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Arquitectura de bodegas

La habitual idea de una bodega oscura, con rastros de humedad en sus paredes y escasa
sofisticación parece haber quedado relegada a pocas regiones en el mundo. La tendencia habla
de lujosos edificios que albergan tanques, barricas y botellas pero que se amplían a spas,
restaurantes, salas de conferencia y hoteles boutique. Todo esto, claro, teniendo a una palabra
como centro de la cuestión: impactar. Bienvenidos a las nuevas bodegas del Siglo XXI.

Por Mariano Braga

Colaboran en esta nota:

César Pelli

César Pelli es uno de los arquitectos más prestigiosos y reconocidos del mundo. Oriundo de Tucumán,
hoy reside en New York, en donde tiene su estudio. RCV tuvo una charla exclusiva con el arquitecto
de alguno de los edificios más famosos del planeta: las Torres Petronas, en Kuala Lumpur, el World
Financial Center de Nueva York y la Torre Repsol YPF en Buenos Aires, entre muchísimos otros.

Clorindo Testa

Clorindo Testa es uno de los arquitectos argentinos más importante de la historia, además de ser un
reconocido artista plástico con obras que se reparten en todo el mundo. Ha realizado en Argentina
obras ícono de Buenos Aires como el Museo Naval y la Biblioteca Nacional, o el famoso balneario La
Perla, en la ciudad de Mar del Plata.

Edgardo Gottfried

Edgardo Gottfried es arquitecto, pintor y escritor, oriundo de Mendoza. A lo largo de su carrera ha


sido director de arquitectura de proyectos tales como el Monumento Conmemorativo a las Víctimas
del Atentado Terrorista del 11-M en Atocha, Madrid, España o la Torre de la Paz en Manhattan, New
York, USA, entre otros.
Estudio Bórmida & Yanzón

Es el estudio de arquitectos argentinos con mayor cantidad de premios y reconocimientos en lo que a


construcción de bodegas se refiere. Desde sus instalaciones en Mendoza, y con la dirección de los
arquitectos Eliana Bórmida y Mario Yanzón, han trazado los diseños de Bodegas Salentein, O.
Fournier, Vistalba, Séptima, La Rural, Navarro Correas, Norton y Finca Flichman, entre otras.

Gabriel Japaz

Es uno de los arquitectos argentinos con más trayectoria en la construcción de bodegas. Desde el año
2000, fecha en la que inició su estudio ‘Gabriel Japaz Arquitectos’, ha tenido a su cargo los proyectos
de Altos Las Hormigas, NQN, Bodegas Caro, Renacer, Chañarmuyo State, Patagonian Wines, Cuvelier
Los Andes y Viña Cobos, entre otros.

José Manuel Ortega

Oriundo de Burgos, España, José Manuel Ortega Gil Fournier es el Presidente de Bodegas y Viñedos
O. Fournier, con propiedades en Ribera del Duero y Mendoza. Fue el diseño arquitectónico de sus
instalaciones en La Consulta el que le otorgó el quinto puesto dentro de las 10 maravillas
arquitectónicas del mundo del vino, logrando el único puesto para una bodega latinoamericana.

Mario Botta

Es uno de los máximos referentes de la arquitectura mundial. Oriundo de Ticino, en Suiza, estudió en
la Escuela de Artes de Milán y en la Universidad de Arquitectura de Venecia. Es autor de imponentes
obras como la Biblioteca Municipal de Dortmund, la restauración del Teatro Alla Scala en Milán o la
bodega Petra, cuyo diseño mereció el sexto puesto dentro de las 10 bodegas más lindas del mundo.

Agradecemos, también, los testimonios y colaboraciones de Alejandra Fehrmin de Ruca Malén,


Arq. Gustavo Albera, Arq. Luisa Bórmida Yanzón, Arq. Marcelo Eduardo Braga, Cecilia Zunino,
Elizabeth Acas del Estudio Pelli Clarke Pelli Architects, Fernando Muñoz de Toro, Francisco
Hugalde de Viniterra, José Jesús Millán y Carlos Cornejo de Los Toneles, Juan M. Del Campillo
de Achával Ferrer, Lic. Carla R. Garraffa de Bodega Vistandes, Lucas Nemesio de NQN, Maria
Pia Kussrow de Bodega El Esteco, Sibila Genolet de Tempus Alba, Stephanie Morton-Small y
Diego Salguero de Finca Decero y Virginia Rivera de Starwood Hotels & Resorts.
¿Cuál es el sentido de tener una bodega con un diseño peculiar? ‘Llamar la atención’ nos
respondió Clorindo Testa sin titubear: ‘Aunque suene difícil de creer, es algo que luego
repercute en el vino, en las botellas y en las ventas.’

Y es que, como afirma el Estudio de Arquitectos Bórmida & Yanzón, el carácter de una bodega
es un atributo fundamental: ‘contribuye a definir la imagen de marca y la identidad del
producto ante el potencial consumidor y así ayuda a hacerlo memorable.’ Es eso,
seguramente, lo que ha hecho que las bodegas que hoy en día surgen en el mercado argentino
e internacional (y son muchas, por cierto) lo hagan teniendo una propuesta creativa, no solo
con etiquetas insólitas, variedades de uva no tradicionales o el uso de medios alternativos de
comunicación. La creatividad está a la orden del día y, como asegura el Arq. Edgardo Gottfried,
‘un empresario inteligente usa la creatividad como ventaja competitiva.’

Por eso en esta nueva nota de tapa de la Revista del Club del Vino les vamos a proponer
entrometernos en bodegas de todo el mundo con diseños extravagantes, edificios clásicos a
los que se les ha sabido dar un nuevo enfoque y muchos (muchísimos) ejemplos de obras
arquitectónicas que darán de qué hablar.

