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Montserrat Altemir Lara &

www.costalero.com Juan José Fernández Fernández


COSTALERAS DE POZOBLANCO

Con el paso del tiempo, las tradiciones van evolucionando. Hace unas décadas era
impensable ver mujeres costaleras bajo las faldas de un paso, pero hoy en día entra
dentro de la normalidad y cada vez es más frecuente encontrar cuadrillas mixtas e
incluso formadas íntegramente por mujeres costaleras.

Inconvenientes de las cuadrillas mixtas.

En las cuadrillas mixtas surge un importante problema, que es el de la altura.


Normalmente entre mujeres y hombres la diferencia de altura va a ser mayor por lo que
será más difícil su correcta distribución bajo el paso, pudiendo aumentar la probabilidad
de lesión en aquellos que estén mal equilibrados.
Por el contrario, si se consigue distribuir bien el peso de la trabajadora sobre la
séptima apófisis espinosa cervical, la cuadrilla estará equilibrada.

Análisis cuadrillas femeninas de Pozoblanco.

Tras una encuesta realizada a 62 costaleras de Pozoblanco, analizamos las


variables que pueden influir en una correcta actividad de las costaleras.

EDAD: desde los 17 años a los 46 años. Predominan mujeres jóvenes de 19 y 20


años. En este caso la edad no se consideraría un factor de riesgo, ya que entre los 18 y
los 40 años se considera que la salud y la condición física son aptas para realizar la
actividad (excepto casos específicos de lesiones o enfermedades y condiciones físicas
individuales). En determinados casos se compensa la falta de edad con condiciones
físicas más desarrolladas. Por lo contrario, se observan mujeres con edad adecuada y
condición física no ejercitada para la actividad de costalera.

ALTURA: la altura menor corresponde a 1,44 m y la mayor 1,78 m. Existe un


rango de diferencia de 34 cm., que podría contribuir a ser un factor de riesgo si no se
consigue equilibrar con las demás costaleras a aquellas de mayor altura (que soportarían
más peso) o a las de menor altura, que cogerían menos peso (haciendo que las demás
hagan mayor esfuerzo). Hay que tener en cuenta que, la altura se afecta en función del
tipo de calle. Por tanto, la posición en función de la altura se tiene que adaptar a el tipo
de calle que existen en la ciudad o pueblo.

PESO: existe una diferencia de 57 kg entre el dato menor (47 Kg.) y el mayor
(104 Kg.). Al igual que con la variable de la altura, será importante la distribución
debajo del paso. Pero, en este caso, la fuerza va a ser más importante que el propio peso
(aunque ambos están relacionados). Igualmente, el peso influye en el espacio en las
trabajaderas. A mayor peso menos mujeres se posicionan correctamente bajo el paso. Es
mejor que se tengan espacio para colocarse correctamente, que poco espacio y que no
puedan adquirir posturas adecuadas.

AÑOS SALIENDO DE COSTALERA: muchas veces la experiencia va a


proporcionar mayor prevención, siempre y cuando el desarrollo de la actividad sea el
correcto. De nada va a servir muchos años de experiencia si existe desconocimiento, por
ejemplo, de cómo protegerse (fajas ortopédicas y vendajes funcionales) o de la actitud
postural bajo el paso.
La mayoría de costaleras de Pozoblanco tienen de 1 a 5 años de experiencia bajo
el paso.

NÚMERO DE PASOS QUE SACAN Y TIPO: a mayor número de pasos mayor


es el esfuerzo, por lo que el número de lesiones puede aumentar (aumenta el factor de
riesgo). Por tanto, la preparación física debe ser mayor.
El 97% de las costaleras de Pozoblanco saca un único paso.
El 65% saca un paso de Cristo. Normalmente las cuadrillas de mayor altura serán
las más adecuadas para sacar los pasos de Cristo y las más bajas las de Virgen. Sería
más adecuado que las cuadrillas femeninas sacaran los pasos de Virgen por su altura,
pero también es cierto que normalmente estos pasos son los que pesan más.

