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CAPITULO III

CHIMBOTE, GUAÑAPE Y SALAVERRY

(CHIMBOTE Y GUAÑAPE CON OBSERVACIONES REFERENTES A SALAVERRY)

CHIMBOTE

1. Introducción

La región de Chimbote entra como excepción en el número de las buenas bahías.


Dentro de una distancia de 20 millas hay en la costa las dos grandes bahías de Ferrol y
Samanco y las dos pequeñas de Coishco y Santa. A las 25 millas del sur de Chimbote
está la bahía de Casma y más cerca de Chimbote una bahía que se encuentra en parte
cerrada por las islas de Tortuga y de La Viuda. También hay muchísimas islas desde la
del Corcovado y las de Santa en el norte hasta las pequeñas peñas en el sur cerca de
Casma, con las islas Blanca y las serie de las Ferrol, que viene a cerrar en la
desembocadura de la bahía del Ferrol y la isla Redonda en la desembocadura de la
bahía de Samanco y las islas de Tortuga y de La Viuda.

Tanto en la bahía de Ferrol como la de Samanco hay muchos pescados, pero los
pescadores dicen que hay muchos en Santa.

Las bahías de Samanco y del Ferrol son grandes bahías gemelas que están separadas
por una faja angostísima de tierra baja sobre la cual pasa a veces el agua, según se
dice, uniendo de este modo las dos bahías. Estas son las más notables, por lo grande,
en la costa del Perú, siendo la de Samanco la más extensa, que hay al norte del Callao,
cuya entrada tiene como dos millas de ancho. Esta tiene seis millas de largo por tres y
media de ancho con fondeadores que varían de 19 y 22 hacia la entrada a 3 brazas, 7
cables delante de la playa baja o restinga que separa o comunica esta bahía con la del
Ferrol. Hay un puerto del cual se exporta azúcar, metales y otros artículos y que en
1902 rindió más de L. 51.000.

La bahía del Ferrol, que es precisamente un poco más chica que la de Samanco, tiene
materialmente las mismas dimensiones. Es la más notable que hay en la costa a causa
de la gran protección que recibe de los altos cerros y de las islas y de estar exenta del
olor fuerte que se presenta en la mayor parte de los puertos. Del este al sur, hay playas
al paso, que las demás riberas no son sino puras peñas. La profundidad, lejos de las
playas, fluctúa de 4 o 5 brazas a 8 o 10 en el centro de la bahía y como a 15 en la
entrada que es relativamente angosta. El puerto de Chimbote está ubicado al nordeste
de esta bahía.

Las observaciones e indagaciones referentes a la pesquería de Chimbote fueron hechas


en los 5 días, desde el 26 de febrero al 2 de marzo, que pasé en la población y en los
viajes que hice a las distintas partes de la bahía cogiendo pescados y observando los
arreos y métodos que usan los pescadores. Me complace dejar constancia de las
atenciones especiales que recibí del señor Don Víctor Pezet, que es un caballero que
demuestra mucho interés por el formato de la pesquería. El señor doctor Juan de Dios
Gonzáles me proporcionó igualmente informes útiles respecto a los pescados.
2. Los pescadores y los botes

Los pescadores son naturales del país; viven separados del pueblo de Chimbote en dos
pequeñas villas, las que presentan un aspecto primoroso con sus casas construidas de
totora y de techos planos. Las casas están regularmente limpias y los pescadores
resultaron extraordinariamente bondadosos y llanos para proporcionar los informes
que poseían habiendo entre ellos unos treinta que eran dueños de redes. El haber dos
aldeas de pescadores se debe, según se dice, al hecho que cuando Mr. Meiggs trazó la
aldea de Chimbote a distancia como de medio kilómetro de la antigua villa de
pescadores que era Huanchaquito, esperaba que la nueva aldea se extendiera y
ocupara el área de la antigua, por lo que les dio terreno para que formarán una nueva
villa a una corta distancia de allí y un poco apartado de la playa. Algunos de los
pescadores se trasladaron al nuevo terreno mientras que otros quedaron en el antiguo.
Contiene la siguiente nota interesante referente al origen de la pesca que hay en lugar
que nos ocupa.

“El pueblo de indígenas permanece allí con el nombre especial de “Huanchaquito”


porque eran vecinos de Huanchaco los pescadores que venían antes como vienen
hoy a la bahía del Ferrol a pescar para llevar su pesca a Trujillo, y sus
descendientes hacen el mayor número de los que hasta hoy habitan ese pueblo
dedicados a la pesca y a los trabajos de puerto, del que son matriculados. Hoy
tiene unos 80 habitantes.”