Idear el diseño de una bodega no es una tarea sencilla. Habrá que evaluar el lugar, el
presupuesto, las intenciones del arquitecto y los requisitos del dueño. Este trabajo previo de
entendimiento es, quizás, la piedra fundamental para que el resultado sea exitoso. ‘Cuando
Vittorio Moretti me pidió el diseño de su bodega para sus nuevos viñedos en Suvereto, me
pareció entender que más allá de los aspectos funcionales, la bodega necesitaba, sobre todo,
generar un imagen que pudiese comunicar la pasión y el compromiso necesario para apoyar
esta aventura.’ Estas son las palabras que utilizó Mario Botta, una de las máximas eminencias
de la arquitectura mundial, para describir su trabajo en Petra, una bodega en el corazón de la
Toscana… un lugar maravilloso donde los viñedos y la naturaleza parecen dominar por
completo el espacio.

Nada que nos resulte extraño en Argentina, donde ya casi es costumbre ver bodegas
impactantes brotadas de una tierra en donde parece no existir nada más: edificios rodeados de
paisajes inexplicables por su belleza. Fuentes de agua, viñedos o cordones montañosos de
fondo son los ejemplos más representativos y buscados para impresionar a los visitantes,
llevando el concepto de belleza hasta los más absolutos límites del placer visual.
Clorindo Testa asegura que este entorno ‘definitivamente beneficia a la construcción, porque
no existen reglamentaciones a las que atenerse. No hay medianeras, por lo que va a ser una
obra que se despegue sola. No es sólo una fachada lo que se ve, sino todo el edificio.’

Y esto en la Argentina se ve potenciado hasta casi el infinito por el ambiente original que rodea
a la gran mayoría de las bodegas nacionales; el arquitecto Marcelo E. Braga asegura que ‘la
presencia de un entorno natural único da la posibilidad para que el arquitecto se nutra y logre
elaborar una imagen expresada dentro de un perímetro libre, en un fabuloso contexto donde
el edificio aparezca flotando, confundido y enraizado con la naturaleza.’

A estas palabras se suman las de Edgardo Gottfried, quien asegura que ‘el entorno es
fundamental: el caminar por el lugar de implantación de la bodega, tomar del entorno las
vistas, el aroma, sus brisas, los sonidos, todo ello es fuente de inspiración para lograr una
buena y contundente idea, en la que se basará todo el proyecto.’ Y el Arq. Gabriel Japaz,
solamente para nutrir un poco más la idea, confiesa que ‘hay muchas puntas que uno puede
tomar como disparador, pero sin dudas lo que más me inspira es sentarme en el lugar por
horas, hasta que el paisaje me cuente qué es lo que necesito.’

Sólo alcanza con visitar Mendoza, Cafayate o Rio Negro para comprender, casi a la perfección,
la desnudez y la aparente falta de vida de esas regiones, donde solo sobrevive la vid y la
exuberancia de esos raros edificios nuevos.

La evolución del mercado vitivinícola

Es indudable que, en las últimas décadas, hubo una fuerte reconversión dentro del mercado
del vino. La tendencia a reemplazar las prácticas en la vitivinicultura y centrar los esfuerzos en
mejorar los procesos de producción hizo que los consumidores también comiencen a dedicar
más su tiempo a leer, ver y hablar (incluso más que disfrutar) del vino. Como puntualiza el
arquitecto Marcelo E. Braga, “los lazos y vínculos que propone el vino ya no tienen límites
sensitivos ni sentimentales. Todo este cataclismo de cambios y sensaciones no podían ser
albergados, elaborados y expresados en los antiguos edificios fríos y lúgubres… era necesario
mostrar esta imagen, esta revelación, en una nueva ‘caja de resonancia’ que contenga en su
volumen la capacidad de hacer explotar el contenido emocional de sus visitantes.”
¡Y vaya si lo logran! Tomemos el ejemplo de la bodega española Ysios, obra del genial Santiago
Calatrava (el arquitecto que diseñó, entre muchísimas otras cosas, el Puente de la Mujer en
Puerto Madero y la Ciudad de las Artes y de las Ciencias en Valencia, España, su tierra natal)...
un edificio inspirado en exaltación de las curvas que insinúa una fila interminable de barricas.

Sin embargo, la opinión de José Manuel Ortega, de O. Fournier, plantea otro punto de vista por
demás interesante: ‘Yo no estoy seguro que cambió el mercado; creo que siempre hubo
bodegas que realizaron esfuerzos arquitectónicos que probablemente en su momento fueron
consideradas vanguardistas. Yo, por ejemplo, estoy enamorado de las bodegas de finales del
siglo XIX que todavía se pueden apreciar en Mendoza como la bodega Los Toneles, una de las
más bonitas que haya visto en el mundo.’

El equilibrio entre diseño y funcionalidad

La clave en la arquitectura de cualquier bodega es la de poder amalgamar un gran diseño con


su aptitud para elaborar vinos, en definitiva, el fin primero, el último y el fundamental. ‘En
bodegas con volcado carácter arquitectónico, algunas veces se olvida que deben ser diseñadas
para elaborar vino en las mejores condiciones técnicas posibles’, segura José Manuel Ortega.

Para apoyar esta visión, Clorindo Testa sugiere una visión interesante: ‘A veces veo a las
bodegas como un despropósito, casi como si fuesen un templo. En realidad, una bodega existe
para hacer vinos… tener una especie de santuario para las barricas me parece un poco
exagerado.’

Y es que, de acuerdo al arquitecto Edgardo Gottfried, son 3 las características que no deberían
faltar en el diseño de ninguna bodega: ‘primero la funcionalidad, ya que, al ser edificios de
carácter industrial, es muy importante que todo funcione como debe; en segundo término, un
buen diseño de bodega debe respetar al entorno y, finalmente, la creatividad en la
arquitectura. Es muy importante que los edificios que se diseñen correspondan a la época en
que vivimos, el Siglo XXI debe reflejar el espíritu de nuestros tiempos, que no es el de nuestros
abuelos.’
¿Cada bodega con su estilo?

