Está en la página 1de 16

Los sellos romanos de panadero: una aproximación

a su estudio a partir de los depositados en el Museo


Nacional de Arte Romano (Mérida)

Mª Eulalia Gijón Gabriel.


Arqueóloga
Macarena Bustamante Álvarez.
Universidad de Cádiz

Fecha de recepción: 05/10/2009


Fecha de aceptación: 03/03/2010

Resumen Abstract
En el presente artículo damos a conocer In this paper we present three bakery
tres sellos de panaderos, dos completos y stamps localized at the National Museum
uno fragmentadi, depositados en el Mu- of Roman Art (Mérida). We want to dee-
seo Nacional de Arte Romano (Mérida). pen in their religious function in the ro-
Este estudio pretende dar a conocer estas man society.
piezas, valorando no sólo sus rasgos mor-
fológicos, sino de igual modo su signifi-
cado con un marcado carácter votivo.

Palabras clave Key words


Mérida, sellos de panaderos, función re- Mérida, bakery stamps, religious function
ligiosa

En el presente artículo damos a conocer tres sellos de panaderos, dos completos y


uno fragmentadi, depositados en el Museo Nacional de Arte Romano (Mérida) (Fi-
gura 1). Con el término “sello de panadero” nos referimos a una pieza de morfología
circular y manufacturada en terracota. Sus dimensiones suelen ir desde los 12 cm. a
los 15 cm. de diámetro y un espesor de 3-4 cm. En una de sus caras se desarrolla una
escena decorativa en positivo mientras que la otra, a menudo, está lisa.
Este estudio pretende dar a conocer estas piezas, valorando no sólo sus rasgos
morfológicos, sino de igual modo su significado con un marcado carácter votivo.
Esta investigación viene motivada por la nebulosa, que a día de hoy, existe a la
hora de valorar estas piezas y sobre todo su funcionalidad. Así mismo, estamos ante
piezas difícilmente reconocibles, a menos, que aparezcan con su sección más menos
desarrollada, por lo que queremos hacer una llamada de atención con esta aportación
a su identificación y estudio. Este hecho, quizás, ha generado que las piezas que se han
determinado como sellos de panaderos sean irrisorias en suelo peninsular.

Huelva en su historia - 2ª época ∙ Vol. 13 ∙ 2010 ∙ [15-30] ∙ ISSN 1136-6877 © Universidad de Huelva
16 Mª Eulalia Gijón Gabriel • Macarena Bustamante Álvarez.

1. Los sellos de panadero y la historiografía


La primera vez que encontramos publicado un ejemplar de estas características lo
localizamos en una de las publicaciones de Overbeck sobre Pompeya (1886, fig. 205)
en la que se hacía referencia a una pieza asimilada al gremio de los panaderos; apun-
tando una funcionalidad práctica de “marca comercial” al desarrollarse una escena de
la cotidianeidad de estas instalaciones, un équido haciendo rotar un molino.
A comienzo de siglo, cuando se impulsaron de manera definitiva las excavaciones
de Ostia Antica, se intervinieron una serie de pistrinae. En este contexto Pasqui (1906)
halló multitud de matrices, tanto de bulto redondo como de formas planas, que se vin-
cularon a una serie de dolia encastrados íntimamente relacionados con la producción
panadera. A partir de aquí se iniciaron una serie de investigaciones que tenían como
fin último dar a conocer estas piezas, pero sobre todo determinar su funcionalidad. Al
respecto Müller, en 1909, centró su investigación en el pragmatismo de las mismas,
vinculando estos sellos a los signos plasmados en panecillos consumidos en festivida-
des concretas del calendario romano. Estas hipótesis se fueron consolidando gracias al
estudio de Drexel (1916, 17-22) quien de nuevo ahondó en la misma idea. Es en este
contexto en el que más hallazgos de esta índole se hicieron en la zona renana danubia-
na (WUILLEUMIER, 1943), muy vinculados todos ellos iconográficamente con los
medallones del Ródano plasmados en la vajilla fina (DESBAT, 2006).
Las teorías de Müller fueron aceptadas ampliamente por la comunidad científica,
así Deonna (1919) planteó esta misma hipótesis para ejemplares aparecidos en Suiza.
En 1938 Alföldi, estudiando los ejemplares de la zona renana danubiana fue más allá
en la intención votiva del sellado vinculándola directamente a dies natalis del empera-
dor reinante en ese momento o días vinculados directamente con su figura.
En 1920 se dio la aparición en Córdoba de un conjunto de dieciocho piezas con
un repertorio iconográfico muy variado (DE LA TORRE, 1921). Estas piezas fue-
ron estudiadas a posteriori ampliamente (DE LOS SANTOS, 1949). El hallazgo se
produjo en un entorno claramente productivo, con dolia asociados, moldes de otra
índole e incluso piezas sin cocer que generaron que se le otorgara una funcionalidad
vinculada a la panadería.
A mitad de siglo el panorama de estas piezas estaba bastante concensuado en lo
que a funcionalidad se refiere, aunándose las veces en su pragmatismo votivo. En estos
momentos se da a conocer cuatro discos procedentes de Tamuda –Tetuán, Marruecos-
(QUINTERO, 1942 y TARRADELL, 1950) de carácter fitomórfico así como otro en
el que aparecía representado un flautista (Figura 6, nº 8). Según Tarradell estas piezas
se podrían encuadrar en época púnica, no sólo por su contexto de aparición sino de
igual modo por el conjunto de piezas aparecidas en otras zonas de ocupación púnica
caso de Ibiza (VIVES, 1917, 170 y 173) o Duimes (DELATRE, 1897, fig. 57 y 58).
Estos sellos se complementan con uno que posteriormente ha sido estudiado con ca-
racterísticas iconográficas propiamente romanas en el que aparecía un individuo cabal-
gando sobre una figura mitológica marina (FUMADÓ, 2006) (Figura 6, nº 10).
Ramos Folqués (1955) a mitad de siglo halló en la Alcudia un ejemplar donde
aparecía representado un león apostado sobre una piedra. Por esta época García y

