La lucha contra la inflación: las estrategias que toman en los barrios

populares
Por Nelson Quiroga

El exponencial crecimiento de la crisis económica que atraviesa nuestro país diezma a los barrios
populares acorralándolos para buscar nuevas estrategias con el fin de subsistir.

Fuente: 1 https://pixabay.com/es/photos/apretón-de-crédito-impuestos-bolso-522549/

La inflación es uno de los problemas más grandes que atraviesa la población argentina hoy en
día. Los precios de los bienes básicos aumentan día a día, pero los salarios se devalúan con el
paso del tiempo perdiendo poder adquisitivo y obligándolos a sufrir una movilidad social
descendente. Debido al encarecimiento de los salarios, los barrios populares son los que más
sufren el golpe libertario del poder ejecutivo.

Es tal el impacto que tiene este golpe en los barrios que incluso no se puede acceder a la atención
médica como antes. Tales son las palabras de Micaela Ferrufino, trabajadora autónoma, que nos
cuenta “De un mes al otro mi prepaga aumentó el triple, y todos los meses sigue aumentando.
A pesar de que preciso de la prepaga por tener una enfermedad crónica, cada vez se me
complica más pagarla”. Además, nos señala cómo, en su casa de un barrio popular, enfrentan la
inflación “Nosotros comparamos los precios en todos los mercados. Estos están descontrolados,
donde en un lugar te sale $500, en el otro $1000, es una locura”.

En adición a esto, se suma el comentario de Cristian Marinero, estudiante y trabajador

autónomo, “Nosotros antes comprábamos de manera mensual para que alcance todo el mes,
hoy lo hacemos de manera semanal o cada 3 días. Tratamos de comprar donde hay ofertas
siempre o, por ejemplo, las verduras y frutas las compramos en la feria que hacen en la plaza de
moreno centro los miércoles y viernes”. Hoy la gente lo que busca son las ofertas, explora cada
uno de los mercados, o las redes, y compra donde puede.
Fuente: 2 https://encrypted-tbn0.gstatic.com/images?q=tbn:ANd9GcSI7JiC0rbvaEWBefohCGU0tMQ2tebY8XT4y-
kwO02gDw&s

Aunque, cabe destacar, que esta emergencia que hoy vivimos no solo afecta a los barrios, sino
también a los comerciantes. Entre aquellos dueños de kioscos de “Mi Barrio”, Claudia Silvestri
“Es una vergüenza ya lo que estamos pagando un paquete de fideos o de azúcar, además de la
luz y gas del local… O sea, yo trato de combatir la inflación, no puedo combatirla, trato. Nos
afecta muy mal el local, vendemos mucho menos que en años anteriores.”

Es muy impactante saber que hasta a los propios comerciantes, proveedores de nuestros bienes
básicos, se les hace una tarea casi imposible poder combatir el contexto en el que vivimos.
Comentan que “la gente ya no viene a comprar acá” o que “van a lugares con ofertas”, algo que
ellos no pueden realizar debido a sus propias necesidades básicas.

Entre otra de las comerciantes importantes del barrio, se suma la voz de Zunilda Cortez, “hoy en
día la inflación nos perjudica muchísimo, trato de comprar ofertas en los propios mayoristas. El
aumento de precios afectó mucho mis ventas, bajó mucho, pero hay que seguir.” Remarcando
de esta manera una tendencia propia de los barrios, buscar ofertas. Incluso hay algunos que
compran en cuotas lo que antes podían costear en un solo pago.

Cabe recordar, que en tiempos de necesidad como aquellos de los 2001, existían no solo las
ferias populares en los barrios, sino también el trueque. Este nació como una “solución práctica
para acceder a bienes y servicios sin depender exclusivamente de la moneda convencional” en
palabras de uno de sus propios fundadores, Horacio Covas.
Fuente: 3 http://trueque-popular.byethost4.com/2023/11/26/redefiniendo-la-economia-el-impacto-del-trueque-
solidario-en-la-argentina-del-2001/

Las lecciones aprendidas durante el 2001 son muy importantes, ante nuestro contexto de
estanflación. Hay que buscar soluciones a largo plazo y no momentáneas en búsqueda de
ofertas. Es por ello, que resulta importante, destacar la labor de la comunidad. Los nodos de
trueque solidario que, hoy en día, continúan existiendo resultan una opción atractiva y viable
para luchar contra la inflación en los barrios.