Está en la página 1de 141

Trabajar para el Cielo o el Infiero

puede ser igualmente problemático

Cambio de Equipo
Resumen

Promovido a mantener un ojo en el planeta para salvar almas, Castillo


debe respetar el acuerdo entre el Cielo y el Infierno, protegiendo el
equilibrio entre el bien y el mal. Por encargo de Gabriel, ahora debe
localizar al demonio que utilizó un vacío legal para condenar almas
inocentes. Como el primer ángel en aparearse debe lidiar con sus
nuevos sentimientos humanos y sus dos parejas Perros del Infierno a los
que no comprende.

Los Perros del Infierno Jared Magnus y Rhyce Sethos no están seguros
de cómo manejar un compañero ángel que tiene miles de años de
antigüedad y es virgen, y mucho menos atrapar a un demonio y salvar
el mundo.

Los malentendidos y sentimientos dolorosos al principio de su relación


les impide conectarse. Pero dejando eso de lado, los tres deben
trabajar juntos para encontrar una manera de ayudar a los inocentes
en peligro de acabar en el infierno y comenzar una reacción en
cadena catastrófica. ¿Van a sobrevivir los obstáculos en su camino, y
aún así ser capaces de manejar su nueva posición y adaptarse al
cambio de equipo?
3
Cambio de Equipo

FLYNN EIRE
Capitulo 1

Localicé a mis compañeros en la Suite que Tristan me dijo


que era de Jared. Llamé y entré, sin esperar para ver si querían
que entre. Se miraron el uno al otro y luego a mí rápidamente
antes de decidir que el piso era el mejor lugar para mantener su
mirada. Por lo tanto me obligaron a tomar la iniciativa en la
situación.

“Si, absolutamente genial. Dejen al ángel socialmente


torpe, sin las habilidades básicas que tiene la gente, manejar la 4
situación más complicada y jodida jamás registrada en la
historia.”

—¿Alguna vez escuchaste hablar sobre un apareamiento


con un ángel, Castillo? —Jared murmuró cuando simplemente
los miré, sin saber qué hacer con ellos.

—No, pero estoy seguro de que ocurre de vez en cuando.


No solemos compartir nuestra vida personal. —Miré a mi
alrededor y me di cuenta que podían oírnos, los oídos de los
perro captaban todo—. Pasemos a tu habitación para que
pueda proteger el ambiente y nuestra discusión permanezca en
privado.

Ellos asintieron y fueron como si estuviera a punto de


azotarlos. Por lo menos los dos parecían comprender que era
importante no cotillear lo que les iba a decir.

—Así que por lo que Gabriel dijo tu sabes porqué estamos


emparejados pero no podemos decirle a nadie. —Verificó
Rhyce mientras él y Jared se sentaron, lo más lejos que dos
personas podían y todavía sentarse en la misma cama. No
necesitaban estar cerca, dado que era una cama grande. Me
di cuenta de que era una cama muy agradable, con un
edredón negro muy acogedor.

Pero me preocupaba por otras razones. ¿Tendría mi


compañero una disposición oscura? ¿Por eso no usaba otros
colores? La paleta de colores era un reflejo de la propia
persona. Sí, yo estaba seguro de que lo había oído en alguna
parte.

Y al parecer no quería responder a su pregunta, porque


mis pensamientos seguían corriendo.

—Sí, por ahora al cielo le gustaría mantener esto en 5


privado. Esto quiere decir que no les gusta anunciar algo hasta
que sea un éxito. —Traté de decirlo sin que se note el sarcasmo
o la molestia, pero simplemente no pude.

Impactante.

—Fui ascendido —traté de explicar cuando el silencio se


hizo incómodo—. Y ustedes dos son mi recompensa. Mi
bonificación por decirlo de alguna manera.

—¿Qué? —Jared gruñó mientras se puso de pie, Rhyce


siguiendo su ejemplo. Yo nunca lo admitiría a nadie, pero
estaba caliente, y perdí el foco de la discusión por un
momento—. Estar acoplado es algo sagrado. No es un premio.

Incliné mi cabeza y lo estudié. —¿No coincidieron todos en


que Rafe es un regalo y Stryker fue bendecido al haberlo
encontrado?

—Sí, por supuesto, pero eso no es- —Rhyce comenzó pero


lo interrumpí con un movimiento de mi mano.
—Es lo mismo, y me disculpo si me equivoqué al decirlo y
pareció que los menospreciaba. No tengo mucha o en realidad
ninguna preparación interpersonal para esto. Yo era un
guardián del planeta, no un ángel que interactúa con los seres
humanos u otros ángeles, excepto para recibir órdenes. Así que
por favor entiendan que voy a hacer mi mejor esfuerzo, y que
no quiero ofenderlos ni ser grosero. —Me froté la frente y
suspiré—. A menos que esté enojado por alguna razón. Entonces
yo podría ser grosero.

Jared tomó un par de respiraciones profundas y las dejó


salir lentamente. —Bien, bien, sólo tenemos que darnos el
beneficio de la duda por un tiempo y tomar las cosas con
calma. Se acercó a Rhyce, y sentí agrandarse cada vez más el
abismo entre nosotros.
6
Junté toda mi valentía, puse cara de poker, e intenté crear
un puente entre nosotros. —Hay otra manera de ver esto, por
supuesto. Si me dieron a ambos como mi recompensa,
entonces yo soy su recompensa también. Quiero decir, hay una
gran cantidad de beneficios de estar acoplado a un ángel.
Pero yo quiero ver cuales serán mis beneficios. Yo no pedí esto ni
tuve una opción, así que espero tener algunas grandes ventajas
también.

—¿Qué quieres-? —Corté a Rhyce quitándole sus ropas—.


Oh, vernos. Correcto. Me siento un poco como un toro en una
subasta de ganado.

Lo estudié de cerca y sacudí la cabeza. —No, tu estás


mucho mejor colgado que cualquier toro. Y para ser honesto
eres impresionante. —Rastrillé mi mirada a lo largo de su cuerpo,
partiendo de sus pies, siguiendo por sus tonificadas y musculosas
piernas, pasando por la polla que era tan grande que me asustó
un poco, a lo largo de sus estrechas caderas a pesar de que era
tan alto y ancho de hombros. Tenía abdominales definidos,
pectorales musculosos con diminutos pezones deliciosos. Y
enormes brazos. ¿Qué hizo para conseguir todo ese músculo
tonificado?

Me alegré de que no tuviera el típico cuello de las


personas que toman esteroides y que esta fuera su constitución
real, no algo de culturismo extremo sobre-enloquecido. Sus
brillantes ojos verdes me miraron como si estuviera esperando a
ver lo que iba a hacer ahora. Observé su hirsuto y maravilloso
pelo rubio oscuro y pasé a Jared.

—Nunca me sentí poca cosa antes —me quejé mientras


estudiaba a mi otro compañero. Rhyce debía medir unos 1,8 m,
Jared 1,9 m y yo apenas 1,6 m, era prácticamente un 7
camarón—. Aunque en el tiempo que me hicieron yo hubiera
sido el más alto de la habitación por mucho.

—¿Hecho? ¿No concebido? —Jared intentó mantener su


expresión en blanco, pero vi que la idea le repugnaba.

—No, yo no soy humano, Perro —le espeté, dando un paso


lejos de él—. No nací. Me hizo Dios hace miles de años para
proteger el planeta donde habitaban sus hijos. No tengo madre
sólo Padre.

—Qué triste para ti —susurró Rhyce y luego cerró la boca


tan rápido que pensé que se podría haber mordido la lengua.

—Sí, lloro sobre ese hecho todos los días —Arrastré las
palabras, tratando de sacudir el comentario pero sintiendo un
dolor en mi pecho—. Así que esto es tener humanidad.

—¿Qué? —Jared me miró boquiabierto, por supuesto que


quería saber lo que quería decir, pero yo negué con la cabeza.
No iba a hablar de eso esta noche cuando ya estaban
disgustados conmigo.

—No, no voy a echar más leña al fuego con la razón por la


que soy tan diferente. No es como si cualquiera de ustedes
fueran normales tampoco.

—Lo siento Castillo —Rhyce susurró frotándose los brazos y


agachando la cabeza.

—Está bien —le mentí, centrándome de nuevo en Jared—


Tu cuerpo es perfecto.

—Así que si nosotros somos tu premio y tu nos perteneces,


¿por qué sólo tu nos inspeccionas? —Jared dijo entre dientes 8
mientras mi mirada se movió hasta sus muslos. Él era más
delgado pero igual de bien construido que Rhyce. Ciertamente
estaba bien dotado, era aún más grande. Querido Dios, nunca
iba a poder mantener a ambos satisfechos.

—Oh, por supuesto estuve de acuerdo —quitándome mi


propia ropa, me sentí escuálido en comparación con ellos—.
Puedo ajustar mi cuerpo si así no les gusto, eso no es un
obstáculo para nuestra copula.

—¿Qué quieres decir? —Preguntó Rhyce suavemente,


levantando una mano cuando Jared abrió la boca.

—Sí, muy bien, me encantará explicártelo —dije en voz


baja, con ganas de fundirme en la alfombra cuando me di
cuenta de que me escuchó. Sus cejas fruncidas lo decían todo.
Usé mis poderes para hacerme tan alto y musculoso como
ellos—. ¿Así les agrada más?
—La forma en la que estabas era mejor —Jared dijo,
mirando a Rhyce. ¿Qué estaba haciendo mal ahora? Asentí y
volví a mi estatura y tamaño normal.

—Aunque tengamos que esperar, hay algunas cosas que


necesitan saber para entender lo que significa aparearse con
un ángel. Una vez que copulemos, nunca podrán tocar
íntimamente a otro.

—Nosotros no somos Infieles. —Podía escuchar el dolor en


el tono de Rhyce y me di cuenta que si no llegábamos a la
parte del sexo pronto, nunca podríamos lograrlo.

—Por supuesto que no —espeté mientras balanceaba la


cabeza como un imbécil—. Simplemente estoy siendo honesto 9
acerca de la situación y las repercusiones. Pensé que era justo
advertirles para que tengan cuidado, ya que significaría su
muerte.

—Detente y explica bien eso —Jared susurró mientras se


inclinó y puso su mano sobre el estribo de la cama como si fuera
a derrumbarse.

—Es una sentencia de muerte para el compañero de un


ángel traicionarlo tocando íntimamente otro —le expliqué con
calma, preguntándome si esto sería la gota que colmaría el
vaso y se escaparían de la habitación—. Cada uno de ustedes
debería follar conmigo por separado antes de que pudiéramos
estar todos juntos íntimamente.

—Define íntimamente —Rhyce dijo, mirando a Jared. Poco


a poco me senté en la cama, por el dolor en mi pecho cuando
mi corazón se aceleró. Ellos me estaban rechazando—.
Supongo que lo que estás preguntando es hasta dónde llega
esa definición. —Miré por la ventana y dejé que mi cabello me
escondiera de ellos—. ¿Eso importa?
—¡Por supuesto que sí! —Jared gruñó dando un puñetazo
en la madera—. ¿Qué pasa si Rafe emocionado o jugando me
da un beso? ¿Me caeré muerto?

—¡Oh, no, eso no es así! —Jadeé poniéndome de pie y


enfrentándolos. Lo que cuenta es la intención. Podrías besar por
ejemplo a Colton, conducido por la lujuria y aunque eso sería
traicionar ni siquiera eso contaría. Tienes que tener la intención
de fornicar con otro y de cualquier acto sexual en sí.

—Entonces no hay problema —dijo Rhyce rápidamente


antes de que Jared pudiera hablar—. ¿Pero no podemos
tocarnos uno al otro hasta que te hayamos follado? No estoy
seguro de que eso suene bien tampoco.
10
—No, por supuesto que pueden —le murmuré mientras me
sentaba de nuevo y cruzaba las piernas como si una vez más
quisiera protegerme de que me dañaran—. Pueden tocarse y
ser tan íntimos como quieran. Hasta que uno de vosotros esté en
la intimidad conmigo. Ambos entonces tendrían que estar
conmigo por separado antes de que pudieran de nuevo estar
juntos. —Ellos se estaban mirando el uno al otro, dejándome
excluido y de repente no quise estar desnudo delante de ellos.
Pero no podía renunciar todavía.

—La vida es un equilibrio, y como tal, hay beneficios para


las reglas adicionales impuestas sobre todos nosotros —les
recordé.

—¿Cómo? —Jared suspiró, inclinándose sobre el estribo y


aclarándose la garganta hasta que me miró—. Dinos el resto,
Castillo.

—No estoy seguro de lo que es el resto —admití,


sacudiendo la cabeza—. Van a ser más fuertes, más rápidos y
mucho más potentes siendo mis compañeros.
—Eso es genial y todo, pero creo que lo que Jared te
preguntó es lo que te dijo Gabriel ya que todavía no lo
compartiste con nosotros —Rhyce intentó explicarme.

—Oh por supuesto. Los altos mandos quieren Perros del


Cielo. Han tenido este plan durante un tiempo al parecer, ya
que me acoplaron a los dos, a espaldas de todos nosotros. Pero
ahora con este demonio canalla en libertad, es más necesario
que nunca, y me informaron que este es mi nuevo papel en la
jerarquía del Cielo. Ahora me convertiría en algo así como su
Dante e informaría al cielo, manteniendo las almas a salvo de la
influencia del infierno. Nosotros tuvimos un enfoque de no
intervención durante demasiado tiempo con los seres humanos,
y estamos perdiendo la guerra por la humanidad.
11
—Teniendo nuestros propios Perros, podríamos luchar
contra los demonios de manera más efectiva. Mientras que los
ángeles son creados por Dios, algunos demonios fueron una vez
ángeles, pero ennegrecieron sus almas eligiendo servir al
Infierno. No tenemos tales agentes y los necesitamos. Me
pusieron a cargo de conseguirlo y se me advirtió que no fallara.
Supongo que me dieron una pareja de cada una de las familias
más respetadas de Perros como una manera de traer a sus
familias a nuestro lado.

—Por lo tanto ¿es todo un truco? Porque lo harías-

Tiré mi cabeza hacia atrás y dejé escapar una risa,


interrumpiendo a Jared. Me tomó unos momentos calmarme,
mientras ambos me miraban con incredulidad. Yo no tenía prisa
tampoco. Lo dejé cocinarse en la estupidez de la acusación
que él iba a hacerme.

—Esto no fue mi idea. Yo estaba muy feliz en mi papel de


protector de la tierra. Yo no pedí estar acoplado a dos Perros, ni
que me dieran una promoción, ni que el destino de la guerra
por las almas cayera en mi regazo. Ni siquiera soy el más
adecuado para esta tarea, pero Dios, en su infinita sabiduría,
ama ponernos desafíos.

—¿Tenemos que decidir en este momento? —Preguntó


Rhyce mientras se sentaba a mi lado—. Esto es algo que tengo
que discutir con mi familia antes de tomar una decisión por
todos nosotros.

—Ellos tienen su propio libre albedrío para elegir por sí


mismos —le aseguré, mirando a donde nuestros muslos se
tocaban—. No es una decisión que tengan que hacer esta
noche, pero si antes de que me reclamen. —Levanté la cabeza
y lo miré a los ojos. —Sé que no estoy explicando esto bien, pero 12
estoy inundado de hormonas y lujuria. Miles de años de
necesidad sexual de repente se liberaron y el deseo de agradar
a los dos me está abrumando.

—¿Debido a que se le otorgó la humanidad? —Asentí y


miré hacia otro lado, los penetrantes ojos de Rhyce veían más
de lo que me hubiera gustado—. ¿Preferirías hablar sobre eso
después de que todos lleguemos a conocernos mejor?

—Sí, me gustaría mucho —suspiré agradecido, viendo que


era sin duda el más comprensivo de los dos.

—¿Así que quieres saltarte el resto de la explicación y que


follemos? —Preguntó Jared, con tono profundo, aunque no
estaba seguro de que fuera por lujuria.

—Si eso les agrada a los dos. —Miré a sus ojos y vi que la
idea les intrigaba. Tomé la oportunidad y me metí en el medio
de la cama—. Puedo prepararme sólo y saltar los juegos previos.
—Lo hice y me quedé sin aliento por las sensaciones, nunca
imaginé lo abrumadoras que podían ser la sensaciones de mi
cuerpo—. ¡Cielos. No tenía ni idea de que es lo que se siente!

—¿Qué hiciste? —Rhyce preguntó mientras se movía en la


cama más cerca mío.

—Facilité nuestra cópula estirando mi pasaje para ustedes


y apliqué lubricación —jadeé cuando mis bolas se
estremecieron y mi polla goteó. Vi a Rhyce mirando mi cuerpo
mientras su propia polla se puso dura como una roca. Sin saber
qué más hacer, traté de hacer la oferta más presentable
bajando los hombros y empujando mi culo en el aire—. Puedes,
por supuesto, comprobar por ti mismo.

—¿Me estás pidiendo que meta un dedo? —Rhyce miró a 13


Jared y yo seguí su mirada. El Perro de pie delante mío, a los pies
de la cama, simplemente se encogió de hombros.

—No les pido nada, simplemente les ofrezco mi cuerpo


para su placer de la forma en que prefieran.

—¿Y si yo dijera que quiero follarte? ¿Qué significaría eso?


¿Estaríamos apareados?

—Yo diría sí, por favor, y no, no estaríamos apareados.


Simplemente prométeme que no tocarás a otro. Me gustaría ser
al que ustedes recurran cuando sientan deseo —dije mirando
entre ellos—. Y Jared también tendría que complacerse a sí
mismo con mi cuerpo antes de que todos pudiéramos ser como
uno. El apareamiento no sucederá ya que hay un
procedimiento diferente dado que hay tres de nosotros y yo soy
un ángel.

—¿Qué cambiaría? —Jared murmuró. Me concentré en él


ahora, al ver que algo se movía en su mirada mientras se lamió
los labios—. ¿Cómo tendríamos que reclamarte?
—Ustedes tendrían que penetrarme al mismo tiempo y
morder cada uno un lado de mi cuello antes de que yo beba
de sus muñecas— le expliqué. Hubo gemidos dobles en la
habitación, y mientras odiaba aplastar su lujuria, sentí que había
más que decir—. Ustedes tendrían que decidir cuándo sería
mejor o cómo hacerlo dado que no tengo experiencia.

¿Eres virgen? —Rhyce susurró mientras se movía detrás de


mí en la cama. Mordí un gemido mientras su mano se movió a lo
largo del pliegue de mi culo.

¡Guauu! —Sí. El cielo no es un fan de predicar el sexo


casual. No encuentran que es un pecado, pero Dios es todo
acerca de las almas, almas gemelas, y la búsqueda de la
persona adecuada para compartir algo tan íntimo. Pero como 14
yo soy tuyo, puedes hacer conmigo lo que quieras.

—¿Así que sólo quieres que saltemos sobre ti y te follamos?


—Preguntó Jared. Lo miré y sus mirada cambio a algo más
oscuro. ¿Enfado? ¿Por qué estaba enojado ahora?

—Estoy ofreciéndome a mismo —le susurré, sin saber qué


hacer—. La decisión es tuya. No estoy seguro de qué más decir
o hacer en esta situación para complacerte. Si me dijeras, yo
trataría de hacerlo.

—Con mucho gusto acepto —dijo Rhyce profundamente


mientras movía su polla hacia mi agujero. Él debe haber hecho
algo o miró a Jared porque su expresión cambió y dio un leve
movimiento de cabeza.

No tuve la oportunidad de averiguar lo que eso


significaba, porque Rhyce se empujó dentro de mi culo. Me
mordí el labio y bajé la cabeza, ofreciéndome y tratando de
mantenerme tranquilo.
—¿Estas bien?

Asentí empujándome hacia su polla tomando más y


asegurándoselo de la única manera que sabía.

—¿Qué pasa si yo no quiero esperar mi turno? —Jared


gruñó. Parpadeé hacia él, una vez más perdido y confundido—.
¿Qué pasa si quiero que mi compañero chupe mi polla mientras
mi otro compañero lo está jodiendo?

Me sorprendió tanto lo que dijo que hice lo único que se


me ocurrió, me incorporé hasta que mi cara estuvo frente a su
ingle y abrí la boca. Él me dio una sonrisa maliciosa antes de
agarrar un puñado de mi cabello y guiar su polla pasando mis
labios. Cerré los ojos retrocediendo un poco, cuando el empujó 15
toda su enorme polla estirando mi boca hasta que la tragué.

—Eso es bueno. Hazlo de nuevo —Jared exigió. Lo hice


mientras Rhyce siguió empujando más profundo en mi culo.
Cuando golpeó mi próstata, sentí mis terminaciones nerviosas
explotar... Como casi lo hice constreñí el flujo de sangre a mi
polla, y evité mi clímax. No había manera de que pudiera
complacerlos si me venía tan rápido.

—Una vez que las caderas de Rhyce tocaron mi culo, él no


se movió, permitiéndome adaptarme a su tamaño. Me retorcí
un poco, poniendo a prueba la sensación de él dentro mío y
estimulándolo al mismo tiempo.

—Folla duro a nuestra puta ángel —Jared gimió mientras su


otra mano se movió a mi pelo—. Yo quiero enterrarme profundo
en su garganta como uno de mis beneficios.

Otra vez había hecho algo mal. Y escucharlo referirse a mí


como su puta ángel en lugar de por mi nombre me produjo
nuevamente dolor en el pecho. En lugar de hacerle frente, le di
lo que quería, casi asfixiándome al hacerlo. Ellos golpearon sin
descanso en mí desde ambos extremos y aunque era más
maravilloso de lo que nunca pudiera haberme imaginado, algo
faltaba. Por supuesto, no podía decir lo que era, simplemente
sentí que follar con mis compañeros debía ser algo más.

Como uno, ambos aceleraron el ritmo como si esperaran


algo. Por supuesto no sabía qué, pero me preocupaba que
fuera debido a mis inexistentes habilidades que no podían
encontrar su liberación. Usé mis poderes para reproducir el
placer de tener lenguas lamiéndolos en sus anos, el alivio me
recorrió cuando Jared llenó mi boca con su semilla y segundos
después Rhyce lo hizo en mi culo.

Cuando habían liberado hasta la última gota, ambos se 16


retiraron de mi cuerpo usado, y sentí como Rhyce caía en la
cama. Jared pasó sobre el estribo y se tiró al otro lado mío.

—Guau. Sólo wow —Rhyce jadeó. Le eché un vistazo con


demasiado miedo de moverme, sólo para verlo sonriéndome—.
Eso fue asombroso. No puedo creer que puedas hacer que
sienta como si tuviera una lengua en mi culo.

—Sí, otro beneficio —Jared murmuró mientras lanzaba su


brazo en su rostro—. Yo te preguntaría si estas dolorido como
para tener nuevamente sexo, pero como para poder estar con
mi otro compañero primero debo estar contigo estoy seguro de
que puedes sufrir por ello.

—Jared, detente —Rhyce espetó mientras rodaba para


sentarse—. Detente, ¿de acuerdo? Todos acabamos de
conocernos. Hay muchas cosas pasando y tenemos que ser uno
para el otro. No condenar al ostracismo a uno de nosotros.

Me senté de nuevo en mis pies, viendo como ellos


comenzaron a discutir. Aunque no entendía porque estaban
discutiendo. ¿Era por mi? ¿Era porque Jared quería sexo otra
vez? ¿O me estaba perdiendo de algo? Apostaba que era la
última opción.

—¿Me prefieres en la misma posición u otra? —Le ofrecí a


Jared, cortando su pelea—. Yo no entiendo por qué estaban
discutiendo, y para ser honesto, no quiero discutir durante
nuestro primer momento íntimo.

Me miró y esa sonrisa extraña regresó a sus labios. —Vamos


a ver lo flexible que eres.

—Voy a tratar de hacerlo lo mejor posible, pero podría


tomar un poco de práctica antes de que tenga las habilidades
para que sea de tu agrado. —Un estremecimiento me recorrió 17
por sus palabras, y no estaba seguro de si era por miedo o
excitación. ¿Podría alguien sentir las dos cosas a la vez?

—Bien, seguro. —Él rodó los ojos y se sentó frente a mí


moviéndome de un tirón sobre mi espalda—. ¿Sigues estirado lo
suficiente?

Pero no esperó a que le responda, movió mis piernas a mi


pecho y enterró de golpe su polla en mi agujero. Me mordí el
labio para no gritar, ya sea de placer o dolor no podía estar
seguro. Se movió más rápido y con más fuerza de lo que hubiera
imaginado que un hombre pudiera, incluso un Perro. Una vez
más, mi cuerpo trató de responder antes de tiempo, así que
contraje mi flujo de sangre a mi polla y volví mi cabeza hacia un
lado para que mis expresiones faciales no lo distrajeran, con la
esperanza de que pudiera encontrar placer en mí.

Mi cuerpo empezó a doler al pasar los minutos, Jared me


empujaba haciendo todo lo posible para convertirme en una
bola. Además yo estaba bastante seguro de que mi ano se
estaba rompiendo. Usé mi poder de la misma forma que antes y
suspiré cuando Jared bramó y llegó muy dentro de mí.

—Bueno, ahora que ya lo hicimos, puedo conocer a mi


pareja real —murmuró en voz baja. Sentí un dolor opresivo en el
pecho, sobre todo cuando me di cuenta de que Rhyce estaba
en el cuarto de baño y no lo escuchó.

—Claro, por supuesto. Lamento que copular conmigo no


fuera placentero —murmuré cuando él se retiró de mí. Intenté
salir de la cama, pero mis piernas estaban entumecidas por la
posición en la que había estado durante demasiado tiempo, así
que en vez de eso, me di la vuelta para sentarme en el borde
de la misma.
18
—Acaba de cortar la mierda, ¿de acuerdo? Sé que no te
importa si me gustó o no. Ya ganaste lo que querías, nosotros te
follamos y probablemente seremos Perros del Cielo ya que nos
fue impuesto por Dios y es su voluntad. Pero esto fue una
maldita farsa.

Antes de que pudiera decir nada, él salió de la cama


hacia el cuarto de baño. Oí la ducha cuando la puerta se abrió
antes de que Jared la cerrara de golpe. Ni siquiera pretendí ser
humano después de eso, o hacer las cosas que ellos hacen.
Aparecí mi cuerpo en el exterior limpio y vestido.

—Gabriel —grité sabiendo que me escucharía. Mi jefe y


amigo desde hace miles de años permanecería cerca para
comprobar una situación tan volátil. Efectivamente, apareció
momentos después con el ceño fruncido en su rostro—. Esto no
va a funcionar. Debes liberarlos de mí. Tiene que haber otra
manera. No puedo soportar esto y no debería tener que
hacerlo.
—Muéstrame —susurró mientras me abrazaba, me atrapó
antes de que cayera de rodillas. Lo dejé entrar en mi mente
para que pudiera sentir cada segundo de mi experiencia, cada
momento de humillación en mi primera experiencia íntima.
Cuando terminó, suspiró, y nos sentó a ambos en el suelo—. No
puedo decirte lo que debes hacer, este es tu viaje, Castillo.

