para la ventaja competitiva de las naciones intenta ayudar a entender la posición competitiva de una nación en el sistema de competencia global. Puede aplicarse también a entes territoriales geográficamente más reducidos: regiones, provincias... o más amplios, tales como asociaciones económicas internacionales entre países. Ventajas tradicionales del país
Tradicionalmente la teoría económica plantea una serie de factores que
determinan la ventaja competitiva de un país en la competencia internacional: • Tierra • Localización • Recursos humanos • Factores de trabajo ( mano de obra). • Tamaño (normalmente en términos de población ) • Porter plantea que, dado que estos factores son difícilmente modificables en el corto/medio plazo y algunos de ellos ni siquiera en el largo plazo, construir el crecimiento sostenible de la economía de un país sobre ellos implica una opción estratégica peligrosa. De hecho, plantea que puede incluso ser contraproducente aprovechar las dotaciones de partida de un país en estos recursos como base del crecimiento: desincentiva a desarrollar otras ventajas competitivas más duraderas y sostenibles, que crean diferencias competitivas más significativas con respecto a otros países. • Porter plantea que lo que permite el desarrollo sostenible de los países es el surgimiento de los denominados clusters de empresas: conjunto de empresas concentradas geográficamente, pertenecientes al mismo sector y conectadas con redes de proveedores, clientes e instituciones, que establecen una dinámica competitiva entre ellas muy intensa que hace que se autoalimente el proceso de desarrollo de ventajas competitivas. Esos clusters (ejemplos típicos sería Silicon Valley, en el sector de las tecnologías de la información; Hollywood en el sector del cine...) son los responsables de la ventaja competitiva de las naciones y los Gobiernos pueden incentivar las condiciones necesarias para su surgimiento. La competitividad de una nación depende de la capacidad de su industria para innovar y mejorar. Las empresas logran ventajas frente a sus competidores a causa de retos y presiones. Ninguna nación puede ser competitiva en todos los sectores, ya que existen diferencias en los patrones de competitividad de cada una. La base de la competitividad a nivel nacional es la productividad, ya que el objetivo principal de una nación es mejorar el nivel de vida de sus ciudadanos. El comercio internacional y la Inversión Extranjera Directa pueden mejorar la productividad de una nación y también pueden ponerla en peligro Facilitan cuando han que la nación se especialice en aquellos sectores en los que sus empresas son más productivas e importen en las que no lo son. Tenemos que comprender qué determina la productividad y la tasa de crecimiento de ésta. Focalizarnos en los sectores y subsectores específicos de una economía. Las empresas logran ventaja competitiva mediante actos de innovación. EL ROMBO DE LA VENTAJA NACIONAL Condiciones de los factores: Situación de la nación en cuanto a los factores de producción, tales como trabajo especializado, capital e infraestructura.
Condiciones de la demanda: Naturaleza de la demanda del producto o servicio del
sector en el mercado nacional.
Sectores afines y auxiliares: Presencia o ausencia en la nación de los proveedores y/o
afines, que sean internacionalmente competitivos.
Estrategia, estructura y rivalidad de las empresas: El grado de competencia que exista
entre las empresas al interior de un país. EL MODELO DE LAS CINCO FUERZAS. Este modelo se ha convertido en la herramienta más utilizada para el análisis de la competencia en un sector o industria, en un departamento, país o región. Según Porter, la competencia por los beneficios en una industria o sector depende de cinco fuerzas. En la cual los actores con mayor poder relativo frente a los demás logran captar para sí la mayor porción de esos beneficios. No obstante, empresas, proveedores y clientes deben cooperar entre sí para mejorar el desempeño del sector en beneficio de todos ellos y a la vez que compiten por sacar la mejor tajada.