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me} ia) gS ra) or ke) S os x. 3) ° -at-Jale(ovle Rosy ONIAIVO ITALO CALVINO Sev. propuestas para el préximo mulenio Nota preliminar de Esther Calvino Edicion al cuidado de César Palma Traducciones de Aurora Bernardez y César Palma ( CIRCULO de LECTORES. NOTA PRELIMINAR La primera ediciin de Seis propuestas para el proximo milenio Jue publicada en mayo de 1988 por la editorial Garcanti de Mil. Como Calvino no deji ni escritos ni entrevistas sobre los temas ni sobre lu elaboraciéin de las Seis propuestas (murié mientras estaba trabe. Jwnato en ellas), rproducimos integramente el texto escrito por Esther Calvino co) esta de 1998, 1 ocasién de esa primera edicion, asi como uno nuevo para Nota a la edicion de 1989 E16 de junio de 1984 la Universidad de Harvard invité oficial mente a Calvino a ocupar la ciitedra de las «Charles Eliot Not ton Poetry Lectures», Es éste un ciclo de seis conferencias que tiene lugar durante el aio académico (para Calvino habria Sido cl aio. 1985-1986) en ka Universidad de Harvard, Cam- bride, en Massachusetts, EL érmino «poetry» significa en este caso toda forma de com acién poética -literaria, musical, pictériea-, y la cleccion del tema es totalmente libre Esta libertad fue el primer problema que Calvino tuvo que alromiar, convencide como estaba de que la conswiccion es lundamental para la ereacién literaria. A partir del momento en que logré definir claramente el tema que habria de tatar algimos valores literarios que deberian conservarse en el pré- Aino milenio~, dedicé casi todo su tiempo a la preparacién de las conferencias, que no tardaron en convertirse en una obse sion, Un dia me dijo que tenia ideas y materiales para ocho conferencias por lo menos, ¥ no S6lo las seis previstas y obliga lorias, Conozco el titulo de ka que hubiera podido ser la octa- va, «Sul cominciare e sul finires (de las novelas), pero hasta hoy no he encontrado el texto, S6lo notas. Fn el momento de partir hacia los Estados Unidos, de las seis conferencias Calvino habia eserito cinco, Falta la sexta, Consistency», de la que s6lo sé que se habria referido, entre otras cosas, al Bartleby, de Herman Mehille, y que la escribiria en Harvard. Naturahnente, éstas son las conferencias que Calvino hu biera dictado en pablico. No dudo de que lis habria revisado yente antes de darlas a kt imprenta. Pero creo poder afirmar que los cambios hubieran sido poco importantes, Las diferencias entre las primeras versiones que lei y las atimas re siden en fa estruc Este libro reproduce el manuscrito tal como lo enconué He dejado en ingles las palabras escritas directamente por Cal- vino en ese idioma, asi como en su lengua original han queda do las citas de diversos autores, Calvino dej6 este libro sin titulo en italiano. Tuvo que pen- sar primero el titulo inglés, Six Memos for the Next Millennium, y éste fue el definitive, Aqui seria conveniente ackarar que, aun que fueron eseritas en italiano, las conferencias habrian sido leidas por Calvino en su traduceidn inglesa, Diré por dtimo que el manuscrito estal en perfecto orden, cada conferencia dentro de un sobre tans parente y todas en una carpeta rigida, lista para el viaje. Calvi ho murio una semana antes de emprenderlo, el 19 de septiem: bre de 1985, Las «Cha Jes Eliot Norton Poetry Lectures», que se inicia- ron en 1926, fueron confiadas a personalidades como T. S. Fliot, Igor Stravinsky, Jorge Luis Borges, Northrop Frye, Oc- tavio Paz. Es la primera vez que se invitaba aun escritor ite fiano, Deseo expresar mi agradecimiento a Luca Marigheui, de la Universidad de Constanza, por su profundo conocimiento de G | eis propuestes pra pon la obra y el pensamiento de Calvino, y a Angelika Koch, de la misma Universidad, por