—Esta es la primera vez —me reí, sacudiendo la cabeza—.


Normalmente estás siempre listo con instrucciones o consejos.

—El consejo que puedo darte, mi amigo sarcástico —se rió,


sacudiendo la cabeza mientras me frotaba la espalda—. Es que
seas paciente con ellos y contigo. Es mucho lo que se les está
pidiendo a todos ustedes. Sin embargo debo decirte que ser
comprensivo y aceptar su naturaleza no debe convertirte en su 19
felpudo. —Le miré, sin saber a qué se refería. Suspiró
profundamente y me frotó la espalda—. No permitas que él te
llame su puta ángel de nuevo. Sentí el dolor que te causó. Él
estaba enojado y confundido pero ese tipo de falta de respeto
es inaceptable, incluso si no fueras su compañero.

—¿Puedo decirle que no puede hacer algo? —Parpadeé


a Gabriel, pensando que sonaba muy parecido a impedir el
libre albedrío de Jared.

—Tu no puedes forzarlo a hacerlo. —Negó y se apretó el


puente de la nariz—. Bueno, tu podrías, pero no debes. Dile que
no lo toleraras porque es ofensivo para ti. Por lo que sabemos de
estos Perros, son honorables. Una vez que sepa que te lastima, él
se detendrá.

Asentí mientras hablaba. Esa parte tenía sentido por lo


menos. —¿Qué pasa con el resto?

—Vas a entenderlo. Estoy aquí si quieres hablar, pero no


puedo decirte qué hacer. —Se puso de pie, y lo seguí también—
. Podría tener una mayor interacción con los seres humanos en
mi haber, pero eso no significa que tengo todas las respuestas
correctas. Así que no me las pidas.

Me golpeó como una tonelada de ladrillos. Él no tenía ni


puta idea tampoco y no quería aconsejarme mal. Lo abracé
rápidamente y asentí. —Ese fue un sabio consejo, y te lo
agradezco.

—Sigue a tu corazón, Castillo. Dios sabía que este era el


camino más adecuado. Simplemente tienes que trabajar en
ello. Muéstrales que esto no es un trueque por su ayuda.

—Yo puedo hacerlo. —Asentí, sin saber cómo me sentía


realmente, mientras que Gabriel desapareció en un destello de 20
luz—. Tan pronto como pueda averiguar cómo hacerlo, lo haré.
No tengo ni idea de cómo hacer esto. Alguna intervención
divina sería genial ahora, pensé en caso de que alguien
estuviera escuchando. Ni siquiera esperé y volví a la casa en
que se estaban alojando.

Estaba casi en calma cuando llegué a las puertas de la


terraza, hasta que sentí unas dos docenas de presencias... no
Perros.

—Váyanse. —Gruñí mientras me volvía—. ¡Estoy seguro que


el propósito de Dios para nosotros, no tiene nada que ver con
espiar y comer palomitas de maíz divirtiéndose con el drama de
otro!

—Como quieras, puta ángel —uno cantó antes de sentir a


todos ellos desaparecer.

—Por supuesto que tenían que escuchar eso. —Cerré la


puerta detrás de mí, murmurando para mí si debía ir a sofocar a
mis compañeros o rogarles que me acepten. Estaba dividido un
50/50.

Y para ser honesto, no sabía por dónde empezar. Así que


hice lo que siempre hacía... trabajar. Hice aparecer mapas y
suministros. Me serví una bebida del impresionante bar,
dispuesto a pasar varias horas buscando como ayudarnos a
todos. Pensé en todo lo que necesitábamos hacer, con la
esperanza de que si les daba algo a mis compañeros, tal vez
serían más tolerantes conmigo...

Pensé que era una buena idea.

Realmente lo hice.
21
Capitulo 2

A la mañana siguiente entré por la puerta de la habitación


de Jared siendo invisible. Me había dado cuenta de algo
mientras marcaba la ubicación de las almas que teníamos que
rescatar en un mapa y organizaba los pasteles que Rafe había
comprado para el desayuno. Rafe no estaba con nosotros en la
casa, pero eso no significaba que los productos horneados
debían desperdiciarse.

No podía leer las mentes de mis compañeros. Podía


escuchar y oír los pensamientos de cualquier otro ser humano o
Perro a mi alrededor, pero mis compañeros eran un vacío para 22
mí. Eso no era bueno para alguien tratando de averiguar qué
hacer y como navegar aguas hostiles.

Y por mucho que quería salir corriendo y ayudar a Rafe,


tenía mi propio pescado para freír como se decía. El dicho me
confundía, pero el punto era el mismo.

Pero sin poder leer las mentes de Jared y Rhyce estaba


perdido en cuanto a cómo manejarlos. Así que tan malo como
era, sentí que un poco de reconocimiento era válido. Sólo hasta
que encontráramos nuestro equilibrio.

—Buenos días, mi compañero —Jared gimió mientras se


frotaba contra Rhyce.

Rhyce frunció el ceño mientras miraba por encima del


hombro a Jared. —Nuestro otro compañero nunca llegó a la
cama.

—Bebé, no te engañes. Castillo no es nuestra pareja. Él es


nuestro regalo por trabajar para el Cielo.
—Tu no puedes creer eso —Rhyce espetó parpadeando
con molestia en los ojos—. ¿De verdad crees que Dios nos iba a
sobornar para hacer lo correcto y ayudar a las almas?

Jared simplemente se encogió de hombros y se acurrucó


más cerca de Rhyce como si él no quisiera molestarse, incluso
en discutir sobre mí. —Honestamente, no sé qué pensar. Todo lo
que sé es que tengo un compañero increíble y uno fiasco. Mi
plan es ignorar el fracaso tanto como pueda y llegar a
conocerte mejor.

—Tu estás siendo una mierda con él. Nos acabamos de


conocer también, pero eres agradable conmigo y no te
preocupas por Castillo. —Rhyce empujó a Jared y salió de la
cama—. Algo más está pasando aquí y hay que tener 23
paciencia. Él tiene miles de años, era virgen hasta ayer por la
noche, un ángel socialmente torpe que no tenía humanidad. Sin
familia, sin una crianza verdadera y-

Y fue entonces cuando me fui. Incluso el compañero que


parecía dispuesto a aceptarme ya no tenía nada bueno que
decir sobre mí. Volví a la cocina, haciendo una mueca cuando
vi a Guy el chef francés que traje para hacer las crepes, voltear
el desayuno que le pedí para mis compañeros.

—Um, hola ¿Quién es él? —Tristán preguntó cuando entró


en la cocina con un gesto hacia el desconocido en la estufa.

—Un intento equivocado de crear buena voluntad —


admití sin querer. Negué y me froté el pecho—. Este es Guy.
Pensé que todos podíamos tener un desayuno completo antes
de empezar con nuestras misiones. Él puede prepararte lo que
quieras.

—Muy bien, gracias dijo, mirándome fijamente mientras


daba un paso más cerca. Sé que no nos conocemos bien pero
si quieres hablar, Castillo, ahora somos familia. Yo no puedo ni
siquiera imaginarme lo que está pasando en tu cabeza con
toda esta locura.

Me volví lentamente y miré al hombre que se parecía


tanto a Jared. Entonces miré al techo como si Dios estuviera
mirando hacia mí justo en ese momento. —¿En verdad? ¿Esta es
tu idea? ¿Por qué por lo menos no me diste al hermano Magnus
bueno? ¿Esto no era ya lo suficientemente complicado que
necesitabas acoplarme al odioso?

—¿Qué te hizo Jared? —Tristán jadeó mientras se acercó a


mí.

—No estaba sólo —suspiré, frotando mis manos sobre mi 24


cara—. Lo siento, estoy acostumbrado a estar siempre solo. Por
favor, no tengas en cuenta mis comentarios anteriores.

—No estoy seguro de que realmente quieras eso si lo dijiste


delante mío —dijo mientras ponía su mano en mi hombro—.
Jared es un poco exaltado pero no dejes que eso te desanime.
Él es una buena persona.

—Por supuesto que lo es. Yo nunca menospreciaría a mi


compañero. —Me aparté recogiendo uno de los platos que
pedí para el desayuno de mis compañeros. Simplemente
deseando que Tristán fuera mi compañero.

—¿Este es el tipo al que me dijiste que querías impresionar?


—Guy me preguntó en francés.

Negué y le entregué el plato a Tristán. —No, pero estoy


empezando a desear que este fuera el que Dios me dio. En
estos pocos momentos fue más agradable conmigo que mi
compañero.
—Correcto, no podemos pedir nuestro desayuno —Colton
murmuró mientras entraba en la cocina—. Buen trabajo
trayendo un chef francés con el que sólo tu puedes hablar.

Sentí que me hervía la sangre cuando Tristán tomó el plato.


—Por supuesto me doy cuenta de que hay una barrera con el
idioma. Voy a traducir. Guy es un viejo amigo y no ha estado
recibiendo las horas que necesita en su lugar de empleo. Yo
simplemente quería hacer algo bueno por ambas partes al
contratarlo por esta mañana. —Cogí el segundo plato y se lo
entregué a Colton quien lo miró con suspicacia.

—¿Otro soborno bonito puta ángel? —Jared arrastró las


palabras mientras entraba en la cocina.
25
—Jared, por favor —Rhyce silbó mientras lo empujaba.

No necesitaba de su mediación. Me volví y azoté el plato


contra la pared. —¡A la mierda todos ustedes! Estoy tratando
aquí. ¿Puede alguno de ustedes decir lo mismo? —Caminé por
la habitación y me detuve justo frente a la cara de Jared—. Yo
soy un puto arcángel ahora y tu compañero. Que me faltes el
respeto en privado durante nuestros momentos íntimos es una
cosa ¿Pero en público? ¿Estás loco? ¡Deseo que Tristán hubiera
sido mi otro compañero porque él fue mejor para mí en tres
minutos de lo que tu fuiste desde que te conocí!

Recorrí el mostrador y encontré un trozo de papel.


Rápidamente anoté tostadas francesas, tortillas, crepes, en
Inglés y Francés.

—¡Ya está! Problema resuelto. Espero que los modales de


las familias Magnus y Sethos se extiendan más allá de Jared y
Colton, porque Guy es una persona maravillosa y no merece el
desprecio o la falta de respeto que parece que yo merezco.
Simplemente apunten lo que quieren y lo hará. —Entonces le
pedí disculpas a Guy en francés y me dirigí hacia la puerta de
atrás. Pero lo pensé mejor y con un gesto de la mano, utilicé mi
poder para que pudieran entenderse entre sí sin importar el
idioma.

—Ahora, pueden entenderse mutuamente —murmuré

—¿Por eso no viniste a la cama la noche anterior? ¿Jared


fue grosero? —Rhyce preguntó en voz baja, me detuve con la
mano en el pomo de la puerta.

—¿Era bienvenido? Eso no se hizo claro para mí con mi


torpeza social y falta de humanidad. No esperé una respuesta,
abrí la puerta y la cerré detrás de mí con tanta fuerza que el
cristal se hizo añicos. Suspiré mientras caminaba por la terraza, 26
agitando una mano y limpiando el desorden.

Mientras caminaba por las piedra me di cuenta que no


estábamos llegando a nada y teníamos trabajo que hacer. Pero
quizás había otra manera.

—¡Quítamela, Gabriel! Yo no puedo cumplir mi misión de


esta manera. Ellos me odian, no me quieren aquí, y no puedo
decir que me sienta de manera diferente ahora —le grité
esperando que aparezca.

—¿Qué quieres que te quite, Castillo? —Suspiró detrás de


mí.

—Tu sabe muy jodidamente bien lo que te estoy pidiendo


—Gruñí, volviéndome hacia él, con las manos en puños—.
¡Todas estas emociones! Quítame mi humanidad. No puedo
realizar la tarea que se me encomendó con todos estos
sentimientos sobre mí.
Él respondió como si fuera mi hermano mayor cruzando los
brazos sobre su pecho enorme. —Actúas como si no tuvieras
ninguna antes pero si las tenías.

—Sí, sí, las tenía —estuve de acuerdo, asintiendo antes de


recuperarme y responderle—. Pero no así. Sentía empatía para
poder estar a favor de los necesitados. No sentía el dolor o la
angustia de tratar con las palabras hirientes de Jared. ¡Esto no
puede funcionar! Trato de hacer algo bueno y es un soborno.
Actúan como si pudiera leer sus mentes, pero ese poder me lo
quitaron. Siento dolor. ¿Cómo puedo tomar decisiones y trazar
un curso cuando temo que podrían odiarme más y hacerme
sentir más dolor?

—No puedo hacer lo que me pides —susurró, inclinando la 27


cabeza. Sinceramente no estaba seguro de si le creí, y nunca
antes me había preguntado si Gabriel me estaba mintiendo.
Fantástico.

—Alguien allá arriba puede. Encárgate de que lo haga.


¡Me pidieron que dejara todo, a cambio deberían concederme
una cosa! —Entonces lo pensé mejor—. Dos cosas. Detén las
hormonas. Todo en lo que podía pensar anoche era en el
placer y me causó más dolor. Puedo lograr la hazaña
monumental que Dios me pidió y salvar al mundo, pero no si
tengo estas necesidades y emociones. No puedo hacerlo.

—No puedo hacerlo, hermano —declaró mientras me


agarró del brazo. Lo sacudí y me alejé... Sólo para ver a otros
siete arcángeles de pie allí.

—¿Ahora qué? ¿Ustedes quieren burlarse de mí un poco


más? Adelante. Nada puede ser peor que lo que me dijo mi
compañero —me quejé mientras me preparé para el impacto.
Ariel dio un paso adelante, con la cabeza baja. —Nos
equivocamos al burlarnos en tu momento de crisis, hermano. Por
favor perdónanos. Sé que mis propios comentarios vinieron de la
ridiculez de la acusación. ¿Cómo puede un ángel que nunca se
dedicó a los placeres de la carne después de estar vivo durante
miles y miles de años ser una puta?

—Bien, estás perdonada —suspiré, comprendiendo ahora


mejor sus burlas— Por favor, sólo déjenme tranquilo.

—Si prometes aún no darte por vencido —rogó, dando un


paso hacia adelante y abrazándome—. Nos burlamos un poco
porque estás recién ascendido a nuestras filas. Pero estamos de
tu lado y aquí para ti. Tenemos fe en ti.
28
—Su fe está fuera de lugar —le susurré, con mis ojos
ardiendo. Me tomó un momento averiguar lo que estaba
pasando, hasta que me limpié la humedad de mis ojos. Me
eché a reír mientras me caí de rodillas—. Sí, ahora es el
momento perfecto para empezar a ser capaz de llorar. Justo
cuando se me da mucho por que llorar. Perfecto.

—Es perfecto. Es “Su” diseño, hermano —Ariel me


persuadió mientras se arrodilló a mi lado—. Por favor, por favor
no te rindas. Contamos contigo. Voy a recorrer el mundo en
busca de este demonio para ayudarte en tu misión. Te lo juro.

La miré fijamente un momento, dándome cuenta por su


expresión de que había algo más que me estaba perdiendo y
parecía ser algo importante. —Si fallo, alguien más va a
emprender la lucha. ¿Por qué es tan importante que sea yo?

—Tu nos das la esperanza de que todos podamos tener


algún día un compañero —admitió mientras apretaba mis
brazos—. Humanidad. Sueño todos los días con sentir el amor y
el calor de otro, y poder llamar casa a otro lugar que no sea el
Cielo.

Negué y traté de apartarme. Este no era el momento para


que ella añadiera más responsabilidades sobre mis hombros. —
Algún otro con un compañero puede prove-

—No hay nadie más. Tu eres el primero —Gabriel


interrumpió. Mi mirada se disparó a él, y vi la profunda
preocupación en sus ojos.

—Dios mío, ¿quieres tanto que esto funcione así algún día
puedes tener un compañero? —respiré mientras se me retorcía
el estómago—. ¿Por qué yo? ¿Por qué soy el primero? No sé
nada de los seres humanos o cómo interactuar con ellos. Mi 29
trabajo era cuidar del planeta. Destruía los asteroides y
recongelaba alguno de los casquetes polares cuando podía.
¡No había ningún ser humano allí!

—Es por eso que fuiste elegido en primer lugar —Ariel me


aseguró. Simplemente negué, ya que no tenía ningún sentido—
Si me hubieran dado un compañero y me hubiera insultado
como lo hizo el tuyo, no me abría dolido. Me habría enfurecido.
Yo soy el gran arcángel Ariel. Yo podría haber lastimado a
cualquier humano que me ofendiera.

—Y ella es la más paciente —Raphael se echó a reír—. Tu


no tienes el ego que tenemos después de servir a Dios e
interactuar con los seres humanos milenio tras milenio. Con
suerte, viéndote aprenderemos un poco de humildad para que
podamos ser dignos de nuestros propios compañeros algún día.

—Genial, más presión —le gruñí y caí de espaldas sobre la


hierba—. Justo lo que necesitaba, que me agreguen la gran
emoción de la culpabilidad. Añádela a la lista de lo que quiero
deshacerme. —Entonces miré a Gabriel—. Voy a hacer lo que
pueda, pero realiza una solicitud oficial para que me quiten mi
humanidad y mi lujuria. No puedo con todo esto.

—Voy a pedirlo, pero eso es todo lo que puedo hacer —


estuvo de acuerdo con el ceño fruncido—. Por ahora, vamos a
ayudarte a localizar a este demonio. Vuelve con tus
compañeros y explícales la verdadera situación.

En un instante, se habían ido todos, dándose cuenta de lo


abrumado que estaba.

—No puedo explicar lo que no entiendo —me susurré a mí


mismo. Me senté y miré hacia el paisaje, tomando comodidad
de su belleza. Esto era lo que yo estaba destinado a hacer:
proteger a esta visión, este mundo. No para amar y ser invadido 30
por emociones humanas. Era lo que se me daba bien, lo que yo
sabía, lo que siempre viví.

Cuando se desató el enorme huracán en Nueva Orleans,


fomenté el sistema de tormentas y lo detuve. Yo lo hice. El
Huracán Katrina habría devastado cinco veces más si yo no
hubiera estado involucrado.

Calentamiento, terremotos, hasta dividí las placas porque


las corrientes oceánicas están cambiando debido al
calentamiento global. Podía manejar eso. ¿Las lluvias de
meteoros viniendo al planeta que amaba? Absolutamente.
Podía desviarlas sin problemas.

¿Mantener el equilibrio entre el bien y el mal, salvar un


montón de almas mientras logro convencer a los Perros de
trabajar del lado de los Cielos y también tratar con mis propios
compañeros y todas estas emociones? Nope. No es ni
remotamente probable.
Después de unos diez minutos, sabía que no podía
retrasarlo más y me levanté. Suspiré de nuevo mientras volví a la
casa. Dudaba de este plan y diseño.

—No es la mejor emoción para sentir ahora tampoco —


murmuré, frotando el dolor en mi pecho. Nunca en todos mis
años había dudado de mi Padre y su sabiduría. Estaba
perdiendo la fe.

Justo cuando más la necesitaba.

Cuando entré a la cocina, todos los Perros estaban


reunidos alrededor de la mesa hablando en voz baja y
comiendo. Miré a Guy que se encogió de hombros.
31
—Ellos creen que perdiste la cabeza, mi viejo amigo —
explicó en francés. Poco a poco levanté una ceja y Guy
sonrió—. Oyeron la conversación y creen que estabas hablando
solo.

—¿Con la voz de una mujer? ¿Tengo ahora la capacidad


de tener conversaciones conmigo mismo con diferentes voces?
Esa es una nueva. —Me senté en el mostrador, sonriendo
cuando él deslizó un plato de crepes en frente mío—. Me gusta
cómo me mimas, Guy. Eres mi único amigo humano, y te quiero
mucho.

—No tengo ninguna duda de que nuestra amistad fue


posible por el amor que guardaste en tu corazón durante siglos.

—Yo no iría tan lejos. —Me encogí de hombros y tomé un


bocado de mi desayuno, gimiendo con los gustos divinos que
golpearon mi paladar.
—No subestimes lo que hiciste, Castillo. Salvaste muchas
vidas al detener la tormenta en mi pueblo. ¿Cuántos
innumerables descendientes nacieron gracias a ti?

—Tu tatara-tatara-tatara-tatara-tatara-tatara-tatara
abuela era muy persuasiva, un alma buena. Fue la primera vez
que alguien me rezó a mí. Ella no me pidió por su vida o por la
ciudad. Lo único que pedía era que salvara a su hijo de la
inundación. Era su naturaleza desinteresada lo que trajo la
salvación sobre su pueblo.

—No, fue tu gran corazón que no sólo respondió a sus


oraciones, sino que también hizo mucho más. Lamento que
estos hombres no puedan ver todavía como eres, pero lo harán.
De eso tengo fe —me aseguró mientras se acercó y acarició mi 32
mano.

—Me alegro de que tengas fe. Estoy perdiendo la mía —le


susurré, limpiándome los ojos—. Lo que esperan de mí es
demasiado grande, demasiado, incluso para un ángel. Como
soy el primero en tener compañeros, todos ellos confían en mí
para hacer este trabajo así podrán tener compañeros propios.

—Gabriel estaba fuera. —Él asintió, sabiendo que éramos


amigos.

—Todos los arcángeles estaban allí. Supongo que no se


manifestaron por si alguien estaba viendo.

Guy miró por las puertas de atrás de una manera


soñadora. —¿Todos ellos? Es un espectáculo que me encantaría
poder ver.

—A mi también —Tristán murmuró detrás de mí. Me quedé


helado con mi tenedor en la boca y rodé mis ojos.
—Genial, se me olvidó que había traducido la habitación
para que todos pudieran entenderse. —Negué con la cabeza y
comí. Entonces me di cuenta de que podía cumplirle su deseo
ya que había sido tan gentil conmigo. Mirando por encima de
mi hombro, me encontré con la mirada de Tristán—. Podría
llamarlos de nuevo si lo deseas. No pueden tomar forma plena.
Es demasiado difícil para alguien que no es de los cielos, pero
podrías verlos en su forma humana como me ves a mi.

—¿Podrías hacer eso para mi hermano, pero no para mí?


—Dijo Jared enojado, levantándose.

—Tu no me lo pediste —me quejé, centrándome de nuevo


en mi desayuno—. No quiero ser acusado de intentar sobornarte
otra vez. —Me di cuenta de lo amargado que sonaba y negué 33
con la cabeza—. ¿Comieron todos? Guy debe regresar pronto
a casa.

—Lo hicimos, gracias —Rhyce susurró en un tono triste.

—Gracias por tu amabilidad en proporcionarnos este


increíble desayuno, mi viejo amigo —alabé mientras miraba a
Guy.

—Fue un placer. —Él bajó la cabeza antes de venir


alrededor del mostrador y abrazarme—. Cuando las cosas se
calmen, trae a tus compañeros a comer a mi casa, ¿si?

—Nunca te podría negar eso y no he visto a las niñas


desde hace tiempo —estuve de acuerdo—. Déjame pagar tú-

—Tonterías. Me pediste un favor como tu amigo —


argumentó mientras rápidamente se apartó, como si pudiera
darse prisa y evitar que le diera algo.
Sonreí ante sus travesuras, amando lo desinteresado que
era. —Lo hice y viniste, por lo que estoy muy agradecido. Pero
yo no estoy ciego en cuanto a la dificultades que sufre tu
pueblo. Angelina es sabia y pura del alma. Su hija se merece
todo. Deja que te ayude con eso. —Hice aparecer una bolsa y
se lo entregué—. Ella sueña con estudiar en París y abrir un
restaurante para ti. Déjala ir a estudiar negocios y hacerlo por ti.

—Te doy las gracias, mi amigo. —Él asintió mientras


tomaba la bolsa de mí, jadeando cuando miró dentro—. Esto es
demasiado para sus estudios. No puedo aceptar esto.

—¿Alguna vez te permití que me regreses un regalo? —me


reí mientras empujaba sus manos cuando él trató de darme la
bolsa de nuevo—. Invierte en el pueblo que tanto amas. Utilízalo 34
con los huérfanos que se que luchas tan duro para alimentar.
¿Qué más puedo hacer para ayudar a tu pueblo?

—Siempre queriendo hacer más. Tienes un buen corazón,


Castillo. —Me dio un abrazo de oso, besando mis dos mejillas—.
Al haber poca agua no hay pesca. Eso es lo que perjudicó a la
economía. Demasiados pescadores sin trabajo.

—Voy a ver que se solucione después de librar al mundo


de este demonio, —juré y me puse de pie—. Dale a la pequeña
Bella mi amor y a tu esposa también. Voy a visitarlos pronto y
recoger otro conjunto de pinturas creadas para ella en Italia.
Supongo que el último ya se le terminó.

—Oh si. Ella la utilizó durante mucho tiempo. La inspiración


y las herramientas que le diste la ayudaron todos estos años.

—Estoy contento de que ella las tenga. Lamento no poder


hacer más, pero no se me permite intervenir de esa manera —le
susurré, vergüenza y culpa llenándome.
—No tienes nada porque pedir disculpas —Él me estudió
de cerca antes de frotar mi hombro—. No era el plan de Dios
que ella fuera como los demás. Nosotros la amamos tal como es
y apreciamos los dones que Dios le dio. Ningún hombre puede
solucionar todos los problemas del mundo, Castillo. Ni siquiera un
ángel. Nuestra familia es muy bendecida.

—Gracias por absolverme de mi culpa. Estás siempre en mi


corazón, Guy. —Le sonreí cuando le toqué la frente.

—Como tu estás en el de mi familia —juró antes de que le


envíe a casa. Me quedé mirando el suelo, donde mi amigo
había estado, ya extrañándolo.

—¿Qué quiso decir con que no es como los demás? — 35


Preguntó en voz baja Colton.

—Ella es autista. Muy inteligente, pero autista lo mismo —le


contesté, volviéndome hacia mi desayuno de nuevo.

—¿Por qué no la curas? —Preguntó Tristán, absolutamente


sin ningún juicio en su tono.

—Yo no soy el tipo de ángel que puede hacer milagros en


los seres humanos —le expliqué mientras pinché mis crepes más
fuerte de lo necesario con mi tenedor—. Pedí que ella fuera
sanada y la respuesta que recibí fue que no era justo intervenir
de esa manera por una familia y dejar a todas las otras personas
llevar esa carga simplemente porque yo era amigo de su padre.

—Así que el cielo estaba siendo imparcial. Es comprensible


—Rhyce conjeturó—. Pero tu los ayudas.

Me encogí de hombros antes de tomar otro bocado. —


Cuando pude lo hice a lo largo de los años. Bella es un artista
muy talentosa y mantiene sus otras dificultades a raya cuando
pinta.

—¿Así que cuidaste esa aldea después de que su ancestro


te oró y te convertiste en el ángel de la guarda de esa familia?

Girándome en el taburete con mi plato en la mano sonreí


por la forma en que Rhyce redactó la pregunta. —En cierto
modo. Trato de mirar por ellos, pero si me apego mucho
cuando mueren es muy difícil de superar.

