestaría aún más interés a su ' ning: Michéle Le Doeuff, philosophy obra es muy conocida por su crítica
de una tierra de buena vida; pero, obra es que se dedicara más plena- and feminism., Ideology and Conscious-
_. feminista de la tendencia patriarcal en
como es también una crítica de la mente al aspecto oculto (las imáge- ness, 9 (1981/1982), pág. 77, citado en
Grosz, Sexi/a/ Subversions, pág. 212. la teoría democrática liberal, también
vida aquí y ahora, implica una cali- nes, etc.) del canon filosófico. Por-
" Pierre Rousse!, Systéme pbysique el se ocupa de cómo la teoría política,
dad de vida concreta y unos medios que, si bien la obra de un Pierre
moral de la fenune (1777). en general, puede producir una for-
específicos de obtenerla. Inevitable- Roussel es indudablemente significa-
Michéle Le Doeuff, •Utopias; Scho- ma de política más democrática y,
mente, la buena vida es la que se tiva a la hora de juzgar cómo ha defi-
larly., trad. de Susan Rotenstreich, Social por tanto, más activa y participativa,
obtiene mediante reformas pedagó- nido la ciencia a la •mujer., Roussel
Pescare!), 49,2 (1982), págs. 441-466. en Occidente y en todas partes. Sin
gicas; necesita filósofos que la ima- no puede verdaderamente conside- 81 /bid., pág. 446. embargo, Pateman cree que, para
ginen y educadores que enseñen sus rarse un filósofo; desde luego, no Ibid„ pág. 462. que ello ocurra, es necesario desarro-
virtudes a la mayoría de profanos. desde un punto de vista sustancial,
llar una teoría política verdaderamen-
Por tanto, como las utopías se alcan- porque muchas de sus ideas quedan
te general, y no solo una que, de facto
zan a través de la escuela, son espe- sin examinar, ni desde un punto de VÉASE TAMBIÉN EN ESTE LIBRO o de fu re, descalifique injustificable-
cíficas de las sociedades basadas en vista formal, porque era un médico
mente a ciertas categorías de perso-
las ideas de los especialistas para la del siglo xtmt. Le Doeuff ha mostrado
Bachelard, Irigaray, Kristeva, Pateman. nas para ser sujetos políticos, descali-
escuela. Si Bachelard consideraba el camino en sus comentarios sobre
ficación que, desde luego, sufren las
que la utopía académica era una for- Descartes, Kant, Rousseau y Sartre, y
mujeres, al menos hasta la aparición
ma entre otras, Le Doeuff afirma que ha entrado en un terreno nuevo. La
PRINCIPALES OBRAS DE LE DOEUFF del movimiento feminista
la utopía es esencialmente académi- cuestión es ir más allá —mucho más
Carole Pateman nació en Sussex,
ca, esencialmente una sociedad que allá— para que la filosofía permanez-
•Women and Philosophy., Radical Phi- Inglaterra, en 1940. Obtuvo una beca
existe para la escuela. Esta situación ca abierta.
losophy, 17 (1977). para asistir a un colegio de segunda
L'Imaginaire pbilosophique, París, Payot, enseñanza, pero dejó la escuela á los
1980. dieciséis años para trabajar como ofi-

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PATEMAN
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sobre todo, se considera que la esfera hombres libres y universales y las


cinista. En 1963 entró en el Ruskin tan libres en el contrato como lo eran doméstica es el terreno privado de las mujeres concretas y naturales (y, por
College y después acudió al Lady en estado natural —así lo sugiere
IVIargaret Hall de la Universidad de mujeres, porque está más o menos de- tanto, no libres). Una vez más, Pate-
Rousseau— corno si su pérdida de li- finida por el predominio de la repro- man señala que la teoría política sólo
Oxford, donde estudió polirica, filo- bertad se ve compensada, al menos, ducción biológica y la maternidad, los admite el estudio de partes de los
sofía y economía, y completó un doc- por la seguridad que reciben de un
lazos emocionales y las relaciones de textos del canon: los fragmentos que
. torado en teoría política. En 1970, estado enérgico —como aseguraba
mientras era aún estudiante de doc- parentesco; en resumen, es la esfera se ocupan de la diferencia sexual o la
Hobbes—, Pateman cree que falta
del cuerpo y los intereses concretos. relación entre las esferas pública y
torado, Pateman publicó su primer li- una explicación profunda para la au- En cambio, la esfera pública es la es- privada quedan excluidos. El modelo
bro de teoría política, Participation toridad política basada en el consen- fera de la razón y la libertad universal, de política que se sigue es el de una
and Democratic Dieory. En 1972 fue timiento. Y, si faltan las condiciones la autonomía y la creatividad, el ámbi- versión idealizada de la polis griega,
nombrada profesora de teoría políti- de consentimiento, la idea de los su- to de la educación y el debate racio- en la que la política está liberada del
. ca en la Universidad de Sidney. Des- jetos libres bajo la ley resulta sospe-
pués de ser nombrada profesora ad- nal. Dado que las mujeres están suje- ámbito (privado) de la necesidad. Del
chosa., A juicio de Pateman, cuando tas a sus funciones biológicas, muy mismo modo, la teoría actual ignora
. junta, en 1990 la designaron para la llega la oportunidad de preguntar por
cátedra de ciencia política en la uni- qué un individuo debe obedecer la
relacionadas con la reproducción, y las pruebas empíricas relacionadas
versidad de California. dado que, en general, están vincula- con las mujeres en la vida social y
ley (es decir, cuando se investiga la das a la naturaleza, su incorporación a política y tiende a repetir las lecturas
Un aspecto esencial de la teoría de base de legitimidad de la ley), la teo- la esfera pública resulta muy proble- tradicionales de los textos canónicos.
la democracia moderna en Pateman ría democrática liberal no tiene verda- mática. El feminismo, o los críticos de la teo-
es el que se basa en una relectura de dera respuesta. Todo lo que puede ría liberal que afirman que algunas
los teóricos clásicos de la democracia Para Rousseau, por ejemplo, la
decir es que el individuo libre acepta existencia de mujeres en la esfera personas quedan sistemáticamente
liberal, como Hobbes, Locke, Rous- voluntariamente el principio del go-
pública no sólo es antinatural en su excluidas del proceso político, no
seau y Mili. En especial, dos cuestio- bierno representativo Pero Pateman
nes han absorbido su interés, La pri-
sentido más amplio, sino que incluso parecen suscitar ningún problema de
afirma que es necesario hallar una principio. Por el contrario, la teoría
mera se centra en torno al problema respuesta a la pregunta clave de constituye un peligro para el funcio-
de la obligación política legítima, y la namiento ordenado de la sociedad. política asegura que, en principio
cómo y por qué cualquier individuo
Las mujeres son incapaces de subli- —de jure—, todos los individuos
segunda, en la naturaleza de la socie- libre e Igual puede ser legítimamente
dad política, e incluye el estudio de mar sus pasiones y deseos naturales pueden incluirse en el estado liberal;
gobernado por cualquier otro'.
y, por tanto, no tienen sentido de la las desigualdades existentes lo son
la importancia que tiene la diferencia Mientras examinaba el concepto de justicia; de modo que siempre prefe- sólo de facto y, por tanto, rectifica-
entre las esferas pública y privada en obligación política, Pateman empezó a bles. Sin embargo, para Pateman, •el
la sociedad moderna. rirán apoyar y proteger a sus parien-
conocer de qué forma problemática se tes y amigos antes que aceptar el feminismo no se limita a añadir,
Dado que el punto de partida de definía en la teoría liberal la propia como se supone frecuentemente, al-
principio de igualdad ante la ley.
la teoría política clásica (como decía naturaleza de la esfera política. No Como consecuencia, Pateman puede guna cosa a las teorías y los modos
Marx) es el individuo aislado en un sólo la existencia de una jerarquía de demostrar que el individuo abstracto, de argumentación existentes. Al con-
estado de naturaleza, es precisó abor- autoridad fuerza la credibilidad de la
dar el problema de la legitimidad de libre e igual de la teoría democrática trario, el feminismo desafía la cons-
hipótesis de los .individuos libres e
la autoridad. Si el individuo es la liberal es, en realidad, un hombre. trucción patriarcal de la teoría políti-
iguales., sino que puede pensarse que Incluso teóricos contemporáneos de ca moderna- 3.
esencia de la sociedad política, ¿cómo el hecho de que lo político se haya la justicia como John Rawls han se- Los mitos sobre el origen de la so-
se vio impulsado a dejar la libertad definido, en gran medida, con arreglo ciedad política (incluidas las versiones
del estado natural para incorporarse guido hablando del individuo abs-
a la esfera pública —o sociedad civil— del contrato social) creen que las mu-
a la sociedad y someterse a las leyes? tracto sin abordar el problema de
tiene repercusiones decididamente cómo evitar la vinculación de las mu- jeres no son capaces de trascender su
La respuesta más o menos mítica — si negativas sobre los derechos políticos
jeres a la naturaleza. En otras pala- naturaleza. O, si la trascienden, sólo
no fantasiosa— ha sido que, como es de las mujeres. Así, a pesar de toda la puede ser con ayuda de un hombre.
bras, toda teoría rigurosa de la justi-
racional (es decir, sabe lo que le in- palabrería sobre los individuos que cia necesita explicar cómo se puede Tanto Freud corno Rousseau, a juicio
teresa), el individuo consiente formar abandonan el estado de naturaleza de Pateman, consideran que la anato-
incluir también a las mujeres en una
un pacto casi legal con sus iguales y para incorporarse a la sociedad, la na- sociedad libre y justa. mía es el destino de las mujeres. Los
. ese pacto, o contrato social, se con- turaleza sigue siendo evidente, para- La teoría política actual está, pues, mitos que apoyan Freud y Rousseau
vierte en la base de la sociedad. Tan- dójicamente, en la esfera doméstica o (la horda primitiva, en la que los
, empeñada en la oposición entre los
to si los hombres son, en definitiva, de lo privado. Siguiendo a Rousseau,
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hermanos forman una sociedad des- nueva teoría de la política del cuer- no el de la familia, como ha sido en no se limita a tener una base lógica,
pués de matar al padre, en el caso de po, que sea una auténtica teoría ge- el pasado. Por tanto, una teoría ver- sino también empírica, algo que equi-
Freud, y el lugar natural de las muje- neral. El objetivo de dicha teoría se- daderamente general de la sociedad valdría al sujeto en el psicoanálisis.
res en el hogar, en el caso de Rous- ría garantizar la incorporación de la política tendrá que abordar el proble- Por último, en tercer lugar, la in-
seau) tienden a confirmar que el vín- individualidad masculina y femenina ma de la naturaleza de la dicotomía tensa atención de Pateman al marco
culo social del que se habla, si no el a la vida política. entre público y privado. de la teoría liberal clásica hace difí-
que se pone en práctica, es un víncu- Dado el problema de fa obligación Pese a lo innovado' : del análisis cil —a pesar de sus intenciones— no
lo social . frarerno. Este vínculo es el en la teoría liberal y la tendencia ma- que hace Pateman de la sociedad buscar una solución a la exclusión
que sostiene la esfera pública, la es- chista de la esfera pública, es imposi- Política, parece quedarse bloqueada de las mujeres de la plena participa-
fera de la libertad, en términos forma- ble estar seguros del significado que por una sede de limitaciones. La pri- ción política en términos que no
les. El ámbito privado —el mundo tiene el consentimiento en general y, mera es que habla claramente dentro sean los de la ciudadanía y la esfera
conyugal en el que residen las muje- en particular, con respecto a las mu- de la tradición de la teoría democrá- pública. El cuerpo sigue pareciendo
res— está totalmente separado de la jeres. No se pude decir que ellas ha- tica liberal que pretende transformar. problemático. El carácter excesiva-
esfera pública. De hecho, afirma Pa- yan consentido en la situación actual; Los conceptos de su análisis (público- mente ideal de la esfera pública, con
teman, la transición de la tradición a por consiguiente, no puede decirse privado, libertad, ciudadano, etc.) su énfasis en la universalidad, hace
la modernidad, tal como la entiende que se haya satisfecho plenamente el proceden de esa tradición. Es ésta la que resulte apropiado un enfoque
la teoría política, puede equipararse contrato social. Como máximo, está que establece, por tanto, los términos mucho más materialista, sobre todo
a la oposición entre las esferas públi- en proceso de elaboración. Igualmen- del debate. La pregunta es: ¿Cómo cuando pensadoras como Julia Kris-
ca y privada. Así, la •política del cuer- te, respecto al contrato matrimonial, puede transformarse por completo teva y Luce Irigaray ya han avanza-
po civil se modela con arreglo a la no se puede decir que las mujeres esta tradición desde dentro? No es do en dicha dirección. Como ha afir-
imagen del 'individuo" varón, que se hayan consentido entrar a formar par- que una forma de reformismo radical, mado Kristeva al usar otro aspecto
constituye a través de la separación te de una relación de poder desigual; sea totalmente imposible: es que Pa- de Freucli, es inevitable y necesario
entre la sociedad civil y las mujeres). la idea de que se pueda consentir la teman no ofrece indicios de cómo cierto grado de extranjería en el Es-
De modo que la concesión de ciuda- violación o la violencia vacía de con- puede hacerse. tado moderno. Esa extranjería no
danía a las mujeres suscita el proble- tenido cualquier contrato, si es que el En segundo lugar, el tono de la cri- procede simplemente del exterior,
ma de si, como ciudadanas —como matrimonio es realmente un contrato tica de Pateman se basa en el concep- sino que es lo que constituye el su-
miembros de la esfera pública—, las legal. Sin embargo, hasta hace poco to de individuo abstracto, aunque ese jeto cosmopolita del final del si-
mujeres deben adoptar una identidad tiempo, ese contrato de matrimonio individuo sea masculino. Nos encon- glo KK. Es una extranjería que puede
masculina y hablar el lenguaje de la era un acuerdo sólo de nombre que, tramos aquí con estas preguntas im- ser la base para un nuevo fortale-
razón masculina. La opinión de Pare- de hecho, permitía que el marido plícitas: ¿Por qué debe permitir un cimiento de la herencia política
man es que, desde luego, la única for- dominara a la esposa en una relación individuo que le gobiernen? ¿Por qué occidental del siglo Kuhl.
ma de que se permita a las mujeres desigual, porque, con arreglo a la, ley, debe una mujer no ser capaz de ob-
en la esfera pública es que imiten a marido y mujer tenían la misma iden- tener los mismos derechos en el Es-
los hombres; porque no pueden ser tidad legal. En la esfera privada se tado? Estas preguntas presuponen el NOTAS
diferentes y, al mismo tiempo, ser permitía, pues, paradójicamente, que uso de una noción de identidad que
ciudadanas. Es decir, públicamente, la el derecho derivara del poder (poten- se está atacando. También presupo-
' darole Patentan, 77.1ePmbleni OfPo-
diferencia entre hombres y mujeres cial o real). ne que el individuo, si es idéntico a litical Obligation: A Critique of Liberal
es la misma que la que parece haber Las feministas, insiste Pateman, sí mismo, es capaz de mantener ale- neo°, (1979), Cambridge, Poliry Press,
entre unos hombres y otros. En el niegan que la forma actual de la di- jada la no identidad (la diferencia). La Blackwell, 1985, pág. 13. La cursiva es
lenguaje de Irigaray o Levinas (aun- cotomía entre privado y público sea experiencia multicultural de las sacie- de Pateman.
que Pateman no se refiere a ellos), las natural. Pero el problema es saber dade.s contemporáneas agudiza aún Carole Pateman, Tbe Disorder of
mujeres en la vida pública quedan cómo puede retenerse, siquiera, una más estas cuestiones. Porque, si la Women, Cambridge, Polity Press en aso-
verdaderamente reducidas al orden esfera privada y no sometida a la ley ciación con Basil Blackwell, 1989, pági-
teoría del contrato social produce la
de lo Mismo. Especialmente, deben (excepto en casos extremos) en una na 14.
identidad de la colectividad al elevar
renunciar a sus cuerpos. La única for- pág. 46.
sociedad plenamente moderna y de- el la (individuo) al poder de un Uno- Véase Julia Kristeva, Strangers (o
ma de avanzar hacia una solución de mocrática. En el mejor de los casos, sotros• homogéneo, la experiencia Ourselves, trad. de Leon S. Roudiez,
esta dificultad, recomienda Pateman, se puede maginar» que la esfera pri- multicultural representa un desafío Nueva York, Columbia Universiry Press,
es empezar de cero y elaborar una vada será el ámbito del individuo y porque propone una -identidad- que 1991.

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PATEMAN

VÉASE TAMBIÉN EN ESTE LIBRO The Disorderof Wonzen: Denzocracy, Ee-


minism anct Political Theory, Cam-
lrigaray, Kristeva. bridge, Polity Press en asociación con
Basil Blachvell, 1989.

PRINCIPALES OBRAS DE PATEMAN

Participation and Denzocratic 77jeory OTRAS LECTURAS


Cambridge, Cambridge University
Press, 1970. DE," Mitchell. •Pateman's dilemma:
77.7e Problem of Political Obligation: A WOmen and citízenship., Theory and
Critique of liberal Theory (1979), Sociely, 21, 1 (febrero de 1992), pági-
Cambridge, Polity Press en asociación nas 121-130.
con Basil BlackWell, 1985. YEATNIAN, Anna, 'Carde Pateman's The
77)e Sexual Contract, Cambridge, Poliry Sexual Conrract., Thesis Eleven, 76 Postrnancismo
Press, 1988. (1990), págs. 151-160.

El postmarxismo pone en tela de juicio el carácter reductor y an-


tidemocrático del marxismo, así como de cualquier movimiento po-
lítico que explica los cambios de la historia en función del papel de
una clase específica o un medio privilegiado. Él postmarxismo acep-
ta la inspiración procedente del compromiso político de Marx, pero
rechaza su énfasis en la economía como determinante o en la idea
de que existe una clase universal —el proletariado— que guiará el
camino hacia la era del socialismo. Los postmarxistas defienden la
democracia radical. En la obra de Flannah Arendt, el tema de la de-
mocracia se explora en relación con la libertad, la comunidad y los
derechos humanos.

222 223
Theodor Adorno rich en 1934, y Adorno fue a Ingla-
terra.
Theodor Wiesengrund Adorno na- En 1938, Adorno volvió al Institu-
ció en 1903. Según Martín Jay, quizá to, que ahora se encontraba en Nue-
abandonó el Wiesengrund cuando va York, y trabajó en el proyecto de
entró en el Instituto de Investigado- investigaciones sobre radio de Prince-
nes Sociales de Nueva York, en 1938, ton, dirigido por Paul Lazarsfeld. Du-
porque sonaba judío. Entre 1918 rante su estancia en Norteamérica tra-
y 1919, a los quince años, Adorno es- bajó en varios proyectos distintos,
tudió com Siegfried Kracauer. Des- incluido un trabajo sobre Doktor
pués de completar su enseñanza se- Faustus con Thomas Mann. En unión
cundara, asistió a la Universidad de de. Mak Horkheimer, Adorno emitió
Francfort, donde estudió filosofía, so- una nota pesimista sobre la razón
ciología, psicología y música. Reci- ilustrada en La dialéctica de la Ilus-
bió el doctorado en filosofía en 1924. tración, publicada por primera vez
En 1925, Adorno fue a Viena para es- en 1947. En 1953, a los cincuenta
tudiar composición con Alban Berg y, años, Adorno dejó Estados Unidos y
al mismo tiempo, empezó a publicar regresó a Francfort para asumir un
artículos sobre música, especialmen- puesto en el Instituto y, en 1959,
te sobre la obra de Schónberg. Tras pasó a ser su director tras la jubila-
desilusionarse con la •irracionalidad. ción de Horkheirner. Al terminar la
del círculo de Viena, regresó a Franc- década siguiente, Adnrno se vio en-
fort en 1926 e inició una Habilita- vuelto en un conflicto con los alum-
tionschrift sobre Kant y Freud, titula- nos que ocupaban las oficinas del
da «El concepto del inconsciente en la Instituto. Murió en 1969 en Suiza,
teoría trascendental de la mente.. La mientras escribía la que muchos con-
tesis fue rechazada, pero en 1931 ter- sideran su obra más importante, Teo-
minó otra: Kierkegaard: La construc- ría estérica.
ción de lo estético, que se publicó El debate actual' sobre la obra de
en 1933, el mismo día del ascenso al Adorno se ha centrado, en parte, en
poder de Hitler. Aceptada su tesis, saber hasta qué punto se adelanta a
Adorno se incorporó al Instituto de aspectos del pensamiento postmoder-
Investigaciones Sociales de Francfort, no y postestructuralista. Se ha presta-
después de que nombraran director a do atención especial, a menudo, a la
Max Horkheimer. Para escapar del crítica que hace Adorno del «pensa-
nazismo, el Instituto se trasladó a Zú- miento de la identidad• en su Dialéc-

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ADORNO ADORNO

tica negativa1. Aunque es necesario dad capitalista moderna. Para Ador- capié en el papel de la conciencia sita un sentido de su propia impoten:
comprender lo que quiere decir aquí, no, el mundo de las apariencias, que los pensadores franceses equipa- cia ante la materialidad del mundo
deberíamos recordar también una se- corno para Platón, es un mundo de rables, corno Lacan o Foucault. Aun- para poder seguir siendo creativa y
rie de elementos que apartan clara- imágenes y meras ficciones, un mun- que pasó cierto tiempo desarrollando abierta a lo nuevo. La materialidad
mente su proyecto de los que inspiró "do de relativismo y, sobre todo, de formas de escapar a una visión reduc- del mundo es el lado inexpresable dé
el pensamiento nominalmente francés. cosiftcación. En esta lectura, cosifica- tora del individuo .socializado., y la filosofía. El carácter esencial de la
Empecemos por la ciencia- Si Julia ción y mercancías, en el mundo capi- aunque su posición es compleja en filosofía consiste en ser demasiado
Kristeva ha dicho que la semiótica de talista, son prácticamente idénticas; otros aspectos, la concepción del in- consciente de las limitaciones de los
inspiración estructuralista debe apo- las mercancías asumen vida propia consciente que tiene Adorno es muy conceptos con los que trabaja. -El •
yarse en los avances de la física cuán- independientemente de sus condicio- sencilla. Para empezar, el inconscien- desencanto del concepto es el antído-
tica, y si Jacques Derrida cita directa- nes de producción. Las mercancías te (como la obra de Freud en gene- to de la filosofía.". En efecto, una fi-
mente a Gódel al formular su
Uocultan la verdad de su carácter ilu- ral) es objeto de escasa elaboración losofía verdaderamente creativa
concepto filosófico de «indecibilidad.l socio. Sirven para estimular da con- en su filosofía. En una de las pocas —que, para Adorno, es la filosofía
-es decir, si bien la semiótica y el ciencia cosificada. que es .un mo- ocasiones en las que se refiere explí- busca aquellas cosas que representan
postestructuralismo franceses han for- mento en la totalidad del mundo citamente a él, en Dialéctica negati- un desafío para el propio pensamien-
jado vínculos entre las ciencias natu- cosificado. 6 . va, explica: to. Dichas cosas pueden designarse
rales y las ciencias humanas—, Ador- Además, a diferencia del pensa- mediante los términos «heterogenei-
no, como otros miembros de la Cuando la doctrina del incons-
miento francés reciente, la ideología dad« o, con más precisión, •no iden-
ciente reduce al individuo a un pe-
)!Escuela de Francfort, creía que la sigue cumpliendo un Papel importan- tidad».
queño número de constantes y con-
ciencia moderna era inherentemente te en los análisis que hace Adorno de A diferencia del sistema de Hegel,) .
flictos recurrentes, revela un
• positivista. Como pretendía elaborar las circunstancias sociales, incluso en el que el elemento heterogéneo
desinterés misántropo por el yo de-
un pensamiento dialéctico que no aunque, como muestra en Prisma?, sarrollado de forma concreta; y, sin sería reclamado dialécticamente, me-
«positivizara. de ninguna forma, trata- el análisis de la ideología no pueda embargo, recuerda al yo la debilidad diante el principio de la «negación de
ba la ciencia en general con las máxi- ya basarse en el método «trascenden- de sus definiciones en comparación la negación«, Adorno anuncia el prin-
mas sospechas, incluso desprecio. La te., en el que el crítico asegura estar con las del id y, por tanto, su carác- cipio de la .dialéctica negativa», un
ciencia, en fa filosofía de Adorno, se- alejado del medio que analiza. La di- ter tenue y efímero'''.
principio que niega todo tipo de afir-
ría incluso la forma de pensamiento ferencia entre •esencia. y •apariencia. Aunque «debilidad., •tenue. y •efí- mación o pOsitividad, un principio de
a la que más se oponía, dado que, comprende el efecto ideológico de la mero. indican un alejamiento de la negatividad absoluta. Por tanto, la dia-
• corno el positivismo en general, se cosificación. Porque, detrás de fas primacía de la conciencia, existe poca léctica negativa es la no identida cr.
considera absolutamente dependien- apariencias cosificadas, reside la ver- evidencia de que el inconsciente sea Este elemento clave del pensamiento
te de la lógica de la identidad. La fi- dad de la «fantasmagoría, de la pro- un obstáculo real a la filosofía o el de Adorno tiene varios sinónimos ade-
losofía se ha permitido estar aterrori- ducción de mercancías. Esta verdad pensamiento. más de los ya mencionados: «contra-
zada por la ciencia, asegura'. Pero la C5 que los seres humanos, pese a lo En otras palabras, Adorno parece dicción., -disonancia-, «libertad., .lo di-
verdad filosófica no equivale a la ver- que puedan creer, no son libres; po- estar aún más apegado a una lógica vergente. y -lo inexpresable.. Pese a la
dad científica, y la filosofía no debe seen formas de pensamiento y acción de la identidad de lo que sugieren importancia de la no identidad, Ador-
negarlo. En resumen, •la filosofía no restrictivas, impuestas por las condi- algunos de sus lectores más recientes. no afirma también que ningún pensa-
es ni una ciencia ni la "poesía medi- iones sociales existentes de produc- Por otro lado, también es cierto que miento puede expresarla realmente:
tativa" a la que la degradarían los po- ción capitalista; viven en «la prisión al sus aspiraciones se dirigen hacia un porque «pensar es identifloar.. El pen-
sitivistas en un oxímoron estúpido.'. aire libre en la que se está convirtien- pensamiento que no esté sola y total- samientne identidad sólo puede
En segundo lugar, Adorno rnantie- Jdo el mundo:. La gente se adapta a mente en deuda con la lógica de la concebir una contradicción pura, es

i ne —aunque mas en sus obras de crí-


tica cultural que en su filosofía— la
I distinción entre •esencia» y »apañen-
; cia. (una distinción rechazada por el
ales condiciones, en lugar de opo-
nerse a ellas. Por consiguiente, la li-
bertad de la que habla Simmel en el
mismo contexto es un mito. •En un
identidad. Así, cuando empieza a re-
examinar la naturaleza de la filosofía
en Dialéctica negativa, Adorno hace
decir, como otra identidad. Entonces,
¿dónde y cómo deja el pensamiento
de la no identidad su huella en el pen-
dos afirmaciones esenciales: primera, samiento? En otras palabras, ¿cuál es la
1 pensamiento francés contemporáneo, estado sin libertad —afirma Ador- que la filosofía -sigue viviendo, tras el,} base material de la dialéctica negativa
' de inspiración postestructuralista), no—, nadie tiene, por supuesto, una fracaso del intento marxista de des- en el pensamiento?
con el fin de rehusar el carácter su- conciencia liberada»?. acreditarla por ser demasiado idealis- En primer lugar, el aspecto mate-
perficial de la apariencia en la socie- Por último, Adorno hace más hin- ta; y segundo, que la filosofía nece rial no es la filosofía corno poesía o

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ADORNO ADORNO

como arre. La filosofía como arre A través de una sorprendente serie de cambio. La subjetividad se reduce dad) de la vida social como por los
equivale a la eliminación de la filoso- de vuelcos, Adorno convierte las limi- a la condición de -mero objeto. por productos superiores y más espiritua-
fía. Ya ésta tampoco se le permite, a taciones potenciales de la filosofía en ese valor de cambio. Hay en Adorno, les de la vanguardia. Ambos pueden
juicio de Adorno, ceder al impulso un gesto filosófico cuyas connotado- pues, un deseo de conservar la santi- tener el distanciamiento suficiente
estético. Ello no impide experimentar nes sólo estamos, quizá, empezando dad, corno si dijéramos, de la subjeti- como para contrarrestar la inmediatez
en la presentación de nuevos concep- a apreciar ahora. .En principio —con- vidad encarnada en el objeto artístico efímera del placer de consumo. Qui-
tos, desde luego, un proceso que firma Adorno—, la filosofía puede contra la embestida del mercado en zá lo .inferion aún más que lo 'supe-
puede conducir a la poesía, del mis- siempre ir a la deriva, que es la única el que el valor se equipara al precio. rior.; porque, en definitiva, el arre .su-
mo modo que el arte más vanguardis- razón por la que puede ir hacia ade- Mediante un estilo paratáctico (la perior. depende del juicio de la critica
ta puede ser una conceptualización lante.u. Por consiguiente, la filosofía yuxtaposición de afirmaciones en la sobre su naturaleza y su calidad, se
inmanente. Sin embargo, la filosofia es una dialéctica negativa en el senti- que está explícito el nexo entre am- incorpora al juego de conceptos. En
debe 'vaciar su esteticismo.. .Su afini- do más enérgico; es precisamente la bas) y otros mecanismos, la presen- otras palabras, el arte de vanguardia
dad con el arte no le da el derecho no identidad que intenta conceptua- tación que hace Adorno de su teoría y la filosofía se hacen interdepen-
de aprovecharse del arte., y aquí lizar. La función del lenguaje se vuel- de la estética en Teoría estética parti- dientes, sobre todo —si se sostiene
Adorno continúa el argumento en el ve crucial, porque el lenguaje equiva- cipa en un esfuerzo por superar la una analogía con la Dialéctica nega-
tono por el que se ha hecho famoso: le a la presentación de la 'falta de reducción del arte y el pensamiento tiva— en la medida en que el objeto
sobre todo, no con arreglo a las libertad, de la filosofía como imposi- a la industria de la cultura. A diferen- artístico se hace inseparable de su
intuiciones que los bárbaros conside- bilidad de conceptualizar la no iden- cia de sus colegas franceses, que Cien- materialidad (no identidad). Captar la
ran prerrogativas del arte-u. Todo lo tidad. Si el lenguaje dejara de ser im- den a comprometerse con el valor de fuerza y significación del arte de van-
que la filosofía puede hacer en tales portante para la filosofía, ésta •se cambio para subvertirlo desde den- guardia requiere el uso de conceptos
circunstancias es seguir como filoso- parecería a la ciencia.. tro, Adorno elogia el arte y la filoso- que nunca pueden hacer justicia a
fía. Darse por vencida ante la imposi- Las declaraciones de Adorno en fía difíciles; porque, a su juicio, sólo una obra; porque la materialidad de
bilidad de expresar la no identidad Dialéctica negativa necesitan leerse a través de la lucha para entender es la obra constituye su carácter único,
implicaría que la filosofía había mal- conjuntamente con su trabajo sobre posible otorgar al valor sus derechos y esto es un reto para la conceptuali-
interpretado el carácter heterogéneo estética y crítica literaria. A este res- genuinos. El modernismo, como mo- zación. Como ha subrayado Peter Os-
y disonante de la no identidad; en pecto, Mínima Moralia, escrita du- vimiento que encarna la renovación borne, •de esta crítica del pensamien-
otras palabras, ceder en este sentido rante la Segunda Guerra Mundial en del valor, sería entonces esencialmen- to de la identidad es de donde surge
es malinterpretar que la no identidad estilo aforístico, se opone, como Kier- te la vanguardia en la que la obra de la concepción básica de experiencia
es impura, no es, ni siquiera, una kegaard (sobre quien también escri- arte —.hasta la más sencilla.— se estética en Adorno, como experiencia
contradicción pura. .Los pensamien- bió Adorno), a la teoría dialéctica de convierte en un complejo tour de for- de lo "no idéntico"•u.
tos que pretenden concebir lo inex- Hegel que .al aborrecer todo lo aisla- cta. Esta estrategia vanguardista es el En conjunto, la Teoría estética de
presable abandonando las ideas falsi- do, no puede admitir los aforismos.' 5. punto de resistencia a la reapropia- Adorno lucha por alcanzar un com-
fican ese inexpresable.' 3. La no En sus reflexiones sobre diversos te- ción por parte del sistema de mercado. promiso entre el arte de vanguardia,
identidad es probablemente el telas mas, Adorno intenta —prácticamente, Algunos autores (como Lyotard) en peligro de ser .normalizado• y co-
negativo y oculto de la filosofía. Por podemos suponer— hacer una afir- han llegado a juzgar el enfoque de sificado en la sociedad capitalista, y
tanto, fue un error de Marx concebir mación filosófica que asuma el lugar Adorno como un último intento de- la autonomía radical esencial de los
el fin de la filosofía precisamente en de la heterogeneidad de la experien- sesperado de mantener límites entre objetos artísticos que, como tales, es-
esos términos. cia humana. el arte superior y la cultura popular tán en especial desajuste con las con-
El otro sentido en el que la filoso- Igualmente, la atracción de Ador- precisamente cuando la base lógica y diciones sociales (incluida la crítica)
tia podría llegar a su fin es si asumie- no hacia la música y el arte de van- social de dicho límite se está hacien- que les permite hablar. Sin embargo,
ra la forma (como en Hegel) del co- guardia, especialmente la música de do insostenible en virtud de los valo- la cuestión tiene otro aspecto, que tal
nocimiento Absoluto. Entonces todos Schónberg, Webern y Berg, estaba res políticos (por ejemplo, la oposi- vez Adorno olvida. Se trata de que el
los problemas a los que se enfrenta causada, en gran medida, por el de- ción al marxismo convencional) a los propio instrumento de conceptualiza-
la filosofía —especialmente su rela- seo de ver cómo las obras vanguar- que se adhería el propio Adorno. ción puede empobrecerse por el re-
ción con el mundo material— se re- distas desafiaban a los efectos homo- Además, partiendo del trabajo de Ba- chazo continuo de su valor y su efi-
solverían mediante el principio afir- geneizadores de la comercialización taille, es evidente que el valor de cacia. Si el detalle del arte que desafía
mativo de la negación de la negación, (léase cosificación) del arte, que-re- cambio puede subvertirse tanto por al sistema porque desafía a la con-
que produce una afirmación. ducía los objetos artísticos a su valor los elementos •inferiores. (obsceni- ceptualización es fundamental, la
228 229
ARENI)T ARE NDT

conceptualización también puede VÉASE TAMBIÉN EN ESTE LIBRO Mostró un interés apasionado por filis contraída, al parecer, antes de su
serlo. En otras palabras, lo que Ador- analizar la naturaleza de la política y matrimonio. Ese mismo año, 1913,
no no reconoce inmediatamente es Beniamin. Derrida. Habermas. la sociedad en la »era moderna' a la también murió su abuelo paterno,
que cierto grado de filosofía de la luz de hechos clave del •mundo mo- que había sido un segundo padre
identidad es tan importante como la dernoi: el mundo de los viajes espa- para ella. A través de su madre, Han-
no identidad material. ciales, la teoría de la incertidumbre, nah se familiarizó con los aconte-
PRINCIPALES OBRAS DE ADORNO
el mundo del Holocausto y los cam- cimientos políticos de la época, inclu-
pos de exterminio de Stalin. Al hablar yendo la historia de la facción espar-'•
NOTAS La dialéctica de la Ilustración (1947) de 'era moderna. Arendt quiere decir taquista del Partido Socialdemócrata y
(con Max Horkheimer), Madrid, Tro- la éra de los grandes descubrimientos sus líderes, Rosa Luxemburg y Karl
' Véase, por ejemplo, los capítulos de rta, 1994. Liebnecht, que fueron asesinados tras
geográficos y científicos -empezan-
Peter Dews y Peter Osborne en Andrew Mínima Aloralia (1951), Madrid, Taurus,
do con Colón y Copérnico-- y el pe- inspirar la revuelta de los trabajado-
Benjamin (ed.), The Problems °Moder - 1987.
Dialéctica negativa (1966), Madrid, Tau- nodo del siglo X3C que supuso el fin res de 1919.
nity: Adorno and Benjamín, Londres,
rus, 1992. de dicha era. Al principio de su gran En 1924, Arendt fue a la Universi-
Roudedge, 1991.
i Theodor W. Adomo, Negative Día - Teoría estética (1970), Madrid, Taurus, obra, La condición humana, Arendt dad de Marburgo para estudiar filoso-
fectiks, trad. de E. B. A.shton, Londres, 1992. escribe que •políticamente, el mundo fía Con Martin Heidegger, con quien
Routledge, 1973 (reimpr. en bolsillo Reacción y progreso, Barcelona, Tus- moderno, en el que hoy 'vivimos, na- mantuvo una relación amorosa. La
1990). quets, 1984. ció con las primeras explosiones ató- influencia de Heidegger en la obra de
, Véase Jacques Derrida, Dissenzina - Ternzinología filosófica, 2 vos., Madrid, micas.'. Aunque no se atuvo realmen- Arendt se puede ver, no sólo en la
:ion, trad. de Barbara Johnson, Chicago, Taurus, 1987 y 1991 te a su propósito de centrarse más en importancia que da a los griegos, sino
University of Chicago Press, 1981, pági- Tres estudios sobre Hegel, Madrid, Tau-
la era moderna que en el mundo mo- también en el método etimológico
na 219. (Trad. esp.: Madrid, Fundamen- rus, 1991.
derno, es cierto que sus obras más que emplea con frecuencia para esta-
tos, 1975.) Actualidad de la filosofía, Barcelona,
Paidó's, 1992. sistemáticas y respetadas - Los oríge- blecer el significado exacto de con-
' Adorno, Negative Dialectics, pági -
na 109. La ideología como lenguaje, Madrid, ne s del totalitarismo, La condición ceptos clave corno iesfuerzo», por
5 Ibid. Taurus, 1992. humana y Sobre la revolución- in- ejemplo. Tras la ruptura de su rela-
6 Adorno, Negative Dialectics, pági - Sobre Walter Benjamín, Madrid, Cate- cluyen siempre referencias históricas ción con Heidegger en 1925, Arendt
na 95. dra, 1995. importantes al periodo 1600-1900, pasó a ser discípula del filósofo de la
' Theodor Adorno, Prisms, trad. de además de a la Grecia y la Roma clá- Existenz Karl faspers. Bajo su super-
Samuel Weber, Cambridge. Mass., MIT sicas. Como veremos, en la obra de visión completó en 1929 su doctora-
Press, 1981, 4. 2 impr. 1988, págs. 30-34. Arendt hay, en particular, dos aspec- do, •El concepto de Irnér én qan
lbíd., pág. 34. OTRAS LECTURAS
tos presentes casi hasta un grado ob- Agustín. Ese mismo año se casó con
I ' Adorno. Negative Dialectici, pági -
sesivo: el de la libertad y la necesi- tirer
ur Stern en París, y más adelan-
I ' na 95. Bucx-Moitss, Susan, The Origins °Mega - dad, y el de la relación de la te, en 1932, empezó a escribir la bio-
' ¡bid., pág. 352. tive Dialectics, Sussex, Harvester
" lbíd., pág. 13. excepción a la norma. El profundo grafía de una mujer judía del si-
Press, 1977.
¡bid., pág. 15. giro que Arendt logra dar a estos te- glo XLX, y figura muy conocida en
JAMESON, FltdeliCk, Late Marxism, or tbe
: I , !bid.. pág. 110. mas de larga tradición -un giro que Berlín, Rahel Vernhagen. Con el as-
Persistence of the Dialectic, Londres,
.Ibid., pág. 14. Verso, 1990. no produce, en ningún sentido, una censo del nazismo en 1933, Arendt y -
" Theodor Adorno, Mininza Moralia, RosE, Gillian, The Melancboly Science, teoría política hegeliana- hace que su marido se vieron obligados a huir a
u-ad. de E. F. N. Jephcott, Londres, Verso, Londres, Macrnilian. 1985. leér su obra resulte atractivo en una París, donde habían conocido a Wal-
1978, 3.' impr. 1985, pág. 16, época en la que todos los idealismos ter Benjamín y otros judíos alemanes
16 Theodor Adorno, Aestbetic 772eoty,
(todas las reflexiones sobre los fines) emigrados. Con la caída de Francia,
trad. de C. Lenhardt, Londres, Routled-
se han puesto en tela de juicio. en 1940, Arendt logró huir a América
ge & Kegan Paul, 1984, pág. 155.
15 Peter Osborne, »Adorno and the
Hannah Arendt nació en 1906 en y establecerse en Nueva York, donde
Hannah Arendt Hannover. A los tres1 -ii5g", 1.r.. )adres enseñó (sobre todo en la Nueva Es-
metaphysics of modernism: The pro- ' ..--- 71
break of a "postmodem" Art., en Andrew r egresaron a la tranquila ciudad bálti- cuela de Investigaciones Sociales)
Benjamin (ed.). 772e Problems of Moder- Hannah Arendt fue una teórica de ca de su niñez, Konigsberg (donde escribió hasta su muerte, en 1975.
nity: Adorno and Benjamin, Londres, la política muy controvertida y que también nació Kant). Cuando Hannah El primer libro importante de Arendt,
Routledge, ed. de boisillo, 1991, pág. 28. demostró gran valentía e inteligencia. tenía siete años, su padre murió de sí- tras la publicación de su tesis -y el

