Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
EL CHISME ES UN PECADO
Salmos 15.2-3
Efe 4.29
Qu debemos hacer cuando nos hallamos presos en las garras de ese gigante llamado chisme?
"Bueno, parece que he adquirido un mal hbito. Sera bueno dejarlo. Voy a
procurar dejarlo."
En lugar de eso, hay que encararlo honestamente, y tratarlo como pecado, como es.
La Biblia dice que hay que confesarlo. Una de las razones por las cuales continuamos hiriendo
a otros con nuestros chismes es que nunca hemos considerado al chisme como un pecado.
Por tanto, hay que decir: "Seor, yo soy un chismoso; eso es lo que soy. Soy, pura y
sencillamente, un chismoso."
Cuando empezamos a considerarlo un pecado, Dios puede ayudarnos. 1 Juan 1:9 dice:
2- La segunda cosa que debemos hacer con el pecado del chisme es abandonarlo.
"El que encubre sus pecados no prosperar; mas el que los confiesa y se aparta
alcanzar misericordia."
No solamente debemos llamar pecado al chisme y confesarlo, sino que debemos apartarnos de
l y pedir a Dios misericordia, de modo de no continuar pecando en esa manera.
Debemos decirle: "Seor, por la gracia de Dios, no voy a ser ya ms esa clase de
persona, ni a hacer tal y tal cosa. Ya no voy a ser la clase de persona que hiere a
la gente por las cosas que dice. Por tu gracia, Seor, y con tu ayuda, no voy a
continuar hacindolo."
Cuando omos un chisme acerca de nosotros mismos, nos damos cuenta de que puede ser un
gigante muy difcil de vencer. Nos lastima, y nos puede dejar amargados.
c- Debemos enfrentarlo con honestidad delante de Dios, y no permitir que nos derrote o que
nos amargue la vida, hacindonos perder amigos.
a- Debemos ser capaces de decir: "Bueno, despus de todo, lo que dicen es verdad, y lo mejor
que puedo hacer es tratar de componerme;" o si no, "Lo que dicen no es cierto, y por la gracia
de Dios, seguir adelante, viviendo delante de Dios."
b- Tengo que confesar que soy un pecador o pecadora, y que necesito tu perdn.
c- Yo creo que Jesucristo derram su Sangre preciosa, y muri por mis pecados.
e- Tengo que recibir ahora mismo Jesucristo como mi Seor y Salvador personal.