—Hiciste bien, ayudando a su hija en la escuela y dándole


al pueblo un descanso de las dificultades económicas —Jared
dijo. Mi mirada se disparó a la suya y vi la curiosidad en sus ojos
mientras me estudiaba—. ¿Porqué lo hiciste? 36
Me encogí de hombros, pensando que era raro que
preguntara cuando la respuesta era obvia. —Debido a que
pude.

—Esa no es realmente una respuesta —susurró mirando a


Rhyce por ayuda.

—Lo siento, pero es la única que tengo —suspiré, a la


espera de otra explosión—. No tengo todas las respuestas,
Jared. Me parece que apenas tengo alguna estos días. Hago lo
mejor que puedo y espero que sea suficiente.

—¿De verdad quieres que te quiten tu humanidad? —


Preguntó Rhyce cuidadosamente mientras todos me
estudiaban.

Asentí. —El dolor que siento ahora es devastador. Voy a


perder de vista la misión si continúa. —Me aclaré la garganta y
miré hacia otro lado—. Tracé nuestros destinos conocidos en la
otra habitación. Encontré un rastro del demonio pero no tengo
nada más para seguir adelante. Los otros arcángeles
prometieron ayudarnos a buscarlo.

Salí de la habitación, sin saber si alguien me seguiría. Y eso


era parte del problema con este trabajo. Yo no era un líder. Y no
podía ver la forma de darles una razón para que quisieran que
yo los guíe.

37
Capitulo 3 Jared

Corrí tras Castillo, rechazando las protestas de Rhyce.


Sabía que él estaba preocupado de que trastornara a nuestra
pareja. Pero esa no era mi intención. Necesitaba respuestas, y si
bien entendí que Castillo no las tenía todas, sabía que estas si
me las podía dar. Al entrar en el comedor, cerré la puerta detrás
de mí.

—No quiero pelear más, Jared —Castillo susurró, con un


dolor tan profundo en su tono que sentí que mi estómago se 38
revolvía.

—Yo tampoco, pero no eres el único que se sintió herido.


—Se quedó inmóvil, con los nudillos volviéndose blancos de
agarrar su plato demasiado fuerte, y poco a poco se volvió
hacia mí—. ¿Por qué ni siquiera nos besaste? Simplemente nos
ofreciste follarte, saltándote todas las sutilezas y sólo queriendo
que te hiciéramos nuestro compañero. Fue ofensivo y frío, como
follar a una prostituta. Por eso dije lo que dije.

—Esa no fue mi intención en absoluto —jadeó mientras


dejaba caer su plato, la mesa estaba lo suficientemente cerca
para atraparlo sin que se rompa—. No sabía cómo hacer esto,
Jared. Les ofrecí todo mi ser a mis compañeros, confiando en
que me mostrarían el camino. No me besaste cuando te di una
invitación general a acostarte conmigo. En su lugar, fuiste
áspero y rompiste mi agujero

—Lo lamento —dije con voz áspera, sintiéndome caer en


un pozo profundo al darme cuenta que lesioné a mi
compañero.
—¿Se sintió Rhyce también así? —Esperó hasta que asentí
antes de caminar hacia la puerta y pedirle a Rhyce que se una
a nosotros. Cuando entró los tres nos quedamos en silencio.

—Yo estaba tratando de disfrutar del sexo —soltó cuando


el silencio se prolongó.

—Estabas tan tranquilo como si estuvieras haciendo tus


impuestos o jugando a las cartas en vez de follar con tu pareja.
Yo quería que demostraras algo.

Dejó escapar un profundo suspiro mientras apoyaba la


cadera contra la mesa de roble enorme. —Parecía que no
querías estar conmigo, así que me mantuve en silencio con la
esperanza de no distraerte por el hecho de que me estabas 39
tomando a mi y no a alguien que deseabas. La única vez que vi
a alguien fornicar fue hace mucho tiempo y al Rey David no le
gustaba que sus parejas de cama fueran ruidosas, él las
amordazaba. Como yo no quería eso, me quedé callado.

—Tú no acabaste. No pudimos complacerte —susurró


Rhyce—. ¿No te gustó?

—Fue un poco duro —Castillo admitió, mirándome antes


de apartar la mirada.

—En definitiva fui demasiado rudo. —Él simplemente se


encogió de hombros—. No tenías una erección mientras lo
hicimos. Tú no me querías y eso me mató.

—No, yo la tenía pero sentí que iba a llegar a mi clímax


demasiado pronto, y constreñí el suministro de sangre para no
fallarte. —Se encogió de hombros mientras miraba por la
ventana—. Nada de eso importa ahora.
—Por supuesto que sí. —Gruñí mientras iba hasta él y lo
rodee con mi cuerpo—. ¿Me quieres? ¿Nos quieres?

—Yo quiero lo que tú y Rhyce ya tienen. Quiero la ternura y


el amor que vi entre Stryker y Rafe.

—¿Y mi hermano? Me atraganté, celoso como el infierno


de que él deseara estar acoplado a Tristán.

—Él fue bueno conmigo. Parece que le importo. Quiero


que me cuiden, no que me llamen ángel puta. —Bajó la
cabeza, pero le cogí la barbilla en la mano y lo obligué a
mirarme.

—Siento mucho mis palabras crueles. Me dolió, pero eso 40


no es una excusa. Parecía como si nos estuvieras sobornando
con tu cuerpo para obtener lo que querías y no te importaba
nada de nosotros.

—Yo te di todo de mí —repitió, con sus ojos empañados—.


Eso no es un soborno, sino una manera de mostrar lo que sentía.
No sé qué otra cosa podría haber hecho, o puedo hacer, para
ser lo que quieres.

—Se honesto y abierto. No te ocultes de nosotros o frenes


tus respuestas le dije finalmente entendiendo cuan poco sabía.
Rocé mis labios suavemente sobre los suyos, notando la forma
en que se mordió sus labios cuando se quedó sin aliento
después de que paré. —No, no te muerdas el labio. Déjanos oír
lo que sientes.

—Voy a tratar.

—Eso es todo lo que pedimos —Rhyce susurró mientras se


movía al lado de nosotros. Él se acercó y pasó la mano por el
pecho de Castillo—. No devuelvas tu humanidad.
—Ya lo pedí —susurró, cerrando los ojos con fuerza—. Me
duele mucho.

—Entonces vamos a sanar el dolor y así tal vez estés de


acuerdo en mantener tus sentimientos si alguien te dice que
puede quitártelos.

—No entiendo lo que quieres decir. —Sus ojos se abrieron, y


vi la profunda, profunda confusión en ellos. En lugar de
responder verbalmente, lo besé de nuevo y desabroché su
cinturón. Cuando no me detuvo, continué y abrí sus pantalones
antes de deslizar mi mano en ellos. Gimió en voz baja contra mi
boca cuando tomé su polla en mi mano.

—¿Esto es lo que quieres? —Le pregunté mientras le 41


acariciaba.

—Quiero que quieras hacer esto —susurró, apoyando la


frente en mi hombro—. Se siente maravilloso, pero yo no quiero
que me llames puta otra vez porque te dejo.

—No, nunca, mi compañero —juré—. Entiendo la situación


mucho mejor ahora, y nunca, nunca voy a hacerte daño así de
nuevo. Deja de lado el dolor y siente lo que te estoy haciendo.

—¿Qué debo hacer? —Me preguntó después de que


empecé a acariciar su polla.

—Besa mi cuello y dime si te gusta que te toque —ofrecí,


no estando seguro de cómo responder a eso—. Haz lo que
quieras.

—Me encanta la forma en que me tocas cuando eres


suave —Castillo gimió mientras besaba mi cuello. Entonces él
fue más allá y deslizó su mano por mis pantalones cortos. Gruñí
cuando tomó mi pene en su mano y oí otro gruñido haciendo
eco de Rhyce. Nos estaba dando placer a los dos juntos.

—Aprieta un poco más fuerte —Rhyce sugirió,


murmurando mientras besaba el cuello de Castillo—. Sí, así.

—Lubrica tu agujero en esa forma mágica que tienes. Te


mostraremos lo divertido que los juegos previos pueden ser —
Ronroneé mientras mordía suavemente el lóbulo de su oreja.
Castillo dejó escapar un profundo gemido al sentir a Rhyce
quitarle sus pantalones. Luego se quedó sin aliento y se sacudió
por lo que supuse que mi otro compañero, debía haber
empujado un dedo dentro de él—. Vente para nosotros, nuestra
pareja.
42
—Hazlo —Rhyce estuvo de acuerdo. Segundos después,
Castillo gritó y llenó mi mano con su liberación. Trabajé su polla
hasta que terminó, sonriendo cuando su pecho comenzó a
agitarse y le faltó el aire.

Le guiñé un ojo a Rhyce sonriendo alegremente. Nosotros


le dimos a nuestro compañero ángel su primer orgasmo.
¿Cuántas personas podían decir eso? Por lo que escuché antes,
cuando Castillo estaba hablando con los otros ángeles,
ninguna.

—Tienes más para darnos. —Me puse de rodillas y me


quedé mirando la impresionante polla delante de mí. Giramos a
Castillo, y tragué su polla mientras Rhyce se ocupaba de su
culo.

Y le dimos a nuestro compañero dos orgasmos más de esa


manera.
—Denme un minuto, y les daré placer —Castillo jadeó,
parpadeando hacia el techo una vez que lo trasladamos a la
mesa.

—Me gusta un poco la idea de estar duro por ti durante la


reunión —Rhyce rió, inclinándose y besando a nuestra pareja—.
Ah, sí, suena bien. Me estaré muriendo para el momento en que
terminemos por saltar sobre ti y enterrarme profundamente en tu
culo y oír tus gritos.

Gemí como lo hizo Castillo, la idea era tan atractiva que


estaba teniendo dificultades para no empujarme en su culo en
ese momento. En cambio, decidí también provocarlo, dejando
que supiera lo que era el verdadero deseo y como las cosas
podían ser. —Todos escucharon lo que hicimos y olerán lo difícil 43
que es para nosotros, esperar hasta que podamos follarte.

—Eso no va a pasar —Castillo suspiró mientras se sentaba.


Él negó mientras se deslizaba fuera de la mesa y enderezó su
ropa.

Eché un vistazo a Rhyce que simplemente se encogió de


hombros. ¿Por qué Castillo tenía un problema con lo que yo
decía? Yo había sido el que vino aquí para cerrar la brecha.

—Puedo decir que dije algo malo otra vez, pero no sé que
y no puedo leer sus mentes —Castillo se quejó mientras se alejó
de nosotros y se paseó alrededor de la mesa—. ¿Por qué eso le
pareció una buena idea a Dios? No tengo ni idea de lo que
estoy haciendo, y toma mi única manera de tener una visión de
cualquier situación. No tiene sentido. Oh Dios, esto es una crisis
de fe, ¿no? Nunca tuve dudas antes. No puedo tener dudas
ahora. ¿Por qué todo se agita dentro de mí ahora cuando las
cosas no van bien?
—Respira, Castillo —exigí mientras su cara cambió de color
y empezó a hiperventilar. Sacudió la cabeza, así que me fui un
poco por la borda, pero él me estaba volviendo loco también.
Lo empujé contra la pared más cercana y lo besé.

—¿Por qué eso me hace sentir mejor? —Susurró mientras


nos separamos—. No entiendo nada de esto.

Ahuequé su mejilla, amando la sensación de su piel suave


bajo mis dedos. —Debido a que no estás solo. Es por eso que te
hace sentir mejor. Nosotros estamos de tu lado y al besarte
cuando enloqueces te demostramos que no te vamos a dejar.
Sólo habla con nosotros. Podemos ayudarte.

—¿Por qué estabas enojado conmigo otra vez? —Sus ojos 44


plateados prácticamente brillaron y en ese momento entendí
completamente lo especial que era. Único en su clase. Y él era
mío si yo podía aprender algo de maldita paciencia.

—Tu dijiste que mi idea ni iba a suceder —susurre, tratando


de escoger las palabras adecuadas con tanto cuidado como
pude para no agitar aún más la situación—. Parecías de
acuerdo con los comentarios de Rhyce, pero luego, cuando yo
hablé, de pronto te molestaste alejándote.

Me miró de cerca y frunció el ceño. —Dios, me gustaría


poder leer tu mente. No era porque fue tu comentario. La idea
me hizo sentir incómodo. Se supone que debo estar a cargo, no
conducir una reunión excitado. Esto es demasiado importante
para distracciones. No puedo poner mis propios deseos antes
que el destino del equilibrio entre el Cielo y el Infierno. Todo esto
es demasiado complicado para mí.

—Está bien, entonces nosotros vamos a simplificarte las


cosas —Rhyce sugirió a toda prisa mientras se acercaba y le
pasó la mano por el brazo—. Nosotros no estábamos diciendo
que íbamos a sentarnos en la reunión desnudos y
masturbándonos, Castillo. Estábamos diciendo que simplemente
porque tuviéramos que realizar la reunión no íbamos a dejar de
desearte.

—Ustedes querían apoyarme en mi papel entonces —


Castillo susurró, mirando entre nosotros. En realidad, no era lo
que significaba pero aún así asentí, notando que Rhyce hizo lo
mismo—. Está bien, entonces podemos hacer esto porque
somos un equipo. Eso es lo que debo entender de esto.

—Exactamente. Una cosa a la vez. —Le di un beso rápido


antes de dirigirme a la puerta, sonriendo cuando oí a Rhyce y
Castillo besarse también. Fui al comedor donde estaban todos
los demás y sacudí mi cabeza cuando vi las miradas 45
preocupadas que me dieron. Sí, nada en la vida nunca era
fácil.

—Stryker fue a ir a buscar a Rafe mientras estabas


hablando con los ángeles —Tristán informó a Castillo—. Dijo que
va a reunirse con nosotros aquí mañana.

—Podemos hacer algo mejor que eso. —Castillo se


encogió de hombros y señaló el mapa—. Aquí están los cinco
primeros nombres que nos dieron con el acuerdo que
alcanzamos con el infierno. Hay uno en el camino de regreso a
Nashville por lo que si el equipo Sethos quiere puede rescatarlo y
llevarlo a la casa de Rafe, voy a realizar un seguimiento del
demonio con mis compañeros. De esa manera nosotros no
interrumpiremos a Rafe y Stryker antes de que tengamos una
buena noticia para ellos. —Se volvió a Colton, sabiendo la
jerarquía correcta con el mayor de cada camada—. Si quieres
tomar el mapa y planear quién va a donde con cada equipo,
puedo acelerar la extracción de las almas en peligro.
—¿Cómo haríamos eso? —Colton miró, estudiando el
mapa—. Algunos están desparramados por todo el país y tengo
serias dudas de que el demonio se mantuviera sólo en EE.UU.

—Puedo enviar a los equipos a donde necesiten ir —


respondió Castillo, echando un vistazo alrededor de la
habitación—. No necesitan conducir ni nada. Todo lo que
necesitan es una manera de comunicarse conmigo cuando
estén listos para que los traiga de vuelta.

—Todos tenemos nuestras celulares. —Dex se encogió de


hombros y sacó el de él—. ¿No podemos sólo llamarte?

Castillo miró el teléfono y luego nos miró a nosotros antes


de mirar al teléfono de nuevo. —No tengo ni idea de lo que es. 46
¿Alguien puede explicarme cómo esto nos ayudaría?

—Es un teléfono móvil. Puedes llevarlo a cualquier lugar y


llamar a cualquier otro teléfono —Tristán ofreció, tragando con
fuerza mientras compartíamos un vistazo con nuestros hermanos.

—¡Oh! Alexander Bell terminó su invención, ¿verdad? —


Castillo exclamó, sonriendo ampliamente—. Bien por él. Yo sólo
lo visitaba de vez en cuando para cenar. No puedo decir que
estoy al día con la mayoría de las cosas. —Él luego frunció el
ceño mientras miraba alrededor de la habitación—. Y aunque
es mejor que invocar hechizos todo el tiempo, todos ustedes
están molestos. —Entonces su rostro se relajó mientras miraba a
Tristán—. Gracias, eso me hace sentir mejor. Sí, es un buena
manera de ver la situación.

—¿Qué estabas pensando? —Le pregunté, tragándome


un gruñido. Como si necesitara otra razón para que Castillo
prefiriera a mi hermano.
—Que no importa si sabe lo que un teléfono celular es o no
—Tristán murmuró, mirando lejos de mis ojos—. Él tiene el poder,
el liderazgo y el conocimiento del Cielo, para hacer el trabajo.
Nosotros estamos aquí para ayudarle y averiguar mejores formas
si podemos, como saber que usar un teléfono celular es más
fácil que hacer hechizos de invocación. Realmente no es un
gran problema. Él nos advirtió que no tuvo mucha interacción
con la gente.

—Por supuesto —estuve de acuerdo, sonriendo a mi


compañero—. Eso es lo que tienes en nosotros, porque somos un
equipo. Tú, yo, y Rhyce.

Tristán miró a sus pies cuando Castillo simplemente se


encogió de hombros. —Maravilloso. Nuestro viaje nos lleva a 47
Rusia por lo que si quieren empacar una bolsa cada uno, voy a
resolver el resto. Puedo transportar un coche así que tal vez esa
sea la manera más fácil, de poner al equipo Sethos justo en el
blanco y el equipo Magnus en la finca de Rafe. Supongo que
tienes curiosidad por saber si Stryker lo pudo solucionar.

—Estoy seguro que Tristán la tiene —solté por mi sensación


de inseguridad—. Me dijo que iba a ir detrás de Rafe y
aparearse con él cuando Stryker no lo quiso. Él realmente sólo
quiere un compañero. —Uno por uno de mis hermanos se
volvieron y me miraron como si hubiera perdido la cabeza por
compartir eso. Entonces vi a Rhyce haciendo lo mismo y la
vergüenza me llenó—. ¿Quieres que embale una bolsa, para ti
Castillo? Quiero decir, mi ropa te quedaría grande pero al
menos algunos artículos para asearte?

—Oh, yo acabo de asearme pero una ducha como la que


tu y Rhyce tomaron anoche es una tentación. —Me tomó un
momento antes de darme cuenta lo que quería decir, porque
Rhyce y yo habíamos follado en la ducha la noche anterior. Me
aclaré la garganta y asentí cuando todo el mundo se fue a
hacer las maletas. Esperó hasta que estuvimos a solas con
Rhyce antes de lentamente caminar hacia mí y estudiarme de
cerca.

—¿Qué? —Le pregunté por último, antes de perder mi


mente por la forma en que miraba, pero no decía nada.

—Oí algunos pensamientos de tus hermanos, pero como


no los compartieron contigo no sé si debería abordar lo que oí?

No había que ser un genio para averiguar a lo que se


refería. —Antes estuve mal. Tristán es un buen hombre y no es un
ladrón de parejas. Nunca realmente fui un hombre celoso, pero
lo que dijiste antes me afectó. 48
—Me gustaría decir que estás siendo ridículo, pero para ser
honesto, no sé lo que siento —murmuró mientras cambiaba su
mirada hacia encima de mi hombro—. Nunca traicionaría a mis
compañeros o me involucraría en actividades carnales con
otro. ¿Eso ayuda?

—No. No, lo hace, porque sé que no lo harías. Pero a ti él


te gusta, y yo jodí las cosas por lo que preferirías tenerlo a él.

—No creo que sea así como me siento —Castillo suspiró,


apoyando su trasero contra la mesa mientras bajaba la cabeza
y apretó el puente de su nariz—. Tristán fue amable conmigo, y
por supuesto, él es atractivo, se parece a ti. Lo estás intentando
así que tengo esperanzas para nosotros de nuevo. No veo
ninguna razón por la que volvería a elegir la compañía de
Tristán sobre la tuya o a buscarlo para nada más que no sea
darnos una mano con la misión. ¿Eso ayuda?

Le di una palmada con la mejor sonrisa que pude reunir. —


Es un inicio y tal vez más de lo que merezco.
—Tuvimos un malentendido porque soy socialmente inepto
y no calificado en estos asuntos. Voy a dejarlo atrás. —Se
encogió de hombros, pero su expresión me dijo que no era tan
fácil.

—Jared no fue el único que te hizo daño —Rhyce aceptó


en silencio, frotándose las manos en sus pantalones como si sus
palmas estuvieran repentinamente sudorosas—. Tú me
escuchaste.

—Fui a buscarlos a la habitación de Jared para decirles del


desayuno, pero me mantuve invisible para hacerme una idea
de sus interacciones, para ver que podía hacer para que no me
odiaran. Veo que puede parecer que los quise espiar, pero yo
estaba perdido y simplemente quería mejorar las cosas entre 49
nosotros. —Se lamió los labios mientras levantaba la cabeza,
probablemente pensando que estaba en problemas.

—Nuestro pequeño espía —bromeé, dándome cuenta de


que esto era importante. Me adelanté y le di un beso suave a
Castillo—. Haz lo que necesites para sentirte a gusto con los
cambios significativos que estás experimentando últimamente.

Fue difícil dejar ir que él invadiera nuestra privacidad, pero


después de mi argumento anterior con Rhyce mientras que
Castillo estaba fuera, me di cuenta que si no controlaba mi
temperamento, podría perder a los dos. Vi que fue un buen
movimiento cuando me alejé de Castillo y él sonreía y la tensión
en los hombros de Rhyce se había ido.

—Gracias —Rhyce articuló y me sentí mucho mejor.

Era un comienzo, al menos en la dirección correcta.


Dejamos la habitación para alistarnos, y me di cuenta que tenía
una persona más con quien hablar.
Tristán. Tiempos divertidos.

50
Capitulo 4

Primero envié a los hermanos Sethos para interceptar el


alma número dos, que cumplía veintiún años al día siguiente.
Entonces transporté a todos los hermanos Magnus a la
residencia de Rafe para que pudieran convertirla en el
comando central. Mientras miraba las manchas ahora vacantes
donde sus vehículos habían estado con Jared y Rhyce a mi
lado, una ola abrumadora de temor me golpeó.

—¿Qué pasa, Castillo? —Rhyce preguntó mientras me 51


giraba para mirarlo—. Te pusiste blanco como un fantasma y
estás sudando.

—No vamos a ser suficientes —admití tomando la decisión


de expresar mis temores a mis compañeros en lugar de
mantenerlos todos dentro—. Este demonio hizo seis tratos en diez
días a partir de Rafe. Él ha estado en libertad durante más de
dos décadas sin reglas que lo pararan. Podríamos tener miles
de almas para rescatar en plazos muy ajustados. Once de
nosotros no va a ser suficiente y además encontrar al demonio y
detenerlo y obtener los otros nombres.

—Tienes razón, tenemos que reclutar más soldados —Jared


estuvo de acuerdo, y luego sonrió—. ¿Dijiste que teníamos que ir
a Rusia? Tengo algunos contactos con Perros de allí. Podríamos
ser capaces de matar dos pájaros de un tiro. Yo puedo trabajar
en eso, tu en rastrear al demonio y Rhyce comenzará a pensar
ideas sobre qué hacer con toda la gente que encontremos.

—¿Qué quieres decir? —Preguntó Rhyce, pero incluso


mientras las palabras salieron de su boca sus ojos se abrieron de
forma desorbitada—. Oh, mierda. No podemos dejar a los niños
con los monstruos que vendieron el alma de su bebé nonato.
Bueno, podemos empezar a pensar en eso también. Por ahora,
llevarlos a lo de Rafe y tal vez dejar a alguien allí para explicarles
cuando otros Perros vengan.

—Esa es una buena idea, especialmente después de que


encontremos al demonio —estuve de acuerdo, con la mirada
fija en el cielo tranquilo y preguntándome si teníamos alguna
oportunidad de ser capaces de sacar esto adelante—. De esa
manera también podemos reclutarlos.

—Entonces tenemos un plan. Ves no estás solo en esto —


Jared se rió entre dientes, lanzando su brazo sobre mi hombro.
52
—Muy bien, nos transportaré a Rusia para que podamos
darle una patada en el culo.

Me concentré en una gran catedral que conocía en


Moscú, cerca de donde habían sentido por última vez la
presencia del demonio, y nos hice aparecer allí. Una vez que
llegamos allí, me di cuenta que no estaba realmente seguro de
qué hacer ahora. Nunca había rastreado un demonio antes.

Dejé escapar un grito confuso que sobresaltó a mis


compañeros. —¡Ariel!

—¿Sí, hermano? —me saludó mientras ella apareció en


una forma similar a la que estaba actualmente yo. La forma real
de un arcángel podría cegar a los seres humanos... Literalmente
aveces.

—Nunca seguí a un demonio. ¿Cómo puedo saber dónde


encontrarlo? Sé donde estuvo cuando hizo el último acuerdo
por un alma por lo que me dijo Gabriel. Pero ahora que ya no
engaña por las almas, no tengo manera de seguir su rastro.
Me miró de cerca y se mordió el labio. —Tal vez no quiero
humanidad y emociones después de todo. Realmente no te
permiten pensar bien.

—¿Qué quieres decir? —Le pregunté, sintiendo el insulto


como una piedra en el estómago.

—Castillo, Dios te dio dos Perros del infierno como


compañeros. ¿No crees que fue para que pudieras encontrar a
este demonio?

—Nosotros no sabíamos lo que estaba pasando y yo ya


era su pareja cuando me convocaron y- —cerré mi boca tan
rápido que me mordí la lengua—. Claro, por supuesto. No
sabíamos pero EL sabe todo. —Suspiré y apoyé mi cadera en 53
una de las bancas, cansado de una manera completamente
nueva—. ¿Así que simplemente deben buscar su olor por todo el
mundo? El demonio podría estar en cualquier lugar.

—En realidad no. Gabriel me dijo que parte del trato fue
que el demonio perdió su capacidad de transportarse a sí
mismo como lo hacemos —Ariel dijo mientras miraba alrededor
de la catedral. Una parte de mí se preguntaba si ella estaba
revisando para asegurarse de que no estábamos siendo oídos o
de que hubiera posibles problemas en el horizonte.

Otra parte de mí pensó que era su naturaleza curiosa. Ella


actuaba mucho como un colibrí a veces. Quiero decir que de
la mejor manera, pero era cierto.

—¿Si el infierno le impidió ser capaz de desplazarse


apareciéndose, que otros poderes pudieron quitarle? —Jared
preguntó con una sonrisa malvada en su rostro, frotándose las
manos—. ¿Por ejemplo ser capaz de hacer aparecer efectivo o
credenciales de la nada? Eso lo mantendría atrapado dentro
de las fronteras de Rusia.
—Muy sabio, Jared Magnus. Voy a comprobar de
inmediato. —Ariel me dio unas palmaditas en el hombro con
ternura, y absorbí algo de su fuerza con ese gesto. Era
exactamente lo que necesitaba—. Fuiste elegido para esto
porque eras la elección correcta, Castillo. No dejes que tus
nuevas emociones te llevan a dudar de ti mismo.

