Está en la página 1de 16

la estructura teológica

del cuarto evangelio

Pedro Ortiz Valdivieso, S. J. *

Aunque es difícil mostrar que el En la exégesis actual es opinión


cuarto evangelio tiene una estructu- común que el cuarto evangelio no
ra formal bien definida y clara, mar- es obra hecha de una sola vez sino
cada por elementos literarios de el resultado de un largo proceso
tipo formal claramente percepti- que parte de la predicación oral y
bles, creo que podemos preguntar- se va formando en varias etapas,
nos si tiene una estructura teológica probablemente con la colaboración
propia. Entendemos por estructura de varias personas, aunque parezca
teológica la organización del mate- lo más verosímil que este proceso se
rial teniendo en cuenta más que haya realizado en una sola comuni-
todo su contenido teológico. El dad cristiana, difícil de identificar.
cuarto evangelio es indudablemente
una obra teológica. Y aunque la Si se acepta esta manera de en-
estructura básica del evangelio está tender la formación del cuarto
dada por tradiciones referentes a evangelio, ¿es posible hablar de una
hechos, palabras, la pasión, la muer- estructura teológica? ¿no será el
te y resurrección de Jesús, con todo evangelio más bien un conglomera-
hay una visión propia de esas tra- do de diversas tradiciones y elemen-
diciones y sobre todo hay una in- tos no totalmente unificados?
terpretación propia de esa historia.
Creo que esa visión propia lleva No podemos entrar a discutir
también a estructurar toda la mate- ahora todos los problemas relacio-
ria de una manera propia. nados con la formación del evange-
-;---¡joctor en Sagrada Escritura, Pontüicio Instituto Bíblico. Profesor de Sagrada Escritura en la
Facultad de Teología, Universidad Javeriana.

PEDRO ORTIZ V., S.J. 169


lio. Y sin duda algunos de los que mos es la obra final; las posibles
aceptan como probable esa manera fuentes son en la mayor parte de
de entender el origen del evangelio los casos puras hipótesis discutibles.
se mostrarán reticentes a aceptar No es razonable renunciar a enten-
una estructura literaria y teológica der lo único cierto y tangible que
propiamente dicha. Sin embargo, tenemos, el texto final, para tratar
creo que se puede afirmar que el de entender fuentes solamente hi-
evangelio, tal como ha llegado hasta potéticas. Por consiguiente, la diver-
nosotros, es ya un texto unificado, sidad de perspectivas no necesaria-
no es una simple yuxtaposición de mente debe llevarnos a negar la
elementos inconexos. Es probable existencia de una verdadera y pro-
que el evangelio se haya formado en funda unidad teológica, que puede
un proceso largo y que el responsa- estar fundada precisamente en el
ble de él no sea una única persona, deseo de conciliar diversas perspec-
un testigo ocular de los hechos. Sea tivas, en la síntesis de diversos ele-
quien sea el responsable del evange- mentos. Solamente en el caso de
lio en su form~ final (cosa que pro- que fuera imposible descubrir un
bablemente nunca lo sabremos), sentido unitario a ese conjunto
el evangelio tiene una verdadera habría que contentarse con enten-
unidad teológica. Esta es una posi- der cada una de las partes por sepa-
ción que creo es necesario defender. rado.
Solo que es igualmente necesario
aclarar que unidad teológica no sig- Nos fijaremos, pues, en el evange-
nifica simplicidad de pensamiento lio en su forma final, prescindiendo
o unilateralidad de perspectivas. solamente de aquellos elementos
Una de las razones que se suelen que la crítica textual muestra que
aducir en contra de la unidad lite- son adiciones de origen diverso,
raria del cuarto evangelio es la pre- como es el caso de la perícopa de la
sencia en él de perspectivas teoló- adúltera (Jn 7,53 - 8,11), aunque la
gicas diferentes (por ejemplo, la tengamos como parte del texto ca-
escatología presente y la escatolo- nónico del Nuevo Testamento.
gía futura). Es posible que estas
perspectivas se encuentren, en otros No será mi intención discutir las
textos, separadas. El hecho de que diversas opiniones que se han pro-
se encuentren unidas en el cuarto puesto al respecto. Para verlas remi-
evangelio se presta a diversas inter- timos a la bibliografía mencionada
pretaciones. Para algunos, quizás en al final.
el fondo presuponiendo que todo
pensamiento original debe ser unila-
teral, esto es ante todo indicio de l. ESTRUCTURA BIPARTITA
pluralidad de tradiciones y fuentes.
Aun aceptando que estas diversas Antes de entrar en los detalles de
perspectivas arguyan diversidad de la estructura. se impone tomar una
fuentes, con esto no se explica to- posición acerca de algo fundamen-
davía el hecho de que ellas se tal. cuál es el principio básico o
encuentren en la obra final. Debe- criterio de fondo según el cual está
mos insistir que lo único que tene- construído el evangelio. Se han pos-

