Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
Se llama Edad Media al periodo comprendido entre la caída del imperio romano de occidente por las
invasiones germánicas en el siglo V y el final del siglo XV en el que se produjo la caída del Imperio
bizantino por los turcos en 1453 y también el descubrimiento de América en 1492. Duró unos 10 siglos
(1000 años) y se divide en varias etapas:
Los historiadores han llamado a esta etapa así porque pensaban que no era tan brillante como la anterior
(Edad Antigua) ni como la posterior (Edad Moderna).
Entre los siglos III y V, llegaron al imperio romano desde el norte y este de Europa los germanos, que
estaban divididos en numerosos pueblos. Lograron poner fin al imperio romano de Occidente en el año 476
y crearon los llamados reinos germánicos.
- francos: se asentaron en la Galia gracias a su rey Clodoveo I.
Su organización era muy simple, formando tribus pero al asentarse en un territorio, crearon sus propios
reinos. Pese a su inferioridad numérica, se impusieron a la población autóctona.
La sociedad de estos reinos estaba claramente dividida; el grupo dominante era la nobleza germana, que
acabaron mezclándose con la nobleza autóctona. Por debajo de ellos se situaba el resto de la población
campesina.
3. EL IMPERIO BIZANTINO
El Imperio
Romano de
Oriente
resistió las
invasiones
germanas,
pasando a
llamarse
imperio
bizantino y
conoció su
etapa de
esplendor en el
siglo VI. Sin
embargo, la
aparición del
Islam y de los
pueblos
eslavos, llevó a
su decadencia.
3.1. Origen y
expansión del
imperio bizantino
En el año 395 el
emperador
Teodosio dividió
el imperio romano.
Así, surgió el
imperio romano
de Oriente, con
capital en
Constantinopla,
que gracias a su
posición
estratégica y su
gran población,
fue la ciudad más
grande de Europa
de su tiempo.
Su época de mayor esplendor fue en el siglo VI, con el emperador Justiniano el Grande; venció a vándalos
y ostrogodos, conquistando el norte de África e Italia, además de controlar el sur de la península ibérica y
edificó grandes construcciones en la capital, como la basílica de Santa Sofía.
Pero a partir del siglo VII, el imperio bizantino entró en crisis, perdiendo territorios y sufriendo el acoso de
otros pueblos como los eslavos y, sobre todo, los musulmanes, que conquistaron más de la mitad de sus
tierras y asediaron Constantinopla varias veces.
La máxima autoridad política y religiosa en el imperio era el emperador o basileus, que era asistido por
numerosos funcionarios y un gran ejército dominado por mercenarios.
El territorio del imperio se dividía en provincias llamadas themas, cada una a cargo de un gobernador o
estratego.
3.3. Economía
La economía bizantina se basaba en la agricultura y la ganadería, sobre todo en las grandes explotaciones
agrícolas llamadas latifundios.
El comercio tuvo mucha importancia debido a su posición geográfica entre tres continentes, dando lugar a
un enorme beneficio económico, que pagaba su administración y su ejército.
Todo esto se complementaba con la artesanía, que elaboraba productos como telas, sedas, orfebrería, ... que
luego se vendían tanto en el interior como en el exterior.
3.4. Sociedad
Se trataba de una sociedad no igualitaria, claramente dividida entre la nobleza terrateniente (la minoría) y
la mayoría, que eran los campesinos. Pese a que los campesinos eran mayoría, el desarrollo del comercio
hizo que la vida urbana no desapareciera como en el imperio romano de Occidente.
La cultura bizantina fue especialmente brillante al ser continuadora de la grecolatina anterior, mezclándose
con elementos orientales, aunque abandonaron el latín y recuperaron el griego como idioma oficial. Su
mayor aportación fue la recopilación de obras y textos antiguos griegos, que de otra manera, se hubieran
perdido.
En principio, los bizantinos continuaron practicando el cristianismo y obedecían al papa de Roma. Pero en el
año 1054 el papa y el emperador bizantino se enfrentaron por ver quién tenía autoridad sobre el otro, lo que
llevó al Cisma de Oriente, que supuso la separación de la Iglesia cristiana oriental, desde entonces llamada
cristiana ortodoxa, de la occidental de Roma.
Por último, en Bizancio fue muy importante el arte, que se caracterizó por su abundante decoración. En
arquitectura usaron el arco de medio punto, cúpulas y la planta basilical y la de cruz griega, sobre todo en
edificios religiosos como la basílica de Santa Sofía; en pintura y en escultura se empleaban colores vivos,
sin volumen ni expresividad en los personajes, que resultaban demasiado rígidos y frontales, siempre
representando temas religiosos o ensalzando al emperador y destacando los llamados iconos, figuras
sagradas sobre un fondo dorado en un soporte de madera.
4. EL IMPERIO CAROLINGIO
El imperio carolingio
comenzó con la
coronación del rey franco
Carlomagno como
emperador en el año 800
y aunque duró poco
tiempo, tuvo una enorme
importancia en la historia
de Europa.