¿Existe alguna receta preestablecida que dice que una bodega boutique deba tener un diseño
distinto (incluso diametralmente opuesto) a aquellas de enormes volúmenes? El arquitecto
Gabriel Japaz es determinante: ‘no hay formulas que funcionen para todas las escalas; incluso
bodegas del mismo tamaño y filosofía pueden trabajarse con imágenes totalmente diferentes.
En Argentina tenemos tal vez el concepto muy arraigado de que los buenos vinos derivan de
bodegas con una imagen arquitectónica de grandes masas, pero otros países como Australia,
Nueva Zelanda o Estados Unidos tienen muy buenos ejemplos de arquitectura bodeguera más
emparentada con lo etéreo; incluso sus vinos son comercializados con una imagen joven y
divertida.’

Sin embargo, podríamos declarar algunos tips que diferencian tres estilos básicos y que, desde
el estudio Bórmida & Yanzón, nos detallan:

• Las Bodegas Boutique son pequeñas y elaboran vinos de calidades Reserva y Premium,
con varietales finos y cuidados procesos. La mayoría de estas bodegas se interesa
mucho por su imagen y su arquitectura, y abundan las que utilizan edificios nobles,
reciclados. Se suelen acompañar con restaurantes y posadas.

• Las bodegas que apuntan a una calidad óptima, tienen, necesariamente, los procesos
de elaboración más rigurosos y están atentas a integrar los conocimientos enológicos
de la tradición con las mejores propuestas innovadoras. Sus espacios son altamente
calificados. Algunos de los más característicos son las cámaras de frío, las dobles mesas
de selección de frutos, naves con tanques de menor tamaño, cavas de guarda en
barricas y botellas con riguroso control higrotérmico. También estas bodegas utilizan
cada vez más sistemas por gravedad, para evitar el uso de bombas. Su arquitectura es
destacada. A menudo este tipo de bodega forma una parte de un complejo que
también puede elaborar otras líneas de vinos.

• Las plantas de elaboración de grandes volúmenes son más industriales, tienen grandes
naves de fermentación y conservación con tanques de mayor capacidad. Si elaboran
sólo vinos jóvenes no tienen cavas, requieren vastos depósitos de insumos y de
productos terminados y amplias playas para movimiento de camiones.
La arquitectura de bodegas y el enoturismo

Una de las marcas de vinos más famosas de España es ‘Marqués de Riscal’. Sus bodegas están
dispersas por toda la península ibérica pero una de sus instalaciones, situada en Rioja,
sobresale por su singularidad: es la llamada ‘Ciudad del Vino’, un complejo que integra la
antigua bodega (la más vieja de la DOC, que data del año 1858) con un nuevo edificio diseñado
por el arquitecto canadiense Frank O. Gehry, con un hotel, tiendas, un spa de vinoterapia,
restaurantes y un centro de convenciones. Es, como ellos mismos lo llaman, ‘un mundo de
sensaciones vivas’ donde el ultra creativo diseño arquitectónico se combina con el enoturismo.
Una curiosidad: cuando se planteó el proyecto, el equipo de Marqués de Riscal dudaba que
Gehry aceptara; por eso, cuando le presentaron la propuesta, y para asegurar su participación,
se le regaló un vino cosecha 1929, fecha de su nacimiento. De más está decir cuál fue su
respuesta.

Pero volvamos a la Argentina. El arquitecto Gabriel Japaz aclara que ‘hoy una bodega no
solamente es un lugar donde se produce vino; su uso se ha hecho extensivo a otras actividades
complementarias que retroalimentan la actividad y la enriquecen. Estos edificios, que en un
comienzo fueron sólo para uso industrial, hoy son museos, restaurantes o salas de concierto.’
La arquitectura, por lo tanto, debe adaptarse a estos nuevos usos dando respuestas creativas y
funcionales.

En el caso de O. Fournier, por ejemplo, José Manuel Ortega asegura ‘que el diseño
arquitectónico es una parte importante del éxito de nuestra bodega con el turismo. Nosotros
queremos ofrecer una experiencia artística completa desde el arte en el vino, al arte de las
exposiciones de pintura que realizamos en la bodega, al arte de la gastronomía de nuestro
restaurante y del arte en la arquitectura.’ Precisamente, su bodega fue diseñada por el Estudio
Bórmida & Yanzón, quienes nos confesaron que ‘el interés del consumidor por la variedad que
encierra el fascinante mundo del vino ha puesto en movimiento un turismo temático
internacional que viaja para conocer los productos en sus lugares de origen y tener allí
experiencias culturales más completas, relacionadas con el disfrute de los paisajes regionales,
la gastronomía, el arte, la música, los deportes… la recepción de estos visitantes ha sido
revolucionaria en la arquitectura de vino.’
Las 10 maravillas arquitectónicas del mundo del vino

DesignCrave es un magazine online de los Estados Unidos que decidió, a principios de Junio de
este año, agrupar una decena de bodegas cuya arquitectura sobresaliese del resto. Escogió
desde estructuras imponentes hasta edificios de líneas rectas y estilo minimalista, todo bajo el
paraguas de lo que, ellos llamaron, ‘las 10 maravillas arquitectónicas del mundo del vino’.

Nosotros decidimos ir más lejos y tomar contacto con todas estas bodegas para que nos
cuenten sobre sus diseños, las características que los hacen especiales y algunos otros detalles
imperdibles. Por eso los invito a descubrir magníficas obras desde la Toscana italiana hasta las
islas neozelandesas, haciendo una parada, claro, en Argentina.
PUESTO 1
Dominus Estate
Napa Valley, California, Estados Unidos

Esta bodega fue diseñada por el estudio arquitectos suizos “Herzog & de Meuron”, los mismos
que realizaron el famoso Tate Modern de Londres, la galería de arte moderno más importante
del Reino Unido. Su diseño arquitectónico buscó integrar a la bodega en el paisaje, gracias al
uso de rocas de basalto y oficinas de vidrio que dejan entrever una fabulosa vista panorámica
de los viñedos.

