Está en la página 1de 157

BR INDANDO LA R ES PU E STA A LO S GRANDE S

PR OBLE MAS DE LA V IDA

Cary Palmón
Publicado por
Naciones Unidas en Cristo, Inc.
Tulsa, Oklahoma

© 2016 por Naciones Unidas en Cristo, Inc.


Reservados todos los derechos.

A menos que se indique lo contrario, las citas bíblicas se tomaron de


la Versión Reina-Valera © 1960 Sociedades Bíblicas en América
Latina; © renovado 1988 Sociedades Bíblicas Unidas. Utilizado con
permiso.

Reina-Valera 1960® es una marca registrada de la American Bible


Society, y puede ser usada solamente bajo licencia.

Las historias que aparecen en este libro son de la vida real. Se


tomaron de los cientos de correos electrónicos que llegan al buzón de
ayuda espiritual de Minuto Final TV y Conflictos del Corazón
Radio. Se cambiaron los nombres y las situaciones específicas, a fin
de proteger la identidad del remitente.

ISBN 13: 978-1533342133


ISBN 10: 153334213X
Comentarios

C reo que no existe en la tierra persona alguna


que no haya pasado por un fuerte dolor ni un
pesar en su corazón. La complejidad del ser
humano es tan grande que es difícil evitar que al
relacionarnos con otros no existan diferencias y, en
muchos casos, fuertes conflictos. La vida está llena de
experiencias de las que podemos aprender si somos
capaces de vernos reflejadas en ellas y tomar las
decisiones adecuadas para resolver determinada
situación. Cary es una mujer que ha dedicado gran
parte de su vida en ayudar a otros para que superen
sus problemas, basando sus consejos y enseñanzas en
la Palabra de Dios. Por tal motivo, sé que este libro
que ahora estás a punto de leer, Conflictos del
Corazón, será un manual de aprendizaje y una guía
spiritual para tu vida y la vida de los que Dios ponga
en tus manos”.
i
Rvdo. Alberto M. Delgado
Apóstol de la Iglesia Alpha & Omega, Miami, FL Doctor
en teología y maestría en artes en la especialidad de
Consejería Cristiana
***
Cary Palmón es una mujer impresionante, una
mujer que ha sabido como superar los obstáculos de
su vida encontrando en Jesucristo la respuesta a una
vida que para muchos hubiera sido la excusa para el
dolor, el resentimiento, la amargura, la tristeza y una
existencia sin propósito. Cary recibió al Señor
Jesucristo como su Salvador y se apropió de cada una
de las maravillosas promesas que Él nos da. Decidió
cumplir el destino que su Padre, que la ama mucho
más de lo que ella se imagina. Tenía planeado desde
antes de la fundación del mundo. Su experiencia,
amplios estudios y sobre todo su dedicación y amor
por los que sufren, la han convertido en una exitosa
consejera cristiana del mundo de habla de hispana de
estos días. Sus programas de radio y televisión son
vistos en todo el continente y más allá;
convirtiéndose en una fuente de agua fresca que trae
refrigerio al alma sedienta en los desiertos de la vida
moderna. Este libro no es la excepción, cada una de
las historias que lo componen trae temas que se
viven a diario en nuestras naciones: la violación, el
incesto, el maltrato, el abandono, el adulterio, la
traición y muchos otros son el pan de todos los días
de miles y miles de personas. Cary nos demuestra
que la solución para todos y cada uno de ellos es
Jesucristo y que Su obra redentora es la única que
puede traer una transformación verdadera. Es muy
duro adentrarnos en tanto dolor; pero le aseguro que
aquí usted no solo oirá de la realidad actual, sino que
podrá disfrutar de las maravillosas promesas que
Dios tiene para cada situación y verá como vidas son
totalmente transformadas para poder cumplir el
propósito de Dios; como fue hecho en la vida de
Cary. La palabra de Dios dice que Él tiene planes de
bien y no de mal para darnos un futuro lleno de
esperanza y ese futuro está esperando a cada persona
que decida decirle sí a Jesús”.
Lic. Juanita Cercone de González
TBN Enlace
Abogada y notaria
Costa Rica / Dallas, Texas
***
Tuve el honor de conocer a Cary Palmón durante
una actividad donde prediqué junto a ella en Costa
Rica en el año 2010. Su sencillez, madurez y
sabiduría son de una persona de gran estatura
espiritual y solidez en Cristo. Al contar su
testimonio, de inmediato ministra el corazón del
oyente. Esto es possible cuando su audiencia escucha
todo lo que pasó debido al asesinato de su padre, de

iii
la partida de su país y de tener que irse a vivir al
extranjero. Todo esto le dio la pauta para que Dios la
preparara a fin de que pudiera ministrar a millones
de personas a través de su programa televisivo,
“Minuto Final”, y su programa de radio, “Conflictos
del Corazón”. Ahora, al ser autora de su libro que
lleva el título de su programa radial, Conflictos del
Corazón, Cary contesta las cartas de muchas personas
en gran necesidad espiritual, ayudándolas a
encontrar la solución de sus problemas y conflictos
internos y llevándolas a una relación personal con
Dios al hallar la salvación de sus almas en Cristo
Jesús y la respuesta a sus inquietudes en las Sagradas
Escrituras. Sin duda, el Espíritu y las Escrituras
inspiraron a esta gran mujer de Dios, Cary Palmón,
porque a ella misma la consolaron en su angustia y
en su dolor. Su experiencia marcada, triste y
profunda y la consolación que encontró en el Señor
la capacitó y le proporcionó los dones del Espíritu.
Por eso ahora puede ayudar a consolar a los que
están experimentando una situación semejante en
sus vidas”.
Rvdo. Josué Yrion
Escritor y evangelista internacional
Fundador y presidente de “Josué Yrion Evangelismo y
Misiones Mundiales, Inc.”
Índice

Dedicatoria .................................................................... 1
Prólogo ........................................................................... 3
Introducción .................................................................. 7
Carmen: Solo una bestia sería capaz ......................... 11
Susana: No todo lo que brilla es oro.......................... 21
Andrés: Mi lazarillo de luz ......................................... 33
María Soledad: De tal palo, tal astilla ........................ 45
Abelardo: Polos opuestos ........................................... 55
Bernardo: No la puedo olvidar .................................. 65
Raúl: Mi único hijo... mi consentido......................... 77
Romina: Fue por lana y salió trasquilada.................. 87
Analía: Una mujer de medio tiempo ......................... 97
Carlos: Atrapado sin salida....................................... 109
Graciela: El golpe nuestro de cada día .................... 121
Sergio: ¡Ya es muy tarde! .......................................... 133
Los factores de éxito y de fracaso ............................ 143
Acerca de la Autora................................................... 147

i
Dedicatoria

D ios en su gran sabiduría antes que nos


lanzáramos a la gran comisión, nos prepara,
equipa y provee de los recursos necesarios.
Muchos de esos recursos no son necesariamente
monetarios sino que en la mayoría de las veces tiene
que ver con personas como fue el caso de Minuto
Final y Conflictos del Corazón.
Cuando Dios puso en mi corazón estos proyectos
para llegar a todo aquel que sufre por medio de la
radio, televisión, Internet y otros medios, no sabía
cómo hacerlo. Inicialmente pensé que quizá un
camarógrafo solucionaría este dilema, sin saber que
el tema sería mucho más complejo de lo imaginado.
Así que en mi oración le pedí a Dios que me
mostrará las herramientas que Él tenía preparado.
Sentí que debía contactar con personas allegadas al

1
2 • CARY PALMÓN

medio y busque en mi red de contactos una persona


que me recomendó a Rubén Bonilla del Perú sin
saber que el guardaba en su corazón las mismas
expectativas y sueños que Dios me había
encomendado.
El resto es historia. Desde ese día, ambos supimos
que Dios nos había unido para esta labor. Rubén no
solo ha sido el productor de Minuto Final y ahora de
Conflictos del Corazón, sino también mi amigo y
consejero en todos estos asuntos. Su amada esposa
Betty se ha convertido en una hija para mí, al igual
que sus hijos, Anita, Cristian y Andrés, los cuales han
trabajado a la par con Rubén para llevar el mensaje
del amor de Cristo a todo aquel que no lo ha
escuchado.
Así que con mucho cariño dedico esta obra a
Rubén Bonilla y a su familia, agradeciéndoles desde
el fondo de mi corazón por su dedicación a esta labor
y por su amistad personal hacia mí y mi familia.
Prólogo

C uántos de nosotros, como psicólogos, hemos


escuchado en nuestro consultorio el lamento
de corazones doloridos a causa de
violaciones, sexo, drogas, brujerías, prostitución,
adulterio, depresión, aborto, alcoholismo, suicidio o
violencia familiar. Estos sufrimientos se tratan en
este interesantísimo libro que Cary Palmón deja en
nuestras manos.
Para entender y ayudar a través de la consejería
personal a las personas que padecen de torturas
psicológicas, se exige una gran dote de empatía, “un
ponerse en el zapato del otro”. Cary logra ese estado.
Con tal fin, usa sus propias confesiones o situaciones
similares. Los casos verídicos mencionados hacen
que la lectura de este libro se sitúe en un nivel de
coloquio y nos da luz para ver el hecho doloroso.
Los que le escriben esperan su comprensión y
quieren escuchar la “voz amiga” que les entienda y les

3
4 • CARY PALMÓN

ayude. Cary sera esa voz que siempre dará un


consejo, no humano, sino extraído de la Palabra de
Dios. La Biblia dice que “en la multitud de consejeros
hay seguridad” (Proverbios 11:14). Los que se
comunican con la autora hacen bien, pues
encuentran una palabra de esperanza y pueden ver
una luz al final del túnel. Otra gran bendición del
libro son los textos bíblicos que son la verdad de
Dios y que dan un entendimiento ante el problema,
así como la salida del mismo.
El ser humano es un ser biopsicosocial y
espiritual. Todos los problemas deben verse en estas
cuatro dimensiones. Los psiquiatras y médicos ven el
lado somático, los psicólogos el lado cognitive y
afectivo, el terapeuta familiar la parte social y el
teólogo la parte espiritual. Este libro cumple un
papel decisivo al tartar el tema desde la visión
espiritual, que es la parte más importante del
hombre y que, a su vez, da la principal solución a su
problema. Cary lleva de la mano a su audiencia por
los caminos del encuentro personal con Cristo y la
somete a la terapia de Dios, que pasa por el perdón,
la oración, la fe y el milagro de ver cómo Dios
transforma vidas. Cuando los seres humanos
miramos “a cara descubierta como en un espejo la
gloria del Señor, somos transformados de gloria en
gloria” (2 Corintios 3:18).
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 5

Leer este libro es ingresar a las profundidades del


ser humano con todas sus flaquezas y frustraciones,
es entender lo que se está viviendo, es ver una luz al
final del camino y es tener la respuesta de los cielos.
Les animo a leerlo y a extraer los más hermosos
consejos y dárselos a los demás.
Dr. Jesús Hurtado Zamudio
Psicólogo clínico
Congresista de la República del Perú
Introducción

¡E l recuerdo me es muy claro! Las imágenes de


mi vida pasan por mi mente como una
película que me muestran escenas desde mi
infancia, con papá y mamá, hasta las escenas
sangrientas y dolorosas del asesinato de mi padre por
culpa de aquel en quien él confiaba.
Puedo ver también, como una película, mi arribo
por primera vez a los Estados Unidos con apenas
dieciséis años de edad, sin saber qué haría con mi
vida ni con las heridas supurantes de mi corazón. Ni
me imaginaba siquiera lo que tenía preparado Dios
para mí, pues desde el momento que Jesucristo vino
a mi vida, Él la cambió por completo.
Durante todos estos años que han pasado, Él ha
estado conmigo en todo momento y en toda
dificultad. Dios cambió mis lágrimas por alegrías,
pudiendo ahora decirles a otros que Él desea hacer lo

7
8 • CARY PALMÓN

mismo que hizo conmigo: cambiar un corazón


quebrantado por uno nuevo. Él compone hogares,
sana cuerpos, restaura a los heridos de manera
emocional y bendice a todo aquel que viene en su
busca.
Sin embargo, lo que nunca me imaginé es que
Dios me daría, entre otras cosas, el honor de tener
una plataforma en la televisión y la radio para
decirles a todos los que andan sufriendo que hay una
esperanza de vida y que Cristo quiere darnos un
nuevo corazón.
A través del programa de televisión “Minuto
Final” y del programa radial “Conflictos del
Corazón”, he podido llegar a miles de personas al
brindarles palabras de esperanza. Y eso es lo mismo
que quiero hacer con este libro: darte esperanza en
Jesucristo para que Él te dé una nueva oportunidad
de vivir una vida victoriosa.
Las historias que leerás, y que tienes en tus
manos, son el resumen de algunas de las cartas que
nos enviara nuestra audiencia. También encontrarás
las respuestas que les ha permitido cambiar las
lágrimas por alegrías.
Como te dije antes, Dios responde las oraciones y,
con tu permiso, haré en este momento una oración
por ti para que el mismo Dios que salva, sana y
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 9

restaura haga una gran obra en tu vida y en la de tus


seres queridos.
Cary Palmon
CAPÍTULO 1

Carmen
Solo una bestia sería capaz

¡T odavía me conmuevo cuando lo recuerdo! ¡La


imagen es cruda cada vez que viene a mi
mente! Así que, pienso: ¡Cuánta maldad puede
haber en el hombre!
Esta fue la forma de cómo me enteré...
El despertador sonó a las seis y media de la
mañana, como es usual cada día. Ese día en
particular, a pesar de ser época de invierno, estaba
mucho más oscuro y frío que los otros días
anteriores. La temperatura había descendido mucho
durante esa madrugada. Miré por la ventana y
observé que la nieve lo había cubierto todo. Así que,
como cada mañana, iba a mi cita matutina con mi
Señor. Entonces, de pronto y antes de mi oración
acostumbrada, tuve una sensación extraña, diferente,
11
12 • CARY PALMÓN

como que alguien me hubiese estado esperando toda


la noche.
Miré a todos lados, tratando de encontrar una
explicación a esta experiencia. Luego, como no
encontré nada inusual, resolví que debía ser solo mi
imaginación. Sin embargo, como esa sensación se
hiciera cada vez más fuerte, me dirigí a encender la
computadora, algo que no hago por lo regular a esas
horas. Entonces, fui directamente a mi buzón de
correos y comencé a ver todos los que me habían
llegado. Mientras los observaba, tuve la convicción
de que al otro lado de aquella fría máquina había un
corazón que se estaba desgarrando de dolor y que
necesitaba una respuesta urgente a su clamor...
En efecto, di un clic... ¡y allí estaba Carmen
mostrando su dolor y el asco que sentía por ella
misma!
Entonces, apresuré mi cita con Dios. Le dije así:
“Padre, solo tú sabes lo que ocurre en el mundo... Así que,
por favor, ¡úsame en este momento!”.
Preparada como madre para escuchar las ilusiones
y las desventuras de los hijos, acudí a la lectura de su
mensaje y no puede evitar que una lágrima se me
deslizara por la mejilla.
Carmencita fue muy expresiva y acuciosa al narrar
con detalles los hechos que dieron origen a su
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 13

desgracia. Me impactó en gran manera lo que dijo


acerca del quiebre total de su vida, lo que ella llamó...
“El regalo de sus quince años”.
¡No! No era un regalo clásico de una quinceañera,
sino un regalo de sangre y dolor. Y aunque en su
correo electrónico manifestaba un cariño particular
hacia mi persona, como si nos conociéramos desde
hace algún tiempo, también sentía el reclamo de
dónde había estado en sus momentos más difíciles...
En fin, aquí transcribo lo que dijo:
Querida Cary:
Soy Carmen y nací en un pueblecito de la costa norte
del Perú. Soy huérfana de padre, pues él murió cuando
yo tenía diez años. Entonces, junto con mi madre,
fuimos a vivir con mi abuela y un tío.
Desde que llegamos a esa casa, recuerdo que vivía muy
triste, extrañando a mi papá, pues él era muy bueno...
muy cariñoso conmigo. No entendía por qué el destino,
la vida, o lo que sea, tuvo que llevárselo y dejarme sola.
No entendía... o quizá sí, porque mi soledad se
acrecentaba más cuando en el colegio veía a otras niñas
con sus padres y yo no lo tenía. ¡Lo extrañaba mucho!
Entonces, supongo que tratando de encontrar un
“nuevo papá”, le entregué a mi tío todo mi amor y mi
atención sin saber que esto sería el inicio de mi
desgracia...
Cary, ¡usted es mujer y con seguridad sabe que la
ilusión de toda niña es cumplir sus quince años! Sin
14 • CARY PALMÓN

embargo, convertirme en una quinceañera fue para mí


el inicio de mi pesadilla...
En esa época, soñaba y esperaba a mi “príncipe azul”.
Pensaba que vendría cuando cumpliera mis quince
años y, así, en medio de ese sueño... llegó la noche fatal.
No hubo fiesta. ¡Nadie se dio cuenta de mi expectativa!
¡Ni siquiera mi madre! Y mientras lloraba sola en la
cocina esa noche, escuché la voz de mi tío que me
llamaba. Por un momento pensé que quizá me tendrían
una sorpresa... Pero no fue así. Me llamaba para que
fuera a su habitación. Y fui... entré... y allí, sin más ni
más, me dijo lo que nunca esperé me dijera. Aquel a
quien había llamado papá estaba un poco borracho,
casi como todos los días. Me dijo sin una sola pizca de
duda que me acostara con él. Que antes que viniera
algún hombre a mi vida, ¡él debía ser el primero!
Asombrada por lo que escuchaba, tan solo atiné a
suplicarle, a rogarle, que no lo hiciera... lloré... clamé...
pero nada valió. El hombre en el cual yo había
depositado tanto amor, porque lo quería como mi
padre, estaba siendo como una bestia...
desgarrándome... destruyéndome no solo por fuera,
sino por dentro y para siempre.
Cary, ¡fue terrible, cruel y doloroso! Solo cuando se
quedó dormido, pude escabullirme como me fue posible
y, escondida en un rincón de la casa, esperé a que
llegara mi madre. Cuando la escuché entrar, corrí
hacia su regazo bañada en lágrimas a contárselo todo.
Sin embargo, ella... ¡ella no me creyó! Al contrario, me
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 15

acusó de mentirosa y de ser yo la que de seguro había


provocado a su hermano. ¡Me pegó!
Fue “sangre y más sangre” mi regalo de cumpleaños. Y
supongo que ya se puede imaginar el resto de mi
historia. ¡A tan tierna edad me convertí a la fuerza en
la amante cotidiana del tío! Mis sueños, mi “príncipe
azul”... ¡todo se esfumó! En vez de esto, vivía, o mejor
dicho, moría cada día aterrada de tener ese “contacto”.
¡Le tenía asco! ¡Le tenía odio por haberme robado no
solo mi inocencia, sino mi vida entera, mi futuro!
En cuanto pude, me fui de la casa. Conseguí un empleo
mal pagado y, como es previsible, me enamoré de un
chico que juró amarme a pesar de mi pasado. ¡Y nos
fuimos a vivir juntos! Todo era “color de rosa” hasta
que comenzamos a tener hijos. Ahí fue donde se le
apagaron todos sus sentimientos hacia mí y hacia los
dos hijos que teníamos. A continuación, se fue de la
casa en pos de otras mujeres y de los tragos. Comencé a
desesperarme. No sabía cómo afrontar sola todos los
gastos del hogar, pues no encontraba trabajo en nada.
Entonces, tuve que regresar a la casa de mi abuela,
donde no solo las puertas del hogar estaban abiertas,
sino también las puertas de la habitación de mi tío.
Una vez más, y en contra de mi voluntad, me convertí
en su amante. El odio que tenía hacia él había crecido,
pero ahora me encuentro atrapada en esta situación
donde consiento en ser su amante para sostener a mi
familia. En realidad, no solo lo odio con todo mi
corazón, sino que me odio a mí misma por mi
comportamiento... ¡De día y de noche! Este odio me
16 • CARY PALMÓN

consume y no me deja ni pensar. A veces, no quiero


salir de la cama, ni participar en la vida... ¡No sé qué
hacer, Cary! ¡Quiero acabarlo todo! En ocasiones, me
vienen pensamientos tan horribles como matar a mis
hijos y, luego, matarme yo... ¿Qué hago?
Cuando terminé de leer esta carta, solo pensaba
en la niña que había perdido su hogar y a su padre, y
en cómo la vida le había llevado a tal extremo de
desesperación. Entonces, le respondí lo siguiente:
Querida Carmencita:
Se me estrujó el corazón cuando leí el dolor reflejado
en tu carta. ¡Lo siento! Lo siento mucho, pero sé que eso
no es suficiente.
Tu historia me recuerda que hay otras personas en este
mundo sufriendo tu misma situación a manos de sus
propios familiares y seres queridos. ¡Igual que tú se
sienten defraudadas por completo de esa persona que
tanto apreciaban! ¡Se sienten llenas de asco y ya no
existe autoestima ni amor propio!
En tu caso, ese tío a quien llamabas papá, a quien con
inocencia le habías entregado tu amor de niña, aquel
tío, se convirtió en el arma de destrucción de tu vida.
Todo esto, sin siquiera permitirte tener la posibilidad
de escapar, ni de que te consolaran. Así que te sientes
como un vaso de cristal roto y sin compostura. Lo más
triste del caso es que hasta ahora el odio y el rencor
invaden tu vida.
Permíteme decirte que te entiendo a la perfección. Que
así como tú, en un momento de mi vida, yo estaba llena
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 17

de odio y rencor, pero que en medio de todo esto


encontré la luz al final del túnel. Una salida que me
permito comentarte. Esa salida se llama perdón. Por lo
tanto, perdónate a ti misma y a tu agresor. Sé que no es
fácil entenderlo y que es aun más difícil aplicarlo. Sin
embargo, ¡yo sé lo que es perdonar a alguien que no
merece que lo perdonen! Conozco muy bien esta
experiencia, porque a mi padre lo asesinaron de
manera brutal cuando él solo tenía treinta y siete años
de edad y yo menos de dieciséis años.
El odio hacia el culpable de su muerte llenaba mi
corazón año tras año hasta que, un día, Dios me ayudó
a perdonar a esa persona culpable de su muerte,
dándome cuenta de que yo también necesitaba que me
perdonaran por mi falta de amor hacia Dios y hacia
otros.
En ese momento, le entregué mi corazón lleno de
rencor y odio para que Él me ayudara a perdonar y a
borrar aquel dolor. El perdón es la llave que sana
nuestros corazones. El perdón nos restaura y abre
puertas en nuestras vidas para tener un nuevo
comienzo. Cuando uno perdona, el poder de Dios
comienza a obrar de forma maravillosa en nuestras
vidas y hasta cambia situaciones. El perdón no es una
sensación, sino que es una decisión.
Carmen, necesitas saber que estás hecha a imagen y
semejanza de Dios. Eres digna de que te amen, te
valoren y te aprecien. Que te amen tal como eres.
Necesitas perdonar al agresor y pedirle a Dios que te
saque de las circunstancias en las que te encuentras.
18 • CARY PALMÓN

Es hora de que salgas de la oscuridad y de la


vergüenza que has sufrido. No tuviste la
responsabilidad por nada de lo que te hicieron. Dios
sabe que eras una niña inocente. Estoy segura que Dios
te dará un buen empleo, te ayudará a criar a tus hijos
en una atmósfera limpia y decente, y te permitirá
tener sueños en tu vida, los cuales se convertirán en
realidad. ¿Cómo es que lo sé?
Porque yo misma soy testigo de las muchas maravillas
que ha hecho Dios en mi vida y, no solo en la mía, sino
en la vida de muchos otros más que han sufrido tanto
como tú. Tengo la seguridad de que así lo hará contigo
también.
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 19

Dios dice...
Muchos de los niños que son víctimas de abuso
sexual consideran que son partícipes de un secreto
mórbido y no enfrentan al abusador. Así que, por lo
general, no lo delatan por muchas razones. Ellos se
encuentran presos en una cárcel sin paredes.