Huelva en su historia - 2ª época ∙ Vol. 13 ∙ 2010 ∙ [15-30] ∙ ISSN 1136-6877 © Universidad de Huelva
Los sellos romanos de panadero ... 17

Bellido en 1957, analizó un ejemplar depositado en el Museo de Badajoz procedente


de la colección de D. Fernando de Calzadilla (GARCÍA y BELLIDO, 1957). El sello
es de factura circular con una cuadrúple división del campo decorativo con alegorías
directas a las estaciones del año (Figura 2).
Posteriormente tendremos que esperar hasta 1981, momento en el cual se gestó
una investigación de corte geográfico con cinco ejemplares procedentes de Murcia y
su entorno (LILLO, 1981). En 1987 se presentó un nuevo sello que venía a ampliar
el repertorio establecido hasta ahora procedente del Cerro de los Santos (SERRANO,
1987) donde aparecía plasmado un cérvido.
Con todo ello podemos observar una tradición historiográfica antigua en el estu-
dio de estas piezas que tiene su apogeo en los años cincuenta y sesenta de la pasada
centuria. En la actualidad esta temática parece haber desaparecido de la escena de la
investigación centrándose ahora estos estudios en la aparición de moldes dedicados
a la repostería con un pragmatismo distintos al ahora planteado ( por ejemplo BUS-
TAMANTE y otros, e.p.).

2. Estudio morfológicos de las piezas depositadas en el MNAR.


En este apartado realizaremos un estudio de carácter morfodescriptivo de las pie-
zas a analizar. Recordamos que dos de las mismas se encuentran completas mientras
que la tercera aparece fragmentada.

2.1. Nº Inv. 17.422 (Figura 3)


- Procedencia: Mérida. Descontextualizado.
- Características Técnicas: Molde realizado con arcilla depurada de color ocre
amarillento con algunas calizas y micas en su composición.
- Dimensiones: El círculo completo mide 17 x 17 cm. y tiene un grosor de 9 mm.;
no obstante y formando parte de su decoración tiene varias incisiones a modo de orlas
o círculos concéntricos que rodean la pieza a diferente distancia a saber:
a. Orla exterior de 0,5 mm. de anchura.
b. Orla media de 0,3 mm. de anchura.
c. Orlas interiores de 0,1 mm. de anchura.
d. Disco decorado: 7,9 mm. de diámetro.
- Descripción: El sello está fragmentado, restaurado con evidentes señales de ter-
moalteración en buena parte de sus bordes. Factura circular con triple grafilado que
enmarca un disco donde aparece la representación de una figura masculina en pie y se-
midesnuda. Por los atributos que le acompañan, parece tratarse del dios Júpiter, pues
pueden apreciarse claramente su haz de rayos y el águila. La figura de la divinidad
aparece de pie, algo de lado y con cabeza y rostro de perfil. Todos los rasgos están muy
cuidados y trabajados con todo lujo de detalles: ojos, cejas, boca, barba y prominente
nariz, todo ello con un marcado estilo griego. Su cabeza va cubierta con una especie de
casquete o redecilla, de la que salen sus cabellos largos y rizados. Su cuerpo, aunque
presenta un buen estudio de anatomía con pelvis marcada, genitales, grandes pectora-
les y extremidades, aparece menos cuidado en cuanto a su traza.