Christian y Cherise Moueix, propietarios de Dominus Estate, nos confesaron en exclusiva que
‘estamos encantados de saber que nuestra bodega se incluye entre las diez mejores del
mundo desde el punto de vista del diseño y la arquitectura. Para sincerarnos, no estamos
familiarizados con esta clasificación y, por lo tanto, desconocemos cuáles fueron los criterios
utilizados. De hecho, cuando construimos la bodega, jamás pensamos en cuánta atracción iba
a generar. Igualmente consideramos el diseño de la bodega como un gran éxito ya que el
edificio funciona como una herramienta ideal para la producción de vinos y de ahorro de
energía, y su largo muro de roca se mezcla en el paisaje y hace hincapié en la importancia de la
viña; para nosotros la viña es lo importante y el diseño de Dominus expresa perfectamente
este enfoque.’
PUESTO 2
Peregrine Wines
Gibbston, Queenstown, Nueva Zelanda

Este es un edificio relativamente nuevo, inaugurado a finales del año 2003. No solamente
DesignCrave reconoció su diseño sino que también ha despertado curiosidad en prestigiosos
concursos en Inglaterra y, obviamente, Nueva Zelanda.

La bodega tiene un carácter básicamente industrial, con líneas simples y rectas que no
merecen especial atención. Sin embargo, lo que la hace única es el techo traslúcido
superpuesto que logra centrar la atención y contrarrestar en ese fabuloso paisaje natural que
mucho recuerda a nuestra Precordillera. Para confeccionarlo se utilizaron materiales de la
región y revestimientos industriales fijados directamente al acero galvanizado para el techo.
‘Supimos desde el principio que el edificio sería importante en el fortalecimiento de la marca
Peregrine Wines’, sostuvo el arquitecto neozelandés a cargo del proyecto, Christopher Kelly.
‘La cubierta del techo puede ser interpretada de varias maneras, pero, sin embargo, nosotros
nos inspiramos en la figura imaginaria que crea el halcón peregrino (de allí, Peregrine Wines) y
sus alas al volar.’
PUESTO 3
Merus Wines
Napa Valley, California, Estados Unidos

Merus Wines es una nueva bodega ubicada en el Valle de Napa y cuya construcción aún no ha
sido finalizada. El trabajo está a cargo del Estudio UXUS, fundado en el año 2003 en
Ámsterdam.

Merus significa ‘puro’, en latín, por lo que el diseño arquitectónico de la bodega se basa,
precisamente, en este concepto donde se buscó mantener cierta tradición pero combinada
con algunos toques sofisticados y singulares aplicados a las tres salas principales. La primera es
la Sala Principal de Degustación, ubicada en el edificio central, con una fusión de elementos de
diseño y estilos, buscando lograr una atmósfera confortable para la cata pero a la vez
sofisticada. La segunda es la Cava de Cata, un pequeño espacio de degustación que fue
totalmente remodelado en el interior de la bodega, y que refleja un estilo ecléctico, con una
pizarra que corre a lo largo del perímetro y cuya utilidad es la de indicar las etiquetas y
cosechas que serán incluidas en la muestra. El último de los espacios es la Cava de Eventos,
que se encuentra al final de uno de los túneles que surgen del área de recepción; en este
recinto, las paredes están pintados en color rojo, con enormes candelabros dorados y una
monumental mesa maciza en color negro.
PUESTO 4
Bodegas López de Heredia Viña Tondonia
Haro, Rioja, España

López de Heredia es la bodega más antigua de Haro, capital sentimental de la famosísima DOC
española Rioja, y una de las tres primeras de la región. Así como tradicional, gran parte de la
arquitectura de sus instalaciones se remonta al siglo XIX, con techos a dos aguas y torres y
paredes recubiertas por ladrillos.

Sin embargo, la novedad está dada a partir del año 2002 cuando, tras haber cumplido 125
años, se le encargó un nuevo diseño a la arquitecta iraquí afincada en Londres Zaha Hadid,
reconocida por la espectacularidad, innovación y atrevimiento de sus obras. Así, construyó un
stand que primeramente se presentó en la Feria Alimentaria de Barcelona y que luego se fijó
en Haro, con el objetivo de darles la bienvenida a los visitantes. La estructura, construida de un
marco metálico blanco, se funde con el entorno y accesos peatonales. Es un edificio con un
diseño arquitectónico diametralmente opuesto al de López de Heredia Viña Tondonia, pero
cuyo contraste resulta sorprendente.
PUESTO 5
O. Fournier
La Consulta, Mendoza, Argentina

Es la única bodega latinoamericana incluida en este conteo y, felizmente, es argentina. El jefe


del proyecto fue el arquitecto Gustavo Albera, del estudio Bórmida & Yanzón, quienes no
solamente han sido reconocidos en este ranking sino que, como el propio José Manuel Ortega
nos cuenta, ‘hemos ganado el premio al Mejor Diseño Arquitectónico dentro del certamen
Best of de las Great Wine Capitals, quedando segunda a nivel mundial. También el afamado
periodista americano George Taber eligió para la revista Forbes las 10 mejores bodegas del
mundo desde el punto de vista de arquitectura y enoturismo y O. Fournier fue elegida en el
cuarto lugar.’

