LA DEFENSA DE LA

VIDA HUMANA

Exigencia del mensaje moral cristiano

 I. PREMISAS
1. De la Dignidad de la persona emanan algunos
principios que deben ser reconocidos, tutelados
y salvaguardados
2. La violación de uno de los derechos humanos
es un atentado contra la dignidad de la persona
humana.
3. Se origina en el ser mismo de la persona y el
respeto es el camino más directo para
reconocer la grandeza de la condición humana.
De este modo, dignidad del hombre y
derechos humanos, se implican
mutuamente, pues forman un todo
indisoluble. De aquí, que el único medio
de que la dignidad de la persona humana
no sea una bella teoría abstracta, sino
que adquiera relieve en todos y cada uno
de los hombres, es que se reconozca y
sea proclamada mediante la defensa
jurídica de los DH en la vida social y
política de los pueblos.
PRECISIONES TERMINOLÓGICAS
DERECHOS: Se entienden como las exigencias
fundamentales de la persona, originadas en el
mismo ser del hombre, que deben ser
reconocidas, valoradas y defendidas.

HUMANOS: en ocasiones se cambia por

universales (ONU), naturales (evolucionismo),
fundamentales (jurídico), de la persona
(personalismo), del hombre,… se usan
indistintamente y aparentemente como sinónimos,
… es peligroso porque todas las constituciones
hablan de DH, incluso las dictaduras.
 La ONU eligió la denominación inglesa “human
rights o civil rights” por exigencias idiomáticas
universales.
 Finalmente, las expresiones derechos de la
persona, derechos humanos y derechos del
hombre, pueden usarse indistintamente.
Derechos de la persona parece la más
adecuada, ella sitúa a la persona en su misma
dignidad y está más cercana a cualquier filosofía
que acepte el ser personal del hombre.
 II. DEFINICION
“Son aquellas exigencias originarias
e irrenunciables que tienen como
sujeto al hombre, en su radicalidad
de hombre, es decir, como persona,
creado a imagen y semejanza de
Dios e injertado en Cristo, y que
piden de los demás –individuos,
comunidades y estado- que sean
reconocidos, respetados y
protegidos jurídicamente”.
1. Sólo el hombre es sujeto de derechos

Es un fundamento de exclusividad:
 No derivan de leyes positivas o por un
privilegio alcanzado públicamente (dadas
por la sociedad, voto). Su origen está en su ser – hombre.
 No se fundamentan en la libertad, la
libertad es un derecho y no un
fundamento.
 Están fundados en la Dignidad de la
Persona (persona-dignidad es una
tautología).
 2. Enraizados en la dignidad humana
 La ONU, menciona varias veces la dignidad de
la persona humana y la considera como
inherente a toda la familia humana, pero no
especifica lo que es la dignidad (nota pag. 392).
 La razón principal de que muchas Constituciones
modernas rehúyan fundamentar la dignidad
humana tiende dos motivos: existencia de
ideologías y un espíritu laicista que se expande
por el mundo, que soslaya cualquier referencia
religiosa.
 La dignidad del hombre deriva del concepto de
naturaleza humana (nota 15, pag. 395).
Concilio Vaticano II: la GS se
ocupa de los DH, no menciona la
Declaración de la ONU, pero los
fundamenta en la naturaleza y en
la igualdad radical de todos los
hombres (n. 29), los enumera y los
clasifica (n. 26), hace un llamado a
que sean respetados por todos los
pueblos (n. 29) y alerta sobre
falsas interpretaciones (n. 41).
III. CLASIFICACIÓN DE LOS
DH
La catalogación de los DH es una
cuestión de menor importancia, y
no se debe dar tanto realce. Lo
verdaderamente importante es
fijar todos y cada uno, sin omitir
ninguno; dado que negar uno es
abrir una brecha inmensa que
atenta contra la dignidad de la
persona.
Según la ONU, se ordenan cuatro columnas y 30
artículos lo fundamentan:
1. Derechos y libertades de toda persona: a la vida, a la
libertad, a la seguridad, al reconocimiento de la
personalidad jurídica, a la igualdad ante la ley, a no
ser detenido injustamente,… (aa, 12-17)
2. Derechos del Individuo en relación con otros grupos: a
la familia, el país, la nación, a la propiedad,… (aa. 3-11).
3. Derechos que defienden libertades reales: religión,
opinión, expresión, información, reunión, asociación,
participación en la vida política, ejercer funciones
públicas... (aa. 18-22).
4. Derechos económicos y sociales: seguridad social, al
trabajo, al salario justo, a sindicarse, al descanso,
nivel de vida adecuado, vestido, vivienda, asistencia
médica, servicios sociales, a la educación,… (aa. 22-27).
 Una clasificación más lógica y rigurosa nace de las
características del hombre como espíritu encarnado, y en razón
de su dignidad:
1. Derechos Existenciales: a la vida, a la integridad corporal, a la
alimentación y al vestido, a una vivienda digna, a la seguridad
personal, a la asistencia en casis eventuales (desempleo,
enfermedad, vejez, viudedad).
2. Derechos personales:
 Autoreflexión: libertad de: pensamiento, conciencia, educación,
cultura, religión.
 Autoposesión: derecho a: la intimidad, al honor, al descanso y al
ocio, al trabajo y justa remuneración, a la propiedad privada, a la
personalidad jurídica.
 Autodeterminación: a la libertad ps, a elegir estado de vida, a
residencia libremente elegida, a la emigración interior o exterior.
 Autocomunicación: a la libertad de culto, de expresión, de
información, de asociación, a las manifestaciones publicas, a la
defensa ante la injusticia, a reunirse.
IV. CARACTERÍSTICAS DE LOS DH.

