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ACTUALIZACIÓN

Hemorragia digestiva alta no varicosa


M. Betés* y M. Muñoz-Navas
Servicio de Digestivo. Clínica Universidad de Navarra. Pamplona. Navarra. España.

Palabras Clave: Resumen


- Hemorragia digestiva alta Etiopatogenia: La patologia ulcerosa es la principal causa de hemorragia digestiva alta no varicosa (ori-
- Terapéutica endoscópica ginada por encima del angulo de Treitz), aunque existen muchas otras.
- Hematemesis Diagnóstico: Ante la sospecha clinica, se debe confirmar la presencia de la hemorragia, evaluar la mag-
nitud del sangrado, comprobar si la hemorragia persiste activa, descartar que pueda ser causada por hi-
- Melenas
pertension portal y establecer el pronostico.
Tratamiento: Las medidas de reanimacion prevalecen sobre cualquier otra actitud medica. Se recomien-
da utilizar escalas clinicas para estratificar a los pacientes precozmente, suprimir la secrecion gastrica
de acido y conocer el manejo de medicamentos que pueden modificar el curso de la hemorragia o estar
relacionados con su inicio.
Endoscopia: Salvo en un pequeno grupo de pacientes de muy bajo riesgo, se aconseja realizar una en-
doscopia en las primeras 24 horas, identificando los casos que pueden beneficiarse de un alta precoz y
seleccionando los que requieren terapeutica endoscopica, aplicando las tecnicas oportunas en cada
caso. El paciente tratado endoscopicamente requiere un ingreso minimo de 72 horas. En caso de fracaso
terapeutico puede estar indicado un tratamiento angiografico o quirurgico.

Keywords: Abstract
- Upper gastrointestinal
Nonvaricose upper gastrointestinal bleeding
haemorrhage
Aetiopathogenesis: Ulcerative disease is the main cause of nonvariceal upper gastrointestinal
- Endoscopic therapy
haemorrhage (originating above the angle of Treitz), although there are many other causes.
- Haematemesis
Diagnosis: If haemorrhage is suspected, clinicians should confirm its presence, assess the magnitude of
- Melena the bleeding, determine whether the haemorrhage remains active, rule out portal hypertension as the
cause and establish the prognosis.
Treatment: Resuscitation measures prevail over any other medical approach. Clinical scales should be
employed to stratify patients early, gastric acid secretion needs to be suppressed, and the management
of drugs that can change the course of the haemorrhage or are related to its onset needs to be
understood.
Endoscopy: Except for a small group of patients at very low risk, it is advisable to conduct an endoscopy
in the first 24 hours, identify the patients who can benefit from early discharge and select those who
require endoscopic therapy, applying the appropriate technique in each case. Patients treated
endoscopically require a minimum hospital stay of 72 hours. In the event of treatment failure,
angiographic treatment or surgery might be indicated.

Introducción
La hemorragia digestiva (HD) es una de las urgencias médi-
*Correspondencia cas más frecuentes en nuestro medio1. Según se origine por
Correo electrónico: mbetesi@unva.es encima o por debajo del ángulo de Treitz, se clasifica en he-

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HEMORRAGIA DIGESTIVA ALTA NO VARICOSA

morragia digestiva alta (HDA) o hemorragia digestiva baja tolimitado en un 90% de los casos y el resangrado es poco
(HDB). Algunos autores diferencian también la HD media, frecuente.
originada en el intestino delgado distalmente al ángulo de
Treitz.
Entre el 74 y el 80% de las hemorragias agudas digestivas Lesiones agudas de la mucosa gástrica
corresponden a hemorragias digestivas altas, con una inci- (erosiones y gastritis hemorrágica)
dencia anual que fluctúa en torno a 50-150 casos por 100.000
habitantes/año2. Se originan fundamentalmente en situaciones de ingesta de
La forma de presentación puede orientar sobre el origen AINE, alcohol y estrés (cirugía mayor, quemaduras impor-
alto o bajo de la hemorragia. Así, la HDA aguda se exteriori- tantes). En general, no ocurren sangrados significativos, ya
za fundamentalmente como hematemesis o melenas. Se de- que las lesiones están confinadas a la mucosa, donde no hay
nomina hematemesis al vómito de sangre fresca, coágulos vasos de calibre grueso.
sanguíneos o restos hemáticos oscuros (posos de café) y me-
lenas a las heces blandas, de color negro intenso y brillante y
muy malolientes. Para producirse las melenas se requiere al Otras causas
menos una pérdida de entre 50 y 100 ml de sangre2 y es ne-
cesario que esta permanezca al menos 10 horas en el tubo La hernia de hiato, la esofagitis o las neoplasias provocan un
digestivo sufriendo la degradación de la hemoglobina por las sangrado frecuentemente crónico, aunque pueden originar
bacterias del colon. Sin embargo, el color de las heces no episodios de HD aguda.
siempre es un indicador fiable del origen de la hemorragia. La hemobilia (sangrado procedente de la vía biliar, exte-
La melena puede aparecer en hemorragias procedentes del riorizada a través de la papila de Vater) puede ser secundaria
intestino delgado o del colon derecho si existe un tránsito a traumas, biopsia hepática, litiasis, etc.; el paciente puede
lento. A su vez, la hematoquecia (heces entremezcladas con presentar ictericia, cólico biliar y hematemesis o melenas.
sangre roja, generalmente originada distalmente al ángulo de Otra causa poco frecuente de HDA son las fístulas aorto-
Treitz)2 puede verse en una HDA cuantiosa, asociada a un entéricas, que se clasifican en primarias (originadas a partir
tránsito rápido, o en pacientes con antecedentes de resección de un aneurisma aórtico) y secundarias (más frecuentes y ori-
intestinal. ginadas a partir de prótesis aórticas) (fig. 1B). Comunican en
el 75% de los casos con el duodeno. Es característica la “he-
Clasificación de las lesiones causantes morragia heráldica” en la que un sangrado autolimitado pre-
de hemorragia digestiva alta cede a una hemorragia masiva con un intervalo de tiempo
variable (horas, incluso meses).
Las malformaciones vasculares son causa de menos del
Se pueden clasificar según el lugar de origen, la causa que lo
5% de las HDA (fig. 1C). Pueden ser heredadas o adquiridas.
origina, la visibilidad de la hemorragia o su cuantía. Es prác-
Se trata de aberraciones de la arquitectura vascular normal
tica la clasificación en dos grandes grupos según esté o no
que afectan a arterias, venas y/o capilares, y pueden localizar-
relacionada con la hipertensión portal (HTP).
se en cualquier tramo del tubo digestivo3.
En esta actualización trataremos la HDA alta no relacio-
La lesión de Dieulafoy es una anomalía vascular localiza-
nada con la HTP.
da generalmente en el estómago proximal y consiste en una
arteria de gran calibre situada en la submucosa o en la muco-
Causas de hemorragia digestiva alta sa que se rompe hacia la luz. La hemorragia puede ser masi-
no secundaria a hipertensión portal va o recurrente. Su identificación es difícil, salvo cuando está
sangrando activamente o presenta un coágulo adherido.
Úlcera péptica