NÚMERO DE RELEVOS: es importante realizar relevos durante el recorrido para


evitar sobrecarga y fatiga muscular, que posteriormente pueden derivar en lesiones
musculoesqueléticas. El 87% de las costaleras de Pozoblanco no realiza relevos. Este
hecho debe mejorarse, ya que gracias a los relevos el rendimiento puede aumentar y se
pueden prevenir lesiones.
En los relevos, el capataz debe conocer las condiciones físicas y capacidades
psíquicas de la cuadrilla. En función de la situación de cada costalera, el capataz, puede
aumentar o disminuir los relevos, al igual que incluir o excluir a determinadas
costaleras. No debemos olvidar, como influye el tipo de calle en el esfuerzo de las
costaleras. Por ejemplo, si pasamos por una calle con la convexidad o lomos
acentuados, las costaleras que se encuentran en la corriente suelen estar más cansadas y
pueden que precisen de más descanso. Por el contrario, si las aguas van por el centro,
las costaleras costeras están realizando mas esfuerzo. En general, debemos tener en
cuenta como afectan las fuerzas sobre la biomecánica del paso. Por ello, conocimientos
básicos de física aplicada a la medicina y bimecánica de la marcha en bipeestación, nos
ayudan a realizar el trabajo de forma más adecuada para las costaleras. Lo que nos da
evidencia del cambio generacional que se está produciendo en el mundo del costal. La
técnica del costal se debe aprender si queremos disminuir el riesgo de las costaleras y
costaleros. La experiencia es muy importante, pero sumada a los conocimientos técnicos
mejoramos el trabajo de todos.

USO DE FAJA ORTOPÉDICA: su uso es adecuado a modo de protección,


disminuyendo el factor de riesgo de aparición de lesiones. Para que sean efectivas, la
contracción abdominal debe ser suficiente y su colocación debe ser correcta;
previamente debe valorarse la movilidad pélvica (movimientos de ante versión y
retroversión).
En el caso de las mujeres, es más fácil encontrar mayor movilidad pélvica que en
los hombres, además, su lordosis lumbar va a ser mayor con frecuencia (predomina la
anteversión pélvica). Por ello, se deberá incidir en la contracción abdominal como
protección de la zona lumbar. Por ello, además del tipo de faja, lo importante es como
se coloca la faja. Lo adecuado es con las abdominales contraídas, siendo la mejor faja
anatómica que existe para prevenir lesiones lumbares.
Se debe tener en cuenta también a la hora de colocar la faja convencional (mejor
usarla por encima de la ortopédica que por sí sola), que deben evitarse la aparición de
arrugas. Lo ideal es colocar primero la camiseta, después la faja anatómica y por último
la tradicional.
El 69% de las costaleras en Pozoblanco usan la faja ortopédica, frente a un 31%
que dice no usarla. Se debería comprobar entre las que la usan, si lo hacen de forma
correcta.

USO DE VENDAJES FUNCIONALES: son útiles a la hora de proteger


articulaciones de riesgo, pero a la vez pueden constituir un factor de riesgo si no son
bien colocados, puesto que en vez de prevenir una lesión podrían ocasionarla.
En Pozoblanco un 8% dice usarlo. Se debería valorar si su uso es adecuado.

CALZADO: es importante que el calzado amortigüe el peso y que proteja a la


articulación del tobillo. Se desaconseja el uso de alpargatas (aunque tradicionalmente
sean el calzado de elección) y se recomienda el calzado deportivo (según el Colegio
Profesional de Podólogos de Andalucía, es el calzado adecuado). Para mantener la
tradición, lo ideal seria crear un calzado con las condiciones que favorecen el calzado
deportivo y con la estética de la alpargata tradicional. Animamos a los podólogos y
técnicos que investigen científicamente y desarrollen un calzado que fusionen lo
tradicional y lo técnico.
El 77% de las mujeres encuestadas en Pozoblanco usan calzado deportivo, pero
aún existe un 23% que llevan alpargatas.

