Está en la página 1de 4

RESUMEN

El teatro barroco
ESPACIO PRO

El teatro antes del Barroco


Las primeras manifestaciones del teatro profano en España son las églogas de Lucas Fernández
y de Juan del Enzina (Égloga de Plácida y Vitoriano), escritas en el tránsito entre la Edad Media y el
Renacimiento.
En el siglo XVI, en España, el teatro continúa vinculado al rito y a la fiesta, y las obras se siguen
representando en las calles, las iglesias o los palacios. Sin embargo, en los dramas de los principales
autores de la época se anticipan algunos rasgos de la comedia nueva que surgirá a finales de la
centuria:
• Bartolomé de Torres Naharro, autor de ocho comedias, aportó el tema de la honra (en Himenea,
considerada su mejor obra) y la teorización sobre la comedia (en el proemio de su obra
Propaladia, donde plantea por primera vez una fórmula teatral con cinco jornadas, final feliz y
ajustada al decoro).
• Gil Vicente, en cuya obra maestra, la Tragicomedia de Don Duardos, se reconocen algunos de los
elementos de la futura comedia barroca: el tema del amor, el motivo del disfraz, la incorporación
de romances y cancioncillas populares, y la doble acción.
• Lope de Rueda, creador del subgénero dramático conocido como paso o entremés. Se trata de
piezas cómicas breves protagonizadas por personajes tipificados entre los que se encuentra el
bobo o simple, antecedente del gracioso en la comedia nueva. De la producción de Lope de Rueda
se conservan ocho pasos entre los que destaca Las aceitunas. En los espectáculos teatrales
barrocos, los entremeses se representarán en los entreactos de la comedia principal.

Los corrales de comedias


En el siglo XVII, aparecieron por primera vez en Europa locales destinados de manera estable y
exclusiva a la representación teatral. En España se inauguraron los corrales de comedias (corral
de las Atarazanas — Sevilla, 1574—, corral de la Cruz —Madrid, 1579— y corral del Príncipe —Madrid,
1583—), que eran patios de vecindad adaptados para albergar representaciones.
La apertura de los corrales de comedias y la construcción del Coliseo del Buen Retiro (Madrid, 1640)
supuso una profesionalización del teatro (dramaturgos, comediantes, autor de comedias —con
funciones de empresario y director—), que se convirtió en el espectáculo popular por excelencia
controlado por el protector de comedias.
A los corrales acudían todos los estamentos sociales sin mezclarse: los nobles (hombres y mujeres)
se situaban en los aposentos; los clérigos y los poetas, en la tertulia; los hombres del pueblo llano,
en el patio, las lunetas, las gradas y los desvanes; y las mujeres, en la cazuela. La escenografía,
muy rudimentaria, consistía en una pared fija al fondo, a la que se incorporaron otros elementos
(bofetón, escotillón, grúa, bastidor).
La representaciones barrocas se desarrollaban a la luz del sol, en un ambiente festivo. Los actos o
jornadas de la obra principal se alternaban con distintos subgéneros del teatro breve (loas,
entremeses, jácaras y mojigangas).

MATERIAL FOTOCOPIABLE / © Oxford University Press España, S. A. Lengua castellana y Literatura BACHILLERATO
RESUMEN
El teatro barroco
ESPACIO PRO