Es la causa más frecuente de HDA, aproximadamente es la Actitud médica ante el paciente


responsable en un 40%, (fig. 1A). Es más frecuente el sangra- con hemorragia digestiva alta aguda
do procedente de la úlcera duodenal que de la úlcera gástrica.
Los principales factores etiológicos de la hemorragia secun- Ante la sospecha de HDA, se debe confirmar la presencia de
daria a úlcera péptica (UP) son la infección por Helicobacter la hemorragia, evaluar la magnitud del sangrado, comprobar
pylori y la ingesta de antiinflamatorios no esteroideos (AINE). si la hemorragia persiste activa, conocer si puede estar causa-
Tiene una tasa de mortalidad entre el 5-10%1. da por HTP, y buscar factores clínicos de importancia para el
pronóstico.
Las medidas de reanimación prevalecen sobre cualquiera
Síndrome de Mallory-Weiss otra actitud médica4,5. En una hemorragia masiva, el paciente
no puede proporcionar información y es prioritario iniciar
Es el desgarro en la unión gastroesofágica producido tras las maniobras que restituyan la estabilidad cardiovascular y
náuseas o vómitos intensos. Constituye alrededor de un 5% aseguren la perfusión adecuada de los órganos vitales, obte-
de los casos de HDA1. Es característica la historia de náuseas niendo la información de los acompañantes. También las me-
y vómitos precediendo a la hematemesis; el sangrado es au- didas diagnóstico-terapéuticas como la endoscopia deben

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ENFERMEDADES DEL APARATO DIGESTIVO (II)

A B C

Fig. 1. A. Gran úlcera en el bulbo duodenal, sin estigmas de sangrado. B. Formación seudopolipoidea en la tercera porción de duodeno, con mancha oscura central que
sugiere sangrado reciente, correspondiente a una fístula aortoentérica. C. Malformación vascular. Pequeño angioma en el cuerpo gástrico.