El número de pescadores matriculados que había al 30 de junio de 1907 era de 20,


pero este no representa de un modo adecuado la extensión de la pesquería porque
hay una porción de otros matriculados como lancheros, etc. Que probablemente
dedican una parte de su tiempo a la pesca.

Los botes que están en uso, y que llegan a 20, pertenece al tipo conocido como -
chalana- y tienen un aspecto algo raro. Como puede verse por la fotografía de un bote
que representa un tipo de que tratamos, son un algo profundo con fondos planos y una
popa ancha y cuadrada: son muy adecuados para voltear en la playa y responden muy
bien a su empleo dentro de la bahía, pero tienen que ser muy lentos para ir a la vela y
no se adaptan bien a los viajes de cierta distancia. Las dimensiones de un bote que
representa dicho tipo fueron las siguientes:

Largo 412 cms


Ancho 146 cms
Altura 53 cms (en la proa y
75 cms. en la popa)
Ancho de la popa 112 cms

El mástil se coloca próximo a la bodega (73 centímetros del extremo de popa).

Los botes llevan una pequeña vela provista de entena y botavara.


Vi dos botes de fondo redondo de mejor tipo, uno de los cuales, según se dijo, se
empleaba a veces en la pesca.

Se hace uso de unos cuantos <<caballitos>> con la <<red clara>>. Esta clase de aparejo
de pesca está descrita en un capítulo posterior.

3. Redes y cordeles

Como de costumbre, la red corriente que está en uso, es la que es recta y adecuada
para que se enreden las agallas, la misma que tiene de largo poco más o menos de 40
brazas y de alto de 45 a 60 mallas:

Para las lisas, machetes, etc. Se emplea de 8 a 10 centímetros, siendo más pequeñas
las destinadas a las cabinzas y lornas; y las más grandes sirven para las corvinas (de seis
dedos o más) o para los róbalos (de ocho dedos).

Las redes para pejerreyes tienen una malla de 4 centímetros cuadrados (dos
centímetros) su largo es de 35 a 40 brazas y su alto de 100 mallas.

A veces se emplea un pequeño chinchorro, pero no se hace gran alto de esta clase de
red.

El nombre de <<red clara>> no se emplea aquí con el mismo sentido que en el sur
(como en Pisco, en Cerro Azul, etc.). Según se emplea en el sur, este nombre denota
una recta, de las corrientes, que tiene una maravilla mayor de la que se emplea para
las lisas. La <<red clara>> parece que es aquí un resurgimiento de los tiempos
anteriores. Es en realidad una clase de chinchorro que se emplea no en la playa sino en
el mar profundo, en donde se le maneja desde dos caballitos, o a veces de dos botes
de fondo plano. Tiene una bolsa muy grande que cuando está en el agua se le deja
abierta y se le pone en boyas de calabaza en la parte superior de la boca de cada lado,
y piedras para hundirlas que van amarradas también a cada lado por la parte baja. Es
de malla muy pequeña, pues solo tiene de 1 y 1 ½ a 2 centímetros y su forma es
cuadrada según resulta la red que tuve ocasión de observar. Los brazos son
relativamente cortos; pues en la red que examiné no tenía sino 8 brazas y las mallas
son muy grandes.

Según la descripción que se hace de ese empleo se tira primero la bolsa a la playa y
enseguida el pescador montando a horcajadas en sus <<caballitos>> le da al canalete a
uno y otro lado hasta alcanzar las extremidades de los brazos y los cortos cordeles que
sirven para recoger. Enseguida le dan con el canalete hacia adelante, todo lo que sea
necesario para que quede atrapada la bandada de pescados, haciendo continuamente
el mayor ruido que pueden en el agua, tanto con los pies como con los canaletes. Los
pescados aterrados por el ruido, por el contacto en que quedan con los brazos, se
dirigen ahuyentados al saco o sea a la bolsa. Los pescados pueden pasar a través de las
grandes mallas de los brazos, porque esto sirve para hacer cambiar la dirección de las
bandadas de manera que se van acercando unos a otros y concluyen por entrar en el
artificio que se les ha puesto. Muchas sardinas se cogen de este modo.
Se dice que anteriormente se empleaba una red especial para las anchovetas, pero
estas se cogen hoy únicamente con una pequeña red de mano, especialmente cuando
se juntan las redes con otros pescados. El mercado que estos tienen es muy reducido.