230 231
ARENDT ARENDT

que la hizo famosa y estableció su junto a la lucha contra el ejercicio de Cuando pasa a considerar el Holo- mas: personas completamente ino-
reputación corno estudiosa e intelec- poder arbitrario que ello frecuente- causto y los campos de exterminio centes que, como los judíos, en mu-
tual— fue Los orígenes del totalitaris- mente supone. En efecto, aunque la estalinistas como ejemplos prototípi- chas ocasiones son miembros de la
mo, publicado en 1951. Claramente ley no es buena en sí misma, verse cos de la forma totalitaria de política, comunidad perfectamente integrados.
inspirado por los terribles aconteci- privado de ella es una indignidad tan Arendt indica cómo se privó sistema- Sólo los inocentes, señala Arendt,
mientos del Holocausto, sólo el últi- incalificable que, muchas veces, es ticamente a comunidades enteras de pueden tener su condición jurídica
mo tercio de la primera edición ana- preferible la situación de un criminal, personas —especialmente los ju- borrada por completo; el verdadero
liza directamente el ascenso del porque constituye una condición le- díos— de sus derechos humanos, enemigo del estado es siempre al-
nazismo y el estalinismo. Los dos pri- gal, aunque sea mínima. La pérdida cómo se les privó sistemáticamente guien que posee, al menos, una apa-
meros tercios de la obra perfilan lo de derechos humanos como persona de su humanidad, en pocas palabras. riencia de condición legal. Una vez
que Arendt considera precedentes sin estado equivale, pues, a la pérdi- Por supuesto, la pregunta que se en- más, el régimen totalitario ejerce el
históricos del modo totalitario de da de legalidad, •de todos los dere- cuentra entretejida en todo lo que terror contra una »población comple-
comportamiento político, especial- chos.'. Para Arendt, otra consecuen- está diciendo es; ¿Qué es lo que ocu- tamente sometida»; pero, sobre todo,
mente en la medida en que afectan al cia de la privación de una condición rrió? Lo que está en juego es el abis- aniquila a la persona moral y psico-
pueblo judío como parias históricos. civil no es tanto la pérdida de la li- mo insalvable entre el horror del ge- lógica, de modo que la muerte se
En la segunda parte del libro, Arendt bertad y el derecho de pensar, como nocidio y su representación. Sin vuelve anónima. El Estado totalitario
analiza cómo el imperialismo introdu- la pérdida del derecho a la acción y duda, ese horror se agudiza por el es como una »sociedad secreta a ple-
jo una estructura administrativa en la la opinión, porque la acción y la opi- hecho de que los observadores pos- na luz•, afirma Arendt; utiliza el Esta-
que la eficacia se convirtió, por sí nión son esencialmente compromisos teriores y las víctimas que han sobre- do y la policía secreta en sus activi-
sola —independientemente de los fi- públicos que exigen el reconocimien- vivido podrían verse obligados a re- dades normales; no se apoya más
nes perseguidos—, en el elemento to de los demás seres humanos como conocer que fue consecuencia de un que en el mito que elabora sobre sí
principal, más importante, desde lue- condición sine qua non para su ejer- proyecto humano totalmente perver- mismo. El Estado totalitario está esen-
go, que las vidas y el bienestar de los cicio. Este argumento anuncia el lar- so. Lo que aparece es una sugerencia cialmente basado en la propaganda y
pueblos colonizados. La horrible go estudio y análisis de la acción casi tan oscura .como el propio mal: resulta impenetrable a la realidad
mezcla de racismo y masacre admi- como algo esencialmente político en que los dos genocidios mencionados material. A través de la propaganda
nistrativa se unen en ciertos aspectos el siguiente libro de Arendt, La con- podrían entenderse sencillamente se borra la diferencia entre crimen y
del imperialismo. dición humana (1958). como la maldad definitiva, impulsada virtud, perseguidor y perseguido, rea-
Los pueblos sin estado, demuestra Para resumir, lo que Arendt de- por una especie de heroísmo, perver- lidad y fantasía. Los judíos, destaca
Arendt, plantearon problemas insu- nomina la »calamidad de los que no tido pero, con todo, heroísmo: el he- Arendt, fueron obligados a la cmnpli-
perables a las naciones estado en el tienen derechos» incluye no sólo la roísmo de quienes no se detienen cidad con quienes estaban a cargo de
periodo de entreguerras. Privados de pérdida de derechos humanos espe- ante los peores excesos y, como con- los campos de exterminio.
ciudadanía y, por tanto, de identidad cíficos (el derecho a la libertad, a la secuencia, se destacan ante los de- Numerosos comentaristas han se-
legal, los pueblos sin estado se con- igualdad, a la felicidad, etc.), porque más. No sólo podemos no recordar a ñalado que el coup de gráce de Los
vierten en víctimas posibles de la ac- éstos sólo tienen significado dentro las víctimas, sino que no podemos orígenes del totalitarismo no se en-
ción arbitraria de la policía, acción de una comunidad concreta; sino la olvidar a Hitler. cuentra en el libro, sino en los artícu-
que se sale de los límites de la ley. El pérdida de la ley persa, la comunidad Arendt intenta hacer frente a esta los sobre el proceso a Adolf Eich-
objetivo pasa a ser el orden, y no la per se: »No la pérdida de derechos es- enorme dificultad sin reparos. Y así, mann que Arendt escribió para New
ley. Aquí, Arendt empieza a demos- pecíficos, pues, sino la pérdida de en vez de emitir juicios sobre el na- Yorker en febrero y marzo de 1963, y
trar que un riesgo esencial de lo que una comunidad dispuesta y capaz de zismo o el estalinismo, empieza a posteriormente editados como Eich -
definirá como totalitarismo es su es- garantizar cualquier derecho, ha sido analizar de forma sistemática cómo mann in Jerusalem. Lo que más im-
fuerzo concertado para despojar a sus la calamidad que ha afectado cada funciona el totalitarismo. El totalitaris- presionó a Arendt en el juicio fue la
víctimas de toda apariencia de identi- vez a mayor número de personas.?. mo no equivale al despotismo, en el diferencia entre la imagen de Eich-
dad, tanto civil como psicológica. Por Los derechos humanos abstractos, que el gobernante intenta obligar a la mann, el monstruo que odiaba a los
consiguiente, sugiere, más importan- reconoce Arendt de acuerdo con Ed- comunidad a que se adapte a su ima- judíos, y la persona real, inocua, un
te que glorificar los derechos de las mund Burke, los derechos que exis- gen: en ese caso, el déspota es quien hombre sin energía ni emoción, una
personas dentro de un estado legal- ten presuntamente con independen- convierte a todos los demás en un mera pieza en b maquinaria nazi y
mente constituido es el esfuerzo para cia de cualquier comunidad, no son enemigo real o potencial. El totalita- de imaginación demasiado limitada
salvarlas de ser anomalías legales, derechos, en realidad. rismo no tiene enemigos, tiene vícti- para estar otra cosa que absolutamen-
232 233
...i
ARENDT ARENDT

te conforme con su condición ordina- la satisfacción de las necesidades han pensadores políticos más influyentes, en 1789. La Revolución se volcó ha-
ria. El aspecto de Eichmann y los da- dominado casi por completo lo que, como Locke y Marx, confirman la im- cia adentro y no fue capaz de cum-
tos de lo que había hecho al enviar a sin embargo, se sigue denominando portancia de la necesidad. La postura plir su potencial universalista. Por el
vastos números de judíos a la muerte vida política. Para Arendt, ello equi- de Marx resulta especialmente para- contrario, la Revolución Americana
confirmaba, en opinión de Arendt, vale a la trivialización de la política dójica, en este sentido. Porque, mien- vio un frenesí constitucional tras ob-
que el genocidio nazi se produjo por (sin duda, la evocación del totalitaris- tras que, con una mano, ensalza el tener la independencia de Gran Bre-
los motivos más triviales, sistemáti- mo no es accidental), porque predo- poder del esfuerzo (y no el trabajo) taña. Con ese gesto, los norteameri-
cos, eficaces y burocráticos: da trivia- mina el utilitarismo y la acción, que como creador de toda riqueza y de la canos situaron los derechos y las
lidad del mal. es la famosa expresión ha dejado de ser creativa y de consti- •esencia- del hombre, también afirma libertades por encima de la •cuestión
que utilizó. En su esfuerzo por des- tuir un objetivo, se ha convertido en que, con la sociedad comunista y la social» y (aunque no suele reconocer-
mitificar el totalitarismo, Eichmann un simple medio. La conformidad y la »extinción del Estado», nadie se verá se) presentaron una revolución más
pasó a ser indispensable; porque era necesidad han arrancado la dimen- obligado a trabajar por necesidad, to- agresiva al mundo. Para Arendt, los
la encarnación de la superficialidad y sión política de la vida humana, por dos tendrán la libertad de ser cazado- norteamericanos se aproximaron más
normalidad de la empresa nazi. Aho- lo que queda atrofiado un aspecto res de día y críticos de noche, sin que que los franceses a establecer el ám-
ra podía verse que esta última era el esencial de la condición humana: el nadie sea esencialmente' cazador o bito de la política y la libertad.
resultado de una obediencia acrítica, aspecto de la creatividad. De forma critico. Esta concepción del esfuerzo Quizá es lógico que se haya criti-
al margen de los fines perseguidos, al esquemática, Arendt hace, en reali- se aproxima a lo que Arendt indica cado frecuentemente y con agudeza
margen del coste en vidas humanas. dad, una distinción general entre la con el ámbito de la política como la distinción de Arendt entre acción y
El hecho de que Eichmann, y el régi- vita activa —compuesta por el es- pura creatividad, el ámbito de las be- esfuerzo. En concreto, los críticos no
men en general, intentaran mejorar fuerzo, el trabajo y la acción— y la llas acciones. han dejado de preguntar cómo pue-
los servicios de ferrocarril o extermi- vita contemplativo, el ámbito del La condición humana (que nunca de asegurar Arendt que la acción que
nar a millones de seres humanos era pensamiento o, más exactamente, el está fija) puede recuperar la esfera de contribuye a mejorar las condiciones
indiferente; lo importante era planear ámbito de la contemplación de lo la libertad en el mundo moderno, sociales o que se basa en una decisión
los medios más eficaces y rentables eterno. Aunque Arendt centra su aná- explica Arendt, porque los avances de ayudar a los demás puede conside-
para lograr el objetivo y seguir las lisis, sobre todo, en la vita activa, tecnológicos han hecho redundante rarse una forma inferior de vida.
órdenes. El verdadero horror del to- afirma que hay una igualdad total la »cuestión social» (sobre las necesi-
talitarismo, por tanto, está en la trivia- entre ambas esferas. dades y cómo satisfacerlas). La prin-
lidad y el absoluto servilismo de sus En la vita activa, el esfuerzo y el cipal actividad en las vidas de los NOTAS
agentes, no en una profunda explica- trabajo —uno interesado directamen- miembros de las sociedades privile-
ción psicológica ni en una voluntad te por la necesidad y la satisfacción giadas no necesita regirse ya por la ' Hannah Arendt, TbeHuman Condi-
política vertiginosa. Ésa es la base de las necesidades biológicas inme- necesidad, como ocurría anterior- tion, Chicago, Liniversiry of Chicago
real de su carácter abyecto. diatas, el otro, por la utilidad y el mente. Press, 1958, pág. 6.
Si el estudio de Arendt sobre el to- mundo de los objetos duraderos— Arendt regresa a la «cuestión social» Hannah Arendt, 77)e Origins of ro-
talitarianisrn, Nueva York, Harcourt
talitarismo deriva de la necesidad de son medios; no son esencialmente en su estudio de las revoluciones Brace and World, 1951, pág. 292.
comprender los sucesos más terribles objetivos. La vida de una persona no francesa y americana, con su libro 3 Ibfd. pág. 294.
del siglo xx, su libro La condicion hu- debe consistir en esfuerzo y trabajo, Sobre la revolución (1963). En él afir-
mana intenta desarrollar una teoría y la tragedia de muchas sociedades ma que, aunque la primera parte de
política muy viva en la Grecia clásica democráticas modernas es precisa- la Revolución Francesa, con los giron- VÉASE TAMBIÉN E■T ESTE LIBRO
pero perdida en la era moderna. El mente el número de vidas tan limita- distas, hizo hincapié en los derechos
factor impulsor de su investigación es das. El ámbito de la acción es donde humanos y, por consiguiente, fue un Laclau, Touraine.
la percepción de que la política, los individuos actúan en completa acontecimiento crucial para la histo-
como esfera de la libertad —de ac- igualdad con los demás, y la libertad ria política, el terror jacobino de 1793
ción— entre iguales, ya no existe de sólo puede lograrse en asociación redujo la posible libertad de la Revo- PRINCIPALES OBRAS DE ARENDT
manera generalizada en el mundo con ellos. En general, el elemento lución a una preocupación por la
moderno, porque el ámbito social (o social ha pasado a dominar lo que, en necesidad. La urgencia de resolver Los orígenes del totikitarismo (1951),
lo que equivale al hogar /bada/ en la otro tiempo, era la dicotomía entre la la »cuestión social» y remediar el su- 3 vols., Madrid, Alianza. 1987.
Greda clásica, el ámbito de la necesi- esfera privada de la necesidad y la frimiento produjo el abandono de La condición humana (1958), Barcelo-
dad [el mantenimiento del hogar]) y esfera pública de la política. Y los -los derechos del hombre. iniciados na, Paidós, 1993.

234 235
HABERMAS HABERMAS

Rabel Varnbagew Tbe Life of a Jewisb younc,-fistail, Elizabeth. Hannab /D'emir, años 80 empezaba sus conferencias el componente hermenéutico de la
IVornan, Londres, East and West Li- Valencia, Alfons el Magnanim, 1993 sobre la modernidad explicando que, ciencia tal COBRO Se ponía en prácti-
brary, 1958. al menos desde una perspectiva filo- ca. Como consecuencia, Habermas
Eicbmann in jerusalenz: A Repon on tbe
Barzality of Euil. Nueva York, Viking, sófica, la modernidad empieza en He- creía que la ciencia y la racionalidad
Londres, Faber & Faber, 1963 -
•Ilegel fue el primer filósofo que se habían nicho en la era capitalista
Sobre la revolución (1963), Madrid, desarrolló un concepto claro de la en contra de los seres humanos
Alianza, 1988. Jürgen Habermas modernidad., asegura'. Aunque estas —e mpobreciendo sus vidas culturales
On Violence, Nueva York. Harcoun Era- conferencias se ocupan, a continua- y exacerbando las formas patológi-
ce and World, 1970. ¡Urgen Habermas es el miembro ción, de la obra de pensadores como cas—, en lugar de servirles. Era pre-
The Life of tbe Mind, Nueva York. Har- más famoso de la segunda genera- Bataille, Derrida y Foucault —es de- cisa una teoría crítica para combatir
court Brace and \Vorld, 1978. ción de la Escuela de Investigaciones cir, pensadores cuya obra ha proble- esta forma negativa de ciencia positi-
Lectures on Kanrs Political Philosopby,
Sociales de Francfort. Nacido en 1929 matizado la teoría social de Marx y vista y convertirla en una actividad
Londres, Harvester Press, 1982. Hegel—, el teórico de la acción co- emancipadora que se ocupase de la
Hombres en tiempos de oscuridad, Bar- en Düsseldorf, Habermas escribió su
celona, Gedisa, 1989. tesis doctoral (publicada en 1954) so- municativa muestra su adhesión a la reforma política y social.
bre el conflicto entre el absoluto y la tradición que siempre ha defendido y A diferencia de la pesimista pers-
historia en el pensamiento de Sche- la utiliza para destacar las insuficien- pectiva de la razón que dan Adorno
t OTRAS LECTURAS lling. Entre 1956 y 1959 fue asistente cias de la llamada -crítica radical de y Horkheimer en La dialéctica de la
i de Theodor Adorno en Francfort. la razón-, presente en las ideas de los Ilustración, Habermas intenta ir en
' B ERNAVER,James (ed.). Amor mundi: at Posteriormente ha sido profesor de fi- pensadores posunodernos.. contra de esa concepción negativa y
1 losofía y director del Instituto Max Una característica del trabajo de trabaja para -completar el proyecto de
1 plorations in the Faitb and Thought of
I Hannab Arendr, Boston, Nijhoff. 1987. Planck en Starberg. Habermas en los años 60 fue su anti- modernidad, iniciado en la Ilustración.

•I
I BOWEN-MOORE, Patricia, Ha nnab
A rendt's Pbilosopby of Natality, na-
Como otros miembros de la Escue-
la de Francfort, Habermas ha estadc
positivismo. En concreto, rechazó el
positivismo de los últimos escritos de
Una vez más, este objetivo necesita
una crítica de la concepción pura -
1I singstoke, Macmillan, 1989. fuertemente influido por las obras de Manc e intentó convertir los primeros mente instrumental de la ciencia que
CANOVAN, Margarer. Hannab Arendt: Hegel y Marx. Sin embargo, a diferen- trabajos en un trampolín más eficaz dominaba en el capitalismo de pos-
i A Reinterpretation of ber Political
Thougbt, Cambridge. Cambridge Uni-
cia de Adorno y Horkheimer, Haber- para una crítica inmanente de la so- guerra.
i versiry Press, 1992. mas rechaza la teoría del valor de
Marx y el pesimismo cultural de la
ciedad capitalista, subrayando su as-
pecto hermenéutica Dicha crítica te-
Los primeros trabajos de Habermas
también intentaron demostrar que el
, KAPLAN, Giesela y KESSLER, Clive,
Han-
1 nab Arendt. Thinking, Judging, Free- primera generación de la Escuela. nía los siguientes rasgos. Primero, Estado moderno era producto y fac-
dom, Sidney, Allen & Unwin, 1989. Como en el caso de Weber, Haber- Habermas afirmaba que la ciencia, e tor de la supervivencia del capitalis -
• KATEB, George, Hannab Arendk Politics, mas cree que la primera generación incluso ciertas facetas de la filosofía, mo. Durante los años 70' hubo un
1
Cbnscience, Euil, Oxford, Martin Ro- de la Escuela se equivocaba al con- habían dejado de tener una función momento en el que Habermas afirmó
bertson, 1984. fundir la -racionalidad del sistema. esencial para determinar el valor de —basándose en la labor de ciertos
MAN., Dersvent, Hannah Arendt. Har- con la -racionalidad de acción., una los fines perseguidos y, en cambio, se economistas políticos— que el Esta-
i mondsworth, Penguin, 1986. confusión paralela a otra: la -separa- habían hecho esclavas de la raciona- do no podría proteger a la gente de
. i PAREICH, Bhikhr, Hannab Aren& and the
Search for a new Political Pbilosopby, ción del sistema y el mundo vital.'. El lidad •instrumental o -intencionada- los peores excesos de las crisis en la
1 (la zweckrationalitdt de Weber). La
Atlantic Highlands, Humanities Press, resultado, afirma Habermas, es que el economía capitalista porque su capa-
1981. sistema parece dominar toda la socie- ciencia, por tanto, contribuía a la ra- cidad para recolectar las rentas nece-
.1 cionalidad técnica que permitió que
SCHURMANN, Reiner (ed.), Public Realtn: dad a expensas de lo que Habermas, sarias para apoyar los programas de
:
Essayson Discursive ?)bes in Political siguiendo a Husserl y Schutz, deno- el capitalismo desarrollara formas de bienestar era limitada. Ello implicaba,
i Philosopby, Albany, State Universiry mina el 'mundo vital., que es el en- mercancía más variadas y complejas, a juiciQ de Habermas, un límite para
of New York Press, 1989. torno inmediato del actor social indi- además de armamento perfecciona- Ea legitimidad del Estado. Porque,
i TLABA, Gabriel Masooane, Politics and
1 vidual. do; pero, sin embargo, fue incapaz de cuanto más incapaz fuera de proteger
I Freedom: Manan Will and Action in a la gente de las crisis económicas,
, tbe nona& of Hannah Arendr, Lan-
Por otro lado, como la primera ge- producir una justificación creíble del
; neración de la Escuela de Francfort, sistema capitalista en sí. En pocas pa- menos podría garantizarse su legiti-
ham, University Press of Arnerica, 1987.
: Info the Dark. Han nah
WHOFIELD, S. J., los textos de Habermas también labras, la comprensión técnica de la midad.
i Arendt and Totalitarianism, Filadel- muestran huellas de la influencia per- ciencia era positivista y en definitiva, Conforme a la tradición del idealiS -
fia, Temple Universiry Press. 1980. manente de Hegel. A mitad de los por tanto, ideológica. Porque negaba mo alemán, Habermas utiliza a Marx
. 236 237
HABERMAS HABERMAS

para desarrollar una estrategia crítica nicativa, además de la conciencia mo- dificar, en general, las estructuras del Siempre en busca de rasgos inmanen-
que fuera, tal como él la ve, esencial- ral) del mundo vital. Éste se basa en mundo vital. Se supone que dichas tes de la situación social que den
mente emancipadora. Si Marx desta- el interés por la emancipación; sólo modificaciones causan una reacción fuerza a su interés en los aspectos
caba el papel autoconstituyente del un uso distorsionado de la razón y el en el sistema social global, con lo que normativos de la sociedad, Habermas
esfuerzo práctico, Habermas, con una lenguaje hace que ello sea dificil de detienen el crecimiento de la raciona- descubre que la naturaleza del len-
seña a Hegel, considera que el es- valorar. En efecto, la emancipación es lidad instrumental. guaje como comunicación significa
fuerzo es critico, especialmente diri- la auténtica base de la vida social (es Junto a su investigación del mun- que tanto el hablante como el oyente
gido contra el poder entorpecedor de decir, humana). La tarea consiste, por do vital a partir de la teoría de Talcott del discurso poseen un interés aprio-
la razón instrumenta/. Al demostrar lo tanto, en ofrecer una teoría que per- Parsons sobre la sociedad corno sis- ri en entenderse. Entenderse signifi-
que la tradición hermenéutica alema- mita la lucidez universal a este res- tema social, Habermas emprende la ca que los participantes llegan a un
na —en la que Habermas incluye a pecto. elaboración de una teoría de la evo- acuerdo: este acuerdo supone el -re-
Freud— había logrado en un sentido En concreto, Habermas inicia un lución de la sociedad y la evolución conocimiento intersubjetivo- de la va-
práctico, se abre paso a un mayor estudio de la noción de mundo vital del individuo en ella, sobre todo en lidez de lo que expresa el otro. En
énfasis en las formas simbólicas de a principios de los 80 mediante el re- la medida en que surgen con arreglo este proceso, cada participante se
interacción de lo que Marx había pre- greso a Duda-mina y la sociología fe- a normas y formas simbólicas especí- verá arrastrado a reflexionar sobre su
visto. nomenológica de Mead y Schutz. ficas. Apoyándose en el trabajo de propia posición en el proceso comu-
Partiendo de ello, en los primeros Para éste, el mundo vital era el mun- Kolberg y Piaget para desarrollar una nicativo. Para Habermas, ello signifi-
años 70 Habermas formuló los prime- do de la vida cotidiana, la esfera total teoría de la competencia moral, y en ca que la estructura del lenguaje es
ros elementos de una teoría del len- de la experiencia de una persona, la labor de Chomsky para una teoría fundamentalmente hermenéutica:
guaje, la comunicación y la evolución que incluye las experiencias previas de la competencia lingüística, Haber- exige que los participantes realicen
de la sociedad, dirigida a suministrar almacenadas; es la situación determi- mas se esfuerza para demostrar que una interpretación a todos los niveles,
la base de un marco normativo den- nada por la biografía en la que se ve debe haber un elemento normativo con lo que aumentará el conocimien-
tro del que pudiera satisfacerse un in- inmerso el individuo, tanto si quiere que domine en la interacción hu- to de cada persona sobre sí misma a
terés emancipador. Ese trabajo culmi- como si no. Se trata del -mundo que mana, así como un elemento pura- partir de su interacción con los de-
nó en los enormes volúmenes de la se da por descontado-, en el que las mente instmmental que se ocupe de más. Éste es, opina Habemus, el ver-
Teoría de la acción comunicativa, personas intentan cumplir objetivos la satisfacción de las necesidades. dadero lelos del lenguaje. Por consi-
publicada por primera vez en Alema- pragmáticos. Para Habermas, el mun- A juicio de Habemms, están equivo- guiente, es preciso entender el
nia en 1981. De ella podemos anotar do vital es un horizonte de concien- cados quienes afirman, con Weber, lenguaje con arreglo a un modelo de
que, aunque Habermas no abandona cia que incluye tanto la esfera públi- que es posible una ciencia de la ac- normas convenido. De una u otra for-
jamás el impulso de emancipación ca como la privada. Es la esfera de la ción técnica e intencionada por sí ma, la función que corresponde al
que se encuentra en Marx, no está formación de identidad y la acción sola, y que los problemas morales e lenguaje es la de permitir que se pro-
dispuesto a aceptar un instrumento comunicativa. Con este último térmi- incluso el verdadero entendimiento duzca la comunicación; cuando la co-
revolucionario ni positivista para lo- no, Habermas se refiere a la acción son cuestión de elección personal. municación falla de manera sistemá-
grarla. Está de acuerdo en que el ca- que -depende de un proceso colaba- Las normas y los valores deben ser tica, quiere decir que el uso del
pitalismo introduce la sociedad de rativo de interpretación en el que los objeto de una reflexión crítica riguro- lenguaje tiene una forma patológica.
clases y la racionalidad burocrática o participantes se relacionan simultá- sa, aunque sólo sea porque la distin- Respecto a la -conciencia moral-,
inténcionada tiene un poder cada vez neamente con una cosa en los mun- ción entre -técnico- y -nommtiva de- Habermas pretende asegurar lo que
mayor sobre las vidas individuales; dos objetivo, social y subjetivo, in- pende de una distinción anterior de él acepta (de Kohlberg, Piaget, Mead
pero es importante, a su juicio, no cluso cuando temáticamente sólo tipo normativo. De modo que ni si- y otros) como etapas morales en una
equiparar el -sistema autorregulador destacan uno de estos tres compo- quiera un interés claramente técnico -lógica del desarrollo... Pretende de-
cuyos imperativos anulan la concien- nentes en sus manifestaciones- 4. La o estratégico puede verse aislado del mostrar que el punto de vista moral
cia de los miembros integrados en él- 3 comunicación es, para Habermas, el interés en una serie de principios uni- se apoya en un elemento original
al -mundo vital.: el mundo de la con- aspecto más importante de todas las versales de inspiración ética. dentro de la estructura de la expe-
ciencia y la acción comunicativa. La actividades en el mundo vital, porque El resultado es que pasa a ser riencia vital humana. -Lo que la teo-
mayor parte de la obra posterior de es ahí donde, idealmente, las perso- esencial saber cuáles son las necesi- ría moral puede hacer y debe con-
Habermas se centra en torno a un nas pueden obtener el reconocimien- dades básicas de los seres humanos fiársele es aclarar el núcleo universal
examen de las estructuras (especial- to de la validez de sus expresiones, y y debe revelarse el carácter de la co- de nuestras intuiciones morales y,
mente el lenguaje y la acción comu- es ahí también donde se pueden mo- municación libre y sin distorsiones. con ello, rechazar el escepticismo del
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HABERMAS HAI3ERM4s

vellón?. Aunque Habermas niega que quieta a Haberrnas de Adorno, Batai- aunque es cierto que afirma haber in- ría de la acción comunicaritia, Ha-
ello signifique atribuirse ninguna ver- 1/e, Foucault y Derrida, especialmen- troducido modificaciones fundamen- bermas habla de •lo que significa para
dad moral, es difícil ver cómo el •s- te, es su aparente negativa a aceptar tales en sus filosofías, es increíble el hablante, al realizar uno de los ac-
cepticismo del valor» puede rehuir que la razón debe tener sus dere- que la preocupación por lo universal tos de habla normales, asumir una re-
una afirmación importante sobre algo chos y que, en cualquier caso, ela- pueda conciliarse con el manteni- lación pragmática" con un objeto en
que constituye una cuestión moral. borar una crítica radical de la razón, miento de lo que rápidamente se está los .mundos del actor», objetivo, so-
Aún más problemática que la afir- como Habermas cree que ocurre, es convirtiendo en un bagaje intelectual cial o subjetivo. Habennas trabaja con
mación de que una posición moral estar aún apegado, sin saberlo, a esa idiosincrático. un modelo de hablante y oyente
sustancial se deriva de un »núcleo razón. Sobre todo, asegura Haber. En segundo lugar, Habermas po- ideales en el que el par hablante
universal» de moralidad es la preocu- mas, los críticos de la modernidad see una concepción anticuada de la oyente es, de hecho, anterior al len-
pación de Habermas por señalar las •debilitan» la distinción entre aliena- ciencia moderna, incapaz de ver que guaje, cuando es bastante probable
patologías y los desequilibrios en el ción y emancipación; es decir, se —tras Einstein, Heisenberg y que sea el propio lenguaje el que
capitalismo moderno. El empobreci- niegan a decirnos ( ia nosotros, que Gódel—, la ciencia no puede ya re- constituye ese par (si es que es sólo
miento cultural producido por un én- tenemos que saberlo!) dónde se en- ducirse fácilmente a un interés pura- un par, y no un trío). El lenguaje,
fasis excesivo en la racionalidad téc- cuentra la ruta hacia la libertad. Ha- mente técnico, que se justifica en pues, habla en sus usuarios tanto
nica e intencional en el plano del bermas está especialmente molesto términos positivistas. Dada su pre- como ellos hablan en él. A diferencia
sistema sería, pues, un ejemplo de por las afirmaciones —ecos de Ador- ocupación por las normas y lo pato- del concepto del sujeto en el proceso
forma social patológica. Para Haber- no y Horkheimer— de que la razón lógico, Haberrnas podría haberse be- de Julia Kristeva, el modelo ideal ba-
mas, en términos generales, una si- y la ilustración modernas han parti- neficiado de la lectura de obras como sado en el habla normal es —incluso
tuación patológica surge cuando se cipado en la represión política de la Sobre lo normal y lo patológico de cuando no se ha realizado totalmen-
produce un desequilibrio —es decir, peor especie. Georges Canguilhem, En ella vemos te— estático y posiblemente cerrado.
una perturbación fundamental— en Desde luego, nos encontramos que la historia de la ciencia puede De lo que se trata es de avanzar ha-
la sociedad. La modernidad, como ante un punto muy controvertido. interesarse por la dimensión normati- cia la apertura que implica proceso».
forma sociocultural y económica, co- Y se ha escrito mucho sobre cómo va de la vida humana. De ahí que, incluso cuando la co-
rre el riesgo de degenerar en un esta- pensadores franceses fundamentales Tercero, pese a sus esfuerzos para municación se interrumpe, la transpa-
do totalmente patológico. Es necesa- han rechazado o ignorado las opinio- construir una teoría general de la rencia es, para Habermas, el telos del
rio aplicar los correctivos que se nes de Habermas. Al margen de lo competencia lingüística y la comuni- lenguaje. Se puede advertir claramen-
encuentran en la propia tradición mo- que se piense sobre los méritos de un cación sin distorsiones en el mundo te que las obras literarias y ficticias de
derna —correctivos que se remontan lado u otro del debate hay varias di- vital, su aproximación al lenguaje se todo tipo son también encarnaciones
al uso de la razón inaugurado por la ferencias básicas, entre Habermas y basa en una serie de hipótesis que la del lenguaje en acción; en principio,
Ilustración— para evitar consecuen- un pensamiento más estructuralista o lingüística y la semiótica han puesto rara vez son totalmente transparen-
' cías graves. Dado que se necesitan postestructuralista, que necesitan una exhaustivamente en tela de juicio. tes —viene a la mente Finnegans
correctivos, es obligatorio revelar la profundización. Éstas son algunas de Aunque varios comentaristas han ob- Wake— pero, aun así, son lenguaje.
base normativa del mundo vital con ellas: servado que el lenguaje poético está Las obras opacas constituyen con fre-
toda claridad. Habermas se considera En primer lugar, advertimos que excluido de la teoría de Habermas, lo cuencia ejemplos de lenguaje en pro-
comprometido en este proceso, pocos autores pueden aceptar, como más llamativo es que éste insiste, ceso de formación, o deformación, en
mientras que otros se han pregunta- parece hacer Habermas, el efecto to- conforme a sus propios términos, en el caso de la obra mencionada.
do cómo su estilo, bastante pesado, talizador del sistema filosófico de ofrecer algo que representa una inter- Por último, una de las mayores di-
ha contribuido a la claridad que pre- Hegel, o que la idea de la moderni- pretación instrumental del lenguaje, ficultades de aceptar gran parte de lo
tende conseguir. dad empieza en Hegel, y no en otros porque lo reduce a un medio de co- que escribe Habermas procede de su
Desde otro ángulo, Habermas que reivindican ese honor, como municación. E incluso aunque él res- insistencia en suponer que puede
analiza lo que denomina el »discurso Rousseau, Descartes o incluso Colón. ponda que ésta es una consecuencia existir un sujeto universal relativa-
filosófico de la modernidad» exami- Igualmente, las afirmaciones de Marx involuntaria de su teoría y que pue- mente fijo e idéntico a sí mismo. La
nando cómo diversos pensadores sobre esfuerzo y revolución, aisladas, de incorporarse a ella, el obstáculo es existencia de dicho sujeto se confir-
—recalcitrantes a la tradición moder- resultan cada vez más redundantes. que Habermas analiza el lenguaje con ma por el énfasis que pone Habermas
na, como destaca nuestro autor— Teniendo en cuenta que el núcleo del arreglo a un modelo ideal, basado en —de acuerdo con la fenomenolo-
exigen •un precio elevado por aban- pensamiento de Habermas parece un emisor y un receptor hipotéticos gía— en la conciencia dentro del
donar la modernidad». Lo que in basarse en estos dos pensadores, del mensaje. Por ejemplo, en La tea- •mundo vital., hasta el punto de ex-
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HABERMAS LACLAU