La bodega tiene cuatro volúmenes principales: tres de ellos dedicados a los procesos de
vinificación (fermentación y almacenamiento, bodega para barricas y botellas y embotellado) y
una última sección para el centro de visitantes y el restaurante. En todos ellos se utilizaron
materiales como el hormigón armado, el cristal, el acero inoxidable y puentes de hierro y
vidrio que conectan las distintas áreas en cada volumen.
PUESTO 6
Petra
Suvereto, Toscana, Italia

Petra es una bodega realmente impactante, delineada por uno de los arquitectos más
reconocidos del mundo y partícipe en este artículo: Mario Botta. Su diseño se basa en un
cilindro de piedra Prun (típico material italiano) que es atravesado por una diagonal plana en
paralelo a la pendiente de la montaña. La idea de este volumen central y sus dos alas fue la de
reinterpretar las típicas villas de la Toscana: el frente con el cilindro de piedra y su corona
circular repleta de olivos, se planteó como una ‘flor artificial’ para honrar a toda la ladera. Esta
imagen, extendida sobre las filas de viñedos, apunta a la existencia de zonas en el interior de la
montaña donde los procesos de producción de la bodega tienen lugar.

Adentro, la planta baja aloja el cilindro central y la sala de barricas, espacio reservado para el
añejamiento de los vinos. Desde allí se extiende un largo túnel que atraviesa toda la montaña,
finalizando frente a una pared de roca, justo en el corazón de la colina. Los turistas son
invitados hasta las entrañas de la montaña; como ellos mismos nos cuentan: ‘casi como para
disipar cualquier posible duda sobre la naturaleza y el origen de lo que contienen las botellas.’

El mismo Mario Botta afirmó que este proyecto fue un fuerte desafío que ‘requiere un control
del paisaje, donde el territorio no tolera incertidumbres o aproximaciones’. Basta con ver el
exuberante diseño de Petra para entender sus palabras.
PUESTO 7
I. Boutaris & Son S.A.
Megalohori, Santorini, Grecia

Esta bodega, llevada adelante por el estudio ateniense Yanniotis & Associates, es la única que
sale de lo común dentro del ranking, ya que su construcción no es innovadora ni moderna. Es
clásica y, hasta me animaría a confesarles, algo antigua, teniendo en cuenta que su diseño se
remonta a 1985.

De acuerdo a DesignCrave, este séptimo puesto no lo ha ganado el diseño interior de I.


Boutaris & Son S.A., sino el tratamiento exterior y el contraste que ejerce este edificio de
cúpulas blancas contra las tonalidades verdes y azules de la famosa isla griega de Santorini,
donde está emplazada. Las instalaciones incluyen un área de administración y un salón de
exposiciones y ventas. El punto más destacado de la bodega es ‘Tholos’, un anfiteatro interno
de forma circular y estructura abovedada donde se realizan catas y presentaciones
audiovisuales; en su momento, durante los primeros años de la existencia de la bodega,
‘Tholos’ fue una propuesta vanguardista para la industria del vino en Grecia.
PUESTO 8
Artesa Vineyards & Winery
Napa Valley, California, Estados Unidos

Artesa es una de las bodegas más reconocidas del Valle de Napa, en Estados Unidos, y tiene un
diseño que algo recuerda a nuestra neuquina NQN, por sus paredes cubiertas de césped. En
esta región norteamericana, las bodegas suelen estar concentradas y es normal que cada una
de ellas tenga apenas unas pocas hectáreas donde emplazar tanto sus instalaciones como los
viñedos. Artesa es todo lo contrario: está en un espacio aislado en medio de lomadas cubiertas
de viñas… un escenario impactante que fue sabiamente aprovechado para que, desde el
interior de la bodega, puedan apreciarse las vistas.

El edificio está salpicado por esculturas y obras de arte, además de una enorme fuente de
aguas danzantes. Artesa forma parte del Grupo catalán Codorníu, quienes son también
propietarios de Bodega Séptima, aquí en Argentina… otro edificio exquisito ideado por el
Estudio Bórmida & Yanzón.
PUESTO 9
Collemassari
Cinigiano, Toscana, Italia

Esta bodega, emplazada en el corazón de la Toscana, es la segunda firma italiana incluida en


este TOP 10. Su diseño está inspirado en la fachada de una casa moderna y lujosa que, a simple
vista, parece una simple caja de madera. La mayor parte de la edificación se ha construido en
el interior de la colina y el único elemento que surge es una pared con recuadros y marcos
blancos, con líneas rectas y simples.

El edificio fue pensado para economizar y minimizar los costos de iluminación y energía,
además de que el hecho de construir gran parte de la bodega debajo de la colina favorece en
el control y regulación de la temperatura. De esta manera, en Collemassari existe el microclima
necesario para producir y conservar el vino en condiciones óptimas: tanto la humedad como la
temperatura son controlados de manera natural. Además, la manipulación de las uvas antes
del prensado y del mosto se lleva a cabo utilizando la fuerza de gravedad, evitando la
utilización de bombas y mejorando la calidad del producto final.
PUESTO 10
Leo Hillinger Winery
Burgenland, Neusiedlersee, Austria

Esta bodega se terminó en el 2004, después de un año de construcción. El proyecto lo llevó


adelante el estudio de arquitectos Gerner°Gerner Plus, y buscó copiar, en 1750m2 de
superficie, el estilo rural tradicional de las bodegas excavadas en la tierra (sólo que esta, a
simple vista, poco se relaciona con la idea de ‘tradicional’). De esta manera, la mayor parte del
edificio en forma de ‘L’ se sumerge en la pendiente de la montaña (con sólo contarles que más
de 24.000m3 de tierra fueron trasladados en el proceso de construcción, ustedes pueden darse
una vaga idea de la dimensión del proyecto.)