La miré a los ojos, pensando que podría encontrar una


idea de su significado subyacente, pero ella era como una
pizarra en blanco. —¿Qué quieres decir?

—Hay un adagio humano sobre los hombres y su falta de


capacidad de parar y pedir direcciones —explicó con una
sonrisa brillante, probablemente, al sentirse divertida—. Aquí es
donde tu falta de orgullo arcángel entra, hermano. Nosotros no 54
hubiéramos pedido ayuda, y hubiéramos perdido el tiempo
tratando de averiguar todo nosotros mismos. No hay vergüenza
en buscar orientación. Tu capacidad para admitir que no lo
sabes todo y que necesitas ayuda es lo que va a llevar a la
gente a ayudarte. La honestidad es una cualidad maravillosa y
algo fundamental para un buen líder, no un dictador de mierda.
Y no temas, me dicen que los Perros serán capaces de
encontrar al demonio por su olor.

Ella desapareció antes de que pudiera responder. —Buena


suerte, Ariel, y gracias, hermana. —Sabía que ella todavía podía
oírme.

—Ella tiene razón, ¿lo sabes verdad? —Rhyce dijo mientras


recogimos nuestras cosas y nos dirigimos hacia la salida—.
Confío en ti porque eres honesto y un líder al que puedo seguir.

—Gracias. Aprecio eso.

Los guié por dos cuadras hasta donde habían encontrado


el rastro del demonio. Podría haber llevado menos tiempo
apareciéndonos allí mismo, pero a lo largo de mis muchos,
muchos años, me di cuenta que era más fácil cambiar de lugar
por los lugares de culto. Ellos eran más tolerantes y trataban
menos de arrestarme aunque no hiciera otra cosa que
aparecerme.

—Oh, mierda —Jared tosió, agitando su mano delante de


su cara—. ¿Que es ese olor?

—Creo que es el demonio —Rhyce se quejó—. Ariel dijo


que seríamos capaces de olerlo.

—Eso debe ser, porque no huelo nada —suspiré, una vez


más lleno de miedo de que fuera la persona equivocada para
este trabajo. Yo no podía incluso ni conducir la búsqueda. 55
Entonces pensé en las otras cosas que me dijo Ariel y encontré
la esperanza de que pudiéramos lograr lo que necesitábamos.

Las emociones y la humanidad eran muy confusas.

—Ahora que conocemos su olor propongo que vayamos a


buscar a esos Perros que conozco —Jared sugirió—. Podríamos
necesitar el respaldo, y podemos llevarlos a la fuente del olor
para rastrearlo.

—Me remito a tu orientación. —Sonreí por la inteligencia


de mis compañeros, pensando que Dios me dio exactamente lo
que necesitaba. También ayudó a la tensión en mi cuerpo
mientras sentía el destino del mundo en mis hombros.

Para parecer normales nos tomamos un taxi a la última


dirección conocida de los contactos de Jared. Se detuvo en
una finca de lujo, con una vieja casa enorme, con una fuente
de piedra en la desembocadura del camino circular. Lo que tal
vez no era tan sorprendente, ya que los Perros eran inmortales.
Yo había escuchado decir a los ángeles que los Perros eran
Perros callejeros desaliñados, escuálidos y que eran un
desperdicio de espacio.

Estaba aprendiendo que podrían haber estado


equivocados porque mis experiencias con ellos no eran nada
por el estilo. Por otra parte, ahora no era imparcial dado que
estaba acoplado a dos.

Hice aparecer un poco de moneda rusa en el bolsillo antes


de entregarle un poco más que el total al conductor y darle las
gracias. Una vez que estuvimos en la calle, dejamos que Jared
se ponga por delante.

Pulsó un botón y dijo en el altavoz —Boris soy Jared


Magnus. Segundos después, la puerta se abrió lentamente y 56
entramos, caminando por el largo camino para autos hasta la
entrada principal. En el momento en que entramos en el
porche, la puerta se abrió y un hombre gigantesco salió de la
casa.

—¡Jared, mi viejo amigo! —El hombre que supuse era Boris


saludó... Antes de tirar a mi compañero en sus brazos y besarlo.
Jared empujó su pecho cuando el hombre atacó a sus labios—.
¡Cómo te he echado de menos!.

—Boris, espera —Jared se quedó sin aliento y sólo fue


capaz de conseguir decir eso antes de que Boris volviera a
besarlo mientras lo agarraba del culo.

—¡Jodidamente increíble! —Gruñí mientras agité mis


manos y los separé. Tiré a Boris dentro de la casa y entré tras él,
permitiendo salir a mi verdadera forma. Extendí mis alas mientras
me acerqué al Perro ahora sentado en el suelo, moviendo la
cabeza—. ¿Tocas mi compañero de esa manera? ¿Te gusta
respirar Perro?
—Detente, Castillo —Rhyce me advirtió mientras frotaba mi
ala donde se unía a mi espalda—. Recuerda por lo que estamos
aquí. —Le miré sólo para ver a otros Perros gruñendo y
acercándose a nosotros, probablemente la camada de Boris.

Me aclaré la garganta y bajé mis alas para que se vieran


pero no estuvieran extendidas. —Claro. Pero Jared está retirado
del mercado de las caricias y los besos. Él está aquí como un
amigo y nada más.

—No sabía que ahora estaba acoplado. Su olor no


cambió al de un Perro acoplado. —Boris me dio un guiño
profundo mientras despidió a sus hermanos—. Pido disculpas,
ángel. Mi nombre es Boris Markova y sean bienvenidos a nuestra
casa. 57
Cerré los ojos por un segundo y le di un gesto superficial,
aceptando, pero no mostrando igualdad. Era uno de esos
juegos de modales. Arcángel supera Perro en la jerarquía de la
vida. —Castillo. Yo soy el Arcángel Castillo y acepto
humildemente tus disculpas.

—No hay ninguna arcángel Castillo uno de los Perros


argumentó en un acento ruso profundo.

—Estoy recién ascendido —le contesté, tratando de


mantener mi tono bajo control—. A los ángeles normalmente no
se les dada compañeros, pero eso también es nuevo. El aroma
de Jared va a cambiar muy pronto. —Le di a mi compañero
una mirada por encima del hombro, desafiándolo a decir nada
más.

—Sí, es correcto —tosió, tratando de ocultar su sonrisa.

—¿Por qué esto les parece divertido? —Le murmuré a


Rhyce cuando vi que también estaba tratando de no reírse.
—Porque parece que los ángeles pueden ponerse celosos,
y dado que estaba preocupado acerca de tus intenciones con
Tristán, creo que dejaste muy claro que él es tuyo —mi otra
compañero ofreció.

—Es bueno saberlo, y podemos hablar de las emociones


más tarde porque los celos me producen rabia. —Me pellizqué
el puente de la nariz y sacudí la cabeza—. Hemos venido a
hablar contigo de una determinada situación y ver si tu familia
está dispuesta a cambiar de equipo y trabajar para el Cielo.

—Somos Perros del infierno, ángel —el mismo hermano se


burló.

—Cuida tu tono, Feodor —Jared advirtió mientras se movía 58


a mi lado—. Boris prácticamente saltó sobre mi cuando abrió la
puerta. Ningún Perro estaría de acurdo que trataran así a su
compañero, tiene sentido que un ángel tampoco lo haga.

—¿En verdad el nombre de este hombre es Feodor? —Me


dio un bufido cuando asintió—. Agradezco a Dios por mi-

—Lo que quiere decir es que hay una manera de cambiar


de bando y proteger a las almas que marcaron para la
colección del infierno y no debería haberlo hecho —Jared
interrumpió mientras tomaba mi mano. Me di cuenta que era un
gesto de solidaridad y comodidad, con gratitud lo acepté y
apreté la suya a cambio. Atenué de nuevo mi apariencia y
nuevamente parecía casi humano.

—Sentémonos y puedes contarnos la situación desde el


principio —Boris ofreció mientras hizo un gesto a otra puerta en
el pasillo. Todos le seguimos y tomamos asientos alrededor de la
habitación, mis compañeros me flanqueaban a cada lado.
—La próxima vez, avísame antes de que nos aparezcamos
en los escalones de entrada de uno de tus anteriores amante —
le susurré a Jared. Él asintió con la cabeza antes de inclinarse y
besar mi mejilla.

—Esto es nuevo para mí también. Lo siento. Yo no estaba


pensar en nada que no sea la misión.

Su disculpa y su beso aflojaron el nudo que se me había


formado en el estómago. Fue reconfortante saber que ver a
Boris no lo afectó y que no era un problema potencial. —Lo
siento exageré. —Podría ser que él sólo fuera un idiota por no
pensar que sería un problema. Realmente esperaba el tiempo lo
confirmara.
59
—No lo hiciste y fue caliente —se rió entre dientes,
dándome otro beso.

Entonces le dijimos a los Perros todo lo que sabíamos, sin


escatimar detalles por más pequeños que fueran.
Lamentablemente sin embargo hubo un par de interrupciones.

—Dejen de mirar a mi compañero con tanta lujuria y


pensamientos carnales —les gruñí a Boris y a uno de sus
hermanos—. Me están provocando a hacer algo que es infantil
e incompatible con la situación que tenemos ante nosotros.

—¿De verdad? ¿Follaste a dos de los hombres que


veníamos a ver y no creíste que eso sería una mala mezcla con
nuestro compañero ángel que es nuevo en las relaciones y es lo
suficientemente potente como para freírlos a todos? —Rhyce
dijo arrastrando las palabras. Lo siguiente que supe, fue que él
estaba tirando de mi brazo para levantarme junto con él, luego
nos reacomodó y nos sentamos uno a cada lado de Jared.

Supongo que no era el único que estaba celoso.


—Yo hubiera hecho eso también —Feodor se burló,
dándonos un gesto desdeñoso—. Jared esta obviamente tan
lejos de sus ligas que la posesividad podría ser la única manera
de evitar que alguien se los robe.

Sí, él era el otro hermano que lo miraba...

Agité mi mano y le sonreí a Feodor cuando trató de hablar


y no salió nada. Si tienes preguntas válidas o algo productivo
para agregar a la conversación, voy a escucharlo y hacerle
frente. De lo contrario no volverás a menospreciar a mi
compañero.

—Veo que superaste tus problemas de interferir con el libre


albedrío de alguien —Gabriel se echó a reír cuando apareció 60
en el brazo del sofá junto a mí—. Bien por ti, hermano. También
estoy orgulloso de tu moderación al sólo haberlo amordazado.

Me aclaré la garganta, ya no sintiéndome infantil por


demostrar mi poder de esa manera. —Gracias hermano.
¿Supongo que estás aquí para algo más que ver el
espectáculo? —Le disparé a Jared una mirada hostil. Él
realmente debería habernos preparado para esta situación.

—Sí, tu compañero tiene buenos instintos sobre el


funcionamiento del castigo —elogió, asintiendo a Jared—. El
infierno de hecho despojó al demonio de todas sus
capacidades. Él no puede hacer aparecer fondos o
credenciales, por lo que suponiendo que no los hubiera hecho
antes, está atrapado y sin dinero. Eso no quiere decir que no va
a robar o intimidar a la gente para conseguir lo que quiere, pero
eso lleva tiempo así que me siento seguro de que su lugar de
búsqueda está más cerca de lo que piensan.

—¿Y tu eres? —Boris preguntó mientras se levantaba


lentamente.
—El arcángel Gabriel, hermano de Castillo. —Boris inclinó la
cabeza con respeto antes de tomar su asiento de nuevo—. El
mundo está cambiando, Perros jóvenes. La balanza se ha
inclinado a favor del mal, y necesitamos soldados en el lado del
bien. ¿No contestarán la llamada de los agentes del Cielo?
Entiendo que trabajar para el infierno es una carga en sus
corazones. Le ofrecemos una manera de salir y demostrar que
no son malos y que los Perros se preocupan por su participación
en el proceso.

Sonreí ampliamente cuando oí lo que estaban hablando


en sus cabezas.

—Deberíamos discutir el asunto un momento en privado —


Boris dijo mientras se puso de pie, haciendo un gesto a sus 61
hermanos para que hagan lo mismo. Luego le dio una mirada
dura a Feodor—. Mi hermano se comportará en el futuro,
Castillo. Si tu pudieras por favor levantarle la prohibición de
hablar, podríamos comunicarnos con más eficacia que
hablando en nuestras cabezas.

—Por supuesto. —Retiré mi poder sobre sus cuerdas


vocales y sonreí, cuando rápidamente salieron de la habitación.
Un poco de miedo siempre era sano alrededor de un ángel.
Entonces mi sonrisa creció. Mejor dicho un arcángel.

—Bueno, yo te dejaré para que hagas retorcerse a tu


compañero por sus pensamientos embarazosos. —Gabriel se
puso de pie y me guiñó un ojo antes de desaparecer.

—¿Pensamientos embarazosos? —De pronto lo entendí,


sabiendo lo que mi hermano quería decir, Jared.

Se aclaró la garganta y cruzó las piernas. No era un buen


comienzo. —Me estaba preguntando cuáles eran sus
pensamientos lujuriosos y que parte de mi tiempo con Boris y
Feodor te mostraron. Yo no quiero que te moleste que nuestras -
pues – mmm - relaciones eran diferentes a las nuestras.

—¿Qué? ¿Más apasionadas? —Rhyce se quejó


empujando a Jared lo que no auguró nada bueno para él ya
que tropezó conmigo. Quería empujarlo también, así que lo
hice. Aunque pareciera infantil.

—Bueno, no es apasionado, pero un poco flexible —Jared


murmuró, frotándose los dedos en las sienes—. Yo era el foco y
centro y vieron lo grandes que Boris y Feodor son. Son muy fuerte
y poderosos-

—No son tan poderosos como yo o tan fuertes como


somos tus compañeros —le espeté. Luego tuve otra idea. Moví 62
mi mano sobre la frente de Jared, sonriéndole a Rhyce cuando
lo hice—. Mi compañero, tú eres mejor creando situaciones
íntimas que yo. —Rhyce levantó una ceja por lo que se lo
demostré—. ¿Te gustó la sensación de tu polla en mi boca, no
es así, Jared?

—Sí, sí, lo hizo —gimió mientras sus caderas comenzaron a


moverse—. Oh mierda, tus labios son perfectos, Castillo. Llévame
más profundo.

—¿Él piensa que los estás haciendo? —Rhyce me lanzó


una sonrisa maligna cuando yo asentí—. ¿Cualquier cosa que
sugiramos lo va a sentir?

—Sí, pensé que era un castigo apropiado? ¿Tu no?

—Castigo mi culo —Jared jadeó, apresurándose a abrir sus


vaqueros—. ¡Esto es fantástico!

—¿Qué pasaría si me comiera tu culo mientras nuestra


Castillo te chupa? ¿Eso lo haría mejor? —Rhyce se burló,
pasando los dedos por el pelo de Jared ya que todavía
estábamos sentamos en el sofá—. Deberías desnudarte e
inclinarte sobre el sofá para que tengamos un mejor acceso.

—¡A la mierda! —Él estuvo de pie despojándose de toda la


ropa en segundos. Observé con total disfrute como Jared abrió
las piernas, con las espinillas tocando el sofá, mientras se inclinó
y agarró las almohadones de atrás—. Rhyce, por favor, necesito
más.

—Dinos lo que quieres, nuestra compañero. —Le disparé a


Rhyce un guiño desde detrás de Jared y él contuvo una
carcajada.

—Los dedos de Rhyce con la lengua. —Gritó cuando 63


empezó a sentir eso, y sus muslos temblaron con necesidad.
Rhyce comenzó a apretarle los pezones cuando me acerqué y
acaricié su apretado saco.

—Debes tener orgasmos múltiples por nuestras atenciones


—le sugerí, sintiéndome reivindicado porque estábamos
haciendo para Jared algo que no podrían los hermanos
Markova.

Efectivamente, Jared lo hizo.

Cuando se le pasó, se arrodilló en el sofá con el pecho en


las almohadas, respirando con dificultad. —Eso fue increíble.

—Y nosotros sólo estamos empezando —Rhyce ronroneó—.


¿Puedes sentir el vibrador masivo recorriendo todo el camino
dentro de ti? —Jared gritó apoyando sus manos en puños en el
sofá, moviendo su cuerpo como si estuviera siendo empalado
por algo muy grande—. Y sientes el placer de estar en el interior
de los dos al mismo tiempo, mientras que las vibraciones
penetran profundamente en tu culo.
—Sabía que eras el hombre adecuado para este juego —
me reí, pero luego fruncí el ceño cuando él extendió su puño
hacia mí.

—Golpea tu puño contra el mío. Es un signo de un trabajo


bien hecho y una felicitación —Rhyce explicó a su manera
paciente. Lo hice, pero quedé mirando mi puño cuando él se
alejó, sacudiendo la cabeza. Echaba de menos los saludos y
gestos de los viejos tiempos. Estos parecían fríos y casi torpes.

Continuamos con la "tortura" de Jared hasta que se dejó


caer en el sofá, desmayado sobre nosotros. Sonreí con orgullo
mientras aparecí una manta sobre él para cubrir su desnudez.
Boris y sus hermanos eligieron justo ese momento para reunirse
con nosotros. 64
Les di la sonrisa más amable que pude. —¿Podríamos
pedirles un vaso de agua para nuestra pareja desmayada?.

—La mayoría de la gente se desmayaría después diez, no,


doce orgasmos —Rhyce acordó, entendiendo mi estratagema.

—Jared puede durar muchos más —Feodor dijo


arrastrando las palabras y levantando una ceja.

—Tal vez con compañeros de cama que no sean sus


compañeros, pero le puedes preguntar cuando se despierte. —
La riqueza almibarada en el tono de Rhyce no tenía precio.

—De cualquier manera, él es su compañero y nosotros


respetamos eso —Boris gruñó hasta que su hermano asintió con
la cabeza—. Estamos muy contentos, como sus amigos, que él
esté siendo muy bien atendido. —Entonces él tomó una
respiración lenta y profunda antes de dejar salir un jadeo
nervioso. —Nos preguntamos si hay alguna reacción que
podemos esperar del Infierno antes de unimos a su causa.
—Una pregunta muy inteligente —lo alabé, dejando de
lado los otros temas con los ex amantes de Jared. Una vez que
la niebla de los celos se levantó, vi por qué mi compañero
decidió que estos hombres serían buenos para nuestro equipo—
. No, no habrá repercusiones en lo absoluto, y si las hubiera de
algún agente corrupto del infierno, yo personalmente lo
manejaré. Hicimos el acuerdo cuando Infierno fue capturado
rompiendo las reglas, por lo que somos capaces de encontrar la
ayuda que podamos y cualquier Perro que quiera pasar a
nuestro lado no será castigado, ya que es una cuestión de libre
albedrío.

—Básicamente este es el castigo al infierno por enviar


Perros detrás de las almas limpias, sabiendo lo que estaban
haciendo —Rhyce resumió por mí. Asentí mientras él hablaba.
65
Esa era una manera más sencilla de decirlo.

Y así fácil ellos estuvieron de acuerdo. Honestamente,


había pensado que tendría que hacer un poco mas de esfuerzo
para convencerlos después de los contratiempos en conseguir
que mi propio compañero quisiera ayudarme. Por otra parte,
podría haber vacilado porque éramos compañeros y sus
sentimientos estaban en juego. Fueron a empacar algunas
cosas mientras nosotros vestíamos a nuestra pareja.

—¿Acabo de tener el más loco sueño sexual o acabamos


de hacer cosas que realmente no son posibles? —Jared gimió
mientras se despertó, sentándose lentamente.

—Necesitas rehidratarte después de tu performance —me


reí, inclinándome para darle el agua, que el hermano menor
había conseguido para él.
Él asintió y se bebió la mitad de ella antes de mirarme. —
¿Que pasó? Mis bolas duelen de venirme tantas veces. Fueron
como trece o catorce veces.

—Deberías decirles a tus ex amantes y explicarles lo bien


atendido que estás y simplemente sugerirnos las diferentes
actividades que se te ocurran.

—No sé si debo en primer lugar darte las gracias por el


paseo más salvaje de mi vida o rogarte que me creas que
nunca te engañaría y que no debes sentir celos. —Él negó con
la cabeza y bebió el resto del agua antes de enfrentarme.

Antes de que pudiera decir nada, se sentó a horcajadas


sobre mi regazo y atacó a mi boca, de forma agresiva como 66
Boris había hecho con él. Me dejé besar tratando de disfrutar de
ello, pero sin saber exactamente lo que significaba el beso.
Como si me hubiera escuchado o hubiera sentido mi vacilación,
se echó hacia atrás y sonrió.

—Decidí hacer las dos cosas a la vez. Tu y Rhyce son mis


compañeros, Castillo. Aunque me alegro de que no tengas ex
amantes a quien celar, sólo recuerda, si hubiera querido estar
con ellos, no hubiera estado solo cuando me conociste.

Cuando él bajó su boca de nuevo a la mía, sentí la tensión


por no entender dejar mis hombros. Agarré su pelo y le respondí
lo mejor que pude, con la esperanza de no parecer un ángel
idiota que era demasiado nuevo en esto para complacer a su
pareja.

—Mmm, bueno —Jared susurró contra mis labios—.


Cualquiera que sea el truco que utilizaste para hacerme sentir
que todo lo que decían era real, fue increíble, pero nada
supera lo real.
Sí, yo pude entender en ese momento lo que él estaba
haciendo. Calentó mi corazón que él se preocupara lo
suficiente para ayudarme a entender que no tenía nada de
qué preocuparme.

—Vamos a ir a rastrear al demonio y luego podemos tener


mucho más de lo real —le ofrecí, frotando su entrepierna a
través de sus pantalones vaqueros. Parecía que le gustó porque
Jared se estremeció contra mí y luego prácticamente atacó mi
cuello.

—Quiero estar dentro de ti tan mal que me está matando.


Quiero volver a hacer el amor y mostrarte que no soy
despiadado y cruel. Lo siento mucho, Castillo. Nunca quise
hacerte daño. 67
—Honestamente, me encantó —admití mientras sostenía
su cabeza en mi cuello para que no pudiera mirarme, ya que
estaba avergonzado por esa confesión—. Creo que
simplemente necesito más tiempo antes de que nos
involucramos en algo tan primordial y contundente de nuevo.

—Hecho y hecho —juró mientras mordisqueaba mi oreja—.


Lo siento por la angustia que esta visita también te trajo. A
vosotros dos.

—Está olvidado —Rhyce rió—. Honestamente estoy celoso


de tu castigo. Ahora también quiero ser malo.

—Tan pronto como nos pongamos al día con el demonio,


estoy seguro de que podemos encontrar un poco de mala
conducta tuya. —Le disparé un guiño y él me sonrió.

Una vez que nos reunimos con los hermanos Markova,


tomamos dos de sus autos y les mostré el lugar donde Jared y
Rhyce habían cogido un fuerte olor del demonio. Luego Rhyce y
Boris cambiaron a su forma de perro, mientras que el resto de
nosotros nos amontonamos en los coches.

Entonces pensamos que Perros enormes corriendo por las


calles de Moscú sería un problema, por lo que luego de
discutirlo decidimos que fueran encubiertos, y dado que Boris
podía comunicarse con sus otros cinco hermanos de camada,
tenía sentido que ellos condujeran.

Perfecto, porque no sé conducir, y no creo que ese fuera


el mejor momento para aprender.

Fue en algún momento en la segunda hora de nuestra


búsqueda que Jared suspiró profundamente y me informó que
los hermanos Sethos habían recuperado de forma segura al 68
siguiente nombre en la lista de las almas en peligro. Decidimos
que los Perros cambiaran, así podía decirle a Rhyce que
recibimos noticias de sus hermanos y que estaban a salvo. Vi la
tensión en sus hombros disiparse y me di cuenta que esta era
probablemente la primera misión de su familia en la que no
formaba parte.

Hice una nota mental para hacer un mejor seguimiento de


este tipo de cosas. Siendo compañero de Rhyce y Jared,
necesitaba ser más comprensivo con los problemas y posibles
peligros de tener hermanos. Nunca me enfrenté a tales
complejidades como la dinámica familiar con otros ángeles.
Otra cosa nueva en mi lista de las cosas por aprender.

Esta lista imaginaria iba a ser pronto tan larga como mis
dos piernas... Y yo no era un hombre de baja estatura.

En el lado positivo, Colton se había enterado de que


equipo de Perros había sido destinado para recuperar el alma y
les había vuelto a nuestro lado. Era fácil de encontrar consuelo
en nuestros números crecientes. Con la tarea que teníamos ante
nosotros, necesitaríamos todos los soldados que pudiéramos
tener en nuestras manos.

El afán de los Perros por cambiar de lado tenía sentido


después de ver cómo le dolió a Stryker oír que Rafe pensó que
era un siervo del Infierno. No, los demonios eran secuaces como
yo suponía que era un siervo de los Cielos. Los Perros eran
diferentes, neutrales, casi, a pesar de que eran un agente del
infierno. No era una vida que hubieran elegido como lo hacían
los demonios.

Por otra parte, no había elegido ser un ángel. Así que tal
vez yo era un agente de los Cielos

Las cosas dieron vueltas y vueltas y vueltas en mi mente 69


hasta que nos detuvimos de nuevo para cambiar otra vez un
par de horas más tarde. Luego hubo otro cambio y otro antes
de que Rhyce y Boris volvieran otra vez. Una vez que fuimos por
la Plaza Roja y el Kremlin por cuarta vez, finalmente tuve que
hacer la pregunta que estaba en mi mente.

—¿Seguro que no estamos recorriendo el mismo sendero y


persiguiendo nuestras colas? —Rodé los ojos cuando el juego de
palabras me golpeó pero sin reconocerlo.

—Sí, este es el camino —Rhyce me aseguró mientras se


sentaba en el coche, cuando fue su turno y permitiendo que el
siguiente grupo tomara su lugar—. Los olores se desvanecen
para que podamos seguir en el mismo camino, definitivamente
no estamos siguiendo un camino equivocado, el olor se hace
más fuerte y sabemos por dónde seguir. Él está dando vueltas
como si tratara de cubrir sus huellas y confundir a los
perseguidores.
—¿Así que, básicamente, el camino original tendría más
de ocho horas y es el que estamos recorriendo ahora? —
Intenté, sin saber si estaba de acuerdo con su lógica.

—Sí, le hemos olido a la distancia un par de veces, pero


estamos enfocados en seguir una ruta. Puede ser que hayamos
sido capaces de saltar a las más recientes pero así podríamos
habernos confundido. Es más lento pero mejor a largo plazo sólo
seguir la pista original con los movimientos del demonio.

—Confío en tu juicio, mi compañero. —La sonrisa que


recibí compensó la falta de control que sentía por toda la
situación. Yo estaba haciendo literalmente nada, además de
montar en el coche. No era una sensación que me gustara
demasiado. 70
Después de varios cambios entre los equipos, me di cuenta
de lo cansados que todos estaban. Rhyce dormía a mi lado,
mientras que Jared estaba desmayado en el asiento delantero.
Ahora sí que me hubiera gustado saber conducir ya que no
necesitaba dormir. Y honestamente me estaba empezando a
preocupar por los conductores. Mientras que no podía morir,
podía experimentar dolor, y yo no quería pasar por mi primer
accidente de coche.