4.1. Origen y expansión del Imperio carolingio
El emperador carolingio
gobernaba el imperio desde
su palacio en Aquisgrán,
ayudado por su corte,
grupo de personas de su
confianza que le
asesoraban. También
nombraba a los condes, que
gobernaban las provincias
en que se dividía el
imperio, llamadas
condados; cuando se
trataba de una provincia
fronteriza o conflictiva, en
lugar de un conde se
encontraba un marqués,
que tenía autoridad militar.
4.3. Economía y sociedad
La actividad agrícola fue la predominante en la economía carolingia dada la decadencia del comercio y
estaba controlada por los nobles ya que acaparaban grandes extensiones de tierras o latifundios que el
emperador les entregaba por sus servicios. Los campesinos que trabajaban esas tierras estaban sometidos a la
autoridad de ese noble.
Carlomagno se preocupó por reunir a los sabios + importantes de la época en su corte así como garantizar
que en los monasterios se copiaran los textos antiguos más valiosos para condensar todo ese saber y evitar su
desaparición; a este desarrollo cultural se le conoce como Renacimiento carolingio.
En el siglo VII, Mahoma fundó la religión musulmana o Islam en la península arábiga, que muy rápido se
expandió, creando un enorme imperio.
Hasta el siglo VII, los habitantes de la península arábiga se dividían en tribus nómadas, dedicadas a la
ganadería y al comercio; en común sólo tenían la lengua y eran politeístas (adoraban a varios dioses)
Años después volvió exitoso como profeta a La Meca, suprimiendo el culto politeísta (salvo la Kaaba) y
convirtió la ciudad en el centro religioso del Islam. Cuando falleció, casi toda Arabia estaba islamizada y a
su muerte, sus sucesores, los llamados califas, extenderán su religión a base de conquistas, dando lugar a un
enorme imperio o califato. La expansión del Islam se divide en varias etapas:
califato ortodoxo lo formaron los 4 primeros califas, que conocieron todos ellos a Mahoma en
vida.
califato Omeya tras la guerra civil que derrocó al último califa ortodoxo en el año 661, el cargo
de califa pasó a la ambiciosa familia Omeya, que trasladaron la capital a Damasco.
califato abasí la familia de los abasíes asesinó y sustituyó como califas a los Omeyas en el año
750, trasladando la capital a Bagdad..
5.2. La economía
La actividad principal fue la agricultura, aunque por sus especiales características geográficas,
desarrollaron importantes técnicas de regadío (norias, acequias, aljibes) e introdujeron, gracias a sus
conquistas, numerosos cultivos nuevos como el arroz, el algodón, los cítricos (naranja y limón) y algunas
hortalizas.
La ganadería también destacó, obteniéndose de ella leche, carne, cuero, lana y medio de transporte.
El comercio tuvo un gran desarrollo, gracias a la creación de monedas que se usaron en todo el califato
como el dinar de oro y el dirham de plata y empleando rutas comerciales tanto terrestres como fluviales y
marítimas, uniendo Europa, África y Asia.
Por último, también se desarrolló la artesanía en forma de joyas, armas, azulejos, cerámica...
No era una sociedad igualitaria, ya que se dividía en varios grupos y los musulmanes tenían más derechos
que los que no lo eran.
aristocracia terrateniente era un grupo muy minoritario pero muy poderoso, formado por las
familias árabes, descendientes de los conquistadores, que se mezclaron con las familias importantes
de los territorios conquistados. Ocupaban los cargos más importantes y las mejores tierras.
resto de la población se dividía en los que se habían convertido al Islam y los que seguían siendo
cristianos o judíos. Estos últimos tenían menos derechos que los conversos y debían pagar un
impuesto especial pero se respetaban sus costumbres y su religión.
esclavos por debajo de los primeros grupos, solían ser de origen eslavo o africano y no eran
muchos, pues al convertirse al Islam, eran liberados.
En el mundo musulmán, a diferencia de la Europa medieval cristiana, la ciudad fue muy importante, gracias
al comercio y a la artesanía. Siempre podía apreciarse en ellas varias partes como la medina o parte más
importante de la ciudad donde se encontraban los edificios principales, es decir, la mezquita aljama o
principal, la madraza, el zoco o mercado, la alcazaba (palacio fortificado donde residía el gobernante) y las
viviendas de la aristocracia y los arrabales, barrios situados fuera de las murallas que contaban con zonas de
cultivo.
En el libro sagrado del Islam, el Corán, se recogen las revelaciones de Alá a Mahoma. Así, por ejemplo, el
Corán establece cinco preceptos que todo buen musulmán debe cumplir: creer en un sólo Dios, Alá, y en su
profeta Mahoma; orar cinco veces al día en dirección a La Meca; dar limosna a los pobres; ayunar durante el
mes de Ramadán y peregrinar al menos una vez en la vida a La Meca.
Además, también recoge otras normas como no representar imágenes de Alá ni Mahoma, ni de ninguna
figura humana o no comer carne de cerdo ni beber alcohol.