Ningún varón se llegue a parienta próxima alguna,


para descubrir su desnudez. Yo Jehová. Levítico 18:6

Las víctimas de abuso sexual experimentan daños


en los aspectos emocional, sexual y social. Estas
víctimas llevan en su corazón vergüenza, baja
autoestima y un patrón funesto para sus relaciones
sociales en su futuro. En su interior, desean que la
justicia se haga en contra del asaltante. En muchos
casos, hasta pueden obtener ayuda del gobierno
local, pero en otros casos la ayuda llega demasiado
tarde. El saber que Dios es justo, les da el
conocimiento de que Él, tarde o temprano, se
encargará de llevar a cabo la justicia que se merecen.

Jehová es tardo para la ira y grande en poder, y no


tendrá por inocente al culpable. Nahum 1:3

Las promesas hechas por Jesucristo en cuanto a la


restauración de un individuo son eficaces y válidas
para todo el que ha perdido tanto debido al abuso
sexual. La víctima tiene que entregarse por completo
20 • CARY PALMÓN

a Cristo permitiéndole que haga la restauración que


solo Él puede hacer en el corazón de la persona.

El Espíritu del Señor está sobre mí, por cuanto me ha


ungido para dar buenas nuevas a los pobres; me ha
enviado a sanar a los quebrantados de corazón; a
pregonar libertad a los cautivos, y vista a los ciegos; a
poner en libertad a los oprimidos. Lucas 4:18
CAPÍTULO 2

Susana
No todo lo que brilla es oro

¡A buela, abuela!”, dijo la niña, “¿nos dejas jugar


con todas tus joyas? ¡Deben costar millones
de dólares!”, gritó entusiasmada y a voz en
cuello. Yo sonreí... Me hizo mucha gracia ver su
carita expectante esperando mi respuesta.
La autora intelectual del saqueo a mi joyero era
una de mis nietas, Amaya, de solo cinco años de
edad. Lo que ambicionaba era que la dejara jugar con
mis collares y otras joyas que tenía guardadas en la
delicada caja china que me dejó la abuela. Ella, junto
con Audrey y Eva, mis otras dos nietas, fantaseaban
sobre cómo se les vería luciendo aquellas “joyas” tan
valiosas. Sus cabecitas imaginaban que eran oro,
brillantes, perlas y zafiros, pero solo eran bisutería

21
22 • CARY PALMÓN

en realidad. Y sus pícaros ojitos solo esperaban a que


asintiera a sus súplicas...
Me hice de rogar por un rato, pero como toda
abuela consentidora, al final saqué la caja china del
estante prohibido y les permití hurgar en la linda
cajita que, además, era musical. Así, al compás de las
bellas notas que emanaban, las niñas comenzaron la
faena. No podían ni imaginar el gozo que yo sentía al
verlas ponerse las joyas una a una. Actuaban como
las actrices en el estreno de una película: vestidas con
“joyas de gran valor”.
Mientras dejaba a las niñas jugar, me encaminé al
escritorio, como cada tarde, para leer los correos
electrónicos que esperaban respuesta.
Por lo general, los adultos sabemos que no todo lo
que brilla es oro, aunque la diferencia entre la
realidad y la ficción muchas veces se hace
imperceptible. Solo al madurar en la vida podemos
reconocer la diferencia entre lo real y lo ficticio. En
fin, estaba frente a la computadora y allí estaba
Susana. Su historia encajaba a la perfección con la
escena que acababa de dejar en el dormitorio.
Recorriendo las líneas de su carta, podía
imaginarme y hasta sentir el dolor de su corazón por
la rabia y la angustia que marcaron su vida al
enterarse que “aquel” a quien ella consider “su
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 23

príncipe azul” no era el que había soñado toda la


vida.
Tomé un respiro antes de responder el correo
para orar y, rogándole a mi Señor, le dije:
“¡Ayúdame, Padre, a ponerme en su lugar!”.
Aquí tienes lo que me narró Susana...
Señora Cary:
Me he permitido escribir esta carta porque el dolor y la
desesperación van a hacer que cometa una locura.
¡Estoy al borde de perder mi cabeza!
Rolando era un hombre de negocios, apuesto e
inteligente. Era todo lo que pudiera desear una mujer.
Me enamoré perdidamente de él y me casé sin pensar
en aquel refrán que dice que “No todo lo que brilla es
oro”.
Y aunque mis primeros meses de casada fueron
maravillosos, dentro de mí sabía que algo no encajaba.
Un sentimiento de incomodidad me asaltaba con
frecuencia...
¡Había algo que me llamaba la atención! A Rolando no
le gustaba tomar licor ni frecuentar reuniones. Siempre
tenía mucho trabajo. A mí, por el contrario, me
encantaba el baile, la alegría y las reuniones con mis
amigas. No todo puede ser perfecto, pensaba, no
soy la protagonista de una película romántica. Si
íbamos a alguna reunión, solo era por cumplir y nos
retirábamos temprano porque al día siguiente él tenía
que madrugar, lo que en efecto era cierto. Sin embargo,
24 • CARY PALMÓN

mi deseo de bailar y de divertirme se quedaba


frustrado, insatisfecho.
Para el cumpleaños de mi mejor amiga, insistí mucho
antes de salir para la fiesta. Entonces, le rogue que nos
quedáramos a bailar: “Mañana es domingo”, le dije,
“no tendrás que madrugar. Hoy quiero divertirme...
dame ese gustito”. Rolando accedió, aunque no de muy
buena gana.
En la fiesta, todo iba muy normal. Reíamos y
conversábamos al compás de una suave música... hasta
que empezó la verdadera diversión. De pronto, ¡vi a mi
esposo como si fuera otra persona! Bebía y animaba a
todos... ¡hasta llegar a ser el “alma de la fiesta”!
En ese momento, me empecé a sentir incómoda, ya que
nunca lo había visto de esa manera. Llegó al extremo
de bromear con mis amigos cuando empezó a sonar la
canción “A quién le importa”. ¡Fue entonces que le pedí
moderación!
Mis amigos se reían y cuchicheaban entre sí porque
había tomado de la mano al hermano de Claudia con
quien bailaba saltando y dando unos “grititos”
extraños. Mi amiga, al ver mi nerviosismo, trató de
ayudarme haciéndome una broma. Aun así, yo sabía
que su familia era muy conservadora y no
acostumbraban a hacer bromas de esa situación.
Entonces, me acerqué y le pedí que dejara de tomar y
que descansara un rato. ¡Se enojó mucho! Me dijo: “Me
hiciste salir a divertirnos y, ahora, ¿quieres regresar?”.
Así que por más que le rogué que no hiciera esa clase
de espectáculos, no me hizo caso. ¡Hasta me propuso
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 25

que pidiera un taxi para que yo me retirara de la


fiesta y me fuera a descansar!
Aquel día, gracias a Dios, por fin terminó, pero fue allí
donde comencé a entender mi desgracia...
A partir de esa experiencia supe que cada vez que
tomaba un trago, “ese hombre”, ¡mi marido!, se
transformaba en una persona diferente. Perdía el
control y le encantaba juguetear a ser gay. Él es
mayor, no es un adolescente para hacer esos papelones.
Mi madre ya me lo había advertido, pero a mí me
molestaban sus comentarios y siempre le respondía
airada, defendiéndolo.
Al final, tuve que recurrir a ella para contarle mis
temores. Me escuchó con atención y me preguntó si
había notado algo extraño cuando estábamos en la
intimidad. Yo no quería hablar de ese tema, aunque le
dije que sí, pero que eran cosas sin importancia... “¿Qué
cosas?”, preguntó mi madre. “Bueno... siempre necesita
un trago”, le respondí. Ella se rió tratando de
tranquilizarme y me contó que papá también tomaba a
veces. “¿Algo más?”, me preguntó al verme tan
angustiada. Entonces tuve que contarle algo que no
cabía en mi mente y que excedía el juego romántico.
Con gran esfuerzo tuve que admitir que mi esposo
hasta se había puesto mi ropa interior. Mi madre se
extrañó y sus comentarios hicieron que me
arrepintiera de haberle contado sobre mi intimidad.
Entonces, de pronto, lo que me dijo me dejó
paralizada: “Lo han visto salir con el hermano de tu
26 • CARY PALMÓN

amiga Marisol. Desde aquella fiesta, salen cada día a


tomar café juntos”.
Yo traté de excusarlo, como siempre, aduciendo que eso
no probaba nada. Hasta que mi madre no pudo más y
me contó que mi marido era la comidilla de nuestros
allegados que lo consideraban “rarito”. Yo ya no quise
escucharla más e indignada tomé mis cosas para volver
a mi casa.
Sin embargo en la intimidad de mi habitación me
preguntaba: ¿Cómo pude ser tan ciega? Me lo había
dicho mi madre... mis amigas... ¡y yo nunca las quise
escuchar!
Cary, yo soy joven y agraciada, y que Rolando no me
buscara en la intimidad era algo que no entendía. Lo
justificaba relacionándolo con lo duro de su trabajo,
hasta que hace tres meses tuve que salir fuera de la
ciudad a cuidar a mi mamá, pues se había enfermado.
Al regresar antes de tiempo y abrir la puerta, sentí
voces y risas extrañas. Avancé hacia el dormitorio y
encontré a mi esposo con el hermano de Marisol en
una escena que yo no soporté y caí desmayada. Cuando
por fin al cabo de un tiempo, reaccioné y vi a mi esposo
llorando al pie de nuestra cama.
“Nunca esperé esto de ti”, le dije bañada en lágrimas.
Entonces me confesó algo con lo que luchaba por años:
él se resistía a admitir que era homosexual, que todo
empezó de niño cuando su tío lo había violado. Por eso
no tomaba, porque sabía que al desinhibirse ya no
podría disimular. Me dijo que me amaba, que esperaba
que ese amor lo ayudara a dejar su “doble vida”, pero
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 27

que, a la larga, no pudo resistir su debilidad. Me dijo


que no me sintiera culpable porque la falla era suya y
que, por temor, no me lo había confesado antes.
En lo único que yo pensaba era en lo que me diría mi
madre diría... ¡Que me lo había advertido!
Me rogó que lo perdonara y le diera otra oportunidad,
pero me negué de manera rotunda y le pedí que se
fuera y no me buscara nunca más, que se llevara sus
cosas... Le grité que me haría la cuenta que había
muerto, porque no podía perdonarle que me fuera
infiel con otro hombre.
Cary, me encuentro en un estado de depresión tan
profunda que no sé qué hacer. Las mujeres luchamos
por nuestra pareja cuando la rival es otra mujer. Sin
embargo, es insoportable pensar que lo hizo con otro
hombre. Desde ese día no lo he vuelto a ver ni tampoco
quiero hacerlo. La rabia, la impotencia y la
desesperación me están embargando, y siento que no
puedo luchar. A pesar de los consejos de mi madre de
salir a conocer otras personas, no puedo. Tengo
miedo... ahora creo que uno jamás sabe... no lograré
confiar nunca más. ¡Ayúdeme, Cary, no puedo más con
esta desesperación! Tengo la idea que la muerte es lo
único que puede liberarme. Y lo triste es que todavía lo
amo.
Conmovida por su relato le respondí de esta
manera:
28 • CARY PALMÓN

Mi querida Susana:
Miles de mujeres casadas sufren por la infidelidad de
sus cónyuges. El adulterio es un cáncer que destruye los
hogares. La sociedad actual minimiza esta plaga
porque se presenta como algo normal, como parte de la
vida. Eso es erróneo por completo. El adulterio no solo
es la infidelidad del esposo con otra mujer, sino
también con alguien del mismo sexo, como en tu caso.
Mirar pornografía, o hasta una relación platónica,
también constituye adulterio.
Las raíces del problema de identidad muchas veces
radican en la infancia a consecuencia de la ausencia
paterna o debido a las madres dominantes. El abuso de
padres o de familiares provoca confusión en el modelo
masculino, causando problemas de identidad en el
hombre. Muchos piensan que casándose todo se
arreglará, pero no necesariamente sucede así. Por otro
lado, la bebida adormece la conciencia, permitiendo
que la debilidad salga a flote. De modo que la persona
que desea evitar que eso suceda se abstiene de ella.
En la actualidad, la sociedad va en contra de las leyes
morales y exige una libertad destructiva. De esa
manera pasa por alto las leyes espirituales. La
homosexualidad expone al individuo a muchos dolores
incluyendo el SIDA. También la conciencia acusa,
porque en el fondo se sabe que el adulterio y la
homosexualidad no son la voluntad de Dios. Por
último, estas personas se sienten estigmatizadas,
devaluadas y sin espacio porque la misma sociedad
permisiva termina condenándolas.
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 29

Dios diseñó el matrimonio para que hubiera amor,


protección. Su intención fue que en el hogar los hijos
recibieran una crianza con equilibrio emocional y que
se prepararan para una vida productiva y sana. Por lo
tanto, el divorcio no está en los planes de Dios, debido
a sus efectos destructivos para todos en la familia...
El adulterio es un pecado. Sin embargo, este acto de
traición puede repararse y superarse a través de dos
condiciones básicas: el arrepentimiento genuine del
adúltero, demostrándole a su pareja que ya no
continúa haciéndolo, y el perdón total y sincero de la
víctima. Y cuando nos referimos al perdón, no podemos
olvidarnos de que el culpable también debe perdonarse
a sí mismo.
Perdonar es olvidar por completo todo lo sucedido. Si
se perdona, pero no se olvida, la ofensa sigue presente
y el dolor latente. Es necesario hacerlo con
misericordia, sin tocar de nuevo el asunto y sin
permitirle a la mente que sigan con conjeturas y celos.
Esto requiere disciplina, pero vale la pena.
Dios ama al pecador y desea ayudarlo en un proceso
de restauración que necesitamos todos.
Mi consejo es que continúes siendo amorosa y
comprensiva. Que sigas ayudando a tu esposo porque
necesitará, además, ayuda profesional para sanar las
heridas del pasado. Ora por él, pues también merece
que le rescaten. Creo que serás una mujer más que
testifique que, donde no había esperanzas, hubo un
milagro de restauración.
30 • CARY PALMÓN

Es un problema complejo, pero hay esperanza y


solución para tu matrimonio. Con Dios todo es posible.
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 31

Dios dice...
Existen muchas razones por las cuales una
persona tiene conflictos de identidad. Sin embargo,
una parte importante de ellas es que se originan
debido a trágicas circunstancias durante la niñez,
tales como crecer sin un padre e incluso ser víctima
de violación en la niñez, etc. Aun así, esto no les da
derecho a cambiar lo que dice Dios. Él nos ha dado
las instrucciones específicas que gobiernan nuestras
conductas, por eso no podemos llamar a lo que es
malo bueno, ni a lo bueno malo (lee Isaías 5:20).

Por esto Dios los entregó a pasiones vergonzosas;


pues aun sus mujeres cambiaron el uso natural por
el que es contra naturaleza, y de igual modo también
los hombres, dejando el uso natural de la mujer, se
encendieron en su lascivia unos con otros,
cometiendo hechos vergonzosos hombres con
hombres, y recibiendo en sí mismos la retribución
debida a su extravío. Y como ellos no aprobaron tener
en cuenta a Dios, Dios los entregó a una mente
reprobada, para hacer cosas que no convienen.
Romanos 1:26-28

Todos pasamos por tentaciones para que hagamos


lo indebido. Sin embargo, Dios nos da la fortaleza
para resistir la tentación. A fin de llevar a cabo un
proceso de restauración con éxito, la persona debe
incorporar a su vida estrategias que le ayuden en el
32 • CARY PALMÓN

momento de la tentación, tales como pedirles ayuda


en dichas situaciones a un pastor o consejero, así
como implementar cambios en cuanto a las
amistades del pasado o lugares que frecuentaba que
pueden hacer que caiga de Nuevo en la misma
conducta.

Cada uno es tentado, cuando de su propia


concupiscencia es atraído y seducido. Santiago 1:14

La persona que está batallando con esta situación


en su vida necesita comprender que Jesucristo desea
liberarlo de esta opresión, y que no solo lo desea,
sino tiene el poder para que pueda vivir en libertad
por el resto de su vida.

Para esto apareció el Hijo de Dios, para deshacer las


obras del diablo. 1 Juan 3:8
CAPÍTULO 3

Andrés
Mi lazarillo de luz

E ran cerca de las tres de la tarde y estaba


enfrascada por completo en la redacción de
uno de los capítulos de mi próximo libro
cuando sonó el teléfono... Me enojé conmigo misma
por haber dejado el teléfono conectado mientras
escribía.
Aun así, respondí la llamada.
Había tomado la firme decisión de desconectar el
teléfono para no perder el hilo de mis
pensamientos... pero a veces olvidaba hacerlo, por
alguna razón u otra. Al responder, escuché la voz
angustiada de Rosario, una amiga muy querida. En
cuanto la escuché, supe que algo malo le sucedía.

