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DONALD DAVIDSON SYN LOS) Sas ACCIONES | ae (tea somes pois se aac cri eon nes de ‘Spit bynes nhc ne area tl © par {3a apr aig maa 0 presi oer popai ye {faamine Hora) lr dur empl eer mee gr came pb ‘Onto Unter Pee, Onn ‘ti: Er Sa ste uta area en an, tard Cp Univers aso! Atsnms se Masco, Ccato Mar de ls Cove Cit obs nineties Sounn O910 en BE 1988 de ein ue Epa» Ameen tee Mec CurTiCa (Gabo Manasa'S'A) Amps 880018 Baclona sso auaaane Dept ea B20 1098 ng eat (WSS ° NOVAGRAFIE, Puget, 12,019 Bsns ORIGEN DELOS ENSAYOS Y RECONOCIMIENTOS. El ensayo 1, «Acciones, razones y causa, s© pesent6 en un simposio sobre accign en la reuni de la American Philosophical ‘Assocation en 1963 y se publics en el Journal of Philosophy 60, 1963, Se rimprime agut con pemmiso de los edtres. El ensayo 2, «;Cémo es posible la debilidad de a voluntad?», se public primero en Moral Concepts, editado por Joel Feinberg, Oxford Readings in Philosophy, 1970. Se leyeron versiones anterio= res del antieulo en el Annual Oregon Colloquium in Philosophy de 1967, ocasién en la que me ayudaron los comentarios cuidadosos {de Donald G. Brown, yen el Chapel Hill Colloquium in Philosophy, ene que escuche las hibileseficas de Gilbert Harman, Eensayo3, «Dela accidns[«Agency}, se presenSenelcuaro coloquio de filosofia que tuvo lugar en la Universidad de Wester Ontario en noviembre de 1968, y se publicé en Robert Binkley, Richard Bronaugh, Ausonio Marra (Comps), Agent, Action, and Reason, University of TorontoPres, 1971 James Cornmancoments claniculoenelcologuo la vrsin impresa mejor con suconsejo. Serreimprime qu eon la autorizcin de la University of Toronto Press El uarto ensayo, Libertad para actuar, fue publicado primero ‘en Essays on Freedom of Action, compilado por Ted Hoadeich, ‘Routledge and Kezan Paul, 1973 (ereimprimi6 en edicién de bol- silloen 1978). Flensayo, «Tener laintenciénn, se leySen el primer Jerusalem Philosophical Encounter en diciembre de 197, y Stuart Hampshire ‘ manos soene cosas suet ‘me hizo una réplicaanimada. Mi ariculoy su éplica se publicaron en Yirmiaku Yove comp.) Philosophy of Historyand Acion,edita- {do por. Reidely The Magnes Press, The Hebrew University, 1978 ‘Una versa anterior se present6 en el Chapel Hill Colloquium in Philosophy enoculbre de1974,en donde ecibiSunexamen Figures por parte de Paul Grice. “La forma logica de las oraciones de accinw el ensayo 6, se presents en un congreso sobre la pia de ln decsign y de a acign fen la Universidad de Pitsburgh en marzo de 1966, EJ. Lemmon, HIN, Castaeda y RLM. Chisholm hicieron comentarios, y mi at {cuo, sus comentarios y ms respuestas se publicaronen Nicholas [Rescher (comp. The Logie of Decision and Action, University of| Pittsburgh Press, 1967. Los origenes del material adcionl al final el ensayo 6 se especifian en és El ensayo 7, «Relaciones causalese, se presenté en un simpo- so dl mismo nombre en ls reunign de ia American Philosophical ‘Association Easter Division en diciembre de 1967; Zeno Vendler hizo la replica. Nuestros dos atcuos se publicaron en el Journal of Philosophy 64,1967, y mi ensayo se reimprime con la sutorizacion elo eitores, Bl siguiente ensayo, el nimero 8, «La indviduacn de los su- eso», se publieéen Nicholas Rescher (comp), Essays in Honor (2f Cari Hempel, D. Reidel, 1969, p. 216-234, copyright ©1969 por D. Reidel Publishing Company, Dordrecht, Holanda. Se rei prime con Ia autorizacin de D. Reidel Publishing Company. David Kaplan comenté una versin anterior qué le en un eologuio en la Universidad de California en Irvine en abil de 1967, Parte de su ‘buen jicio se ha incorporado a la versa impress. LLovensayos9y 10, «Los sucesoe como particulares»y «Sucesos cetemos vs. suoesos effmeros, fueron escrito con motivo de un ‘imposio sobre sucess en la eunidn de mayo de 1970 dela West- tem Division de Ia American Philosophical Association. Roderick ‘Chisholm ley6a primera ponencia, «Sucess y proposiciones>. Este anieulo y el ensayo 9 se publicaton por primera vez en Noi 4, 1970, de Wayne State University Detroit, Michigan. Poco después, (Chisholm me respondisen «States of Ars Agnins, Node 8, 1971, nian be or HAO RECONDCRARNTOS 5 9 yole respond’ nuevamente con el ensayo 10en el mismo volumen fe Nous, EE ensayo 11, «Sucesos menaless fue una de una serie de conferencias que impatieron varios fldsofos en la Universidad de “Massachusetsen 1968-1969, Estas conferencias se publicaron en Lawrence FostryJ.W. Swanson (comps). Experience and Theory The Univesity of Massachusetts Press y Duckworth, 1970, y 20 reimprimen con autorizaién de los editors. El ensayo 12, «La psicologla como filosofiay, se present6 en tun simposio sobre I flosofia de la psicologiaen la Universidad de Kent en 1971, El artcuo se public, con comentarios y respuestas, en SC. Brown (comp), Philosophy of Psychology, The Macmillan Press and Barnes, Nobic, In, 1974, ysereimprime con autorizacién ‘de Macmillan, Londres y Basingstoke, y de Barnes & Noble Books, ‘Nueva York. El ensayo 13, «La mente material, fue escrito en un café de ‘Viena y presente ea la Secein 9, Metodoogiay Filosofia de las Ciencias Psicolgica, en el Cuarto Congreso Intemacional de Lé- ica, Metodologtay Filosofia de la Ciencia, en Bucaest, 1971. Las ‘Actas del Congreso, compiladas por P. Suppes, L. Henkin, GC. “Moisily A Joja,sepubicaronen a North-Holland Publishing Com- pany en 1973, y mi arcu se reimprime con autorizacin de los editores. Elensayo 14, «ffempel yl explicscin del accin» se ley6en ‘unhomenajeen honor de profesor CarlG, Hempel en a Universidad 4e Princeton en noviembre de 1975, y se publics en Erkennmis 10, 1976, pp. 239-283, copyright ©1976 por D. Reidel Publishing (Company, Dordrect, Holanda, Sereimprime con la autrizacién de . Reidel Polishing Company. ‘La eoria cognosciiva de orgllo de Hume>, el ensayo 15,56 present en un simposio durante las reunions de la Easter Di- vision de la American Philosophical Associaton en diciembre de 1996, y se publicé en el Journal of Philesophy 73, 1976. Se se- Imprie con autorizacign de los editoes. Annette Bair y Kelth DDonnellan hicieron comentarios @ mi ponencia en el simposio, y ‘ esos some Accmnts vceot ‘Annette Baier amplié después sus comentarios y los comvini6 en tl aniculo «Hume's Analysis of Pride», Journal of Philosophy 75, 1978 Losensayos 1, 3,6,7,8, 11 y 12 sean publicado anterormente en varios lugares idiomas, INTRODUCCION ‘Todos los ensayos de est libro se han publicado en otros lados, cada uno ha sie disefado de manera que pueda lerse con cirta Autonoma. Sin embargo, aun cuando se han redactado alo largo de ‘una docena de alos, existe una unidadenel ema ena ess general Ettema ex el papel de los concepts causles en la descrip y la expliacion del acién humana, La esis es que a nocionordinasia ‘decausaquese introduce en lasexplicacions,anocentficas como el sentido comin, de asuntos no psicolégicos, es esencal también paraentender qué cs actuat por una raz6n, tener una cet iatencica Al actuar, ser un agente, actuar en contra del propio mejor juicio © actuarIifrement. La causa es el eemento del universo; el coacepio e causa es To que mantiene unida nuestra imagen del universo, ‘una imagen que de ora manera se desinegrria en un diptico de lo ‘mental yf fsio. Deal dela res grandes subdivsiones que he impuesto Tos «nsayos, el orden de publicacién proporcion un esquema de organi- 2zacién bastante natural. Una cosa levé ala ota, elas soluciones de tm artculo sugieron los problemas del siguiente. Sin embargo, co- ‘mo sed claro aun para el lector mis benévolo, no todo results fi algunos problemas posterior frcuentemente inspraron revisio- ‘es drsticas de dostrinas anteriores, a unidad de la esis general Se presenta, en esas péginas, con una considerable inconsisencia diaernica. 'No se ha hecho ningtin intento de ocular las discrepancias en ‘ae propuestas anteriores y posteriores. Se han eliminado algunos cerores accidentals yfealdadesesilsias y e han reducdo las re- lundancia. Hay todavia bastante redundancia, pro las propuestas en las que mis insisto son generalmenteaquelias que me eausaron mayors problemas, asf que espero que se encuenten ensefianzas interés en aquello que pudiers parece, y que probablementepre- tena ser, mera repetcién, Ot raza por la que he dejado i Drimeros pensamientos sin un cambio sustancial es que ene curso Setos alos han provocado comentarios y cca, y sera de mala fe teatar de mover el blanco fuera de alcance cuando yas ha dsparado ltr. ‘Estas som algunas de las coexiones entre los ensayos: Ensayo 1. «Acciones, razones y causas» fue una reacciGn cn conira de ls doczina ampliamente aceptada de que la explicacign ‘de una aciénintencional en términos de sus motivos 0 razones no podia elacionar alas zones y acciones como causa y efecto. Un Argument central era que las elcionescausales son esencalmente ‘nomolégicas y estin basada en Ia induccién, mientras que nuestro ‘conceimiento de que wn agente actuado por ciertasrazones no de- pend usualmentedelainguccinodel onocimintodeleyes seria. Este agumentohabatenido una expres influyente, aunque breve, ‘enlos Libros azul y marvin de Wittgenstein, qu circularon am mente desde mediados de los aos trinta (aunque se publicron hasta 1958) En el ensayo 1 acepto a tess de que las explicaciones tcleoligicas dea acid diferen de las explicacionesen as cencias naturales en cuanto a que las primeras no incluyen esencialmente leyes, pero sostengo que ambos tpos de explicacién pueden, y mur chas veces deben invocar conexiones causes. ‘Ensayo 2. La explcacin de una accién intencionalentérminos 4d razonesdifiere dela explicacién en as cencis naturales en otro pinto crucial: los contends proposicionales de las acids y de fas ereencas explicatva deben mantener cienarelacia lies con Indeseripeién bajo la cual seexplicalaaccién —una descripeién que 10s proporciona una intencién con la ques realiz6 la seca. Pero {eudl es esta relacin Logica? En el ensayo 2, «{Cémo es posible I debilidad de I voluntad?»,asumo que noes ceptable ninguna ‘espuesta que frustre una expicacin coherentedelconflicto moral, ‘dela debilidad dela voluntody de otras formas de acién itencional, ‘aunque sean iraionals. En este ensayo objeto la tsi, expuesiaen Lensayo 1, de que las expesiones proposiionales dela razones ssrroouccon 9 para una ace est deduetvamente relacionadas con la propos: én que corresponde ala accin tal como la explican esas razoaes. Las accionesintencionales que son contaras al mejor juicio del ctor son un desfio para las tori eausales de la acid. Poraue si lasrazones son causas,esnaturlsuponer que las razones més fuertes son las causar més fucres. Defindo la esis causal en el ensayo 2, ‘rgumentando que una razin que es Ia mis fuerte causalmente no necesita ser Ia azn que el actor considera que proporciona los ‘otivos més fuertes (mejores) para actuar. ‘Ensayo 3. Ese ensayo, sobre la actaci6n [agency], se pregunta scercade cues larelacign entre un agente yun suceso que hace de ‘86 suceso una accién. Se echazan algunas propuestas ys plantean fas para reducir algunos casos a otros: de fas aciones que no son intencionles se afirma que lo son bajo otras descripciones, y Se argumenta que ls acciones que aparenan incr consecuencias| de acciones son idéntieas a la accién causate, Pero la demand fundamental de anlisis de Ia atuacin(y por consiguent, sean ef argumento de a accién) queda sin respuesta. Ensayo 4. Las teoris causales siempre han sido vulnerables @ la exicaen el sentido de que no pueden oftecer una explicaci6n Ge la aceién libre, o del se libres para realizar un acto. Ea este ensayo trato de deshacer algunos de los argumenios que paeefan ‘mostrarque libertad par ctuar no puede sun poder causal. Pero también eritico algunos intents de analizar ese poder y concluyo (que, aun cuando la libertad para actuar es un poder causal no puede Analizarse ni definise, por lo menos no sin aplar ala nocién de {ntencidn. Debido ala titima conexign que existe ene la iderad ara actuary Ia accién intencional, la conclusi de este ensayo Contradice una nota optimistaenel ensayo | que antcipaba, pero no fofrecta, una enunciaién de condiciones suficientes para la scci6n itencional (ibe) ‘Ensayo 5. Cuando esrb el ensayo | crea que, de los res usos principales del concepto de intencig que distingue Anscombe (a {ar con una intencién, actuarintencionalmentey tene la intencin, e actual primero era el mis bisico. Actua intencionalmente, ftp en ei ensayo 1, slo era actuat con alguna itencin, Faltaba tener I intenci6n que yo pensaba que, de algin modo, podria ene ders ficilmente en términos de Tos ouos. Me equivogué. Cuando 10 enor tonne Acces vsuCEOE ude por fin dedicarme allo, medi cuenta de que erael més difel fe los tees; en contra de mi idea original er, al parecer, la nocién bisica de la qu dependen las ours; y lo que logréavanzar con res- ecto a esta nocinsocava en parte un tema importante del ensayo 1'—que «la intencin con Ia que se hizo una acién» nose refire a una enida o estado de alguna clase ‘Ensayo’, «La forma lgica de as oraciones de accién» introduce tun grupo de cinco artfcuos sobre Ia semnica dels oraciones que Coatienen verbos de accién, ode cambio en general, y de tas ora- ‘ones estrechamente relacionadas que contienen frases nominales ‘ue aparentemente se refieen a sucess o accion. Enel ensayo I mereferfde un modo demasiado lgero a acciones, bajo una deseripcién, oa dos descripciones de la misma accié; pero sme preocupaba el hecho de que la mayorta de as oraciones que con- ciemen a acciones no contenian una deseripign u oto recurso que Sirviera para referre aun sucesoo accidn. Algunos flésofos han ‘onsiderado esta incursin en asuntos