Se hace uso del cordel bonitero, el cual consiste sencillamente en un grueso cordel con
una piececita de plomo pulido que afecta como una forma de pescado y que va
amarrada cerca de la extremidad. Precisamente después del pedazo de plomo hay una
piececita redonda de tela blanca en que van encerrados dos gruesos anzuelos. Cuando
hay una buena brisa se transporta sencillamente este cordel por la popa del bote y si
hay calmachicha o la brisa es ligera, el pescador en el momento que conceptúa que
están por allí los pescados, busca lanzar el plomo lo más lejos posible y enseguida
recoge la red con toda rapidez. Así es como se cogen los bonitos y los róbalos.

Para la pesca que se hace en las peñas se emplea el cordel sencillo. (Este es un cordel
con peso que tiene 1 o 2 anzuelos). El cebo que más se usa es la sardina, la anchoveta,
el mui-mui o pedazos de cangrejo.

El cordel de pesca que es más eficaz, es el espinel, que consiste en un pedazo de una
soga pequeña con una longitud de 75 a 200 brazas o más yendo amarrados los
anzuelos con unos cortos cordeles a intervalos poco más o menos de una y media
brazas. Por lo regular hay de 50 a 75 anzuelos, si bien se dijo que cuando se quería se
ponían de 100 a 150. Este cordel sólo se emplea en la balsa, es decir, en agua que tiene
una profundidad que llega a 14 brazas.

Una vez que el cordel está con cebo, que por lo regular consiste en pedazos de sardina,
se hecha al agua y se le deja por media hora más o menos, o bien hasta que se siente
que el cordel está pesado. Se dijo que el espinel se empleaba especialmente para las
rayas, tollos, etc.

4. Métodos de conservación

La mayor parte del pescado se vende fresco a los habitantes de Chimbote y a las
haciendas vecinas, así como a los puntos del interior a que se puede llegar por
ferrocarril, conservándose, sin embargo, una buena parte por medio de la salazón, o
poniéndola a secar. No hacen uso de la sal pura sino de lo que llaman <<salitre>> que a
lo que se aparece, no es otra cosa que una mezcla de sal natural y arena con un poco
de salitre, (el cual tal vez) se saca de los depósitos naturales que hay por allí cerca y
que no les cuesta más que el trabajo de transportarlo. Los pescadores dicen que (para
el caso esto es mejor) que la sal pura, pues el pescado no se pone tan dura; sin
embargo, está demasiada cargada de arena para que puede ser un preservativo
deseable.

Los pescados que he observado se les prepara tajándolo por la barriga, lo cual se hace
de modo que sólo la cabeza y la cola queden al lado izquierdo cuando se abren los
pescados: se sacan las entrañas y se echa salitre. Así es como preparan los róbalos
(especialmente en abril), los roncadores (cocos), los bonitos, las corvinas (muy pocas) y
las cabrillas, a más de otros pescados más pequeños tales como las lornas, las caballas,
los machetes, las sardinas, etc.

Otro método de que se hace uso especialmente para las rayas, los tollos, las guitarras y
una que otra vez para los pejegallos, es el ponerlos a secar. Se sala todo un día el
pescado, después se le lava y se le pone a secar al sol, se dice que a veces se han
preparado de este modo los róbalos.

Algunas anchovetas se conservan echándoles sal y lavándolas después, enseguida se


les extiende en esteras puestas al sol hasta que se secan. Algunas veces se les sacan las
entrañan antes de ponerlas a secar, pero probablemente lo más frecuente es no
hacerlo.

Un caballero de aquí ha descrito el siguiente método de conservación de los róbalos y


las corvinas, pero parece que nunca se ha puesto en planta en Chimbote. Se limpia el
pescado sin quitarle la espina del lomo, y enseguida se taja de parte a parte. Las
tajadas se colocan en barriles, cuidando de salar bien cada capa y en la parte superior
se le pone un peso. Después se embarrilla el pescado en nueva salmuera.

5. Pescados

La lista de la página siguiente es de los pescados que hay en la región de Chimbote


acompañada de algunas observaciones que han sido tomadas especialmente de los
pescadores.

Indudablemente que a esta lista habría podido agregarse otros pescados, haciéndoles
preguntas a los pescadores y teniendo en la mano una lista más extensa de pescados,
que la yo entonces tenía.

