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HECHOS JURIDICOS

Se denomina hecho jurídico en sentido amplio a un acontecimiento que tiene


trascendencia en el ámbito del derecho, es decir, se modifican ciertos estados
jurídicos iniciales desde el punto de vista legal.

Una norma jurídica parte siempre de un presupuesto de hecho, para posteriormente


regular las consecuencias que ello tiene en el área del derecho. El presupuesto de
hecho de la norma es un hecho jurídico. Es importante distinguir, dentro de los
hechos jurídicos en sentido ámplio, los llamados actos jurídicos y los hechos
jurídicos en sentido estricto. Un hecho jurídico en sentido estricto no tiene por qué
ser voluntario ni controlable por la persona, mientras que en un acto jurídico, la
voluntad de la persona es esencial. Por lo tanto, todos los actos jurídicos son hechos
jurídicos, pero no todos los hechos jurídicos son actos jurídicos

Es habitual que en derecho procesal se establezca que una sentencia judicial


explique dos aspectos: hechos jurídicos que se entienden probados, y fundamentos
de derecho a aplicar a tales hechos. Así, el fallo o sentencia vendrá fundamentado
por estas dos categorías.

* Ejemplos de hechos jurídicos:


o La muerte
o La promulgación de una Ley.
o El Nacimiento de una persona.
o Una declaración de guerra.
o Una catástrofe natural.
o Una catástrofe humana (genocidios, golpes de estado etc)

* Ejemplos de hechos jurídicos que además son actos jurídicos:


* Nota: todos los actos jurídicos son además hechos jurídicos pero no a la
inversa.

Por ejemplo:

*
o La firma de un contrato.
o El otorgamiento del consentimiento matrimonial.
o Otorgar testamentoo Las inscripciones registrales
LA PERSONALIDAD DEL SER HUMANO, INICIO Y FIN.

Comienzo de la personalidad de las personales naturales. El nacimiento y su prueba.


La persona por nacer. Situación del concebido y de la persona por concebir. Cálculo
de la concepción. La personalidad del ser humano. "Todos los individuos de la
especie humana son personas naturales" (C.C art. 16), y aunque no lo diga
expresamente la ley, sólo los seres humanos son personas naturales. Como hemos
visto en el capítulo anterior, no siempre ha sido así: en otras épocas, el Derecho ha
negado personalidad a ciertas categorías de seres humanos (esclavos, muertos
civiles), y la ha atribuido en cambio a los animales (a efectos honoríficos o penales).
El tema central es la determinación del comienzo de la personalidad del ser humano.
En el próximo se tratará de determinar el momento de la extinción de esa
personalidad.

COMIENZO DE LA PERSONALIDAD DE LAS PERSONAS.

INDIVIDUALES: TEORÍAS

Todas las teorías propuestas al respecto coinciden en señalar como inicio de la


personalidad del ser humano, el momento en que éste adquiere una vida
independiente. Las divergencias surgen porque no existe acuerdo acerca de cuándo
el hombre adquiere vida independiente. Las principales teorías son:

I. teoría DE LA CONCEPCIÓN.

Sostenida por Casajús en España y con remotos antecedentes en la doctrina de los


Santos Padres, esta teoría sostiene que la vida humana independiente comienza en
el momento de la concepción y que por ello la personalidad jurídica del ser humano
debe comenzar en dicho momento. En la práctica esta teoría no ha sido consagrada
en el Derecho Positivo, especialmente, por la gran dificultad que existe para
determinar y probar el momento de la concepción.
II. teorías DEL NACIMIENTO.

Sostienen que la personalidad del ser humano comienza en el momento del


nacimiento por considerar que con anterioridad el hombre no tiene una vida
independiente. Sus partidarios más extremistas llegan a sostener que el feto no es
sino una parte de la madre, unaportio mulierís, lo que es falso puesto que
biológicamente está demostrado que el feto no es parte del organismo de la madre
y desde luego, tiene una vida diferente de la vida de ella. Estas teorías del
nacimiento, a veces atenuadas o complementadas, han predominado desde los
tiempos de Roma. Dentro de ellas podemos distinguir:

1° La teoría de la vitalidad, que sólo exige que el feto nazca vivo para reconocerle
personalidad. Esta teoría es, entre todas las teorías del nacimiento, la que
predomina desde los tiempos de Justiniano.

