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CARACTERISTICAS

GENERALES DE LOS VIRUS


Los virus son agentes infecciosos
responsables de numerosas enfermedades
del hombre, de los animales y plantas y
pueden también infectar a las bacterias
(bacteriófagos).
Características de los virus

 Los virus tienen reservorios naturales.


 En general los virus afectan sólo a un tipo de célula. Estando dentro
de las células los virus pueden reproducirse, convirtiéndolas en
fábricas de nuevos virus.
 En este proceso la célula agota sus recursos y casi siempre muere.
Si muchas células son captadas por el virus, se produce una
enfermedad.
 Si el cuerpo está sano, tiene anticuerpos que lo defienden de los
virus por lo que las células infectadas por el virus serán atacadas
 La enfermedad puede relacionarse con la multiplicación del virus o
con la respuesta inmune.
CARACTERISTICAS DE LOS VIRUS

Debido a sus características especiales, como son su


pequeño tamaño y su parasitismo intracelular obligado, los
virus no pudieron ser estudiados hasta principios del siglo
XX, si bien algunas enfermedades producidas por ellos,
como la viruela y la rabia, ya se conocían desde la
antigüedad.
Los virus pueden definirse como agentes infecciosos
caracterizados por:
1- ser parásitos intracelulares obligados
2- su pequeño tamaño, de 20 a 250 nanómetros (nm)
3- poseer una estructura elemental y un mecanismo especial
de replicación.
Dado que los virus no son organismos celulares, carecen de
los constituyentes fundamentales para su crecimiento y
multiplicación, tales como los que poseen las células
procarióticas o eucarióticas, es decir carecen de sistemas
enzimáticos productores de energía, o necesarios para la
síntesis de ácidos nucleicos y proteínas, ribosomas, etc. Por
esto deben necesariamente utilizar los sistemas de la célula
que parasitan y por ello son parásitos intracelulares
obligados. Sin embargo, la mayoría de los virus poseen
enzimas especiales necesarias para iniciar su replicación,
como transcriptasas u otras enzimas.
Tamaño
La mayoría de los virus poseen un tamaño muy inferior
al de las bacterias. Por ello, sólo pueden observarse
con el microscopio electrónico.
Dado su pequeño tamaño es necesario utilizar para su
medición una medida inferior al micrón, denominada
nanómetro (nm) o milimicrón (mu) que equivales a 10-
9 metros.

Los virus mas pequeños, por ejemplo los que integran


la familia Picornaviridae, donde se incluye el virus de
la poliomielitis, miden alrededor de 27 nm y los más
grandes, como los de la familia Poxviridae, donde se
encuentra el virus de la viruela, miden
aproximadamente 250 nm.
Tamaño comparativo de los virus con otros agentes
infecciosos
ESTRUCTURA DE LOS VIRUS
ESTRUCTURA