deforma lgica como ajena & Tateorfa del aceiGn, Esta situ es, sin embargo lesgosa, pues es claro, ceo yo, que muchas teorias de la accign que en un principio parecen aractivas revelan confuiones subyacentes cuando re las ‘Somete a un escrtinio formal euidadoso, Cuando excib el ensayo {no se me habia ocurido todavia que no debemos consderar que una orscign como «Eva comida manzand»contiene una referencia ‘singular aun sueeso su forma I6gica es diferente ala de «La in- {estén de la manzana pr Eva ocurrigs, aunque la segunda implica Wgicarente Ia primers. ‘He anexado al ensayo 6 algunas rplicas a varias sugerenciasy ‘teas que son petinntes ala esis que abi se sotiene. El ensayo 7 apica a la causalidad Ia leccién de ensayo 6. EL ‘ensayo 1 dependia en gran medida del hecho de que los sucesos pueden describirse en formas lgicamenteindependientes, de modo tal que las zones y las acciones, dscrits tal como deben serlo para resaltar la intenci con la que reali a accién, no pueden ‘escribire como haria falta para que apuntaran leyes causales| seria. No obstante, ls raznes y las acciones pueden Ser causa yf efecto. Sin embargo, en el ensayo 1 no tenia todavia una idea Stara de lo que queria decir con la descripcién de un suceso y, por srmooucc un consiguiene, tampoco tena idea de cud pudiese se la forma Iigica dela oracionescausalessingulazes. Ensayo 8. La doctrina del ensayo 6 postulaba que ciertas des- cripeiones de acciones 0 sucesos, si es qu refieren a algo, han de referral misma cos. En ese caso, la mayoria de los modiicedo- res advebiales no pueden cambiar la referencia del expresion que modifian,y (como es de esperar —aunque algunas torasactuales lo objeten) el sustiuir trminos singulares coreferencales en la deseripeién de wna accién 0 suceso no puede cambiar (excepto fen ciertoscontextos) la aecién 0 suceso al que se refer, ero estos casos no tocan otros problemas mis iteresantes con respecto ala indviduseién de los Sucesos, aquellos en los que Ia [sgca n basta para decidir el asunto, El ensayo 8 se ocupa en gran sedida de otros ertrios de indviduacin. En particular, itrodujo por primera vez en letra impresa (hasta donde yo lo sé) un enigma ‘ue, desde entonces, ha sido muy discutido: si A mata a B exve- ‘nenindolo, parece difel negar que tiene que haber un asesinato| {ue es idéntco un envenenamiento. Pro un aesinato implica una ‘uert, y la muerte puede ocurrir mucho tiempo después del acto ‘que a caus6, {Cémo puede entonces el eavenenamiento ser idético al asesinto? Elensayo8 propuso una respuesta que ha sido amplia- ‘mente crtcada y defendida. La respuesta todavia me parece mejor {ue las alterativasradicales, aunque ahora pienso que se podria ‘ejorar en certos as ‘Los ensayos 9 y 10 defienden y elaboran la ontologta de sucesos {que se propone en el ensayo 6 Ambosensayos fueron exeios en espuesia a aiculos de Roderick Chisholm. ‘Los siguientes cuatro artcuos exploranel papel de Is leyes en lnexplicacién de las acionesy de os fendmenospsicagicos. Elensayo 1 argumenta que aun cuando los fenémenos psicols- cosy fsios se conectan causalmentey ext implica lgicamente ‘que existe eyes etritas que gobiernan alos sucesos que las jem: Plifican, hay, sin embargo, leyesestitas que cubran alos sucesos ‘estadosdeseitos en términospsicoldgicos. Alexplicarcdmo pue- 4d ocuriresto surge una versiGn de la teria dela dentidad que yo llamo monisma anmao, Enel ensayo 12 hay un mayor desarolo de los argumentos en contra de a posibilidad de eyes picofsicasesicta ye pone énfa- 2 says sme Acco y sceso8 sisen a importanca fundamental que tiene un concepto normativo de rationalida en la atrbucién de crecncias,intenciones,deseos y (ras acitudes de esta clas. 'El ensayo 13 planea la cuestin acerca de eudnto podemos es- pera aprender sobre a pscologi del pensamiento y dela accion de fos avancesen Ia neuropsicologi,y ega aconclusiones que cen fovimamente relacionadas con las de 1s ensayos 11 y 12. "Elensayo 14, al igual qu el ensayo 8, lo esrb para celebrar las vitudes, tanto itelectualee como de oo tipo, de Carl Hempel. En ste ensayo, «Hempel y Is explicacign dela acién>, se To reeonoce ‘moun antiguo partidario de la teorfacaucal de la cin, pro se Aisiente especto al papel que le atibuye las leyesempiricas en la expliaci de acciones El ensayo 15, sole la teora del orgullo de Hume, defiende un andlsis humeano de ciertaspasioes y emociones y, en paula, Gefiende la tess de Hume de que lacreenia de que uno tiene una «asa bella (por ejemplo) es una condici causal de estar orgulloso de que uno tiene una casa bella. Al igual que ea el ensayo | y en los subsiguientes, lego que podiia ser una verdad necesaria el que ‘un sucesoo estado, desenito de cierta manera tenga cert causa, El ‘ue esto sea consistent o no con el anlisis que Hume hace dela ausalidades otra cuestién J, en mi opinia,es una cuestionsbiera En cualquier caso, sies comecta la tesis que deiendo aqut acer ca dela naturaleza de orgllo =proposicional> y de otras emocio- nes similares, esto muestra cr el erpull, igual que ls acciones ‘ara las cuales podria ofrecer una razén, forma parte de las cade- ‘nas causes que ayudan a explicar, en eierta medida ajusifiar, patrones humanos de sentimiento, pensamiento y conducia. ‘ebo dar gracias & muchas personas, ene ella yen particular 1 Max Black, Michae! Bratman, Joel Feinberg, Paul Grice, Stat Hampshize, Gilbert Harman, Carl Hempel, Merl ita, Georg reise, Sue Larson, David Lewis, Hamy Lewis, Mary Mothersill, David Nivsoa, David Pears, Richard Ress, Richard Rory, Allison Ryan, David Sachs, 1. Sma, PF Stawson, Patrick Suppes, ving ‘Thalberg. David Wiggins y Kathleen Wilkes. Akee!Bilgraml pre par Ia bibiografia del Libro e hizo mucho para mejorar su estilo ¥ contenido. Con Sue Larson colaboré en la elaboracién del indice Analtico. Sin su ayuda yestimulo no haba podid hacer et iro. rtmoouccon B La National Science Foundation y la Guggenheim Foundation spoyaron la elaboracin de algunos de los ensayos. Dos de ellos fern escritos durante el ato que paséen el Centr for Advanced Study in the Behavioral Sciences de Stanford, y otro durante mi visita al All Souls College en Oxford. ‘Las Confereacias Gavin David Young, que impart{en la Univer- sidad de Adelaida en 1968, se basaron en gran medida en boradores de ensayos que se publican aqu. Mi agradecimiento alas personas {be hicieron comentarios a ess eonferencias y, en especial a Jack, Smart, cuyas tess acerca de la relacign entre lo mental y To fsico, stunqueencertoeaspectos diametralmenteopuestas alas miss, cons” iuyeron un gran estimulo para mi propio pensamiento. También le agradezco que me seialraunertorastrondmico (no de tamafo sino 4e tema. ‘La mayor de las ideas en este libro Ins elaboréy las probe en Aiscusones con aquellos a los que yo, en algin momento, estaba supuestamente ensefando, Daniel Benoett me animé mucho a em- pezar con este tema, Su tess, en teora eserita bajo mi direci6a, Ie abrié los ojos hacia lo que estaba sucediendo 8 mediados de los cineventa en Oxford, y me influy6 nuevamente cuando, siendo ambos colegas en la Universidad de Stanford, dims al alia ua ‘Seminario sobre la eorfa dela acca, ohn Wallace y yo hablamos interminablemente acerca de pro- blemas de filosofia de lengua, primero cuando éleraestudiant en Stanford, luego durante un aio en Atenas, Cf y Grindelwald, ‘mds are, cuando fuimos colepas en las universidades de Princeton 1 Rockefeller Lasideas clave de los ensayor6y 7 sugieron de estas ‘En 1968 Nancy Hirschberg me iavité a dar una charia en el Departamento de Psicologia de a Universidad de lini en Cham- alan el ensayo 11 fue uno de los resultados. En la composicién de {os tltimos cinco ensayos me guiaron su conocimiento dela psico- Togfay sus consejos jstos. Su eatusismo,alegray cari hicieron Aivertido el trabajo y maravllosa la diversi, INTENCION Y ACCION: 1, ACCIONES, RAZONES ¥ CAUSAS Qué relacidn ay entre razén y acciGn cuando una razéiexplica tuna accin ofreiendo la razén del agente para hace lo que hizo? Podemos lamar racionalizacionesa tales explicacions y decir que la raza racionaliza la seca, “Eneste ensayo quiero defender la posicin antigua —y de sen- tido comin— segdn In cual Ia racionalizacin es una especie de explicacién causal. Esta defensa require, sin duda, de alguna r- ‘laboracién, pero no parece necesarioabandonar totalmente dicha posicién, tal Como To pretenden muchos autores recientes! ‘Unarazén racionliza una acci6a sos nos lleva aver algo que cl agent vio, 0 pens ver, en su acs; agin rasgo, consecvenci ‘© aspect de a acién que el agente quis, dese6, apresi, que le pareci arativo,benéfico,obigatorio, agradabe, o que coasiderd ‘omosu deber No podemosexplicarpor qué alguienhizeloquehizo ‘iclendo simplemente qu esa accion particular le parecisatractiva: tenemos que Sefialr qué fue lo que le preci tractive de a accin. Por lo tam, siempre que alguien hace algo por una razén, puede Algusos ej: iene The Concept of Mind EM. Aciconbe, ‘neni; oa Hap, Twp ont Aton HUA Hay AM. Howe (Contin te Lave Willa De. La ond Eplnion n tory yx ls Tlie elas ead ex RE Hold, Sade in Pls ea Pycotony, ‘inreodi I ba de Aton) Ken. Acton, Boon and Wil ad A Mele, Pre Acton as neo ene presse een gins ess ‘caracterzsrsele: (a) como si tviera algn tipo de actiud favor ble hacia aciones de una clase determinada, y(b) como si ereyera (e supiera, pereibier, notara, ecordara) que su acién es de esa clase. Deben ineuirseen (a) acttudes tales como deseos, impulss, instnts yuna gran variedad de conviciones morales principioss- \étcos, prejuicios econdmicos, convencionalismos sociales, metas 4 valotes pblcos y privados, en la medida en que ésios puedan imerpretase como actitudes del agente drigidas a cera clase de La palabra sactitud» vale aut para todo, porque debe abarcar no so lo rasgos permanentes de carter que se muestan ea la conducts de alguien a lo largo de toda su vida, como el anor 4 los nifos © Ia aficion a companerosescandaloss, sino tambien el capricho misefimero queimpulsaa una cia Unica, comoel deseo ‘bit de tocar ef hombro de una mujer. En general, las actnudes favorables no deben confunirse con ls convesiones, por pasje= ras que sean, de que toda acca de cients clase debertarealizarse, de que vale la pena realizarla 0 de que, hechas todas las cous. . Lo primero se refire cla ‘amente aun suceso particulary pr eso concluimas que lo segundo tiene por objeto ese mismo suceto. Es obvio, por supuesto, que Ist os oraciones no pueden referirse de a misma manera al suces0 que ‘onsite en mi eneender [a uz, ya que la verdad de eencen In hiz> require dela existencia del saceso,y no ast la verdad de «quise tencende Is luz Sia referencia fuer a misma en ambos casos, a segunda oracinimplicarislgicamente la primera: pero de hecho las os oraciones son Idgicamenteindependientes. Lo que es menos ‘obvi, por lo menos mientras no le prestemos atencién, es que el ‘uceso que al ccurirhace verdaderacencendt lah» no puede ser amado objeto, por intencional que se, de «quse encende a luz. ‘Siencends la uz, ave que hacerlo en un momento preciso y de wna ‘manera determinada; todos los detalles estén fijados, Peto no tiene ‘senido exigi que mi deseo ediijaa una accin realizada en cierto ‘momento y hecha de alguna manera inica. Cualquier acca de un ‘conjuntoindefinidamente grande satistaria el deseo y podria consi- ‘erarse igualmenteclgible como su objeto. A menudo el querer y celdesearsedsigenaobjetosisicos. Sin embargo, quiero es elo} ‘de oro que est en a vitrina> noes una azén primar y sso porque sugiee una razén primaria explica por qué entrée la ends: por ‘ejemplo sugiere que queria comprare reo de oven potriae verde gue sehen becho na aie porcini ya oo bes ealzado i sca. Compre a aa de ery on lng sia gu ator de Waverly xb Ware ae faigoseminico dea eeptne de sso espe eh Herenayorsy 6 SKN AAZONES CASAS a En vista de que «quiseencender la luz» y «éncendf la luz» son l6gicamente independientes la primera puede usase para dar una rain dela verdad de a segunda. Esta razén ofece una informaciéa ‘minima: implica que la acin fue intencional —y querer tende a exclur algunas de las otras atitudes favorabls, ales como el ser- {ido del debero de la obligacién. Pero la exclusin depend mucho ela accion y del cotesto dels expicacién, Querer nos parece un ‘éemino pélido comparado con ansiar, sin embargo, sonara extaio negar que un hombre que ansiara una mujer o una tza de eafé no las quisiera En realidad, no deja de ser natural ratar el querer como tun género que inluye todas las actitudesfavorabes como especies suyas. Cuando se considera asy cuando sabemos que alguna acein esintenciona es iil espondet ala pregunta «por qué lo icste?» ‘oatestando «puss por ninguna razén, queiendo decir no que no hayaningunaraz6n, sino qe n hay ninguna razén ulterior ninguna azén que no pueda inferitse del hecho de quel aceién se hizo in- tencionalmente; en otras palabras, ninguna razén apart del querer hacera. ste imo punto no es esencal ala presente discusicn, pero no carece de interés pues deiendelaposbilidad de defnir una ‘sc(p. 168). Convengo en ‘que el concepto de deseo es demasiado estrecho, pero he sostenido ‘Que, por lo menos en un gran nimero de casos tpicos, tiene que: Suponerse la presencia de alguna acttud favorable ila formulacisn de las razones que tuvo un agente para actuar ha de ser itligible. Hampshire no ve eémo pueda considerarse como verdadero 0 falso el esquema de Aristteles, «pues no queda claro cull podria ser Ja base de Ia evaluacin gut tipo de prueba podda ser decisiva 167). Sin embargo, yo insistiria en que flla de unaalterativa satisfactora,el mejor argument en favor de un esquema como! de Aristteles esque slo éste promete dar cuenta dela «conexit