realizarse cuando el paciente se encuentre perfundido y oxi- ción, gasometría, grupo sanguíneo y pruebas cruzadas. Si la
genado, salvo en casos desesperados en que las medidas de hemorragia es importante se deben cruzar y reservar de 2 a
reanimación resultan insuficientes y la endoscopia e incluso 4 concentrados de hematíes para utilizar de forma inmediata
la cirugía se consideren la única opción terapéutica. si fuera necesario.
La respuesta fisiológica a la hipovolemia consiste en la
vasoconstricción periférica y el aumento de la frecuencia car- Reposición del volumen intravascular
diaca para mantener el gasto cardiaco y la perfusión tisular. Se iniciará con la administración rápida de cristaloides (suero
Una pérdida importante de sangre en un periodo de tiempo fisiológico o Ringer lactato) y, si el paciente lo requiere, ex-
prolongado permite la adaptación del volumen intravascular, pansores plasmáticos (gelatinas, dextranos, etc.) cuyo efecto
y puede ser bien tolerada sin requerir medidas de reanima- sobre el volumen plasmático circulante es mayor. En algunos
ción urgentes, mientras que si se pierde bruscamente puede pacientes debe evitarse perfundir cantidades importantes de
no dar tiempo a la puesta en marcha de los mecanismos com- soluciones salinas (hepatópatas crónicos, cardiópatas, etc.),
pensadores y provocar un shock hipovolémico, con riesgo en aunque tiene prioridad la recuperación hemodinámica frente
la perfusión tisular. a otras consideraciones. La velocidad de perfusión se debe
adecuar a la gravedad de la hemorragia y a la recuperación de
los indicadores hemodinámicos del paciente. En general, el
Medidas de reanimación objetivo es mantener la tensión arterial sistólica (TAS) supe-
rior a 100 mm Hg, la presión venosa central (PVC) entre 0
Posición y administración de oxígeno y 5 mm Hg y la diuresis mayor de 30 ml/hora6. Una reposi-
Los pacientes con hematemesis, especialmente aquellos con ción excesiva de la volemia podría favorecer la recidiva he-
alteración del nivel de conciencia, tienen riesgo de sufrir una morrágica.
aspiración pulmonar. Se debe colocar al paciente en decúbito
lateral e intubarlo si es necesario; la posición de Trendelen- Transfusión sanguínea
burg es útil para favorecer el flujo cerebral. La administra- La transfusión inicial debe basarse más en el riesgo individual
ción de oxígeno contribuye a mejorar la oxigenación tisular, de complicaciones por falta de oxigenación de los diferentes
preferentemente mediante cánula nasal, ya que la mascarilla órganos que por una cifra de los niveles de hemoglobina7.
podría facilitar la aspiración en caso de hematemesis. Los valores iniciales del hemograma tienen poco valor en la
hemorragia aguda. Solo cuando se ha producido el proceso
Acceso venoso de hemodilución (48-72 horas) reflejan de forma objetiva la
Se deben colocar dos catéteres venosos periféricos gruesos intensidad de la pérdida. Inversamente, durante la reposición
para iniciar la reposición de volumen. Un catéter grueso y hemodinámica, una administración excesiva de fluidos puede
corto es más fácil de colocar y permite una perfusión de flui- hacer descender artificialmente estos valores. La información
dos o sangre más rápida que una larga vía central (esta se aportada por la endoscopia también influirá en la indicación
colocará en los casos graves una vez mejorada la situación de transfusión. En general, los pacientes con alto riesgo (pa-
hemodinámica para ajustar la velocidad de perfusión a la si- tología cardiorrespiratoria y hemorragia activa), deberían
tuación cardiovascular del paciente). recibir concentrados de hematíes para mantener la hemoglo-
bina en torno a 10 g/dl. En los enfermos de bajo riesgo, in-
Extracción de sangre cluyendo a personas jóvenes, sin enfermedades graves asocia-
Al tiempo que se obtiene la primera vía venosa, y antes de das y con buena capacidad de adaptación hemodinámica, es
iniciar la perfusión de líquidos, se extraerán muestras de san- suficiente mantener una hemoglobina de 7-9 g/dl8,9.
gre para hemograma completo, urea/BUN (nitrógeno uré- Los pacientes con hemorragia activa y coagulopatía
mico en sangre), creatinina, glucosa, ionograma, coagula- (tiempo de protrombina prolongado con INR mayor de 1,5)

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HEMORRAGIA DIGESTIVA ALTA NO VARICOSA

o plaquetopenia (menor de 50000/ml3) deberían ser trans- epistaxis o hemoptisis. La sangre procedente de las fosas na-
fundidos con plasma fresco o plaquetas, respectivamente. Si sales o del territorio broncopulmonar puede ser deglutida y,
el paciente presenta una coagulopatía específica (hemofilia, posteriormente, vomitada en forma de hematemesis fresca o
enfermedad de Von Willebrand, etc.), se reemplazarán los en “posos de café”. Los vómitos fecaloideos también se pue-
factores deficitarios. den confundir con posos de café.

Monitorización
Los pacientes con hemorragia activa e inestabilidad hemodi- Valorar la magnitud del sangrado
námica (hipotensión, alteración del nivel de conciencia y oli-
guria) deben ser ingresados en una Unidad de Cuidados In- La magnitud del sangrado determina la actuación médica y
tensivos y sometidos a una estrecha monitorización clínica. el pronóstico del paciente. En la gravedad de la HD influyen
Las hemorragias leves pueden ser observadas en una unidad dos variables fundamentales: la cantidad de sangre y la velo-
de hospitalización convencional, con controles periódicos de cidad a la que se ha producido la pérdida.
la frecuencia cardiaca y de la tensión arterial según la situa- Aunque se han establecido parámetros para estimar la
ción clínica del paciente. cuantía de las pérdidas sanguíneas (tabla 1), en general puede
afirmarse que la sensación de mareo y la piel pálida, sudoro-
Otras exploraciones sa y fría reflejan una situación de inestabilidad hemodinámi-
Se aconseja realizar electrocardiograma al ingreso de todos ca. Por el contrario, una piel caliente, normocoloreada y seca,
los pacientes con HDA, y una radiografía de tórax. Deben supone una situación de estabilidad hemodinámica11. La hi-
efectuarse análisis periódicos para controlar los parámetros potensión postural (incremento de la FC mayor de 20 lpm y
que pueden alterarse por la hemorragia, la fluidoterapia y las descenso de la TAS mayor de 10 mm Hg al pasar de decúbi-
transfusiones. Es frecuente observar una leucocitosis mode- to a la sedestación) también refleja compromiso hemodiná-
rada y una elevación de urea o BUN en ausencia de patología mico. Estos signos son menos significativos en ancianos o
renal al inicio de la hemorragia, normalizándose los valores pacientes con comorbilidad importante (dado que pueden
cuando ha cesado. La elevación del BUN tiene un origen aparecer ante pequeñas pérdidas sanguíneas) o en pacientes
mixto: la hipovolemia provocada por la hemorragia aguda y que toman betabloqueantes (que pueden enmascarar la apa-
la absorción intestinal de los productos nitrogenados proce- rición de taquicardia en respuesta a la hipovolemia).
dentes de la digestión de la sangre.