PRÁCTICA DE EJERCICIO HABITUAL: un 58% no afirma realizar ejercicio de


forma regular. De esta forma el factor de riesgo a la aparición de lesiones aumenta
considerablemente, ya que es imprescindible contar con una buena condición física para
un correcto rendimiento y desarrollo de la actividad de costalera.
Además de la práctica de ejercicio regular durante todo el año, es importante
también realizar una preparación específica antes, durante los relevos y después de la
actividad. Los ejercicios deben estar adecuados y especificados por un preparador físico
que desarrollen los programas de entrenamiento en función del trabajo de la mujer
costalera.

MOMENTO DE APARICIÓN DEL DOLOR (horas bajo el paso): más de la


mitad de las costaleras refieren que su dolor aparece entre las 3 horas y media y las 4
horas debajo del paso. Habrá que tener en cuenta este dato a la hora de realizar los
relevos (por ejemplo, que se realicen cada dos horas para no llegar al máximo de
esfuerzo posible). Además es importante que durante los relevos además de descansar y
beber agua, se realicen estiramientos y se intenten modificar posturas adoptadas
anteriormente que hayan sido perjudiciales, así como recolocar la faja si ésta estuviese
mal colocada.

INTENSIDAD Y FRECUENCIA DEL DOLOR: de entre las costaleras que


padecen dolor (alrededor del 70%), la mayoría decían tener un dolor de intensidad
moderada y cuya frecuencia no es relevante. Nos encontramos, por tanto, con dolores
esporádicos pero de relativa importancia con respecto a su intensidad.
Probablemente puede deberse al mal acondicionamiento físico para realizar la
actividad. Por tanto, es importante de nuevo hacer hincapié en la práctica habitual de
ejercicio para la prevención de lesiones y el buen rendimiento durante la actividad bajo
el paso.

LESIONES ANTERIORES: la mayoría de las mujeres entrevistadas (el 81%) no


presentan lesiones previas. Si se padecen lesiones anteriores, éstas contribuyen a ser un
factor de riesgo, ya que el estado de salud inicial no es el óptimo, y la actividad puede
dar lugar a una nueva lesión o agravar la que ya existe.

ALIMENTACIÓN ANTES DE LA SALIDA: disminuyen el factor de riesgo


alimentos ligeros con el suficiente aporte de hidratos de carbono, también bebidas que
aporten glucosa, para evitar las bajadas de azúcares. Las comidas copiosas y el ayuno
aumentan el factor de riesgo. El consumo de bebidas alcohólicas también aumentan el
factor de riesgo.
En este caso hay que mencionar que un 21% de las mujeres entrevistadas afirman
no ingerir alimentos antes de la salida, lo que podría ocasionar desmayos por falta de
aporte energético.

Variables comunes entre hombres y mujeres costaleras

Existen un tipo de variables, que son comunes tanto para hombres como para
mujeres, ya que no dependen directamente del sexo del sujeto. Ya han sido estudiadas
en el análisis sobre el costalero, pero las enumeramos para que las tengamos en cuenta
puesto que también afectan a las mujeres:

ESTADO DE SALUD PREVIO A LA REALIZACIÓN DE LA ACTIVIDAD:


Aquellos que sufran de procesos patológicos deben considerar el riesgo que conlleva la
actividad del costalero: los daños articulares, discales, musculares, viscerales (entre
otros) deben ser detectados mediante el diagnóstico médico antes de la realización de la
actividad. En consecuencia, se aconseja a este colectivo que pase por una consulta
médica con antelación a la Semana Santa (mínima de dos o tres meses).
La fisioterapia complementa el diagnóstico médico realizando una valoración con
objeto de prevenir posibles lesiones del aparato locomotor (musculatura y huesos),
estudiando los factores de riesgo de forma individual.