33
34 • CARY PALMÓN

La voz de Rosario se sentía muy angustiada. Entre


sollozos me contó que Priscila, su sobrina de tan solo
quince años, había sufrido un accidente cerebro-
vascular. Le dijeron que una vena se había lesionado
y la estaban trasladando en ese momento al hospital
en helicóptero para ver si podían salvarle la vida a
través de una operación. Sus padres estaban
desesperados...
Miré de nuevo el teléfono y le di gracias a Dios
por no haberlo desconectado, pues pude ayudar, en
lo que estuvo a mi alcance, a mi amiga Rosario.
Mientras caminábamos por el pasillo del hospital,
recordé con algo de tristeza la historia de Andrés,
quien también sufrió un accidente siendo muy joven,
al igual que la sobrina de Rosario.
Andrés era un muchacho que tenía toda la vida
por delante, como muchos otros de su edad, pero un
inesperado evento cambió su vida de repente. Era un
buen muchacho, comprometido con su trabajo y con
sus responsabilidades de la vida diaria. Lleno de
sueños y esperanzas, pues sabía que le esperaba un
futuro prometedor. De manera inesperada, Andrés
quedó prisionero de los trágicos acontecimientos que
marcaron su vida... El correo electrónico de Andrés
decía así:
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 35

Apreciada Cary:
Espero que pueda ayudarme, pues la situación en que
me encuentro es muy delicada. Déjeme contarle desde
el principio.
Mi familia es muy pequeña. Solo somos mi madre y
yo. Ella ha sido el empuje de mi vida para salir
adelante. Desde niño, me enseñó a estudiar, a trabajar
y a ser ahorrativo. Así que siendo muy joven comencé
a trabajar en una fábrica que le llamaban “La
Fundición”, pues fundían diversos metales para
distintos usos. Lejos de lamentarme por trabajar en
semejante lugar, me entusiasmaba pensar en ser el
sostén de mi madre; más aun, cuando mi trabajo no
me impedía jugar al fútbol con mis amigos del barrio.
Incluso, comencé a ir a la universidad y hacer la vida
normal como cualquier muchacho de mi edad.
Recuerdo con claridad el día que recibí mi primer
sueldo: emocionado, corrí a casa pensando en
celebrarlo con mi mamá y llevarla a comprarse un
vestido nuevo y cenar juntos en algún lindo lugar.
Estaba feliz de pensar que en adelante sería yo el que
proveería para los gastos del hogar. ¡Mi madre no lo
permitió! Por el contrario, decidió que ese dinero se
destinaría “al ahorro para mi futuro”.
En los cinco años siguientes, me convertí en un experto
en lo que hacía y me gané el respeto de mis jefes y
compañeros. Como mi trabajo en la fundición incluía
manipular ácidos peligrosos, usaba guantes y lentes
protectores. Lo lamentable es que, en mi inmadurez, me
resistía a usarlos porque me hacían más lento y
36 • CARY PALMÓN

disminuía mi producción. Me sentía muy seguro


trabajando con esos productos. No les temía.
Sin embargo, y como era de esperarse, llegó el día fatal
de mi vida: Uno de los frascos que contenían los
químicos para la fundición resbaló, y estando a punto
de tocar el suelo, por puro impulso me abalancé sobre
el mismo, salvando el frasco para que no se rompiera.
El ácido, en cambio, saltó a mi rostro y lo que fue
peor... ¡cayó en mis ojos!
Me atendieron de inmediato, pero por lo que podia
percibir, era evidente que tenía quemaduras en todo el
rostro. Entonces, al tratar de abrir los ojos, sentí un
dolor tan penetrante que estuve a punto de quedarme
inconsciente. Cuando le avisaron a mi madre lo
sucedido, llegó a la sala de emergencia y sé que se puso
a llorar sin consuelo.
Pasados unos días, los médicos en el hospital me
hicieron muchos exámenes y tratamientos; hasta que,
al final, un médico se acercó a mi habitación y de
manera solemne nos informó que el ácido había
comprometido el nervio óptico, la retina y el globo
ocular, incluyendo las órbitas de mis ojos que
quedaron dañadas. Había quedado ciego...
Recuerdo el llanto de mi madre al saber que había
quedado ciego y que no era algo pasajero. En mi mente
comencé a pensar en mis ilusiones y mis planes de
vida. Mi futuro estaba arruinado y estaba condenado a
vivir en la oscuridad por el resto de mi vida. Lloré
como un niño pequeño. Mi madre trataba de
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 37

consolarme, pero en la sala se podía escuchar también


su llanto.
Tenía veintidós años de edad cuando me ocurrió este
accidente. Ahora, que ya han pasado algunos años,
puedo decir que la recuperación ha sido lenta, dolorosa
y agobiante con las huellas de las cicatrices que me
recuerdan que la vida puede cambiar de un momento a
otro.
En mi caso, por fortuna, contábamos con el ahorro que
mi madre me aconsejó tener y logramos abrir una
tienda para trabajar en ella y vivir de esos ingresos.
Sin embargo, en mi afán de “ser normal”, me compré
una computadora que responde a mi voz, aunque
también he aprendido Braille, lo que hace que pueda
conectarme con el “mundo real”.
Además, me atreví a tomar un curso de liderazgo, pues
quería liderar mi vida e influir en otros. Así que ahora
escribo artículos publicables con la ayuda de Roxanita,
una joven a la que llamo “mi secretaria”. Ella viene
todas las tardes a acelerar la productividad: yo
dictándole y ella escribiendo mis pensamientos.
Señora Cary, aunque usted no lo crea, en este tiempo
las tardes se han convertido en los momentos más
maravilloso de mi vida. Las espero con mucha
ansiedad, pues me siento muy atraído por Roxanita...
¡es como mi ángel de la guarda!
Hace unos días, decidí confesarle mis sentimientos y
ella los correspondió. Me dice que sigo siendo muy
guapo y buen hombre. Hasta dice que cualquier mujer
podría enamorarse de mí. Sin embargo, yo les tengo
38 • CARY PALMÓN

temor a mis sentimientos, pues en mi mente me


persiguen algunos interrogantes con los que me
gustaría que usted me pudiera ayudar.
Me pregunto si una mujer puede enamorarse en
realidad de un ciego. ¿O solo será compasión? Pienso
que algún día, si nos casáramos, ella podría llegar a
sentir que es mi lazarillo y no mi esposa. Aunque estoy
enamorado, se me hace imposible pensar en que ella
pueda unir su vida a la mía, pues me parece que no la
puedo apoyar, sino que, por el contrario, mi apoyo es
ella.
Estoy angustiado por este dilema que afronto. ¿Qué me
aconseja, Cary?
Como siempre, le pedí a Dios que me iluminara y
me diera las palabras adecuadas para responderle a
Andrés. Y esto fue lo que el Señor puso en mi
corazón que le dijera:
Apreciado Andrés:
De alguna forma tu historia me recuerda a la mía. Yo
también tuve que empezar a trabajar desde muy joven,
a partir de la súbita muerte de mi padre. En ese
entonces, solo tenía quince años de edad. Eso nunca
estuvo en nuestros planes, pues mi madre se quedó
desconsolada debido a su muerte, así que yo decidí salir
a trabajar para proveer el sustento familiar, y no solo
a mi madre, sino también a mi hermanita menor.
¡No fue fácil! Además de trabajar, tuve que terminar
de estudiar en el colegio y los días se me hacían
interminables. Recuerdo muy bien el cansancio que
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 39

sentía, pero también recuerdo el gozo que


experimentaba al llegar a mi casa trayendo el dinero
para los gastos de la casa y ser el sustento de mi madre
y de mi hermanita. ¡Precisamente como tú! A pesar que
esos no eran los planes de Dios para mi vida, le doy
gracias a Él por haberme dado la fortaleza a fin de
poder trabajar de manera honrada y ayudar a mi
familia.
Sé que muchos otros jóvenes han enfrentado
situaciones similares y después han sentido la alegría
de haber tenido el valor para sacar adelante a sus
familias. En esos años de trabajo se aprenden muchas
cosas que nos sirven en la vida, además de tener la
satisfacción de haber sido de bendición a nuestras
familias. ¡Te felicito por salir adelante! Y por el
problema de tus temores, permíteme contarte una
historia que espero te sirva de inspiración para perder
tus miedos y seguir adelante con tu vida.
Se trata de un hombre famoso, llamado Jim. Era un
muchacho trabajador y estudioso, con un future
prometedor y brillante. Sin embargo, casi al finalizar
sus estudios, se le presentaron serios dolores de cabeza
y problemas en la visión. Después de muchos estudios y
análisis escuchó las mismas palabras que escuchaste tú:
quedaría ciego sin remedio. Su dolencia obedecía a un
problema genético que en pocos meses le dejó en la
oscuridad total.
Jim quedó devastado. Todos sus sueños quedaron
truncados: no habría graduación, ni novia, ni hijos.
Solo aquella terrible y permanente oscuridad. Se
40 • CARY PALMÓN

encerró en su casa y se negó a salir de ella por mucho


tiempo. Le costó mucho acostumbrarse a la ceguera.
Una tarde quiso ver su programa favorito de
televisión. Negándose a sentirse frustrado, le pidió a su
major amiga que le narrara las escenas que iban
sucediendo. Ella asistía a su casa con regularidad y
repetían el ritual: ella le narraba las escenas y él se las
imaginaba.
Haciendo esto tuvo una idea fabulosa: Si él podia
hacerlo, otros ciegos también podrían “ver” con los ojos
de la imaginación.
Entonces Jim decidió capacitarse y dedicarse al rodaje
de películas para ciegos. La técnica es la misma: cuando
la película corre, hay un narrador que va describiendo
las escenas. En la actualidad, Jim es propietario de una
serie de programas de television para ciegos en los
Estados Unidos, en el cual se Narran todos los
programas y miles de hombres y mujeres con ceguera
pueden disfrutar una vez más sus programas favoritos
a través de la narración y la imaginación. Ha sido una
bendición para todos ellos. La amiga que de manera
solícita iba a narrarle las películas, es hoy su esposa y
compañera. Su matrimonio es normal y feliz.
Siendo ya empresario de la televisión, algo muy tierno
sucedió en un momento de su vida. Eso fue cuando el
médico le dijo que tal vez un trasplante le pudiera
ayudar a devolverle la visión, pues había un donante.
Agradecido, Jim le pidió al médico que le revelara la
identidad de la persona fallecida que tuvo la nobleza
de donar sus ojos. El médico, conmovido, le respondió
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 41

que la persona estaba viva y que se trataba de su


propia abuela... El amor de esta mujer hizo que ella
decidiera darle lo mejor que tenía a su nieto, Jim.
Quiero que sepas, Andrés, que Dios te ama, y que el
amor que Él siente por ti hizo que diera lo mejor que
tenía: Jesucristo, su Hijo único, a fin de que tú
recibieras perdón, restauración y una nueva vida por
medio de Él. Hoy puedes aceptar el amor de Dios o
rechazarlo. El amor de Dios echará fuera todo temor...
Al aceptarlo, recibirás el mejor regalo que puedas tener
en la vida.
Te deseo que goces de tu nueva vida en Dios y aceptes
este regalo de Él.
42 • CARY PALMÓN

Dios dice...
La Palabra de Dios nos indica que la voluntad de
Jesucristo era la de sanar a todo el que necesitaba
recuperar su salud. Unos recibieron su sanidad al
instante y, en otros casos como los leprosos, se
fueron sanando a medida que iban caminando. Una y
otra vez, las Escrituras mencionan que todo el que
vino a Jesucristo recibió su sanidad cuando la
solicitó.

Y cuando llegó la noche, trajeron a él muchos


endemoniados; y con la palabra echó fuera a los
demonios, y sanó a todos los enfermos; para que se
cumpliese lo dicho por el profeta Isaías, cuando dijo:
El mismo tomó nuestras enfermedades, y llevó
nuestras dolencias. Mateo 8:16-17

La Palabra de Dios nos indica que debemos clamar


a Dios por nuestra sanidad.

Jehová Dios mío, a ti clamé, y me sanaste. Salmo 30:2

La compasión de Dios se extiende para todo el


que sufre de cualquier enfermedad. Una y otra vez se
lee en la Biblia de que Él desea sanarnos y
rescatarnos de este sufrimiento. Nuestra parte
consiste en orar por los enfermos y no dudar de que
la voluntad de Dios es que la persona no sufra y que
reciba su sanidad.
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 43

¿Está alguno enfermo entre vosotros? Llame a los


ancianos de la iglesia, y oren por él, ungiéndole con
aceite en el nombre del Señor. Y la oración de fe
salvará al enfermo, y el Señor lo levantará; y si
hubiere cometido pecados, le serán perdonados.
Santiago 5:14-15
CAPÍTULO 4

María Soledad
De tal palo, tal astilla

M e encanta cocinar y, por supuesto, a mi


familia le encanta comer. Somos... ¡el
equipo ideal! Un día de estos me animaré
a publicar un libro de recetas.
En una tarde en particular, tenía planeado
enseñarle cómo hacer un flan a mi nuera. Ella es
estadounidense y, en su país, el flan es muy popular,
aunque no todos conocen la verdadera receta. Por
eso, el “secreto del flan” es muy codiciado entre ellos.
Llegado el momento, no vino sola, sino que la
acompañaba Cherish, ni nietecita adolescente. Ella
también quería aprender “los secretos de su abuela”.
Así que al poco tiempo, las tres convertimos la
cocina en una sala de fiesta. ¡Qué divertido fue tener
una reunión 3G (de tres generaciones)! No puedo
45
46 • CARY PALMÓN

expresar la alegría que sentí al darme cuenta que las


dos estaban ansiosas por aprender a preparar ese
delicioso postre.
Nos pasamos la tarde horneando el flan mientras
que, a la vez, se deleitaban escuchando mis historias.
Entre animadas conversaciones, pasaron las horas y
así, en poco tiempo, terminamos tres grandes
porciones de postre.
Al final de la tarde, madre e hija se llevaron
consigo los deliciosos manjares y, mientras subían al
auto, mi hijo me decía por teléfono que las esperaba,
listo para saborear su postre preferido. Estaba muy
contento del hecho, pues sabía que a partir de ese
momento disfrutaría de esa exquisitez sin tener que
venir a mi casa...
Cuando mi nuera y mi nieta se marcharon, me
quedé pensando en cómo una madre tiene mucho
que enseñarles a sus hijos. No en vano nuestros hijos
viven a nuestro lado sus primeros años aprendiendo
lecciones para la vida.
Sin embargo, este hecho me trajo un profundo
recuerdo sobre María Soledad y en cómo esta chica
tuvo que atravesar una gran crisis debido a la
desgraciada influencia de su madre. A decir verdad,
me estremece el solo hecho de recordarlo, pero más
aun cada vez que vuelvo a leer su carta. Me resultaba
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 47

difícil pensar en que no todas las madres tienen


buenos planes para sus hijos.
Esta es su narración...
Apreciada señora Cary:
No sé cómo comenzar esta carta porque me siento muy
avergonzada de lo que le voy a contar. Me animé a
escribirle pues usted me inspira confianza y estoy
segura de que puede ayudarme.
Mi problema comenzó cuando era muy joven. Soy
huérfana de padre, pues él murió cuando yo era muy
pequeña. ¡Tenía cirrosis hepática debido a su adicción a
la bebida!
Aunque me crió con modestia, la pobreza no pudo
arrebatarme la devoción que le profesaba a mi madre.
Yo la quería mucho y era lo único que tenía. Es más,
creo que la quería tanto que no imaginaba mi vida sin
su presencia. Sin embargo, mis sueños y todo mi
mundo de niña quinceañera se derrumbaron cuando
mi madre me dijo algo que mis oídos se negaban a
escuchar.
Sus crueles palabras comenzaron a salir de su boca
como sale la inmundicia de la cloaca... Cary, ¡me duele
aún! No dejo de pensar a cada momento en esas frases
que desgarraron mi corazón y cambiaron mi vida para
siempre.
Aquel día sin ningún reparo me dijo: “Hijita... ¡Ya
dejaste de ser quinceañera! Acabas de cumplir dieciséis
años y ha llegado el tiempo que “ese tesorito” que tienes
48 • CARY PALMÓN

nos proporcione el dinero que necesitamos. ¡Gracias a


esa “cosita” podrás ir a la universidad y vestirte como
es debido!”.
No sabía de qué estaba hablando... Era mi madre, la
más santa que yo creía. Entonces, dejando de lado ese
aspecto sublime que tenía, me explicó con lujo de
detalles lo que quería que yo hiciera. Por supuesto, ese
“algo” rompió mi corazón. Me dijo que el “tesorito” al
que se refería era mi virginidad y que había un tal Sr.
Pineda listo para pagarnos buen dinero con tal que yo
accediera a estar con él.
¡Me encontraba en estado de choque! ¡Confundida por
completo! ¡No lo podía creer! En ese momento, lo que
anhelaba era “reservarme” para un muchacho que
estuviera enamorado de mí y que fuera el que quisiera
casarse conmigo... El sueño ideal de mi vida...
Traté de convencer a mi mamá que no iba a hacer tal
cosa, porque algo en mi interior me decía que acceder a
los requerimientos del tal Sr. Pineda no era apropiado.
Mi mamá, en cambio, insistió en que aceptara. Es más,
me dijo que de esa manera podríamos tener el dinero
no solo para ropa, sino para otras cosas de las que
carecíamos. Y acepté... Nunca olvidaré la noche de ese
horrible suceso. ¡Fue el peor momento de mi vida! Mi
cuerpo me quedó dolorido, pero mi alma quedó
ensangrentada y llorando... Clamando que todo fuera
tan solo un feo sueño... una pesadilla, pero no fue así.
Los siguientes días fueron peores. Continué haciéndolo
una y otra vez, y comencé a descuidar mi arreglo
personal. Mi madre me pedía que me bañara, no
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 49

teniendo en cuenta que aunque me bañara mil veces,


yo seguía sintiéndome sucia. Además, la idea de tener
ropa nueva no me causaba alegría, ni motivación
alguna. Pero en fin, mi vida continuó así, día tras día...
Después del Sr. Pineda vinieron otros y otros. En un
abrir y cerrar de ojos me había convertido en una
prostituta de profesión. Todo por aceptar los consejos
de mi madre... ¡Los consejos de la mujer que me dio la
vida! Sin embargo, la necesidad económica comenzó a
taladrar mi mente y, de pronto, ya no podía vivir con
poco dinero ni con carencias. Al final, ¡la ambición
terminó por convencerme!
Pasó el tiempo y conocí a un hombre maravilloso. Él
era casado, pero a mí eso no me importaba. Era tierno,
guapo, amable. Me trataba como una mujer decente.
Yo estaba loca por él, pero nadie lo sabía. Pasaron los
meses hasta que un día desapareció de mi vida y nunca
más lo volví a ver. No obstante, ese hombre me dejó “un
regalo”. Me enteré que estaba embarazada de él, y
como todavía me sentía muy enamorada, acepté “este
regalo” con gran alegría.
Mi madre me regañó y se burló, diciéndome: “¡Mira la
romántica!”. Sin embargo, aceptó ayudarme con la
niña, pero con la condición de que no tuviera más
hijos. Ambas cumplimos nuestras promesas.
Mi madre me ayudó a criar a mi niña mientras yo
continuaba en mi “profesión”. Luego, cuando mi hija
creció, tuve que mentirle sobre mi trabajo pues me
daba mucha vergüenza que se enterara de lo que hacía.
50 • CARY PALMÓN

Le dije que era enfermera. Ella no debía nunca


enterarse del verdadero oficio al que me dedicaba.
Al cumplir los quince años, ¡mi hija ya era una mujer
muy hermosa!
Entonces un día, de repente, mi hija se me enfrentó y
me preguntó si yo era una prostituta. El cielo me cayó
encima y quise desaparecer del mundo al escuchar esas
palabras saliendo de su boca. Con intenso dolor le
pregunté: “¿Quién te dijo semejante cosa?”. Ella
respondió que fue su abuela, que ella le había contado
lo que yo hacía para que no nos faltara nada. Y lo que
es peor, mi madre además le había dicho que ya yo
estaba vieja y que era tiempo de que ella, mi hija, me
ayudara a traer el dinero a la casa de la misma
manera en que lo hacía yo.
No soporté que mi hija supiera esa verdad, ni lo que
mi madre le había insinuado que hiciera ella también.
Comencé a gritar y a llorar. Mi madre salió de su
habitación para saber lo que sucedía. Tuvimos una
pelea terrible y le dije que no iba a arruinar la vida de
mi hija como lo hizo conmigo, porque esa niña se
merecía algo mejor. Así que le pedí a mamá que se
fuera de mi casa porque no iba a permitir que también
destruyera la vida de mi hija.
Entonces, para mi sorpresa, mi hija se puso a favor de
mi madre y me gritó: “¡Si mi abuela se va, yo también
me voy!”. No se puede imaginar el dolor que sentí al
ver que mi hija estaba en mi contra y convencida de
las ideas de mi madre.
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 51

Después de esa pelea, he resuelto cambiar mi estilo de


vida. Mi madre y mi hija están conmigo en la casa y
yo necesito proveer para nuestros gastos, pero no sé qué
hacer ni cómo hacerlo... Gracias por su tiempo, espero
su respuesta.
Después de leer la carta de María Soledad me
sentí apenada y a la vez indignada de que hubiera
madres capaces de llevar a sus hijas por un camino
así. Como cada vez que respondo estos interrogantes
de la vida, le pedí a Dios su dirección para
responderle a María Soledad y esto fue lo que le
dije...
Estimada María Soledad:
Ante todo, debo felicitarte por tomar la decisión de
salir de ese estilo de vida y de vivir decentemente. ¡No
te desanimes en tu intento! Estás tomando una Buena
decisión y, sobre todo, honrosa. Así demuestras tu deseo
de cambiar el curso de tu vida.
Con respecto a tu hija, opino que la mala influencia de
tu madre y su apego hacia ella la ponen en peligro de
seguir por el mismo camino al que te llevó tu madre.
Necesitas la ayuda de Dios para cambiar el rumbo de
tu vida y, sobre todo, el de la vida de tu hija antes que
sea demasiado tarde.
Lo primero es tener fe en Dios, lo segundo es poner en
acción esa fe... déjame explicarte: Tanto tu hija como tú
necesitan buenos mentores en sus vidas que les enseñen
y les ayuden a vivir una vida honrada; una vida con
52 • CARY PALMÓN

los valores morales que solo Dios puede enseñarles a


través de su Palabra.
Por lo tanto, te sugiero que busques una Buena iglesia
cristiana en la cual les enseñen la Palabra de Dios y en
la que tu hija pueda reunirse con jóvenes decentes que
la animen a vivir una vida diferente.
Allí, en la iglesia, tu hija tendrá la oportunidad de ver
la diferencia entre lo que conoce y el comportamiento
de un hijo de Dios. El mismo grupo la puede ayudar a
cambiar sus patrones de conducta.
Tengo que aclararte que lo único que cambia en
realidad a una persona es un verdadero encuentro con
Jesucristo como Salvador de nuestras vidas. Cuando
esto ocurre, comienza la transformación dentro de
nuestro corazón, y nuestra conciencia empieza a
funcionar como es debido, indicándonos el camino a
seguir.
Por lo que puedo deducir de tu carta, tú aún no has
tenido ese encuentro con Cristo, pero debes empezar
por allí. Entonces, desaparecerá ese sentimiento de
suciedad, de estar manchada. Todos nos hemos sentido
así, hasta el día en que Cristo nos limpió con su sangre
divina.
Espero recibir noticias tuyas y de tu hija en las que me
cuentes que Jesús ya es el Señor de tu vida y que ambas
han empezado su proceso de transformación para vivir
una vida libre, honrada y feliz.
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 53

Dios dice...
Aunque vivimos en tiempos donde existe una
gran carencia de santidad en el aspecto sexual por
parte de la gente, esto no quiere decir que tenemos el
permiso de Dios para practicar la fornicación y la
prostitución.

¿No sabéis que los injustos no heredarán el reino de


Dios? No erréis; ni los fornicarios, ni los idólatras, ni
los adúlteros, ni los afeminados, ni los que se echan
con varones, ni los ladrones, ni los avaros, ni los
borrachos, ni los maldicientes, ni los estafadores,
heredarán el reino de Dios. 1 Corintios 6:9-10

La persona que ha estado acostumbrada a ganarse


la vida en esta forma, tiene temores en cuanto a su
habilidad de poder ganarse la vida de forma honrada.
Jesucristo nos enseña que Él se encargará de suplir
nuestras necesidades (lee Mateo 6:25-34).

