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IGLESIA REY DE GLORIA

ESTUDIO BIBLICO

EL RAPTO DE LA IGLESIA Y LA SEGUNDA


VENIDA DE CRISTO
(señales antes del fin)
INTRODUCCION
Estamos haciendo este estudio sobre un tema
trascendental dentro de la doctrina cristiana como
lo es el rapto o arrebatamiento de la iglesia y la
segunda venida de Cristo al final de la Tribulación.
Este video podrá verse en mi blog, cuya dirección
va a aparecer ahora al pie del video, en el zócalo y
es: http://escudriniandolabiblia.blogspot.com.ar/.
Vamos a basar este estudio en los capítulos 24 y 25
del libro de Mateo y en muchos otros pasajes de las
Escrituras. Vamos a intentar demostrar que, en
efecto, estamos viviendo los tiempos finales,
motivo por el cual tanto el rapto o arrebatamiento
de la iglesia como la segunda venida de Cristo son
hechos que están en un futuro cercano.
Las profecías de Jesús contenidas en su “discurso del Monte
de los Olivos” (capítulos 24 y 25 del libro de Mateo), que inicia
en Mateo, 24:3 con el título “Señales antes del fin” y continua
hasta Mateo, 25:46, fueron una respuesta a la pregunta de sus
discípulos: “¿Qué señal habrá de tu venida y del fin del siglo?”.
Cristo les dio:

[1] señales generales: falsos Cristos, guerras y rumores de


guerras, pestes, hambres, terremotos, aborrecimiento de unos
a otros, falsos profetas, enfriamiento del amor por la
multiplicación de la maldad y la predicación del Evangelio en
todo el mundo (Mateo, 24:4-14);
[2] señales especiales: la “abominación desoladora” de la que
hablo el profeta Daniel (Mateo, 24:15-28);
[3] señales espectaculares o eventos astronómicos (“el sol se
oscurecerá, y la luna no dará su resplandor, y las estrellas
caerán del cielo”) que ocurren en su venida triunfante con
poder y gran gloria (Mateo, 24:29-31);
[4] advertencias a los creyentes que vivan antes de la Tribulación,
para que estén espiritualmente preparados para el rapto de la
iglesia (Mateo, 24:36-51, 25:1-30);
[5] advertencias para los santos de la tribulación (que no
representan a la iglesia, la cual es arrebatada con anterioridad)
para que estén alerta a las señales de la segunda venida de Cristo
inmediatamente después de la Tribulación de 7 años (Mateo,
24:32-35); y

Para que se entienda: antes de hacer caer los peores juicios sobre
la tierra para castigar a la humanidad, Dios va a sacar a su iglesia
de la tierra en lo que se conoce como el rapto o arrebatamiento de
la iglesia. Dios va a hacer desaparecer a la iglesia y luego hará
llover los perores juicios sobre la tierra. La iglesia esta formada
por los cristianos verdaderamente convertidos al momento del
rapto y los “santos de la Tribulación” también son cristianos pero
que no forman parte de la iglesia. Ellos no se fueron en el rapto.
Se terminan de convertir luego del rapto, durante la Tribulación.
[6] una descripción del juicio de las naciones
después de la segunda venida de Cristo (Mateo,
25:31-46); cuando Cristo venga a la tierra por
segunda vez, se encontrara con personas que
sobrevivieron a la Gran Tribulación:

[a] las ovejas: son los “santos de la tribulación” y


son los cristianos convertidos durante la tribulación
y a estos Jesucristo apartara a su derecha; y

[b] los cabritos: son personas que, a pesar de haber


sobrevivido a la Gran Tribulación, siguen sin
convertirse y a estos Jesucristo apartará a su
izquierda y serán condenados;
COMENZAMOS
No todos los versículos de Mateo, 24 y 25 están dirigidos
al mismo publico sino a públicos distintos:

1º Corintios, 10:32 No seáis tropiezo ni a judíos, ni a


gentiles, ni a la iglesia de Dios.

O sea que, en principio, tenemos 3 grupos a los que esta


dirigido el mensaje de Cristo:

[1] La iglesia;
[2] Los judíos; y;
[3] Los gentiles;

Habría un cuarto grupo que seria los “santos de la


tribulación”
Empecemos por lo mas fácil que es la iglesia. En la iglesia
de Jesucristo hay de todo: judíos y gentiles, que tienen en
común el haber aceptado a Cristo como Señor y Salvador.
Ya lo veremos con mayor detalle pero, a modo de anticipo,
diremos que la iglesia será raptada, es decir, Dios sacara a
la iglesia de la tierra antes de hacer llover sus juicios para
castigar al mundo. Los judíos “a secas” son judíos que, ya
sea por su ateísmo o por su ortodoxia (apego a su religión
que es el judaísmo) no han aceptado el mesianismo de
Jesús. Los gentiles son no judíos que tampoco han
aceptado a Jesús como el Hijo de Dios. Mientras la iglesia
es rescatada por Dios, tanto judíos como gentiles van a
pasar por los juicios terribles de la Gran Tribulación. De
estos judíos y gentiles va a salir un grupo que van a ser los
“santos de la tribulación”, es decir, personas que se van a
convertir al cristianismo durante la Gran Tribulación.
TRIBULACION Y GRAN TRIBULACION
Se conoce con el nombre de Tribulación a los últimos 7
años del gobierno del hombre sobre la tierra, antes de la
segunda venida de Jesucristo. A su vez, se suele dividir a
estos últimos 7 años en dos mitades: un primer sub-
periodo de 3 años y ½ llamado Tribulación seguido de un
segundo sub-periodo, también de 3 años y ½, llamado
Gran tribulación. La “bisagra” entre estos 2 periodos es la
manifestación y revelación plena del anticristo
declarándose Dios dentro de un tercer templo que aun hoy
no se ha construido. Esta es la “abominación desoladora
de la que hablo el profeta Daniel” (Mateo, 24:15, Daniel,
9:27) y de la que también hablo Pablo (2º Tesalonicenses,
2:3-4). La diferencia es que las calamidades y los eventos
desastrosos serán más frecuentes e intensos en el
segundo sub-periodo de 3 años y ½, pero, en general, los
últimos 7 años serán angustiosos.
Por un lado, Jesucristo hablo de que sus seguidores, a
lo largo de la historia, sufrirían “tribulación” (angustia y
dificultades), como una “condición general” que
acompañaría a los cristianos a lo largo de toda la era de
la iglesia, es decir, las angustia y las dificultades serian
inherentes a la condición de cristiano.

Por el otro, Jesucristo aquí hablo de la “Gran


Tribulación” como un “periodo de tiempo” que tendrá un
comienzo y un final y que comenzará cuando la
“abominación desoladora” (el anticristo), que fue
predicha por el profeta Daniel, se manifieste en el (tercer)
Templo, a la mitad de los últimos siete años de la historia
(Mateo, 24:15) y terminará (ese periodo de “Gran
Tribulación”) con la segunda venida de Jesucristo a la
tierra, 3 años y ½ después (Mateo, 24:29-30).
El propósito de la Gran Tribulación es doble:

[1] disciplinar (purificar) al pueblo de Israel


para que esté preparado para recibir al
Mesías, que ya ha venido (Jesucristo) pero
que ellos no han querido aceptar; y

[2] destruir completamente a las naciones


en las cuales fue esparcido Israel y que
también rechazaron al Mesías.
 
¿Y la iglesia?.
 
En el caso de Israel, todas las generaciones desde la
cruz están perdidas por haber rechazado al Mesías. La
disciplina de la última generación de israelitas tiene la
intención de llevarlos a que terminen de aceptar a
Jesucristo como el Mesías de Israel.

En el caso de la iglesia, todas las generaciones


anteriores han muerto creyendo en Jesucristo por lo
que el sufrimiento de una última generación de
cristianos en la Gran Tribulación no tendría ningún
sentido ya que no serviría para purificar a todas esas
generaciones anteriores de creyentes que ya han sido
purificadas por que, precisamente, han muerto en
Cristo.
Lo que debe quedar claro es lo siguiente:

[1] El propósito de la Gran Tribulación es el de


disciplinar a Israel y destruir completamente a las
naciones que lo maltrataron y que rechazaron al
Mesías; y

[2] La Iglesia no tiene necesidad de ser purificada o


disciplinada, y por consiguiente nuestra presencia
aquí durante ese período – la Gran Tribulación –
estaría en oposición directa a nuestra naturaleza como
la ve Dios. La Iglesia fue purificada en la cruz, ocasión
en la que todos los castigos que merecíamos por
nuestros pecados, fueron llevados por el mismo Señor.
 
La Iglesia es una “nueva raza humana”, que sale de entre
judíos y gentiles pero que no comparte su destino con
ninguno de los dos (Efesios, 2:15-16).

Efesios, 2:15 aboliendo en su carne las enemistades, la


ley de los mandamientos expresados en ordenanzas,
para crear en sí mismo de los dos un solo y nuevo
hombre, haciendo la paz, 2:16 y mediante la cruz
reconciliar con Dios a ambos en un solo cuerpo, matando
en ella las enemistades.

Por esto Pablo divide a las personas en 3 categorías


distintas: judíos, gentiles y la iglesia.
 
1 Corintios, 10:32 No seáis tropiezo ni a judíos, ni a
gentiles, ni a la iglesia de Dios;
Debido a esto, Dios ha prometido remover a la Iglesia antes
de que inicie la Gran Tribulación.

1 Tesalonicenses, 1:10 y esperar de los cielos a su Hijo, al


cual resucitó de los muertos, a Jesús, quien nos libra de la ira
venidera.
1 Tesalonicenses, 5:9 Porque no nos ha puesto Dios para ira,
sino para alcanzar salvación por medio de nuestro Señor
Jesucristo,

También tenemos el siguiente pasaje de Apocalipsis:

Apocalipsis, 3:10 Por cuanto has guardado la palabra de mi


paciencia, yo también te guardaré de la hora de la prueba que
ha de venir sobre el mundo entero, para probar a los que
moran sobre la tierra. 
Pero ¿de qué manera la iglesia será rescatada de la ira
venidera?.
 