Según la clasificación realizada por los Doctores Cruz Fernández, Pérez Castilla, Blasco
Huelva y Álvarez Zarallo, se determinará como apto al costalero que en estudio médico
practicado no se haya detectado ningún proceso patológico que pueda implicar un riesgo
para su salud; como no apto a aquellos a los que se detecta un proceso patológico. La
fisioterapia denomina al costalero de alto riesgo a aquel que tras la valoración individual
de fisioterapia se remite al médico con objeto de practicar un diagnóstico.

PROFESION: Diversas profesiones y estudiantes donde el esfuerzo intelectual


ha suplido al físico:
Profesión que disminuye el factor de riesgo: aquella que requiere esfuerzo físico.
Profesión que aumenta el factor de riesgo: aquella que no requiere esfuerzo físico

POSTURAS ADOPTADAS BAJO EL PASO: Al iniciar los movimientos una


postura inadecuada implicaría mantener una posición incorrecta hasta que el paso se
estacione. Al mantener una postura incorrecta durante un periodo de tiempo mayor del
debido existe el riesgo de padecer un dolor o de sufrir una lesión que podría ser
prevenida.
Actitud postural que disminuye el factor riesgo: tras una valoración se detecta una
realización adecuada de la actitud postural durante la actividad.
Actitud postural que aumenta el factor de riesgo: Tras una valoración se detecta una
realización inadecuada de la actitud postural durante la actividad.

POSTURAS ADOPTADAS FUERA DEL PASO: El fisioterapeuta indicará las


adecuadas que se deben adoptar en actividades de la vida diaria.
Actitud postural que disminuye el factor de riesgo: tras una valoración de fisioterapia se
observa una actitud normal.
Actitud postural que aumenta el factor de riesgo: tras una valoración de fisioterapia se
observa una actitud anormal.

LA IGUALÁ. Igualá que disminuye el factor de riesgo: la trabajadera se apoya


sobre la séptima cervical.
Igualá que aumenta el factor de riesgo: Si la igualá no es correcta la trabajadera no
recaerá en todos los costaleros sobre el mismo punto de presión (apófisis espinosa de la
séptima cervical).
“Un trabajo realizado por los costaleros con la cabeza flexionada hacia adelante
por la mala “igualá” entre los hombres o por “ aliviarse” en el peso, da lugar a un mayor
esfuerzo, cuando no a una rozaduras en el cuello que erosionan la piel.

POSICIÓN QUE LLEVA BAJO EL PASO: Dependiendo de la posición bajo las


trabajaderas se adquieren diferentes posiciones del miembro superior, existiendo la
posibilidad de dar origen a lesiones diversas en relación con la posición que se adopte
bajo el paso.
Las primeras trabajaderas se presentan libres de trabajaderas anteriores, de forma que
los hombres de las primeras llevan los brazos en distinta posición que los de las
posteriores a la primera.
Los costeros que se colocan en los laterales llevan situados los brazos sobre los palos
laterales, implicando un aumento de presión en los bordes externos de los brazos.
Los pateros situados en los bordes anteriores y posteriores presentan una función de
guía, por ser los puntos de referencia de los movimientos realizados por el resto del
grupo.
Los “corrientes” al pasar por calles convexas tienen menos espacio para adquirir la
posición erecta de la columna, necesitan cifosar la columna vertebral para tener
suficiente espacio.

ESPACIO ENTRE TRABAJADERA:Espacios que aumenta el factor de riesgo:


Cuando los espacios son reducidos los costaleros no tienen el suficiente espacio para
extender los miembros superiores y necesitan cifosar la columna vertebral a nivel dorsal
para extender los miembros superiores.
Espacios que disminuyen el factor de riesgo: Cuando los espacios son lo suficiente
anchos que permite que los costaleros tengan bastante espacio para extender los
miembros superiores y no necesiten cifosar la columna vertebral a nivel dorsal para
extender los miembros superiores.