Cirugía Averiguar si la hemorragia está activa


En HDA masivas o recidivantes puede ser necesario un tra-
tamiento quirúrgico de urgencia en el curso de la evolución Saber si la HD persiste activa en el momento de la evalua-
del paciente. ción tiene implicaciones terapéuticas y pronósticas. La he-
matemesis de sangre fresca, la presencia de hiperperistaltis-
mo intestinal o las heces rojizas o claramente sanguíneas son
Confirmar que se trata de una hemorragia indicadores de HD activa. Por el contrario, los vómitos en
digestiva “posos de café” y las heces negras duras y formadas (melenas
de aspecto “residual”) sugieren que la hemorragia no está
El diagnóstico es evidente cuando el enfermo ha presentado activa.
una hematemesis cuantiosa o melenas recientes y abundan- Aunque algunos autores recomiendan colocar una SNG,
tes; pero pueden plantearse dudas en muchos casos. Así, la creemos que esta maniobra debe usarse solo de forma excep-
presentación clínica de una HD grave puede ser consecuen-
cia de una mala oxigenación tisular de órganos vitales, pro-
TABLA 1
duciendo síncope, isquemia coronaria aguda o disnea, sin
Clasificación de la gravedad de la hemorragia atendiendo a parámetros
que el enfermo haya observado o exteriorizado el sangrado; clínicos
otras veces el enfermo refiere deposiciones “melénicas” no
Gravedad Síntomas/signos clínicos
detectadas por el médico, con poca o nula repercusión he-
modinámica. En estos casos, la anamnesis y la exploración HDA leve Paciente asintomático, constantes normales, piel normocoloreada,
templada y seca
física (incluyendo el tacto rectal) deben confirmar la presen- Indica una pérdida de hasta un 10% de la volemia circulante
cia de sangre en la deposición. HDA moderada TA sistólica > 100 mm Hg, FC < 100 lpm, discreta vasoconstricción
Ciertas sustancias alteran el color de las heces y pueden periférica (palidez, frialdad), signos posturales negativos
simular melenas (alimentos como morcilla y tinta de calamar Pérdida de un 10-25 % de la volemia
o fármacos como sales de hierro, de bismuto, etc.). En caso HDA grave TA sistólica < 100 mm Hg, FC: 100-120 lpm, intensa vasoconstricción
periférica (palidez intensa, frialdad, sudoración, etc.), inquietud o
de duda, es útil buscar evidencias más consistentes, como la agitación, oliguria, signos posturales positivos
presencia de “posos de café” en el aspirado a través de una Pérdida del 25-35% de la volemia.
sonda nasogástrica (SNG), aunque debe tenerse en cuenta HDA masiva Shock hipovolémico, intensa vasoconstricción periférica y colapso
venoso, agitación, estupor o coma, anuria
que entre el 15 y el 20% de los pacientes con HDA bien
Pérdida superior al 35% de la volemia
documentada por endoscopia presentan un aspirado lim-
FC: frecuencia cardiaca; HDA: hemorragia digestiva alta; lpm: latidos por minuto; TA: tensión
pio10. Otro factor de confusión puede ser la presentación de arterial.

