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EDICIONES EN DANZA
ISBN 978-631-6520-08-1
Apariciones
A mis abuelos
a mis padres, mis hermanos
a Claudia Masin, a las letras
y a todas las casualidades
que se dieron para que éstas
páginas como yo
sean
Es hora de volver
a lo que apenas llegó
quehacer
Es hora de devolver
una vida prestada
9
en verano tardío el agua
despierta antes que las madres
movimiento: el Rialto (rumor)
ondula sobre mi hombro
es mochila sed y en cada puente
suelta un suspiro como aquellos
de quienes confundían, por última vez
cielo y mar
10
de canal en canal
su bastón
adornado evita al vecino
que canta y viste su propia herencia
11
como acá
en todos lados
lo más pesado debería
poder cargar con lo más leve
12
campanas cantan coplas
senza faccia
como allá lejos
por febrero tardío
tentando a los días santos
de ayuno
olor a tabaco prendido
coca y bica / toro y chicha
espigas entre espinas
enterrado el llamado
como si todos pudieran verlo
salir de atrás de los cerros
de Purmamarca
guiando a sus secuaces
canal por canal de mis ojos
por sobre el agua se mueve
el diablo vestido de espejos
tintes / cola que agarra
con mano y agita en el aire
13
el baile es el reflejo árido
carnavalito caja y comadres
gondolieres compadres brindan
desde las máscaras hasta el canto
de harina talco y papel las no-caras
barniz y espuma
fiesta y ofrenda
tierra y agua
14
te vibra
el equilibrio
aire cortado
inhalás y te cae
la ficha
escalón de por
medio verano
que te abre las rejas
las filas la plaza
y junio que a vos
a medias te
frena te
drena pero
escalón de por medio
golpea sin agua en la botella
y dejás
pasar a uno
que viene de arriba
querés llegar rápido
con la altura
te sube el café
de hace unas horas
no dejás pero todo
te pasa igual
todo un grupo
por la izquierda
y la campana resuena
te gana de mano te
abre te mueve te suda
15
la inercia
cuerda floja
y cuando llegás
ya se apaga
te ves temblar con el cuenco
invertido frente a la cúpula
coronada en cruz y ala
dorado ladrillo paloma
en las manos huecos
te vibra el golpe
en los techos el sol
inunda y colgás
corre el Arno
divide por lo bajo
maderas y piedras
preciosas en las vidrieras
en las manos en puentes
en las suelas que arden
en las medias bajas
en tus tobillos flacos
blandos te vibra
el canto de los fieles
el rezo de tu abuelo
que seguro no pudo
pisar esta tierra
más suya por derecho
tanteá y buscá
decíle que no querés bajar nunca
decí si te vuelve la voz
cuando pase el agite
que las lenguas trepan
16
escalón de por medio
el caracol sigue
al cielo un puente
que en vertical
cruza el Atlántico
Campanile di Giotto
17
tus maestros no reclaman
del cirio la opacidad
madrigal
corazón del sestiere
a la luz de los ojos de los faunos
el paisaje se hace joven
renace continuo
un lamento disonante de amor
para alcanzarte
desde
cualquier tiempo
con el canto
María hecha ninfa
entre voces / tribunas
y rejas que atrozmente
te dejan lejos del cuerpo
La tumba de Monteverdi
(Basilica di Santa María Gloriosa dei Frari)
18
brava estrella acorralada
por los bosques
Bardini-Belvedere-Boboli, Firenze
19
de una voz de tantas yerbas
techo de palo ladrillo y curva
metal / el cielo llueve barro
de tantas sube
ciudad abierta
de tantas canta
ciudad abierta
de un frío descalzo
al público empasta
alma cruda arma y foro
Trastevere, Roma
20
cantan coplas campanas
21
Sobre tierra...
