Está en la página 1de 19

El Jero

Mercedes Fuentes
Guatemala, 2010
El Jero
Después del asalto
El Crudo, Jero y Chitío, revisan objetos robados, son ladrones
desarmados, de teléfonos móviles y billeteras.
Crudo: Esta mierda se la hubieras tirado en la jeta.
Jero: Aunque sea 50 varas nos dan.
Crudo: Cincuenta varas no me sirven para ni verga, tené, regaláselo
a tu vieja o a tu güisa, yo pa´que quiero esa mierda.
Jero: Tres litros mano, con bocas.
Crudo: Pa que vergas, solo planta sos con tanto tatuaje y no servís
para ni verga. (Chitío, que ha permanecido en silencio, se
ríe como en burla) Y vos ¿de qué te reís?
Chitío: ¿No te ha contado?
Crudo: ¿Qué cosa?
Chitío: (A Jero) ¿No le has contado?
Jero: Sho mierda, eso es onda mía.
Crudo: ¿Qué putas?
Chitío: La semana pasada unas viejas se le fueron encima a pura
verga, se lo controlaron como a la media hora que le había
puesto a una y entre 4 lo agarraron de repente, estaba bien
ahuevado el cerote, salió corriendo, ni un vergazo les pudo
meter.
Jero: Eran una viejas pizadas ¿qué querías? Uno no se da verga con
unas viejas.
Chitío: No pues, a huevos, uno LES DA verga a ellas.
Jero: ¿Qué tal si hubiera sido tu madre cerote?
Chitío: Mi mamá te hubiera dejado puspo a pura verga (ríe).
Jero: Así como te dejaba a vos de ishto, por eso te quedaste mula.
Crudo: Ya sho los dos, sáfense, hay les digo al rato cuanto me
dieron por estas mierdas.
Chitío: Si querés te acompañamos.
Crudo: Nel.
Chitío: Bien hombre, así ahora andás con guardaespaldas.
Crudo: Ya te dije que nel.
Chitío: Vos, no nos vas a hacer una ¿vaá?
Crudo: Tu madre ¿Cuándo putas les he hueveado yo a ustedes
decime?
Chitío: Saber mano, que sabemos nosotros si no te dan mas de lo
que nos decís.
Crudo: Mirá cerote, si estás con esas mierdas andá a ver quien te
compra toda esa tu mierda, agradecé que yo hago la otra
mitad del chance y solo me quedo con la tercera parte, que
si fueramos legales deberíamos ir mita mita, y este tu primo
talega ni mierda bueno trae, me hace perder el tiempo y
ahora decís que lo verguean las rucas, para que vergas. Así
que ya sabés, no me vengás con mierdas o una sola te voy a
hacer.
Chitío: Va ya alivianáte pues, tranquilo cerote, no me grités.
Crudo: Entonces no me pongás como mil putas.
Jero: Necesitamos cuetes mano, así sin cuetes ya no sale, hoy otra vez
una vieja cerota no bajó el vidrio del carro cuando vio que
navajas teníamos y se fue a la verga.
Crudo: Le hubieran quebrado el vidrio cerotes, huecos son.
Chitío: Nel mano, deveras que con cuetes si saldría la onda,
podríamos huevearnos carros y ahí si la meteríamos
cuadrada.
Crudo: Eso ya es grandes ligas y para eso todavía nos falta, los
cuetes tal vez consiga uno, pero huevearse un carro así para
que vergas, ¿a quien putas se lo vendemos? Decíme.
Jero: ¿No vos hacés la otra mitad del chance pues? Ponéte las pilas y
conseguí quien compre carros y le entramos.
Crudo: Yo te voy a meter a vos las pilas pero entre el culo mierda,
ustedes váyanse a hacer lo suyo y a mi me dejan tranquilo, y
si no les gusta vayan a ver con quien visnean cerotes, que
yo no necesito estas sus mierditas que consiguen, yo por
hacerles el paro nomás, que con esto yo no la hago ni para
un día. Sáfense pués, ¡jule cerotes jule! ¡a la verga!
La güisa.
(Jero toca a la puerta insistente y molesto. Abre Josselyn.)
Joss: ¿Qué onda?
Jero: ¿Qué onda?
Joss: ¿Qué tenés?
Jero: Entro o salís.
Joss: Entrá, ya es muy tarde. (Entran) ¿Qué tenés?
Jero: Nada.
Joss: Nada será, estás bien maleado.
Jero: Vergueos con el Crudo, que le dijimos con el Chitío que qué putas,
que muy poca feria nos da por las chivas y nos mandó a la
mierda.