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cional, en casos en los que existe una duda razonable sobre la En los últimos consensos internacionales sobre el trata-
existencia de HD activa, o en algún caso con sangrados repe- miento de la HDA9,14, se recomienda utilizar escalas de pro-
tidos, para diagnosticar la recidiva antes de que aparezcan nóstico para estratificar a los pacientes precozmente (antes
signos clínicos de inestabilidad hemodinámica. En la mayo- de la endoscopia) en grupos de alto y bajo riesgo. Con el
ría de los casos no es necesaria, ya que produce molestias al índice de Blatchford se puede seleccionar un pequeño grupo
paciente, predispone al reflujo gastroesofágico y a la aspira- de pacientes de muy bajo riesgo, que podrían ser tratados de
ción pulmonar y puede causar lesiones de la mucosa o agra- forma ambulatoria con indicación de endoscopia programa-
var las ya existentes. Además, como se ha indicado previa- da9,16-18, y en la práctica clínica se considera el más útil en el
mente, la presencia de un aspirado normal no permite ámbito de la Atención Primaria. En el resto de los casos se
descartar totalmente la existencia de una hemorragia activa. requiere una atención especializada, realizando endoscopia.
Una vez hecha la gastroscopia, se utilizan los hallazgos de
esta exploración para establecer el pronóstico. La escala más
Obtener información clínica relevante utilizada en esta segunda clasificación pronóstica que incluye
para el diagnóstico etiológico los hallazgos endoscópicos, validada en diferentes países, es
la escala completa de Rockall, que se considera la más discri-
Conocer si la hemorragia puede ser causada minatoria para identificar pacientes de bajo riesgo tras el es-
por hipertensión portal tudio endoscópico, y es útil para planificar el seguimiento y
Las hemorragias relacionadas con la HTP (principalmente el alta hospitalaria. Otros sistemas de clasificación están to-
varices esofágicas) son especialmente graves y presentan una davía pendientes de validación. Los pacientes en los que se
elevada mortalidad. Además, en su tratamiento se utilizan observa en la endoscopia una úlcera con fondo limpio y que
medidas específicas que deben iniciarse de forma precoz. Por se mantienen hemodinámicamente estables, sin enfermeda-
este motivo, resulta vital la búsqueda intencionada de cual- des graves intercurrentes, con fácil accesibilidad al hospital y
quier dato sospechoso de una hepatopatía subyacente10. adecuado soporte sociofamiliar pueden seleccionarse para un
alta precoz14.
Medicación habitual o reciente
Puede modificar el curso de la hemorragia o puede estar re-
lacionada con su inicio, como: Tratamiento farmacológico
1. Fármacos potencialmente lesivos para la mucosa gas-
troduodenal (ácido acetilsalicílico –AAS– u otros AINE). Es precisa la supresión de la secreción gástrica de ácido. El
2. Medicamentos que pueden agravar la hemorragia: an- ácido y la pepsina interfieren con la curación de las úlceras y
ticoagulantes, antiagregantes, quimioterápicos. de otras lesiones causantes de HDA no varicosa. Además, el
3. Fármacos que dificultan la reanimación del paciente medio ácido promueve la antiagregación plaquetaria y la fi-
(betabloqueantes, hipotensores, etc.). brinolisis, y dificulta la formación del coágulo. Mantener el
pH gástrico superior a 6 ayuda a estabilizar los coágulos for-
mados. Además, para que el pepsinógeno en el estómago
Búsqueda de factores clínicos de importancia pase a su forma activa (pepsina) requiere un pH menor de 4
para el pronóstico (un pH superior mantiene el pepsinógeno en su forma inac-
tiva)10. Se ha demostrado que la administración de dosis altas
Se han identificado diferentes factores de riesgo indepen- de inhibidores de la bomba de protones (IBP) reduce de for-
dientes que implican una mayor tasa de resangrado y/o una ma significativa la necesidad de tratamiento endoscópico y
mayor mortalidad en el contexto de una HDA5,12,13: edad ma- acorta la estancia hospitalaria, por lo que su utilización está
yor de 60-65 años, shock, bajos niveles de hemoglobina inicia- justificada aun antes de obtener el diagnóstico etiológico de
les, melenas, requerimientos de transfusión, sangre fresca en la lesión sangrante. El objetivo es mantener el pH gástrico
el tacto rectal, en el vómito o en el aspirado gástrico, sepsis, mayor de 6 durante un mínimo de 72 horas. Para ello, los
elevación de urea/creatinina, elevación de transaminasas, his- anti-H2 no son eficaces. Se puede utilizar cualquier IBP, ad-
toria de alcoholismo crónico, enfermedades cardiovasculares ministrando una primera dosis de 80 mg en bolos intraveno-
o neoplásicas, diabetes, clasificación APACHE igual o mayor sos y posteriormente una perfusión de 8 mg/hora9. En los
a 11. Su búsqueda intencionada en la anamnesis y la explora- casos que requieren tratamiento endoscópico, la perfusión
ción física es importante para prevenir posibles descompen- debe mantenerse tras haber realizado una terapia endoscópi-
saciones. ca inicialmente eficaz, ya que se ha demostrado que reduce el
En los últimos años se han desarrollado diversas escalas resangrado, las tasas de cirugía y la mortalidad8,14. Aunque
que permiten valorar el pronóstico de los pacientes con algunos estudios apuntan que podrían alcanzarse resultados
HDA, como los sistemas de Rockall y de Baylor y el índice similares con dosis más bajas de IBP o con la administración
del Cedars-Sinai Medical Center14. Todos ellos requieren de la de estos fármacos por vía oral, son necesarios más datos que
información proporcionada por la endoscopia. Blatchford et permitan establecer evidencia científica suficiente en este
al. desarrollaron una escala que permite estratificar el riesgo sentido19. Tampoco es posible recomendar un IBP frente a
basándose exclusivamente en datos clínicos y de laboratorio15 otro con la evidencia científica actual. Es importante recor-
(tabla 2). También se ha utilizado la escala de Rockall exclu- dar que el uso de IBP no debe reemplazar unas adecuadas
yendo los parámetros endoscópicos16. maniobras de resucitación, ni tampoco una estratificación

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TABLA 2
Escalas pronósticas en la hemorragia digestiva alta

Escala de Blatchford Escala de Rockall


Factor de riesgo
Parámetro Puntos Parámetro Puntos
TAS (mm Hg) 100-109 1 < 100 2
90-99 2 > 100 1
< 90 3
Pulso (lpm) ≥ 100 1 ≥ 100 1
Edad (años) – – 60-79 1
≥ 80 2
Melena Presente 1 –
Síncope Presente 2 –
Comorbilidad Hepatopatía 2 Cualquier comorbilidad mayor 2
Fallo cardíaco 2 Fallo renal o hepático o cáncer 3
metastásico
BUN (mmol/l) 6,5-7,9 2 – –
8,0-9,9 3
10,0-24,9 4
≥ 25,0 6
Hemoglobina (g/l) Hombres: 12-13 1 – –
Mujeres: 10-12 1
Hombres: 10-12 3
Ambos: < 10 6
Diagnóstico endoscópico
No lesión, Mallory-Weiss 0
UP, erosiones, esofagitis 1
Cáncer 2
Datos endoscópicos
(solo aplicable en escala Rockall) EHR
Base limpia, puntos negros 0
Coágulo adherido, vaso visible, 2
hemorragia activa, sangre en
estómago
Escala de Rockall Recidiva hemorragia % Mortalidad %
1 3,4 0
2 5,3 0,2
3 11,2 2,9
4 14,1 5,3
5 24,1 10,8
6 32,9 17,3
7 43,8 27
8 o >8 41,8 41,1
BUN: nitrógeno urémico en sangre; ERH: estigmas de hemorragia reciente; TAS: tensión arterial sistólica; UP: úlcera péptica.
Adaptada de Savides TJ, et al1.

