Ciberacoso o

Ciberbullying
 Ciberacoso o
Ciberbullying
Acto agresivo e intencionado llevado a cabo de manera repetida y
constante a lo largo del tiempo, mediante el uso de formas de contacto
electrónicas por parte de un grupo o de un individuo contra una víctima
que no puede defenderse fácilmente.
Algunos de los principales tipos de ciberacoso son los
siguientes: A través de
fotografías

Acoso Correos
telefónico electrónicos

Programas
de Sesiones de
mensajería chat
instantánea
Amplitud de la audiencia

Invisibilidad de los acosadores

Comunicación del ciberacoso

Muchas son las formas utilizadas por los acosadores para infringir
daño utilizando las TICs, sin embargo las más habituales serían las
siguientes:

• Excluir intencionalmente a alguien de un grupo online, como

una lista de amigos.

• Grabar y colgar en internet vídeos de peleas y asaltos a

personas a quienes se agrede y que después quedan expuestas
a todos.
• Enviar o propagar comentarios crueles o rumores sobre alguien que dañan
su reputación e imagen o la dañan ante sus amigos.

• Pretender ser alguien que no es y enviar o difundir materiales e

informaciones online que dejan mal a la persona en cuestión, la ponen en
riesgo o causan daño a su reputación ante sus conocidos y/o amigos.
• Utilizar un blog personal para denigrar y hablar mal de una
persona.

• Manipular materiales digitales: fotos, conversaciones grabadas,

correos electrónicos, cambiarlos, trucarlos y modificarlos para
ridiculizar y dañar a la víctima.

• Robar contraseñas.
Decálogo para una víctima de ciberbullying

No responder
Pedir ayuda provocaciones

Tomar medidas
legales
¿cómo pasar de espectador
a luchar
contra el ciberbullying?
Muestra tu rechazo.

Toma la iniciativa.

Tienes más poder.

Denuncia los contenidos abusivos.

Rompe la cadena.

Ofrece tu ayuda.
 Información para menores
acosadores sobre cómo actuar
ante el ciberbullying: ¿cómo
dejar de hacerlo?
Evita justificarte.

Busca ayuda.

Limita acceso a determinados sitios.

Piensa antes de publicar.

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C o
• Sé muy cuidadoso con los datos personales.
• Nunca debes responder a una provocación y mucho menos si eres presa de
la furia.
• Cuando la amenaza o el acoso persiste es recomendable guardar pruebas.
• En previsión de que hayan publicado online informaciones sobre ti, puedes
utilizar Google para buscar tus datos.