Joss: ¿Ya no les va a recibir?
Jero: Saber, pero estaba como la gran puta.
Joss: (Luego de una pausa). Ya no me bajó vos.
Jero: ¿Qué?
Joss: La menstruación.
Jero: ¿Cómo así?
Joss: Que hace mas de dos meses que no me viene la menstruación.
Jero: ¿Y entonces?
Joss: ¿Qué?
Jero: ¿Qué putas?
Joss: Compré una de esas pruebas que se hacen con el bish pero no le
agarro la onda.
Jero: Pero ¿ya te la hiciste?
Joss: No, no te digo pues, no le agarro la onda.
Jero: ¿Ahí está tu mamá?
Joss: Ya se durmió.
Jero: A ver esa mierda. (Joss la toma de algún lugar y se la da. Jero lee
un momento) Veníte, vamos al baño. (Van y vuelven
segundos después) ¡Ala puta! ¿Qué putas? Que metida de
huevo. Que metida de huevo. (Pausa) Ala puta, que metida
de huevo.
Joss: Ay vos, solo eso podés decir. Voy a hablar mañana con la Niki
para que me diga como le hizo ella.
Jero: ¿Cómo hizo qué?
Joss: ¿No te acordás que te conté pues?
Jero: Hace como un año.
Joss: Por eso.
Jero: ¿Por eso qué?
Joss: Ay Jero, si vos la mirás siempre a la Niky, que no ha tenido ni
panza ni hijo pués ¿qué creíste?
Jero: Nada, ni me acordaba que me habías dicho que estaba panzona, y
no me digás Jero.
Joss: Si panzona no se puso.
Jero: Ay si hombre, pela, yo ni me acordaba, a mi me pela la verga la
Niki, pero ¿Cómo así que le vas a preguntar qué decís?
Joss: Como hizo para sacárselo. (Pausa).
Jero: ¿Por qué querés sacártelo?
Joss: (Se encoje de hombros) ¿Y vos qué querés que haga pués?
Jero: Yo… no sé.
Joss: Yo creí que preferías eso, como todas mis cuatas que les ha
pasado los traídos les han dicho que se los saquen, eso creí.
Y vos que ahora estás bien metido en esa mierda,
Jero: Eso no es de ahora, vos sabés.
Joss: Va, pero ahora hasta armado vas a andar.
Jero: Saber, el Crudo no nos quiere dar cuetes.
Joss: Va, pero yo digo que es mejor ni pensar en tener chavitos.
Jero: Simón, pero…
Joss: ¿Qué?
Jero: No sé.
Joss: Pero hablá Jero, decíme que jodidos pensás, o qué querés. Si vos a
mi ni me querés Jero.
Jero: ¡Ya te dije que no me digás Jero, me llamo Adolfo y si querés
decime Fito pero no Jero! ¿Entendiste?
Joss: ¿Y por qué todos tus cuates te dicen así y no te enojás?
Jero: Esos son cuates, ni eso, pela la verga, pero vos sos mi güisa y no
quiero que me digás así.
Joss: Va, ya sho, mejor andate (Pausa).
Jero: ¿Y si no te lo sacás?
Joss: ¿Vos querés tener un chavito?
Jero: No sé.
(Tocan desesperadamente a la puerta)
Joss: ¿Quién?
Chitío: Yo, el Chitío. ¿Aquí está el Jero?
Joss: (Abriendo) Si ¿Qué onda?
Chitío: (Mientras entra precipitadamente) Se echaron al Turbio,
llegaron tres cerotes a la casa y se jalaron todas las mierdas
que tenía El Crudo, al Turbio le metieron un vergo de plomo,
al Crudo también le dieron pero no se murió, se lo jalaron al
hospital los bomberos, hay un vergo de mara y el MP y toda
la mierda, hay que safar porque nos van a pisar a todos
ahora.
Joss: Nel, a la tira le pela que se maten entre ustedes.
Jero: ¡Puta! Gracias, que buena onda ¿vaá?
Joss: Si es cierto.
Jero: Que huevos, ese Turbio era bien turbio pero más turbio es el
Crudo, mejor se lo hubieran quebrado a él.
Chitío: A lo mejor no la hace y se muere en el hospital.
Jero: Saber, ¿y ahora?
Chitío: ¿Qué?
Jero: ¿A quién putas le vamos a llevar las mierdas mientras el crudo
sale del hospital?
Chitío: En lo que estás, ese sale del hospital directo al bote.
Joss: Pues sí.
Jero: Si ¿vaá?
Chitío: A huevos.
Jero: Vaya, por eso, ¿ahora a quién le llevamos las mierdas?