Huelva en su historia - 2ª época ∙ Vol. 13 ∙ 2010 ∙ [15-30] ∙ ISSN 1136-6877 © Universidad de Huelva
18 Mª Eulalia Gijón Gabriel • Macarena Bustamante Álvarez.

El movimiento de su torso y la posición de sus piernas, la derecha apoyada con


firmeza en el suelo y la izquierda ligeramente doblada a la altura de la rodilla con el
pie flexionado sobre la punta de los dedos, da a la figura un ondulado y contenido
movimiento que recuerda al modelo policleico del s. IV a. C (ADRIANI, 1933, 59),
aunque también puedan apuntarse algunas similitudes con ciertas variantes praxi-
telianas (LIPPOLD, 1950, 275). Esta pose es bastante recurrente en otros sellos de
panaderos aparecidos en la Península Ibérica, caso de Córdoba (DE LOS SANTOS,
1949, lám. III, nº 1-4).
Existe un pequeño circulo (0,3 mm.) junto a su pie izquierdo quizás para facilitar
el desmolde del producto manufacturado. La posición flexionada de su brazo de-
recho, a la altura de su antebrazo y codo, así como la de su brazo y mano izquierda,
que se muestra extendido, va a facilitar el apoyo de la única vestimenta que porta el
dios, una túnica. Este hecho lo muestra desnudo de frente, cayéndole la túnica por
su parte trasera generándose así enormes pliegues. La pose de su brazo derecho, le va
a servir también para agarrar entre sus dedos, salvo su índice muy largo y extendido,
un cetro. Dicho elemento parece rematar en una bola, bajo la cual se aprecian dos
incisiones a modo de arandelas u otro adorno similar. La figura completa mide 7,1
cm.
En la parte izquierda del disco y junto al pie de este mismo lado se aprecia su
atributo más universal, el águila. Aparece representada de perfil y totalmente ladeada
porque su figura debe adaptarse al espacio que queda disponible, pese a ello el ave
mantiene su robustez y fuerza. Aparece con las alas desplegadas y cabeza pequeña de
la que sobresale un enorme pico.
En el lado opuesto aparece un trípode a modo de altar, también adaptado al es-
pacio, del que salen tres llamas. Su parte superior va decorada con el haz de rayos.
Completa la decoración del disco unos motivos vegetales a modos de guirnaldas.
Se ha detectado el de uso de tres punzones para la realización de esta pieza: de
punta roma (para el cuerpo), punta bífida (para el altar) y punta muy fina (para la
cara). Su reverso es completamente liso y bruñido y el canto perfectamente redondea-
do. La fiabilidad en la representación nos permite hablar de un deseo claro de que la
representación quedara en amplitud marcada en la pasta, de ahí que creamos que no
estamos ante una pasta cocida sino más bien ante pastas más menos crudas fácilmente
moldeables.

2.2. Nº de Inv. 37.514 (Figura 4)


- Procedencia: Mérida. Descontextualizado.
- Características técnicas: Arcilla de color rojizo-anaranjada con micas doradas,
pequeños fesdelpatos y algunas calizas. Pasta algo cuarteada, posiblemente por falta
de desgrasantes o cocción.
- Dimensiones: El círculo completo mide 13 x 13,4 cm. y tiene un grosor que os-
cila entre los 9 mm. y 1,3 cm. En su canto se aprecia con claridad las señales del torno
y en su propio disco se ven varias incisiones, a modo de orlas o círculos concéntricos.
Posee un triple grafilado que rodea la pieza a diferente distancia; a saber:

