Propiedades Químicas de la Materia

Propiedades Químicas
Estructura de la materia y principios de adhesión:
Cambio de estado

Para comprender la ciencia de los materiales dentales debemos

comenzar con un conocimiento básico de su estructura atómica o
molecular y su comportamiento durante la manipulación y
aplicación.
 ¿Qué es un átomo?
Porción material menor de un elemento químico que interviene en las
reacciones químicas y posee las propiedades características de dicho
elemento.

Los átomos están formados por tres tipos de

partículas subatómicas: los protones, los
neutrones y los electrones. Las partículas
subatómicas se caracterizan básicamente por
su masa y por su carga: Cada átomo está
formado por un núcleo formado de protones
y neutrones.

Los átomos raramente se encuentran libres, tienden a agruparse

formando moléculas.
 ¿Qué es una molécula?
Una molécula es una agrupación definida y ordenada de átomos
que constituye la porción más pequeña de una sustancia pura y
conserva todas sus propiedades.
El comportamiento de los materiales dentales, cerámicos, poliméricos o
metálicos se basa en su estructura atómica. Las reacciones físicas y
químicas colectivas de los átomos determinan las propiedades del material.

Los átomos y las moléculas se

unen mediante interacciones
atómicas

Cuando el agua hierve, se

necesita energía para transformar
el líquido en vapor

La atracción entre los átomos (o moléculas) en estado sólido debe ser

mayor que en estado líquido o gaseoso, ya que se necesita energía para
pasar de sólido a líquido
Enlaces Interatómicos Primarios
Un enlace interatómico es aquel que se da entre los átomos y forman una
molécula.
Las fuerzas que unen a los átomos se denominan
fuerzas de cohesión

Enlaces Iónicos
Los enlaces iónicos son el resultado de la
atracción mutua de cargas positivas y negativas.

Los enlaces iónicos dan lugar a cristales cuya

configuración atómica se basa en el equilibrio de la
carga y del tamaño. En odontología, los enlaces
iónicos se presentan en determinadas fases
cristalinas de algunos materiales, como el yeso y los
cementos de fosfato.
Enlaces Covalentes
Resinas dentales
Los enlaces covalentes se dan en
muchos compuestos orgánicos, como
las resinas dentales, en las que los
compuestos forman la columna
vertebral de las cadenas de
hidrocarburos

Los átomos enlazados por

enlaces covalentes comparten
uno o más pares de electrones
de su último nivel de energía.
Enlaces Metálicos

Es el tercer tipo de interacción atómica primaria

Un enlace metálico es un enlace químico que mantiene unidos los

átomos de dos metales entre sí. Estos átomos se agrupan de forma
muy cercana unos a otros, lo que produce estructuras muy compactas.
Enlaces Interatómicos Secundarios
Enlace de Hidrógeno
El enlace de hidrógeno es una fuerza electrostática fija muy fuerte entre átomos de
hidrógeno y otros átomos electronegativos, cuando hay muchas moléculas unidas,
ya que da gran estabilidad pero es más débil que el enlace covalente o el enlace
iónico.

Cuando una molécula de agua se entremezcla

con otras moléculas de agua, el hidrógeno (la
parte positiva) de una molécula es atraída por el
oxígeno (la parte negativa) de la molécula
adyacente, formando puentes de hidrógeno. Esta
polaridad es importante a causa de las
reacciones intermoleculares de muchos
compuestos orgánicos, como la absorción de
agua por parte de las resinas dentales sintéticas.
Energía Térmica
La energía térmica vienen dada por la energía cinética de los átomos o
moléculas a una temperatura determinada. Los átomos de un cristal a
temperatura superior a cero están vibrando constantemente dependiendo de
la temperatura.

Expansión térmica
A una temperatura determinada para un material la energía mínima está en
equilibrio. Al aumentar la temperatura la amplitud de la vibración atómica o
molecular se incrementa. El espacio interatómico también aumenta al igual
que la energía interna. Todo ello da lugar al fenómeno conocido como
expansión térmica.
 ESTRUCTURA CRISTALINA
Hasta ahora, para explicar conceptos específicos hemos empleado
únicamente dos átomos o moléculas. Los materiales dentales están
formados por millones de estas unidades.

Los átomos están unidos entre sí por enlaces primarios o

secundarios. En estado sólido, se combinan de manera que
garantizan la energía interna mínima.