PROPIOCEPCION: REPARTIR EL PESO DE LOS KG DE FORMA


EQUITATIVA: El peso del cuerpo debe ir en el centro del mismo. El equilibrio se verá
afectado por el tipo de calle y la propiocepción de cada costalero.
Propiocepción que disminuye el factor de riesgo: Tras una valoración de fisioterapia se
observa una propiocepción suficiente para la actividad del costalero.
Propiocepción que aumenta el factor de riesgo: Tras una valoración de fisioterapia se
observa un propiocepción insuficiente para la actividad del costalero

COORDINACION: Coordinación que disminuye el factor de riesgo: Tras una


valoración de fisioterapia se observa una coordinación suficiente para la actividad del
costalero.
Coordinación que aumenta el factor de riesgo: Tras una valoración de fisioterapia se
observa una coordinación insuficiente para su actividad.

TIEMPO DEL RECORRIDO: A medida que aumenta el tiempo de recorrido sin


descansos ni tratamiento de daños aumenta la curva de riesgos posibles adquiridos.
A mayor número de relevos, más posibilidades de rectificar una postura
incorrecta, aumenta la posibilidad de poder realizar ejercicios de estiramientos que
descarguen la zona, permite tratar al costalero dañado disminuyendo, de este modo, la
curva de riesgo que va aumentando a lo largo de la actividad del costalero impidiendo
que llegue a lesionarse. Si el costalero se lesiona permite tratar al costalero. A su vez el
capataz tiene la posibilidad de reajustar la posición de la cuadrilla de costaleros
Número de relevos que disminuye el factor de riesgo: permite reajustar la cuadrilla bajo
el paso, rectificar las posturas incorrectas y tratar costaleros dañados o lesionados.
Número de relevos aumenta el factor de riesgo: no permite reajustar la cuadrilla bajo el
paso, ni rectificar la posturas incorrectas al igual que no posibilita tratar a costaleros
dañados o lesionados.

HORAS DE SUEÑO: Horas de sueño que aumentan el factor de riesgo: horas


de sueño que le permita realizar la actividad del costalero con un rendimiento efectivo.
Horas de sueño que disminuyen el factor de riesgo: horas de sueño que no le permita
realizar la actividad del costalero con un rendimiento efectivo.

MOTIVACION. CONCENTRACIÓN: Si ambos factores aumentan, la fuerza y


la postura correcta serán favorecidas.
Motivación que aumenta el factor de riesgo: motivación que no le permite mantener la
concentración en la realización correcta de la actividad propia de su trabajo, dando
lugar a la realización de acciones impropias.
Motivación que disminuye el factor de riesgo: motivación que le permite
mantener la concentración en la realización correcta propia de su actividad

Todas las variables citadas anteriormente se reagrupan entre fijas y


modificables.

Variables fijas:
Se consideran variables fijas aquellas que, siendo o no siendo posible cambiarlas, se que
no van a modificarse, por ejemplo: la profesión y el tipo de calles pueden cambiarse
pero establecemos que no va a cambiar. Al igual que los kilogramos del paso y el
reparto de los kilogramos bajo el paso. En determinadas circunstancias los kilogramos
recaen más sobre una zona y no se considera que se vaya a modificar. La altura, edad,
meteorología son variables que no se modifican.

Variables modificables por el costalero:


Variables que el costalero puede cambiar eligiendo una medida de actuación correcta o
incorrecta.
El costalero debe prepararse físicamente y específicamente antes de la realizar su
actividad propia del costalero. Debe pasar por una consulta médica y de fisioterápica
antes de salir de costalero. El costalero no debe faltar a los ensayos que les propone el
capataz y antes de salir de costalero debe colocarse la ropa de forma adecuada, al igual
que la protección. Una vez que conoce cuales son las medidas de actuación correctas
debe concentrarse: practicando, trabajando de forma responsable bajo el paso
soportando los kilogramos que les corresponde llevar. El costalero debe alimentarse
adecuadamente antes de salir y descansar en los relevos cuidándose los posibles daños
con objeto de evitar una futura lesión. El costalero debe sacar el numero de pasos que su
condición física y su estado de salud le permitan, sin exceder los límites corporales.
Variables no modificables por el costalero.
Variables modificables por el capataz:
Dependiendo de la forma de actuar del capataz, el riesgo de padecer una lesión del
costalero podrá aumentar o disminuir.

