Documentos de Académico
Documentos de Profesional
Documentos de Cultura
El Dr. Pablo Vargas, editor de la obra, nos comenta en este artículo lo que representaron las especias para los europeos
de entonces.
Vargas. Este libro pretende rendir un pequeño tributo a las gentes de muchos países después de quinientos años, justo
cuando conmemoramos el esfuerzo internacional que supuso la primera vuelta al mundo. Sin duda fue un esfuerzo
conjunto en el que estuvieron implicadas personas que ahora se asignarían a países no solo europeos (alemanes,
españoles, franceses, griegos, holandeses, ingleses, irlandeses, italianos y portugueses), sino también americanos
(argentinos, brasileños, chilenos y norteamericanos), asiáticos (filipinos, indonesios y malayos) y africanos (caboverdianos),
protagonistas todas ellas de la primera circunnavegación de la historia. Cada uno contribuyó de distinta forma a una
empresa común organizada y financiada principalmente por la Corona de Castilla (costó algo más de ocho millones de
maravedís, lo que hoy día equivaldría a unos tres millones de euros), planificada y capitaneada por el portugués Fernando
de Magallanes, finalizada gracias al liderazgo del capitán vasco Juan Sebastián Elcano, narrada con maestría por el
lombardo Antonio Pigafetta, y así sucesivamente hasta alcanzar más de trescientas personas que apostaron por tan
arriesgada empresa. Cinco naos con unos doscientos cincuenta navegantes zarparon finalmente, y casi tres años más
tarde solo regresó una nao (Victoria) con dieciocho extenuados tripulantes.
Pregunta: Algunos de los hitos más sobresalientes de la primera vuelta al mundo fueron…
Vargas. El libro está estructurado de la siguiente manera: tras una introducción histórica de los hitos fundamentales del
viaje, siguen varios capítulos que describen la importancia de las especias tanto en el plano económico como en la
alimentación, centrándose en la especia protagonista de la expedición, el clavo; para continuar con unos capítulos más
geográficos sobre plantas de Brasil, Patagonia argentina, el estrecho de Magallanes en tierras chilenas y las islas Filipinas.
La segunda parte hace hincapié en aspectos relacionados con el viaje y su época, como un primer análisis del diario de
Pigafetta, el desarrollo de la ciencia botánica en la temprana Edad Moderna, el cultivo de plantas de todos los continentes
en los primeros jardines botánicos del siglo XVI (los llamados huertos de simples) y, por último, un viaje a la imaginación
sobre cómo se comunicaría la vuelta al mundo con redes sociales actuales (Twitter).
Con todo ello, esperamos haber conseguido transmitir la importancia del primer viaje alrededor del mundo que, sin duda,
ha tenido mayores consecuencias que la mismísima llegada del ser humano a la luna.
Vargas. Muchos libros y documentales nos dicen que en la edad Media las especias tenían un uso como ahora, para dar
sabor a los alimentos. Esto es cierto, pero parcialmente. En la antigüedad los alimentos se estropeaban o pudrían con
frecuencia, y en el mejor de los casos eran muy insípidos. Al especiarlos se conseguía mejorar el sabor y disfrutar de la
comida. Pero hay que tener en cuenta que esto s elo podía permitir la gente rica, que era un porcentaje muy bajo de la
población. Además en Europa ya había muchas hierbas que servían para especiar, particularmente las plantas que
procedían del Mediterráneo europeo.
siempre fue un problema en la historia de la humanidad. Las nuevas especias tropicales ayudarían a una mayor
conservación, pero poco pues ya en la edad Media todas las culturas ya tenían formas muy eficaces de conservar la
comida (salazones, ahumados, encurtidos, etc.).
(3) En la edad Media las medicinas eran escasas y su eficacia se confundía con mitos y creencias (véase Recuadro 2). No
hay que olvidar que se usaban muchas plantas con fines medicinales, por ejemplo para combatir la peste y otras
enfermedades que diezmaron la población europea durante siglos. Entonces había gran esperanza en las plantas de los
trópicos lejanos pues tenían nuevos compuestos que ayudarían a curar o al menos aliviar las enfermedades.
(4) Hay que considerar también motivos históricos. Los árabes, que habían monopolizaron el comercio con Asia durante
siglos, transmitieron una imagen de misticismo alrededor de todos los productos que venían de oriente, y en particular de
las especias.
(5) Los europeos que gozaban de las virtudes de las especies asiáticas formaban parte de los estamentos sociales más
altos: reyes, nobles, clero. Sin duda adquirir especias era mostrar enriquecimiento y poder.
(6) No hay que olvidar motivos socioeconómicos en este tipo de análisis. Debido al descubrimiento de América la mano de
obra empezó a escasear en Europa pues muchos emprendían la aventura de enriquecerse en ultramar. Un mayor poder
adquisitivo del pueblo explicaría una mayor demanda y con ello un encarecimiento de las especias.
Y, en cualquier caso, sea como fuere, hay que considerar que las especias tenían muchas utilidades más allá de
condimentar alimentos.
ENTRADAS RECIENTES
Las jornadas ‘Dieta Mediterránea: la alimentación inteligente’ vuelven en 2023 a visitar diferentes ciudades de España.
CATEGORÍAS DISPONIBLES:
Actualidad (114) Cursos (1) Entrevistas (33) Estudios científicos (69) Eventos y actividades (35) Gastronomía (8)
ENTRADAS RECIENTES
ÚLTIMA NOTICIA
leer más
Inicio Mapa web Área de socios Información legal Contacta con la Sedca