Sobre todo en ese momento con las apuestas que


estábamos tratando.

—¿Cuánto tiempo más todos ustedes pueden mantener


este ritmo antes de que tengamos que parar para un descanso
de verdad? —Le pregunté a Boris que fue a responder, pero
bostezó en su lugar.

No es exactamente algo que impulsara mi alivio.


—Vamos a hacerlo todo el tiempo que sea necesario —
finalmente respondió—. Tuvimos mucha suerte de que no llovió
lavando el olor. Si nos detenemos por más tiempo de los que nos
lleva rotar los equipos, corremos el riesgo de que el clima
desmejore y perder el rastro por completo.

—Estamos bien, mi dulce ángel —Rhyce murmuró y luego


volvió a sus ronquidos tranquilos. Me pregunté si estaba soñando
o tenía alguna idea de lo que dijo. De cualquier manera, me
pareció entrañable.

Varios cambios después, estaba claro que teníamos que


parar. No sólo no arriesgaría a mis compañeros, tampoco a los
hermanos Markova, que nos estaban ayudando.
71
De repente hubo una nueva presencia a mi lado y un
destello de luz.

—¡Mierda santa! —Exclamó Boris, desviando el coche a la


derecha. Me golpeé en la puerta, tratando de girar la cabeza
para ver lo que estaba sucediendo a medida que
avanzábamos en forma errática. Enderezó el coche y tocó la
bocina antes de detenerse en el descanso—. ¿Qué estás
haciendo?

—Oh, lo siento —se disculpó Ariel, haciendo una mueca—.


No pensé en el peligro de aparecerme en un coche en
movimiento. Mis disculpas, Perro. —Luego se volvió hacia mí con
una sonrisa emocionada—. Encontramos al demonio. Gabriel le
atrapó y está esperando tu llegada.

—Gracias a Dios —alabé, mientras se drenaba mí


preocupación al no poder encontrarlo. Pero fue sustituida por
otra cosa, miedo. Yo no quiero tener que pasar por lo que sabía
que venía después. Pero experimentar las cosas que no
queremos era parte de la vida.
—Llévenlo a la casa de Rafe. Nos reuniremos allí. Nos
transportaré a todos nosotros allí.

Ella negó y me lanzó una sonrisa triste. —Lo haré yo. Tu


necesitas tu fuerza. —Salió del vehículo, para esperar hasta que
los otros Perros que habían estado siguiendo el rastro se unieron
a nosotros y luego lo hizo. Sentí una ligera opresión en mi pecho
como siempre me pasaba cuando me transportaba, no sabía
muy bien por qué tenía esa reacción corporal pero siempre
asumí que tenía algo que ver con la presión del aire.

—Wow, bonita —Rhyce murmuró mientras salía del coche.


Hice la misma, sonriendo por lo grande que nuestra base de
operaciones era. Puede ser que necesitara un complemento
para contener a todos los Perros y las almas en peligro hasta 72
que pudiéramos encontrar condiciones más permanentes, pero
fue un alivio ver que para empezar era mucho mejor de lo que
había pensado.

—Vamos a entrar y suministrarles alimentos a todos ustedes


antes de que vayan a descansar —les sugerí, sin mirar a ninguno
de mis compañeros. Yo no sabía cómo decirles que no quería
que vieran lo que tenía que hacer con el demonio.

Entramos en la casa, todos se saludaron mientras estaba a


un lado. Sonreí cuando Rafe se acercó a mí, casi brillando.

—Castillo, estoy tan contento de que estés aquí —me


saludó con timidez.

—Estoy muy contento de que hayas hecho las paces con


tu pareja. —Acepté el abrazo que me dio, devolviéndole el
gesto y absorbiendo la esperanza pura que emanaba.
Capitulo 5 Rhyce

—¿Tus compañeros se quedan? —Gabriel preguntó


evasivamente, mirando entre nosotros—. No creo que sea sabio,
Castillo. Le pedimos a Rafe que nos diera privacidad. Los seres
humanos no deben presenciar esto.

—Ellos están invocando su libre albedrío, haciendo caso


omiso de mis advertencias —nuestro compañero le informó,
encogiéndose de hombros—. Les advertí que no sería bonito
¿pero no puedo decirles nada más verdad? 73
—No —Gabriel suspiró mientras negaba con la cabeza—.
Definitivamente no.

Ahora estaba muy preocupado. ¿Qué carajo iba a


suceder?

¿Qué son esas marcas? —Jared preguntó mientras


estudiaba los dibujos brillantes en el suelo de piedra.

—Símbolos Enoc para atrapar al demonio —explicó Ariel


mientras terminaba el último—. Él no podrá huir de este espacio,
incluso después de que salga de su anfitrión.

—Espera, ¿los demonios poseen a los seres humanos?


Pensé que era sólo un mito —Palidecí, mirando a Jared quien se
encogió de hombros. Sí, al parecer, no sabíamos tanto sobre el
infierno como habíamos pensado.

—Sí, el demonio ha poseído a esta pobre alma durante


décadas por lo que parece. —Gabriel frunció el ceño cuando
Castillo se quitó la camisa—. ¿Estás seguro, hermano? Me
encantaría tener esta carga por ti.

—Te doy las gracias, pero no. Dios me dio esta tarea, y yo
acepto libremente las repercusiones. —Se acercó a Ariel que
quemó algún símbolo Enochian en su pecho. Castillo fue mucho
más valiente de lo que yo hubiera sido porque él sólo hizo una
mueca de dolor, pero no gritó. Luego dio un paso hacia la
estrella con los símbolos y asintió a Gabriel. —Puedes
despertarlo.

—Buena suerte, hermano. Buena suerte —Gabriel murmuró


antes de agitar su mano. Un segundo después el demonio
estaba despierto, gruñó haciéndome saltar por lo inhumano del
sonido y por sus profundos ojos rojos. No había negro ni blanco, 74
todo el ojo era rojo. Era muy inquietante por decir lo menos.

—Esto va a ser muy divertido —el demonio se burló


mientras lamía sus labios—. Te voy a rasgar en todos los sentidos
y todo lo que pueda. Tu no vas a recuperar este cuerpo, ángel.

Sí, sus palabras eran terribles, y me preocupaba por lo que


estaba haciendo Castillo pero era más que eso. Me di cuenta
de mi compañero poseía un cuerpo también.

—No, no lo hace, joven Perro —Gabriel me aseguró,


hablando en mi mente. —Los demonios que son ángeles caídos
tienen su verdadero cuerpo como lo tenemos nosotros. Son las
almas malvadas que fueron enviados al infierno que se
convierten en los demonios de las leyendas los que poseen a los
demás. No debes comparar a tu pareja con este parásito como
el no te comparó con un demonio aunque trabajabas para el
infierno.

Le di un ligero movimiento de cabeza diciéndole que


entendía y me centré de nuevo en la situación frente a mí. Eso
no quiere decir que no me sentí aliviado por la explicación de
Gabriel.

Castillo agarró la cabeza del demonio forzándolo el


contacto visual, y comenzó a cantar en lo que supuse era
Enochian. Le tomó un minuto o dos, pero entonces el cuerpo
del demonio quedó inerte, cayendo al suelo en un montón. Yo
no estaba seguro de lo que estaba pasando hasta que Castillo
se giró hacia nosotros, gruñendo. Y vi a sus ojos rojos.

—¿Acaba de dejar que ese demonio lo posea? —Jared


exclamó mientras tomaba mi mano.

—Oh, es bonito y poderoso —el demonio Castillo se rió


entre dientes mientras frotaba las manos por el pecho de 75
nuestra pareja. Wow, esto rápidamente consiguió
confundirme—. ¿Así que ustedes dos son sus compañeros? Yum.
Voy a tener todo tipo de diversión con los dos. Siempre quise
probar un Perro. Tengo que advertirles que me pongo un poco
violento.

—No le presten atención a las palabras de esta bestia —


Ariel nos advirtió cuando ella se interpuso entre nosotros y la
estrella en el suelo—. Él está desafiándolos tratando de que
crucen nuestra barrera. Castillo no está en control, mientras él
hace lo que se necesita.

—Oh no seas tan perra, Ariel. Yo no los lastimaría, mucho —


el demonio se rió, sorprendiéndome ya que no era la voz de
Castillo la que venía de su cuerpo. Obviamente era algo más.
Con énfasis en algo.

—¿Realmente necesitamos mantener viva a esta bestia


cuando Castillo termine? —Ariel arrastró las palabras, no
afectada por lo que la cosa decía. Gabriel le lanzó una mirada
hostil y ella suspiró—. Bien bien. Entiendo. Simplemente no me
gusta. Éste es mucho más miserable que los que nos
encontramos antes.

—¡Anímate por el hecho de que ahora tenemos permiso


para eliminar otros demonios que encontremos en el futuro!. La
guerra está sobre nosotros y se nos permite luchar de verdad.

Ariel y Gabriel compartieron una sonrisa oscura. —Y yo


amo una buena pelea. —Se volvieron hacia el demonio,
moviéndose junto a mí, y sonrieron—. Espero que sepas la
ubicación y las caras de todos tus amigos que te estuvieron
ayudando, demonio. Ya que vas a ser su perdición.

—No se pueden involucrar —el demonio rompió finalmente


mirando asustado—. No pueden romper el balance. 76
—Al que tu no te adheriste, y por lo tanto, cambiaste los
términos del acuerdo original —Gabriel lo incitó mientras
cruzaba sus brazos sobre su pecho—. Honestamente, te doy las
gracias por ello. Vamos a salvar a todas las almas que
injustamente te vendieron y ahora seremos capaces de atacar
a los demonios libremente.

—¡Voy a bañarme en tu sangre! —El demonio rugió y se


abalanzó sobre Gabriel.

Sólo para ser detenido por un muro invisible. Él siseó y


gruñó mientras arañaba la barrera, lanzando el cuerpo de
Castillo contra ella una y otra vez.

—Sí, Castillo tendrá contusiones por las acciones del


demonio —Ariel me advirtió en mi mente. Sentí a Jared
estremeciéndose y me di cuenta que la había oido también—.
Pero no te desanimes. Cuanto más el demonio se distrae, más
fácil será para Castillo conseguir lo que necesitamos de sus
recuerdos.
Tomé una respiración profunda, dándome cuenta de lo
que podía hacer para ayudar a mi compañero. Haría cualquier
cosa para ayudarle en esto.

—Ya encontramos las primeros dos almas —Ronroneé


mientras me aparté de Jared y me moví alrededor de la estrella
lentamente—. Y tenemos docenas de Perros que se cambiaron
del lado del cielo. ¿Cuan molestos crees que estarán tus
superiores?

—Vete a la mierda, Perro. Tu no sabe nada —me dijo entre


dientes, dando vueltas conmigo como si yo fuera la presa.

Me sentí un poco atraído por él. Lo que no era difícil dado


que tenía el cuerpo de mi compañero. 77
—Sé, que gracias a ti, ya no tengo que llevar almas al
infierno —me reí, sacudiendo la cabeza hacia él continuando
con el acto—. Ahora puedo salvarlas, proteger a otros de la
influencia del infierno. Tu liberaste a muchos de nosotros y más
por venir.

—Entonces debes venir aquí y darme las gracias. —Él


sonrió ampliamente de una manera que no me gustó—. ¿O tal
vez debería darte un show? ¿Qué es lo que más te gusta de tu
pareja?

—Su corazón —respondí, mirando a Ariel.

—¿Quieres verlo? —El demonio se burló antes de arañar la


piel de Castillo—. ¿Qué tal si lo saco para que lo tengas en tus
patas, Perro?

—¡No! —Grité mientras arrancaba la carne de Castillo. Casi


caí en su trampa y di un paso dentro de la estrella, Gabriel me
capturó en el último momento.
—Juego de niños, demonio —Ariel rió, agitó la mano y
sanó el cuerpo de Castillo.

—Si no hubieran estado aquí, hubiera funcionado —


espetó, intentando una y otra vez a destrozar el cuerpo de
Castillo. Cada vez uno de los otros ángeles sanó la herida, pero
el verlo me estaba volviendo loco.

Necesitábamos un nuevo plan y rápido.

—¿Por qué quieres rasgar un cuerpo tan lindo y poderoso?


—Jared se rió entre dientes, mirando el cuerpo de Castillo y
lamiéndose los labios—. No te imaginas el placer que encontré
en esa carne.
78
La cabeza del demonio se giró hacia a él mientras esa
sonrisa regresó. Prácticamente me preparé para el impacto. —
Sí, ya sé que lo hiciste. Tu compañero no lo hizo sin embargo. Él
usó sus poderes para acelerar la curación del daño que le
causaste cuando le arrancaste la virginidad de su agujero con
tu ira y lujuria.

—Fue un malentendido por el cual me disculpó —Jared


gruñó, su plan obviamente fue contraproducente—. Yo también
lo complací. Castillo me perdonó, así que deja de actuar como
si hubiera problemas que no hay.

—Perdonarte y olvidarlo son dos cosas diferentes, Perro —el


demonio prácticamente cantó—. Castillo está lleno de dolor,
preocupación y duda. Él sabe que nunca lo vas a amar, y que
habrías preferido un compañero humano. Vio el placer que
obtuviste cuando uso sus poderes, y mientras él estaba feliz de
darle eso a su compañero, en el fondo de su mente, en el fondo
en un lugar que ni siquiera se admite a sí mismo, le dolió que
hayas disfrutado con su magia más de lo que hiciste con su
cuerpo.
Jared se estremeció y luego sonrió. —Gracias, demonio.
Me alegra saberlo.

—No, no lo hace —gruñó, entrecerrando los ojos a Jared.

—Sí sí, lo hace. Puedo arreglar eso cuando Castillo sea el


mismo de nuevo. ¿Qué más puedes decirme que nuestra pareja
no puede?

Me quedé mirando a Jared, completamente


impresionado. No había manera de que yo jamás pudiera
haber volteado el daño que trataba de hacerle en algo útil. Él
era un poco sexy rudo en ese momento.

El demonio despidió el intento de Jared de echar a perder 79


su diversión como si no fuera nada de otro mundo. —Está bien,
puedo jugar a este juego todo el día. Te prometo que haré
soltar esa fachada mucho antes de que me quede sin cosas
que tu compañero pensó.

—No tengo dudas que oír esto realmente puede hacerme


daño, pero son cosas que debería saber —Jared reconoció,
dando al demonio Castillo un gesto profundo.

—Que comience el juego entonces. —Él se frotó las manos


mientras hizo un pequeño paso de baile en la estrella—. Prefiere
a tu hermano Tristán y soñó con él sexualmente.

—Mentira —Ariel gruñó mientras agitaba su mano e hizo


caer al demonio de rodillas—. Puedes jugar el juego si le dices la
verdad o nosotros simplemente te callaremos.

—Castillo no prefieren a Tristán —argumentó y los ángeles


no sueñan por lo que eso también es mentira.
—Ok, policía de la diversión. —Se puso de pie de nuevo y
desapareció sus pantalones, haciendo un espectáculo como si
el golpe bajo que le dio Ariel no fuera gran cosa—. Él cree que si
estuviera acoplado a Tristán, podría encontrar la felicidad,
alguien a quien amar en lugar de simplemente la lujuria que
comparte contigo. El amor y el entendimiento que sientes con
Rhyce.

—Tristán es el más paciente y comprensivo de nosotros, así


que tiene sentido —Jared estuvo de acuerdo, asintiendo con la
cabeza lentamente—. ¿Qué otra cosa?

—Él nunca estará a la altura de la amplia diversión que


tenías con Boris y Feodor. —Echó atrás la cabeza y se rió
profundamente mientras se agarraba el pecho—. Oh, y cómo 80
esos dos todavía te desean. Castillo sintió todo y revivió tus
momentos íntimos con los Perros. Puedes ser muy flexible para
alguien tan grande. Te gusta estar en el medio y que te violen,
¿verdad?

—¿A quién no? Ya lo sabía. Dame algo nuevo que no


sepa —Jared arrastró las palabras, pareciendo completamente
aburrido.

—Él no cree que cualquiera de ustedes pueda serle fiel y


por lo tanto decidió no reclamarlos plenamente para que no
mueran cuando lo engañen. El término perro caliente tuvo que
venir de alguna parte, ¿por qué no de los Perros? —Jared fue a
discutir, pero el demonio le despidió con la mano, dándose
cuenta de que había encontrado un buen punto para
lastimarlo—. Eso es lo que todos los ángeles piensan después de
todo. Los Perros están por debajo de los seres humanos y no se
puede confiar en ellos
—Ustedes trabajaban para el infierno, y nosotros para Cielo
—Gabriel suspiró, frotandose las manos por la cara—. No
siempre decíamos las mejores cosas de ustedes, eso es cierto.
Pero las opiniones cambian, y aprendí mucho más de lo que
pensábamos que sabíamos acerca de los Perros.

—La imagen de los Perros, que siempre tuvimos era la de


bestias sarnosas que disfrutaban de perseguir, caza y arrastrar
las almas al infierno —Ariel agregó con un encogimiento de
hombros—. Puedo admitir que estábamos equivocados.

—Eso está bien, la mayoría de los Perros están celosos de


los ángeles, —me reí—. Todos nacemos o nos crean en nuestros
papeles y pero nosotros tenemos el extremo corto de ese palo,
obligados a trabajar para el equipo en el que no queremos 81
estar.

—Y, sin embargo ninguno de los dos tratan a su


compañero arcángel con respeto —el demonio rompió,
probablemente molesto de que lo estuviéramos ignorando.

—Sólo porque me viste insultarlo cuando yo estaba herido


no significa que no lo trato con respeto —Jared replicó—. No le
puedo poner arriba en un pedestal de arcángel, y al mismo
tiempo abrirle mi corazón. Respeto mucho su liderazgo. Es una
tarea monumental la que está realizando y como cualquier
buen líder, delega en las personas mejor informadas en torno a
él, y les permite ayudarle. Creo que es de lejos la mejor persona
para este trabajo. —Jared sonrió y me lanzó un guiño—. Incluso
si él no sabía lo que era un teléfono celular.

—Me pareció entrañable —me reí, sacudiendo la


cabeza—. Fue lindo lo emocionado que estaba porque el
invento de Alexander Bell había llegado a buen término. Él es
amable, y aunque no interactuó mucho con los humanos, tiene
esperanza para la humanidad. Creo también que es la persona
perfecta para la asignación. Y lo voy a seguir como mi líder a
cualquier lugar que me pida.

—Incluso una vez que sus emociones y humanidad le sean


quitadas? —El demonio ronroneó—. Él pidió también que le
quiten su lujuria. Después de que fue íntimo con los dos y le
fallaron.

—Lo hicimos, pero es algo que podemos arreglar. Creo


que hemos dado el paso correcto para hacer eso también. —
Miré a Jared quien asintió—. Y simplemente tendremos que
demostrarle cuánto nos preocupamos por él mimándolo una
vez que estés fuera de él.
82
El demonio se rió, pasando sus manos por el cuerpo de
Castillo de nuevo. —¿Crees que voy a dejarlo ir? ¡Oh, no, esto es
demasiado divertido. Esta carne es mía ahora.

—Para de fanfarronear sobre cosas que sabes que no son


verdad —Ariel, arrastró las palabras—. Viste la marca que puse
en Castillo.

—¿Qué marca? —El demonio hizo un gesto a su pecho, la


marca no estaba—. ¿Por qué crees que arranqué su piel allí? Y
tu lo sanaste, quitando la marca.

Ariel se puso pálida, lo que me dijo que el demonio estaba


en lo cierto. Podríamos estar en serios problemas.

—Sea como fuere, Castillo es lo suficientemente fuerte


como para sacarte —argumentó Gabriel, mientras un cubo
apareció en su mano—. Serás desterrado a esta celda hasta
que hayamos terminado contigo y entonces vas a desaparecer.
—Veremos, Gabriel. Veremos. Castillo ha estado tratando
de recuperar el control desde hace un tiempo y no fue capaz
de hacerlo. Su plan perfecto no funcionó.

—Oh, por favor, nuestra pareja es lo suficientemente fuerte


para volver a nosotros cuando esté listo —le dije arrastrando las
palabras. Ariel me dio un guiño con el rabillo del ojo, pero no
estaba seguro de lo que eso significaba. ¿Quería que siga
hablando? Yo podría hacer eso—. Tu eres débil en
comparación con él. Vi lo que él es capaz de hacer, y a ti el
infierno te despojó de tu poder.

—Ustedes no vieron nada todavía —gruñó, arremetiendo


contra la pared de la estrella. En un instante, Ariel saltó dentro y
cogió al demonio desde atrás. Luego le dio la vuelta hacia 83
Gabriel quien también entró en la estrella. Abrió la caja, los dos
cantaron algo que no pude entender.

Observé con horror como Castillo se ahogó con el humo


de color rojo que era el demonio, su cuerpo casi
convulsionando en los brazos de Ariel. En el mismo segundo que
lo último entró en la caja, Gabriel la cerró y quemó con su mano
la madera.

—El demonio está atrapado aquí ahora —explicó, mientras


la puso en el centro de la estrella—. Es imperativo que nadie
entre en esta sala hasta que hayamos terminado con él.

—Me aseguraré de que la puerta esté bloqueada —Jared


juró, mirando hacia el humano colapsado en el círculo.

¿Estaba aún con vida? Negué y lo empujó fuera de mi


mente. Eso era problema de Ariel y Gabriel. Yo estaba
preocupado por mi compañero.
—Vamos a hacer eso otra vez —Castillo gimió, de nuevo
mientras volvía en si—. En serio, descubrí que me gustó.

¿En serio? —Ariel preguntó mientras lo sacó de la estrella.

—No, fue horrible, pero hice mi camino a través de la


primera década de sus acuerdos.

—Sólo tenías que hacer el primer año —Gabriel se quejó


envolviendo el brazo del Castillo por encima de su hombro—.
¿En qué estabas pensando?

—Que yo no quería seguir tomando el mal dentro de mí —


espetó Castillo—. Una vez que vi como era pensé que hacerlo
en dos veces parecía una idea mucho mejor que veintiuna 84
veces de esfuerzos cortos. Ya viste lo inteligente que era el
demonio. Decía la verdad sobre que había empezado a luchar
para recuperar el control, pero él estaba alimentando mis
dudas y preocupaciones, buscando un mejor punto de apoyo
dentro mío.

—Confío en tu juicio, hermano —Gabriel reconoció,


disparándonos una mirada de preocupación—. Sé consciente
del mucho enojo que todavía puede residir en ti después de ver
y experimentar ese grado de maldad.

—¿De qué estás hablando? —Castillo le disparó a Gabriel


una mirada poco amistosa y luego bajó la cabeza—. Tu hiciste
esto antes, me olvidé. Sí, enojado es una manera de describir lo
que siento. Locura primordial tal vez. Todo esto es tan nuevo y
hay tantas emociones ahora donde antes sólo había
tranquilidad. Es demasiado.

—Pensé que ya no querías perder tu humanidad —Susurré


dando un paso adelante para ayudar a Ariel y Gabriel a
sostener a Castillo. Jared se me adelantó, balanceando a
nuestra pareja en sus brazos.

—Yo no lo sé —Castillo murmuró, volviendo la cabeza


hacia el pecho de Jared sin rechazar la ayuda—. En este
momento no sé nada.

Jared le dio un beso en la frente cuando se reunió con mis


ojos. —Bueno, en ahora no tienes que decidir nada. Todo lo
que tenemos que hacer es descansar un poco, dormir, y luego
ponernos a trabajar.

—Los Ángeles no duermen. —Castillo se encogió de


hombros como diciendo que no nos molestáramos en hacer
preguntas, porque él no sabía las respuestas. 85
—Tu puedes ser el primero, hermano —Ariel dijo,
frotándome el brazo antes de caminar junto a nosotros—. Te ves
como una mierda como a los seres humanos les encanta decir.

Vi que Castillo trató de ocultar su sonrisa, pero fracasó


miserablemente. —Vete a la mierda, Ariel.

—Si tan sólo pudiera. El enterarme de todas tus aventuras


carnales me hace sentir aún más curiosidad. —Ella suspiró
dramáticamente mientras salía de la habitación en el sótano,
todos nosotros nos reímos de sus travesuras.

—Voy a cerrar esta puerta para que nadie pueda entrar,


además de uno de nosotros —Gabriel me informó mientras
cerraba la puerta detrás de nosotros y agitó su mano sobre el
pomo—. Siento que es lo mejor. ¿Estás de acuerdo?

Parpadeé hacia él un par de veces. ¿Tu me estás


consultando?
—Sí, Rhyce Setos —se rió entre dientes, dándome
palmadas en la espalda—. Mi hermano confía en ti tanto que
no encuentro ninguna razón para no seguir su ejemplo. Ariel y yo
estamos ayudando por ahora para sentar las bases de esta
tarea pero entonces tendremos que volver a nuestras propias
funciones. Eso me lleva a sentir que tu estás más a cargo aquí
que nosotros.

—Sí, bloquea la puerta. Así no habrá accidentes o errores.


—Sonaba como un buen plan para mí.

Rafe estaba esperando en la cocina, pálido y mirando listo


para vomitar cuando vio la forma en que Castillo se
encontraba.
86
—Él se recuperará, amable Rafe —Ariel le aseguró—. Y su
misión fue un éxito. Si le das en tu casa un lugar para descansar
a nuestro hermano lo apreciaríamos mucho.

—Claro. Me imagino que esta es vuestra casa ahora. Y


Castillo es mi cuñado, el es mi familia y siempre es bienvenido
aquí.

—Eso es muy amable de tu parte y muy apreciado. —


Gabriel le dio a Rafe un gesto profundo y lo siguió cuando Rafe
abrió la marcha—. Es una invitación que vamos a aceptar. Hay
mucha vida y emoción en esta casa, puedo ver que será mi
destino elegido durante mi tiempo de inactividad.

—¿Qué tiempo de inactividad? —Ariel bromeó guiñando


un ojo. Ella se quedó sin aliento cuando llegamos a nuestra
habitación designada, mirando fijamente a Castillo—. Podemos
dormir.

—Yo estoy despierto —se quejó—. Me siento en el borde


de algo, pero no puedo llegar a él.
—Sólo déjate ir, Castillo. Así es cómo funciona el sueño —le
ofrecí, sin saber de qué otra manera explicarlo. Para el
momento en que Jared le metió en la cama extra grande,
Castillo estaba fuera. Lo que me quitó algunas de mis
preocupaciones de encima. No muchas, pero algunas.

Estábamos todos demasiados preocupados lo que era


desconcertante. Y tuve la sensación de que así iba a ser nuestra
forma de vida.

Al menos por ahora.

