“Verdad y amor sin compromiso, ¿Jesucristo o anticristo?

”
2da. Carta de Juan

Texto clave: versículo 6

“Y este es amor, que andemos según sus mandamientos. Este es el mandamiento: Que andéis
en él, como vosotros habéis oído desde el principio.”

INTRODUCCIÓN:

¿Podemos hablar de verdad y amor desasociados del compromiso? ¿Es la verdad algo
relativo? ¿El amor me lleva al compromiso? vamos a tratar de responder a esto.

Jesucristo dijo una frase que encierra una verdad muy grande (cómo todo lo que él dijo) y que
en estos días toma una relevancia especial: “El que cree en mí, como dice la Escritura, ríos
de agua viva correrán de su vientre”. Juan 7:38 Vivimos tiempos de relativismo cristiano, en
el que cada quien cree no como dice la Escritura, sino como cada quien lo quiere hacer, en
esa rebajada y barata forma de evangelio de muchos, han planteado la verdad y el amor a su
manera. En muchos casos se han vuelto enemigos de aquellos que no consecuentamos la
verdad según ellos, tachándonos de intolerantes e hipócritas.

Ante toda tesis siempre se levanta una antítesis. Ante toda verdad siempre se levanta una
mentira en oposición. Cristo es el verbo encarnado, el camino, la verdad y la vida, y como
sabemos no hay otra manera de llegar al Padre si no es por medio de Él. Satanás pretende
de manera sutil confundir y mover este fundamento, para lo cual no ha utilizado una mentira
abiertamente, sino que aparentando ser verdad y amor y usando un lenguaje
condescendiente, se ha infiltrado en las iglesias y ha diluido el mensaje poderoso y
comprometedor de Cristo.

I. El Amor expresado en el Padre mismo, en Jesús y los mandamientos.

Andar en amor es andar en obediencia
El mandamiento no ha cambiado (amor al prójimo)

II. La Verdad es la doctrina de Jesucristo

III. El engaño del anticristo

Desvirtuar la divinidad de Cristo
Rebelarse al amor verdadero presentando otra forma engañosa de amor.

IV. Perseverar es comprometerse

Compromiso es exclusividad.
Convivir con los rebeldes es aceptar y respaldar su rebeldía
CONCLUSIÓN

Un amor que no es normado y fundamentado en y por la verdad no es amor, y mucho menos

lleva al compromiso. El gran engaño de nuestro tiempo es hacernos creer que por amor
debemos tolerar y respetar conductas y formas de pensamientos que se oponen a la verdad
de Cristo, pretende ser expresado en una forma retorcida de tolerancia y respeto a las
creencias y conductas de las personas, cualesquiera que estas sean y que generalmente son
ajenas a la verdad. Pero el verdadero amor no traiciona a la verdad, se asienta y es controlado
por Cristo, ama en la verdad, según los mandamientos y preceptos divinos