cluir la conducta inconsciente o sin- de Christian Lenhardt y Shierry Weber INGRAM, David, Ha bernias
and ¿be Dia- minada; existe cierto espacio para la
tomática. No se trata sólo de una ob Nicholsen, Cambridge, Poliry Press en lectic of Reason, New Haven, Yale
asociación con Basil Blackwell, 1990, autonomía, aunque se constituya me-
jeción filosófica: aparece como un University Press. 1987. diante la dislocación. Las identidades
problema concreto en varias declara- pág. 211, MCCAR11-1Y, Thomas, Critical neory of
Habermas, 7k Theory of Communi- Jürgen Ha bennas (1978), Cambridge, se forman en la vida social a través de
ciones. Así, al hablar de la moderni- c atine Action Volume 2, pág. 120. La la actividad políticamente eficaz que
dad, en gran parte bajo la influencia Poliry, 1984.
cursiva es mía. RoDERICK, Rick, Habennas and the Foto:- articula y, por tanto, vincula diversos
de Hegel, Habermas escribe: •.a mo- ' Habermas, TIJC Philosophical Dis- antagonismos sociales. Laclau deno-
dations of Critica( Tbeory, BasingS-
dernidad se ve volcada hacia dentro, course ofModernity, pág. 7. toke, Macmillan, Nueva York, St. Mas- mina a esta actividad .hegemonía.. En
sin posibilidad de escapatoria. Ello titis Press, 1986. el plano de la sociedad, podría decir-
explica la sensible comprensión de sí THOWSON, John B. y HELO, David (eds.), se que la hegemonía es la identidad
misma, el dinamismo del intento, lle- VÉASE TAMBIÉN EN ESTE LIBRO Haber-mas: Critica( Debates, Londres, provisional de la estructura social.
vado adelante sin cesar hasta nues- Macmillan, 1982. Ernesto Laclau nadó en Argentina.
tros tiempos, de "concretarse"J. Aquí Adorno, Benjamín, Canguilhem. Tou- Warn, Stephen R., Pie Recent Work of
Jürgen Habernias:Reason, Justice and
Estudió en las universidades de Bue-
está analizando psicológicamente raine. nos Aires y Oxford. Desde 1973
toda la modernidad como si fuera Modernity, Cambridge, Cambridge
Universiry Press, 1988. enseña en el Departamento de go-
una entidad homogénea y perfec- bierno de la Universidad de Essex.
tamente lúcida. Y no es cuestión de PRINCIPALES OBRAS DE HABERMAS En 1971, Laclau adquirió fama en los
insistir en que Habermas acepte la círculos marxistas cuando publicó
noción del sujeto radicalmente des- Teoría ypraxis (1967), Madrid, Tecnos, una crítica devastadora de la obra de
Ernesto Laclau
centrado a la que se opone, sino de 1987. Gunder Frank en un artículo titulado
sugerir que despojar a la modernidad Conocimiento e interés (1968), Madrid,
—o al lenguaje, o la ciencia, d el su- Taurus, 1992. Junto a Alain Touraine, Ernesto La- 'Feudalismo y capitalismo en Améri-
La lógica de las ciencias sociales (1970), clau —sobre todo en el libro que ca Latina.". En este ensayo, Laclau de-
jeto— de la complejidad de su modo
de unidad es, sin duda, inadecuado. Madrid, Tecnos, 1988.. escribió con Chantal Mouffe, Hege- muestra la pobreza analítica •cle las
Teoría de la acción comunicativa monía y estrategia socialista: hacia teorías existentes (especialmente la
(1981), 2 vols., Madrid, Taurus, 1992. la radicalización de la democracia de Frank) que reducen el capitalismo
Discurso filosófico de la modernidad (1985Y — se encuentra en la vanguar- a una concepción (decimonónica) del
NOTAS (1985), Madrid, Taurus, 1993. mercado. Esta concepción, subraya
dia de la teoría política y social diri-
Perfiles filosofico -políticos, Madrid, Tau- gida a reanimar la acción política. Laclau, resulta especialmente inade-
' Jürgen Habermas, The 77.reory of rus, 1986. Mediante el recurso a los conceptos cuada para captar la peculiaridad de
Communicating Action Volurne 2. Li- Ciencia y técnica como ideología, Ma-
feworld and Systen:: A Critique ofFunc- de contingencia, antagonismo y hege- las sociedades latinoamericanas, so-
drid, Tecnos, 1986. ciedades capitalistas en las que la cul-
tionalist Reason, trad. de Thomas Mc- El pensamiento pOstmetafisico, Madrid, monía, Laclau afirma que ninguna
Carthy, Boston, Beacon Press, 1987, Taurus, 1990. estructura sodal está totalmente ce- tura y la ideología son tan importan-
pág. 333. Parte VI, cap. 2, págs. 153-197, Conciencia moral y acción comunicati- rrada; por el contrario, la dislocación tes como el mercado.
es un estudio general del concepto de va, Barcelona, Ed. 62, 1991. es su rasgo esencial, la característica En su obra más conocida, escrita
la separación entre el sistema y el mun- Escritos sobre moral y eticidad, Barcelo- que abre paso a la acción socialmen- en colaboración con Chantal Mouffe,
do vital. na. Paidós, 1991. te transformadora. Como Touraine, Laclau procede, en primer lugar, a un
Jürgen Habermas, The Philosophical La reconstrucción del materialismo his- Laclau ofrece un enfoque optimista y análisis crítico de la herencia marxis-
Discourse ofAtoderniry, trad. de Frede- tórico, Madrid, Taurus, 1992. ta, especialmente un análisis de la
rick Lawrence, Cambridge, Poliry Press esperanzado de la política, precisa-
en asociación con Basil Black-well, 1987, mente cuando la desesperación post- identidad y la condición epistemoló-
pág. 4. Las conferencias se pronuncia- moderna parecía haber dejado a mu- gica de la clase obrera o proletariado
ron en París, Francfort, Nueva York y OTRAS LECTURAS chos ahogados en una sensación de en el marxismo. En éste, todo lo rela-
Boston en 1983-1984. impotencia. Aunque Laclau está de tivo al cambio social, económico y
Habermas, The Theory of Communi- Richard J. (ed.), Habermas y
BERNSTEIN, acuerdo en que a todo el mundo le cultural había consistido en entender
cative Action Volume 2, pág. 333. la modernidad, Madrid, Cátedra, afecta la estructura de relaciones so- cómo el proletariado, como clase
'Ibid. , pág. 120. La cursiva es de Ha- 1988. ciales —hasta el punto de que esta- oprimida bajo el capitalismo, podía
bermas. BRAATEN, Jane, Habermas's Critica! mos parcialmente determinados por adquirir conciencia de dicha opresión
Jürgen Habermas, Moral Conscious- Theory of Sociery, Albany, State Uni- ellas—, al mismo tiempo, ninguna y, con ello, provocar b transición del
ness ancl Comntunicative Action, trad. versiry of New York Press, 1991. capitalismo al socialismo. Varios pen-
identidad está completamente deter-
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LACLAU
LACLAU

sadores, corno Karl Kautsky, habían nista y esencialista, se necesita un


sociedad. Es el esencialismo, afirman, constituye en un sistema de relacio-
interpretado el marxismo como la nuevo marco teórico que pueda ex-
el que ha llevado al fundamentalismo nes — es, según Saussure, relacio-
teoría de la inevitabilidad histórica plicar los aspectos potencialmente li-
y los regímenes totalitarios del nazis- nal—, pero no puede reducirse a esas
del socialismo generado por las leyes beradores de la relativa fluidez o mo y el comunismo. relaciones. La identidad es relacional
de la historia que había descubierto ta de fijeza., que •se ha convertido en
Pero, niás en concreto, es impor- y autónoma al mismo tiempo. En rea-
y formulado la -ciencia. del marxis- el requisito de toda identidad social..
tante saber cómo surge una identidad lidad, es el resultado de la dislocación
mo. Para esta lectura tan dogmática, Cualquier teoría productiva debe par-
en el nuevo marco esbozado por La- derivada de ello.
la base económica —o infraestructu- tir de la posición de que no existe
clau y Mouffe. ¿Qué es, en efecto, un Este modo de teorizar la identidad
ra— de la sociedad determina el pa- ningún vínculo forzoso entre el socia-
sujeto o una identidad? La respuesta posee un carácter ejemplar en el pen-
pel del proletariado en la historia, sea lismo y unos agentes sociales concre-
más breve es que, aunque la identi- samiento de Laclau. Una vez que se
o no consciente de ello. Del mismo tos (como la clase obrera), que no
dad no está fija, en el sentido de que ha comprendido, puede iluminar sus
modo que las formaciones económi- hay un punto privilegiado (como la
no es reducible al individuo autóno- ideas sobre toda una gama de proble-
cas precapitalistas dieron paso inevi- marginalidad) del que pueda derivar
mo encerrado en sí mismo, tampoco mas. Por tanto, la estructura social no
tablemente al capitalismo, éste dejará una politica progresista, y que todo es equivalente a la esturctura social. está completa jamás; nunca es total-
paso inevitablemente al socialismo, al depende de la forma de concebir la
Una identidad no es ni fija ni total- mente idéntica a sí misma y siempre
margen de las - desigualdades de de- relación entre las diferentes relacio-
mente Fluida. Es el resultado de una está sujeta a la dislocación. Si fuera
sarrollo y las peculiaridades nacio- nes entre sujetos. La sociedad no
tensión contradictoria entre la nece- una totalidad idéntica a sí misma, se-
nales. debe ya considerarse un conjunto
sidad (la estructura social) y la con- ría un sistema cerrado en el que los
Por supuesto, estas ideas, típicas unido por leyes necesarias.
tingencia (la autonomía individual). elementos de la estructura (por ejem-
del marxismo de la Segunda Interna- Aunque rechaza el aspecto deter-
La relación entre identidades consti- plo, los individuos) serían idénticos a
cional, tuvieron sus críticos y detrac- minista de la concepción económica tuye la base de los antagonismos so- la propia estructura. Igualmente, la
tores. Varias corrientes del marxismo de Althusser, como algo que está de-
ciales. No existe una razón subyacen- hegemonía es una serie tanto contin-
reformista (caracterizado por el Parti- terminado •en última instancia., no
te para esos antagonismos; ésa es la gente como necesaria de relaciones
do Laborista británico), revisionista ocurre lo mismo con el concepto de tesis esencial de Hegenzonía y estra- entré identidades. La hegemonía
(por ejemplo, Bernstein) o el sindica- .superdeterminación. que Althusser tegia socialista. No obstante, los an- —como el término democracia— es
lismo revolucionario (tipificado en tomó prestado de Freud. La superde-
tagonismos son inevitables preci- un ejemplo de significante flotante en
Sore!) intentaron dar más peso a los terminación dará forma simbólica a la
samente porque las identidades (in- el que el significado es, al mismo
factores ideológicos o superestructu- noción de identidad; se considera
cluyendo la de la estructura social) no tiempo, contextual e independiente
tales en la plasmación del cambio so- que la identidad se origina en múlti-
pueden ser nunca totalmente fijas. La de todo contexto específico. La es-
cial. Después, en los años 20, Gramsci ples fuentes, y ello le da su fluidez.
hegemonía es la fijeza provisional de tructura social es .inefable. y determi-
revisaría la relación entre •base y su- La superdeterminación y lo simbólico
unas identidades en relación con nada. De hecho, es el carácter inefa-
perestructura• y atribuiría un papel implican que el sujeto se constituye -
otras en el contexto de los antagonis- ble de la estructura social el que
determinado a los intelectuales a la dentro de una pluralidad de discur- mos sociales. produce los antagonismos, el elemen-
hora de producir el cambio histórico. sos. Aunque, para Laclau y Mouffe,
En su libro posterior, Laclau desa- to clave en la política de Laclau. Los
Pese a ello, Laclau demuestra que el ello significa que dentro del contexto rrolla estos argumentos y afirma que antagonismos constituyen la base de
marxismo clásico es determinista y de las relaciones sociales no hay nin-
una identidad totalmente autodeter- la política y ésta es lo que mantiene
esencialista. No sólo porque otorga guna entidad que no posea un carác-
minada equivaldría a la autonomía abierta la estructura social. Todo acto
prioridad a la economía —en última ter simbólico o discursivo, la realidad
tater'. Si así fuera, la cuestión de la político (un ejemplar de contingen-
instancia., como había hecho Althus- no puede reducirse a un discurso.
autonomía individual sería redundan- cia) se produce sólo en relación con
ser—, sino porque sitúa a la clase Dentro del ámbito de las relaciones
te. Sólo el hecho de que la identidad una serie de prácticas .sedimentadas.
obrera en el origen del cambio bajo sociales, no existe diferencia entre las --
está parcialmente determinada y par- Éstas son el elemento de necesidad
el capitalismo. Sea economicista o prácticas discursivas y no discursivas. :
cialmente fluida la convierte en una sin el cual la vida social se desharía
culturalista, el marxismo es siempre Tanto si se puede lograr acuerdo 11 ::
cuestión política permanente. Por en puta contingencia, es decir, en in-
esencialista, porque •los intelectuales como si no, sobre esta cuestión epis-
otro lado, si el sujeto no fuera más determinación. La política cambia las
socialistas leen en la clase obrera su temológica, el objetivo de los autores -
que lo que la estructura social deter- prácticas sociales, pero para que haya
destino objetivo.' y, por tanto, le con- de Hegemonía y estrategia socialista mine, sería lo mismo que la estruc- una política debe haber también
ceden un carácter ontológico. es ir más allá de la visión esencialista :
tura, tal como tendía a suponer el prácticas sedimentadas y relativanien-
Si el marxismo clásico es determi- y homogeneizadora de la política y la .
marxismo clásico. La identidad se te inmutables, legadas por la historia

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o la tradición. Los antagonismos se noma y contingente. No puede pen- lado en el individualismo americano) ese nuevo examen. Por mucho que
convierten en una práctica de descen- sarse que son la manifestación inevi- han impregnado la vida social y polí- una concepción historicista pueda
tralización; pero la descentralización table de la lucha de clases, ni proble- tica hasta la época contemporánea, afirmar que entiende el pasado en
sólo es posible a través de unos cen- mas económicos. Todavía menos Laclau quiere terminar con el mito. sus propios términos, el hecho de
tros que se forman porque la estruc- pueden considerarse la articulación Porque parecería que el mito y la que Laclau acepte ese historicismo no
tura no está nunca por completo en desplazada de una clase obrera cuyo contingencia —el mito y la política— se ajusta al tono general de su pro-
equilibrio. Los centros se forman a otro nombre es •necesidad» y cuyo se oponen hasta tal punto que el yecto. No podemos limitarnos a decir
través de los antagonismos y la dislo- destino histórico sería el de asumir el primero pretendería eliminar a la se- que, »para su época», el marxismo
cación de lo estructural. Por último, la poder en interés del conjunto de la gunda. dogmático resultaba apropiado, por-
representación no podría ser total- sociedad para indicar el camino a la Sin embargo, haciendo referencia que ello implicaría que se puede
mente transparente porque ello pro- era del socialismo. Por el contrario, específica a este punto, debemos ad- comprender con independencia de
vocaría la desaparición de la propia sugiere Laclau, la época contemporá- vertir que toda lectura seria de Laclau las preocupaciones del presente. Lo
relación de representación. En otras nea es el periodo en el que la políti- debe reconocer la presencia de refe- que las nociones de .hegemonía. y
palabras, para que la representación ca (que también recibe los nombres rencias continuas (incluso en sus »dislocación» de Laclau nos han per-
logre sacar a la vista lo representado, de •oder• y •contingencia»), como obras más recientes) a la tradición mitido hacer es entender el marxismo
es preciso que asuma cierta opacidad. acción autónoma, ha llegado a asumir marxista, casi hasta el punto de que bajo una luz nueva; y esa luz es ne-
Como se ha advertido con frecuen- su lugar legítimo en los asuntos hu- él mismo parece estar unido orgáni- gativa. La hegemonía supone que
cia, este estilo de pensamiento está manos, ahora que la era de los deter- camente al marxismo. Los textos de debemos cortar todos los lazos políti-
en deuda con la tendencia antimeta- minismos parece haber llegado de- Marx y la teoría de Trotski sobre el cos con el marxismo dogmático. Sin
física y antiesencialista que se obser- finitivamente a su fin. En este contex- desrrollo desigual siguen pareciendo embargo, Laclau no parece estar dis-
va en la filosofía de Derrida. En su es- to, Laclau puede afirmar que .la cons- un punto de partida para las teoriza- puesto a seguir las repercusiones de
fuerzo para superar un pensamiento titución de la identidad social es un ciones de Laclau. Como consecuen- su propio trabajo. ,
que queda fácilmente atrapado en acto de poder y la identidad, como cia, el lector puede muy bien pregun- Indudablemente unida a ello está
uno u otro de los extremos de una tal, es poder.'. tar cuál es la verdadera relación de la cuestión del carácter exacto que
oposición (a veces estéril) debida a la Una consecuencia fundamental de Laclau con el marxismo. ¿Es su pos- tiene la teoría de Laclau. ¿Hasta qué
rígida adhesión a la ley de la contra- equiparar identidad y poder es que el tura verdaderamente tan postmarxis- punto están relacionadas sus hipóte-
dicción, Derrida busca la •impureza». yo hipotéticamente autónomo que ta» como asegura? Si se considera que sis con ese mismo presente que de-
Defiende una lógica basada, simultá- caracteriza a la tradición norteameri- el marxismo, en todas sus formas, es fine y teoriza, el presente de los an-
neamente, en el uno y el otro. Sin cana del individualismo se vuelve dogmático y esencialista, ¿por qué tagonismos y la búsqueda de la
embargo, este enfoque ha obtenido la problemático. Porque, como hemos seguir remitiéndose a él? Pero aún hegemonía? Seguramente, Laclau po-
reputacjón der ser .apolítico.. A este visto, suponer que el individuo es an- más: Laclau no parece haber teoriza- dría responder —de acuerdo con la
respecto, lo más asombroso del pen- terior a la sociedad y, por tanto, una do su posible relación - con Marx a lógica de Derrida de la que es parti-
samiento de Laclau es que convierte especie de mónada autónoma y ais- partir de sus propias hipótesis. Por- dario-- que su teoría participa, sin
las intuiciones de Derrida en la base lada resulta tan increíble como pen- que, si debemos reconocer que no pertenecer a él, en el medio que se
para que lo político pueda reivindicar sar que no hay nada más que una es- existe un nexo intrínseco entre las esfuerza por articular. En otras pala-
definitivamente sus derechos. Verda- tmctura social que determina a los condiciones y las formas de la prácti- bras, si abandonamos la lógica de
deramente, en la interpretación de individuos en su peculiaridad. El plu- ca social y política, y si, además, to- o/o, cero/suma, tan común hasta
Laclau, cualquier forma de determi- ralismo fundado en este concepto de das las identidades son resultado de ahora, podemos ver que la propia
nismo o esencialismo equivale a la individualidad autónoma pasa a ser la dislocación, el antagonismo y teoría de b hegemonía se somete a
muerte de la política. sencillamente el reverso simétrico del —dentro de unos límites— la contin- juicio en el juego de •hegemoniza-
Teniendo esto en cuenta, la ambi- elitismo; pluralismo y elitismo son, gencia, ¿no es como decir que el dog- ción» y que, a pesar de ello, no tiene
ción de Laclau es demostrar que las pues, dos caras de la misma moneda _ matismo marxista estaba equivocado? por qué ser menos rigurosa. Por eso
cuestiones y los movimientos esen- determinista: ambas terminan, a su Nuestro presente nos ha llevado a la hegemonía será también caracterís-
ciales en la política contemporánea manera, con la política. Si los mitos ' una reevaluación fundamental del tica de la lógica »inefable» destacada
—como el feminismo, la ecología, el con asociaciones metafísicas (como el _ pasado y no podemos afirmar que lo inicialmente por Gódel y la ciencia
multiculturalismo y el movimiento mito del proletariado producido por conocemos independientemente de moderna.
pacifista— deben interpretarse como las condiciones económicas en el
factores constituidos de forma auto- marxismo y el mito del individuo ais-

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TOURAINE TOURAINE

NoTAs Alain Touraine se asoció al sociólogo Georges Pried- actores. La sociedad no se limita a ser
mann en el Centre National de la Re- el resultado de acciones o hechos ais-
. cherche Scientifique (Centro Nacional
' Ernesto Laclau y Chamal Mouffe, Alain Touraine es un sociólogo a lados, que ella pone en su lugar. Al
Hegenwny and Socialist Strategy: quien afectaron profundamente los de Investigaciones Científicas). El pri- contrario, para que la acción produz-
Towards a Radical Democratic Politics, sucesos de mayo de 1968 en París. mer gran trabajo de investigación de ca nuevos elementos de la estructura
Londres y Nueva York, Verso, 1985, 3. 1 Como profesor en la Universidad de Touraíne fue un estudio del trabajo social (a través de la cual se reprodu-
impr. 1989. Nanterre, Touraine vio que la acción en la fábrica de coches 'Renault de Pa- ce la sociedad), debe trabajar a través
Ernesto Laclau, •Feudalism and ca- política estudiantil en 1968 había de- rís, y se publicó en 1955. Su siguien- y en contra de las instituciones exis-
pitalism in Latin America», New Left Re- te libro importante, Soci plagie de
biew, 67 (1971) recogido en Politics and jado de ser una reacción, ya no esta- tentes y las formas culturales relativa-
ba contenida en las formas políticas l'action, es de diez años después. mente permanentes. Por otro lado,
Ideology in Manis! 71,eory: Capitalism,
Fascism, Populism (1977), Londres, Ver- y las relaciones de poder existentes. En 1952 Touraine dejó Francia y fue sería difícil subestimar la importancia
so, 2. mpr., 1982, págs. 15-30. Se había convenido en una forma de a estudiar a Norteamérica con Talcott que Touraine otorga a la acción en la
Lac/au y MoufFe, Hegenwny and So- comportamiento diferenciada por su • Parsons y Paul Lazarsfeld. También constitución de la sociedad. Para
cialist Strategy, pág. 85. carácter transformador: unos aspectos impartió clases en varias universi- comprenderlo, no tenemos más que
' Ernesto Laclau, New Reflections on fundamentales de la estructura social dades norteamericanas, entre ellas recordar el argumento planteado
tbe Revolution of Our Time, Londres y UCLA. Ello le convierte en uno de /os poco después de 1968 en Lsí produc-
estaban en proceso de transforma-
Nueva York, Verso, 1990. pág. 37. ción debido a lo que Touraine llama- escasos sociólogos franceses con co- ción de la sociedad, donde Touraine
¡Ud., pág. 31
ría un «movimiento social.. Pese a sus nocimiento de primera mano de la afirma que la sociedad no es más que
numerosos estudios sobre obreros y sociología norteamericana. En gran la acción social, porque •el orden so-
VÉASE TAMBIÉN EN ÉSTE LIBRO estudiantes y un examen oportuno parte, la teoría de la acción social de cial no tiene garantía metasocial de su
del sistema académico norteamerica- Touraine es una crítica de la teoría existenciarl. En sus trabajos de prin-
Akhusser, Derrida, Foucault, Touraine. no, además de libros y artículos so- del sistema social de Parsons. Des- cipios de los 70, Touraine sigue usan-
bre Latinoamérica, la conceptualiza- de 1960, Touraine es profesor en la do el término «sociedad. y la sociolo-
ción y el estudio que hace Touraine École des Hautes Études en Sciences gía sigue siendo el estudio de la
PRINCIPALES OBRAS DE LACLALI constituyen, sin duda, el rasgo aisla- Sociales. sociedad, como había sido para Dur-
do más importante de su sociología La experiencia de Touraine en kheim, pero con la variación de que
Política e ideología marxista: capitalis- de la vida política. El elemento clave mayo de 1968 le confirmó en la opi- ahora se considera que la sociedad es
mo, fascismo, populismo (1977), Ma- del movimiento social es la acción: la nión de que una teoría rígida que un sistema capaz de transformarse.
drid, Siglo )0C1, 1986. acción contra el sistema social. Su concibe la sociedad como un conjun- Para Durkheim, en cambio, la socie-
Hegemonía y estrategia socialista: bacía ambición, especialmente en su obra to orgánico y funcional, caracterizado dad era un sistema orgánico cuyo es-
la radicalización de la democracia más tardía, es demostrar que ese én- esencialmente por su interés en re- tado normal era de equilibrio. Más
(1985) (con Chantal Mouffe), Madrid, fasis en la acción no tiene por qué producirse, era insuficiente. Porque adelante, sobre todo en /os años 80,
Siglo XXI, 1987. conducir inevitablemente al volunta- no explicaba cómo se transformaban Touraine pregunta si la sociología
New Rejlections 077 me Revolution of Our
Time, Londres y Nueva York, Verso, rismo o el individualismo. Ni uno ni las sociedades, ni daba el peso debi- puede hacer justicia a las nociones de
1990. otro ofrecen una percepción del su- do a las diversas formas de acción acción y transformación y seguir sien-
jeto de la acción. social. Aunque se opone al primer do el estudio de la sociedad. Su res-
Alain Touraine nació en 1929. Su Foucault y a versiones dogmáticas del puesta es que no puede, y que debe
OTRAS LECTURAS padre era un médico que procedía de estructuralismo, Touraine, en un estu- convertirse en el estudio del cambio
una larga línea de ejercicio de la me- dio reciente sobre la modernidad', ha a la luz de los avances en las ciencias
GEsAs, Norman, -Post-Marcism?., New dicina. Aunque iba destinado a una reconocido la importancia de las naturales sobre aspectos como el sis-
Review, 163 (mayo/junio 1985). carrera académica al entrar en la Éco- - obras posteriores de aquél sobre la tema abierto. Más profundamente,
Rusas, Michael, •Absolute voluntarism: le Normale Supérieure, donde obtu- - _ historia de la cárcel y la sexualidad, desde el punto de vista de la sociolo-
A critique of a Post-Marxist concept of vo su agrégation, Touraine decidió por haber reintroducido la materia en gía, Touraine afirma que la clase
hegemony-, New German Critique, romper con la tradición familiar des- el estudio de la vida social. —como ejemplar de una serie de
43 (invierno de 1988), págs. 146-173, pués de /a guerra y fue a trabajar en Aunque Touraine destaca la impor- condiciones detenninadas— debe dar
una mina de carbón en el norte de tancia de la acción social, no se olvi- paso al reconocimiento de que las ac-
Francia. Esta experiencia alimentó su da, en absoluto, de los efectos de la ciones, y no las condiciones recono-
interés por la sociología y, en 1950, estructura y la »historicidad. sobre os cidas, revelan las relaciones de domi-

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_ _.-J
- ...
TOURAINE TOURAINE

nación y subordinación y que, por ción conflictiva que se opone a una los movimientos sociales coincide nidad es esencialmente de orienta-
tanto, la •clase', como categoría expli- forma existente de integración social. con la desaparición de las sociedades ción secular y excluye toda finalidad.
catoria, debe dejar paso al •movi- Ese desafío a la integración social ac- muy estratificadas y jerárquicas. Ello Sin embargo, en su compromiso con
miento social.. Sin embargo, esta tual no es, en absoluto, lo rnismo que no quiere decir que se haya logrado el progreso, la modernidad no exclu-
atención al cambio no debe crear la una crisis de la sociedad y el derrum- la igualdad total, sino que ha habido ye un posible fin de la historia, pese
opinión de que ya no existen proble- be de su organización. Por consi- un enorme crecimiento de la clase a que dicha posibilidad parecería
mas estructurales; la acción asume guiente, los cambios producidos por media en las sociedades industrializa- anulada por el predominio de la ra-
su verdadero significado sólo en la acción social no pueden conside- das de Occidente, y las barreras so- cionalidad instrumental. Esta última
relación con la estructura. Más exac- rarse patológicos ni •isfuncionales., ciales se ven constantemente derriba- —la zweckrationnalitiit de Weber, o
tamente, ¿cómo define Touraine la para utilizar los términos de Parsons. das, precisamente, porque el tipo de racionalidad de medios y fines— lle-
naturaleza de los •movimientos so- Una sociología de los movimientos formación social que se ve ahora va a la valoración de los medios; los
dales.? sociales es, pues, muy diferente de puede intervenir para modificar su medios (tecnológicos, científicos, ló-
. En primer lugar, vincula su análi- un estudio de la sociedad como sis- propia estructura. Junto a la desapa- gicos, etc.) se convierten en fines. La
sis' a la designación de tres formas de tema orgánico en el proceso de evo- rición de las sociedades de clases y racionalidad instrumental predomina
conflicto social: 1) conducta colectiva lución gradual de una a otra forma; jerarquías rígidas, se han desvanecido mientras siguen en vigor los valores
defensiva, en la que podría exigirse por ejemplo, la evolución de la socie- las condiciones objetivas que deter- de razón, libertad, método, universa-
una reforma concreta; 2) luchas socia- dad occidental de la tradición a la minan la acción; por ejemplo, a la lismo y progreso de la Ilustración.
les que pretenden modificar las deci- modernidad. manera de la relación marxista entre Igualmente, el yo o individuo, con-
siones, o incluso un sistema de deci- Una sociología que toma en serio infraestructura y superestructura. cretado en el ciudadano, se conviene
siones; y 3) movimientos sociales. En el concepto de acción como base de Dado que ahora la acción determina en el centro de la acción política y so-
el ejemplo de la fábrica, que Tou- la vida social considerará ahora que las condiciones, el sociólogo debe cial y da a la era moderna su consti-
raine da para ilustrar estas tres for- las clases sociales son actores, y no la admitir que es imposible estudiar los tución histórica distintiva.
mas, la acción colectiva se manifesta- mera concreción de una situación movimientos sociales sin verse invo- Con la llegada de la Escuela de
ría en la demanda de que las diferen- marcada por la tradición. Al contrario lucrado en ellos. Como dice Tourai- Francfort, la obra del primer Foucault
cias salariales entre personas con las que Marx, Touraine afirma que no ne, la fría objetividad no es capaz de y, últimamente, los •postmodernos., la
mismas calificaciones queden aboli- existe la clase por sí sola, porcjue no entrar en contacto con el calor del razón, tanto instrumental como uni-
das. Se trata de una reforma concreta existe sin una conciencia de clase. .La movimiento social. La acción debe versal, el sujeto, las ideologías y la
relacionada con una estructura ya clase social es la categoría en cuyo estudiarse desde dentro, pero ello no noción de valores definitivos están so-
existente. La lucha social se produci- nombre actúa un movimien coi'. significa que el investigador adopte la metidos a grandes presiones. Se con-
ría si los trabajadores reclamaran un Como ejemplo de movimiento social, ideología de los actores. Justo al con- sidera que la modernidad produce las
papel thás importante en la toma de Touraine señala el movimiento femi- trario. El objetivo es llegar a una •in- opresiones que está intentando supe-
decisiones. Por último, el intento de nista. En él, el objetivo no es sólo versión•, que Touraine denomina rar; la razón instrumental parece en-
provocar una transformación de las reaccionar ante las desigualdades •conversióm. El investigador lo aplica, gendrar una trivialización de la vida, y
relaciones sociales de poder en la fá- inexistentes apelando a los valores li- en primer lugar, a sí mismo, y des- se ve al sujeto como el producto de la
brica y, por tanto, en el conjunto de berales, sino trabajar para cambiar las pués lo prueba con los actores, para ideología, o de una configuración
la sociedad, correspondería a la apa- normas y los valores de la vida cultu- aproximar al investigador y a los ac- epistemológica concreta que ahora
rición de un movimiento social. ral y social. Con la eficacia del movi- tores lo más posible, con el fin de está a punto de desaparecer.
En general, un movimiento social miento feminista se hace posible que extraer el máximo significado posible Como respuesta, Touraine afirma
es una fuerza activa, más que reacti- los hombres asuman una posición del conflicto. que la crítica no reconoce que la
va, a diferencia del comportamiento distinta en el hogar y las mujeres ten- Más recientemente (1992), Touraine modernidad está dividida en contra
colectivo, que es siempre reactivo. gan nuevas oportunidades en la vida ha renovado el estudio de la mo- de sí misma: es .autocrítica• y •uto-
Los movimientos sociales suelen lu- pública. El movimiento de mujeres es dernidad. Para empezar, ello ha su- destructiva.. Los escritos de Nietzsche
char por el control de la •historici- ejemplar también porque no puede puesto un regreso a las definiciones y Freud son la mejor prueba de esa
dad•. Este término se refiere a las for- reducirse a ninguna forma política predominantes de la modernidad, división, los mismos textos que se
mas y estructuras culturales generales previa como un partido político. Un Formuladas en los comienzos de la han usado, con frecuencia, en la crí-
de la vida social. Si el término •socie- movimiento social siempre trasciende era moderna con Descarte y la Ilus- tica de la modernidad, incluyendo las
dad• se refiere a la integración social, la política de partidos. tración. Incluso en esta lectura, resul- que están presentes en los textos
•movimiento social:- implica una ac- Para Touraine, el surgimiento de ta claro para Touraine que la moder- postmodernos. Además, y con espe-

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TOURAINE TOURAINE

cial referencia a la Escuela de Franc- el sujeto hacia el final de su vida, • sociales y la reproducción necesaria por una singularidad que no procede de
fort —que, a su juicio, es insoporta- Touraine detecta un giro respecto a la para la integración. las formas sociales.
blemente elitista—, Touraine destaca idea de que la subjetividad equivale Toda valoración de la nueva mo- Alain Touraine, •Is sociology Mill
que está muy bien denunciar la racio- a una forma de estar sometido a la dernidad de Touraine debe admitir the snidy of sociery?-, trad. de Johan Ar-
nalidad tecnológica en nombre de un idea de que el sujeto es capaz de que es un antídoto poderoso para el nason y David !lobeas, Thesis Eleven, 23
transformarse a sí mismo, Existe la pesimismo a priori que, tan a menti- (1989), pág. 19.
fin universal, pero que siempre exis- ' Alain Touraine, -Social movements:
te el riesgo de que la empresa obten- necesidad de ceinventar. la moderni- do, caracteriza la experiencia llamada Special area or central problem M socio-
ga un resultado totalitario. En cual- dad sobre la base de estas teorías dis- postmoderna. Del mismo modo, me- logical analysis?», trad. de David Roberts,
. quier caso, continúa, persas. Existe la necesidad de en- diante minuciosa atención a los mati- Thesis Eleven, 9 (julio de 1984), pági-
contrar un nuevo principio de inte- ces que separan el sujeto como actor nas. 5-15.
La debilidad de nuestras socieda- gración social que no posea los as- del yo como reactor, Touraine ha lo- 5 Ibid. pág. 9.
des no procede de la desaparición pectos negativos de la forma anterior Touraine, Critique de la nzodernité,
de los fines destruidos por la lógica grado sacar a la luz los problemas de
de modernidad. Con la •nueva mo- la acción y la libertad de una forma págs. 125-126.
interna de los medios técnicos, sino, ' ¡bid., pág. 256.
por el contrario, de la descomposi- dernidad. de Touraíne, el sujeto y la que, hace menos de una década, pa-
i ción del modelo racionalista, roto razón pasan a ser conductos para los recía escasamente creíble. La pregun-
por la propia modernidad y, por tan- aspectos más amplios de la existen- ta que se plantea todavía, teniendo
. to, por el desarrollo separado de la cia social (-vida-, •onsumo., ;nación. en cuenta las hipótesis de Touraine, VÉASE TAMBIÉN EN ESTE LIBRO
. lógica de la acción, que ya no se re- y -empresa.). En lugar de ser el prin- es cómo debemos entender el paso
fiere a la racionalidad: la búsqueda cipio unificador, como ocurría en la del yo normalizado al sujeto activo. Bourdieu, Foucault, Habermas, Sirnmel.
del placer, el nivel social, el benefi- Ilustración, el sujeto es el testigo que ¿Cuál es exactamente el principio so-
cio o el poder'. -reconstruye el terreno cultural frag- bre el que reside este? movimiento?
En una reinterpretación de Freud, mentado.7. Lejos de estar cerrado en ¿Es la teoría de Touraine la que ofre- PRINCIPALES OBRAS DE TOURMNE
Nietzsche y, en menor medida, sí mismo —como ocurre con el yo ce la base para una nueva reflexivi-
Foucault, Touraine halla el medio puramente narcisista—, el sujeto se dad? ¿O son las condiciones materia- L'Évohition du travail ouvrier aux USi-
para un posible ceencantamiento. del convierte en el intento de unificar los les; es decir, la propia acción? nes Renault, París, CNRS, 1955.
mundo. Porque lo que hacen estos deseos y las necesidades dentro de Sociologie de raction, París, Seuil, 1965.
tres pensadores es elaborar una críti- una conciencia que pertenece a la Canas a una estudiante, Barcelona, Kal-
ca casi incontestable, no tanto del nación o la empresa. De una concep- rós, 1977.
sujeto corno del •yo., la versión so- ción centralizada del yo, pasamos a Movimientos sociales hoy, Barcelona,
cialmente consagrada del sujeto. Es una concepción bipolar; ésa es la ra- ' Alain Touraine, Critique de la mo- Hacer, 1990.
zón de que el sujeto no pueda redu- Crítica de ta modernidad (1992), Ma-
decir, tanto en su teoría como en su dernité, París, Fayard, 1992, págs. 198-
cirse a ninguno de los fragmentos de 201 drid, Temas de Hoy. 1993.
1 práctica, estos antirnodernistas reco- ¿Qué es la democracia?, Madrid, Temas
nocen la singularidad que constinwe la totalidad social. Alain Touraine, The Self Production
-
de Hoy, 1994.
Sobre todo, Touraine desea rein- of Society, trad. de Derek Coltman, Chi-
el sujeto —el actor puro—, la entidad
que no puede reducirse a una serie troducir a un sujeto corno actor y cago, University of Chicago Press, 1977,
como movimiento, que sustituya, pág. 2. La edición francesa se titula Pro-
convencional de comportamientos o duction de la société, París, Seuil, 1973.
formas simbólicas. como determinante clave de la ac- La traducción de production como «au- OTRAS LEcrugns
Partiendo de esta revitalización del ción, a las nociones de clase y situa- toproducción. resulta confusa porque,
sujeto actuante, Touraine presenta ción reconocida. La movilización de -en su obra posterior, Touraine se esfuer- Scan. Alan, «Action, movement, and in-
asimismo un argumento apasionado las convicciones, unida a aspectos za por explicar que el -yo• es el produc- tervention: Refiections on the Socio-
en contra de la opinión de que la so- morales y personales, sustituye a la to de una forma social determinada, logy of Alain Touraine•. Canadian
. ciología es reductiva. Sobre todo, en importancia del lugar de trabajo y la mientras que la acción hace referencia Review of Sociology and Anthropology,
las figuras de Nietzsche, Simmel y dirección del partido en la política. a un sujeto o una entidad caracterizados 2, 8 (febrero de 1991). págs. 30 - 45.
Weber, se está fabricando una socio- En general, el objetivo es reinventar
logra antiutilitaria. Las pistas que han la esperanza, no en el sentido popu-
lanzado están esperando a que al- lista de reinventar los orígenes, sino
guien las recoja. Del mismo modo, en en el sentido de la acción que produ-
los textos que Foucault escribió sobre ce la elaboración de nuevas formas