Huelva en su historia - 2ª época ∙ Vol. 13 ∙ 2010 ∙ [15-30] ∙ ISSN 1136-6877 © Universidad de Huelva
Los sellos romanos de panadero ... 19

a. Orla exterior 1 cm. de anchura.


b. Orla media de 0,2 mm. de anchura.
c. Orla interior de 0,3 mm. de anchura.
d. Disco decorado: 10,2 cm.
- Descripción: Figura sentada en un posible trono (se aprecia con claridad sus
brazos indicados y un zócalo decorado con pequeños casetones en la parte inferior de
la pieza) que se asimila a otros tronos representados en sellos de panaderos (DE LOS
SANTOS, 1949, lám. I, nº 2-3).
. La figura aparece vestida con una larga túnica plisada que le cubre todo su
cuerpo. Existe un rehundimiento en la parte central de la figura ¿acaso para resaltar
sus piernas? Como ya es habitual en este tipo de piezas el cuerpo aparece de frente
y la cabeza de perfil. Cubre su cabeza una diadema o corona que remata en lo que
parece una torre. Es complicado distinguir estos elementos con claridad debido al
poco resalte y detalle de los mismos. Exactamente igual ocurre con su cara y pelo, que
además aparecen muy rehundidos. Su mano derecha está levantada y sostiene un
cetro que remata en bola. Esa posición hace que su brazo y antebrazos aparezcan des-
nudos; por el contrario su brazo izquierdo, totalmente extendido, parece ir cubierto
hasta su antebrazo. Su mano agarra una corona circular adornada con lo que parecen
ser guirnaldas y cintas. Este modelo de representación recuerda a un cierto tipo de
representación de la diosa Ceres.
El resto del espacio del disco está decorado con elementos vegetales, muy estiliza-
dos, que podrían corresponder a posibles espigas.

III. Nº de Inv. 10.570 (Figura 5)


- Procedencia: Mérida. Descontextualizado.
- Características técnicas: Arcilla de color ocre-grisáceo con micas doradas, peque-
ños fesdelpatos y algunos granates. Está rota y una de sus esquinas quemada en algún
un proceso deposicional.
- Dimensiones: Es un fragmento que no llega a representar ni una cuarta parte del
todo de la pieza. Mide 5,5 cm. de alto y 3,5 cm. de ancho. Tiene un doble grafilado,
aunque poco marcado e irregular. La separación de la grafila es de 2 mm. y su grosor
oscila de los 1,7 cm. a 1,3 cm.
- Descripción: Es un lateral de una pieza circular y lo poco que queda de su parte
ornamentada se corresponde una decoración incisa muy profunda de lo que parece
ser un tallo grueso con cuatro y tres hojas por todo su entorno.

3. Paralelos peninsulares y extrapeninsulares.


En suelo hispano destacamos los siguientes ejemplares:
- El de la colección Fernando Calzadilla de Badajoz. En este se representan alegó-
ricamente las cuatro estaciones del año (GARCÍA y BELLIDO, 1957).
- El localizado en la Alcudia (RAMOS FOLQUÉS, 1955). Aparece plasmado un
león en actitud activa (Figura 6, nº 7).
- Uno procedente del Cerro de los Santos -Montealegre del Castillo, Albacete-

Huelva en su historia - 2ª época ∙ Vol. 13 ∙ 2010 ∙ [15-30] ∙ ISSN 1136-6877 © Universidad de Huelva
20 Mª Eulalia Gijón Gabriel • Macarena Bustamante Álvarez.