Chitío: (Luego de una pausa) Ahora entrémole nosotros al chance,
taloniemos a donde iba ese cerote y le entramos nosotros.
(Pausa) Si hombre mano, no hay que ahuevarse. ¡Vivo!
Jero: (A Joss) ¿Vos que decís?
Chitío: (A Jero) ¿Y vos que putas? A las güisas no se les anda
pidiendo permiso cerote, si andás con esas huecadas mejor
me aviento yo solo.
Joss: ¿Qué digo de qué?
Jero: Si te lo vas a sacar le entro con este, si lo tenés busco un chance.
Chitío: ¿Qué putas pués?
Joss: Esa onda es entre nosotros Fito, ¿Qué tenés que hablar delante de
este?
Chitío: Ah puta, si quieren me safo.
Joss: Si, mejor andáte.
Chitío: (Con intención de salir) Pa´ que vergas.
Joss: Perate hombre, ahora ya estuvo. La onda que estoy esperando.
Chitío: (Ríendose un poco de nervios, un poco de burla) ¿A lo
macho? ¿Qué putas? Muchá ¿porqué no van a APROFAM a
que les regalen condones pués? (Ríe más abiertamente) Si
son bien mulas ¿vaá?
Joss: Sho Chitío, sho, ahorita la onda no es esa.
Chitío: Mirá pues vos Jero, la onda ahorita es que a huevos no
somos los únicos que estamos pensando en el chance de
aquellos, si esos cerotes le agarraban las mierdas a un
chingo de mara, así que los más vivos se van a quedar con
ese hueso, hay que salir ahorita cerote, ahorita o nos la van
a ganar (ha sacado un cigarro y está a punto de encenderlo).
Joss: Andáte a fumar afuera que esa babosada me da nausea.
Chitío: (A Jero) Diez minutos pa´ que lo pensés, ahí voy a estar
afuera, si no me busco otro. Diez minutos. (Mientras va
saliendo) Tic tac, tic tac, tic tac, tic tac. (Sale).
Jero: ¿Y entonces?
Joss: No sé, es que vos con esa tu onda de los hueveos conseguís pisto
pero cualquier rato te matan y yo sola con el chavito que
huevos.
Jero: ¿No te estoy diciendo pues? Si lo tenés consigo un chance. Ahí
miro que putas en una maquila o de uniformado, saber, ahí
de algo, si mula no soy, lo que pasa que me daba cacho de
hueva y todos los cuates me jalaron desde chavito, neta que
es más fácil conseguir pisto así, pero ya casi todos se
murieron, puta ya siento que me va a tocar a mí, no creás
que no me la paso bien ahuevado.
Joss: No me habías contado.
Jero: Mucha huecada, pero si no ¿para qué tiene uno güisa pues? (Ríen)
Joss: Pero no le ponemos Adolfo.
Jero: Ah bien, como su abuelo y como su tata.
Joss: Nel.
Jero: Ahí miramos después. (Pausa) Que metida de huevo.
Joss: Simón, que metida de huevo.

La Entrevista
(Una oficina pequeña, sencilla, pocos objetos. Por necesidades de
simultaneidad con la siguiente escena, ésta deberá desarrollarse en el
lado derecho o izquierdo del escenario, el autor recomienda el lado
izquierdo.)
Reclutador 1: Buenas tardes señor Luarca, siéntese, solo le voy a
robar unos minutos. Antes que nada vamos a verificar sus
datos, para estar seguros de que todo esté bien. Nombre
completo.
Jero: Adolfo José Luarca Gómez.
Reclutador1: Número de cédula.
Jero: A uno guión uno cero uno cero uno cero uno. (El reclutador lo ve
un poco escéptico) Ahí está la fotocopia de mi cédula, mire.
Reclutador1: (Busca entre las hojas, la encuentra, continua)
Escolaridad.
Jero: Eso es lo de hasta qué grado llegué ¿vaá?
Reclutador1: Si.
Jero: Segundo básico.
Reclutador1: Edad.
Jero: 19.
Reclutador1: No anotó ningún trabajo anterior donde podamos pedir
referencias.
Jero: Es que es la primera vez que pido trabajo.
Reclutador1: ¿A qué se ha dedicado entonces desde que dejó los
estudios?
Jero: Pues, nada, ahí me estuve en la casa nada más, ayudando a cuidar
a los hijos de mis hermanas grandes.
Reclutador1: ¿Cuántos años?
Jero: No sé, como tres digo yo.
Reclutador1: Según esto el segundo básico lo terminó hace cinco
años.
Jero: Simón, digo, si señor.
Reclutador1: ¿Hijos?
