Los padres siempre quieren lo mejor para sus hijos, desean de la forma que ellos consideran la

correcta, garantizar su prosperidad en tiempos de incertidumbre, tener alguna seguridad de

que en el futuro todo funcionara correctamente para su descendencia y si bien probablemente
no habrá abundancia (la cual es siempre el objetivo ideal) por lo menos se evitara la escasez.
Lamentablemente, como ya lo he dicho, a veces la forma que los padres consideran la correcta
no es precisamente… la correcta, sino todo lo contrario…

He aquí mi caso y estoy seguro que el de muchas personas más tanto en nuestro país como
alrededor del mundo.

Mi nombre es Adolfo Román Jiménez, naci el 16 de enero de 1988 entre las 16:00 y las 17:00
horas, soy hijo de Antonio Román Pérez y Patricia Jiménez Mora, no tengo mas hermanos ni
hermanas, aunque me hubiera gustado tener por alguna razón, hermanas mayores.

Me cuentan, ya que no lo recuerdo completamente, que durante mi infancia fui un niño

demasiado inquieto que no podía estar sentado por mucho tiempo, que sacaba todo de los
cajones y alacenas donde estuviera (algo que aun me da mucha curiosidad, saber que hay,
pero por razones de mi edad evidentemente ya no hago) , me gustaba inventar cosas, mi
madre me platico que alguna vez cuando yo era niño estaba muy preocupado de que los gatos
callejeros bajaran en la noche al patio de nuestra casa, asi que construi una maquina simple
cuyo nombre “El atrapa-gatos” deja mas que claro para que fue inventada, me cuenta mi
madre que a partir de que puse eso en la escalera por donde bajaban, jamás se volvieron a oir
en la noche. Me fascinaban series como “Weird Science” o “Beakman’s World”, las películas de
Disney o de dibujos animados que estuvieran dirigidas al publico infantil nunca fueron mucho
de mi agrado pero el cine de acción o de comedia me hipnotizaba, prefería ver las películas de
Jean-Claude Van Damme o de Jim Carrey, el cual desde “The Mask” se convirtió en mi actor
favorito. Fue gracias a Carrey y a Van Damme que me nació el primer sueño vocacional que
tuve que fue el ser actor de cine y quería serlo ya que en alguna ocasión escuche de boca de
mi padre que eran los actores quienes decidían como hacer una película, me di cuenta ya hasta
mi adolescencia temprana que lo que yo quería en realidad ser, era director de cine. Como
verán de niño, algunos de mis gustos no fueron realmente los de uno.

Asi pasó mi infancia, ingrese al kinder “Emanuel Kant” a la edad de 4 años, estuve 2 años ahí
que transcurrieron sin complicaciones, no recuerdo exactamente como fue, solo recuerdo que
me agradaba mucho, me viene a la memoria un recuerdo en el que ya eran vacaciones, me
levante a la hora que acostumbraba y le dije a mi madre que ya quería irme a la escuela. De
ese tamaño me solia gustar.

Todo eso no duro mucho lamentablemente, cuando entre a la primaria fue en el colegio
“Gustavo Adolfo Becquer”, el primer dia lo recuerdo muy bien, quería regresarme al kínder, no
quería ir a esa escuela, era extraño para mi estar sin mis amigos, me sentí triste… pero de
todas maneras tuve que ir, fue esa la primera escuela de la que me corrieron, debido a que era
yo muy inquieto, “se la pasa corriendo” recuerdo que alguna vez le dijo una profesora a mi
madre.

En fin, la segunda escuela a la que asistí en la primaria fue al instituto “Narciso Bassols”, desde
ahí es cuando tengo la mente mas clara sobre cuando empezaron muchos de los problemas
que después tendría que retomar ya siendo casi adulto y reflexionar sobre ellos con mayor
intensidad, conocimiento pero sobre todo experiencia.