La comedia nueva
Los dramas del teatro barroco español se ajustan a la fórmula establecida por Lope de Vega, conocida
como comedia nueva, que consagró la libertad del creador y la necesidad de amoldarse a los gustos
del heterogéneo público de los corrales.
En su Arte nuevo de hacer comedias, Lope definió las características de este tipo de obras:
• Están escritas en verso y combinan distintas estructuras métricas.
• Se componen de tres actos o jornadas, que se corresponden, respectivamente, con el planteamiento,
el nudo y el desenlace de la acción.
• No respetan las unidades de lugar, tiempo y acción del teatro clásico, es decir, los acontecimientos
pueden ocurrir en más de un lugar o de un día, y se desarrolla una doble acción.
• Combinan elementos trágicos y cómicos.
• Abordan argumentos muy variados, con referencias a fuentes como la mitología, la Biblia, las vidas
de santos, las novelas italianas del Renacimiento y las crónicas históricas. Son también numerosas
las obras de asunto inventado.
• Tienen una doble finalidad: entretener y difundir la ideología de las clases dominantes.
Los temas fundamentales de los dramas barrocos son la honra —la reputación y el buen nombre que
se tiene ante la sociedad— y el amor —definido por los conflictos entre familias y que a menudo choca con
los rígidos códigos de la honra—.
En la comedia nueva los personajes están tipificados, es decir, presentan rasgos y funciones fijos: los
protagonistas, encarnados por un galán y una dama jóvenes, pertenecientes a la nobleza; los
antagonistas, reproducidos en las figuras del contragalán y la contradama; los criados, personificados
por el gracioso y la criada de la dama; y las figuras de autoridad, representadas por los padres o
hermanos de la dama, y por el rey.

Lope de Vega
Las comedias de Lope de Vega gozaron de gran éxito entre el público de los corrales. Las claves de este
triunfo son la recreación de motivos propios de la poesía popular castellana, que los espectadores
reconocían con facilidad, la agilidad de la acción y la intensidad lírica del texto.
En la inmensa obra dramática de Lope de Vega, de la que se conservan más de trescientas obras de
atribución segura, destacan tres núcleos temáticos:
• Dramas de poder injusto, en los que un personaje de la nobleza abusa de su poder sobre un villano.
Este acude al rey quien restablece el orden y la justicia. En este grupo destacan Fuenteovejuna y
Peribáñez y el comendador de Ocaña.
• Comedias de capa y espada, cuyo tema central es el amor que se impone a los obstáculos y las
normas. Forman parte de este grupo La dama boba y El perro del hortelano.
• Tragedias, que recrean temas universales como el amor, la muerte y la salvaguarda del honor. Las
obras más representativas son El caballero de Olmedo y El castigo sin venganza.

MATERIAL FOTOCOPIABLE / © Oxford University Press España, S. A. Lengua castellana y Literatura BACHILLERATO
RESUMEN
El teatro barroco
ESPACIO PRO

Las principales obras lopescas y sus respectivos argumentos son los siguientes:
• Fuenteovejuna. Fernán Gómez, comendador de Fuenteovejuna, secuestra a la villana Laurencia el día
de su boda. La joven logra escapar e insta al pueblo a sublevarse contra su agresor. Los habitantes de
Fuente Ovejuna deciden matarlo y asumir, conjuntamente, la responsabilidad del acto. Al final,
conscientes de los abusos del comendador, los Reyes Católicos acuden la villa y restauran el orden y
la justicia.
• El caballero de Olmedo. Don Alonso, caballero natural de Olmedo, pretende a doña Inés, una joven
de Medina a quien su padre pretende casar con don Rodrigo. En un lance de toros, don Alonso salva la
vida de don Rodrigo y este, humillado y receloso, decide matar a don Alonso en una emboscada. Tras
el asesinato, Tello, criado de don Alonso, pide justicia al rey Juan II, quien ordena ejecutar a los
culpables.
• El castigo sin venganza. Un triángulo amoroso entre el duque de Ferrara, Casandra (su nueva esposa)
y Federico (hijo ilegítimo del noble) acaba en tragedia. El duque descubre que Federico y Casandra
mantienen una relación secreta y, con el fin de restablecer su honra, decide quitarles la vida. Para ello,
tiende una trampa a Federico al convencerlo de que hay un traidor que quiere matarlo. Federico da
muerte al supuesto traidor, que está encapuchado y atado, pero resulta ser Casandra. Finalmente, el
duque ordena ejecutar a Federico y luego difunde que este mató a Casandra porque ella iba a darle un
heredero legítimo.