252 253
La modernidad

La modernidad puede referirse a la industrialización. Sin embar-


go, los pensadores que figuran en este libro, y a quienes fascinaron
los auténticos cambios producidos por la modernidad, pensaban que
la clave de la modernidad estaba en las transformaciones producidas
en la conciencia. De hecho, la modernidad podría interpretarse, en
parte, como la valoración y el reconocimiento de la conciencia como
una fuerza por derecho propio. La frase de Baudelaire de que la
modernidad es lo «transitorio, lo camero y lo contingentes podría en-
tenderse en este sentido. Joyce es un autor que intenta seriamente
desentrañar las consecuencias de este hecho en el arte de la escritu-
ra (la novela).
Walter Benjamin dad llegó a ser dirigente de los estu-
diantes radicales judíos y, como su
Como los especialistas en la obra amigo Gershom Scholem, se vio in-
de Walter Benjamín han empezado a fluido por el pensamiento judío me-
dejar claro, •cualquier intento de es- siánico y cabalístico'. La corriente
tablecer una unidad a partir de textos de sionismo de Scholem, mezclada
tan variados como los de Benjamin con simpatías políticas anarquistas,
está siempre condenado desde el ejerció una enorme influencia sobre
principio. No sólo escribió Benjamin Benjamin. Mientras estudiaba hebreo
sobre una variedad extraordinaria- en M'únich, Benjamin conoció al filó-
mente amplia de temas —el teatro sofo utópico Ernst Bloch, y pensó en
trágico alemán, el Romanticismo, la ir con Scholem a Palestina en 1924,
historia, el lenguaje y la traducción, el hasta que interfirió su matrimonio
cine, París, Baudelaire, el mandsmo y con la actriz letona, y comunista con-
la narración—, sino que estilística- vencida, Asja Lacis.
mente se movió entre la prosa, el Durante la mayor parte de los
fragmento, los aforismos y las citas y, años 20, Benjamin vivió la precaria
a menudo, se situó entre los géneros vida del erudito, mantenido principal-
de la narrativa, la crítica literaria, la mente por su padre, con quien tenía
historiografia y la filosofía. Con distin- relaciones difíciles. Con el fin de me-
tas influencias del judaísmo, el mar- jorar su situación económica, empe-
xismo y lo que él consideraba los as- zó a trabajar para obtener un puesto
pectos proglesistas de la modernidad, en la universidad —una operación te-
Benjamin se encuentra en el umbral rriblemente dificil en la época— y,
de una nueva era intelectual. Y, sin en 1925, presentó una Habilnations-
embargo, transcurrió su vida refugia- cbrift, •El origen del drama barroco
do en los avíos de erudito, una forma alemán.. La Universidad de Francfort
de existencia que, corno el narra- rechazó la tesis por su estilo poco
dor de cuentos al que tan bien des- convencional y frecuentemente lírico
cribía él mismo, estaba a punto de y personal. El origen del drama ba-
desaparecer, quizá para siempre. rroco alemán fue el único libro com-
Walter Benjamin nació en Berlín pleto de Benjamin, puesto que los
en 1892, hijo de un marchante de arte demás textos son ensayos, artículos
judío. Tras asistir a un instituto huma- (tanto académicos como periodísti-
nístico, estudió filosofía y literatura cos), traducciones y fragmentos, mu-
en Friburgo y Berlín. En la universi- chos de ellos póstumos. A través de

257
BENJAMIN BENJAMIN

su actividad literaria, que incluyó tra- aura de autenticidad de ésta se ha ducción de los objetos de arte clási- pasaban inadverridos—, así sensibili-
ducciones de Proust y Baudelaire, desvanecido porque es reproducible, cos; sino que sugiere que lo que más za la cámara a la gente (por ejemplo,
13enjarnin pudo ganar algún dinero la percepción de los sentidos cambia le interesan son las nuevas posibilida- con el primer plano) sobre aspectos
para él y su familia. Con el ascenso junto a todo el modo de existencia de des estéticas aportadas por la technik. del entorno que, hasta entonces, no
de los nazis al poder, en 1033, I3enja- la humanidad. La técnica de la repro- La reversibilidad (el efecto sobre el habían captado.
• min fue a París, donde conoció a ducción aproxima los objetos artísti- tipo de obra de arte producido), ¡un- Aunque I3enjamin se vio claramen-
Hannah Arendt. Allí vivió de una cos a un público de masas. Más aún, to a una nueva concepción de .origi- te cautivado por la modernidad
modesta beca concedida por el Insti- se desarrolla cierta reversibilidad: la nalidad., no son más que dos de los —como muestran el Proyecto Arca-
tuto de Investigaciones Sociales, se obra de arte reproducida lleva a la aspectos iniciados por el estudio de des y sus demás escritos—, también
relacionó con los surrealistas y, en obra de arte diseñada para ser repro- Benjamin. se le ha considerado un teórico de la
menor medida, con miembros del ducida. Como ocurre siempre con los Destacan dos elementos adiciona- tradición, que, a primera vista, pare-
Colegio de Sociología, dirigido por análisis de Benjamin, no hay un mo- les. El primero es que, con la posibi- cía ser lo que la modernidad había
Georges Bataille, y emprendió un vimiento unilateral entre posturas o lidad de la reproducción, una obra de eliminado. Sin buscar, por ahora, una
gran estudio de Baudelaire y el si- situaciones, sino un movimiento de arte puede recibir su significado de motivación judía para este interés, es
glo >u en el Proyecto Arcades& Al es- ida y vuelta entre ellas. varios contextos diferentes. En un posible sugerir que el vínculo entre la
tallar la guerra, con el proyecto inaca- Por tanto, pese al título de su obra, importante ensayo sobre la cuestión, tradición y la modernidad en la obra
bado, Horkheimer y Adorno conven- Benjamin considera que es significan- Gregory Ulmer habla de una obra, o de Benjamin es el concepto de repro-
cieron a Benjamin de huir a América te algo más que la mera reproducción significante, que se «remotiva. en un ducción. Aparece bajo distintos as-
a través de España. Pero, al llegar a de obras de arte en la era moderna contexto nuevo y forma la base del pectos en sus textos: en la imagen del
• la frontera de Port-Bou, le fue nega- (finales del siglo MX y siglo )a). En collage y el montaje postmodernoss. narrador de cuentos, en la concep-
do el paso y, aparentemente incapaz realidad, lo revolucionario es el pro- La intuición de Ulmer es que aparece ción de la traducción, en la valora-
de hacer frente a la idea de que le ceso de reproducción en sí: por ejem- una nueva forma de creatividad pre- ción de la mémoirc involontairc de
• apresara la Gestapo, se suicidó en la plo, el hecho de que el negativo cisamente donde la gente había pen- Proust, en el aspecto lírico de la poe-
noche del 25 de septiembre de 1940. fotográfico permite una verdadera sado que la reproducción solía pro- sía de Baudelaire y en la noción de
A la mañana siguiente, los guardas multiplicación de .originales.. Con la vocar la degradación del objeto transmisión cultural en el Proyecto
fronterizos, a quienes había impresio- fotografía, pues, aparece el espectro artístico. El segundo elemento del en- Arcades. Veamos cada uno de ellos
nado su muerte, permitieron que el del simulacro, aunque Benjamin nun- sayo de Benjamin que merece aten- brevemente.
grupo con el que viajaba entrase en ca le da ese nombre. La fotografía ción es su caracterización del cine. Si En el primer texto, •La labor del
España. •El suicidio —había escrito como simulacro supera la simple di- algunos de los primeros comentaris- traductor. (1923), Benjamin empieza
Benjamin en su estudio de Baudelai- ferencia entre original y copia. Este tas de cine habían intentado compa- diciendo que la tarea del traductor no
re— es el triunfo de la modernidad rasgo de la obra de Benjamín es el rarlo con los jeroglíficos egipcios o la está clara si se observa desde el pun-
en el terreno de las pasiones.' que tiene una im¡Sortancia crucial pintura clásica, el método de Benja- to de vista del público. Al contrario,
Aunque toda la obra de Benjamin para un teórico como Jean Baudri- min consiste, una vez más, en verlo hay que suponer que 4ningún1 poe-
está llena de ideas inspiradas sobre la llard. El centro de interés de Benja- como una nueva technik de arte, en ma está dirigido al lector, ningún cua-
modernidad, en todos sus aspectos, min no es el simulacro, sino la tad,- la que, a diferencia del teatro (donde dro al observador, ninguna sinfonía al
posiblemente ningun texto ha llama- nik (alemán para técnica; el término ' el público se identifica con el actor), que escucha.'. Es el texto el que debe
do más la atención, especialmente en tiene también la connotación de tec- el público ocupa la misma posición ser centro de atención. En este senti-
el debate sobre la postmodernidad, nología). Siguiendo con el ejemplo que la cámara. Esto implica dos co- do, es preciso tener en cuenta, en
que su ensayo •La obra de arte en la de la fotografía, vemos que, en ella, sas. La primera que, al contrario de lo principio, la diferencia entre el 'origi-
era de la reproducción mecánica... 4 . la técnica no es una parte accidental esperable, el público puede tener un nal y la traducción. Y aquí Benjamin
Aunque ostensiblemente escrito en el sino esencial del arte. Por eso una papel bastante activo al contemplar da un paso curioso. Afirma que no
tono de un análisis político sobre la obra de arte fotográfica puede no una película y, la segunda, que el debe creerse que un mriginal• está,
reproducción de la obra de arte, so- poseer el aura de una pintura clásica '- cine puede transformar •nuestro cam- sobre todo, herméticamente cerrado
bre todo en la era del cine y la foto- original, consagrada por la tradición, po de percepción.. Igual que Freud y a traducciones posteriores gracias a
grafía con su acceso de masas, I3en- pero tampoco es una mera negación - el psicoanálisis han sensibilizado a la una cualidad de pureza. Si hiera así,
jamin ofrece un astuto análisis de un de dicha aura. Ello no quiere decir . gente sobre los deslices en el habla y ningún texto (e incluso una interpre-
cambio fundamental en la calidad es- que Benjamin no elogie asimismo el 1 el inconsciente, en general —desde tación es una traducción) sobreviviría
tética de la obra de arte. Cuando el potencial democrático de la repro- luego existían antes de Freud, pero al momento de su elaboración inme-

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BENJAMIN BENJAMIN

<Hata. El texto, u objeto artístico, tie- [naciones y olvido. El relato es el ele- que, a juicio de Adorno, sólo Benja- podrían ser la 'vida después de la
ne una .vida después de la vida , que mento de la transmisión —también min podía explicar por completo. vida , de la modernidad'.
lo empuja en la historia a través de la llamada tradición por Benjamin— y la Tornemos nota sólo de dos aspectos Por su parte, Buck - Morss ilustra
tradición o, deberíamos decir, a tra- transmisión es fundamentalmente el • importantes del proyecto: el prime- esta cuestión con exactitud cuando se
vés de la traducción. Para usar el caso relato de una vida tras la muerte. El ro es que Benjamin basaba en él la refiere a la fascinación de Benjamin
concreto del que habla Benjamin, se relato es la «vida después de la vida« revolución arquitectónica que el uso por una figura de cera femenina que
trata de ver cómo la poesía francesa de las personas, igual que la traduc- del hierro y el cristal había hecho se ajustaba el corsé en el Musée Gra-
de Baudelaire puede traducirse fiel- ción es la vida después de la vida del posible. Los comentaristas han ad- vin. Buck-Morss observa: •Su acción
mente al alemán. No intentando una poema. El relato, que siempre presu- vertido aquí, sobre todo, que Benja- efímera está congelada en el tiempo.
traducción literal, sino con un •ligero pone una comunidad, es lo que con- mM estaba fascinado por las nuevas Es inmutable y desafía a la degrada-
toque del original•, es /a respuesta. vierte a un oyente en un narrador: •El relaciones espaciales entre interior y ción orgánica)". Lo que está aún por
Una traducción literal •destruye la punto crucial para el oyente sincero exterior que permitía el empleo del entender es cómo la figura de cera
teoría de la reproducción de signi- es asegurarse de la posibilidad de re- cristal; se podía llevar la calle al in- —o su equivalente estético, visible a
ficado y es una amenaza directa producir la historia.". Aquí vemos terior y ese interior estaba abierto al través del laberinto de la sociedad—
contra la comprensibilidad.'. La «re- que, como principio de reproduc- exterior. La diferencia entre público puede pasar a ser la «vida después de
producción del significado« es la tra- ción, el relato contiene también un y privado se iba haciendo proble- la vida« —la encarnación— de la his-
ducción del elemento poético de la principio de reversibilidad, cuando el mática. toria. Responder a esta pregunta es
obra, que es lo que necesita traduc- oyente se convierte en narrador. En segundo lugar, aunque Benja- empezar a desentrañar la esfera de
ción. Es parte de la obra. La repro- De nuevo con la poesía lírica de min se dedicó a desarrollar una filo- os escritos más enigmáticos de Ben-
ducción es parte de la obra. Éste es Baudelaire, como con la mémoire in- sofía de la historia y una historia so- jamín.
el argumento más notable de Benja- volontaire de Proust, se plantea la di- cial y cultural, como han indicado
min. Para ilustrarlo, afirma que, igual ferencia entre •remembranza« y •re- Buck-Morss y McCole, surge la cues-
que los fragmentos rotos de una vasi- cuerdo«. La remembranza deriva de tión del mecanismo por el que, en NOTAS
ja son distintos unos de otros y, sin una experiencia del recuerdo que, opinión de Benjamin, se podía repro-
ducir la modernidad, como la encar- Andrew Benjamin, Art, Mimesis and
embargo, constituyen la misma vasi- para empezar, no era consciente.
the Avant -garde, Londres y Nueva York,
ja, así los fragmentos diferentes y no Como el inconsciente freudiano, la nación efímera de la que hablaba Routledge, 1991, pág. 143. Véase tam-
literales de una traducción pueden remembranza produce la experiencia Baudelaire. ¿Cómo podían entender bién, a este respecto, una visión gene-
reproducir todo el original. El princi- (la madeleine de Proust), pero no es el teórico y el escritor de la tradición ral de la recepción de Benjamin en John
pio de la reproducción del sentido una experiencia en sí. Lo mismo ocu- la modernidad en su variante capita- McCole, Walter Benjamín and the And-
(no el significadcrliteral) está en la rre con lo lírico en la poesía de Bau- lista'siempre cambiante? Parece haber nonzies of Tradition, Nueva York, Cor-
palabra. •En el principio fue la pala- delaire: como conmoción traumática, acuerdo sobre el hecho de que, en el nell University Press, 1993, págs. 10-21.
bra., repite Benjamin a partir del Nue- la lírica se convierte en el principio •-- sentido más amplio. Benjamin inten- Sobre as repercusiones intelectua-
vo Testamento. El principio de la de la transmisión de la poesía como tó reconciliar una versión del mands- les de la experiencia judía de Benjamin,
véase McCole, W alter Benjamin and the
traducción —el principio de la repro- una especie de réplica, del mismo mo con una versión de la teología
Antinomies of Tradition, cap. 1, e Irving
ducción— es original, por tanto, y no modo que la nzémoire involontaire judía; el elemento marxista ofrecía un Wohlfarth, •0n some bwish motifs in
el objeto reproducido. empuja la vida hacia adelante, pese a análisis clínico de la realidad del ca- Benjamin•, en Andrew Benjamin (ed.),
En -El narrador de cuentos« (1936) que la conciencia pueda haber olvi- pitalismo y la teología judía ofrecía The Problenzs of Modenzity: Adonio and
se ve una estructura semejante. Lo dado los sucesos en cuestión. El su- una explicación de cómo se encarna- Benjamin, Londres y Nueva York,
que permite reproducir la historia jeto puede haber olvidado la base de ba la tradición en la más incorpórea •Warwick Studies in Philosophy and Li-
contada por el narrador no es su con- la lírica, o el recuerdo, pero éstos no de las formaciones culturales. La cla- terat-ure•, 1991, págs. 157-215.
han olvidado al sujeto. Una vez más, ve, sin duda, es entender que, para 3 Para un estudio más profundo de
tenido —no la información, como
dice Benjamin—, porque entonces no en el acto de reproducir la experien- Benjamin, la historia está incrustada este proyecto, véase Susan Buck-Morss,
Tbe Dialectics of Seeing: Walter Benja-
sobreviviría al momento de su narra- cia se observa la reversibilidad. en la modernidad, no separada de
mín and the Arcades Pro/ea, Can-brid-
ción inicial. Lo importante es, más En relación con el Proyecto Arca- ella, y que el objeto .original«, produ- ge, Mass., y Londres, MIT Press, 4. 3
bien, el relato en el recuerdo. El rela- des, la situación es mucho más com- '''' cido en un momento determinado, impr., 1991.
to es lo que permite que la memoria pleja. Los especialistas están empe- contiene la posibilidad de su repro- ' Walter Benjamin, -The work of art
retenga el contenido. Es decir, relato zando ahora a internarse en esta ducción dentro de él. La historia o, in the ase of mechanical reproduction»,
y memoria son homólogos con infor- estructura laberíntica, una estructura más bien, la comprensión histórica, en ///mninatiorns, trad. de Harry Zohn,

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Glasgow. Fontana/Collins, 3. impr., and Scholem, Can:bridge, Mass., Har-


para Francois Mitterrand y Michel Blanchot. Aunque existen buenas ra-
1979, págs. 219-253. vard Unwersiry Press, 1991,
Gregor,r Ulmer, -The object of post- BENJAMIN, Andrew, Art, Mimesis and tbe
Foucault (así corno para Alarilyn zones para rechazar el epíteto de ro-
criticism., en Hal Foster (ed.), 772e Anti- Avant garde, Londres y Nueva York,
-
Monroe), pero no para Maurice Blan- mántico en su caso (entre ellas, su
Aestbetic, Essays on Postmodern Culture, Routlege, 1991, caps. 9 y 10. chot, uno de los principales escrito- no aceptación del concepto de autor
Seattle, Washington, Hay Press, 6.' BENJAMIN, Andrew, Trandation and the res y críticos franceses de la posgue- corno origen), hay muchos más mo-
impr., 1989, pág. 85. Nature of Philosopby, Londres y Nue- rra y un pensador que ha ejercido tivos para afirmar que Blanchot es
Benjamin, ;Che task of the transla- va York, Routledge, 1989, cap. 4. enorme influencia sobre Foucault y un lúcido defensor del modernismo
tor-, en IlluminatIons, pág. 69. Buck Mortss, Susan, 772e Dialectics ofSee-
-
otros muchos. De sus textos críticos artístico. Ello no implica aceptar una
7 !bid., pág. 78. La cursiva es mía. ing: %Vatter Benjamín and the Arca- podemos deducir que a Blanchot no versión concreta del principio de
s Benjamin, .The storyteller., en Illu- des Project, Cambridge, Mass., y Lon- le preocuparía en absoluto; conside- creatividad original. En realidad,
nzinations, pág. 97. dres, MIT Press, 4.' impr., 1991.
• 9 John McCole cita un fragmento de CESAR, Jasiel, %Vatter Benjamin on Expe- ra que la escritura es autónoma y re- Blanchot ha tenido en cuenta la ad-
Benjamín que respaldaría esta posibili- dance and History: Profane ¡ilumina- sultado de una profunda soledad, por vertencia que representa la dialécti-
dad. McCole, Walter Benjamín and the :ion, Mellen, San Francisco, Edwin lo que una biografía o un currículum ca hegeliana, en la que, al final, todo
• Antinomias ofTradition, pág. 248, nota. Press, 1992. vitae tienen poca importancia a la se recupera dentro del marco del
1 ° Véase Buck Morss, The Dialectics
- David, Fragmentos de la moder-
FRISEIT, hora de ayudar al lector a capturar los Conocimiento Absoluto. Con el tiem-
of Seeing, pág. 369. nidad, Madrid, Visor, 1992, enigmas de una obra verdaderamen- po, asegura Hegel, la historia llegará
HANOELMAN, Susan A., Fragments of Re- te literaria. De hecho, el silencio de a su fin; el objetivo del sistema se
demption: Jewish 7bought and Litera- Blanchot sobre aspectos biográficos unificará en el proceso de llegar a a
VÉASE TAMBIÉN DT ESTE LIBRO ry7beory in Benjamín, Scholenz, and constituye una parte importante de su Toda la obra de Blanchot puede juz-
Levinas, Bloomington, Indiana Uni-
Adorno, Baudrillard. versity Press, 1991. proyecto literario. Para él, el objeto garse una negativa a aceptar la base
McCoca, John, Walter Benjamin and the literario es, al mismo tiempo, irreduc- de la filosofía de Hese' sobre lo in-
Antinomies ofTradition, Nueva York, tible (a explicaciones psicológicas o evitable de la homogeneidad implí-
PRINCIPALES OBRAS DE BENJAMIN Cornell University Press, 1993. sociológicas) e indeterminado (no es cita en el final de la historia.
NAGLE, Rainer, Theatre, Theory, Specula- posible nunca recuperar todo el sig- A diferencia de Joyce, n'anchor
Iluminaciones (1955), 4 vols., Madrid, (ion: Walter Benjanzirz and the Scenes „ nificado y la importancia de un texto no escribe prosa •ilegible.: tampoco
Taurus, 1990-1993. ofModemity,Baltimore, Johns Hops- literario). Saber si ello equivale, como compone textos explícitamente musi-
El origen del drama barroco alemán kins University Press, 1991. afirma Tzvetan Todorov, a una conti- cales, corno Mallarmé, aunque el au-
(1963), Madrid, Taurus, 1990. ainn, Gary (ed.), Benjamin: Philosophy, _ nuación del Romanticismo es quizá tor de Un . Coup de dés es un punto de
El Berlín denzónico, Barcelona, Icaria, Aesthetics, History, Chicago y Lon-
dres, Chicago University Press, 1989. una de las cuestiones clave para com- referencia importante para él. Por el
1987. prender la oeuvm de Blanchot.
El concepto de critica del arte en el ro- Wrriz, Bemd, 1Valter Benjamin, Barce- 1j contrario, la limpidez inmediata de
manticismo alemán, Barcelona, Ed. lona, Gedisa, 1990. A pesar de cierta oposición enér- los textos de ficción de Blanchot em-
62, 1988. WOHLFAITH, Irving, -Re-fusing theology: gica, Blanchot —que nació en 1907 puja al lector a esperar que su signifi-
Diario de Moscú, Madrid, Taurus, 1990. Some first responses to Walter Ben- y dedica su vida por completo a la cado sea igualmente accesible. La pri-
Infancia en Berlín hacia 1900, Madrid, jamin's Arcades Project., New German - literatura'— ha adquirido la reputa- mera frase de L'arr'ét de mort (La
Alfaguara, 1990. Critique, 39 (otoño de 1986), pági- ción de escribir una prosa que se en- sentencia de muérte)es ejemplar: .Es-
Historias y relatos, Barcelona, Ed. 62, nas 3-24. cuentra entre las más enigmáticas tas cosas me ocurrieron en 1938. .3
1991. WOHLFAITH, Irving, •On some Jewish
del francés moderno. Teniendo en Gradualmente, esta limpidez de esti-
Discursos interrumpidos. Torno I: Filoso- motifs in Benjamin, en Andrew Ben- cuenta que él mismo ha aclarado de lo y significado deja paso a una pro-
fía del arte y de la historia, Madrid, jamba (ed.), 772e Problents ofModerni- r
Taurus, 1992. sy: Adorno and Benjamín, Londres y _ forma indirecta parte de las motiva- funda oscuridad. Los nombres están
La metafísica de la juventud, Barcelona, Nueva York, Routledge, 1989, pági- ciones de su obra literaria en sus borrados, como en Kafka; el lugar
Paidós, 1993- nas 157-215. textos críticos', ésa es indudable- donde ocurren los hechos parece ser
Sonetos, Barcelona, Ed. 62, 1993. mente una afirmación excesiva. Por París, pero nunca se ofrecen direccio-
otro lado, dado que hay una fuerza nes precisas: •.1. es una mujer con una
_ que arrastra hacia un centro de atrac- enfermedad terminal, que parece
OTRAS LECTURAS Maurice Blanchot ción desconocido —sólo vagamente morir por deseo propio y a la que,

perceptible para quien escribe—, más tarde, parece ayudar a morir el
Arrot Roben, Necessaty /Ingles: Traditions En el Fontana Dictionary of Mo - I parece haber cierto grado de oscuri- narrador, que le administra un cóctel
and Modernity in Zafia, Benjamín derrz Thinkers (1983), hay artículos
1 dad integrado en el proyecto de letal de morfina y sedante, Los suce-
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- _
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sos parecen ocurrir en la época de la tica es anónima. Ello no significa que singularidad al convenir cada obra esencialmente visual, es una forma de
crisis de Múnich, pero el narrador da el autor esté simplemente intentando —por diferente que pueda ser de las capturar el objeto mediante el distan-
también la impresión de que los •he- esconderse en su obra; lo que quiere demás— en una repetición de la ins- ciamiento, o cosificación.
chas- involucrados son los relativos a decir es que la fuerza creadora de la titución. Ésa es la razón de que Slan- Muchas de las obras de ficción de
la propia escritura del relato, una es- obra borra, por sí sola, la presencia chot afirme que no existe nada con S'anchor juegan con el carácter para-
critura que el narrador se niega con- del autor. Desconocer totalmente la anterioridad a la obra y que toda la dójico de la imagen que transmite la
tinuamente a asumir, puesto que, en obra es desconocer totalmente a su obra es una reinvención del ejercicio mirada. La imagen es una proximidad
efecto, el tiempo de la redacción es autor. En realidad, aunque un autor de la escritura. Por consiguiente, des- producida por el distanciamiento. La
ambiguo. Un borrador inicial de la puede vincularse conscientemente a de el punto de vista de la institución soledad, la fascinación, la imagen y la
narración ha sido destruido y ello re- un libro o a un cuadro, su verdadero literaria, toda obra individual se ca- mirada forman, pues, una serie funda-
mite el momento de la escritura a un mérito artístico es apreciable sólo racteriza por su carácter no literario. mental de conceptos que impregnan
pasado distante, mientras que, en el en la variedad de sus obras, en su Dada la singularidad de la obra li- su escritura. Esta escritura provoca in-
momento de la muerte de el na- oeuvre. Sin embargo, dados los cam- teraria, podemos ver por qué, en la determinación. Quien está fascinado
rrador dice que los hechos que relata bios que se producen en la orienta- primera etapa de su carrera, S'anchor no ve un objeto o figura real, -porque
no han ocurrido aún. Los rasgos de ción creativa a lo largo del tiempo, el había hablado sobre la importancia lo que se ve no pertenece al mundo
este tipo en la obra de Blanchot han carácter exacto de la oeuvre no está de la soledad del escritor. La soledad de la realidad, sino al medio no deter-
fomentado su definición como ele- jamás presente para ningún autor. se refiere a la forma en que una obra minante de la fascinación- 5 . Con un
mentos confusos e indeterminados. Para comprender una obra en su sin- literaria y su proceso de elaboración paso característicamente enigmático,
Y la propia teoría literaria de Blan- gularidad es preciso entender el mo- están aislados de todo lo demás, in- Blanchot separa también la imagen del
chot ofrece cierta base para ello. vimiento que la ha producido. Así, cluso si, como ocurre a menudo, alu- significado y la relaciona, en cambio,
De sus textos críticos de los años 50, para entender la obra escrita, es ne- de a otras obras. La soledad significa con el éxtasis. Muchos afirmarían que
resulta claro que Blanchot se opone cesario entender las condiciones de que quien lea la obra va a experi- esta idea no se transmite apenas en el
a cualquier apropiación fácil del tex- posibilidad de la escritura. Ello signi- mentar su carácter único. La soledad hecho más bien melancólico de la fic-
to auténticamente literario. Sin em- fica, casi de forma inevitable, que el es la forma en que habla la obra, una ción de Blanchot.
bargo, así ocurre con frecuencia, por- carácter de la determinación de cual- forma de hablar que es también el si- Aunque es imposible afirmar que
que pocos críticos leen de verdad lo quier obra individual no esté nunca lencio del escritor. Blanchot varía li- es posible excavar toda la profundi-
que aseguran haber leído. Prefieren, inmediatamente presente. geramente la frase y dice que la obra dad del proyecto modernista de Blan-
más bien, escribir sus comentarios En relación con la obra literaria en es el medio para que tome forma el chor, es evidente que la muerte, el
basándose en lecturas que incorporan particular, la naturaleza de la determi- silencio del escritor. De acuerdo con olvido, la espera y la finalidad consti-
las obras nuevas a categorías ya exis- riación adopta otro giro, que parece su afición a la figura retórica del 0x:U tuyen otra serie importante de con-
tentes; cuando el crítico ve que no se ser un elemento importante en el moron, el silencio se convierte en la ceptos sobre los que se apoya gran
puede interpretar así una obra, es ejercicio de la escritura de Blanchot. forma de hablar del autor. Como éste parte de su escritura. La muerte, se-
demasiado tarde para leerla; porque Se trata de que •la esencia de la lite- se encuentra dentro de una oeuvre, gún la famosa declaración de Blan-
el crítico es ya un autor y, por tanto, ratura es escapar a cualquier determi- en parte producida por su deseo chot, no puede experimentarse. En
incapaz de convertirse en lector. La nación esencial o afirmación que la consciente o inconsciente, el descu- lugar de pretender convertirla en el
verdadera lectura, implica Blanchot, estabilice o incluso la concrete: nun- brimiento de la forma de esa oeuvre sujeto de una proyección imaginaria
es la que respeta la singularidad de la ca está ya allí, siempre tiene que ha- es interesante para el autor y para el o intentar una reconstrucción feno-
obra literaria. La verdadera lectura es llarse o ser reinventada- 4. En otras pa- lector. La obra es una fuente de fasci- menológica de la muerte, Slanchot
una crisis en la lectura. Éste sería el labras, el impulso modernista de nación del escritor, precisamente por- escribe la experiencia de la imposibi-
ímpetu modernista y vanguardista en Slanchot implica que no haya certe- que no está determinada de manera lidad de la experiencia de la muerte.
el enfoque de Blanchot durante los za, ni mucho menos, de que exista consciente. Sólo lo está la obra espe- Sin duda es éste el sentido que tiene
años 50. Lo acompañan otras carac- una cosa llamada institución artística, cífica. La fascinación es la mirada de la vuelta a la vida de ..1.• en La senten-
terísticas que siguen figurando, en un mecanismo que estaría esperando la soledad en la oeuvre. La fuente de cia de muerte. Tanto L'attente
gran parte, en su obra reciente. En para recibir la nueva obra en el mar- fascinación por excelencia es la ima- como Au moment voutu exploran las
primer lugar, contra quienes tachan gen; y resulta interesante que Blan- complejidades de la espera y el olvi-
co previamente existente. Dar priori-
fácilmente a Blanchot de romántico, dad a la institución anística por enci- chot no acepta automáticamente que do. Esperar es algo que sucede, se
podemos advertir que, para él, toda la imagen sea un reflejo sin proble- hace imposible, mientras que eLolvi-
ma de la singularidad de la obra de
obra verdaderamente literaria o artís- arte es, en realidad, eliminar esa mas del objeto. La imagen, que es do está atrapado entre el momento

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determinado y el momento deseado; Blanchot procede en su escritura con En sus últimos trabajos, la forma ' Maurice Blanchot, Le Livre á venir,
olvidar es siempre, en este sentido, arreglo al principio de que el azar elemental y fragmentada de narrativa París, Gallimard. •Idées•, 1959, pági-
una forma de recordar. produce incertidumbre e indetermina- (récit) deja paso a una serie de frag- nas 293-294.
Teniendo en cuenta la tendencia ción. Aquí está implícita una co- Maurice Blanchot, L'Espace tittdrai-
mentos marcados, como si el orden
nexión entre indeterminación, y la
re, París, Gallimard, •Idées., 1955. pági-
de Blanchot a indicar formas en las pudiese reconstituirse si lo desea el
na 26. La cursiva es mía.
que no se produce la finalidad o, al reversibilidad del tiempo, e indeter- lector. Aquí, Blanchot está escribien- 6 Maurice Blanchot, Le pas au - detri,
menos, no puede experimentarse, minación, que corresponde al tiempo do, en realidad, para dar el mayor París. Gallimard, 1973, pág. 133.
vemos que el último hombre, en el irreversible. Muchos de los textos de poder posible a la indeterminación. ' Maurice Blanchot, •Le dernain
libro del mismo título, es en realidad ficción de Blanchot plantean la cues- Desde el punto de vista del lector, joueur (sur l'avenir du surréalisme), en
como todos los demás hombres; es tión de si algo ha ocurrido o no: por ello implica dar poder a la mayor va- La Nouvelle Revue Franvaise, 172 (abril
como si el último hombre —que de- ejemplo, la muerte de ti. en La sen- riedad posible de significados. Sería de 1967), págs. 283-308.
bería ser totalmente singular— fuera, tencia de muerte. O, una vez más, por apartarse de la lógica de Blanchot
de hecho, un hombre corriente. Del el azar, hay un momento que llega y pretender ser capaces de explicar su
mismo modo, la •Itima palabra. es se va. En cierto momento de Au mo- funcionamiento más oculto. Por el VÉASE TAMBIÉN EN ESTE LIBRO
una variación de .hay., que no es una ment voutu, Claudia parece detenerse contrario, es preferible ser prudentes
palabra realmente, sino lo que indica y mirar al narrador, come invitada y, de esa forma, acercarse más quizá Bataille.
el ser del mundo en general. La últi- por azar. a hacerlo. Poco despues, el a la genuina comprensión.
ma palabra sugiere algo reconocido. azar y el momento vuelven a estar Brevemente, y para terminar, es
La última palabra requiere explica- presentes: •en ese momento. el narra- necesario hacer referencia al interés PRINCEPALES OBRAS DE BLANCHOT
ción, es decir, más palabras. dor ve el rostro de Claudia •por azar•. de Blanchet por el concepto de co-
En la época de las etapas interme- •¿En ese momento? —pregunta el na- munidad. Él argumento en el que Thomas l'Obscur, París, Gallimard, 1941.
dia y última de Blanchot (los cerdos rrador—. ¿Y cuándo era ese momen- quiere insistir es que una verdadera Aminadab, París, Gallimard, 1942.
posteriores a los años 60), el azar asu- to?.. Existen dudas de que algo haya comunidad no tiene más fin que su La sentencia de muerte (1948), Valencia,
me una presencia más visible. La ocurrido realmente. Es una escena de propia existencia. En la medida en Pre-Textos, 1985.
muerte adquiere toda su significación indeterminación. El azar no puede que es así, la comunidad es indeter- La Pan du jeu, París, Gallimard, 1949.
sólo en relación con el azar. En Le pas considerarse simplemente un suceso Tomás el oscuro (nueva versión) (1950),
minada, imposible de representar o
Valencia, Pre - Textos, 1982.
a u- delá, Blanchot se refiere a lo im- aislado y diferenciado, sino que ex- simbolizar. No es posible comunicar
El espacio literario (1955), Barcelona,
predecible de la muerte'. Pero su ela- tiende su manto por encima del con- su carácter. Para el escritor, esa co- Paidós, 1992.
boración más sistemática del azar se junto, como la tinta de un pulpo. munidad es el público compuesto de L'Aliente toubli, París, Gallimard, 1962.
encuentra en un ensayo sobre André Si el verdadero suceso es el azar, lectores desconocidos sin los que él El paso (no) más allá (1973), Barcelona,
Brecon y el surrealismo': En él, Blan- escribirlo equivaldrá, por supuesto, a no podría existir, pero que no poseen Paidós, 1994.
chot habla del azar como un tipo de explorar la indeterminación. Blanchot una identidad definible. Para Blan- La risa de los dioses, Madrid, Taurus,
experiencia particular, en el que el plantea la perspectiva de que la pro- chot —como para Bataille—, el lec- 1976.
sistema predominante de pensamien- pia escritura sea un suceso y, por tan- tor indeterminado y desconocido Falsos pasos, Valencia,Pre-Textos, 1977.
to se ve sacudido. El azar es lo que to, esté sujeta a la indeterminación. Michel Fozzcault tal y como yo le imagi-
constituye el vacío en el que debe
deja fuera el pensamiento existente; Ya hemos visto que esta posibilidad no, Valencia, Píe-Textos, 1992.
aventurarse todo escritor.
es lo que deja de lado, sin que, por se anunciaba en la idea de la oeuvre
ello, deje de tener efecto. La muerte como producto del deseo inconscien-
llega, pero el momento exacto en el te del escritor. Hay un sentido en el NOTAS OTRAS LECTURAS
que llegará es cuestión de azar. Por que el escritor no va donde le lleva
consiguiente, en la medida en que no su escritura. El escritor escribe en el ' Esta es, en esencia, la nota del edi- CLARK, Timothy, Den-ida, Heidegger,
se tenga en cuenta el azar, la muerte vacío: la página blanca, en palabras tor relativa a Blanchot. Blancboti sources ofDerrida's notion
no llega; flota en la indeterminación. de Mallarmé. Así, en gran parte como Sobre todo, en La Part du jeu, and practice oí &amurre, Cambridge
L'Espace littéraire, Le Ltvre ti venir y y Nueva York, Cambridge University
En este sentido tan específico, por el una exploración del azar, la escritura
rEntretten Press, 1992.
que se interesaban los surrealistas, la de Blanchot presupone que no existe
3 Maurice Blanchot, L'arrét de mor! FOUCAULT, Michel y BLANCHOT, Maurice,
muerte escapa a una lógica de causa nada anterior a ella; éste es el senti- (Deatb Sentence), trad. de Lydia Davis, Maurice Blancbot, Pie nought from
y efecto porque la causalidad es la do más profundo de la noción de so- Nueva York, Station Hill, 1978, pági- ¡be Ourside, de Michel Foucauil, frad,
marca de la determinación. Así, pues, ledad y autonomía en la escritura. na 1. de Brian Massurni; Michel Foucault as