Porque yo Jehová soy tu Dios, quien te sostiene de tu


mano derecha, y te dice: No temas, yo te ayudo.
Isaías 41:13

A pesar de todo lo que haya sucedido en sus vidas,


Dios nos dice que cuando una persona se arrepiente
y viene a Cristo, todo su pasado dejó de existir y
ahora es una nueva criatura. Los que vienen de un
pasado tortuoso deben concentrarse y meditar en
que son una nueva criatura en Cristo.
54 • CARY PALMÓN

De modo que si alguno está en Cristo, nueva criatura


es; las cosas viejas pasaron; he aquí todas son hechas
nuevas. 2 Corintios 5:17
CAPÍTULO 5

Abelardo
Polos opuestos

E
Final”.
staba en el set de televisión, lista y esperando
la cuenta regresiva para comenzar a grabar
uno de los diversos programas de “Minuto

Como siempre, en el estudio había un alto nivel


de tensión, pero también de concentración de todos
los involucrados. Este es un trabajo que requiere
cuidar muchos detalles y cada uno de ellos no solo
tiene que estar perfecto, sino también trabajado de
manera artística. Debe haber una buena
coordinación entre los aspectos como la iluminación,
el sonido, las cámaras, etc.
Mientras esto ocurría, yo estaba sentada en mi
lugar frente a las cámaras, esperando con paciencia
mi participación. Entonces, de pronto, se
55
56 • CARY PALMÓN

encendieron los reflectores, y debido a la luz tan


intensa, tuve que cerrar los ojos con rapidez. Más
allá de mi reacción física al hecho de la luz, algo me
impresionó de este suceso. Me di cuenta cómo la
iluminación disipaba todas las sombras logrando que
todas las partes que eran oscuras estuvieran
resplandeciendo por la luz.
Mientras meditaba en ese contraste entre la luz y
la oscuridad, a lo lejos escuché la voz del director que
trataba de captar mi atención dándome indicaciones.
Se trataba de la clásica voz de advertencia del
coordinador de piso que comenzaba con la rutina de
producción diciendo a viva voz: “¿Atenta, Cary?”. A
lo que asentí con la cabeza, para que diera inicio al
rodaje.
“Cinco, cuatro, tres, dos, uno... cero... ¡Acción!”
Lo curioso fue que, el tema que comencé a grabar,
se refería a la oscuridad del alma de Abelardo. Una
oscuridad que no solo fue capaz de engendrar los
peores sentimientos de su corazón, sino también de
llevarlo a resolver sus propios asuntos de la peor
forma: con la mismísima muerte...
Recibí su carta entre las muchas cartas de cada día.
La de Abelardo, en cambio, fue la que me impactó en
gran medida. Estoy segura que cuando la leas te
quedarás impresionado también. Su triste e
impresionante carta comenzaba así:
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 57

Estimada Cary:
Permítame presentarme... Soy Abelardo, pero no le voy
a dar mi apellido, pues prefiero mantenerme en el
anonimato.
Vivo en una provincia muy alejada de la capital en mi
país. Allí le damos mucha importancia a los terrenos
que poseemos, debido a que para nosotros eso es vida.
De allí comemos y allí vivimos, pues como campesinos
sabemos que mientras más tierra poseamos,
obtendremos más ingresos. Lo lamentable es que
existen también las disputas de terrenos en las que,
incluso para evitar perderlos, se puede llegar hasta a
matar. Es triste, pero este es el contexto de mi situación.
Resulta que tengo unos primos que se apropiaron del
terreno que tenía nuestra familia, aprovechándose de
ciertos viajes que mi hermano y yo tuvimos que
realizar.
Déjeme explicarle que mi hermano Gregorio y yo nos
enteramos de que los primos habían “pagado por lo
bajo” y registraron la tierra a nombre de ellos. ¡Nos
habían robado nuestra propiedad! Sabíamos que ellos
eran seis y nosotros solo éramos dos, y que estos
ladrones eran capaces de matarnos con tal de quedarse
con la tierra.
La cólera nos invadió hasta el punto de perder el buen
juicio. Gregorio y yo decidimos pelear en su contra,
pero no utilizando la ley, sino que para enfrentarlos
recurrimos a la brujería. Visitamos al brujo más
poderoso de la zona donde vivimos y le explicamos la
situación y cómo queríamos solucionarla.
58 • CARY PALMÓN

El brujo nos advirtió que estábamos entrando “en un


terreno inimaginable”, con fuerzas oscuras que no solo
podrían afectarnos a nosotros, sino también a otros.
Sin embargo, a pesar de sus advertencias, Gregorio y
yo decidimos proseguir.
El brujo nos preguntó qué era lo que deseábamos.
Entonces nuestra respuesta fue: “¡Muerte para todos
ellos!”. Aun así, deseábamos que la muerte fuera de una
forma en la que no nos responsabilizaran. El brujo dijo
que él sembraría una semilla de odio entre ellos hasta
el punto de confundirse, odiarse y matarse. Luego, nos
advirtió que este hechizo también podría afectarnos y,
que en ese caso, ya no podría ayudarnos.
Estábamos tan llenos de odio por los primos que no
pensamos en lo que decía el brujo: “Que nuestra sangre
también se mancharía”.
El brujo cumplió su trato y le pagamos muy bien por
ese trabajito... Y así fue que poco después comenzó una
ola de violencia entre los primos. Todos se acusaban,
empezaron a pelearse entre hermanos y entre las
esposas de ellos. Entonces, no pasó mucho tiempo para
que empezaran a morir. Eso desencadenó más odio
que, para nuestra desgracia, trascendió a toda la
familia, pues hasta llegaron al extremo de mandar a
matar a mi hermana y a mis sobrinos. Luego, dos de
los primos que quedaban vivos atacaron a Gregorio a
puñaladas y lo dejaron moribundo.
Cuando fui al hospital para ver a Gregorio, me contó
que mataron a su mujer y sus hijos. También me dijo
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 59

cómo el demonio se había apoderado de todos ellos. Mi


hermano murió esa noche.
Enfurecido por completo, al salir del hospital compré
un revólver y fui a buscarlos para matarlos, pero los
muy cobardes, a pesar de emboscarme y dispararme,
no me hirieron. Salieron corriendo y se perdieron
entre la maleza, diciendo en voz alta que me matarían.
Al día siguiente, fui en busca del brujo y le pedí que
detuviera esta pesadilla. Él me dijo que ya era muy
tarde, que no se podía parar, que el odio reclamaba
sangre, y la sangre reclamaba muerte. Por lo tanto, el
embrujo no cesaría hasta que yo muriera.
Jugué con fuego y salí quemado. En la actualidad, vivo
aterrorizado. La tierra se ha quedado sola, nadie la
habita. Muchos le dicen “La tierra maldita”, y tienen
razón. Yo no tengo descanso, no puedo ni dormir, no sé
qué hacer... ¡He perdido tanto!
Lo peor del caso es que no sé si Dios podrá perdonarme
por todo lo que he desencadenado. No sé si Él pueda
ayudarme a salir de este infierno.
Esta fue mi respuesta para Abelardo...
Mi apreciado Abelardo:
Cuánto siento saber la situación en la que te
encuentras! A pesar de todo, ¡Dios tiene un plan
maravilloso para tu vida en este momento y entre sus
planes está tu liberación total!
La brujería, la curandería, las adivinaciones, los
encantamientos y los hechizos son algunas de las
60 • CARY PALMÓN

armas que utiliza el diablo para destruirnos. No


obstante, desde el principio Dios nos dio instrucciones
específicas en su Palabra acerca de que semejantes
prácticas eran prohibidas por completo. Es más, las
instrucciones terminaban con una maldición por
realizar estos actos oscuros.
Aun así, la brujería ha tomado cada vez más auge en
los últimos años porque el hombre siente que hay un
vacío en su ser. Es un vacío que solo Dios puede llenar,
pero que el hombre, en su ignorancia, busca esta clase
de conexión espiritual. Entonces, en vez de conectarse
con Dios, con quien se conecta es con el diablo y su
mundo espiritual. El resultado es terrible, porque una
vez que comienza a involucrarse en el ocultismo, queda
atrapado y se decreta una maldición no solo para él,
sino también para su entorno, como te ha sucedido a ti.
La gente pasa por alto que la brujería trae malos
resultados, pues su acción es maligna y ata a las
personas a cosas terribles. Por eso es que desprenderse
de ellas no es fácil. La única forma de lograr una
liberación completa empieza por dentro.
Déjame explicártelo con otras palabras: Dios envoi a
su Hijo único, Jesús, para reconciliarnos con Él. Por lo
tanto, ¡Jesucristo vino a esta tierra con el propósito de
pagar por nuestros pecados y liberar a todos los
cautivos! Para recibir esta liberación tenemos que
reconocer, en primer lugar, que somos pecadores.
Luego, por fe, aceptar su sacrificio en la cruz y con esto
recibir su perdón y la salvación de nuestras almas.
Sucede que cuando reconocemos nuestra gran
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 61

necesidad de perdón y de ayuda por parte de Cristo,


entonces Él nos da un nuevo corazón lleno de fe en Él y
en su poder. Como resultado, pasamos del reino de las
tinieblas al Reino de Dios donde Él nos cuida, nos
protege y nos ama.
No sé si ya has dado este primer paso de entregarle a
Cristo tu corazón tal como te encuentras en este
momento, con todo lo bueno y lo malo que hayas hecho.
Este debe ser tu primer paso: Tienes que decider de
todo corazón hacer una oración, pedirle perdón a Dios
y entregarle tu vida, si es que aún no lo has hecho.
Una vez que Cristo mora en ti, tienes el derecho
espiritual a la protección de Dios, y recuerda que
ninguna brujería puede venir contra ti.
Debido a tu participación en la brujería, has cometido
un pecado y necesitas pedirle perdón a Dios. Así que,
en voz alta, declara que ahora mismo rompes toda
atadura o puerta abierta que tienes debido a ese
comportamiento. También declara que a partir de este
momento le niegas al diablo todo acceso a tu vida y a
la vida de tus hijos. Esto es muy importante para
obtener la verdadera liberación. Luego, recibe las
promesas de Dios en cuanto a la protección de esas
oscuras prácticas.
Espero que decidas seguir mis consejos y aceptes el
regalo de Dios a fin de que te liberes de todo el mal que
te está aconteciendo.
62 • CARY PALMÓN

Dios dice...
Para ser más explícito y hablando en términos
actuales he hecho la siguiente relación que muestra
lo que Dios dice con respect a todas las prácticas
oscurantistas:
• Los adivinos: Dicen predecir la fortuna, el
amor, el futuro, etc. Incluye a los espiritistas,
la ouija y todo tipo de cartas.
• Los agoreros: Los que leen o escuchan el
horóscopo y la astrología.
• Los sortílegos: Los que adivinan o
pronostican algo por medio de suertes
supersticiosas o magias.
• Los hechiceros: Los que hacen tratos con los
espíritus inmundos.
• Los encantadores: Los que practican el
hipnotismo.
• Los clarividentes: Los que adivinan hechos
futuros u ocurridos en otros lugares, y que
practican la telepatía y el control mental.
• Los que consultan los muertos: Estos cultivan
la necromancia mediante la adivinación por
evocación de los muertos.
• Los médiums: Personas que se comunican
con los espíritus.
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 63

No sea hallado en ti quien haga pasar a su hijo o a su


hija por el fuego, ni quien practique adivinación, ni
agorero, ni sortílego, ni hechicero, ni encantador, ni
adivino, ni mago, ni quien consulte a los muertos.
Porque es abominación para con Jehová cualquiera
que hace estas cosas, y por estas abominaciones
Jehová tu Dios echa estas naciones de delante de ti.
Deuteronomio 18:10-12

Dios insta a la persona a que tenga un


arrepentimiento total y que se aleje para siempre de
este tipo de relación y de vida. No solo perdona al
individuo, sino que lo acepta como su hijo.

Por lo cual, salid de en medio de ellos, y apartaos,


dice el Señor, y no toquéis lo inmundo; y yo os
recibiré, y seré para vosotros por Padre, y vosotros
me series hijos e hijas, dice el Señor Todopoderoso. 2
Corintios 6:17-18

Es importante que la persona involucrada en


cualquier tipo de magia destruya todos los artefactos
que la conectaban con este pasado.

Y muchos de los que habían creído venían,


confesando y dando cuenta de sus hechos. Asimismo
muchos de los que habían practicado la magia
trajeron los libros y los quemaron delante de todos; y
hecha la cuenta de su precio, hallaron que era
cincuenta mil piezas de plata. Hechos 19:18-19
CAPÍTULO 6

Bernardo
No la puedo olvidar

I ba con mucha prisa, pues se me hacía tarde para


llegar a la hora establecida por la autoridad
carcelaria de la prisión de hombres que visitaba
con frecuencia.
Llevaba varios años trabajando en ese lugar como
voluntaria. Allí pude conocer a muchas personas que
jamás pensaron terminar cometiendo algún delito y
que por sus hechos consumados tendrían que pagar
con la privación de su libertad largos años de
condena. Sin embargo, allí también pude ser testigo
de impactantes cambios en la vida de muchos de
ellos.
La prisión es un lugar terrible e inhóspito. Todo
es sombrío: los pisos, las paredes, las rejas. Es una
atmósfera tan dura que el solo contacto con sus

65
66 • CARY PALMÓN

ambientes produce dolor. Esa sensación y la carencia


total de paz fue una de las cosas más impresionantes
que vi cuando entré por primera vez a uno de estos
centros penitenciarios.
Un día, realizando una de mis acostumbradas
visitas, recordé la historia de Bernardo que estuvo a
punto de formar parte de este grupo de
desafortunados y tuvo la oportunidad de librarse a
tiempo.
En su correo electrónico, me contó lo sucedido de
esta manera...
Señora Cary:
Soy un oyente de sus programas. Me gustan mucho y
por eso sé que usted me puede ayudar. Estoy en un
terrible dilema y lo triste es que estoy luchando contra
mí mismo.
Soy estudiante de programación en la Universidad. Me
gusta también el deporte y juego fútbol con un grupo
de amigos todos los fines de semana. Como deportista,
frecuento el gimnasio y esto me permite lucir muy
atlético y hace que se muy amistoso. Solo tengo
veintitrés años.
El asunto es que hace alrededor de un año y medio,
doña Rosita y su esposo se mudaron a mi barrio. Ella
es una señora joven y, a la verdad, muy guapa. Mis
problemas empezaron cuando la conocí en persona.
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 67

Ella y mi madre se hicieron amigas y, una tarde, doña


Rosita le llevó una deliciosa torta a la casa. A los pocos
días, mi mamá me pidió que le devolviera el recipiente
de la torta. Así que fui a llevárselo y, al mirarla con
más detenimiento, pude apreciar que era mucho más
joven de lo que pensaba. Tal vez solo un par de años
mayor que yo.
Al entregarle la bandeja, ella me pidió que pasara a su
casa y me comentó que se le había “quemado” una
bombilla y no sabía cómo cambiarla. De inmediato, me
ofrecí para ayudarla. Sin embargo, ella me convenció
de que era mejor que regresara en la noche. Así que le
pregunté si su esposo no estaría esa noche y ella me
contó que él es camionero y que no regresaría en varios
días.
Sé que parece demasiado inocente, pero esa noche
regresé para cambiar la dichosa bombilla. Al llegar, me
abrió la puerta muy perfumada y vestida con un
impactante atuendo de cama. Creo que no es necesario
contarle en detalle lo que sucedió después. A diferencia
de ella, yo era un joven inexperto. De modo que, a
partir de ese día, una tremenda pasión se desencadenó
en mí.
Semana tras semana esperaba con ansias a que saliera
el esposo, a fin de correr a sus brazos. Pensaba en ella
de día y de noche... y poco a poco Rosita fue haciendo
de mí lo que quería. En el fondo, yo sabía que estaba
actuando mal. Aun así seguía haciéndolo.
Cuando el esposo se ausentaba, la visitaba a diario y a
escondidas. Entonces, un día, noté algo raro; algo que
68 • CARY PALMÓN

me alarmó. Eran unas marcas de golpes en diferentes


partes de su cuerpo. Al preguntarle la razón, me contó
que su esposo era una persona iracunda y que la
maltrataba muy a menudo. También me contó la
razón que la llevó a casarse con él.
Rosita me dijo que provenía de un hogar humilde y
con muchas carencias, y que este hombre, su esposo,
pasaba por su casa llevándole regalos hasta que un día
la invitó a pasear en su camión. Ella accedió y, al final,
no solo la llevó de paseo, sino que la raptó y la trajo
hasta la capital. Como resultado, se resignó a ser su
mujer y así fue que se casaron.
Con lágrimas en los ojos me dijo que no amaba a ese
ogro y que, al conocerme, había descubierto lo que era
el amor y que ya no soportaba más estar con él. Me
contó, además, que su esposo se emborrachaba, se ponía
violento y peleaba con ella. Incluso, la había
amenazado con matarla si lo dejaba; y no solo a ella,
sino también a la persona con la que lo traicionara.
Mientras hablaba, sus sollozos eran cada vez más
incontrolables. Como yo no sabía qué hacer, me sentí
desesperado e impotente.
Sin embargo, poco a poco se fue calmando, y entre
suspiros y lágrimas, terminó por decirme que teníamos
que pensar en un plan para “acabar con todo esto”, pues
él jamás nos dejaría ser felices. Me di cuenta de lo que
me quería decir, pues aunque no me lo decía
abiertamente, me insinuaba que el camino que nos
quedaba era eliminar al marido.
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 69

A pesar de mi constitución atlética, al lado de ese


hombre yo parecía un debilucho. ¡Así que no sabía qué
hacer! La verdad era que me había vuelto un muñeco
en los brazos de Rosita... y por eso empecé a temer
convertirme en un asesino.
Una noche, a la hora de comida, mi padre me preguntó
si yo sabía cuál de los chicos del barrio estaba viendo a
doña Rosita. El bocado se me atragantó y apenas pude
contestarle que no tenía idea. Luego, le pedí que me
dijera la razón de su pregunta.
Mi padre me comentó que estando en el bar, se había
encontrado con el esposo de Rosita, quien estaba muy
tomado como siempre, y le dijo a mi papá que se había
enterado que un chico del barrio entraba a su casa
cuando él estaba de viaje. Entre otras cosas, mi padre
de manera muy sutil y sabia me explicó que aunque él
sabía que ese matrimonio no iba bien, también era
cierto que algunas mujeres usan a los jóvenes
inexpertos para que hagan lo que ellas no se atreverían
a hacer. Además, me pidió que si conocía al muchacho
en cuestión, le advirtiera que el marido era muy
violento, y que si encontraba algo extraño, no dudaría
en matarlo.
Las sabias palabras de mi padre no dejaron de resonar
en mis oídos: “Usan a los jóvenes inexpertos para que
hagan lo que ellas no se atreverían a hacer”. Rosita me
había insinuado con bastante claridad que lo único que
quedaba era eliminar a su esposo.
En ese momento, me di cuenta que me había metido en
un tremendo lío...
70 • CARY PALMÓN

Aunque ya he dejado de frecuentarla, Rosita me sigue


buscando. Yo huyo de ella. Sé que el esposo está
vigilante. He tratado de salir con otras chicas, pero no
la puedo olvidar. Sigo pensando en ella. Sin embargo,
también sé que si la vuelvo a ver, ese sentimiento
desordenado puede llevarme a cometer un terrible
error... Señora Cary, ¿qué debo hacer?
Mi respuesta para Bernardo no demoró... he aquí
lo que le dije:
Apreciado Bernardo:
Tu historia me recuerda mucho a la de Sansón y
Dalila. Sansón era el hombre más fuerte que existió en
su época, pero su gran debilidad fue Dalila. Ella era
ambiciosa y formaba parte del pueblo enemigo. En
verdad, no lo amaba y lo vendió a sus enemigos,
quienes lo emboscaron, lo ataron, le sacaron los ojos y
lo convirtieron en una bestia de trabajo. Incluso, un día
lo sacaron para exhibirlo como trofeo y divertirse. Los
enemigos de Sansón estaban eufóricos por su logro. No
obstante, con una fuerza sobrenatural, Sansón empujó
las columnas donde descansaba la casa donde estaban
todos reunidos y destruyó el lugar, matando a sus
enemigos, pero perdiendo su vida al mismo tiempo.
Sansón era joven y murió a causa de su debilidad por
Dalila.
En cuanto a Rosita, lo lamentable es que se trata de
una mala persona que no tiene reparos en pedirte que
elimines a su esposo. ¡No te ama! Solo te quiere utilizar.
¿Cómo puedes sentir amor hacia ella? Lo que te ocurre
es que el enemigo te está tentando para que caigas en
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 71

su trampa y así destruir tu vida. ¡Ten cuidado, corre,


huye!
Creo que Dios, en su infinita misericordia, puso a tu
padre en medio de esta situación para salvar tu vida.
¡Nadie sabe lo que hubiera ocurrido si este hombre los
encuentra juntos en su casa!
Es muy interesante saber que la Biblia nos enseña que
cuando nos tientan en el aspecto sexual, la instrucción
que se nos da es la de huir, no es hacernos los valientes
enfrentándonos a la situación... ¡No! La Biblia es muy
clara al decirnos que debemos de huir. Esto no es un
acto de cobardía. En cambio, se require de mucho valor
para darle las espaldas a la tentación y caminar en
sentido contrario.
Todos tenemos un enemigo: el diablo. Su propósito es
matar, hurtar y destruir. Para eso usa la tentación del
mismo modo que nosotros usamos una carnada para
pescar...
¡El diablo hasta intentó tentar a Jesucristo! Y si trató de
tentarlo a Él, es de esperarse que trate de tentarte a ti
también. Entonces, ¿qué es lo que debemos hacer cuando
llega la tentación?
A través del ejemplo de Jesucristo, la Biblia nos enseña
muy bien lo que debemos hacer. Él enfrentó las
tentaciones usando la Palabra de Dios. Al enfrentar
una tentación, lo primero que debes hacer es averiguar
con exactitud lo que Dios dice acerca de la misma y
aplicar su Palabra a tus circunstancias.
72 • CARY PALMÓN

Te daré un ejemplo. Si la tentación es de robar, tú


declaras: “¡No robaré!”. No solo debes hacer la
declaración en forma verbal, sino que también debes
tomar la decisión en tu fuero interno de que no robarás
y, a partir de ese momento, te atendrás a dicha
decisión.
Decláralo con firmeza para que el diablo sepa que tú
conoces lo que está mal y que no vas a violar la Palabra
de Dios. Al igual que el diablo huyó de Jesús, de la
misma manera huirá de ti. Al final, cesará la
tentación.
El enemigo no quiere que sepas que toda acción, ya sea
buena o mala, traerá una consecuencia. Por ejemplo,
después que la persona alcohólica se pase toda una vida
bebiendo, comenzará a tener serios problemas de salud.
Esto puede llegar al extreme de terminar con una
enfermedad mortal como consecuencia de actuar en
contra de lo que establece la Palabra de Dios con
relación a cuidar nuestros cuerpos y a no participar en
nada que los destruya. Tienes que saber que el
propósito de la tentación es hacerte caer con el fin de
destruir tu vida.
La Palabra de Dios tiene gran poder. Por lo tanto, si
decides someterte a ella y aplicarla en tu vida personal,
triunfarás sobre la tentación. Cuando Jesucristo fue
tentado, no trató de dialogar con el enemigo, sino que
le dijo con exactitud que no tenía lugar en su vida.
Entonces, utilizó la Palabra de Dios a fin de de
terminar con la tentación.
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 73

No te sientas mal. Te están tentando y todos pasamos


por situaciones semejantes. Así que ejercita la sabiduría
y utiliza la Palabra de Dios para escapar del lazo
destructor. Dios está de tu lado para ayudarte.
Haz lo mismo que Jesús y utiliza la Palabra de Dios
para derrotar esta tentación declarando lo que Dios
dice: “¡No cometeré adulterio!”.
74 • CARY PALMÓN

Dios dice...
El adulterio es el acto sexual de una persona
casada con otra, ya sea que esta sea casada también o
no. Sin embargo, Jesucristo nos enseña en Mateo
5:27-30 que con solo mirar a una mujer para
codiciarla, ya se considera adulterio en el corazón.