Tirso de Molina
La obra dramática de Tirso de Molina sigue fielmente la fórmula teatral establecida por Lope de Vega,
aunque posee algunas particularidades como la importancia de los personajes femeninos, el
protagonismo de un solo personaje y la aparición de problemas teológicos como la
predestinación y el libre albedrío.
La producción de Tirso de Molina puede clasificarse en tres grandes grupos:
• El teatro religioso, en el que destacan el drama teológico El condenado por desconfiado, el drama
bíblico La venganza de Tamar y los dramas hagiográficos de la trilogía Santa Juana.
• Los dramas históricos, entre los que sobresale La prudencia en la mujer, que retrata la lucha de
María de Molina para conservar la corona en la figura de su hijo (Fernando IV de Castilla).
• Las comedias, definidas por la acción y la intriga, entre las que se incluyen obras como Marta la
piadosa y El vergonzoso en el palacio.
La obra más importante de Tirso de Molina es El burlador de Sevilla y convidado de piedra. Escrita
entre 1627 y 1629, recoge el mito de don Juan, el personaje más universal del teatro español, cuya
influencia se verá reflejada en recreaciones posteriores como la del dramaturgo Molière (Don Juan),
la del compositor Mozart (en su ópera Don Giovanni), o las de autores del Romanticismo como Lord
Byron, quienes harán una lectura positiva del personaje.
En El burlador de Sevilla y convidado de piedra se desarrollan dos elementos que configuran el mito
de don Juan: la figura del conquistador insaciable, seductor y arrogante, que engaña
compulsivamente a mujeres de distinta condición y no teme ni a los hombres ni a Dios, y el convidado
de piedra, quien arrastra a los infiernos al protagonista para que cumpla la condena eterna.

MATERIAL FOTOCOPIABLE / © Oxford University Press España, S. A. Lengua castellana y Literatura BACHILLERATO
RESUMEN
El teatro barroco
ESPACIO PRO

Calderón de la Barca
Calderón de la Barca representa el nuevo ciclo del teatro español. Con una marcada profundidad
filosófica, definida por la presencia de densos y elaborados monólogos, el autor aborda temas como el
conflicto entre la libertad y el destino, la existencia terrenal, los sueños, los engaños y las ilusiones.
La obra dramática de Calderón, compuesta por casi doscientas obras, se divide en tres grupos
principales:
• Las comedias de capa y espada, que llevan al límite las posibilidades del enredo amoroso. Destacan
La dama duende y Casa con dos puertas, mala es de guardar.
• Los dramas de honor, que tratan los comportamientos deshonrosos en las relaciones conyugales
o familiares, así como el restablecimiento de la honra dañada. Forman parte de este grupo El médico
de su honra, El pintor de su deshonra, A secreto agravio, secreta venganza y El alcalde de Zalamea.
• Los dramas filosóficos, que plantean el conflicto entre el libre albedrío y la predestinación, y ofrecen
reflexiones sobre la vanidad, las apariencias, los comportamientos virtuosos y las pasiones.
Pertenece a este grupo La vida es sueño, obra maestra del autor estrenada en 1635. Este drama,
que representa la culminación del teatro barroco español, ofrece rasgos estructurales complejos y
un repertorio de temas profundos: la fugacidad e inconsistencia de la vida, la vanidad de las
apariencias, la necesidad de mantener un comportamiento virtuoso, la primacía de la libertad sobre
el destino, y la victoria sobre las propias pasiones. Así, el príncipe Segismundo, el protagonista,
renuncia a vengarse de su padre, el rey Basilio, y a su amor por Rosaura, para restaurar el honor
de la joven.
Calderón cultivó también el subgénero dramático de los autos sacramentales: piezas de carácter
alegórico que se representaban el día del Corpus, cuyo objetivo era ilustrar aspectos de la doctrina
cristiana y consolidar, así, el ideario contrarreformista. Entre los autos de Calderón destacan La cena del
rey Baltasar y El gran teatro del mundo.

MATERIAL FOTOCOPIABLE / © Oxford University Press España, S. A. Lengua castellana y Literatura BACHILLERATO

También podría gustarte