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• • . •

. JOYCE JOYCE

Imagine Ni,,:, de Maurice Blanchot. graduó, en 1902,,Joyce hablaba italia- te la Primera Guerra Mundial. Con la
recordar. Platón, en Fedro, llama a la
trad. de Jeffrey NlehIntan, Nueva no, francés, alemán, noruego literario sospecha de que tenía una ulcera de
mnemotecnia memoria defectuosa,
York, Zone Books, 1987, y latín. Para su disgusto, Joyce nunca estómago, la salud de Joyce se dete-
sin admitir, al parecer, que no sería
GALLOP, Jane, Intersectionsi A Reading of estudió griego antiguo, pese a que le rioró progresivamente. En enero
necesaria si la memoria no fuera ya
Sade with Bataille, Blanchot and Klo- fascinaban los mitos de Grecia. Deci- de 1941 murió de una úlcera perfora-
. ssousla, Lincoln, University of Hebras- defectuosa. La mnemotecnia es, pues,
dido a hacerse un nombre, Joyce dejó da de duodeno y fue enterrado en el
ka Press, 1981. una confirmación del carácter arbitra-
Dublín para ir a Paris poco después cementerio de Fluntern, en Zúrich.
Házialán, Geoffrey H., Beyond Forma- do del signo que propone Saussure.
lismi Litera:y Essays, 1958 1970, New
- Glas, afirma Derrida, es también una de graduarse, con el fin de estudiar Ulysses es un día (16 de junio de
Haven, Yale University Press, 1970. medicina en la Sorbona. 1902) en la vida de Molly y Leopold
especie de velatorio, de duelo. Por
Ltaawrsorz, Joseph, Proa-in:ay, Letrinas, En 1904, Joyce vivía en Martellow Bloom, presentado con arreglo a la
último, Derrida asegura que La tarje-
, M'anchor, Batalle and con:marica- ta postal está •impregnada de Joyce•: Tower, famosa gracias a su novela versión popular y romanizada del
• tion, La Haya-Boston, M. Nijhoff, • Es sobre todo el motivo de Babel, Ulysses, y empezó a escribir Stephen poema de Hornero y que contiene,
1982. Hero (Stephen el héroe), el anteceden- desplazados, elementos biográficos y
que obsesiona los Envois- 4 , en el sen-
SHMORO, Steven, Passion and EXCCSS: te de Retrato del artista adolescente, numerosos detalles extraídos de la
Blancbot, Bataille and Litera ry tido, entre otras cosas, de significado
que apareció por primera vez como historia de Dublín y de la literatura
• Tbeocv, Tallahassee, Florida State Uni- como multiplicidad de voces, signifi-
; serial en Egoist, en 1914. Esta última inglesa (por ejemplo, Shakespeare).
versity, 1990. cado siempre abierto.
obra se publicó mientras Joyce vivía Si bien es cierto que el poema de Ho-
La referencia a Derrida nos recuer-
en Trieste con su esposa, Nora Sana- mero y la biografía de Joyce propor-
da que, además de constituir una in-
cle, cón la que se había fugado en cionan al lector puntos de referencia
fluencia fundamental en la literatura
1904. También en 1914 publicó, tras relativamente fijos para entender mu-
James Jayne y la crítica literaria del mundo anglo-
grandes dificultades con el censor, chos de los detalles de la novela, la
sajón y otros lugares, Joyce ha sido
En su libro sobre Ulysses y Finne- Dublineses, una colección de relatos contingencia es también un aspecto
asimismo fuente de inspiración para
gans Waket, Jacques Derrida relata cortos de los que cada uno presenta esencial. Recordemos que la contin-
nuevas ideas, el centro para una nue-
que Joyce estaba presente en su pri- un aspecto concreto de la •parálisis• gencia fascinaba a Baudelalre y le dio
va comprensión de la escritura en el
mer libro, la Introducción al Origen (Joyce) de la vida en Dublín. Como pistas sobre el carácter de una expe-
siglo )cki una fuerza que ha produci-
de la geometría de Husserl (1962), y dice un crítico, •Dublineses es, en riencia genuinamente moderna, cen-
do la reevaluación de la relación en-
también en un ensayo fundamental, cierto sentido, la explicación del exi- trada en la conciencia. ' , Estar lejos de
tre arte y realidad. La referencia a De-
«La farmacia de Matón., publicado por lio de Joyce. 5 . Después de pasar el casa y, sin embargo, sentirse en casa»:
rrida nos recuerda también que
primera vez en 1968 2. Derrida confir- resto de la guerra en Zurich, Joyce y esto era, a juicio de Baudelaire, lo
existen pocos filósofos o escritores en
ma además la importancia de Joyce su familia llegaron a París en 1920. que distinguía la experiencia moder-
la última parte del siglo )0( en quie-
para entender sus obras Glas (1974) Fue allí donde Sylvia Beach publicó na de todas las demásá. Estar lejos de
nes no haya influido —consciente o
y La tarjeta postal (1980). Frente al Ulysses en 1922, en una edición de casa significa estar abierto a lo nuevo
inconscientemente— Joyce. Aunque
significado untvoco de Husserl, Derri- 1,000 ejemplares, y fue también allí y efímero, lo flotante y lo transeúnte.
éste escribió varias obras importantes
da presenta el .equivoco generaliza- donde Joyce escribió Finnegans Antes de la modernidad, la experien-
— como Dubliners (Dublineses) y
do» de Joyce 3. .La farmacia de Platón• Wake entre 1923 y 1938. En mayo cia podía ser .hogareña, es decir,
A Fortran' of ¡he Artist as a Yourzg
se refiere a Thot (presente en Finne- de 1939, la obra fue publicada, por predecible y conocida. La experiencia
Man (Retrato del artista adolescen-
gans Wake), el dios egipcio de la es- fin, por la editorial de T. S. Eliot, Fa- moderna se enfrenta a lo impredeci-
te)—, además de Ulysses y Finnegans
ber & Faber, y el primer ejemplar lle- ble, lo desconocido, el cambio y la
critura, que, según Platón, fue el Wake, aquí vamos a centrarnos esen-
inventor del falso recuerdo, el recuer- gó a manos de Joyce a tiempo para novedad, cuando no lo busca activa-
cialmente en estos dos últimos textos,
su quincuagésimo séptimo cumplea- mente (como hace Baudelaire). En
do como nemotecnia (en oposición al porque son los que han ejercido ma-
recuerdo vivido). Thot estaría presen- ños, el 2 de febrero. cambio, quedarse en casa es estar en
yor influencia en el pensamiento y la
te como inspiración del procedimien- Un año después de que estallara la un sistema cerrado, en el que el equi-
literatura.
to mnemotécnico en el que se pue- guerra, Joyce seguía indeciso sobre librio y la repetición (de lo conocido)
James Joyce nació en Dublín
den forjar nexos entre los elementos qué hacer. Tuvo la oportunidad de ir siempre predomina y lo nuevo se ve
en 1882. Asistió a la Clongowes School
más diversos. En dicho procedimien- a América, pero decidió solicitar visa- excluido o reprimido.
y el Belvedere College de dicha ciu-
to, lo importante es no crear el pro- dos suizos para él y su familia y, en ¿Cómo puede aplicarse un marco
dad, antes de obtener un titulo de
pio objeto en la memoria, sino elabo- diciembre de 1940, los Joyce llegaron baudelairiano al Ulysses de Joyce si, al
lenguas modernas en University Co-
a Zúrich, donde habían vivido duran- hablar de la novela, acabamos de se-
rar un procedimiento que permita llege, también en Dublín. Cuando se
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JOYCE JOYCE

ñalar que Homero y la biografia son no puede predecirse mediante una dades concretas de la escritura, como causalidad. Eso es lo que les hace in-
dos puntos de referencia estables y estructura o marco (simbólico). Pue- las frases— cuenten por si mismas en determinables. La narrativa clásica del
bastante •hogareños? El intento de de resultar extraño, dado que la es- su relación con otras. En este senti- siglo Kv sigue el principio de causa-
responder a esta pregunta debería critura de Joyce parece ocuparse pre- do, la poesía es la presentación defi- lidad corno verosimilitud al pie de la
.
permitir una mayor comprensión del cisamente de la vulgaridad de la nitiva de un estilo. Si Hornero consti- letra. Todo tiene una razón y hay una
proyecto de Joyce. existencia, es decir, de las cosas que tuye un telón de fondo estructural o razón para todo. Aunque Joyce, en
Aunque la Odisea de Hornero —y parecen estar lo más lejos posible de narrativo para Ulysses, es preciso in- parte, también apoya la verosimilitud
el catolicismo— ofrecen una especie lo exótico y lo heroico. El tipo de terpretarlo como una estructura abier- en Ulysses, la mayor parte de la-nove-
de ancla para el texto, es completa- fragmento que centra claramente la ta capaz de acomodar una serie casi la —su aspecto más innovador— la
mente provisional. Lo que tiene im- cuestión sería como el siguiente, del infinita de hechos. Y pocos comenta- desafía. Cualquier duda sobre la pos-
portancia en Hornero, para Joyce, es principio del capítulo 5: ristas han dejado de señalar la cuali- tura de joyce se desvanece en Finne-
que el héroe de la Odisea deja su dad poética de la escritura de Joyce; gans Wake.
Mr. Bloom pasó circunspecto al
hogar, deambula, toma direcciones un ejemplo fundamental que se cita Ulysses, como proclamó constante-
lado de camiones en el muelle de sir
indeterminadas, pese a que, al final, es el monólogo de Molly Bloom en el mente Joyce, es el .relato. del día.
John Rogerson, pasado Windmill
también lucha para regresar. Así ocu- Lane, el triturador de semilla de lino último capítulo. Sin embargo, son Pero no se refería simplemente a que
rre con Leopold Bloom. Sale de 7 Ec- de Leask, la oficina de correos y te- menos los que han sido capaces de los hechos de la novela ocurran du-
cies Street y no vuelve hasta el final légrafos. También podría haber vincular el estilo de Joyce al proble- rante el día. Tampoco querf a decir
de la novela, un regreso que no es dado esa dirección. Y pasado el ho- ma de la escritura con el que lucha- que la vista sea el sentido más usado
nada predecible. En realidad, aparte gar de los marineros. Se apartó de ba. El estilo es su respuesta a la cues- en la obra. También quería explicar
del tituló (lo que Genette llamaría el los ruidos matutinos del muelle y que, en cuanto a su sintaxis, su gra-
tión de cómo hacer que aparezca la
avanzó por Lime Street. Al llegar a mática, su vocabulario y su estructu-
paratexto«) y la estructura, no se ob- contingencia en la novela. Si los au-
las cabañas de Brady un chico esta-
serva ninguna otra evocación explíci- tores realistas del siglo mX se esforza- ra oracional, Ulysses es perfectamente
ba recostado contra las pieles, su
ta de Hornero, y Joyce eliminó, en la ron por hacer que los detalles contin- legible. Es decir, en un nivel inmedia-
cubo de asaduras atado, fumando
versión definitiva del libro, los títulos una colilla mordisqueada. Una niña gentes parecieran necesarios para el to, Ulysses se comunica con el lector.
homéricos dejos capítulos. Gran par- más pequeña con cicatrices de ecze- conjunto del tejido narrativo de la Para mejor comprender lo que está
te de Ulysses es •coincidencia de en- ma en su frente le miraba mientras novela, la estrategia de _loyce es, por en juego en Finnegans Wake, debe-
cuentros, discusiones, bailes, peleas, sostenía sin fuerzas el aro golpeado el contrario, poner en peligro la posi- mos regresar previamente a un frag-
la vieja sal del tipo hoy aquí y maña- del barril. Dile que si fuma no cre- bilidad misma de la narración, ha- mento clave de la novela anterior. En
na en otro sitio, vagos nocturnos, cerá. ¡Déjalo! Su vida no es un lecho ella, Stephen Dedalus reflexiona so-
ciendo que los detalles contingentes
-; de rosas'.
toda la galaxia de acontecirnientos.', sean relativamente autónomos, su- bre un tema que también es impor-
hechos que sirven para crear •un me- El paseo de Bloom consiste, casi bordinados a nada más que su pro- tante para Homero: la naturaleza de
dallón en miniatura del mundo en el de manera surrealista, en una serie de pia existencia (poética). Para una la paternidad. La paternidad —afirma
que vivimos.". El azar cumple, pues, encuentros fortuitos. Es un paseo de sensibilidad decimonónica, Joyce Stephen— puede ser una ficción le-
un papel. El texto de Joyce está situa- contingencia casi pura. Casi., porque hace lo imposible: basa sus novelas gal. ¿Quién es el padre de cualquier-
do en un punto en el que el azar —o hay que escribir el texto. Es necesa- en la contingencia y la indetermina- hijo para que cualquier hijo le ame o
la contingencia— y la estructura coin- rio convertir el detalle tnsignificante e ción. Ésta surge precisamente porque él ame a cualquier hijc)?•' °. Stephen
ciden. Ésta es su gran aportación a la impredecible en un signo para que la estructura narrativa completa, fun- prepara el terreno para la idea de que
literatura del siglo )0c y, desde luego, pueda abandonar parte de su condi- dada en una lógica de causalidad, no la paternidad está llena de incerti-
a la de lengua inglesa. ción camera y comunicarse, es decir, , es nunca más que parcialmente visi- dumbre, aunque sólo sea porque,
El problema de la escritura que re- pasar a forma parte de la novela de ble. Los hechos que ocurren por azar, para empezar, nadie puede estar ab-
_
sulta evidente en un texto como Ulys- joyce. Con el fin de evitar, en frag- de forma contingente e impredecible, solutamente seguro de quién es su
ses es cómo dar forma literaria —es- rnentos como el que citamos, que la no tienen un origen discernible. Joy- padre. Si, en segundo lugar, es a tra-
crita— al azar y la contingencia; en denotación se convierta en un mero ce desarrolla el aspecto activo y ha- vés del principio del padre como se
otras palabras, a los hechos del aquí inventario, aparecen dos estrategias: ; blado del lenguaje, más que, en ter- da un nombre, la incertidumbre men-
y ahora. Kristeva ha llamado a este -- cionada se vuelve incertidumbre res-
1) el desarrollo de una estructura na- minología de Saussure, el lado de la
aspecto de la escritura de „loyce una rrativa mínima; y 2) el desarrollo de • langue, el sistema fijado. Los hechos pecto a la propia identidad. Como ha
•revelación«, con lo que quiere decir un estilo definido. Para Joyce, el esti- de habla son en principio, como el destacado el psicoanálisis, el princi-
que el texto es la escritura de lo que lo hace que las palabras —o las uni- azar, únicos. Desafían la lógica de la pio del padre —el nombre del pa-

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JOYCE NIETZSCHE

dre- es crucial para la función co- duraría trescientos años. Dicha afir- " !bid., pág. 112. ELLMANN, Richard, Jame s Joyce, Barcelo-
municativa del lenguaje. El principio mación resulta confusa -al menos lbíd, pág. 118. na. Anagrama, 1991.
del padre, pues, es el principio de de- pág. 205. HART, CliVC y HAVNIEN, David, James
en cierto sentido- porque suprime
terminación, significado y causalidad. la posibilidad de que, al final, Finne- pág. 117. Joyce's •Ulysses.: Critica! Essays, Berke-
" /bid, pág. 497. ley, Los Ángeles. University of Califor-
Joyce desafía este principio en Finrze- gans Wake sea un texto indetermina-
nia Press, 1977.
gans Wake al hacer que e/ significa- do que, corno tal, no posee significa- Geert, Tbe Frencb Joyce, Ann
LERNOLIT,
do sea totalmente fluido. E/ escenario do definitivo. Es, más bien, la función Albor, University of Michigan Press,
VÉASE TAMBIÉN EN ESTE LIBRO
que le permite hacerlo es la noche, el poética la que hace que el significa- 1990.
mundo de /os sueños. Una técnica do sea indeterminado; definitivamen- Lin, A. Walton, 77e Art of James Jo_vc e.
Benveniste, Derrida, Kafka, Kristeva, illethod and Design in Ulysses and
que utiliza es /a de aglutinación: pa- te es un desafio a/ padre. Es análoga Saussure.
labras y frases que corren juntas de al principio de que el lenguaje no po- Finnegarzs Wake, Londres, Oxford
forma que pasan a ser ambiguas. Los see un núcleo esencial, sólo un siste- University Press, 1964, reimpr. 1968.
significados posibles se multiplican, ma de diferencias. PRINCIPALES OBRAS DE JOYCE
como en -meandertal•", •automuta-
ción» 11, •caosmos." y •continuarra- Música de cámara (1907). Madrid, A.
ción•"; lo que podría denominarse, NOTAS Corazón, 1979. Friedrich Nietzsche
con arreglo a Finnegans Wake, una Dubitneses(1914), Madrid, Cátedra, 1993.
técnica •poliglutura1. 15. Ademáj, ve- ' Jacques Derrida, Ulysses, granzopbo- Retrato del artista adolescente (1916), La filosofía de Nietzsche ha sido
mos que contribuye a la distorsión, o ne. Deux mots pourJoyce, París, Galliée, Madrid, Alianza, 1994. fundamental para el pensamiento
•proceso de deformación• 16 (= una 1987. La segunda parre de este libro fi- Exiliados (1918), Madrid, Cátedra, 1990. contemporáneo, especialmente para
obra en progreso): una escritura que gura en inglés como •Two words for J'o- Ulysses, París, Shakespeare 8: Co., 1922; el que ha adoptado una postura an-
utiliza ritmos, entonaciones y modu- yce., trad. de Geoff Bennington, en De- Ulysses (The Corrected Text), Londres, tihumanista, ejemplificado en la obra
rek Attridge y Daniel Ferrer (eds.), The Bodley Mead, 1986, Ulises, Barce-
laciones para dar fluidez a todas las lona, Tusquets, 1994, de Michel Foueault. Que un pensa-
formas fijas de comunicación. Sin Post-Structzzralist Joyce, Cambridge, dor tan singular y dificil haya podi-
Cambridge University Press, 1984, pági- Finnegans Wake (1939), Barcelona, Lu-
embargo, dar fluidez a los significa- men, 1993. do ejercer tal impacto es aún más
nas 145-159.
dos no es despojar de significado a/ Véase Jacques Derrida, •Plato's Stepben el héroe (1944), Barcelona, Lu- sorprendente si recordamos que la
texto. Si es llegar a conocer el plano pharmacr, en Dissenzinatzlon, trad. de men, 1984. biografía de Nietzsche y su presunta
semiótico (Kristeva) y reprimido del Barbara Johnson, Chicago. Chicago Cartas escogidas, 2 vols., Barcelona, Lu- influencia sobre el nazismo han con-
lenguaje. Una vez sumergido en el University Press, 1981. págs. 61-171. men, 1982. tribuido a complicar la tarea de
texto, el lector se encuentra•frecuen- 3 Derrida, Ulysses, Granzopbone. Deux
Escritos críticos, Madrid, Alianza, 1983. interpretar sus textos. Pese a ello,
temente con que aquél se apodera de nzots pourJoyce, pág. 28. - ; Poesía completa, Madrid, Visor, 1987. Nietzsche ha sido el elemento cen-
' Derrida, -Two words for Joyce-, en Anna Livia Plurabelle, Madrid, Cátedra,
él, que el tipo normal de critica n 1992. tral, en tiempos recientes, de una re-
el que el crítico comenta el texto- se Attridge y Ferrer (eds.), Post-Structura- novación en el pensamiento que se
lia Joyce, pág. 151. Epifanías, Barcelona, Montesinos, 1992.
hace rnuy difícil, si no claramente niega a aceptar la necesidad de una
Armin Asno/d, James Joyce, Nueva
imposible. En pocas palabras, se hace York, Frederick Ungar, 1969, pág. 26. relación más o menos estable entre
dificil cosificar Finnegans Wake, pre- C. Baude/aire, Tbe Painter of Mo- • OTRAS LECTURAS sujeto y objeto.
cisamente aquello para lo que el dera Life: Selected Writings on Art and Friedrich Nietzsche nació en 1844
•principio del padre. sería el requisi- Artists, trad. de P. E. Charvet, Mar- AlTRIDGE, Derek y FERRER, Daniel, Post- en Sajonia, Prusia. Era hijo de un mi-
to previo. mondsworth, Penguin, 1972, págs. 399- Structuralist Joyce, Cambridge, Cam- nistro luterano, Ludwig, que murió
Por consiguiente, las preguntas so- 400. bridge University Press, 1984. en 1849 a los treinta y seis años, des-
bre qué ocurre en la novela, quiénes 7 James Joyce, U1ysses(7lbe Corrected BENSFOCK,Barnarcl, Tbe Augnzented Nintb, pués de haberse vuelto loco un año
son los principales protagonistas, Text), Londres, The Bodley Head, 1986, • Proceedings of the Nintb International antes. El hijo, que siempre tuvo mala
quién es el que sueña realmente esos pág. 528. James Joyce Syntposiunz, Frankfurt, salud, pensó que él también estaba
8 !bid. 1984, Syracuse, Syracuse University
sueños, son imposibles de responder pág. 58. condenado a morir a los treinta y seis
9 IbM. , Press, 1988. (Véanse las contribucio-
con certeza, aunque muchos lo han ¡Ud., pág. 170. nes de Kristeva y Derrida.) años. Como nos cuenta el estudio clá-
intentado. El propio Joyce predijo " James Joyce, Finnegans Wake, ELLMANN, Richard, (ilysses orz ¡he Liffey, sico de Walter Kaufmann', desde los
que, con Finnegans Wake, había pre- Londres, Faber & Faber, 1939, 3. ed., Londres y Boston, Faber 8: Faber, seis años, después de la muerte de
parado a los críticos una tarea que reimpr. 1971, pág. 19. 1972, Edición corregida. 1984. su hermano en 1850, Nietzsche fue

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.
NIETZSCHE NIETZSCI-IE

criado por su madre en un hogar como un pensador radica/mente ho- gar uno o más aspectos de la vida miento de que la vida no puede co-
completamente femenino. A partir rizontal. Antes de seguir, es necesa- para ser coherente. Ésa es la razón de nocerse en función de ninguna ver-
de 1858 asistió al viejo internado de rio explicar su relación con lo que Nietzsche afirme que el idealis- dad definitiva, corno implicaba la me-
Pforta, y sobresalió en religión, litera- que hemos denominado pensamien- mo niega la vida, hasta el punto, en tafísica idealista. Esn era la vida como
tura alemana y los clásicos, pero tuvo to •horizontal.. la era moderna, de producir conse- tragedia. El arte se convierte en una
malos resultados en matemáticas y di- lntuitivamente, se podría pensar cuencias patológicas. La vida es siem- forma de no tener que negar la vida.
bujo'. En esa época el joven estudian- que invocar el eje horizontal es colo- pre irreductible; es una totalidad de La vida trágica se representa, sobre
te empezó a sufrir las jaquecas que le car el pensamiento en un nivel único diferencias, no una identidad. Una todo, en el espíritu de la música
acompañarían durante la mayor par- y que, por tanto, Nietzsche está qui- identidad puede representarse y po- como encarnación del principio dio-
te de su vida de adulto. zá proponiendo cierta igualdad de nerse en una escala utilizando una nisiaco (la primera edición del libro
Después de graduarse en Pforta pensamiento. ¿No podría ser que el medida común. La horizontalidad, de Nietzsche se llamó, de hecho, El
en 1864, Nietzsche fue a la Universi- pensamiento horizontal sea precisa- por el contrario, se refiere a la im- nacimiento de la tragedia. Desde el
dad de Bonn y estudió teología y filo- mente el pensamiento democrático? posibilidad de hallar jamás una esca- espíritu de la música). Por esa razón,
logia clásica. En 1865 abandonó la La respuesta es que el pensamiento la que se ajuste a la diferencia. La Nietzsche se centra en el papel estra-
teología y fue a Leipzig, donde sintió horizontal no tiene nada que ver con horizontalidad abre el extremo 'ideo- tégico del Coro en el drama griego
el influjo del Schopenhauer de El el concepto de igualdad o democra- léctico• (de lenguaje privado) del presocrático. Lejos de ser equivalen-
mundo como voluntad y como repre- cia. La horizontalidad no se refiere, proceso comunicativo. Y da pie a te al público (que nunca confundiría
sentación. Como se le consideraba un en absoluto, a ningún tipo de isomor- cuestiones relacionadas con todo el el drama con la vida), como había
alumno brillante, la Universidad de fismo, sino todo lo contrario. En efec- proyecto de Nietzsche sobre las que propuesto Schlegel, el Coro cree que
Basilea le ofreció la cátedra de filolo- to, el pensamiento horizontal es in- volveremos. la acción sobre el escenario es real y
gía clásica a los veinticuatro años, a comparable; no se puede medir en Lo que acabamos de explicar sobre reacciona ante la vida mediante una
pesar de que todavía no había obteni- una escala; porque es el pensamien- el idealismo y la voluntad de poder intoxicación rítmica. Así, el Coro da
do el doctorado. Se hizo rápidamente to de la diferencia, no de la identidad. está más cerca del punto al que llegó forma al impulso dionisiaco. Apolo,
lo necesario para que se lo concedie- En muchas ocasiones, a lo largo de su el pensamiento de Nietzsche que de el dios de los poderes plásticos y la
ran tras el nombramiento, y Nietzsche obra, Nietzsche se refiere a la idea su punto de partida. En su primer li- adivinación, produce el aspecto vi-
dio clases en Basilea entre 1869 convencional de la igualdad como bro, El nacimiento de la tragedia, sual y cosificador del drama. Sin em-
y 1879, año en e/ que se vio obligado ejemplo del orden de lo Misnio. Por publicado en 1872, cuando tenía bargo, Nietzsche advierte que el as-
a retirarse por mala salud. Su vida ejemplo, Nietzsche asegura que la veintiocho años, Nietzsche introduce censo del platonismo destruyó el
productiva continuó hasta enero igualdad ideal de la democracia o el dos principios que estarían presentes teatro trágico griego desde dentro: el
de 1889, cuando se desv a neció en cristianismo es una igualdad funda- en sus escritos hasta el final: el prin- platonismo, un idealismo superior,
Turín con los brazos rodeando el cue- mentalmente hornogeneizadora, con cipió dionisiaco —el principio del generó el rechazo de la necesidad de
llo de un caballo al que el cochero una 'moralidad de rebaño.. Del mis- caos, el sueño y la intoxicación— y un elemento intoxicador. La filosofía
había azotado con crueldad. Nunca mo modo, Nietzsche afirma que el el principio de Apolo, es decir, el moderna —y ciertos aspectos de la
recobró la cordura, y murió en 1900. principio idealista', planteado con principio del orden y la forma. Am- ciencia modema—, heredera del pla-
Entre 1872 y 1888, Nietzsche publi- frecuencia (según dice) por los •fisió- bos están vinculados a una disposi- tonismo, niega la vida: elimina el es-
có nueve libros y preparó otros cua- logos., de que toda vida humana es ción estética, de la vida como obra de píritu de la música, la aceptación del
tro para su publicación. Su obra mag- reducible, en definitiva, al •instinto de arte. Así, en el primer Prefacio a la elemento trágico. El conocimiento es
na, La voluntad de poderío, basada conservación., es una teleología ho- obra, escrito en 1871, Nietzsche afir- tan dominante en la cultura moderna,
en notas de sus cuadernos de los mogeneizadora e injustificada. La ma: .El arte representa la tarea más que la gente ya no es capaz de ac-
años 80 y publicada por primera vez, vida humana es, más bien, una ex- elevada y la actividad genuinamente tuar. .El conocimiento mata la acción
póstumamente, en 1901, ofrece la presión de vida y, al mismo tiempo, metafísica de esta vida.6 . En esta pers- —afirma Nietzsche en El nacimiento
mejor confirmación de su postura ra- una woluritad de poder» 5. Lo que dis- pectiva, los griegos demostraron que de la tragedia—, la acción requiere
dicalmente anti-idealista. Éste es el minuye la credibilidad del principio el arte —como una especie de volun- los velos de la ilusión.7.
factor que ha atraído especialmente de conservación son todos los hechos tad de ilusión compuesta por los Si la filosofía ha pasado a negar la
la atención de pensadores rant° post- (violencia, sacrificio, vida insalubre, principios de formación e intoxica- vida en la esfera del conocimiento, el
modernos como postestructuralistas 3. etc.) que lo contradicen. Cualquier ción— podría servir de verdadero lu- cristianismo lo ha hecho en la esfera
Dicho anti-idealismo total es el que esencialismo o teleología, al ser una gar estratégico para la vida. El arte de la moralidad. Aquí, Nietzsche- se
nos permite describir a Nietzsche versión del idealismo, tiene que ne- pasa a equivaler, así, al reconoci- centra sin piedad en el papel de la
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NIETZSCHE
NIETZSCHE

culpa cristiana. Este terna nos permiti- nados por la ética de la igualdad ye
articulación más sostenida de una serie una genealogía. En tales circunstan-
rá mencionar otro: la relación entre apego a la utilidad que va con ella
de aspectos esenciales en el pensa- cias, Nietzsche elabora su contro-
actitudes activas y reactivas. La morali- los que están en el mercado quieren,
miento de Nietzsche. Entre ellos: la vo- vertido concepto de la -recurrencia
dad cristiana propone un principio todos, la misma cosa. -Ningún pastor
luntad de poder; la recurrencia eterna; eterna., la doctrina del juego de la di-
fundamental de igualdad entre indi- y un rebaño. Todos quieren lo mis-
el nihilismo; el anti-idealismo; y una re- ferencia y la incertidumbre. En otras
viduos humanos. La dificultad, señala mo, todos son lo mismo: quien pien-
visión de todos los valores. Aquí vamos palabras, la forma adoptada por la
Nietzsche, reside en que la vida mues- sa otra cosa se dirige voluntariamente
a desarrollar, sobre todo, los dos pri- voluntad de poder es esencialmente
tra que hay diferencias: diferencias a la locura-s. El rebaño, inexorable-
meros aspectos, porque recientemente impredecible. Es: •el disfrute de todo
entre fuertes y débiles, ricos y pobres, mente reactivo, no puede concebir
han adquirido enorme importancia en tipo de incertidumbre, experimenta-
dotados y mediocres, hombres y mu- ningún otro fin que el de ser felices.
el pensamiento contemporáneo. lismo, como contrapeso a este fatalis-
jeres; en realidad, la vida tiene todo Se trata de la felicidad que va obliga-
Como explicamos más arriba, debe mo extremo; la abolición del concep-
tipo de diferencias imaginables. Sin toriamente asociada a la igualdad y la
entenderse que la voluntad de poder to de necesidad; la abolición de la
embargo, para mantener la ilusión (es utilidad. La muchedumbre pide a Za-
es el fundamento de la postura anti- -voluntad.; la abolición del -conoci-
decir, el ideal) de igualdad, el cristia- ratustra que les lleve al Hombre Defi-
idealista de Nietzsche. Es la concre- miento en sí mismod a. Como el mun-
nismo inventó la culpa, o •mala con- nitivo, inventor de la felicidad. Zara-
ción del principio de afirmación de la do no tiene objetivo, está en un flujo
ciencia•, que se verían obligados a tustra representa al hombre superior,
vida. La voluntad de poder es, en continuo y -sin rumbo. de transforma-
aplicarse a sí mismos aquellos que se que, como superación de todo idea-
cierto sentido, equivalente a todo lo ción. Todo reaparece; el mundo no
considerasen diferentes en sentido lismo en favor de la vida, es también
que verdaderamente ocurre en la es, afirma Nietzsche, un mundo de
positivo. Porque, con su diferencia la superación del hombre; porque el
vida, lo que convierte a nuestro au- novedades infinitas. El sistema no
(especialmente la sensación de supe- hombre también es un ideal que no
tor, a juicio de algunos, en un pensa- está en equilibrio, pero tampoco está
rioridad), resultarían ser responsables corresponde a nada en la realidad. El
dor radicalmente realista. La voluntad infinitamente abierto. Es como un
del sufrimiento de otros. pensamiento reactivo, sin embargo,
de poder es el -mundo., dice; y conti- juego (de dados) que se juega un
Dentro del esquema nietzscheano, desea la felicidad, no los riesgos y
núa: •Este mundo es la voluntad de número infinito de veces, de modo
la culpa es la marca del pensamiento el sufrimiento que frecuentemente
poder ;y no otra cosa! Y vosotros mis- que los resultados acaban por repe-
reactivo, el pensamiento de los débi- acompañan a la creatividad y origina-
mos sois también esta voluntad de tirse. El principio de la recurrencia
les, no necesariamente débiles en lidad. El hombre definitivo (equiva-
poder ¡y no otra cosa- 9 . No existe eterna es el más enigmático de toda
sentido físico, sino en el sentido de lente al hombre en general) es un
ningún sujeto voluntario tras el po- su filosofía. En ocasiones, Nietzsche
quienes no pueden aceptar la vida tal hombre reactivo; el hombre superior,
der, ninguna realidad tras el juego de parece querer vincularlo a la teoría de
como es, quienes se dejan.sobernar b superhombre, es el individuo activo
fuerzas, ninguna división entre la vo- la termodinámica del siglo XIX (de ahí
por el resentimiento y tienen que in- con la determinación de ser creativo
luntad y su otro, o entre ser y nada, las referencias a un volumen constan-
ventar ideales para ocultar sus debili- y evitar que su vida se sumerja en
o entre sujeto y objeto; porque la te de energía y al desequilibrio del
dades. La culpa, en suma, es el arma la ética calculadora de la igualdad,
propia división forma parte de esa sistema); en otros casos, la cuestión
que emplean los menos dotados con- Como ejemplo del hombre superior,
voluntad de poder. Ésta es una plu- parece centrarse en la voluntad de
tra los espíritus libres y originales que Zaratustra no puede —casi por defi-
ralidad de fuerzas a partir de las cua- poder y la disposición a no negar nin-
alcanzan frecuentemente nuevas altu- nición— ser comprendido; porque
les deben construirse las identidades, gún aspecto de la vida —incluso sus
ras. En vez de intentar elevarse a esas encarna el pensamiento horizontal y,
no una unidad que yace tras las apa- hechos más horribles—, tal como
nuevas alturas para mantener la igual- como consecuencia, su lenguaje pue-
riencias. La revisión de valores equi- ocurre, afirma, cuando se divide la
dad, niegan que dichas alturas exis- de traducirse raras veces al habla nor-
vale a la fabricación de valores vida en un lado bueno reconocido y
tan. En su obra más poética y famosa, mal. Es decir, el pensamiento del
dentro del juego de fuerzas de la vo- un lado malo rechazado; aquí, la vo-
Así habló Zaratustra, Nietzsche hace hombre superior es poético.
luntad de poder. Los valores siempre luntad de poder es la voluntad del
que éste —ejemplo de -hombre supe- La figura del hombre superior alcan-
tienen que afirmarse; no existen •en regreso eterno de todo suceso, sea el
rior— baje de b montaña a hablar za su apogeo en La voluntad de pode-
si mismos., como pensaba Kant. que sea. Amorfati —el amor al desti-
con b gente en el mercado. Como la río, publicada póstumamente. Es inte-
Una vez más, la voluntad de poder no— es la expresión que utiliza y que
gente que está en el mercado entien- resante el hecho de que Nietzsche se
no tiene origen ni propósito, princi- mejor evoca esta perspectiva.
de sólo el lenguaje de la utilidad (el caracterizaba a sí mismo como un pen-
pio ni fin, porque éstos también son Desde luego, el proyecto de
lenguaje del valor de cambio y el sador póstumo, en quintaesencia: un
categorías idealistas y, por tanto, me- Nietzsche es exorbitante. Pero no es
cálculo), nadie logra entender a Zara- pensador desafinado con su época.
tafísicas. O, por lo menos, el mundo una locura, no es irracional; posee su
tustra, y le toman por un loco. Domi- A pesar de ser póstumo, este libro es la
no tiene otro origen que el que le da propia lógica definida y coherente, y

276
277
NIETZSCHE SIMMEL

ello hace que sea comunicable y sus- z !bid. Así habló Zaratustra (1883, 1884, 1885), sidera que la' objetividad es mascu-
ceptible de ser aprovechado para los 6 Aquí puede indicarse b obra de Ba- Madrid, Alianza, 1994. lina, evocan las preocupaciones femi-
taille, Blanchot, Deleuze, Foucault, De- Más cilla del bien y del mal (1886), Ma- nistas de Irigaray; sus textos sobre
fines de un anti-idealismo de fin de
rricla, Lyocard e Irigaray. drid, Alianza, 1994. dinero e intercambio reproduce algu-
siécle. ¿Cuáles son, entonces, sus in- La genealogía de la moral (1887), Ma-
convenientes? ' Para Nietzsche, cualquier principio nos de los intereses de Mauss y Ea-
que se presente como verdad subyacente drid, Alianza. 1994.
Para empezar, si la voluntad de El crepúsculo de los ídolos (preparado
taille; y su teoría del suceso y la críti-
y coherente para los distintos datos de las ca del realismo en la modernidad
poder es todo lo que existe, ¿por qué apariencias es idealista. Con toda proba- para su publicación en 1888; 1.' ed.
se siente Nietzsche obligado a expli- bilidad, cualquier forma de reduccionis- 1889), Madrid, Alianza, 1994. recuerda al primer Barthes.
carla? Quizá habría podido responder mo (sea en forma de esencia o de teleo- El anticristo (preparado para su publica- Aunque muchos de sus contempo-
afirmando que no la explica, sino logía, de propósito) sería idealista de ción en 1888; I.' ed. 1895), Madrid, ráneos le consideraban un académi-
que, a través de su estilo de filosofar, acuerdo con el esquema de Nietzsche. Alianza, 1994. co idiosincrásico y una afrenta para la
ofrece un ejemplo de ella. Sin embar- S Véase Friedrich Nietzsche, Beyond Ecce Homo (preparado para su publica- universidad por su estilo de ensayo
Good and Evil, trad. de R. J. Hollingda- ción en 1888; 1.' ed. 1908), Madrid, indocumentado y su elección de ma-
go, cualquiera que lea su obra ve que Alianza, 1994.
hay un mensaje que acompaña el es- le, Harmondswordi, Penguin, 1973, re- terias 'prosaicas-, visto retrospectiva-
impr. 1974, pág. 26. Aurora, Madrid, M. E., 1994.
tilo. Nietzsche es un pensador ex- mente, Simmel resulta un pensador
6 Friedrich Nietzsche, The Birtb of
traordinario, de eso no cabe duda; innovador y original que vio la nece-
Tragedy, en The Birth of Tragedy and
Pero también lo dice él. No escribe 77.3e Case of Wagner, trad. de Walter sidad de analizar los fenómenos so-
No publicado por Nietzsche
poesía pura. Por tanto, hay que juz- Kaufrnann, Nueva York, Vintage BOoks, ciales contemporáneos y estar infor-
gar sus teorías como movimientos en 1967, págs. 31-32. mado filosóficamente. Aún más; para
La voluntad de poderío (fragmentos se-
el juego de la filosofía; negarlo es ' !bid., pág. 60. leccionados de los cuadernos de Nie- Simmel, escribir sobre la sexualidad,
negar una dimensión importante de , Friedrich Nietzsche, Thus Spoke Za- tzsche de la década de 1880; 1.' ed. el dinero y la sociabilidad era tam-
su pensamiento. Por otro lado, admi- rathustra, trad. de R. J. Hollingdale, en 1901; ed. ampliada 1906), Madrid, bién un modo de vivir dichos fenó-
tirlo es levantar sospechas sobre la Harmondsworth, Penguin, reimpr. 1974, Edaf, 1981. menos. A través de sus análisis —so-
pág. 46. bre todo, Pbilosopbie des Geldes (La
posibilidad de que exista un pensa- 9 Friedrich Nietzsche, The Will to
dor radicalmente heterogéneo. filosofía del dinero) y 'La metrópolis
Power, wad. de Walter Kaufmann y R. J.
En segundo lugar, el antHdealismo Hollingdale, Nueva York, Vintage OTRAS LECTURAS y la vida mental—, Simmel se hizo
de Nietzsche parecería alzarse .o caer Books, 1968, sec. 1067, pág. 550. La cur- famoso poi su retrato sociológico de
ante la posibilidad de que un suceso siva es de Nietzsche. KAUFMANN, W2IICI, Nietzsche: Philoso- la conciencia en la modernidad, una
pueda reducirse a su decripción; lbíd., sec. 1060, pág. 546. Ser, Psycbologist, Antichrist, Nueva conciencia que se sabía individuali-
esta afirmación es claramente dudosa York, Vintage, 1968. dad autónoma.
MAGNI" Bemd, MILLER, St2IIICy y MILEUR, Nacido en Berlín en 1858, Simmel
si la metáfora está en el corazón del • Jean Pierre, Nietzsche's Case: Philoso- fue el menor de siete hijos. A lo largo
-

lenguaje, tal como han argumentado VÉASE TAMBIÉN EM ESTE UBRO


phy as/and Literature, Nueva York,
pensadores como Kristeva. Londres, Routledge, 1993. de su vida insistió en que nadie, en
Por último, si Nietzsche quiere evi- Bataille, Baudrillard, Deleuze, Foucault. NErtionAs, Alexander, Nietzsche: Life as casa de sus padres, tenía idea de una
tar ser álguien que •niega• la vida, ¿no Literature Cambridge, Mass., Harvard cultura genuinamente intelectual, y
tiene que aceptar que la vida impli- University Press, 1985. que fue un amigo cercano de la fami-
ca, en parte, la negación de la vida?, PRINCIPALES OBRAS DE NIEuSCHE lia, el editor musical .jullus Friedlán-
¿que una voluntad de ilusión puede der, quien le mantuvo durante gran
Libros preparados por el propio _ parte de su vida académica. En la
no sólo adoptar la forma artística,
sino quizá también la forma de una Nietzsche para Sil publicación Georg Simmel Universidad de Berlín, a la que llegó
voluntad de felicidad? en 1876, Simmel estudió psicología,
El nacimiento de la tragedia (1872, Como Georg Simmel es contempo- historia, Filosofía e italiano. En 1881
1874, 1886), Madrid, Alianza, 1994. • iáneo directo de Ferdinand de Saus- obtuvo su doctorado con un ensayo
Consideraciones intempestivas (1873 -
sure, Sigmund Freud y Émile Duck- titulado •Descripción y valoración de
NOTAS 1876), 4 vols., Madrid, Alianza, 1988. heim, muchas tendencias dentro de distintas opiniones de Kant sobre la
Humano demasiado humano, Madrid,
Walter Kaufman, Nietzsche, Nueva sus ideas se cruzan con temas de los naturaleza de la materia•. Durante
M. E., 1993.
York, Vintage Books, 3. cd., 1968, pá- La Gaya ciencia (1882), Madrid, M. E., pensadores de su tiempo. Sus escritos quince años, hasta 1900, Simmel en-
gina 22. 1994. • sobre la sexualidad, en los que con- señó como Privatdozent en la Univer-