En 1933, se determinó por primera vez la


composición química de un virus y se
observó que estaba constituida por ácidos
nucleicos y proteínas. Posteriormente, se
demostró que todos los virus poseen un solo
tipo de ácido nucleico ya sea ADN o ARN.
ESTRUCTURA
Una partícula vírica está constituida por el ácido nucleico,
denominado genoma, que se encuentra protegido por una
cubierta proteica denominada cápside.
Algunas familias de virus presentan por fuera de la cápside una
estructura de naturaleza lipoproteica denominada envoltura.
Se define como virión a la partícula viral completa e infectante. El
ácido nucleico, ya sea ADN o ARN constituye el nucleoide y,
asociado a proteínas, se designa como core viral. En el core se
encuentra toda la información genética del virus. El core está
protegido por la cápside y, en ciertos casos, por una envoltura.
La cápside está formada por subunidades
denominadas capsómeros.
Las funciones de la cápside son:
1- protección del ácido nucleico de factores
adversos como desecación, enzimas tisulares, etc
2- la unión del virus a los receptores específicos
presentes en las membranas tisulares
3- la de actuar como antígeno, estimulando la
respuesta inmune del huésped
Algunas familias de virus poseen, fuera de la
cápside, otra estructura de naturaleza lipoproteica
denominada envoltura. Aquellos virus que la poseen
se denominan envueltos, los que no la poseen se
denominan desnudos.
Dado que la envoltura está constituida por lipoproteínas,
todos los virus con envoltura son muy sensibles a los
solventes de lípidos, tales como éter y sales biliares. En la
envoltura se encuentran glicoproteínas que constituyen
importantes antígenos del virus. Las funciones de la
envoltura son similares a las de la cápside. Así, en los virus
envueltos, es la envoltura la que presenta las
glicoproteínas que permitirán la unión a receptores de la
célula huésped. Todos los virus con envoltura son muy
sensibles a la desecación, al pH ácido, a los solventes de
lípidos y a las sales biliares. Esto hace que su transmisión
fecal-oral no sea posible.
En cambio, la mayoría de los virus desnudos son
resistentes al medio externo, a la desecación y a
los solventes de lípidos. Por esta razón, los virus
desnudos pueden penetrar por vía digestiva ya
que resisten el pH ácido del estómago. Pueden
ser transmitidos por vía fecal oral, a través de
agua o alimentos contaminados o por manos u
objetos. Son ejemplos de virus desnudos
el Poliovirus, y los Adenovirus.
COMPOSICION QUIMICA DE LOS VIRUS

Ácidos nucleicos

Los virus se clasifican en dos grandes grupos


de acuerdo con el tipo de ácido nucleico que
poseen. Si éste es ADN se
denominan desoxirribovirus, si es ARN, se
denominan ribovirus.
PROTEINAS
Las proteínas constituyen del 50 al 90% de la masa de un virus. Según
el tamaño y complejidad del virión éste puede contener desde 2 a 30
polipéptidos estructurales deferentes.
Las proteínas del virión pueden ser estructurales o no estructurales. Se
define como proteína estructural aquella que está presente en el virión
en proporción importante y mantiene la estructura del mismo. El virión
contiene proteínas de superficie y proteínas internas. Las proteínas de
superficie constituyen los capsómeros, así como también las
proyecciones de la envoltura, denominadas peplómeros.
Las proteínas de superficie de los virus tienen las siguientes funciones:
1- Protección del genoma contra la acción de proteasas bacterianas o tisulares.
2- Afinidad con receptores tisulares, lo que iniciará la adsorción y penetración del
virus a la célula huésped, esta afinidad selectiva será la que determine el
tropismo del virus por determinados tejidos
3- Antigenicidad, ya que las proteínas externas son potentes inmunógenos, que
inducirán en un huésped inmunocompetente una respuesta inmune, mediada
fundamentalmente por anticuerpos neutralizantes. Estos anticuerpos son los
responsables de la protección del huésped.
Las proteínas internas del virión pueden ser proteínas
estructurales o no estructurales. Las proteínas estructurales
pueden ubicarse en la cara interna de la envoltura, en
capas de capsómeros colocados debajo de la cápside, y en
el centro del virión asociadas al core. Un ejemplo de
proteínas no estructurales son las enzimas requeridas para
el ciclo de replicación y que se sintetizan en las fases
tempranas de la replicación.
Las proteínas internas son en general , menos antigénicas
y los anticuerpos que inducen no son protectores.
La enorme diversidad de proteínas que presentan los virus
permiten distinguir entre virus de los diferentes grupos y,
aún dentro de un mismo grupo, identificar diferentes
serotipos( tipos antigénicos). Esto constituye una de las
bases de la clasificación viral
Glúcidos y Lípidos

Algunos virus poseen glúcidos y lípidos en pequeñas


cantidades. Los virus con envoltura contienen lípidos o
glucolípidos de origen celular, ya que adquieren su
envoltura por brotación en la membrana celular o
nuclear de la célula huésped. Todos los virus envueltos
son sensibles a los solventes de lípidos como éter,
cloroformo, sales biliares y detergentes.
Otros virus poseen pequeña cantidad de lípidos de
origen viral, como los poxvirus y glúcidos que forman
parte de las glicoproteínas presentes en la envoltura
como los mixovirus y paramixovirus.
SIMETRIA VIRAL