mascarones vigilan
las estrellas son casquillos
en la noche vuelven sus rostros
y el calor de sus voces
la familia son las luces de los barcos
que penetran en la arena / piedras
y puertas camufladas
por el óxido
de arpillera mis manos
el murmullo
se desprende y flota
cuando abro la bolsa
y caen
granos
caricias
casquillos del cielo
en la cueva percute
el perfume: metal, pólvora y miel
se guarda en años el tiempo que dura
el pan ahogándose en un café
Castello di Duino
22
cantata
de metal sobre
metal bajo agua
bronce con arrugas
y en esas huellas
que aprietan los bolsillos
las instrucciones
precisas de ella:
en el cruce de las tres
calles la Virgen
se hidrata con cada deseo
yo como el mar ausente
de espaldas
por sobre el hombro
desprendo ya de mis yemas
la promesa
una piedra liviana al lago
entra, por tubos sube
y cae
salpicando los tobillos / las frentes de los niños / y mue-
ve todo / carroza túnica / y tritón por dentro / media
cúpula / navaja entre barbas / de mármol la raíz / las
hebras de té / en los lentes / en mis pupilas / cerradas
por el candil / media vuelta y canta / el tilo del jardín de
atrás / de las barricas / entre todas / el vino / la voz entre
las cuerdas de ella / salmos y más de cincuenta / cuentas
y una cruz / se repiten en mis labios / sin decirse / un
23
padre un ave un gloria / en voz alta se reproduce / en el
aire se entierra / el precio de aquel deseo
de volver
y encontrarse
a ojos cerrados
en la fuente
Fontana di Trevi
24
mesada de mármol
achicoria y panceta
el abrazo de tus huesos
ramas y hoja secas
temperatura de cuerpo dormido
en siesta a frente tapada la antena de radio despuntando
desde el bolsillo boina sobre marcas de piel quemada en
las plantas de los pies corre grasa cadenas rayos en las
palmas de las manos huecos el rumor tosco de un bigote
que engulle pedazos de pan bañado en caldo de tarde
noche una taza blanca una cocina azulejos de flores
grises salpicadas de aceite queso rallado cayos cruces
de amores metro y tijera hilo mimbre enhebrado café
con leche y salame feteado
su forma de hablar
de moverse, su rostro no hiciste ni miraste
que lo, que sí ni migraste ni escapaste
conozco y fumo no tocaste ni curaste
noventa años sus pupilas ni cortaste ni rezaste
sus tablas, culatas no sangraste ni sabés
talones, bombas no fuiste el canto
que me, que sí no subiste las escaleras
toca fuera de cuadro no bailaste para desenterrar
su pobreza entiza no dejaste de amarte
su carbón empiedra ni de olvidarte para escuchar
condenado a mostrar
25
sólo humo
piccola patria / de punta al norte los pelos / la puna delata
al monte en curvas / que se imitan / motor de aire / lago
mamífero / marfil los ojos / en punto muerto tirando por
la cuesta / ronchas y aleteos / de por medio / del sol /
la lengua amasa ladrillos de polenta fuera de estación
/ ciruelas y uvas / en grapa / papel de carta / a bordo /
la cursiva en la firma / la conciencia del vapor que no
deja volver / más / las horas de viaje se hacen años / en
los nietos el fuego del frío / aguardiente en el viento y
tanto verde que no puedo abarcar / pinchan los pies /
cuando trepo / de las espinas / el corte y gotas / sobre
las mismas piedras que hace tanto / atardece / decía el
temblor que las trajo abajo en el setenta / mueven los
huesos las bisagras / sueltas las tablas y el óxido / donde
el agua que conecta ya no fluye / sí las voces de familia
/ enredadera breve fresca y vegetal / crece del pozo
de raíces que separan los materiales / un gran árbol se
construye en esas ruinas / hoy del corte mi sangre ayer /
la de su madre goteaba y él caía en otros brazos / al lado
del fuego cual pesebre / animales y estrellas veo ahí /
generaciones atrás nace para cruzar el mar / con hambre
/ gateando / desde el bigote / el calcio en las uñas que
mueven / el dial de bolsillo / betún negro / el cepillo
rasga / de su madre / un fernet puro la herencia / de litro
en manos / águila y mundo / garras torpes / cargadas /
de tierra y cincel
26
peina bigote con índice y pulgar
ayer retoma por allá
sus promesas adolescentes
y vuelve a construir
la casa de sus padres
el campo
pelón maduro
tu piel
durazno, flor
a Yaco
27
Bagazo
En un patio
interno de un palazzo
en Roma un viejo
fuma y corta
de raíz una higuera
cuelgan un par
de calzas negras, más allá
en una escalinata un pibe
aprieta contra la baranda
a una tana rubia y come
acá ya es otoño
quien me viera
tirando azúcar al mate
del sobrecito, él diría
que es el cambio
de aire
28
es el mismo aunque
ya no amarga tanto
al chorro de agua tibia
mi viejo
cebaba directamente
de la pava sobre la hornalla
dejando siempre
el fuego al mínimo
cuando el sol
ya no roza ya
decía él
ya no quema el pie
de la caña, comienza
la época
de zafra
29
pasando Porta Rossa
ahí sentado
sobre sus patas traseras
salvaje, a bocca aperta
con toda la gente
en semicírculo
alrededor
me cuesta encontrar
la fila
(...)