(SERRANO VAREZ, 1987) donde aparece la representación de un cérvido que


se ha pretendido relacionar con Diana (Figura 6, nº 1).
- Uno procedente de las excavaciones del Cabecico del Tesoro en Verdolay fecha-
do en el I a.C. En él se representa la escena de la loba capitolina (LILLO, 1981,
nº 1) -Figura 6, nº 6-
- De Murcia también se dio a conocer otro ejemplar en el que aparecía represen-
tado Dionisos y por paralelos interpretado como una plasmación de la tutela
cósmica (LILLO, 1981, nº 2) -Figura 6, nº 4-
- Uno de los sellos más controvertidos procede de una colección particular de
Murcia (LILLO, 1981, nº 3-4). Este sello aparece impreso en sus dos caras y que
fue relacionada con el culto a Ceres (Figura 6, nº 3).
- Un sello con decoración de pavo real procedente de Lorquí (LILLO, 1981, nº
4) -Figura 6, nº 2-.
- Otro sello procede de Cehegín (LILLO, 1981, nº 5) en el que se representa un
macho cabrio en movimiento todo ello inserto en un paisaje frondoso (Figura
6, nº 5).
- Un sello procedente de Jumilla (Murcia), en el que de nuevo encontramos la
representación de ovicáprido vinculado a rituales agrarios. El mismo se caracte-
riza por presentar un ovicáprido en movimiento sobre un paisaje con decoración
fitomórfica frondosa. La escena aparece inmersa en triple orla lisa y simple flan-
queada en su zona interior con una gráfica enjoyada (Figura 6, nº 11 y Figura
7).
- Los dieciocho ejemplares localizados en Córdoba (DE LOS SANTOS, 1949) en
los que la variedad decorativa es la nota predominante. Es interesante observar
como estos ejemplares aparecen grafitados. Esto lejos de ser el sello de alfarero
como planteaba su investigador parece ser una marca de propiedad (Figura 8).
Para el caso Marroquí encontramos dos ejemplares claramente romanos prove-
nientes del entorno de Tamuda (Tetuán) –Figura 6, nº 8-. En el primero de ellos se
nos representa a una individuo con (oulós) flauta doble en mano y gorro al estilo frigio
(TARRADELL, 1950, lám. LVIII, nº 4-5). A la izquierda de la escena aparece una
rama posiblemente de palma que se ha querido vincular con un Adonis. En segundo
lugar destacamos un ejemplar donde se representa un individuo cabalgando sobre un
animal mitológico marino (FUMADÓ, 2006). Junto a estas encontramos un con-
junto de piezas de época feno-púnica que no trataremos al no vincularse directamente
con las estudiadas (Figura 6, nº 10).

4. Hacia una sistematización de los sellos de panaderos peninsulares.


A la hora de valorar en conjunto estas piezas advertimos que nos movemos ante
ejemplos que pueden tener un doble significado: gremial y ritual. Para el caso ritual
puede estar bifurcado en dos vertientes: una genérica y otra relacionada directamente
con el culto imperial.
Si analizamos todas las piezas se repite un esquema físico común entre ellas que
pueden responder a una estandarización de las mismas.

Huelva en su historia - 2ª época ∙ Vol. 13 ∙ 2010 ∙ [15-30] ∙ ISSN 1136-6877 © Universidad de Huelva
Los sellos romanos de panadero ... 21

Figura 6.- Sellos de panaderos documentados en la Península Ibérica

- En primer lugar todos están hechos en cerámica. Este hecho que nos puede
parecer normal no se repite en los sellos de panaderos “epónimos” que han sido
hallados en Pompeya, los cuales a modo de sello nominativo aparecen sobre
metal, sobre todo en bronce.
- En segundo lugar todos presentan una morfología circular siendo la medida más
menos estándar por lo que servirían para crustulae estandarizadas y posiblemente

Huelva en su historia - 2ª época ∙ Vol. 13 ∙ 2010 ∙ [15-30] ∙ ISSN 1136-6877 © Universidad de Huelva
22 Mª Eulalia Gijón Gabriel • Macarena Bustamante Álvarez.