87
Capitulo 6

—No dormí mucho, la promesa de la mañana que llegaría


en varias horas y un nuevo día para poner todo detrás de mí me
empujaban. Pero todavía estaba agotado, algo nuevo para
sentir y tratar. Decidí que era mejor ignorarlo.

Sí, sí, los ángeles podían ser estúpidos también.

Me dirigí al sótano, llamando a Ariel y Gabriel. Cuando se


presentaron, ambos tenían el ceño fruncido.

—Tu no sabes como tratar con este demonio aunque 88


hayas tenido otros dentro —le expliqué antes de que pudieran
decir nada malo—. Quiero terminar, y yo no quiero que mis
compañeros tengan nunca que pasar por esto otra vez. Ni
siquiera puedo descansar por miedo a que la bestia se escape
de su caja y sea libre en el mundo otra vez. Es demasiada
presión. Es malo de una manera que no había visto en todos mis
años. Él prosperó con el conocimiento que estaba enviando
almas inocentes al infierno con estos acuerdos.

—Entonces vamos a terminar esto hoy —Ariel estuvo de


acuerdo.

Así lo hicimos. Que Dios me ayude, fue una batalla, pero al


final fueron capaces de sacar al demonio fuera de mí. Y yo fui
capaz de ver todo el resto de las almas por las que había hecho
acuerdos. Fue raro, porque yo no tenía un nombre. No, era más
que eso. Sentía sus almas ahora antes de que hubieran incluso
nacido. Incluso los que eran demasiado jóvenes para tener
almas, y sólo eran un grupo de células, conocía la firma de las
almas de sus padres y sería capaz de encontrarlos con eso.
No, no sé cómo explicarlo de otra forma.

—Recuéstame en la sala de estar. No quiero despertar a


mis compañeros —le dije a Gabriel mientras me llevaba. ¿Vas a
destruir a ese demonio? Puedo hacerlo después de descansar.

—Vamos a hacerlo por ti, hermano —Ariel me aseguró


mientras me pasó la mano por el pelo en un cariñoso gesto de
hermana mayor que calentó mi corazón—. Vamos a limpiar la
sala y dejar en perfecto estado el sótano de Rafe. No tienes
nada de qué preocuparte, además de recuperar tu fuerza.

—Y encontrar todas estas almas, conseguir más Perros de


nuestro lado, proteger las almas después de que las
encontremos —Sentí mi estómago y mi cerebro revueltos por lo 89
abrumado que estaba.

—Esas son preocupaciones para otro día —Gabriel susurró


mientras me colocaba en el sofá—. ¿Que más necesitas?
¿Quieres que traiga a Guy aquí para que te alimente? Temo
que puedas necesitar mucho alimento para combatir este
esfuerzo agotador.

—Sólo si puede —le dije, sabiendo que Gabriel podía ser


demasiado exigente a veces—. No lo saques de su puesto de
trabajo o cualesquiera otro compromiso, hermano. Si es posible
dile que estoy enfermo y reubicado en otro lugar y si tiene
tiempo para darme de comer.

—Vamos a ver que se haga o traerte otra alternativa.


Tendrás un ejército de Perros despertando pronto. —Ariel me
lanzó un guiño—. Eso es algo que esperamos ver. Y tenemos que
tener su ceremonia de lealtad.

—¿Qué? —Murmuré, listo para tener un poco de paz en


lugar de llenarme con más problemas.
—Los Perros que fueron reclutados deben jurar su lealtad al
Cielo y su tarea, Castillo. De lo contrario, aún podrían ser
llamados al infierno por sus trabajos normales.

—Oh mierda, yo no les dije eso a ninguno de ellos —gemí,


acurrucándome en la manta que Gabriel puso en mí, con
ganas de disfrutar de su comodidad y calidez. No les había
dicho pero tenía mucho frío, casi me sentía congelado.

—Esa no va a ser una razón para que no te ayuden —Ariel


me aseguró añadiendo otra manta sobre mí.

Después de eso me empecé a calentar y no escuché el


resto de lo que dijo. Pero no podía haber pasado mucho tiempo
cuando ella me despertó. 90
—Guy tenía el día libre y está aquí cocinando para ti y las
tropas. Él te va a despertar cuando tu fiesta esté lista —me
informó. Luego inclinó la cabeza, mirándome fijamente, antes
de inclinarse y besar mi mejilla—. Está bien, hermano. Destruimos
al demonio. Ya no dañará a nadie más, y sé que vas a salvar al
resto.

Asentí mientras caía en la tranquilidad del sueño. Se sentía


tan bien, sinceramente deseaba poder hacerlo una vez cada
noche al igual que los humanos.

Pero, de nuevo, yo no pude quedarme acostado mucho


tiempo. Mantuve una de las mantas envueltas alrededor mío y
me fui a la cocina.

—Me dijeron que necesitabas mucho descanso, mi amigo


—Guy me regañó en francés, su tono de voz mezclado con
preocupación—. Vuelve a la cama y te despertaré cuando la
comida está lista.
—No, tengo que aclarar mi cabeza y empezar a trabajar
antes de que tenga a otros mirando por encima de mi hombro.
Yo puedo descansar cuando todos tengan sus asignaciones
para después del desayuno. Todo está montado en mí, Guy. —
No tuve que hacer mucho, para dejarle ver totalmente lo que
estaba sintiendo en mi expresión antes de que él suspirara,
dejando ir sus objeciones.

—Está bien, pero si no vuelves a descansar después del


desayuno, voy llamar a mi amor para que te mime o te obligue
a dormir de un golpe.

—Mimo o golpe, ¿eh? —Me reí, sacudiendo la cabeza.


Entonces me di cuenta de que nadie sería capaz de entenderlo
y usé mis poderes para hacer que la habitación tradujera 91
universalmente.

Guy simplemente se encogió de hombros. Vi sus manos


ocupadas por un momento, odiando ser una carga.

—Ve a trabajar. Tu hermano y hermana se aseguraron de


que tuviera todo lo que necesitaba para hacer tus favoritos.
Pronto tendrás tus crepes de cerezas negras con un montón de
tocino magro.

—Eres el mejor —lo alabé, sintiéndome un poco mejor.

Bueno, eso era una mentira. Mi ánimo eran un poco mejor,


pero después de hacer algo tan simple como que todos
entendieran cualquier idioma que se hablara en la cocina, me
dolía aún peor. Entré cojeando en el gran comedor que los
Perros parecían haber establecido como comando central, con
un mapa enorme. Después de leer las notas en el lado del
mapa, me di cuenta de que ya teníamos los primeros cinco
nombres, algunos aquí en la casa, otros en camino.
Lo que me quitó un enorme peso de encima de mi
espalda. Y de acuerdo con las notas, Stryker y Colton habían
reclutado a otros dos equipos de Perros. Así que teníamos siete.
Eso podría ser suficiente ahora que estaba aquí para
transportarlos a donde las almas estuvieran. Eso reduciría el
tiempo de manera drástica.

Pero, de nuevo, no había más que eso para hacer.

—Cada cosa a su tiempo, Castillo —me recordé a mí


mismo. Comencé desde el principio de los recuerdos del
demonios, saltando a Rafe y los otros cinco. Entonces escribí
todos los nombre de las personas por quien el demonio había
hecho el trato y la fecha. Pero aún más que eso, el demonio se
había mantenido en contacto con todos los que había hecho 92
los tratos, para asegúrese de saber dónde estaban las alma
puras en todo momento.

Así que hice otra lista con esas personas. ¿Por qué hice esa
lista? En mi ira, decidí que, si habían hecho un acuerdo que no
era por su alma, no deberían cosechar los beneficios del
acuerdo realizado. No era justo que ellos sobrevivieran ilesos a
todo el caos que provocaron.

Íbamos a sacarles todo y lo utilizaríamos para ayudar a las


almas puras que teníamos que albergar aquí. Les dejaría a
discreción del equipo de Perros si el alma estaba lista para ser
arrastrada al infierno o no. Yo estaba demasiado enojado y
amargado después de todo el mal que había experimentado
para poder decidir sobre eso.

Tenía veinte nombres en cada lista cuando Guy me trajo


una bandeja enorme. La colocó sobre la mesa y me miró
fijamente hasta que me mudé allí con mis listas y empecé a
devorar la comida que me trajo. Nunca me había gustado
mucho el café.

—¿Qué será lo próximo? —Me preguntó, en francés.


Levanté una ceja mientras me metí otra crepe en mi boca. Él se
rió entre dientes mientras se movía hacia mí y me dio unas
palmaditas en el hombro—¿Tortilla, mi amigo? ¿O mis rollos de
canela?

Miré mi plato ya vacío antes de mirarlo él. —Ambos pienso.


Y tengo que advertirte, hay un par de docenas de hombres
grandes que se unirán a nosotros para el desayuno.

—Tu hermana me advirtió. Ella y Gabriel se sumarán a


nosotros para el desayuno en una hora más o menos y para 93
comprobar como estás. Voy a decirles que te portaste mal.

—Adelante, siempre y cuando me sigas alimentando —


bromeé. Echó la cabeza hacia atrás y soltó una carcajada
antes de recoger mi bandeja, dejando el café. Me quedé
mirando con nostalgia cuando se fue, deseando haber lamido
el plato antes de que se lo llevara. Vamos a necesitar un
cocinero a tiempo completo en esta casa con tanta gente.

Por otra parte, no tenía ni idea de qué tipo de personal


Rafe tenía. Tenía la esperanza de que fueran muchos o tuviera
la capacidad de contratar más, rápidamente. Él tenía una casa
muy grande que íbamos a llenar hasta el borde de gente.
Incluso este comedor tenía capacidad para unos cincuenta en
la enorme mesa del viejo mundo. Ni siquiera estaba seguro de
cómo hicieron para pasarla por la puerta. Fue construido en la
sala o, más probablemente, trajeron las piezas y la montaron
aquí.

En el momento en que Guy regresó con más comida, tenía


un centenar de almas en la lista. Quería llorar porque que sólo
cubría el primer año de los acuerdos del demonio. A ese ritmo,
podría haber más de dos mil almas para rescatar.

¿A dónde vamos a ponerlas a todos? A Siete equipos les


tomaría un mes con los lógicos descanso recoger un centenar
de almas, y eso era prometedor, pero había mucho que podía
salir mal en el medio.

Comí mi tortilla rellena de carne y mis pecaminosas


diminutas papas fritas, preguntándome si ese era realmente la
forma francesa para cocinarlas o si Ariel las había pedido así
porque sabía que me gustaban de esa manera. Conociéndola,
probablemente lo último.

—Estuve comiendo así que no me griten por no dormir más 94


tiempo —les dije a mis compañeros cuando sentí que entraron
en la habitación—. Todo lo que estuve haciendo es estar
sentado sobre mi trasero y anotando lo que sé.

—Gabriel dijo que terminaste con el demonio y que fue


destruido —Rhyce dijo evasivamente mientras se movía detrás
de mí y empezó a frotar mis hombros. Gemí por lo bien que se
sentía, dispuestos a hacer lo que quisiera si seguía haciéndolo—.
¿Por qué no nos esperaste?

—¿Sé honesto conmigo? —Lo miré y esperé hasta que


asintió.

—¿Cuan molesto fue verme con los ojos rojos y otra voz
saliendo de mi boca?

—Mucho —suspiró, inclinándose y besando mi mejilla—.


Podíamos manejarlo, Castillo. No queríamos que pasaras por eso
sólo. Deberías haber reconstruido tu fuerza antes de hacerlo de
nuevo.
—Estaba demasiado preocupado para esperar. Anote los
nombres y ahora todos los equipos tienen las personas para
rescatar mientras descanso. Lo haré, lo prometo. —Me quedé
mirándolo, rogándole con mis ojos que entendiera mi decisión y
la aceptarla.

—Me alegro de que hayas traído a Guy de vuelta y que


esté aquí para ayudarnos con la comida.

—Tenemos un ejército viniendo a desayunar —bromeé—. Y


me imagino que deben tener el estómago lleno antes de que
les diga que tienen que jurar su lealtad al Cielo antes de que el
infierno deje de mandarlos a misiones.

—Stryker ya se lo imaginó cuando Dante nos llamó para 95


decirnos que teníamos otro trabajo —Jared me informó. Giré mi
cabeza en su dirección, pero él me despidió con la mano
mientras se sentaba a mi lado—. Fue para el alma que los
hermanos de Rhyce ya habían recuperado por lo que no pasó
nada. Todos estamos dispuesto a prometerles nuestra lealtad a ti
y al Cielo, Castillo. Nosotros estamos todos felices de no tener
que trabajar nunca más para el Infierno.

—Bien, bien —suspiré, con otra preocupación menos en


mis hombros—. Te lo juro yo no lo sabía cuando le pedí a sus
familias que se unieran a esta causa.

—Te creemos. —Rhyce se inclinó y frotó su mejilla contra la


mía en un gesto muy perruno—. ¿Qué podemos hacer para
ayudarte?

—Tu puedes seguir frotando mi espalda —me reí mientras


le entregaba una de las listas a Jared—. Este es el primer año de
las almas para ser recuperadas en orden de tiempo.
—¿De qué es la otra lista en la que estuviste trabajando?
—Entonces él negó con la cabeza—. ¿Cómo obtuviste sus
ubicaciones actuales exactas?

Rápidamente les puso al corriente de la otra lista y de que


el bastardo furtivo del demonio había estado revisando
constantemente a las almas limpias y su ubicación.

—Eso es muy jodido —Rhyce silbó, mientras sus manos


apretaban mis hombros—. Este tipo realmente sabía lo mal que
estaba jodiendo el orden normal de las cosas si él estaba
presente diligente. Por lo que sabemos, los demonios
normalmente hacen los acuerdos y el Infierno se mantiene al
día con el seguimiento a partir de entonces. Así es como saben
a dónde enviarnos a recogerlos. 96
—Parece que si —estuve de acuerdo con un suspiro,
haciendo una mueca cuando mi cabeza golpeó contra el
respaldo alto de madera gruesa de la silla—. Esos nombres son
sólo del primer año.

—Vamos a tener mucha, mucha gente aquí pronto


entonces —Jared susurró mientras sus ojos se abrieron como
platos—. ¿Dónde vamos a poner a todos?

—Y ahora sabes también por qué estoy tan preocupado.


No tengo ni idea.

Rhyce se dejó caer en la otra silla al lado de mío. —


Necesitamos construir una casa. Pero, ¿quién va a cuidar de
todos estos niños? ¿Sería como un colegio tipo internado? Pero
entonces ¿qué pasa con los bebés? ¿Quién va a pagar por
todo esto?

Pasé mis manos sobre la madera dura de los brazos de la


silla, esperando que mis compañeros no me juzguen cuando les
dijera lo que había pensado. —Yo digo que tomamos el dinero
o por lo que ellos hicieron el trato. También creo que hay que
dejar en manos de el equipo enviado si el alma que hizo el trato
debe ser arrastrada al infierno o no. No quiero que personas que
son básicamente buenas y cometieron un error sean tomadas,
pero deberían pagar por lo que hicieron-

—En realidad ya se está haciendo —Jared me aseguró


mientras se levantaba. Esperé a que dijera más a medida que
empezó a escribir marcadores y a colocarlos en los lugares
correctos del mapa—. Tres de los cinco fueron trasladados al
infierno. Dos se salvaron porque habían hecho el acuerdo para
salvar la vida de un ser querido. Ellos pensaron que solamente
sería un aborto involuntario el precio. Parece que el demonio
también mentía.
97
—Todavía horrible pero casi puedo verme sacrificando un
embarazo para salvar a uno de mis hermanos —murmuró Rhyce
pero luego negó con la cabeza—. Casi. Por otra parte, nunca
tuve un niño creciendo dentro de una mujer que era mío. Así
que tal vez no podría.

Asentí, completamente de acuerdo con la forma en que


veía las cosas. No podíamos saber lo que haríamos en una
situación hasta que estuviéramos en la mismo. —De cualquier
manera, creo que las personas buenas no deben ser llevadas al
infierno.

Rafe interrumpió nuestros pensamientos entrando de golpe


en el comedor. —Lo siento mucho. Yo no sabía que se
despertaban tan temprano. ¿Quién es ese hombre extraño
cocinando en mi cocina? Wanda se va a molestar porque
alguien esté tocando sus cosas. ¿Como pudiste conseguir a
alguien?
—Reduce la velocidad y respira Rafe —me reí, mientras
enfocaba sus ojos salvajes sobre mí. Los abrió aún más y corrió
hacia mí—. Te ves como la muerte.

—No le digas a nadie pero me siento así también. —Lo


abracé fuertemente y le di un par de palmaditas en la espalda.
No te preocupes por Guy. Él es un viejo amigo que vino a
ayudarnos a alimentar a las masas. Incluso podría enseñar a tu
Wanda una cosa o dos porque nunca comí crepes que se
pudieran comparar con los de Guy.

—Somos todos adultos, Rafe. Tu no necesitas hacer de


anfitrión, nosotros invadimos tu casa y tu nos la ofreciste como
nuestro hogar, ¿de acuerdo? —Jared le dijo mientras el
pequeño hombre se apartó de mí—. No vamos a romper la 98
plata ni la vajilla china.

—Mis hermanos podrían romper algo —Rhyce admitió con


una mueca de dolor—. Sin porcelana China en las comidas.

—Bien, bien. —La cabeza de Rafe se balanceaba arriba y


abajo como si estuviera atada a una cadena en lugar de
controlada por su cuello—. Es sólo que no estoy acostumbrado
a la gente y hay un montón de gente y ahora es mi casa y la
gente me están haciendo preguntas que no sé las respuestas y
no quiero decidir cosas y-

—Respira —Jared ordenó mientras empujaba a Rafe en


una silla y la cabeza del hombre entre sus rodillas. Yo había
estado a punto de hacer algo así, Rafe estaba hiperventilado
haciendo que le falte el oxígeno.

—Está entrando en pánico de nuevo, ¿no? —Stryker suspiró


mientras se unió a nosotros—. Bebé, por favor, deje de tomar
tanto en ti mismo. Tienes diez personas que se encargan de la
casa y las habitaciones. Todos somos adultos aquí. Podemos
hacer esto.

—No me gusta estar a cargo —Rafe murmuró, todavía


inclinado—. Nunca lo estuve antes y es demasiado duro. Quería
abrir un orfanato con el dinero del trato, pero después de esto,
no hay manera de que pueda manejar esa responsabilidad

—¿Un orfanato? —Le pregunté una vez que él se echó


hacia atrás y estaba respirando normalmente—. Estábamos
pensando en construir un internado para alojar todas las almas
que rescataremos.

—Eso podría requerir más dinero del que tengo —Rafe


suspiró, apoyado en la mesa y mirando por sobre el mapa—. 99
Hay tantos para proteger. No sé como ayudar.

—Por ahora, el que nos permitas usar tu casa es la mayor


ayuda que podríamos necesitar —le dije—. Nuestra prioridad es
salvar las almas, en el resto vamos a empezar a trabajar poco a
poco, ¿de acuerdo? —Esperé hasta que él asintió antes de
ponerme poco a poco en pie, sintiéndome viejo y débil—. Y
vamos a tener más fondos.

—¿Cómo? —Susurró, con sus ojos llenos de temor.

—De la misma manera que nos aseguramos de que tu


tuvieras tu dinero —Stryker se rió entre dientes, de forma
graciosa—. Asustaremos a las almas que hicieron los acuerdos
para que firmen dejándoles todo a sus hijos.

—Básicamente —estuve de acuerdo con un medio


encogimiento de hombros—. Vamos a reunir a todos, vamos a
comer, hacer que prometan lealtad al cielo y hacer un plan
básico para empezar.
Todos ellos aprobaron y se apresuraron a ver que se haga.

Veinte minutos más tarde, el comedor estaba lleno de


gente toda centrada en mí mientras yo estaba en medio de
Gabriel y Ariel.

—Jared Magnus —llamé en vos alta y le hice un ademán a


mi compañero para que se adelante. No dudó en ponerse de
rodillas delante mío con la cabeza inclinada reverentemente—.
¿Jared Magnus, juras aquí delante de los testigos, tu compañero
y tu familia, que le prometes tu lealtad al Cielo?

—Lo hago —prometió.

Dejé escapar el aliento que no me había dado cuenta 100


que estaba conteniendo, por el alivio de que tal vez esta
ceremonia fuera a salir bien. —¿Prometes siempre tratar de
poner el bien antes que el mal y cumplir cualquier tarea que los
ángeles del Cielo te pidan?

—Lo Hago.

—Entonces se bienvenido al lado de la luz —le felicité—.


Levántate, Perro de los Cielos, y que Dios te bendiga.

Después de Rhyce, yo estaba agotado por estar de pie


tanto tiempo. Gabriel se dio cuenta y se hizo cargo, me senté
detrás de ellos, mientras me debatía sobre si debería salir de la
ceremonia me acurruqué en una bola y me desvanecí. Estaba
enfermo. Yo no se cómo los humanos pueden hacer cosas
sintiendo un dolor como este en sus articulaciones o incluso a
medida que envejecen.

—¡Joder, Castillo! —Gritó Jared, sacándome de mis


pensamientos y haciendo que preste atención a la ceremonia.
Parpadeé hacia él, dándome cuenta de que había
interrumpido el turno de Boris con lo que sea que hice mal.

Excepto que cuando se arrodilló frente a mí y comenzó a


limpiarme la sangre de la cara y el cuello, me di cuenta de que
estaba asustado. Por eso me había gritado.

—Oh, mira, mi primer sangrado por la nariz —me reí,


tratando de aligerar la situación, rechazando las
preocupaciones de todos—. Estoy bien. A los seres humanos les
pasa todo el tiempo, ¿verdad?

—¡No! —Varias personas exclamaron. Bien entonces.

—Inclina tu cabeza hacia atrás —alguien me dijo. 101


—No, hacia adelante —Rhyce argumentó.

—Tráele hielo —Stryker ordenó a otra persona.

—O podría simplemente curarlo —Gabriel se echó a reír.


De repente, su mano estuvo en mi cabeza y un frío hormigueo
invadió mis sentidos—. ¿Mejor?

—Mucho. Gracias —le contesté después de un momento


de evaluarme.

—Es hora de que te acuestes —Ariel instruyó mientras


asentía a Rhyce. Mi compañero me levantó en sus brazos y se
dirigió hacia la puerta—. Vamos a continuar la tarea de hoy con
los Perros, hermano. Sólo debes descansar y recuperarte de la
dura prueba que tuviste.

Normalmente habría argumentado.

Normalmente hubiera pensado en el millar de cosas que


había que hacer.
Normalmente habría odiado ser mimado.

Hoy no era normal y acepté su ayuda, amabilidad, y la


instrucción. Asentí y estaba fuera antes de que Rhyce llegara a
dondequiera que me llevaba. No sé si alguien drogó mi café o si
Gabriel me hizo algo, pero esta vez me dormí de verdad.

Y algo más.

102
Capitulo 7

—Estás vivo después de todo —Rhyce bostezó mientras


parpadeé despertándome—. Buenos días, cariño. —Se inclinó y
me besó lentamente, vacilante. Cuando yo correspondí,
abriendo la boca ligeramente para él, Rhyce lo tomó como una
luz verde, tirando de mí en su contra. Luego empujó su rodilla
entre mis muslos, agarrando un puñado de mi pelo mientras
atacaba mi boca.

Mi única respuesta fue gemir y frotarme contra él,


disfrutando de cada segundo de ello.
103
—Quiero entrar —Jared gruñó mientras se apoyaba en mi
espalda, rozando su dura polla con fugas contra mi culo.

—Sí, penétrame, le rogué y usé mis poderes para


prepararme.

Se quedó sin aliento antes de reír tan profundamente en su


pecho, que lo sentí vibrar a través de mi espalda. —Quise decir
que quería participar de la diversión que ustedes estaban
teniendo, pero no puedo dejar pasar una oferta como esa.

—Esto es por lo qué los humanos disfrutan sus sueños —


Gemí mientras movían sus manos por todo mi cuerpo.

—No estás soñando, bebé —Rhyce rió contra mis labios—.


Esto es real.

Parpadeé hacia él un momento. Él estaba en lo correcto.


Le sonreí, dándome cuenta de que esto era la alegría de estar
acoplado, despertar en sus brazos. —Entonces yo debería hacer
un mejor trabajo haciendo el amor en la mañana. —Antes de
que pudieran preguntar lo que quería decir, me di la vuelta y
me deslicé por el cuerpo de Rhyce. Pasé mi lengua por su polla,
y me llené de orgullo cuando mi compañero gimió y abrió más
las piernas para mí.

Entonces puse mi culo en el aire, con la invitación más


descarada que podía darle a Jared.

—Acepto —bromeó antes de ponerse detrás de mí.


Cubriéndome con su gran cuerpo, besó mi cuello mientras yo
chupaba la polla de Rhyce—. Joder, es caliente verlos desde
aquí. ¿Te gusta el sabor de esa polla, Castillo?

Asentí y tomé más en mi boca.


104
—Debes sentarte en la polla y montarlo. —Me estremecí y
me sentí estimulado por la idea de la mente sucia de Jared—. Y
luego añadir la mía a tu dulce, dulce agujero.

Me quedé inmóvil, mirando a Rhyce cuyos ojos se


agrandaron. Entonces quité lentamente mi boca, tratando de
ignorar el sonido de succión sucio. —¿Quieres reclamarme?

—Quiero. ¿No nos quieres? —Preguntó Jared, con la mano


corriendo sobre mi estómago. Nos comprometimos a tu servicio
y a estar en el lado de los Cielos. Lo hice porque confío
plenamente en ti, incluso te confío la vida de mi familia. Tu
nunca nos vas a llevar por mal camino. Aún así, miré a Rhyce,
sin saber qué hacer—¿No nos has perdonado todavía? ¿Tenía
razón el demonio sobre que deseas a Tristán?

—No, no la tenía —le aseguré con firmeza. De eso no tenía


más dudas. Jared se había más que probado ante mí y se
disculpó por nuestra incomprensión—. Por supuesto que te
perdoné. Pero parece demasiado rápido para dar un paso tan
grande, cuando no hemos pasado ni un día juntos. Nuestra
única vez haciendo esto no fue así. Creo que estoy asustado e
inseguro y no estoy dispuesto a dar este paso hasta que sepa
que no voy a ser utilizado como la otra vez.

—Me encanta tu jerga formal —se rió entre dientes y


enterró su cara en mi cuello—. A veces maldices y gruñes lo que
me hace pensar que te estamos influenciando. Me hace sentir
en el interior cálido y difuso el que estés aprendiendo de
nosotros. Más adelante, tal vez en un par de días nos dirás que
estás listo.

—¿Rhyce? —Susurré, el hombre seguía estando


inquietantemente tranquilo.

Se encogió de hombros y movió las manos detrás de la 105


cabeza. —Estaba listo para reclamarte la noche que nos
conocimos. Estaba asustado e inseguro, pero creo que es algo
que a todos en algún momento de su vida les sucede. Pero yo
confío en Dios y su plan. Estábamos destinados a estar juntos y
voy a dar ese salto de fe en cualquier momento en que esté
listo. Jared y yo ya discutimos esto.