del riesgo, y que no debe usarse para poder retrasar la endos- ra de los niveles considerados terapéuticos (en este caso, la
copia9. De hecho, las guías NICE más recientes (2012) no corrección previa a la endoscopia puede facilitar el trata-
encuentran evidencia científica suficiente para usar de forma miento endoscópico). La reintroducción de estos fármacos
rutinaria los IBP antes de la endoscopia20. debe realizarse con un enfoque multidisciplinar, consideran-
Del 60 al 76% de los pacientes con resangrado tras el do en cada caso los riesgos y los beneficios.
tratamiento endoscópico de una lesión causante de HDA lo En pacientes que requieren tratamiento continuado con
hacen en las primeras 72 horas14, por lo que este tiempo se AINE8,14, tanto la asociación de AINE con IBP como la ad-
considera el mínimo periodo de hospitalización con adminis- ministración de inhibidores selectivos de la ciclooxigenasa 2
tración intravenosa de IBP en los casos que hayan requerido (COX-2), (coxibs) supone un riesgo de sangrado recurrente,
tratamiento endoscópico y presenten buena evolución poste- por lo que los expertos aconsejan discontinuar los AINE si es
rior. posible y, en caso contrario, prescribir coxibs asociados a
En los pacientes que reciben anticoagulantes14, se reco- IBP21.
mienda la corrección de la coagulopatía, pero este objetivo En pacientes con alto riesgo cardiovascular, que siguen
no debe retrasar la endoscopia a menos que el INR esté fue- tratamiento con dosis bajas de AAS o antiagregantes, como

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ENFERMEDADES DEL APARATO DIGESTIVO (II)

clopidogrel, y en aquellos con doble antiagregación (como de HDA, aconsejándose cuando se sospecha la existencia de
los portadores de stents farmacoactivos) el reinicio del trata- abundante cantidad de sangre en la cavidad gástrica y en los
miento con AAS puede realizarse precozmente, según su ne- pacientes que no hayan mantenido ayuno de, al menos, 6 ho-
cesidad, incluso 1-3 días tras la endoscopia terapéutica9,21. El ras. Los gastroscopios terapéuticos modernos disponen de
riesgo de resangrado con clopidogrel en monoterapia es ma- un canal de aspiración amplio y de un chorro de agua adicio-
yor que el asociado al tratamiento combinado de AAS y un nal que facilita el lavado de la cavidad gástrica y la aspiración
IBP. Estos últimos (especialmente omeprazol) pueden inter- de coágulos.
ferir en el efecto antiagregante de clopidogrel por competir Las complicaciones que pueden aparecer antes o durante
a nivel del citocromo P450 (requerido para convertir clopi- la endoscopia, incluyen la broncoaspiración (especialmente
dogrel en su metabolito activo). Los anti-H2 son de menor en pacientes agitados o excesivamente sedados), la hipoven-
eficacia y no se deberían prescribir como alternativa a los tilación (generalmente asociada a sobresedación) y la hipo-
IBP en estos pacientes. tensión (generalmente asociada a una inadecuada reposición
de volumen). Otras complicaciones, como la hemorragia o la
perforación, pueden aparecer como consecuencia de la te-
Endoscopia rapia endoscópica aplicada y son muy poco frecuentes. En
general, la tasa de complicaciones es más frecuente en los
Con la posible excepción del pequeño grupo de pacientes pacientes gravemente enfermos (puntuación APACHE II
considerados de mínimo riesgo según las escalas de pronós- mayor de 16 o hipotensión previa a la endoscopia).
tico expuestas previamente, la mayoría de los pacientes que
consultan por una HDA deberán someterse a una endoscopia Rendimiento de la endoscopia
en las primeras 24 horas tras el episodio agudo (12 horas en La endoscopia, además de identificar la etiología en el 95%
pacientes con criterios clínicos de muy alto riesgo)9. En los de las HDA, permite aplicar técnicas de hemostasia y tiene
pacientes hemodinámicamente inestables debe realizarse la valor pronóstico. El informe endoscópico debe describir el
endoscopia inmediatamente después de las maniobras de tipo, la localización y el número de lesiones y precisar si exis-
reanimación20. te sangrado activo o estigmas de hemorragia reciente (EHR).
Estos datos (incluidos en la clasificación de Forrest (fig. 2)
Consideraciones previas a la realización de la endoscopia permiten valorar el riesgo de recidiva hemorrágica seleccio-
La endoscopia debe ser realizada por un equipo médico nando a los pacientes candidatos a terapéutica endoscópica20.
adiestrado en la realización de endoscopias terapéuticas y El riesgo de continuar sangrando o de resangrar es práctica-
en una dependencia dotada del material necesario para reali- mente del 100% si se trata de una lesión con sangrado arte-
zar una reanimación urgente si es necesario. rial activo (Forrest Ia); está entre el 10 y el 27% si la lesión
“rezuma” sangre (Forrest Ib); y es del 50% cuando se visua-
Momento de la endoscopia liza un “vaso visible” (que aflora en el fondo de la lesión sin
En general los gastroenterólogos coinciden en que debe rea- sangrado activo, Forrest IIa). La probabilidad de recidivas
lizarse precozmente en la mayoría de los casos. La endosco- disminuye si se observa un coágulo fresco adherido (8-35%,
pia precoz conlleva beneficios14: Forrest IIb), manchas pigmentadas planas (menos de 8%,
1. En los pacientes de alto riesgo, disminuye los requeri- Forrest IIc) o un fondo de la lesión limpio (menos de 3%,
mientos de transfusión, la tasa de recidiva y la necesidad de Forrest III)10. En los dos últimos casos no se requiere trata-
cirugía. miento endoscópico, debido a que no se ha demostrado be-
2. En los pacientes de riesgo medio, sus hallazgos permi- neficio5.
ten seleccionar a un subgrupo de pacientes que podrían ser Un catéter de eco-doppler introducido por el canal de
dados de alta hospitalaria en un intervalo menor de 24 horas. trabajo del endoscopio y aplicado sobre la úlcera, puede de-
3. En ambos casos, la endoscopia precoz permite acortar terminar si hay flujo sanguíneo en la base del ulcus, pudiendo
el tiempo de permanencia del enfermo en el hospital. No precisar el riesgo de recidiva y también confirmar la comple-
obstante, debe subrayarse que el enfermo precisa un tiempo ta obliteración de la arteria con el tratamiento endoscópico
de adaptación desde que es admitido en el área de Urgencias aplicado24.
hasta que puede realizarse la endoscopia. En los pacientes con bajo riesgo de recidiva (ausencia de
criterios de gravedad al ingreso y úlcera de base limpia docu-
Medidas que permiten optimizar los resultados mentada por endoscopia) podrían indicarse un alta precoz
de la endoscopia (menos de 24 horas) con el beneficio consiguiente en costes
La presencia de sangre y coágulos en la cavidad gástrica difi- directos (hospitalización) e indirectos (incorporación tem-
culta la visión endoscópica y aumenta el riesgo de broncoas- prana al trabajo).
piración durante el procedimiento. La eritromicina facilita la Por el contrario, en los enfermos con alto riesgo de reci-
evacuación de los restos hemáticos por sus propiedades pro- diva (signos de sangrado activo, vaso visible y coágulo rojo
cinéticas. La administración de una dosis única de 3 mg/kg adherido en el momento de la endoscopia), deben aplicarse
por vía intravenosa en 20 minutos, entre 30 y 90 minutos técnicas de hemostasia endoscópica5. Varios estudios han de-
antes de la endoscopia, mejora notablemente la visibilidad y mostrado que esta terapia implica una reducción significativa
la calidad del examen endoscópico9,22,23. La administración en la persistencia o recidiva de la hemorragia, así como una
de eritromicina no se considera necesaria en todos los casos reducción de la mortalidad y de la necesidad de cirugía10.