Hay un pasaje en Lucas que sugiere que habría una
“forma de escapar” de estos eventos descriptos en
Mateo, 24 y ss. acerca de la Gran Tribulación:
 
Lucas, 21:36 Velad, pues, en todo tiempo orando que
seáis tenidos por dignos de escapar de todas estas
cosas que vendrán, y de estar en pie delante del Hijo del
Hombre.
 
Jesucristo dio a entender que los verdaderos creyentes
tendrían una forma de escapar de “todas estas cosas”
pero no dijo nada más. Años más tarde, el misterio fue
revelado a Pablo en 1º Corintios, 15:51-52.
EL RAPTO O ARREBATAMIENTO DE LA
IGLESIA
EL RAPTO
 
1 Corintios, 15:51 He aquí, os digo un misterio: No todos
dormiremos; pero todos seremos transformados, 15:52 en un
momento, en un abrir y cerrar de ojos, a la final trompeta;
porque se tocará la trompeta, y los muertos serán resucitados
incorruptibles, y nosotros seremos transformados.
 
Aquí Pablo dice que estaba revelando un “misterio” (un secreto),
pero la resurrección de los muertos se puede encontrar en el
Antiguo Testamento. El secreto está en que algunos no van a
morir, sino que serán tomados vivos ante la presencia del Señor
después de pasar por una transformación instantánea.

El Rapto sucede muy rápido. En un instante nos encontramos


caminando en la tierra y al siguiente estamos en el Reino.
El rapto o arrebatamiento de la iglesia consiste
en el traslado instantáneo de millones de
personas vivas de la tierra a los cielos, en los
días venideros y está acompañado por otro
evento paralelo: la resurrección previa de todas
aquellas personas que, antes de morir, pidieron
perdón a Dios por sus pecados, aceptando a
Jesús como su Señor y Salvador pero la muerte
se les anticipo. O sea, tanto los muertos en
Cristo (serán “resucitados”) como los
cristianos que se encuentren vivos (serán
“transformados”) serán llevados al cielo, en un
pestañear e inmediatamente comenzara la
Tribulación.
Aunque el día y la hora del rapto de la iglesia no lo conoce
nadie (solo Dios Padre, Hijo y Espíritu Santo), respecto de la
“época” en que ocurrirá se han desarrollado 3 posturas
doctrinales:

[1] Pretribulacionista: según la cual el rapto ocurrirá antes de la


Tribulación total que durara 7 años (es mas, según esta postura
con el rapto se inicia el periodo de los últimos 7 años);
[2] Mesotribulacionista: según la cual el rapto ocurre a mitad de
los últimos 7 años, es decir, a los 3 años y ½ de comenzado el
periodo total de la Tribulación de 7 años por lo que el rapto aquí
coincide con otro evento que es la manifestación de la
“abominación desoladora” (Mateo, 24:15); y
[3] Postibulacionista: según la cual el rapto ocurre al final de la
Tribulación, superponiéndose casi con la segunda venida de
Cristo (es la postura que menos adhesiones ha despertado);
Pasajes bíblicos que sustentan la ocurrencia del rapto:

1 Corintios, 15:51 He aquí, os digo un misterio: No todos


dormiremos; pero todos seremos transformados, 15:52 en un
momento, en un abrir y cerrar de ojos, a la final trompeta;
porque se tocará la trompeta, y los muertos serán resucitados
incorruptibles, y nosotros seremos transformados.

1 Tesalonicenses, 4:15 Por lo cual os decimos esto en palabra


del Señor: que nosotros que vivimos, que habremos quedado
hasta la venida del Señor, no precederemos a los que durmieron.
4:16 Porque el Señor mismo con voz de mando, con voz de
arcángel, y con trompeta de Dios, descenderá del cielo; y los
muertos en Cristo resucitarán primero. 4:17 Luego nosotros los
que vivimos, los que hayamos quedado, seremos arrebatados
juntamente con ellos en las nubes para recibir al Señor en el
aire, y así estaremos siempre con el Señor.
Juan, 14:1 No se turbe vuestro
corazón; creéis en Dios, creed también
en mí. 14:2 En la casa de mi Padre
muchas moradas hay; si así no fuera,
yo os lo hubiera dicho; voy, pues, a
preparar lugar para vosotros. 14:3 Y si
me fuere y os preparare lugar, vendré
otra vez, y os tomaré a mí mismo, para
que donde yo estoy, vosotros también
estéis.
El Rapto es un evento desconocido y secreto, cuando
Jesús llega a medio camino entre el cielo y la tierra para
encontrarse con su iglesia en el aire y llevarla a donde Él
se encuentra ahora. Y decimos “desconocido y secreto”,
porque el momento específico permanecerá desconocido
hasta que haya sucedido.

La Segunda Venida, en cambio, es un evento conocido y


público cuando Jesús llega hasta la tierra con su iglesia,
para establecer Su reino aquí. Y decimos “programado y
público” porque el momento general de su llegada será
conocido en la tierra 3 años y ½ antes que suceda (a partir
de que se manifieste la “abominación desoladora”,
quedaran 3 años y ½ para la segunda venida de Cristo) y
público, porque todas las personas en la tierra podrán ver
su llegada (Apocalipsis, 1:7 He aquí que viene con las
nubes, y todo ojo le verá).
La Gran Tribulación (los últimos 3
años y ½) comienza en Apocalipsis
11—13. Pero la ira de Dios es más
larga, empezando en Apocalipsis 6
(los juicios de los sellos). Los
juicios de las copas que vienen
después, no inician el momento de
su ira, sino que la concluyen
(Apocalipsis 15:1).
Habiendo sido rescatados del tiempo, del lugar y de
cualquier relación que hubiera con la ira de Dios,
significa que la Iglesia tiene que desaparecer antes
de Apocalipsis 6 (que es donde realmente comienza
la ira de Dios), y es por eso que el Rapto debería
llevarse a cabo en Apocalipsis 4:

Apocalipsis, 4:1 Después de esto miré, y he aquí una


puerta abierta en el cielo; y la primera voz que oí,
como de trompeta, hablando conmigo, dijo: Sube
acá, y yo te mostraré las cosas que sucederán
después de estas.

La Iglesia es ese grupo de creyentes que se ven en


el Cielo en Apocalipsis 5.
¿POR QUE ES DE SUMA IMPORTANCIA
QUE NOS VAYAMOS EN EL RAPTO?

¿LOS CRISTIANOS QUE NO SE VAYAN EN


EL RAPTO TENDRAN UNA SEGUNDA
OPORTUNIDAD DURANTE LA GRAN
TRIBULACION?
Venimos diciendo que tenemos 4 grupos o compañías
de personas: la iglesia, los santos de la tribulación, los
judíos y los gentiles y ya hemos dicho quienes son
cada uno. También venimos diciendo que la iglesia se
va a ir en el rapto en algún momento durante la primera
mitad de los 7 años totales, motivo por el cual la iglesia
no entrara en la Gran Tribulación, donde se van a ver
los juicios de Dios mas severos. La iglesia será, por
tanto, rescatada de la ira de Dios. Se van a quedar a
atravesar la Gran tribulación los judíos y los gentiles.
Respecto del segundo grupo, los “santos de la
tribulación”, venimos diciendo que son personas que
se convertirán al cristianismo, luego del rapto, durante
la Gran Tribulación y van a salir de los judíos y gentiles
que se quedaron. No se fueron en el rapto porque no
formaban parte de la iglesia.
Dentro de este grupo de judíos y gentiles que no se fueron en el
rapto y que van a atravesar la Gran tribulación y de los cuales
van a salir los “santos de la tribulación” tenemos:

[a] Judíos y gentiles incrédulos que, al momento del rapto,


jamás habían aceptado a Jesucristo (nunca fueron cristianos); y

[b] Judíos y gentiles creyentes pero que eran cristianos


inconstantes (llamados “cristianos tibios”), es decir, cristianos
que se congregaban y participaban, incluso, de algunas de la
actividades de su congregación, pero que, al momento del
rapto, no estaban 100% convertidos (por eso no se fueron en el
rapto);

De estos dos grupos saldrán los “santos de la tribulación”, es


decir, los cristianos que se conviertan durante la Gran
Tribulación.
Surge, entonces, una pregunta interesante: dentro de
los “santos de la tribulación” ¿de quienes habrá mas?.
¿Judíos o gentiles?. ¿Judíos y gentiles que no se
fueron en el rapto por incrédulos (nunca creyeron en
Dios) o Judíos y gentiles que, habiendo creído en
Jesucristo, no se fueron en el rapto por ser tibios?. Lo
primero que tenemos que decir es que hay malas
noticias para los gentiles, es decir, para los no judíos,
porque la mayoría de los “santos de la tribulación” van
a ser judíos. ¿Por qué?. Porque el foco de la Gran
Tribulación es judío. Ya dijimos que el propósito
principal de la Gran tribulación es disciplinar a Israel
para llevarlos a la aceptación de Jesucristo como el
Mesías. Con el rapto habrá terminado la era de la
iglesia (que fue de la cruz al rapto) y se habrá acabado
la gracia.
Con el rapto, se acaba el “tiempo de gentiles” y Dios
volverá sus ojos a Israel. Para los gentiles fue la
“gracia” (que fue de la cruz al rapto). Para judíos es la
Gran tribulación. Y de los pocos gentiles (no judíos)
que formen parte de los “santos de la tribulación”, es
muy probable que la mayoría hayan sido “gentiles
incrédulos” y no tibios. ¿Por qué?. Porque los
cristianos tibios que no se hayan ido en el rapto
precisamente por ser tibios, van a quedar resentidos
de alguna manera con Dios. Ellos, aun reconociendo
su tibieza, le van a reprochar a Dios lo siguiente:
¿nosotros, aunque fuimos tibios, siempre creímos en
vos y hasta hicimos algunas cosas por tu obra,
tenemos que pasar por las mismas calamidades que
los judíos, que nunca aceptaron a tu Hijo y que los
gentiles que jamás creyeron en vos?.
Es decir, a los cristianos gentiles tibios, su conocimiento
previo de Dios no solo que no les va a servir para nada (no
les va a ser contado por justicia) sino que, además, les va
a jugar en contra. Ellos, conociendo la verdad, se relajaron
y no tomaron en serio las advertencias de Dios.