30
entonces seguro
se vuelve
como el niño
la gente grita y saca fotos y sigo yo
que rasco, pido y tiro
mas que tirar
sólo abro la mano desde la lengua
pero no, choca
rebota y queda a un costado
(...)
apenas giro
un vagabundo agarra
mis monedas y se sienta
queda a un costado
31
a la espera
de otro fallo
(...)
cruzo el mercado
mañana, me digo
podría venir de nuevo
con cambio, a hacer fila
no es el tamaño
del deseo sino del recurso
el que cuenta
y quiero, sí
jabalí
volver
32
coplas cantan campanas
la garganta
con ella al lado
silba involuntaria
de la iglesia vecina
coplas cantan campanas
cada media y hora
33
Almuerzo en Italia: Antipasti (Frío)
Quella (señala)
Levanto la vista.
Yo no me animo, no a pedirle
en lugar de responder
asiento con la cabeza / sonrío
con la botella de vino en alto
blanco.
34
De un gancho agarra
una tira y corta / rechina
la grasa en las arandelas.
Se pone de pie
(parece descubrir
en cada movimiento, cómo
funciona el cuerpo humano).
Entrega la carga.
Nos sentamos. Prende
la televisión / se desabotona
el cuello de la camisa. De sus preguntas
sólo queda aquel ruido gris, el dejo que va
de un canto grave, esa
granulación
35
en rodajas bien finas:
tajos
vino dulce
nos sirve más
y más piel se despega
más fuerte se aferra
más
tajante el golpe
36
Almuerzo en Italia: Primo piatto (Pasta)
37
Dice que es tan simple como vestir a una muñeca
cicatrices
fetuccini al pomodoro.
La perfección está
en el detalle, en la limpieza
del corte
cuando pruebo
me pregunto
38
qué harás
con los fluidos, las tripas
con las entrañas
de tantos
animales que pasan
y se quedan
ahí
mirando.
39
Almuerzo en Italia: Secondo piatto
(Cacería)
ya desajustando el cinturón
ya con la panza llena y tu esposa me sirve otro plato,
/el segundo
40
el principal dice / el cucharón se mueve lento,
/las manos le tiemblan
las arrugas, los cortes de cuchillo bañados en salsa
y el relato:
de cómo y dónde, con coraje (a tu edad)
diste muerte para darnos de comer. Una delicia
el contorno de polenta amarilla, la piel, el gatillo,
/los pies paralelos
con tu esposa
estás
en otra foto
con los mismos ojos
el miedo
yo y ella / el chancho
que corre y grita en el bosque de atrás de tu casa
41
tu mujer me mira mientras mastico:
de sus pestañas delineadas me habla
su voz joven, limpia de enfermedades
42
Almuerzo en Italia: Caffè e il dolce
(Pipa)
Cada estómago
con su digestión, cada mano
con su rojo: el vino / su cuello / pipa
en tus venas la hornalla
calentando a fuego viejo
una Bialetti
con tizne
el canto
de una respiración entrecortada, cortado digo
cuando me preguntás cómo me gusta.
Del cartón
el chorrito de leche entibia
también a él, apretando el rubio
contra el fondo él, con su pulgar
tomando impulso
hasta dar mecha.
43
El cosquilleo se contagia y te veo
rasgando hilos / acariciándote / tabaco
que se consume y destiñe
el humo
se confunde entre tanto perfume
a flor / de piel de monte / perfume que tus dedos
dejan con el plato sobre el mantel de flores:
tu rostro
el cáncer
44
el amor macerado
guardado en un estante.
de sangre
nada tengo
nada tuyo
ni siquiera el silencio
de las fotos / de tu pipa
que arde sobre mi hombro
que se apaga y deja
en nuestra casa
cenizas.