88 Medicine. 2016;12(02):82-91
HEMORRAGIA DIGESTIVA ALTA NO VARICOSA

A B C

D E F

Fig. 2. Lesiones con diferente riesgo de sangrado mantenido o recurrente. A. Hemorragia activa (Forrest Ia). Sangrado arterial «en jet» en el fondo de una úlcera por infil-
tración tumoral del bulbo duodenal. Visión en inmersión de agua. Riesgo del 100%. B. Hemorragia reciente. Ulcus gástrico con un vaso visible (Forrest IIa). Riesgo del
35-55%. C. Hemorragia reciente. Ulcus péptico con coágulo adherido (Forrest IIb). Riesgo del 14-37%. D y E. Manchas pigmentadas planas (Forrest IIc). Hemorragia recien-
te. Riesgo del 5-10%. F. Hemorragia reciente. Ulcus gástrico prepilórico con fondo limpio (Forrest III). Riesgo < 3%.

A pesar del éxito de la hemostasia endoscópica inicial, un Técnicas de hemostasia endoscópica


15-20% de los pacientes presentan signos de nuevo sangra- Todos los pacientes que presenten estigmas de alto riesgo de
do, habitualmente en el curso de las primeras 72 horas. Por persistencia o resangrado deben ser tratados en el momento
este motivo, tras un procedimiento endoscópico eficaz, estos de la endoscopia. Existen diferentes técnicas que enumera-
pacientes requieren una hospitalización de no menos de 72 mos a continuación.
horas8.
En algunos casos (úlcera gástrica, lesiones neoplásicas, Técnicas de inyección. Sobre todo adrenalina, aunque tam-
etc.) puede ser necesario tomar biopsias para estudio anato- bién suero salino, etanol, polidocanol y adhesivos tisulares
mopatológico. Si las características de la lesión desaconsejan como la trombina o el cianoacrilato, que producen un tapo-
la toma de muestras en el momento de la endoscopia por el namiento por el volumen inyectado, por favorecer localmen-
riesgo elevado de hemorragia (presencia de EHR), deberá te la trombosis o la vasoconstricción, o por el sellado del te-
repetirse la exploración para tomar las biopsias una vez que jido en el lugar del sangrado.
el riesgo haya cesado.
Procedimientos térmicos. Electrocoagulación monopolar
Helicobacter pylori o bipolar, coagulación con gas argón que producen coagula-
La infección por H. pylori es un factor de riesgo independien- ción de tejidos superficiales.
te de HDA, y su prevalencia en pacientes con HDA por le-
siones pépticas es alta, mayor del 80%25. Las guías de con- Procedimientos mecánicos. Por ejemplo, hemoclips que
senso recomiendan estudiar y erradicar H. pylori14. Sin producen taponamiento físico del punto sangrante20.
embargo, las pruebas diagnósticas (serología, antígenos en Aunque cualquier técnica endoscópica consigue mejores
heces, prueba de ureasa en biopsia o prueba de aliento, culti- resultados que el tratamiento farmacológico aislado, se ha
vo de biopsia) tienen un valor predictivo negativo bajo en el demostrado mediante metaanálisis que la inyección aislada
contexto de una HDA, por lo que una prueba negativa debe de adrenalina es menos eficaz si se utiliza en monoterapia
repetirse pasado el episodio agudo. Una vez tratado, debe con- que si se hace en combinación con un procedimiento térmi-
firmarse la erradicación de la bacteria, ya que esto implica un co o mecánico26. Los clips y las técnicas de termocoagulación
menor riesgo de recidiva25. pueden emplearse en monoterapia o asociadas a la inyección