170 LA ESTRUCTURATEOLOGICA DEL CUARTO EVANGELIO


tulado diversos criterios: los signos a) venir (erkhomai)
realizados por Jesús, las fiestas del 1,9.11; 3,2.19.31 (x2); 5,43; 6,
calendario judío varias veces men- 14; 8,14 (x2); 9,39; 10,10; 11,27;
cionadas, u otros aspectos teológi- 12,46.47; 15,22; 16,28; 18,37.
cos diferentes. Estos diversos crite-
rios llevan a ver el evangelio estruc- De tener en cuenta son especial-
turado en un número diverso de mente los textos en que esta idea
grandes (dos, tres, cuatro, cinco, aparece con la expresión "venir al
siete ... ). mundo" (1,9; 3,19; 6,14; 9,39; 11,
27; 12,46; 16,28; 18,37).
En mi opinión, lo que caracteriza
la visión joanea de la historia y la b)Salir de Dios (o del Padre)
obra salvífica de Jesús y el elemen- (exerkhomai)
to que estructura todo el evangelio 8,42; 13,3; 16,27.28.30; 17,8.
es el doble movimiento en que
toda esa historia aparece enmarca- c) Venir (heko)
da: en primer lugar un movimiento 8,42 (reforzando el verbo ante-
descendente de Dios al mundo y en rior).
segundo lugar un movimiento as-
cendente del mundo a Dios Padre. d) Bajar del cielo (katabaino)
Hay dos textos en que esto es ex- 3,13; 6,33.38.41.42.50.51.58.
presado de manera especialmente
clara. En 13,3 se dice: "Sabiendo e) En viar (apostello)
que todo se lo había puesto el Pa- 3,17.34; 5,36.38; 6,29.57; 7,29;
dre en sus manos y que había salido 8,42; 10,36; 11,42; 17,3.8.18.21.
de Dios y que a Dios volvía. . ." y 23.25; 20,21.
en 16,28 leemos: "Salí del Padre y
vine al mundo; de nuevo dejo el Se trata de los textos en que se
mundo y me voy al Padre". dice que Dios (o el Padre) envía a
su Hijo.
Pero no se trata de dos textos
aislados. Tenemos en realidad una f) Enviar (pempo)
idea que domina todo el cuarto 4,34; 5,23.24.30.37; 6,38.39.44;
evangeIío. Toda la historia y la obra 7,16.28.33; 8,16.18.26.29; 9,4; 12,
de Jesús está vista en la perspectiva 44.45.49; 13,20; 14,24.26; 15,21;
de ese doble movimiento del Hijo 16,5.
que viene al mundo de parte de
Dios y que regresa al Padre. Esta
idea es expresada en Jn de diversas Se trata igualmente de los textos
maneras. Creo que vale la pena tra- en que se dice que Dios envía a su
tar de recoger los diversos términos Hijo.
con que en el evangelio se expresan
estas dos ideas, no siempre simultá- g) Dar (didomi)
neamente. 3,16; 6,32

1. PID-a expresar la venida del h)Ser de (eimi ek / eimi para)


Hijo de Dios al mundo: 6,46; 7,29; 8,23.47; 9,33.

PEDRO ORTIZ V., S.J. 171


Tenemos un total de 81 textos Jesús. Para Jn la actividad de Jesús
en que de una manera u otra se en este mundo no tiene sentido
habla de ese movimiento descen- sino porque ha sido enviado por el
dente del Hijo de Dios, desde Dios Padre, y su ausencia ahora porque
al mundo. ha regresado al Padre. Esta es una
visión que penetra toda la teología
2. Para expresar el regreso al Pa- de Jn.
dre.
Si esto es así, es fácil suponer
a) Subir (anabaino) que el evangelio esté más probable-
3,13; 6,62; 20,17 (x2). mente estructurado de manera bi-
partita. Para Jn el regreso al Padre
b) Irse (hypago) coincide con su pasión, muerte y
7,33; 8,14.21 (x2). 22; 13,3.33. resurrección.
36; 14,4.28; 16,5.10.17.
En realidad, como muchos auto-
c) Ir (erkhomai) res lo han señalado, el evangelio
17,11.13. aparece articulado en dos grandes
partes y el punto de articulación lo
d) Alejarse (aperkhomai) constituye el comienzo del capítulo
16,7 (x2). 13. Aquí encontramos una expre-
sión tan solemne que no hay duda
e) Marcharse (poreuomai) de que para Jn aquí comienza a
7,35; 14,2.3.12.28; 16,7.28. verse todo desde la perspectiva del
"regreso al Padre": "Antes de la
f) Dejar (aphiemi) fiesta de la Pascua, sabiendo Jesús
16,28 que había llegado su hora de pasar
de este mundo al Padre ... Sabien-
g) Levantar (hypsoo) do que todo se lo había puesto el
3,14; 8,28; 12,32.34. Padre en las manos y que había
salido de Dios y a Dios volvía. "
h)Pasar (metabaino) (13,1-3).
13,1.
De esta manera, creo que induda-
En total tenemos 34 textos en blemente el cuarto evangelio debe
que se expresa, de diversas maneras, verse estructurado en dos grandes
la idea de pasar de este mundo al secciones, centradas en esos dos
Padre. grandes temas:
Todos estos textos (a los que po- 1. El Hijo de Dios viene al mun-
siblemente se puedan añadir otros) do: Jn 1-12.
muestran la importancia de este
doble tema en Jn. Esos temas se n. Regreso al Padre: Jn 13-21.
encuentran a lo largo de todo el
evangelio y muestran que realmen- Es interesante anotar que de los
te todo está penetrado por esa 81 textos que hablan de la venida
visión de la historia y la obra de del Hijo de Dios al mundo 61 se

