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1. DEFINICIÓN
La CÉLULA en el cuerpo humano es la unidad más esencial que tiene todo ser
vivo. Es la unidad mínima de un organismo, capaz de mantenerse viva. Tiene
capacidad de duplicarse por sí solas.
De la misma forma creemos que la iglesia como organismo vivo tiene una
unidad básica de desarrollo llamado CÉLULA o Grupo Pequeño de creyentes
(promedio de 3 o 4 personas) que se comprometen a crecer en los 5
propósitos: Adoración (Conectar con Dios), Evangelismo y Misiones (Comunicar
la Palabra), Discipulado (Capacitar a otros), Compañerismo (Confraternizar
entre hermanos) y Servicio (Compartir con los demás).
2.2 PERMITE:
a. La participación de todo el Cuerpo de Cristo: (Efesios 4: 12-16; 1 Corintios
12: 14). Permite el desarrollo de los dones, talentos y ministerios de cada
creyente de la célula. Se involucra mejor a los nuevos creyentes. Todos
llegan a ser importantes.
b. El evangelismo eficaz: (Hechos 2: 47) Permite los contactos personales con
una relación íntima y natural entre familiares, vecinos, amigos. Y por otro
lado, el discipulado de ese nuevo bebé ganado en nuestra célula.
c. El compañerismo: (1Tesalonicenses 3: 12) Hay tiempo de comunión, se
puede hacer amistades y hacer cosas juntos (comer, jugar, etc). Hay
también ayuda mutua que suple necesidades.
d. El discipulado eficaz: (Mateo 28: 19 – 20; 2 Timoteo 2: 2) En una célula uno
se hace responsable por el otro y se tiene más tiempo para poder
compartir. Un discípulo tiene la oportunidad de aprender de su líder de
célula.
e. Mejorar la atención pastoral: (Hebreos 13: 7; Exodo 18: 13 – 26) La
atención en una célula es más personal. Hay cuidado, afecto, alimento y
compasión.
f. La edificación de los miembros: (1 Corintios 14: 26 b) En una célula hay
oportunidad de abrir nuestros corazones, confesar faltas, darnos consejos,
exhortarnos y animarnos.
g. La reproducción de líderes: (Efesios 4: 11-12; 2 Timoteo 2: 2) El reto de cada
líder es reproducirse en otro líder de célula.
h. La oración: (Hechos 12: 12). Oramos por las necesidades de los demás.
Escuchamos testimonios de cómo Dios responde a nuestras oraciones.
Recordando que:
«Y todos los días, en el templo y por las casa no cesaban de enseñar y predicar a
Jesucristo»
Hechos 5:42
«…ve por los caminos y por los vallados, y fuérzalos a entrar, para que se llene mi
casa»
Lc. 14: 23
La IGLESIA alcanzando a la gente por medio de las Células
Lección 3
2. DEL COORDINADOR
3. DEL SUPERVISOR
1.1 Orar es fundamental para la obra del Señor. Sobre todo en el caso de las
células, sabiendo que nuestra dirección debe venir del Señor de Señores.
1.2 Es esencial para el Tutor de Célula buscar a Dios en oración:
a. Orar por su propia vida, pidiendo santidad (Nehemías 12: 30)
b. Orar por cada uno de los miembros de su célula.
c. Orar por los invitados a su célula.
d. Orar entregando el de cada reunión al Señor.
e. Participar de los tiempos de ayuno y vigilia que convoque su Red o la Iglesia.
1.3 La oración en el tiempo de la reunión de célula:
a. Conocer sus necesidades:
a.1 Escuchando a los miembros de la célula.
a.2 Escuchando lo que dice el Señor (discernir).
a.3 Identificando el tipo de necesidad: financiera, problemas
matrimoniales, dificultades en el trabajo, enfermedades, problemas de
droga o alcohol, espirituales, etc.
b. Decidir qué hacer (cuándo y qué):
b.1 En lo posible orar inmediatamente por la necesidad.
b.2 Si no puede tomarse una decisión inmediata, fijar una ocasión
apropiada.
b.3 Disponerse a orar por largo tiempo, si es necesario.
b.4 Hacer un seguimiento personal o delegarlo a otro líder.
c. Orar en grupo (Santiago 5: 16):
Sobrellevando los unos las cargas de los otros; orando por sus necesidades
personales, por los demás y por las de la iglesia.
d. Maneras de orar:
d.1 Una persona dirige la oración por todos
d.2 Orando todos en círculo, uno por uno
d.3 Orando en conversación: cada uno ora libremente como siente y en el
momento que Dios le guíe.
d.4 Oración en parejas: en grupos de dos se comparte las peticiones de
oración.
2. EL EVANGELISMO
2.1 El evangelismo en las células es por AMISTAD. Cada uno gana a uno.
Ejemplos bíblicos: Marcos 2: 14 – 15; Lucas 8: 39; 19:9; Juan 1: 40 – 46
2.2 El Tutor debe cumplir con la evangelización que es uno de los cinco propósitos
de las células (Hechos 2: 43-47; 5: 42)
Pasos:
a. ORE:
a.1 Haga una lista de 3 a 4 personas que usted conoce y que desea que
reciban a Cristo.
a.2 Descubra sus necesidades específicas: problemas matrimoniales, vicios,
economía, trabajo, enfermedad, colegio, universidad, etc.
a.3 Comience a orar por ellos.
b. RELACIÓNESE:
b.1Desarrolla una amistad más cercana con la persona.
b.2Recuerda que eres un canal del amor y de la preocupación de Dios para
la persona.
b.3Dedícale tiempo para crear confianza.
b.4Invítalo a una reunión especial de tu red.
c. COMPARTA:
c.1 Háblale de Cristo en la oportunidad que se presente.
c.2 Comparta su testimonio.
c.3 Preséntele el Plan de Salvación o espere que el Tutor invite a recibir a
Cristo después de un tema.
c.4 Use palabras entendibles recuerda que el que convence de pecado es el
Espíritu Santo.
c.5 Tenga paciencia, nunca manipule.