La simetría es la forma que adopta un virus en el


espacio y está dado por la estructura de su
nucleocápside. La simetría puede
ser helicoidal, icosaédrica o compleja.
CLASIFICACION VIRAL
Los virus pueden clasificarse de acuerdo a los huéspedes que
infectan, de acuerdo a su forma de transmisión, por sus
propiedades físico-químicas y por sus características
morfológicas.
1. De acuerdo con sus huéspedes, los virus pueden ser
clasificados como virus de vertebrados, virus de insectos, virus
de plantas, virus de bacterias (bacteriófagos) y virus de
parásitos. Inicialmente, los virus de clasificaron de acuerdo con
su especificidad de huésped, con el tipo de enfermedades
producidas o bien con su tropismo tisular. Así, por ejemplo,
los arbovirus replican en un artrópodo vector,
los poliovirus producen poliomielitis, los adenovirus se aislaron
de adenoides, etc.
1. Desde el punto de vista epidemiológico, los
virus pueden transmitirse por vía respiratoria,
digestiva, cutáneo mucosa o ingresar directamente a
la sangre a través de picaduras de artrópodos, en el
caso de los arbovirus, o bien transfusiones o
materiales contaminados con sangre, como es el
caso del virus de la hepatitis B, C, D, virus HIV y
HTLV. Algunos virus se transmiten a través de la
placenta, como es el caso del HIV o virus de la
rubeola, por vía lactogénica, y por transmisión
perinatal, en el canal de parto, como el HIV y el virus
de la Hepatitis B
Los virus entéricos se transmiten por vía fecal-oral
a través de agua o alimentos contaminados.
Penetran y replican primariamente en el tracto
gastrointestinal. Este grupo incluye numerosos virus
desnudos y por ello resistentes a la temperatura
ambiente, al ácido y sales biliares, como el caso de
los enterovirus (virus de la poliomielitis, Coxsackie,
virus de la hepatitis A), virus de la hepatitis C,
rotavirus, calcivirus, etc.
Los virus respiratorios penetran a través de la mucosa
respiratoria, por inhalación o por contacto con materiales
contaminados, como manos, máscaras de oxígeno, pañuelos,
etc; y producen patología localizada exclusivamente en el
aparato respiratorio. Este grupo incluye a los orthomixovirus,
muchos paramixovirus, coronavirus, rhinovirus y
algunos adenovirus.
.
Otros virus si bien penetran por vía respiratoria se
diseminan a otros órganos por viremia, es decir paso de
los virus a la sangre, como el virus del sarampión, el de
paperas, rubeóla y viruela.
Los arbovirus infectan a artrópodos hematófagos y
replican en ellos. Se transmiten al hombre o a los
animales por picadura del vector, por ejemplo
mosquito Aedes aegypti, transmisor de la fiebre amarilla.
Dentro de los arbovirus se incluyen cuatro familias que se
transmiten por artrópodos hematófagos: togavirus,
flavivirus, bunyavirus y orbivirus.
Taxonomia

Actualmente existe un Comité Internacional de


taxonomía que se encarga de la clasificación de
los virus y de la inclusión de los nuevos agentes
virales. Los virus se agrupan en familias y éstas
se subdividen en géneros. La subdivisión de los
géneros en especies está todavía en discusión.
Los criterios para definir una familia son:
1.tipo de ácido nucleico, características (cadena simple o
doble, polaridad del genoma) y mecanismos de replicación.
2.tamaño del virión y simetría de la cápside
3.número de capsómeros en el caso de los virus desnudos o
diámetro de la hélice en los virus helicoidales
4. presencia o no de envoltura
5.lugar de ensamble de las partículas virales, ya sea en el
núcleo o en el citoplasma
6.forma de salida de la célula huésped, por lisis o por
brotación
7. la secuencia de nucleótidos
Los virus que causan patología en el hombre se agrupan
actualmente en 17 familias que incluyen a aquellos virus con
características similares
METODOS DE DIAGNOSTICO DE LAS
INFECCIONES VIRALES