172 LA ESTRUCTURA TEOLOGICA DEL CUARTO EVANGELIO


encuentran en la primera parte (primera parte) y luego mostrando
(y 20 en la segunda parte), mientras sus características al interior de la
que de los 34 textos que hablan del comunidad misma (segunda parte).
regreso al Padre 22 se encuentran Por esta razón las discusiones con
en la segunda parte (y 12 en la los judíos están todas en la primera
primera). parte, mientras que las instruccio-
nes a los discípulos están principal-
Esta visión de la obra de Jesús en mente en la segunda, en los discur-
la perspectiva del doble movimien- sos después de la cena. El tema del
to, descendente y ascendente, apa- amor fraterno, que es el que man-
rece estrechamente relacionada con tiene la comunidad, aparece solo en
un tema de Jn: el de la "hora" o esta parte. Esto no significa que las
"momento" (kairós) de Jesús. So- dos partes se separen totalmente en
bre ese "momento" u "hora" de este respecto. Ya en la primera
Jesús encontramos en Jn varias parte se habla de la fe de los discí-
referencias. Una serie de ellas ha- pulos, pero más que todo en su
bla de que "todavía no ha llega- nacimiento y en su primer crecimien-
do" esa hora: 2,4; 7,6.8.30; 8,20. to. Su consolidación tendrá lugar en
En cambio en 13,1 leemos esa so- la instrucción de la cena y en las
lemne afirmación: "sabiendo (Je- manifestaciones de Jesús resucita-
sús) que había llegado su hora de do. Por otra parte, la pasión es la
pasar de este mundo al Padre". y consecuencia del rechazo que Jesús
aunque solo en 13,1 se encuentra encontró en su pueblo (1,11; 11,45-
explicado el término "su hora" por 53 etc.). Así pues, las dos partes
la expresión "de pasar de este están estrechamente trabadas entre
mundo al Padre" podemos suponer sí y forman la unidad total del
que esta expresión es, en todos los evangelio.
casos, la menor explicación de lo
que Jn entiende por la hora de
Jesús. Esa hora aparece en Jn 12,27 11. ULTERIOR SUBDIVISION
como muy próxima y a partir de
13,1 como ya presente. Esto nos Más difícil parece descubrir có-
confirma en la opinión de que el mo está estructurada cada una de
evangelio debe verse dividido sus- esas dos partes, sobre todo la pri-
tancialmente en esas dos grandes mera. No parece que se pueda
partes. encontrar un criterio puramente
formal. Hay que recurrir de nuevo
Esta visión del evangelio como a elementos de contenido, teológi-
dividido en dos grandes partes, de cos. Si nosotros nos fijamos en los
la manera indicada, se confirma con diversos temas teológicos de impor-
otra observación complementaria. tancia en el evangelio, veremos que
Se puede decir que el cuarto evan- no hay otro que tenga la trascen-
gelio quiere presentar la identidad dencia y frecuencia que tiene el
de la fe cristiana (cf. 20,30-31). Y tema del creer. El verbo creer (pis-
esta identidad la dibuja de dos ma- teuo) aparece 98 veces en el evange-
neras 'principalmente: primera con- lio (comparado con los sinópticos,
trastándola con la identidad judía tenemos: Mt 11 veces; Mc 14, in-

PEDRO ORTIZ V., S.J. 173


cluÍdo el final 16,9-20; Lc 9 veces). Teniendo en cuenta la importan-
Aunque es interesante que el sus- cia de estos temas, creo que es
tantivo fe (pistis) no aparece ni una posible descubrir en la primera par-
sola vez. Creo que el tema del creer te el desarrollo -podríamos decir
es realmente el tema que, sobre dialéctico- del tema del creer
todo en la primera parte, nos per- como respuesta de los hombres al
mite descubrir la ulterior estructu- Hijo de Dios que viene al mundo
ración del evangelio. Hemos visto a comunicarles la vida eterna: la fe
que la primera parte del evangelio y el rechazo.
está centrada en la idea de la venida
del Hijo de Dios al mundo. Sin em-
bargo, lo que allí se describe no Para el cuarto evangelio la fe sur-
es la venida en sí misma sino la ge en un proceso que tiene su punto
obra de Cristo para la que vino. de arranque en el testimonio. Esto
Creo que Jn 3,16 resume el sentido lo dice muy clarramente cuando se
de toda esa primera parte del evan- menciona por primera vez a Juan
gelio: "Hasta tal punto amó Dios Bautista: "Este vino para ser testi-
al mundo que le dio su Hijo, para go, para dar testimonio a favor de la
que nadie que crea en él perezca luz, para que todos creyeran por
sino que todos tengan vida eterna". medio de él" (Jn 1,6). Es la primera
El envío del Hijo de Dios al mundo vez que aparecen estos dos concep-
está ordenado a la comunicación a tos, y aparecen estrechamente rela-
los hombres de la vida eterna que se cionados.
hace por medio de la fe. Sin embar-
go es característico de Jn el presen- Pero en 1,29 y siguientes aparece
tar muchos de los conceptos en claro que el testimonio de Juan
forma contrastada: la fe aparece en Bautista lleva a sus discípulos al
toda su urgencia y seriedad vista encuentro con Jesús. En el encuen-
frente a su negación, el rechazo, la tro personal con Jesús avanza y cre-
incredulidad. Este dualismo, no ce la fe de los discípulos (1,35 Y
ontológico sino funcional, es típico siguientes). Sin embargo, es el signo
de Jn. Toda la primera parte del el que perfeccionará la fe: "mani-
evangelio aparece centrada en las festó su gloria y sus discípulos
vicisitudes de la actividad de Cristo creyeron en él" (2,11). Pero en Jn
que quiere llevar a los hombres a la el signo va con frecuencia acompa-
vida eterna mediante la fe. A ese ñado de la palabra de Jesús (véase
fin se ordenan sus signos (cf. 2,11) especialmente Jn 6). En Samaría
y sus palabras (cf. 4,41). Sin embar- Jesús no realiza propiamente nin-
go, la comprobación triste que hace gún signo: la fe surge en los sama-
el evangelista ya desde el comienzo ritanos principalmente por el en-
es que Jesús, la Palabra de Dios, cuentro y la palabra de Jesús (Jn
"vino a su propia casa y los de su 4,39-42).
casa no lo recibieron" (1,11). La
primera parte termina con un tono
pesimista (12,37-43). El regreso de Teniendo en cuenta estos crite-
Jesús al Padre coincide con el re- rios, podemos ver estructurado el
chazo que recibe de parte del mun- cuarto evangelio, en sus grandes
do. líneas, de la siguiente manera:

174 LA ESTRUCTURA TEOLOGICA DEL CUARTO EVANGELIO


1 El Hijo de Dios es enuiado al tradición (cena, predimiento, pro-
mundo para comunicar la uida eter- ceso, condena, muerte y resurrec-
na por medio de la fe. (Jn 1-12). ción). En la primera parte es donde
más se ve que desarrolló sus puntos
Introducción: el punto de parti- de vista propios.
da (1,1-18).
lII. Explicación de esta estructu-
A.El nacimiento de la fe (1,19 - ra en particular
3,36).
B. El crecimiento de la fe y el
surgir del rechazo (4,1-6,71). PRIMERA PARTE
C. Se acentúa el rechazo (7,1 -12,
43). Introducción (1:1-18)