Fue durante mi estancia en el instituto cuando debido a la gran cantidad de problemas que
generaba (peleas con mis compañeros, me saltaba las clases y me iba a meter a otros salones a
jugar con los demás, cuando me preguntaban de que salón era o como me llamaba le decía
que no sabia, no ponía atención en las clases, etc) mis padres decidieron llevarme con el Dr.
Jesús del Bosque Garza, psiquiatra, el cual les fue recomendado por quien fuera mi pediatra el
Dr. Alfonso Buendía Hernández, ambos personas honorables a las cual hoy en día les sigo
teniendo mucha admiración, aprecio y respeto sobre todo. Fue el Dr. Jesus del Bosque quien
me diagnóstico con TDAH (Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad) y fue este uno
de los momentos claves de mi vida el cual no puede comprenderse del todo sin que antes
sepan quien es Antonio.

Mi padre, Antonio Román Pérez (yo me refiero a el simplemente como Antonio ¿Por qué?,
pues porque asi se llama, ja) es alguien que como todos los padres siempre tuvo altas
expectativas y planes para su hijo, pero no se daba cuenta que como a todas las personas en el
mundo, estas expectativas y planes se veian afectadas directamente tanto por sus miedos
como por sus seguridades, por lo que conocía y por lo que no, por la información y la
desinformación también, ¿Que fueran malos o estuvieran diseñados para hacerme daño? Por
supuesto que no, o al menos el no sabia que pudieran llegar a tener ese efecto.

Despues de que fui diagnoticado con TDAH, se me receto un medicamento para este, hoy en
dia se que probablemente hubiera sido mejor que no se me hubiera recetado nada y lo mejor
hubiera sido canalizarme a un deporte o algo para lo que tuviera habilidad innata, me gustan
mucho los idiomas y era muy bueno yo en ingles, pero no fue asi, se decidió que tomaria el
medicamento y continuaría la escuela, hoy en dia siento que fue algo similar a un castigo mas
que un apoyo, fue como tratar de que me desarrollara en algo que además de que no me
gustaba, no era bueno para ello y para lo que me gustaba y era bueno no se me apoyaba
como debía de hacerse, ¿cual fue el resultado eventual? Pues un sentmiento grande de
frustración, ya que lo que hago no me gusta y no se hacer lo que quisiera.

Se me termino de suministrar el medicamento después de algunos meses, para este tiempo

me corrieron del instituto Bassols, lo cual me hizo conocer la escuela que seria la definitiva
desde mi 3er al 6to año de la primaria, el “Colegio Vasconcelos”.

No lo se porque, pero hoy puedo decir que el Colegio Vasconcelos es hasta el momento la
mejor escuela en la que he estado y puedo también decir que es el mejor colegio de toda el
area de Cd. Nezahualcoyotl sin temor a equivocarme, inscriban a sus hijos ahí. No fue un lugar
donde alguna vez haya tenido algún problema grave, hice amistades con las que aun hoy en
día me frecuento, a pesar de que mi conducta siguió siendo demasiado inquieta y ya
comenzaba con ciertas objeciones a los profesores, fueron capaces de tolerarme demasiado lo
cual a los largo de los 4 años que cursé me llevo a obtener el promedio global mas alto que he
tenido académicamente que fue de 8.6 .

Terminando Vasconcelos mí padre y yo optamos por escoger algo diferente, seguía la

secundaria, la etapa donde comenzaron todos los problemas que prácticamente
revolucionaron mi vida de una buena manera, la primera escuela que escogimos fue el Colegio
“Jose Marti”.

En el colegio Jose Marti comencé a notar que me era muy fácil aprender cosas, también
empecé a utilizar mucho toda la información y cultura general que había venido reteniendo a
lo largo de mi vida, pero por alguna razón el TDAH volvió a resurgir, solo que de esto no me di
cuenta hasta mucho despues y también mis inquietudes sobre idiomas, para ese tiempo
comencé a estudiar ingles en Interlingua Lindavista.

Casi a mediados del año en el colegio Jose Martí iba yo demasiado mal debido de nuevo a mi
falta de disciplina ya que me era no muy posible concentrarme y el modo propio en el que
quería hacer las cosas, además de problemas internos que existían en la escuela ya que era
nueva y era el primer año de esta, digamos que casi el primer año de las escuelas todas
aceptan a los rechazados de las demás, ya saben, la falta de renombre, asi que debido a esto
de esta escuela no me expulsaron sino mi padre me saco y después ingrese al Colegio Patria.