No cometerás adulterio. Éxodo 20:14

David fue tentado cuando vio a Betsabé


bañándose y se despertó en él la lascivia. Entonces,
en vez de huir de la tentación, se entregó a ella y
cometió adulterio.

Y sucedió un día, al caer la tarde, que se levantó


David de su lecho y se paseaba sobre el terrado de la
casa real; y vio desde el terrado a una mujer que se
estaba bañando, la cual era muy hermosa. Envió
David a preguntar por aquella mujer, y le dijeron:
Aquella es Betsabé hija de Eliam, mujer de Urías
heteo. 2 Samuel 11:2-3

La mejor forma de superar este tipo de tentación


es huyendo de la persona y separándose físicamente
de su derredor y de cualquier tipo de contacto con la
misma.

Huye también de las pasiones juveniles, y sigue la


justicia, la fe, el amor y la paz, con los que de
corazón limpio invocan al Señor. 2 Timoteo 2:22
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 75

El rey David cometió adulterio y Dios lo perdonó.


Él describe el alivio y el gozo que recibió cuando
confesó su pecado y recibió el perdón de Dios. De
esta misma manera, Dios perdonará a todo el que se
arrepienta de su maldad. (Lee el Salmo 51:1-17).

Bienaventurado aquel cuya transgression ha sido


perdonada, y cubierto su pecado. Bienaventurado el
hombre a quien Jehová no culpa de iniquidad, y en
cuyo espíritu no hay engaño. Salmo 32:1-2

La Biblia narra el caso de una mujer que fue


sorprendida en el pleno acto del adulterio. Según la
ley de Moisés, a esta la debían apedrear. A pesar de
eso, Jesucristo le demostró su perdón y que no hay
condenación para los que están arrepentidos de
verdad, no sin antes exhortarla a que no volviera a
cometer tal acción.

Enderezándose Jesús, y no viendo a nadie sino a la


mujer, le dijo: Mujer, ¿dónde están los que te
acusaban? ¿Ninguno te condenó? Ella dijo: Ninguno,
Señor. Entonces Jesús le dijo: Ni yo te condeno; vete,
y no peques más. Juan 8:10-11
CAPÍTULO 7

Raúl
Mi único hijo... mi
consentido

E ra fin de semana, y sobre mi escritorio estaba


la montaña de papeles que se había acumulado
por largo tiempo y necesitaba que la archivara
como era debido. Así que, con ánimos encontrados,
entre querer hacerlo o posponerlo, opté por lo
primero.
En cuanto levanté unas cuantas hojas, descubrí la
foto de mi padre que, por alguna razón, la había
dejado allí. La elevé frente a mí y casi de inmediato
me invadió una profunda nostalgia. De pronto,
muchos pensamientos vinieron a mi mente, en
especial las palabras que solía decirme cuando apenas
yo tenía cinco o seis años de edad. Él me decía: “Esta

77
78 • CARY PALMÓN

es mi hija, Cary, en la cual tengo puestas todas mis


esperanzas”. Recordé que cuando me decía esto, yo
sonreía ilusionada aceptando sud eclaración y, en la
inocencia de mi niñez, estaba segura de que sería tal
como lo decía.
A medida que iba creciendo y le escuchaba
decirme las mismas palabras, ya no sonreía igual
porque pensaba: ¿Cuáles serán estas esperanzas? ¿Las
podré llevar a cabo?
Lo lamentable fue que mi padre murió cuando yo
solo tenía quince años de edad y me quedé con el
gran interrogante de saber cuáles eran esas
esperanzas que tenía puestas en mí.
A pesar de que han pasado tantos años desde su
muerte, siempre lo recuerdo y entre esos recuerdos,
tengo un lugar especial en mi corazón para aquella
declaración que siempre solía expresar.
Guardé la foto donde debía y comencé a revisar
las últimas cartas del día. Así que, a pesar de que era
fin de semana, empecé a trabajar en las respuestas a
los correos electrónicos que me llegan, dado que el
dolor de las personas no tiene horario de oficina. Por
el contrario, se presenta cada vez que puede. La
trágica historia de Raúl me rasgó el corazón por el
dolor que transmitían sus palabras. Un dolor que,
como él decía, le hacía sentir que estaba viviendo en
el mismo purgatorio de Dante.
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 79

Su carta era clara y contundente. Decía:


Mi apreciada señora Cary:
Espero que cuando reciba mi carta se encuentre
gozando de buena salud y en compañía de su familia.
Permítame distraerla un poco de sus valiosas
ocupaciones para contarle mi situación, esperando que
tal vez me pueda ayudar, no solo a mí, sino también a
mi esposa.
Tengo veintitrés años de casado y mi único hijo,
Daniel, tenía diecinueve años cuando empezó nuestro
tormento. A Daniel, como hijo único, lo consentíamos
en todo. Y no solo lo consentíamos, sino que mi esposa
y yo nos disputábamos su atención. Nos esforzamos
para que estudiara en los mejores colegios. Luego,
cuando estuvo listo para entrar en la universidad, mi
esposa me dijo que Daniel le había pedido tomar un
año de descanso antes de comenzar los estudios
superiores.
¡Me opuse de manera rotunda a esa decisión y protesté!
Así que le dije que debía estudiar porque no deseaba
que estuviera un año sin hacer nada. Sin embargo, mi
protesta fue en vano, pues mi esposa y él ya se habían
puesto de acuerdo en que permaneciera un año sin
estudiar.
Durante ese tiempo, comencé a observar que mi hijo
consentido andaba con otros muchachos hasta muy
tarde en las noches. Sospechaba que se iban de
parranda. Mi esposa me insistía que eran solo ideas
mías porque Daniel era buen chico y que yo era
80 • CARY PALMÓN

demasiado estricto. Mis últimas palabras sobre este


asunto se las dirigí a mi esposa. Le dije: “Si el chico se
desvía del buen camino, la responsabilidad será tuya”.
Como le decía, de una manera inexplicable o quizá por
intuición de padre, supe que había un problema con
Daniel, que le habíamos dado mucha libertad. Con el
paso del tiempo, ya había perdido toda autoridad en el
hogar, pues él hacía lo que quería y regresaba a la hora
que se le antojaba. Lo que más pena me daba era que su
madre lo apoyaba en todo. Incluso, le daba dinero para
que se divirtiera. En resumen, un desastre total.
Una tarde recibí una llamada del hospital. Me
informaron que a mi hijo lo habían ingresado y que
necesitaban mi presencia con urgencia. Maya, mi
esposa, y yo fuimos deprisa para saber lo que había
sucedido y los médicos nos explicaron que nuestro hijo
estaba grave debido a una sobredosis de drogas. Nos
explicaron que, por sus síntomas, el muchacho ya venía
drogándose desde hacía mucho tiempo, y que si se
salvaba de esta situación podría quedar en estado
vegetativo. Se me cayó el mundo. No sabía qué hacer...
solo cuidarlo.
Y así comenzamos nuestra vigilia en el hospital. No
nos separábamos de su lado. Yo quería llevarlo a otro
hospital, tal vez hasta fuera del país, a fin de que lo
trataran los mejores médicos. No obstante, los medicos
que lo estaban atendiendo insistían en que no se le
podía trasladar porque su cerebro estaba muy dañado
y que, de hacerlo, existía la posibilidad que tuviera un
paro respiratorio y falleciera.
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 81

Pasaron los días y las noches. Mi esposa y yo


seguíamos en vela, cuidándolo, atentos a su
respiración, pero lo triste es que una de esas noches
nuestro hijo falleció. Pienso que tal vez fuera lo mejor
porque, como ya le expliqué, los médicos opinaban que
si sobrevivía quedaría en estado vegetativo.
Después del entierro, empezó el martirio. Ni Maya ni
yo podíamos mirarnos a la cara. Las noches eran
largas, no teníamos deseos de hablar, ni siquiera de
pelear... estábamos destruidos.
Al cabo de un tiempo, Maya me confesó que se sentía
muy culpable de la muerte de nuestro hijo porque
desde pequeño sentía celos por mí debido a mi relación
con él. Daniel y yo pasábamos buenos tiempos
estudiando o jugando a la pelota, y ella sentía que no
tenía cabida entre nosotros. En su egoísmo, y “para
atraerlo” a ella, quiso complacerlo en todo y así
ganarse su amor y su atención.
Maya me dijo que sentía tanto cargo de conciencia que
necesitaba irse de la casa. Me dijo que se debía al dolor
de haber perdido a nuestro hijo y al sentimiento de
culpa que llevaba. Traté de disuadirla de ese empeño,
pero no hubo forma... se fue.
Ahora me he quedado solo, sin mi hijo y sin mi esposa.
Maya se encuentra en un terrible estado depresivo y yo
voy por el mismo camino. No sé qué hacer, por eso le
escribo esta carta, a fin de que me ilumine y me ayude
a rescatar lo único que me queda en el mundo: Mi
esposa. Incluso, temo por su vida.
82 • CARY PALMÓN

Gracias por su atención, esperaré con ansias su


respuesta.
Una vez más le pedí a Dios sabiduría y compasión
para responderle, pensando en el dolor de su alma al
perder su hijo único. Esta fue mi respuesta:
Querido Raúl:
¡Cuánto lamento la pérdida de tu hijo! ¡Estaré
pidiéndole a Dios que les dé a ti y tu esposa el Consuelo
que solo Él puede ofrecer!
En cuanto a lo que me cuentas sobre tu esposa, Maya,
es comprensible que se sienta destruida por completo
debido a los sentimientos de culpabilidad que la
agobian. Sin embargo, los momentos de dolor que estás
atravesando son una buena oportunidad para acercarte
a Dios y pedirle su perdón. Él nos perdona por todos
nuestros errores, sin importar lo grandes o lo pequeños
que sean.
Por lo que dices, puedo apreciar que tú también te
sientes culpable por la muerte de tu hijo. De modo
que,al igual que tu esposa, también necesitas
perdonarte por lo sucedido. Si no te perdonas, vas a
comenzar a desarrollar un odio contra ti mismo que
sería suficiente para destruirte y encadenarte en un
abismo de amargura. ¡Dios quiere cambiar tu vida y la
de tu esposa si tú se lo permites!
Permíteme contarte algo personal que oscureció mi
vida por largos años. Un dolor indescriptible que me
acompañaba a cualquier parte que iba. Algo que Dios,
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 83

en solo un segundo, lo transformó cuando entendí


cómo hacerlo.
Lo que sucedió fue algo indescriptible. Un evento que
parecía sacado de una saga de terror. El hecho fue que
una persona, amiga de la familia, de una forma
sangrienta, desleal e inexplicable, fue responsible del
asesinato de mi padre. Así que yo... no lo podia
perdonar. ¡Este hecho me esclavizó!
Desde aquel lamentable incidente, los años
transcurrían sin que pudiera borrar de mi mente y de
mi corazón los terribles recuerdos que me
aprisionaban. Al contrario, me acostumbré a vivir con
un odio y un dolor que hicieron de mi vida un
desastre. Las cosas llegaron a tal extremo que mi
matrimonio terminó en el divorcio que me dejó con
una nueva dosis de dolor al tener que criar sola por
completo a mis hijos pequeños.
Sin embargo, un día conocí a una señora que me invitó
a una reunión. Allí en esa reunión encontré algo que
hizo que cambiara mi vida. En este lugar, sentí por
primera vez la presencia de Dios que hablaba a mi
corazón diciéndome que yo no lo amaba. Sabía que era
cierto, pero nunca le había prestado importancia a esto
hasta ese momento en que de pronto mis ojos se
enfocaron en las páginas abiertas de una Biblia donde
pude leer unas palabras que impactaron mi corazón.
Aquel texto decía: “Acéptame como tu Salvador y Rey,
y tú y tu casa serán salvos”. Ese día decidí entregarle
mi corazón a Jesucristo y supe que mi vida sería
84 • CARY PALMÓN

diferente porque Él me amaba, me perdonaba y me


protegería.
Según pasaban los días, había una parte de mi corazón
que todavía me dolía. Era la parte donde se albergaba
ese terrible odio contra el hombre causante de la
muerte de mi padre, la única parte de mi ser que no le
había entregado a Dios. El dolor era muy grande, pero
mayor aun es Dios que me ayudó a perdonar a ese
hombre y a todos los que me habían herido. Fue en
cuestión de un segundo que todo el dolor pasó a la
historia.
El tiempo ha transcurrido y ahora veo a muchas
personas que sienten que ya no pueden más, como es tu
caso. Así que déjame decirte lo siguiente: Jesucristo hizo
un cambio en mi vida y lo quiere hacer también en la
tuya. Entrégale tu corazón y todo tu dolor a su
voluntad. Deja que Él te perdone y te libere. Él está de
tu lado para salvarte y rescatarte, pero no puede
hacerlo si tú no lo consientes.
Mi oración es que Dios te ayude a perdonarte y a
restaurar tu vida con Él. Aunque te parezca increíble,
en estos momentos Dios va a socorrerlos a ti y a tu
esposa para que puedan recibir el consuelo y la
restauración que solo Él puede ofrecer. Espera que Dios
haga un milagro en tu vida... ¡y recíbelo con fe.
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 85

Dios dice...
El perdón es la clave esencial para vivir una vida
victoriosa. No solo debemos perdonar a los que nos
han herido, sino también necesitamos perdonarnos a
nosotros mismos de todos los errors que hemos
cometido en nuestra vida.

Antes sed benignos unos con otros, misericordiosos,


perdonándoos unos a otros, como Dios también os
perdonó a vosotros en Cristo. Efesios 4:32

Para todos los que han perdido un ser querido,


tenemos la gran esperanza de reunirnos con ellos en
un futuro.

Tampoco queremos, hermanos, que ignoréis acerca


de los que duermen, para que no os entristezcáis
como los otros que no tienen esperanza. Porque si
creemos que Jesús murió y resucitó, así también
traerá Dios con Jesús a los que durmieron en él. 1
Tesalonicenses 4:13-14

Solo el Espíritu Santo puede consolar nuestros


corazones de sufrimientos tales como la pérdida de
un ser querido. Este es uno de los nombres que
describe su función: el Consolador. Y si aceptamos
su ayuda, Él nos restaurará.

Él sana a los quebrantados de corazón, y venda sus


heridas. Salmo 147:3
CAPÍTULO 8

Romina
Fue por lana y salió
trasquilada

S e trata de una de las noches más largas que


recuerdo. Mi hija, Patricia, y yo íbamos
conduciendo toda la noche para llegar por fin
al hospital donde Liza, mi hija mayor, estaba en
plena labor de parto para traer al mundo a su
segundo hijo.
Patricia y yo estábamos extenuadas, pues la fuerte
tormenta de nieve de mediados de febrero que había
batido todos los récords de intensidad de los últimos
cinco años nos tenía preocupadas.
Conducir en esas circunstancias hizo que mi
adrenalina se mantuviera al tope, pues requería de

87
88 • CARY PALMÓN

una extrema y aguda concentración para conducir el


vehículo sin percances. A pesar de lo difícil del clima,
nos animábamos la una a la otra con la ilusión de ver
a este bebé que ya imaginábamos y amábamos
intensamente aun antes de nacer.
Traté de entretener a Patricia con el propósito de
minimizer el efecto de la tensión y pensé que sería
bueno aprovechar el trayecto para contarle mis
vivencias acerca de su nacimiento. Le conté de la
felicidad tan enorme que es ser madre. Le hablé de la
alegría que es tener una nueva vida en los brazos y el
amor espontáneo y grande que nace por una
criaturita tan especial que es un regalo de Dios.
El entretenimiento dio resultados y, sin darnos
cuenta, habíamos llegado al hospital. Aunque
tuvimos que esperar por horas el alumbramiento,
horas que se nos hicieron interminables, de pronto
pudimos escuchar el llanto del bebé anunciando su
llegada al mundo. Después de un poco más de
tiempo de espera, el médico nos dijo que podíamos
pasar a ver a Liza y su bebé.
La emoción de ver a mi nuevo nieto fue
indescriptible. Saber que mi propia vida se extendía
en esa vida. Entonces, en ese instante, una imagen
vino a mi mente. No pude detenerla. Se trataba de
Romina, una televidente de mi programa “Minuto
Final” que, en su carta, me contaba que también fue a
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 89

ser madre. Sin embargo, lo lamentable fue que hubo


las alegrías que vivíamos nosotras, sino que, por el
contrario, el desenlace de su embarazo se convirtió
en una trágica circunstancia de su vida. Romina me
escribió como sigue:
Sra. Cary:
Soy una más de sus tantas admiradoras, pues nunca
me pierdo sus programas. Mi nombre es Romina y
tengo veinticuatro años.
Mi infancia y parte de mi juventud las viví en un
barrio muy pobre. Siempre estuve deseando tener las
cosas que toda niña, y después una adolescente, anhela
poseer. En cambio, eso fue algo que nunca pudo
suceder, pues yo carecía de todo y parecía no poder
nunca escapar de ese círculo de pobreza.
Cierto día, me encontré con María, una de mis mejores
amigas del barrio. Para mi sorpresa, ella estaba vestida
de manera elegante, con zapatos y cartera muy a la
moda. Su corte de cabello y el cuidado de sus manos
hacían notar que frecuentaba algún salón de belleza
para verse regia. En fin, su transformación era total.
Bromeé con ella preguntándole si se había sacado la
lotería. Ante esta insinuación, ella me respondió que no
y me invitó a cenar. Pasamos juntas un lindo rato
riéndonos de cada recuerdo y muy contentas de volver
a vernos.
Durante la cena, María me habló de Elvira, una amiga
en común con la que crecimos juntas en el barrio y que
era tan pobre como nosotras. Me contó que ella había
90 • CARY PALMÓN

conocido a un famoso jugador de fútbol y que, por


amor, él le había regalado una hermosa casa en un
barrio de clase alta. Además, me dijo que por medio de
ella, también había conocido a un compañero de su
equipo que se había prendado de ella y que ahora la
tenía como una princesa. Incluso, le compraba todo y la
consentía mucho.
En medio de la larga conversación, y al notar que yo
no podía salir de la situación de pobreza en la que
vivía, María me convenció para presentarme a un
futbolista. Se trataba de un amigo de ellos que siempre
asistía solo a sus reuniones porque no tenía pareja (o
quizá porque no era apuesto para nada). Me prometió
organizar una salida con él para presentármelo.
También me prometió que ella misma se iba a
encargar de mi arreglo personal para ese día y que iba
a lucir impresionante para que este muchacho se fijara
en mí. Entonces, me dijo que tenía que ser muy coqueta
con él para atraerlo y que ese hombre podía ser mi
futuro.
Sin embargo, allí no acababan sus planes. María llegó
más lejos y pensó en toda una estrategia para
enamorarlo y convertirme en su pareja. De esa
manera, saldría embarazada y lo comprometería de tal
forma que, si no salían bien las cosas con él y yo
tampoco conseguía enamorarme, podría separarme y
quedar asegurada con una muy buena cantidad de
dinero para mí y para el bebé.
Me reí de las locuras de mi amiga imaginando esa
posibilidad. María, en cambio, estaba decidida de
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 91

verdad e hicimos todo lo planeado para que yo lo


conociera. Cuando me lo presentaron, comprendí por
qué estaba soltero, puesto que a nadie le resultaría fácil
enamorarse de una persona como esa. El hombre no
era agraciado para nada. Por el contrario, hasta me
pareció desagradable. Aun así, tenía dinero y eso era lo
único que me importaba: Imitar a mis amigas y tener
la oportunidad de salir para siempre de la pobreza.
Siguiendo las instrucciones de María, y a pesar que no
fue tan fácil, al final conquisté a Genaro que terminó
pidiéndome que me fuera a vivir con él. Al poco
tiempo, quedé embarazada.
El día que se lo dije fue terrible, pues al final se
manifestó el hecho de que no lo conocía en realidad. En
cuanto se lo dije, se molestó mucho y me insultó de
manera espantosa. María y yo no habíamos pensado
en la reacción tan brutal que él tendría ni el modo en
que me pidió que abortara. Aparte de insultarme y
reírse de mí a carcajadas cuando le sugerí que nos
casáramos, me dijo que de ninguna manera se casaría
porque se lo impedía el contrato con el club europeo con
el que había firmado. Así que de la manera más brutal
me preguntó cuánto quería por hacerme un aborto. Me
trató peor que a una prostituta.
Fue humillante que me trataran como a una
cualquiera. Sin embargo, en lo único que yo pensaba
era en mis sueños de una vida mejor. Por lo tanto, le
pedí una importante suma de dólares para asegurar mi
futuro. A los pocos días, busqué una clínica donde
hacían este tipo de procedimientos y aborté, tal y como
92 • CARY PALMÓN