Conclusión (12,44-50). Que 1,1-18 constituya una uni-


dad literaria y teológica en sí, clara-
lI.EI Hijo de Dios regresa al mente delimitada, es admitido gene-
Padre (13 - 21). ralmente y no hace falta detenernos
a mostrarlo. Lo que sí merece algu-
Debemos tener en cuenta que de na discusión es a qué sea introduc-
acuerdo con el estilo característico ción. Para un gran número de auto-
de Jn y con la necesidad impuesta res, este llamado "prólogo" es in-
al evangelista de basarse en material troducción a todo el evangelio.
tradicional, ya existente en parte, Esto parecerá tanto más verosímil
los temas no se desarrollan en for- cuanto más se insista en que este
ma lineal, de modo que cada aspec- texto tuvo una existencia indepen-
to se agote en cada sección y luego diente previamente, como un him-
se pase a algo completamente nue- no que después fue acomodado al
vo. Lo ordinario es más bien que evangelio.
los temas aparezcan entrelazados,
con anuncios de lo que vendrá des- Sin embargo, hay razones bastan-
pués y reminiscencias de lo que ya te serias para creer que 1, 1-18 no
se ha expuesto. es un "prólogo" o introducción a
todo el evangelio sino solamente a
Veamos ahora si es posible descu- la primera parte. En él, en efecto,
brir una ulterior estructuración de no encontramos ninguna alusión a
estas partes. Aunque no podemos la idea del regreso al Padre; sola-
pretender encontrar una organiza- mente a la venida al mundo. Una
ción perfectamente simétrica y pre- explicable inclinación a entender la
cisa, creo que es posible encontrar estructura del cuarto evangelio en
diversos indicios que nos ayudarán paralelismo con los evangelios si-
a encontrar la organización de las nópticos puede llevar a considerar
diversas partes. Aparece claro que 1,1-18 como algo que se sale del
en la segunda parte (lo que llama- esquema básico del evangelio. Sin
mos en términos generales "la pa- embargo, es el punto de partida
sión") el evangelista se atuvo más esencial de la cristología y la sote-
de cerca a la línea recibida de la riología joaneas. La persona y la

PEDRO ORTIZ v .. S.J. 175


misión de Jesús en Jn no se entien- en 1,19.Jn, lo mismo que los sinóp-
den sino a partir de ese origen: ticos, relaciona este comienzo de
Dios. En esta introducción se habla Jesús con la actividad de Juan Bau-
sólo en términos generales de la tista. Pero para el cuarto evangelio
actividad histórica de Jesús, pero es esencialmente "el testigo de la
allí se encuentra interpretada esa luz". Lo que a este evangelio inte-
actividad según la perspectiva de la resa por encima de todo en Juan
teología joanea. Por esta razón en Bautista es su testimonio. Pero el
1,1-2 se comienza hablando del testimonio se endereza a la fe. Uno
Lagos en Dios. de los modos más importantes
como surge la fe es por el testimo-
En 1,1-18 se insinúan los temas nio. Encontramos, entonces, una
principales, no de todo el evangelio, primera sección que comienza con
sino sólo de la primera parte: la el testimonio de Juan y nos va a
venida del Lagos al mundo, el testi- mostrar cómo surge la fe en los
monio, la fe, el rechazo, los dones discípulos. Creo que una buena
que se comunican al creyente. En explicación de la presencia de un
cambio no hay ninguna alusión al nuevo testimonio de Juan en 3,22-
regreso del Hijo al Padre. 36 (que a algunos parece una digre-
sión sin razón especial) es precisa-
En esta perspectiva se explica mente porque desempeña la fun-
mejor la presencia de los vv. 6-8 Y ción de enmarcar toda esa sección
15 en que se presenta a Juan Bautis- bajo el signo del testimonio. Pero la
ta y se insiste en su carácter de tes- importancia del testimonio depende
tigo. Se quiere mostrar con esto la de su finalidad: la fe ("este vino
relación estrecha de esta introduc- para ser testigo, para dar testimo-
ción con todo lo que va a seguir en nio de la luz, para que todos cre-
esa primera parte, que va a comen- yeran por medio de él" 1,7). Vea-
zar precisamente con el testimonio mos más en detalle cómo se desa-
de Juan. En un himno que fuera rrolla esta sección.
introducción a todo el evangelio
estas alusiones a Juan serían menos 1. Testimonio de Juan (1,19-34).
comprensibles. Siguiendo la tradición antigua, la
actividad de Jesús se relaciona con
ASÍ, pues, prescindiendo de si la actividad de Juan. Pero Juan es
una parte de esta introducción ante todo el testigo. Así tenemos
existió bajo otra forma y con una aquÍ un doble testimonio de Juan.
función diferente de manera inde-
pendiente del evangelio, creo que se 2. El proceso de la fe en los pri-
debe decir que 1,1-18 es la intro- meros discípulos: testimonio, en-
ducción natural a la primera parte cuentro, signo (1,35 - 2,11). El
del evangelio. evangelista nos presenta aquÍ uno
de los modelos básicos del proceso
Sección A (1,19 - 3,36). El naci- de la fe, el de los primeros discípu-
miento de la fe. los. Parte del testimonio, el cual
lleva al encuentro personal con
El desarrollo de la primera etapa Jesús y tiene un punto culminante
de la actividad de Jesús comienza en el signo.