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SISBIEL SIMMEL

• sidad de Berlín, con los honorarios de gran variedad de mercancías cuando tra en el ámbito de la ley de lo Mis-
al estimulo y ejemplifica la actitud
• sus alumnos como base de ingresos. el dinero sustituye a las transacciones •hastiada» del paisaje urbano moder- mo. Porque el dinero es el instrumen-
Aunque concursó para una serie de de trueque, así el impulso intelectua- no. Después de dejarse arrebatar por to de la equivalencia: el valor de cam-
puestos en la universidad (uno de lizado permite que el individuo se todo tipo de distinciones, dicha acti- bio —lo que Sirnmel llama también la
ellos, en la Universidad de Heidel- constituya mediante una variedad de tud se convierte en •una indiferencia. reducción de la calidad a la canti-
berg, donde le apoyó Max Weber), acciones e interacciones y, por tanto, dad— es un principio general que
ante ellas'. Empieza a descender so-
• una conjunción de antisemitismo y no se limite a las rutinas y los rituales bre la ciudad una especie de mono- destruye la •uma• específica del ob-
conservadurismo académico provocó fijos de la tradición. Aunque quizá jeto. Por esta razón, es frecuente que
tonía, cuando inicialmente Qhistórica-
que hasta los últimos tiempos de su Simmel concede un nuevo sabor y un a la gente no le agrade que se dé va-
mente?, ¿psicológicamente?; Simmel
carrera, en 1914, no le llegara el nom- nuevo aire a la ruptura con la tradi- no lo explica) habla un sentido de lor monetario a una gran obra de arte
bramiento para la cátedra de filosofía ción, ése no es el factor por el que fascinación y participación, (la Mona Lisa, por ejemplo). O, al
en la Universidad de Estrasburgo, a resulta más original. Su principal menos, si hay que atribuir un precio
Como Marx y Durkheim, Simmel
los cincuenta y seis años. Cuatro años aportación es, más bien, proponer reconoce la aparición de la división a una obra genial, debe ser tan alto
más tarde 'noria. que la vida urbana genera una acti- que resulte casi inimaginable. Porque
del trabajo y la correspondiente dife-
En 'La metrópolis y la vida mental., tud psicológica fundamentalmente el carácter extraordinario y original
renciación económica y social. Sin
Simmel ofrece un esbozo analítico de nueva: el estar •de vuelta de todo•. de la obra constituye la base de su
embargo, a diferencia de Marx, inten-
la interacción entre conciencias indi- Ello se debe a que, una vez liberada ta perfilar sus efectos culturales. En importancia. Su naturaleza irreprodu-
viduales y la dudad moderna. Como del tiempo reversible dé la tradición cible es lo que la distingue de un ob-
concreto, Simmel llama la atención
Ferdinand Tánnies y otros antes que —en el que se considera que la vida jeto artesanal, en el que la peculiari-
sobre lo que llama »el predominio del
él, Simmel llama la atención sobre es eminentemente repetitiva—, la dad reside en la técnica. Pero lo que
espíritu objetivo sobre lo subjetivo.
cómo contrasta la vida urbana, en su conciencia individual se sumerge en en la sociedad moderna. En términos resulta oportuno para el terreno del
sentido moderno, con la tradición. En el flujo del tiempo irreversible de la arte sirve también para otros ámbitos
generales, el •espíritu objetivo , equi-
la ciudad, los lazos formales entre los ciudad. La experiencia pasa a estar de la vida moderna, en relación con
vale al impulso de cosificar la vida so-
individuos sustituyen a los vínculos dominada por la expresión de Baude- el dinero.
cial. La cosificación es el resultado de
afectivos más tradicionales; con el as- !aire: •Lo transitorio, lo fugitivo, lo las mediaciones, desde el dinero, las Por ejemplo, en su conocido estu-
censo de la burocracia y la ciencia, la contingente.. dio de la prostitución, Simmel dice
leyes y la escritura hasta el crecimien-
vida se hace muy diferenciada, ya no Aunque Simmel no lo sitúa exacta- to de los medios de comunicación. que evoca la degradación humana
tiene un contenido fijo, sino que se mente en esos términos, claramente porque los seres humanos se convier-
Cosificar un objeto es liberarlo de su
caracteriza por formas abstráctas, de implica que la experiencia moderna ten en un medio (cuando Kant afir-
contexto «original. y traducirlo a va-
las que la principal es el dinero. An- es inseparable de una transformación ma que el imperativo categórico es
rias formas simbólicas. Para Simmel,
tes de entrar en más detalles, advirta- de la conciencia en la que el yo se por tanto, la diferenciación es insepa- que siempre hay que tratar a las per-
mos que, en la metrópolis, el dinero, hace casi hipersensible a cada detalle sonas como un fin en sí mismas) y
rable de la cosificación y, en menor
como instrumento de intercambio, de la existencia, y la conciencia se medid*cle la representación. porque lo que, en esencia, debería
permite la transferencia de la mayor basa en el carácter transitorio de la En el libro de Simmel La filosofía ser la posesión más personal de una
variedad imaginable de mercancías existencia. Por tanto, de una forma del dinero, que pasamos ahora a re- mujer en una relación humana, se
porque representa una medida co- extraña, la conciencia moderna convierte, en realidad, en propiedad
, visar, la cosificación se explica con
mún a todas ellas; por tanto, es un es una conciencia de la muerte, no pública. Simmel reconoce, no obstan-
referencia al arte. En un contexto tra-
gran elemento nivelador. como un suceso definitivo que se re- te, que puede existir un aspecto cul-
dicional, el arte se encarna casi por
Con el dinero como ejemplo, el pite, sino como algo desplazada me- tural a la hora de entender la prosti-
completo en una técnica (artesanal).
ensayo de Simmel sugiere que la ciu- diado a través de las múltiples face- tución, porque ésta no tiene en todas
Con la modernidad, en cambio, apa-
dad está, en principio, tejida por for- tas de la existencia efímera. Esta partes el carácter negativo que ha
rece el objeto artístico, el objeto se-
mas y mediaciones de todo tipo. Los hipersensibilidad ante la vida moder- p ara d o de la técnica que lo ha adquirido en Occidente. Desde un
vínculos afectivos en y entre grupos na y su complejidad, afirma Simmel, punto de vista ligeramente distinto,
producido. Sólo como objeto puede
dejan paso a lazos formales entre in- produce la necesidad de no dejar pa- podríamos preguntar en qué sentido
tener la obra de arte un valor mone-
dividuos; y Simmel cree que ello per- sar más que un volumen controlable la economía muy desarrollada puede
tario o de cambio. Y tener valor de
mite una mayor libertad. Porque, del de estímulos intelectuales y sensoria- hacer que la prostitución se convier-
cambio significa, en el sentido más
mismo modo que el vendedor de les. Más allá de cierto punto, el me- ta en modelo de las relaciones-huma-
general, que el arte —como tantas
productos puede traer al mercado canismo psíquico deja de responder otras cosas en la vida moderna— en- nas. Esta noción parece excesiva: se

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SIMMEL SIMMEL

basa en la idea de que toda relación Por la misma razón, también es posi- cian las tareas en el conjunto de la economía— es inseparable de una-
• impersonal es, en potencia, una re- ble el cinismo, la sensación de que economía, menos justificada está la concreción total del proyecto de la
lación de medios, mientras que no existen valores elevados. Es típica división del trabajo en función del modernidad. No obstante, su sutileza
otra forma de abordar In cuestión es de la actitud cínica la convicción de sexo. Aunque Simmel (siguiendo una consiste en proponer que las mujeres
decir que el concepto de profesiona- que todo se puede comprar. vieja tradición) cree que las mujeres se incorporen a la esfera pública en
. lización —vivir gracias al propio Ea- Corno el dinero está privado de están más cercanas a la •naturaleza. sus propios términos, en función de
lento— es un proceso general igual- cualidades, actúa de estímulo para que los hombres, las •formas y cos- sus capacidades específicas como
mente plausible y producido por la todo tipo de posibilidades. En el es- tumbres fijas de la vida matrimonial mujeres. Así, las mujeres son mejores
economía de dinero. cenario moderno, éste es el sentido que se imponen a los individuos van en el diagnóstico médico que los
Dentro de un gran volumen de re- en el que el dinero permite una ma- en contra del desarrollo personal de hombres porque tienen la capacidad
ferencias históricas, etnográficas y yor libertad. Como instrumento libe- la pareja.'. Dado que el matrimonio de empatía con otros. Por el contra-
psicológicas, Simmel destaca las que rador, el dinero produce la desperso- sigue incluyendo elementos de la tra- rio, la ceguera de Simmel es quizá
considera características fundamenta- nalización porque tiende a arrancar a dición (es decir, dado que todavía que, para atribuir a las mujeres una
les del dinero. Lo más importante es las personas de los profundos lazos hay mucho que cosificar), limita el identidad que sea sólo suya, con fre-
que el dinero, como ya hemos dicho, afectivos que les hacen más conscien- desarrollo personal de las mujeres, cuencia naturaliza sus cualidades, con
es el principio de equivalencia o me- tes de su .libertad personal.. Paradó- especialmente, porque ellas, más que lo que corre el riesgo de elaborar una
diación, que por sí solo no tiene va- jicamente, Simmel dice que la inde- los hombres, se han visto obligadas a psicología femenina (por ejemplo, la
lor. Su significado se halla en lo que pendencia de los lazos afectivos que soportar la carga de ser las transmi- periferia de la naturaleza de una mu-
puede comprar. Ello no quiere decir inicia el dinero provoca también cier- soras de la tradición. jer está supuestamente más conecta-
que el dinero, mal empleado, no pue- ta dependencia respecto a los demás. • Como queda perfectamente claro da con su centro; la naturaleza de la
da convertirse en un fin. Pero una Porque el dinero •nos ha dado la úni- • en sus otros textos, Simmel creía que mujer es más homogénea que la del
economía monetaria plenamente de- ca posibilidad de unir a las personas las mujeres debían obtener su liber- hombre, etc.). A pesar de ello, ten-
sarrollada es la que está siempre en excluyendo todo lo personal.'. Así, tad, igual que los hombres; aquí hay dríamos que preguntar si se puede
movimiento, y en la que rara vez se aunque hay cierta sensación de sole- que interpretar libertad en el sentido acceder a las limitaciones de Simmel
acumula el dinero. dad en la ciudad moderna, engendra- moderno de libertad de los vínculos por otra vía que no sea la raíz de la
Otro rasgo clave del dinero en el da por la ruptura de los lazos afecti- tradicionales. A este respecto, Simmel cosificación que él señala. Después
análisis de Simmel es que, como prin- vos, informales y sociales, cuando se afirma que las mujeres deben ser ca- de todo, es también el teórico de la
cipio de equivalencia, es totalmente lleva el individualismo a su forma paces de incorporarse a la cultura ob- sociedad conflictiva y heterogénea,
abstracto, una pura forma. Como tal, más compleja y desarrollada, incre- jetiva. Aunque ésta asume el aspecto temas que expresan el tono de los
puede tener infinitos contenidos. En menta el contacto con los demás y, de la cultura en general y, por tanto, tiempos postmodernos al acabar el
este sentido es un instrumento de li- por tanto, puede aumentar la proba- se considera neutral en materia de siglo x.X.
bertad, porque, al contrario que en bilidad de que se formen vínculos sexos, Simmel no duda en designarla Una limitación más grave del mé-
una situación de trueque, muchas co- emocionales con un círculo de gente corno masculina. De hecho, la oposi- todo de Simmel que la que muestra
sas diferentes pueden tener el mismo más amplio. ción que muestran a veces las muje- su análisis de la condición femenina
valor de cambio. Como el dinero es Con el desarrollo de la economía res contra la ley no debe, asegura es su insistencia en la oposición en-
también una forma de cosificación, es monetaria, la condición de la mujer Simmel, interpretarse como una opo- tre tradición y vida moderna. Como
un conocimiento del valor a través se transforma. Con la eliminación del sición contra la ley en sí, sino contra consecuencia, la libertad, la ciudad,
del precio. carácter cerrado de la vida familiar, la ley que ha acabado por encarnar el dinero, la sexualidad y el amor, el
El dinero sirve también para nive- las mujeres pueden entrar en la esfera eficazmente los intereses masculinos. trabajo, etc., se consideran modernos
lar. Destaca lo que las cosas tienen en pública como trabajadoras remunera- La ley sigue teniendo vestigios de un (es decir, opina que son predominan-
común. Por consiguiente, puede con- das. El auge del movimiento feminis- propósito reconocido detrás de ella, temente formas de mediación) por-
ducir a la actitud hastiada en la que ta, afirma Simmel, se debe indudable- • pese a que debería ser, en su calidad que se han liberado de las restriccio-
se ha perdido el sentimiento del va- mente al hecho de que los avances de instrumento abstracto, una forma nes tradicionales. Sin embargo, ahora
lor: 'Aquel de quien se ha apoderado tecnológicos, acompañados de . una pura como el dinero. han surgido dudas sobre si hay casos
el hecho de que la misma cantidad de división del trabajo más intensa, han En términos generales, pues, el empíricos de sociedades en las que
dinero puede procurar todas las po- hecho que gran parte del trabajo de apoyo que Simmel da a las mujeres las mediaciones, en el sentido moder-
sibilidades que ofrece la vida puede las mujeres en el hogar sea redundan- —en la familia, en relación con la ley no, no existan previamente. En otras
también acabar de vuelta de todo.'. te. En efecto, cuanto más se diferen- y la justicia, en el arte, el amor y la palabras, lo que hay que preguntar a

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SOLLERS SOLLERS

Simmel es si la propia modernidad no FRISBY, David. Georg Simule!, Londres, Al margen de la posición con res- Francos Mauriac había alabado Le
es más mítica (y, por tanto, tradicio- Tavistock, •Key Sociologists-. 1984, pecto a su obra o su personaje, no Dffl.
nal) que real. KAREN, Michael et al. (eds.). Georg Slot- hay duda de que la creación, por par- Durante su adolescencia y juven-
mel and Con ten:por-cuy Sociology, te de Sollers (junto con otros), de la tud, Sollers recibió la influencia de
Dordrecht, Boston, KluYver Academic
revista literaria Te/ Quel en 1960, y la Baudelaire, Poe, Proust, Lautréamont y
Publications, 1990.
NOTAS publicación en ella de textos impor- el surrealismo. Más adelante, en 1960,
RAY, Larry (ed.), Forma/ Sociology.. 77,e
Sociolow of Georg Simule,: Brookfield, tantes de Foucault, Barthes, Deicida y el poeta Francis Ponge adquirió gran
' Georg S immel, •The metropolis and Kristeva —entre otros— transforma- importancia, hasta el punto de que
Edward Elgar Publishing Co., 1991.
mental life.. trad. de Edward A. Shils en Sollers dio, a los veinticuatro años,
ron el panorama literario en Francia.
Donald Levine (ed.), Georg Stumm!, On
Tel Quel, para muchas personas, fue una conferencia sobre Ponge en la
Individuality and Social Forms, Chicago
y Londres, University, of Chicago Press, la vanguardia literaria francesa. Sorbona. En 1965, Sollers indicaría
1971, pág. 329. Philippe Sollers Y, sin la fundación de L'Infini en 1983, que Francis Ponge era uno de los po-
Georg Simmel, The Philosophy of tras la desaparición de Te/ Que!, ape- cos escritores que trataba el lenguaje
Money, trad. de Tom Bottomore y Da- Igual que Georges Bataille usó nas se habría señalado el paso de la como un medio que proporcionaba
vid Frisby, Londres, Routledge, 2.' ed. fragmentos biográficos para desarro- noción de una escritura de vanguar- cuerpo y alma al ser humano, y no
1990, pág. 256. dia preocupada por la ausencia de como un vehículo de ideología'.
llar su escritura de transposición, Phi-
3 lbíd., pág. 345.
lippe Sollers (admirador de Bataille) significado a su concepción como •el En 1972, Sollers declaró que el su-
lbz'd„' pág. 464. rrealismo había sido el responsable
utiliza su biografía para desarrollar regreso del significado..
una escritura del acto de escribir: la Philippe Sollers, cuyo nombre era de las censuras a Joyce, quien, junto
escritura analógica, como dice Phi- Philippe Joyaux, nació en 1936 en a Artaud, representaba •la mayor re-
VÉASE TAMBIÉN EN ESTE LIBRO
lippe Forest en su estudio de la Burdeos, donde su familia poseía una volución en el lenguaje del siglo ks.c•'.
oeuure de Sollers'. Uno de los obs- fábrica. Sus padres eran anglófilos, Después de apoyar varias de las as-
Benjamin,
táculos para captar el carácter especí- tendencia acentuada durante la Ocu- piraciones del nouveart roman,
fico y extraordinario del proyecto de pación. Como consecuencia, el joven Sollers se distanció en 1964 del mo-
PRINCIPALES OBRAS DE SIMMEL Sollers está relacionado con el énfa- Philippe se hizo ferviente seguidor, vimiento y su fundador, Alain Robbe-
sis que el mundo de la crítica ha si- primero, de todo el jazz, y luego de Ja- Grillet. Aunque los críticos habían
Sociología, 2 vols., Madrid, Alianza, tuado siempre en las transformacio- mes Joyce. Educado por los jesuitas en detectado la huella del proyecto de
1986. nes, aparentemente espectaculares y la École Sainte-Geneviéve en Versa- Robbe-Grillet en Le Parc, el nouveau
Philosophie des Geldes, Leipzig, Duncker perversas, de Sollers corno personaje Iles, fue expulsado por indisciplina. Se Toman se había vuelto demasiado
und Humblot, 1900. vio obligado, por tanto, a educarse a académico para Sollers, es decir, se
publico, más que en el contenido de
Haupprobleme der Philosophie, Leipzig, sí mismo en historia de la literatura y había hecho estéril. En otro aspecto,
sus textos literarios, teóricos y críti-
Güschen, 1910.
cos; una situación de la que Sollers es filosofía, una vergüenza considerable aunque la escritura de Robbe-Grillet
Das Problem der historischen Zeit, Ber-
también, en parte, culpable. Desde el en una cultura en la que se da tanta aborda un vacío en la realidad que no
lín, Reuther und Reichard, 1916,
nouveau ronzan (que consideraba importancia al aprendizaje formal. La puede escribirse (sólo puede impli-
Der Konflikt der modenzen Kultur: Fin
Vonrag, Munich, Duncker und Hum- gravemente restrictivo el modelo con- oposición a la disciplina y a todas las carse), Sollers pretende decir —escri-
bloc, 1918. vencional y decimonónico de novela) formas de militarismo le hizo fingir es- bir— ese vacío. Para él, la escritura es
El individuo y la libertad. ensayos de crí- y una crítica de la literatura erzgagé, quizofrenia en el momento de ser lla- análoga al vacío; igual que la escritu-
tica de la cultura, Barcelona, Ed. 62, pasando por el maoísmo y el catoli- mado a filas durante el levantamiento ra surrealista sería una analogía
1986. argelino en 1962, Pero, para entonces, del déltre (delirio), en vez de ser su
cismo, hasta el regreso al clasicismo
Sobre la aventura: ensayos filosóficos, ya había obtenido premios literarios, teoría'.
del siglo xviil francés (Voltaire, Crébi-
Barcelona, Ed. 62, 1988. Toda escritura analógica aspira, en
llon hijo) y al •significado., Sollers ha primero por su novela corta Le Défl (El
ofrecido siempre a los críticos lo que desafío), publicada en 1957, y después cierto sentido, a ser una práctica de
necesitaban: una fi gura que pueden por Le Parc (El parque), publicada la escritura: no quiere ser transparen-
OTRAS LECTURAS
tanto despreciar como adorar (el es- en 1961. Su primera novela real, Une te en un sentido realista (una venta-
FRISBY, David, critor a quien la gente •adora aborre- cunease solitude (Una soledad extra- na al mundo) ni, por otro lado, se li-
Fragmentos de la moder-
nidad, Madrid, Visor, 1992. cer• es una expresión que le encantaría ña), publicada en 1958, recibió los mita a ser pura poesía en la que
Benjamín, Cambridge, Polity Press, a Sollers), porque también juega el jue- elogios de Lotus Aragon, del mismo predonima la opacidad de la palabra.
1955. go de espejos de ellos, y lo juega bien. modo que el escritor conservador Aunque la escritura no es nunca to-

284 285
SOLLERS SOLLERS

talmente opaca, no significa —lejos nista apenas disimulado de sus obras mente (la clo.ta de la escritura, po- Un término que, para Sollers, es
de ello— que el ritmo esté ausente. más recientes, Sollers explora, a tra- dríamos decir) es en su propia esfera casi sinónimo de .excepción., es •sin-
Así, al hablar de su novela de los pri- vés de la escritura, su relación con la una forma legitima de escritura; el gularidad.. Para mejor abordar este
meros años 70 Lois (Leyes), Sollers sociedad de fin de siécle y el espec- problema surge, a juicio de Sollers, concepto a principios de los 80. So-
destaca el ritmo decasilábico de la táculo donde el sexo es obligatorio y cuando la literatura en todn su senti- tiers buscó, junto con algunos de sus
obra, un ritmo que surge, sin embar- el rechazo del significado es la nor- do (la •gran• literatura) se equipara al colegas corno jean-Houdebine, una
go, del inconsciente y evoca las can- ma. En conjunto, pues, el proyecto periodismo. Aunque no existe, desde elaboración de •singularidad• en la
ciones de gesta. El MI110 de Lois es de Sollers aspira a elaborar una escri- luego, ningún modelo con el que noción de "baecceitas• de Duns Esco-
inicialmente inconsciente; pero gra- tura que sea simultáneamente poéti- pueda compararse, el verdadero arte to. Literalmente, &laceabas es la •cua-
dualmente se pueden controlar sus ca (ficción) y descriptiva, que sea una del escritor es siempre un arte de lidad de esto. de una cosa. Es la par-
efectos, de manera que, en la novela transcripción del acto de escribir y, al vanguardia, siempre una excepción. ticularidad o individualidad absoluta.
sin puntuación Paradis (1981), el rit- mismo tiempo, una intervención re- El escritor como excepción, pues, no La baecceitases lo que no puede jus-
mo decasilábico se desarrolla de for- veladora de la censura que restringe puede situarse con facilidad en una tificarse por ningun acuerdo o norma
ma consciente como base del poder la elaboración de .excepciones.. escala o tabla existente de categorías. anterior; es la propia norma la que
de la escritura. •Excepción. es un término clave en En relación con lis normas de la so- tiene que ser modificada para hacer
Entre 1961 —con la publicación de la teoría de la escritura de Sollers, por ciedad, siempre es •otro, y se integra sitio a esa singularidad. El sistema
Le Parc— y la aparición de Paradis lo que merece la pena detenerse un en la vida social, si es que lo hace, social censura de forma inevitable la
en 1981, la escritura de Sollers, en los momento a aclarar su significado. sólo con dificultad. Hay un peligro singularidad; pero, como un sistema
términos más generales, atraviesa las Como Nietzsche en filosofía, Sollers muy real de que la literatura (el arte) abierto en biología, la singularidad es
etapas de una breve adaptación a afirma que el autor que está realmen- pueda degenerar en un narcisismo au- esencial para mantener la vitalidad
ciertas estrategias estilísticas del te imbricado en la literatura como toindulgente. Sin embargo, lo que dis- del sistema.
nouveau ronzan, la estructura muy vocación es inevitablemente una ex- tingue al narcisista del verdadero es- En la interacción entre el autor y el
formalizada de Drama, Nonzbres, Ny cepción. Para Sollers, la excepción •es critor es que, al final, el narcisista no lector del texto, Sollers se opone de
Lo is —escritas entre 1965 y 1972— la norma en arte y literatura.: porque, agita nunca el entorno social porque forma fundamental a las normas ha-
y los textos de vanguardia de los para ser un escritor en el pleno senti- su arte nunca adopta las normas cuasi bituales de lectura: desafía al lector a
primeros 80, líricos y sin puntuación, do de la palabra, es necesario trans- universales de la sociedad. En cambio, transformar sus concepciones previas
y que recuerdan a Joyce y Mallarmé. formar la forma y los protocolos de la excepción asume lo universal -como y a ampliar su capacidad de imagina-
Sollers ha subrayado que escribe .la escritura y dejar al sujeto en una un problema personal; para ella, lo ción. Para Sollers, una obra que no
con arreglo al ritmo de la música, y soledad, a menudo, insoportable. Por universal y la excepción son insepara- haga eso puede ser buen periodismo,
que la inspiración procede, sobre consiguiente, el verdadero autor no bles; para el narcisista puro, esencial- pero no puede ser gran literatura.
todo, de Purcell, Montevercli, Schón- escribe dentro de las convenciones ya mente, la universalidad no existe. Aunque puede afirmarse que •ex-
berg y Webern, además de grandes existentes en su arte, sino que las re- El desacuerdo con este argumento cepción. y .singularidad. rigen la eco-
del jazz como Parker, Konitz y Brax- forma o, al menos, es el catalizador se centra, a veces, en su presunto eli- nomía global de la empresa de So-
ton. El oído, ha declarado, es su prin- de una reforma. Como los elementos tismo. Sin embargo, una teoría elitista Reís, su escritura se guía por un
cipal Prioridad. La principal priori- convencionales de la escritura son propone inevitablemente un sistema principio, o práctica, más específico.
dad, pero no la única. Aunque las siempre elementos convencionales de clasificación claramente reconoci- Se trata del principio, destacado por
obras literarias de Sollers están muy de la sociedad, el efecto de dicha es- ble, basado en la inferioridad y la primera vez en Dranze y Nombres, de
alejadas de una literatura engagé critura (Joyce es un ejemplo) es agi- superioridad; es irrevocablemente je- •buscar una coincidencia lo más estre-
como la de Sartre, casi todas están, al tar —y quizá rehacer— ese entorno rárquica. Los grupos elitistas sólo cha posible entre el acto de escritura
menos, indirectamente ligadas a he- social. La literatura, quizá el arte en pueden existir dentro del sistema re- y la narración; el acto dicta la narra-
chos de la biografía del autor o a su- general, no puede explicarse sólo conocido de relaciones sociales; no ción, y la narración relata el acto.'.
cesos que ocurren en el entorno so- desde un punto de vista sociológico; desafían la competencia del sistema Incluso después de la «ruptura con
cial en el que Sollers ha participado debe capturarse con arreglo a la teo- para juzgar. La teoría de la excepción la literatura visiblemente poética de
siempre activamente. COMO advierte ría de las series, en la que la parte es de Sollers se caracteriza por un enfo- los años 70, que culminó con la pu-
Forest, el elemento biográfico adquie- frecuentemente más grande que el que mucho más horizontal. Y, en esa blicación de la novela Paradis, total-
re especial importancia en las nove- poder de la totalidad. La escritura perspectiva horizontal, el escritor es mente sin puntuación, en 1981, la
las de la década 1981-1993 (a partir periodística, que suele encarnar las esencialmente sui generis: incompara- preocupación explícita sigue siendo
de Femmes (Mujeres°. Como protago- normas de escritura aceptadas social- ble, una excepción. elaborar una escritura sobre la escri-

286 287
SOLLERS
SOLLERS

tura. Por tanto, en la novela Mujeres, mente situada en torno al intento de Francis Ponga ou la Raison dphis baza
Con sus últimas obras, Sollers preten-
que señala la transición a un estilo asesinato del Papa Juan Pablo II el 13 de constituir la excepción, no median- prix, París. Seghers, Col. -Poétes
más convencional y reconocible, la de mayo de 1981, la intriga se centra, te la violencia- de una imaginación d'aujourd'hui-, 1963. .
narración sigue siendo una narración en parte, en una nota perdida que desbocada, sino a través del respeto Di-orne, Paris. Seuil, Tel Quel, 1965.
de la escritura de la novela. Según la contenía información sobre el atenta- Nombres, París, Seuil, Tel Quel, 1968.
hacia una realidad que, a su juicio,
información que suministra la intriga, do. La pérdida de la nota lleva a un Logiques, París, Seuil. Tel Que!, 1968.
está desapareciendo rápidamente. Se
•Will» (un periodista americano), pu- esfuerzo para establecer lo que decía La escritura y la experiencia de los lina-
trata de la realidad de las múltiples res09711 Valencia ! Pre-Textos, 1977.
blica Mujeres en París bajo el nombre sobre el motivo y la mecánica del in- identidades que asumen tanto el escri- Lois, París, Seuil, Tel Quel, 1972.
de S, que previamente ha publicado tento de asesinato. Como la carta ro- tor como el agente secreto. H, París, Seuil, Tel Quel, 1973.
una novela sin puntuación e •ilegi- bada de Edgar Allan Poe, la ausencia Sobre el materialismo, Valencia, Pre-
ble.. Por lo que parece, S está en ple- de la nota permite la proyección de Textos, 1978.
no proceso de publicar una obra to- un contenido imaginario. El conteni- Paradis, París, Seuil, Tel Que], 1981.
NOTAS
talmente •egibte•, que garantice un do de la nota permenece secreto. Visión en Nueva York (1981), Barcelona,
escándalo entre los críticos, dado su Aunque se exploran distintos aspec- ' Philippe Forest, Pbilippe Sol/cc. Pa- Kairós, 1982.
pasado .vanguardista». Como, en la tos del secreto (agente secreto, la rís, Editions du Seuil, 1992, págs. 59-61.
Alujeres(1983), Barcelona, Lumen, 1985.
realidad, los críticos de París reaccio- vida secreta o privada del narrador, d Aunque FOrest se refiere sobre todo, en Retrato de/jugador (1984), Barcelona,
naron criticando la falta de coheren- secreto en la estrategia militar), realidad, a Le Parc, el término es reve- Lumen, 1988.
cia de Sollers y •su deslealtad a los lador respecto a la obra de Sollers en su Paradis II, París, Gallirrtard, 1986.
la novela hace hincapié en el hecho
conjunto. Tbéorie des exceptions, París, Gallimard,
principios vanguardistas, la obra de de que la diferencia entre la ficción Folio/Essais, 1986.
ficción incorporó esa respuesta y ce- —como algo ajeno e irreal— y la rea- Philippe Sollers, •La poésie, oui ou
non. (1965), en Logiques, París, Seuil, El corazón absoluto (1987), Barcelona,
rró así el hueco tradicional entre fic- lidad está desapareciendo. Ocurre así, Lumen, 1992,
Col. Tel Quel, 1968, págs. 198-205.
ción y no ficción, entre la narración sobre todo, en relación con la vida y Les Folies franyaises, París, Gallimard,
3 Philippe Sollers, •Philippe Sollers:
escrita y la escritura de la narración. la muerte en el contexto de la inse- 1988.
"ébranler le systéme". (entrevista), Ma-
Como señala Forest, la diferencia minación artificial y la paternidad sus- gazine Eittéraire, 65 (1972), pág. 12. Le Lys d'or, París, Gallimard, 1989.
entre Paradisy Mujeres no es, en rea- tituta, o de la tecnología de los nue- ' Véase Elisabeth Roudinesco, Jac- La FU á Venise, París, Gallimard, 1991.
lidad, tan grande como podría pen- vos medios. ques Lacan & Co., trad. de Jeffrey Mehl- Le Rire de Reme, París, Gallimard, 1992.
sarse por la respuesta del público. man, Chicago, Chicago University Press, El Secreto (1993), Barcelona, Lumen,
Escribir hoy una novela, afirma So-
1990, pág. 26. 1994.
Paradis, con todas sus referen- Ilers, sólo es posible si se empieza
cias contemporáneas e históricas, es por los hechos. Los hechos son Philippe Sollers, Vision á New York.
Femmes sin puntuación; ésta, con to- Entretiens avec David Hayman, París,
singularidades; son impredecibles y
Grasset, 1981, pág. 100. OTRAS LEGRA/A.5
das sus referencias literarias e históri- ajenos al control de la conciencia co-
cas, es una versión puntuada de Pa- lectiva, como se manifiesta en los me- Emmus, Roland, So/len Writer, trad. de
radis. O, para utilizar los términos de dios de comunicación de masas. •La Philip Thody, Londres, Althone; Min-
VÉASE TAMBIÉN EN ESTE LIBRO
Femmes, Will, el periodista america- realidad es más extraña que la fic- neapoliS, Universiry of Minnesota
no, y 5., son, como sabernos, la mis- ción., es el principio enunciado. So- Press, 1987.
Blanchot, Duras, Joyce, Kafka.
ma persona (así lo subraya el aspec- llers asegura que -no inventa nada.. CLARK, Hilary, TbeFictionalEzzcyclopae-
to de rornan ñ cié del texto). Incluso El riesgo es que, con la capacidad de dia: Joyce, Pound, Sollers, Nueva
en una obra tan explícitamente auto- los medios para reproducir los he- York, Garland Publishing, 1990.
PRINCIPALES OBRAS DE SOLLERS KURK, K. C., Consumnzation of tbe Text:
biográfica como Le Portrait dujoueur chos, y con la intervención de un me-
A Study of Philippe Sollers, Texas, Uni-
(Retrato del jugador), con un narra- diador en la reproducción de la vida
Le Déji, Paris, Seuil, ,, Ecrire., 1957 versity of Kentucky, 1979.
dor único, el relato se siente atraído humana, la excepción está en peligro:
hacia d juego con los nombres, So- la excepción no puede reproducirse
Ilers-Diamant. La identidad del narra- ni colectivizarse, no puede codificar-
dor se hace ficticia (es decir, escrita) se, El mayor temor de Sollers, por
hasta el punto de que, a través del tanto, es que la sociedad postmoder-
nombre, se pluraliza la identidad. na sea la sociedad del espectáculo
En 1992, Sollers publicó una nove- puro, en la que no haya nada único,
la llamada Le Secret (El secreto). Vaga- ninguna sorpresa, ningún -secreto.

288
289
La postmodernidad

Aunque hay varias formas de entender lo que es la postmoderni-


dad, una idea clave en este libro, procedente de la obra de Jean-
Francois Lyotard y Jean Baudrillard, es que la postmodemidad impli-
ca poner en tela de juicio una epistemología modernista basada en
una distinción clara entre sujeto y objeto. Otras cosas que se han
dicho al definir la postmodemidad se refieren a la iincredulidad res-
pecto a las metanarrativas• (Lyotard), lo cual significa que ninguna
explicación global de la conducta es creíble en una época de racio-
nalidad intencionada. Además, se observa que la tecnología tiende a
centrarse en la reproducción, en contraste con el paradigma moder-
nista de la producción. El pensamiento postmodemo se toma las con-
notaciones de la modernidad absolutamente en serio. Por ejemplo,
si los signos y el lenguaje son el resultado de relaciones diferencia-
les más que de una cualidad esencial, y si, según Foucault, el poder
no tiene una cualidad esencial, la postmodemidad avanza a través
de las repercusiones radicales que ello tiene.