Apocalipsis, 3:15 Yo conozco tus obras, que ni eres frío ni


caliente. ¡Ojalá fueses frío o caliente! 3:16 Pero por cuanto
eres tibio, y no frío ni caliente, te vomitaré de mi boca.

Jesucristo dice que es mejor ser frio (incrédulo) o caliente


(lleno del Espíritu Santo), antes que tibio.

Hacete un auto examen. Si sos gentil (no judío) y cristiano


y hay tibieza en vos, yo te diría que tu única oportunidad
es el rapto de la iglesia.
Romanos, 11:25 Porque no quiero, hermanos,
que ignoréis este misterio, para que no seáis
arrogantes en cuanto a vosotros mismos: que
ha acontecido a Israel endurecimiento en parte,
hasta que haya entrado la plenitud de los
gentiles; 11:26 y luego todo Israel será salvo.

Con esto Pablo quiere decirles a los gentiles


(los no judíos) que no se “agranden”, es decir,
que no piensen que van a reemplazar a Israel
porque, una vez que la plenitud de los gentiles
termine (es decir, la era de la iglesia) todo Israel
será salvo.
LOS SIETE ARREBATAMIENTOS BIBLICOS

Para terminar de demostrar que el rapto es una doctrina


que tiene una fuerte presencia en las Escrituras, vamos a
hablar ahora de los 7 raptos o arrebatamientos que se
registran en la Biblia (5 cumplidos y 2 todavía sin cumplir).

1º Arrebatamiento 'cumplido' (Enoc)

Génesis, 5:24 Caminó, pues, Enoc con Dios, y desapareció,


porque le llevó Dios.

Hebreos, 11:5 Por la fe Enoc fue traspuesto para no ver


muerte, y no fue hallado, porque lo traspuso Dios; y antes
que fuese traspuesto, tuvo testimonio de haber agradado a
Dios.
2º Arrebatamiento 'cumplido' (Elías)

2º Reyes, 2:11 Y aconteció que yendo ellos y hablando, he aquí un


carro de fuego con caballos de fuego apartó a los dos; y Elías subió al
cielo en un torbellino.

3º Arrebatamiento 'cumplido' (Jesucristo)

Hechos, 1:9 Y habiendo dicho estas cosas, viéndolo ellos, fue alzado, y
le recibió una nube que le ocultó de sus ojos. 1:10 Y estando ellos con
los ojos puestos en el cielo, entre tanto que él se iba, he aquí se
pusieron junto a ellos dos varones con vestiduras blancas, 1:11 los
cuales también les dijeron: Varones galileos, ¿por qué estáis mirando
al cielo? Este mismo Jesús, que ha sido tomado de vosotros al cielo,
así vendrá como le habéis visto ir al cielo.

Apocalipsis, 12:5 Y ella dio a luz un hijo varón, que regirá con vara de
hierro a todas las naciones; y su hijo fue arrebatado para Dios y para
su trono.
4º Arrebatamiento 'cumplido' (Felipe)

Hechos, 8:38 Y mandó parar el carro; y


descendieron ambos al agua, Felipe y el eunuco,
y le bautizó. 8:39 Cuando subieron del agua, el
Espíritu del Señor arrebató a Felipe; y el eunuco
no le vio más, y siguió gozoso su camino. 8:40
Pero Felipe se encontró en Azoto; y pasando,
anunciaba el evangelio en todas las ciudades,
hasta que llegó a Cesárea.

El de Felipe fue el único arrebatamiento de una


ciudad a otra (de un lugar de la tierra a otro lugar
de la tierra y no al cielo).
5º Arrebatamiento 'cumplido' (Pablo de
Tarso)

2º Corintios, 12:2 Conozco a un hombre en


Cristo, que hace catorce años (si en el
cuerpo, no lo sé; si fuera del cuerpo, no lo
sé; Dios lo sabe) fue arrebatado hasta el
tercer cielo. 12:3 Y conozco al tal hombre
(si en el cuerpo, o fuera del cuerpo, no lo
sé; Dios lo sabe), 12:4 que fue arrebatado al
paraíso, donde oyó palabras inefables que
no le es dado al hombre expresar.
Existen 3 paraísos y 3 cielos:

[1] el primer paraíso fue el Huerto del Edén, de donde


fueron expulsados Adán y Eva por pecar (Génesis, 3:24);

[2] el segundo paraíso fue el Seno de Abraham (Lucas,


16:22); y

[3] el tercer paraíso es la Nueva Jerusalén, que esta en el


tercer cielo (Apocalipsis, 21:9-27);

El 'primer cielo' es la atmosfera, el 'segundo cielo' es el


universo y el 'tercer cielo' es donde esta el Trono de
Dios. Pablo dice que fue arrebatado hasta el 'tercer
cielo'.
6º Arrebatamiento 'pendiente' (Iglesia)

1º Corintios, 15:51 He aquí, os digo un misterio: No todos


dormiremos; pero todos seremos transformados, 15:52
en un momento, en un abrir y cerrar de ojos, a la final
trompeta; porque se tocará la trompeta, y los muertos
serán resucitados incorruptibles, y nosotros seremos
transformados.

1º Tesalonicenses, 4:16 Porque el Señor mismo con voz


de mando, con voz de arcángel, y con trompeta de Dios,
descenderá del cielo; y los muertos en Cristo resucitarán
primero. 4:17 Luego nosotros los que vivimos, los que
hayamos quedado, seremos arrebatados juntamente con
ellos en las nubes para recibir al Señor en el aire, y así
estaremos siempre con el Señor.
7º Arrebatamiento 'pendiente' (los 2 testigos del
Apocalipsis)

Apocalipsis, 11:3 Y daré a mis dos testigos que profeticen


por mil doscientos sesenta días, vestidos de cilicio. 11:4
Estos testigos son los dos olivos, y los dos candeleros
que están en pie delante del Dios de la tierra. 11:5 Si
alguno quiere dañarlos, sale fuego de la boca de ellos, y
devora a sus enemigos; y si alguno quiere hacerles daño,
debe morir él de la misma manera. 11:6 Estos tienen
poder para cerrar el cielo, a fin de que no llueva en los
días de su profecía; y tienen poder sobre las aguas para
convertirlas en sangre, y para herir la tierra con toda
plaga, cuantas veces quieran. 11:7 Cuando hayan
acabado su testimonio, la bestia que sube del abismo
hará guerra contra ellos, y los vencerá y los matará.
Apocalipsis, 11:8 Y sus cadáveres estarán en la plaza
de la grande ciudad que en sentido espiritual se llama
Sodoma y Egipto, donde también nuestro Señor fue
crucificado. 11:9 Y los de los pueblos, tribus, lenguas
y naciones verán sus cadáveres por tres días y medio,
y no permitirán que sean sepultados. 11:10 Y los
moradores de la tierra se regocijarán sobre ellos y se
alegrarán, y se enviarán regalos unos a otros; porque
estos dos profetas habían atormentado a los
moradores de la tierra. 11:11 Pero después de tres
días y medio entró en ellos el espíritu de vida enviado
por Dios, y se levantaron sobre sus pies, y cayó gran
temor sobre los que los vieron. 11:12 Y oyeron una
gran voz del cielo, que les decía: Subid acá. Y
subieron al cielo en una nube; y sus enemigos los
vieron.
Estos 2 testigos del Apocalipsis muy probablemente sean
ELIAS y MOISES.

Sabemos que Elías, en su tiempo, oro para que no


lloviera (poder para cerrar el cielo) y también conocemos
todos los prodigios que hizo Moisés, delante de Faraón,
para que dejara salir a su pueblo (Israel) de Egipto. Estos
dos testigos que menciona el Apocalipsis, tendrán poder,
precisamente, para hacer todas estas maravillas. Con el
arrebatamiento de la iglesia se inicia la Tribulación de 7
años (según la doctrina pretribulacionista) o la Gran
tribulación (según la doctrina mesotribulacionista).
Luego del rapto vendrán estos 2 testigos y profetizaran
contra el anticristo 3 años y ½ (1.260 días). Finalmente
los mataran y no permitirán que los entierren. A los 3 días
y ½ de muertos serán arrebatados por Dios.
¿QUE TE ESPERA EN LA GRAN
TRIBULACION?
En la Gran Tribulación te esperan todas las cosas
descriptas en el libro de Apocalipsis:

[a] va a escasear el agua: el único agua potable


que se puede beber es el que se encuentra
mayormente en ríos y lagos – el agua dulce – el
cual va a quedar envenenado y Dios va a provocar
esto (Apocalipsis, 16:4);
[b] van a escasear los alimentos;
[c] el sol va a estar tan enfermo que va a incinerar
todo lo que se exponga a el (Apocalipsis, 16:8);
[c] va a estar la “marca de la bestia” sin la cual
nadie va a poder comprar ni vender (Apocalipsis,
13:16-17; 16:2);
Apocalipsis, 13:16 Y hacía que a todos,
pequeños y grandes, ricos y pobres,
libres y esclavos, se les pusiese una
marca en la mano derecha, o en la
frente; 13:17 y que ninguno pudiese
comprar ni vender, sino el que tuviese la
marca o el nombre de la bestia, o el
número de su nombre. 13:18 Aquí hay
sabiduría. El que tiene entendimiento,
cuente el número de la bestia, pues es
número de hombre. Y su número es
seiscientos sesenta y seis.
Hace 30 o 40 años atrás esto era “ciencia ficción”,
pero hoy ya se sabe que la “marca de la bestia” es un
microchip que se va a implantar en la mano derecha o
en la frente en el cual van a estar cargados todos tus
datos y tu sueldo como “dinero electrónico” (el
dinero en papel va a desaparecer). Vos me dirás: no
me dejo implantar el chip y listo. En primer lugar va a
ser obligatorio y en segundo lugar, los que no tengan
esta “marca” (este chip implantado) van a quedar
afuera de todo: no vas a poder comprar ningún
producto en ningún comercio (ni medicamentos), no
vas a poder conseguir trabajo, vas a quedar afuera
del sistema de salud (si no tenés esta marca - este
chip implantado) y no vas a poder atenderte (ni vos ni
tus hijos) ni siquiera en un hospital publico, etc.
Vos me dirás: bueno, me implanto el chip y listo.
Pero hay un problema. Si tejas marcar con esta
“marca de la bestia” (si te dejas implantar este
chip), para Dios es lo mismo que adorar a
Satanás y esto (junto con la blasfemia del
Espíritu Santo) no será perdonado por Dios.