En la época que giré mi visita había, tanto en la Bahía como afuera, una gran
abundancia de anchovetas. Durante el viaje a Chimbote y después al ir de este Puerto a
Guañape, casi siempre se presentaban a la vista grandes bandadas de anchovetas que
por lo regular eran perseguidas de bonitos. Los pescados principales que por entonces
cogían los pescadores eran cabrillas y peje-blancos, pero también capturaban casicas,
gallinazas, tramboyos y rayas, a más de las anchovetas que se empleaban como cebo.
En algunas partes de la bahía se podían ver muchas lizas que saltaban sobre el agua.
Algunas mojarrillas se cogían con abundancia, haciéndose la pesca desde nuestro bote
con cordeles y también se capturaron caballas y pejerreyes. En la noche los muchos
relampagueos fosforescentes que ocurren dan claridad al agua dejándose ver una
porción de pescados. Cuando pasé en el vapor en el mes de mayo se veían pejerreyes
con gran abundancia por las cercanías de la embarcación.

6. Otras órdenes
Con mucha frecuencia he visto tortugas, en la bahía y los pescadores manifestaban que
estas se presentaban todo el año y podían cogerse unas tres o cuatro por semana (sin
ningún aparato especial).

7. Mariscos

A veces se cogen langostas de un modo casual en las redes de los pescadores y en


ocasiones, del todo grandes.

No se les busca de una manera especial y no se sabe si abundan. Se aseguró que no


había conchas de abanico, pero quizás no han sido debidamente buscadas. En la arena
de la playa se encuentran mui-mui y a veces conchas blancas, maruchas y navajuelas.
En las peñas como de costumbre están las lapas, parquillus, patas de burro y
campanitas (señoritas), caracoles y pequeños choros. A veces se encuentran en el agua
choros grandes según se asegura. Entre las peñas se tropieza con gavias y pulpos y,
como de costumbre hay cangrejos de dos o tres clases. Los pescadores comen los
yuyos o cocho-yuyos.

8. Lobos

Hay una gran cantidad de lobos en la bahía del Ferrol. En las peñas que hay en el
sudeste del puerto de esta bahía se encuentran dos loberías que se les distinguen con
los nombres de lobería chica y lobería grande, y entre una y otra contienen varios miles
de lobos, de los cuales hay muchas quejas, debido al hecho de que consumen mucho
pescado, y también porque causan gran daño a las redes de los pescadores. Si se les
matara o ahuyentara de la bahía, los pescadores podrían indudablemente sacar más
pescado, lo que no sería de gran utilidad para éstos, salvo que hubiera un mercado
más amplio para el pescado. En el caso en que se establecieran aquí industrias
pesqueras en grande, escala sería conveniente hacer el experimento de matar o
ahuyentar a las focas. Podría observarse los resultados, haciéndose en otra parte, una
tentativa análoga. Mientras tanto, no puede haber inconveniente para que se destruya
un número limitado de lobos con el fin de utilizar las pieles y el aceite.

Con frecuencia se han visto bufeos en la bahía, durante mi estadía.

9. Conclusiones

Chimbote parece ser en verdad uno de los puntos de la costa que más esperanza
prometen en orden a las industrias pesqueras, debido a lo bien situado de los campos
de pesca y a la variedad de que disfruta y a las muchas islas y magnificas bahías que
según parece abundan en pescado. Lo seguras que son las bahías hace que lleguen a su
mínimo toda la interrupción proveniente de la braveza del mar.
Hay un ferrocarril como de 60 kilómetros de largo que se extiende desde Chimbote
hasta el valle que enlaza este puerto con algunas de las haciendas y aldeas del referido
valle, y es expectativa general la de que en el interior se han de desarrollar importantes
industrias de minas de carbón. Chimbote parece que es el puerto que mejor se adapta
para proporcionar pescados al departamento de Ancash y a la ciudad de Trujillo. Lo
que se necesita es que se implante un establecimiento con un pequeño capital y un
gerente competente para que se pueda conservar debidamente el pescado.
GUAÑAPE Y SALAVERRY

1. Observaciones

Salimos de Chimbote el 2 de marzo y llegamos al día siguiente a las islas de Guañape. A


más de estudiar los pájaros guaneros, hubo ocasión de coleccionar pescados y de
observar los métodos que siguen pescadores de Salaverry y de Caleta de Guañape, así
como de hacerles a éstos algunas preguntas.