176 LA ESTRUCTURA TEOLOGICA DEL CUARTO EVANGELIO


Aunque muchos autores no vean otros dos elementos en ese proce-
un nexo muy estrecho entre el ca- so: la Escritura y la palabra de
pítulo 1 y el 2, creo que 2,11 es la Jesús. Al mismo tiempo muestra
coronación de toda la sección en que esa fe históricamente sólo llegó
que se habla de los discípulos, y a perfeccionarse "cuando (Jesús)
que toda esta sección 1,35 - 2,11 resucitó". Por otra parte aquí co-
tiene una gran unidad en el tema mienza a insinuarse la posición
del proceso de la formación de la opuesta a la de la fe: el rechazo.
fe de los discípulos. Ese proceso es Los judíos piden un signo. Jesús no
presentado en tres pasos: les ofrece un signo, sino su palabra,
que a la luz de la Escritura es de
a) El testimonio (1,35-42) igual valor que los signos.
b) El encuentro personal (1,43-
51) 4. Diálogo de Jesús con Nicode-
c) El signo, revelación de la gloria mo (Pascua) (2,23- 3,21). El evan-
de Jesús (2,1-11). gelista continúa describiendo el sur-
gimiento de la fe: estando en Jeru-
Creo que una de las principales salén, en la fiesta de la Pascua, "mu-
funciones del dato cronológico "al chos creyeron en su nombre" (2,
tercer día", que leemos en 2,1, es la 23). Pero el lugar destacado en este
de ligar esta escena con las anterio- trozo lo ocupa la instrucción de
res, aunque al mismo tiempo se Jesús a Nicodemo. Aquí no es tanto
indique una mayor distancia crono- la misma fe de Nicodemo la que in-
lógica y geográfica. La anotación teresa, sobre la cual nada explícito
del evangelista en 2,11 concluye dice el evangelista, sino la palabra
claramente este trozo: " ... y mani- de Jesús. Va a mostrar más amplia-
festó su gloria y sus discípulos cre- mente cómo Jesús complementa los
yeron en él". signos con sus palabras.

3. Purificación del templo, anun- Esta escena es situada "en la Pas-


cio de la resurrección. (2, 12-22). A cua" (2,23). Las tres Pascuas de Jn
primera vista esta escen¡¡ no encaja aparecerán así repartidas de manera
dentro de los temas que hemos uniforme en la cuarta escena de
venido exponiendo. Pero debemos cada sección.
verla en la perspectiva de Jn. La
observación final nos aclara cuál es 5. Nuevo testimonio de Juan (3,
esa perspectiva: "Cuando (Jesús) 22-36). En la redacción final del
resucitó, se acordaron sus discípu- evangelio 3,22-36 forma una uni-
los que era esto a lo que se refería dad. La elevada teología presentada
(es decir, su resurrección) y creye- en 3,31-36 no debe examinarse en
ron en la Escritura y en la palabra la verosimilitud de su procedencia
que había dicho Jesús" (2,22). Es histórica de Juan Bautista sino en
interesante observar que para Jn su función como conclusión de
esta escena es sobre todo un ele- toda esta sección. La frase final "el
mento más en el proceso de la fe que cree en el Hijo tiene vida eter-
de los discípulos. Lo que esta esce- na, pero el que no cree en el Hijo
na muestra es la importancia de no verá la vida, sino que la ira de

PEDRO ORTIZ v., S.J. 177


Dios permanece sobre él" cierra var a los demás a la fe con su tes-
esta sección y al mismo tiempo pre- timonio (cf. 17,20).
para para la siguiente, donde empe-
zará a delinearse más claramente la 2. Jesús cura al hijo del funciona-
posición contraria a la fe. rio real (4,43-54). El relato de la
curación del hijo del funcionario
Sección B (4,1-6,71). El creci- real termina con la anotación: "y
miento de la fe y el surgir del recha- creyó él y toda su casa" (4,53). Es
zo para Jn un ejemplo de la fe que
nace del signo obrado por Jesús.
En esta segunda sección sigue el Es interesante que esto suceda en
evangelista desarrollando el tema de Caná de Galilea y que se anote que
cómo Jesús va llevando a los hom- es el segundo signo que obró Jesús
bres a la fe por medio de sus signos (4,54). Aparece así un claro parale-
y su palabra, a la vez que en el lismo con la escena 2 de la sección
encuentro personal. Todavía predo- A (1,35 - 2,11) donde se habla del
mina el lado positivo. Sin embargo "primer signo", realizado también
empieza a delinearse más claramen- en Caná.
te la posición contraria, el rechazo.
Aparecen algunos elementos en pa- 3. Jesús cura a un paralítico. Dis-
ralelismo con la sección A. cusión. (5,1-47). Tenemos aquí un
nuevo signo de Jesús, que está sin
1. Jesús y los samaritanos (4,1- duda ordenado a la fe, pero que
42). En esta escena no solamente muestra que el signo por sí solo no
nos muestra el evangelista cómo un basta. Habiendo sido realizado en
número de samaritanos aceptan la sábado, esto les da a "los judíos"
fe en Jesús en el encuentro con él ocasión para rechazar ese signo.
y al escuchar su palabra, sino que Jesús les pone de presente que ya
incluye una instrucción de los las Escrituras son un testimonio de
discípulos referente a su misión. Dios a favor de él y que ese testi-
La fe de la mujer samaritana surge monio es confirmado con las obras
en el encuentro con Jesús y al escu- que él realiza por encargo de su
char su palabra. Pero ella a su vez Padre. Las palabras conclusivas
da testimonio ante sus compatrio- de Jesús son: "Porque si creyerais a
tas y este testimonio los lleva a Moisés, creeríais en mí, pues él
ellos a su vez al encuentro con escribió acerca de mí. Pero si no
Jesús. Por eso dice el evangelista: creéis a sus escritos, ¿cómo creeréis
"Muchos samaritanos de aquella a mis palabras?" (5,46-47). La
ciudad creyeron en él por lo que actitud hostil aparece ya claramente
había dicho la mujer . . . " (4,39) enunciada aquí: "por esto más
"y muchos más creyeron en él por deseaban los judíos matarlo" (5,18)
la palabra de él. . ." (4,41). La
instrucción de los discípulos sobre 4 Jesús multiplica los panes (6,1-
la misión no es un elemento extra- 21). Tenemos un nuevo signo de
ño que no tenga nada que ver con el Jesús. El que se considere 6,1-21
resto, sino que tiene su importancia como una sección, que por una par-
porque ellos son enviados para lle- te incluye el pequeño relato de la