Apocalipsis, 14:9 Y el tercer ángel los siguió,


diciendo a gran voz: Si alguno adora a la bestia y
a su imagen, y recibe la marca en su frente o en
su mano, 14:10 él también beberá del vino de la
ira de Dios, que ha sido vaciado puro en el cáliz
de su ira; y será atormentado con fuego y azufre
delante de los santos ángeles y del Cordero;
Apocalipsis, 15:1 Vi en el cielo otra
señal, grande y admirable: siete
ángeles que tenían las siete plagas
postreras; porque en ellas se
consumaba la ira de Dios. 

Apocalipsis, 16:2 Fue el primero, y


derramó su copa sobre la tierra, y vino
una úlcera maligna y pestilente sobre
los hombres que tenían la marca de la
bestia, y que adoraban su imagen.
EL TERCER TEMPLO
Mateo, 24:21 porque habrá entonces gran
tribulación, cual no la ha habido desde el
principio del mundo hasta ahora, ni la habrá. 

La señal mas importante para el comienzo de


la Gran Tribulación es la “abominación
desoladora” (Mateo, 24:15), es decir, el
anticristo, dentro del templo, profanándolo y
autoproclamándose “Dios”. Esta señal les dice
a los fieles que estén vivos en ese momento
(que no se fueron en el rapto) que la venida de
Cristo a la tierra ocurrirá al finalizar los
próximos 3 años y ½.
Una vez que Dios haya arrebatado o este a punto de
arrebatar a la iglesia, “empezara a tratar de nuevo con
Israel” (con el rapto estará terminando la “era de la
iglesia”), motivo por el cual se reanudara el antiguo
pacto, con todo el sistema de sacrificios, con lo cual
un nuevo templo tendrá que ser construido. Este
templo que se construya (que hoy no existe) será un
tercer templo: el primero, que construyo Salomón, fue
destruido por Nabucodonosor en 586 a.C. y el
segundo, que fue reconstruido durante la época
postexilica de Esdras y Nehemías, fue destruido por
los romanos en 70 d.C.. El anticristo, llamado el
inicuo, levantara su imagen en el templo de Dios (esta
es la abominación cometida por el desolador),
declarándose “Dios” (Daniel, 9:27, 2º Tesalonicenses,
2:3-4, Apocalipsis, 13:14-15).
Muchos se preguntan por que un nuevo (tercer) templo tiene
que ser construido para seguir efectuando sacrificios si:

[1] el templo del Espíritu Santo es el cuerpo (1 Corintios,


6:19) por lo que ya no es necesario un templo físico; y

[2] El sacrificio de Cristo fue una vez y para siempre


(Hebreos, 10:12) con lo cual ya no es necesario sacrificar
animales;

La primera razón por la que un nuevo (tercer) templo tiene


que ser construido es evidente: la “abominación desoladora”
(el anticristo) de la que hablo el profeta Daniel (Mateo, 24:15),
tiene que revelarse como tal en un templo, el cual profanará
(autoproclamándose “Dios”) y el cual usara como centro de
sus pronunciamientos contra Dios. Por lo tanto, un nuevo
(tercer) templo (que hoy no existe) tiene que ser construido.
La segunda razón por la que un nuevo (tercer) templo
tiene que ser construido es que Dios va a retomar su
relación con Israel exactamente donde quedo al momento
que apareció la iglesia con la primera venida de
Jesucristo. Durante la era de la iglesia el antiguo pacto
quedo suspendido. Como los judíos, aun al día de hoy,
jamás han aceptado a Jesús como Mesías, cuando la
iglesia ya no este por haber sido arrebatada, Dios
retomara su relación con ellos en el punto donde había
quedado hasta llevarlos (utilizando como disciplina la
Gran Tribulación) a la aceptación definitiva de Jesús
como el Mesías prometido a Israel. Por lo tanto, si Dios
va a “retomar” su relación con Israel donde había
quedado, un nuevo (tercer) tiene que ser construido para
que Israel retome el sistema de sacrificios interrumpido
por la destrucción del segundo templo en el año 70 d.C. a
manos de los romanos.
Una tercera razón por la que un tercer templo tendrá
que ser construido la encontramos en Ezequiel, 40
donde el profeta Ezequiel tiene una visión de un
templo, que no es ni el de Salomón (destruido en 586
a.C. por Nabucodonosor) ni el segundo templo,
reconstruido en la época postexilica de Esdras y
Nehemías (destruido por los romanos en 70 d.C.). Es
mas, este tercer templo que se construya se hará con
las especificaciones que recibió Ezequiel. Busca en
internet. Hay muchos videos acerca de la
construcción del tercer templo. Incluso, ha sido
creado en Israel el “instituto del tercer templo” desde
donde se supervisara su construcción y también la
confección de los trajes de los sacerdotes y de los
instrumentos musicales que tocarán los levitas.
EL FIN DEL MUNDO
Antes de continuar debemos aclarar que
significa “fin del mundo” en el contexto de
este “discurso del Monte de los Olivos”
(Mateo, 24 y 25). Con la segunda venida de
Cristo lo que se producirá es el fin del sistema
por medio del cual el hombre ha gobernado
hasta ahora a la tierra y a sus semejantes.
Cuando Cristo retorne peleara contra el
anticristo y lo derrotara y tanto el anticristo
como el falso profeta (las 2 bestias del
Apocalipsis) serán arrojados vivos al lago de
fuego (Apocalipsis, 19:20). Por su parte,
Satanás será encarcelado en el abismo por
1.000 años (Apocalipsis, 20:1-3).
Durante los 1.000 años que Satanás esté encarcelado
en el abismo, Jesucristo gobernara políticamente la
tierra desde Jerusalén en lo que se conoce como el
“reinado milenial de Cristo” (Apocalipsis, 20:6).
Cumplidos estos 1.000 años Satanás “será suelto de
su prisión y saldrá a engañar a las naciones”
(Apocalipsis, 20:7). La rebelión será nuevamente
aplastada y Satanás será lanzado al lago de fuego
donde el anticristo y el falso profeta ya habían sido
arrojados 1.000 años antes (Apocalipsis, 20:10). Y
después de esto recién será el fin del mundo (no en
la segunda venida de Cristo). Existirá, entonces, un
cielo nuevo y una nueva tierra porque “el primer
cielo y la primera tierra pasaron y el mar ya no existía
mas” (Apocalipsis, 21).
ISRAEL VUELVE A SER UNA NACION
Hay muchos pasajes que hablan del resurgimiento de
Israel como nación. Yo elijo un pasaje del libro de Ezequiel:

Ezequiel, 37:21 y les dirás: Así ha dicho Jehová el Señor:


He aquí, yo tomo a los hijos de Israel de entre las naciones
a las cuales fueron, y los recogeré de todas partes, y los
traeré a su tierra;
 
A pesar de que Ezequiel escribió estas palabras mientras
los israelitas aun se encontraban exiliados en Babilonia, no
se cumplieron cuando la nación retornó del exilio (en la
época de Esdras y Nehemías) ya que luego, en la época de
los romanos y después de Jesús se produjo la famosa
diáspora o dispersión. Ezequiel estaba hablando del
segundo y último retorno: el de mayo de 1948, luego de la
segunda guerra mundial.
LA SEÑAL DE LA HIGUERA

Mateo, 24:32 De la higuera aprended la parábola: Cuando


ya su rama está tierna, y brotan las hojas, sabéis que el
verano está cerca.

En este pasaje, la “higuera” representa a Israel, el “brote


de las hojas” representa su restauración como estado
político y el “verano” representa la segunda venida de
Cristo (tanto en el rapto de la iglesia como al final de la
Gran Tribulación). La higuera comenzó a reverdecer en
mayo de 1948, cuando nació el Estado de Israel. Si
consideramos que en la “guerra de los 6 días”, librada por
Israel en 1967 contra una coalición de naciones árabes,
Israel recupero el control total de Jerusalén, podríamos
decir que la higuera esta bastante reverdecida.
Mateo, 24:34 De cierto os digo, que no pasará esta
generación hasta que todo esto acontezca.

Lo que Jesucristo quiso decir con esto es que algunas


personas de la generación que estaba naciendo
cuando Israel fue restaurado como estado político en
mayo de 1948 (cuando la higuera reverdeció), aun
estarían vivas cuando Él retornara. De acuerdo a la
propia Biblia una generación es de 70 a 80 años
(Salmos, 90:10) o directamente de 70 años (Isaías,
23:15). Si tomamos como una señal decisiva la
restauración de Israel en mayo de 1948 (y vaya si lo
es) y que muchos de lo que estaban vivos en esa
época, estarán vivos para cuando el Señor regrese,
nos vamos al año 2018 (1948 + 70 años) con lo cual la
segunda venida de Cristo estaría mas que cerca.
Si a 1.948 sumamos 80 años (la otra alternativa de
Salmos, 90:10), nos vamos al año 2.028. Año 2.023
en promedio si a 1.948 sumamos 75 años
(precisamente el promedio entre 70 y 80 años).
Con lo cual, como podemos ver, el retorno de
Cristo estaría mas que cercano. Con esto, no
pretendemos “sacar cuentas” sino solo corroborar
que estamos en los “últimos tiempos”, los cuales,
mas allá de las fechas, deben ser reconocidos por
los verdaderos hijos de Dios. Recordemos que una
de las principales acusaciones de Jesús a los
Fariseos fue la de que eran incapaces de
reconocer los tiempos del advenimiento del
Mesías (que era El, Jesús), ampliamente
profetizado en las Escrituras.
Mateo, 24:36 Pero del día y la hora nadie sabe, ni aun los
ángeles de los cielos, sino sólo mi Padre.

