Está en la página 1de 2

¿Estamos todos?

Estamos.

Y cual caballeros

cumplimos

y a las mujeres

amamos

pues entonces..

¡bebamos! ¡bebamos! ¡bebamos!

¿Bebió nuestro padre Adán?

Bebió.

¿Bebió nuestra madre Eva?

¡Uf! ¡Cuan borracha era!

¡Ah! Cual líquido infernal que te crías entre matas y al hombre más cabal hiciste a gatas.

¡Ah! Sangre de cristo cuanto ha que no te he visto y ahora que te veo.. ¡lingotazo que te arreo!

Por ellas , las más bellas, por las del culo ancho y el cuello estrecho.

Por las que nos brindan sus labios desinteresadamente aunque estén llenas de telarañas,

por ellas, ¿por las mujeres?

No . Por las botellas.

Si Dios borrachos nos mantiene

Será porque nos conviene

Hágase su voluntad

Cuando Dios llamó a Gavino ,

no dijo Gavino ven,

sino ¡Venga Vino!

Antes que no nos conocíamos


Bebíamos

Ahora que nos conocemos

Bebamos hasta que no nos conozcamos

y de culo nos caigamos.

Ni arriba, ni abajo, ni al centro, ¡¡Arriba y para dentro!!

También podría gustarte