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El matrimonio es una institución antigua que funda la familia y que a lo largo de la historia ha estado regulada por normas sociales. Más que una simple convivencia, el matrimonio implica una vocación de conocerse y aceptarse mutuamente a través de una elección libre. Esta vocación conlleva el constante esfuerzo de comprender al otro, mantener la pasión y la ternura, y corregir aquello que pueda dañar la relación.
El matrimonio es una institución antigua que funda la familia y que a lo largo de la historia ha estado regulada por normas sociales. Más que una simple convivencia, el matrimonio implica una vocación de conocerse y aceptarse mutuamente a través de una elección libre. Esta vocación conlleva el constante esfuerzo de comprender al otro, mantener la pasión y la ternura, y corregir aquello que pueda dañar la relación.
El matrimonio es una institución antigua que funda la familia y que a lo largo de la historia ha estado regulada por normas sociales. Más que una simple convivencia, el matrimonio implica una vocación de conocerse y aceptarse mutuamente a través de una elección libre. Esta vocación conlleva el constante esfuerzo de comprender al otro, mantener la pasión y la ternura, y corregir aquello que pueda dañar la relación.
El matrimonio es tan antiguo como el ser humano. A lo largo de la historia, esta
convivencia, que funda la familia en su multiplicidad de significados y formas, según las creencias y culturas, ha estado rodeada y regida por innumerables ritos, costumbres, leyes y normas El matrimonio no es simplemente una invitación a vivir juntos, sino una experiencia de saberse y sentirse llamados a realizar la atracción mutua que surge entre dos seres, desde la opción libre y voluntaria
"Constituye la constante búsqueda de
conocer y acoger al otro y a sí mismo" • El amor se transforma en complicidad: compañerismo. Se mantiene la pasión y la ternura; se cuidan también la admiración y el intentar no defraudar al otro. Se muestran los lados positivo y negativo de la convivencia, pero tratando de corregir lo que interfiere el normal funcionamiento de la pareja… Porque la vida es ser, no tener. • Si bien Constitucional y legalmente se reconocen diversos tipos de familia, es necesaria una mayor investigación no sólo como un hecho sociológico sino existencial. Es importante, por ejemplo, preguntarse sobre cuál es el denominador común o las características básicas que tienen estas realidades para que se definan o consideren familias