mis- teria» ene as razones las aciones. wv Para converte primer ey» en un sporgue> en a oracin: sha ejerecio y queria adelgazar y pepsaba que con e eericio lo lograria, como el paso fundamental tenemos que complementar la condiciéaC 1 dela siguiente manera (C2 Una razén primara de una accin es su causa Ahora las consideraciones en favor de C2 son bvias, sin espero: en To que resta de este ensayo deseo defender C2 de varios ataques 4e diveso tipo y aclarar a lo largo de este proceso a nociéa de explicacion causal que estén juego, ‘A. He aqut el primer tipo de atague: las razones primaias con- sisten en atts y ereencias que son estados 0 dispsicions, no ‘Sueesos; por tant, o puedea ser casas. Es fei replcar que a los estados, alas disposciones ya las condiciones se los denomina fecuentementecausas de los sicesos. ‘Asi se dice que el puente se desplomé por un dfecto estructural; 5. Dig scomo eps fansanetl pre dena cir speed ge € PCD on enpntamete fee pr dein aes ees ‘Stoner sspes qu expan, Fars an eee st vest Tien yeensye 2% vos snne Aces ¥ 2308 aoeclavisnse neil depen orgie latenpertua delat SE ee spetepepe carey jose Sienbure,caréfcaonret ua cbidneeechinets ‘icons El enon ua concn cus parson sues ms Fenton wea vloe oe pee ce tesla ot {Soiree fo oes nce pee rn En muchos cat o0 eileen sbylao encores carne oan tata pr onto se fostions so on ser prs foun darn own ed Disease anc a imran pce ape tne moment enorme ia edo cpa sure cee nckn ao tl mone erty hs eae pose tmerendl meno cn uemmaos peebimes,tpeadenorote Sunsips Qussehnsoarsasanesoha seer eas ‘dies pun life conecaun dacs fecaonen ‘Shan pst por aot qos cbvi por tania ere An mew mel eben convo ona (ns ten Sater ont) cope cose prtomouen pueda an ee ernie, nn pss, spac un mateo age is conser o'n ade awh A ea len sre (Ltconcate ura elas pa scarp pel ena as {fe'qch efcar cau la sene fue Wenitinen Si Sse one we pear comdas ots en cane” Th {rus sta ineacren sao ighnsetinate6 Speen prea. 9) Pr coomnemaie ay un coe tmz engin mpl conocer na pss sta) a Eibuleqs cue donde eda phary 6 Ceelmonensen {ez asta Dart hid dnc ono cont Tattoo dure tla eee cpl, come eter doles hy propane abo Ormeos hips Gan eels yen format da copes 1 hy tn tino cone ae oman see co Taodoy sobre scutes medi, de cero on ca ‘eplaney shot sts wees Omg pera IStonccaca een un concor dqusto epee Gopi lanicsma capaci oladasonteniennesea ‘Scltcupot uc nononcnene qu merce ea scciones mazes YenAS » bre 0 no, mds vale que sea la raz6n por la que el conductor levanta 1 brazo. En este caso, y por lo general, puede no haber nada a lo {ue podamos llamar un motivo, peo si mencionamos un propésito tn general como el de querer llegar a salvo a su destino, es claro ‘que el motivo noes un suceso, La intencign con la que elconductor alza el brazotampoco es un suceso, porque no es en absolute cosa slguna i un sueeso, ni una actitud luna disposci, ni un objeto. Finalmente, Meldenie pide altesrico causal que encuenteunsuceso «que sea peculiar y comin a toes los casos en los que un hombre alzainteneionaimentelbrazoyesto—tenemosqueadmitislo— no puede hacerse, Pero entonces tapoco puede presentarse una causa “nica y comin os derrumbamientos de puentes, los accidentes de svionesy las ruptures de patos. El conductor que hace la sefial si puede cotestar Ia pregunta: «por qué levantat el brazo cuando lo heise?», por su respuesta ‘os enteramos del suceso que caus6laacién, Pero ;puede un agente responder siempre esa pregunta? A veces Ia espuesaaludira 8 un suceso mental que no propociona una razin, como el decir «f- ralmente me deci. Sin embargo, también parece haber casos de secione itencionalesen los que no podemos explicar en absolto or qu actuamo como lo hicimos, En tales casos laexplicacion en térmainos de razonesprimaras es paraela ala expicacién del des- plome del puente por un defeeto estructural: ignoramos el suceso © Ia seevenca de sucesos que condjeron al (causron el) desplome, pero estamos seguros de que hubo tal sucesoosecuencia de cesos 2B. Sein Melden, una causatene que ser «ldgicamente distin de su supuest efecto» (p. 52): pero una azn de una acc no es Igicamente distin de la acca; por lo tanto, las razones no son casas de las aeciones "Ya ee ha sugerdo antes una de las formas que podria tener es te argumento.Puesto que una razén hace intligible una acca al redesribirla, no tenemos aqui dos sucesos, sino uno en diferentes (6 Puedeeconaneelapumet cn anasctsericnce Kenny. Hanpsie yNeidensicomoen Peet Wah, Thelden Sova Scene yea. ee The Concp of Monaton Pox mayen, amen de sins gue ce Rylecn The Concept ef Mind pil gameta en uta oman 30 sos snus ACS ¥ CEOS descripciones. Sin embargo, las telaciones causes exigen sucesos distintos. ‘Se puede caren el ero de pensar que mi presionar el interrup- tor fue la causa de que yo encendierala luz (de hecho, fe la causa de que la uz se encendiera). Pero no se sigue de ello que sea un ‘or considerar que ri azn paa presinar el interrupor fue que ‘queria encende a uz» implique igicamente, en parte, «presioné el Interuptor y esta sccién puede descibirse tambien como algo cal- Sado por el Querer encender la ua». Deserbirun suceso en érminos de su causa noes confundir el siceso con su causa, ni tampoco la explicaeionentéminos de una redescripeia excuye nexplicacién causa El ejemplo sive también para refuta a afirmacin de que no ‘poclmos describir ia accin sn usar palabras que la conecten con sa Supaesta causa. Aqua aceldn ha de explicarse bajo la deseripcin: mi presionar el Interrptor»,y la supuesta causa es «mi querer ncender Ia Tuzs. ;Quérelacién Iogica pertinete se supone que existe entre estas dos expresiones? Parece mis plausible defender lunvinculolégico entre emiencenderlaluz y «mi querer encendet Ia Tus, pero aunen este cat el vincuoresulaser, tas una inspeccién, ss bien pramatical que logic, De cualquier manera, hay algo muy extrao en Ia idea de que las ‘elacionescausales son empiicas y no lgicas. {Qué puede querer decir esto? Seguramente no significa que todo enunciado causal vere sea rpc, Pau ping a can Bet 9 entonces la causa de B= A; por lo tanto, al sustitic resulta ‘Ticausade Baus Bolo calcsnaiico Lavetade wren ido causal depende de qué sucesos se describan: su condicign de nal osiifico depende de cdmo se desriban los sucess. No ‘bstane, puede sstenerse que una azn acionalizauna acci6ns6lo ‘uando se confarman apropiadamente las desripeiones,y evindo Jas descripeiones apropiadasno son Idgieamente independiente. Supongamos que decir que un hombre quiso encender Ia luz significara que realizaria cuslquir accion de la que ereyera que To'llevara ese fin, Entonces el enunciado de su razén primatia para presionarelinteruptorimplicaralicamente que presions el Inerruptor, que «actin inmedistamente», com dice Aritételes. En est cato, cleramente habia una conexi lgica entre la razény Ta AccIONES AZORES CADE at cc, el mismo tipo de conexidn que la que ay entre «es soluble ‘enaguay fue puesto en agua» y «se disolvid», Puesto que lnimplice- inva dela deserpcin del causa ala descripcién de efecto, pero no ala invers, nombrar la causa todavia proporcionainformacisa, ‘Y aunque esta cuestién a menudo se pase por alto, ehaberlo puesto enc] agua caus su dsolucién»no implica Iégicamente wes soluble fen agua; por tanto, esto Ghimo tiene una fuerza expliatva adi ‘ional. Sin embargo, la expliacion sefa mucho mds interesante si, en lugar de referimos aa solubildad, con su conexin defnicional ‘obvia con el suceso que debe expicase, pudiramos referimos aa ‘guna propiedad, dgamos a una estructura eristalina particular, cya ‘conexin con la disolucin en el agua se conocierasélo mediate laexperimentacin. Ahora est claro por qué las razones primaias, ‘como los deseos y ankelos, no expican las acciones de la manera relativamente trivial en qu la soublidadexplia las disluciones La solubiida, silo suponemos, es una propiedad dsposicional pur: se define en teminos den slo experiment, Pero no eS Posible defini os deseos por ls acciones que puedan raionaliza, ‘aun cuando larelacién entree deseo y Ia accién no sea simplemente empire; hay otros crtrios igualmenteesencales pra los deseos: por ejemplo, su expresion en seatimientos yen aeciones que n0 ra ionalizan La persona que tiene un deseo, un anhelo o una ceencia normalmeate no necesita ningn eritero; eneralmente sabe. aun en ftsencia de toda clave accesible alos demds, lo que quite, desea ¥ cree. Estos rggos lopicos dela rzones primarias muestran que fo es sélo una falta de ingenio lo que nos impide defnirlas como ‘isposiciones para actuar por esas razones, . Segin Hume, epodemos defini una eausa como un objeto seguido de oto, y en donde todos los objets similares al primero ‘on sguidos pr objets similares al segundo», Pero Harty Honoré Sostienen que wel enunciado de que una persona hizo algo porgue, por eemplo, alguien Ia amenaz6, no contene ninguna implicacion 6 afimacion implicta de qu s las cireunstancis se repitiran se- {hire la misma acid (p52). Harty Honoré sdmiten que Hume ‘ene razén al decir qu los enunciados causales singulares ordna- ros implican generalizaciones, pero que se equiva pores misma, ‘azén al suponer que los motives y los deseos son eausas ordna- 2 isos somne ACINES SLEESOS ras de las acciones. En sum, ls explicacioneseausales ordnarias ‘sencialmente suponenleyes, pero no as las racionalzaciones. "Es comin tatar de contestar este argumento sugiriendo que sf tenemos leyesrudimentarias que relacionan las razones con las 8c- cones y que ésas en tora pueden mejorarse.Cierto as personas menazadas no siempre responden del misma manera; pro pode ‘mos dstinguir entre amenazasy tambien enre agentes, en trninos de sus creencia yactiudes. "No obstantc, a sugerenci resulta engaosa porque las genera- lizaciones que conectan las razones eon la acciones no son dela clase de lyes conforme a as cuales puedan hacerseconfiadamente predicciones precisa, ni tampoco se pueden afinar y conver en ‘este tipo de leyes. Si reflexionamos sobre la manera en que las, ‘azones deteminan la elecién la decisi y la conduct, es fei ‘er por qué esto es asi, Lo que surge como Ja razén en el aura ‘expos facto de In expicacién y de a justfeac6a fecuentemente ‘ra para el agente en ef momento de a accidn, una consideracién fete muchas, una raz Toda tora seria que sitva para predecit fcciones sobre la tase de razones debe encontrar una manera de valu a fuera relative de varios deses y ereencias en la mata dea decisin; no puede tomar como su punto de patda el afin tient de lo que se espera de un solo deseo, El silogismo prctico ‘gota su funciin al mostar que una aceién eae bajo una razén, por Jo que no se puede afinar pare convetrlo en una reconsruccin {el razonamiento prictico que suponga la ponderaci de razones ‘que compiten ene sf. El slogismo préctico no oftece un modelo fi para una clenciapredictiva dela acc, ni para un explicacin ‘ormativa del razanamiento valorativo. a ignorancia de leyespredictvas apas no inhibe Ia explica- cidn causal vilid; de lo eontrario podefan hacerse pocas expli- ‘aciones causales. Exoy seguro de que el erstal de Ia ventana se ‘ompis porque una piedra lo golpe yo vi cémo sucedi todo; pero ro dspongo(yiquitndispone?} de as leyes sobre cuya base pueda predecir qué golpes romperin qué ventanas. Una generalizacin ‘Somo «los crstales de nt ventana son fg, y las cosas frgiles Tienden a romperse cuando se las golpea con sufcinte fuerza en ‘condiciones normales» noes una ley preicivagrosso modo. la ley predictva sila tuviéramos, seria cuanttatva y usaria Conceptos ACCES AZORES Y CASAS 3 muy distintos. Esta generalizacion, como nuestrs generalizaciones scefea dela conducta, sive para uta funcin diferente: ofreceprve- basen favor de Ia existencia de una ley causal que abarca el caso presente ‘Generalmente estamos mucho més seguros de una ola conexién causal que de cualquier ly causal que ijaen ese easo;jdemuesta esto que Hume estaba equvocado al airmar que lo enunciados ‘ausaessingularesimplicanlgicamenteleyes? No necesariamen- te, porque la tesis de Hume, tal como fue citada anteriormente,e5 ambigua, Puede significar que «A caus6 B» implica Iogieamente alguna ley en particular que contene Ios predicados usados en lat ‘descripciones «A> y «B>, 0 puede significar que «A caus6 B> impli a Togicamente que existe una ley causal ejemplificada por algunas . Peto, entonces, la ‘conclusin que podemos extracren cualquier case de conflict (, ‘or tanto, de incontinenca) ses «xe, prima facie, mejor que YY €s, prima face, mejor que x», Est se reduce a decir, como lo hace lao la estructura que el razonamiento pritico tendrfa conforme ‘este supuesto, «hay ago que decir favor y hay algo que decir fen contra de hacer tl y cual —y también a favor y en contra de no hacetlow, Probablemente eso pueds decirse acerea de cualqulet acca que sea: de cualquier manera es dificil aceparaidea de que Tasuma de nesta sabidurfa moral acerca de qué hacer en una situa- ‘in dada tiene esta form La situacidn que desribo nose alera de ninguna manera interesante si prima facie» u eobligatorio prima 1M, Eels dete queen efecto. cnceden son rinipomara ine: Kurt ae en The Mera Poin of ew ssn ute os decaf ee cps pce Ge orien pei gu ean ge net nenen rece ‘oc Singer fora Reles ad Pacis, osene ut pitcipios mores pte ear en cofict He en The Language of Moral, ayes mo iy escepnes a pncpos mes sepa ifs pitepos dino nen “tom en conflicts none iene conrapnpes, pods sepa cnn Sc picnics dimer owe mere pnp co, mera ry epic Se on perros lor cafe cbyanese patos coms Fncipisimescepeones, cela estos aris fos ean Sho dere cee ue ay sn ipo mor io, sn exepioes s eos soma ACNE SLES Jace e trata como un operadororacional (no funcional veiaivo) mds bien