El capataz debe realizar la igualá adoptando como punto de referencia la séptima


vertical. Al igualar en función de la altura del costalero no se equilibra equitativamente
los kilogramos del paso y aumenta el riesgo de éstos de padecer una lesión, por
ejemplo; si se iguala en función de la altura puede que haya costaleros que tengan el
cuello más alto que otros y la trabajadera no recae en la séptima vertical después de la
igualá. También es importante el espacio que hay entre las trabajaderas. Al aumentar el
número de costaleros que van bajo el paso aunque la fuerza de empuje es mayor y se
reparten más que es importante el espacio que hay entre las trabajaderas. Al aumentar el
número de costaleros que van bajo el paso aunque la fuerza de empuje es mayor y se
reparten más los kilogramos, las posturas que adoptan los costaleros es incorrecta por
no tener espacio suficiente de
Forma que aumenta el factor de riesgo del costalero de lesionarse.
El capataz debe realizar el número de ensayos adecuados que permite a la
cuadrilla de costalero estar preparados para su actividad indicándole como debe
prepararse, y colocarse la ropa apropiada, establecer el número y tiempo de los
intervalos de los relevos de forma que el costalero que el que necesite asistencia pueda
tratarse, y el que adopte una mala postura pueda corregirla o adaptarse bajo las
trabajaderas

Recomendaciones para la prevención de lesiones.

- Pasar un reconocimiento médico dos o tres meses antes de la Semana


Santa (según publicaciones de www.diariomedico.com sólo el 20 % de los
costaleros se someten a este reconocimiento)
- Ir a una consulta de fisioterapia con el objetivo de prevenir posibles
lesiones, analizando los factores de riesgo individuales. Resolver con el o
la fisioterapeuta cualquier tipo de duda referente a la postura, los
movimientos, la forma de fajarse, los vendajes, etc.
- Realizar un entrenamiento durante todo el año para que el cuerpo esté
preparado física y técnicamente para salir de costalero/a.
- Incluir en este entrenamiento la coordinación, el equilibrio y en definitiva
la propiocepción, de forma que el trabajo realizado sea lo más eficiente
posible y exista el mínimo riesgo de lesiones posibles.
- Adoptar una buena actitud postural durante la vida diaria.
- Realizar un número adecuado de ensayos para el buen desarrollo de la
técnica y la coordinación del trabajo en equipo.
- Proteger la séptima vértebra cervical (donde va a recaer la mayoría del
peso) con la morcilla. Adecuar el tamaño y la posición de la misma para
este fin.
- Colocar la ropa y faja sin que se formen arrugas.
- Usar calzado deportivo que amortigüe el peso. Buscar además que proteja
la articulación del tobillo.
- Usar vendajes si son necesarios (consultar con el fisioterapeuta la
colocación de los mismos)
- Mantener la espalda recta y la mirada al frente durante el trayecto.
- Trabajar la musculatura abdominal para que pueda actuar como faja
muscular a la hora de “meter riñones”.
- Realizar estiramientos antes, durante los relevos y después de sacar el
paso.
- Beber agua en pequeña cantidad y de forma continuada durante todo el
trayecto.
- Cuando vaya a quitarse la faja, hágalo de forma muy lenta.
- Consultar al fisioterapeuta ante molestias o dolor del aparato locomotor y
al médico en caso de que éstas sean persistentes o en caso de aparición de
dolor de otro tipo.

Montserrat Altemir Lara Juan José Fernández Fernández

- Autora – Promotor del proyecto


- Autora manual del costalero. – Costalero y Capataz
- Autora www.costalero.com
- Creadora y coordinadora del centro
de atención al costalero

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