CINCO MENTIRAS QUE LOS CRISTIANOS CREEN

Por: Jessica Morris

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Pablo....En todas sus cartas se refiere a estos mismos temas. Hay en ellas algunos puntos difíciles de
entender, que los ignorantes e inconstantes tergiversan, como lo hacen también con las demás Escrituras,
para su propia perdición. Así que ustedes, queridos hermanos, puesto que ya saben esto de antemano,
manténganse alerta. 2 Pedro 3:16-17

A veces usamos las promesas de la Biblia o nuestra interpretación de ellas para sentirnos mejor. Esto
puede volverse la base de nuestra fe y poner de lado las verdades y promesas de la Biblia. Estas son cinco
mentiras que los cristianos creen y que no vienen de la Palabra.

1. Somos invencibles.

Versículos o frases como: "Todo lo puedo en Cristo que me fortalece" y "todo es posible", nos llenan de
entusiasmo y quitan el temor, haciéndonos creer que podemos vencerlo todo. Aun así, a veces los
creyentes pasarán por situaciones sin estar preparados, con ingenuidad y sin las herramientas o autoridad
espiritual apropiadas para hacer el trabajo de Dios.

Como cristianos, se nos ha dado la comisión de ir por los perdidos y servirlos, pero seguimos siendo
humanos. La llenura del Espíritu, junto con la madurez y la responsabilidad nos ayudan a evaluar en qué
situaciones se nos ha pedido ministrar. Pero debemos recordar: no somos nosotros quienes somos
invencibles, es Cristo.

2. Siempre debemos decir que sí.

Como cristianos, sentimos que es nuestro deber hacer todo lo posible por ayudar a la Iglesia y así, salvar
al mundo. Pero muchos "sí" pueden llevarnos al cansancio, al estrés y hasta a la amargura.

Sé un siervo y di que sí, pero sé selectivo. Si decir que "sí" a la iglesia es un "no" a tu familia o tu salud,
tal vez necesites volver a pensarlo.

3. El éxito se mide en números

El número de gente salva, campamentos de la iglesia, miembros o incluso el diezmo semanal pueden, en
ocasiones, dictar lo que nosotros y la sociedad consideramos como una iglesia "exitosa".

Pareciera que los cristianos han empezado a medir el éxito en variables mundanas; la verdad es que
debemos verlas a través de los ojos de Cristo.

4. El pastor siempre está en lo correcto

Aun como cristianos tenemos la tendencia de poner a la gente sobre pedestales y escuchar sus palabras
como verdades absolutas.

Un pastor y un líder de la iglesia han sido puestos por la autoridad de Dios y, como congregación,
necesitamos respetarlos y someternos a ellos; sometiéndonos todos a la autoridad bíblica. Sin embargo, es
también nuestra responsabilidad tener conocimiento de Dios y de su Palabra, la cual se activará si algo no
está bien.
Los líderes también son humanos e inevitablemente fallarán. Si tenemos una genuina relación con Cristo
y estamos constantemente creciendo en él seremos capaces de discernir lo que viene de él y lo que es
humano.

5. Debemos ser perfectos

En algún punto de la historia, los cristianos han traducido el deseo de Pablo de llegar a la perfección en
una obligación para todos los creyentes.

La verdad es que, una vez que hemos aceptado a Cristo como nuestro salvador, somos libres de culpa
delante de Dios, pero seguimos siendo carne, y seguiremos luchando contra las tentaciones y debilidades
del mundo. Debemos aceptar que aunque amemos a Cristo y deseemos fervientemente agradarle,
cometeremos errores. Confía en el perdón que Dios te otorga, perdónate a ti mismo y a quienes están a tu
alrededor; es el corazón que busca hacer la voluntad de Dios lo que define tu valor, no la opinión de la
congregación.

(Aportación de Erika Villalobos)

Este material fue tomado del Boletín dominical de la Iglesia Bíblica Unidos en Cristo (IBUC) en Monterrey, NL, Méjico.

Usado con permiso

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