Medicine. 2016;12(02):82-91 89
ENFERMEDADES DEL APARATO DIGESTIVO (II)

de vasoconstrictores, sin que pueda considerarse un procedi- tentos de tratamiento endoscópico9,26. Los candidatos típicos
miento mejor que otro, por lo que el uso de uno u otro se a este tratamiento son los pacientes con hemorragia masiva
deja la elección de cada endoscopista14. Si se observan coágu- (requerimientos mayores de 4 concentrados de hematíes en
los durante la endoscopia, se recomienda un lavado vigoroso las primeras 24 horas), inestabilidad hemodinámica o sangra-
para intentar exponer la lesión subyacente y tratarla según do que no ha respondido a uno, o dos intentos de tratamien-
corresponda. En caso de no poder mover el coágulo, realizar to endoscópico. En este punto, en los pacientes de bajo ries-
o no un tratamiento endoscópico depende del explorador, ya go puede plantearse el tratamiento quirúrgico, y en los de
que los estudios realizados hasta ahora no han aportado con- alto riesgo indicarse tratamiento angiográfico. La emboliza-
clusiones definitivas. ción también es un recurso posible en los casos que recidivan
En los últimos años, se han desarrollado diferentes técni- tras la cirugía. Pueden utilizarse agentes vasoconstrictores
cas hemostáticas que pueden aplicarse con endoscopia, como (vasopresina) liberados a través de un catéter vascular en los
lazos, crioterapia y sistemas de sutura27, cuyo uso no se ha vasos que nutren la lesión sangrante o sistemas de oclusión
generalizado. Más interés ha despertado, por su sencillez y mecánica del vaso sangrante (espirales metálicas –coils–, esfe-
eficacia, el uso de un polvo no tóxico que puede aplicarse ras de gelatina –gelfoam–). Es un sistema efectivo para inte-
sobre la lesión sangrante a través de un catéter que se intro- rrumpir el flujo sanguíneo en el punto de sangrado sin com-
duce por el canal de trabajo del endoscopio. El polvo se ad- prometer la viabilidad del resto del intestino, aunque
hiere al punto de sangrado, concentra los hematíes, las pla- requiere que se pueda definir con claridad el punto sangran-
quetas y las proteínas que forman el coágulo, consiguiendo te, para evitar isquemia o infarto intestinal (si se interrumpe
una hemostasia rápida. Existen dos sistemas comercializados, el flujo en un segmento amplio).
Hemospray® y Endoclot®, con un buen perfil de seguri-
dad28,29, aunque su posición en los algoritmos de las distintas
guías está por definir. Conflicto de intereses
Repetir la endoscopia de forma programada 16-24 horas
después del tratamiento endoscópico inicial (endoscopia de Los autores declaran no tener ningún conflicto de intereses.
second look) no es una práctica aconsejada de forma rutinaria,
pero puede considerarse en pacientes seleccionados con es-
pecial riesgo de resangrado, aunque en la actualidad no está Responsabilidades éticas
establecida la definición de este subgrupo de casos9,26.
Protección de personas y animales. Los autores declaran
que para esta investigación no se han realizado experimentos
Pacientes con sospecha de hemorragia en seres humanos ni en animales.
digestiva alta sin diagnóstico etiológico
tras gastroscopia o en los que fracasa Confidencialidad de los datos. Los autores declaran que en
la hemostasia endoscópica este artículo no aparecen datos de pacientes.

Derecho a la privacidad y consentimiento informado.


En un pequeño porcentaje de pacientes con hematemesis o
Los autores declaran que en este artículo no aparecen datos
melenas puede no observarse una lesión causal durante la
de pacientes.
gastroscopia inicial, bien porque se trate de un sangrado in-
termitente (frecuente en la lesión de Dieulafoy) o porque el
origen de la hemorragia no sea accesible a la endoscopia alta Bibliografía
(más frecuente en los casos manifestados como melenas que
en los pacientes con hematemesis). En estos casos, según la t Importante tt Muy importante
sospecha diagnóstica, puede repetirse la gastroscopia inicial
o realizarse un estudio endoscópico del intestino delgado ✔ Metaanálisis ✔ Artículo de revisión
(con enteroscopia de balón o con cápsula endoscópica) o del ✔ Ensayo clínico controlado ✔ Guía de práctica clínica
colon (mediante colonoscopia), o bien un estudio vascular ✔ Epidemiología
mediante angio-tomografía computadorizada (TC).
En los pacientes con hemorragia activa persistente en
situación grave, en los que no se ha logrado un diagnóstico

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