2° La teoría de la viabilidad, que exige que el feto nazca vivo y viable (vitae-babilis
literalmente: hábil para la vida), o sea, apto para vivir fuera del seno materno, ya
que estima que, caso contrario, no existe una vida humana independiente. Acogieron
esta teoría entre otros, el Código Civil francés, el italiano de 1865 (no el vigente) y
el español.

El gran inconveniente que presenta esta teoría deriva de la doble dificultad de


determinar si un niño nacido vivo es viable o no, y de probarlo después. Para obviar
tal inconveniente, el Código Civil italiano de 1865 establecía una presunción jurís
tantum de viabilidad, o sea, que consideraba que todo niño nacido vivo había nacido
viable, salvo que se probara lo contrario. El Código Civil español estableció en
cambio una presunción juris et de jure de que es viable todo niño que sobrevive 24
horas al nacimiento y de que no lo es, el que no sobreviva dicho plazo. Este sistema
de determinar la viabilidad por la supervivencia del niño, no corresponde a la
realidad, ya que puede ser viable un niño que muera a las pocas horas de nacido (p.
ej.: por un accidente), y no serlo un niño que fallezca al segundo o tercer día de
nacido. y La teoría de la figura humana que sostenía que, en todo caso, acéptese la
teoría de la vitalidad o de la viabilidad, la personalidad jurídica presuponía que el
nacido tuviera figura humana. Con ello se pretendía excluir a los "prodigios" o
"monstruos", pero hoy día nadie adhiere a la teoría porque se sabe que es la
generación y no la figura lo que determina la condición humana del nacido.
EL NACIMIENTO Y SU PRUEBA.

Entre nosotros, la personalidad jurídica del ser humano, a reserva de lo que diremos
respecto de las personas por nacer, comienza con el nacimiento, o como dice el
B.G.B. con la terminación del nacimiento siempre que el niño nazca vivo, aunque no
sea viable. Así pues, en principio, se ha acogido la teoría de la vitalidad. Conviene
aclarar que no obstante las expresiones equívocas de algunos autores, nadie ha
sostenido que la personalidad del ser

humano comienza con la inscripción en el Registro Civil. Nacimiento es la separación


del feto respecto del cuerpo de la madre, aun cuando sea prematuro (o sea, antes
del final de la

gestación normal), cualesquiera que sean los medios que se empleen para ello
(expulsión natural, intervención quirúrgica, etc.).

Corresponde a la Medicina Legal determinar si un niño ha nacido o no. La opinión


dominante es que para considerar nacido al niño, basta que éste haya salido
(totalmente) del seno materno, aun cuando todavía no haya sido cortado el cordón
umbilical. También es cuestión de hecho que corresponde resolver a la Medicina
Legal, la de si un niño ha nacido vivo o no. En Roma, los proculeyanos exigían que el
niño manifestara su vitalidad media voce (por medio de la voz), mientras que los
sabinianos, cuya tesis fue acogida por Justiniano, sostenían que bastaba cualquier
manifestación vital (aun cuando no fuera el "grito"). Modernamente, las pruebas
médico legales más frecuentes para determinar si un niño actualmente fallecido
nació vivo son las llamadas docimasias, que son diversos procedimientos para
averiguar si el niño llegó a respirar (existen docimasias pulmonares —hidrostática,
óptica, histológica—, digestiva, etc.). El medio legal por excelencia para probar el
nacimiento es la partida de nacimiento y, en su defecto, la sentencia supletoria
correspondiente.

La carga de la prueba de que el niño nació con vida corresponde a quien lo afirma, o
sea, que corresponde probar que el niño nació y que nació vivo, a quien fundamente
una pretensión en el hecho de que el niño nació vivo. En nuestro Derecho no existe
la presunción del Código Civil austriaco de que, en la duda, debe considerarse que el
niño nació vivo. Igualmente debe señalarse que quien alega un derecho que depende
del momento del nacimiento de una persona y, en particular, del orden cronológico
en que ocurrieron los nacimientos de dos o más personas, tiene la carga de probar el
momento del nacimiento y, en su caso, el orden cronológico de los nacimientos en
cuestión. No existe presunción alguna en esta materia.

PERSONA Y SUJETO DE EL DERECHO.

Si se entiende por sujeto de derecho aquel que actualmente tiene un derecho o


deber, el concepto de persona es más amplio porque comprende también a quien
puede llegar a tener un derecho o un deber, aunque actualmente no lo tenga. Pero
tomada la expresión, ¨sujeto de derecho¨ en abstracto, o sea, sin referirla a ningún
derecho o deber concreto, viene a ser sinónimo de persona.

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