la ayuda que me ha prestado, Esther Calvino Nota a la edicion de 1998 En esta nueva edicién se ineluye el testo inédito «EI arte de empezar y el arte de acabar», que no es la sexta conferencia (Consistency) ¥ que fue hallado entre los papeles y manus: /ritos de Calvino ocho aiios después de fa primera edicién de este libro, En realidad no se sabe si se hubiese tatado de ta septima o de la octava, como yo suponia tras baberle escuchado decir que tenia ideas y material para escribir por lo menos ocho con lerencias, y unas semanas después, que acababa de escribir una conferencia entera y que habia encontrado en nuestra bi lioteea los Tibros que necesitaba consular y releer Lo cierto es que, segtin su tradicion, las «Charles Eliot Nor- ton Poetry Lectures» no admiten cielos de mis de seis conferen- as, por Io que Calvino se vio obligado a adaptar un conjunto coherente de ideas y reflesiones.a la forma que le imponian, En el manuscrito de Seis pmpuestas para el priximo milenio ran ocho esquemas mas © menos detalkidos y anotados de los temas que debian ser desarrollados, El problema del empe- far vaacabar aparece en siete de ellos, que copie textual y lite ralnente del manuscrito: VERVO PROYECTO Di: ESQUEMA GENERAL empesary acabar ta encicloprdia y la nada (mathesis singularis y wniversais?) of projimo ~ ta interdependencia singularis y universalis ~ precisiin y waguedad rupides ~ formas tnews 1 ta gpoca deta imagen y de ta falta de tiempo Jevedad ~ dtomos y alfabeto Con esta note: En todas [las conferencias} recordar ef ca ricter invustituible de la literatura y de ta leetura en un mun doen el que ya nadie quervi leer 12.35.85 orno esque. 1. Empesary acabar 2 la Enciclopedia y ta nada (la multiplicidad dentro de ta obra) 3. Visibilidad y palabra (...) 4. el indiviiduo y los otros Amerika (Candide? el hombre en el vasto mundo) 5. da progenie de Ovidio (22) 6. la progenie de Lucvecio, conocimiento plviscular Elesquema podria ser Empear y acabar la Enciclopedia y la nada Mathesis singularis (vaguedad y procisiin — descripeién) lac subjetividad plural (América de Kafka ~el yo) Ja progenie de Ovidio Ta progenie de Lucrecio 1. Cosinicidad — Lucrecio y Ovidlio ~ enciclopedia 2. Visibilidad — visién y palabra Lewdad ~ disolucién de lo concerto 1. vauedad geametria precision 5. (Jas otras) intersubjetividad 6. to acabado (en ef sentido de walizado y perfecto) empesar y avabar [6.4.85]. partir de esta fecha, Ia levedad ocupara definitiva- mente el primer lugar 1. fa levvdtad 2. ti relacin de todo con todo (enciclopedia) Lucrecio Ovidio Gadda Pevee 8, la rvcipmocidad las personas intersubjelividad y solipsismo 4, visibilidad eteétera 5. la nada y to poco 6. elempesar y el acabar Aunque introducide come tema inicial, Empear y acabar pasa al dtimo lugar \ partir del 19 de abril anota otros esquemas, cada vez mis concretos, abandona el italiano y los escribe directamente en inglés, La conferencia que nos interesa aparece como The art of be The art of concluding sen otros dos easos, The art of beginning and the art of concluding ELS de mayo de 1985 eseribe habiendo acabado (2) La levedad esbezado Mutiplicidad ya esrrito extensamente sobre The art of beginning and the art of concluding manteniendo como punto necesario visible/invisible -singularis/universalis rato de puntualizar ‘tras euestiones padrian ser rapide: (quickness) la nada los otros exactittud — geometvia {Qué sucede con el empezar y el acabar en el momento de la redaccion definitiva? Nota pretininar | 9 Cahe suponer que, siendo éste un problema de twenica lite raja, no haya encontrado su lugar en un conjunto de valores abstracts y conceptuales (tales como la levedad, rapidez, exac titnd, visibilicad, multiplicidad) destinados a ser preservados y transmitidos al