291
I Jean Baudrillard próximo a la forma de funcionamien-
to del lenguaje. Por último, a partir de
En una sociedad dominada por la la mitad de los años 70, sus escritos,
, producción, afirma Jean Baudrillard, empezando por Intercambio sinzbóli-
1 la diferencia entre valor de uso y ro y muerte, muestran que Baudri-
1 valor de cambio tiene cierta impor- Ilard ha asumido las consecuencias,
I tanda. Desde luego, durante algún
tiempo, Marx pudo ofrecer una expli-
que él juzga radicales, de la omnipre-
senda del código en las sociedades
cación relativamente plausible del de la modernidad reciente. El código
crecimiento del capitalismo usando se refiere, sin duda, a la informatiza-
sólo estas categorías. El valor de uso. ción y la digítalización, pero también
de un objeto sería su utilidad, en tér- , es fundamental en física, biología y
minos marxistas, respecto a la satis- 1 otras ciencias naturales, donde penni-
facción de ciertas necesidades; el ' te una reproducción perfecta del ob-
valor de cambio, por otro lado, se re- ' jeto o situación; ésa es la razón de
l • ferina al valor de un producto en el que el código permita dejar de lado
• mercado, el objeto medido con arre-, lo real y abra pasa a lo que Baudri-
glo a su precio. El objeto del valor de II ard ha designado, de forma bien j
cambio es lo que Marx denominó el ' conocida, como •hiperrealidad-. ,
objeto en forma de mercancía. Aunque Baudrillard prefiere no po- :
Partiendo de la reevaluación y crí- seer antecedentes', es posible asegu-
tica de la teoría económica del objeto rar que nació en 1929 en Reims. Sus
en Marx, sobre todo en relación con abuelos eran campesinos, pero su fa-
el concepto de •valor de uso., Jean milla hizo la transición a la vida ur-
Baudrillard desarrolla la primera gran bana y empleos en el funcionariado.
fase de su obra con una teoría de No era un ambiente intelectual; Rau-
base semiótica sobre la producción y drillard trabajó duramente en el lycée
el objeto, que destaca el .valor de sig- para compensarlo y se convirtió en el
no de los objetos. En la segunda eta- primer miembro de su familia que
pa, Baudrillard afirma que incluso el hizo un trabajo intelectual serio. Aun.
concepto de signo como vehículo de que intentó obtener la agrégation, no
significado y contenido es demasiado lo logró, corno tampoco obtuvo nun-
reductivo; el Saussure de los anagra- ca un puesto permanente en la uni-
mas, en el que las palabras parecen versidad (actualmente está jubilado).
surgir de forma misteriosa y casi má- Personalmente, Baudríllard prefiere
gica mediante las letras, está más considerar su vida como un .estado

293
BAUDRILLARD BAUDRILLARD

prácticamente de ruptura.. En 1966 algo con un valor simbólico, irreduc- en muchos objetos, lo que es esencial mica— constituyen la base de la vida
terminó su tesis de sociología en tible al valor de uso o de cambio Un es su capacidad de significar una con-
Nanterre con Henri Lefebvre, un an- regalo (por ejemplo, un anulo de dición. En este sentido, incluso la ne- Una consecuencia importante del
tiestructuralista. Más tarde se unió a boda) es un objeto de este tipo. El gación puede ser un lujo, corno cuan- análisis del consumo que hace Bau-
Roland Barthes en la École des HM.:- regalo sigue existiendo —aunque en do el •buen gusto. exige que no se drillard, en función de los signos, es
tes Études, y, en 1969, escribió un forma limitada— en las sociedades abarrote una habitación de objetos. que disminuye la validez de la distin-
importante artículo sobre el objeto y capitalistas; constituye el obstáculo a Aquí hay que subrayar que, en una ción —empleada tanto por Galbraith
la función de signo en Conununica- cualquier teoría fácil de la economía sociedad de consumo, los objetos no corno por la Escuela de Francfort—
Hans. Su libro Le systéme des objets (El corno equilibrio. se limitan a ser consumidos; no se entre necesidades verdaderas y falsas,
sistema de los oblatos) (1968) refleja la Pero, incluso aunque se quiera producen tanto para satisfacer una artificiales y reales. Lo que debe evi-
obra de Barthes, El sistema de la aceptar la división entre objetos con necesidad como para indicar una tarse, explica Baudrillard, es una crí-
, moda valor de uso (objetos útiles y necesa- condición, y ello es posible sólo por tica del consumismo y el concepto de
Los primeros textos de Baudrillard rios) y objetos con valor de cambio, la relación diferencial entre objetos. homo economicus a costa de un mo-
sobre Calvin° y otros, publicados en queda saber dónde hay que trazar Por eso, en una sociedad plenamen- ralismo renovado. Al desarrollar este
Les temps modernas de Sartre, junto a exactamente la línea entre estas dos te de consumo, los objetos se con- punto, Baudrillard propone una idea
sus traducciones de Brecht y Weiss, formas. En sus libros sobre esta cues- vierten en signos y el ámbito de la al final de su análisis de la sociedad
no presagian la crítica explosiva de la tión —Le Systéme des objets (1968), necesidad queda muy atrás, si es que de consumo que servirá como pie-
teoría del valor en Marx que surgiría Sociedad de consumo (1970), Por una alguna vez existió. dra de toque para toda su obra pos-
menos de una década después. A di- economía política del signo (1972)—, El objetivo de Baudrillard, pues, es terior. Se trata de que, en el discurso
ferencia de Lefebvre, Baudrillard no Baudrillard empieza por ampliar el dar un carácter problemático a la mis- del consumo, hay un antidiscurso: el
rechazó el estructuralismo; avanzó a alcance de su análisis añadiendo' a la ma idea de la necesidad o la utilidad. discurso exaltado de la abundancia
través de él hasta llegar al otro lado. categoría del objeto el objeto simbó- Las necesidades, sugiere, sólo pue- tiene, en todas partes, la réplica de
Ello le permitió usar os conceptos de lico y el objeto signo. Luego explica den sostenerse en una antropología una crítica de la ociedad de consu-
•sistemm y •diferencia. para que es necesario distinguir cuatro ló- del sujeto de base ideológica. Con mo, hasta e/ punto de que es frecuen-
eliminar el límite de la empresa es- gicas distintas: I) La lógica de las frecuencia, ésta adopta una forma te que la publicidad haga parodias in-
tructuralista, sobre todo en relación operaciones prácticas, que corres- psicologicista (las necesidades como tencionadas de sí misma. Todo lo que
con la diferencia entre lo real y lo ponde al valor de uso; 2) la lógica de función de la naturaleza humana) o es •anti–, dice Baudrillard, puede re-
imaginario. la equivalencia, que corresponde al culturalista (las necesidades como cuperarse; eso es lo que arrincona a
Aunque las reservas de Baudrillard valor de cambio; 3) la lógica de la función de la sociedad). Después de Marc a una época ya pasada. La so-
con respecto a la economía política ambivalencia, que corresponde al in- examinar la obra de Veblen (sobre el ciedad de consumo es también la so-
de Marx se debe, en gran parte, a una tercambio simbólico; y 4) la lógica de consumo ostentoso), Bataille y ciedad de la denuncia del consumo.
concepción semiótica del objeto en el la diferencia, que corresponde al va- ivlauss, y de introducir en la ecuación Varias veces, en sus primeros escri-
capitalismo, también ha tenido la in- lor de signo. Estas lógicas pueden re- diferentes formaciones sociales y cul- tos, Baudrillard utiliza el término •có-
fluencia crucial de la teoría del rega- sumirse, respectivamente, como las turales, la idea de que las necesida- digo al referirse al sistema de signos.
lo de' Mauss y la teoría del gasto de de la utilidad, el mercado, el regalo y des primarias irreductibles rigen las Aunque quizá esté como un sinónimo
Bataille. Para estos dos pensadores, la condición. En la lógica de la prime- actividades humanas pasa a ser un de sistema, o lenguaje (la langue de
ninguna economía humana puede re- ra categoría, el objeto se convierte en mito. El sujeto y el objeto, destaca Saussure), en• su principal obra de
ducirse a una base utilitaria putativa, instrumento, en la segunda, en mer- Baudrillard, no están vinculados por mitad de los 70, Intercambio simbóli-
y el equilibrio es su estado normal. cancía, en la tercera, en símbolo, y en las cualidades eternas del primero, co y muerte, la noción de •código•
En cambio, instituciones como los la cuarta, en signo'. &no —de acuerdo con Lévi-Strauss- adquiere una importancia que mere-
Kula y los potiatch muestran que el Con sus textos semióticos sobre el a través de la estructura inconsciente ce valorarse. No es que Baudrillard (a
desperdicio por el prestigio fue el objeto, Baudrillard, de acuerdo con de las relaciones sociales. En resu- diferencia de Eco) dedique mucho
fundamento original y no utilitario Saussure y los estructuralistas, inten- men, los seres humanos no buscan la tiempo a definir el carácter y los ma-
del consumo. Desde esta perspectiva, ta mostrar que ningún objeto existe felicidad; no pretenden alcanzar la tices del concepto de código. En rea-
la distinción que hace la economía aislado de los demás. Al contrario, su igualdad; el consumo no homogenei- lidad, podemos advertir que rara vez
política entre valor de uso y valor de aspecto diferencial o relacional se za, sino que diferencia a través del define sus términos clave de forma ni
cambio es muy limitada, Un objeto vuelve crucial para entenderlos. Ade- sistema de signos. El modo de vida y remotamente exhaustiva y el sentido
debe interpretarse asimismo como más, aunque hay un aspecto utilitario los valores —no la necesidad econó- se extrae, en gran parte, del contexto

294 295
BAUDRILLARD BAUDRILLARD

y de la opinión de que Baudrillarc 1 portancia sin precedentes en la vida tegrarse en el sistema: mejor dicho, el 1 equilibrio del sistema. Éxtasis, fasci-
acepta como reconocidos los progre - social. La simulación y los modelos principio de reversibilidad implica (nación, riesgo y vértigo ante el obje-
sos de la semiótica y otros campos . son ejemplos de reproducción pura. que la muerte no se produce en rea- f to seductor tienen prioridad respecto

Sin embargo, aquí podernos deci: r Cornn el código permite superar la lidad. 1 a la sobria reflexividad de la teoría
que el significado de •código. es muyr realidad —tal como se entendía en la Si, como intentaba demostrar la I vulgar. La teoría vulgar es siempre
; directo: es el código binario de los or - era de la producción—, surge un cu- obra de Foucault, el poder ya no tic- I tautológica: el principio siempre
denadores, el código del ADN en bio. rioso potencial; Baudrillard lo llama ne un contenido sustancial —ya no es equivale al final. Con lo fatal (= muer-
logra, o el código digital en televisiór 1 -reversibilidad.. Ésta implica la des- algo poseído y centralizado—, el fun- te y destino), no existe un -fin., en
• y grabación de sonido, así como er aparición de todas las finalidades; cionamiento continuado de las insti- ningún sentido representativo ni te-
. la tecnología de la información. La 1 nada está fuera del sistema, que se tuciones de poder centralizado se leológico. La seducción es fatal en el
era del código está por encima de la i convierte en una tautología. Donde convertirían en una simulación de sentido de que el sujeto se ve domi-
( era del signo. Nada de esto está ex- • esto se ve con más claridad es en la cierta forma de relaciones de poder. : nado por el objeto impredecible, el
1 plícito, pero el contexto lo implica simulación y el simulacro. En pocas palabras, la afirmación de ( objeto de fascinación. Las masas que,
con claridad. Una preocupación cen- Con respecto a la simulación, 13au- , que el poder tiene contenido pasaría 1 debido a su falta de reflexividad y
tral de Baudrillard es la conexión en- drillard define tres tipos: el de la fal- a ser una pretensión. La simulación 1 conformidad, eran la desesperación
tre código y reproducción, una repro- sificación predominante en la era c generalizada acompaña, pues, a la de los intelectuales revolucionarios,
ducción que es .original.. El código lásica del Renacimiento, el de la pro- / muerte de todos los esencialismos. ( pasan ahora a ser el modelo que hay.
I supone que el objeto producido —el ducción en la era industrial y, por úl- Desde el punto de vista social, I que seguir. Porque siempre han dado
tejido en biología, por ejemplo— no timo, la simulación de la época ac- 13audrillard advierte que la era del 1 prioridad al éxtasis y la fascinación y,
es una copia en el sentido aceptado tual, regida por el código. Con el código empieza a penetrar en todo el por tanto, al objeto; es decir, las ma- ,..,
i
1 del término, en el que la copia es .objeto falsificado, se hace evidente la ( tejido social. Uno de los síntomas es I sas convergen hacia las extremidades
i copia de un original, de un objeto. 'diferencia con el objeto real o &nato- 1 que los opuestos empiezan a desapa- : pnsibles del sistema. Al hablar de la --
I Ahora, más bien, la diferencia entre ! ral.; en la producción industrial, se ve ( recer y -todo se hace imposible de i relación de las masas con la imagen,
1 copia y original es redundante. ¿Muy I la diferencia entre el objeto y el pro- decidir.; lo bello y lo feo en la moda, ' Baudrillard escribe: -Hay en esta con-
(
I redundante? Ésta es la pregunta fun-
damental. Baudrillard tiende a afirmar
(ceso laboral; en la era de la simula- la izquierda y la derecha en política, 1 formidad un poder de seducción en
lo verdadero y lo falso en los medios ' el sentido literal de la palabra, una
1 ción, lo esencial no es la producción
que es totalmente redundante; pero I sino la reproducción de objetos. de comunicación, lo útil y lo inútil 1 fuerza de diversión, distorsión, captu-

1:
coincide con su opinión de que la l Y, como hemos visto, el principio de
única forma de evitar la implosión en I1 reproducción está contenido en el có-
entre los objetos, la naturaleza y la 1 ra y fascinación irónica. Hay una es-
cultura; todo se vuelve intercambia- 11 pecie de estrategia fatal de confomfi-
el sistema social es asumir una pos- .digo. Con respecto a la reproducción, ble en la era de la reproducción y la dad-3 .
1 tura teórica muy extrema. Sin embar- 1 está claro que se reproduce también simulación. Gran parte de lo que ha escrito
go, muchos asegurarían que el códi- l la fuerza laboral, el trabajador. La re- Baudrillard demuestra así que el Baudrillard ha provocado encendidos
go no ha adquirido aún, ni adquirirá ' producción, por consiguiente, inclu- /sistema es, en potencia, un sistema debates, sobre todo cuando escribía
lamás, las proporciones hegemónicas ye lo que, en la era de la industriali- / cerrado con riesgo de implosión. La artículos en el diario francés Libéra-
1 que esboza Baudrillard. Pero no pue- zación, habrían sido ambos lados de hiperrealidad borra la diferencia en- tion, con afirmaciones, al parecer,
de negarse que tiene una importan- la ecuación. El origen de las cosas no i tre lo real y lo imaginario. La pregun- como que la Guerra del Golfo
cia inmensa. La realidad virtual, las es un objeto ni un ser original, sino ta que hay que responder es cómo es de 1991 no existió. El debate resulta,
comunicaciones globales, el hologra- fórmulas, señales codificadas y núme- posible una intervención política que a menudo, estéril, porque los que ha-
ma y el arte no son más que algunas ros. Dado que el origen en la repro- no se vea recuperada por el sistema. blan no se escuchan; 13audrillard par-
de las áreas en las que se ven ejem- ducción es el principio de genera- ( Baudrillard sugiere una vía con su re- te de su posición en relación con las
plos de ello, además de las ya men- ción, y no el objeto generado, es t flexión sobre la -seducción. y las .es- implicaciones del código y los avan-
cionadas.
En una época en la que el objeto
posible la reversibilidad completa: el
último -original- producido puede re-
1 trategias fatales.. En ambos casos,
, afirma que es necesario dar prioridad
ces en la ciencia y la tecnología ato-
derna, y sus oponentes, con frecuen-
natural ya no es creíble (después de , producirse perfectamente. Desapare- ( al objeto sobre el sujeto, la teoría fa- cia, de la posición humanista de la
que el estructuralismo haya sido el i ce la diferencia entre lo real y su re- tal, determinada por el objeto, sobre ciencia decimonónica, en la que el
l primer movimiento moderno que ha ( presentación y aparece la eta de los la teoría vulgar y critica determinada origen se concebía como un objeto
1 desafiado su credibilidad), el código simulacros. En su forma más extrema, (por el sujeto. Lo importante es ir ha- real y natural. Lo que hace 13audri-
I ha otorgado a la simulación una im- 1 por tanto, incluso la muerte puede in- lcia los extremos para contrarrestar el Ilard es demostrar las consecuencias

296 297
DURAS DURAS

muy reales de los cambios en las for- L'Échange symbolique et la Alón, París, interesantes de Francia. Triunfó como La propia vida de Duras ha sido
mas simbólicas y materiales, y ello re- Gallimard, 1976. escritora, cineasta y dramaturga. Tras una fuente esencial de material e ins-
sulta importante en un mundo cada Pour une critiqzte de l'é.cononzie potin- la Segunda Guerra Mundial trabajó piración para sus escritos de ficción.
vez más dominado por la exagera- gue du Sig NO, París, Gallimard. 1976. asimismo, durante varios años, como Pocos autores han sido capaces de
Olvidar a Foucazdt (1977), Valencia, periodista para France Observateur. transformar fragmentos de la vida co-
ción y la ofuscación en los medios de -

Yre Textos, 1993.


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Ha estado frecuentemente en prime- tidiana en manifestaciones artísticas
masas. Seguramente, el límite de Bau- A la sombra de las mayorías silenciosas,
drillard debe hallarse en el propio lí- ra línea de movimientos políticos con la conjunción de intensidad y
Barcelona, Kairós, 1978. plenitud que caracteriza la prosa de
mite de la ciencia moderna. Y éste De la seducción (1979), Madrid, Cátedra, como la oposición a la guerra de Ar-
consiste en que el código no domina 1989. gelia, mayo de 1968 y el feminismo. Duras. Aunque, como ha indicado
aún de manera uniforme; la réplica Simulacres et sinzulation, París, Galilée, Sorprendentemente, quizá, Duras Leslie HIIP, no existe ninguna secuen-
clónica de la realidad social que tan 1981, apoyó también el hundimiento, por cia de hechos totalmente cierta e in-
eficazmente presenta Baudrillard no Estrategias fatales (1983), Barcelona, parte del servido secreto francés, de mutable en relación con su vida, se
es cierta todavía. Seguimos viviendo, Anagrama, 1991. la nave Tbe Rainbow Warrior, de pueden admitir como seguros ciertos
en parte, fuera del alcance del códi- La izquierda divina (1985), Barcelona, Greenpeace, en 1985, porque opina- elementos3.
go; eso es lo que demuestra, en reali- Anagrama, 1985. ba, por aquel entonces, que cualquier Marguerite Duras, cuyo nombre
América (1986), Barcelona, Anagrama, era Marguerite Donnadieu, nació
dad, el Jurassic Parkde Steven Spiel- 1987. obstáculo —como el representado
berg, aunque por fin esté presente el El otro por sí mismo, Barcelona, Anagra- por Greenpeace— a las pruebas nu- en 1914 en Gia-Dinh, cerca de Sai-
principio de su dominación. ma, 1988. cleares de Francia en el Pacífico no gón, en Cochinchina (ahora Viet-
Coal Memories (1987), Barcelona, Ana- servía más que para estimular el ex- nam). Sus padres habían estado casa-
grama 1989. pansionismo soviético. dos con anterioridad y se habían
NOTAS La guerra del golfo no ha tenido"lugar, En su extensa obra, Duras ha ex- conocido allí. Su padre era un profe-
Barcelona, Anagrama, 1991. plorado especialmente el desequili- sor de matemáticas del sudeste de
' Véase, por ejemplo, su respuesta a L> Cultura y sinzulacro, Barcelona, Kairós, brio emocional producido por el Francia, mientras que su madre pro-
una cana de Mike Gane, en Mike Gane 1993. amor, el deseo, el sufrimiento y la cedía de una familia de campesinos
(ed.), Baudrillard Live, Selected Inter- La ilusión del fin, Barcelona, Anagrama, pobres en el norte. Poco después de
muerte, sobre todo cómo afecta a las
views, Londres y Nueva York, Routled- 1993. mujeres y las empuja hacia los abis- ser destinado a Phnom Penh, en 1918,
ge, 1993, pág. 6. mos de la locura. Pero, además, los el padre contrajo. disentería y tuvo
Véase Jean Baudrillard, For a Criti- que regresar a Francia, donde murió
que of the Política! Economy of tbe Sign, OTRAS LECTURAS
textos de Duras examinan el espacio
trad. de Charles Levin, San Luis, Tejos entre fusión y separación (por ejem- posteriormente. De modo que la ma-
Press, 1981, pág. 66. GANE, Mike, Saudrillard: Critica! and plo, en el amor y la sexualidad) cuan- dre de Duras se vio Obligada a criar
Jean Baudrillard, TbeEvil Denzon of Fatal Theory, Londres, Routledge, do derrumba el límite entre la vida sola a Marguerite y sus dos herma-
Images, trad. de Paul Patton y Paul Foss, 1991. privada (familia) y pública (política y nos, en distintos puntos de Camboya
Sidney, Power Instaure, 1981, pági- GANE, Mike, Baudrillard'sBestiary. Bau- artística), entre lo simbólico y lo ima- y Vietnam. Hasta los once años, edad
nas 14-15. drillard and Culture, Londres, Rout- ginario, entre el tiempo de la narrati- a la que obtuvo su certificado de es-
ledge, 1991. va y el suceso relatado. A menudo la cuela primaria, Marguerite hablaba
KELLNER, Douglas, Jean Baudrillard. narración parece una especie de dis- más vietnamita que francés.
VÉASE TAMBIÉN EN ESTE LIBRO Fronz Marrinn to Post-Modernisnz and ianciamiento de lo real y la escritura En 1932-1933, Duras regresó de
Beyond (1989), Cambridge, Polity forma permanente a Francia y em-
se convierte en la única realidad. Por
Bataille, Lyotard, Mauss. Press, 1989. eso se hace difícil separar el sujeto y prendió estudios de matemáticas,
13Eboas, Julian, Heterology and tbe Post-
modern, Bataille, Baudrillard and el objeto en muchas de las principa- pero pronto lo abandonó para estudiar
Lyotard, Sidney, Alíen & Unwin, 1991. les obras de ficción de Duras. Así ciencias y leyes. Después estuvo em-
PRINCIPALES OBRAS DE BAUDRILLARD pleada en la Oficina Colonial como
queda patente en Iba Ravishing ej. Lol
V. Stabil (El arrebato de Lol Y Stein), investigadora y archiv'era y, poco
Le Syst&ne des objets, París, DenoCI antes de que estallara la guerra, se
1968. donde el autor/narrador y el tema
La Société de la consommation, París, Marguerite Duras sobre el que se está escribiendo re- casó con el escritor Robert Antelme.
Gallimard, 1970. sultan especialmente difíciles de de- Entre 1940 y 1942, Duras publicó su
El espejo de la producción (1973), Barce- Marguerite Duras es una de las fi- terminar. De ahí que se considere a primera obra con Philippe Roques,
lona, Gedisa, 1980. guras intelectuales más importantes e Duras como una autora postmoderna. L'Empire franais, pero Gallimard re-

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DURAS DURAS

chazó su primera novela, La ramilla plicable, pérdida del amor, cambios forzar un estilo minimalista y nada cio de Kristeva, la escritura de Duras
Tanéran, escrita bajo el nombre fami- casi imperceptibles —pero funda- es tan intensamente evocadora y des-
barroco, casi todas las novelas de
liar de Donnadieu, También en esta mentales— en los estados emociona- Duras son cortas, para las medidas criptiva de la tristeza, en vez de ana-
época nació muerto su primer hijo. les o corporales, extraños vuelos de convencionales (alrededor de 40.000 lizarla, que nos aproxima al borde de
Posteriormente, en 1947, tendría otro la imaginación: todo esto constituye palabras). Ese minimalismo es más la locura; sus textos se funden con
hijo con su amante Jean Mascolo, el núcleo de su empeño artístico. En que un instrumento estilístico; es tam- ella en lugar de representarla o tras-
después de que se disolviera su ma- especial, el énfasis en los estados bién parte de un esfuerzo para cen- cenderla. Pero esta locura es ahora la
trimonio con Robert Antelme en 1946. emocionales ha dado a la ocurre de trarse en la dificultad de hablar y es- única forma de vivir la propia indivi-
El año 1943 resultó ser un hito: apa- Duras un tono que, a juicio de las fe- cribir; contiene un silencio apenas dualidad, debido al empobrecimien-
reció Les Impudents, su primera nove- ministas, ha puesto en peligro la na- suprimido. to de los medios públicos de repre-
la publicada, y el primer texto que rrativa racionalista y presuntamente Las características mencionadas de sentación.
apareció bajo el seudónimo •Durasi; falocéntrica de la literatura masculina la obra de Duras han impulsado a La observación que hace Leslie Hill
y entabló amistad con Georges Betai- más apreciada. Julia Kristeva a considerar que su es- en el contexto de un estudio de
lle, Maurice Merleett-Ponty, Edgar Indudablemente se puede indicar critura es sintomática de un mundo El amante confirma el empuje de la
Morin y otros. Al mismo tiempo, su que el extraordinario ritmo de articu- en el que, tras los terribles sucesos hipótesis interpretativa de Kristeva:
marido y ella se unieron al movimien- lación de la narración fragmentada en del siglo 1'0c, se ha producido una fal- •El amante no hace más que repetir
to francés en favor de los prisioneros India Song es una muestra del estilo ta de lenguaje y representación. Aun- episodios, en lugar de justificarlos. 1 .
de guerra. En 1944, mientras trabaja- •femenindt de Duras, un estilo que que es cierto que Kristeva utiliza, En realidad, Duras reelabora en sus
ba en la Resistencia con Frainois Mit- contrasta con el enfoque realista y para interpretar los rasgos de la obra novelas numerosas escenas y muchos
terrand, Duras se unió al Partido Co- ordenado que caracteriza a gran par- de Duras, un marco psicoanalítico personajes de su repertorio, especial-
munista, del que fue expulsada te del cine convencional. Rodada en que puede resultar problemático para mente los referentes a su propia au-
en 1950. Robert Antelme fue detenido blanco y negro, India Song juega con algunos, pocos comentaristas están tobiografía.
y enviado a Buchenwald y Dachau. una disonancia entre la banda sonora en desacuerdo en cueles son esos Kristeva destaca la importancia de
La dolorosa experiencia de esperar y las imágenes; el diálogo se desarro- rasgos. Leslie Hill critica la lectura la madre y el tema de la separación
su regreso inspiró la novela La Dou- lla fuera de la pantalla, casi todas las Que hace Kristeva de El arrebato de en Duras. La presencia de la madre,
leur (El dolor), publicada en 1985. tomas son estáticas y hay un rechazo Lol V. Stein, pero su análisis de que desde Un dique contra el Pacífi-
En 1984, Duras recibió el premio a la técnica de plano y contraPlano. la indeterminación es un rasgo funda- co (1950), pasando por El amante,
Goncourt por su novela El amante. Desde luego, el carácter poético de la . mental de dicha novela no parecería hasta El amante de la China del Nor-
Ya antes de las aclamaciones gene- película contrasta vivamente con el sino confirmar el carácter problemá- te (1991), no sólo se ve en la figura
ralizadas en 1985, Duras era conoci- énfasis diegético de una película rea- tico de la identidad típico de la crisis representada en una narración, sino
da para un público más amplio lista convencional. • de la representación que caracteriza en la propia escritura. La madre, en
gracias a su guión de la pelícu- El estilo literario de Duras, si bien al final del siglo NX. esta lectura más psicoanalítica, es la
la de Alain Resnais Hiroshima 'non claramente peculiar, evoca con fre- • Para Kristeva, por tanto, la obra de emoción de la experiencia vivida, la
anzour (1959), su propia película In- cuencia el realismo experimental del Duras debe juzgarse en un entorno locura que no puede trascenderse.
dia Song (1974), basada en su novela nouveazt ronzar:. Frases cortas centra- de temas apocalípticos: Hiroshima, el Para empezar a entenderlo, no hay
Le Vice consul (1966), y dos novelas das en pequeños detalles dan un rit- más que acudir a cómo la narración
-
Holocausto, el estalinismo, el colonia-
muy controvertidas, Moderato Canta- mo lento a la articulación de la intri- lismo. De esa forma participa en la (tal como es) de El anzante permane-
bife (1958) y El arrebato de Lol Vi ga. Una mirada, un suspiro, un toque, ce tan cercana a los hechos condci-
búsqueda de un instrumento simbóli-
keit: (1964). parecen tener muchas veces y tanta dos de la vida de Duras. Como escri-
co apropiado para representar el ho-
En general, la escritura de Duras imponencia por sí mismos como el rror de lo ocurrido. En lugar de cen- be ella en la novela, quería matar a
no se centra en el desarrollo de ideas significado que están encargados de trarse en una percepción pública del su hermano por lo que lo queda su
o en la faceta experimental del arte transmitir que, a menudo, es una dis- sufrimiento, éste se presenta en un madre. Además, escribe que «he escri-
(aunque, desde luego, ambos factores posición de ánimo, o una crisis emo- contexto intensamente privado. La to mucho sobre los miembros de mi
están implícitos en todo lo que hace), cional, más que una idea. Es típico gente se encierra en su pena particu- familia, pero entonces estaban aún vi-
sino en experiencias emocionales di- que la novela L'amour no contenga .- vos, mi madre y mis hermanos. Y yo
lar —o depresión—, de modo que
fíciles de traducir a una forma simbó- ningún examen de lo que es el amor; sus palabras, en vez de ser un instru- di vueltas a su alrededor, di vueltas
lica: silencios, narticulación, tristeza lo evoca y lo denota en forma de diá- mento para la catarsis o la adaptación alrededor de todas estas cosas sin
profunda, violencia repentina e inex- logo y frases breves. Como para re- al horror, es un síntoma de él. A jui- verdaderamente abordarlas•'. Aunque
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Í DURAS DURAS

se propone abordar las cosas que ha- un ejemplo de sus enseñanzas psi- después qué ocurrió exactamente capaces de ocupar la posición de tes-
cen referencia a su vida, da historia coanalíticas, aunque Duras, en 1964, aquella noche y asegura haber deja- tigo de nuestra propia vida. Lo que
de mi vida —afirma— no existe. No no conocía en absoluto sus teorías ni do de amar a su prometido desde el está en juego es cómo hablar y escri-
existe. No tiene ningún centro. Nin- había asistido a su seminario. Para mismo momento en el que Anne-ida- bir, no si lo que uno dice y escribe es
guna trayectoria, ninguna línea. 6 . Una Lacan, la novela es el intento repeti- ne Stretter entró en el salón de baile. cierto o falso, ficticio o no ficticio. Por
vez más, lo que está haciendo tes, al do de rememorar la escena primor- Dado el olvido de Lol, el testimonio consiguiente, el hecho de adoptar un
mismo tiempo, diferente e igual: 5 . dial traumática, en la que el prometi- de Tatiana, filtrado a través de la na- seudónimo y dejar el apellido familiar
Duras reelabora el mismo material, do de Lol Valerie Stein se marcha con rración de Jacques Hold, es esencial debe considerarse parte esencial, no
pero la cuestión es si es capaz de una mujer mayor, Anna-Maria Stret- para reconstituir los hechos, es decir, accidental, del arte de Duras. Es ei
trascender así la desesperación y el ter, durante el baile en T. Beach. Este para el propio relato. Como la histo- medio de que se convierta en testigo
odio que figuran en esta y otras no- suceso se trasmite, al menos en par- ria de Lol se encuentra totalmente en de su propia vida. Incluye la separa-
velas, o si su escritura es, en realidad, te, a través de un doble filtro: el pri- un segundo grado, sospechamos que ción (e incluso la negación) del trau-
una analogía y, por tanto, una confir- mero, el del narrador, Jacques Hold su incapacidad de contarla personal- ma real de dicha vida. De este modo,
mación de ellos. En otras palabras, —asimismo activo protagonista de los mente es parte de su enfermedad; el Duras quizás ha logrado algo que
¿Duras recuerda su pasado y, por hechos—, y luego el de Tatiana Karl trauma, incapaz de manifestarse de pocos autores han conseguido en el
consiguiente, lo trasciende, o posee (esposa del jefe de Hold en el hospi- forma simbólica, se representa conti- siglo 70C: poner en el lenguaje —aun-
más bien una relación afectiva y nos- tal donde trabaja aquél como médico, nuamente. Y, de hecho, la última par- que sea mínimamente— la lucha por
tálgica con él? En favor de la primera y su amante), que, indica la narración te de la novela relata el regreso de el lenguaje.
explicación y, quizá, contra la opi- de Hold, le ha contado lo que se ha- Lol al escenario de los dramáticos
nión de Kristeva, está el dato del in- bía traslucido en T. Beach. Lo que sucesos y su intento de represen-
dudable éxito de Duras como escri- también está claro, no obstante, es tación.
NOTAS
tora, especialmente con El amante, que el relato de lo que pasó en Rápidamente, el lector, cada vez
que se ha convertido en éxito de ven- T. Beach no está Separado de los su- más alerta a nuevas pruebas que acla-
' Marguerite Duras, Pie Ravishing of
tas mundial. Por tanto, a pesar de que cesos narrados. Sobre todo, en la par- ren el significado del relato, se • da Col V. Stein, trad. de Richard Seaver,
no pueda recordarlo para sí misma„ sí te que describe el intento de recons- cuenta de que éste no trata tanto de Nueva York, Grove Press, 1966.
puede hacerlo para otros. En ese sen- trucción de la noche decisiva. un suceso como de la forma de con- I Leslie Hill, Marguerire Duras: Apo-
tido, la obra trasciende la desespera- Esa noche, la impresión de ver a su tar ese suceso. Lol no puede contar- calyptic Desires, Londres, Routledge.
ción. Por otro lado, la ausencia de prometido, Michael Richardson, salir - lo, porque estaba demasiado próxima 1993, pág. 1.
trascendencia puede confirmar la con Anna-Marie Stretter parece em- a él; sólo el testigo posee el instru- ' Los detalles biográficos de Duras
desesperación presente en la socie- pujar a Lol V. Stein a un estado mento simbólico para relatarlo. Pero que figuran a continuación proceden,
dad moderna, y quizá sea eso lo que de locura. No obstante, parece reco- " I en gran parte, de Leslie Hill, Marguerite
ni siquiera eso es sencillo; porque, en
constituye la base de su éxito. Así Duras, y Christiane Blot-Labarrére, Mar-
brarse y abandona su ciudad natal, la versión de Jacques Hold, Lol se
guante Duras, París, Seuil, 'Les Contem-
como es posible reaccionar ante el S. Tabla, para casarse con Jean Be- encuentra en la posición intermedia
porains•, 1992.
sufrimiento sufriendo también, así los dford, con quien tiene tres hijos. Al del tercero, de lo simbólico, cuando Hill, Marguerite Duras, pág. 118.
lectores pueden tener una respuesta cabo del tiempo, Lol V. Stein regresa se convierte en testigo de la relación Marguerite Duras, 7Zie Lover, trad.

empática ante Duras, una reacción a S, Tabla tras una ausencia de diez entre Jacques y Tatiana. Es como si de Barban Bray, Londres, Collins, Fon-
fascinada, y no analítica. Sea como años, renueva su trato con Tatiana y, Lol quisiera desesperadamente en- tana/Flamingo, 3. impr. 1986, pág. 11.
sea, es evidente que Duras nos hace al mismo tiempo, conoce al amante contrarse en una posición que le per- ¡Ud.
pensar seriamente sobre el carácter de Tatiana, Jacques Hold. Un elemen- mita hablar de lo que ve, y no ser la 7 !bid,
actual de la literatura. 8 Jacques Lacan, tHommage to Mar-
to clave de la novela es la ambigua víctima traumatizada, el objeto del
Una de las novelas más famosas e guerite Duras., trad. de Peter Connor en
situación de Lol V. Stein. Al principio, discurso de otro.
intrigantes de Duras es El arrebato de Duras on Duras, San Francisco, City
parece (una cuestión crucial es si ver- La relación de Lol V. Stein con su Lights Books, 1987, págs. 122-129.
Lo/ V. Steín. Su compleja narración daderamente llega a trascenderse la trauma parecería corresponder a la
—o ausencia de una narración cla- apariencia) que Lol está destrozada relación de Marguerite Duras con su
ra— ha provocado numerosas inter- porque la han abandonado por otra propia familia (especialmente su ma-
pretaciones, y una de las más conoci- mujer. Pero varias cosas complican la dre y su hermano). Una vez más, lo VÉASE TAMBIÉN EN ESTE LIBRO
das es la de Jacques Lacan". Lacan situación, una de las cuales, y no la importante no es reconstruir los ver-
considera que el relato de Duras es menor, es que Lol no puede recordar daderos hechos del pasado, sino ser Irigaray, Kristeva, Lacan,