Tomé una respiración profunda y bajé la cabeza un


momento, tratando de construir mi coraje. Luego salí de debajo
de Jared y me coloqué sobre la polla de Rhyce. —Estoy listo.
Dime que hacer.

—¿Estás seguro? —Preguntó Rhyce en voz baja mientras


frotaba las manos sobre mis muslos. Asentí y tomé su polla, Jared
tomó mis caderas y me empujó suavemente hacia bajo. Tocó
mi agujero, que estaba más que suficientemente resbaladizo,
para estirarme aún más para él. Me recosté contra su pecho,
abrumado por las sensaciones hasta el punto de que tenía
problemas para sostenerme a mí mismo—. Vamos a distraerte
para que te relajes.
—¿Eh? —Le pregunté, pero recibí mi respuesta cuando su
gran mano se envolvió alrededor de mi polla—. Él me
masturbaba al mismo ritmo que un dedo de Jared se movía
dentro mío, luego en algún momento se convirtieron en dos,
luego tres. Grité cuando empujó un cuarto, viniéndome sobre mi
compañero debajo mío.

Monté el placer que me dieron, agradecido que me


quisieran tanto. En algún momento de la experiencia, sentí más
presión en mi culo, más de mi semilla brotó hacia fuera sobre
Rhyce. Que se incorporó un poco mientras Jared me rodeaba
por detrás, intercalándome completamente entre ellos dos.

Cuando bajé de mi dicha, me di cuenta de que ambos


estaban dentro de mí. 106
—No es necesario que te mordamos en este momento —
Rhyce ofreció ahuecando mi mejilla—. Esto es el Cielo en la
Tierra y estamos encantados de sólo haberlo experimentado si
no estás listo.

—No, esto se siente correcto. Reclámenme, por favor —les


supliqué. Él sonrió ampliamente, y ambos comenzaron a
moverse, empujando dentro y fuera de mí lentamente. No
había nada que pudiera hacer, además de aferrarme para el
paseo.

¡Y que paseo!

Pasé un brazo alrededor de cada uno de sus cuellos,


simplemente tratando de equilibrarme, pero el resultado fue
que se acercaron más y empujaron más profundo dentro mío.
Las sensaciones me sorprendieron, lanzándome hacia otro
clímax antes de que supiera lo que estaba pasando. Era tan
bueno que no quería que terminara.
Se movieron más rápido y más rápido, provocándome más
placer y empujándose más cerca de su orgasmo.

Lo siguiente que supe fue que había dos muñecas


cortadas en frente mío. Ni siquiera tuve tiempo de preguntarme
lo que estaba pasando, ya que me mordieron a cada lado de
mi cuello. Apreté los labios en las muñecas, tratando de beber
de los dos al mismo tiempo lo mejor que pude. Rhyce y Jared
gruñeron en voz alta, sus empujes se volvieron erráticos antes de
sentir estallar su semilla en mi agujero.

Curé sus muñecas cuando las sacaron de mi boca y


retrajeron los dientes de mi cuello. Una paz absoluta me llenó
como si no hubiera un solo mal en el mundo y la vida fuera
increíblemente perfecta. Mientras tanto, lenta y 107
cuidadosamente salieron de mí, me perdí pensando que era
extraño que algo tan bueno, antes pudiera haberme lastimado
tanto.

Entonces, el verdadero dolor comenzó. Las personas


utilizan el término abrasador, y yo siempre pensé que era una
ligera exageración para un dolor intenso. Realmente lo creí
cuando el fuego del Cielo quemó algo en mi espalda. No podía
decir que, pero sabía que me habían marcado con algo escrito
en la base de mis alas.

Rápidamente salí de arriba de Rhyce, haciendo caso


omiso de mis compañeros gritando hasta que uno de ellos fue a
tocarme.

—No me toquen —jadeé, apenas con la voz suficiente


para disuadirlos. De inmediato retrocedieron y el dolor comenzó
a disminuir cuando me dejé caer pecho hacia abajo sobre la
cama. Claro que todavía me dolía, irradiando como lo haría
una lesión punzante, pero lo peor ya había pasado. Tuve la
sensación de que iba a pasar mucho más tiempo antes de que
me sintiera totalmente curado.

—¿Qué pasó? —Jared susurró después de que había


pasado unos minutos acostado jadeando.

—Fuego del Cielo. El Cielo hizo algunas marcas en mí.


Ustedes tendrán que decirme o de alguna manera ponerme un
espejo para que pueda ver, porque por un tiempo no me voy a
poder mover —les expliqué, rodando mis ojos cuando me di
cuenta de lo mucho que sonaba como un niño.

—Tienes escrito algo pero no en Inglés —Rhyce dijo


mientras se inclinó con cuidado sobre mí.
108
—Probablemente Enochian. El Cielo normalmente no
escribe nada que no sea en su propio idioma.

—Y como no podemos leerlo, esto es un ejercicio inútil —


Jared gruñó mientras se movió al otro lado de la cama y agarró
algo de la mesita de noche. Momentos más tarde, escuché un
par de clics antes de tener la pantalla de su teléfono frente a mi
cara—. Este es uno de ellos.

—Rhyce —susurré y de repente dejé de sentir gran parte


del dolor—. Apuesto a que el otro dice Jared. Sus nombres han
sido grabados a fuego en mi carne por el fuego el cielo.

Rhyce se acercó y tomó mi mano. —Suenas feliz por eso,


como si fuera algo romántico y hubieras conseguido tats de
apareamiento.

—¿Tats? —Parpadee ante ellos, mientras Rhyce me


sonreía—. No tengo ni idea que significa. Realmente a veces es
como si ambos hablaran un idioma diferente al mío. Otras veces
usan el argot de un lugar determinado y luego hay otras veces,
como ahora, que yo juraría que lo hacen para confundirme.

—Tats es la abreviatura de tatuajes —Jared se rió entre


dientes, sentándose sobre la cama junto a Rhyce—. ¿Por lo
tanto esta es la forma en que los ángeles se hacen tatuajes de
acoplamiento con el nombre de su pareja?

—Supongo que si. Yo soy el primer ángel que se aparea


después de todo—. Me detuve justo antes de encogerme de
hombros ya que eso me habría dolido.

Rhyce se acostó a mi lado, prácticamente extendido


sobre Jared. Estoy muy impresionado de que no gritaras como si
te estuvieran asesinando. La habitación todavía huele a carne 109
quemada.

Tomé una bocanada y luego dejé mi cabeza en la


almohada. —Todo lo que huelo es este tejido y los remanentes
del sexo.

—¿Te sientes mejor, entonces? —Rhyce se aclaró la


garganta y miró hacia mi espalda. Yo no lo entendí hasta que vi
donde estaban las manos de Jared.

En ningún lugar adecuado para que los niños vean, eso


era absolutamente seguro.

—Si, estoy bien. Tal vez necesito tener un poco de


entretenimiento caliente mientras descanso.

—Podríamos darte eso —Jared soltó antes de mirar a


Rhyce—. Quiero decir, que deberíamos. Nuestro compañero
está lesionado. Sí, quiero decir, que eso sería genial. Lo que sea.
—Tu sutileza apesta, se quejó Rhyce mientras se sentaba. Y
luego, en un impresionante movimiento que estoy seguro que
cualquier gladiador romano hubiera envidiado, rodó a Jared
debajo de él.

—Tu primero. ¿Alguna objeción? Por favor, dila ahora —


Rhyce se burló antes de empujar dos dedos en el culo de Jared.
Nuestro compañero gritó moviéndose contra la mano de
Rhyce—. ¿Sí? Alguna objeción?

—No, ninguna en absoluto —gimió, empujando su culo de


nuevo para tomar más.

Realmente ver esto arrojó algo de luz sobre mi intimidad


inicial con Jared, a él le gustaba áspera. O por lo menos a 110
veces. Así que para él, la cópula vigorosa conmigo podría
haber sido sólo parcialmente alimentada por la ira. El resto
podría simplemente haber sido él haciéndome lo que le
gustaba para sí mismo.

Interesante.

De cualquier forma, fue un espectáculo que nunca


olvidaré. Me sorprendió que no rompieran la cama por como se
movía con las constantes bofetadas de carne y lucha libre.
Cuando terminaron, tuve la idea más absurda. Me eché a reír,
para gran confusión de mis compañeros que estaban uno sobre
el otro.

Rhyce estaba bajo de Jared en ese momento.

—¿Algo para compartir con la clase? —Jared gimió


mientras salió de Rhyce, mirándome como si hubiera perdido la
cabeza.
—Me disculpo. Finalmente entiendo por qué los humanos
hacen bromas acerca de la necesidad de un buen cigarrillo
después de participar o ver sexo. Es como si sólo pudiera acabar
por observarlos a ustedes y por la cantidad de hormonas que
despidieron en la habitación.

—Genial, él está atrapado en las bromas de los años


cincuenta —dijo Rhyce arrastrando las palabras.

Nos limpiamos y nos dirigimos abajo para desayunar, mis


compañeros me disuadieron de usar una camisa. Estaba bien
con eso ya que no creía que la tela se sintiera muy bien contra
mi piel en curación. Estaba mucho, mucho mejor después de la
ducha fría que tomamos, durante la cual recibí estimulación
oral. 111
Tendía a pensar que ayudó. Al parecer, mis compañeros
encontraron mis marcas sexys. Si me hacían recibir tales
atenciones, entonces yo era fan de los tatuajes.

—Tenemos un regalo de apareamiento para ti —Ariel


prácticamente chilló cuando entramos en la cocina.

—¿Alguna vez te escuché hablar en un tono tan alto? —Le


solté, lanzándole una sonrisa.

—Sí, sí, el buen sexo te hace sarcástico, y oh, demasiado


frío —se rió, enganchando su brazo con el mío—. Querré
detalles más adelante, hermano.

—No. No, Ariel. —Ella me lanzó una mirada de


incredulidad, pero negué con la cabeza—. Hasta yo sé que no
es caballeroso besar y contar. Tendrás que esperar y descubrirlo
cuando sea tu momento.
—O puede probar el porno —Colton Sethos sugirió—.
Teniendo en cuenta los sonidos que escuché procedentes
desde su habitación, podría estar cerca de lo que estaban
haciendo.

—Muérdeme Rhyce espetó, golpeando a su hermano en


el pecho. —La mayor parte fue cuando enloquecimos cuando
el fuego del Cielo marcó la piel de nuestra pareja con nuestros
nombre en Enochian.

—Es impresionante, hermano —Ariel le dijo, sonriendo


ampliamente con la idea de que nuestra familia se ampliara. No
podría decir que entendía, pero de nuevo, no me habían
asignado a tareas en la Tierra en todos estos años.
Definitivamente ella entendió los ideales humanos y las nociones 112
más rápido que yo. Salí de mis pensamientos errantes cuando vi
a través de las puertas ventanas de la cocina el enorme edificio
que había enfrente en el patio de Rafe—. ¡Feliz apareamiento!

—¿Nos construyeron un casa enorme en la propiedad de


otra persona? —Pregunté evasivamente, mirando a ella y luego
de vuelta al edificio.

—No, nosotros la construimos para las almas que fueron


rescatando —gimió como si fuera tonto—. El regalo de
apareamiento es que no tienes que preocuparte más por esto.
Gabriel, Miguel, Rafael y yo unimos nuestros poderes para
hacerlo, incluso cambiamos todos los registros y los recuerdos de
las personas necesarios para que ellos crean que fue construido
hace años junto con la propiedad rural de Rafe, y está
protegida por extensos bosques. Fue muy agotador, por lo que
podría pasar un tiempo antes de que esté totalmente
amueblada.
—Es un regalo increíble, Ariel —susurré, abrumado por un
sentimiento que no podía nombrar. Me limpié mis ojos que me
picaban, sin saber por qué de repente me molestaban, pero los
ignoré centrándome en nuestro regalo. Debido a que era
verdaderamente nuestro. Entonces me di cuenta de algo más y
miré por encima de mi hombro a Rafe—. Gracias, dulce
humano. La mayoría no nos permitirá hacer esto en su tierra.

Se encogió de hombros y se detuvo antes de tomar un


sorbo de café. —Me ahorra tener que desplazarme y tener a mi
compañero demasiado lejos de mí. —No engañó a nadie. Vi la
sonrisa de alegría por la buena acción que estaba tratando de
ocultar.

—Hay más, hermano —Ariel se jactó, con impaciencia 113


clara en su tono—. Nuestros otros hermanos ayudaron a los
Perros y las primeras cien almas están aquí, sanas y salvas.

—¿Cuánto tiempo estuve dormido? —Jadeé, dándome


vuelta y mirando al grupo.

—Una semana —Rhyce me informó, frotando la parte


posterior de su cuello—. Sí, tal vez deberíamos haberte
alimentado un poco antes de saltar sobre tus huesos. Es que-
umm- bueno-

—Eres caliente cuando duermes. Quiero decir, quería


hacerte cosas inapropiadas para que despiertes caliente —
Jared interrumpió con una gran sonrisa. De ninguna manera
pareciendo arrepentido. Juro que estoy acoplado a dos
extraños, tontos, hombres calientes. Y estaba bien con eso.

—Aún así, es impresionante —yo los alabé, con alegría en


mi corazón por toda la ayuda, pero también aliviado y con
menos peso en los hombros—. Es maravilloso y sorprendente que
ya hayan podido rescatar cien almas.
—Tuvimos un ejército de ángeles ayudándonos —Stryker
rió, sacudiendo la cabeza—. Cada grupo se asoció con un
ángel que nos traslado y trajo de vuelta y Rafe se quedó aquí
con Gabriel para recibir a las almas y ayudarlas a aclimatarse
cuando las traían.

—¿Todos nuestros hermanos y hermanas ayudaron?


Supuse que se refería a los otros arcángeles. —Poco a poco
comencé a entender y me sentí abrumado por la cantidad de
ayuda que habíamos recibido.

—Por supuesto. Todos ellos están emocionados, no sólo


nosotros —Gabriel dijo arrastrando las palabras. No lo había visto
de pie en la parte de atrás del grupo, apoyado en la pared—.
Acabas de convertirte en arcángel después de todo. Todos tus 114
hermanos inmediatos están contentos por ti también.

—No entiendo la dinámica de su “familia” —Jared gruñó


mientras usaba comillas en el aire sobre la palabra familia,
como si eso ayudara mejor a ejemplifican su molestia—. Su
padre es Dios, pero se supone que es el padre de todos
nosotros. Es un poco espeluznante como si estuviera
cometiendo incesto. Y ahora ustedes están hablando de
hermanos inmediata ¿qué coño significa eso?

—Wow, esto realmente te molesta, Perro —susurró Ariel,


sentándose en un banco junto a mi—. Sí, Dios es el padre de
todos nosotros y para los seres humanos es más un creador que
otra cosa. Tu tienes un padre biológico y a Dios de Padre. Dios
es nuestro padre biológico por lo que es diferente. Y hay
diferentes castas de ángeles. Llamamos a nuestra casta nuestros
hermanos inmediatos y a los otros nuestros hermanos, pero tal
vez pensamos en ellos como medios hermanos o hermanas. —
Ella miró a Gabriel y se mordió el labio—. ¿Lo dije bien? ¿Es así
como se explica?
—Nunca tuve que explicarlo antes, pero creo que fue una
maravillosa manera de hacerlo, hermana. —Le dio un gesto de
aprobación, actuando siempre como un hermano mayor para
Ariel y el resto de nosotros.

—Eso realmente tiene sentido para mí. Y ya no me volveré


loco —Jared rió, inclinándose y apoyando la cabeza en mi
hombro.

—Me alegro de que ya no tengas que preocuparte por el


incesto —le susurré mientras envolví mis brazos alrededor de él.
Recordé, una pregunta que no había tenido la oportunidad de
hacer todavía y me preocupaba—. ¿Y el hombre del que saqué
el demonio? ¿Qué hay de él? ¿Qué historia pusieron en su
mente? —Vi todos los ceños fruncidos a través del cuarto y 115
empecé a preocuparme—. ¿Qué? ¿Que pasó? Dijiste que el
demonio fue destruido. Ya no puede hacerle daño a ese pobre
hombre nunca más.

—Extraer el demonio de su anfitrión lo mató —explicó


Gabriel. Frunciendo sus cejas y negando con la cabeza—. No
sabemos cómo. Raphael está investigando, pero parece que los
demonios de alguna manera están tomando una posición más
fuerte en los que poseen.

—No es una crítica a ti de ninguna manera, Castillo —Ariel


dijo mientras daba un paso más cerca y tomó mis manos entre
las suyas—. Pero nos dimos cuenta que era mucho más difícil
para ti poder expulsar esa bestia de ti que cuando tuve que
hacer lo mismo con Dialen. Ella hizo muchas más acuerdos para
el diablo que los que el tuyo hizo, y además era mucho más
poderosa. Suponemos que es el tipo de almas por las que
realizó los acuerdos lo que le dio este poder extra.
—Pero el infierno lo despojó de su poder. Eso era todo él —
supuse, sorprendido de que no hubiera pensado en eso antes.
¿Cómo llegó dentro de mí tan profunda y rápidamente?— ¿Así
que se nos permite participar directamente contra los demonios
ahora, pero al hacerlo, matamos a los seres humanos que
poseen? Eso es cojonudo.

—Compartimos el sentimiento y preocupación. Confía en


mí —Gabriel suspiró, tomando asiento en la mesa—. Hay más en
esta situación de lo que sabemos y el Diablo ha sido capaz de
ocultar las cosas del Cielo. Tenemos que empezar a atacar a su
fuente de energía, que son los demonios y las almas que
quieren.

—¿Pensé que los demonios sólo podían poseer seres 116


humanos que eran malos? —Rafe preguntó mientras agitaba su
café nerviosamente—. Me refiero a que la Hermana Catalina
siempre decía que no entrarían en un cuerpo de un alma pura,
que tenía que ser alguien que oscureció la suya.

—Eso es cierto, pequeño humano —Ariel acordó, mirando


a Rafe con tanto amor que no pude evitar sonreír. Mi amigo
tenía ahora su propio ángel de la guarda, Ariel era ferozmente
protectora de los que ella cuidaba—. Pero aun así no merecen
la maldición de ser habitados por otro ser o la muerte al sacar al
demonio.

—Oh, por supuesto que no. No quise dar a entender eso.


Sólo quería decir que si bien es horrible, al menos, la persona no
era exactamente inocente, supongo. Lo siento no voy a hacer
preguntas otra vez. —Él se apresuró a agarrar algunas galletas,
manteniendo su mirada fija en ellas.

—Tonterías —se rió, corriendo hacia él y besando la


cabeza gacha—. Nos encantan tus preguntas y era una buena
idea. Yo quería que supieras que no debían ser personas que
hubieran matado a alguien o cualquier cosa así para ser
poseídas.

—Hay víctimas en la guerra y mientras que estos


huéspedes no eligieron participar o se registraron para la pelea,
creo que lo que Rafe está señalando es que no son niños
inocentes exactamente —Stryker explicó, mirando a su
compañero quien asintió—. Estoy de acuerdo. Son como las
personas que son reclutadas para el ejército. Puede ser que no
quieran estar allí o hayan elegido su destino, pero son ellos los
que luchan, no obstante.

—De acuerdo —Rhyce declaró antes de volverse hacia


mí—. ¿Cómo hiciste para que el demonio entre dentro tuyo si- — 117
Él se golpeó en la frente—. Correcto, el símbolo en tu pecho. Eso
le permitió entrar.

—Tus compañeros no sólo son atractivos, sino inteligentes


también. Bien hecho, hermano —Ariel elogió mientras miraba a
mi pareja con aprecio—. Bien hecho. Y estás en lo correcto,
Rhyce. —Entonces ella puso su sonrisa normal y se centró de
nuevo en mí—. Pero con lo malo siempre hay algo bueno así
que no te preocupes, hermano.

—¿Es una buena noticia que los seres humanos mueran


porque estaban poseídos? —Le pregunté, pensando que esto
era demasiado, incluso para Ariel.

—No, en la guerra y la situación que tenemos ante


nosotros. —Ella dio un gruñido de frustración y me hizo un gesto
para que me calle—. La sorprendente buena noticia es que
recuperaron almas inocentes. Stryker, querido, por favor ayuda
a tu hermana y llena a mi hermano con esto. —Entonces ella
dejó escapar una risita peculiar—. ¡Siempre quise decir eso! A
mis hermanos no les gusta cuando utilizo argot pero eso fue
divertido.

—¿Ella tomó el autobús corto a la escuela ángel?1 Colton


murmuró en la mesa.

—Soy el mayor —Gabriel nos recordó, haciéndonos callar


a los dos. Ariel asintió, pero cruzó los brazos sobre su pecho. Sentí
lo mismo, pero no imité el gesto. Gabriel hizo un gesto con la
mano y Colton de un salto se puso de pie, gritando y
maldiciendo—. No seas tan cruel con nuestra hermana de
nuevo, Colton Setos, o voy a hacer mucho más que hacerte
sentir picaduras de hormigas.

—En el culo, ¿en serio? —Rhyce dijo arrastrando las 118


palabras, y moviéndose para estar entre Colton y los otros
ángeles. Esto es infantil y sólo estaba jugando con Ariel. Eso es lo
que hacen las familias. Colton estaba siendo sarcástico, sí, pero
esa es su manera de cerrar la brecha y de tratar Ariel como una
hermana pequeña como si fuéramos todos una familia.

—En realidad lo hice en sus partes privadas, pero hiciste un


buen punto para su indulto —Gabriel reconoció y saludó con la
mano—. Tal vez no hacerlo con la única mujer aquí y nuestra
hermana pequeña por el momento podría ser prudente.
Necesitamos aprender las costumbres de los otros, eso es
seguro.

—No, lo entiendo. Yo sería igual de protector con mi


familia —Colton suspiró mientras se apoyaba en el respaldo de
la silla, con expresión aliviada. Bueno, aliviar el dolor de las
picaduras de las hormigas fue una manera de aliviar la
situación.

1
Traducción literal, supongo que dice que es un poco tonta.
—De todas formas —dije arrastrando las palabras, divertido
por las payasadas de mis hermanos, pero con ganas de saber
cuál era el problema ahora. Quiero decir, la buena noticia sería
seguida por otro problema. Porque esa era la forma en que las
cosas iban desde que todos empezamos en este camino.
“Encontramos al demonio - matamos al hombre para conseguir
lo que necesitábamos. Conseguimos más Perros como aliados -
mi compañera fornicaba con dos de ellos.

Y sigue y sigue.

—Descubrimos que sólo uno del par sabía que estaban


vendiendo el alma de su hijo —Stryker explicó mientras le
entregaba a Dex una lista de algo que pasó a Boris, luego a
Jared antes de que pudiera verla. No, yo no iba a hacer un 119
problema sobre que Boris estaba cerca de nosotros.

—Me preocupa que hubiera algo más en estos acuerdos.


Si el vacío legal era que el niño era todavía parte de los padres
y por lo tanto podría ser intercambiado por el alma a venir,
¿cómo uno de los padres hacía el trato si era parte de ambos?.

—Ese es un buen punto. Tenemos que comprobar que el


acuerdo no fuera de alguna manera por el feto y el que lo lleva
u otra cosa. —Ariel estuvo de acuerdo, dándome un pulgar
hacia arriba—. Por otra parte, no todos los que hicieron los
acuerdos eran hombres. Cinco mujeres diferentes lo hicieron
para proteger a sus maridos en la guerra en el extranjero. Ellas
pensaban que iban a abortar el embarazo, no entregar su alma
al diablo cuando cumplieran veintiún años.

—Estoy muy contento que el demonio se esté tostando.


Pero con toda la mierda que causó, la muerte podría haber sido
demasiado buena para él.
Yo realmente no censuraba a Rhyce por lo que dijo, pero
había un fallo. —Los demonios que no son ángeles caídos que
se vuelven en contra de Dios, son seres humanos muertos. Son
almas malvadas que optan por trabajar por el infierno en lugar
de disfrutar de sus llamas.

—¿Está bien, entonces que hicieron con el demonio? —Él


me miró parpadeando como si no pudiera comprender cómo
funcionaba en absoluto.

—No matamos al demonio. Él verdaderamente ahora no


es nada. No volvió al infierno para recuperarse o encontrar un
nuevo huésped. —explicó Gabriel, sin una pizca de
remordimiento en su tono. Bien, porque yo tampoco tenía
ninguna—. Quemamos la una vez humana alma del demonio, 120
con el fuego del cielo y se convirtió en nada.

—¿Y eso es lo que están hablando de hacerles a los otros


demonios que nos encontremos? —Stryker esperó a que Gabriel
asintiera antes de dejar escapar un largo silbido—. Maldita sea.
Eso me haría pensar largo y tendido antes de ir en contra de
ustedes.

—Los demonios rompen los siete pecados capitales en una


base regular. No les importa, Ariel bromeó, pero luego rodó los
ojos cuando vio que nadie lo entendió, además de nosotros, los
ángeles—. Están llenos de orgullo. Tienen cabezas grandes
como escuché decir a los humanos. Ellos piensan que van a
ganar.

—De todas formas Stryker rió, sacudiendo la cabeza. —


Dado que sólo uno de los padres sabía, el que no sabía, si aún
estaba vivo, se comprometió a ayudarnos. Claro, que lucharon
toda la cosa al principio, pero una vez que se dieron cuenta de
que iban a perder a sus hijos de cualquier manera y ese chico
necesitaba ser protegido, cambiaron su tono.

—¿A qué? ¿Ayudarnos con el dinero? —Le pregunté a él


mientras me moví en mi asiento. Eso parecía una receta para el
desastre.

—No, cuidando de las almas y manteniéndolas a salvo


mientras se dedican a lo que hacían habitualmente. —Stryker
me hizo un gesto con la mano para que lo mirara cuando se dio
cuenta de que no lo entendía—. Tenemos tres profesores, una
enfermera, dos cocineros profesionales, varios militares, y
algunas otras profesiones que serán de utilidad. Veinte padres
de los cien almas están en el internado ayudándonos a lograr
que todos se instalen. 121
—Eso es maravilloso —le susurré. Nunca se me pasó por la
mente que algunos quisieran ayudar. Pero, por supuesto que lo
harían. Les estaban quitando a su hijo aunque sea para
protegerlo.

—Todos estuvieron de acuerdo en poner un poco de


dinero en un fideicomiso para sus hijos, si la ganancia financiera
fue la motivación del acuerdo —Stryker continuó mientras
hojeaba algunas páginas—. Hay setenta de esos que están
contribuyendo para lograr que la escuela funcione. Ayer nos
entregaron varios cientos de ordenadores. Y hay mucho más
por venir.

—Bien. Así que podemos tomarnos el día para descansar y


organizar que más debemos hacer —sugerí. Todo el mundo
parecía a bordo con eso y empezamos con el desayuno. Había
un montón de gente, por lo que tuvimos que hacer una
tonelada de comida sin exagerar. íbamos a tener que comprar
remolques de comida a la semana sólo para alimentar a todos
los Perros. La cantidad de carne que podían comer era
realmente impresionante. Y a decir verdad daba un poco de
miedo.