Las islas de Guañape forman un grupo de dos islas principales y un número


considerable de peñas y farallones. El grupo ocupa un espacio como de dos y medias
millas náuticas en dirección de norte a sur y una milla de este a oeste.

Está a 40 millas al norte de Chimbote, 19 millas al sur de Salaverry y como a 6 millas de


la costa. Salaverry es el puerto más inmediato, pero los pescadores más cercanos viven
en la caleta de Guañape que sólo está como a siete millas de distancia. Según los
informes que dieron los pescadores, en la isla sólo hay como treinta habitantes
(¿familias?) en Guañape. El 30 de junio de 1907 había en Salaverry, según lo acreditan
los documentos que obra en la Capitanía del Puerto del Callao, 29 pescadores y un
cabo.

Durante mi estadía en Guañape, había 7 o más botes pescadores procedentes en estos


dos lugares, tripulado cada uno de ellos por cuatro hombres; dichos botes eran muy
adecuados para hacer viajes que sean de alguna duración a las islas y eran de los más
grandes botes pescadores que he visto en la costa. Eran fuertes y anchos y por ambos
extremos acababan en punta. Las dimensiones de una de ellos eran como sigue:

Largo 26 pies
Ancho 8 pies y 9 pulgadas
Profundidad en 3 pies y 10 pulgadas
el mástil
Profundidad en 3 pies y 6 pulgadas
el banco de popa

El mástil estaba situado como a 10 pies de la proa. El bote tenía un bauprés largo y
grueso y llevaba dos foques a más de la vela principal.
Los pescadores estaban pescando únicamente con anzuelo y cordeles y salaban todos
los días sus capturas para llevárselas a tierra. Se quedaban pescando en las islas hasta
que tenían un cargamento suficiente, para el cual, el término medio que necesitaban
era probablemente de 6 días. Cada bote era tripulado por cuatro pescadores, y cada
uno de ellos estaba con dos cordeles que tenían amarradas al cinto y no había sino un
anzuelo en cada cordel. A la sazón estaban pescando en agua que podría tener unas
doce brazas, pero con sólo cuatro brazas de cordel y la captura que hacían era
principalmente de pequeñas caballas.
El pescado lo abría por el lomo y una vez que le sacaban las entrañas lo salvan con
salitre (que era sal mezclada con arena) y lo colocaban en montones o hileras con el
mayor esmero, sobre el piso del bote. Algunos pescados eran preparados un tanto
diversamente. Se les remojaba por algún tiempo en una fuerte solución de esta sal,
después se le lavaba y se le ponía a secar al sol. Éstos quedaban por supuesto más
limpios por hallarse libres de arena. Cuando estaban relativamente frescos y se les
tostaba a fuego vivo resultaban muy buenos.
El pescado se vende en las escazas pequeñas poblaciones de la costa, en Trujillo y en
los pueblos y haciendas del interior. Los pescados pequeños se dice que dejaban cuatro
soles más o menos por cada 100. Los pescadores hacen su captura cerca de la ribera de
Salaverry y de Guañape, por las islas de Guañape y a veces mucho más afuera. Parce
que las islas son la fuente principal de provisiones. Como pocos son los pescados que
se capturan por la ribera y como los que se cogen en las islas están materialmente
todos salados, resulta que los habitantes de esta región consumen pescados, que en su
mayor parte están salados, y desgraciadamente muy mal.
El cordel bonitero lo emplean estos pescadores con objeto de capturar bonitos y
róbalos. Se emplean redes que en lo principal son análogas a la red clara de Chimbote.
Según los términos que estos pescadores emplean se llama <<red diminuta>> la que
tiene mallas pequeñas y que se destina a anchovetas y <<red clara>> la que tiene
mallas más grandes y que sirve para los machetes, sardinas, etc. Cuando pescan cerca
de la costa a veces hacen uso de dos caballitos para manejar estas redes, pero cuando
pescan a distancia de la ribera las manejan solamente desde un bote grande.