Fue en el colegio Patria donde el interés que tenia por la música comenzó a hacerse mas
evidente ya para en la primeria era muy bueno en la clase y me gustaba mucho escuchar
musica, para la clase de música compre una guitarra acústica y fue ahí cuando poco a poco
comencé a tocarla. En el Patria por otro lado, la historia se comenzara a repetir, pero aunque
pareciera que la escuela no me interesa, el conocimiento si.

Despues de que la historia se repitiera y un record de 28 reportes en el colegio patria en un

semestre (el “segundo lugar” llevaba 4) termino el ciclo escolar de una forma muy triste. Asi al
siguiente siglo escolar ya no me quisieron inscribir a una escuela privada y comence con las
escuelas del gobierno, asi que me inscribieron a la secundaria “Narciso Bassols”, de la cual
también fui expulsadoa mitad de año debido a la cantidad de reportes acumulados, el
constante ausentismo y al odio que algunos porfesores me tenían ya que “era muy conteston”,
asi accedieron en la escuela a pesar de las materias reprobadas que tenia a ponerme 6 en
todas las materias con tal de que me cambiara de escuela.

La siguiente fue la telesecundaria “Justo Sierra” en la cual trabaja mi mama, debido al sistema
de la escuela que era solamente de 1 maestro y exámenes, sinceramente se me hacia muy fácil
sobrellevar la escuela y era de los mejores de mi clase, en esa secundaria termine el segundo
año de secundaria “bien”, ya que el maestro que me daba clases era una persona muy
paciente y reingrese a esta misma escuela en 3er año, pero al final también fui expulsado de
esta a mediados del año.

Cuando esto sucedió, mi padre me saco de los cursos de ingles ya que consideraba el que esos
eran premios para mi (porque me gustaban mucho) a pesar de que ya iba para ese entonces
en los niveles avanzados, una cosa que le falto ver a mi padre era que eso era algo en lo que
podía ser continuo y bueno al mismo tiempo, además de que tenia habilidad para el idioma,
hoy en dia el vive en Estados Unidos desde hace casi 7 años y a pesar de que yo nunca había
practicado realmente con nadie hablo mucho mejor que el. Tambien me saco de los cursos de
guitarra porque de igual manera, pensaba el que eran como un premio, eso fue algo que hasta
el dia de hoy le sigo reclamando… no es algo que aun haya podido superar… trataba como ya
lo dije anteriormente, de que me desarrollara en lo que no tenia talento y de que me
estancara en lo que podía sobresalir, solo que el no se daba cuenta y yo para ese entonces no
tenia la madurez suficiente como para hacérselo ver.

Finalmente ingrese a la secundaria “Leyes de Reforma” para concluir mi tercer año escolar y lo
hice con mucha dificultad, de esta escuela no me expulsaron pero si les cause algunos dolores
de cabeza a los miembros del personal, sea como sea, termine ahí la secundaria con un
promedio global de 6.8.

Para cuando hice mi examen de ingreso a la preparatoria estaba yo si, algo emocionado, pero
al mismo tiempo no me daban ganas de cursarla, eran mas bien mis deseos pasar de la
secundaria a la universidad.

Aplique para la preparatoria no. 5 de la UNAM, a pesar de lo que pudiera creerse debido a mi
bajo promedio, obtuve alrededor de 90 respuestas correctas, mas que suficientes para
ingresar a la prepa 5, la razón por la que no me quede fue el promedio menor a 7.0 que había
tenido en la secundaria, asi que tuve que ingresar al cetis numero 132, lo cual no fue
sinceramente, de nada de mi agrado.

En el cetis la historia como podrán saber, se repitió de nueva cuenta, fui expulsado a los 3
meses de iniciar el primer semestre, asi estuve lo que resto del año sin hacer nada, esto fue
principalmente a las confrontaciones que tenia con profesores en algunas ocasiones.