préximo milenio, Esther Calvino ‘eis propuestas para el proximo milenio 10. | seis propestas fra ot prime wi Estamos en 1985; apenas nos separan quince aiios del comien- zo de un nuevo milenio. Por el momento no yeo que la proxi- midad de esta fecha despierte una cmocion particular. De to: das maneras no estoy aqui para hablar de faturologia, sino de literatura, El milenio que esta por terminar ha asistide al nact- miento ya la expansion de las lenguas modernas de Occidente yde las literaturas que han explorado las posibilidades expres: vas y cognoscitivas e imaginativas de esas lenguas, Ha sido tam. bien cl milenio de! libro, dado que ha visto como el objeto tie bro adquiria la forma que nos es familiar. La seal de que el ilenio esti por concluir tal yer sea la frecuencia con que nos, interrogamos sobre la suerte de la literatura y del libro en la era tecnolégica llamada postindustial, No voy a aventurarme en previsiones de este tipo. Mi fe en el futuro de fa literatura consiste en saber que hay cosas que sdlo la literatura, con sus medios especificos, puede dar. Quisiera, pues, dedicar estas conferencias it algunos valores © Cualidades o expecifieidades de la titeratura que me son particularmente caros, tratando de situarlos en la perspectiva del nuevo milenio. LEVEDAD Dedicaré la primera conferencia a lt oposicién levedad-peso daré las razones de mi preferencia por la levedad, Esto no quiiere decir que considere menos vilidas las razones del peso, sino que sobre ka levedad creo tener mas cosas que decir Tras cuarenta aiios de escribir fiction, tras haber explorado. distintos caminos y hecho experimentos diversos, ha leg momento de busear una definicién general para mi trabajo; propongo ésta: mi labor ha consistido las mas de las veces en sustraer peso; he ratado de quitar peso a las figuras humanas, alos cuerpos cclestes, a las eitudades; he tratado, sobre todo, de qquitar peso a Ta estructura del relato y al lengualje En esta conferencia tataré de expliear ~a mi mismo ya us: tedes= por qué he Hegado a considerar Ia levedad mas como, un valor que como un defecto; cuales son, entre las obras del pasido, los ejemplos en los que reconozco ini ideal de levedacl: cémo sittio ese valor en cl presente y como Jo proyecto en el futuro, Empezaré por el tiltimo punto, Cuando inicié mi actividad, el deber de representar nuestro tiempo era cl imperativo catego- rico de todo joven escritor, Leno de buena voluniad, traté de dentificarme con la energia despiadada que mueve la historia de nuestro siglo, con sus vicisitudes individuales y colectivas Ivataba de percibir una sintonia entre el movido especticulo del mundo, unas veces dramstico otras grotesco, y el ritmo in: terior picaresco ¥ azaroso que me incitaba a escribir. Rapida menteadverti que entre los hechos de la viela que hubieran de- bido ser mi materia prima y la agilidad nerviosa e incisiva que yo queria dar a mi escritura, habia una divergencia que cada ves me costaba mas esfirerzo superar. Quiz’ silo entonces esta ba descubriendo la pesadez, la inercia ia opacidad del mundo, caracteristicas que se adhieren ripidamente a la escritura si no. a manera de evitarlas. En ciertos momentos me parecia que el mundo se iba vok viendo de piedra: una lenta petrificacion, miso menos avanzat dase hingtin aspecto de la vida, Era como si nadie pudiera esquivar Ja mirada inexorable de ka Medusa. EL nico héroe eapax de cortar la cabeza de la Medusa es Persco, que vuela con sus sundalias aladas; Perse, que no mira las personas y los lugares, pero de la que no se salvaba cl rostro de la Gorgona sino s6lo a su imagen reflejada en el es- cudo de bronce. Yen este momento, cuando empezaba a sen= ado por ka piedra, como me sucede cada ver que ica, Perseo acide intento una evocacidn