que como un predcado, Ea breve volveré neste problema ‘econsideremos abora I incontinencia. La imagen dela incootinncia que obtenemos de Aristles, Santo Toms y Hareeslade una bata tes. Cada contendiente esl armado con su argumentoo principio. Uno de los lados puede denominarse spasiGn> y el oro azo, ambos luchan ene sf; un lado gana el ado equivocado el lado de- ‘ominadoepasiéne(elujuia»oeplacers). Empero hay otraimagen encompetencia (que puede encontarse en Plat, at comoen Butler yen muchos otros). Quiz la pesagia Dante (quien ere seguir a Santo Tomis ya Aristicles) cuando habla del hombre inconinente como de quien «deja que el deseo sague ala razén de su tron0e Unferno, Canto v). Agu hay tes actores en escena: la razén, el ‘deseo y quien deja que el deseo obteng la ventaj El eer actor {gues te denomine sla Voluntad» (0 «Concieneia») Depende dela ‘Voluntad decidir quién gana la batalla. Sila Voluntad es fuer, Je 4a a palma ala raz6n; sts Abi, puede dark el tiunfo al placer © ‘lapasion, ‘Sugiero que esta segunda imagen es superior ala primera, por sbsurdas que ambas nos puedan parecer Conforme a la primera historia no s6lo no podemos dar cventa de la incontinenea: no es claro emo podemos jamds culpar al agente por lo que hace su ‘cei meramente refi el resultado de una lucha interior. ;Qué rms puede hacer? Y, més imporant, la primera imagen 90 nos permite dare sentido a un conficto én el alma de una persona, Porque no deaespacio parael muy importante proceso de sopesalas Consideracones. Conforme ala segunda imagen, la representante el agente a Voluntad, puede juzgar la fuerza de los argumentos 4d ambos iados, puede e}ecua’ Ia decision y recibir el castigo. El ‘ico problema ex que parece que volvemos a donde e pues jo6mo puede la Voluntadjuzpar que una via de acién es la efor sin embargo, escoge la ot? ‘Seria un err pensar que no hemos progresado nada. Pues lo ‘que ahora debensugerir estas coloridasmetifora de gladiadores y 19. Unaersn is comple conics, ae pce bce apie mismo temas vende Ryleen The Cnc of Mind, pe. 9°98. (O40 Es FosmLELABERLIDAD DLA VOLE 55 jueces esque, en el conlicto moral y, portato, ena incontinencia, ‘st presente un razonamientoprciio que, hasta ahora, hemos pa ‘sudo completamente por ato. Lo que debe afiaise ala imagen es ‘un nuevo argument: (86) My Bt fms) my ms (C5) Bsa accion es equivocada Es claro que resulta necesario algo como este tercer aumento si un agente ha de actar, sea corecta 0 incontnentemente, frente ‘un conficto. No basta saber las razones de cada lado: debe Saher a gu equivalen El hombre incontinent va en contra de si Ilo juico exo, seguramente, es (C3), que se basa en todas las ‘onsideraiones,y no (C), que no logra tomar en cuenta a razones elotro lado Se podria decir que hemos descubierto dos significados ‘muy diferenies de a frase «su mejor Jucion. Esto podria significar ‘cualquier juicoa favor del lado corecto (raz, moraidad, familia, ‘also el juicio busado en toda las consideracionespertinentes ‘ue el actor conoce. He argumentado que la primera nocign no es ‘almente pertinent para el anlisis de la incontinencia, Pero ahora nos enfentamos a nuesto oto problems, a forma 0 la natursleza del eazonamicnto prictico. Pues nada pra ser més ‘bvioqueel que nuestro tercer esilgismo pectico» noes silogismo alguno; Ia conclsién simplemente no se sigue Wieamente de las premisas. de todas maneras,introducr ese tercerFazonamiento 9 ‘esuelve el problema que tenfamos antes: an tenemos sconclusio- ‘es contraictoras. En este punto podtlamos intent introduce, tna vez mis, prima facie» en lugares adecuados: por ejemplo, en (,), (3) (C;) 9 (Ca). Luego podrfamos intentarrelacionar la Aeseablidad prima face con la deseablidad sin mis al hacer que (Gi)y (Ca), at iterpretads,fuesen ls datos para (Ca). Peto ésta no es una linea de pensamiento promisoria.Difcilmente podemos 22. Miao wera deaquéeqilenenes cases Sao Tomi ne larforencinnaot. 56 ears snae coors Ys {Megara saber una acidn debe realizarse simplemente po el becho cualtatva por una medida ‘numérica de grado de apoyo), ‘Me propongo apical modelo al razonamicnto prictico dela ‘manera obvia. Laidea central esque un principio moral como «aen- tires (prima facie ert6neo» no puede ratarsecoherentemente come ‘un condicioal cuantifcado universlmente, sino que ha de ron ‘erse que significa algo como «que un acto sea una ment lo hace, prima facie, enréneo»; en simbolos, «_pf(Ex, Mx)», El concepto de prima facie, ‘aleomo se necesita en ilosfia moral relacionapropo- siciones. Ea la grmdtica gia, «prima facie» noes un operador de ‘raciones singulares y mucho menos de predicados de acci6a, sino e pares de oraiones relacionadas como (si expresaran)juiios y fandamentos morales. He oq eSmo se vera el azonamiento prsc- tico tergiversado por (Mf), (m)y (C), cuando se lo reconstituye: (Me) pfx es mejor que y, xe una abstenci de foricsciény y ‘eum acta de fornicacién) (im) aes una abstencién de fomnicacién y bes un acto de fornica- ifn “ (Ge) pflaes mejor que , (Hs) y (ms) De manera similar, (Ms) y (ma), cuando se reescriben det modo nuevo y se rotulan (My (m), dard 38 ‘muvossoenz ccs ysucso8 (CA pf(b es mejor que a, (M2) y (m)) Un juicioen el que tendremos especial interés: (Co) pflaes mejor que be) donde « son todas las consideracionespertinentes que nos son co- ‘nocidasinclayendo, al menos, (Ma) (ms), (i) y Om). ‘Claro ests qu (Cy) no se sigue Iigteamente de nada de lo que pas6 anes, pero a este respecto el razonamiento moral no parece Ser peor que predecir el iempo. Enninguno de estos casos conoce- ‘mos una férmla general para computa siuna conjuncién apoyo hhsta qué punto lo hace, una conclusin, a parr dest la apoya cada conyunto oa patr de hasta qué punto lo hacen. A este respect, tampoco hay pérdida alguna en nuestra estategia de relavizar los juiclos morales; no tenemos pista alguna acerea deco Hegar a (Cj) a panic de razones, pro su prottipo defectuoso, (Cy), no se ‘enconraba en mejor form, Sin embargo, ha habido una pérdida de pertinencia, pues la condicionlizacién qu impide que (Cs) choque on (C2) y que (Cz) choque con cualquiera de éstos también ais {ea accién alos tes. Al defender Ply P2 he argumentado que la ‘ccién intencional est dzeetamentedirgida a juiciosincondicio- hale como seria mejor hacer «que hace bn. El razonamientoquc Se detene en juicioscondicionales als camo (Cy) es précico silo ‘en su tema, pero no en su resultado.” ‘Sin embargo, el rszonamiento prictico con frecuencia llega a juiciosincondicionales de que una acei es mejor que otra —de ‘tra manera, no habria una cosa tal como actuar conforme a una tazén, Los lementos minimos de tl razonamicnto son Estos: el agente scepta alguna razén (0 conjnto de razones)r y sostiene {que pfla es mejor que ,r) y sta constitye la Tazén por la que {aga que aes mejor que b. Bajo estas condiciones, el agente bark {shes que hace @ 0 b intencionalmente y su razén para hacer a ims bien que b ser idéntica ala razin por la que urge que a c= mejor que b. Esta versin modificada de actar conform ana raz6n no toca nia Pl nia P2y sigue siendo convincente la observacin de Aris- c0u0 S rOSELELADEBLDADOELA VOLS? 9 Asteles de que la conelusisn (de un razonamiento pectic) es una vein Peo abora no hay ninguna dfcultad (pica) enel hecho de I incontinenia, pur l divas vel caraceriza como alguien que sostiene que, hechas todas las consderaciones, seria mejor hacer > que hacer, aun cuando él hace a mas bien que B y con una ‘azén. La dlicultad ldgca se ha desvanecido porque un jucio de {que aes mejor que b,hechas todas las consideraciones, es un jicio ‘elacional © py, asi, no puede eatraren conflict légico con un Jicioincondicionl Posiblemente se aceptaré que P1-P3, tl como aqut se interpre- ‘an, no producen una contadiciéa, Pero al mismo tiempo, puede surgi una doda sobre si P3 es plausible, dada esta interpretacién, ‘ues cotmo e posible que un hombre jizgue que a es mejor que 8, hethas toa as comsideracions, yn juzgbe qu oes mer ‘ued? ‘Répidamente se descata una confusién potencial. «a es mejor ‘que, hechas todas las consideraciones (esto es, acerea de todas Ins verdades, morales y no)» cierament implica formalmente «a ‘es mejor que be, n0 queremos explica la incontinencia come tuna’ Talla Logica. La frase «hechas todas las consieracio- nese debe refers, claro est, sélo a auello que el agente cree ‘© sostene, la suma de sus prncipos, opiniones, attudes y de- feos perinenes. Empero, dejar esto claro parece que slo subraya Ja dificult real. Ahora deseamos pregunta. jc6mo es posible ‘queun hombre juzgue que ae mejor que b sobre Ia base de que r 4 sin embargo, no juzgue que aes mejor que b cuando rs la Suma ‘etodo lo que ie parece petinente? Cuando decimos quer contiene todo lo que al agente le parece peninente, ino queremos deci, tn so, que nose ha omitdo nada que pueds infliren su juicio de ‘quea-es mejor que B? ‘Pues que Io que ee central para la solucién propuesta en este ‘escrito sobre el problema de Ia incontinenca es el contase entre Jlicios (prima facte)evaluatvos cndicionalesyjuicios evaluativos Sin mds, quads podamos dar una carncterizaién dela incontinenci ‘que evte la problematicaexpresion shecha todas las consideraio- nes», Una modificacién plausible de nuestra defniién original de incontinencia, (D), podria etiquetr una acidn, x, como inconti- rnente con slo que, simplemente, el agente tenga una mejor razén © snsaos Some Aceves ¥UCEOS para hacer cualquier otra cosa €l hace x por una razénr, pero tee tuna razén 7” que incuye r y mig, con base en la cual juzgs que ‘yes una alfematva mejor que x2¥ Claro esté que podria también ihaber sido incontinente de Su parte haber hecho y, puesto que po- ria haber tenido una razén ain mejor para realizar alguna tercera ‘accinz Siguiendo esta linea de pensamiento,podriamos deci que tna accin es continent sx Se hace por uma razén r y no hay ‘ninguna razén (que incluye a 7) con ase en la cual el agente Suga alguna acién mejor que x Esto muestra que podemos dale sentido a la ineootinencia ‘pela Ta idea dela Sabiduria total de un agente y, de cualquier ‘manera, a nueva formulacidn pda consierarse una mejora sob (D),yaque permite (creo que de manera correct) que haya aciones incomtinents incluso cuando no se hace ning juico ala luz de ‘ods ls razones. Sin embargo, no podemos exclir el caso en el ‘ge se hace un jici ala luz de todas las razones, asf que puede ensarse que an permanece la diicultad subyacente De hecho, sin embargo, la difcultad no es ral. Todo jucio se hace ala lz de todas las razones en exe sentido: que se ace en presencia de esa fotaidud yest condicionado po ella. Pero eto no ‘Significa que todo juicio sea razonable 0 que el agente pense que lo'sea, con base en esas razones, ni que se lleg6 a juico a partir y ayo hice que me topezarae no dan cuenta de mismo suceso. La segunda oracén implica formalmente la primera, [Porque tropezarme es hacer algo que tene como resultado el que {Yo tropece; peo, claro ests hacer algo que tiene como resultado el ‘que yo wopiece noes iatico alo que causa. Ta extensionalidad dela expresin de acuaciénsugiere que el ‘concepto de actuaciénes més simple o més bisico qu el de inten- ‘dn pero, desafortunadamente, el camino que hemes recortido no _muesracémoexplotarlapista, pus todolo que hasta ahora tenemos ‘esuna forma de dstnguircaros de actuacin apelando alanocién de intenein. Esto es analiza lo oscuro apelandoa lo mis oscuro —n0 ‘esun proceso tan ini eomo a menudo se piensa que es, pero sigue endo decepeionate. Debernos intent ver si podernos encontrar tana marea dela actscin que no we el concept de intencin, ‘La nocin de causa puede proporcionar la clave, Con respecto ‘la causacin hay cierta simetfa aproximada ene intencién y a¢- uacidn, Si digo que Péter incendi la casa para cobrar el seguro, explico su accén, en pare, dando una de sus causa, a saber, su deseo de cobrar el seguro. Si digo que Pétez convimti6 en ceniras la casa por prender fuego a la colcha entonces explico el incendio dando una Eaus, sabe, la acciin de Pétez. En ambos cass, la ‘explicacin causal toma la forma de una descripiin mas completa extensones mayores 0 ‘menores de sicesos. Los sucesos que cubren diferentes extensiones ro pueden se idéntcos Pienso que hay difeultades insuperables que obstaculizan el camino para considerarnuméricamente distin estas diversas ac- one, las acciones primitivas como mover una mano y ls acciones| para cua descripcin nos eferimos alas eonsecuencas. 