Despues de esa escuela aplique el año siguiente al cetis no 1, me quede en la escuela sin
ningún problema e ingrese, alrededor de igual 3 meses después de a ver ingresado, debido a
las constantes disputas que tenia con profesores los cuales me catalogaban de “líder negativo”
fui también expulsado de la escuela debido a las bajas calificaciones que tenia y
confrontaciones también con mis compañeros.

Para ese entonces se me había ocurrido la idea de cursar la preparatoria abierta, se lo platique
a mi madre y no estuvo de acuerdo ya que contaba con cierta mala reputación, sobre si
podrías entrar o no a la universidad con esa preparatoria, lo deje entonces y me pase el
siguiente año sin hacer absolutamente nada, a pesar de mis intentos por persuadir a mis
padres para que me permitieran ingresar a estudiar música e idiomas mientras comenzaba el
siguiente ciclo escolar, las experiencias pasadas con las ecuelas les decían que seria no mas
que una perdida de dinero y tiempo, asi que nunca ingrese de nuevo a completar mi teacher`s
en ingles o mis estudios de música.

La cuarta escuela fue una preparatoria oficial a la cual me inscribi sin problemas ya que era
nueva y necesitaban alumnado, para finales del 3er mes, estaba en esa escuela muy bien,
había ingresado con muchas ganas y llevaba un promedio de 8, mi madre se encontraba muy
satisfecha con mis resultados, pero mi necesidad de expresarme y debatir en clases no me
permitia poder encajar de nuevo, para ese entonces había adquirido una gran pasión por la
Filosofia, la cual demostraba confrontando mucho a mi profesora de Logica que a decir verdad
era una mujer que carecia bastante de esta ultima. Fue en esas épocas a causa del estudio de
la filosofía cuando comenze a entender muchas cosas y a poder debatir apropiadamente y con
argumentos solidos, como siempre, el poder estaba en otras personas y no en mi, asi que
decidieron que seria correcto expulsarme debido a la falta de respeto por la institución y
algunos otros problemas que habían sucedido.

El dia que regrese de la expulsión, simple y sencillamente me desplome y perdi toda la

esperanza de poder algún dia concluir, por lo menos el primer semestre de la preparatoria, y
ya no digamos el ingresar a la universidad, era un sueño eso.

Finalmente, para hacer un ultimo esfuerzo, estudie en la preparatoria numero 15 del estado de
Mèxico, ahi conclui por primera vez el primer semstre de prepa, pero a pesar de que participe
en los coloquios de filosofía y algunas otras actividades culturales mas, también fui expulsadoa
mitad del segundo semestre. Simplemente tire la toalla ese dia y decidi que seria mejor
dedicarme a otra cosa.

Ya para ese entonces vivi en Estados Unidos con mi padre alrededor de 3 meses y trabaje
empaquetando palomitas de maíz, pero no aguante el vivir alla, extrañaba mucho mi país asi
que decidi regresarme, al momento de regresar encontré trabajo en un call center llamado
telvista, del cual debido a la depresión por la que atravesaba me corrieron ya que alguna vez
utilize un teléfono para platicar con mi padre en un momento en el que no lo debi de haber
hecho.

Asi fui también mesero, ayudante de mecanico, de taquero, otra vez en un call center y en
otro, aunque el trabajo que mas me gusto fue el del programa amigos en el aeropuerto de la
ciudad de mèxico, era como orientación dentro del aeropuerto a los turistas, lamentablemente
solo duro el periodo vacacional.

Asi eventualmente ingrese a la preparatoria abierta, sobre todo por mi edad y comenze a
hacer exámenes, para mi examen de filosofía contacte a Lutz Keferstein, un Doctor en Ética de
la UNAM, el accedió a darme clases privadas y convenci a mi padre de que me las pagar para
poder pasar el examen, fueron dos meses de clases y yo estaba enajenado prácticamente con
las enseñanzas de Keferstein, pero mi padre al final de esos dos meses ya no accedió a
pagármelas y terminaron.

Como tampoco nunca fui constante en eso, al principio llevaba solo alrededor de 3 examenes
aprobados de las 33 materias que debía… seguía con la esperanza por debajo.