Puede definirse una estructura reticular espacial como cualquier disposición de

átomos en el espacio en la que cada átomo se sitúa de manera similar al resto.
Hay 14 tipos de formas posibles de estructuras reticulares, aunque muchos
de los metales empleados en odontología pertenecen al sistema cúbico, es
decir, los átomos cristalizan en formas cúbicas.

Todas las amalgamas dentales, las aleaciones para colado, los metales
formados, las láminas de oro y las amalgamas dentales son cristalinos.
Algunas cerámicas puras, como las cerámicas con el centro de aluminio y
zirconio, son totalmente cristalinas.
 Adhesión y Unión
El fenómenos de la adhesión se aplica a muchas situaciones en la odontología. Por
ejemplo, las fugas adyacentes a los materiales dentales de restauración son el resultado
de una adhesión insuficiente o incompleta. Probablemente, la retención de dentaduras
postizas depende, en cierto modo, de la adhesión entre la prótesis y la saliva y entre esta
y el tejido. En realidad, la unión de la placa o el cálculo a la estructura dental se puede
explicar como un mecanismo de adhesión.

Cuando dos sustancias se ponen en contacto, las moléculas de una se adhieren o son
atraídas por las moléculas de la otra. Esta fuerza se denomina adhesión cuando se
atraen diferentes moléculas y cohesión cuando se atraen moléculas del mismo tipo. El
material o película empleado para la adhesión se denomina adhesivo y el material al
que se aplica es el adherente.

La adhesión es, simplemente, un proceso de unión superficial. El término adhesión

se caracteriza normalmente por la especificación del tipo de atracción intramolecular
que puede existir entre el adhesivo y el adherente.
Unión mecánica

La fuerte unión de una sustancia a otra se puede producir también por

una unión mecánica o de retención, y no por la atracción molecular.
Dicha retención estructural puede tener una naturaleza groseras, tal
como se ha visto en las aplicaciones en que se usan tornillos, pernos o
socavaciones. La unión mecánica supone mecanismos más sutiles como
la penetración del adhesivo en las irregularidades microscópicas.

Para este procedimiento es mejor un adhesivo fluido o un adhesivo líquido

ligeramente viscoso, porque penetra en estos defectos superficiales con
facilidad.
Un ejemplo más reciente de la unión mecánica son los materiales de
restauración de resina (plástico). Estas resinas no tienen las capacidad
de adherirse realmente a la estructura dentaria, por lo que pueden
producirse filtraciones adyacentes a la restauración.
Humectación:
Es difícil forzar la unión de dos superficies sólidas. Con
independencia de lo lisas que puedan parecer esas superficies,
suelen ser extremadamente rugosas al verlas a escala atómica o
molecular. Como consecuencia, cuando se ponen juntas sólo están
en contacto los “picos” o asperezas. No se produce ningún tipo de
adhesión perceptible, ya que estas zonas suelen constituir sólo un
pequeño porcentaje de la superficie total.
 Un método para solventar esta dificultad es emplear un fluido que se
introduce en estas irregularidades para que haya más contacto entre una
mayor parte de la superficie del sólido. Por ejemplo, cuando se coloca una
superficie de vidrio pulido sobre otra y se presiona, estas muestran poca
tendencia a la adhesión. Sin embargo, si se introduce una película de agua
entre ellas, es bastante difícil separar las dos superficies. La energía
superficial del vidrio es los suficientemente grande como para atraer las
moléculas de agua.

Para producir adhesión de esta manera, el líquido debe fluir fácilmente por toda la
superficie y adherirse al sólido. Esta característica recibe el nombre de humectación. Si
el líquido no moja la superficie del adherente, no se producirá la adhesión entre el
líquido y el adherente, o será insignificante. En caso de que se humecte la superficie
debería producirse la adhesión.
La limpieza de la superficie es bastante importante, una película de agua de sólo
una molécula de espesor sobre la superficie de un sólido puede reducir la energía
superficial del adherente y prevenir que el adhesivo provoque humectación. Del
mismo modo, una película oleosa sobre una superficie metálica también puede
inhibir el contacto del adhesivo.

La energía superficial de algunas sustancias es tan baja que muy pocos líquidos,
en caso de que haya alguno, humectan su superficie. Algunas sustancias
orgánicas, como las ceras dentales, son de este tipo.