Este versículo se refiere al rapto de la iglesia y no a la


segunda venida de Cristo, ya que el tiempo exacto de su
segunda venida será conocida una vez que se manifieste la
“abominación desoladora” (Mateo, 24:15). A partir de aquí
Cristo vendrá, en su segunda venida (no el rapto) a los 3
años y ½.
Este pasaje dice que solo el Padre conoce el tiempo del
retorno de Cristo por su iglesia (el rapto). Hay que entender
esto como una referencia al tiempo en que Cristo estuvo en
la tierra, donde El se despojo de su divinidad y se hizo
siervo hasta la muerte (y el siervo no conoce). Seguro que
ahora Jesús, que ha regresado a su gloria anterior (Juan,
17:5), tiene conocimiento futuro de su retorno por su
iglesia (el rapto).
Mateo, 24:37 Mas como en los días de Noé, así será la venida del
Hijo del Hombre.

Cuando Cristo afirma que su (segunda) venida será como en los


días de Noé, tenemos que pensar que fue lo que sucedió en los
días de Noé. En los días de Noé hubo 3 categorías de personas:

[a] Enoc, que antes del diluvio, fue arrebatado por Dios,
representa a la iglesia (Génesis, 5:24 Caminó, pues, Enoc con
Dios, y desapareció, porque le llevó Dios, Hebreos, 11:5 Por la fe
Enoc fue traspuesto para no ver muerte, y no fue hallado, porque
lo traspuso Dios; y antes que fuese traspuesto, tuvo testimonio
de haber agradado a Dios);
[b] Noé (y su familia) que se salvaron del diluvio porque
construyeron el Arca (representan a los “santos de la
tribulación”); y
[c] Los impíos (incrédulos) que perecieron en el diluvio (no le
creyeron a Noé);
Mateo, 24:40 Entonces estarán dos en el campo; el uno
será tomado, y el otro será dejado. 

Este pasaje no se refiere a la segunda venida de Cristo


sino al rapto de la iglesia. Cuando Jesús dice “el uno
será tomado y el otro será dejado”, lo dice antes de decir:

Mateo, 24:42 Velad, pues, porque no sabéis a qué hora ha


de venir vuestro Señor.

Como ya dijimos, una vez que se manifieste la


“abominación desoladora” (Mateo, 24:15), la segunda
venida del Señor será conocida porque ocurrirá 3 años y
½ después. Es decir, cada vez que aparezcan pasajes
donde se nos diga “velad” porque “no sabéis”, etc.,
claramente están haciendo alusión al rapto de la iglesia.
Mateo, 24:44 Por tanto, también vosotros
estad preparados; porque el Hijo del Hombre
vendrá a la hora que no pensáis.

Una vez mas Cristo se refiere a su venida por


los fieles de su iglesia en un momento
“inesperado y desconocido”. Claramente esta
advertencia esta dirigida a la iglesia y se
refiere al rapto o arrebatamiento. No esta
referida a su segunda venida, al final de la
Gran Tribulación, cuyo tiempo será conocido:
3 años y ½ después de que se manifieste la
“abominación desoladora” (Mateo, 24:15).
La única manera de armonizar la enseñanza de Cristo
sobre:

[a] su venida inesperada en el rapto de la iglesia (Mateo,


24:42, 44); con
[b] su venida esperada al final de la Gran Tribulación
(Mateo, 24:33);

Es dar por sentado dos fases de su segunda venida:

[1] La primera etapa se refiere al rapto o arrebatamiento de


la iglesia (1 Corintios, 15:51-52, 1 Tesalonicenses, 4:15-17);
y
[2] La segunda etapa, se refiere a su (segunda) venida 3
años y ½ después de que se manifieste la “abominación
desoladora” (Mateo, 24:15);
Mateo, 24:48 Pero si aquel siervo malo dijere en su
corazón: Mi señor tarda en venir;

Como ya dijimos, es necesario saber diferenciar a


quien se le habla en cada versículo. Cuando la Biblia
utiliza la palabra “siervo” se esta refiriendo a un
cristiano, es decir, a un miembro de la iglesia de Cristo
(no a un judío o a un gentil). Si, además, la expresión
es “siervo malo” se esta refiriendo a un cristiano
inconstante (tibio). Los cristianos tibios no
participaran del rapto de la iglesia por lo que tendrán
que pasar por las mismas pruebas que los judíos y los
gentiles: o aceptan a Cristo durante la Gran Tribulación
(aun a precio de morir) o serán condenados. El Señor
advirtió que vomitaría (no haría participes del rapto) a
los tibios (Apocalipsis, 3:16).
De la misma forma que el infierno (el fuego eterno)
inicialmente se preparo para el diablo y sus ángeles y
no para los hombres (Mateo, 25:41), la Gran
Tribulación estuvo siempre destinada, como ya
dijimos, a disciplinar a los judíos (para que terminen
de aceptar al Mesías) y castigar a los gentiles
incrédulos, pero jamás estuvo destinada para la
iglesia. No obstante, los cristianos tibios no
participaran del rapto motivo por el cual sufrirán la
Gran Tribulación al igual que los judíos y los gentiles.
Ellos tendrían que haberse ido en el rapto pero, por
no haber estado consagrados 100% al Señor, ahora,
durante la Gran Tribulación, tendrán que probar su fe
a cada instante y hasta el fin, sufriendo pruebas
terribles, para conservar su salvación, incluso a costa
de perder la vida.
Mateo, 24:13 Mas el que persevere hasta el
fin, éste será salvo.

Estas palabras de Jesús no están destinadas


a la iglesia (que habrá sido raptada antes de
la Gran Tribulación) sino a los cristianos
tibios que no hayan participado del rapto y a
los incrédulos (judíos y gentiles) que se
conviertan durante la Gran Tribulación. A
todos estos se les llama los “santos de la
tribulación” (muchos morirán como mártires).
Tendrán que “perseverar hasta el fin” para
ser salvos.
Apocalipsis, 7:9 Después de esto miré, y he aquí
una gran multitud, la cual nadie podía contar, de
todas naciones y tribus y pueblos y lenguas,
que estaban delante del trono y en la presencia
del Cordero, vestidos de ropas blancas, y con
palmas en las manos; 7:13 Entonces uno de los
ancianos habló, diciéndome: Estos que están
vestidos de ropas blancas, ¿quiénes son, y de
dónde han venido? 7:14 Yo le dije: Señor, tú lo
sabes. Y él me dijo: Estos son los que han salido
de la gran tribulación, y han lavado sus ropas, y
las han emblanquecido en la sangre del
Cordero. 7:15 Por esto están delante del trono
de Dios, y le sirven día y noche en su templo;
En el libro de Apocalipsis, Juan es transportado al cielo
y ve a una multitud “vestida de ropas blancas y con
palmas en las manos”. Uno de los ancianos que adoran
a Dios le pregunta quienes son y de donde han venido.
Juan no los reconoce (un indicio de que no son la
iglesia) y le dice al anciano: tu lo sabes. El anciano
responde: son los que han salido de la gran tribulación.
¿Cómo salieron de la Gran Tribulación?. Muriendo
como mártires (porque en la visión de Juan están en el
cielo). Y están con palmas en las manos y “sirven en el
templo día y noche”. Claramente no son la iglesia
cuyos miembros están destinados a ser “reyes y
sacerdotes”. Por lo tanto, los “santos de la tribulación”
no solamente tendrán que pasar por pruebas mas
duras para salvarse sino que, además, no tendrán los
privilegios a los que esta destinada la iglesia.
RESPECTO DE LA VENIDA DEL SEÑOR
2 Tesalonicenses, 2:1 Pero con respecto a la venida de
nuestro Señor Jesucristo, y nuestra reunión con él, os
rogamos, hermanos, 2:2 que no os dejéis mover fácilmente
de vuestro modo de pensar, ni os conturbéis, ni por
espíritu, ni por palabra, ni por carta como si fuera nuestra,
en el sentido de que el día del Señor está cerca.

En estos pasajes, Pablo habla de la venida del Señor y de


“nuestra reunión con El”, es decir, Pablo no esta hablando
de la segunda venida sino del rapto o arrebatamiento de la
iglesia donde, como vimos, nos “reuniremos con el Señor
en el aire”. En la segunda venida, al final de la Tribulación
total de 7 años, Cristo no viene a reunirse con nadie sino
que viene a pelear contra el anticristo, con su iglesia con la
cual se reunió antes en el rapto. De este modo, cuando
Pablo dice respecto a la venida del Señor y nuestra reunión
con El se esta refiriendo al rapto.
Pablo les advierte a los tesalonicenses que no se
turben ni se dejen convencer (no se dejen mover
fácilmente de su modo de pensar) en cuanto a que la
venida del Señor y nuestra reunión con El (el rapto)
esta cerca:

[a] ni por espíritu (se refiere a los espíritus


engañadores y las doctrinas de demonios de 1
Timoteo, 4:1);
[b] ni por palabra (soltada por algún falso profeta);
[c] ni por “carta como si fuera nuestra” (probablemente
los tesalonicenses recibieron, en algún momento,
alguna carta como si fuera de Pablo pero que no era de
Pablo; tales son las artimañas del enemigo para
infiltrar y pervertir el Evangelio verdadero);
2 Tesalonicenses, 2:3 Nadie os engañe en ninguna manera;
porque no vendrá sin que antes venga la apostasía, y se
manifieste el hombre de pecado, el hijo de perdición, 2:4 el
cual se opone y se levanta contra todo lo que se llama Dios
o es objeto de culto; tanto que se sienta en el templo de
Dios como Dios, haciéndose pasar por Dios.

Es decir, el Señor no vendrá y, por lo tanto, no nos


reuniremos con El (el rapto no ocurrirá) hasta que no pasen
2 cosas:

[1] la apostasía, es decir, el abandono de la fe (en una


escala importante) dentro de la iglesia (un inconverso no
puede apostatar porque no puede abandonar lo que jamás
tuvo); y
[2] la manifestación del “hijo de perdición”, es decir, el
anticristo;
Esta manifestación consiste en que (el anticristo) va
a entrar en un tercer templo (aun no construido) y se
va a autoproclamar “Dios”. Esta es la manifestación
de la “abominación desoladora” de la que hablo el
profeta Daniel (Mateo, 24:15). Y no solo se opondrá a
Dios sino a “todo lo que es objeto de culto”, es decir,
se opondrá incluso a las religiones falsas (paganas)
porque pretenderá que se le adore únicamente a el
como a un “dios”. Según Pablo, entonces, el rapto
de la iglesia no ocurrirá hasta que:

[1] venga la apostasía dentro de la iglesia y alcance


niveles alarmantes; y
[2] se manifieste el “hijo de perdición” (el anticristo);
Esto, por supuesto, nos conduce o nos acerca a la
doctrina mesotribulacionista en cuanto a la época de
ocurrencia del rapto ya que, según Pablo, la iglesia
vera la manifestación del anticristo (lo cual ocurre a
mitad de la Tribulación total de 7 años).

