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A menudo los pacientes empiezan el proceso de consulta describiendo un problema
más o menos específico. Éste puede ser una dificultad para dormir, una
relación conflictiva con algún pariente, fumar o comer en exceso, pérdida de interés
por el sexo u otra área importante de gratificación, o sentimientos de depresión
y apatía. Sin embargo, el análisis funcional de estos problemas revelará que
la queja inicial es sólo el aspecto más visible de un conjunto mayor de dificultades
en la vida de un sujeto que interfiere con su funcionamiento pleno y el desarrollo
de sus potencialidades como persona.
A menudo los pacientes empiezan el proceso de consulta describiendo un problema
más o menos específico. Éste puede ser una dificultad para dormir, una
relación conflictiva con algún pariente, fumar o comer en exceso, pérdida de interés
por el sexo u otra área importante de gratificación, o sentimientos de depresión
y apatía. Sin embargo, el análisis funcional de estos problemas revelará que
la queja inicial es sólo el aspecto más visible de un conjunto mayor de dificultades
en la vida de un sujeto que interfiere con su funcionamiento pleno y el desarrollo
de sus potencialidades como persona.
A menudo los pacientes empiezan el proceso de consulta describiendo un problema
más o menos específico. Éste puede ser una dificultad para dormir, una
relación conflictiva con algún pariente, fumar o comer en exceso, pérdida de interés
por el sexo u otra área importante de gratificación, o sentimientos de depresión
y apatía. Sin embargo, el análisis funcional de estos problemas revelará que
la queja inicial es sólo el aspecto más visible de un conjunto mayor de dificultades
en la vida de un sujeto que interfiere con su funcionamiento pleno y el desarrollo
de sus potencialidades como persona.
A menudo los pacientes empiezan el proceso de consulta describiendo un problema ms o menos especfico. ste puede ser una dificultad para dormir, una relacin conflictiva con algn pariente, fumar o comer en exceso, prdida de inters por el sexo u otra rea importante de gratificacin, o sentimientos de depresin y apata. Sin embargo, el anlisis funcional de estos problemas revelar que la queja inicial es slo el aspecto ms visible de un conjunto mayor de dificultades en la vida de un sujeto que interfiere con su funcionamiento pleno y el desarrollo de sus potencialidades como persona. La terapia conductual se puede dar por empezada desde el momento mismo en que se inicia el anlisis de la conducta como una funcin de sus contingencias antecedentes, organsmicas y consecuentes. Este anlisis minucioso, que se fundamenta en las hiptesis del interaccionismo y situacionismo (Bandura, 1977) pronto inicia un movimiento de exploracin en el paciente cuyo impacto principal, en la mayora de los casos, es que comienza a visualizar su problema como un eslabn con significado y sentido dentro de una cadena de eventos en su ambiente circundante en s mismo. En muchos casos, con alivio, el paciente cuestiona una imagen de s mismo sobrecargada de autoetiquetas como "estoy loco", "soy neurtico", "algo anda mal en mi mente", etc., y por primera vez percibe con claridad que su "problema personal" trasciende su persona y parte adems, de una compleja constelacin de conductas propias, las de otras personas y otros eventos relevantes de su ambiente interno y externo. De este modo, el paciente pronto se familiariza y aprende con las reglas del mtodo de anlisis, el cual empieza a utilizar
ms y ms de manera independiente. Casi siempre este proceso
conlleva a una reestructuracin importante de la manera en que el paciente perciba de inicio sus problemas, y en ocasiones, a que ste se replantee totalmente el motivo de consulta original. Por ejemplo, el paciente puede llegar a establecer que su"agresividad" no es en realidad lo que ms importa ahora, ya que ha empezado a comprender que se trata posiblemente de una reaccin emocional asociada de manera funcional a una dificultad especfica en la relacin con su cnyuge, que lo conduce a episodios frecuentes de frustracin. Finalmente, el problema puede reducirse de forma ms especfica an, a un dficit en el repertorio conductual del paciente que le impide manejar de un modo ms efectivo esos aspectos de la relacin. Por ejemplo, esto podra ser, negarse a hacer algo que no desea hacer de manera no rechazable, pero a la vez firme y decidida. El lector no debera extraarse si ha pensado que lo mencionado anteriormente podra ser descrito en trminos de un proceso de insight en concordancia con las teoras psicodinmicas. Muchos autores (Wachtel, 1978), han considerado el proceso de "discriminacin de estmulo" involucrado en el anlisis funcional de la conducta como un fenmeno equivalente a algunas formas de insight. En este proceso, cuando el paciente descubre, con la ayuda del terapeuta, que sus reacciones emocionales y motoras estn determinadas por situaciones de las que l no era "consciente", la situacin teraputica puede ser realmente muy similar en terapia conductual o en alguna otra forma de terapia orientada psicodinmicamente.A manera de ilustracin y usando el ejemplo anterior, el paciente podra haber estado convencido de que en realidad no amaba a su cnyuge, ya que no era posible experimentar tales sentimientos hostiles hacia alguien que se quiere. Al profundizar
en el anlisis de los estmulos que determinan sus respuestas agresivas,
ve claramente que no es "su cnyuge" el estmulo relevante sino slo algunas de sus conductas en un determinado contexto. Con este "simple" descubrimiento su percepcin del problema experimenta importantes cambios. A medida que el anlisis progresa, el paciente comienza tambin a ser capaz de organizar su situacin de tal manera que le es posible establecer una jerarqua de prioridades con respecto a la solucin de sus problemas. En ocasiones, el anlisis funcional es suficiente para que algunos pacientes modifiquen su situacin y resuelvan algunos problemas "espontneamente". En otros casos es necesario iniciar un proceso de diseo de estrategias de cambio para situaciones que son muy complejas o resistentes a la capacidad de control que el paciente tiene en ese momento. Tambin puede ocurrir que el paciente posea la conducta necesaria para modificar las condiciones que determinan su problema. Sin embargo, es posible que debido a interferencias de tipo emocional (angustia, miedo, depresin), el paciente est incapacitado para ejercer estos recursos eficazmente. Esta situacin, descrita en ocasiones por otras teoras como "resistencias", tambin son incorporadas en el contexto de la terapia conductual y con mucha frecuencia se manejan, como se ver ms adelante, reestructurando el ambiente de tal forma que los pacientes ejerciten sus potenciales de respuesta, primero en situaciones que son mucho menos amenazantes que la que ha originado la consulta teraputica. son suficientes para la resolucin del problema, el terapeuta conductual se convierte en una fuente constante de informacin referente a posibles modos, derivados de la investigacin clnica experimental, que podran ser tiles para
resolver el problema. En una situacin teraputica real, rara vez se
trabaja con un problema nico y por lo mismo rara vez se aplica una sola tcnica o tcnicas "puras" (tal como se describen en la literatura experimental). Para el proceso de diseo de las estrategias de cambio especficas que cada paciente podra necesitar, el terapeuta conductual, posee un conocimiento profundo de los principios tericos del aprendizaje y la psicologa general y es capaz de combinarlos con la experiencia experimental y clnica acumulada. Pueden encontrarse excelentes descripciones de las tcnicas generales que constituyen el arsenal bsico de la terapia conductual, en obras como Terapia conductual: Tcnicas y hallazgos empricos de Rimm y Masters, publicada en 1974 y 1979. A continuacin se abordarn algunos problemas que se presentan con frecuencia en la consulta clnica, presentando su definicin desde un punto de vista conductual y las posibles alternativas bsicas de tratamiento