122
Capitulo 8

Fue un gran día, relajado conociendo realmente a mis


compañeros y su familia sin ningún tipo de presión, además de
la pregunta al azar aquí y allá. Por ejemplo, —¿Cuando dices
París, quieres decir París Francia o París Arkansas?

—¿O París, Ontario? —Alguien preguntó. Resultó que había


unos dos docenas de otros lugares con el nombre París.

Y un guerra de Cheez-It2 comenzó cuando dije Springfield


porque hay uno en todos los estados de los EE.UU. y había una
broma en curso acerca de un espectáculo llamado los Simpson 123
que son una burbujeante gente amarilla, que no tienen el
número correcto de dedos, pero no son extraterrestres de algún
tipo. De cualquier manera, me senté y disfruté de la
camaradería con el grupo. Incluso me pidieron participar en el
debate Los Simpson vs. Family Guy.3

Resultó que tenía un compañero en cada lado del


argumento, exigiendo que me ponga de su lado. Los sorprendí
a todos diciéndoles que cambiaría mi voto por el que me de los
mejores favores carnales.

—Oh, bien, Castillo. Esa es mi respuesta también, Stryker —


Rafe rió, batiendo sus pestañas a su compañero.

3
Vas a conseguir un azote por tener la idea de que alguien
más aquí podría entrar en ese acuerdo —gruñó mientras se
alzaba sobre su compañero.

—Mierda. Está bien —voy a votar contigo entonces. —El


pequeño humano me lanzó un guiño y entendí que era broma.

—Quiero una opción diferente que esa. Nadie golpea mis


nalgas y se sale con la suya —bromeé.

Todos compartimos las risas, y antes de la puesta del sol,


tuvimos los próximos tres años trazados. Era desalentador,
estudiar el mapa y ver todas esas banderas, pero mis hermanos
y hermanas ya había accedido a ayudarnos un día a la semana
haciendo equipo con los Perros. 124
Eso nos dio cinco días a la semana para hacer lo que se
necesitaba para mantener todo lo que sucedía detrás de
escena, porque había un montón que manejar, esa lista era
abrumadora también. Y un día para Dios. Sí, podría haber sido
una noción anticuada para algunos, pero esto era un esfuerzo
Santo después de todo. Nadie pareció sorprenderse cuando
Gabriel y Ariel insistieron en ello.

—Sólo si ustedes no hacen del día de Dios un día seco —


Colton ofreció.

—No, me parece que más bien me gusta el alcohol —


estuve de acuerdo con una sonrisa. Y todo quedó arreglado.
Seguro que hubo un poco más de riñas entre hermanos ángel y
Perro por igual. Pero éramos una familia y todos trabajamos en
equipo.

Ariel y Gabriel salieron mucho antes de la cena, y una vez


que los aromas llenaron el aire, mi estómago gruñó listo para ser
alimentado. Entramos en la cocina, todo el lote de nosotros,
pero de repente los Perros empezaron a toser.

—Mujer, ¿qué hiciste estofado de aguas residuales? —


Jared preguntó a Wanda la dulce cocinera de Rafe.

—Voy a darte una paliza, muchacho —amenazó,


sosteniendo una cuchara de madera—. Nunca hago nada más
que excelentes comidas saludables.

Me di cuenta de lo que estaba mal en primer lugar, corrí


hacia la puerta de atrás. Una vez que llegué allí, salí y corrí
hacia el patio. —¡Gabriel Ariel Llamen a todos! —Grité, corriendo
más rápido de lo que nunca creí posible—. ¡Estamos bajo
ataque! 125
—¿Qué? —gruñeron varios Perros que me habían seguido.

—Están oliendo demonios —les expliqué rápidamente—.


¡No me miren directamente!— Tenía la esperanza de que no lo
hicieran cuando tomé mi verdadera forma. Mis alas se
desplegaron a su máximo de longitud y se sentía maravilloso
poder liberarlos. No me había dado cuenta de lo mucho que
me sentía abrumado por esconder quién yo era y bajar el tono
de mi apariencia. Claro, siempre estaba el contorno de las alas,
pero nunca era lo misma que la cosa real.

De repente oí varios golpes fuertes a ambos lados mío,


sabiendo que eran mis hermanos haciendo su entrada triunfal.
Hey, incluso los ángeles tenían un sentido del estilo.

—Se nos dio la libertad de matarlos a todos —advirtió


Michael, su voz haciendo eco en las piedras de la escuela y
entre los árboles por donde los demonios se acercaban—.
Ahora está abierta la temporada de caza de demonios.
Unos Perros rieron detrás de nosotros, y una vez más, me
sentí dejado de lado, pero algún día pronto entendería todas
estas bromas. Me sorprendió sin embargo que Michael supiera
esas cosas. Él era un tipo frío la mayoría de veces.

—Vamos a empezar a invitarte a nuestras noches de cine,


—Ariel prometió, dándose cuenta de que no entendía lo que
estaba pasando—, Nos divertimos.

—Es bueno saberlo, pero tal vez deberíamos enfocarnos —


Dije arrastrando las palabras, señalando a decenas y decenas
de ojos rojos que podíamos ver ahora en los árboles.

—Por favor —ella rió mientras estiraba los brazos—.


Podemos derrotar a estas perras prostitutas4 sin siquiera romper a 126
sudar. Y lo van a descubrir muy pronto.

—¿Quién le permitió ver el canal argot de nuevo?—


Raphael se quejó, sacudiendo la cabeza—. Ariel, ya discutimos
esto. Los ángeles no deben hablar como salidos del gueto.

—Yo soy fabulosa no importa que —le respondió. Entonces


comprendí que estaban demostrando que no estábamos
preocupados.

—Vas a necesitar esto, hermano —Gabriel gritó mientras


me tiró algo. Lo cogí y reprimí un grito de asombro. En todos mis
años nunca había pensado que tendría mi propia espada
arcángel. Pero ahora que la tenía. Realmente había sido
promovido. Era emocionante. —¿Viste como se usan?

—No por muchos, muchos años, pero no voy a tener


problemas —respondí, dándole una inclinación de cabeza.

4
Está usando Argot, esa fue la mejor traducción que pude poner, bitches and hoes se usa para insultar a un
grupo de personas que no conoces.
—Por lo tanto, hay un nuevo miembro en las filas de los
ángeles luchadores —dijo un demonio entre dientes, tomando
ventaja del grupo, cuando salió de la línea de árboles—. Bueno,
más para jugar.

—Sus poderes no pueden trabajar en los arcángeles pero


pueden en los Perros —Michael nos dijo a través de todas
nuestras mentes, Perros incluidos supongo. Eso o algo hizo que el
nivel de tensión detrás de nosotros aumentara—. No se
involucren a menos que uno pase a través de nuestras líneas.
Las almas deben mantenerse a salvo a toda costa. En su forma
de Perro, nuestra presencia no les hará daño a los ojos si nos
miran directamente. Tu compañero humano está protegido
también. Sólo lo sentirán como una luz brillante.
127
Bueno saberlo. Yo había pensado que podíamos hacerles
daño como a los humanos. Me gustó más la respuesta de
Michael.

—Cambien ahora— Stryker ordenó, probablemente,


dándose cuenta de que, incluso si no podían luchar, un montón
de Perros del Cielo eran mucho más intimidantes que en forma
humana.

—¿Tu maestro sabe que están aquí? —Ariel se burló,


dándoles tiempo por si los necesitában—. El acuerdo negociado
hace que estas almas sea intocables una vez que las
rescatamos.

—Los acuerdo se hicieron para romperse —el demonio se


rió, con una voz horrible, espeluznante—. Vinimos a terminar lo
que empezó nuestro hermano. El hecho de que encontrara un
resquicio en su maldita equilibrio no significa que lo que hizo
estuviera mal. Nosotros vinimos a recoger lo que debería ser del
infierno.
—Espero que estén dispuestos a morir por sus creencias
porque eso es lo que va a pasar hoy —Les advertí de nuevo.

—Tal vez sea así, pero vamos a llevarnos a todos ustedes


con nosotros y dejar las almas listas para que se las lleven la
próxima ola —otro demonio se burló, con su voz llena de lujuria
por lo que supe qué pecados trajo al mundo.

—Que así sea —Michael decretó antes de cargar contra


ellos. Fue una jugada inteligente, ya que le dio a los Perros más
margen de maniobra si uno de los demonios rompía nuestra
línea. Vi como metió la espada en el primer demonio que había
hablado, desconcertándome cuando el demonio se derrumbó,
su cuerpo físico sano y salvo. En lugar de humo rojo, un manto
de arena roja cayó del cuerpo hacia la tierra alrededor de él. 128
Desafortunadamente el cuerpo humano cayó muerto. Me
dolía el saber que una vida fue tomada, pero no había otra
manera. Esa alma estaría con Dios ahora, sus pecados menores
que permitieron al demonio entrar en él perdonados. Yo sabía
que tan cierto como conozco mi nombre, que Dios se ocuparía
de esa alma con la atención, y comprensión de que nunca
quiso ser un anfitrión de un demonio.

Si lo hiciera de acuerdo, bueno, esa sería probablemente


otra historia.

Apuñalé al primer demonio que encontré, desconcertado


de cuan ligera la espada se sentía en mi mano, corté la carne
del demonio, sin dejar ninguna huella en el cuerpo. Lo sé, lo sé,
ya había visto a Michael hacerlo, pero algo como eso en
realidad no se cree hasta que lo hace uno mismo.

Entonces me giré, cortando a través del siguiente demonio


antes de tirarme a un lado para esquivar otro, viendo Ariel
despacharlo cuando rodé al suelo. Estuve de pie en un abrir y
cerrar de ojos, apuñalando al próximo demonio.

Estuvimos haciendo esto por lo que pareció una eternidad,


pero sinceramente, no podría haber pasado más de diez
minutos. Lo que significaba que había mucho más que un par
de docenas de demonios atacándonos. Esto era organizado,
bien pensado, con el fin de hacer su camino a través de
nuestras filas.

—En el lado positivo, todos se reunieron en un solo lugar


para que podamos matarlos y disminuir las filas de los demonios
—murmuré para mí misma mientras sacaba mi espada de otro
demonio.
129
—Mírate siendo todos positivo, Castillo —Ariel elogió antes
de soltar un grito de guerra y matar dos demonios con un golpe
de su espada. Me prometí entonces esforzarme por ser tan
versado con mi espada tan pronto como pudiera.

—Escuché que el sexo puede hacerle eso a una persona


—Michael bromeó mientras mataba otro demonio—. Espero
que Dios reconozca que me gustaría tener un compañero de
sexo femenino, pero si recibo dos como lo hizo Castillo, yo sería
el ángel más positivo también.

—Ten cuidado con lo que deseas —bromeé, sabiendo que


mis compañeros me escuchaban. —Son animales insaciables.
Juro que van terminar mi inmortalidad con sus apetitos sin fin.

—Sí, nos sentimos tan mal por ti… —Ariel rió mientras
esquivó el golpe de un demonio. Me di vuelta y lo maté antes
de que pudiera recuperarse—. Bien hecho, hermano. Aprendes
rápido.
—Igualmente me gustaría alguna tutela en tu tiempo libre,
si no te importa. —Ser capaz de mantenerme en una pelea y ser
digno de mi espada arcángel eran dos cosas diferentes.

—Sería un honor —ella juró... Y luego despachó tres


demonios en un giro impresionante que cortó limpio a través de
los cuellos humanos, eliminándolos de los cuerpos. Así que no
teníamos que apuñalar el corazón. Interesante. Parecía que
cualquier golpe que normalmente mataba a un ser humano
podría destruir a los demonios.

Se oyó un golpe en algún lugar delante de nosotros y toda


la luz pareció filtrarse en esa dirección, volviéndose oscuridad.
Era exactamente lo contrario que ocurría cuando un arcángel
aterrizaba en la Tierra. Oí un fuerte chasquido y luego todos los 130
demonios se habían ido.

—Parece que mis hijos no me invitaron a la fiesta —una voz


profunda, rió. Sentí frío, a sabiendas de a quién pertenecía esa
voz, nunca podría olvidarla no importa cuánto lo intentara—.
Los niños a veces desobedecen a su padre después de todo.

—¿Estás diciendo que no tenías conocimiento de este


ataque, Lucifer? —Preguntó Michael, con tono acusatorio.

—Honro mis acuerdos, Michael. No estaban aquí por mi


comando —espetó, con sus ojos brillantes de color rojo sangre
antes de volverse humanos.

—Entonces traerlos de vuelta y vamos a terminar de


eliminar a los rebeldes por ti —Raphael ofreció mientras
casualmente se acercó a Michael. Vi a los demás a hacer lo
mismo, dándome cuenta de que estábamos mostrando
solidaridad.
—Ahora, ahora, voy a castigar a mis hijos como Dios
castiga a los ángeles cuando son malos. No estoy seguro de
que la muerte sea apropiada para ellos por tratar de tomar la
iniciativa. —Lucifer nos dirigió una sonrisa que no podía ser
descrita en otra forma que diabólica.

—Rompieron el acuerdo, Lucifer —Michael empujó, dando


un paso adelante—. Vinieron tras las almas protegidas. Muchos
de tus secuaces están rompiendo las reglas.

—Yo ya no respondo a ti o a Dios, hermano —le espetó,


entrecerrando los ojos de una manera muy peligrosa. Pero
Michael ni siquiera se inmutó. Supuse que era por eso que era el
más temible de todos los ángeles.
131
No estaba seguro de lo que hubiera ocurrido a
continuación debido a que una risa suave y musical llenó el aire.
Todos nos volvimos lentamente a la fuente, sólo para descubrir
que era Rafe.

Se detuvo rápidamente y se aclaró la garganta. —Lo


siento, no fue mi intención interrumpir. —Vi que los hermanos
Magnus se acercaron a él flanqueándolo por todos los lados
con los hermanos Sethos justo detrás de ellos.

—¡Rafe, da la vuelta y vuelve adentro. Estás loco, incluso


para venir aquí! —Pedí en su mente.

—Tonterías —Lucifer respondió, habiéndome oído también.


—He deseado mucho poder conocer a la primera alma. Por
favor, pequeño humano, di lo que piensas. Todos somos amigos
aquí.

—El diablo no es amigo mío —Rafe argumentó, con su voz


sorprendentemente firme.
—Bien, entonces no somos amigos, y exijo que expliques lo
que encuentras tan divertido, humano —Lucifer espetó mientras
daba un paso hacia él. En un instante, comparecí ante Rafa, mi
espada en la mano—. ¡Muy lindo! El nuevo arcángel me desafía
para salvar a un ser humano. ¿Te gusta ocupar mi lugar entre los
arcángeles, Castillo? Escuché que tienes mucho mejores
beneficios para el trabajo de los que nunca recibí. ¿Quién
sabe? Yo podría no haber revelado si hubiera conseguido dos
Perros sexys en el trato por servir a los Cielos. Vamos a verlos.

Traté de no estremecerme cuando Lucifer hizo un gesto


con la mano, y oí dos aullidos de dolor. Apenas mirando por
encima de mi hombro, vi a Jared y Rhyce desnudos y humanos
de nuevo.
132
—Muy bonitos —Lucifer se rió entre dientes. Miró a Jared y
se humedeció los labios—. Ese peca en una base regular. Él está
tan lleno de lujuria y gula por sus actividades carnales que
quiere saltar en este momento y demostrar que eres suyo y que
no debería jugar contigo. —Entonces él se centró en Rhyce—. Y
éste está tan celoso de su poder que está prácticamente verde.

—Eso no es cierto —argumentó Rhyce, poniéndose a mi


lado. —Me siento orgulloso de estar acoplado a un ángel como
Castillo. Yo no estoy celoso. Temo no ser capaz de darle la
ayuda que necesita, porque es muy fuerte. Tu sabes que no es
lo mismo.

—Mi error. Yo no leo Perros por diversión, y nunca había


conocido a ninguno de ustedes antes. Es una pena, no sabía
que los Perros estaban tan bien construidos. Tal vez debería dar
a todos ustedes un examen más de cerca ahora que
traicionaron su lealtad al infierno.
—¡Eso no era parte del trato!— Rafe gritó, envolviendo sus
brazos alrededor de Stryker—. Él es mi compañero no puedes
tocarlo o serás castigado.

Lucifer extendió los brazos golpeándose el pecho. —


¿Quién me va a castigar, pequeño humano? Yo soy el diablo,
¿recuerdas? No respondo a nadie!

—Sigue diciendo eso si te hace sentir mejor, pero todos


sabemos que no es cierto.

—Así que estamos de vuelta a la razón por la que te


estabas riendo. Explícanos joven, hormiga, insignificante. —
Lucifer sonrió mientras movió sus brazos detrás de la espalda y se
balanceó sobre sus pies. —Por favor, edúcanos a todos nosotros 133
en los caminos de las cosas que no conocemos.

Rafe se puso de pie lentamente, dejando ir a su


compañero, y se enfrentó cara a cara con el diablo. —Ten
cuidado con lo que deseas. Siempre dicen que una perspectiva
externa es la más precisa ya que no está influenciada por el
pasado. Tu todavía respondes a Dios, título de Diablo o no. Tu
demonio cruzó una línea y Dios dijo que no iba a permitir que
eso ocurra y no sucedió. Ignoraste las reglas y dios que es justo
como siempre te permitió tomar tus propias decisiones. Es
posible que gobiernes en el infierno, pero sólo eso y el Infierno
existe porque Dios lo permite. Tu eres sólo un matón.

—No vas a tocar a estos Perros por temor a la retribución


de Dios. No puedes ahora que se les dio una elección y eligieron
el lado del cielo. Tus demonios salieron con o sin tu permiso,
porque tu lo querías y cuando no funcionó, igual que como
hace un niño, lo negaste todo y los mandaste de vuelta al
infierno. Si eres todo-poderoso y no respondes a nadie como
dices, habrías sabido de cualquier manera lo que estaban
haciendo.

—Un punto para el ser humano,— Michael se rió entre


dientes, señalando a Lucifer. —Él explicó las cosas en pocas
palabras bastante bien. Puedes irte ahora, Lucifer. Vuelve al
Infierno a lamer las heridas de tu derrota. Sólo debes saber que
a causa de lo que hiciste, ahora estamos trabajando
activamente exterminando a los demonios como los bichos que
son.

—Ellos son fácilmente reemplazables. Hay muchos


anfitriones maduros para poseer. Pero entonces, nunca tuviste
ningún reparo en matar a los seres humanos en el nombre de
Dios. ¿Lo tuviste, Michael? —Él inclinó su cabeza de una manera 134
condescendiente, como analizando a Michael.

—No tengo una respuesta ni necesito explicarte nada


Lucifer. Los días en que nos contábamos confidencias pasaron
hace tiempo. Ve y advierte a tus demonios que venir aquí es lo
mismo que una sentencia de muerte.

—Esto no terminó y tu lo sabe —Lucifer amenazó antes de


centrarse en Rafe—. Vamos a vernos mucho los unos a los otros
en los días venideros. —Luego su mirada se movió a mis
compañeros.— Sí, va a ser muy divertido. Los ángeles podrán
estar libres de mi influencia, pero los Perros no. —Él chasqueó los
dedos, y vi con horror como Jared se dejó caer de rodillas,
presentó su culo al Diablo y le pidió que lo folle.

—Ya hiciste tu punto, Lucifer —le espeté, encontrando de


alguna manera mi voz—. Yo podría hacer lo mismo con
cualquier Perro aquí. Esto no es más que un truco de salón y no
es real. Si pudieras realmente convencer a mis compañeros de
pasarse a tu lado, entonces estaría impresionado. —Señalé a mi
compañero follando el suelo, rogando que Lucifer le hiciera
todo tipo de cosas repugnantes—. Esto no es nada más que la
reacción de un niño celoso porque fui bendecido con el don de
tener compañeros, algo que tu nunca tendrás.

Para probar mi punto, chasqueé mis dedos manteniendo


mi mirada fija en Lucifer y puse a Jared a dormir.

—Esta es tu advertencia, Lucifer —Dije furioso dando un


paso hacia el Diablo sin ningún temor por una vez—. Juega,
toca, influencia o tira cualquier otra puta mierda en mis
compañeros, y recién ascendido o no, tendrás una pelea en tus
manos de la que no vas a salir con vida. Ellos están fuera de los
límites. ¿Soy absolutamente claro?
135
—Oh, Castillo, relájate —el rió, desestimándome con un
gesto—. Estoy mucho más interesado en verte intenta llenar mis
zapatos que con tus compañeros aunque sean atractivos.
Bienvenido a las filas de los arcángeles, hermano. Sólo no falles.
Yo soy la prueba de lo que sucede cuando los buenos
pequeños arcángeles fallan a papá.

Una luz crepitó en el cielo y Lucifer se había ido.

Y entonces el verdadero caos sobrevino.

Stryker le estaba gritando a Rafe por venir a hablar con el


Diablo. Rhyce se estaba volviendo loco por Jared, así que lo
saqué de su sueño. Jared era un desastre, lo que era
comprensible. Y todos los ángeles estaban discutiendo en
cuanto a qué hacer. Los Perros fueron cambiando y exigiendo
respuestas, pensando que no sabían la historia completa sobre
estas almas.
Yo no estaba tan seguro de que no tuvieran razón. Lucifer
tomó un gran riesgo tratando de recuperar las almas. Era un
movimiento que no entendía.

Ariel puso sus dedos en la boca y dejó escapar un silbido


ensordecedor. —¡Basta! —Ella esperó hasta que se hizo el
silencio antes de mirar alrededor—. Ganamos el día. Sí, tenemos
más preguntas que respuestas, pero ese es un problema para
mañana. Hoy ganamos contra el Diablo y matamos más de un
centenar de sus soldados, sin siquiera un rasguño para nosotros.
Creo que eso merece una copa.

—Mañana vamos a seguir adelante con lo que viene


después. —Ella se acercó a mí y envolvió su brazo alrededor de
mi cintura—. Y quiero brindar por mi hermano, por luchar 136
valientemente en su primera batalla.

—Sí, eso es de hecho algo para celebrar —Michael estuvo


de acuerdo con una profunda inclinación de cabeza para mí—
Vayan, voy a limpiar aquí, y enviar estos pobres anfitriones a
casa, y luego voy a reunirme con ustedes—. Él se había ido
antes de que nadie pudiera decir nada, la hierba chamuscada
era la única prueba de lo que había sucedido.

Todos los cadáveres habían desaparecido.

—No se ofendan cuando no regrese —advirtió Gabriel,


inclinándose y ofreciendo una mano a Jared—. No es nada
personal. Michael se enoja mucho cuando ve a Lucifer.

—Creo que yo también aunque él me asustó muchísimo —


Rafe murmuró, sacudiendo la cabeza—. No tengo ni idea de
dónde provino esa ráfaga de coraje, pero espero que nunca
vuelva.
—El valor es genial. Empujar a la bestia, no tanto —Stryker
arrulló mientras lanzaba su brazo protector alrededor de su
compañero ahora que se había calmado.

—No —es más que eso —suspiré, envolviendo mi brazo


alrededor de de la cintura de Jared para ayudarlo a sostenerse
sobre sus piernas temblorosas una vez que Gabriel lo levantó—.
Michael y Lucifer solían ser mejores amigos. Siente, teniendo en
cuenta lo cerca que estaban, la rebelión de Lucifer como algo
personal.

—Sí, me di cuenta de eso —Rhyce acordó, rozando su


brazo con el mío para sostener a Jared. Todo el mundo parecía
pensativo a medida que nos dirigimos hacia el interior.
137
—Iré a hablar con los niños y los padres que alojamos en el
colegio —Colton ofreció antes de girar en esa dirección.
Dejamos que vaya. Alguien tenía que hacerlo. No había
ninguna manera de que no oyeran el alboroto en el exterior.

Además, el despertar y ver la hierba chamuscada con la


forma de los cuerpos sería aterrador. Ellos ya habían pasado por
suficiente.

—Sabes que nunca te traicionaría así, ¿verdad? —Susurró


Jared cuando nos sentamos en una de las salas de estar para
relajarnos. Se estremeció en nuestros brazos, secándose
rápidamente sus ojos—. No quise decir nada de eso. Me sentí
como una marioneta.

—Lo sabemos —le prometí, abrazándolo con fuerza—.


Nunca se me pasó por la mente que fuera realmente tu
voluntad. Lo siento por no intervenir antes. Supongo que me
sorprendió. No podía dejar de pensar en lo difícil que de verdad
debe haber sido ver a ese demonio dentro mío, y escuchar las
palabras que salieron de mi boca en su nombre.
—En realidad, nos dio algunos muy buenos consejos sobre
cómo ser mejores compañeros para ti —Jared bromeó,
tomando la copa de líquido ámbar que Stryker le ofreció—.
Gracias. Creo que voy a necesitar más de uno.

—Claro, pero vas a estar muy bien, hermano. Por otra


parte te veías fabuloso tirado en el piso.

—Tu sabes que no que-

—Eso es lo único que vimos. Nada más —Stryker le aseguró,


comprendiendo la vergüenza de Jared— Personalmente, pensé
que era muy valiente de tu parte mostrarle tus “lunas” al Diablo.
Me hubiera gustado que se me hubiera ocurrido a mi.
138
Jared se acomodó entonces, relajándose contra nosotros
También me hizo darme cuenta de que se había sentido débil e
indefenso, y Stryker le dio la forma de recuperar ese control.
Todos nosotros compartimos una copa, brindando por la batalla
y las victorias del día. Mañana podría traer más problemas y
preocupaciones, pero en ese momento, la noche era nuestra.

Y esa noche, arcángel o no, me metí en la cama con mis


dos compañeros, y todos juntos hicimos el amor como uno. Así
era como había planeado pasar todas nuestras noches juntos
por el resto de nuestras vidas inmortales. Siempre voy a apreciar
los dones que Dios me dio y a “Ellos” sobre todo. Porque a pesar
de que tenía las alas y ellos no, Rhyce y Jared eran mis ángeles.

El diablo estaría condenado si pensaba que podría


alejarlos de mí. Hay algunas peleas por lo que vale la pena
darlo todo. Y así sería mi lucha en el caso de que alguien viniera
por ellos. Hasta Dios entendería que llegaría a cualquier extremo
para proteger a los que más amaba.
Fin

139
Luchando Contra la Locura
140

FLYNN EIRE
Traducción, Edición, Diseño, y Corrección

Dankar

141

No lo pongan en Facebook
ni en ninguna red social.

Si lo ponen para descargar en su blog, agradezcan y


conserven el formato. Y Gracias por ponerlo

Es de fans para fans y no recibimos ninguna compensación


económica por las traducciones que realizamos. Espero que
les guste.
Y no olviden comprar a los autores, sin ellos no podríamos
disfrutar de estas maravillosas historias

También podría gustarte