178 LA ESTRUCTURA TEOLOGICA DEL CUARTO EVANGELIO


travesía del lago y por otra se obra de Dios: que creáis en aqm
separa del discurso de Jesús, puede que él envió (6,29). La reacció
discutirse. Sin embargo creo que el ante las palabras de Jesús y su
relato de la travesía del lago no tie- obras es doble. Por una parte tenE
ne en Jn autonomía sino que forma mos la de aquellos que reconoce:
una sola unidad narrativa con lo en Jesús el enviado de Dios, reprE
anterior. El relato comienza con el sentada por Simón Pedro: "SeñOl
paso del lago en dirección oeste-es- ¿a quién iremos? Tú tienes palabra
te; allí se realiza el signo y luego de vida eterna. Nosotros hemo
regresan a Cafarnaúm. Aquí encon- creído y sabemos que tú eres e
tramos la mención de la segunda Consagrado por Dios" (6,68-69). ~
pascua (6,4). La escena 4 de la sec- por otra tenemos la actitud d,
ción A estaba colocada "en la muchos otros: "Desde entonce
Pascua" (2,23), creando así cierto muchos de sus discípulos se echa
paralelismo. Aunque aquí se dice ron atrás y ya no seguían con él'
"estaba cerca la Pascua", después (6,66). Pero también se anunci;
nada se dice de la fiesta misma. En aquí ya la traición de Judas (6,70
la sección. A la cercanía de la 71).
Pascua había sido mencionada en la
escena 3 (2,13), pero la escena 4 Sección e (7,1-12,43). Se acen
aparecía colocada propiamente túa el rechazo
en la Pascua (2,23). En esta escena
no se hace mención explícita de la Esta sección está marcada predo
fe, pero está implícita la referencia minantemente por el signo negati
en las palabras: "La gente, al ver el vo: el rechazo que encuentra entrE
signo que había realizado, decía: los suyos. Es la explicación mru
Verdaderamente este es el profeta detallada de lo anunciado en lf
que debía venir al mundo" (6,14). introducción: "Vino a su propill
casa, y los de su casa no lo recibie·
5. Discurso sobre el pan de vida ron" (1,11).
(6,22-71). Creo que el discurso
sobre el pan de vida debe separarse 1. En la fiesta de los tabernáculos
del anterior relato para formar una (7,1-52; 8,12-59). Esta primera es·
escena propia. Aunque el discurso cena marca claramente la tónica
claramente se refiere al signo ante- que va a predominar en toda la
rior, sin embargo está separado de sección. Ya en 7,1 leemos: " .. .los
él literaria, cronológica y topográfi- judíos querían matarlo" y la escena
camente. El breve relato de la tra- concluye con la anotación: "toma-
vesía del lago (6,16-21) lo separa ron piedras para apedrearlo" (8,59).
literariamente de lo anterior. Cro- Esta actitud hostil es mencionada
nológicamente está seprado por la en varios lugares de esta escena
indicación "al día siguiente" (6,22). (7,19.20.25; 8,37.40). El tema de la
Topográficamente se separa tam- incredulidad se hace cada vez más
bién, pues aparece localizado en la insistente: "ni siquiera sus herma-
sinagoga de Cafarnaúm (6,59). En nos creían en él" (7,5). Véase tam-
este discurso aparece como tema bién 7 ,48; 8,24.45.46. A pesar de
central el tema de la fe: "Esta es la todo no se excluye que muchos

PEDRO ORTIZ V.,S.J. 179


crean en Jesús (7,31; 8,30). La plementan los hechos, aclaran su
escena principalmente nos narra sentido. En la discusión se manifies-
la enseñanza de Jesús y la contra- ta de nuevo la actitud hostil de los
dicción que encuentra. judíos (10,25-26) y aparece de
nuevo el intento de matar a Jesús
2. Jesús cura a un ciego. Discu- (10,31-39) Con todo no falta la
sión (9,1-10,21). Esta escena tiene mención de algunos que creen en
una unidad muy clara dada por la Jesús (10,42)
narración dramática de la curación
del ciego y la discusión con los 4. Escenas en Betania: resurrec-
judíos. Jesús cura a un ciego para ción de Lázaro y unción (11,1-12,
mostrar que él es la luz del mundo 11) Esta cuarta escena la considero
(9,5) y el que estaba ciego llega a la doble, pues está formada por la
fe (9,38) mientras que el grupo de resurrección de Lázaro (11,1-57) y
los fariseos se empeña en no creer la unción por María (12,1-11) En
y así se cumplen las palabras de realidad se puede dudar si se deben
Jesús: "He venido a este mundo considerar juntas o más bien comb
para realizar un juicio, para que dos escenas distintas, separadas. A
los que no ven vean y los que ven favor de la unión de estas dos
se vuelvan ciegos" (9,39). El trozo escenas, dentro de todo el conjunto
que se encuentra en 10,1-21 puede de la sección C, están las siguientes
parecer algo distinto, sin mayor consideraciones: a) En primer lugar
conexión con lo anterior. Sin em- la localización geográfica: todo
bargo en el estado actual del texto sucede en Betania. b) La escena
es indudablemente continuación de de la unción está estrechamente
las palabras de Jesús comenzadas relacionada con la resurrección, de
en 9,41. Las palabras conclusivas Lázaro, pues la que unge a Jesús es
(10,21) hacen referencia a la cura- María, hermana de Lázaro. c) En la
ción del ciego. escena de la unción se menciona
cuatro veces a Lázaro (12,1.2.9.10).
Este signo también es realizado Expresamente se dice que él estaba
en sábado (9,14) y esto sirve tam- presente en la cena y que los sumos
bién de ocasión a los fariseos para sacerdotes decidieron matarlo a él
interpretarlo torcidamente (9,16) también. De esta manera se estable-
Las palabras de Jesús a los judíos ce una clara unión entre las dos
les muestran que toda su vida y su escenas, a pesar de estar separadas
actitud de entrega por sus ovejas cronológicamente. En ellas se mues-
manifiestan el sentido de sus hechos tra que Jesús es la resurrección y
y el origen de su persona y de sus la vida. Esto es lo que él muestra
obras. resucitando a Lázaro, pero esto es
lo que sirve de pretexto a los fari-
3. Fiesta de la Dedicación. Discu- seos y sumos sacerdotes para buscar
siones (10,22-42) Esta nueva esce- una solución radical, que expresa
na aparece situada en la fiesta de la Caifás: "¿No os dais cuenta de que
Dedicación. Aquí no se relata nin- es necesario que un solo hombre
gún hecho de Jesús, sino solamente muera por el pueblo y no que toda
palabras suyas. Las palabras com- la nación perezca? .. y desde aquel