comunales. Esta estandarización parece que se diluye al avanzar en el tiempo, al


respecto el tercer ejemplar que caracterizamos como tardío presenta unas dimen-
siones sensiblemente inferiores, que servirían para panecillos más pequeños que
se ajustarían al individualismo propugnado por el cristianismo.
- En tercer lugar se repite un esquema productivo más menos estandarizado. Así
en las zonas más extremas a modo de gráfila encontramos una orla lineal conti-
nua que facilitaría el contenido de la masa y el mejor estampillado de los sellos.
También encontramos una rama fitomórfica esquematizada en alguno de los ex-
tremos distales de la pieza. Ésta evocaría a Ceres como divinidad protectora del
campo y de sus frutos, sobretodo del trigo, con el que se fabricaría estos pane-
cillos. Para finalizar la escena sería de carácter religiosa o mitológica, a excepción
de la pieza documentada en Pompeya donde se observa un pragmatismo claro
(Figura 6, nº 9). Es muy interesante valorar las piezas halladas en centro Europa
que aluden más bien a un culto imperial. Este esquema se aleja de los ejemplares
feno-púnicos que plantean un esquema más simple cargado de simbolismo fito-
mórfico y sobre todo de un horror vacui patente.
- En cuarto lugar existe un gran número de ellos que aparecen (LILLO, 1981,
193) en contextos rurales, aunque la mayor parte de ellos se encuentran des-
contextualizados. Podrían tener como excepción el ejemplar documentado en
Tamuda en el que se ha querido ver una íntima relación con el mundo marino
y la pesca heróica
- (Figura 6, nº 10) (BERNAL, 2009).
Advertimos como estas piezas aparecen en números escaso lo que nos indican un
uso poco extendido de estos sellos. Este hecho nos puede dar las pautas para con-
siderar estas piezas como excepcionales y usadas en muy contadas ocasiones, como
festividades o conmemoraciones.
En cuanto a la cronología de los dos ejemplares completos propuestos apostamos
por momentos posteriores a época Trajanea por las características decorativas de las
piezas. De todas formas lo mismo que pasa con nuestros ejemplares ocurre con la
mayor parte de los otros sellos documentados, se encuentran descontextualizados y
procedentes de excavaciones y/o donaciones muy antiguas. Al respecto es muy escla-
recedora la aparición de un solo ejemplar en Pompeya, pero con una representación
funcional propiamente dicha. Esto nos podría indicar que la proliferación de los se-
llos, al menos con significación religioso/votiva, se produce en momentos posteriores
al reinado de Vespasiano.
El ejemplar, se caracteriza por presentar pastas que podemos calificar como “tar-
días” con desgrasantes gruesos y poco amasado que se alejan de la finura y la depura-
ción de las otras piezas que se acercarían por sus dimensiones a lo que Deonna deter-
minó como eulogiae, es decir, panecillos individualizados y bendecidos (DEONNA,
86-87).
Genéricamente estos ejemplares pueden ahondar sus raíces en época republicana
(LILLO, 1981, 193), aunque no descartamos que tengan relación con las terracotas
“placas” (Grupo IX, tipo II) de época fenicio-púnicas estudiadas por Almagro en la

Huelva en su historia - 2ª época ∙ Vol. 13 ∙ 2010 ∙ [15-30] ∙ ISSN 1136-6877 © Universidad de Huelva
Los sellos romanos de panadero ... 23

colección de Ibiza así como todo el elenco antes resaltado en el estudio de los ejem-
plares de Tamuda. Al respecto plantean parecidos bastante claros con los ejemplares
romanos pero con esquemas más complejos (ALMAGRO, 1980, Lám. LXXVI, nº
168, 170 y 171 y Lám. LXXIV, nº 163 y 165).

5. El pan en la sociedad romana, algo más que un alimento.


El pan, como por todos es sabido, fue un producto de primera necesidad. Este
hecho generó un culto extremo al pan y todo lo que le rodeaba. En este contexto las
divinidades protectoras de la tierra y la fertilidad, caso de Juno y Ceres estuvieron pre-
sentes ampliamente en el devenir iconográfico romano. Su significado pragmático y
cotidiano pronto pasó a ser un elemento más en el mundo religioso. Así el ingerido de
panes con representaciones de estas divinidades se hizo un acto común en el imperio
romano siendo prueba de ello los sellos de panaderos.
Tampoco debemos olvidar el estatus social que adquirieron los panaderos en el
mundo romano. Carrera política, extravagancias o grandes edificios funerarios son
algunos de los ejemplos del estatus alcanzado por estos individuos destacándose a
Marco Virgilo Eurysaces y su mausoleo en Porta Maggiore, Roma.
Como ya hemos dicho la representación de panes o divinidades protectora de los
frutos de la tierra se hibridaron en las manifestaciones iconográficas. Así los panecillos
vinieron a representar las ofrendas pudiéndose presuponer en algunas representacio-
nes de terracotas oferentes (Figura 8). Al respecto en Mérida están muy extendida
las mismas, uniéndose a esta temática el banquete ritual representado en el relieve de
Noé (ARCE, 2000) donde se observa una serie de panecillos y rosquillas en la escena
central (Figura 10).