Jero: (Titubea) No.
Reclutador1: ¿No? ¿Seguro?
Jero: Es que todavía no tengo pero mi novia está (con las manos hace
señas de un abdomen grande)
Reclutador1: ¿embarazada?
Jero: Ajá, si.
Reclutador2: (Entra interrumpiendo) Vos, ya no da tiempo de estas
tus entrevistas, al grano mano.
Reclutador1: Ya te dije que yo no trabajo de esa forma, me estás
interrumpiendo, esperá afuera por favor.
Reclutador2: Don Ignacio me dio permiso así que ni modo. Ahora
mirá como se hace: ¿trajiste fotocopia de tu cédula?
Jero: (Señalando a los papeles que tiene Reclutador1) Ahí la tiene él.
Reclutador2: Contestáme “si” o “no” a lo que te pregunte. ¿Trajiste
copia de tu cédula?
Jero: Si.
Reclutador2: ¿Podés trabajar de ocho a seis, media hora de
almuerzo, de lunes a viernes, y sábado de ocho a dos?
Jero: Si.
Reclutador2: ¿Ganando mil ochocientos al mes sin prestaciones?
Jero: ¿Qué es eso de prestaciones?
Reclutador2: ¿Si o no?
Jero: Si.
Reclutador2: ¿Has estado metido en maras?
Jero: (Duda un segundo) No.
Reclutador2: ¿Nunca has estado en una mara?
Jero: No.
Reclutador2: Quitáte la camisa.
Jero: ¿qué?
Reclutador2: No los conoceré yo a ustedes, cuando vienen de
manga larga es que están llenos de esas mierdas.
Reclutador1: No le podés hablar así.
Reclutador2: Bien que puedo (a Jero) Quitate la camisa pués.
Jero: Esstuve hace años, ahí donde vivo casi a la fuerza para uno ahí,,
pero quiero trabajar, no voy a hacerles ninguna bronca, en
serio, se los juro.
Reclutador2: Pajas, tené tus papeles y decíle al que sigue que pase.
Reclutador1: La novia está esperando, por eso quiere formalizarse.
Reclutador2: Pajas, estos ya no se componen, y de todos modos son
órdenes de Don Ignacio, si se la dejamos pasar y de ahí se
entera nos echa también a nosotros.
Reclutador1: (A Jero) Lo lamento.
Jero: No hay clavo. (Sale. Entra solicitante 2).
Rclutador2: ¿Trajiste fotocopia de tu cédula?
Solicitante2: Si señor. (Transición a siguiente escena).
La clínica
(A la derecha, una especie de sala de consulta médica, una mujer de
aproximadamente 35 años, con bata blanca. Hay equipo médico.
Durante esta escena, continúan accionando en la escena de los
reclutadores pero en silencio y bajo perfil; algunas veces más rápidas
que otras las entrevistas, en ocasiones el solicitante se quitará la
camisa, y el mismo actor usando varias camisas y camisetas diferentes,
puede ser siempre el solicitante. )
Mujer: Buenos días Adolfo ¿Cómo estás?
Jero: Bien, gracias.
Mujer: Vamos a ver, aquí dice que querés removerte algunos
tatuajes ¿cierto? (Jero afirma con la cabeza) ¿Cuántos tenés?
Jero: Dos, bueno, tres, pero el de la espalda yo digo que no es clavo.
Mujer: ¿Clavo para qué?
Jero: Para que me den trabajo, si voy con manga corta y me corto bien
el pelo yo digo que no me piden que me quite la camisa.
Mujer: ¿Dónde te pidieron eso?
Jero: En una maquila.
Mujer: ¿Tus tatuajes son decorativos o te identifican con algún tipo
de organización?
Jero: ¿Cómo así?
Mujer: ¿Te los hiciste como adorno o para formar parte de una
mara?
Jero: Ah, nel, de adorno están bien feas esas (se corta) esas babosadas.
Mujer: (Escribiendo) Entonces son identificación de de una
organización de las denominadas maras. (Jero se encoje de
hombros). No te preocupés, aquí estamos para ayudar no
para juzgar a nadie ni causarte más problemas, te pregunto
solo porque tenemos que llevar registro estadístico.
Sigamos: ¿tipo de sangre? (Jero se encoje de hombros) ¿te
has hecho una prueba de VIH? (igual) Bueno, de todos
modos vamos a hacer un análisis de sangre para ver cómo
está tu hemoglobina, antes de hacerte cualquier
intervención.
Jero: Ya.
