La Armadura de Dios.

Efesios 6: 10-20
 EL YELMO DE LA SALVACION.
“y tomad el yelmo de la salvación”
(Efesios 6:17)
•El yelmo es el casco. Así es, en el tiempo
pasado para cubrir sus cabezas del ataque de
piedras, flechas y jabalinas, los soldados
utilizaban cascos hechos de pieles correosas o
metal, algunas veces adornados con un
ondeante crestón..

•En la Biblia se habla de estos cascos en la

época de Uzías (2ª Crónicas 26:14; Jeremías
46:4).
Alegóricamente el Yelmo espiritual es la Salvación.
Por tal razón Pablo dice: “Tomad el casco de la
salvación”. El verbo “tomar”, es significativo porque
presenta la opción a aceptar o rechazar la
seguridad de redención. La salvación es un regalo
que se pagó muy caro, pues costó la preciosa
sangre de Cristo. Solo es necesario aceptarla
(Efesios 2: 4-9).
La salvación es un evento pasado porque
fue en la Cruz del Calvario donde se
efectuó. Pero es un evento presente
porque “hoy es el día de la salvación”. Sin
embargo, es un evento futuro, porque
esperamos el momento cuando Cristo
nos salvará, en el día de su regreso a la
tierra por segunda vez.
Expliquemos estos eventos que revelan lo
que es el yelmo de salvación.
I. EL YELMO DE SALVACION REVELA QUE EN
EL PASADO CRISTO NOS SALVO.

La confianza en lo que Cristo hizo en la cruz del

Calvario hace ya casi 2000 años es lo que nos
Justifica delante de Dios (Romanos 3;21-25;
Efesios 2:4-5, 8-9). El sacrificio de Cristo no
necesita ser repetido, pues es de naturaleza
infinita y por un acto de fe, creemos que ese
sacrificio fue el nuestro, pues está escrito:
“Cristo murió por nosotros” (Romanos 5:8;
Hebreos 9: 24-28).
 Luchar contra el diablo es una
experiencia desgarradora. Las
artimañas de Satanás son muchas, pero
las que mas utiliza van directo a la
cabeza, esto es a la mente; algunas de
estas son el desánimo y la duda.
Existen ejemplos de hombres de Dios
que fueron atacados en su mente con el
desaliento y estos son:
*Job (Job 10:1)
*Moisés (Números 11:15)
*Josué (Josué 7:7)
*David (Salmo 42:6)
*Elías (1ª Reyes 1|9:4)
Y hubo otros que fueron atacados en su
mente con dudas:
*Pedro (Mateo 14:30-31)
*Tomás (Juan 20: 24-27)
*Los discípulos (Mateo 17:16-17)
*Juan el Bautista (Mateo 11:2-6)
Esto describe cómo algunos siervos de
Dios se desanimaron y dudaron, son
un ejemplo de porqué se dice:
“tomemos el Yelmo de la Salvación”.
No dudemos, ni nos desalentemos,
ya que la salvación de Cristo fue una
realidad. ¡El nos salvo ya!
 II.- EL YELMO DE LA SALVACION REVELA
QUE EN EL PRESENTE CRISTO NOS SALVA.

Este segundo aspecto de la Salvación cae

en la dimensión presente, describe
nuestra santificación. Y es que
mientras estemos en la tierra,
tendremos una constante lucha interior
(Romanos 7:14-25), pero al ponernos
ese yelmo de salvación en la mente,
nos dará libertad y victoria sobre el
poder dominador del pecado.
Este yelmo espiritual, aunque se puede
enmarcar dentro de las armas
defensivas, podemos discernir que
tiene también su aspecto positivo,
porque también es un arma ofensiva.
Al colocarse el cristiano el yelmo en su
mente, nos ayuda a tenerlo siguiente:
a) La mente de Cristo (1ª Corintios 2:16)
b) Meditaciones sabias (Salmo 119: 59)
c) Conceptos humildes (Romanos 13:3)
d) Pensamientos virtuosos (Filipenses 4:8)
e) Cántico nuevo (Salmo 40:3)

Todos estos elementos se puede decir

que son elementos que nos hacen
avanzar en el camino de la Salvación.
 III.- EL YELMO DE LA SALVACION REVELA
QUE EN EL FUTURO CRISTO NOS SALVARA.

Esta tercera dimensión de la salvación es

futura y es el aspecto de la glorificación.
Es el día en que seremos redimidos por
completo del poder del pecado; esto
sólo será posible cuando Cristo venga
por nosotros y nos de un cuerpo
glorificado (Romanos (.16-24; 2ª
Corintios 5:1-10).
Colocarse el yelmo de la salvación es no perder la
expectación de la futura salvación. Que dice la
Biblia acerca:
a) Es una esperanza de salvación (1ª
Tesalonicenses 5:8)
b) Es una esperanza de identificación (1ª Juan
3:1-2)
c) Es una esperanza viva (1ª Pedro 1:3-5)
d) Es una esperanza de glorificación ( Romanos
8:28-30)
El Yelmo de Salvación colocado en
el creyente, le da seguridad de
saber que Cristo lo perdonó en la
Cruz; y en cuanto al presente
estar agradecido de que es salvo
del dominio del pecado, además
de alegrase porque la Salvación
esta cerca.

JLMC