6. Conclusiones
Con este estudio hemos querido valorar tres piezas inéditas depositadas en el
Museo Nacional de Arte Romano de Mérida. En primer lugar una con una clara
representación de Júpiter con haces de rayo y demás atributos de dicha divinidad. En
segundo lugar otro con la representación de Ceres y el tercero muy fragmentado pero
con al menos una rama fitomórfica en uno de los lados.
Funcionalmente creemos que serían los objetos utilizados para sellar panecillos o
pastelillos a comer en fiestas concretas. Esto vendría vinculado en primer lugar por
la ausencia de piezas en positivo en ningún tipo de soporte, de igual modo la escasa
aparición de estas piezas puede ser otro hecho a tener en cuenta y en último lugar
por las representaciones alegóricas y religiosas que en ellas se plasman. Tampoco po-
demos olvidar los paralelos etnográficos que poseemos y que para el caso extremeño
son amplios en el Museo Arqueológico de Cáceres en su sección etnográfica, que nos
demuestran un constante sellado de las piezas incluso hasta momentos cercanos a la
actualidad.
Esperamos que próximamente aparezcan sellos en contextos arqueológicos claros
que nos puedan aportar nuevos datos para su conocimiento.

Huelva en su historia - 2ª época ∙ Vol. 13 ∙ 2010 ∙ [15-30] ∙ ISSN 1136-6877 © Universidad de Huelva
24 Mª Eulalia Gijón Gabriel • Macarena Bustamante Álvarez.

7. Bibliografía
ADRIANI, A. (1933): “A proposito delle repliche degli Hermes Lansdowne e Ri-
chelieu, esistenti nel Museo Nationale di Napoli” in Bulletino della Commissione
Archeologica Comunale, LXI, 1933, 59-78.
ALFÖLDI, A. (1938): Tonmodel und Reliefmedaillons aus den Donailänder. Disserta-
tiones Panonicae. Laureae Aquicenses, I, Leizpig.
ALMAGRO GORBEA, M. (1980): Museo Arqueológico Nacional. Catálogo de terra-
cotas de Ibiza, Madrid.
ARCE MARTÍNEZ, J. (2000): “Noé en Mérida (Augusta Emerita)”, Archivo español
de arqueología, 73, nº 181-182, 285-294.
BERNAL CASASOLA, D. (2008): “Roma y la pesca de ballenas. Evidencias en el
Fretum Gaditanum”, BERNAL, D. (ed.) Arqueología de la pesca en el Estrecho de
Gibraltar, 259-287.
BUSTAMANTE, M., GIJÓN, E. y OLMEDO, A. (e.p.): “Un nuevo molde de te-
rracota en Augusta Emerita”, en XI Coloquio Internacional de Arte Romano Provin-
cial, Mérida 2009.
D’ORIANO, R. (1989): “Matrici tipo Uzita-Ostia dalla Sardegna”, en L` Africa Ro-
mana, Atti del VI Convengo di Studio, Sassari 1988, 505-512.
DE LA TORRE, J. (1921): “Hallazgos arqueológicos junto a Córdoba”, Boletín de la
Real Academia de la Historia, LXXIX, 419-421.
DE LOS SANTOS, S. (1949): “Moldes de barro romano”, Actas y memorias de la
Sociedad Española de Antropología, Etnografía y Prehistoria, Tomo XXIV, 1-4, Ma-
drid, 62-82
DELATTRE, P. (1897): La necropole penique de Douimes (a Carthage). Fouilles de
1895 et 96, Paris.
DEONNA, W. (1919): “Notes d’Archeologie Suisse. Decoration murale de Corsier”,
Anzeiger für Scheweizerische Altertunskunde, NF.
DESBAT, A. (2006): “La céramique comme vecteur de l’idéologie impériale : l’exem-
ple des gobelets d’Aco et des médaillons d’applique de la vallée du Rhône “ en
NAVARRO CABALLERO, M. y RODDAZ, J.M. La transmission de l’idéologie
impériale dans l’Occident romain, Bourdeaux, 297-305.
DREXEL, FR. (1916): “Crustulum et mulsum”, Römisch-germanisches Korresponden-
zblatt, IX, 17-22.
FUMADÓ ORTEGA, I. (2006): “El caballero de Tamuda”, L’Africa Romana 16 (Ra-
bat, 2004), Roma III, 2009-2018.
GARCÍA y BELLIDO, A. (1957): “Sello de panadero”, Archivo Español de Arqueolo-
gía, XXX, 1957, 237-238.
LILLO CARPIO, P.A. (1981): Memorias de historia antigua, nº 5, pp. 187-194.
LIPPOLD, G. (1950): Die grieghische plastik hanbbuch der ärchaeologie, III, 1, Mu-
nich.
MÜLLER, A. (1909): “Die Neujahrsfeier im römischen Kaiserreiche”, Philologus,
LXVIII, 4.
OVERBECK, A. (1866): Pompeji in seinen Gebäuden,