Los métodos utilizados para reconocer las


infecciones por virus humanos pueden clasificarse
en directos e indirectos, según persigan demostrar la
presencia del virus o de alguno de sus
constituyentes (antígeno o genoma viral) o bien la
respuesta de anticuerpos específicos por parte del
huésped en el curso de la infección.
Gran parte de las técnicas utilizadas en el
diagnóstico clínico se basan en pruebas
serológicas que identifican anticuerpos
específicos frente a diversas proteínas
antigénicas. Sin embargo, existen circunstancias
en las cuales son necesarias pruebas que
detecten precozmente la infección viral
(tratamientos específicos, medidas profilácticas,
etc.).
En algunas infecciones virales es posible detectar la
presencia de antígenos virales previamente al desarrollo
de la seroconversión, siendo esta prueba la única
evidencia de la exposición al virus cuando no existe
aumento de los niveles de anticuerpos circulantes
(pacientes inmunodeprimidos).
Igualmente la detección del genoma viral puede favorecer
la precocidad del diagnóstico viral y su confirmación. En la
última década se han desarrollado una serie de técnicas
para el diagnóstico viral basadas en la detección de
ácidos nucleicos. De ellas la Reacción en cadena de la
polimerasa (PCR) es la más utilizada.
En el momento actual, la tendencia en el diagnóstico
virológico consiste en emplear nuevas y más sensibles
tecnologías de detección de antígenos y de
investigación de ácidos nucleicos con el propósito de
lograr un diagnóstico viral más rápido. El desarrollo de
quimioterapia antiviral efectiva es responsable de esta
tendencia que hace de la identificación rápida, sensible
y específica de los virus, una necesidad.
DIAGNOSTICO VIROLOGICO:
METODOS DIRECTOS