16, Lave Dade ue sclera urea move aman, cn de cera pora er camda potter nnn hi advan ites sermon tine 17. Hay mayor dace desta amor en remap 6 8 0 xenorvomas Aca CEIOE sein greasing ys on fran mn 0 mano deta manera qo vena veneno en noe del ey ye {uc ella lo mate no pds srla ain de asia de ces. So ues, tenfamos que decir quel reise can a misma Imaal ey. Esto noel mismo que Geir qu ari prod Joo hizo que svcetese qo il malate al rey exe neviones, un cuando sean frais no parcen carats eres, pues ‘no es claro que ellas signifiquen algo mas que el que la reina se ‘hig a matar aly, eto, etonce, la fctones mo poste ser austere el sentido equrdo, Pes supongse gue al mover a ‘mane lneina seca a mma marley, Emons poi {oe pregunta co Hao es ence. La ie ees or edo imagines quel hizo moviend I mano de era mer Peo este movimiento, ors mim ae tastnt par casa a ier de ey —o0 fia objeo ota an por pate de i tie ta Ni hay ninguna van 4 menos gue amplemos Ia nec de una manera ieevanis) de por qu la ena haba quid eau. fare {misma marae. Logue queria hacer ee at al rey—exto cs. hice alg qo cates mice. .NO es abd $Sponsr ae inego en ina movi la mano e manera para Ceusarlamocrte ee, egueds an por realizar o completa agin hecho? Ela ha echo rato soe queda al veneo realizar ct sy. ‘No ser il pesar en mits como un sin que comien za canoe Uva cabo el movimiento dela mano pew ou Coneliye después, ya qe, ana vez mis, coindo inguimos for Jn lain ene estos suceso, fn espucsta dee ser que maar consist en el mavimieno de fa mano en una ds coe Ceencis, Podemos reno ex manera pore el moviento de ln mano caus a muerte. Per, enone, a move a apo, In rena ena haciendo algo qu caso ln mcr de rey. Exe tas son dos desripiones de mismo sceso ia weina manila tmano de esa mane la hizo algo ge eats I mocre dl rey (© para fomalrio, como me agrarian eminos dena dex. ‘Spcin Sefnid: ol mover arena a mano en em cain fe iSemico x su hacer alg que cana mer de ey) Hacer algo ue cause una muerte e etic a causr una mae. Pero no pevancoon ar hay dstncin alguna entre causar la muerte de una persona y ma: ae ‘Se sigue que lo que pensamos que era un suceso més atenuado el matar—no levé mis tempo que el movimiento de la mano, y no difris de [Li idea de que, en las circunstancias supuesas, matar a una persona difere de mover de ciena manera la propia mano surge de tua confusin entre un rasgo de la descripita de un suceso y un asgo del suceso mismo. El eror coniste en pensar que cuando se hace que la descripcién de un suceso ineluya una referencia a ‘una consecuencia, entonces la consecuenela misma est incluida en el suceso descito. El scordeén, que sigue siendo el mismo a teavds del compriie y el estirar, es Ta acién; los eambios estin en aspectos deserts oen dscripciones del suceso. De hecho, hay ‘muchas tonadas que se pueden tocar en el acorde6n. Podiamos omenzar con «LA reina movié la mano» yall la derecha, alladiendo wcausando as{ que se vacara la anpolleta en la oeja de ey»: ahora, un nuevo jlén,ecausando as que el veneno enrara eel cuerpo del rey: finimente (si con esto tenemos bastante pues no hay limites caro para las posibilidades de expansin), ‘causando asf que el rey murieras. La expresion puede scorarse 4e varias manera en Ios components del centro, de Ia izquierda © de la derecha o en cualquier combinacién. Algunos ejemplos: ‘La reina movi6 la mano causando as Ia mverte del rey» (os dos extremos);o: «La rina mat6 al ey» (colapso ala derecha) 0: «La reina yaci6 la ampolleta en a oreja del rey» (el centro). También Jy ora forma de mover el insirumento: podrlamos comenzar con ‘La reina mut al rey», afadiendo eal verter veneno en Su ofdo> Y asi sucesivamente aumento a la izquerda. Muchas de estas expresiones son equivalents; por eemplo: «La rina mats al ey al ‘verter veneno en su oe y La reina veri veneno en la.oeja del ‘ey, causando assu muerte. ¥, obviamente, las descripiones mds largasimplicarn formalmente muchas de las mis carts. 18, Vine ns 10. Elagumento funciona laser de earn se eta window el co ene ue na prtona en ada a he algo ‘ne cmse meen 2 ccs sum acon cts08 Pero esta cantidad de descripeiones relacionadas coresponde a un nico descriptum —Esta es la conclsién en Ia que convergen todas nuestas consideraciones.” Cuando inferimes que pars su auto de hecho de que al presionarun pedal un hombre causa que su automévil pare, no tansferimos la actuacié de un suceso a O40 i inferimos que el hombre fue agente no s6lo de una acca sino de dos. Poems ciertamente, extender la responsabilidad ola impulse bilidad por una acién ala responsabilidad oa Ia imputabiidad por sus consecuencas, pero eso nolo hacemos achacéndoe al agente tua nueva acesn, sino seflalando que su acién original uvo esos resultados, Debemos concluir, quis no sin un sobresalo, que nuestas accionesprmiivas, las que no hacemos al hacer alguna ota cosa, on meros movimientos del cuerpo —éstas son todas las acciones 4uehay. Nunca hacemos ms que mover nuestos eerps: lo dems, slo dejamos ala naturaleza Puede parecer que esta doctrina aun cuando no estan mala como Ja viejay mala doctrina de quel nico que hacemos es querer wil] {que sucedan las cosas o prepararnos para actuar, compart algunas ddesusdesvenajas. ermitaseme indicar,brevemente por qué pienso ‘que esto noes ast Primero, se dirk que algunas acciones requeren que hagamos ‘otras afin de produci aquéllasy, as no pueden ser prmitivas; por «ejemplo, antes de dari al blanco, debo eargar y alzar mi pistol, ‘uego apunta y jaar el gail. Claro est que fo niego que debo prepara el camino para algunas agconesrealizand ors. Lacrfica ‘ale so i muestra que algunas acciones no son prmiiva. En este ejemplo, el desafo es demosrar que darle al blanco es una aceiéa ‘rimitiva.¥cieramente les, conforme a argumento que he dado, ‘ues dare al blanco noes mis que hacer algo que cause que se le 19, aa ola ot ues La forma clarnente EM. Anca, AImenion pp. 3A. Hay abc ek. neni ad, Aen abel Ste In, inst de etnies nice UNAMPuse, Mascaro, 1991. Yosepuseemploen easyo | 20. Aucando moa es orci, cada de ote epson. swevo bia et ne Cmo algo ms ue mover a ung. El necio toning mo sa (Not aud 1979) peLancoxin 6 4¢ al blanco y esto, dads las condiciones adecuadas,incluyendo tun arma ea la mano lo puedo hacer sosteniendo mi arma en cierta posicin y moviendo mi dedo en el gallo ‘Segundo se dice con frecuencia que las acciones primitivas se distinguen por el hecho de que sabemos,quzds sin necesdad de jobservacionodeevidencia que estamos realizindolas, mientras que te no es un rasgo de otros sucesos tales como dark al blanco. Peo claro que podem saber que certo suceso est levandose cabo ‘cuando slo deserite de una manerayno saber ques estevando a abo cuando se lo descibe de otra. lnluse cuando estamoshaciendo algo intencionalmente podemosno saber que lo estamos haciendo; 5 ain més claramente posible que esto sea verdadero acerea de fcciones cuando Gta se describen en términos desu resultados 0 buscado. Finalmente, puede parecer una dficultad que las accionespri= rmitivas no den cabda al concepto de intent, pues las acciones ‘rimitivas son acciones que simplemente hacemos —nada puede ‘bstaculizarls, por at decir Pero, cienamente, dir el erico, hay algunas cosas que debemostratar de hacer (como dale al Banco). Una vez mis, sive el mismo tipo de respuesta Tratar de hacer una cosa puede simplemente ser hacer otra. Yo trato de prender la uz al Dresionar el infeupion. Pero simplemente presiono el interupton ‘0 queds,enalguna ocasién, incluso eso es un ntento. Sinembarzo, cintento onsite en algo que puedo hacer sin atar de hacerlo; tan ‘s6lo mvevo Ia mano, ui El mismo hecho subyace en as dos Gitimas respuests: habetlo ‘ntentadoy saber que acoatceeno son caracerstias de los sucesos, ‘sino de os sucesosen tanto que se los desribe ose los concibe de ‘una otra manera, También es este hecho el que explica por qué podemos estar imitados, en nuestra aceiones,ameros movimicatos ‘Se nuestros cuerpos y, sn embargo, ser capaces, para bien 0 para ‘mal, de consrut presas, contenerinundaciones, malarnos unos a ‘otros 0, de tiempo en tiempo, dare al blanco. Poviemos ahora volver ala preguntaacercade la relacin entre un agente y su acid, La conclusin negativa que habiamos alcanzado cesésta lanocién de causa nada tiene que ver, dzectamente,con esta ‘elocidn. Eleonocimiento de que wna actin a iene certo resultado os permite describ al agente como la causa de ese resultado, pero 8 sssavos soma Aci ¥sicesos ‘61a es, tan s6lo, una manera conveniente de redescribir ay y de lla, como hemos visto, no tiene objeto decir que él es In causa. La ‘ausalidad nos permite redesribir as aeciones de formas en as que ro podemos redescribir otros sucesos; este hecho es una marca de las aciones, pero no produce ning als de a actuaci6n Dec que todas las aciones son aciones primitives tan slo conocer, quizis de manera engaiosa el hecho de que el concepto Ge ser primitvo, como el concepto de ser intencional, es intensio- ral y asi, no puede marear una ease de secions. Si un suceso es ‘una accidn,enfonces bajo alguna(s) desripcin(es) es primitive, Y bajo algunas) descripcidn(es) es intencional- Esto explica por {que facasamos en el intento de suponer que n conceptobésico de ‘ctuacia se aplica a las accionesprimiivas,y de tenderlo a otras ‘ccionesdefnidas en érminos de las consecuencias de las acciones rimitivas: el intent fracas porque no hay otras acciones, slo hay tas descrpciones. El colapso de todas las acciones en ls aciones primitvas, el ‘ual se sefla en la sintanis por el efecto de acordedn, conduce a una gran simplificacign del problema de Ia actacin, pues muestra ‘que ay una relacin entre una persona y un suceso, cuando es su cia, que es independieme de cémo se describan los mines de la relacion. Por otra parte, no hemos descubiero ninginandlisis de ‘esta relacién que no apele al concepto de inenciGn. Averiguar In intencin puede entenderse en trminos de ideas més bisicas © simples es un problema que noe intentado tocar en este escrito, LIBERTAD PARA ACTUAR ‘La tess de que ls acciones libres estén causadas por estados ¥ episodios como deseos, reencas, recuerdos y ls impulsos de ia pasén, recibe ataques de dos frees. Tenemos las andanadas de ‘quienes creen que pueden ver, incluso proba, que la libertad es Inconsstente con el supuesto de que las accionesestin determinadas causalment, al menos si ls causas pueden rasrearse en sucesos fuera del agente. Nome preocuparindirectamente tales argumentos, puesto que no conozco ninguno que no seamds que supericalmente plausible. Hobbes, Locke, Hume, Moore, Slick, Ayer, Stevensony ‘muchos ouos han hecho lo que puede hacese, Toque janis podila habersenecestad, para eliminar ls confusiones que puedan hacer aque parezca que el deteminismo frustr la libertad. ‘El otro slagve es mis interesante, No se dinige en contra del , de segro ene rx, pes la segunda osc fe convent, como Io acabamos de ver, en «A Gap.) i 10 lige ilo clgen, que es ogicanents cquvalenea «AG, 1) allo clgen. Avi arguye en conta de xa equivalency, pe El epuorto cx defectooo. El ame como obviogque se (Gap) silo elige> significa lo mismo que «A puede io clipes, enlonces «(3p y puede ——_»deben signiicat fomism, esto ex paeatement false, Pero el supuesto et eq veeado «Ga. pny «puede.» no sigan lo isn), tin embargo son equivalents las Onones A (Ga) so lige y (estamos Landes fn at sn et et lan apc one sigue sin prs el eb de mi ea lie: Fenton el nga resent dear {2 Enalacan and Caer Keith Leber ella agence ean ‘Moore de cYo har elo y=Yo pd ula ej, Per ep cope fae circu so epee 0 snsaos some Accs ¥UCE08 suponiendo) es un condicion, cuyo antecedent es «El lige. Ast {que «A puede silocliger implica formalmenteclconsscvente, Toque muestra qu a oracién mae larga no puede ser un condicional causal. Sin embargo sera torpe zonar que puesto que «A puede —"siloeliges es lgicamenteequivalenteaA Ga. p) silo ‘lige y el primero noes un condieional causal, entonces el ukimo tampoco lo es. ‘Austin parece haber peasado que la palabra ess tiene en fos condicionals causales un significado diferente que en ottosluga- res, peto la evidencia a favor de esto no es muy convincente. No hay buenas razones para decir que si» tiene sigificados diferen- tes en «Si un nimero es divisible enre cuatro, es divisible entre dose y en «Si comes bastantes sells de manzana, tends enve- nenamiento de arsnico>, aun cuando, presumiblemente, el imo ‘es un condicional causal y no asf el primero. La diferencia no e¢ Semiéntica, sino epistemolgiea;sostenemos que la primers oracién ¢ verdadera pr razones ldgicas 0 aiunéticas; sostendfamos que Ia segunda orci es vrdadera si pensisemos que comer semilas cde manzana causase envenenamiento de asco La cuestin del significado es perinene para la siguiente pro- puesta, Austin dice que es earacterstic de los condicionaes caus Tes que la conteaposicion es una forma vilida de inferenca. Esto es seguramente correctoy podemos ver que Is contrapoicin funcio- ‘na para «A _Ga, p.) siloelge>. Pero, hay algunas oraciones si» para las que no funcione la contraposcion? (Silas hay, debe- ‘emos admitir que «si» es ambiguo}) Pinso que no. No estamos inclinados a razonar de «A puede __ silo elige> a su conra- postiva, pero pienso que la explicasiGn noes que la implicaién formal fale. Una mejor explicacign es ésta: conform al enlisis de Moore, «A puede silo elige» significa «A Ga. .) si lo lige, silo eligs, la que a su vex resulta ser Iogicamente equi- valente su consecvente. La cuestin acerca desi «A puede Silo elige» implica formalmente su contaposiiva es, por ano, fa Sélo a evestén acerca de i «A puede » implica formalimente “Si A no puede ___entonces no elige >. Caro esté que lo implica formalmente, de la manera formal y vacua en la que una contradicein implica formalmente cualquier cosa que sea. ste no Luroaprina crunk ot ‘el tipo de implicacién formal que invite aun razonamiento serio fuera de a Iopica. El argumento de Austin nos ayuda aver, una vez mis, que «A puede silo clige» no es un condicional causal, ero no musta qu un ws causal eséenperspectiva —est es, elepuede>.? ‘En una resefiade los aniculos de Austin Roderick Chisholm eg por unarutaalgodistna,esencialmentelamismaconelusién aque yo e aleanzado de que Austin noha dado ninguna raz con- luyente para echarar el aniisis de Moore de «puede» en trminos {de elo haces To elige>, ni se ha mostrado que ls oracionesresul- {antes no sean condicionales causales, Chisholm cree que Austin ha rmostrado que «El puede silo elige» no es un condicionl y ‘que hay dftcultades acerca de celiges como el verbo apropiado para el antecedent, Yo no pienso que Austin logre demosirar ninguna de estas cosas, pero esto no importa con respect al argumento de Chisholm, pues el arzumento de Chisholm, ses bueno, no slo se aplicaaeeliges sino también a muchos oes verbos que podramos ‘Pone en su lugar, como «intent. La propuesta de Chisholm es que mientras que pode serve o ser libre pare» no debe contener, como su verbo do. 3. Por zones sloge o sons qu lay Szcochs no spur silos queers cote ut as normal «np frmaimesem comragoetina Dejns de eet pue apnes gu mer ee wo pede proc oe ‘Sacre: or tno shly Laas ene pra os quien vedner ‘si shy Daca ne spar Ene pen conde el unecreme e In copes. at ge eh agar eine cntnpotiv, singlet ot ‘sconce pregunta aces Se eters ‘¢ aL Ann's Pilaphia Papers. 