habíamos quedado. Una semana más tarde fui a


buscarlo para ver cómo concretábamos nuestro trato,
pero el hombre se había esfumado. Se había ido de viaje
y no recibí de él ni un centavo. ¡Fui por lana y salí
trasquilada!
Me encontraba en estado de choque cuando sucedió
todo esto. No podía pensar en nada, sino en la rabia y
la frustración que sentía por sentirme burlada. No
obstante, cuando reaccioné por fin, tuve que afrontar el
hecho de que además de todo lo que me dijo Genaro, en
realidad era una asesina que mató a su propio hijo por
dinero.
Me sentí asqueada de mí misma. Me había portado
como una prostituta y, encima de eso, no solo era una
asesina ante la sociedad, sino que también lo era
delante de Dios. En ese momento, lloré de rabia al
recordar los planes que hice con mi amiga, pensando
que éramos muy inteligentes, cuando en realidad todo
terminó peor que en una mala telenovela. Para colmo
de males, subestimamos a Genaro, que no era ningún
tonto, y no tenía escrúpulos para deshacerse de lo que
le impidiera cumplir sus sueños.
Señora Cary, ahora tengo un gran remordimiento que
no me deja vivir tranquila, me siento sucia y
miserable. Tengo secuelas en mi salud emocional y
también en mi salud física por el aborto. Ni siquiera sé
si podré llegar a ser madre alguna vez por las
consecuencias. Creo que mi vida se ha truncado más de
lo que ya estaba y no me puedo perdonar por lo que
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 93

hice. Aunque pienso que no tengo el perdón de Dios, le


pido por favor que me ayude.
Entristecida por semejante historia, le respondí
así:
Querida Romina:
Me ha conmovido el dolor que se aprecia en tu carta.
La ambición por salir de la pobreza te llevó a extremos
impensables y terminaste, según tus propias palabras,
como asesina de tu propio hijo.
Ahora, luchas con sentimientos tan terribles como la
culpabilidad, el arrepentimiento y, además, el dolor de
saber que ese hombre te utilizó también.
Lo triste es que, el problema del aborto, trae
implicaciones que casi siempre permanecen durante
toda la vida. He conocido mujeres que aún pasados
cuarenta años de haber abortado, no se han podido
perdonar por lo que hicieron. Después de haber
cometido un crimen, la voz de la conciencia no cesa de
acusar. En muchos casos, al aborto les siguen la
depresión y la apatía por la vida. Después de todos
estos síntomas que hacen su vida desdichada, las
mujeres empiezan a tornarse irritables y terminan
presentando trastornos de personalidad. Todo esto sin
mencionar los daños físicos que este lamentable acto
también ocasiona muchas veces.
El aborto parece ser la solución de un problema, pero la
verdad es que después de consumada esta acción,
aparecen muchos problemas más que son aun peores.
Abortar, por cualquiera que sea el motivo, es cortar
94 • CARY PALMÓN

una vida que ya se encuentra en proceso, porque la


vida humana no empieza en el momento del parto,
sino en el de la concepción.
Es lamentable que haya personas y Corrientes
ideológicas que no consideren al feto como un ser que
ya tiene vida. Sin embargo, la Biblia nos enseña que
desde que somos engendrados en el vientre de nuestra
madre, ya Dios nos conoce y Él tiene planes para
nosotros.
La vida humana es de gran valor delante de Dios. Lo
que hiciste está mal. No es necesario seguir repitiéndolo
porque ya lo sabes. Tu corazón te condena y no puedes
liberarte de ese terrible dolor. Sé que al igual que tú
hay muchas mujeres que se encuentran en tu misma
situación. Se realizaron un aborto y ahora sufren por
ese ser al que nunca podrán escuchar decirles “mamá”,
y al que nunca podrán conocer. De modo que se pasan
años de su vida imaginando cómo sería si viviera, o si
habría sido niño o niña. Lo peor de todo es cuando el
aborto trae como consecuencia daños irreversibles para
la mujer que ya sabe que no podrá tener más hijos
siquiera.
La buena noticia es que Dios sí desea perdonarte por
esa acción. Este es el momento. El pecado te ha
separado de Dios, pero en este mismo instante puedes
implorarle su perdón y pedirle otra oportunidad. Él te
ama y su deseo es perdonarte y ayudarte.
Esta es la verdadera razón por la que Él envió a su
Hijo, a fin de pagar por tus pecados y que recibas el
perdón por completo. Acepta este regalo gratuito que te
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 95

ofrece Dios. No esperes a ser una persona perfecta para


acercarte a Él, pues ese día jamás llegará. Lo único que
necesitas es decirle de corazón: “Señor, creo que
enviaste a tu Hijo Jesús a morir por mí. Yo recibo el
perdón por mis pecados. Entra ahora en mi corazón y
dame otra oportunidad... ¡Ayúdame!”.
Si haces esta oración, te aseguro que Dios te perdona.
Él dice en su Palabra que todo el que le pida perdón
será perdonado. Además, tendrás la esperanza de
algún día ver a tu bebé en el cielo. También tienes que
practicar tu fe en Dios, saber que Él ya te ha
perdonado y extenderte a ti misma ese perdón. En el
momento que te arrepientes de tus pecados y aceptas a
Jesucristo como tu Salvador, Dios borra ese pecado de
tu vida. Ahora bien, después te toca a ti borrarlo de tu
corazón y de tu mente de una vez y para siempre.
Estarás en mis oraciones para que recibas el perdón
que solo Dios puede ofrecer a través de ese acto de fe en
Él. Como resultado, tu corazón se llenará de la paz que
Él desea que tengas hoy.
96 • CARY PALMÓN

Dios dice...
Cuando Dios nos entregó los Diez
Mandamientos, nos dijo: “No matarás”. Sin embargo,
en el momento que se practica el aborto, este
constituye el asesinato contra la criatura que aún no
ha nacido.

No matarás. Éxodo 20:13

Una y otra vez Dios revela que el feto es una


persona, la cual Él conoce y para la que tiene un
propósito y un plan. (Lee Deuteronomio 30:13, 16).

Antes que te formase en el vientre te conocí, y antes


que nacieses te santifiqué, te di por profeta a las
naciones Jeremías 1:5

Dios desea perdonar a toda persona que viene a Él


con un corazón arrepentido por sus actos.

El que encubre sus pecados no prosperará; mas el que


los confiesa y se aparta alcanzará misericordia.
Proverbios 28:13
CAPÍTULO 9

Analía
Una mujer de medio
tiempo

E ran como las ocho de la noche, y después de


un día agotador, parecía que por fin iba poder
tener un tiempo para descansar. Luego,
mientras me servía abundante hielo para acompañar
mi refresco de frutas preferido, me senté a ver la
televisión, con la expectativa de poder disfrutar de
algún programa entretenido del horario estelar. Así
que, poniéndome muy cómoda, tome el control
remoto y comencé la búsqueda de alguna comedia,
una película interesante o algo propio para la familia.
Pasados unos minutos, terminé apagando el
televisor, pues no pude encontrar nada que pudiera
satisfacer mis intereses. En cambio, lo que me llamó

97
98 • CARY PALMÓN

la atención fue la cantidad de anuncios publicitarios


que “bombardearon” mis ojos con intenciones de
venderme algún producto o servicio para que uno se
“sintiera mejor”.
No puedo dejar de pensar en lo bien hechos que
están esos anuncios, pues uno casi termina
convencido de que “necesita” un auto nuevo o tal o
más cual zapato, chaqueta, etc. Ni hablar de los
perfumes y los desodorantes que prácticamente
“garantizan “una relación sexual a “primera vista” a
quien los utilice, ya sea hombre o mujer. Me di
cuenta en ese momento del ataque permanente
contra nuestros sentidos, tratando de que estos
encuentren su complacencia a cualquier precio.
En fin, mientras me alejaba del televisor rumbo a
mi escritorio, vino como un rayo a mi mente la
historia de Analía, una pobre muchacha que,
creyéndolo todo, terminó como una esposa de medio
tiempo.
Sentada ya frente a mi computadora, busqué su
correo electrónico, pues ya sabía lo que le tenía que
contestar a su carta en la que me narraba sobre su
vida que, según ella, no tenía esperanza, sino una
profunda vergüenza debido al secreto que guardaba...
Al releerla, encontré que sus palabras estaban
llenas de dolor y de desasosiego. Además, reflejaban
a una mujer con una autoestima muy baja y sin
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 99

esperanzas de cambio, dejando entrever que era una


persona que no podía soportarse más a sí misma.
Esta es su historia que tanto me conmovió:
Querida Cary:
Me he permitido escribirle estas líneas para contarle
mi caso, que pienso que es mucho más común de lo que
uno puede imaginar en estos días.
Crecí en una familia de clase humilde, en la cual se
pensaba que el valor más importante que puede tener
una persona era el dinero. Esa era la forma en que me
crió mi madre: Crecer y buscar un hombre con
posibilidades económicas suficientes para mantenerme
y tener una buena posición económica, de modo que
pudiera cumplir con todos mis sueños. Mi madre me
enseñó como atrapar y casarme con un “Príncipe Azul”
y no hacer nada más para conseguir las cosas por mis
propios méritos y mi trabajo.
Debido a que me educaron con esta filosofía de vida,
casi nunca les hacía caso a los chicos comunes que se
me acercaban. Por el contrario, me burlaba de ellos si
no cumplían con los requisitos que yo exigía para
pensar siquiera en darles cabida en mi vida.
Al terminar mis estudios, conseguí empleo en un centro
comercial importante, donde conocí a Dionisio, un alto
ejecutivo que por su forma de vestir, las joyas que
llevaba y el automóvil que conducía, parecía tener
mucho dinero. Lo conocían por ser el dueño de la
compañía en la que trabajaba y, a la verdad, tenía todo
100 • CARY PALMÓN

el aspecto de un triunfador. Sumado a todo esto, era


muy buena persona y bastante guapo.
Al cabo de un tiempo, él comenzó a enamorarme y a
hacerme invitaciones. Era bastante mayor que yo, pero
me explicó que había permanecido soltero a la espera
de la mujer de sus sueños para poder cumplirle todas
sus ilusiones y caprichos a través del dinero que él
había logrado con su negocio.
No se puede imaginar la ilusión que sentí. ¡Era el
hombre que había soñado! Comenzamos a salir y, por
supuesto, empezaron los cortejos y los regalos caros.
Siempre se trataba de perfumes de marca o vestidos y
accesorios igualmente de diseñadores famosos.
Al cabo de unos meses, me propuso irme a vivir con él,
prometiéndome que nos casaríamos en cuanto
estuviésemos seguros de que éramos el uno para el otro.
Acepté su propuesta y me mudé a su apartamento.
Todo era color de rosa, pues él demostraba estar
profundamente enamorado de mí. También el
apartamento era de primera y con diseños muy
elegantes. Para mí era como haberme sacado el premio
mayor de una lotería y esperaba con ansias que me
pidiera en matrimonio.
Empezamos nuestra vida juntos, pero me sentía un
poco frustrada porque Dionisio viajaba mucho debido
a su trabajo. A decir verdad, esto no me extrañaba,
pues concluí que todo ejecutivo viaja con regularidad.
Para que no me aburriera ni perdiera el tiempo en su
ausencia, me propuso que empezara a estudiar una
carrera y que él pagaría todos mis gastos. ¡Me pareció
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 101

una excelente idea! Dionisio viajaba de viernes a lunes,


y aunque en el fondo ese asunto de que viajara solo los
fines de semana me parecía un poco extraño, traté de
restarle importancia, ya que él siempre explicaba que
era algo circunstancial y prometía que en el futuro no
tendría que viajar tanto. Todo iba a las mil maravillas,
hasta el día en que mi madre llegó a visitarme.
Al poco rato de estar conversando, mi madre no pudo
aguantarse más y empezó a hablarme acerca de la
verdadera razón de su visita. El asunto era que una
amiga suya le había contado que Dionisio era casado y
que la verdadera dueña de la empresa era su esposa,
quien estuvo de viaje durante un año, pero que había
regresado por fin.
En ese preciso momento, todo mi mundo se vino abajo.
¡No podía creer que él me hubiera engañado tanto! Sin
embargo, también tuve que aceptar que esa tenía que
ser la verdadera razón de sus viajes de fin de semana.
Se pasaba tres días conmigo y cuatro con su esposa. Por
fin mis ojos se habían abierto.
No me pude resistir y esa misma noche quise
enfrentarlo. Mis ilusiones se habían hecho añicos. En
realidad, estaba indignada y desesperada.
Hice un plan para que tuviera que confesar la verdad.
Entonces, cuando llegó a nuestro apartamento, le dije
que quería hacer una cena para invitar a nuestros
compañeros de oficina a nuestra casita. Él reaccionó
con sorpresa y se negó de manera rotunda diciéndome
que no tenía por costumbre socializar con los
compañeros de trabajo. Aproveché esa respuesta y, de
102 • CARY PALMÓN

inmediato, le dije que ya sabía cuál era el verdadero


motivo de su negativa. Le conté que ya sabía que era
casado y que la verdadera dueña de la empresa en la
que trabajaba era su esposa. Por mi rostro rodaban
lágrimas de rabia e impotencia al saber que me había
engañado.
Cuando escuché su respuesta, quedé más asombrada
aun. A pesar de todo, me dijo que no estaba enamorado
de su esposa y que, en efecto, era la verdadera dueña
de la empresa. Además, me dijo que casarse con ella lo
había ayudado a ascender en lo social y a disfrutar del
poder económico del que gozaba.
Entre sollozos me confesó que sentía que yo no lo
amaba de la misma manera en que él me amaba a mí
y me rogó que no lo dejara. Incluso, me pidió que
aceptara compartirlo con su esposa, pues solo sería por
un tiempo en el que yo podría terminar mi carrera.
Luego, dejaría a su esposa, pues no quería perderme
debido a que yo era muy importante en su vida.
Señora Cary, Dionisio me convenció. Así que desde ese
momento acepté ser su esposa a medio tiempo. Vivo con
muchas comodidades y, aparte de eso, sigo con mis
estudios. Cuando él llega, hago el papel de la esposa
perfecta, pero en el fondo soy consciente de que, en
realidad, me he convertido en “la otra”. Detesto esta
situación, aunque reconozco que la ambición fue lo que
me ha llevado a aceptar sus requerimientos. En el
fondo, sé que todo mi futuro y mis sueños quedaron
truncos, pues nunca podré tener hijos ni una familia
normal. Estoy condenada a ser “la otra” para siempre.
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 103

También sé que nunca llegará el día de su possible


separación.
Ayúdeme, por favor... ¿Qué debo hacer?
Al terminar de leer su relato solo deseaba que
Dios me diera las palabras adecuadas que podrían
cambiar el destino de Analía. Embargada por la
tristeza de la situación le respondí como sigue:
Querida Analía:
Dices que eres esposa a medio tiempo, pero no te
engañes: ¡Eres la amante, la otra! Permíteme hablarte
como una madre y describirte lo que tal vez te espere
en el futuro. Jamás te respetarán como la esposa y es
que ni siquiera logres tener hijos por el temor de
exponerlos a tu mismo sufrimiento y amargura.
Los años pasarán y esta se convertirá en una relación
de esclavitud. El pecado siempre esclaviza. No sabes
cuántas mujeres me cuentan historias parecidas a la
tuya, y lo peor es que después de años viviendo como la
otra, las han desechado como una cosa que ya no es
útil.
Muchas mujeres cometen el error al escoger un
compañero para sus vidas. Su veneración por el dinero
y la seguridad material llega a tal punto, que se
convierten en idólatras postradas ante ese ídolo. De
modo que arriesgan toda su vida por un hombre
adinerado. Sin darte cuenta, tu amor por el dinero está
por encima de todos los demás valores en tu vida.
104 • CARY PALMÓN

El deseo de tener comodidades no es malo, sino que lo


malo es permitir que esa codicia nos esclavice. La
codicia es la receta ideal para un terrible y permanente
conflicto con tu conciencia.
Supongo que el deseo de conseguir un hombre
adinerado tal vez se deba a la inseguridad y a la falta
de autoestima. Muchas mujeres crecen pensando que
no tienen valor y se sienten inferiores e insuficientes
para merecer amor. Así que sus propios temores y
deficiencias les impiden abrirle su corazón a alguien
que las quiera tal como son y que acepten sus virtudes
y sus defectos. Es más, se esconden tras una máscara
para no mostrar su verdadera personalidad.
Las instrucciones a fin de hallar a la persona ideal
para el matrimonio se encuentran escritas en la Biblia,
que es el manual que Dios nos dejó para regir nuestras
vidas. Dios nos indica con claridad que no debemos
buscar a personas que no tengan nuestra misma fe y
que no estén comprometidos con Cristo. Este es el
requisito primordial en la búsqueda de un esposo.
Por error, nosotros nos fijamos en el aspect económico
y en la atracción sexual. No obstante, el verdadero
secreto del éxito para que un matrimonio dure, sobre
todo en estos tiempos, es que ambos sean hijos de Dios.
Tener una relación personal con Cristo es el arma más
eficaz que hay para superar los problemas de la vida y
tener un matrimonio victorioso.
El camino que has escogido es inapropiado por
completo. Sin embargo, no eres la primera ni serás la
última persona que haya tomado una mala decisión.
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 105

Dios es un Dios de oportunidades, y si escogiste un


camino que no traerá bendiciones, Él te ofrece una
nueva oportunidad para cambiar tu destino.
Para hacerlo y recibir todas las bendiciones de Dios,
tienes que empezar por creer en Jesucristo, el Hijo de
Dios que murió por tus pecados. Pídele perdón por ellos
y acéptalo como tu Salvador. Ruégale que entre a tu
corazón y cambie tu ser. Él te está esperando, listo para
ofrecerte una nueva vida. Atrévete a creer en Él y no
quedarás defraudada.
Jesús te dice al corazón que dejes la esclavitud y recibas
la libertad que le ha costado tan caro conseguir para
nosotros: su sacrificio en la cruz. No desperdicies esta
oportunidad.
Haberme escrito esta carta refleja que deseas cambiar,
pero no sabes cómo. Tienes que empezar por terminar
tu relación, buscar un empleo para mantenerte y ser
libre. Busca una iglesia donde se enseñe la Palabra de
Dios y puedas conocer a personas que crean lo mismo
que tú. Consigue una Biblia y léela todos los días, para
que aprendas más de Dios y comprendas cuánto te
ama. Así desarrollarás una relación con Él, no
repitiendo palabras, sino hablándole como si hablaras
con tu padre. Dios te abrirá puertas para ese trabajo, a
fin de que dejes el pecado y recibas la libertad.
Prepárate para una nueva vida que incluirá tener tu
propia familia y un lindo futuro.
106 • CARY PALMÓN

Dios dice...
Muchos padecen de temor en cuanto a su
provisión diaria o a sus mejoras económicas. La
carencia de confianza en Dios es una de las mayores
fuerzas que existen en el corazón de las personas
ambiciosas, la cual las lleva a cometer actos
pecaminosos.

Confía en Jehová, y haz el bien; y habitarás en la


tierra, y te apacentarás de la verdad. Salmo 37:3-4

A fin de lograrlo, el primer paso es reconocer el


amor que Dios tiene hacia nosotros y que, como
buen Padre, Él desea velar por sus hijos y asegurarse
de que tengan lo que necesitan, ya bien sea en el
aspecto espiritual como en el físico. Muchos tienen
carencias porque desconocen la voluntad de Dios
con respecto a este asunto. Sin embargo, a través de
las Escrituras, Dios se revela como un Padre que ama
a sus hijos y desea lo mejor para ellos.

Echando toda vuestra ansiedad sobre él, porque él


tiene cuidado de vosotros. 1 Pedro 5:7

El convertirse en una amante trae serios


problemas. Si la persona entra en esta relación ilícita,
su vida estará llena de sinsabores, mentiras,
vergüenzas, y nunca podrá alzar su rostro con
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 107

dignidad. Dios tiene un mejor plan para toda mujer


que se encuentra en este dilema.

Huid de la fornicación. Cualquier otro pecado que el


hombre cometa, está fuera del cuerpo; mas el que
fornica, contra su propio cuerpo peca. 1 Corintios
6:18

La forma de escapar de este círculo vicioso del


pecado es a través del arrepentimiento, pero no solo
de palabras, sino de corazón. Dios mira el corazón de
la persona y sabe cuándo se encuentra arrepentida de
verdad por su acción. Él perdonará al transgresor y le
dará la fortaleza necesaria para huir de su pecado.