La necesidad de disponer de microscopio


electrónico para visualizar los virus ha limitado su
observación durante muchos años a centros
especializados. Consecuentemente su observación
en los tejidos y secreciones no ha constituido un
paso habitual del diagnóstico de las infecciones
víricas en los laboratorios de microbiología clínica.
En la actualidad existen métodos para detectar los
virus mediante microscopía óptica. Naturalmente no
permiten la visualización individualizada de los
viriones, sino la presencia de grandes acúmulos de
material vírico intracelular, que pueden teñirse y
constituyen los denominados cuerpos de inclusión
(véase más adelante).
La utilización de anticuerpos marcados con
sustancias fluorescentes permite detectar en las
células infectadas los antígenos víricos específicos
formando acúmulos o distribuidos de forma difusa.
Este tipo de observaciones puede hacerse tanto
sobre tejidos humanos infectados naturalmente
como sobre cultivos celulares inoculados en el
laboratorio.
Aislamiento y propagación de los virus
Los virus, a diferencia de los que sucede con la
mayoría de las bacterias, hongos y protozoos, sólo
pueden multiplicarse en el interior de células vivas,
no pudiendo hacerlo en un medio nutritivo carente
de células.
Los sistemas celulares utilizados para propagar
los virus en el laboratorio son:
1.animales de experimentación
2.embriones animales
3.cultivos celulares artificiales.
Animales de experimentación. La inoculación a
animales de experimentación de muestras clínicas o de
virus para su aislamiento o propagación, es una técnica
poco empleada por las dificultades de mantener un
estabulario, la laboriosidad de la inoculación y el peligro
de difusión del virus con las excretas de los animales. Se
emplea únicamente cuando se trata de propagar virus
cuya replicación en los otros sistemas –embriones o
cultivos celulares– no es posible.
Los animales más utilizados para este fin son los monos,
los cobayos y los ratones lactantes, que se utilizan
esporádicamente para el aislamiento de un número
limitado de virus y en general en laboratorios de
investigación.
Embriones animales. Los más utilizados son los
embriones de pollo (huevos de gallina fecundados). Los
huevos fecundados se incuban hasta el momento de su
inoculación que suele oscilar entre 6 y 14 días. Las
inoculaciones, que pueden realizarse en diversas zonas
del embrión, requieren experiencia para su realización. La
inoculación en la cavidad amniótica es las más utilizada
para el aislamiento de virus a partir de muestras clínicas.
Este sistema es el más adecuado para el aislamiento de
los virus de la gripe.
Cultivos celulares. Se denomina cultivo celular a la
multiplicación y mantenimiento de células in vitro
Las células se obtienen de un fragmento de un órgano
como el riñón, el pulmón u otros, por trituración y posterior
disgregación con tripsina, lo que permite obtener células
aisladas que se introducen en frascos con medios de
cultivo adecuados. Los cultivos celulares, por tanto, están
formados por células disgregadas que han perdido su
organización tisular, a diferencia de los cultivos de tejidos
u órganos en que se conserva esa estructura.
Las células en los frascos pueden estar en suspensión,
es decir, libres en el medio de cultivo líquido o adosadas a
la pared del frasco, como unas baldosas, y bañadas por
el medio. En el primer caso se trata de células en
suspensión y en el segundo en monocapa.
Se denomina cultivo celular primario en suspensión o
monocapa, al obtenido a partir de las células normales de
un órgano de un animal adulto. Estas células se
mantienen vivas algún tiempo en el cultivo, pero no
pueden propagarse in vitro. Se denominan líneas
celulares o cultivos celulares de línea a los que tras la
obtención de las células de un órgano o tejido pueden
propagarse posteriormente in vitro.
Existen varios tipos de células de línea, como las de
tejidos embrionarios, que sólo permiten alrededor de 50
subcultivos y mueren y las células de tejidos neoplásicos,
que se propagan indefinidamente y se denominan líneas
celulares continuas, confirmándose este hecho cuando se
han propagado durante más de 70 pases.
Los virus o las muestras clínicas se inoculan a estos
cultivos celulares. Según el virus que se pretende aislar
Acción citopática
Se denomina acción citopática la lesión que causan algunos virus a las células en que se replican.
Las lesiones celulares pueden ser intensas y precoces, produciendo en 24 o 48horas la muerte celular,
acompañada de lisis fácilmente observable al inspeccionar los cultivos celulares con un microscopio. En
otras ocasiones las alteraciones morfológicas que se producen en las células son mínimas o tardías y muy
difíciles de detectar.
En las células infectadas por determinados virus pueden observarse cuerpos de inclusión, acompañando a
las alteraciones celulares más o menos importantes. Los cuerpos de inclusión pueden visualizarse, después
de la tinción de las células con hematoxilina eritrosina, como masas con morfología más o menos
característica y localización nuclear o citoplasmática típica, según los virus que los originan. Están
constituidos por acúmulos del material vírico sintetizado depositados en zonas celulares alteradas; en
ocasiones predomina o es exclusivo el depósito de material vírico y en otras lo prominente o exclusivo es la
lesión celular.
El aspecto particular y característico de cada tipo de inclusión suele orientar sobre el grupo de virus que la
produce. La formación de cuerpos de inclusión ocurre tanto in vivo, en las infecciones naturales, como en
los cultivos celulares infectados.
Ya se ha señalado que, aparte de la acción citopática directa, la lesión de las células infectadas por un virus
puede deberse a la respuesta inmune dirigida contra antígenos codificados por el virus y expresados en la
superficie celular.
Detección de ácidos nucleicos

El método mas utilizado para detección de acidos


nucleicos es la Reacción en Cadena de la Polimerasa,
PCR, que es una reacción de amplificación de ácidos
nucleicos, que utiliza una ADN polimerasa y
oligonucleótidos cebadores, primers, para producir luego
de varios ciclos, millones de moléculas del fragmento
seleccionado a partir de una sola copia. Los productos de
PCR pueden ser detectados por tinción con bromuro de
etidio y electroforesis en geles de agarosa.
Esta técnica permite detectar mínimas cantidades de
ácidos nucleicos en muestras clínicas y por lo tanto ha
significado un gran avance con respecto a los métodos
convencionales.
Las siguientes imágenes correponden a la observación
directa por microscopía electrónica de distintos virus