Huelva en su historia - 2ª época ∙ Vol. 13 ∙ 2010 ∙ [15-30] ∙ ISSN 1136-6877 © Universidad de Huelva
Los sellos romanos de panadero ... 25

PASQUI, A. (1906): “Ostia. Nuove scoperte presso il Casone”, Notizie degli Scavi
Antique, 357-373.
QUINTERO, P. (1942): “Moldes y matrices de barro procedentes de Tamuda”, Re-
vista Mauritana de Tánger, 172, …Tetuán.
RAMOS FOLQUÉS, A. (1955): “Memoria de las excavaciones practicadas en La
Alcudia de Elche. Campaña 1940, 1942, 1947 y 1948”. Noticiario Arqueológico
Hispánico. Cuadernos 1-3, 1953. 107-133.
SERRANO VAREZ, DANIEL (1987): “Sello de Panadero del Cerro de los Santos
(Montealegre del Castillo, Albacete”, Al-Basit, 13 (21), 65-68.
TARRADELL, M. (1950): “Sobre unos discos de cerámica procedentes de Tamuda
y sus paralelos”, I Congreso Nacional de Arqueología, Almería 1949, Cartagena,
326-330.
VIVES, J. (1917): Estudio de Arqueología cartaginesa. La necrópolis de Ibiza, Madrid.

Huelva en su historia - 2ª época ∙ Vol. 13 ∙ 2010 ∙ [15-30] ∙ ISSN 1136-6877 © Universidad de Huelva
26 Mª Eulalia Gijón Gabriel • Macarena Bustamante Álvarez.

Figura 1.- Ubicación de Augusta Emerita.

Figura 2.- Sello procedente de la Colección de D. Fernando de Calzadilla (GARCÍA


y BELLIDO, 1957).

Huelva en su historia - 2ª época ∙ Vol. 13 ∙ 2010 ∙ [15-30] ∙ ISSN 1136-6877 © Universidad de Huelva
Los sellos romanos de panadero ... 27

Figura 3.- Sello de panadero procedente del MNAR con representación de Júpiter (nº
de inventario 17422).

Figura 4.- Sello de panadero procedente del MNAR con representación de Ceres (nº
de inventario 37514).

Huelva en su historia - 2ª época ∙ Vol. 13 ∙ 2010 ∙ [15-30] ∙ ISSN 1136-6877 © Universidad de Huelva
28 Mª Eulalia Gijón Gabriel • Macarena Bustamante Álvarez.

Figura 5.- Fragmento de sello de panadero procedente del MNAR con representación
de fitomórfica (nº de inventario 10570).

Figura 6.- Sellos de panaderos documentados en la Península Ibérica

Huelva en su historia - 2ª época ∙ Vol. 13 ∙ 2010 ∙ [15-30] ∙ ISSN 1136-6877 © Universidad de Huelva
Los sellos romanos de panadero ... 29

Figura 7.- Sello procedente de la Villa de los Cipreses, Jumilla (montaje a partir de
foto cortesía del Museo Arqueológico de Jumilla).

Figura 8.- Alguno de los sellos aparecidos en Córdoba (a partir de DE LO SANTOS,


1949).

Huelva en su historia - 2ª época ∙ Vol. 13 ∙ 2010 ∙ [15-30] ∙ ISSN 1136-6877 © Universidad de Huelva
30 Mª Eulalia Gijón Gabriel • Macarena Bustamante Álvarez.

Figura 9.- Terracota aprehendiendo un posible panecillo en su mano derecha proce-


dente de la necrópolis Norte (Mérida, Badajoz).

Figura 9.- Relieve de Noé expuesto en el MNAR de Mérida.

Huelva en su historia - 2ª época ∙ Vol. 13 ∙ 2010 ∙ [15-30] ∙ ISSN 1136-6877 © Universidad de Huelva

También podría gustarte