Asi un dia en los que me ponía a leer la wikipedia en el internet, leia la biografia del astrofísico
británico Stephen Hawking, ya que para ese entonces estaba interesado en la Fisica Nuclear y
trataba de entender como funcionaba un hoyo negro, lei entonces que Hawking en alguna
ocasión cuando comenzaba su paralisis, cayo de unas escaleras y se golpeo fuertemente en la
cabeza, entonces Hawking preocupado de que su IQ se hubiera de alguna forma dañado ya
que era eso de lo que el vivía, acudió a una organización llamada Mensa a resolver un examen
de IQ.

Yo no tenia idea de que una asociación de superdotados pudiera existir, asi que me puse a
investigar sobre eso y encontré que entre las organizaciones de gente superdotada que
existían aquí en el país se encontraba la fundación Telegenio. Asi que decidi unirme a su grupo
de MSN (si cuando todavía existían los grupos de MSN).
Fue de esa manera como conoci a Antonio Rada, con el cual tiempo después entable una
amistad debido a que cuando trabajaba de mesero alguna vez me di cuenta que no tenia
dinero para nada y comenze a interesarme en la ciencia económica y desde que Toño Rada es
egresado en Economia, decidi preguntarle cosas básicas sobre como administrar el dinero
adecuadamente, etc, a lo que Toño me ofreció impartirme clases privadas sobre economía
básica y a lo cual yo accedi, para ese entonces ya trabajaba yo en un call center bilingüe, de
nuevo.

Mientras se dieron las clases me di cuenta de que no solo nos enfocábamos a la ciencia
económica sino a muchas otras cosas que tenían que ver con mi persona, como sentimientos,
salud física, etc… poco a poco Antonio y yo nos fuimos volviendo mas amigos y el mas que yo
me ayudaba para que fuera siendo una persona integral, algo que tomo su tiempo, ya que es
difícil cambiar totalmente de un dia a otro.

Me di cuenta paulatinamente de los cambios favorables que había tenido en mi conducta, eso
debido tanto al apoyo de toño como al factor de que ya no vivía yo con mis padres, también
influyo el vivir solo (ya que a partir de los 18 años comenze a vivir solo, por las diferencias que
tenia con mis padres) y tener que valerme en muchas ocasiones por mi mismo dentro del
mundo laboral, en el cual descubri también muchas cosas negativas, ejemplo yo pensaba que
estaba mal burlase de los demás a sus espaldas, asi que no lo hacia, pero cuando llegue al
mundo laboral me di cuenta que era algo que sucedia normalmente.

Para el finales del 2008 yo trabajaba en este call center y ya había tomado mis clases de
economía, estaban las olimpiadas de Beijing en ese entonces, y ver a Michael Phelps ganar 8
medallas de oro y saber que fue un joven que también había sido diagnosticado con TDAH, me
pego sobremanera, fue tanto el impacto que me dio que recordé los tiempos en lo que yo
nadaba (cuando era niño practicaba natación) y de igual forma comenze a nadar de nuevo y
aunque no me volvi profesional era yo muy constante y eso junto con mi entrenamiento, me
llevaron a incrementar demasiado mi nivel en poco tiempo, los entrenadores en la alberca me
felicitaban ya que decían que le echaba muchas ganas, pero eso por otro lado me llevo a
descuidar mi trabajo, asi que para noviembre me quede sin empleo y por consiguiente sin
dinero para seguir nadando lo cual hizo que dejara de hacerlo. 2 semanas después consegui
otro trabajo en el cual solo estuve 2 semanas ya que la empresa quebró de repente, un dia nos
dijeron que nos tomaramos unas vacaciones y nunca nos volvieron a llamar. Comenze a buscar
trabajo de nuevo pero en ningún lugar me recibían ya que no tenia el certioficado de
preparatoria.

Asi el dia de mi cumpleaños numero 21 me levante en la mañana y el primer pensamiento que

me llego ese dia al cumplir el 1er año de mi tercera década vivo, fue que nunca asistirua a la
universidad, asi que en vez de festejar me puse a trabajar y hacer un plan minusicioso sobre
como terminar la escuela, ese mismo dia Antonio Rada me llamo para felicitarme por mi
cumpleaños y le platique los planes que tenia, asi que me apoyo en todo eso que me había
propuesto.