2. Lista de pescados
Los pescados que observé en las referidas Islas de Guañape fueron en orden de su
abundancia los siguientes:

Nombre Observaciones
Anchovetas Se observaron algunas anchovetas
Caballa Son los pescados principales que cogen los pescados con anzuelo y
cordeles
Cabrilla Abundantes. Con huevas (hueveras) grandes
Cherlos Abundantes con huevas (hueveras) grandes. En los estómagos se
encontraron cangrejos, camarones, etc.
Pintadillas Abundantes en los estómagos se encontraron caracolitos
Peje-blancos Son comunes
Cabinsas Son comunes
Chavelitas Son pescados pequeños. Unos cuantos han sido observados.
Peje-aguas Con huevas (hueveras) grandes, unos cuantos han sido observados
Cacicas Se cogieron dos ejemplares
Castañetas Se cogieron dos ejemplares
Trambollos Se cogieron dos ejemplares
Jureles Se cogió un ejemplar, se observó una pequeña banda de pescados,
que eran visiblemente jureles.
Morenas Se capturó un ejemplar. No tienen importancia.
Peje-sapos Se les vio en las peñas. Probablemente son pequeños.
Róbalos Un ejemplar fue capturado por los pescadores con cordel bonitero.
Este pescado mide exactamente un metro de largo y los pescadores
lo llaman "chico".

3. Bufeos
Se les vio no con poca frecuencia y una gran bandada pasó cerca de nuestro bote.
Hay varias loberías por las islas del norte y en éstas se hallaban un gran número de
cachorros. La parte oriental del extremo norte de las islas era casi una continua lobería,
y la peña chica que está al ángulo del noroeste estaba cubierta de lobos. En el lado
occidental hay dos o más loberías, y en el ángulo que está al sudeste había otra. En
otros puntos se veían lobos desparramados. En el agua había tantos lobos que no era
factible calcular su número. Podría decirse que, a ojo de buen cubero, habría como
unos mil lobos grandes en la referida isla.

4. Pájaros
Los principales pájaros fueron los siguientes:

Nombre Observaciones
Piqueras menores Son los pájaros que más abundan
Camanais Fueron observados en todos sus periodos los huevos y los
pequeñuelos
Patillos Fueron observados los huevos y todos los periodos en los
pequeñuelos
Guanayes Junto con los adultos fueron observados los pequeñuelos ya
crecidos, pero que no habían llegado a su madurez
Gaviotas No daban señales de celo
Alcatraces No daban señales de celo
Gallinazas No daban señales de celo
Pájaro-nimes Eran muy pocos; fueron observados los adultos y los
pequeñuelos

También había algunos pájaros pequeños en las peñas de la ribera. Éstos, según
parece, se sustentaban principalmente de anchovetas. Las observaciones detalladas
referentes a los aludidos pájaros son objeto de un informe separado.
En las peñas que hay en la ribera se vio, así como en la reventazón, los habituales
mariscos, cangrejos y malezas marinas.
En las islas Macabí, que están un poco más de 50 millas al norte de las de Guañape, se
observó una gran bandada de sardinas y se capturaron dos grandes cabrillas
empleándose el anzuelo y el cordel. El largo de éstas era de 36 y 44 centímetros
respectivamente. En esta islita había como el doble de lobos que en la isla norte de
Guañape. Relativamente había pocos pájaros siendo éstos en su mayor parte alcatraces
(con unos 1000) piqueras, patillos, guanayes y gallinazas.

5. Temperaturas
La temperatura del agua se tomaba tres veces al día y la más baja que se observó fue
en un punto muy cercano a la isla de San Lorenzo el día de la partida. Tomadas en su
conjunto las temperaturas señaladas iban siendo más baja a medida que seguíamos al
norte hacia Pacasmayo. Probablemente la corriente se dirigía constantemente hacia
tierra. Casi siempre se hacían patentes las enormes cantidades de anchovetas y
bonitos. El agua era algo más caliente al entrar en la bahía de Pacasmayo, pero al día
siguiente hubo un descenso notable de la temperatura.

TEMPERATURA
N° MÁS MÁS
PROMEDIO
FECHA LUGAR TOMAS TOMAS ALTA BAJA
Feb-22 San Lorenzo 1 18 21 24
22 al 26 Febrero Del Callao a Chimbote 12 21.9 20 24.5
26 Feb al 3 Marzo Bahía del Ferrol 12 22.3
Mar-03 Chimbote a Guañape 1 21
3 al 7 Mar Islas Guañape 10 20.5 19.5 22
3 al 9 Mar De Guañape a Pacasmayo 4 19.7 18.6 20.2

Esta baja temperatura que acusa la Bahía del Ferrol fue tomada en la parte sudoeste de
la bahía, en la base de un alto cerro que era continuamente azotado por una brisa
fuerte y fría. Compárese igualmente el registro de la temperatura de la isla de San
Lorenzo en que reinaban las mismas condiciones. Salvo la temperatura tomada en la
parte sudoeste de la Bahía del Ferrol la más baja en toda la referida.

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