45
Zapecado
crudo
cruzo
a un museo a colarme
sol arriba y sed
a boca llena con dos euros
siendo fiel a la carne
de vacas de verdad
el rostro
en tela y tierra
a sí mismo
46
retrata
repite
óleo de jardín
de linos el pelo
el suelo tus manos
reza
el mingitorio en el centro
obra blanca la mochila
tapa que salta y moja
en un cubículo
por bombilla
migas migran entes
cortes de yerba
palo y polvo usado
47
repito: desdoblo
la bolsita de plástico
transparente al negro
al tacho el museo
se amarga y baja
repito: presumo
48
Baldosa floja
en la vereda
del bar de la esquina
hay mesas y sillas
abajo de un toldo
que todavía gotea
gris, paso por el costado
de un viejo y conmigo
queda ese tono
añejo
a vermut
en la misma esquina
giro, entro por una de las bocas
del Ponte Vecchio
y los colores me pintan
un pasaje de corcho gastado
un aire o un Caminito
de hormigas
a punto el baile
49
serán las puteadas
serán las piedras en el piso
si las maderas fueran
chapas si el agua
del Arno te cerrara
la nariz como el riachuelo
50
camino un par
de cuadras largas y en subida
cuando llego al portón
de uno de los jardines
pago la entrada y me dejo caer
en el primer rescoldo de pasto
que encuentro
Qué encuentro
el mío con las hormigas
en el aire de las cuatro de la tarde
no hay bar pero hay vermut
y barro
y me digo
sobre adoquines
secos o húmedos
no se puede caminar con alpargatas
51
necesitaban por diseño
traer el peso equivalente
a aquello que venían a buscar
52
ese largo que cruza el riacho
el negro
de esa agua
que salvo por el olor
de noche es la del Arno
53
convocado en ese momento
y el que vino después del nacido
un ángel
colgado a bocca aperta del andamio
pintando cal blanca graba en grava
granito en polvo y mármol
con el riesgo de no poder
corregir lo hecho
in mezzo / la puerta del infierno
y miles de cabezas
flotan
desnudos
54
brazos colgando a bocca
aperta sus voces escondidas en una sola
en pecado / como él
como ellos yo
por el sodio restaurado
dejando caer el peso del mentón
con tres cruces en el cuerpo que
no me puedo sacar
aunque rasgue - con fe
feto febril fétido aflora
frente labio y pecho
grabados en fresco ardiendo
los dedos arrugados de los jóvenes
sin escudos
ni uñas ni armas
escarbando las murallas
ladrillos amarillos y blancos
más de dos mil tesoros en años
una pared al menos
que se desprenda
y caiga / para dar de comer
a las bocas flacas que los trajeron
55
hoy también como
en ese momento
pagando la salvación del alma
con tinte de sangre
Capilla Sixtina
(Museos Vaticanos)
56
inmaculada llueve en ruinas estando sola
a ella le encantaba hacer sapito en el lago
del Duomo y cuando estaba acompañada
caminar sobre las piedras,
decía que “el conocimiento
entra por los pies”
y por las manos
en el juego
se le escapaba la fe
Santa Reparata
(Santa María del Fiore)
57
anclados
en el centro
piedra vieja sobre
nuestras piedras
que rozan más allá
en los vértices
del cabo
rasca el Egeo
el santuario
lo que envuelve
aún responde al tridente
que vigila las islas
aún más allá
con el enojo
tu brillo cede
y por primera
vez creo ver
esa cicatriz
en forma de estrella
sobre tu hombro
el día se acaba
y vos más adelante
tu pañuelo tu pelo
de luces se agita
entre los pilares
del templo como rejas
que intentan en vano
encerrarte y te vas
58
porque ya es tarde
para los dos
caés sola sin
nubes que apacigüen
tanto azul
te ahoga y te traga
la montaña
ni el dios
del mar
ni la sal en mi cara
te retienen conmigo
quedáte
que los siglos
me aplastan
que no puedo
viajar a oscuras
estas tierras tan vivas
que no conozco
Templo de Poseidón
59
el beso azul fermenta
en una ciudad que es selva
baúles flotando
nómades
al sol blanco de las seis
corazón de casas amarillas
sobre el mar
las huellas / la copa
del este
de un árbol que cae
y se arrastra
Oia, Santorini
60
columna de aire, más
que aire
suspiros y vigas
él
todos ellos
a la espera de otra
luz que cruce
también
del mar / carbón
estrella de leña
un punto avanzando
contracorriente
mortero / marzo
deshilachándose
en cada aniversario
nunca más
vuelve
del llamado
el ardor, sólo
lo ven
sus espaldas
61
sus padres mueren otra vez todos los días
cuando sus ojos se alzan de frente
al asilo de las mañanas
y el espejo devuelve
el beso sobre una mejilla joven
que hoy se astilla
no hay fechas que rezar ni noticias