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KAFKA KAFKA

PRINCIPALES OBRAS DE DURAS do en el seno de una familia judía de de sus relatos al checo, Milena Jeses- evocarlo. Es muy posible que los lec-
Praga en 1883, Franz Kafka era hijo ka. En 1914, Kafka leyó el primer tores que buscan en Kafka un men-
La vida tranquila (1944). Barcelona, de un próspero hombre de negocios. capítulo de El proceso a Brod, y saje sobre la modernidad sean capa-
Noguer, 1990. Aunque sus padres hablaban checo en 1918, un año después de que se ces de hallarlo porque la sugerencia
Un dique contra el Pacifico (1950), Bar- en su aldea natal, hicieron todo lo le diagnosticara tuberculosis, se pro- del mensaje es uno de los rasgos fun-
celona, Versal, 1985. posible para garantizar que su hijo
Moderato cantaba° (1958), Barcelona, metió a _lidie Wohryzek. En el invier- damentales de su estrategia literaria.
Tusquets, 1987, tuviera una buena educación y, sobre no de 1920-1921, durante su estancia Sugerir y evocar —avanzar a través
Hiroshima Mon Amour(1960), Barcelo- todo, que pudiera hablar y escribir en un sanatorio para tratarse la tuber- de enigmas—, en vez de afirmar,
na, SeLx Barral, 1988.
- correcto alemán, como la minoría pri- culosis, Kafka expresó a Bord su de- otorga a las cosas un carácter profun-
El arrebato de Lol V. Stein (1964), Barce- vilegiada germanohablante de Praga. seo de que toda su obra se destruye- damente caleidoscópico. La novedad
lona, Tusquets, 1987. El padre quería asimismo que su hijo ra tras su muerte, una petición que de la escritura de Kafka, que pocos
La amante inglesa (1967), Barcelona, conociera y apreciara el lado judío de luego confirmó por escrito. Después lectores anteriores a los años 80 pu-
Versal, 1986, la historia familiar, un factor que pro- de vivir en Berlín con una estudiante dieron dejar de advertir, debe encon-
Destruir, dice (1969), Barcelona, Tus- vocó conflictos habituales entre am- polaca de hebreo, Dora Dymant, Ka- trarse en este estilo minimalista de su-
quets, 1991. bos; porque Franz tenía una idea muy gerencia. La novedad ha significado
El amor (1971), Barcelona, Tusquets, fka murió de tuberculosis en 1924.
1990. distinta del judaísmo, como queda La influencia de Kafka ha sido muy que cada lector puede empezar a ver
El mal de la muerte (1982), Barcelona, bien patente en la famosa carta a su profunda, al menos, desde dos pun- en el texto algo para él. En otras pa-
Tusquets, 1986. padre, escrita en noviembre de 1919. tos de vista. En primer lugar, sus labras, la falta de definición y especi-
El amante (1984), Barcelona, Tusquets, Entre 1893 y 1901, Kafka asistió al textos —en los que parece haberse ficidad en el mundo de Kafka produ-
1994. ghnnasium alemán, y después estu- creado un mundo enigmático y es- ce los elementos •kafkianos., el
El dolor (1985), Barcelona, Plaza Si Ja- dió jurisprudencia en la Universidad pectral— han puesto el dedo en la enigma, la oscuridad y el misterio en
nés, 1994. Karl-Ferdinand. En 1906 se examinó Haga de la vida tal como transcurre los que todos pueden hallar un lugar,
Ojos azules pelo negro (1986), Barcelo- de su doctorado en leyes. En 1902 se en la sociedad industrial moderna. En por perturbador y deprimente que
na, Tusquets, 1987. encontró por primera vez con el críti- ellos se esbozan el nihilismo de una ello resulte.
Emily L (1987), Barcelona, Tusquets,
1988, co y novelista Max Brod, que le in- sociedad sin Dios, el hiperracionalis- El papel del enigma y la oscuridad
El amante de la China del Norte (1991), trodujo en los círculos literarios de mo del dominio burocrático, que es- no es, en absoluto, el claro resultado
Barcelona, Tusquets, 1991, Praga. En 1907 entró a trabajar en una trangula al inocente en su tela de ara- de una estrategia de escritor, sino
compañía de seguros italiana, antes ña, y el fin de todos los idealismos, que, en ocasiones, parece ser intrín-
de irse a trabajar, desde julio de 1908 incluyendo, quizá, el final del con- seco del objeto que se describe. En
0111AS LEC-CURAS hasta su retiro en 1922 por mala sa- cepto de causalidad junto A todos los ningún sitio se ve mejor que cuando
lud, a la Oficina de Seguro de Acci- primeros principios. En la amarre de se habla de las leyes en El proceso. La
Hut, Leslie y Duails, Margueríte, Apo- dentes para los Trabajadores, semigu- Kafka se encuentra la alegoría de una ley, que presuntamente debe ilumi-
calyptic Desires, Londres, Routledge, bernamental. La empresa le concedió sociedad sin ningún fin determinado, nar el caso, al mismo tiempo lo oscu-
1993. Este libro contiene una exhaus- una baja prolongada de enfermedad, pero que está claramente destinada a rece. De hecho, parece tener un pun-
tiva bibliografía de las obras de Du- lo cual le dejó más tiempo libre para terminar en el sentido material. Jo- to ciego en su propio centro. Porque
ras en inglés y francés. . escribir. seph K no logra saber por qué crimen no logra dar una respuesta definitiva
Wooraituu., Winifred, •Marguerite Duras En 1909, una publicación de Praga se le detiene en El proceso, del mis- a la pregunta de quién está dentro y
and the question of community., Mo- aceptó el primer relato de Kafka, y mo modo que K, en El castillo, no quién fuera de ella. En principio, la
dern language Studies, 17, 1 (invier- éste leyó a Brod capítulos de su no- puede entrar en él, pero no sabe por ley no puede reconocer sus límites;
no de 1987), págs. 3-16, vela Preparativos de boda en el cam- qué. En cierto plano, pues, Kafka ha pretende ser todopoderoCa. En reali-
po. En 1910 empezó a llevar sus dia- asumido la función de revelador de dad, sin embargo, siempre existen
rios y a relacionarse con la compañía los peligros en las relaciones sociales áreas fuera de la ley, como son las
de teatro en yiddish. En 1912 cono- y psicológicas, que quedan reducidas áreas del placer, el horror y la muer-
Franz Kafka ció a Felice Bauer, a quien estuvo a nada más que instrumentos. Y la te; precisamente las que obsesionan
prometido en dos ocasiones y con la creación de su mundo parece aún al texto de Kafka,
La singularidad de Kafka deriva, en que mantuvo una voluminosa corres- más lograda en la medida en que En segundo lugar, Kafka y su obra
gran parte, de la intersección de la li- pondencia. También escribió cartas, nunca lo describe ni caracteriza, sino ofrecen una percepción del modo de
teratura y la experiencia vivida. Naci- que están publicadas, a la traductora que siempre se limita a sugerirlo o ser de un escritor en el siglo rc. La
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vida de Kafka, en y para la escritura más profundamente, vive en su escri- posibilidad de ese compromiso está desecha las conexiones genealógicas
—una vida parcialmente revelada, tura, e incluso está formado por ella más cerca de la orientación de Kafka. y se centra en las cosas pequeñas que
con gran fuerza e intensidad, en sus en sentido físico. Es la escritura corno El ejercicio de la escritura es una es- le rodean; produce una riada de car-
Diarios—, suscita la cuestión de lo gasto de cierta cantidad de energía critura producida a pesar de la deses- tas en vez de una visión global. Es
que podría significar verdaderamente sin obtener nada a cambio. Algunos peración y la oscuridad del mundo, a decir, Kafka transforma significativa-
para alguien el hecho de estar dedi- éleinentos de la biografía de Kafka pesar de la ausencia de protocolos mente, aunque de manera impercep-
cado al arte en general, y a la litera- confirman e ilustran lo que está en racionales que puedan seguirse con tible, la naturaleza del alemán y se
tura en particular, en el siglo n. ¿Por juego. Por ejemplo, en lugar de con- algún grado de certeza. En este senti- labra en él un hueco extraordinario,
qué es una pregunta tan difícil de res- vertirse en un escritor profesional y do, la escritura de Kafka es una escri- un lugar que no anticipaba, en abso-
ponder? ¿Por qué no se puede decir, vivir de ello, Kafka siguió trabajando tura de sacrificio. Sus enigmas le son luto, el uso corriente de la lengua en
sencillamente, que algunas personas en la oficina de seguros del gobierno esenciales, como también lo es el es- la época en la que escribió.
sienten la llamada de la vocación de durante el día y escribiendo sólo de fuerzo que le cuesta: Kafka se agota Sin desarrollar más el análisis de
•scritoc., como otros son abogados o noche, o al final de la tarde. En se- cuando escribe. En una ocasión, aho- estos hechos, baste decir que la vida
médicos? Una respuesta gira en torno gundo lugar, como es bien sabido, ra famosa, escribió su relato La con- de Kafka puso sobre el terreno una
a lo que el escritor se siente llamado Kafka declaró a su albacea literario, dena de una sentada, la noche del 22 nueva forma de entender el vínculo
a hacer, como escritor, en la sociedad Max Brod, que quería que se quema- al 23 de septiembre de 1912. Obser- entre la escritura y la vida. Se puede
moderna. Si se conforma con adap- ran todas sus obras (con ciertas ex- va en su diario: resumir de esta forma: Kafka demos-
tarse a las normas convencionales cepciones). Del mismo modo que el tró con su trabajo que escribir es un
sobre la escritura, no hay ningún pro- origen de los hechos en sus obras de Casi no podía sacar mis piernas modo de vida, que exige la concen z
blema; las puertas del periodismo y la ficción está envuelto en las brumas de debajo de la mesa, por la rigidez tración de fuerzas'; además hizo que
escritura, en géneros muy estableci- del enigma, también lo está dicha so- que habían adquirido de estar sen- se viera lo que estaba realmente en
dos (por ejemplo, la novela de detec- tado. El miedo y la alegría, cómo se
licitud. ¿Por qué habría hecho tal pe- desarrollaba la historia ante mis ojos, juego al construir el objeto literario;
tives), están abiertas para él. Pero, tición Kafka, que en su lecho de como si caminara por encima del y, por último, mediante el uso del
con razón o sin ella, desde mitad del muerte seguía corrigiendo las prue- agua. Varias veces durante la noche enigma, liberó la escritura de un de-
siglo XVIII ha aparecido en la sociedad bas de uno de sus libros? Gracias a sentí mi propio peso sobre mi espal- terminismo sociológico o psicológico
moderna la categoría de la literatura. que Max Brod se negó a cumplir el da... A las dos miré el reloj por últi- que pretendiera explicar la escritura
La literatura, al menos desde un pun- deseo de su protegido en este aspec- ma vez. Cuando la doncella atrave- en función de las condiciones mate-
to de vista determinado, es la cano- to tan importante y, por el contrario, só por primera vez la alcoba, estaba riales o la biografía de un autor. Des-
nización. de la escritura verdadera- se propuso publicar sus obras com- escribiendo mi última frase... Los li- pués de Kafka, la escritura (la litera-
mente extraordinaria. En el caso de pletas en cinco volúmenes, Kafka se geros dolores en torno a mi corazón.
El cansancio que se desvaneció en tura) ya no es resultado de unas
Kafka, ello implica la consagración de ha hecho inmortal; su escritura ha mitad de la noche'. condiciones, sino que ayuda además
su experiencia más íntima. Dicha pasado a ser literatura. Por fin obtu- a constituir esas condiciones.
consagración, el hecho de que la es- vo reconocimiento con arreglo a sus Aunque Deleuze y Guattari no Según la crítica francesa Marthe
critura se haga literaria, provoca una propios términos, pero, trágicamente, creen, tampoco, que el efecto políti- Robert, Kafka emplea el anonimato
tensión muy profunda. Porque, cuan- no vivió para verlo. co de la escritura de Kafka sea un de sus principales personajes, como
do el escritor ha jugado sus cartas, ha Aunque indudablemente hay ele- compromiso en el sentido sartriano, K, para sacar a la luz su cualidad tras-
quemado sus naves, lo ha arriesgado mentos en la ficción de Kafka que se afirman que su ficción es política en cendente'. En otras palabras, se libe-
todo y ha preparado el escenario prestan a una lectura alegórica y, por el sentido de que constituye una es- ran del entorno en el que pueden
para desafiar las convenciones más tanto, a una utilización política, se critura •menor• dentro de una gran haber aparecido y son capaces de
arraigadas del arte de su tiempo, pue- puede decir que la obra de Kafka tie- formación lingüística'. Como judío arraigar en muchos entornos diferen-
de no lograr el reconocimiento; ne consecuencias políticas, sobre checo —es decir, miembro de una tes. El personaje es entonces un exi-
puede que todo ello no haya servido todo, de una forma más indirecta, minoría— que escribía en alemán, liado —como los judíos (aunque no
para nada. Es preciso contar con la mediante la valoración del ejercicio Kafka logra abrirse paso en la lengua se dice jamás en ningún punto de su
posibilidad del mayor fracaso. Se ha de la escritura. La escritura' de Kafka dominante construyendo un idioma ficción)—, capaz de transgredir lími-
apostado mucho, y la teritación de no es comprometida corno la de Sar- menor dentro de ella. Kafka juega tes de todo tipo, morales, legales, cul-
llegar a un compromiso es muy fúerte. tre; la verdad ideal necesaria para esa con la tonalidad del alemán; rechaza turales, psicológicos. El personaje es
Desde esta perspectiva, un autor posición política está ausente en la las metáforas; escribe para desfarnilia- la persona anónima y desarraigada
no sólo vive para su escritura, -sino, ficción de aquél. En realidad, la im- rizar (desterritorializar) el lenguaje; que está siempre en busca de una co-
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KAFKA LYOTARD

municiaci, como se encuentran mu- decir, a pesar de su preocupación por Diarios 1910 1913 (1948), Barcelona.
- nis), puesto en el que permaneció
chas personas desplazadas en la Eu- Ja muerte: •Ésa es la razón de que Lumen, 1991. hasta su jubilación, en 1989. En-
ropa de finales del siglo Nx. La vida sólo entendamos Ha oetwre de Kafka] Carta al padre(1953), Madrid. Debaie, tre 1956 y 1966, Lyotard estuvo en el
del propio Kafka, mitad judío, mitad 1994. comité editorial de la - publicación so-
cuando la traicionarnos; nuestra lec-
alemán, encarna asimismo el tema
Canas a Felice, 3 ols.. Madrid, Alianza.
tura gira ansiosamente en torno a un cialista Socialismo ou barbarie y el
1977.
del exilio y la •xtraterritorialidad.. malentendido.'. periódico socialista Pouvoir aura-ter.
Escritos sobre sus escritos, Barcelona,
Desde otra perspectiva, la ausencia Además de oponerse activamente al
Anagrama. 1983.
de límites fijos puede considerarse un Informe para una academia, Madrid, gobierno francés a propósito de la
rasgo de las novelas de Kafka. Esta NOTAS Akal, 1985. guerra de Argelia, Lyotard participó
vez, la caída de esos límites evoca Cartas a Antena, Madrid, Alianza, 1991. en los sucesos de mayo de 1968.
la falta de trascendencia. La fuente, el ' Franz Kafka, TU Diarias of Franz La condena, Madrid, Alianza, 1994. Si bien durante los años 50 y 60
, origen, desaparece: el origen de la Kafka 1910-1923, Meditación, Madrid, M. E., 1994. fue un activista político de tendencia
ed. de Max Brod,
ley, el origen del cambio, de la se- trad. de Joseph ICresh y Martín Green- marxista, en los 80 Lyotard se convir-
xualidad, la causa en la relación de berg, Harmondsworth, Peregrine/Pen- tió en el filósofo no marxista de la
. causa y efecto, todo se evapora en un guin, 1964, pág. 212. postmodernidad. Ésta señala una se-
OTRAS LECTURAS
enigma. •Por qué , no tiene respues- = Gilles Deleuze y Félix Guattari, Kaf- paración fundamental del tipo de
ta. En este sentido, Kafka se vuelve ka: Toward a Minar Literatura, trad. de
pensamiento totalitario que represen-
Dana Polan, Minneapolis, University of ANDERSON, Mark (ed.), Reading Kafka:
nietzscheano y radicalmente anti- ta (aunque no sólo) el marxismo.
Minnesota Press, 1986, 1618. Prague, Politics and Iba Fin de siécle,
idealista. Como explica Georges Ba- Antes de la aparición del que es, pro-
3 Sobre este aspecto, véase Franz Kaf- Nueva York, Schocken Books, 1989.
taille 5 , en Kafka no existe tierra pro- ka, 71w Diarias of Franz. Kafka 1910- bablemente, su libro de filosofía más
BATALLE, Georges, .Kafka., en Littératu-
metida; el objetivo de Moisés es 1923, pág. 163. re and Eva, wad. de Alastair Hamilton, importante -Le dIfférend: PbrasesCil
inalcanzable porque estamos hablan- • Manhe Robert, Franz Kafka's Lona- Londres, Calder & Boyars, 1973. dispute (La diferencia)-, Lyotard ya
do de la vida humana -el mundo fí- liness, trad. de Ralph Manheim, Londres, BENJAMIN, Walter, •Franz Kafka on the había indicado este cambio de direc-
sico y material-, no de un ámbito Faber 8: Faber, 1982, pág. 5. tenth anniversary of his death., en ción filosófica tanto en su tesis doc-
trascendente. Sin duda, Kafka tiende Georges Bataille, •Kafka-, en La Illutninations, trad. de 'Harry Zohn, toral, Disco urs, figure (Discurso, figu-
a encajar en algunas de las caracterís- littérature et le mal, en Oeuures com- Glasgow, Fontana/Collins, 3. impr.
ra) como en Eco710Mie libidinale.
plétes, IX, París, Gallimard, 1979, pági- 1979, págs. 111-140.
ticas definidas como .postmodernas•, Esta última obra pretende escapar de
na 272. (Trad. esp.: La literatura y el B1ANCH0T, Maurice, De Kafka ñ Kafka,
por su esfuerzo para dar más fluidez la .frialdad. teórica del marxismo me-
mal, Madrid, Taurus, 1987.) París, Gallimard/Idées, 1981.
a todos los límites y, por tanto, todas 6 Maurice S'anchor. De Kafka á Kaf-
diante la economía de la energía de
DELEUZE. Gilles y GUATTARI, Félix, Kafka:
las identidades. ka, París, Gallimard/Idées, 1981, pági- Toward a Minor Literatura, Minnea- la libido y la noción del proceso pri-
La ficción de Kafita está impregna- na 66. polis, University of Minnesota Press, mario en Freud. Ahora, la economía
da del espectro de la muerte, junto ' liad., pág. 74. 1986. de la libido se convierte en la base de
con la angustia y la desesperación. Se ROBERT, Manhé, Acerca de Kafka. Acer- lo político, sustituyendo a la econo-
puede excluir la fe, pero no la bús- ca de Freud, Barcelona, Anagrama. mía politica. Esta ruptura radical con
queda de la fe. Como ha explicado 1980., el marxismo, en Econoyite libidinale,
VÉASE TAMBIÉN EN ESTE LIBRO
Maurice Blanchot, existe la incerti- se matiza mucho más en la filosofía
dumbre del significado porque la del postmodernismo.
Bataille, Blanchot, Duras.
desesperación y la ansiedad son los Pese a lo prolífico de su produc-
equivalentes de la muerte en la vida 6. ción en años recientes, sobre todo en
La desesperación surge porque la el campo de la estética, casi todo el
PRINCIPALES OBRAS DE KAFKA Jean-Frangois Lyotard
existencia es un exilio; no existe un pensamiento genuinamente innova-
verdadero hogar en el que se pueda dor (o experimental) de Lyotard -y,
evitar la ansiedad de la vida moder- La nzetanzollosis (1919), Madrid, Cáte- desde luego, el pensamiento por el
Jean-Franlois Lyotard nació en
na. Ser moderno es, en cieno modo, dra, 1985.
1924 en Versalles. Durante diez años, que ha adquirido fama- se reúne en
El proceso (1925), Madrid, Cátedra, 1995.
ser judío. Pocos han resumido mejor hasta 1959, enseñó filosofía en escue- sólo dos libros: La condición postmo-
América (1927), Madrid, Alianza, 1993.
la singularidad de Kafka que Blan- las de segunda enseñanza y, más tar- denza y La diferencia.
El castillo 0926). Madrid. Alianza, 1984.
chot, cuando afirma que la obra de La muralla china (1931). Madrid, Alian- de, fue profesor de filosofía en la La condición postmodenia, escrita
aquél reluce a pesar de sí misma, es za, 1990. Universidad de París VIII (Saint-De- como un informe sobre el conoci-

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LYOTARD LYOTARD

miento para el gobierno de Quebec, justificación, incluso dos, para el co- 4. Una afirmación científica exis- apoyo financiero. Para obtener finan-
examina el conocimiento, la ciencia y nocimiento o la ciencia, se vuelve re- te sólo dentro de una serie de afirma- ciación es preciso justificar la impor-
la tecnología en las sociedades capi- mota. Anteriormente, la fe en una ciones a las que dan validez los argu- tanda a largo plazo de la investiga-
talistas avanzadas. Aquí se cree que narrativa (por ejemplo, las doctrinas mentos y las pruebas. ción, lo que sitúa la investigación
el concepto de sociedad corno forma religiosas) habría resuelto la posible 5. Teniendo en cuenta (0, el jue- pura bajo los auspicios del juego lin-
, de •unicidad. (como en la identidad dificultad. Desde la Segunda Guerra go lingüístico científico exige estar al güístico de la performatividad.
nacional) está perdiendo credibilidad. Mundial, las técnicas y las tecnolo- tanto del estado actual de los conocí- Una vez que predomina esta últi-
La sociedad como algo único, se con- gías, tal como anticipaba Weber, han tnientos científicos. La ciencia ya no ma, la verdad y la justicia suelen ser
ciba como un conjunto orgánico •trasladado el énfasis de los fines de necesita una narrativa para su legiti- resultado de la investigación con más
(Durkheim) o como un sistema fun- la acción a sus medios.'. Al margen mación, porque las normas científicas fondos (con más fondos, es decir,
cional (Parsons), o como un conjun- de que la forma de unificación narra- son inmanentes a su juego. más convincente); .al reforzar la tec-
to fundamentalmente dividido, for- tiva sea de tipo especulativo o eman- nología se "refuerza" la realidad, y las
mado por dos clases opuestas (Marx), cipador, la legitimación del conoci- Para que la ciencia •progrese• (es posibilidades de ser justo y acertado
ya no es creíble debido a la creciente miento no puede ya depender de una decir, para que se acepte un nuevo aumentan de forma correspondien-
'incredulidad respecto ai• las •netana- narrativas grandiosa-, de modo que la axioma o afirmación denotativa), ie.'. Y, si quienes tienen dinero para
rrativas. legitimadoras. Dichas meta- ciencia se entiende mejor, actualmen- cada científico o grupo de científicos financiar la investigación tienen tam-
narrativas (por ejemplo: toda socie- te, con arreglo a la teoría del •juego debe obtener la aprobación de todos bién poder (y tienen poder, según
dad existe para bien de sus miem- lingüístico , de Wittgenstein. los demás científicos en su campo. Lyotard, porque se aprovechan de la
bros; el conjunto une las partes; la re- Un juego lingüístico significa que Y, a medida que el trabajo científico investigación), la era postmoderna
lación entre las partes es justa, o in- ningún concepto ni teoría podría cap- se hace más complejo, también lo ha- sería aquella en la que el poder y el
justa, dependiendo de la situación) turar adecuadamente el lenguaje en cen las formas de probar; cuanto más conocimiento entran en contacto mu-
ofrecen una teleología que legitima el su totalidad, aunque sólo sea porque compleja la prueba, más compleja la tuo como nunca antes.
vínculo social y el papel de la ciencia el intentarlo constituye, ya en sí, su tecnología necesaria para lograr nive- Por otro lado, la performatividad
y el concimiento en relación con él. propio juego lingüístico concreto. les de validez aceptados generalmen- puede permanecer en una posición
Es decir, una metanarratíva suminis- Una vez más, pues, las narrativas te. La tecnología, esencial para enten- de hegemonía en el juego lingüístico
tra un propósito creíble- para la ac- grandiosas ya no tienen credibilidad, der la forma del conocimiento científico sólo si se deja de lado la
ción, la ciencia o la sociedad en ge- porque forman parte de un juego lin- científico en la sociedad del último cuestión de su legitimidad. Esto resul-
neral. En un plano más técnico, una güístico que, a su vez, es Parte de cuarto del siglo ,cx, se rige por el ta fácil si dicha cuestión es lo mismo
ciencia es moderna si intenta legiti- múltiples juegos lingüísticos. Lyotard principio del rendimiento óptimo: que la pregunta ¿qué es la ciencia? Sin
mar sus propias normas mediante la ha escrito sobre el discurso especula- máxima producción con mínimo es- embargo, una vez que la performati-
referencia a una metanarrativa, o sea, tivo como juego lingüístico, un juego fuerzo. Lyotard lo llama el principio vidad de la pregunta se plantea, apa-
una narrativa exterior a su propia es- con reglas específicas que pueden de performatividack y domina el jue- rece el límite de la racionalidad per-
fera de competencia. analizarse en función de cómo se de- go lingüístico científico precisamente formativa, en la medida en que la
Dos metanarrativas influyentes son ban vincular las afirmaciones entre sí. porque un descubrimiento científico performatividad no puede justificarse
la idea de que el conocimiento se Por consiguiente, la ciencia es un requiere una prueba que cuesta dine- sino mediante una metanarrativa.
produce por sí mismo (típica del juego lingüístico con las siguientes ro. La tecnología pasa a ser la forma Teóricos de sistemas como Luh-
idealismo alemán) y la de que el reglas: más eficaz de obtener una prueba mann proponen que la performativi-
conocimiento se produjo para un científica: •se establece, pues, una ciad es la base sobre la que se sostiene
pueblo sometido que buscaba la 1. Sólo son científicas las afirma- ecuación entre riqueza, eficiencia y el sistema (social), tras el desencanto
emancipación. Por otro lado, la post- ciones denotativas (descriptivas). verdad.. Aunque pueden seguir ocu- del mundo producido por la ciencia
modernidad implica que hay oposi- 2. Las afirmaciones científicas son rriendo descubrimientos .arriesgados. y la tecnología. Como se considera
ción a esos objetivos del conocimien- muy diferentes de las que (se ocupan (en los que la tecnología es mínima), que el sistema perfecto es el más efi-
to y que, ademas, no existe ninguna de los orígenes) constituyen el víncu- ésta suele vincular la ciencia con la ciente, el objetivo es eliminar todas
prueba definitiva para sentar las dispu- lo social. economía. Aunque sigue siendo po- las disfunciones. Para el teórico de
tas en relación con ellos. En la era de 3. Sólo se requiere competencia sible la investigación barata y pura en sistemas, los seres humanos son par-
los ordenadores, cuando se advierte por parte de quien emite el mensaje búsqueda de la verdad, la investiga- te de un sistema homogéneo, estable,
que la complejidad está en aumento, científico, no por parte de quien lo ción costosa se está convirtiendo en teóricamente cognoscible y, por tan-
la posibilidad de que haya una sola recibe. /a norma; y el/o significa conseguir to, predecible. El conocimiento es el

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LYOTARD LYOTARD

instrumento para controlar ese siste- o una reivindicación) en el área ac- se presenta un universo. Por tanto, afirmando que sólo puede ser testigo
ma. Incluso aunque todavía no exista tual de discurso. Se ve de forma muy no hay un universo único, sino uni- una persona muerta.
d conocimiento perfecto, la ecuación gráfica cuando los historiadores revi- versos plurales. Un régimen de frases La posibilidad de esta subversión
•cuanto más grande es el conocimien- sionistas se niegan a admitir la exis- presenta un universo oracional, o de lo cognitivo genera el diferendo.
to, más grande el poder sobre el sis- . tencia de las cámaras de gas nazis a tipo de frase: prescriptiva, ostensiva, Su existencia no puede establecerse
tema. es , a su juicio, irrefutable. menos que se pueda llevar a una víc- perforrnativa, exclamativa, interroga- por medios cognitivos, porque es la
En cambio, Lyotard demuestra que tima como testigo. Para ser una vícti- tiva, imperativa, evaluativa, nominati- señal de una injusticia que, como tal,
la teoría de sistemas está situada den- ma, es preciso haber muerto en las va, etc. Un género de discurso inten- no puede expresarse en términos
tro de una epistemología modernista. cámaras. Muchos historiadores se han ta dar unidad a una colección de cognitivos. El que alguien sea, o no,
Porque, en los propios términos del mostrado comprensiblemente indig- frases. Es preciso invocarlo para iden- víctima de una injusticia no puede
sistema como performatividad, el nados por este uso pervertido de las tificar un régimen de frases, porque tener validez mediante frases cogniti-
control a través del conocimiento dis- reglas deja evidencia, y hablan de la éstas pueden citarse e imitarse. Una vas porque, como víctima, ese al-
minuye su rendimiento, ya que la in- mala fe de quienes lo llevan a cabo. frase cognitiva (factual) en una obra guien es el sujeto de un díferendo. El
certidumbre no se reduce, sino que Lyotard, por el contrario, subraya que de ficción no es lo mismo que la fra- diferendo marca el silencio de la im-
se incrementa con el conocimiento el problema surge porque se ha in- se cognitiva de un historiador. Como Posiblidad de expresar una injusticia.
(cfr. Heisenberg). Ahora está consti- vertido demasiado esfuerzo en lo que el género de la historiografía ha in- En el estudio •El signo de la histo-
tuyéndose un nuevo paradigma post- no es más-que una historiografía em- tentado combinar la historia y el gé- ria•', Lyotard aborda la interpretación
moderno, que subraya la impredeci- piricista. Ésta supone que la mera nero cognitivo, ha permitido que de hechos históricos partiendo del
bilidad, la incertidumbre, la catástrofe existencia del referente (por ejemplo, Faurisson —historiador revisionista— concepto de lo sublime en La crítica
(como en la obra de René Thom), el las cámaras de gas) es suficiente para elabore un argumento contra la exis- del juicio de Kant. Para Kant, el sen-
caos y, sobre todo, la paralogia, o di- aceptar como cierta una frase cong- tencia de las cámaras de gas. Logra timiento sublime no procede del ob-
senso. Este último desafía las reglas noscitiva (por ejemplo, •las cámaras restar validez a los procedimientos jeto (por ejemplo, la naturaleza), sino
del juego. La paralogía se hace impo- de gas existieron.). También acepta del género histórico porque, en dicho que es indicio de un estado mental
sible cuando se retira el reconoci- que este principio de la prueba que género, se ha asegurado que la histo- extraordinario que reconoce su inca-
miento y se niega la legitimación a deriva de la simple existencia del re- ria sólo se ocupa de lo que se puede pacidad para hallar un objeto adecua-
nuevos movimientos dentro del jue- ferente tiene validez universal. Se conocer a través de una frase cogniti- do a ese sentimiento. El sentimiento
go. Silenciar —o eliminar— a un ju- cree que la prueba tiene validez uni- va. En pocas palabras, las frases cog- sublime, como todos los demás, es
gador equivale a un acto terrorista. La versal porque se considera que la rea- nitivas se ocupan solamente de lo de- un signo de esa incapacidad. Por con-
idea de ser incapaces de presentar lidad es un universo (una totalidad) terminable; lo que es imposible de siguiente, se convierte en un signo
una postura que difiera de las normas que puede representarse o expresar- conocer y lo indeterminado están del diferendo entendido como puro
predominantes de argumentación y se en forma simbólica. Sin embargo, fuera de su alcance. Igual que la cien- signo. La tarea del filósofo pasa a ser
validación ofrece un punto de transi- ni siquiera en la física existe un uni- cia es inseparable de las condiciones la búsqueda de esos signos del dife-
ción adecuado para la obra . posterior verso que pueda ponerse por com- de la prueba (no es una mera infor- rendo. Una vez más, puesto que nin-
de Lyotard, La diferencia. pleto en forma simbólica. Más bien, mación sobre la realidad), así las nor- gún universal —ni humanidad, ni li-
Como si hubiera comprendido los se puede demostrar rápidamente que mas para establecer la realidad del bertad, progreso, justicia, ley, belleza,
aspectos políticos que estaban en jue- cualquier afirmación con pretensio- referente determinan el Juniverso de sociedad o lenguaje— puede corres-
go —sobre todo en relación con la nes de universalidad es sólo parte del frases cognitivas., donde la verdad y ponder a un objeto real, el vinculo
justicia—, Lyotard pasa a desarrollar universo que asegura describir. la falsedad están en juego.l. Las afir- buscado entre uno y otro sólo puede
su filosofía del diferendo, la verdade- Para Lyotard, es necesario adoptar maciones veraces no surgen automá- producir el totalitarismo y la subsi-
ra base filosófica de La condición un enfoque regional, y no universal, ticamente como resultado de la sim- guiente exclusión de la alteridad. Sin
postmoderna, que es una obra más para abordar las cuestiones de histo- ple existencia del referente. Por eso embargo, Kant fue un observador
sociológica. El diferendo es el nom- ria, política, lenguaje, arte y sociedad. habrá, no sólo desacuerdos sobre la atento de la Revolución Francesa. La
bre que da Lyotard al hecho de si- En vez de hablar de juegos lingüísti- verdadera naturaleza de este último, contempló como un suceso que indi-
lenciar a un jugador en un juego cos, en La diferencia, Lyotard habla sino afirmaciones de quienes (de caba que la humanidad progresaba.
lingüístico. Existe cuando no hay pro- de .regímenes de frases. y •géneros mala fe) se niegan a aceptar que haya Tuvo el entusiasmo de tantos espec-
cedimientos reconocidos para pre- de discurso.. Como los juegos lingüís- adhesión a las reglas del juego, o que tadores ajenos a ella. ¿Estaba yendo
sentar lo que es diferente (tanto si es ticos, los regímenes de frases poseen las interpretan de un modo que les Kant, pues, en contra de la lógica de
una idea como un principio estético sus reglas constituyentes, y cada fra- permite subvertidas; por ejemplo, lo sublime, y confundiendo un fuerte

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LYOTARD LYOTARD

sentimiento (el entusiasmo) con el es el resultado de •mi ley, sino de la nero y suprimir el diferendo. Suprimir ' Jean-Francois Lyotard, Le Différend,
hecho histórico concreto de la Revo- ley •del otro.: sólo me puedo sentir el diferendo es sofocar nuevas formas París, Minuit, 1983, pág. 35.
lución Francesa? No, porque el entu- obligado si esa obligación procede de 5 Lyotard, "Le signe de fhistoire, en
de pensar y actuar.
siasmo es un signo de que la Revolu- fuera de mi mundo, del mundo del Le Différencl, págs. 218-260.
Más problemático resulta, no obs-
ción posee una faceta sublime, es - otro. La ley del otro que nos obliga tante, el hecho de que, al promover
j decir, impresentable; precisamente es la evidencia de la imposibilidad de Lyotard la frase a una posición privi-
porque es un hecho histórico. Ningún construir jamás una representación legiada en relación con el diferendo, VÉASE TAMBIÉN EN ESTE LIBRO
género de discurso puede dar expre- adecuada de ella. La frase ética sólo corre el riesgo de oscurecer éste. Por-
sión a un hecho verdaderamente his- puede ser un signo indicador de una Baudrillard, Habermas, Levinas.
que aquí no hay una no frase. Un si-
tórico; de modo que desafía a los gé- obligación que nunca tiene forma lencio. una interjección, un encogi-
neros existentes a que encuentren un concreta. Se trata de saber si el impe- miento de hombros, son frases.
sitio para él. En otras palabras, el he- rativo categórico de Kant podría ja- PRINCIPALES OBRAS DE LYOTARD
Tampoco hay una primera o última
cho histórico es un caso de diferendo. más constituir la base de una comu- frase, porque siempre están encade-
A diferencia de Hegel, Kant no in- nidad ética. Aquí vemos la relevancia nadas. Decir que no hay más que la La fenomenología (1954). Barcelona,
tenta fabricar una frase especulativa de b filosofía de Levinas, que invoca frase implica, sin duda, que la frase Paidós, 1990.
Discurso, figura 09711 Barcelona, Gus-
equivalente a una frase cognitiva. Las fuentes teológicas judías con el fin de emana de sí misma, que es su propia
frases especulativas se refieren siem- tavo Gili, 1979.
mostrar la necesaria prioridad del ley. Pero esta afirmación tiene el pe- Apar& de Marry Freud (1973), Madrid,
pre a signos (es decir, sentimientos y otro (el •11.) en el origen de la ley ligro de convertirse en una totaliza- Fundamentos, 1975.
emociones), y Hegel se equivocó al moral. No sólo se niega Kant a ceder ción restrictiva que choca contra el Dispositivos pulsionales (1973), Madrid,
pensar que una frase especulativa po- y reducir el género del discurso de principio de permitir que el diferen- Fundamentos, 1981.
día tener concreción. En este aspecto, obligación al género cognitivo, sino do salga del silencio. Lyotard podría Instructions paiennes, París, Galilée,
Hegel estaba ligado a una filosofía del que además ofrece un modo de pen- replicar que eso es negar el carácter 1977.
resultado, de cómo resultarían las co- sar sobre cómo se •conectan» los gé- (radicalmente) heterogéneo que atri- La condición postmoderna (1979), Ma-
sas de forma determinante. El indeter- neros de discurso entre sí. Cada gé- buye a los regímenes de frases, un drid, Cátedra, 1989.
minante —el signo, la emoción, el su- nero de discurso es análogo a un La diferencia (1983), Barcelona, Gedisa,
carácter que garantiza el diferendo. 1988.
ceso, el diferendo-- está totalmente .archipiélago., y el juicio es un medio ¿Qué tipo de heterogeneidad puede El entusiasmo 09861 Barcelona, Gedi-
ausente del sistema hegeliano. de pasar de un archipiélago a otro. Al ser el que niega la alteridad? Afirmar sa, 1987.
Como la crítica de la historia de contrario que la tendencia homoge- que siempre hay una frase —que Peregrinaciones, ley, forma, aconteci-
Kant, los problemas de la obligación neizadora del discurso especulativo, siempre hay algo más que nada— no mientos (1988), Madrid, Cátedra,
aparecen .en el libro de Lyotard Just el juicio permite la heterogeneidad elimina el problema de la .nada., aun- 1992.
Gaming La búsqueda del fundamen- necesaria de los géneros. El juicio, que esa nada sea una imposibilidad. La postmodernidad (explicada a los ni-
to para una frase ética y, por tanto, el por consiguiente, es la forma de re- Dicho problema indica que es nece- ños), Barcelona, Gedisa, 1987.
fundamento para tener una obliga- conocer el diferendo, y la especula- ¿Por qué filosofar? Cuatro conferencias,
saria una elaboración más desarrolla-
ción, guía el estudio. Su conclusión ción hegeliana, una forma de ocultarlo. Barcelona, Paídós, 1989.
da de la •frase» antes de poder acep-
es, quizá paradójicamente, que el El poder del argumento de Lyotard tar la afirmación de Lyotard de que la
fundamento de la obligación no pue- reside en su capacidad de destacar la filosofía de las frases es la forma de
de especificarse; para empezar, por- imposibilidad de hacer que una idea obtener una percepción del diferendo. OTRAS LECTURAS
que una obligación no puede expli- general sea idéntica a un caso real
carse con una descripción; si se concreto (es decir, al referente de una BENNINGTON, Geoffrey, Lyotard: Writing
pudiera, la obligación se desvanece- frase cognitiva). Filósofos, matemáti- me Event, Manchester, Manchester
ría. Sólo podemos sentirnos obliga- cos y científicos admiten actualmente NOTAS University Press, 1988.
dos si —como dice Kant— tenemos las paradojas que surgen cuando una DESCOMBES, Vincent, Modem; French
la libertad de no cumplir con la obli- afirmación general sobre el mundo se Jean-Francois Lyotard, The Postulo- Phylosophy, trad. de L. Scott-Fox y
gación. Una descripción sólo puede dern Conclition: A Report on Knowledge, J. M. Harding, Cambridge, Cambridge
ve obligada a tener en cuenta su pro- trad. de Geoffrey Bennington y Brian University Press, 1980, págs. 180-186
mostrar por qué no puede rehuirse la pio lugar de enunciación. Las ideas Massumi, Minneapolis, University of Min- y passim.
obligación: en resumen, «debería» no de Lyotard en La diferencia son un nesota Press, 1984, 6." impr., pág. 37. PEFANIS, Julian, Heterology and (he Post-
puede derivarse de .es.. antídoto valioso contra el delirio to- = /bid., pág. 45. modern: &n'afile, Baudrillard, and
En segundo lugar, la obligación no talitario de reducir todo a un solo gé- Ibrd., pág. 47. Lyotard, Sidney, Allen & Unwin, 1991.

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Colección Teorema
Serie mayor

TÍTULOS PUBLICADOS

ABERCROMBIE, N. y otros, Diccionario de Sociología, 2.3 ed.


ACERO, J. J.; BUSTOS, E.; QUESADA, D., Introducción a la filosofía del lenguaje,
4.' ed.
ANG VERA, María Teresa, Metodología de la observación en las den cias
humanas, 5 2 ed.
AYALA, Francisco, Introducción a las Ciencias Sociales, 2.' ed.
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