Por su parte, la apostasía tendrá 2 dimensiones:

[1] una dimensión teológica: la desviación y el rechazo


total o parcial de las enseñanzas de las Escrituras; y

[2] una dimensión moral: se predicara sana doctrina


pero tolerando el pecado y la inmoralidad dentro de la
iglesia;
¿Que significa que el anticristo se haga
manifiesto?. Se opondrá (lo veremos)
contra Dios tanto (hasta el punto) de
sentarse en el templo de Dios y hacerse
pasar por Dios. O sea que, de acuerdo a
estas palabras de Pablo, la iglesia, antes
de ser arrebatada, tendría que ver a la
abominación desoladora manifestada
(Mateo, 24:15), por lo que un tercer
templo tendrá que ser construido en los
días de la iglesia.
LA MANIFESTACION DEL HOMBRE DE PECADO
2 Tesalonicenses, 2:5 ¿No os acordáis que cuando yo
estaba todavía con vosotros, os decía esto? 2:6 Y ahora
vosotros sabéis lo que lo detiene, a fin de que a su
debido tiempo se manifieste. 2:7 Porque ya está en
acción el misterio de la iniquidad; sólo que hay quien al
presente lo detiene, hasta que él a su vez sea quitado de
en medio. 2:8 Y entonces se manifestará aquel inicuo, a
quien el Señor matará con el espíritu de su boca, y
destruirá con el resplandor de su venida; 2:9 inicuo cuyo
advenimiento es por obra de Satanás, con gran poder y
señales y prodigios mentirosos, 2:10 y con todo engaño
de iniquidad para los que se pierden, por cuanto no
recibieron el amor de la verdad para ser salvos. 2:11 Por
esto Dios les envía un poder engañoso, para que crean la
mentira, 2:12 a fin de que sean condenados todos los que
no creyeron a la verdad, sino que se complacieron en la
injusticia.
Al momento de escribir esta segunda carta a los
tesalonicenses, Pablo les dice que ya (en ese tiempo)
estaba en acción el “misterio de la iniquidad”. ¿Qué es
este “misterio de la iniquidad”?. Es la actividad
secreta de los poderes del mal. Esta afirmación de
Pablo de que ya, en sus días, estaba en acción el
“misterio de la iniquidad” se corresponde con la
afirmación de Juan de que, también en sus días, “han
surgido muchos anticristos” (1 Juan, 2:18). Pablo les
dice a los tesalonicenses que, cuando todavía estaba
con ellos, el les había dicho personalmente que era lo
que detenía la acción de este “misterio de la
iniquidad” (de esta actividad maligna) y agrega que,
cuando el que lo detiene sea quitado de en medio, esta
maldad se manifestara en aquel inicuo a quien el
Señor matara con el espíritu de su boca.
El único que tiene poder para limitar y detener esta
actividad maligna (este “misterio de la iniquidad”) es el
Espíritu Santo (es Dios). Pero, en algún momento, el
Espíritu Santo será quitado de en medio, lo cual no
significa que será quitado del mundo sino que cesara su
influencia que restringe la iniquidad, es decir, serán
quitadas todas las limitaciones contra el pecado y
comenzara la rebelión de Satanás. Como la iglesia es el
medio por el cual actúa el Espíritu Santo, al ser arrebatada
de la tierra, el Espíritu Santo permanecerá en el mundo
(convenciendo de pecado y capacitando y convirtiendo
personas a Cristo) pero no actuara para detener y limitar
el mal, ahora totalmente desenfrenado, porque la iglesia
ya no estará presente. O sea: si actualmente no vemos
cosas peores es por la presencia en el mundo del Espíritu
Santo actuando a través de la iglesia.
El Espíritu Santo no va a abandonar el planeta
porque es Dios y uno de los atributos de Dios, que
comparten las 3 personas de la Trinidad, es la
omnipresencia (es imposible que Dios no este en
un lugar). Lo que si sucederá es que el Señor, el
Espíritu Santo, Dios ya no actuara directamente
para refrenar el mal porque le va a faltar su brazo
derecho, es decir, la carne que utiliza el Espíritu
Santo para modificar las cosas en el mundo
conforme al plan de Dios y que es la iglesia, la cual
ya no estará por haber sido raptada. Este inicuo,
cuyo advenimiento es por obra de Satanás, dice
Pablo refiriéndose al anticristo, será un
gobernante mundial que, al iniciar los últimos 7
años de la historia hará un pacto de paz con Israel.
Terminara de revelar su verdadera identidad
cuando 3 años y ½ después (a mitad de los 7 años)
rompa ese pacto con Israel (Daniel, 9:27), llegue a
ser gobernante mundial, se declare a si mismo
“Dios”, profanando un tercer templo (aun no
construido), que utilizara como centro de sus
pronunciamientos. Mediante el poder de Satanás y
utilizando los medios masivos de comunicación
(en especial la TV), el anticristo hará grandes
señales, milagros y portentos para propagar el
error. Estos milagros genuinos (serán verdaderos
actos sobrenaturales), engañaran a la mayoría que
no acepto la verdad de Jesucristo, para que
acepten la mentira y sean condenados, lo cual será
permitido por Dios.
EL INICIO DE LOS ULTIMOS 7 AÑOS
Hasta ahora hemos hablado de que el tiempo total de
la Tribulación es de 7 años, de que a mitad de dicho
periodo (a los 3 años y ½) se manifestará la
“abominación desoladora” (Mateo, 24:15), de que, a
partir de aquí, comenzará la Gran Tribulación y de que,
de este modo, la segunda venida de Cristo seria
conocida ya que se producirá al final de la Gran
Tribulación, es decir, 3 años y ½ después de la
manifestación de la “abominación desoladora” (Mateo,
24:15). También dijimos que la iglesia no entrara en la
Gran Tribulación, por lo que tendrá que ser raptada en
algún momento de la primera mitad de estos 7 años.
Pero no hemos dicho nada acerca de cuando inicia
este periodo total de 7 años. ¿Cómo sabemos cuando
inicia este periodo?. ¿A partir de que momento
empezamos a contar?.
La respuesta esta en el libro de Daniel:

Daniel, 9:24 Setenta semanas están determinadas


sobre tu pueblo y sobre tu santa ciudad, para
terminar la prevaricación, y poner fin al pecado, y
expiar la iniquidad, para traer la justicia
perdurable, y sellar la visión y la profecía, y ungir
al Santo de los santos. 9:25 Sabe, pues, y
entiende, que desde la salida de la orden para
restaurar y edificar a Jerusalén hasta el Mesías
Príncipe, habrá siete semanas, y sesenta y dos
semanas; se volverá a edificar la plaza y el muro
en tiempos angustiosos. 
Daniel, 9:26 Y después de las sesenta y dos
semanas se quitará la vida al Mesías, mas
no por sí; y el pueblo de un príncipe que ha
de venir destruirá la ciudad y el santuario; y
su fin será con inundación, y hasta el fin de
la guerra durarán las devastaciones. 9:27 Y
por otra semana confirmará el pacto con
muchos; a la mitad de la semana hará cesar
el sacrificio y la ofrenda. Después con la
muchedumbre de las abominaciones vendrá
el desolador, hasta que venga la
consumación, y lo que está determinado se
derrame sobre el desolador.
A estos versículos que acabamos de leer del libro de
Daniel (Daniel, 9:24-27) se los conoce con el nombre
de “las 70 semanas de Daniel”. Este fue un periodo de
tiempo, que le fue revelado a Daniel, sobre el que
profetizo Daniel, en el cual iban a ocurrir una serie de
eventos que iban a ser claves para Israel. La profecía
es para Israel, ya que Daniel, 9:24 dice: “Setenta
semanas están determinadas sobre tu pueblo [el
pueblo de Daniel era Israel] y sobre tu santa ciudad [la
santa ciudad es Jerusalén]”. El periodo total de
tiempo al que se refiere la profecía son 70 semanas.
Pero estas semanas no son “semanas de días” sino
“semanas de años” con lo cual el periodo total al que
se refiere la profecía es de 490 años (70 semanas x 7
años) en los cuales iban a ocurrir una serie de
eventos cruciales para Israel.
¿Desde donde empezamos a contar estos 490 años?. La
misma profecía lo dice en Daniel, 9:25: “desde la salida de
la orden para restaurar y edificar a Jerusalén”. ¿Y hasta
donde llega?. También la misma profecía lo dice: “hasta el
Mesías Príncipe”. Y dice mas: dice que entre estos dos
eventos (entre la salida de la orden para edificar Jerusalén
hasta el Mesías) habrá 69 semanas (en realidad la profecía
dice 7 semanas y 62 semanas) o, lo que es lo mismo, 483
años (69 semanas x 7 años). La salida de la orden para
reedificar Jerusalén se produjo en el año 444 a.C.. Si a
estos 444 a.C. le restamos los 483 años, tendríamos que
llegar hasta el Mesías, que murió en el año 33 d.C.. Pero si
hacemos esta cuenta, desembocamos en el año 39 d.C. y si
contamos los años transcurridos desde 444 a.C. hasta 33
d.C. suman 476 años y no los 483 años de los que habla la
profecía, con lo cual las cuentas no cierran. ¿Por qué no
cierran?.
Porque en los tiempos bíblicos se usaba el
“calendario lunar”, donde los meses eran todos de 30
días y los años de 360 días y en los tiempos modernos
usamos el “calendario gregoriano” donde no todos
los meses tienen 30 días y donde un año tiene 365
días. ¿Cómo armonizamos ambos calendarios?. Muy
fácil. Si multiplicamos los 483 años por 360 días (lo
cual da un total de 173.880 días) y luego dividimos ese
numero por 365 días la cuenta da 476,383562 años (la
porción decimal nos lleva puntualmente hasta la fecha
exacta en que fue crucificado el Mesías). Es decir, 483
años de 360 días equivalen a 476 años de 365 días,
con lo cual las cuentas si cierran y vemos que desde
la salida para reedificar Jerusalén hasta el Mesías
Príncipe si transcurrió el tiempo que dice la profecía:
69 semanas o 483 años.
Pero la profecía habla de un periodo de 490 años. Desde
la salida de la orden para reedificar Jerusalén hasta hoy,
por ejemplo, han pasado mucho mas que 490 años.
¿Qué paso con esta profecía?. Paso que el “reloj
profético de Dios se detuvo”. ¿Dónde se detuvo?. ¿Por
qué se detuvo?. Se detuvo en la cruz de Cristo porque
ahí nació la iglesia, es decir, comenzó la “era de la
iglesia”. Vimos que desde la salida de la orden para
reedificar Jerusalén hasta el Mesías Príncipe
transcurrieron 483 años. O sea que faltan todavía 7 años
por cumplirse. ¿Cuando se va a reactivar el “reloj
profético de Dios”?. Con el rapto de la iglesia o antes, si
es que la iglesia, en lugar de ser arrebatada al inicio de
los últimos 7 años, es arrebatada a mitad de dicho
periodo. El “reloj profético de Dios” es Israel y se va a
reactivar cuando Dios empiece a tratar nuevamente con
Israel.
¿Cuándo empiezan a contar los últimos 7 años, que fue la
pregunta que nos hicimos al inicio?.