Mujer: ¿Te ha contado algún amigo como es el procedimiento? (él
niega con la cabeza). Muy bien. Igual que cuando te los
hicieron, la remoción provoca una gran cantidad de
pequeñas heridas que debemos hacer para extraer el tinte
especial, que está realmente por debajo de la piel, así que
en una sesión de dos horas se puede trabajar un área
aproximada de 20 centímetros cuadrados. ¿Te molestaría
quitarte la camisa para poder decirte en cuantas sesiones
podríamos remover los tuyos?
Jero: Está bueno, con usted no hay clavo doctora (se la va quitando).
Mujer: Yo no soy doctora patojo.
Jero: (Deteniendo la acción de quitarse la camisa) ¿No?
Mujer: ¿Ahora me vas a decir que le pediste ver el título al que te
los hizo? (los dos ríen con complicidad, Jero se termina de
quitar la camisa y la mujer lo evalúa sin tocarlo). Okey, yo
creo que en seis sesiones estaríamos, una cada cuatro o
cinco días.
Jero: ¿Seis?
Mujer: Si.
Jero: ¿Más de un mes?
Mujer: Si, ya cuando vamos en las últimas áreas han cicatrizado las
primeras. Tenés que tener varios cuidados para que no se te
infecten, lavarte bien, ponerte una crema que es un
antibiótico, para el dolor es opcional, antiinflamatorios. Si se
llegar a infectar alguna, que a veces sucede, tenés que
tomar antibiótico en pastillas.
Jero: ¿Y no puede ser más rápido? Es que, me urge conseguir trabajo.
Mujer: Ay patojo, es que no es recomendable forzar tanto al
organismo. Podríamos hacerlo en cinco, lo menos lo menos
en cuatro sesiones.
Jero: Porfa. ¿Y puedo empezar hoy?
Mujer: Hoy solo avanzaríamos con la prueba de sangre. ¿Traés el
dinero).
Jero: (Confundido) No. Es que, no sabía, la verdad creí que era gratis.
¿Y cuanto cuesta?
Mujer: Mirá, el servicio si es gratis, solo se cobran los materiales y
las medicinas, que te las incluímos en el presupuesto para
asegurar que te las pongás, y en ningún lugar son más
baratas.
Jero: Y estos ¿Cómo en cuanto saldrán?
Mujer: (Escribe en un papel) Con estos datos te hacen el
presupuesto en recepción, no es muy caro en realidad pero
tampoco es gratuito.
Jero: Bueno pues, gracias doctora, digo, seño.
Mujer: Que te vaya bien Adolfo, por aquí te esperamos.
Jero: Nos vemos. (Sale).
(Los escritorios donde accionan Reclutador2 y Mujer deberán estar de
espaldas uno del otro, y al terminar la escena de la clínica, la mujer
voltea hacia él, que hace lo mismo, ella lo ve y hace un sutil gesto de
reproche y él solo se encoje de hombros. Transición a siguiente escena.
Suena el timbre de un celular)

La llamada
Joss: (Al teléfono) Aló. ¿Qué onda, que te dijeron? (Pausa) Si yo no sé
de donde sacaste que era gratis. Esperáte al quince y yo te
lo doy. (Pausa) ¿Y entonces que vas a hacer? (Pausa) No
hombre, no jodás, así nunca te vas a safar. (Pausa) Si, si lo
tengo, esperáte (busca un número en el directorio del
teléfono) cinco cuatro siete dos seis seis cinco cero. Juráme
que es la última vez. (Pausa) Jurámelo por tu mamá. (Pausa)
Ahora jurámelo por tu hijo.
(Transición a siguiente escena)

El último robo
Una mujer en un cajero automático realiza una operación, Jero se acerca
y la toma por la cintura, le habla bajo.
Jero: Tranquilita pues, compórtate y no te pasa nada, dame un mi beso
como que somos amiguitos y sacá toda la feria que tengás
de todas las tarjetas o aquí mismo te mato mamaíta.
Tranquila pues, no pongás cara de susto que no queremos
que nadie se dé cuenta ¿verdad mi amor? Dale pues,
primero es que ya tenés metida, va, tu clave pues… retiro…
monetarios… viste que no soy analfabeto, si los cacos somos
gente con educación mamita, mil, así está bonito ve, a ver,
te ayudo con eso (toma el dinero y se lo guarda, de vez en
cuando ve alrededor). Otra vez, otros mil.
Mujer: No me va a dar más.
Jero: Probá mamaíta (ella acciona, solo se escucha el beep del cajero
denegando la transacción). Va, las otras tarjetas pues.
Mujer: Solo tengo otra y ahí solo hay trescientos y pico, si quiere
registre mi bolsa.