180 LA ESTRUCTURA TEOLOGICA DEL CUARTO EVANGELIO


día tomaron la decisión de matar- Conclusión (12,44-50). Me pare-
lo". (11,50-53). Se decide la muerte ce que se puede considerar el trozo
del que da la vida a los hombres y 12,44-50 como la conclusión de
Lázaro queda involucrado en esta toda la primera parte. Parecía que
sentencia (12,9-11). La unción es 12,36-b-43 ya era la conclusión de
"un prenuncio de la muerte de Jesús toda la primera parte del evangelio.
(12,7). Pero ese tono negativo solo cuadra
bien con la sección C. Por esa
Este signo aparece encaminado a razón, creo, se añaden unas palabras
la fe (11,14). La fe es el camino de de Jesús que sirven para encuadrar
la vida: "El que cree en mí, aunque mejor toda la primera parte. En
muera, tendrá vida, y todo el que ellas encontramos de nuevo acentos
viva y crea en mí no morirá eterna- positivos. Son en realidad un resu-
mente" (11,25-26). María proclama men de todos los temas expuestos
claramente su fe (11,27). Pero tam- en la primera parte; se expresa cla-
bién se dice: "Muchos judíos que ramente cuál es el origen de Jesús y
habían venido a visitar a María y de su enseñanza, y cuál es su mi-
vieron lo que Jesús hizo creyeron sión: iluminar a los hombres, comu-
en él" (11,45). Muchos judíos iban nicarles la vida eterna. Es un trozo
allá y creían en Jesús" (12,11). que tiene mucho paralelismo de
temas con la introducción (1,1-18)
De nuevo encontramos un ele- aunque la forma literaria sea dis-
mento que establece un paralelo tinta.
entre esta escena y las otras escenas
4 de las secciones A y B: la men-
ción de la cercanía de la Pascua (11, SEGUNDA PARTE
55; 12,1).
Ya se ha indicado cómo toda esta
5. Entrada mesiánica en Jerusa- segunda parte aparece claramente
lén (12,12). Aquí Jesús llega a Jeru- marcada por la idea del regreso al
salén, el lugar de su muert~. Las di- Padre. La unidad literaria de toda
versas actitudes frente a Jesús son esta sección es manifiesta. El evan-
características. Por una parte Jesús gelista sigue aquí más de cerca la
es recibido con aclamaciones, lo tradición antigua y el desarrollo de
que hace exclamar a los fariseos: las partes depende más de los diver-
"¡Todo el mundo se va detrás de sos acontecimientos que se narran.
él!" (12,19), cosa que se ilustra Una cosa llama la atención y es la
especialmente con el deseo de los amplitud que adquiere la cena de
"griegos" de ver a Jesús. Pero al despedida, prolongada por la ins-
mismo tiempo es la entrada para trucción a los discípulos. Podemos
la muerte. El grano de trigo tiene distinguir en esta segunda parte
que morir (12,24), se acerca la hora igualmente tres secciones principa-
del regreso al Padre (12,27). La les. Los criterios para encontrar la
observación del evangelista sobre articulación de las partes son sobre
la incredulidad de ese grupo de su todo de orden topográfico y cro-
pueblo y la cita de Isaías precisa- nológico. Indicaré de manera bas-
menté sobre este tema (12,36b-43) tante somera la que me parece ser
concluyen la escena. la estructura de esta parte. Cada

PEDRO ORTIZ v., S.J. 181


una de las tres secciones se puede l. Simón Pedro y el discípulo
ver dividida, sin violencia, en cin- amado encuentran el sepulcro
co escenas de diversa longitud. vacío (20,1-20).
2. Jesús se manifiesta a María
Sección A (13,1-17,26) La cena (20,11-18).
de despedida 3. Jesús se manifiesta a sus discÍ-
pulos, no estando Tomás (20,
Esta cena, que en los sinópticos 19-23)
es solo una parte pequeña de todo 4. Jesús se les manifiesta de nue-
relato de la Pasión, adquiere en Jn vo, estando Tomás (20,24-29).
una importancia considerable, sobre 5. Aparición junto al lago (21,1-
todo por la instrucción que da 24).
Jesús a sus discípulos antes de irse
al Padre. Las escenas principales
que podemos distinguir son: Con frecuencia se opina que el
capítulo 21 es una especie de epí-
1. Lavatorio de los pies (13,1-20) logo a todo el evangelio, ya que en
2. Anuncio de la traición de Ju- 20,30-31 ya parece que hubiera
das (13,21-30) terminado el evangelio en un estado
3. Anuncio de su partida y de la más primitivo. Pero no hay duda de
negación de Pedro (13,31-38) que en el estado actual del texto, en
4. Instrucción a los discípulos. su forma definitiva, el cap. 21 hace
primera parte (14,1-31) parte de las manifestaciones de
5. Instrucción a los discípulos: Jesús resucitado.
segunda parte (15,1-17,26)
En esta estructura que he pro-
Sección B (18,1-21,25) La Pa- puesto el interés principal debe
sión buscarse en las grandes líneas direc-
trices más que en las subdivisiones
Esta sección que es esencialmen- particulares. Estas pueden ser discu-
te narrativa aparece claramente arti- tibles; sobre todo, si cada una de las
culada por los lugares en que se de- secciones esté realmente dividida en
sarrollan las diversas escenas. cinco escenas. Creo que hay razo-
nes en el texto para aceptarlas co-
1. Predimiento en el huerto (18, mo se han propuesto. Pero no cam-
1-11) biaría lo esencial de la estructura si
2. En las casas de Anás y Caifás estas subdivisiones se vieran de
(18,12-27) otra manera.
3. En el pretorio (18,28-19,16a)
4. En el Gólgota (19,16b-36) De manera esquemática se puede
5. Sepultura (19,37-42) proponer la estructura del cuarto
evangelio así:
Sección e (20,1-21,24) :Jesús
resucitado
PRIMERA PARTE: El Hijo de
Antes de irse al Padre Jesús se Dios es enviado al mundo para co-
manifiesta vivo a sus discípulos y municar la vida eterna por la fe
los envía a su vez. (1-12)

182 LA ESTRUCTURA TEOLOGICA DEL CUARTO EVANGELIO


Introducción: El punto de parti- Conclusión (12,44-50).
da (1,1-18).