Si confesamos nuestros pecados, él es fiel y justo


para perdonar nuestros pecados, y limpiarnos de
toda maldad. 1 Juan 1:9
CAPÍTULO 10

Carlos
Atrapado sin salida

E stuvimos manejando alrededor de cinco horas


rumbo a los lagos de Missouri. ¡Por fin
habíamos llegado! A decir verdad, levantarse
de madrugada para “ir a pescar” no es algo que
anhelo hacer. Sin embargo, lo disfruto mucho
porque a mi familia sí le gusta esta actividad y, cada
vez más, lo pasamos de lo mejor.
Nos íbamos por algunos días a vacacionar, y este
primer día, por precaución, nos llevamos
sándwiches, frutas, bebidas y algunos postres extras.
De modo que todos ansiábamos poder disfrutar
algún delicioso pescado recién capturado.
Mi hijo, como buen entendido en la materia, al
cabo de un buen rato de haberse ido en la lancha,
volvió con una de sus mejores sonrisas “cual héroe
109
110 • CARY PALMÓN

que regresa a la comarca después de una conquista”,


pues había consiguió un pez enorme. Ese día lo
preparamos en la brasa, estaba delicioso, ¡tuvimos un
gran banquete!
Mientras disfrutábamos del producto de su
esfuerzo, la curiosidad sobre su éxito me invadió. Así
que le pregunté el secreto que tenía para ser tan buen
pescador. De inmediato, él me contó que se debe al
tipo de carnada que utiliza. Según me explicó, cada
pez tiene su carnada favorita y lo importante es saber
cuál es la carnada específica que se debe utilizar. Me
dijo también que es muy importante el momento
cuando el pez pica la carnada, pues es allí que el
pescador debe saber hacer la presión necesaria en la
caña para que se la trague por complete y de ese
modo no se pueda escapar mientras se saca del agua.
En ese momento, sentí como un escalofrío. La
sangre se me heló. De pronto, pude entender cómo a
Carlos lo había atrapado y devorado su captor. En
ese momento entendí de qué forma un hombre de
buena posición, al que todo le iba bien en la vida,
pudo tragarse una carnada y ser “pescado”, como él
dice, de una manera tan tonta...
Para Carlos, morder ese anzuelo ha sido tan
indescriptible que ahora está luchando por su propia
vida, pues esta situación lo está devorando.
Esta es su carta electrónica...
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 111

Estimada Señora Cary:


Le escribo porque estoy asqueado de vivir una
existencia tan baja y asquerosa. Quisiera culpar a
alguien por el infierno en el que vivo, pero en el fondo
sé que solo yo tengo la culpa de mis propias acciones.
Por lo tanto, no tengo excusas y debo asumir la
responsabilidad por lo que me sucede.
Para que tenga una idea general, le contaré que tengo
cuarenta años de edad y estoy casado hace más de
quince años con Sarita, aunque lo lamentable es que
nunca pudimos tener hijos.
Todo comenzó hace unos dos años cuando
celebrábamos su cumpleaños. Fuimos a su restaurant
favorito, y en el transcurso de la cena, le comuniqué
que le tenía “un regalito”. Ella se mostró muy ansiosa
por saber de qué se trataba, pero yo se lo entregué
cuando llegamos a nuestra casa, sin saber que ese
“regalito” sería el detonante de nuestra desgracia.
Días antes de la celebración, yo andaba buscando qué
regalarle. Deseaba darle algo que la sacara de la
rutina. Debido a la sugerencia de unos amigos, se me
ocurrió comprarle una película para adultos XXX.
Cuando llegamos, le dije que “mi regalito” consistía en
una botella de vino y la famosa película para amenizar
nuestra intimidad. Suponiendo de lo que se trataba,
Sarita se negó indignada y me dijo que no iba a
participar de mis locuras, pues le parecía algo muy
vulgar. Sin embargo, yo insistí tanto que logré
convencerla al final.
112 • CARY PALMÓN

A partir de ese momento se desató un caos en nuestras


vidas. Lo que empezó como una diversion diferente, se
transformó en el infierno en que vivimos. Mi esposa
empezó a pedirme que siguiera comprando más vídeos
de esos. Se obsesionó muchísimo con la experiencia y
me pedía nuevas emociones, cada vez con más
frecuencia.
De pronto me di cuenta que había despertado a un
monstruo. Inclusive, llegó a pedirme que invitara a
otra pareja para ampliar la aparente diversión. Sin
embargo, ya estaba harto y solo entonces reaccioné
oponiéndome a hacerlo, pues era caer demasiado bajo.
Después de esa experiencia, su deseo de ampliar su
placer la llevó a consumir drogas. Al inicio parecía que
todo estaba bajo control, pero después llegó un
momento en que mi esposa vivía solo para el sexo y las
drogas.
Yo empecé a sentirme muy perturbado y culpable de la
situación. Así que le dije que ya era suficiente, que no
podíamos seguir cometiendo tantos abusos y que solo
quería que le pusiéramos un final a nuestros excesos
para poder buscar descanso y restauración.
No obstante, mi esposa se negó. Siguió consumiendo
drogas y llevando una vida libertina. Las cosas
llegaron a tal extremo, que cuando yo me iba para el
trabajo, traía a los muchachos del barrio a nuestra
casa, la cual convirtió en un antro de perdición. No sé
cómo se las arreglaba para manipularme y hacerme
creer todas sus mentiras. Mentía de la forma más
descarada y yo le creía todo lo que me decía.
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 113

Al cabo de un tiempo, llegó el momento en que


reaccioné y la afronté. Ella negó de manera rotunda
todas sus bajezas y me dijo que solo eran chismes. Se
enojó conmigo e hizo todo un teatro acusándome de
juzgarla sin motivo. Fue entonces cuando me di cuenta
que yo había propiciado que mi buen nombre quedara
denigrado hasta convertirme en el hazmerreír del
barrio.
Por todo esto, le propuse buscar ayuda professional en
algún lugar de rehabilitación donde nos ayudaran. Sin
embargo, se negó. Dijo que todo estaba bien, que todo
estaba controlado y que no pasaba nada.
Al verla caer tan bajo, algo terrible sucedió dentro de
mí. Ya no quería ni verla. La había amado mucho, pero
ahora solo podía pensar en todos los hombres con los
que había estado y no podía perdonar ni olvidar ese
hecho.
Sarita lloraba, prometiéndome cambiar, y yo hice lo
posible para quedarme a su lado. En primer lugar,
debido al amor que tuvimos, aunque también por el
sentido de culpabilidad de que fuera yo mismo el que
la condujera por ese camino. A pesar de todo, debo
admitir que dudaba de que sus lágrimas fueran reales.
Al final, decidí darle un tiempo. Ya sabía que no podía
dejar de drogarse con mucha facilidad y la tenía
vigilada. Entonces, unos días después sucedió lo que
tanto me temía que pasara. Salí para el trabajo como
siempre, pero permanecí cerca de la casa observándola.
Al poco rato, ella le abrió la puerta a un par de
jovencitos del barrio, mostrándose muy animada.
114 • CARY PALMÓN

Esperé un rato que me pareció interminable


suponiendo lo que estaba sucediendo en mi casa. Abrí
con violencia la puerta y me encontré con el cuadro que
usted ya se puede imaginar. En ese momento, ¡me fui
del hogar!
Como ve, perdí a mi esposa, la mujer de la cual me
enamoré y quien fue mi compañera durante quince
años. Ya no existe. Sin embargo, yo también he perdido
hasta las ganas de vivir. Casi no salgo, ni hablo con
nadie, pues tengo temor que mis amigos ya sepan lo
que estuvo sucediendo.
Me dicen que mi esposa está arrepentida de sus actos y
yo velo por sus gastos. No la culpo a ella, sino que me
culpo a mí mismo por haber permitido que llegara a
esos extremos y no haber puesto un alto cuando todo
empezó a salirse de control. Mi esposa necesita ayuda y
no sé qué hacer.
Esto fue lo que Dios puso en mi corazón como
respuesta:
Mi querido Carlos:
Lamento mucho saber lo que ha sucedido con tu vida, y
cómo algo que comenzó como una actividad
emocionante entre ustedes, terminó destruyendo tu
vida y la de tu esposa.
¿Sabes? Esa es la forma en que se desarrolla el pecado.
Parece ser algo pequeño y sin importancia. Luego,
cuando reaccionas, te encuentras atrapado en los vicios
más viles.
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 115

Ahora, permíteme explicarte lo que muchos no saben


acerca de las adicciones sexuales.
Esta clase de adicción comienza por la curiosidad de
observar asuntos sexuales, como fotografías o películas
que estimulan la libido convirtiéndose en una tentación
al parecer inofensiva al inicio. En cambio, se va
convirtiendo cada vez más en una situación
incontrolable.
Después que la persona se siente atraída a este primer
paso, esta actividad continúa hasta que se convierte en
una adicción. Además, eso es lo que hace que el adicto
vuelva a caer una y otra vez.
A medida que progresa la adicción, la persona se
involucra en la masturbación compulsiva y aumenta
su deseo sexual. Con esto, aumenta también la
necesidad de que sea más impactante y frecuente.
Lo lamentable es que, una vez que la persona llega a
este punto, se desensibilizan sus valores morales y es
capaz de echar abajo toda barrera emocional y física
con tal de satisfacer su adicción. Incluso, comienza a
buscar otras parejas sexuales, acentuando así su
degradación sexual.
Esto es, querido amigo, lo que le ha sucedido a tu
esposa, como quizá le haya ocurrido a muchos otros
que se encuentran atrapados en su comportamiento y
deseando una salida a su esclavitud.
Como he explicado muchas veces, el primer paso para
la restauración es el reconocimiento de que se necesita
ayuda. Sin embargo, esta ayuda tiene que venir de
116 • CARY PALMÓN

afuera, porque en su ser mismo, la persona es incapaz


de solucionar el problema en el que se encuentra.
Entre los pasos necesarios para el rescate de tu esposa
se encuentra un plan que contará con nuevas fuerzas y
no con las suyas. Una fuerza que solo Dios podrá darle
y que es el poder divino para vencer el pecado. ¿Cómo?
En primer lugar, debe entender que tiene un corazón
podrido, lleno de pecados, y que Dios quiere cambiar
ese corazón por uno nuevo, limpio, repleto de amor y
de deseos de hacer lo bueno. A continuación, debe
entregarle su vida con todos sus pecados a Cristo y Él
obrará.
Una vez que Cristo more en el corazón de tu esposa,
hay unas ciertas etapas para dejar que este Nuevo
corazón gobierne su vida. El primero debe ser adquirir
una Biblia y aprender quién es Dios. Luego, aprender
a tener una vida de oración y asistir a una iglesia
donde se predique la Palabra de Dios.
Todo esto la ayudará a desarrollarse de manera
espiritual, así como otros asuntos en el aspecto físico,
tales como dejar de ver películas indecentes, alejarse
del grupo de personas con el que compartía ese tipo de
vida, programar su computadora de modo que le
impida recibir provocaciones sexuales. Junto con todo
esto, debe realizar estas acciones en forma decidida de
modo que cuando le llegue una de estas tentaciones, las
puedas superar.
No podemos olvidar también que existen consejeros
profesionales preparados para ayudar a las personas
con estos problemas en el proceso de conquistar su
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 117

libertad. Por lo que te sugiero que consultes a uno de


ellos, ya que tú mismo dices que sientes que toda esta
situación está fuera de control.
Sin embargo, no solo ella necesita la ayuda de Dios,
sino tú también. ¡Pídele a Jesucristo que entre en tu
corazón como tu Señor y Salvador! ¡Dedícale tu vida al
Señor y deja que Cristo tenga el control absoluto de
ella!
118 • CARY PALMÓN

Dios dice...
La persona que se encuentra esclavizada a
cualquier tipo de adicción lleva este mal dentro de su
ser y está sujeta por complete a los deseos de su
cuerpo. Muchos de ellos sufren porque no quieren
entregarse a esta esclavitud, pero se ven impotentes
en su contra.

Así que, queriendo yo hacer el bien, hallo esta ley:


que el mal está en mí. Porque según el hombre
interior, me deleito en la ley de Dios; pero veo otra
ley en mis miembros, que se rebela contra la ley de
mi mente, y que me lleva cautivo a la ley del pecado
que está en mis miembros. Romanos 7:21-23

Para obtener la victoria de cualquier tipo de


adicción, debe de considerarse la ayuda que Dios le
quiere otorgar a todo el que está sufriendo esta clase
de esclavitud. Por lo tanto, debe incorporar a su
rutina diaria una vida de oración y de relación con
Dios. También debe considerar pedirle la ayuda de
un consejero espiritual que lo oriente a través de esta
trayectoria que puede tomar cierto tiempo hasta que
se complete el cambio en la persona.

Y me ha dicho: Bástate mi gracia; porque mi poder se


perfecciona en la debilidad. Por tanto, de buena gana
me gloriaré más bien en mis debilidades, para que
repose sobre mí el poder de Cristo. 2 Corintios 12:9
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 119

Dios está dispuesto a rescatar a toda persona que


le pida ayuda. No existe ningún pecado que Él no
pueda perdonar. Aunque nuestras acciones nos
separan de Dios, tenemos que darnos cuenta que el
pecado es lo que nos separa de Él en realidad.

Entonces clamaron a Jehová en su angustia, y los


libró de sus aflicciones. Salmos 107:6

El perdón de nuestros pecados y la restauración de


nuestra relación con Dios es el regalo que Jesucristo
compró con su muerte en la cruz del Calvario.

Porque la paga del pecado es muerte, mas la dádiva


de Dios es vida eterna en Cristo Jesús Señor nuestro.
Romanos 6:23
CAPÍTULO 11

Graciela
El golpe nuestro de cada
día

P arecía ser un vuelo tranquilo. Sin embargo,


cuando las luces de advertencia para ponernos
los cinturones de seguridad se iluminaron y la
tripulación nos advertía que estábamos atravesando
una zona de turbulencia, nuestras expectativas de
disfrutar de un vuelo tranquilo se esfumaron...
Esa noche de septiembre, un grupo de personas y
yo viajábamos rumbo a Suramérica para dar una
serie de conferencias a otro grupo de mujeres en
Bogotá. Entonces, como eran más de cinco horas de
vuelo, consideré que sería un tiempo provechoso si
podía usarlo para leer y responder algunos correos
electrónicos que llegan al buzón de “ayuda espiritual”

121
122 • CARY PALMÓN

de los programas de “Minuto Final” y “Conflictos del


Corazón”. De pronto, me percaté que el avión, al
entrar en la zona de turbulencia, comenzaba a
conmocionar a todos los viajeros.
Parecía que nos sacudía una enorme y malévola
mano que amenazaba con poner en riesgo la vida de
todos nosotros. En el lugar se respiraba la adrenalina
producida por el temor que reinaba en el ambiente.
No puedo negar que también yo sentía un vacío en el
estómago que me hizo apretar los ojos con fuerza
para no contagiarme con los semblantes
aterrorizados que me rodeaban.
Sin embargo, una vez que pasó la estrepitosa y
amenazante turbulencia pude respirar hondo para
después incorporarme y observar cómo las dedicadas
azafatas se esforzaban en tranquilizar a algunos de
los pasajeros que parecían haber tenido ataques de
pánico y otros problemas de los nervios. Deduje
entonces que, para muchos, el placentero vuelo
inicial se había convertido en una terrible
experiencia.
Fue justo en ese momento cuando se me aclaró la
mente y entendí por fin cómo la turbulencia de la
vida había afectado y transformado la vida de
Graciela. De ser una persona vivaz y tranquila, se
convirtió en una persona temerosa y herida. Al igual
que los pasajeros del avión, Graciela requería de una
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 123

voz amiga que la ayudara a recuperarse de la atroz


experiencia que le había tocado vivir.
Esto fue lo que Graciela detalló:
Mi querida Cary:
Decidí escribirle y contarle mi historia, porque estoy
muy confundida y no sé qué hacer. Llevo casada cuatro
años con Juan José y tengo que decir que felizmente
todavía no hemos tenido niños.
El primer año de nuestro matrimonio fue maravilloso.
Sin embargo, los atroces problemas que enfrento ahora
comenzaron cuando Juan José perdió el trabajo que a él
tanto le gustaba. Era un excelente trabajador, pero fue
lamentable que lo involucraran en un desfalco y lo
despidieran a pesar de que él pudo comprobar que su
participación fue solo incidental.
Mi esposo se desanimó mucho ante una acción tan
vergonzosa e injusta. Entonces, se le metió a la cabeza
que no encontraría otro empleo similar y debido a la
necesidad que pasábamos empecé a trabajar yo.
Hasta allí no había mayor problema. En todo caso,
estaba controlado. En cambio, las cosas empeoraron
cuando Juan José, mi esposo, comenzó a beber y poco a
poco se fue hundiendo en el alcohol. Su desaliento llegó
a convertirse en una fuerte depresión de la que trataba
de escapar bebiendo hasta perder el sentido.
Los efectos del alcoholismo y la depresión no tardaron
en manifestarse. Empezó a actuar como una persona
violenta y amargada. Lo peor es que se la desquitaba
124 • CARY PALMÓN

conmigo maltratándome de palabras. Su conducta


empeoró hasta el punto de golpearme sin motivo. En
una de esas ocasiones, la golpiza fue tal, que acudí a
denunciarlo a las autoridades. Sin embargo, no me
hicieron caso y le restaron importancia al hecho con el
argumento que “eran asuntos familiares en los que no
intervenía la policía”. En ese estado, pronto pasaron
tres años hasta que todo se salió de control y me
encontré en medio de un terrible caos.
Un día, mi mejor amiga, Patty, viendo que el
alcoholismo de mi esposo era incontrolable y que ya no
teníamos dinero ni para el sustento, pues yo también
había perdido el trabajo, amablemente me trajo un rico
potaje que ella misma preparó. En realidad, mi amiga
no toleraba a Juan José debido a su violenta conducta.
Así que, dejándome la comida, se fue a hacer unos
recados, prometiéndome volver al rato para conversar.
Casi inmediatamente después, llegó mi esposo y me
encontró almorzando. Lejos de alegrarse, en un ataque
de ira me arrancó el plato de las manos y me preguntó
de dónde lo había sacado. Estaba borracho. Cuando le
dije la procedencia de los alimentos que comía, se
atrevió a insinuar que mi amiga, Patty, y yo éramos
lesbianas y que teníamos una relación. Por lo tanto, me
exigió que le pidiera dinero para su bebida. Yo estaba
indignada y discutimos de manera violenta. En medio
de la pelea, y al escuchar que lo desmentía, me dio tal
golpiza que terminé perdiendo el sentido y desperté en
la sala de urgencias del hospital.
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 125

¿Qué había pasado? Bueno, gracias a Dios, Patty volvió


y, al encontrarme desmayada y bañada en sangre,
llamó a los paramédicos y a la policía y ellos me
tendieron.
Mi marido lo negó todo y dijo que fue un accidente.
Sin embargo, era evidente para todos que fue una
golpiza tan feroz que hizo que pasara tres meses en el
hospital.
Tenía muchas fracturas y algunas de ellas eran muy
serias. ¡Estoy viva de milagro! Como consecuencia, he
quedado desfigurada y necesito otra operación estética
para arreglar mi rostro. Es lamentable que tuviera que
pasar esto para que las autoridades acabaran
aceptando mi denuncia contra Juan José por maltratos
físicos y psicológicos. No obstante, en cuanto la mama
de mi marido se enteró del problema, me pidió que no
acusara a mi marido pues en el fondo, decía, “es un
buen hombre atrapado en el alcohol”.
Sus súplicas me conmovieron tanto que no he
continuado con la acción penal.
Juan José me llama a menudo y me dice que está
arrepentido. Es más, quiere que vuelva con él
prometiéndome que no volverá a beber y que me ama.
Le he pedido el divorcio, pero él alega que sería un
pecado porque la iglesia no acepta el divorcio.
Me siento muy confundida, no sé qué hacer. Creo que
Juan José solo quiere convencerme para llegar a un
arreglo y poder archivar el caso. Yo lo amo todavía,
pero no soportaría otra golpiza. Aunque le tengo
miedo, otro temor me agobia y es el de cometer un
126 • CARY PALMÓN

terrible pecado al divorciarme. Además, por momentos,


una parte de mí quiere creerle y darle otra
oportunidad.
¿Qué me aconseja usted? Espero con ansias su
respuesta.
La historia de Graciela nos muestra una vida
turbulenta como el mal rato que yo acababa de pasar
en el avión. Después de pedirle sabiduría a Dios, le
respondí de esta manera:
Querida Graciela:
¡Qué pena me da el saber acerca de tu triste
circunstancia! Tu carta me ha dejado muy conmovida
porque el abuso físico implica también heridas
emocionales. El problema de la violencia familiar es
lamentable y más frecuente de lo que todos pensamos y
deseáramos. En muchos otros países, a tu esposo ya lo
hubieran encarcelado por golpearte y dejarte en el
estado que me cuentas.
Sin embargo, analicemos lo sucedido y hablemos de lo
que, por desgracia, te espera en la vida si regresas con
él. Dice un dicho popular que “un abusador sera
siempre un abusador”. En la mayoría de estos casos, los
ataques se vuelven cada vez más frecuentes de modo
que siempre estarás expuesta a un mal golpe que te
podría matar.
Gran parte de los abusadores se lamentan, dicen
arrepentirse y prometen que no repetirán esa conducta.
Sin embargo, es imposible corregirla por voluntad
propia. Lo más probable es que eso se deba a conflictos
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 127

internos de su personalidad, añadiéndose el hecho que


él no ha sufrido todavía ninguna consecuencia por su
conducta. Así que lo más seguro es que la vuelva a
repetir. Por lo tanto, si vuelves a su lado antes de que
tenga una restauración, deberás vivir sabiendo que
estás expuesta a un gran peligro.
El vicio del alcohol conduce a que los valores morales se
distorsionen y a que las personas se comporten de
modo distinto al normal. Además, con el tiempo, llegan
a perder sus valores hasta cometer en muchos casos
actos ilícitos de los que después se sienten avergonzados
y estupefactos al ver cómo han llegado tan bajo. Esta
clase de individuos sufre un cambio en su personalidad
que se convierte en permanente y actúan como
personas distintas por completos a las que solían ser.
Muchos sufren porque saben que están atrapados y
pierden la esperanza de ser ellos mismos una vez más,
aparte de darse cuenta que hacen sufrir a sus seres más
queridos. Aun así, no pueden despegarse del trago y
siguen bebiendo para evadir la realidad y pasar por
alto el ser en el que se han transformado.
La mayoría de los alcohólicos niegan serlo y no
aceptan que son víctimas de este vicio. Se engañan
pensando que podrán controlarse y dejar de beber
cuando quieran hacerlo. Sin embargo, esto no es
verdad.
Tu esposo tiene que reconocer que es un alcohólico y
que necesita ayuda. Mientras no lo haga y no acepte su
condición, no podrá resolver nada en lo absoluto.
Tendría primero que enfrentar su realidad para
128 • CARY PALMÓN

después poder obtener su libertad. El proceso de su


restauración tomará tiempo hasta que se puedan ver
sus frutos y comprobar que se ha liberado del vicio.
Solo entonces podrías pensar en una nueva vida con él.
El efecto dañino del alcohol no solo afecta la
personalidad, sino que causa daños irreversibles en la
salud física del alcohólico. De modo que es muy común
que contraigan cirrosis hepática y otras enfermedades
que se agudizan, como la diabetes. Su final puede ser
terrible.
En realidad, este problema no es de un estrato social
determinado, sino que afecta en cualquier esfera de la
sociedad donde vivimos y cualquier familiar nuestro
puede llegar a ser víctima de esta terrible adicción. La
buena noticia es que Dios está atento para ayudarlos a
ustedes y a cualquiera que se lo pida. A pesar de esta
tragedia, siempre existe una esperanza y es saber que
Dios desea ayudar a todas las personas que se
encuentran en esta situación.
Sin embargo, es importante que la persona reconozca
su adicción y su necesidad de Dios para que Él los
ayude, pues su voluntad no es que ellos ni sus familias
vivan en este infierno.
Muchos se sienten condenados por su comportamiento
y se niegan a presentarse ante Dios con su problema
porque piensan que no se lo merecen. En cambio, la
realidad es que Dios es el primero en desear ayudarlos
porque comprende la debilidad del ser humano y está
listo para perdonarlos.
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 129

Aceptar nuestros pecados y pedirle ayuda a Dios es el


comienzo de toda restauración. Se trata de un proceso
en el que el adicto a cualquier sustancia debe tomar
conciencia que tundra que someterse toda la vida a un
tratamiento para evitar las recaídas. También debe
alejarse de los amigos y las influencias dañinas del
pasado.
Respecto a lo que llamas pecado de divorciarte, pienso
que él te está manipulando, pues te diré que en
ninguna parte de la Palabra de Dios vemos que Él
apruebe el abuso como lo hace él. Tu ser querido
necesita ayuda, pero tú también la necesitas. Dices que
aún lo amas, pero a veces ya no es amor lo que une a
personas como tú a sus parejas. Lo que sucede en
realidad es que, debido a la manipulación a la que
están sometidas, al final se resignan a ese estilo de
vida. Creo que tú también necesitas valorarte y
reconocer que no naciste para ser víctima y que tienes
gran valor como mujer.
Estarás en mis oraciones porque sé que Dios quiere
ayudarte y darte la fortaleza espiritual para dar los
pasos necesarios hacia tu propia restauración. Dios te
ama más de lo que te imaginas. Él envió a Jesucristo a
morir por tus pecados demostrando su gran amor
hacia ti y, entre otras cosas, Él pagó ese alto precio
para que seas libre. Por lo tanto, no es su voluntad que
sigas atada a una situación tan difícil y peligrosa.
Busca tú también a Jesucristo y entrégale tu vida para
que Él obre una restauración en tu alma y tu ser que
están tan afectados por lo que has vivido. Entonces,
después de pasar ese proceso, podrás tomar una
130 • CARY PALMÓN

decisión madura y responsable respecto a tu futuro y el


de tu esposo.
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 131

Dios dice...
La Palabra de Dios nos enseña que el amor del
esposo hacia la esposa debe ser tan completo que
debe estar dispuesto a sacrificarlo todo por ella.
Cuando a una mujer la aman de esta manera, sabe
que su esposo desea lo mejor para ella.