histéricosautobiogr’ de nuevo en mi ayuda, Mis vale dejar que mi -xplicacién se componga de las imagenes de ka mitologia. Para cortar la eabe- za de la Medusa sin quedar petrificado, Perseo se is leve que poyat en lo xiste: los vientos y las nubes, y ditige ka miracka hacia lo que tinicamente puede revelarsele en una vision indi- reeta, © una imagen cautiva en un espejo, Inmediata siento la tentacién de encontrar en este mito una alegoria de a relaci6n del poeta con el mundo, una leccidn del método para seguir escribiendo. Pero sé que toda interpretacién em- pobrece ef mito y lo ahoga; con los mitos no hay que andar con, prisa; es mejor dejar que se depositen en ka memoria, detener- se a meditar en cada detalle, razonar sobre lo que nos dicen sin salir de su Lenguaje de imagenes. La leceién que podemos extraer de un mito reside en la literalidad del rekuto, no en lo que aiadimos nosotros desde fuera, La relacién entre Perseo y ka Gorgona es compleja: no ter= mina con la deeapitacion del monstruo. De la sangre de la Me- dusa nace un caballo alado, Pegaso: la pesadez de la piedra puede convertirse en su contrario; de una coz, Pegaso hace 16 | brotar en el monte Helic6n la fuente donde beben las Musas. En algunas versiones del mito, Perseo montara el maravilloso Pegaso caro a las Musas, nacido de la sangre maldita de la Me dusa. (Por lo denuis, también las sandalias aladas provenian del mundo de los monstruos: Perseo las habia recibido de kas, hermanas de la Medusa, las de-un solo ojo. las Greas.) En cuanto a la eabera cercenada, Perseo no li abandon, ka Mev consigo escondida en un saco; cuando sus enemigos estin a punto de vencerlo, le basta mostrarla alzindoka por la eabelle- a de serpientes y el despojo sanguinolento se convierte en un rat inveneible en ku mano del héroe, un arma que ne usa sino en casos extremos y solo contra quien merece el castigo se cn la estatua de si mismo, Aqui, sin duda, ef 10 quiere decirme algo, algo que esta implicito en las image: es y que no se puede explicar de otra manera. Persco consi gue dominar ese rostro temible manteniéndolo oculto, asi » lo habia vencido antes mirindolo en el espejo. La fuerza de Perseo esta siempre en un rechazo de ka vision directa, pero. no en un rechavo de la realidad del mundo de los monstrues que le ha tocado vivir, una realidad que lleva consigo, que asuime como carga personal Sobre la relacion entre Perseo y ka Medusa podemos apren- der algo mas levendo a Ovidio en las Metamorfosis. Perseo gana una nueva batalla, mata con su espada a un monstruo marino, libera a Andromeda. Ydecide hacer lo que cualquiera de novo- os haria después de semejante faena: lavarse lay manos. En este caso sui problema es donde posar ka cabeza de ka Medusa, Yaqui Ovidio explica, en versos (IV, 740-752) que me parecen extraordinarios, cuanta delieadeza de alma se necesita Perseo, vencedor de monstruos Para que la ispera arena no daie ka cabeza de serpentina cabellera (anguiferumque caput dura ne laedat hanna), Perseo miulle el suelo cubriéndolo con una capa de hojas, extiende encima unas ramitas nacidas bajo el agua, y en ellas posa, boca abajo, la cabeza de ka Medusa.» Me parece que kt levedad de la que Perseo es el héroe no podria estar mejor representaca que con este gesto de refrescante cortesia hacia ese ser monstruoso, Lewded | 17 yalerrador, aunque también en cierto mode deteriorable, fri gil. Pero lo mais inesperado es el milagro que sigue: las ramitas marinas en contacto con Ia Medusa se ansforman en corales y par Lormarse con ellos aeuden las ninfas que acercan rami: tasyalgas a ta terrible cabeza. Este encuentro de im roa la fero7r 3 nes, en el que la sutil gracia del coral rocidlad de la C Jona, Lambién esti tan eargado, de sugestiones que no quisiera