Jero: Metela, a ver si es cierto que solo trescientos tenés, enseñáme el
saldo (accionan rápidamente igual que antes, él ve la cifra
en la pantalla) Va, sacá los trescientos pues y con casaca
dame el celular (accionan). Vaya pues mi amor, dame un mi
beso pues, si teníamos tiempo de no vernos (la besa en la
boca por la fuerza, se va burlón y triunfante. Transición).

La remoción
(En la clínica nuevamente, Jero está sin camisa, sentado, tiene vendados
2 brazos y la mujer trabaja en la espalda. Durante el diálogo,
eventualmente Jero dará señales de dolor).
Mujer: Tan preocupado que te vi por el dinero la primera vez y tan
rápido que lo conseguiste. ¿Cómo hiciste?
Jero: Una mi amiga me lo dio.
Mujer: Ahora que consigás trabajo ya sin los tatuajes, no vas a
tener que “pedirle” a tus amigas.
Jero: Simón. Si. (Pausa larga)
Mujer: ¿Te está doliendo mucho? ¿Estás llorando? (él se encoje de
hombros) ¿por qué?
Jero: No sé.
Mujer: ¿Tenés miedo?
Jero: Si.
Mujer: ¿De qué?
Jero: No sé.
Mujer: ¿Por qué decidiste quitarte los tatuajes?
Jero: Ya sabe, para conseguir trabajo.
Mujer: ¿Si pero porqué te dio por buscar trabajo?
Jero: Mi chava está esperando un chavito.
Mujer: (Pausa) ¿Y no han pensado en… tener hijos un poco mas
adelante? ¿Cuándo ya tengás trabajo? Además estás re
jovencito ¿Cuántos años es que tenés?
Jero: Ya le dije.
Mujer: Si pero no me acuerdo.
Jero: Diecinueve, y ya no me diga cosas porfa, ya está igual que la
Josselyn, que se lo quería sacar, la convencí de que no pero
tengo que conseguir trabajo rápido, sino capaz que dispone
sacárselo.
Mujer: Y ella ¿cuántos años tiene?
Jero: Seño.
Mujer: ¿Si?
Jero: ¿Le falta mucho?
Mujer: Un poco, ¿tenés prisa?
Jero: No, hambre.
Mujer: Esto es cansado y tardado, por eso era mejor que fueran
mas sesiones, yo puedo parar si querés pero tenés que venir
una vez más.
Jero: Nel, no, ya quiero que se acabe esta onda. Las costras de este ya
me empezaron a picar. Yo digo que los que contratan no son
mages y saben que las cicatrices son de tatuajes ¿vaá seño?
Mujer: Supongo, algunos talvez si, otros… la verdad no tengo idea.
¿Todavía tenés antibiótico?
Jero: Simón. Si. ¿Usted no se pone de malas cuando tiene hambre?
Mujer: Un poco, me da como desesperación.
Jero: Yo ya me estoy poniendo como la gran.
Mujer: ¿Querés que paremos y terminamos la otra semana?
Jero: Nel, ya le dije que ya quiero terminar, el hambre me la aguanto,
solo le conté por contarle no por quejarme.
Mujer: Bueno, quince minutos si mucho.
Jero: El de la espalda como me dolió cuando me lo hicieron.
Mujer: ¿Te confieso algo que nunca le he confesado a ningún
paciente?
Jero: Simón. (La mujer se quita un lado de la bata y se descubre un
hombro, dejando ver un tatuaje decorativo, mediano, muy
colorido y bien hecho, algo como mariposas o flores. Jero ríe
fuerte) ¡Ve la seño! ¿Ese de que mara es? (ríen los dos, ella
le hace señas de bajar el volumen, se cubre).
Mujer: Es nuestro secreto.
Jero: Me hubiera contado antes, hubiera pedido trabajo aquí ¿no me
contrata de su ayudante?
Mujer: No sería mala idea, pero ya nos vamos a ir el otro mes para
El Salvador este aparatito y yo, ahí donde nos mirás vamos
rotando por Guatemala, El Salvador, Honduras y Nicaragua.
Jero: ¿Y por qué no mejor tienen uno en cada país pues?
Mujer: No tiene tanto dinero la asociación, y no por mi pago sino
que el aparato es bastante caro.
Jero: ¿Entonces en esos otros lados tampoco le dan chance a uno si está
tatuado?
Mujer: Igualito que aquí m´hijo, igualito.
Jero: Ya m´hijo, si a usted ahora ya no la miro doña, ahora que ya vi que
es de la mara mariposa más bien le voy a tirar barrio (ríen).
Pero si me contrata de su ayudante me voy con usted para
todos lados.