La respuesta la tenemos en este pasaje:

Daniel, 9:27 Y por otra semana confirmará el pacto con muchos;


a la mitad de la semana hará cesar el sacrificio y la ofrenda.

El pasaje esta hablando del anticristo o de ese líder mundial que


va a surgir y que luego se convertirá en el anticristo. Los últimos
7 años comenzaran a contar con la firma de un acuerdo mundial
por la paz, referido a Israel (“por otra semana confirmará el
pacto con muchos”). Luego, a mitad de semana (a los 3 años y
½) quebrantara este pacto y se manifestara como el anticristo”
dentro del (tercer) templo (“a la mitad de la semana hará cesar el
sacrificio y la ofrenda”). Era necesario, entonces, primero
entender la profecía de “las 70 semanas de Daniel” para
responder esto.
ESQUEMA DE LOS ULTIMOS 7 AÑOS
3,5

1 2 3 4 5 6 7
Semana 70 de Daniel
A
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RAPTO DE LA IGLESIA
PAZ Y SEGURIDAD
1 Tesalonicenses, 5:3 que cuando digan: Paz
y seguridad, entonces vendrá sobre ellos
destrucción repentina, como los dolores a la
mujer encinta, y no escaparán.

Pablo dice que cuando el mundo hable de


(cuando digan) “paz y seguridad” (no
cuando la consigan), vendrá sobre ellos
destrucción repentina. ¿Qué es esta
“destrucción repentina”?. ¿Desastres
naturales?. No. Esta “destrucción repentina”
es la “guerra de Gog y Magog” de Ezequiel,
38 (la tercera guerra mundial).
La “paz y seguridad” de la que habla Pablo (1
Tesalonicenses, 5:3) no parece ser la paz (el pacto) que
el anticristo firmara con Israel (lo que dará inicio a los
últimos 7 años o la Tribulación) y que luego, a los 3 años
y ½ quebrantara y se autoproclamara “Dios” en el
(tercer) templo. La “paz y seguridad” de la que habla
Pablo pareciera ser una paz mas endeble y fugaz, a la
que sobrevendrá “destrucción repentina”, es decir, la
“guerra de Gog y Magog” de Ezequiel 38, cuando una
coalición de naciones musulmanas, comandada por
Rusia, ataque Israel y sean destruidos milagrosamente
por Dios. Es de esperar que, luego de la tercera guerra
mundial, ahí si surgirá un líder mundial (que hoy no
existe), que aparecerá como el “salvador del mundo” y
que firmara un pacto de paz con Israel (dando inicio, así,
a la Tribulación de 7 años), que 3 años y medio después
quebrantara y se manifestara abiertamente.
LAS ABOMINACIONES DESOLADORAS

Hemos hablado bastante acerca de la


“abominación desoladora” de la que hablo el
profeta Daniel y que podemos encontrar en
Mateo, 24:15, Daniel, 9:27 y 2
Tesalonicenses, 2:3-4. Esta “abominación
desoladora” se refiere al anticristo de los
últimos tiempos. Pero la “abominación
desoladora de la que hablo el profeta Daniel”
también se aplica a un personaje histórico de
la antigüedad, quien profano el (segundo)
templo de Jerusalén.
En el libro de Daniel, el ángel Gabriel le da al profeta
Daniel la siguiente profecía:

Daniel, 8:3 Alcé los ojos y miré, y he aquí un carnero


que estaba delante del río, y tenía dos cuernos; y
aunque los cuernos eran altos, uno era más alto que
el otro; y el más alto creció después. 8:4 Vi que el
carnero hería con los cuernos al poniente, al norte y
al sur, y que ninguna bestia podía parar delante de
él, ni había quien escapase de su poder; y hacía
conforme a su voluntad, y se engrandecía. 8:5
Mientras yo consideraba esto, he aquí un macho
cabrío venía del lado del poniente sobre la faz de
toda la tierra, sin tocar tierra; y aquel macho cabrío
tenía un cuerno notable entre sus ojos. 
Daniel, 8:6 Y vino hasta el carnero de dos cuernos,
que yo había visto en la ribera del río, y corrió
contra él con la furia de su fuerza. 8:7 Y lo vi que
llegó junto al carnero, y se levantó contra él y lo
hirió, y le quebró sus dos cuernos, y el carnero no
tenía fuerzas para pararse delante de él; lo derribó,
por tanto, en tierra, y lo pisoteó, y no hubo quien
librase al carnero de su poder. 8:8 Y el macho
cabrío se engrandeció sobremanera; pero estando
en su mayor fuerza, aquel gran cuerno fue
quebrado, y en su lugar salieron otros cuatro
cuernos notables hacia los cuatro vientos del
cielo. 8:9 Y de uno de ellos salió un cuerno
pequeño, que creció mucho al sur, y al oriente, y
hacia la tierra gloriosa. 
Luego, el ángel Gabriel le da a Daniel la interpretación de esta
visión profética:

Daniel, 8:16 Y oí una voz de hombre entre las riberas del Ulai, que
gritó y dijo: Gabriel, enseña a éste la visión. 8:17 Vino luego cerca
de donde yo estaba; y con su venida me asombré, y me postré
sobre mi rostro. Pero él me dijo: Entiende, hijo de hombre, porque
la visión es para el tiempo del fin. 8:18 Mientras él hablaba
conmigo, caí dormido en tierra sobre mi rostro; y él me tocó, y me
hizo estar en pie. 8:19 Y dijo: He aquí yo te enseñaré lo que ha de
venir al fin de la ira; porque eso es para el tiempo del fin. 8:20 En
cuanto al carnero que viste, que tenía dos cuernos, éstos son los
reyes de Media y de Persia. 8:21 El macho cabrío es el rey de
Grecia, y el cuerno grande que tenía entre sus ojos es el rey
primero. 8:22 Y en cuanto al cuerno que fue quebrado, y sucedieron
cuatro en su lugar, significa que cuatro reinos se levantarán de esa
nación, aunque no con la fuerza de él. 8:23 Y al fin del reinado de
éstos, cuando los transgresores lleguen al colmo, se levantará un
rey altivo de rostro y entendido en enigmas. 
La profecía habla de un “carnero” que tenía dos cuernos:
estos son los reyes de Media y de Persia, le dice el ángel
Gabriel a Daniel. La profecía habla también de que este
carnero fue vencido por un “macho cabrío”, que tenía un
cuerno notable entre sus ojos. El propio ángel Gabriel le
aclara a Daniel que el “macho cabrío” es el rey de Grecia (el
imperio griego) y que el “cuerno grande” que tenía entre sus
ojos es “el rey primero” (Alejandro Magno). La profecía
también dice que el macho cabrío (el imperio griego
comandado por Alejandro) se engrandeció sobremanera
pero que, estando en su mayor fuerza, el “gran cuerno” fue
quebrado (Alejandro Magno murió cuando estaba en su
apogeo). La profecía también dice que del “gran cuerno
quebrado” (de Alejandro Magno) salieron, a su vez, otros 4
cuernos notables (otros 4 reyes) y que de uno de los
cuernos (de uno de esos 4 reyes) salió un cuerno pequeño
(otro rey menor) que creció mucho al sur y al oriente y
“hacia la tierra gloriosa” (hacia Jerusalén).
El ángel Gabriel le dice a Daniel que los 4 cuernos que
salieron del cuerno quebrado son cuatro reinos (reyes),
que no iban a tener la fuerza del cuerno quebrado (4
reyes que no iban a ser tan poderosos como Alejandro
Magno). Del gran cuerno quebrado (Alejandro Magno),
saldrían 4 reyes y de uno de esos reyes saldría un rey
que marcharía hacia Jerusalén y profanaría el templo. El
profeta Daniel, que vivió durante el apogeo del imperio
babilónico (al mando de Nabucodonosor quien, a su vez,
fue sucedido por su hijo Belsasar) y que vivió también la
caída y dominación del imperio babilónico a manos del
imperio medo-persa, no vio, sin embargo, el
cumplimiento de esta profecía (la caída, a su vez, del
imperio medo-persa a manos del imperio griego
comandado por Alejandro y la profanación del templo de
Jerusalén por un rey descendiente de uno de los 4 reyes
que sucedería a Alejandro tras su muerte).
Los Macabeos fueron una familia numerosa judía, que
tomaron las armas contra los griegos. Y ellos ganaron
muchos adeptos. De aquí surgieron los “zelotes”, que
representaron la resistencia armada judía durante la época de
la dominación romana (Barrabas era “zelote”). El imperio
griego fue enfrentado por una minoría judía: los Macabeos.
 
¿Qué ocurrió en los días de los Macabeos?.
 