La sala de degustación es el cubo más visible de la construcción, que parece flotar sobre un
delgado apoyo en forma de ‘V’. Además, el cuerpo principal de la bodega cuenta con ocho
cúpulas en forma de pirámide que proporcionan luz natural a la sala de producción
subterránea, una de las más modernas de Europa. Adentro, las paredes son de vidrio,
permitiendo que los visitantes sigan detenidamente las diferentes etapas de los procesos de
vinificación. Quizás el toque de mayor sofisticación de Leo Hillinger Winery esté dado por un
puente colgante que une la sala de degustación con el salón de reuniones multifuncional;
debajo de éste, se extiende la imponente cava de barricas de la bodega.
10 bodegas argentinas que usted no debería perderse

Hacer turismo por bodegas de la Argentina es una experiencia realmente fenomenal. Sin
necesidad de recorrer el mundo (tarea que tampoco resulta muy tediosa), en nuestro país hay
maravillosos ejemplos de bodegas arquitectónicamente impecables y con propuestas de
enoturismo imperdibles. En Patagonia, Cuyo o el Norte, el pretexto es viajar y disfrutar de
momentos inolvidables con el vino de por medio.

Finca Decero
Bajo las Cumbres 9003, Luján de Cuyo, Mendoza

Finca Decero fue elegida como la bodega con Mejor Arquitectura, Parques y Jardines de la
Argentina en la competición ‘Best of Wine Tourism’ organizada por ‘The Great Wine Capitals’
y, como no podía ser de otra manera, también nosotros decidimos incluirla aquí. El diseño,
llevado adelante por el Arq. Rafael Reina, mantiene grandes similitudes con la modalidad y
prácticas tradicionales de la Mendoza colonial en la elaboración de vinos, utilizándose
materiales de la provincia como madera de eucaliptos con grietas naturales, piedra de la
Cordillera de los Andes en pisos y paredes y caña típica de Mendoza en sus techos exteriores.
También los parques y jardines resultan especiales, ya que se les ha dado un énfasis especial a
la vista de las montañas, con el Cordón del Plata y el Cerro Tupungato detrás. Como último tip
de diseño, la bodega cuenta con un lago que sirve como reserva de agua y embellece aún más
el paisaje.

Finca Decero abre sus puertas de lunes a viernes de 8.30 a 17.30 horas y sábados, domingos y
feriados de 10 a 16.30 horas. Todos los tours guiados ofrecen la posibilidad de degustar sus
vinos y se realizan de lunes a viernes a las 9.30, 11, 14 y 15.30 horas y sábados, domingos y
feriados a las 10, 11.30, 14 y 15 horas. Además, pueden consultar por programas de turismo
especiales y distintas ofertas gastronómicas (previa reserva). Por consultas pueden
comunicarse con Diego Salguero, Events & Education Manager, al 0261.5244748 o enviar un
mail a decero@decero.com.
Vistandes
Rutas N° 60 y Carril Urquiza, Maipú, Mendoza

Bodega Vistandes es proyecto creado por el Ing. Daniel Hugo Rodríguez y la Arq. Lina Fazio, de
estilo arquitectónico moderno y minimalista, con líneas puras y volúmenes bien simétricos. En
este diseño, como en muchos otros, las premisas que se tuvieron en cuenta fueron dos: la
agrupación de actividades y la integración con el entorno. La Nave Norte está destinada a la
elaboración, con tanques de acero inoxidable y piletas de hormigón en el subsuelo, donde el
vino llega por gravedad. También aquí está la zona de estiba de botellas, la cava de barricas y
la cava privada del propietario. Para el exterior se eligieron materiales y colores naturales,
como texturados con arena de San Luis y piedras traídas de La Rioja. En el interior se jugó con
el brillo de los vidrios espejados y del porcelanato, con revestimientos de yeso y predominio de
blancos y grises, con toques de rojo y negro. Otro elemento distintivo son los gaviones: redes
metálicas que albergan en su interior piedras; éstos se utilizaron como columnas interiores y
exteriores, además de como soportes a los lotes de estiba de botellas.

La bodega abre sus puertas al público de lunes a viernes a las 10.30, 11.30, 12.30, 14.30, 15.30
y 16.30 horas; sábados, domingos y feriados se atiende con reserva previa. Las visitas son
aranceladas e incluyen la degustación de sus vinos. También se puede visitar su restaurante,
con una gastronomía de fuerte orientación local, de lunes a sábados de 12.30 a 16 horas.

El Esteco
Ruta Nacional 40 y Ruta Nacional 68, Cafayate, Salta

Con más de 150 años de antigüedad, el edificio de El Esteco es uno de los más tradicionales de
la Argentina, cuyo predio hoy comparte con el hotel Patios de Cafayate, el primer hotel
boutique bajo la marca “The Luxury Collection” en el interior del país. Ambas construcciones
conservan el espíritu arquitectónico original de la bodega y la antigua casa de la época
colonial: los edificios originales fueron restaurados y adaptados a las necesidades tanto del
hotel como de la bodega, respetando los detalles de época tales con antiques originales,
alfombras y telares artesanales, pisos de cerámica realizada en hornos de barro a leña, y cestos
de poleo.
La bodega tiene visitas aranceladas de lunes a lunes (feriados incluidos) por la mañana a las 10,
11 y 12 horas y, por la tarde, de lunes a viernes a las 14.30, 15.30, 16.30 y 18.30 horas.

Viniterra
Avenida Acceso Sur Kilómetro 17,5, Luján de Cuyo, Mendoza

Viniterra tiene un diseño que sigue los conceptos de la escuela de arquitectura veneciana cuya
característica central es el uso de grandes masas de cemento. El edificio recrea el estilo de una
villa italiana, haciendo honor a los orígenes del enólogo y propietario del emprendimiento,
Adriano Senetiner. Tiene un volumen de unos 1000m2, correspondiente a la nave de estiba y
otros 1300m2 para albergar la nave de fermentación y estacionamiento. Al edificio se accede a
través de un importante portal, flaqueado por un par de piletas y canteros, que hacen una
alegoría de la tierra árida de la provincia y la bendición del agua para transformarla en un
bergel.

La bodega abre sus puertas de lunes a viernes de 9 a 17 horas y los sábados, previa reserva. En
todos los casos, Viniterra tiene una fuerte orientación al turismo, dando la posibilidad de
realizar distintos recorridos y degustar todos sus vinos, acompañados por los reconocidos
productos gourmet De Mi Campo. Por consultas pueden enviar un mail a
turismo@viniterra.com.ar o comunicarse al 0261.4980073.