2-25. 5. The Refuaion of Deerminion 133 2 seas vous ACoONESYsuCEIOS rinant, un verbo de acc o cualguier verbo que haga que tenga sentido ia pregunta puede alguien hacer eso? ‘Sie estoy equivocado, MR. Ayers a supuesto que porque el antecedente de un condiciona causal que analiza Ia ibertad para ‘ctuarno puede estar dominsdo por un verbo de acisa, ningin andliss causal es posible. Su argumeato parece ser que en todos fos ouos casos de'condicionales causales, el antecedente es algo ‘que podemor hacer verdadero de manera independiente del efecto Supuesto. Pero en el caso de la aciéa, nos dice: que poner & prueba la habilidad propia para hacer algo no es 1o mismo que poner prucba la verdad dé una hipstess, se sigue simplemen- fe del trusmo de que a fin de hacer algo no siempre es neces tio hacer alguna ota cosa anes». El aur coneluye: «Ast queda exclu la posibilded de cualquier anlisis hipotético del poder personal» La conclusion no se sigue de I premiss. Lo que se sigue del truism de que «afin de hacer algo no siempre es necesario hacer ‘otra cosa antes» es s6lo que si un condicional causal ha de ana- Hizar Ia libertad de actu, el antecedente no puede tener como 8 ‘verbo prineipal un verbo de accién. Claro estd que esto no sign fica que el agente mismo no pueda, en general, poner a prusba la verdad del condicional haciendo alguna otra cost —haciendo ver- es conistente con los dos enuncados siguientes: ‘tA no puede sino te dala condicion C» y «C n0 s¢ dam Sin embargo, 3 estas dos cltimas orciones son verdaderas, A no puede En palabras de Lehrer, wes Iopicamente posible que alguna condicin, que es una condicin suficente para causar que LuneAomnRAAcTUAR 93 una persona haga algo, deba ser también una condicion necesaria ara que sea capuz de hacerlo, y que esa condicién no suceda>.® ‘Aun cuando Lelver no parece haberlo notado, su argumento nada tiene que ver en particular con la acién. Sis linea de razo- namiento es correcta, muesira que ninguna atribucin de un poder de una dispsicin jamés es equivalente aun condcional (sea que el condiconal se interprete como ley causal 0 como subjuntivo) ‘As conforme al argumento de Lehrer, decir qu algo es soluble ‘en agua no puede signficar que se disuelve si se siti em el agua, uesto que puede no ser soluble y, in embargo, stuarlo en el agua fo hariadisoverse,” Hay diversas maneras como uno podria in tentar enfrentr esta propuesta. Pero, params propésitay, Bastard fefalarque incluso el aumento de Lehrer mostrase qu ninguna sea eteahe inc el esectet del anya no cocetne oa a (pcre p29, Porto, en coe co waa qu se comers Col Sthaqcdlapeme erie de aun diar "~ stwislordecory Isteencn ropa, seroquel no pubes ebro acer EX ‘te entyoreius estas Souengo que un etd sco en lca oe lites de" Gases) sere go to ues este pr a ‘eon aed accor peer) anlar ade rent loner Ls cen sees de poles eer ear aes yen 8 98 cos tonne Acero ¥ E08 ‘Afadindole sntencionalmente» al definiendum hemos respon ido una dela objeciones de Austin contra un andlsis condcional 4 «poder pues una de sus objeciones a «Lo hur silo elijo» era que tlcontecucate sl implica formalmente «puedo. De manera si lar, st analiegsemos «A puede hacer x» como «Si A tiene actitudes ‘que racionaizan x, entonces A haces», Austin sn dada Se quejaria de que «A hace x» nuevamente implica formalmente «A puede ha- ‘eer, mostrando que hay algo extao acerca del condicional. La ‘ifcltad desaparece cuando el definiendum ex «A puede hacer = intencionalmente>, pues esto nose sigue de «A hace x». Pero, més importante, la raz6aparael cambio muestra que, n primer gar, la ‘objecién no era vida, De hecho, hacer x na implica formalmente ‘ue uno pueda hacer x. La palabra shacer»sugieeintencién en alga lugar, pero en el presente contexto sive slo como un espa tio para lenarlo por eulguir verbo cuyo sujto pueda nombrar 0 ‘escribir una persona. Por el hecho de que hoy al mediodacurnplt exactamente $5 afios, 72 das, 11 horas y $9 minutos de edad no se ‘sigue que yotuve libertad paraeparaestaedad (mis bien que aotra) fen esta fecha o que yo podria hacerlo. Simplemente no estaba en ‘mi poder hacerlo —ningin deseo oereenea de mi parte desempes Algin papel causal en que yo legaraa esta edad en esta fecha, ni pod habedo hecho. Si, por otra parte, attudesracionalizantes ‘ausan una accign mia, entonces no Slo la aceiénsucede sino que, ‘en a desripién racionalizada, es intenional. Eso, claro est, e6 lo que debtamos esperar: lo que un agente hace intencionalmente cs lo que exten libertad de hacer y tiene razones adecuadas para hacerlo. La dscusin dels dhimos pérafos puede ayudarnosaponeren perspectiva otra perpljidad conocida Es natural poner que una Secién que uno estéen libertad derealzares una acign que uno tam- sez excepto encanta capeclen) n0eprinene Hay uenesotenen {ie nee meno, concede qu -pode ve sign dere py spec 0 10. Deed Por bce moms steven, wm cute por one so erences and Ca, 3H UsemomeA ACT 9 bim esti en libertad de no realizar. De manera similar, encontramos ‘que muchos ildsofo sostenen que una acid serealizalibremente Slo si el agente, cuando la realiz6, tena libertad de abstenerse; él Podia haber actuado de otra manera. Pues supongamos qu € no po- ‘Sa hacer otra cos jo significa esto que ao tena elec? Sila teorla causal nos leva a esto, por qué no tiene razén el liberario ‘uando nega que laliberad pueda reconilarsecon{a ori causal? , para tomar el caso meramente potencal, ipo es una pretension veia decir que un hombre es ire para realizar unaacei6n sno tiene también libertad para no realzala? Cietamente, Hberad significa Ineexistencia de alternatives, ‘La difcultad (que recientemente puso de manifiesio Hay Frankfurt)" es que sidecimos que un hombre es libre de hacer lo si su hacer + depende de si vale ono la condi de acid (Gletige hacer x, decide, lo quiere, tiene acitudes racionalizantes) enfonces encontamos contraejemplos en esos de sobredetemina- dn. Lo que un hombre hace'con su propa ibe voluntad —una accién hecha por elecisn y con propésito,causada por sus propios Ia clecetn o los mativor, ‘Dos intuiciones parecen estar en pugna y el ettrioamenazado porla desruccién lo ocupalateora causal Las intuiciones son, por {na pare, laesis de que no podemos tener libertad de hacerlo que, de cualquier manera, estaramos causalmente determinados ahacet y-porlaotra, lasensacién de que siclegimos hacer algo y lohacemos porque lo elepimos,entonces la acidnes libre, sin importr lo que Fabra socio si na hubierema elegido. ‘Resuelve la perplejidad un descubrimiento que hiimos en otto contest. Lo que depende del agente es La ealizcinintencional de tun acto de cierto tipo. Es verdad que, en ocasiones, puede suceder ‘ie To que un hombre hace inencionalmente, podria haber sido ausado a hacerlo, de cualquier manera, por fucras extras. Pero ental caso, lo que habriamos hecho no abria sido intencional. Ast ‘que incluso en los casos de sobredeterminaci, algo recae en el agente, De hecho, no es lo que hace (cuando se describe de una ‘manera que deja abierto si acaso fue intencional) sino si acaso lo 1, Aleit Foils a Mora Response 100 yaar sone acces ¥ceiO8 hace intencionalmente. Su accién, en el sentido ene que la acid ‘depende de I ntencionalidad,sucede ono, como él quer: lo que ‘thace,enel sentido mis ampli, puede suceder, sea que Elo quiera Plenso que esta reflexiones mucsran que es un error suponer que afadimos algo al alisis de Ia iberad cuando decimoe que tt agente es libre de hacer algo si puede hacerlo 0 no, como él ‘uiera (lj, ete). Pues si esto significa que actialibremente So si no hubiera hecho lo que hizo si ubiesen estado ausentes las condiciones deacttud es falso.Y si signiicaque él nohabria actua- do intencionalmente si las condiciones de acttud hubiesen estado ausentes,enfonces esto es verdad, pero es gratuito decilo, puesto ‘que es una verdad lgica Hc estado examinando cl concepto de lo que una persona pucde Inacet, 0 tiene libertad de hacer, cuando se interpreta este concepto como 5 incluyera lo que puede hacer, Sea que lo sepa one, haciendo algo inteneional. Conforme la propuesta actual, un hombre estéen libertad de asesinara un futur drano si est cerca de faturo tirano, tiene una pstola de alguna manera la oporunidad, aun cuando to tenga razén para pensar que el bombre junto a les el futuro Tirano, Pues sé creyese que el hombre junta a él eel futur iran 1 €l deseas, sobre todo, matar al futuro tran etonces,dadas las ‘irunstancias propicias,é lo mataria, Obtenemos una version mis limitada de lo que él puede hacer si decimes que puede matar al futuro trano s6lo si, dado que él quiere matar al futuro trano,ét Johace. Pues entonces, puesto que él nolo hat intencionalmente a ‘menos que sepa o tea que el hombre junto a él eel futuro trano, €1no tene libertad de hacerlo a menos que tenga el conoeimiento. ‘Obviamente este sentido mis restringido de ser capaz de hacer algo es importante cuando se tiene que hacer responsable a un hombre por n actuar Mi propésito al sefilare6mo podemos ajustar las condicio- res en las que un hombre acta para acomodar diversas intexpeta- cones del ibeiad es hacer claa la medida en Ia que el problema e analiza la libertad para actuar se encuentra entramado con el problema de defini Ia aceiéninteneional (y con esto, Ia acein en [Beneral, puesto que las aciones no intencionaes son aecionesin- ‘encionalesen ota dscripciones). La rani es obvig; decir euindo neo mea ACTOR 101 un agente ten libertad de realizar intencionalmente (sto es, con ‘ier intencién) una accidn es enunciar condiciones en as cuales] realizaria la accin; explicrl ealizaién de una acin con cierta intencin es decir que ls condiciones estan stsfchas. Claro est ‘que ese estilo de andlisis y de explicacin funciona slo sila satis- faccién 6 las condiciones (que, estamos suponiend, son causales) sempre conduce a Ia realizacin de a acién.Y, ast, si podemos analiza o bien la ibertad de atua (en nuestro sentido amplio) fctuar con una inteeidn,estaremos en posesion de una ley que ‘iga que siempre que se tatsfacen cirtas condiciones, un agente realizard una aeign con cieraintencin. ‘Puesto que, en la teoria causal, la scién intencional se define en parte por sus causa, quizds no debera sorprendemos que tan Slo con aber el andliss dela acc intencional estarfamos en el dominio de una ley de conducta. Empero,je6mo puede sugirloque parece ser una genealizciOn mpirca a partir de consideraciones tocalmenteanalticas? En un momento volveté a esta cuestia, "Asi que puede afrmarse que estas couas se sostienen j una ley que enuncia condiciones en las cuales los agentes realizan scciones intencionals, un andisis de a iberia de actuar que laha- = un poder causal y un andiss causal de a acciém inencional. Se Sstienen juntas o cun juntas. En mi opinién cen junta fo que {quero son andlisisexplicitos, que ao sean peticiones de principio 0 leyes sn advertencas generosasycldusulas ceteris paribus. ‘Un breve estudio de tes inentos recientes por proporcionar la Jey o el anlisisapropiado me ayudaré a explicar las dificulades. Primero, considérese Ia siguiente ley de accion propeesta por Paul Churchland si Aquiere 6 y cree que hacer xesuna manera de produce {y que no hay mejor manera de producir yA no tiene ning eseo dominanc, sabe e6mo x yes capaz de x, enfonces, A Ihace [He simplificado la formlacién de Churchland,) Es claro quesifuese aceptabe esta propuesta, podrfamos defini set capaz de x como el estado de un agente que, cuando son satsfechas 12, The Lop Chaser Action Explanations 21-22, oz cron some ncoones SUE las otras condiciones, hace x, Pero la «ley» es defectuosa pues en primer log, nocin de deseo dominantes es raicioners, ya que no es elaro cémo mostrar que un deseo es dominant excepto por lhecho de que domine. Sin embargo la dificult mis general es ‘sta: todas as condiciones pueden ser satsfechasy,sinembargo, no ‘conseguir iniear una aceign, Podriasuceder de manera tan simple ‘om és: elagente quiere ¢y cree que hacer xes la mejor formade producir y, sin embargo no legaareunir esas dos cosas; el a- Zonaminto prictico que lo Hevata a conlui que vale la ena hacer “simplemente pure no darse. No hay més rzén para suponer que ‘unapersona que tiene razones pars actuar, actuard sempre conforme 2 ells, que para suponer que una persona que tiene creencias que Jmplicanformalmente cierta conclusién, exraerd esa conclusion, ‘Alvin Goldman ilusta de la siguiente manera el entramado de las es empresas que he estado estudiando, Primero define un tipo de acto bisico como una especie de acto que realiza un agente si ‘inguna fuerza externa se lo imide y quiere realizar un acto de ese tipo. El autor prosigue:!