virus de la hepatitis B

adenovirus papillomavirus
herpes virus
METODOS DE DIAGNOSTICO
INDIRECTO

La detección de anticuerpos es de gran utilidad


diagnóstica cuando no pueden realizarse métodos
directos para detectar el agente en la enfermedad aguda
y para valorar inmunidad o la posibilidad de transmisión
de ciertas infecciones virales.
La mayoría de las infecciones virales primarias inducen un aumento en el título
de anticuerpos, que puede ser evidenciado por la titulación de sueros pareados,
el primero obtenido tempranamente, suero agudo, y el segundo en la
convalecencia (15 a 21 días después). Existen ciertas excepciones en las que
puede no detectarse esta variación de título, en caso de infecciones en
huéspedes inmunocomprometidos, infecciones respiratorias en niños o
infecciones adquiridas en presencia de anticuerpos transferidos pasivamente.
Los sueros deben ser procesados el mismo día y por el mismo método, para
evidenciar la presencia de seroconversión o de un aumento mayor que el
cuádruple en el título de anticuerpos; por ejemplo primer suero 1/8 y segundo
suero 1/64. Desde el punto de vista práctico, la detección de anticuerpos en
muestras pareadas es un diagnóstico retrospectivo y de escasa utilidad clínica
en el episodio agudo.
La situación mas frecuente es intentar evaluar un
título elevado de anticuerpos en una sola muestra
de suero, lo cual puede determinar errores en la
interpretación diagnósticxa cuando se detectan
anticuerpos totales. Existen situaciones en las que
una sola muestra de suero en la que se detectan
anticuerpos totales, puede ser suficiente para el
diagnóstico de infección reciente
En el curso de una infección varían las poblaciones de
anticuerpos frente al agente infectante. En una primera
fase la clase predominante suele ser IgM, mientras que
con el transcurso del tiempo las IgM disminuyen hasta
desaparecer o quedar a baja concentración residual y, en
cambio, aumentan las IgG. La búsqueda de anticuerpos
clase IgM es de utilidad para hacer diagnóstico de
infección reciente en una sola muestra de suero extraída
en el período agudo de la enfermedad. Este método se
emplea para el diagnóstico de enfermedades como:
Rubéola, Citomegalovirus, Hepatitis a virus A, etc.
La búsqueda de anticuerpos clase IgG en una sola
muestra se utiliza como técnica de tamizaje, por ejemplo,
para el diagnóstico de la infección por el virus de la
inmunodeficiencia humana (VIH). Posteriormente los
hallazgos positivos son confirmados en la misma muestra
de suero por otra metodología.
Las determinaciones serológicas también nos pueden
informar sobre el estado inmune del paciente frente a
muchas infecciones virales, como paperas, sarampión y
rubéola, donde la presencia de anticuerpos específicos
indica que el individuo ha estado expuesto previamente al
virus y que es inmune para una nueva infección.
A veces el diagnóstico serológico tiene dificultades, por ejemplo: cuando se
realiza en recién nacidos para identificar la causa de una infección congénita.
La evaluación de los resultados en este caso es difícil porque los ensayos
serológicos detectan ante todo IgG, y mucha de la IgG presente en el suero
del niño provino de la madre por vía transplacentaria y no es posible
diferenciar la IgG del niño de la IgG de la madre.
Tradicionalmente, el diagnóstico de las enfermedades virales congénitas se
realiza mediante determinaciones seriadas de IgG en el suero. El descenso
del titulo de anticuerpos indica que los anticuerpos eran maternos y que el
niño no está infectado. El aumento en el título de anticuerpos indica que el
niño esta produciendo anticuerpos y por lo tanto esta infectado. Sin
embargo, hoy en día el diagnóstico serológico viral se ha simplificado con las
nuevas técnicas que detectan IgM, ya que la detección de IgM específica en
el suero del niño confirma que el niño está infectado, porque la IgM no
atraviesa la placenta y por tanto no puede ser de origen materno.
Existen una variedad de métodos disponibles para
determinar anticuerpos, los más utilizados son:
1.Fijación de complemento
2.Inhibición de la hemoaglutinación
3.Inmunofluorescencia indirecta
4.Aglutinación de partículas de látex
5.Enzimoinmunoensayo
6.Western-blot

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