Achával Ferrer
Calle Cobos 2601, Luján de Cuyo, Mendoza

Más allá de lo hermoso del edificio, el estilo arquitectónico de Achával Ferrer fue ideado desde
el punto de vista de la funcionalidad y la seguridad de la operación, por sobre lo estrictamente
estético. Dentro de su estilo, convive el antiguo modelo de piletas de hormigón con vigas
recicladas de viejas naves industriales y aberturas de aluminio, todo iluminado por gigantescos
ventanales que regalan una inigualable vista a la Cordillera de los Andes.

Para visitar la bodega, pueden comunicarse con Patricia Lambert, hospitality manager de
Achával-Ferrer, al 0261.4881131 o hacer la reserva a través de www.achaval-ferrer.com, en el
link “Visita a bodega”. También pueden enviar un mail a la dirección winery@achaval-
ferrer.com.

NQN. Viñedos de la Patagonia


Ruta Provincial 7, Picada 15, San Patricio del Chañar, Neuquén

Fue una de las bodegas pioneras en el polo vitivinícola de San Patricio del Chañar y, para serles
sincero, en aquel momento impactaba ver brotar del suelo semejante construcción… allí,
donde apenas unos años atrás no existía nada. Hoy existe un número mayor de
emprendimientos próximos a NQN, pero no por eso deja de sorprender su arquitectura,
ideada por el estudio Gabriel Japaz Arquitectos (autores de otros tantos proyectos como el de
Altos Las Hormigas, Cuvelier Los Andes o Viña Cobos). El diseño está conformado por una
fachada principal y una cara posterior de tipo industrial, donde se concentra el sector de
producción. El edificio parece incorporarse al paisaje a través de las pendientes cubiertas de
césped, haciendo que los vientos de la región pasen por sobre el edificio, protegiendo el área
de vendimia. El ingreso de los visitantes se realiza a media altura, lo que favorece a lograr la
idea de “bajar a las cavas”… un engaño al ojo muy bien logrado.

NQN brinda visitas gratuitas sin necesidad de reserva previa de lunes a viernes de 10 a 17
horas, y sábados, domingos y feriados de 10.30 a 17 horas. También pueden visitar el Malma
Resto Bar (una experiencia que personalmente les recomiendo), para el cual es recomendable
reservar previamente los días feriados y fines de semanas.

Ruca Malén
Ruta Nacional 7 Kilómetro 1059, Luján de Cuyo, Mendoza

La arquitecta Claudia Bolfson estuvo a cargo del diseño de Ruca Malén, un edificio compacto,
funcional y austero que debía cumplir con 2 requisitos básicos: resultar elegante en su imagen
y respetar un presupuesto estricto en costos. La bodega tiene 3 secciones diferenciadas que se
comunican por una circulación exterior y otra interior, creada especialmente para los visitantes
que realizan turismo en la bodega. La idea rectora fue, desde el inicio, priorizar la vista
panorámica de la Cordillera de los Andes, es por eso que desde el acceso principal a la finca las
visuales nunca la pierden de vista. Sentarse a disfrutar la excelente gastronomía de Ruca
Malén en su restaurante con esa maravillosa panorámica es una experiencia que
personalmente he vivido y se las recomiendo ampliamente.

La bodega ofrece la posibilidad de recorrer las instalaciones y degustar sus vinos. Las visitas
son en español, inglés o portugués y se llevan adelante de lunes a viernes a las 10, 11, 15 y 16
horas; los sábados únicamente por la mañana, a las 10 y 11. Pueden consultar al 0261.4106214
por programas especiales que incluyen degustaciones verticales, almuerzos o ‘juego de cortes’,
donde los turistas pueden armar su propio blend.

Tempus Alba
Carril Perito Moreno 572, Maipú, Mendoza

Tempus Alba es una bodega con un diseño simple pero efectivo, llevado adelante por los
arquitectos Benjamín Gamboa y Pablo Inaudi. El edificio se desarrolla sobre y bajo el nivel del
terreno, destacándose en su planta alta una sala de degustación junto a una gran terraza con
vista a los viñedos. Tanto para el área de producción como el espacio dedicado al enoturismo,
se utilizaron materiales fríos como el metal, el hormigón y el vidrio, aunque las piedras de
tonos cálidos que cubren la fachada lo equilibra.

La bodega posee un área destinada específicamente al enoturismo, además de un restaurante


y Wine-bar donde se pueden disfrutar sus vinos. El horario de visitas es de lunes a viernes de
10 a 18 horas.

Valle Perdido Patagonia Estate Winery


Ruta Provincial 7, Picada 6, San Patricio del Chañar, Neuquén

Valle Perdido se encuentra en un oasis de viñedos regados por el Río Neuquén, sobre una
ladera de bardas. La refuncionalización del edificio, proyectada internamente y con la
asistencia del estudio Bórmida & Yanzón, posee un área central donde se encuentra un tasting
room y la sala de tanques, el laboratorio y el salón de estiba de botellas. Desde allí, además, se
accede al Wine + Tapas Bar y al restaurante. Otra de las características distintivas de esta
bodega es que dentro de sus instalaciones también funciona el Valle Perdido Wine Resort y
Spa; allí, las habitaciones conviven con la cava y sus barricas, muy próximos y a la vista pero
con las condiciones de confort que ambos necesitan. Todos los cuartos se expanden con
amplios ventanales hacia un parque cercado por los mismos viñedos. Fernando Muñoz de
Toro, presidente y gerente general de la bodega nos contó que ‘el uso de hormigón armado,
texturas de tonos terrosos, madera, metales crudos y piedras de la región (incluso algunas con
fósiles), buscaron imprimirle al edificio el carácter de la Patagonia.’

