El documento describe los sacramentos de la iniciación cristiana, en particular el sacramento de la Confirmación. Explica que la Confirmación completa la iniciación cristiana iniciada en el Bautismo y fortalecida en la Eucaristía. También describe los símbolos utilizados en la Confirmación como la vestimenta blanca, la medalla del Bautismo, el crucifijo, el rosario, la vela y la Biblia. Finalmente, enfatiza la importancia de vivir una vida cristiana fiel después de recibir la Confirmación.
El documento describe los sacramentos de la iniciación cristiana, en particular el sacramento de la Confirmación. Explica que la Confirmación completa la iniciación cristiana iniciada en el Bautismo y fortalecida en la Eucaristía. También describe los símbolos utilizados en la Confirmación como la vestimenta blanca, la medalla del Bautismo, el crucifijo, el rosario, la vela y la Biblia. Finalmente, enfatiza la importancia de vivir una vida cristiana fiel después de recibir la Confirmación.
El documento describe los sacramentos de la iniciación cristiana, en particular el sacramento de la Confirmación. Explica que la Confirmación completa la iniciación cristiana iniciada en el Bautismo y fortalecida en la Eucaristía. También describe los símbolos utilizados en la Confirmación como la vestimenta blanca, la medalla del Bautismo, el crucifijo, el rosario, la vela y la Biblia. Finalmente, enfatiza la importancia de vivir una vida cristiana fiel después de recibir la Confirmación.
Cristiana EL SACRAMENTO DE LA CONFIRMACIÓN • 1285 Con el Bautismo y la Eucaristía, el sacramento de la Confirmación constituye el conjunto de los "sacramentos de la iniciación cristiana", cuya unidad debe ser salvaguardada. ¿Qué sucede en la Confirmación? • En la Confirmación el alma de un cristiano bautizado queda marcada con un sello indeleble que sólo se puede recibir una vez y que marca a esta persona para siempre como cristiano. • Confirmarse quiere decir hacer un «contrato» con Dios. El confirmando dice: Sí, Dios mío, creo en ti. Quién puede recibir este sacramento • 1306 Todo bautizado, aún no confirmado, puede y debe recibir el sacramento de la Confirmación (cf CIC can. • Sin la Confirmación y la Eucaristía, el sacramento del Bautismo es ciertamente válido y eficaz, pero la iniciación cristiana queda incompleta La preparación para la Confirmación debe tener como meta conducir al cristiano a una familiaridad más viva con el Espíritu Santo, su acción, sus dones y sus llamadas. Fue Cristo mismo quien instituyó este sacramento al prometer la efusión del Espíritu sobre sus discípulos: “Cuando el Espíritu Santo venga sobre vosotros, recibiréis una fuerza que os hará ser mis testigos” (Hch 1, 8). El ministro de la Confirmación • 1312 El ministro originario de la Confirmación es el obispo ( LG 26). • Los obispos son los sucesores de los Apóstoles y han recibido la plenitud del sacramento del orden. – como testigos del Espíritu Santo debemos difundir y defender la fe mediante la palabra y las obras como verdaderos testigos de Cristo. (cf DS 1319; LG 11,12): “El único Espíritu distribuye los múltiples dones que enriquecen a la única Iglesia: Es el autor de la diversidad, pero al mismo tiempo es el creador de la unidad”. Papa Francisco Los confirmados debemos de compartir los dones recibidos y cumpliendo con el compromiso adquirido en la Confirmación de hacer “apostolado”, sirviendo a los demás en nombre de Dios y transmitiendo la Palabra de Cristo. La fe es la virtud teologal por la que creemos en Dios, en la revelación, y que la Santa Iglesia nos propone, porque Él es la verdad misma. La fe implica un “riesgo”, significa abandonar antiguas seguridades e implica un cambio radical de conducta. El Hijo fue obediente hasta la muerte de cruz. El sufrimiento que experimentó al cumplir la voluntad del Padre, concedió a su fidelidad un valor singular. Pero, “la fe sin obras está muerta” (St 2, 26): Se vive o se muere. Y queda privada de la esperanza y de la caridad. El servicio y el testimonio de la fe son requeridos para la salvación: (Mt 10, 32- 33). Mt 10, 32-33 "«Por todo aquel que se declare por mí ante los hombres, yo también me declararé por él ante mi Padre que está en los cielos; pero a quien me niegue ante los hombres, le negaré yo también ante mi Padre que está en los cielos." Preferentemente deben ser los mismos de Bautizo. Tienen el compromiso de dar atención en su crecimiento espiritual y humano, a su vez procurando que lleve una vida cristiana. Los padrinos son los responsables de la educación cristiana del ahijado(a) en el caso de que los padres falten. Deben ser casados por la Iglesia o solteros en algunas circunstancias. Ser padrino es un compromiso para toda la vida, que este no se rompe bajo ninguna circunstancia. No elegir padrinos por presión familiar o social. La vestimenta debe ser de color blanco que significa la pureza del niño(a) que recibe la plenitud del Espíritu Santo. La medalla que llevan colgada al cuello deberá ser la del bautizo que tiene por un lado la imagen de Cristo, y del otro el nombre y la fecha de su bautismo. El crucifijo es un recordatorio del sacrificio de Jesús y representa las pequeñas obligaciones del niño(a). Y también le servirá al estar colgado en la pared de su cuarto los momentos matutinos y nocturnos de oración. El rosario simboliza su confianza en la ayuda y protección de la Virgen María y el compromiso de rezar el rosario con frecuencia por la unión de las familias y conversión de los pecadores. La vela que se deberá llevar en la mano derecha, significa a Jesucristo resucitado, y al encenderla se simbolizan dos realidades: La luz de Cristo que ilumina su vida y la misión de ser luz del mundo con su testimonio. La Biblia que en ella Dios le habla al ser humano, significa el compromiso que tendrá para leer frecuentemente la sagrada Escritura para conocer e imitar a Jesús RITUAL DE LA CONFIRMACIÓN Homilía