Tras la muerte de Alejandro Magno, cuatro de sus generales,
tomaron el reino: Lisímaco, Seleuco, Ptolomeo y Casandro.
Uno gobernó Siria, otro Egipto, otro Arabia y otro Israel. Y de
Siria (gobernada por Seleuco, quien fundo la dinastía
seleucida) salió Antíoco Epifano o Antíoco IV, que profano el
templo de Israel, levantando una imagen de Zeus dentro del
mismo y sacrificando un cerdo en el altar (esta es la
“abominación desoladora” de la que hablo el profeta Daniel).
ANTIOCO IV
En 167 a.C., Antíoco IV organizó una expedición contra
Jerusalén, la cual saqueó. Según el Libro de los Macabeos,
promulgó varias ordenanzas de tipo religioso: trató de suprimir
el culto a Jehová, prohibió el judaísmo, suspendiendo toda
clase de manifestación religiosa, mandó que se comieran
alimentos considerados impuros y trató de establecer el culto a
los dioses griegos. Pero el sacerdote judío Matatías y sus dos
hijos llamados Macabeos consiguieron levantar a la población
en su contra y lo expulsaron.
 
Cuando la ciudad de Jerusalén estaba sitiada ocurrió un
milagro impresionante, que dio origen a una de las fiestas más
importantes de la nación de Israel. El (segundo) templo vivió
uno de sus días más difíciles. La “Menorah” es el conocido
candelabro de 7 brazos que Dios había ordenado construir a
Moisés y que se encontraba en el templo. Este candelabro tenía
que permanecer encendido de día y de noche (no podía
apagarse nunca).
Lo que hacía arder a este candelabro era aceite de
oliva. Pero la ciudad de Jerusalén se encontraba
sitiada (rodeada) por los griegos  y no había manera
de conseguir más aceite, con lo cual este
candelabro amenazaba con apagarse, motivo por el
cual los sacerdotes judíos estaban desesperados.
 
Cuenta la historia que uno de los levitas, en unos
pasadizos secretos del templo, encontró
milagrosamente una botella, sin abrir, que contenía
aceite de oliva. Este levita corrió entonces al sumo
sacerdote y le mostro la botella que había
encontrado, con el aceite de oliva para hacer arder
el candelabro.
La porción encontrada de aceite de oliva en la botella alcanzaba
solo para un día, pero, milagrosamente, alcanzo para hacer arder
el candelabro durante 8 días. Por eso también hay un candelabro
que tiene 9 brazos, con 9 velas y es el candelabro de “janukah”.
“Janukah” es el nombre de una fiesta que también se la conoce
como la fiesta de las luces o de la dedicación, recordando la
gesta de los Macabeos. ¿Porque tiene 9 velas este candelabro?.
Porque con una vela se van encendiendo las otras 8, porque el
milagro duro 8 días. Al final de los 8 días Israel venció a los
griegos. Un milagro de Dios, un milagro de sobrevivencia. Los
judíos tuvieron que desarmar el altar, donde se había sacrificado
el cerdo, y construir un nuevo altar. Por eso a la fiesta de
“Janukah” también se la llama “la fiesta de la dedicación”,
porque tuvieron que re-dedicar el altar nuevamente a Dios. Sacar
las piedras y colocar nuevas piedras y hacer nuevos sacrificios
en el nuevo altar. En esta fiesta de “Janukah”, el candelabro de 9
velas no se enciende todo de golpe, sino que se enciende una
vela por noche.
Recién en la octava noche el candelabro arde
completo. Si Israel no hubiese vencido en la gesta de
los Macabeos, Jesucristo no hubiese nacido, porque
lo que pretendían los griegos (impulsados por
Satanás, claro está) era exterminar al pueblo judío, a la
nación de Israel, para que precisamente el Mesías no
venga. Tal es la relevancia histórica de la fiesta del
“Janukah”. ¿Jesucristo celebro la fiesta del Janukah?.
 
Juan, 10:22 Celebrábase en Jerusalén la fiesta de la
dedicación. Era invierno, 10:23 y Jesús andaba en el
templo por el pórtico de Salomón. 10:24 Y le rodearon
los judíos y le dijeron: Hasta cuándo nos turbarás el
alma? Si tú eres el Cristo, dínoslo abiertamente. 10:25
Jesús les respondió: Os lo he dicho, y no creéis;
 
El versículo anterior dice que “celebrábase en
Jerusalén la fiesta de la dedicación”. La
dedicación del templo, sin dudas la fiesta de
“Janukah”. Era invierno, dice el versículo. Esto
es a mediados de diciembre, que es cuando los
judíos celebran la fiesta de “Janukah”. Esta
fiesta es tan importante que el mismísimo Mesías
la vivió en sus días.

Lo que hizo, en definitiva, Jesucristo en Mateo,


24:15 es tomar la profecía de Daniel y decir: ojo
que esto que profetizo Daniel y que ya paso,
hacia el final de los tiempos va a volver a pasar
(van a volver a profanar el templo).
PAZ Y SEGURIDAD
Puedes ver un video sobre la firma de un
acuerdo mundial de paz firmado por las
potencias europeas y EEUU con Irán en
abril de este año 2015 en la siguiente
dirección:

https://www.youtube.com/watch?v=4MGu
PGryi7M
SEÑALES DE LA SEGUNDA VENIDA DE CRISTO

[a] señales generales: pestes, hambres, guerras y rumores


de guerras, terremotos, multiplicación de la maldad, etc.
[b] restauración de Israel como Estado político en mayo de
1948 (Mateo, 24:32; Ezequiel, 37:21);
[c] recupero del control total de Israel sobre Jerusalén, en
1967, en la "Guerra de los 6 días" (Lucas, 21:24);
[d] acuerdo global de paz (1 Tesalonicenses, 5:3);
[e] lideres mundiales preparando el camino para el
anticristo;
[f] lunas de sangre (Joel, 2:31 El sol se convertirá en
tinieblas, y la luna en sangre, antes que venga el día
grande y espantoso de Jehová;
[g] surgimiento de una religión mundial;
[h] surgimiento de una moneda única a nivel mundial;
ISRAEL RECUPERA EL CONTROL DE JERUSALEN

Lucas, 21:24 Y caerán a filo de espada, y serán


llevados cautivos a todas las naciones; y Jerusalén
será hollada por los gentiles, hasta que los tiempos
de los gentiles se cumplan.

Este pasaje de Lucas contiene la profecía relativa a la


dispersión (diáspora) de Israel, profetizada por
Moisés (Deuteronomio, 30:1), que sobrevino sobre
Israel, junto con la destrucción del templo en 70 d.C.,
por haber rechazado al Mesías. Jerusalén, hasta que
Israel recupero su control en 1967, fue gobernada por
los gentiles durante casi 2.000 años, “hasta que los
tiempos de los gentiles se cumplan” dice la profecía.
El recupero del 100% del control de Israel
sobre Jerusalén es una señal, precisamente, de
que “los tiempos de los gentiles están
cumplidos”. En el año 1967, en la llamada
"guerra de los 6 días", Israel recupero el control
total de la ciudad de Jerusalén. Hay un esfuerzo
mundial para dividir de nuevo la ciudad (como
parte del reconocimiento de un "estado
palestino"). Casi todos los líderes de Israel han
estado firmes sobre su compromiso de
mantener Jerusalén unida para siempre como la
capital de Israel, pero los líderes incrédulos del
mundo están resueltamente determinados a
dividirla.
LIDERES MUNDIALES PREPARANDO EL
CAMINO PARA EL ANTICRISTO
El ex secretario general de la ONU, el africano Kofi
Annan (antecesor del actual secretario Ban Ki-moon)
Kofi Annan, en su momento, dijo:

“Si no hallamos la paz con urgencia en oriente


medio, el mundo se incendiara. Además, es de
imperiosa necesidad que, en este tiempo, surja un
nuevo liderazgo mundial que potencie la unidad de
los pueblos, que sea capaz de establecer un nuevo
orden mundial, que abra la puerta al mundo para
una nueva era de armonía internacional, que
comande el proceso de globalización no solo en el
área económica, sino que gobierne con leyes más
justas la política y la sociedad, instaurando un
nuevo régimen para todos los humanos, sin
distinción alguna, venga de Dios o del infierno
mismo. Lo recibiremos con los brazos abiertos”.
PAPA FRANCISCO I
Recientemente, el Papa Francisco I dijo:

“LA CRUZ DE CRISTO FUE UN FRACASO”.

Puedes verlo en un video en la siguiente


dirección:

https://www.youtube.com/watch?v=EBLqSF
fm1LM
LUNAS DE SANGRE
Puedes ver el significado de las “lunas
de sangre” en un video en la siguiente
dirección:

https://www.youtube.com/watch?v=MhfA
d81WU3k

Recientemente se vio una luna


totalmente roja producto de un eclipse.
CONCLUSION
Hace unos pocos años atrás, pongamos 30 años, la “marca de la
bestia” de la que habla el libro de Apocalipsis (sin la cual nadie
podrá comprar ni vender) y de la cual hablamos en este video,
era ciencia ficción y hoy esta a la vuelta de la esquina, porque ya
esta la tecnología y porque, como habrás notado, también esta
el poder del Estado que, cada vez mas, lo quiere controlar todo.
Los gobiernos van a entregar su poder al diablo (Apocalipsis,
17:12 Y los diez cuernos que has visto, son diez reyes, que aún
no han recibido reino; pero por una hora recibirán autoridad
como reyes juntamente con la bestia. 17:13 Estos tienen un
mismo propósito, y entregarán su poder y su autoridad a la
bestia). Es decir, algo que decía la Biblia y de los cual muchos se
rieron hoy es posible y, además, en algunos casos, ya se esta
haciendo. Israel, después de 2000 años de diáspora (dispersión)
y habiendo existido el holocausto nazi, volvió a ser un Estado
independiente. La Biblia también dijo que esto pasaría. Se esta a
punto de acabar la gracia y van a comenzar los juicios de Dios
sobre este mundo. Ya no importa si sos judío o gentil. Busca a
Dios mientras pueda ser hallado.
Isaías, 55:6 Buscad a
Jehová mientras puede
ser hallado, llamadle en
tanto que está cercano. 

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