Mujer: No jovencito, usted se queda aquí con su novia y su hijo.
Jero: (Pausa) Mi hijo, simón.
Mujer: Adolfo estás temblando ¿estás bien?
Jero: No sé, ya le dije que tengo como miedo, bien raro, no sé.
Mujer: Ya va a pasar, todo pasa patojo, todo pasa.
El tuerce
(Jero sale de la clínica. Mientras ocurre la siguiente escena, siguiendo la
misma fórmula anterior, la Mujer atiende a otro paciente en silencio, de
manera similar. Jero vuelve a aparecer en escena, la atraviesa
caminando cuando se escuchan gritos de alarma, gente que dice frases
como “allá, allá” “el de gorra” y la voz de Chitío y otro asaltante
gritando “quítense” “a un lado”. Aparece el que no es Chitío y atraviesa
corriendo la escena, casi atrás Chitío gritando como ya se indicó, cuando
ve a Jero se detiene un segundo desconcertado, se oye la voz del otro
que dice “Corré Chitío”, él corre y sale de inmediato y Jero, tras dudarlo
un segundo, corre tras ellos. Se escuchan sirenas de radiopatrullas).

La cárcel
Jero, el Crudo, Chitío y los otros actores hombres de que se haya
dispuesto para la puesta, mínimo 2 mas. No tienen zapatos, no hay
mobiliario, algunos de pie, otros sentados, alguien podría estar
acostado. Entra el Crudo).
Crudo: (Cínico) Ve tan lindos los cerotes ¿me extrañaban muchá?
¿me vinieron a acompañar? Qué buena onda son.
Chitío: (Cordial) ¿Qué putas?
Crudo: (Lo golpea en el estomago) ¡Que putas te pregunto yo a voz
hijuelagran puta! La misma noche que me balearon te fuiste
a poner en cuatro con MIS conectes mierda, MIS BISNES
¿Qué creés, que no sé? ¡Al día siguiente ya me lo habían
contado! Así calladito me gusta, nada de gritíos maricones,
y ahora, para no perder la costumbre, van a trabajar para mi
mierdas, agradecidos tienen que estar que ya tienen trabajo.
Hay les aviso al rato en que anda la onda. (A Jero) Y vos
cerote no te vergueo porque me dijeron que no andás en
nada y que le metiste gol a la ricota de la Josse. ¿Qué putas,
como no fuiste a Aprofam a que te regalaran condones
mano? O me hubieras dicho a mi cerote, falta de confianza.
Jero: Va, ya hombre, no (se corta).
Crudo: ¿No qué?
Jero: Ya hombre.
Crudo: Vivos pues, que aquí si culo dormido no tiene dueño (ríe y
sale).
Chitío: ¿Y vos por qué corriste mula? (Jero se encoje de hombros)
Pendejo. ¿Y esas tus mierdas (refiriéndose a los vendajes de
los brazos. Jero se descubre uno, el que ya está en fase de
caer las costras). Ve pues, que hecho mierda queda ese
chunche. ¿Y el de la espalda, también?
Jero: Simón, pero ese no se me ha curado todavía y me está doliendo.
Me tengo que echar una pomada para que no me salga pus.
Asaber cuanto tiempo me voy a volar aquí, estos cerotes no
me van a dar ni mierda para echarme.
Chitío: Nel.

La visita
(Jero sentado. Entra Josselyn con un abdomen de 6 meses de embarazo,
al verlo se altera y se le va encima a golpes.)
Joss: ¡Cerote, cerote pajero! ¡Pajero de mierda! (Jero logra controlarla)
Te dije que mejor me lo sacaba, te lo dije a tiempo, ahora ya
está bien grande, se mueve y todo, ahora ya me da pena y
todos modos ya no se puede. Sos un pajero de mierda.
Jero: Joss te lo juro que yo no iba con aquellos, yo venía de donde la
doctora, si vos me viste el día anterior mano, vos sabés que
yo andaba buscando otra mierda, mirá, si ya me lo
terminaron de quitar también el de la espalda. (Le muestra
levantándose la playera, ella hace un gesto de mucho
desagrado mezclado con sorpres) ¿Viste?
Joss: Si, pero tenés lleno de pus, ya yede.
Jero: Simón, ya no aguanto el dolor.
Joss: ¿Y no te puede ver un doctor pues?
Jero: Nel.
Joss: ¿No hay doctor?
Jero: Simón pero si voy me van a echar color que estaba tatuado y así
menos voy a salir.
Joss: Pero peor es que te murás.