Me organize, reuni dinero y comenze a solicitar exámenes de la preparatoria abierta, los 30

que me faltaban para concluirla, todo estaba programado para terminar en junio-julio y con
planes B, C, D, E, F, G.. etc por si algo me salía mal. L e explique a mi padre lo que intentaba y
mágicamente me hizo caso, no muy convencido, pero decidió intentarlo.

Tambien durante ese mes se había abierto la convocatoria para la UNAM, asi que ya me
inscribi cuando eran los últimos días, no sabia si elegir entre Filosofia o Economia… opte por
economía.

Asi comenze a estudiar y a leer los libros de la prepa abierta, ya había yo comprado antes
cuando trabajaba todos los libros en una librería, pero nunca los había usado ni si quiera.

En febrero tuve el examen de la UNAM, sinceramente ya que mi intención no era pasarlo

porque visto desde un punto de vista nunca había cursado la preparatoria y de las materias
que había pasado eran las de ingles, que ya sabia y no me servia de nada en si para el examen.,
pues no me había preocupado por estudiar, mas bien mi intención el dia que lo fui a hacer fue
la de ver como iba a ser, tratar de familiarizarme de alguna manera para llegar bien preparado
a la segunda convocatoria del examen en el mes de julio, fecha para la cual ya tendría yo
suficientes conocimientos para acreditarlo. Según yo.

Sucedió pues el dia que me entregaron los resultados que me había quedado en la
universidad, en la Facultad de Economia de Ciudad Universitaria, no lo podía creer, al
momento de escribir esto incluso me vuelvo a poner un poco nostálgico de nuevo solo de
recordar ese momento. Y fue precisamente Toño Rada que se encontraba conectado en ese
momento por Messenger la primera persona en enterarse, obviamente me felicito, me alentó
a seguir trabajando y asi continue estudiando ya que ahora lo que me faltaba era obtener el
santo grial de mi carrera academica, el certificado de preparatoria.

Muchas veces asisti con toño a algunas clases privadas que después de algún tiempo ya no me
cobro (porque además estaba viviendo como pobre en ese entonces y no tenia para pagarle)
como forma de apoyo y continue pasando exámenes, uno tras otro.

Finalmente en julio realice mi ultimo examen, para ese entonces me había dado cuenta que
me faltaba mi certificado de secundaria asi que por mar y tierra busqye la manera de obtener
una reposición la cual fui a encontrar hasta las oficinas de SEIEM en Toluca y el dia que me
entregaron mi ultima calificación ya con todos mis documentos en regla fue el dia que me
entregaron mi certificado parcial de preparatoria con un promedio global de 7.9.

Aunque con un 8 me hubieras otorgado un financiamiento en el ITAM, pero creo que UNAM
esta muy bien.

Para terminar con todo esto, mi madre me acompaño a inscribirme el dia que me tocaba a la
universidad, fue un dia que me sentí muy bien, había terminado por fin con la etapa mas difícil
de mi vida y si bien no tenia todo lo que me hubiera gustado tener para ese entonces debido a
falta de educación tanto de mis padres como de mi, por lo menos tenia una gran oportunidad
a partir de la cual comenzar a construir de nuevo todo lo que se había derrumbado o se había
dejado inconcluso.

Hoy en dia, asisto a UNAM, y me gusta mucho, es un lugar donde hay muchas libertades,
aunque sigo confrontando en ocasiones a los profesores, el nivel es definitivamente distinto,
ya no son los típicos profesores frustrados de secundaria que trabajan porque necesitan
dinero, sino gente que esta metida de fondo en investigación y la docencia es para ellos mas
un placer que una necesidad.

Le agradesco infinitamente a Toño Rada y a fundación telegenio por haberme apoyado en

todo esto y espero sinceramente que no sea yo la única persona a la que esta noble fundación
apoye sino cada vez mas personas, ya que nuestro país las necesita.

Adolfo Román Jiménez