™ sixesuntipode acto isco para Aenty iA esti en condiciones ‘stindares con especto ax en entonces& verdadero el sigue fendicional causal Si A guises hacer xen entonces A hla x fmm. Este enncido condcional causal] impli formalmenie tl enunciado de que et scpare de hace ten. (le aerada eh Simbolimo de tra ‘Puesto que Goldman hace de querer hacer la causa atitudinal dd hacer x, parece que su aniisis evita nuestra difcultad, Pero de hecho no lo hace, como lo vemos cuando distinguimos claramente actos tipo aciones panieulares. Queer hacer x es, para Goldman, lundesco por un tipo de accidn no por unaaceign particular, Esto est bie: ls objetos de querer y del desear son de carscterproposicional 4. as, no pueden ser acciones paniculars, Pero entonces, es un ror decir que querer hacer x (eto es, realizar una aciéa de tipo 2) eausa x, puesto que x, al no se un suceso sin un tipo, no puede ‘ausarse. Lo que puede causaseessdo alga suceso que pertenece 1A Theory of aman Aeon p19 non mana acre 103 al tipo, :Cudl de éstos ha de causarse? Goldman enuncia unt ley ‘que, eformulads, sera come esto: sia una persons no la limitan fuerzas exteras,entonces si quiere hacer algo de ipo x, ella hace algo de tipo x. Se supone que esto se aplic Slo a actos bisicos» pet, de hecho, no creo que se aplique a ninguna clase interest ‘de acciones. El problema es que querer hacer algo de tipo, aun si cel hacer x esté completamente en poder del agente y éste To sabe, pede no causarquc l haga alg de tipo x. ¥ un probiema mayor fs que querer hacer algo de tipo « puede causar que alguien haga slg dep sin ebro, lactis causal pode opera a ‘manera que el acto no sea intencional ‘David Armstrong, nun aculolamado «Acting and Trying: csquienmér se acerea ver lanatraleza dela dificultad. Armstrong formula a pregunta de qué se debe afar a «A intents hacer» a fin de tener condiciones suficientes y necesarias para «A hizo xine tencionalmente».La mayoia de nosotros dita —yo ciertamente lo dita que el intentar mismo no esnecesario en muchos esos, pero festa propuesia aun cuando cenal paral interés de Armstong, en gran medida no es pertinnte para el tema actual, Conforme a Arm strong, el que A haga intencionalmente x implica fommalmente que cl intento de A por hacer x caus que x sucediera, pero el intento eA por hacer x, aun euando cause que x suceda, 99 pricba que A hizo x intencionsimente. La diffcultad es que el intento puede pro- ddcirel efecto deseado de una manera inesperada ono deseada, He ‘qufun ejemplo de Daniel Bennet. Un hombre pucde intent matar ‘alguien dsparindole. Supongamos que e sesino fala su disparo por una milla, pero el tro provoca una estampida de una pars de {erdossalvajes que psotean y matan ala victima seal ¢Que- emos decir que el hombre mats a su vctma intencionalmente? La ‘uestion esque no cualquier conexidn causal entre acttudes racio- nalizantes yun efecto deseado basta para garantizar que producir el efecto deseado fue intencional. La cadena causal debe segit el ipo de ruta correct. ‘Armstrong intents llenar este hueco dciendo que el efecto de. seado debe ser producido por una cadena causal que responda, al 14. Armsong ha replicado «mis coments en ua ee psa de Phase! Papers. naj de 918. 104 esos some Acne YSU ‘menos apoximadamente, al esquma del azonanieno pric. Enel ejemplo de Bennett deberossuponer que el agente tuo la intencin de mata aa victma jlando patio porque razon que jalando el gtil eausra que Ia pistol spar, logue causara ‘que volra fa al, lo que casera que la bala penetra en el everpo ‘ela vitina causando ast su muerte Per la ama dels sucess, telejada por el esquema dl rzonanieno pric, nos pods Porlnacei de largo. Exo pone en dada la coesnserea ‘esi el agente mats intencionalment a su vctima. 'No estoy seguro sobre siesta difculad pueda superase 0 no, pero hay un problema relacionado que Among no considers y {ue ami me pace insperble. Ese ex el problem, ao de una cata cadens causal eterna, sao de eaenas causal interns, to estindrsoocas, Amtrng al iteatr pone remedial pro- Sma ceca de telaciones cases extemas no desea, 30 llevado a habla de Ia rte del razonamseno préctico, In manera como inteactan ls ceenias y los deseos para produc la acin. ‘Yaqt vemos qe el ands de Armstrong como el qu props snus cunts pginas at, debe enfentane a cues de emo leserencias los esos causanscionesinenconles. Las cree clas y los deses que raconalzarfan una aces la causasn de laminer correc por un ua de rzonaeno pric, como podramos itentar decir pucden causal eos mancras Stes 318 aciGn no se reais con la intencin que podriamos haber Alscemido de as scttuds que Ia causaron. Lo que me Sesespero poraclaares a forma come las cites dcben aura las aciones Shan dercionalizara scion, Sivan ejemplo de muesta Un alpina porta queer quitrse ‘peso y peligro de sostener a ot hombre de una curds y podiia Saber que solar a euerda podria quire el peso ye peligro. Eta ‘reece deseo pdriandescoceralo ato Como para caus ve a soley, sin embargo, podia sceder que nines eiplese ‘Ebiltar su presi, ai haceloimencionment, Peas que bo ‘judaréaadir que ia erencia y elqueter debencombinars para ‘usar que él quleraslarla,paes adn quedarin las des preguntas Ge cme increvaia ye deseo cas el tepundo deseo 9 cme querer solar aus quel soltase, Linon en acre vos Algunas pjginas ars intenté analiza «A eibre de hacer x (0 puede hacer x)» en tminos del condicionl «El harfaxintencio- nalment situvies acttudes que racionalizasen su hacer x», Aun i Jems este condiconalsubjunivo como si implicara una rela causal, ahora podemos ver que no es adecuado, Siel agente hat ex intencionalmente,entonces su hacer x lo causan sus actitudes ‘que racionalzan x. Pero, puesto que puede haber cadenas causales visas, no podemos decir que sls actnudes que raconalzaran x ‘ausan que un agente haga , enfonces hace + intencionalmente Es en gran medida porque no podemos ver cémo completa el ‘nunciado de as condiciones causales de la acién intencional que zo podemos decir si, en caso de tenerlo bien, el resultado seria un aso de anilisiso una ley empirca para predect Ia conducta. Si ‘comenzamos con la sugerenea de ques un hombre ine creencias Y deseos que racionalcen una accin de tipo, entoncesintencion ‘nalmenterealiza una acién de tipo 2, es facil ver que mejoramos las cosa i afiadimos al antecedente«y ests creencaty deseo, © llegar a tenerlor,causan que el agente realce una accién de tipo 2» Mejorar esta formulaci,asu vez, de una manera que elimina- ‘se cadenascausales eriness, eliminaa Ia necesidad de depender era el avi, ‘que se dirgia a Londres, Ontario, Pero la susttuién de «abordae ‘Lavién marcado “Londres” » con sabordar el avién que se dirigia ‘Londres, Ontarion hard flso (1) y dejard verdadero (2) Claro ‘std que la descripeién de a intencidn en (2), como la descrip, 4e Tos contenidas dela creenciay de a actitud favorable en (1 ‘ecupa un coatextoopaco. Finalmente, hay esa elacion ere enunciados con ls formas 4e (1) y de @): aun cuando (2) no implica formalmente (1), si(2)es verdadero agin enunciado con la forma de (1) es verdadero (con, ‘quizis, otra descripein dela acciény con una attud favorable y tna creencia apropiadasea los lugares adecuados) Elenunciado (1), a diferencia del (2), debe describ la accién del agente de manera sin que se dais Londres, Onrios.Conerme una ect alle, sl ‘sori sers encore mane’ simiar nl (0) gue gue, a anaes 0 avon snag ACNE sLCEOS ‘que haga claro un sentido en el que ta scei6n era razonable a a luz ‘de as razones del agente. Ast, podemos decir, si un agente hace A ‘con la intencién de hacer B, que ay alguna descripckin de A que ‘evelaque laacein es razonable ala uz de las razones qu el agente ‘cna para realizar {{Cuindo es razonable una accién (descrita de una manera par- cular) ala luz de las creencas y de Tas actitudesfavorables espe cificas? Una manera de abordar el asunto es mediante wa versa bastante abstract del razonsmientoprctico. No podemos suponer (que siempre que un agente acta intencionlmeaterecorre un proce- Sode deliberacino de razonamient,ordenaevidenciay prinipios Y extra conclusiones. Sin embargo si alguien acta con una inten- ia, debe tener acttudes y eeencias dela que, si hubiese estado onsciente de ells y hubiese tendo tiempo, podria haber razonado {que su accidn era deseable (0 tenia algun oto atributo postive). ‘Si podemos caracterizar el razonamiento que seria, habrfamor escrito, en efecto, las relaciones ldgcas entre descripciones de ‘creencas y deseos la descripeidn de una aceidn, cuando la primera dd las razones con las que se reali altima. Enfonces hemos de Jmaginar que las creencia y los deseos del agente le proporcionan las premisas de un argumento, En el caso dela creencia es claro, de inmediato, cules la premisa. Tomemos un ejemplo: alguien le aide salvia al guisado con la intencion de mejorar su sabor. As, Su premisacomespondiente es: atadirle salvia al guisido mejorard su tabor La actitud favorable del agent e, quis, un deseo oun querer; supongamos que quiere mejorar el sabor de gisado, Pero, eu es la premisa correspondiente? Si buseSsemos la proposicion hacia ‘que se dirge su deseo, Ia proposicén que quiere verdader, seria algo como: él hace algo que mejora el sabor del guisado (de manera mis breve: él mejora el sabor del guisado). Sin embargo, ta no ed sr su premisa, pues nada interesante se sigue de as dos pre- ‘miss: aa salviaal guisado mejorardsusabor ye agente mejora cl subor del guisado, EI problemaes que = hadejado fuera a actitud ‘de aprobacidn que iene el agente hacia la segunda proposicign. No puede volverse a intodueir haciendo qu la premisa sea wel agente (guere mejorar cl sabor del guisadon; no quetemos una desripen de su deseo, sino una expresion del mismo de una forma en la que mea awerencn mt 41 podria wsaro para legar a una sec. La expres natural de so deseo es, segin me parece, de forma evaluativa; por ejemplo, «es ‘deseable mejorar el sabor del gusado 0 wdebo mejorar el sabor del fuisados, Podemos suponer que diferentes acitudesfavorabes se ‘expresan con otras palabras evaluaivas en lugar de «deseable». ‘No hay ninguna prueba breve de que las eracionesevalutivas ‘expresen descos y olrs attudesfavorables la manera come Ia traci la nieve es blanca» expresa Ia ereencia de que Ia neve ‘es blanca, Pero la siguiente consideracin nos ayudar, queda Tostrar lo que estén Juego. Si alguien que sabe espaol die, honestaments, «la nieve es blanca», entonces él cree que lanive es blanca, Simi te dejar de fumar.Siene alguna inclinacién hacia ello; de hecho, lo har si nada se interpone sabe cme hacerlo no tine ning valor 0 deseo en contra. Dado este supueso, es razonable generliar Si julcios expliitos de valor representa acttudes favorable, todas lasactitudesfavorables pueden expresarse mediante jicios de valor ‘que sean al menos implcts, Estautimaestipulacién nos permite dar una vers uniformed ctuar con unaintencin, Si alguien realiza una acciGn de tipo A con Inintencién de realizar una ain de tipo B,entonces debe tener una acitud favorable hacia acciones de tipo B (lo que puede expresarse {ela forma: unaaccién de tipo Bes buena (0 tiene agin owe aibuto positivo)) yuna creenciade qual realizar una acca de tipo A estaré (oprobablement estar ralizando una accié de tipo (lacreencs puede expresarse dela manera obvia). La expresin de la ereen- ia y del deseo implican formalmente que as acciones de tipo A son ‘oprobablemente sein buenas ( deseabls, justas, debidas, ete). La ‘escripcion de la aciGn que proporciona la race sustituida por «A> 4d ia desripcin en a cul el deseo y la creeciaracionalizan la aceién. Asi que para devolver las cosas a nuestro ejemplo, el deseo ‘de mejorar el sabor del uisado y la creencla de que afar sal al guisado mejorard su sabor sven para racionalizar una acid escrita como «afar salvia al puisadow (esta versiGn més o menos estandar del razonamiento pritico se medifiaréradicalmente en ‘un moment). m2 savor vonu actos vsucesos Debe haber tales creencis y deseos rcionalzantessiuna acci6n hha de hacerse por una razén pero, claro est, la presencia de ales reencias y deseos, cuando la accidn se hace, no basa para asegurar ‘Ue lo que se hizo se hizo con ia intenciGnapropiada 0 siquera con Imencign alguna. Alguien podria querer un gusado Sabroso, creer (que la salva lo Tograriay ponere salva pensando gue era pre: © ponerle salvia porgue e empujaron la mano. Ast que debemos Stair que el agente puro la salvia por sus razones, Ese esto es lo que nuesira revisién nosh llevado a esperar Pero noes ‘probable quest un hombre tiene Ta intencion de atrapar un ire, su Intencin no sea un estado, disposicino acttud de alga tipo. Sin ‘embargo, eso es asi es absolutamenteinerefble que este estado ‘ actitud (y el suceso o acto relacionado de formar una intenciGn) ‘no vaya a desempenar nnn papel en el actuar on una intecisn. ‘Noes falta de habilidad para dar una versin stisfacora de me- ‘amente tener I infencin, sobre la base de nuestra version de la acca intencional, se refej ast sobre la version misma de accién itencional. ¥ creo que se veri que la versin que he dlineado es incompleta cuando tengamos un andlsisadecuado de meramente tener I intencién, Claro est que realizamos muchas accionesintencionales sin formar una intencién de realzala con frecvencia la acc inten ‘ional noes precedida por una intend, Asi, no sera sorprendente Si algo estuvise presente en meramente tener la intencién que n0 ‘est Siempre presente en la accin intencional. Pero sera sorpren ‘dente si ee elemento exira forse extrato a nuestra comprension de ln ccisn imencional, Pes considérese alguna accién simple, como ‘serbia palabra eaccién. Algunos segmenos temporales de esta cei son también aciones; por ejemplo, primero escribo [a letra ‘a>, Exo lo hago con It itencin de inilar una aeign que n0 se ‘completaré hasta que haya escrito el esto de Ia palabra. Es diel ver e6mo la actiud hacia el acto completo que tengo mientras es: ‘ribo Ia eta wa» dere de la mera intenciOn que haya podido tenet tun momento antes, Ciertamente mi inenciGn se ha comenzado realizar ahora pero por qué eso necesariamente ha de cambiar mi ‘tit? Parece que en cualquier ccin intencional ue tome cho Sempo o compen pasos preartris, debe exar presente algo ‘Comenzamos con meramente tener la intencién —tener la in- ‘coc sin delieracién consciente o una consecuenca externa ‘Porque no habia espacio para dudar de que tent Ia itencin es un ‘stad osucesoseparado de la accién que se pretende ode las a20- us sos soman scones sucess nes que mueven a la scsi, Una ver ques reconoce Ia existencia ‘de meramente tener la intencin, no hay razén para no conceder ‘que est presente la intencin exactamente del mismo tipo cuando Stcede Ia seci6n que e pretendia, Asf que, en lo que sigue, aun ‘cuando parezca que me concenroenel caso muy especial de inten- ones no satisfechas el tema, de hecho, es cualquier caso de tener Ta intencisn, esto es, el tener a inteneiGn abstaido de un contexto ‘que pueda incur cualquier grado de dliberacin y cualquier grado de éxito en Ia ejecucién. Meramente tener a intencién muestra tan ‘slo que abt hay algo por absraer. El éxito que hayamos enido al enfentaros al concept de a in intencional provin de watar el discurso de la intencién con Ia ‘que te hace una acein como dscurs de crencias,deses yacisa. ‘Esto supiere que intentemos trata las mers intenciones —el tener itencionesabstraido de los resultados normales— como aciones, ‘reencias oactitudes favorables dealgintio. Elrestode esteensayo ‘considera estas posbilidades. 