Jero: Ya así, ni que se muriera uno por un raspón. ¿Vos podés traerme
de una pomada que venden ahí donde la doctora?
Joss: Voy a ver cómo le hago. ¿Y cuándo vas a salir?
Jero: Saber. Pero todavía te faltan tres meses ¿vaá?
Joss: Simón.
Jero: ¿Y cómo estás? (Joss se encoje de hombros) ¿Y el chavito?
Joss: Bien digo yo. Pero se me hinchan un montón las piernas, peor ya
en la tarde con tanta hora parada.
Jero: Hay vas a ver que salgo antes que él.
Joss: Ya me voy, el sábado te traigo la pomada. ¿Le avisaste a tu papá?
Jero: Nel.
Joss: ¿Le aviso?
Jero: Nel.
Joss: Tal vez te ayuda.
Jero: Ya te dije que nel. Vení para acá. (Le estampa un beso en la
boca). Sino no es visita conyugal.

La litera
(Una litera es lo único en escena, con la luz concentrada en ella, donde
están acostados, arriba El Chitío, abajo Jero, éste último temblando).
Chitío: Vos cerote ¿Qué es la tembladera mano?
Jero: Como que tengo calentura.
Chitío: (Desde arriba se alarga y le toca la frente, se limpia la mano
del sudor del otro) Puta, estás hirviendo vos. No seas necio,
te tiene que ver el doctor. (Pausa. Se levanta y va hacia un
lateral) ¡Poli! ¡Poli! ¡Poli! ¡Este mi roomate se está muriendo!
(Transición).

Clínica de la carcel
(Jero está dormido en una cama, aunque sea la clínica no deja de tener
condiciones de preventivo. Tiene incluso suero. Entra Josselyn, ya no
tiene abdomen de embarazada, le toca la frente, mira el lugar, él
despierta, se le nota muy mal en toda la escena).
Jero: ¿Qué onda? ¿Qué bueno que te dejaron entrar? (Repara en la
ausencia del estómago) ¿Qué onda?
Josse:Ya nació.
Jero: Si faltaban tres meses.
Josse:Nació de siete.
Jero: ¿Y qué onda? ¿Cómo está?
Josse:Bien.
Jero: ¿Y qué, güiro o güira?
Josse:Nene.
Jero: Nene. Ve pues, ya somos papás.
Josse:Se lo di a unos señores.
Jero: ¿Cómo así?
Josse:Lo di, va a estar mejor.
Jero: ¡Pendeja! ¿No sabés que les quitan pedazos para ponérselos a los
gÜiros gringos que están enfermos? ¡Les quitan unas
mierdas de los ojos y los dejan ciegos o los matan! ¡Cerota,
estúpida, pendeja! ¡Te dije que voy a conseguir trabajo, si ya
voy a salir! ¡Ala gran puta!
Josse:No hombre, si viven aquí, hasta le fui a dar de mamar un par de
veces, es que ellos estaban necios que es para que tenga
buena salud dicen, pero ahora me saco la leche con un
aparato que me dieron y la pasan trayendo todos los días, lo
miro y todo, pero no lo cargo, y lo tienen bien chilero.
Jero: Pues yo se los voy a ir a quitar, es MI hijo ¿me oíste? Vos no tenías
derecho a regalarlo, capaz que se los vendiste. Cerota.
Josse:¡El cerote sos vos! ¿me oís? Con ellos está bien y si algún día salís
no te voy a decir quiénes son ni donde están. Ya me voy y
ojalá te murás oíste, para que no salgás solo a chingar. (Se
va).
Jero: (Se incorpora para seguirla) ¡Josselyn! ¡Josselyn! (No logra
ssotenerse en pie y cae al suelo. Intenta levantarse un par
de veces pero no lo logra. Transición).

El Velorio
(Una banca o dos sillas. Sentadas, vestidas de negro, la mujer y
Josselyn).
Joss: (Le entrega un frasco) Tenga, ya nunca se la pude dar, está
nueva.
Mujer: ¿Has visto al bebé?
Joss: Si, todavía pasan trayendo leche, me llevan comida y leche en
polvo, para que me siga saliendo a mi, quieren ver si llego al
año,, pero es bien cansado. Nos llevan montón de comida,
hasta alcanza para mi mamá.
Mujer: Está bueno que comás bien.
Joss: Si, está bueno, supongo.
Mujer: Ya regresaste al trabajo, supongo.
Joss: Ya.
Mujer: ¿Y qué tal? (Josselyn solo se encoje de hombros). Contáme
una cosa ¿por qué le decían Jero?
Joss: Por Jeroglífico, que nadie lo entendía.

FIN

También podría gustarte