echarlo a perder intentando co mentarios o interpretaciones. Lo que puedo hacer es acercar a estos versos de Ovidio los de un poeta modern, 1 «Piccolo tes tamento» de Eugenio Montale, en el que encontramos igtial mente clementos sutilisimos que son como emblemas de su poesia («traccia madreperlacea di lumaca / a smerighio di vetro, calpestator [ huella nacarada de earacol / 0 esmeril de vidrio pi- soteado)) frente a un espantoso monstruo infernal, un Lucifer de alas bituminosas que se al e sobre las capitales de Occiden- {c. Jamas evocé Montale como en este poema escrito en 1953 una vision tan apoca jptica, pero lo que sus versos ponen en pri mer plano son las minimas huellas huminosas que contrapone a la oscura catastrofe: «Conyervane la cipria nello specchietto quando spenta ogni lampada / la surdana si fava infernale [Conserva su polvo en el espejito / euando apagadis todas las Jamparas / la sardana sea infernal... Pero zeomo podemos es- perar salvarnos en lo que es mvs fragil? Este pocma de Montale es una profesion de fe en la persistencia de lo que parece mais «loa perecer y en los valores morales depositados en las Has my tenues: «ll tenue bagliore stvofinato / laggitt non cra quello dun fiammifero» [El tenue fulgor restregado / alla abajo no erael de un fostore] Para poder hablar de nuestra época he tenido, pues, que dav tun largo rodeo, evocar la frigil Medusa de Ovidio y el bitu minoso Lucifer de Montale. Es dificil para tun novelista repre- sentar su idea de la levedad con ejemplos tomados de ka vida contemporinea si no se la convierte en el objeto inaleanzable de una quétesin fin. Es lo que ha hecho con evidencia ¢ inme- diatez Milan Kut dera. Su novela La insoportable lrvedad del sores, en realidad una amarga constatacién de la Incluctable Pesadez 18 | Seis propuesas ara ef prisime mite del Vivir; no solo de la condicion de opresion desesperada y all-pervading que ha tocado en suerte a su desventurado pais, 2 condicién humana que nos es comin, aunque ne~ ios. El peso del vivir sotros seamos infinitamente ma para Kundera esti en toda forma de constricei6n: la tupida red it por envolver de constricciones piiblicas y privadas que ter toda existencia con nudos cada vez mas apretados, Su novela nos der cémo en la vida todo lo que elegimos y aprecia mos por su Ievedad no tarda en revelar su propio peso insoste- nible, Quiza s6lo Ia vivacidad y la movilidad de la inteligencia : rracional. sco otro espacio, No hablo de fugas al sueiio 0 a lo Qu mundo con otr miento y de verificacion. Las imagenes de levedad que busco no deben dejarse disolver como suetios por la realidad del pre- ero decir que he de cambiar mi enfoque, he de mirar el Optica, otra légica, otros métodos de conoci- sente y del futuro, En el universo infinito de la literatura se abren siempre ‘otras vias que explorar, novisimas o muy antiguas, estilos y for- mas que pueden cambiar nuestra imagen del mundo... Pero si la literatura no basta para asegurarme que no hago sino perse~ ui suefios, busco en la ciencia alimento para mis visiones, en las que toda pesadez se disuelve as de la ciencia parecen querer demostrar- en cntidades sutilisimas, como los pulsos de las neuronas, los quarks, Hay todas nos que el mundo se ape mensajes del ADN, los i itrinos errantes en el espacio desde el comienzo de los Hiempos. Ademiis, la informatica, Es cierto que el software no podria ejercitar los poderes de su levedad sin la pesader del hardware, pero el soffseare es el que mand: m exterior y sobre las maquinas, que existen solo en funcién del swftware, se desarrollan para elaborar programas cada vez mas ndo el que acttia sobre el mi complejos. La segunda revolucién industrial no se presenta Levedad | 19

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