3. EL DISCIPULADO
El discipulado es que un cristiano maduro, espiritualmente hablando, asume la
responsabilidad por el crecimiento espiritual de un nuevo creyente en una
relación de padre a hijo o de discipulador a discípulo. Formándolo a la imagen
de Cristo a fin de que se convierta en un líder celular.
RECUERDE:
Al leer Efesios 4: 1 – 16 entendemos que la mejor estrategia para el discipulado es
a través de la RELACIÓN y AMISTAD: pasando tiempo juntos, haciendo cosas juntos
(orar, estudiar la Biblia, aconsejar a otros, visitar, evangelizar), saliendo de paseo o
involucrándolo en actividades sociales con otros hermanos (cumpleaños, salidas a
comer, deporte, entre otros).
Lección 6
1. METAS DE LA CONSEJERÍA:
a. Cambiar actitudes, acciones o valores.
b. Entender las causas de los problemas.
c. Aprender habilidades, por ejemplo: cómo relacionarse adecuadamente con
las demás personas, cómo comunicarse, cómo estudiar o cómo orar.
d. Reconocer y expresar sentimientos, como ansiedad, temor, soledad o ira.
e. Reconocer el pecado, confesarlo y experimentar el perdón de Dios.
f. Tomar decisiones inteligentes.
g. Reconocer y tomar alguna clase de acción con relación a futuros problemas
que pudieran surgir.
h. Aprender a crecer como discípulo de Jesucristo.
2. LA BASE DE LA CONSEJERÍA:
Las Escrituras (Hebreos 4: 12; 2 Timoteo 3-. 15 – 17)
b. La introducción:
b.1Esta es la parte que nos permite captar el interés de las personas en el
tema a compartir.
b.2A veces habrá una frase seguida de preguntas. O comienza con
preguntas para poder compartir y nos introduzcan al tema.
b.3En esta parte el Tutor lanza las preguntas al aire y espera que alguien
responda, sin forzar a nadie a que lo haga. El deseo es comenzar el estudio
compartiendo.
b.4Si nadie contesta entonces se hace la pregunta en forma directa a un
hermano de confianza y que podría ayudarnos a iniciar el dialogo.
b.5Después de más o menos 5 minutos de dialogo se pasa a la otra parte de
la lección.
c. El Estudio:
c.1 Tiene una parte inicial que une la INTRODUCCIÓN con el ESTUDIO.
c.2 Aquí el Tutor puede leer con todos los hermanos esta parte. Puede
decir: «Después de haber dialogado vamos a ver qué nos dice el estudio
acerca de lo que hemos estado conversando»
c.3 Todo estudio va a estar siempre bosquejado, es decir, va a tener uno
a tres puntos que va a estar desarrollando. Estos puntos pueden estar
desarrollados para facilitar su estudio o puede estar en forma de
preguntas para resolver.
c.4 Habrá una parte: PARA COMPARTIR. Allí habrá preguntas de
aplicación que servirán para abrir el dialogo y para aplicar la Palabra a
nuestras vidas.
c.5 El Tutor podrá agregar material estudiado aparte que enriquezca el
tema de lo ya mencionado y formulará preguntas de discusión.
c.6 Cuando formule preguntas:
- Esté seguro que la persona puede contestarla sin dificultad.
- Si está inseguro ayúdele, pero haciéndolo sentir que él dio la
respuesta, por lo menos en una parte y elógielo por su respuesta. No
debe dejar que una persona sienta que ha fallado. Especialmente con los
nuevos.
- Evite argumentos estériles en la discusión.
- Las preguntas deben ser claras y deben estimular el pensamiento o la
capacidad de razonamiento, no solo la memoria del estudiante: ¿Por
qué?, ¿Para qué?, ¿Con qué propósito?, ¿Qué hay detrás de ello?,
¿Cómo lo interpretas?, etc.
- Evite que sólo un miembro hable, si pasa ello invite a otro a
compartir.
- Haga las preguntas en forma espontánea y conversativa. Se
recomienda dirigirse a todo el grupo antes de designar
específicamente quien la ha de responder.
- Si una persona no sabe la respuesta, no insista.
- No haga muchas preguntas si se agotó el tema.
- No apruebe ni desapruebe una respuesta, sino continúe dando
información adicional para aclarar la idea.
4. LA CONCLUSIÓN:
a. Esta parte tiene el propósito de ser un resumen de la enseñanza central que
nos confronta y nos debe llevar a una decisión de cambio o avance.
b. Esta parte es para que las personas cuando lleguen a casa puedan decir:
«Esto o lo otro tengo que hacer para aplicar a mi propia vida»
c. En esta parte también habrá preguntas que animarán a recibir a Cristo
como Salvador y Señor de nuestras vidas.