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Este documento resume un soneto de José Montero Padilla. Describe la belleza de una mujer y exhorta a disfrutar de la juventud antes de que pase el tiempo. El poema usa imágenes renacentistas y temas clásicos como el carpe diem. Aunque la belleza y juventud son pasajeras, como se indica en los últimos versos donde la rosa se marchitará con el viento helado y todo cambiará con el tiempo. El documento también analiza la forma métrica del soneto y cómo representa los ideales del Renacimiento.
Este documento resume un soneto de José Montero Padilla. Describe la belleza de una mujer y exhorta a disfrutar de la juventud antes de que pase el tiempo. El poema usa imágenes renacentistas y temas clásicos como el carpe diem. Aunque la belleza y juventud son pasajeras, como se indica en los últimos versos donde la rosa se marchitará con el viento helado y todo cambiará con el tiempo. El documento también analiza la forma métrica del soneto y cómo representa los ideales del Renacimiento.
Este documento resume un soneto de José Montero Padilla. Describe la belleza de una mujer y exhorta a disfrutar de la juventud antes de que pase el tiempo. El poema usa imágenes renacentistas y temas clásicos como el carpe diem. Aunque la belleza y juventud son pasajeras, como se indica en los últimos versos donde la rosa se marchitará con el viento helado y todo cambiará con el tiempo. El documento también analiza la forma métrica del soneto y cómo representa los ideales del Renacimiento.
El poema comienza con una locucin temporal, En tanto
que, reiterada anafricamente despus (verso 5.), que manifiesta la simultaneidad de las acciones expresadas por las oraciones subordinadas (versos 1. a 8.) y por la principal (coged...), locucin a la que sigue la pareja de sustantivos, con cierto carcter adjetivo, rosa y azucena, de sugestin y contraste coloristas. Nuevas parejas de trminos aparecen en seguida, en los versos siguientes: de adjetivos (ardiente, honesto), de verbos (enciende, refrena), y la correlacin y los contrastes significativos se muestran evidentes:
Los cuatro primeros versos inician al propio tiempo un
retrato de mujer, retrato que se ampla seguidamente con la referencia al dorado cabello (que en la vena del oro se escogi) y al cuello (blanco, enhiesto). Esta esbozada descripcin coincide, sin duda, con el ideal renacentista de la belleza femenina (recurdese, como plstico ejemplo, el admirable retrato de la emperatriz Isabel, esposa de Carlos V, por el pintor Tiziano). Todava en el segundo cuarteto (verso 8.), el efecto del viento sobre el cabello es mostrado y matizado morosa, certeramente por la sabia gradacin de las tres formas verbales: mueve, esparce y desordena, una gradacin que sugiere, por un instante, a los ojos actuales, en la lentitud de los movimientos descritos, la tcnica de la cmara lenta en el cinematgrafo.
Las claves temticas e ideolgicas del poema se hallan a
continuacin (versos 9. a 11.), en la exhortacin al goce de la juventud (representada tpicamente por la imagen de la primavera), antes de que sta pase, antes de que el hermoso cabello rubio encanezca como consecuencia del paso del tiempo (metafricamente, antes que el tiempo airado / cubra de nieve la hermosa cumbre). Este tema, de ascendencia clsica, con antecedentes inmediatos en la literatura latina, en Horacio (Carpe diem...), y en Ausonio (Collige, virgo, rosas...), y al que se suele denominar precisamente, con las palabras del poeta latino, del carpe diem, puede simbolizar y representar el sentido de afirmacin existencial, el afn por el goce de vivir caractersticos del espritu del Renacimiento. Por ello mismo, con significativa coincidencia, el mismo tema es reiterado y glosado tambin por otros importantes escritores renacentistas: Poliziano, Bernardo Tasso (al que ley y tuvo en cuenta Garcilaso), Ronsard, etc. Todo ello da testimonio a la vez del inters por la Antigedad grecolatina y del retorno a ella, otra de las claves inspiradoras del Renacimiento.
Sin embargo, los tres versos finales del soneto nos
recuerdan y aseveran la inexorable fugacidad de todas las cosas, con un ejemplo concreto primero en bellsimo verso (Marchitar la rosa el viento helado), mediante una afirmacin de mbito general despus: todo lo mudar la edad ligera / por no hacer mudanza en su costumbre. El ltimo verso, segn observ Rafael Lapesa, se repliega en una paradoja incolora [...]; pero este final desdibujado facilita la evasin del pensamiento, librndolo de fijarse en la futura ruina. (La trayectoria potica de Garcilaso, Madrid: Revista de Occidente, 1968 2. ed., p. 163). Esos dos ltimos versos acaso nos puedan sugerir, tambin, el ltimo acorde de una composicin musical que se apaga lenta, melanclicamente, y tiembla en el aire hasta desvanecerse por completo. Asimismo, el juego de palabras mudar y mudanza recuerda los artificios tan habituales en los cancioneros del siglo XV.
En cuanto a su forma mtrica, es la siguiente: catorce
versos endecaslabos con acentos en 6. y 10. slabas los predominantes o en 4. y 8. slabas, encabalgados en su mayora; con rima consonante o total, en el siguiente orden: ABBAABBACDEDCE. Se trata, pues, de un soneto, una de las estructuras mtricas o estrofa compuesta incorporadas de manera definitiva a la mtrica espaola por Garcilaso, tras los ensayos habidos en el siglo anterior (como los sonetos del marqus de Santillana, fechos al itlico modo, por ejemplo significativo).
Son numerosos y concluyentes, por tanto, los rasgos que
definen a esta composicin como un texto singularmente representativo y de plenitud del Renacimiento, y de modo ms concreto, de la creacin potica de Garcilaso: abundancia de adjetivos (apenas hay sustantivos sin ellos), sugestin sensorial y colorista, el tema e ideas que expresa, abolengo clsico, forma mtrica de origen italiano, equilibrada expresin del pensamiento. Paradigma renacentista en definitiva.
(Para el comentario utilizo la edicin de Toms Navarro
Toms y, por tanto, acepto el verso enciende el corazn y lo refrena, en lugar de con clara luz la tempestad serena. Cfr. el valioso trabajo de Mara Rosso Gallo, La poesa de Garcilaso de la Vega. Anlisis filolgico y texto crtico, pp. 208-212.)