Sección A. El nacimiento de la fe
(1,19-3,36). SEGUNDA PARTE: El regreso al
Padre (13-21)
1. Testimonio de Juan (1,19-34).
2. El proceso de la fe en los pri- Sección A. La cena de despedida
meros discípulos: testimonio, (13,1-17,26).
encuentro, signo (1,35-2,11).
3. Purificación del templo, anun- 1. Lavatorio de lps pies (13,1-20)
cio de la resurrección (2,12- 2. Anuncio de la traición de Ju-
22). das (13,21-30).
4. Diálogo de Jesús con Nicode- 3. Anuncio de su partida y de la
mo (Pascua) (2,23-3,21). negación de Pedro (13,31-38).
5. Nuevo Testimonio de Juan (3, 4. Instrucción a los discípulos:
22-36). primera parte (14,1-31).
5. Instrucción a los discípulos:
Sección B. El crecimiento de la segunda parte (15,1-17,26)_
fe y el surgir del rechazo (4,1-6,71).
Sección B. La Pasión (18,1-19,
1. Jesús y los samaritanos (4,1- 42).
42).
2. Jesús cura al hijo del funciona- 1. Prendimiento en el huerto (18,
rio real (4,43-54). 1-11)
3. Jesús cura a un paralítico. Dis- 2. En las casas de Anás y Caifás
cusión (5,1-47). (18,12-27).
4. Jesús multiplica los panes (Pas- 3. En el pretorio (18,28-19,16a).
cua) (6,1-21). 4. En el Gólgota (19,16b-37).
5. Discurso sobre el pan de vida 5. Sepultura (19,38-42).
(6,22-71).
Sección C. Jesús resucitado (20,
Sección C. Se acentúa el rechazo 1-21,24).
(7,1-12,43)
1. Simón Pedro y el discípulo
1. En la fiesta de los tabernáculos amado encuentran el sepulcro
(7,1-52; 8,12-59). vacío (20,110).
2. Jesús cura a un ciego. Discu- 2. Jesús manifiesta a María (20,
sión (9,1-10,21). 11-18).
3. Fiesta de la Dedicación. Discu- 3. Jesús se manifiesta a sus discí-
siones (10,22-42). pulos no estando Tomás (20,
4. Escenas en Betania: resurrec- 19-23).
ción de Lázaro y unción (Pas- 4. Jesús se les manifiesta de nue-
cua) (11,1-12,11). vo, estando Tomás (20,24-29).
5. Entrada mesiánica en Jerusa- 5. Aparición junto al lago (21,1-
lén (12,12-43). 24)

PEDRO ORTIZ V., S.J. 183


NOTA BIBLIOGRAFICA

En la forma expuesta debe completarse la estructura presentada en PEDRO ORTlZ


VALDIVIESO, S J., Introducción a los Evangelios (Pontificia Universidad Javeriana,
Facultad de Teología, Colección Profesores No. 11) Bogotá 1981, págs. 123-124.

Para otros puntos de vista sobre la estructura del cuarto evangelio pueden verse los
comentarios al cuarto evangelio y otros estudios generales y particulares, de los que cita-
mos algunos más importantes.

a) Bibliografía

La principal bibliografía sobre el cuarto evangelio puede encontrarse sobre todo en:

E. MALATESTA, Sto John's Gospe11920-1965 (Analecta Bíblica 32), Roma 1967.


H. THYEN, Aus der Literatur zum Johannesevangelium: Theologische Rundschau 39
(1975) 1-69; 222-252; 289-330; 42 (1977) 211-270; 43 (1978) 328-359; 44 (1979)
97-134.

b) Estudios generales más importantes

R E 8ROWN, El Evangelio según Juan, 2 vols, Madrid 1979.


R BULTMANN, Das Evangelium desJohannes. Giittingen 1941 (reeditado varias veces)
C. DODD, La interpretación del cuarto evangelio. Madrid 1978.
J MA TEOS - J SARRETO, El Evangelio de Juan. Madrid 1979.
D. MOLLAT, L 'Evangile et les Epitres de saint Jean (La Sainte Bible traduite en fram;ais
sous la direction de rEcole Biblique de Jérusalem) Paris 1953 (varias reedicionesJ.
R. SCHNACKENBURG, El Evangelio según San Juan, 3 vols. Barcelona 198a
H. VAN DEN BUSSCHE, El Evangelio según San Juan, Madrid 1972.
A. WIKENHAUSER - J SCHMID, Einleitung in das Neue Testament, 6a. ed. Freiburg-
Basel-Wien 1973.

c) Estudios particulares más recientes

D DEEKS, The Structure of the Fourth Gospel: New Testament Studies 15 (1968s)
107-129.
l. DE LA POTTERIE, Structura primae partis Evangelii Johannis: Verbum Domini 47
(1969) 130-14a
M. GIRARD, La structure heptapartite du quatrieme évangile: Studies in Religion 5
(1975s) 350-359.
R PUlGDOLLERS, Notas sobre la estructura del cuarto evangelio: Naturaleza y Gracia
19 (1972) 123-151.
J WILLEMSE, Het vierde evangelie. Een onderzoek naar zijn structuur. Hilversum-An-
twerpen 1965 (con bibliografía especializada en las págs. 327- 334).

184 LA ESTRUCTURA TEOLOGICA DEL CUARTO EVANGELIO

También podría gustarte