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Según informó en días pasados el ministro del Poder Popular para Relaciones Interiores y Justicia,
Tareck El Aissami, el plan contempla seis vértices estratégicos: Prevención y convivencia solidaria,
Ley del Sistema de Justicia, Creación de un sistema de faltas, Fortalecimiento del sistema penal,
Resolución de conflictos comunitarios-mediación, y la creación y socialización de conocimiento
para la convivencia y seguridad ciudadana.
Los ejes estratégicos parten de la prevención integral y la convivencia solidaria. "A la inseguridad
hay que continuar atacándola fuertemente de manera coordinada y mucho más científicamente,
elaborada por el lado de la prevención. Un elemento fundamental del enfoque humanista y
socialista señalado en nuestra Constitución", subrayó el Presidente.
Ejemplificó cómo impactan las políticas sociales aplicadas por el Estado en la prevención y cómo su
ausencia contribuye con la inseguridad. "Los niños que están en las escuelas bolivarianas y en los
simoncitos, los que están tocando un instrumento, estoy seguro de que es casi imposible que de
ellos salga un delincuente. Al contrario: es casi imposible que de un niño de la calle no salga un
delincuente".
Cada municipio tendrá su casa de justicia. Arrancarán en 79 municipios del país, que
científicamente se ha demostrado concentran más del 80 por ciento de la criminalidad nacional. El
1° de enero deberá ser inaugurada la primera casa.
El cuarto vértice es la modernización del sistema penitenciario, y el quinto la creación de un
sistema nacional de atención integral a las víctimas de la violencia.
Los vértices agrupan 29 líneas estratégicas y 117 acciones programáticas, 30 de estas últimas de
ejecución inmediata. Sus políticas de acción se fundamentan en seis ejes primordiales basados en
la articulación entre medidas de prevención (anticipación) y medidas de control penal
(intervención).
La Gran Misión A Toda Vida Venezuela también contempla la municipalización del sistema de
justicia, a través de una figura denominada «Casas de Justicia», para lo cual se comenzará en 79
municipios que, sobre la base de un análisis geo-situacional, se han determinado como los que
poseen mayor incidencia delictiva.
Además, se expande la Policía Nacional Bolivariana (PNB) - que actualmente operaba solo en
algunos municipios del Distrito Capital - a siete estados del país, entre ellos: Aragua, Lara, Táchira,
Zulia, Carabobo y Miranda.
Principios
La Gran Misión apunta a mejorar las condiciones de convivencia y seguridad ciudadana para todos
y todas los venezolanos, sin discriminación y apuntando a corregir inequidades en el disfrute de
los derechos de la población. La búsqueda de la igualdad sustantiva y la universalización del
desfrute de los derechos, a partir del reconocimiento de las desigualdades fácticas, implica
priorizar la acción de la Gran Misión en aquellos territorios y poblaciones que más lo necesiten.
La Gran Misión generará alianzas con sectores sociales y organizaciones populares, tanto para la
validación de su diseño (diagnóstico, objetivos y medios); como para la ejecución y evaluación de
la propia Gran Misión. El fortalecimiento de la organización y movilización popular en torno a sus
derechos, es entendido aquí como un componente fundamental de la convivencia solidaria, que la
Gran Misión apunta promover.
La Gran Misión adopta el enfoque de derechos humanos. En consecuencia, sus acciones son vistas
como el cumplimiento de obligaciones del Estado en materia de garantía de derechos, que pueden
y deben ser exigidas por la población. En el desarrollo de la Gran Misión la población, y en
particular los sectores populares, deben ser fortalecidos y empoderados en su conciencia de
derechos, en el acompañamiento crítico-propositivo del desarrollo de la Gran Misión. La Gran
Misión involucra el cumplimiento de un conjunto interdependiente de derechos, por tal razón, se
trata de una política pública enraizada al resto de las políticas del Gobierno Bolivariano, orientadas
a la construcción de la máxima felicidad posible y la vida digna.
Interagencialidad y articulación
Transparencia y eficiencia
La Gran Misión es transparente en su gestión, por lo que contará con un sistema de indicadores de
estructura, proceso y resultado que permita su monitoreo, evaluación y rendición de cuentas. El
uso racional del talento humano y de los recursos materiales y presupuestarios, en función del
logro de sus metas y objetivos, en apegado a los principios y enfoque ético-político de la Gran
Misión, es el criterio rector de la gestión.