2Meramente tener a intencién es una accién? Podriaobjetare aque ene a intenci de hacer algo noes un cambio o un suceso de alg tipo y, ast, no puede ser algo que haga un agente. Pero esta objec se refutaajustando less; diiamos que la acci es formar lua intenién en tanto que meramente tener Ia intencin esl estado ddevun agente que ha formado una intencin(y noha cambiado de ‘pinidn).Asttodoe peso se pone enlaidea de formar un intencién. Se dirt que la mayorfa de la intenciones no se forman, al menos si formar una intenciOn requiere una deliteracin 0 una dcisign consciente.Entonces lo que necesitamos es el concepto ms amplio "yds neural delega tener una intencién —un cambio que puede arse de manera tan lena o inadvertida que el agente no pueda decie ‘eutndo sucedié, De cualquier forma, sun sucesoy podemos decidir lamarlo una acca o, menos, algo que hace el agente 'No veo ninguna razén para rechaza esta propuesa; lo peor que puede decirse de ella es que es muy poco ilustrativa. El estado de Intencin es solo lo que resulta de egaratenerunaintenci6n —pero, {qué tipo de estado es? El legar a tener una intenci podriamos Conectarle con deseosy ereencias, como lo hicimos con otras acco. nes intencionales(nuevamente con una cadena causal que funcione Teen tanec us «de manera comet»), Pero la historia no tiene la calidad sustancal de la versin dela accinintencional, porque la acciénpretendida nos familiar u observable ni squiera ara el mismo agente. ‘Oto enfaque se entra en acts de habla plies. Decir que uno tiene Ia intencin de hacer algo o que uno lo hares, de manera innegable, una acca tiene algunas de as aracersticas de formar tna inteneign, Deir, en les cicunstanciasapropadas, que uno the Inintencion de hacer algo o que uno lo hari, puede comprometerioa tuo ahaceo; si el hecho no se sigue, es aprpiado pedir unaexpli- ‘acién. De hecho, idenificar el decir que uno tiene Ia intencion de hacer algo con formar una inteneiGn seria apoyar una especie de eo. sa realizativa de a intenidn; af como deve que uno promt hacer lg puede ser prometer hacerlo, deci que uno tiene la intencion de hacer algo puede ser pretender (o formar la intencion de) hacerlo CCaroesté que uno puede formar una inencién sin decir nadaen vor alta, pero puede lear este hyeco la nocién de hablarse as mismo, sdetirlo para sus adenros»." Una variant teria seria asemejar (identifica) formar una intenciGn coa drigise un mandato a Uno ienso que es cil ver que formar una intend es muy distin de decir algo, aunque sea 8 uno mismo, y que tener Ia intenci6n de hacer algo es muy distinto de haber dicho alg. Pues, por un lado el caricterealizativo de los mandatos y de las promesas que hacen gue ciertos actos de habla sean sorprendentemente importantes depen- 4e de convenciones muy especifieas y no hay tales convenciones goterando la formacidn de intenciones. El prometer comprende ssumir una obligacién; pero incluso si hay obligaciones para con lune mismo, el ene a intencidn normalmente no crea ninguna. Si lunagente mo hace lo quctenfalaintenci de hacer, normalmente no sedebe asf mismo ninguna expicacin odsculpa, especialmente si simplemente eambié deopinin; sin embargo st es justamente el ‘aso que pide unaexplicacin ouna disculpa cuando sha quebran- {ad una promesa hecha a oto. Un mandsto puede desobedecee, pero so cuando est vigente. Pero stun agentenohace lo que tenia Ta intencin de hacer porque ha cambiado de opnica, la intenciéa 4, Vea Metal ct PT: Gch, 16 vec sonns acon sues original ya no est vigente.Quizds baste, para desacreditar estas teo- as, Seflalar que el prometery el manda, tal como usualmente los entender, son, neceseriamente realizaciones pablicas, en tanto ‘que formar na intencién no lo es. Frmar una intencin puede ser {ina ace, pero no es una realiacin y tener una inten no es, fen general el resultado de una. 'Nada de eso es negar que decir «tengo la intencin de hacerlo» 6 alo haré» es muy similar 0, en ocasiones, idéntico a prometer Inscerlo, Si digo cualquiera de estas cosas en el contexto correcto, leday derecho a un oyente a reer que yo creo que lo haré Quizds ‘una forma mis simple de formularlo es ésta: si digo en cieras condiciones wtengo Ia intencién de hacerlon, lo hares 0 «prometo Inscerlo, enfonces me represento a mi mismo como si ereyera que lobar. Puedo no ereer que lo hare, puedo no tener la intencin de ‘que mi escucha crea que lohar, pero le estoy dando un fundamento para que se queje sino lo hago. Estos hechossugieren que si no Slo digo «tengo la intenciGns 0 wlo har de al manera que me represente a mi mismo como sicreyera que lo har, sino que tam- bién soy sincero, entonces mi sinceridadgarantza tanto que tengo I imtencin de acerio como que creo qu lo haré. Una linea de a- _gumento semejante a éta ha evade a muchos Hlsofos a sostener| ‘gue tener I inteeisn de hacer alg implica frmalmente creer que Uno lo hardy ha Hlevado a unos cuants fil6sofo ala opinin mas ‘extrema de que tener laintencin de hacer algo esidénico aun tipo ‘de creencia de que uno lo had, Tener laintenciénde actuar es unacreenciadequeunoloharé? El argumento que acabo deesbozar ni siguiera muestra qe tener la intencién implique creencia, El argumento prueba que un hombre due, en ciertas condiciones, sinceramente dice «tengo la intenciGn de hacerlo» o lo haré» debe creer que lo hard. Pero puede ser el ‘ecirloy no la intencidn lo qu impligue la creencia. ¥ pienso que pdemos ver queestoesast. El problema es que hems pedo que la ocién de sinceridadejecute dos tareas. Comenzamos considerando ‘e2s0s en los que al decir «tengo la intencion demo «lo hare le doy ‘derecho aun escucha a creer quel hare. Y aqui es obvio que si s0y sincero sila cosas son como las represento,entonces debo creer (que lo hare. Pero es un supueso no apayado por el argumento de fe hacerlo, Estamos de acuerdo en que hay casos en Tos que la Sinceridadenel emisor de «tengo la intncidn de» equiereque quien Joemite crea que lo hard pero el argumentorequiee que estos esos incluyan todos aquellos en los que el hablante sabe oeree que tiene Ta inteneiGn de hacerlo. ‘Una vez que hemos dstinguid la cuestign de emo la ceencia se introduce en ls reconocimicntos de intencion de la euestin de ‘cémo la creencia se introduce en la intencia, nos debe salar ala Vista lo dudosa que es la ultima cones, ‘Es unerrorsuponer que siun agente ests haciendo alg intencio- ‘almente, debe saber que Io esté haciendo. Pues supoagamos que tun hombre est eserbiendo sa estamento con Ia ntenein de velar por el bienesar de sus hijos. El puede dudar acerca de su éxito y Segur asi hasta su muerte; sin embargo, aleseribir su tetamento, Al puede, de hecho, estar velando por el bienestar de sus hijos ys ‘esas ciertamente lo esti haciendo de manera intencional. Alguos ‘scéplcos pueden pensar que ese ejemplo fala porque se niegan a ‘conceder que un hombre puede ahora velar por el Blenestar de sus hijos si ese bienestar incluye sucesos aun por scontecer. Ast que he agu tro ejemplo: al escribir con fucrea sobre este papel peda tener a intencién de producir diez copias al carbéa legibles. No sé ro creo con confanza que est teniendo éxito. Pero, si estoy produ- iendo diez copia al carn legibles, ciertamente lo estoy haciendo itencionalmente. Estos ejemplos no prucban que el meroteneriain- tencién no pueda implicarereencia, pues los ejemplos comprenden ¢lactuar con una intenciGn Sin embargo es fell imaginar que la propuestano se apique al meramente ener I intencidn. Mientras {scribe su testament, el hombre no s6lo ests actuando con lainten- ‘dn de velar por el bienstar de sus hijs, sino que tambign tiene In intencin de velar por el bienestar de su hijos. Si puede dudar acer de s ahora hace Io que tiene la intencin de hacer, de seguro pede dada acerca de i har lo qu tien la intencién de hace. La tesis de que lene I nteneién implica crer se deiende en ‘ccasiones sosteniendo que las expresiones de intenciénsoa,engene- ‘al incompletasoelipieas.As.el hombre queescrbe su testamento us sao some acevo suceso8 debe desribirse como si tuvier Ia intenciGn de tratar de velar por el bienestar de sus hijos, no como situvier Ia intencién de velar por 6; yelhombre cone papel carbn tan soo est teniendo la intencién . ;Qué pasaria con ‘tengo lt inteneiGn de ir al concierto si no estoy en la cirec Tnuitvamente esto se acerea mis a comnicat a verdad acerca de la situaiGn tal como X la ve. Pro ces lizeralmente més pre- sa? Es difiell ver mo, Conforme a a tess a favor de la Cal largumenta Grice, si X djese en sentido estricto y honestamente “tengo laintencibn dei al concertos, dara entender que eels (que estria ahi. Si X diese en el sentido estrcto y honestamen- {e stengo la inieneign de ir al concierto sino estoy en Ia c&rce>, 6 daria a entender que crefa que estaria en el concierto si no es. tuviese ela edreel. Ahora bien, obviameate Ia primera ereencia ‘implica la segunda pro noes implicad pr éstay, asf, unaexpresia implica ‘una ercencia mas débil que stengo la inten de ir al conc to». Sesto es coreto, ain se tendré mayor precision con mis condiciones, ya que Xtampoco cree que estar en el concierto Si cambia & parecer 0 si se lo impide algo distinto a In prision. ‘Ast, cada vez mis nos vemos llevados hacia el casi vacfo ster. {go ln intencién de hacerio si nada me Io impide, si no cambio 4e parecer, si nada adverso sucede>. Esto no nos ice casi acer cde To que el agente ere acerca del futuro 0 sobre Io que de Inecho hard 120 savor som acoonts ¥sueo8 ‘Creo que X habs correctamentey con precisi, pero engaosa- ‘mente, cuando djo «tengo la intenci6n dei al concierto». El pudo haber corepido Ia impresidn y an sostene la pecisién diiendo sahora tengo laintencin de ir al concierto, pero ya que me pueden nearcelar podréno estar ahs, Un hombre que dice «tengo la in- tencign de estar sh, pero podria no estar af nose contradice a sf ‘mismo; alo sumo, srt inscrutable hasta que diga mis. Debemot , me parece claro que la diferencia es ét: las condiciones bona fde son quella que on zones para actuar que son contemporsneas con It intencidn A alguien puede no gustarle la misica fuerte ahora y esto puede ser por lo que tiene ahoraaintencin de ire dela esiaa casa resentanescrnt na ‘emprano sila misica es muy fuerte. El que no pueda irs temprano 8 casa no es una razén a favor 0 en conta de que se vaya a casa ‘emprano y, asf noes una condicén pertinnte para une intenccn, aungue si cree que no puede hacerlo, eso puede impedile tene ia intencién. Cambiar de opinin es un caso complicado pero, en general, nadie etd dispuesto a considerar un posible cambio futuro de intencién como una razén para modifica su intencién actual, a ‘menos que pense que eleambio futur lo produces algo que ahora consideraris como una azn Elcontraste que ha surgido entre las citcunstancias que en cae sones aceptamos que condicionan nuestrasintenciones y las cir fcunstaneis que sceparfamos si las intenciones. implicasen Ia treencia de que haremos lo que tenemos la intencin de hacer, me parece que indica muy concluyentemente que no necesaiamente freemos que haremos aquello que tenemos la inteneién de hacer Y que no enunciamos nvestas intenciones de manera mis preci- Sahaciéndolascoodicionales para todas ls cireunstancas en cuya _resencia pensamos que actuarlams. Estas diimas consideracioes apuntan a argumento més fuente en conta de Ia identfeacin de meramente tener la ntencin con, In-creencia de que uno hard aquello de lo que tiene la intenci. ‘ste es que las razones par tener la intenciGn de hacer algo son, cen general, muy distinas dels azones para creer que uno lo hark ‘He aqut por qué tengo la intencida de arizar la mayor: veo que ‘viene una turbonada, quiero impedir que zozobre el bote y creo ‘que arrizar la mayor impediré que zozobre el boe. Yo formulaia ‘mis razones pra inentararsizar la mayor de esta manera: viene una {urbonada, sera vergonzoso que elbotezozobrara y arizarlamayor pedir queel bore ozobre. Peo, por sf misma, esta azones para lmenararizar la mayor no me dan ninguna razén para creer que arvizaté la mayor. Dados supuesosadicionales, por cemplo, que la Droximidad de una turbonada es una razén para reer que yo creo ‘que una turbonada est prima y que lo vergonzoso de que zarobre el bote puede ser una razén para ereer que yo quiero impedir que zorobre el botey dado que tengo estas crencias y deseos, puede Ser razonable suponer que tengo Ia infenciGn de arizar la mayor ¥ que de hecho lo are. Asf que puede haber una conexin dil

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