Maridos, amad a vuestras mujeres, así como Cristo


amó a la iglesia, y se entregó a sí mismo por ella.
Efesios 5:25

Tal como dice la Palabra de Dios, nadie golpea ni


aborrece a su propia carne. El esposo no debe
maltratar a su esposa de manera física ni verbal. No
se puede maltratar su propia carne.

Así también los maridos deben amar a sus mujeres


como a sus mismos cuerpos. El que ama a su mujer, a
sí mismo se ama. Porque nadie aborreció jamás a su
propia carne, sino que la sustenta y la cuida, como
también Cristo a la iglesia. Efesios 5:28-29

Existen circunstancias en que el esposo le exige a


la esposa que haga algo que no es apropiado. Así que
la lleva a desobedecer a Dios. Sin embargo, la Palabra
de Dios nos enseña con claridad que debemos
obedecer a Dios antes que a los hombres.
132 • CARY PALMÓN

Respondiendo Pedro y los apóstoles, dijeron: Es


necesario obedecer a Dios antes que a los hombres.
Hechos 5:29

Dios declara que el hombre debe amar y proteger


a la esposa. No obstante, si ella o sus hijos sufren
maltrato físico por parte del hombre, deben ser
conscientes que el que está quebrantando la ley de
Dios es el abusador y no la víctima. Dios está
dispuesto a ayudar y rescatar a las mujeres y los hijos
que se encuentran en esta situación. No es su
voluntad de que permanezcan en medio de esta
violencia.

Los que amáis a Jehová, aborreced el mal; él guarda


las almas de sus santos; de mano de los impíos los
libra. Salmo 97:10
CAPÍTULO 12

Sergio
¡Ya es muy tarde!

F ue un fin de semana maravilloso! Mi familia y


yo habíamos decidido pasar juntos el fin de
semana, tal y como lo hacíamos años atrás
cuando mis hijos eran pequeños aún. ¡Esos días
fueron maravillosos! Pude comprobar que me hacía
muy feliz cada ocurrencia de mis nietas. Incluso, me
alegraban las travesuras que antes me hubieran
exasperado. Sin embargo, inexorablemente, llegó el
momento de la despedida. Cada quien se marchó a
sus respectivas casas para continuar con sus vidas,
trabajos, estudios, etc. Al final, mi esposo, Larry, y yo
nos quedamos solos y listos para ordenar el caos
provocado por la reunión.
Cuando me disponía para hacerlo, de pronto sentí
un agotamiento que nunca antes había
experimentado al notar que aún me faltaba por

133
134 • CARY PALMÓN

guardar una infinidad de juguetes que se


encontraban regados por toda la casa y solo me
quedaba continuar. Entonces, mientras lo hacía,
sentí aun más que me flaqueaban las energías. ¡Me
sentía exhausta! Atrás habían quedado la amena
charla familiar, el chocolate caliente disfrutado en la
sala, pues delante de mí solo había un panorama de
platos sucios y la cocina llena de trastes. En ese
momento acepté que el paso del tiempo es
inclemente, pues mis fuerzas físicas ya no me
acompañaban igual que en otros tiempos.
Por fortuna, reaccioné justo a tiempo y no caí en
el desánimo, pues me di cuenta que todos tenemos
que cuidar de nuestros pensamientos, no dejando
que nada altere el gozo de nuestras vidas. Este
momento fugaz de desaliento me hizo pensar en
cómo muchas personas que se sienten agobiadas por
los problemas de la vida terminan sin ánimo y
sumidas en la más profunda depresión, cansadas y
sin aliento. Ese fue el caso de Sergio, un hombre al
que el agotamiento de la vida parecía haberle Ganado
la partida y se encontraba a punto de cometer una
locura.
La carta de Sergio decía así:
Señora Cary:
Permítame contarle mi historia. Soy Sergio, y aunque
vivía una vida maravillosa con mi esposa a la que
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 135

amaba mucho, ella se marchó de la casa por problemas


que se presentaron en la vida. Todo comenzó hace unos
años atrás, cuando la empresa para la cual trabajaba
tuvo problemas financieros y cerró por insolvencia.
Cuando me retiré, tenía algunos ahorros y commence
un negocio de comida, dando servicios de banquetes a
reuniones sociales y fiestas, entre otras actividades
similares. En cambio, las cosas no me salieron bien. No
fue por falta de clientes, sino por confiar en personas
deshonestas que en poco tiempo me hicieron perder
todo mi capital. Como consecuencia, mi hijo ha tenido
que abandonar los estudios y yo tengo que dejar el
apartamento donde vivo por falta de pago de las varias
mensualidades que debo. El dueño está a punto de
llevarme a juicio. Prácticamente me está desalojando y
no tengo a dónde mudarme.
Algunos amigos me han hecho préstamos, pero eso ha
empeorado las cosas, pues ahora les estoy debiendo a
ellos también. Siento que todas las puertas se me han
cerrado en todo lugar. Me siento muy avergonzado con
todos, con mi familia en especial. Creo que he perdido
todo el respeto de mi familia por no poder cumplir con
mis obligaciones de esposo y padre. Me siento culpable
de que la vida de mi familia navegue como un barco a
la deriva, sin rumbo y sin horizonte.
He tratado por meses de vender la herencia que recibí
de mi padre, un terreno en una zona rural, pero ni eso
he podido conseguir. Así que me siento muy frustrado
y abandonado. Hasta perdí las tres cosas que me
infundían aliento. Mi trabajo, lo poco que heredé de
136 • CARY PALMÓN

mis padres y mi familia. Siento que ahora solo soy una


carga para la sociedad. He perdido toda esperanza, y
aunque me consider cristiano, he perdido la fe al ver
que Dios no responde a mi clamor. Le he pedido
dirección, pero no veo una respuesta. Su paz y su
ayuda se han esfumado. ¡Estoy muy confundido por
tantos problemas!
A decir verdad, me siento muy molesto y no tiene
ningún sentido vivir así. No soporto más. No quiero
seguir viviendo en esta angustia. Aunque sé que
suicidarse no es agradable ante los ojos de Dios, siento
que esa es la única salida para acabar con esta vida
miserable. Me he quedado sin amigos, sin trabajo, sin
mujer, sin hijo, sin casa y sin ningún bien material
que me sirva para salir de este infierno.
No entiendo por qué me pasa esto. Despierto cada día
pensando en una salida y no puedo encontrar una
respuesta. Estoy atormentado, así que la vida no tiene
sentido que la viva de esta manera. ¡No resisto más!
Todo se destruyó para mí y tengo la manera de
evitarlo. Me siento absolutamente solo. No encuentro
Consuelo a esta desesperación.
Eso es todo, señora Cary, agradeciéndole desde ya sus
consejos que, a pesar de que serán buenos, estoy seguro
que no podrán hacer mucho.
Me despido de usted... y que Dios la bendiga, pues para
mí ya es demasiado tarde en realidad.
La carta de Sergio fue una de las pocas que me
dejó perturbada en verdad, pues sabía que Dios
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 137

deseaba ayudarlo. Sin embargo, ¿cómo? Después de


orar y esperar la manifestación de Dios en la vida de
Sergio, le respondí así:
Estimado Sergio:
Todos pasamos por tiempos difíciles. La Biblia dice:
“Porque siete veces cae el justo, y vuelve a levantarse”
(Proverbios 24:16). A pesar de lo que me dices, el hecho
de haberme escrito es una demostración que tienes
todavía la esperanza que Dios te rescatará. Él dice en
su Palabra que no nos abandonará ni nunca nos
dejará. Yo tengo la fe suficiente para creer que la
oración eficaz del justo puede mucho y que esta carta
llegará a tiempo para evitar que cometas una locura.
Por lo que me dices, presumo que eres una persona con
estudios y conocimiento de los negocios. Tienes que
ponerte en las manos de Dios y actuar en fe para
saldar tus deudas. Conversa con tus acreedores y confía
en que Dios te dará la provisión para cumplir con los
pagos en cuota.
El suicidio no es una salida y me acongoja pensar en lo
que sufriría tu hijo si en verdad decidieras cometer esa
locura. Recuerda que no eres dueño de tu vida. Si eres
creyente, sabes que tu vida le pertenece a Cristo.
No sé si tus padres viven, pero imagina lo que les
afectaría una decisión de esa magnitud. Si como dices
eres cristiano, estoy segura que tus principios
terminarán venciendo estos malos pensamientos que te
atormentan.
138 • CARY PALMÓN

Tengo la certeza que Dios está listo para ayudarte. No


estás solo como imaginas. La batalla para recuperar el
ánimo, la esperanza y una situación digna en la vida
no la estás librando solo. Cristo está contigo y nuestro
equipo de oración te seguirá apoyando. Hemos visto
verdaderos milagros con el poder de la oración. Estoy
segura que pronto recibiremos noticias tuyas para
contarnos las maravillas que Dios tiene para tu vida.
Acerca de tu hijo, sé por experiencia el gran dolor por
el que pasaría el muchacho, pues yo crecí con mucha
amargura debido a que mi padre murió durante mi
adolescencia. Siempre pensaba que mi vida sería
distinta si estuviera él. Así que, por su ausencia, tomé
muy malas decisiones que tuvieron dolorosas
consecuencias en mi vida. Pienso que no desearías que
tu hijo pase por una situación semejante.
Imagina que debido a esa experiencia tu hijo se llene
de amargura y decida tomar la misma decision que
estás pensando tomar tú. Él tendrá en el futuro
también que luchar contra la depresión, contra los
pensamientos de suicidio y contra el temor a fracasar
en la vida.
Estoy segura que Dios tiene algo preparado para ti. A
pesar de lo que sientes, ten la plena seguridad que Dios
está listo para ayudarte y rescatarte de esta crisis.
Estamos en oración por ti para que Dios sea el que te
ministre y te dé el aliento y la fe necesaria a fin de que
puedas encontrar la salida. Estoy segura que, por el
momento, tus pensamientos no te dejan ver con
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 139

claridad las puertas que Dios está abriendo delante de


ti, pero vive convencido de que sí las hay.
Por otro lado, quiero comentarte de algunas razones
por las que debes rechazar las ideas suicidas:
• Estás negando la habilidad y el poder de Dios
para rescatarte de tu situación.
• El suicidio va en contra del mandamiento de
no matar.
• Estás tomando la decisión de rebelarte contra
la soberanía de Dios sobre tu vida.
• Esa decisión afectará de manera grave la
salud emocional de tus seres queridos.
• Si dices que ya no resistes, estás declarando
que eres tú el que está tratando de resolver las
cosas en tus fuerzas y no en el poder de Dios.
En realidad, yo tengo otra perspectiva sobre lo que
estás viviendo. Tú te ves sin Dios y sin esperanza y yo,
en cambio, veo a Dios dispuesto a darte un future
diferente. Dios envió a su Hijo a morir por nosotros
para darnos la vida eterna y devolvernos una relación
personal con Él, una relación de Padre a hijo. Un
padre jamás le da las espaldas a su hijo, ni tampoco lo
presiona hasta llevarlo a la destrucción. Por el
contrario, siempre está dispuesto para rescatarlo.
Reconsidera todas esas ideas que tienes en mente y
recuerda el gran amor que Dios tiene por ti. Piensa en
su promesa que nunca te dejará y nunca te
abandonará. Él te sostiene con su diestra poderosa...
140 • CARY PALMÓN

Dios dice...
Existen muchas razones por las que la persona
piensa que el suicidio es su única alternativa. En la
mayoría de los casos, la persona se encuentra sumida
en una depresión muy fuerte y necesita ayuda, ya
bien sea de la ciencia médica o de la consejería
pastoral. Lo más importante es reconocer que la
persona necesita este tipo de intervención. Por lo
que es necesario brindarle ayuda a fin de que la
obtenga, puesto que el hombre, o la mujer, que está
en medio de esta crisis no va a poder buscar la ayuda
que necesita para superar esta situación.

No os ha sobrevenido ninguna tentación que no sea


humana; pero fiel es Dios, que no os dejará ser
tentados más de lo que podéis resistir, sino que dará
también juntamente con la tentación la salida, para
que podáis soportar. 1 Corintios 10:13

Cuando la persona está bajo un nivel de angustia


que le lleva a considerar el suicidio, necesita que
alguien le escuche, que esté a su lado, que acepte sus
emociones y que no le condene. Es muy importante
demostrar el amor de Dios y recalcarle que Él salva al
quebrantado de corazón.

Cercano está Jehová a los quebrantados de corazón; y


salva a los contritos de espíritu. Salmo 34:18
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 141

La falta de esperanza, el miedo al futuro y las


circunstancias que rodean a la persona que está
sufriendo esta crisis contribuyen a su agonía. Sin
embargo, Dios dice que Él tiene Buenos planes para
esta persona y que estos son de bendición.

Porque yo sé los pensamientos que tengo acerca de


vosotros, dice Jehová, pensamientos de paz, y no de
mal, para daros el fin que esperáis. Jeremías 29:11
EPÍLOGO

Los factores de éxito y de


fracaso

Y colorín, colorado... este cuento se ha


acabado”, reza el clásico final de muchas
historias que aún guardo en los recuerdos de
cuando era una niña cándida.
En esas clásicas historias, una varita mágica y el
favor de un hada madrina lo resolvían todo. Por
último, el autor sentenciaba: “Y fueron felices para
siempre”. Sin embargo, la cruda realidad de la vida
demuestra sin cesar que no hay acto mágico alguno
que resuelva los problemas del ser humano ni que
transforme siquiera sus lágrimas en alegrías.
No obstante, así como hay factores constantes que
reproducen el fracaso en la vida, también existen los
de triunfo. Y este contraste es el que presentamos en
este libro, el cual, estoy segura, será de gran valor
143
144 • CARY PALMÓN

para todos los que vienen enfrentando momentos


difíciles.
Aunque siempre supe de las incidencias de cada
uno de los referidos factores, solo podía
conceptualizarlo mejor a medida que leía los cientos
de cartas de dolor que personas, como tú, enviaron al
buzón de Minuto Final*. Miles de esas historias
desesperadas reflejaban de manera vívida lo que
llamo “el factor común del fracaso”. En cambio, con
los años de vida que Dios me ha dado, he podido
comprobar “el factor del éxito” que está presente en
cada una de las historias de los individuos que
lograron superar sus penas y sus derrotas.
¿Cuál es ese factor del fracaso en la vida del ser
humano? La respuesta solo puede ser una: La instintiva
y permanente búsqueda de un amor inaccesible que lo
convierte de forma progresiva en un mendigo de ese
sentimiento.
Entonces, surge una lógica interrogante: ¿Cuál es
ese factor del fracaso en la vida del ser humano? La
respuesta solo puede ser una: La instintiva y permanente
búsqueda de un amor inaccessible que lo convierte de
forma progresiva en un mendigo de ese sentimiento.
Como resultado, el saldo se torna infructuoso y lleno
de dolor cuando esa misma persona, que puso
esperanzas en alguien o en algo, ve que fueron en
vano, convirtiéndose todo en resentimiento y odio...
Y el vacío continúa, agrandándose cada vez más.
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 145

Por consiguiente, los seres humanos deambulan


por la vida llorando y sufriendo sin saber y sin
entender que hay una forma de encarar y triunfar
sobre este problema que se reproduce de generación
en generación cual cadena de maldición.
Lo primero que debemos hacer es tomar
conciencia y reconocer que nos diseñaron para una
vida mejor, sin soledades ni vacíos, sin sequías de
sueños ni de ilusiones marchitas, sino viendo cómo
nuestros anhelos más sublimes se realizan día adía,
siendo sus protagonistas.
¿Y cómo llegar a ser el actor principal de ese
éxito? Solo existe una respuesta radical: y es
recibiendo por gracia la misericordia y el perdón de
Jesucristo, el Hijo de Dios, quien por puro amor
realiza ese cambio de corazón, de uno fracasado a
uno exitoso.
Somos seres devastados por el pecado e
incomunicados con Dios. Solo Jesucristo es el que
puede pagar por nuestras culpas y restaurar nuestra
relación con Dios haciéndonos sus hijos.
Preséntale a Dios tu corazón con todas tus heridas,
con todos tus pecados y Él se encargará del resto.
Si tú le entregas tu vida a Jesucristo, Él se hará
cargo de tus sueños, de tus ilusiones, de tus recursos,
de tus relaciones, de tu futuro. Él borrará tu pasado y
146 • CARY PALMÓN

todas tus historias de dolor. Así que preséntale tu


corazón con todas tus heridas, con todos tus pecados
y Él se encargará del resto. Él te dará un nuevo
corazón lleno de su amor, haciéndote capaz de
reproducir ese mismo amor en otros... ¡sin
condiciones! Él te acompañará todos los días de tu
vida, te aconsejará, te cuidará y te bendecirá.
Por lo tanto, debo concluir de manera categórica
que Jesucristo es el factor del éxito en la vida de
millones de personas que podemos vivir esta
transformación y que damos fe de ello.
¡Atrévete a creerle a Dios y Él hará un milagro en
tu vida!
¡Dios te bendiga y use!
Acerca de la Autora

N ació en La Habana, Cuba. En 1961, llega


junto a su familia a los Estados Unidos y, a
los dos años, se establecen en Tulsa,
Oklahoma.
No obstante, el año de 1973 fue el más importante
para su vida, pues recibe a Cristo como su Salvador
personal en un encuentro sobrenatural. Más
adelante, en 1979, da inicio a su trabajo ministerial
como pastora.
A inicios de los años ochenta, Cary observó la
necesidad de ayuda social y humanitaria a los latinos
ubicados en su localidad. Al escuchar este clamor,
gestó la creación de una organización sin fines de
lucro, “Naciones Unidas en Cristo”, como iglesia y
fuente de ayuda humanitaria. Le tomó años expandir
esta labor, pero se hizo realidad al crearse toda una
red de servicios.

147
148 • CARY PALMÓN

En el año de 1987, comenzó su trabajo como


evangelista para los países latinoamericanos y
alcanzó a su país natal a través de la radio de onda
corta, predicando un mensaje de perdón y esperanza
por medio de Jesucristo. Su programa radial “Un
camino de fe”, que se inició en el año 2000, amplió
sus horizontes.
Al recorrer América Latina, Cary observa de igual
modo los muchos problemas de su gente y decide
ahora utilizar la televisión, a fin de llegar con ese
aliento inicial al menospreciado, al alcohólico, al
indefenso, al adicto y, en fin, a todo aquel que sufre.
Con tal objetivo, da inicio a su programa de
television “Minuto Final”, el cual se transmite por
todas las naciones hispanohablantes, alcanzado a
miles de personas con el mensaje de salvación y
trayendo aliento a los quebrantados de corazón.
En la actualidad, se transmite también su
programa radial “Conflictos del Corazón”, que va
dirigido a todo el mundo hispano. Por lo tanto,
podemos decir que la obra de Cary Palmón se ha
expandido por las naciones, no solo por sus
programas de radio y televisión, sino como la autora
de varios libros, incluyendo Del Fracaso al Triunfo,
Evidencia y Veredicto, Principios para una Vida
Victoriosa, Seeds of Destiny y otros más.
CONFLICTOS DEL CORAZÓN • 149

Si deseas comunicarte con la autora, puedes


escribirle a:
Cary Palmón
P.O. Box 54723
Tulsa, OK 74155

Para más información acerca de Cary Palmón y su


ministerio, puedes visitar la siguiente página Web:
www.carypalmon.org

También podría gustarte