Está en la página 1de 16

LIBERACION DE ENERGETICOS E

INFLACION
 ERIKA MARICELA DE LEON DEAN
 TEORIA ECONOMICA
 1°B
Definiciones

Liberalización Energéticos Inflación



Consiste en el proceso Denominamos recursos energéticos a
los medios o recursos que nos ofrece la
La inflación es el aumento
generalizado y sostenido de los
de reducir o eliminar las naturaleza, y a partir de los cuales,
mediante un proceso industrial, se precios de bienes y servicios en un
restricciones o obtiene alguna forma de energía que país durante un periodo de tiempo
puede ser directamente utilizada por el sostenido, normalmente un año.
regulaciones consumidor o por alguna actividad Cuando el nivel general de precios
previamente impuestas productiva.
sube, con cada unidad de moneda
• se refiere a la cantidad de energía se adquieren menos bienes y
en un mercado necesaria para la fabricación y servicios.
suministro de un producto, material o
servicio desde la extracción de la
materia prima hasta su desecho o
eliminación. El contenido de energía
también se denomina "energía virtual",
"energía incrustada", "energía gris" o
"energía oculta".
QUE ES LA LIBERACION DE ENERGETICOS

• La liberación de energéticos es permitir que la libre competencia


de los agentes lleve a un equilibrio entre la oferta y demanda en
el mercado que se presenta en bienes o servicios. (petróleo,
carbón, gas natural, energía hidroeléctrica)
INFLACION DE ENERGETICOS EN MEXICO

México registró la segunda mayor inflación de energéticos y alimentos entre


los países de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo
Económicos (OCDE) durante febrero.
De acuerdo con el comparativo mensual de inflación de la OCDE, se puede
identificar que la fluctuación anual de los precios de energéticos de México
en febrero fue de 8.1%, variación con la que se ubica debajo de Australia, el
líder de la inflación de energéticos, cuya variación de precios anual fue en
febrero de 11.2 por ciento.
Con este registro, la inflación de energéticos de México quedó por arriba de
la que promediaron los países miembros, que en el mes fue de 5.5 por
ciento.
El director de Investigación Económica del Banco de México
(Banxico), Daniel Chiquiar, explicó que la situación de los
precios energéticos en México refleja el impacto del proceso de
liberalización.
LÍDER DE INFLACIÓN GENERAL Y DE
ALIMENTOS

Los precios de alimentos en México registraron una variación de 7.7%


anual en el segundo mes del año, seis veces superior a la observada
por el promedio de los países OCDE, de 1.7% y se mantiene
liderando la inflación en este segmento de los países del grupo, por
cuarto mes consecutivo.
Tal como sucedió en enero, antes de México, sólo está la inflación de
alimentos de Turquía, cuyo registro anual es de 10.3 por ciento.
El comportamiento de ambas variaciones, la de precios de
energéticos y la de alimentos, contribuye a que la inflación general
mexicana se ubicara en febrero en 5.3 por ciento.
En este comparativo, el de inflaciones generales, México queda
también en el segundo sitio de la Organización, debajo sólo de
Turquía, que tuvo una variación de 10.3 por ciento.
En este comparativo de la OCDE, se puede identificar también
una primera desaceleración de la escalada general de precios en
México, tras el registro de enero, de 6.8 por ciento.
En el reporte de la OCDE, evidencian que, en la media de los
países, la inflación general repuntó a 2.2% en febrero, que es el
nivel más alto desde abril del 2012 y está por debajo de la que
registró México.
EL ARRASTRE INFLACIONARIO DE LOS
ENERGETICOS

En 2017, como para prácticamente todos los años del siglo XXI, el
gobierno federal presupuestó una variación acumulada anual del
Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) de tres por ciento.
Año tras año la meta fue ampliamente superada por el mercado, con
excepción de 2015. El punto álgido fue 2017, en que el INPC llegó a
6.7 por ciento, 2.23 veces el valor pronosticado, lo que coincidió con
la liberación adelantada de los precios de las gasolinas y el diésel de
2018 a 2017, así como con la elevación persistente, iniciada seis
meses antes, de los precios del gas y la electricidad para uso
industrial y de alto consumo residencial.
entre diciembre de 2016 y diciembre de 2017 el rubro de precios que
más creció dentro del INPC fue el de derivados del petróleo y el
carbón, con 23 por ciento, entre junio y diciembre de 2016 el precio de
la generación y transmisión de energía eléctrica había sido el mayor, al
aumentar 56.4 por ciento, Con esto, en el periodo acumulado que va
de junio de 2016 a la primera quincena de diciembre de 2017, la
energía eléctrica subió 58.7 por ciento; los energéticos en general,
32.2 por ciento, y los derivados de petróleo y carbón, en que se
incluyen las gasolinas y el diésel, casi 26 por ciento.
a partir de un nivel del salario mínimo muy bajo, cuya corrección
tenía que hacerse en algún momento, se llevó a cabo un alza real
en el periodo de 10 por ciento, no vista desde los años setenta del
siglo pasado, la cual se logró a partir de tres aumentos nominales,
que al acumularse ascendieron a 21 por ciento. Con esto, se dejó
pendiente para posiblemente diciembre de 2018 un nuevo
incremento, que deberá ser en ese momento de aproximadamente
15 por ciento, con el que dicha figura institucional se equiparará al
costo personal de la canasta alimentaria y no alimentaria calculada
por el Consejo para la Evaluación de la Política de Desarrollo Social
(CONEVAL).
Evidentemente la inflación tiene memoria, y varios de los
principales agentes formadores de precios tienden a seguir
aumentando durante 2018, en vez de retrotraerse,
particularmente: los energéticos, el costo de la mano de obra, el
transporte, la tasa de interés, el tipo de cambio y una serie de
productos de consumo básico. A esto hay que agregar dos
factores: la dependencia de México en los carburantes y el gas
natural importados, que se vuelve más lesiva en periodos con muy
bajas temperaturas, como la del invierno 2017-2018, y el
sobrecalentamiento de la economía mexicana por razones
electorales.

También podría gustarte