Avances científicos acerca de la forma de curar el TOC en

2017

Hay que poner en contexto primero que nada que el Trastorno Obsesivo Compulsivo se
considera una enfermedad que sufren individuos con patrones de miedos, y acostumbra a
resultar muy complicado de superar, y esto crea mucho sufrimiento en muchos colectivos lo
que constituye un problema. emociones , el estrés mantiene la mente en estado de alarma
por temores y malestares. Frecuentemente el miedo generada por sus pensamientos
obsesivos, que frecuentemente pueden perjudicar su integridad física y mental. En concreto
dichos efectos angustiantes son consecuencia de el Trastorno Obsesivo Compulsivo, que en
realidad es un trastorno de miedo. Los fuertes niveles de ansiedad suelen ser tan altos que
el ciudadano centra su atención reiteradamente en el tipo de pensamiento que lo intimida y
actúa de manera compulsiva. No se conoce cual puede ser el motivo del Trastorno Obsesivo
Compulsivo, aunque se piensa que el único modo de curarlo suele ser erradicar totalmente
causa.

Por ejemplo, uno de los actos compulsivos más frecuentes consiste en el de la higiene. La
presencia de miedo repetido y obstinado a que los virus consigan afectarlos hace que sea
necesario para estos pacientes estar seguros a ciencia cierta de que su cuerpo o sus
ambientes luzcan limpios, al punto de que comprueban de manera reiterada que la limpieza
sea óptima. Para ello limpian obsesivamente la misma superficie de forma preceptiva hasta
que se sienten satisfechos. Otro caso similar es el de los actos de revisión. Estos sujetos
precisan una y otra vez asegurarse todo lo que se haga prudente que una tarea fue
concluida. Algunos ejemplos son cerrar una ventana, apagar algo que está encendido,
desplazar algo de un lugar a otro, por solo mencionar algunos.
Si bien tras de muchos años de estudios aún no está claro cuál puede ser la causa o cura
del Trastorno Obsesivo Compulsivo, es decir, la justificación por la que progresa el patrón
mental en un sujeto, muchos estudios señalan que normalmente sucede durante la infancia
cuando tendría sus cimientos este problema. La la alta demanda en los años de formación
de un niño pequeño o el maltrato hasta los 7 años de desarrollo, van a establecer
inevitablemente factores de incertidumbre y baja autoestima en su identidad. Partiendo de
ese factor inconsciente, el individuo es capaz de moverse hacia adelante sin problemas.
Aunque ante algún suceso embarazoso el problema comienza a de repente dispararse y
poco a poco llegaría a tomar control del comportamiento de la persona con TOC.

El tipo de síntomas puede aparecer y desaparecer, aliviarse, agudizarse o unirse a la rutina

de vida de un individuo. Eso dependerá del nivel del desorden, la correcta aplicación del
modo de curación y la voluntad del paciente de curar el TOC y esfuerzo liberarse. A veces
resulta útil la psicología conductiva y el psicoanálisis como por ejemplo los ejercicios de
libros de auto ayuda. Aunque frecuentemente estos no son efectivos y fracasan
enormemente y el paciente vive atrapado en su mismo dolor. Pero por supuesto se puede
conseguir la cura del Trastorno Obsesivo Compulsivo y salir del estado de angustia
existencial que el paciente tiene que sufrir, como consecuencia de este conjunto de
síntomas que les arrebató la libertad. Generalmente la población con proceso gasta mucho
tiempo y ahorros en psicólogos intentando conseguir erradicar la causa del TOC y revisando
mucho por Internet sobre algún tratamiento terapéutico.

La presencia de actos compulsivos suele acompañar a las personas que sufren con el
Trastorno Obsesivo Compulsivo. Enmarca todo un cuadro de insuficiencias en la
personalidad del sujeto. El trance de no tener control sobre los pensamientos y estar
viviendo en un constante estado de ansiedad y estrés no debe ser fácil. Por consiguiente,
estos sujetos, conscientes del hecho que su vida se vuelve difícil sin que de manera
voluntaria consigan actuar en consecuencia, se se hunden de tristeza e insatisfacción y es
allí cuando la presencia de pensamientos obsesivos tiene lugar y comienza a irrumpir. El
papel de la responsabilidad y personas próximas al paciente resulta fundamental para
reducir su carga. Es necesario ser tolerantes ya que la conducta compulsiva es automática,
aunque necesaria para estos sujetos y reprimir la actuación solo aumentará los niveles de
ansiedad por no tener la posibilidad de poner en práctica la actuación que para ellos es
ineludible.