La bodega abre sus puertas a los visitantes los lunes, miércoles y viernes de 11 a 12 hs y todos
los días de 19 a 20 hs. Por consultas pueden comunicarse al 011.43439909, enviar un email a
info@valleperdido.com.ar o visitar www.valleperdido.com.ar.

Los Toneles
Bandera de los Andes 1393, Guaymallén, Mendoza

Los Toneles es una de las bodegas cuyanas más antiguas, construida en 1922, y declarada
como Patrimonio Cultural de la Provincia de Mendoza. Con una fachada de ladrillos que se han
conservado en excelente estado hasta la actualidad, Los Toneles es una de las escasas bodegas
ubicadas a pocos metros del centro de la ciudad; es urbana, de admirable arquitectura y un
referente histórico para la región. Cuenta, además, con un salón de eventos con capacidad
para 1200 personas, en donde se realizan casamientos, cumpleaños y programas especiales.

La bodega realiza visitas guiadas personalizadas y degustaciones especiales con reserva previa
en los horarios de 9 a 21 horas. Por consultas puede comunicarse al 0261.4310403.
Una charla exclusiva con César Pelli
El arquitecto César Pelli es uno de los mayores orgullos argentinos en el mundo. Nacido en
Tucumán (característica imposible de no identificar al hablar con él), fue el autor de algunas de
las más significativas obras arquitectónicas salpicadas por los 5 continentes: las Torres
Petronas en Kuala Lumpur (los edificios más altos del mundo hasta el 2003), el Pacific Design
Center en Hollywood, la aún en construcción Torre Repsol YPF en Puerto Madero o el
Costanera Center en Santiago de Chile, complejo que ha reanudado recientemente su
edificación y que, cuando finalice, se convertirá en el edificio más alto de Sudamérica. Hoy, con
83 años y muchos proyectos por delante, nos cuenta desde sus oficinas en New York sobre el
trabajo y sus anécdotas, con el vino como excusa.

Sabemos que hasta el momento no ha diseñado ninguna bodega, pero ha trabajado durante
mucho tiempo en una región vitivinícola muy emblemática de Estados Unidos como lo es
California. ¿Ha tenido contacto con el mundo del vino allí?

Efectivamente nunca me han pedido que haga una bodega, pero me parece interesante… si le
pagan con vinos al arquitecto, sería una alternativa fantástica (risas). Si, conozco Napa Valley
bien pero nunca me pidieron que diseñe nada allí.

Igualmente imagino que ha visto o visitado bodegas con diseños imponentes que se
destacan en forma drástica de lo común. ¿Cuáles cree que son los objetivos de tener un
edificio así?

Sí, claro. Principalmente es una forma de publicidad. De una manera o de otra es una forma de
publicidad: divulgan al edificio, usan las imágenes para la publicidad o por la gente misma, que
hace turismo de viñedos. El diseño atrae a la gente y hace más conocida a la marca. Esa es la
principal razón. De cualquier manera, lo básico es el deseo de los dueños de las bodegas de
tener algo que los haga más conocidos o estar más a la vista del público.
Y en este sentido, ¿Cree que la arquitectura de una bodega guarda relación con la marca o
los productos?

Claro que sí, las bodegas se convierten en una extensión de la marca; es algo en lo que,
entonces, los dueños de las bodegas van a querer participar: en la selección del arquitecto y en
la aprobación del diseño. La mayoría de las bodegas que he visto publicadas son todas muy
diferentes unas de otras; algunas parecen muy hermosas, pero son todas distintas. Hablo de
las bodegas hechas por arquitectos más famosos, por supuesto; hay muchas otras bodegas
que se hacen de una manera más tradicional, más sencilla y no se las ve como una extensión
de la marca necesariamente.

Pero este tema de la arquitectura como publicidad de bodegas es bastante viejo. Aun cuando
yo estaba en California, hace unos 35 años, recuerdo viajar por Napa Valley y que todo el
mundo hablase de la bodega Sterling Vineyards y su nuevo edificio… claro que en términos de
lo que se hizo después era muy sencillo: un edificio todo blanco relativamente moderno; pero
en su momento tuvo enorme repercusión.

La mayoría de las bodegas argentinas se ubican en zonas inhóspitas y desérticas; sin


embargo, dentro de este marco aparecen enormes figuras como la Cordillera de los Andes o
la estepa patagónica. ¿Cómo maneja un arquitecto esta escenografía natural y logra sus
objetivos en un simple edificio?

Claro, la Cordillera de los Andes de fondo es algo espectacular, pero tanto eso como el
perímetro libre es, simplemente, otra condición. Cada edificio tiene sus condiciones únicas y el
hecho de que esté en un terreno vacío es una más; eso es algo en lo que los arquitectos
estamos bien entrenados para responder.

Recién hablaba del poder que puede tener una construcción para cautivar a los visitantes…
¿Alguna vez le sucedió estar de recorrido por viñedos y tener esa sensación?

Solamente una vez visitando una bodega muy pequeña en Cafayate: Michel Torino. Pero
realmente nunca he visto personalmente ninguna de estas bodegas diseñadas por arquitectos
reconocidos, sólo en publicaciones.
¿Cómo es su relación actual con Argentina? ¿Cuán a menudo nos visita?

Intento ir seguido; la última vez que estuve allí fue en Diciembre. Voy un par de veces al año,
tengo hermanos, familia, amigos, así que suelo ir por allí.

Por último… alguna referencia de César Pelli persona con relación a nuestro mundo. Me han
comentado que es un gran amante del vino. ¿Esto es así? ¿Qué suele beber?

Sí, claro, todas las noches tomo un vaso de vino tinto… como recomendaba el Doctor Favaloro.
Me gusta cambiar, así que tengo 2 ó 3 tipos favoritos: en estos momentos estoy tomando dos
vinos de Rioja, España, que son muy sabrosos.

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