1. Fundamentales
2. Originarios
3. Universales
4. Inviolables
5. Irrenunciables
6. Jerarquizados
7. Correlativos
 1. FUNDAMENTALES
La expresión de Derechos fundamentales es
empleada por la ONU y por la Pacen in Terris (n.
29), ha sido motivo de grande polémica.
Afirmamos tres cosas de esta característica:
 Que son manifestación primaria de la naturaleza
personal del hombre.
 Que son el fundamento de toda relación
interpersonal y de toda vida social.
 En el lenguaje religioso declara la sacralidad del
hombre (res sacra según RH de Juan Pablo II).
2. ORIGINARIOS
Es decir, que brotan de la
naturaleza del hombre. No son
producto de la cultura ni otorgados
por la autoridad ni por la ley. Son
innatos al ser humano, no
concebidos. Son pre-existentes y
la ley positiva debe reconocerlos
como tal y protegerlos
jurídicamente.
3. UNIVERSALES
Son comunes a todos los hombres y no sólo de
un determinado grupo, todos están dotados de
alma racional y han sido creados a imagen de
Dios y tiene la misma naturaleza y el mismo
origen (GS 29).
En este sentido la negación de algún derecho
fundamental lesiona la naturaleza del hombre.
Es el caso de los disminuidos físicos o psíquicos,
de los dementes, de los concebidos y no
nacidos,… son propios para todos los hombres
por el hecho de serlo.
4. INVIOLABLES
El respeto de los DH obliga por
naturaleza. No es preciso que exista
ley positiva que obligue al respeto. Las
leyes deben ayudar a salvaguardarlos.
Siempre que se conculcan, la persona
humana es maltratada. De aquí que
deben ser protegidos por la autoridad.
La violación de los DH constituye una
falta moral (pecado) y el ámbito civil es
un delito que debe ser castigado.
5. IRRENUNCIABLES
El hombre es sujeto de esos derechos
y no sólo objeto de los mismos. Es
responsable de ellos y están fuera de
su dominio. No puede renunciar a
ellos. De aquí nace la obligación de
protegerlos y defenderlos
(jurídicamente si es el caso) cuando
son vulnerados por otros o por leyes
positivas que los conculcan.
6. JERARQUIZADOS
Existe un orden en los DH, no todos tienen
el mismo valor. El primero y el fundamento
de todos es el derecho a la vida, dado que
los demás están condicionados a la
existencia. Algunos aparecerán como
consecuencias prácticas de su aplicación
perfecta a aquellos que son soporte
fundamental. Están también conexos a las
circunstancias reales de naciones o
tiempos.
7. CORRELATIVOS
Los derechos se corresponden con los
respectivos deberes. En nuestra época
se a puesto el énfasis en reclamar mis
derechos y no en cumplir mis deberes.
Si cada hombre tiene derecho a la
vida, cada tiene el deber de respetar y
defender la vida de cualquier persona.
Lo mismo cabe decir de los valores
morales y materiales.
 VI. LA LEGÍTIMA DEFENSA

A partir de datos bíblicos y de

principios filosófico-teológicos de
la dignidad de la vida y de la
obligación de defenderla, la
Teología Moral elaboró la doctrina.
Condiciones:
1. Se requiere que esté gravemente en riesgo
la vida.
2. Debe ser una agresión injusta y no una
agresión provocada.
3. Se deben buscar antes todos los medios
posibles para no causar muerte (huir,
desarmar, herir,…)
4. La defensa debe ser proporcional.
5. Incluso para otra persona injustamente
agredida.