en los diarios, no hay idioma
ni raíz que los cobije. Hoy sus nietos
los visitan y sus padres mueren
otra vez todos los días
62
yo era alérgico a los gatos
y nunca me gustó la pera
el balcón sostiene
al cielo, bastón que tiembla
con la lengua que sostiene
al caramelo de anís
batón con betún negro
colas en alto se pasean
y tengo pies que no las pueden
y manos que ya no
sólo hacen música en el roce
cuando se refriega una
amoldándose involuntaria
encima de la otra que cada tanto
se despega para hacer
una señal en cruz
sobre mi cara que dista de
tengo imanes en la frente
en los hombros el pecho
y esa otra que vuelve
me persigna, roza
en mis labios las grietas
bocca chiusa que ya no
no tiene con que
y caer con la mandíbula
y ese pedazo despejado, crudo
a través del cristal
las bombitas de la calle
y la despensa del frente
63
todas las lámparas son de querosén
Mamma! y algo de dialecto
que se vuelve juego para el resto,
vapor: un piano al fondo de la casa
la plancha y canciones de iglesia
el ceño, esa que era la voz de ella
el olor a sala de espera y a sopa
de la calle Independencia
el Prode y el bautismo a la luz de las velas
en Italia nos comíamos la carne de los gatos
y confundo el asfalto con el sendero
en medio de la granja confunden
el barrio los cerros con mis montes
reverdecido estoy
venas por las que no corre...
ellos arrastran el escobillón, levantan
los pelos de los animales
y yo ya no estornudo
y a pesar de mí el cielo es el mismo
mis hijas mis nietos los veo
me ven me sienten
se visitan y abrazan en mí
esto y aquello, me hablan
como a un nene chiquito
Mamma! y un poco de todo
ensalada de achicoria con pasas
panceta, aserrín y salares que no
y el cuchillo abre la pera
y mi bigote bien cuidado
eso vivido que se mezcla
ladrillo, cal con polvo
de luciérnagas
64
y vapor: rumoreo constante
el del torno en el piso de arriba
hollín sobre las aguas
de un mar no tan ancho
no tanto como ese pedazo
tormentoso de cielo
más allá de la ventana
que viene en cuadraditos
pedazos de ese fruto
en lo blanco, insípido
el jugo y la cáscara
con sus puntos negros
cuando lo rugoso
se pega al paladar
y ahí queda
y la lengua que tiembla
que no, ya no puede
2018
Buenos Aires, Argentina
65
ÍNDICE
Es hora de volver... . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 9
en verano tardío el agua... . . . . . . . . . . . . . . . . . . 10
campanas cantan coplas . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 13
te vibra... . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 15
tus maestros no reclaman... . . . . . . . . . . . . . . . . . . 18
brava estrella acorralada... . . . . . . . . . . . . . . . . . 19
de una voz de tantas yerbas... . . . . . . . . . . . . . . . . 20
cantan coplas campanas . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 21
Sobre tierra... . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 22
cantata... . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 23
mesada de mármol... . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 25
Bagazo . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 28
pasando Porta Rossa... . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 30
coplas cantan campanas . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 33
Almuerzo en Italia: Antipasti (Frío) . . . . . . . . . . . . 34
Almuerzo en Italia: Primo piatto (Pasta) . . . . . . . . 37
Almuerzo en Italia: Secondo piatto (Cacería) . . . . 40
Almuerzo en Italia: Caffè e il dolce (Pipa) . . . . . . . 43
Zapecado . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 46
Baldosa floja . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 49
convocado en ese momento... . . . . . . . . . . . . . . . . 54
inmaculada llueve en ruinas... . . . . . . . . . . . . . . . 57
anclados... . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 58
el beso azul fermenta... . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 60
columna de aire, más... . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 61
sus padres mueren otra vez... . . . . . . . . . . . . . . . . 62
yo era alérgico a los gatos... . . . . . . . . . . . . . . . . . 63
La presente edición de
Apariciones, de Rodrigo Orquera Vecile,
se terminó de imprimir en julio de 2023
en PROVISIONES GRÁFICAS,
Quilmes 282/284, C.A.B.A.